Suplemento especial // Diciembre 2013 www.clasecontraclase.org // clasecontraclase@hotmail.com Precio 1€

Estamos a dos años de la victoria del PP con una mayoría absoluta. En todo

este tiempo ha seguido y acrecentado los planes de ajuste draconianos que empezó el PSOE.

A la hora del “balance”, entre sus principales logros han recortado hasta la saciedad en Sanidad, jugando con las vidas de la mayoría de la población, re-duciendo servicios médicos básicos, de-jándonos sin atención médica si estamos en el paro por mucho tiempo, o si eres un inmigrante sin papeles, privatizando servicios públicos esenciales o cerrando centros sanitarios y hospitales. Lo mis-mo en la educación, dejando a miles de profesores sin trabajo, centros escolares en situaciones paupérrimas o directa-mente cerrándolos y subiendo las matrí-culas a niveles inalcanzables obligando a muchos estudiantes a abandonar.

Al mismo tiempo, impuso una Refor-ma Laboral, facilitando y abaratando los despidos, “fl exibilizando” las condicio-nes laborales en las empresas a golpe de planes de viabilidad, con una escalada sin precedentes de ERE’s, ERTE’s.

Por si fuera poco, hizo un rescate mil-millonario para salvar la banca en cri-sis. Como siempre, mientras un puñado de políticos, empresarios y banqueros siguen benefi ciándose a costa de la cla-se trabajadora y los sectores populares, somos nosotros quienes pagamos los costes de la crisis capitalista y sufrimos la más injusta de las miserias.

Por último, este año hemos visto cómo se iba generando la mayor cri-sis institucional desde que se instauró el Régimen del ’78, viendo cómo la corrupción alcanzaba todas las esferas institucionales. En primer lugar, en el propio gobierno, que a mediados de año ha estado a punto de saltar por los

aires por el Caso Bárcenas, uno de los casos de corrupción de mayor dimen-sión en mucho tiempo y que ha tenido en jaque todo el verano al Gobierno.

La Monarquía tampoco se salva y está sufriendo la peor crisis institucional desde el inicio de la democracia. El escándalo de corrupción del caso Noós cuyo principal imputado es Iñaki Urdangarín, yerno del Rey, ha sido el catalizador de un profundo desgaste de la Casa Real. A duras penas ha podido contenerse con una mezcla de “pacto por arriba” con el gobierno y la justicia para que el Caso Noós no siguiera desprestigiando la imagen de los Borbo-nes, y el operativo mediático alrededor de la enfermedad del Rey… pues si no gene-ra entusiasmo, al menos que genere pena.

Al son de esta verdadera “danza de los corruptos” también bailan gran parte de los partidos capitalistas nacio-nales y autonómicos que también han sido salpicados, así como la patronal

con el ex-presidente de la CEOE Díaz Ferrán a la cabeza.

Pero lo más lamentable, es que has-ta las grandes centrales sindicales se han visto implicadas en escándalos mayúsculos de corrupción. Primero fueron los ERE’s fraudulentos de An-dalucía en los que fueron cómplices el Gobierno socialista andaluz, la buro-cracia de UGT y CCOO y la patronal: una verdadera “asociación ilícita” que saqueó los fondos públicos por más de 10 años. Y ahora se suma el nuevo escándalo de las subvenciones públi-cas a la UGT, también en Andalucía, por haber endosado facturas falsas por varios millones a la Junta andaluza du-rante años. Lo que le costó la cabeza al líder de UGT en Andalucía, Francisco Fernández Sevilla.

Y como telón de fondo, la sacro-santa unidad de España se viene cuestionada cada vez más por el crecimiento, sobre

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Dos meses de huelgahistórica. ¡¡Sí se puede!!

Suplemento especial

por la reconst rucc ión de la cuar ta in ternac iona l / órgano de

DESPIDOS REBAJASDESPIDOSDESPIDOSDESPIDOSDESPIDOS REBAJASREBAJASREBAJASREBAJASREBAJASREBAJASREBAJASREBAJAS,

EDITORIAL

A dos años del gobierno del PP

Entre la ofensiva reaccionaria del Gobierno y el resurgir de la lucha de clases

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todo en Catalunya, de una aspiración democrática entre diversos sectores populares de poder ejercer el derecho de autodeterminación.

Todo un conjunto de síntomas, no de fortaleza del gobierno y las institucio-nes del Régimen, sino de sus tenden-cias a la descomposición, entre las cua-les la generalización de la corrupción y el fraude como uno de los mecanismos básicos de dominación es una de las máximas expresiones.

Un giro bonapartista preventivo

Contenido de momento el escándalo Bárcenas, el Gobierno ha sabido recu-perar la iniciativa política y tratar de aparecer fortalecido, aunque esto no sea más que coyuntural. Basta ver los últimos estudios que sitúan al Partido Popular muy lejos de la mayoría abso-luta que obtuvo hace dos años con unos resultados en los que perdería hasta 40 diputados y con tan solo 15 más que el PSOE, los dejaría con la necesidad ineludible de tener que pactar con al-guna otra fuerza política para reeditar mandato. Pero la política se hace en la coyuntura, y en su intento de man-tener “todo atado y bien atado”, está iniciando una ofensiva abiertamente represiva y de ataque a las libertades democráticas, buscando endurecer las leyes de seguridad y limitar el dere-cho a huelga. En el marco de una cri-sis económica y social que multiplica las experiencias de resistencia obrera y popular contra los ataques, preven-tivamente el gobierno tiene que echar mano de todos los mecanismos posi-bles para blindar un Régimen que hace aguas por todos lados.

La realidad es que a pesar de las de-rrotas y retrocesos, la clase trabajado-ra y los sectores populares no se han rendido ni han dejado de plantar cara a tantos ataques y recortes. Ejemplos son las luchas que se han llevado a cabo en este último semestre del año, con huelgas como la de la comunidad educativa en las Islas Baleares, los tra-bajadores de la limpieza en Madrid, los de Panrico en Barcelona o la lucha de los trabajadores de Canal 9 y RTVV, sin olvidar el germen que significó la lucha de los mineros del 2012. La ofensiva que despliega el Gobierno, va en el sentido de impedir que estas luchas se masifiquen y se expandan, concitando el apoyo de sectores popu-lares cada vez más amplios. Este es el principal temor que tienen el Gobierno y los capitalistas, hoy y siempre.

La nueva “Ley de Seguridad Ciuda-dana”, cuyo anteproyecto aprobó el día 29 el Consejo de Ministros del PP, de orden público, autoritaria y con tintes

franquistas, tiene el objetivo de reprimir a golpe de sanciones administrativas a los sectores que se organizan y enfren-tan a los ataques capitalistas; lo que re-presenta una vulneración de las más ele-mentales libertades democráticas de los trabajadores/as y sectores populares.

Se aplicarán sanciones económicas a los que participen en un “escrache”, se manifiesten ante el congreso u otras instituciones del Gobierno, quemen contenedores o insulten a las fuerzas represivas del Estado entre otras ac-ciones. También las “ofensas a Espa-ña” como manifestarse con pancartas contra España, sus símbolos, banderas o instituciones serán penalizadas. Una ley que en definitiva avanza en el cami-no de convertir el Estado español en un virtual “estado de excepción”.

En línea con esta abierta medida bo-napartista, el Gobierno también está preparando una nueva ley de huelga, encubierta bajo el eufemismo de una “ley de servicios mínimos”, cuyo obje-tivo no puede ser otro que limitar el de-recho a huelga. No casualmente viene precedida de la gran huelga indefinida de la limpieza en Madrid que por casi dos semanas puso contra las cuerdas a las patronales y a la impresentable Ana Botella, y que de no haber sido porque las direcciones sindicales negociaron un acuerdo pernicioso para los traba-jadores, podría haber pegado un salto que le infligiera una dura derrota al PP y las patronales de la limpieza.

Y por si fuera poco, el Gobierno amenaza de nuevo con ampliar con nuevas medidas la Reforma Laboral, una verdadera máquina de liquidar conquistas obreras y miles de puestos de trabajo. Luís de Guindos, ha anun-ciado los que serán los ejes de la nue-va reforma: la simplificación de con-tratos, reduciéndolos drásticamente a solo cinco -indefinidos, temporales, de relevo, prácticas y formación y apren-dizaje-, todos y cada uno encamina-dos a sumir más a los trabajadores y trabajadoras en la precariedad laboral. Y por otra parte otra medida será la flexibilización de la contratación a tiempo parcial. Nuevas medidas para engrosar las listas del paro que ya as-cienden a más de seis millones.

La lista podría continuar infinitamente, como por ejemplo con la reforma de la ley del aborto que encabeza el Ministro de Justicia Gallardón a las órdenes de la Iglesia Católica y la derecha más rancia. Un durísimo retroceso para las mujeres de poder decidir sobre su propio cuerpo.

En este marco, el discurso que adopta el Gobierno, anunciando sus previsiones de un crecimiento del 0,7%, es una mas-carada que no podía estar más lejos de la realidad, ya que el supuesto crecimiento es fruto de capital extranjero que entra

en el Estado español, pero con intención de especular con las empresas en quie-bra. Grupos de fondos de capital riesgo como Apax Partners o Oaktree llegan como “Mesías” para luego por medio de especulaciones, tasaciones, compra-ventas y demás artimañas acaben gene-rando mayores beneficios a las empresas a costa de aplicar planes de viabilidad, con miles de despidos y rebajas salaria-les entre otras medidas sangrantes para el conjunto de la clase trabajadora.

En fin, el Gobierno está llevando a cabo un giro bonapartista preventivo, frente a la perspectiva de que la lucha de clases se torne más aguda y que los sindicatos mayoritarios ya no sean capaces de con-tener la reacción obrera y popular.

¡Si se puede!

Las trabajadoras, trabajadores, la ju-ventud y los sectores populares hace tiempo que dijeron basta, no aceptan seguir sufragando los costes de esta crisis capitalista: sectores combativos resisten las embestidas que acometen Gobierno y patronal. Desde que sur-gió el Movimiento 15M hemos visto como los trabajadores y personal sa-nitario integrados en la “Marea Blan-ca” luchan por una sanidad pública o como la PAH -Plataforma afectados por la hipoteca- lucha por evitar cada día decenas de desahucios.

Sin embargo, en los últimos meses comienzan a gestarse conflictos que expresan un nivel más elevado de combatividad. Han surgido luchas ca-paces, aunque aún de forma incipiente, de plantar cara al freno que supone la burocracia de las grandes centrales sin-dicales en desplegar verdaderos meca-nismos de lucha obrera.

La comunidad educativa de las Islas Baleares llevó a cabo una huelga inde-finida de más de tres semanas contra el TIL -Tratamiento integrado de Lenguas- y la LOMCE, con un 90% de seguimien-to entre la comunidad educativa, con una gran caja de resistencia que superó los 200.000 euros y una amplia solidari-dad. Ha sido, probablemente, la mayor y más unitaria lucha educativa en mucho tiempo, dando ejemplo de como la lucha unitaria por encima de la burocracia sin-dical que no impulsa este tipo de huelgas y cajas de resistencia es posible.

Hoy, un gran ejemplo de lucha es Panrico en la planta de Santa Perpetua de la Mogoda con una huelga indefi-nida que ya va por la octava semana1. Huelgas tan combativas y duraderas no se veían desde los años ’80. Enfren-tando los duros ataques de la patronal, los palos de las fuerzas represivas y llevando el conflicto fuera de su planta para llenarlo de solidaridad y organi-zarse con otros trabajadores en lucha y

con una gran caja de resistencia para la subsistencia de los trabajadores/as. Los trabajadores de Santa Perpetua superaron también los obstáculos y maniobras que la burocracia puso para levantar la huelga, además de la trai-ción que supuso firmar el acuerdo de despido de 745 trabajadores y rebajas salariales del 18%.

En Madrid los trabajadores de la Limpieza y Jardinería llevaron a cabo una huelga indefinida durante 13 días en los que pusieron en jaque al Ayunta-miento y a la ciudad entera. Los traba-jadores demostraron su potencialidad y su fuerza social poniendo en movi-miento sus métodos de lucha, arreba-tándole a la patronal las amenazas de despidos que tenían encima de la mesa. Aun así, el resultado del conflicto es contradictorio, pues los sindicatos fir-maron prejubilaciones, bajas y exce-dencias, lo cual significa un retroceso en las conquistas ganadas en años por los trabajadores.

Y mencionar también la valerosa lucha que emprendieron los trabaja-dores de RTVV y Canal 9 emitiendo bajo control de los propios trabajado-res tras la amenaza y cierre de la tele-visión pública valenciana hasta que la policía tuvo que irrumpir en los estu-dios y dejarlos en la calle.

Estos ejemplos nos enseñan que con una verdadera coordinación de todos los sectores en lucha, poniendo en disposición los métodos de lucha his-tóricos de la clase trabajadora como la huelga, la solidaridad, la caja de re-sistencia... y superando los límites que pone la burocracia sindical, se podrá enfrentar a los ataques y la represión que acomete el Gobierno.

La estrategia de “contención” de la lucha que vienen imponiendo desde hace años las direcciones mayorita-rias del movimiento obrero, y toda una cadena de traiciones, están co-menzando en encontrar resistencia. Los trabajadores y trabajadoras están haciendo una experiencia lenta pero sostenida con la burocracia sindical. Desde estos sectores es de donde pue-de surgir una alternativa para superar a CCOO y UGT, desarrollando la de-mocracia obrera, las asambleas uni-tarias y democráticas, los comités de lucha y la coordinación con todos los sectores en lucha.

Sólo avanzando en este camino, y tomando en nuestras manos la defensa de las libertades democráticas contra la ofensiva reaccionaria del gobier-no, puede plantearse la posibilidad de avanzar contra los capitalistas, su Go-bierno y su podrido Régimen del ’78.

SUPLEMENTO ESPECIAL

3SUPLEMENTO ESPECIAL

La huelga en PANRICO continúa

Re�exiones para pelear por una victoria

Se abre otra etapa de la lucha. Hay que darle “otra vuelta de tuerca”

El acuerdo firmado por 6 delegados de UGT y 3 de CCOO de la Comisión Negociadora es una traición anunciada. Todas las maniobras de las semanas an-teriores se demuestran meras tretas para intentar desmoralizar la huelga, evitar que otras plantas pudieran sumarse, di-vidir... La dos victorias consecutivas del NO son respondidas con esta caciquea-da. Esta es la “democracia en las em-presas”, y esta es la “democracia” en la que vivimos, donde la ley y el Gobierno barren para la casa de los empresarios.

Pero este obstáculo no detiene la lucha. Los trabajadores de Santa Perpetua man-tienen la huelga hasta imponer el 0 despi-dos y 0 recortes. Una nueva muestra de la dignidad de esta plantilla, que con su ac-ción saca los colores a muchos dirigentes sindicales acomodados que llevan toda la crisis convenciendo a los trabajadores que lo que hay que hacer es “tragar” y “tra-gar”, para supuestamente mantener unos puestos de trabajo que después tampoco sobreviven a la ofensiva patronal.

Muchos compañeros se preguntan “¿Y ahora qué? ¿Cómo seguimos?” La vo-luntad de seguir con la lucha puede lle-var a contestar “igual que hasta ahora”. Esto es así, porque la huelga y todas las acciones que se están llevando adelante deben mantenerse, pero como plantea-ron algunos compañeros en la asamblea del martes 26 también “hay que dar una vuelta de tuerca a la huelga”.

Esto es clave, pues otra forma más si-bilina de acabar con la huelga, podría ser dejarla que se desgaste para acabar le-vantándola a cambio de alguna migaja.

La responsabilidad de CCOO en que la lucha se gane o se pierda

La lucha contra los despidos se endu-rece, y la huelga debe hacerlo también. La plantilla está ya dando el 100% de su tiempo y energía; mantienen los pique-tes, van a las empresas a buscar la so-lidaridad, a llevar la caja de resistencia, se solidarizan con otros conflictos obre-ros y sociales, como con la PAH o en la manifestación contra la violencia de género, organizan rifas y festivales soli-darios... La pelota está pues en el tejado de las organizaciones sindicales, empe-zando por CCOO, que es el sindicato al que está afiliada la mayoría de la planti-

lla. CCOO debería levantar ya una gran campaña de solidaridad con PANRICO, empezando por el Vallés y Catalunya, y extendiéndola al resto del Estado, y dejarse de “marear la perdiz”. La huel-ga de PANRICO es lo que se llama un “conflicto testigo”. Si gana, sentará pre-cedente para el resto de luchas. La gente dirá “Sí, se puede, si hacemos como en PANRICO”. Por eso Gila está tan duro, y hasta Homs de la Generalitat sale a apoyarlo. Por eso para ganar, se necesita que sea tomado por las organizaciones sindicales, políticas y sociales como un conflicto de todos los trabajadores.

Hay que exigir a CCOO, junto con todos los afiliados y delegados de otras empresas que apoyan a los trabajado-res de PANRICIO, que impulse bonos y mueva la caja de resistencia por todas las empresas, y que ponga parte de sus fondos y cotizaciones para fortalecerla, así como que acelere todos los trámi-tes legales para que la empresa abone inmediatamente el IPC atrasado que se ganó en los tribunales. Ningún compa-ñero tiene que verse asfixiado econó-micamente por luchar.

Pero además de esta solidaridad ma-terial hay que pelear porque CCOO im-pulse movilizaciones en toda la comar-ca y en Barcelona, que además de por la lucha de PANRICO, sume también al resto de empresas en conflicto, como la ALSTOM, la Johnson and Control o la Delphi, por mencionar sólo algunas de la comarca. Hace falta coordinar y unifi-car todas estas luchas mediante un plan y medidas de acción comunes. Al mismo tiempo, hay que denunciar públicamen-te la labor de traidores de los delegados firmantes y de los delegados esquiroles que siguen bloqueando que el resto de plantas del grupo no se sumen a la lucha, sean de UGT o de CCOO. Como los de Paracuellos, donde la plantilla votó dos veces el ir a la huelga. Se ha de animar y apoyar a sus trabajadores para depo-ner estos dirigentes vendidos y a elegir otros que les permitan salir a la lucha,

con Comités de Huelga elegidos en las asambleas y formados por trabajadores honestos y con ganas de luchar.

¡¡Sí se puede ganar!! ¡¡Rompamos el cerco, que PANRICO sea la lucha de todos los trabajadores!!

Estas son algunas de las medidas más elementales para romper el aislamiento al que la empresa, y cada día más la di-rección de CCOO, quieren condenar a la lucha para que cunda el desgaste. Medi-das que deberían ir en ascenso, sin des-cartar paros o huelgas de apoyo en la co-marca y otras grandes empresas, cortes de carretera simultáneos en Catalunya... y otras medidas. Un primer paso en esta dirección es el encuentro de solidaridad con PANRICO que se está preparando para el próximo 14 de diciembre, que puede ser una lanzadera para impulsar una gran campaña de solidaridad y el germen de una coordinación de todas las empresas y sectores en lucha del Vallés.

En esta tarea también el resto de or-ganizaciones sindicales, empezando por las de la izquierda sindical, tienen una gran responsabilidad. Más aún cuando cada vez es más claro que la dirección de CCOO se está empeñando cada vez más en que la huelga se acabe, y no se puede descartar que lleven adelante una traición brutal como han hecho en otros muchos conflictos. Sindicatos como la CGT, la IAC, CoBas... deben ser parte activa de esta campaña de solidaridad y coordinación, dejando a un lado todo corporativismo o actitud recelosa por un tema de siglas. Ellos pueden demostrar en la práctica otra forma de hacer sindi-calismo, poniendo sus delegados, Comi-tés de Empresa... al servicio de la lucha.

También los estudiantes, asociacio-nes de vecinos, asambleas de barrio, movimientos sociales... deben jugar un rol clave, como muchos ya lo están em-pezando a hacer. Como la Federación de Asociaciones de Vecinos de Saba-

dell que va a organizar charlas en todos los barrios, o los estudiantes de la UB Raval que van a impulsar un dinar po-pular para la caja de resistencia.

En esta misma dirección nosotros como grupo marxista revolucionario llamamos también a todas las organi-zaciones de la izquierda anti-capitalista a tomar esta lucha como suya, empe-zando por las CUP que deberían poner a su disposición su amplia red munici-pal y los diputados en el Parlament.

Romper el cerco e imponer un giro a favor de la lucha de la política de CCOO son dos tareas cruciales en este momen-to. Los trabajadores de PANRICO han demostrado por activa y por pasiva que están dispuestos a llevarlas adelante, la última vez el pasado jueves, cuando lo-graron tumbar la última maniobra de los miembros del Comité contrarios a conti-nuar la huelga que quería hacerles volver al trabajo por medio de falsos rumores. Para que la lucha pueda avanzar y forta-lecerse va a ser necesario que al frente de la misma estén los mejores, los más convencidos... y no aquellos que le están poniendo palos en las ruedas. Hasta aho-ra la asamblea está logrando controlar la huelga, el Comité de Huelga acepta lo que se decide. Pero en esta nueva fase de la lucha cada vez se hace más necesa-rio que los que están arriba sean la más fidedigna expresión de lo que se piensa y discute abajo. Esta lucha, que está ha-ciendo historia, se merece unos dirigen-tes y portavoces que infundan ánimos, organicen las acciones, busquen la coor-dinación con otras empresas... y corten todo rumor o maniobra que busque sem-brar el desaliento. Esta cuestión, que ya se empieza a discutir en las hogueras y corrillos, será sin duda una de las claves de la siguiente etapa de la lucha para po-der ganar y evitar posibles maniobras y traiciones desde arriba.

La lucha debe pues salir hacia afuera y fortalecerse para poder tener la fuer-za suficiente para imponer el 0,0, para evitar todo despido y recorte, para que Gila tenga que echar marcha atrás. Y si se niega a hacerlo, proponerse otras salidas, como ocupar la planta y pelear porque la planta sea expropiada por la Generalitat y puesta a producir bajo el control de los trabajadores. Una salida, que ya han tomado otros trabajadores en otros lugares del mundo -como los de la empresa argentina Zanon- que garan-tizaría el mantenimiento de los puestos de trabajo y todas las condiciones.

Clase contra Clase 6/12/2013

4 SUPLEMENTO ESPECIAL

IMÁGENES DE UNA HUELGA HISTÓRICAL a lucha de los trabajadores/as de PANRICO acaba de cumplir dos meses de huelga, que arrancó el domingo 13 de octubre. Dos meses con la

principal planta del grupo paralizada, y sus entradas custodiadas por piquetes permanentes. Pero además, los trabajadores/as de la planta de Santa Perpetua, con la fi rme intención de luchar por los 0 despidos y 0 rebajas salariales, empezaron desde bien pronto a movilizarse y sacar

el confl icto hacia fuera, extendiendo su lucha y generando una amplia solidaridad entre sectores combativos de trabajadores, estudiantes, vecinos... Estas iniciativas, como otras tan importantes como abrir la caja de resistencia o los viajes a otras plantas del grupo donde sus delegados vendidos ha bloqueado que se sumaran a la huelga, han sido claves para resistir estos dos meses y poder esquivar todas las maniobras de la burocracia sindical para hacerlos volver a entrar a trabajar. En esta fotogalería hemos rescatado algunos, no todos, de los momentos de esta histórica huelga.

Haciendo frente al dispositivo policial en Santa Perpetua. Durante la primera semana de huelga los trabajadores y

trabajadoras de PANRICO se enfrentaron a un gran dispositivo policial que sirvió para que los camiones pudieran entrar a reco-ger todo el stock que quedaba en la planta y llevarlo a otros cen-tros del Estado español, además de todo el material de ofi cinas para que los administrativos pudieran seguir trabajando desde Esplugues. Cargas policiales el primer día de huelga, retenciones ilegales, más golpes... así comenzó esta importante lucha.

Junto a los trabajadores de Alupu en Sabadell. Los trabajadores/as de PANRICO estuvieron tres días en los portones de Alupu dando

solidaridad a los compañeros en huelga indefi nida por las amenazas de

la empresa de llevarlos a Italia durante nueve semanas con la intención

de desmoralizarlos y que renunciaran por su propia cuenta. Al fi nal, gra-

cias a los trabajadores de PANRICO y una actitud intransigente frente a

la empresa y los Mossos consiguieron negociar una salida que satisfi zo a

los trabajadores. Demostrando que con una coordinación de sectores en

lucha, empezando por una solidaridad activa, se puede vencer.

Concentración en Plaza Sant Jaume. Las trabajadoras/es de PANRICO se concentraron el viernes 18 de octubre delan-

te de la Generalitat en Barcelona por las cargas policiales sufridas por los trabajadores el mismo día. Estuvieron acompañados en todo momento por los compañeros de No Pasarán y estudiantes combativos, abogando por una unión obrero-estudiantil que pon-ga freno a los planes de ajuste que sufren todos los sectores. Al día siguiente se realizó una marcha desde la fábrica hasta Santa Perpetua, en la que participaron centenares de personas solidarias.

Viajes a Madrid y Zaragoza. Ante la negativa de los diferentes Comités de Empresa de otras

plantas a sumarse a la huelga, los trabajadores/as de PANRICO Santa Perpetua realizaron varios viajes a algunas de ellas para dialogar con sus compañeros a la entrada y salida de los turnos, y convencerles de que les impusieran a sus dirigentes sindicales la nece-sidad de sumarse a la lucha y rechazar los principios de acuerdo que proponía la Comisión Negociadora.

Militando la caja de resistencia. Durante todo este tiempo han sido muchas las iniciativas para llenar

la caja de resistencia. Desde rifas, mercadillos... hasta las visitas y reuniones con Comités de Empresa de diferentes empresas. Los trabajadores de SEAT, NISSAN, DANONE, COCACOLA, el Puerto de Barcelona, TMB... han manifes-tado su solidaridad y han aportado importantes cantidades económicas. Así se han ido tejiendo importantes lazos de ayuda y coordinación entre todos estos sectores obreros.

5SUPLEMENTO ESPECIAL

IMÁGENES DE UNA HUELGA HISTÓRICAManifestándose por las calles de Sabadell.

El 17 de noviembre realizaron una gran

manifestación por las calles de Sabadell, sacando

el confl icto a fuera con la solidaridad de los veci-

nos de la zona. Organizaciones como Clase contra

Clase y CUO, empresas en lucha como Alupu o

Alstom... se hicieron presentes. La manifestación

acabó en el Ayuntamiento con emotivas interven-

ciones hacia la lucha de los compañeros de PAN-

RICO y las organizaciones solidarias.

P rimer encuentro de trabajadores y solida-ridad con PANRICO. Los trabajadores y

trabajadoras de PANRICO junto a asociaciones de vecinos, sindicatos, organizaciones políticas, estu-diantiles... han preparado para el 14 de diciembre un encuentro de trabajadores en lucha. Un espa-cio que pretende impulsar la coordinación entre diferentes empresas en lucha y para que surjan

acciones para echar atrás los planes de las patrona-les, empezando por imponer el 0-0 de PANRICO.

Además de una buena oportunidad para que toda la zona del Vallés pueda brindar toda la solidaridad a la lucha de esta fábrica que está haciendo historia.

P resentación del libro Pan y Rosas de las compañeras de Pan y Ro-

sas en Terrassa. El 22 de noviembre las trabajadoras y trabajadores de PANRI-CO acudieron como invitadas de honor a la presentación del libro Pan y Rosas en el Casal de la Dona en Terrassa. En

la presentación hubo momentos muy emocionantes entre las ponentes y las

trabajadoras/es de PANRICO llegando a saltar alguna lágrima.

Actos de unidad obrero estudiantil. Los trabajadores de PANRICO también

han ido a las universidades a tejer lazos de unidad obrero-estudiantil. Estuvieron en varias ocasiones en la UAB, incluida la fi esta mayor.

También en la UB, en el campus del Raval, dando una charla ante un auditorio lleno de

estudiantes combativos. Este acto, organizado por No Pasarán, Pan y Rosas y AEP, sirvió

para que se crease “in situ” el Comité de Soli-daridad Estudiantil con PANRICO.

T rabajadores/as de PANRICO en Te-lepizza Zaragoza. Los trabajadores

y trabajadoras de PANRICO participaron de la concentración convocada por la Sección

Sindical de CGT-Telepizza en Zaragoza. Lle-varon toda la solidaridad a la lucha de Telepi-zza por la readmisión del compañero David y

estuvieron en la fi esta solidaria organizada por ellos, que recaudó dinero para la caja de resis-

tencia de la huelga.

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6 SUPLEMENTO ESPECIAL

El próximo viernes 13 se cumpli-rán 2 meses desde el arranque de esta huelga que ya es histórica. El ge-rente Carlos Gila y los representan-tes vendidos de la Comisión Negocia-dora que firmaron el acuerdo de los 745 despidos seguro que esperaban que tras esa traición los ánimos iban a decaer. Incluso las direcciones de CCOO en Catalunya y la Federación a eso apostaron con sus maniobras y rumores sobre la huelga ilegal para intentar forzar la vuelta al trabajo. Sin embargo lo que ha ocurrido ha sido todo lo contrario. La “vuelta de tuerca” a la huelga que plantearon algunos trabajadores en la asamblea donde se informó del acuerdo defini-tivo, está ya tomando cuerpo-

El bloqueo de las delegaciones de ventas frena las medidas anti-huelga de la empresa

Uno de los obstáculos que ha enfren-

tado el conflicto desde el principio es la vil posición de los delegados y Comités de Empresa de PANRICO del resto del Estado y de los repartidores. Tanto los representantes de UGT y CCOO, como los de los autónomos, se han negado a sumarse a la huelga. Los trabajadores de Santa Perpetua han intentado com-batir esta actitud viajando a las fábricas de Zaragoza y Madrid para hablar con los trabajadores, animándoles a que impusieran a su Comité la decisión de ir a la huelga. En fábricas como la de Paracuellos sus trabajadores votaron dos veces por la huelga, pero las ma-niobras de su Comité lograron que se desconvocase por las mentiras sobre la huelga ilegal.

Pero además estos representantes han aceptado ser parte del operativo rompe-huelga montado por la empresa, que trae productos de las otras plantas para abastecer el mercado catalán que corresponde a la planta de Santa Per-petua. Los repartidores, dirigidos en su mayoría por la pro-patronal ATA, han sido separados todo el tiempo por sus delegados-jefes de la lucha de los asa-lariados. Vendiéndoles la mentira de que se trata de luchas diferentes, que no va con ellos la cosa. Pero Gila es el mismo que les debe miles de euros y que quiere deshacerse de 300 de ellos. Esta línea, impuesta por una combi-nación de miedo y confusión, ha per-

mitido que los repartidores siguieran reponiendo este producto que es toda una vulneración al derecho e incluso la ley de huelga.

Desde hace más de una semana, los trabajadores de Santa Perpetua han tras-ladado el piquete a las delegaciones de ventas (almacenes) y están bloquean-do toda la distribución. Un duro golpe económico para la empresa, que va a perder las tres últimas semanas de bue-nas ventas antes de Navidad, al mismo tiempo que se mantiene parada y cerra-da a cal y canto la principal planta del grupo por la huelga indefinida.

Avanzar en la unidad de todos los trabajadores de PANRICO

Se trata de una medida de fuerza más llevada adelante con el esfuerzo de la plantilla, y que debería ser apo-yada activamente desde CCOO y todo el Comité de Empresa. No basta con personarse en los piquetes, sino que el sindicato debe exigir a los delega-dos de CCOO en Zaragoza, Paracue-llos, Puente Genil y Valladolid, que se nieguen a seguir produciendo para romper la huelga de Santa Perpetua. Si no lo hacen es inaceptable que es-tos rompe-huelgas sigan en las filas de un sindicato que dice luchar y apoyar la huelga de PANRICO, y la Federa-ción Agroalimentaria debería llamar a que sean revocados por los afiliados en estas plantas que fueron parte del NO a los preacuerdos de la Comisión Negociadora.

Los autónomos, aún siendo más di-fícil por el férreo control que mantie-ne la mafiosa ATA, es necesario, a la

vez que se impide que puedan seguir repartiendo el producto, ver como ten-der puentes, sumar reivindicaciones... hasta conseguir romper la división que la empresa y sus representantes están imponiéndonos y que en nada benefi-cia a los trabajadores.

El primer Encuentro de solidaridad puede convertir la lucha en una lucha de todos

Al mismo tiempo el próximo sábado

14 tendrá lugar el primer encuentro en solidaridad con la huelga de PANRI-CO. En él está prevista la participación de otras empresas en lucha, sindicatos, asociaciones vecinales, plataformas en contra de las retalladas, estudiantes, organizaciones de la izquierda... Este acto pretende ser un hecho de pro-testa y solidaridad en sí mismo, pero también, y fundamentalmente, un foro para aprobar medidas y una hoja de ruta para fortalecer la lucha, extenderla a otros sectores, que sean cientos las personas que estén realizando acciones en favor de poder imponer el 0 despi-dos y 0 recortes por el que pelean los trabajadores de PANRICO.

Por ejemplo algunas entidades ve-cinales ya barajan ideas muy buenas como organizar una marcha por el Va-llés, o promover jornadas de lucha en los municipios próximos a la fábrica, con paros de los comercios, asambleas en los centros de trabajo... También ahí se pueden organizar grupos solidarios que refuercen los piquetes de las dele-gaciones. Otros grupos quieren iniciar campañas de boicot activo a los pro-ductos y la marca de PANRICO. Es-

tudiantes, como los del recientemente creado Comité de Solidaridad de la Universidad de Barcelona, están pro-moviendo una campaña de facultades libres de donuts y otros productos has-ta que la huelga termine...

Puede ser una gran palanca para con-seguir que el conflicto pase a ser una gran lucha popular, que lo convierta en un problema también para la misma Generalitat, que le haga temblar porque la solidaridad es el primer paso para que las ganas de luchar contra otros problemas se extiendan, y que todas estas luchas puedan coordinarse y uni-ficarse para golpear unidos. El Encuen-tro del 14 es oportunidad para que los delegados, secciones sindicales, comi-tés de empresa y las diferentes organi-zaciones nos demos un espacio común de coordinación contra los despidos, cierres, recortes salariales y el chantaje patronal. Si tocan a uno, nos tocan a to-dos. Por eso es necesario luchar juntos contra las empresas esclavistas.

Dos pilares claves para poder imponer el 0,0: la lucha económica contra la empresa y la extensión y solidaridad con el conflicto

La “vuelta de tuerca” que se viene

desarrollando en estos últimos días marca dos de los pilares claves para poder pensar en una victoria.

Por un lado el mantenimiento de la huelga y el desarrollo de todas las medidas necesarias para incrementar el impacto de la misma sobre los be-neficios de la patronal, empezando por aquellas que son una defensa del mis-mo derecho de huelga que se ha viola-do sistemáticamente. Y esto hacerlo al mismo tiempo que se exige a todos los miembros del Comité, y en especial a los que tienen más relación con la Fe-deración de CCOO, que se pongan a la cabeza de la denuncia de los repre-sentantes sindicales vendidos, sean del sindicato que sean, que están sembran-do la división entre los trabajadores y busquen con qué sectores de trabajado-res de esas empresas se puede poner fin al reinado de esos traidores.

Por el otro lado todas las medidas destinadas a “romper el cerco”, sumar otros sectores al combate, fortalecer la solidaridad, la caja de resistencia... son las que van a dar la fuerza necesaria para mantener la lucha y además abrir

2 meses de huelga en PANRICO

La lucha se endurece, sí es posible imponer el 0,0

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te del movimiento popular que arropó la huelga de los trabajadores y traba-jadoras de la limpieza y jardines, una gran lucha obrera que puso contra las cuerdas al ala más derechista del PP y que logró, aún a pesar de su dirección, echar atrás el brutal plan de despidos.

En las últimas semanas hemos veni-do haciendo esto también con la huel-ga de PANRICO, una lucha que ya es histórica. Promover la solidaridad, la caja de resistencia, los contactos con otros sectores en lucha... ha sido nues-tro modesto aporte. Y al mismo tiempo, en la cotidianeidad del piquete, en los diferentes momentos que ha ido atrave-sando la lucha, hemos ido extrayendo importantes lecciones de la misma jun-to con buena parte de los trabajadores y trabajadoras más activos.

Como algo primordial es la inten-ción de no conformarse con el mal menor, que queda sintetizado en el lema del confl icto “0 despidos y 0 rebajas”. Nada que ver con la canti-nela que en otras empresas enarbolan muchos delegados, de que “es lo que hay”, “la cosa está muy difícil”, “más vale perder un poco ahora”... y que es la banda sonora del “cuesta abajo y sin frenos” al que nos están llevando. La pelea por la defensa de los puestos de trabajo, pero con salarios y condi-ciones dignas, es una de las señas de identidad de esta gran lucha.

La otra es la de buscar la solidaridad, el apoyo y hasta la coordinación, con otros trabajadores y sectores en lucha. El apoyo a los trabajadores de ALU-PU, a los vecinos de la PAH, la parti-cipación en diversas manifestaciones... la militancia de la caja de resistencia en muchas empresas, universidades... Y el mismo Encuentro de solidaridad organizado en Sabadell el próximo 14 de diciembre, que puede ser el ger-men de una coordinación superior, son muestras de que se están recuperando tradiciones del movimiento obrero que parecían olvidadas.

Por último, pero es algo central que en muchos confl ictos no sucede, es la importancia de que las decisiones partan de abajo, que ningún paso de-cisivo pueda darse sin la aprobación de la asamblea. Esto ha desbaratado en sucesivas veces los intentos de una parte del Comité de Huelga de intentar hacer volver al trabajo, por medio de rumores y mentiras nada dignos. Esta actitud ha generado una desconfi anza muy amplia hacia este tipo de sindica-lismo, y sobre todo, hacia los aparatos burocráticos que están detrás, que se expresa en que en la práctica todas las medidas que hacen grande a esta huel-ga han sido impuestas desde la base a los dirigentes más timoratos.

Todo esto deja planteado para noso-tros una cuestión que es clave. Los tra-bajadores y trabajadoras necesitamos y merecemos nuevas direcciones en las

empresas y las luchas. El rol que están jugando muchos dirigentes acomodados y pasivizados tras décadas de sillón es nefasto. La máxima democracia asam-blearia es clave para controlarlos, pero es necesario empezar a pensar en que sur-jan nuevos compañeros y compañeras que al calor de estas experiencias, y jun-to con los delegados actuales que sí es-tán a la altura, sean los nuevos delegados y miembros de los Comités, secciones... en la perspectiva de poder reconquistar los grandes sindicatos y poder dejar en la calle a los Toxo y Méndez que hoy los corrompen. Las luchas actuales y futu-ras necesitarán direcciones a la altura del desafío para poder triunfar.

Para nosotros todos estos puntos son cuestiones claves que ameritan empezar a pensar como transformamos estas va-liosas experiencias en herramientas para las luchas actuales y futuras y en orga-nización. Somos muchos los trabajado-res, trabajadoras y jóvenes que en luchas como al de PANRICO, los basureros, las limpiadoras, Telepizza... los levantamos y tratamos de hacer realidad, muchas ve-ces contra la corriente, y sobre todo en contra de la burocracia sindical que hasta el momento dirige el movimiento obre-ro. Para nosotros es necesario encontrar las formas para reagruparnos detrás de la defensa de todos estos puntos, poder sin-tetizarlos y llevarlos a otras luchas, otros trabajadores y jóvenes que salen a luchar muchas veces por primera vez.

En este sentido desde Clase contra

Clase queremos proponer levantar en común un agrupamiento de todos los trabajadores, trabajadoras y jóvenes, más allá del sindicato en el que estén afi liados o que no sean parte de ninguno (sea por desconfi anza o por la desidia de los dirigentes sindicales que se nie-gan a organizarlos, como en la mayor parte de la juventud trabajadora), pero que creen que hay que pelear contra la burocracia sindical en los confl ictos y los sindicatos, que hay que hacer todo lo posible por rodear de solidaridad las luchas obreras, retomar tradiciones como la caja de resistencia, la coor-dinación de luchas, los encuentros de trabajadores... por formar alas en los movimientos sociales y el movimiento estudiantil que vean también esta nece-sidad de unirse a la clase trabajadora, y pelear por un programa de clase, para que la crisis la paguen los capitalistas y no por el “mal menor”.

Se trataría de un primer pero impor-tante paso para que las luchas obreras que están por venir cuenten desde el principio con el apoyo de toda esta masa crítica de jóvenes y trabajadores, y no se vean obligadas a partir en muchas cosas de cero. Un paso para tratar de avanzar en que las trabajadoras, trabajadores y sectores populares, empecemos a decir basta a la cadena de retrocesos que ve-nimos padeciendo en los últimos años, un paso en defi nitiva para empezar a ver nuevas y mayores victorias contra la patronal y su Gobierno.

SUPLEMENTO ESPECIAL

un frente al Govern, que se llena la boca de hacer país, mientras apoya el plan de viabilidad en boca del mismo Vicepresidente Homs.

A la presión económica que se le vie-ne ejerciendo desde el 13 de octubre a Gila, que va a tratar de aguantar tirando de millones, hay que sumarle la mayor

de las presiones políticas, por medio de convertir esta lucha en un problema no sólo para PANRICO sino para la mis-ma Generalitat.

Estos dos pilares son claves y se re-troalimentan entre sí. Cuanta más fi r-meza han mostrado los trabajadores y la huelga, más sectores se han decidido

a apoyarles y sumarse a la solidaridad. Y viceversa. Este apoyo es la garantía necesaria para que la lucha se pueda mantener, extenderse y fortalecerse, se pueda llenar la caja de resistencia para que nadie dude por la falta de salario, se pueden reforzar los piquetes con es-tudiantes y obreros solidarios...

Viva la lucha de las/os obreras/os de Panrico!¡Que no salga ni un donnete de las delegaciones!¡Por la coordinación de los trabajado-res contra el chantaje empresarial!¡0 despidos y 0 rebajas!

Viene de Contraportada

Lee y difunde

órgano de expres ión mensua l de C lase cont ra C lase

www.c lasecon t rac l ase .o rgC/Berenguer de Bardaji 20-22CP 50010 Zaragoza // teléfono Zaragoza 625 389 389 // teléfono Barcelona 699 789 036 // clasecontraclase@hotmail.com

Las compañeras y compañeros de Clase contra Clase venimos inter-viniendo en algunas de las luchas obreras más importantes que se han dado en el Estado español al calor de la actual crisis capitalista. Somos un grupo marxista revolucionario bastante joven, compuesto por tra-bajadores y estudiantes, que vibra-mos con todos estos procesos, porque somos conscientes de que es al calor de estas y futuras batallas como se podrán dar pasos en recomponer la capacidad de lucha de nuestra clase.

Una lucha que hoy parte por enfren-

tar los ataques de los capitalistas, pero que apostamos a que se encamine en la perspectiva de acabar con este Régimen político podrido, esta democracia de los ricos y con la explotación y opresión que genera el capitalismo, aquí y en el resto del mundo. Estamos seguros que la actual crisis que va a generar nuevas oportunidades para conseguirlo. Nuevas situaciones y procesos revolucionarios. Ya en estos años hemos visto crecer la capacidad de lucha de la juventud y la clase obrera en numerosos países.

Para que estas oportunidades las po-damos aprovechar consideramos que los trabajadores debemos construir he-rramientas que sean capaces de pelear por una victoria de la clase obrera y los sectores populares. Como una central está la de poder construir un gran parti-do de trabajadores revolucionario, en el Estado español y a nivel internacional, que luche por levantar una verdadera democracia de los trabajadores, un Go-bierno nuestro, que permita avanzar en poner al servicio de las grandes mayo-rías sociales todos los medios que pro-ducen la riqueza mediante la expropia-ción del puñado de capitalistas que hoy dictan nuestro destino.

Esta salida de fondo aún no es com-partida por la gran parte de la clase tra-bajadora. Sin embargo nosotros cree-mos que en este camino son muchas las tareas preparatorias que hay que echar-se a la espalda, como acabar con la bu-rocracia sindical que hoy corrompe los sindicatos y que está llevando a muchas luchas a callejones sin salida y derro-tas, unifi car los sectores obreros que la patronal divide entre fi jos, contratados, precarios, inmigrantes... y retomar tra-

diciones de lucha que parecían perdi-das como la huelga, la coordinación de las luchas o las cajas de resistencia, así como construir alas en los movimientos sociales y el estudiantil, que sean alia-das de las luchas de los trabajadores.

A día de hoy, estas sí son tareas que son vistas por un número cada vez mayor de jóvenes, trabajadoras y tra-bajadores como necesidades elemen-tales para poder ganar los combates del presente. Nuestro grupo viene pe-leando por estas cuestiones en común con muchos de ellos, y hacia ellos di-rigimos esta propuesta.

Nosotros hemos sido los impulsores de uno de los primeros procesos de organización en un sector tan preca-rio como Telepizza. Allí tuvimos que pelear, junto con decenas de jóvenes trabajadores, con la empresa, pero también con la burocracia sindical de CCOO y UGT, que no querían que los trabajadores se organizaran bajo la de-manda de “pasar al convenio de hoste-lería” porque cuestionaban el convenio de segregación y a la baja (de pizzas) que ellas mismas habían fi rmado. Lle-vamos adelante una lucha en coordina-

ción con otros trabajadores de empre-sas del automóvil, el transporte urbano y otras muchas, toda una muestra de unidad entre la juventud precaria, los obreros y obreras más mayores y con derechos conquistados, que nos permi-tió ganarle el pulso a la empresa.

Con orgullo hemos sido parte de grandes luchas obreras, organizando la solidaridad con ellas en las faculta-des e institutos. Como con la huelga de los mineros en 2012, levantando además la reivindicación de luchar por la nacionalización bajo control obrero de todo el carbón, en contra de la polí-tica de “más ayudas a las patronales” de las direcciones de CCOO y UGT. También con otros confl ictos impor-tantes, como las trabajadoras de la limpieza de centros sanitarios de Ara-gón, que tras más de 40 días de huel-ga lograron tumbar la aplicación de la reforma laboral que quería hacerlas pasar al Estatuto de los Trabajadores y a cobrar el salario mínimo. También la de los jóvenes informáticos de HP. O recientemente en Madrid, siendo par-

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Una propuesta para los trabajadores, trabajadoras y jóvenes que están peleando para que la crisis la paguen los capitalistas

por l a reconst rucc ión de la cuar ta in te r nac iona l

órgano de expres ión mensua l de C lase cont ra C lase