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LA EDUCACIN ARQUITECTNICA EN LA UNI-VERSIDAD DE TUCUMN (1939-1952)

Franco MARAGLIANO*

AbstractThe characteristic of the Institute of Architecture and Urbanism of Tucumn in the Argentinean scenarioof the second half of the XX century is bound to a local re affirmation of the modern movement. Maybewhat transcends of their short existence is their zeal for the consolidation, through teaching, of the theo-retical and constructive budgets of the modern architecture, where ideology and didactics converge for thefirst time in the country in an university environment.Starting from 1946, during the first Peronist government, deep transformations happened in the NationalUniversity of Tucumn that consolidated its academic and cultural pole of the Argentinean North. But

there of the complicated relationship among the public universities and the government, the splendor ofthe university cloisters in Tucumn coincides with that "Peronist Revolution", mark where the Instituteof Architecture carries out a renovated teaching process with valuable relations of the Argentinean andforeign modern architecture, such as Eduardo Sacristi, Jorge Vivanco, the italians Ernesto Rogers, EnricoTedeschi and Calcaprima Encircles, among others. In this way, the school of Tucumn, deeply modifiesthe old pedagogic concepts and outlines a new didactics as architectural school of vanguard in LatinAmerica based on three fundamental pillars: Researching, Projecting, and Building.Under the new methodology to be disciplined conceives projects from the Institute that were paradigmsof the Modern Movement in Argentina. The unconcluded University City of Tucumn in the "Cerro SanJavier", the Hospital City in Horco Molle and a series of plans regulators for the region, projects these lastones that although they were devised when the Institute had disappeared, IN 1952 it changes its name forFaculty of Architecture and Urbanism - they manifest the direct influence of its fundamental postulates.Thus in this kind of works of an eminent public character sponsored by the national government, there isan outline of an especial conjunction among architecture, university and State.During Peron's second government (1952-55) a series of events rebounds negatively on the political andeconomic conditions of the country, and therefore, in the sphere of University of Tucumn. That situationcaused, first, the massive renouncement of the Professors of the Institute and later on their definitive disap-pearance. Nevertheless the motivation of the Institute will continue latent a considerable time, product ina large part of the students that continued bound as teachers in the Faculty. The scale that had the Instituteis not ignored by those who integrate the Faculty of Architecture and Urbanism of Tucumn. But apartfrom incidental recognitions, the certain thing is that the information seldom exceeds the anecdotic orsuperficial character. And on the other hand, we question ourselves about which are the legacies and thecharacteristics of the Institute, its meaning, the inheritance that somehow can infer so much in the acade-mic field where we practice architecture. Some of the objective we pursue in our investigation. Is to verifyif in the present times , we can recognize the distinctive features in the city of Tucumn, (in the construc-tive field) or in the FAU ( in the pedagogical field) which demonstrates the existence of something thatwas, half a century behind, one of the most advanced architectonical schools, in America Latina.

Introduccin

Hablar de los orgenes en la enseanza de la arquitectura en la Universidad Nacionalde Tucumn significa rever todo un derrotero que se extiende ms de medio siglo,donde comienzan a estructurarse las bases acadmicas de nuestra Facultad. Con estaconsideracin hemos explorado la primera Escuela de Arquitectura fundada en 1939hasta la creacin de la Facultad en 1952. Proceso histrico que tiene su ncleo ms

*Facultad de Arquitectura y Urbanismo - UNT fmarigliano@webmail.unt.edu.ar

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relevante en el Instituto de Arquitectura y Urbanismo -sobre cual indagaremos conmayor profundidad-, una experiencia que nace en 1946 y que transforma a Tucumnen un centro de vanguardia en la enseanza de la arquitectura .1El perodo del Instituto de Arquitectura, ms all de su campo disciplinar especfico,conjuga una serie de factores polticos, sociales y culturales ligados a las transfor-maciones que suceden en la Universidad de Tucumn durante el rectorado deHoracio Descole, entre 1946 y 1952. Nuestro trabajo procura indagar este proceso

con una perspectiva amplia y abarcativa, una aproximacin documental que se haceeco en Adolfo Bioy Casares cuando seala "la nica forma de sobrellevar la historiaes escribindola". En ltima instancia, buscamos revelar las circunstancias por lascuales la enseanza arquitectnica en el Tucumn de mediados del siglo XX, segnversiones sostenidas durante dcadas, fue una de las ms paradigmticas en lamodernidad de Amrica Latina.

La Escuela de Arquitectura

En julio de 1939 bajo el rectorado del Dr. Julio Prebisch se crea la primera Escuelade Arquitectura dentro de la Facultad de Ingeniera. Apoyados por el decano Ing.Arturo Guzmn, los arquitectos Adolfo Cavagna y Horacio Moyano Navarro comen-zaron a diagramar lo s primeros bosquejos curriculares para la enseanza arquitect-nica en Tucumn junto a un reducido plantel docente: el plstico espaol Pedro Zurrode la Fuente, los arquitectos Ricardo Orlando Marr, Gualterio Carminatti, y ungrupo de profesores de la Facultad de Ingeniera.Dos ejes bsicos podran sintetizar el primer plan de estudios de la Escuela deArquitectura: 1) una marcada lnea academicista en la enseanza, tal como sucedaen el resto de las facultades del pas segn criterios fundados en la Escuela de BellasArtes de Pars; 2) un mayoritario aporte terico correspondiente a las ingenieras.Asignaturas como Teora e Historia de la Arquitectura, Dibujo de Ornato, croquis yacuarela, Modelados y dibujos de desnudos se fusionaban con la rigurosidad delAnlisis Matemtico, la Fsica Experimental, el aprendizaje de las Construcciones enmampostera, madera y hormign armado o la Ingeniera Legal. Si bien elMovimiento Moderno ya tena presencia en el contexto arquitectnico argentinodesde las primeras dcadas del siglo XX, las reglas Beaux Arts eran preponderante

en la enseanza del oficio. La conformacin de la modernidad, pues, se limitaba a lasinvestigaciones que cada arquitecto resolva dentro del campo puramente constructivo sinque las escuelas de arquitectura participen como protagonistas.Este esquema se mantuvo hasta 1944, ao en el que se incorporaron a la Escuela dosjvenes arquitectos de Buenos Aires: Eduardo Sacriste y Horacio Caminos. "LaEscuela de Arquitectura -recuerda Carmen Pags- tena las mismas caractersticastericas que se dictaba en Buenos Aires. La enseanza era puramente ingenieril, llenade clculos y frmulas, y lo poco que hacan de arquitectura eran dibujos con acua-rela, estudios de los mtodos compositivos o copiar los ordenes clsicos (...) pareceincreble el salto que dar unos aos despus" 2 . En efecto, la experiencia en la prc-tica profesional basada en el lenguaje de la arquitectura moderna y sus investigacio-nes proyectuales junto el vanguardista Grupo Austral permitieron a Sacriste y

Caminos motivar por primera vez un posible vnculo entre la modernidad y el campode la didctica. Primer paso hacia una substancial transformacin de la enseanzaarquitectnica, que un ao ms tarde tendr un nuevo y decisivo empuje con el arri-bo a Tucumn del arquitecto Jorge Vivanco.

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Transformaciones en la Universidad Nacional de Tucumn

Lo que sucedi a partir de 1946 con la fundacin del Instituto de Arquitectura yUrbanismo representa uno de los perodos ms sobresaliente de nuestra historia, cicloque no slo involucra a nuestra Casa sino a la Universidad de Tucumn en su con-junto. Compartiendo con Marina Waisman 3 en cuanto que toda investigacin sobrela arquitectura latinoamericana debe cotejarse con el desarrollo de movimientos an-logos en lo poltico, social y cultural podramos hablar del Instituto sin antes sea-

lar las transformaciones en la Universidad a partir del rectorado del Dr. HoracioDescole? Sera desatinado enmarcar la nueva pedagoga propuesta por Vivanco,Sacriste y Caminos en un espacio acadmico superior que involucra al resto de losInstitutos universitarios? Aunque no pretendemos profundizar sobre aquellas cues-tiones, s deberamos cuanto menos citarlas a fin establecer el contexto real de aque-llas transformaciones.El sistema educativo en Argentina, desde la escuela primaria hasta la educacin supe-rior, no fue ajeno a los significativos cambios que se sucedieron en el pas desde queel peronismo lleg al gobierno en 1946. El mbito universitario fue uno de los prin-cipales opositores a Pern, con lo cual luego de su categrico triunfo todas las uni-versidades del pas fueron avasalladas, vulneradas y finalmente intervenidas. No obs-tante, si bien el caso de la UNT no escap al contexto general, experiment profun-dos cambios estructurales que la llevaron a un alto grado de excelencia acadmica.En mayo de 1946 el Dr. Horacio Descole asumi la intervencin de la UNT con elfirme propsito de transformarla en el polo cultural ms importante de la regin, pro-fundizando una inquietud fundamental de Juan B. Tern al crear la Universidad en1914. Como aconteca en casi todos los centros universitarios de Amrica Latina des-pus de la Segunda Guerra Mundial, el exilio de muchos investigadores tendr comodestino final nuestra provincia. Si bien durante los aos '20 y '30 se haban incorpo-rado a la UNT un importante nmeros de profesores extranjeros -recordemos a losingenieros alemanes en la Facultad de Ingeniera, o la significativa presencia, entreotras, del espaol Manuel Garca Morente en Filosofa- lo cierto es que el procesotuvo su auge a partir de 1947.El rea tecnolgica fue copada por alemanes, austriacos y rusos, situacin que serepeta en el mbito jurdico y humanista donde intelectuales italianos y franceses

ocuparon los ms altos cargos docentes, junto a distinguidos artistas plsticos deBuenos Aires que se integraron tambin a los claustros universitarios de Tucumn 4.La extensin al medio a travs de seminarios y ciclos culturales, la creacin de laOrquesta Sinfnica, la edicin del peridico universitario "El Trpico", fueron ini-ciativas que alentaron espacios intelectuales de tremenda importancia para Tucumn.

El Instituto de Arquitectura y Urbanismo: investigar, proyectar y construir

En este contexto se funda el Instituto de Arquitectura y Urbanismo. Junto a Vivanco,Sacriste y Caminos se sumaron ms tarde los arquitectos Jos Le Pera, Hilario Zalbay Rafael Onetto Jorge Borgato, el plstico Ideal Snchez y un grupo de ingenierosque ya haba participado como profesores en la primera Escuela: Dardo Escalante,Juan Carlos D'Angelo, Jos Galndez, Guillermo Torres Posse y Roberto Herrera

entre otros. "Cuando entr a estudiar arquitectura -recuerda Csar Pelli- nos pasba-mos diseando palacios y urnas para cenizas, mansiones para soberanos que habansido destituidos (...) Pero luego vinieron a Tucumn unos arquitectos jvenes, noscomunicaron las ideas de la arquitectura moderna, y en vez de palacios, empezamosa disear estaciones de mnibus, hospitales, dispensarios, viviendas populares. Ahencontr el sentido de la arquitectura"5 .

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Pero faltaba un hecho decisivo para conformar el Instituto. El viaje a Europa de JorgeVivanco a fines de 1947 no slo sirvi para conectarse con el escenario mundial dela arquitectura moderna, mediante su participacin en el Congreso Internacional dela Arquitectura Moderna de Bridgwaters, Inglaterra, sino tambin para contratar a losarquitectos italianos Ernesto Nathan Rogers, Cino Calcaprina, Enrico Tedeschi,Luigi Piccinato y el ingeniero Guido Oberti. Como tantos que huan de las dictadu-ras europeas y el caos de la Segunda Guerra, los italianos buscaron en la Universidad

de Tucumn, alentados por un visionario Vivanco, un espacio con perspectivas defuturo donde plasmar su bagaje de conocimientos.La primera tarea de aquel cuerpo de profesores fue modificar el rgimen curricular.As diagramaron un nuevo Plan de Estudios, donde el aprendizaje en los Talleressera mediante ejercicios proyectuales destinados a satisfacer problemas reales quepudiera solicitar cualquier organismo dentro o fuera de la Universidad. Un espaciode enseanza donde el alumno se nutra "con los conocimientos bsicos del procesode proyectar y de las tcnicas de construir, con el conocimiento de las artes y cien-cias afines, con una conciencia social y de los problemas de la poca que le son inhe-rentes" 6. Recordemos que congeniar la institucin universitaria con la realidad socialy econmica de la regin era un concepto que alent la fundacin misma de laUniversidad de Tucumn, y que en cierto modo, por el particular marco poltico deentonces, se cristaliz con el gobierno universitario de Horacio Descole.Con este propsito el Instituto busc la transferencia de los conocimientos adquiridos afin de ejercer una influencia transformadora que vinculen la Universidad con su propiomedio. De este modo estableci sus objetivos fundados en Investigar, Proyectar yConstruir, principios que expandan conceptualmente presupuestos acadmicos acredita-dos, y a su vez cuestionaban la didctica por la cual el proceso proyectual quedaba ins-cripto en un marco terico. Dicho en otros trminos, el Instituto de Arquitectura extendisu rol de educador para convertirse tambin en generador de hechos arquitectnicos.Organismos como la Caja Popular de Ahorros, gobiernos municipales y provincialesde la regin fueron desde entonces sus circunstanciales clientes. Los alumnos de losltimos cursos se sometan a una experiencia, cuanto menos novedosa, diseandoedificios con programas y contextos reales bajo el tutelaje de sus maestros. Las esca-las de trabajo variaban segn las circunstancias, desde un conjunto de viviendas

obreras para los Ingenios Marapa, uorco o Villa Alberdi, una escuela y hotel enPurmamarca, un Centro Cvico en Catamarca, o el Plan Regulador de Jujuy-Palpalelaborado por Jorge Vivanco ya en los ocasos del Instituto a principios de 1950. Y sien verdad la mayor parte de los proyectos slo quedaron registrados en el papel fuela impronta metodolgica de enseanza, devenidas siempre en herramientas proyec-tuales, lo que en definitiva subray al Instituto como una escuela de avanzada.Y en este marco debemos citar el emblema proyectual y constructivo por el cual latriloga Investigar, Proyectar y Construir encuentra su ms acabado sentido: laCiudad Universitaria. Incluso podramos afirmar que, por lo menos en la inquietudde su director Jorge Vivanco, el Instituto naci por y para construir la CiudadUniversitaria. La colosal empresa arquitectnica resuma los paradigmas delMovimiento Moderno, sus lenguajes, sus principios arquitectnicos y urbansticos,

parafraseando el discurso de Le Corbusier en el escenario natural de San Javier.Quiz por el peso de aquella utopa, tan propia de la arquitectura moderna, las estruc-turas abandonadas para el block de residencia y las viviendas individuales son hoy elnico reflejo de su frustrada existencia.Merece una alusin aparte la valiosa contribucin que hicieron al Instituto los arqui-tectos italianos. En el campo de la teora, el urbanismo y la historia de la arquitectu-

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ra, Tedeschi y Calcaprina marcaron indudablemente el rumbo disciplinar. La influen-cia ideolgica de Bruno Zevi en cuanto a los lineamientos del estudio histrico, ycomo sealan Alberto Nicolini y Carlos Paolasso 7, los criterios cientficos del pla-neamiento urbano interpretados por Calcaprina sumaron una nueva perspectiva a laenseanza de la arquitectura.La ansiedad de los italianos en generar conocimiento hizo que en muy corto tiempoaparecieran sus primeras producciones escritas publicadas por el Instituto. Cabe aco-

tar que la trascendencia de algunos libros excedi los lmites del Instituto para ilus-trar a escuelas de arquitectura de Amrica Latina y Espaa, entre ellos, los escritosde Tedeschi en Una introduccin a la historia de la arquitectura o la primera traduc-cin al castellano del libro de Zevi Saber ver la arquitectura, realizada por Calcaprinay el alumno espaol Jess Bermejo Goday. Y si quisiramos revisar este breve seg-mento de nuestra historia relatada con el crtico prisma de un italiano, nada ms inte-resante que releer los escritos de Ernesto Rogers -uno de los tericos europeos msimportante de la posguerra- sobre su paso por Tucumn, transcripto en su libroExperiencia de la Arquitectura.El Instituto se consolid entonces como un mbito de singulares caractersticas en elcontexto arquitectnico argentino; all la arquitectura moderna penetra a travs de laenseanza, y por primera vez ideologa arquitectnica y didctica confluyeron en unmbito universitario. Hemos sealado tambin que su gestin coincide con el esplen-dor de la Universidad de Tucumn, contexto en el cual el Instituto promueve un reno-vado proceso de enseanza con valiosos referentes de la arquitectura argentina yextranjera; modifica antiguas normativas de aprendizaje, colabora con los organis-mos oficiales con proyectos concretos para la regin, y con ello plantea una nuevadidctica como escuela de vanguardia. Pero el proceso, como veremos, tomar otromatiz en los comienzos de 1950.

La Facultad de Arquitectura y Urbanismo

En su segundo mandato a partir de 1952 Pern introdujo cambios que repercutieronnegativamente en las condiciones polticas y econmicas del pas, y consecuente conello la UNT imprimi otras directrices a sus propsitos acadmicos. Nuevas autori-dades asumieron el gobierno universitario -Anacleto Tobar y luego Carlos Aguilar-

modificando sensiblemente la estructura acadmica que Descole haba implementa-do a travs de los Institutos universitarios.El Instituto de Arquitectura fue uno de los ms perjudicados, de hecho la mayor partesus docentes renunciaron o fueron cesanteados. No es aventurado vincular aquelhecho como consecuencia de la crisis universitaria, de presiones polticas y del brus-co cambio curricular impuesto en la Universidad 8. El Instituto fue finalmente inter-venido en febrero de 1952, crendose a partir de su estructura la Facultad deArquitectura y Urbanismo bajo la direccin del arquitecto Abel Enrique Tannur, y apartir de entonces se consolid como un ente autnomo al margen de la Facultad deCiencias Exactas y Tecnologa. Junto a algunos protagonistas del Instituto, Tedeschi,Calcaprina o jvenes docentes como Diego Daz Puertas, se sumaron nuevos profe-sores como el americano Norman Fletcher, Dermont Jos Greham, Santiago Ramos

Meja y Eithel Federico Traine.La Facultad de Arquitectura intent seguir los derroteros del Instituto en cuanto con-geniar su produccin intelectual con el medio. De all surgieron el Plan Regulador deSan Miguel de Tucumn de Cino Calcaprina o el proyecto para la Ciudad Hospitalen Horco Molle, que si bien no fue encarada institucionalmente por la UNT -sino porel Ministerio de Salud de la Nacin- estaba coordinada por un grupo de profesores y

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estudiantes de la Facultad con la direccin de Eithel Traine.Aquel estimulo que haba creado al Instituto seguir latente un tiempo prolongado,alentado en gran medida por los alumnos que ya en calidad de arquitectos continua-ron ligados a la enseanza de la Facultad: proceso que de todas maneras tendr otrocorte a partir de 1955 con la cada de Juan Domingo Pern.

Conclusiones

A modo de conclusin podramos cuestionarnos sobre el legado de aquel proceso, laherencia que hoy puede inferir tanto en la prctica profesional como en la ensean-za de la arquitectura en nuestra Facultad. Si hablamos en trminos de "legado cons-tructivo", sto es visible en obras de Eduardo Sacriste, Blanca Saad, RodolfoMitrovich, Pedro Prioris, Jorge de Lasaletta, Ricardo Cuenya, Carlos Robledo,Carmen Pags o Diego Daz Puertas; arquitectos que en muchos casos, adems deafianzar la arquitectura moderna a travs del oficio, ligaron su hacer profesional conun sostenido ejercicio docente. Desde otra perspectiva sera oportuno indagar el"legado pedaggico", aunque enunciado de este modo no sea del todo reconocible.La base pedaggica del Instituto contena grandes dosis de pragmatismo, estableci-do como experiencia piloto en una escuela con pocos aos de ejercicio disciplinar, ycuyo particular criterio de enseanza desapareci junto a sus fundadores.Sin embargo hoy es posible revelar marcas de aquella experiencia pedaggica. Nosreferimos -asumiendo la subjetividad del discurso- a los fundamentos ideolgicosque sustentan algunos profesores de Taller, manifestando que la jerarqua del funcio-nalismo no ha desaparecido; a la conformacin de la Quinta Agronmica construidapor arquitectos de la segunda generacin, espacio donde la Facultad de Arquitecturaexpone los estudios sobre las escala arquitectnicas de Vivanco que a su vez convi-ven con decenas de lminas sobre la obra de Le Corbusier, mentor de los pioneroslocales. Un "Corbu", adems, que se extiende como emblema en propagandas estu-diantiles, y an llega fresco con estudios del Modulor en prendas que aluden al 50aniversario de nuestra Facultad festejado durante el ao 2002.En definitiva, todo lo expuesto constituye el legado de la enseanza arquitectnicaen Tucumn durante los aos '50, vistos en el siglo XXI como ecos casi quijotescos,que como Habermas, nos alientan a completar definitivamente el proyecto inacaba-

do de la modernidad.

Citas1 El artculo se sustenta en la tesis doctoral del autor "El Instituto de Arquitectura y Urbanismo de

Tucumn. Modelo arquitectnico del Estado y Movimiento Moderno en Argentina, 1946-1955", EscuelaTcnica Superior de Arquitectura, Universidad Politcnica de Madrid, Espaa, 2003.2 Entrevista del autor a la arquitecta Crmen Pags de Hill, noviembre de 1999.3 Marina Waisman, El interior de la historia: Historiografa arquitectnica para el caso Latinoamericano.Escala, Bogot, 1990.4 Excede los lmites de este trabajo detenernos sobre el tema. Sin embargo, ms all de involuntarias omi-siones, remarcamos algunos nombres que aportaron sus conocimientos a la Universidad de Tucumndurante aquellos aos. En el Instituto de Derecho Civil, el Dr. Werner Goldschmidt, autor de la TeoraTridimensional del Derecho; en el Instituto de Filosofa, quien ser su Director en 1948 el profesorRodolfo Mondolfo, ex-catedrtico en la Universidad de Bolonia, y otro italiano de prestigio como el pro-fesor Renato Treves; el Instituto de Historia estuvo conducido por uno de los ms importantes pensadores

argentinos, el Dr. Manuel Lizondo Borda; en el Instituto de Artes, dirigido por Guido Parpagnoli se aglu-tinaron personalidades de renombre artstico en el pas como Ideal Snchez, el vanguardista Lino EneasSpilimbergo y el ilustre plstico tucumano Luis Lobo de la Vega. (El caso del Instituto de Arquitecturaser estudiado en los apartados siguientes). Vase a Florencio Gilberto Aceolaza, Descole. Una pasinuniversitaria. Edicin del autor, Tucumn, 1993; Universidad Nacional de Tucumn, Memoria 1947, 1948,1949, Tucumn.5 Entrevista a Csar Pelli, revista Nueva N 425, Buenos Aires, setiembre de 1999, p. 36.

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6 "Plan de Estudios para la carrera de Arquitecto en la Universidad Nacional de Tucumn", ResolucinN 31-130-947, 22 de enero de 1947.

7 Alberto Nicolini y Carlos Paolasso, "Racionalismo y arquitectura orgnica en Tucumn", Documentospara una historia de la arquitectura argentina (Coordinacin de Marina Waisman), Ediciones Summa,Buenos Aires, 1984.8 Las crticas al Instituto desde Federacin Gremial Universitaria -agrupacin estudiantil afn al peronis-

mo- como las presiones para apoyar a Evita como candidata a vicepresidente de la Nacin provocaronrenuncias masiva de profesores, no slo en Arquitectura sino en todos los estamentos de la UNT.