¿Valora Dios a las Mujeres?

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  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

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    1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    Valora Dios

    a las mujeres?

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    2/32

    EL PROP

    OSITO DE LA ATALAYA es honrar a Jehov

    a Dios, el Soberano del universo. En el pasado, las atalayas, o torresde vigilancia, permit

    an descubrir lo que suced

    a a lo lejos. De igual modo, esta revista nos ayuda a descubrir la

    relaci

    on entre las profecas b

    blicas y los sucesos de nuestro tiempo. La Atalaya consuela a la gente anunciando

    que el Reino de Dios un gobierno de verdad que se halla en los cielos pronto acabar

    a con la maldad y

    transformara la Tierra en un paraso. Adem as, promueve la fe en el Rey reinante de dicho gobierno, Jesucristo,quien muri

    o para que pudi

    eramos alcanzar la vida eterna. Esta publicaci

    on, editada sin interrupci

    on desde 1879

    por los testigos de Jehov

    a, es polticamente neutral y reconoce la Biblia como m

    axima autoridad.

    Esta publicaci

    on se distribuye como parte de una obra mundial de educaci

    on bblica que se sostiene con donativos. Prohibida su venta. A menos que se indique lo

    contrario, las citas bblicas se han tomado de la versi

    on en lenguaje moderno Traducci

    on del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras (con referencias).

    345676 Ti ra da me di a de ca da n umero:42.182.000 EN 195 IDIOMAS SEPTEMBER 1,2012

    SERIE DE PORTADA

    3 La triste realidad

    4 Valora Dios a la mujer?

    8 Dios respeta y valora a la mujer

    SECCIONES FIJAS

    16 Ense

    nanzas de la Palabra de Dios:Qu e pasar a durante el Da del Juicio?

    21 Ac

    erquese a Dios: Las nacionestendr

    an que saber que yo soy Jehov

    a

    22 Lo saba?

    23 Nuestros lectores quieren saber:Tienen ministras religiosas los testigos de Jehov

    a?

    & 24 Carta de Grecia

    30 De padres a hijos: Perdi

    o todo por codicioso

    Y TAMBIEN

    12 Al fin conozco al Dios a quien sirvo

    18 La bondad: imprescindible para agradar a Dios

    & 26 Se da a conocer el nombre de Dios en suajili

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    LAS palabras de la jovencita citada a la derecharevelan una triste realidad: mujeres y ni nas detodo el mundo son v

    ctimas de alg

    un tipo de vio-

    lencia o discriminaci

    on. He aqu algunos datos.

    Discriminaci

    on de g

    enero. En el continenteasi

    atico existe una clara preferencia por los ni

    nos

    varones. De acuerdo con un informe de las Nacio-nes Unidas publicado en 2011, se calcula que haycasi 134 millones de mujeres de menos en la po-blaci

    on de Asia debido a abortos, a infanticidios

    o al abandono. Escolarizaci

    on. Dos tercios de la poblaci

    on

    mundial con menos de cuatro a

    nos de escuelason mujeres y ni

    nas.

    Acoso sexual. M as de 2.600 millones de mu-jeres viven en pa

    ses donde no est

    a penado que

    el esposo las viole.

    Atenci

    on m

    edica. En los pases en v

    as de

    desarrollo, aproximadamente cada dos minutosmuere una mujer durante el embarazo o el partopor falta de atenci

    on m

    edica b

    asica.

    Derecho a la propiedad. Aunque las mujerescultivan m

    as de la mitad de los productos del

    mundo, en muchos lugares no se les permite

    tener tierras en propiedad ni heredarlas.A qu

    e se debe que las mujeres reciban un trato

    tan injusto? En algunas culturas se debe a creen-cias y pr

    acticas religiosas que fomentan, e incluso

    justifican, el maltrato y la explotaci

    on de la mujer.El diario espa

    nol El Pa

    s cit

    o en cierta ocasi

    on a

    Amelia Valc

    arcel, catedr

    atica de Filosofa Moral y

    Poltica, quien dijo: No conocemos ninguna reli-

    gi

    on que no discrimine. Y a

    nadi

    o: En ningunade ellas a la mujer se le ha reconocido su libertadindividual.

    Piensa usted igual? Cree que la Biblia es otrolibro sagrado m

    as que rebaja a la mujer? Bas

    ando-

    se en ciertos versculos, a algunos les parece que s

    .

    Pero qu

    e opina realmente de la mujer el Dios dela Biblia? Aunque este sea un tema delicado, valela pena investigarlo de forma objetiva y profunda.

    La triste

    realidad

    Cuando veo c

    omotratan a las mujeres,

    se me quitan

    las ganas de crecer.ZAHRA (15 ANOS),

    edici

    on francesa

    de la revista GEO.

    G.M.B.

    Akash/PanosPictures

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    ESTAS palabras, que en realidad no proce-

    den de la Biblia, se han utilizado durantesiglos para justificar la discriminaci on de lamujer. A

    un hoy existen fan

    aticos que respon-

    sabilizan a las mujeres de todos los males dela humanidad y recurren a textos religiosospara explicar por qu

    e creen que hay que so-

    meterlas. Pero era la intenci

    on de Dios quela mujer fuera despreciada y maltratada por elhombre? Qu

    e dice la Biblia? Ve

    amoslo.

    Maldijo Dios a la mujer?

    No. Jehov

    a Dios maldijo a la serpiente ori-ginal, el que es llamado Diablo (Revela-ci

    on [Apocalipsis] 12:9; G

    enesis 3:14). Cuan-

    do Jehov

    a dijo que Ad

    an dominara a su

    esposa, no le estaba dando su consentimien-to para que la sometiera (G

    enesis 3:16). Solo

    estaba prediciendo cu

    ales seran las tristes

    consecuencias del pecado que haban come-

    tido.

    De modo que el maltrato que sufre la mu-jer es consecuencia del pecado que heredan

    los seres humanos, y no de una maldici

    on di-

    vina. La Biblia no promueve la idea de que lamujer deba ser sometida para pagar por el pe-cado original (Romanos 5:12).

    Fue creada inferior al hombre?

    En absoluto. G

    enesis 1:27 dice: Dios pro-cedi

    o a crear al hombre a su imagen, a la ima-

    gen de Dios lo cre

    o; macho y hembra loscre

    o. As

    que tanto el hombre como la mujer

    fueron creados con la capacidad de reflejar lapersonalidad de Dios. Y a pesar de tener unaconstituci

    on f

    sica y emocional diferente, su

    Creador les encarg o la misma comisi on y lesotorg

    o los mismos derechos (G

    enesis 1:28-

    31).

    Antes de crear a Eva, Dios indic

    o: Voy ahacerle una ayudante [a Ad

    an], como com-

    plemento de

    el (G

    enesis 2:18). Significa elhecho de que Eva fuera creada como comple-mento de Ad

    an que era inferior a

    el? De nin-

    g

    un modo. La expresi

    on hebrea empleadatambi

    en se puede traducir ayuda id

    onea

    Valora Dios

    a la mujer?Por una mujer tuvo comienzo el pecado, y a causa de ella, todos morimos.(ECLESI ASTICO, SIGLO II ANTES DE NUESTRA ERA)T

    u eres la puerta del diablo; t

    u eres la que abriste el sello de aquel

    arbol;

    t

    u eres la primera transgresora de la ley divina; [...]t

    u destruiste tan f

    acilmente al hombre, imagen de Dios.

    (EL ADORNO DE LAS MUJERES, DE TERTULIANO, SIGLO II DE NUESTRA ERA)

    345676Desea obtener m

    as informaci

    on o recibir en

    su hogar clases bblicas gratuitas? Escriba a

    Testigos de Jehov

    a a una de estas direcciones.Encontrar

    a la lista completa de direcciones en

    www.jw.org/contact.

    Argentina: Casilla 83 (Suc. 27B), C1427WAB Cdad. Aut.de Buenos Aires. Bolivia: Casilla 6397, Santa Cruz. Cana-d

    a: PO Box 4100, Georgetown, ON L7G 4Y4. Chile: Casi-

    lla 267, Puente Alto. Colombia: Apartado 85058, Bogot

    a.Dominicana, Rep.: Apartado 1742, Santo Domingo. Ecua-dor: Casilla 09-01-1334, Guayaquil. Espa

    na: Apartado 132,

    28850 Torrej

    onde Ardoz(Madrid). Estados Unidos: 25Co-lumbiaHeights,Brooklyn, NY 11201-2483. M

    exico: Aparta-

    doPostal895,06002 M

    exico,D.F. Per

    u: Apartado 18-1055,Lima 18. Puerto Rico: PO Box 3980, Guaynabo, PR 00970.Venezuela: Apartado 20.364, Caracas, DC 1020A.

    The Watchtower (ISSN 0043-1087) is publishedsemimonthly by Watchtower Bible and Tract Society ofNew York, Inc.; L. Weaver, Jr., President; G. F. Simonis,Secretary-Treasurer; 25 Columbia Heights, Brooklyn, NY11201-2483, and by Watch Tower Bible and Tract Society of

    Canada, PO Box 4100, Georgetown, ON L7G 4Y4. Periodi-calsPostage Paid at Brooklyn, NY,and at additionalmailing

    offices. POSTMASTER:Sendaddresschangesto Watchtow-er, 1000 Red Mills Road, Wallkill, NY 12589-3299. 5 2012Watch TowerBible and Tract Society of Pennsylvania. Todos

    los derechos reservados. Printed in Canada.

    Vol. 133, No. 17 Semimonthly SPANISH

    4

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    para

    el o ayuda similar a

    el. Para ilustrarlo:

    qui

    en es m

    as importante en un quir

    ofano?El cirujano o el anestesi ologo? Es cierto queel cirujano es el que opera, pero no podr

    a ha-

    cerlo sin la ayuda del anestesi

    ologo. Algo pa-recido pasa en el caso del hombre y la mujer.Dios los cre

    o para que colaboraran estrecha-

    mente, no para que compitieran entre s (G

    e-

    nesis 2:24).

    Qu

    e prueba que Dios valora a la mujer?

    Dios previ

    o que, debido a la imperfecci

    oncausada por el pecado original, la actitud delhombre hacia la mujer cambiara. Por esotom

    o medidas para protegerla. En su libro

    La Bible au f

    eminin (La Biblia en genero fe-

    menino), Laure Aynard habla de la Ley mo-saica, que se implant

    o en el siglo XVI antes de

    nuestra era, y se

    nala: La mayora de las veces

    que se menciona a la mujer en el pacto de laLey es para defenderla.

    As, la Ley de Dios mandaba honrar y res-

    petar tanto al padre como a la madre (Exodo

    20:12; 21:15, 17). Adem

    as, exiga que se mos-

    trara la debida consideraci

    on a las mujeresembarazadas (

    Exodo 21:22). Incluso en nues-

    tros das, estos mandatos contrastan con la

    falta de derechos que sufren las mujeres en

    muchas partes del mundo. Pero eso no estodo.

    La Ley de Dios y la mujer

    La Ley que Dios suministr

    o a la naci

    on de

    Israel tena multitud de beneficios f

    sicos,

    morales y espirituales para todo el pueblo,

    hombres y mujeres por igual. Si ponan en

    practica lo que escuchaban, estar

    an por en-

    cima de todas las otras naciones de la tierra

    (Deuteronomio 28:1, 2). Y qu

    e hay en cuan-to a las mujeres? Con qu

    e derechos conta-

    ban bajo la Ley?

    1. Derecho a la libertad individual. A dife-

    rencia de lo que pasaba en otras naciones

    de aquel tiempo, las israelitas disfrutaban

    de mucha libertad. Aunque el var

    on era el

    Eva era complemento y ayudante de Ad

    an

    PUBLICADA AHORA EN 195 IDIOMAS: acholi, afri-k

    aans, alban

    es, alem

    an,267 am

    arico,

    arabe, armenio, ar-

    menio occidental, aymara,7 azer, azer

    (alfabeto cir

    lico),

    baul

    e, becol, bengal, birmano, bislama, b

    ulgaro, cambo-

    yano, catal

    an, cebuano, checo,7 chichewa, chino simpli-ficado, chino tradicional7 (grabaci

    on solo en mandar

    n),

    chitonga, chitumbuka, chuuk

    es, cibemba, cingal

    es, con-go, coreano,67 criollo de las Seychelles, criollo haitiano,criollo mauriciano, croata, dan

    es,7 efik, endebele, endon-

    ga, enzema, eslovaco, esloveno, espa

    nol,267 estonio, ew

    e,finland

    es,7 fiyiano, franc

    es,687 ga, gar

    funa, georgiano,

    griego, groenland

    es, guaran,68 gujarati, gun, hausa, he-

    breo, hiligaynon, hindi, hiri motu, holand

    es,67 h

    ungaro,67

    ibo, ilocano, indonesio, ingl

    es,267 island

    es, isoko, italia-no,67 japon

    es,67 kannada, kaonde, kazajo, kikongo, ki-

    kuyu, kiluba, kimbundu, kiniaruanda, kirgus, kiribatiano,

    kirundi, kwangal, kwanyama, let

    on, lingala, lituano, lu-

    ganda, lunda, luo, luvale, macedonio, macua, malay

    alam,malgache, malt

    es, marat

    , marshal

    es, maya, mixe, mizo,

    mongol, mor

    e, n

    ahuatl del norte de Puebla, nepal

    es, ng

    a-bere, niueano, noruego,67 nyaneka, oromo, os

    etico, ote-

    tela, palauano, pangasin

    an, panjab, papiamento de Aru-

    ba, papiamento de Curazao, persa, pidgin de las islasSalom

    on, polaco,67 ponap

    es, portugu

    es,2687 quechua an-

    cashino, quechua ayacuchano, quechua boliviano,7 que-chua cuzque

    no, quichua, r arotongu

    es, rumano, r uso,67

    samoano, sango, sepedi, serbio, serbio (alfabeto latino),sesoto, shona, silozi, sranangtongo, suajili, suati, sueco,7tagalo,7 tahitiano, tai, tamil,t

    artaro,telugu, tetum, tigri

    na,

    tivo, tok pisin, tongano, totonaco, tshiluba, tshwa, tsonga,tsotsil, tsuana, turco, tuvaluano, twi, ucraniano, umbun-d

    u, urdu, uruund, vendal, vietnamita, wallisiano, waray-

    waray, wolaytta, xhosa, yap

    es, yoruba, zand

    e, zapotecodel Istmo, zul

    u

    2 Tambi

    en disponible en braille.

    6 Tambi

    en disponible en CD.

    8 Tambi

    en disponible en CD-ROM (formato MP3).

    7 Tambi

    en disponible en grabaci

    on de audioen www.jw.org.

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    6 LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    cabeza de familia, la esposa, con la plena con-fianza de

    el, pod

    a desempe

    nar tareas como

    inspeccionar un terreno, comprarlo o plantaruna vi

    na. Y si era buena hilando y tejiendo,

    poda montar su propio negocio (Proverbios

    31:11, 16-19). Las mujeres del antiguo Is-rael eran individuos con derechos propios yno meros ap

    endices del hombre.

    Tambi

    en podan cultivar una relaci

    on per-

    sonal con Dios. En la Biblia se mencionan ca-sos como el de Ana, quien le or

    o a Dios sobre

    algo que le preocupaba y le hizo un voto ensecreto (1 Samuel 1:11, 24-28). Cierta se

    nora

    de la ciudad de Sunem sola ir los s

    abados a

    consultar al profeta Eliseo (2 Reyes 4:22-25).

    Algunas, como D ebora y Hulda, ejercieron derepresentantes divinas. Hasta sacerdotes yhombres prominentes acud

    an a ellas por

    consejo (Jueces 4:4-8; 2 Reyes 22:14-16, 20).

    2. Derecho a la educaci

    on. Al ser una de laspartes implicadas en el pacto de la Ley, las

    mujeres podan estar presentes durante la lec-

    tura de las leyes, lo que les daba muchas opor-tunidades de aprender (Deuteronomio 31:12;Nehem

    as 8:2, 8). Asimismo pod

    an recibir

    preparaci

    on para ciertas facetas de la ado-raci

    on p

    ublica. Algunas probablemente de-

    sempe

    naban servicio organizado en el ta-bern

    aculo, y otras cantaban en un coro mixto

    (Exodo 38:8; 1 Cr

    onicas 25:5, 6).

    Muchas israelitas saban c

    omo llevar un

    negocio pr

    ospero (Proverbios 31:24). Y lasmadres contribu

    an a la formaci

    on de los hi-

    jos varones hasta que se hacan adultos (Pro-

    verbios 31:1). Qu

    e diferente de otras nacio-nes en las que solo el padre los educaba! Sin

    duda alguna, la mujer del antiguo Israelno carec

    a de educaci

    on.

    3. Derecho al respeto. Uno de los Diez Man-damientos estipulaba: Honra a tu padre y atu madre (

    Exodo 20:12). Y el sabio rey Salo-

    m

    on dijo en uno de sus proverbios: Escucha,

    Muchas mujeres del antiguo Israel llevaban sus propios negocios

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    7/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 7

    hijo mo, la disciplina de tu padre, y no aban-

    dones la ley de tu madre (Proverbios 1:8).

    La Ley regulaba con detalle el trato con per-sonas del sexo opuesto y manifestaba granrespeto por las mujeres (Lev

    tico 18:6, 9; Deu-

    teronomio 22:25, 26). Incluso les recordaba alos hombres que deb

    an tener en cuenta los

    lmites f

    sicos y biol

    ogicos de su esposa (Lev

    -

    tico 18:19).

    4. Derecho a la protecci

    on. En su Palabra,Jehov

    a se describe a s

    mismo como padre

    de hu

    erfanos de padre y juez de viudas, esdecir, se consideraba responsable de protegera quienes no ten

    an unpadre o un esposo que

    lo hiciera (Salmo 68:5; Deuteronomio 10:17, 18). De hecho, en cierta ocasi

    on en que la

    viuda de un sacerdote se vio en aprietos porculpa de un acreedor injusto, Jehov

    a hizo un

    milagro para que ella pudiera sobrevivir sinperder su dignidad (2 Reyes 4:1-7).

    Otro ejemplo es el de las hijas de Zelofehad.Cuando los israelitas todav

    a estaban en el

    desierto, este cabeza de familia muri

    o sin de-jar un descendiente var

    on. Entonces, sus cin-

    co hijas solicitaron una posesi

    on en laTierra Prometida. Jehov

    a les concedi

    o m

    as de

    lo que ellas haban pedido, pues le dijo a Moi-

    s

    es: Debes darles la posesi

    on de una heren-cia en medio de los hermanos de su padre, ytienes que hacer que la herencia de su pa-dre pase a ellas. A partir de ese momento,las mujeres israelitas pudieron recibir unaherencia de sus padres y dej

    arsela a sus des-

    cendientes (N

    umeros 27:1-8).

    Una visi

    on distorsionadade la opini

    on de Dios

    La Ley de Israel conced

    a una posici

    on ho-norable a las mujeres y fomentaba el respetopor sus derechos. Sin embargo, a partir del si-glo IVantes de nuestra era, el juda

    smo se dej

    o

    influir por la cultura griega, que considerabainferior a la mujer (v

    ease el recuadro Textos

    antiguos que discriminan a la mujer).

    Ya en el siglo VIII antes de nuestra era, elpoeta griego Hes

    odo culpaba a la mujer de

    todos los males. En su obra Teogon

    a hablabade la m

    as perniciosa raza de mujeres, el m

    as

    cruel azote que existe entre los hombres mor-tales. Esta idea cobr

    o auge en el juda

    smo a

    principios del siglo II antes de nuestra era.De hecho, el Talmud, que se empez

    o a com-

    pilar en el siglo II de nuestra era, adverta a los

    hombres que conversar mucho con mujerespoda empujarlos a recurrir a prostitutas.

    Claro, con el paso del tiempo, semejantedesconfianza hacia la mujer afect

    o enorme-

    mente su papel en la sociedad juda. En tiem-

    pos de Jes

    us, su acceso al recinto del templo sehab

    a limitado al atrio de las mujeres. Solo

    Textos antiguosque discriminan a la mujer

    A partir del siglo I de nuestra era, diversos in-telectuales comenzaron a reinterpretar el re-lato de G

    enesis a la luz de la filosof

    a griega.

    Para Fil on de Alejandra, por ejemplo, Evahab

    a cometido el pecado de tener relacio-

    nes sexuales y por eso haba sido condenada

    a sufrir las consecuencias de la p

    erdida dela libertad y del dominio del var

    on con el

    que convive. Este repudio de la mujer seinfiltr

    o en los escritos judaicos y en los de los

    Padres de la Iglesia.

    Por ejemplo, en un midr

    as (comentario ju-d

    o) que data del siglo II, un rabino explica

    por qu

    e pensaba que la mujer deba cubrirse

    la cabeza: Ha cometido una trasgresi

    on ysiente verg

    uenza de la gente. Y el te

    ologo

    Tertuliano, cuyas obras ya tenan mucho

    peso en el siglo II, predicaba que la mujerdeb

    a caminar como una Eva llorosa y pe-

    nitente. Estas ense

    nanzas y otras similares,que algunos atribuyen equivocadamente ala Biblia, han fomentado la discriminaci

    on

    de la mujer.

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    8/32

    MIENTRAS Jes

    us estuvo en la Tierra, reflej

    oa la perfecci

    on la personalidad y la forma

    de actuar de su Padre celestial. No hago nada

    por mi propia iniciativa; sino que hablo estascosas as

    como el Padre me ha ense

    nado, ex-

    plic

    o. Ya

    nadi

    o: Yo siempre hago las cosas que

    le agradan (Juan 8:28, 29; Colosenses 1:15).As

    pues, si queremos hacernos una idea de lo

    que Dios piensa de las mujeres y de c

    omo de-sea que las traten, nada mejor que analizar elejemplo de Jes

    us.

    Diversos estudiosos de los Evangelios hanconcluido que la actitud de Jes

    us hacia la mu-

    jer es, como mnimo, innovadora. En qu

    e

    sentido? Y mas importante a

    un, es posible

    que sus ense

    nanzas tengan alg

    un efecto libera-

    dor en las mujeres de la actualidad?

    C omo trat o Jes us a las mujeres Jes

    us no las consideraba objetos sexuales.

    Para muchos lderes religiosos jud

    os, las muje-

    res eran una peligrosa fuente de tentaciones ycualquier contacto con ellas pod

    a llevar a la

    lujuria. De ah que les prohibieran hablar con

    Dios respeta y valoraa la mujer

    reciban educaci

    on religiosa los varones, y

    ellas probablemente se sentaban aparte en lassinagogas. En el Talmud tambi

    en se citaban

    las siguientes palabras de cierto rabino: Todoel que instruye a su hija en la Tor

    a [la Ley] es

    como si la instruyera en cosas frvolas. As

    pues, al transmitir una visi

    on distorsionada dela opini

    on divina acerca de la mujer, los l

    de-

    res religiosos judos inculcaron en muchos

    hombres el desprecio por las mujeres.

    Cuando Jes

    us estuvo en la Tierra, percibi

    oestos prejuicios tan enraizados en la tradici

    on

    del pueblo judo (Mateo 15:6, 9; 26:7-11).

    Ahora bien, dej

    o

    el que influyeran en su ma-nera de tratar a las mujeres? Qu

    e podemos

    aprender de su actitud y del trato que lesdaba? Y qu

    e puede decirse del cristianismo

    verdadero? Ha contribuido a mejorar la si-tuaci

    on de la mujer? Hallar

    a las respuestas en

    el siguiente artculo.

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    9/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 9

    hombres en p

    ublico o salir sin cubrirse la cabe-za. Sin embargo, Jes

    us nunca insinu

    o que ha-

    ba que excluirlas de la vida social. M

    as bien,

    ense

    n

    o que los hombres tenan que controlar

    sus deseos carnales y tratarlas con respeto (Ma-

    teo 5:28).En otra ocasi on dijo: Cualquiera que se di-vorcie de su esposa y se case con otra cometeadulterio contra ella (Marcos 10:11, 12). Ob-

    viamente, Jes

    us no concordaba con la idea ra-b

    nica tan com

    un entonces de que los hom-

    bres podan divorciarse por toda suerte de

    motivo (Mateo 19:3, 9). La mayora de los ju-

    dos ten

    an un concepto equivocado del adul-

    terio. No crean que un hombre fuera ad

    ultero

    por acostarse con una mujer que no fuera su

    esposa. Seg

    un los rabinos, solo las mujereseran infieles, nunca los hombres. Como expli-ca cierto comentario b

    blico, Jes

    us, al poner al

    esposo bajo las mismas obligaciones moralesque su esposa, elev

    o el nivel y la dignidad de la

    mujer.

    Beneficio para las mujeres actuales: En lascongregaciones de los testigos de Jehov

    a, las

    mujeres se relacionan con los varones segu-ras de que no las mirar

    an de forma inapropiada

    ni las trataran con excesiva familiaridad. Los

    hombres cristianos se esmeran por tratar a lasmujeres de m

    as edad como a madres, a las de

    menos edad como a hermanas, con toda casti-dad(1 Timoteo 5:2).

    Jes

    us dedic

    o tiempo a instruirlas. Los rabi-nos de aquel entonces abogaban por mantenera las mujeres en la ignorancia. En contraste, Je-s

    us dedic

    o tiempo a ense

    narles la verdad y las

    anim

    o a expresar lo que pensaban. Ademas,

    no crea que hubiera que relegarlas a trabajar

    en la cocina. Lo demostr

    o cuando en ciertaocasi on no le neg o a Mara la oportunidad deaprender (Lucas 10:38-42). Y las respuestasbien pensadas que Marta la hermana de Ma-ra dio a Jes

    ustraslamuertedeL

    azaro revelan

    que ella tambi

    en sac

    o provecho de las ense-nanzas cristianas (Juan 11:21-27).

    Jes

    us se preocupaba de educar a las mujeres.La mayor

    a de las jud

    as de su tiempo daban

    mucho valor a tener un hijo que se convirtieraen alguien importante, sobre todo un profeta.Por eso, cuando una mujer le dijo feliz es lamatriz que te llev

    o,

    el aprovech

    o para ense-

    narle que es m

    as valioso ser obedientes a Dios

    (Lucas 11:27, 28). As demostr

    o que las mujeres

    tenan tareas m

    as importantes que las que les

    impona la tradici

    on (Juan 8:32).

    Beneficio para las mujeres actuales: En la con-gregaci

    on cristiana, los comentarios de las mu-

    jeres durante las reuniones son muy bien reci-bidos. Los maestros respetan a las mujeres conmadurez cristiana que, en p

    ublico y en priva-

    do, son ejemplares, maestras de lo que es

    El ap

    ostol Pablo recomend

    o que las mu-jeres guard[aran] silencio en las congrega-ciones (1 Corintios 14:34). Qu

    e quiso

    decir? Consideraba el que no tenan la in-teligencia necesaria para ense

    nar? No pudo

    ser eso, pues a menudo alab

    o su labor deevangelizaci

    on (2 Timoteo 1:5; Tito 2:3-5).

    En una de sus cartas a los corintios, Pabloaconsej

    o no solo a las mujeres, sino tam-

    bi

    en a quienes tenan el don de lenguas y de

    profetizar que guardaran silencio cuandootro cristiano estuviera hablando (1 Corin-tios 14:26-30, 33).1 Puede que algunas cris-tianas, entusiasmadas con lo que estabanaprendiendo, interrumpieran al orador parahacer preguntas, como se acostumbraba ha-cer en esa parte del mundo. Por eso, a fin demantener el orden, Pablo las anim

    o a in-

    terrog[ar] a sus propios esposos en casa(1 Corintios 14:35).

    1 Hallar

    a m

    as informaci

    on sobre el papel de la mujer en lacongregaci

    on en el art

    culo Tienen ministras religiosas los

    testigos de Jehov

    a?, en la p

    agina 23.

    Prohibi

    o el ap

    ostol Pabloque hablaran las mujeres?

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    10/32

    bueno (Tito 2:3). Tambi

    en cuentan con ellaspara anunciar las buenas noticias sobre elReino de Dios (Salmo 68:11; v

    ease el recuadro

    Prohibi

    o el ap

    ostol Pablo que hablaran las

    mujeres?, en la p

    agina 9).

    Jes us valoraba a las mujeres. En tiempos b-blicos se valoraba m

    as a los hijos varones.

    El propioTalmud deca: Dichoso del que tiene

    hijos varones, y desdichado del que tiene mu-jeres. Una hija era una pesada carga para algu-nos padres: ten

    an que encontrarle c

    onyuge y

    pagar la dote, y no podan contar con que los

    cuidara en su vejez.

    En cambio, Jes

    us valoraba tanto la vida deuna ni

    na como la de un ni

    no. Tal como resuci-

    t

    o al hijo de la viuda de Nan, resucit

    o a la hija

    de Jairo (Marcos 5:35, 41, 42; Lucas 7:11-15).En otra ocasi

    on cur

    o a una mujer que sufr

    a de-

    bido a un espritu de debilidad desde ha-

    ca dieciocho a

    nos. Hasta la llam

    o hija de

    Abrahan, una expresi

    on casi desconocida en

    los escritos judaicos (Lucas 13:10-16). Con esteapelativo digno y cari

    noso demostr

    o que, ade-

    mas de reconocer a las mujeres como miem-

    bros plenos de la sociedad, respetaba su pro-funda fe (Lucas 19:9; G

    alatas 3:7).

    Beneficio para las mujeres actuales: Seg

    uncierto dicho asiatico, criar una hija es como re-

    gar el jardn del vecino. Sin embargo, el padre

    cristiano amoroso no se deja llevar por esa for-ma de pensar. Al contrario, cuida bien de todossus hijos, sean ni

    nos o ni

    nas, y se asegura de

    que reciban la educaci

    on y la atenci

    on m

    edica

    debida. Jes

    us confiaba en las mujeres. En los tribu-

    nales judos, el testimonio de una mujer val

    a

    tan poco como el de un esclavo. De hecho, elhistoriador del siglo I Josefo dec

    a: No valdr

    a

    el testimonio de mujeres por la frivolidad y te-meridad propias de su sexo.

    Qu

    e diferente fue Jes

    us!El eligi

    o a muje-

    res para que anunciaran su resurrecci

    on (Ma-teo 28:1, 8-10). Es interesante que, aunqueestas fieles mujeres hab

    an presenciado la eje-

    cuci on y el entierro de su Se nor, hasta a losap

    ostoles les costaba creer lo que ellas dec

    an

    (Mateo 27:55, 56, 61; Lucas 24:10, 11). Sin em-bargo, al escoger como primeros testigos de suresurrecci

    on a unas mujeres, Jes

    us prob

    o que

    las consideraba tan dignas de ser sus testigoscomo a cualquier otro disc

    pulo (Hechos 1:

    8, 14).

    Beneficio para las mujeres actuales: Los varo-nes que tienen responsabilidades en la congre-

    gaci

    on cristiana muestran su consideraci

    on alas mujeres tomando en cuenta lo que tengan

    Jes

    usle confi

    o

    a Mara

    Magdalenala tareade anunciar

    su resurrecci

    ona los ap

    ostoles

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    11/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 11

    que decir. Los esposos, por su parte, honran asus esposas escuch

    andolas con atenci

    on (1 Pe-

    dro 3:7; G

    enesis 21:12).

    Los principios bblicos

    hacen m

    as feliz a la mujer

    Quienes imitan a Cristo dan a la mujer la li-bertad y el respeto que Dios se hab

    a propuesto

    para ella cuando la cre o (G enesis 1:27, 28).Los esposos cristianos no promueven actitudesmachistas. M

    as bien, se gu

    an por principios

    bblicos que hacen m

    as felices a sus esposas

    (Efesios 5:28, 29).

    Cuando Yelena empez

    o a estudiar la Biblia,sufr

    a en silencio el trato duro e insensible de

    su esposo.El se hab

    a criado en un entorno

    violento, donde eran comunes el rapto de lanovia y el maltrato f

    sico de la mujer. La Biblia

    me dio fuerzas explica ella. Aprend

    que ha-ba un Dios que me amaba de verdad, me valo-raba y se preocupaba por m

    . Me di cuenta de

    que mi esposo poda cambiar si

    el tambi

    en es-

    tudiaba la Biblia. Este sue

    no suyo por fin sehizo realidad cuando, con el tiempo, su esposo

    se bautiz

    o y se convirti

    o en testigo de Jehov

    a.

    Pas

    o a ser un ejemplo de autodominio diceYelena. Y ambos aprendimos a perdonar.Ella reconoce lo siguiente: Los principios b

    -

    blicos han contribuido a que me sienta mas

    querida y protegida en mi matrimonio (Colo-senses 3:13, 18, 19).

    El caso de Yelena no es una excepci

    on. Hay

    millones de cristianas como ella que son felicesporque, junto con sus esposos, se esfuerzan poraplicar los principios b

    blicos en su relaci

    on de

    pareja. Ademas, reciben consuelo y se sienten

    respetadas y libres entre sus hermanos en la fe(Juan 13:34, 35).

    Todos los cristianos tanto hombres comomujeres reconocen que son imperfectos y pe-cadores y que son parte de la creaci

    on someti-

    da al fracaso. Sin embargo, est

    an convencidosde que, acerc

    andose a su amoroso Dios y

    Padre, Jehov

    a, ser

    an liberados de la esclavitudde la corrupci on y disfrutaran de la glorio-sa libertad de los hijos de Dios. Qu

    e maravi-

    llosa perspectiva para los hombres y mujeresque est

    an bajo el cari

    noso cuidado de Dios!

    (Romanos 8:20, 21, La Biblia de Nuestro Pue-blo.)

    Quienes siguenlos principiosb

    blicos

    respetany tratancon dignidada las mujeres

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    12/32

    12 LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    NACI el 10 de diciembre de 1968 en Ilo-

    cos Norte (Filipinas). Fui la s

    eptima dediez hijos. De ni

    na me inculcaron el catoli-

    cismo, como a la mayora de los filipinos.

    En 1986, cuando me gradu

    e de la escue-la secundaria, so

    naba con ser enfermera.

    Pero mi sue

    no no se hizo realidad por culpade una enfermedad tan grave que llegu

    e a

    pensar que morira. Le rogu

    e desesperada

    a Dios que me ayudara y le promet que

    si me recuperaba, le servira el resto de mivida.

    Tras una lenta recuperaci

    on, me propu-se cumplir mi promesa. As

    que en junio

    de 1991 me inscrib en una escuela b

    blica

    pentecostal. Supuestamente, si ayunabamos

    y orabamos, los estudiantes recibir

    amos el

    don del espritu santo. Yo lo quer

    a para cu-

    rar a los enfermos. En una ocasi

    on, una demis compa

    neras de clase estaba orando en

    voz alta en una esquina durante una sesi

    onde oraci on. Con la intenci on de que otroscreyeran que yo ten

    a el don, me acerqu

    e a

    escondidas para escucharla. Cuando ella es-taba a punto de terminar, volv

    de prisa a

    donde yo haba estado arrodillada. Despu

    es

    le dije todo lo que ella haba pedido en su

    oraci on. Mordi o el anzuelo! Se creyo que yoten

    a el don.

    Durante el tiempo que segu estudiando

    all, me surgieron muchas dudas. Por ejem-

    plo, en Mateo 6:9, Jes

    us habl

    o del Padre yde su nombre. As

    que me preguntaba:

    Qui

    en es el Padre? Qu

    e nombre debe sersantificado?. Las respuestas de mis profeso-res no me llenaban, pues eran muy ambi-guas. Estaba confundida; nos daban clases

    sobre la Trinidad, pero ense naban que era unmisterio. Pese a todo, segu

    estudiando para

    ser pastora.

    Mi encuentro con los testigos de Jehov

    a

    En la escuela nos decan que de todas las

    religiones falsas, los testigos de Jehov

    a eranla peor. Los llamaban el anticristo. Por esolos odiaba.

    Durante mi segundo a

    no escolar, aprove-ch

    e unas vacaciones para visitar a mis pa-

    dres. Carmen, una de mis hermanas mayo-res, se enter

    o de que yo estaba en casa y vino

    a vernos. Se haba convertido en testigo de

    Jehov

    a. De hecho, era evangelizadora detiempo completo. Cuando intent

    o hablarme

    de Dios, le respond hecha una furia: Yo ya

    AL FIN CONOZCOAL DIOS A QUIEN SIRVORELATADO POR MARIETA MANUEL BACUDIO

    Un predicador pentecostal de quien se deca que ten

    a el don de

    sanaci

    on vino de visita. En el momento en que me toc

    o, ca al suelo

    inconsciente, abrumada por el espritu santo. Cuando despert

    e,

    pareca tener lo que tanto hab

    a deseado: poderes para sanar.

    C

    omo llegu

    e hasta aqu y qu

    e efecto tuvo esto en mi vida? Primero

    les contar

    e algunos detalles de mi pasado.

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    13/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 13

    conozco al Dios a quien sirvo!. Tras insul-tarla a voz en cuello, la empuj

    eynodej

    e que

    me volviera a hablar del tema.

    Despu

    es de regresar a la escuela, recib de

    Carmen un ejemplar del folleto Debera

    creer usted en la Trinidad?1

    Nada mas verlo,

    lo estruj

    eylotir

    e al fuego. Estaba furiosa conmi hermana.

    Logro mi objetivo

    Mientras todava estaba en la escuela,

    convert a algunas personas a mi religi

    on.

    Me llenaba de orgullo que mi madre y mihermano se hubieran hecho pentecostalescomo yo.

    En marzo de 1994 me gradu

    e de la escuela

    pentecostal. Como ya dije, aquel da nos visi-t

    o un predicador. Todos los graduados que-

    ramos estar con

    el porque cre

    amos que te-

    na el don de sanaci

    on. Nos subimos al

    escenario y nos pusimos a saltar y aplaudircon

    el al ritmo de una banda. Entonces, tan

    pronto como

    el tocaba a alguien, este caa al

    suelo derribado por el espritu.2 Cuando me

    toc

    o a m, tambi

    en ca

    y perd

    el cono-

    cimiento. Aunque me despert

    e con miedo,

    sent

    que ten

    a poderes para sanar, y eso mealegr o mucho.

    1 Editado por los testigos de Jehova; agotado.

    2 En algunas religiones se cree que el espritu santo en-

    tra en los creyentes con tanta fuerza que los tira al piso.

    Poco despu

    es emple

    e mis nuevos poderespara sanar a una ni

    na que ten

    a fiebre alta.

    Hice una oraci

    on, y en ese instante la ni

    nacomenz

    o a sudar y la fiebre desapareci

    o. Ya

    poda cumplir mi promesa a Dios! Sin em-

    bargo, por extra

    no que parezca, me senta

    vaca. En el fondo sab

    a que solo hay un

    Dios, pero no lo conoca. Adem

    as, ten

    a du-

    das persistentes sobre muchas de las doctri-

    nas de mi Iglesia.

    Cambia mi forma de pensar

    A estas alturas, mi odio contra los testigosde Jehov

    aeraa

    un m

    as intenso. Cada vez que

    encontraba una de sus publicaciones, la que-maba. Entonces descubr

    algo que me sacu-

    di

    o: mi madre ya no quera ser pentecostal.

    Carmen le haba estado dando clases de la

    Biblia! No quera ver a mi hermana ni en

    pintura.

    Un da encontr e una revista Despertad! encasa de mi madre. Mi reacci

    on habitual ha-

    bra sido quemarla, pero como ten

    a curiosi-

    dad por saber lo que mi madre estaba leyen-do, le ech

    e un vistazo. Me llam

    o la atenci

    on

    un artculo que hablaba de un se

    nor que cre

    a

    firmemente en lo que predicaba su religi

    on,hasta que comenz

    o a analizar la Biblia con la

    ayuda de las publicaciones de los Testigos.Qued

    o convencido de que ense

    nanzas como

    la Trinidad, el infierno o la inmortalidad delalma no tenan nada que ver con las Escritu-ras. Lo que le

    me lleg

    o al coraz

    on. Era justo lo

    que yo anhelaba entender. Sent un fuerte de-

    seo de averiguar lo que ense

    na la Biblia.

    En otra revista Despertad! le sobre un se-

    nor que abandon

    o el alcohol y las drogas

    Emple

    e mis nuevos poderespara sanar a una ni

    na que ten

    a

    fiebre alta

    El da en que

    me gradu ede pastora

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    14/32

    14 LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    gracias al estudio de la Bi-blia. A ra

    z de esa biograf

    a,

    me aficion

    e a las publicacio-nes de los Testigos. Tambi

    en

    hall

    e un ejemplar del fo-

    lleto El nombre divino quedurar a para siempre, en elque aprend

    que el nombre

    de Dios es Jehov

    a.1 Cono-cer mejor al

    unico Dios ver-

    dadero me hizo muy feliz(Deuteronomio 4:39; Jere-m

    as 10:10).

    Sin que los demas se ente-

    raran, segu investigando

    muchas verdades bblicas

    mas. En la escuela pentecostal me haban en-se

    nado que Jes

    us es Dios, pero ahora sab

    a lo

    que dice la Biblia: que

    el es el Hijo del Diosvivo (Mateo 16:15, 16).

    Cambia mi coraz

    on

    Cuando vi a Carmen de nuevo, le sorpren-

    di

    o que le pidiera varias publicaciones, entreellas el folleto El nombre divino que durar

    a

    para siempre. Haba pasado muchos a

    nos

    en una escuela bblica de los pentecostales,

    pero all no me haban ense nado la verdad.Me hab

    an dejado a oscuras. Mi coraz

    on re-

    bosaba de alegra por todo lo que estaba

    descubriendo en la Biblia. Estaba viviendoen carne propia lo que dijo Jes

    us en Juan

    8:32: Conoceran la verdad, y la verdad los li-

    bertara. Mi vida estaba tomando un nuevo

    rumbo.

    Aunque por alg

    un tiempo cre que era po-

    sible adorar a Jehov

    a en secreto y a la vez ser

    pastora, pronto me di cuenta de que yano podr

    a ense

    nar muchas de las doctrinas

    de mi Iglesia. Pero tena miedo. C

    omo me

    ganara la vida si renunciaba? No quer

    a que

    mi Iglesia pasara por la verg

    uenza de que una

    1 Editado por los testigos de Jehova.

    de sus pastoras se hubiera hecho testigo deJehov

    a. Decid

    seguir ense

    nando desde el

    p

    ulpito sin mencionar las doctrinas falsas.

    En mi siguiente encuentro con Carmen,ella me anim

    o a ir a una reuni

    on de los Testi-

    gos. Como yo tena que ir frecuentemente a

    la iglesia madre situada en la ciudad deLaoag, aprovech

    e uno de esos viajes para

    buscar, sin que nadie lo supiera, un Sal

    on delReino de los Testigos de Jehov

    a. All

    conoc

    a una evangelizadora de tiempo completo

    cuyo nombre era Alma Preciosa Villarin,pero todos la llamaban Precious (Preciosa eningl

    es). Aunque todav

    a me ca

    an mal los

    Testigos, acept e estudiar la Biblia con ella.

    Mi hermana haba sido muy paciente con-

    migo. Y Precious era igual. Me ayud

    o much-

    simo a entender la Biblia a pesar de que yonoeraf

    acil: me enfadaba, discut

    a, levantaba

    la voz e insista en algunas de mis anteriores

    Mi vida estaba tomandoun nuevo rumbo

    Estudiando la Biblia con Precious

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    15/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEM BRE DE 2012 15

    creencias. El inter es personal, la humildad yla serenidad de Precious y de otros Testigoscalaron hondo en m

    . Ahora quer

    a servir a

    Jehov

    a.

    En julio de 1995 me di cuenta de queno hab

    a vuelta de hoja: deb

    a dejar la Igle-

    sia. Por qu

    e? Revelaci

    on (Apocalipsis) 18:4habla en t

    erminos simb

    olicos de la religi

    on

    falsa y advierte: S

    alganse de ella, pueblom

    o, si no quieren participar con ella en sus

    pecados, y si no quieren recibir parte de susplagas. Pero de qu

    e vivir

    a si abandonaba

    mi carrera pastoral? Aprend en Hebreos 13:5

    que a todo el que hace la voluntad de Dios

    elle promete: De ning

    un modo te dejar

    e y de

    ning

    un modo te desamparar

    e.

    A pesar de que mi padre y mi hermano es-taban muy en mi contra, dos semanas antesde bautizarme como Testigo me arm

    e de va-

    lor y fui a casa para quemar todo lo que sola

    utilizar en mi labor de pastora. Fue despu

    esde hacer eso que not e que desaparecieron lospoderes que hab

    a recibido. Tambi

    en desa-

    pareci

    o la presi

    on constante que anterior-mente sent

    a sobre m

    mientras dorm

    a.

    Nunca mas volv

    a ver las sombras que apare-

    can en la ventana de mi dormitorio. En la

    Biblia aprend que los supuestos dones dehoy, como el poder de sanaci

    on, no vie-

    nen de Dios, sino de los espritus malvados.

    Ha sido un gran alivio escapar de su control,tal como le sucedi

    o a la sirvienta a quien Pa-

    blo libr

    o de un demonio de adivinaci

    on(Hechos 16:16-18).

    Algo especialmente emotivo para m fue

    bautizarme junto a mi madre en septiembrede 1996. Poco despu

    es comenc

    e a servir

    como evangelizadora de tiempo completo de

    los testigos de Jehov

    a, un servicio que disfru-t

    e muchos a

    nos.

    En la actualidad, mi esposo Silver y yo nosesforzamos por ense nar a nuestra hija a se-guir el camino de la verdad b

    blica. Otras tres

    hermanas mas tambi

    en se han hecho Testi-

    gos. Y aunque me duele haber pasado tantosa

    nos en la ignorancia, estoy feliz porque al

    fin conozco al Dios a quien sirvo.

    Conocer mejor al

    unico Diosverdadero me hizo muy feliz

    Cuando mi madrey yo nos bautizamos

    Como evangelizadorade tiempo completo

    Junto a mi esposo, mi hijay otros familiares que tambi

    en son Testigos

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    16/32

    1. Qu

    e e s e l Da del Juicio?

    La ilustraci

    on de la derecha representa lo quemuchos piensan que ocurrir

    a durante lo que la Bi-

    blia llama el Da del Juicio. Imaginan a miles de mi-

    llones de almas reunidas ante el trono de Dios paraser juzgadas por sus hechos: algunas ser an recom-pensadas con vida en el cielo, mientras que otrasser

    an condenadas al infierno. La Biblia, por el con-

    trario, indica que el objetivo del Da del Juicio es

    erradicar la injusticia del mundo (Salmo 96:13). Je-s

    us es el Juez que Dios ha elegido para traer justicia

    a la humanidad. (Lea Isaas 11:1-5 y Hechos 17:31.)

    2. C

    omo se har

    a justiciadurante el D

    a del Juicio?

    El primer hombre, Ad

    an, se rebel

    o contra Jehov

    aDios. Por su culpa, todos sus descendientes pecan,sufren y mueren (Romanos 5:12). A fin de corregiresa injusticia, Jes

    us resucitar

    a a los miles de millo-

    nes de personas que han muerto. El libro bblico de

    Revelaci

    on, o Apocalipsis, se

    nala que eso ocurrir

    adurante el reinado de mil a

    nos de Jesucristo. (Lea

    Revelaci

    on 20:4,11, 12.)Quienes resuciten ser

    an juzgados, pero no seg

    un

    lo que hicieron antes de morir, sino seg

    un lo quehagan tras revelarse la informaci

    on de los rollos

    mencionados en el captulo 20 de Revelaci

    on (Ro-

    manos 6:7). El ap

    ostol Pablo habl

    o tanto de justoscomo de injustos para referirse a aquellos que vol-ver

    an a la vida y tendr

    an la oportunidad de apren-

    der acerca de Dios. (Lea Hechos 24:15.)

    ENSENANZAS DE LA PALABRA DE DIOS

    Qu e pasar adurante el D

    a del Juicio?

    Este artculo le permitir

    a encontrar en

    su propia Biblia la respuesta a algunas

    preguntas que tal vez se haya hecho.Si lo desea, los testigos de Jehov a puedenanalizar estas preguntas con usted.

    EL JUICIO FINAL,DE GUSTAVE DOR

    E (1832-1883)

    Grabado de Dor

    e

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    17/32

    3. Qu

    e m

    as lograr

    a e l Da del Juicio?

    Las personas que murieron sin haber podido co-

    nocer y servir a Jehov

    a tendr

    an la oportunidad dehacer su voluntad. Si la aprovechan, su resurrecci

    on

    habr

    a probado ser una resurrecci

    on de vida. Sinembargo, la resurrecci

    on de quienes no quieran

    obedecer a Dios habr

    a resultado ser de juicio[condenatorio]. (Lea Juan 5:28, 29 e Isa

    as 26:10;

    65:20.)Para cuando acaben los mil a

    nos que durar

    a el

    Da del Juicio, Jehov

    a habr

    a devuelto a la familia

    humana a su estado original de perfecci

    on (1 Co-rintios 15:24-28). Qu

    e recompensa tan bonita por

    su obediencia! El Diablo, que habr a estado en-cerrado esos mil a

    nos en un abismo, ser

    a soltado

    por Dios para una

    ultima prueba. Satan

    as har

    acuanto pueda por apartar a la gente de Jehov

    a,

    pero quienes superen esta prueba podr

    an vivirpara siempre en la Tierra. (Lea Isa

    as 25:8 y Revela-

    ci

    on 20:1, 7-9.)

    4. Qu

    e otro da de juicio

    traer

    a bendiciones a la humanidad?

    La Biblia habla de otro da de juicio. Se trata del

    suceso que pondr

    a fin al actual sistema mundial.Este d

    a vendr

    a de forma repentina, al igual que el

    Diluvio de No

    e, que se trag

    o a toda una generaci

    onde gente mala. Pronto, la destrucci

    on de los hom-

    bres impos, o malvados, dejar

    a v

    a libre a una

    nueva sociedad humana en la que la justicia habr

    a

    de morar. (Lea 2 Pedro 3:6, 7, 13.)

    Si desea m

    as informaci

    on, consulte las p

    aginas 213 a 215de este libro, editado por los testigos de Jehov

    a.

    QUE ENSE

    NA

    realmente

    LA BIBLIA?

    17

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    18/32

    18 LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    LA BONDAD de un misionero mayor impre-sion o a un joven japon es. El amable an-cianito llevaba pocos a

    nos en Jap

    o n y a

    un te-

    na dificultades para hablar el idioma. Pese a

    todo, iba cada semana a casa del muchachopara conversar sobre la Biblia. Con una son-risa amigable y buenos modales, respond

    a

    pacientemente a las incontables preguntasdel curioso estudiante.

    El trato amable de este se nor dej o una hue-lla imborrable en el joven, que pens

    o: Si la

    Biblia ayuda a la gente a ser tan buena, yotengo que estudiarla. La bondad del misio-nero fue el incentivo que el joven necesitabapara estudiar algo completamente nuevopara

    el. As

    es, esta cualidad ablanda corazo-

    nes y suele ser mas poderosa que las pala-

    bras.

    Una cualidad divinaPor lo general, a los seres humanos no nos

    cuesta ser bondadosos con las personas quem

    as queremos, como nuestros familiares.

    Ahora bien, la bondad es en esencia una cua-lidad divina y, como dijo Jes

    us, nuestro Pa-

    dre celestial no solo es bueno con quieneslo aman, sino tambi

    en con los ingratos.

    De hecho, Cristo inst

    o a sus discpulos a imi-

    tar el ejemplo perfecto de Dios cuando losanim

    o a ser perfectos, como su Padre celes-

    tial es perfecto (Lucas 6:35; Mateo 5:48;Exodo 34:6).

    Como hemos sido creados a la imagen deDios, tenemos la capacidad de ser bondado-sos (G

    enesis 1:27). Eso significa que pode-

    mos imitarlo y mostrar bondad mas all

    a de

    nuestro crculo familiar. La Biblia indica que

    esta cualidad es parte del fruto que produceel esp

    ritu santo de Dios, su fuerza activa

    (Galatas 5:22). De modo que, cuanto m

    as co-

    nozcamos al Creador y mas nos acerquemos

    a

    el, mayor sera nuestra bondad.

    Puesto que esta cualidad es parte de la na-turaleza humana y es muy valorada porDios, no sorprende que

    el nos pida que sea-

    mos bondadosos unos con otros (Efesios4:32). En su Palabra tambi

    en nos anima a

    mostrar hospitalidad, o bondad a extra-nos (Hebreos 13:2, nota).

    De veras se puede ser bueno con los de-m

    as, incluso con desconocidos, en un mun-

    do tan cruel y desagradecido? C

    omo pode-mos lograrlo? Es m

    as, por qu

    e deber

    amos

    intentarlo?

    Imprescindible para agradar a DiosEs digno de menci

    on que el ap

    ostol Pablo,

    tras mencionar esa bondad a extra

    nos, di-jera: Por ella algunos, sin saberlo, hospe-daron a

    angeles. C

    omo se sentir

    a usted si

    tuviera la oportunidad de agasajar a mensa-jeros divinos? F

    jese en que Pablo precis

    o

    que algunos atendieron a

    angeles sin saber-lo. En otras palabras, si tenemos la costum-bre de ser bondadosos con todo el mundo,hasta con quienes no conocemos, podr

    a-

    mos recibir bendiciones inesperadas.

    La mayora de las biblias que contienen re-

    ferencias a otros pasajes relacionan estas pa-labras de Pablo con los relatos de Abrah

    an y

    Lot que hallamos en los captulos 18 y 19 de

    G

    enesis. Ambos hombres recibieron la visita

    La bondadimprescindible para agradar a Dios

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    19/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEM BRE DE 2012 19

    de unos

    angeles que porta-ban mensajes divinos. En elcaso de Abrah

    an, el mensaje

    tena que ver con la promesa

    que Dios le haba hecho de

    que tendra un hijo. Y en

    el caso de Lot, le anuncia-ba la inminente destrucci

    on

    de las ciudades de Sodomay Gomorra (G enesis 18:1-10;19:1-3,15-17).

    Si usted lee los versculos citados en la ora-

    ci

    on anterior, observara que Abrah

    an y Lot

    fueron hospitalarios con unos viajeros queno conoc

    an. En tiempos b

    blicos, la hospita-

    lidad ya fuera con amigos, parientes o ex-tra

    nos era parte de la cultura y se conside-

    raba un deber. La Ley mosaica, por ejemplo,requer

    a que los israelitas tuvieran presentes

    las necesidades de los inmigrantes (Deutero-nomio 10:17-19). Aun as

    , es evidente que es-

    tos dos hombres hicieron mucho mas de lo

    que posteriormente estipul

    o la Ley. Se desvi-vieron por ser bondadosos con los extra

    nos,

    y por eso fueron bendecidos.

    Abrah

    an fue recompensado con un hijo,Isaac, pero nosotros tambi

    en nos beneficia-

    mos de su bondad. En qu

    e sentido? Abrah

    ane Isaac desempe

    naron un papel fundamental

    en el cumplimiento del prop

    osito de Dios.Ambos fueron personajes clave del arbol ge-neal

    ogico del Mes

    as, Jes

    us. Y cierto episodio

    de sus vidas represent

    o lo que Jehov

    a hara

    m

    as tarde por amor y bondad: poner las basespara salvar a la humanidad (G

    enesis 22:1-18;

    Mateo 1:1, 2; Juan 3:16).

    Estos relatos no solo dejan muy claro loque Dios espera de quienes ama, sino que,adem

    as, nos ense

    nan cu

    anto estima la bon-

    dad. Para

    el no es opcional, es imprescindi-ble.

    Ser bondadosos nos acerca a Dios

    Seg

    un la Biblia, vivimos rodeados de hom-bres y mujeres desagradecidos, desleales,sin [...] cari

    no natural (2 Timoteo 3:1-3).

    Y aunque todos los das tratamos con genteas

    , eso no justifica que hagamos lo mismo.

    Mas bien, los cristianos seguimos este conse-

    jo: No devuelvan mal por mal a nadie. Pro-vean cosas excelentes a vista de todos (Ro-manos 12:17).

    Vale la pena mostrar bondad generosa-mente y de todo coraz

    on. La Biblia declara:

    Todo el que ama [...] adquiere el cono-cimiento de Dios. Y una forma de mostrar

    amor es siendo bondadosos con nuestro se-mejante (1 Juan 4:7; 1 Corintios 13:4). Al ha-cerlo, llegamos a conocer mejor a Dios, y esonos hace m

    as felices. En el Serm

    on del Mon-

    te, Jes

    us afirm

    o: Dichosos los que prestanayuda, porque

    esos van a recibir ayuda. Di-

    chosos los limpios de coraz

    on, porque

    esos

    Abrah

    an recibi

    omuchas bendiciones

    por demostrar bondad

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    20/32

    van a ver a Dios (Mateo 5:7, 8, Nueva BibliaEspa

    nola).

    Fjese en lo que le ocurri

    o a Aki, un ama de

    casa japonesa con dos hijos. Tras la repentinamuerte de su madre, esta joven esposa se de-

    primi

    o mucho. A veces estaba tan hundidaque ten

    a que ir al m

    edico. En esa

    epoca se

    mud

    o a su vecindario unafamilia. El padre acababade fallecer en un acciden-te, y la madre hab

    a queda-

    do con cinco ni

    nos a sucargo. La desgracia de estafamilia conmovi

    o a Aki,

    quien se esforz

    o por hacer-se amiga de ellos. Al ayu-

    darlos en todo lo que podad

    andoles comida, la ropa

    que su familia ya no usabay otras cosas, logr

    o sen-

    tirse mejor. Vio por s misma que la Biblia

    tiene raz

    on cuando dice: Hay mas felici-

    dad en dar que en recibir (Hechos 20:35).Sin duda, mostrar bondad es lo mejor queuno puede hacer por s

    mismo cuando se en-

    cuentra desanimado.

    El bondadoso le presta a Jehov

    a

    Para mostrar bondad no hace falta tenermucho dinero, energ

    as o alguna habilidad

    especial. Una sonrisa, una palabra cari

    nosa,un regalito bien pensado, hacer alg

    un fa-

    vor o simplemente ceder el lugar en unafila puede significar mucho para los dem

    as.

    Si no est

    a seguro de qu

    e decir o qu

    e hacer,diga o haga lo que sea m

    as bondadoso.

    El comportamiento del anciano misioneromencionado al comienzo le caus

    o una pro-

    funda impresi

    on al joven japon

    es y rompi

    olas barreras ling

    u

    sticas. Con raz

    on uno de

    los requisitos de Dios para sus siervos esamar la bondad (Miqueas 6:8).

    Un proverbio oriental reza: Una palabra

    bondadosa puede dar calor durante tres me-ses de invierno. Cu

    al es la lecci

    on? Se puede

    lograr mucho con un sencillo acto bondado-so. Cuando este va acompa

    nado de buenos

    motivos y de amor a Dios, puede dar caloral coraz

    on de todos los implicados. Incluso si

    los dem

    as no lo agradecen, no piense queno ha valido la pena. Dios siempre lo valora.La Biblia nos asegura que quien muestra bon-dad le presta a Jehov

    a (Proverbios 19:17).

    Por qu

    e no busca oportunidades de ser bon-dadoso con quienes lo rodean?

    Si no est

    a segurode qu

    e decir

    o qu

    e hacer,diga o haga

    lo que sea m

    as

    bondadoso

    Quien muestrabondad a otrosle presta a Jehov

    a

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    21/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 21

    C

    OMO se sentira si lo acusaran falsa-

    mente de un terrible delito que ha per-judicado a muchos inocentes? Seguro quequerr

    a aclarar los hechos y limpiar su nom-

    bre. ConJehov

    a Dios pasa algo parecido. Mu-cha gente le echa la culpa, sin raz

    on, de la

    injusticia y el sufrimiento que hay en el mun-do. Querr

    a

    el limpiar su nombre? El libro b

    -

    blico de Ezequiel muestra que s. (Lea Eze-quiel 39:7.)

    Ya no dejar

    e que mi santo nombre seaprofanado, declara Jehov

    a. Cada vez que se

    le responsabiliza de las injusticias, se est

    a pro-fanando, o ensuciando, su nombre. Y cuandola Biblia habla del nombre de alguien, a me-nudo se refiere a su reputaci

    on. Cierta obra

    especializada explica que el nombre de Diosdenota lo que otros conocen de

    el, lo que

    el

    ha revelado de s mismo. Tambi

    en representa

    su fama y, por tanto, su honor. As que el

    nombre de Jehov

    a incluye su reputaci

    on.Y qu

    e sabemos sobre c

    omo ve

    el las injusti-

    cias? Que las odia y que siente compasi

    on porquienes las sufren (

    Exodo 22:22-24).1 Cuan-

    do los seres humanos lo acusan de cosas queel detesta, en realidad est

    an echando por

    tierra su reputaci

    on y tratando [su] nombrecon falta de respeto (Salmo 74:10).

    Por qu

    e emplea Jehov

    a dos veces la expre-si on mi santo nombre en Ezequiel 39:7?En las Escrituras, el nombre de Dios aparecemuchas veces con los t

    erminos santo o santi-

    dad, que transmiten la idea de separaci

    on e

    1 Consulte el artculo Ac

    erquese a Dios: Jehov

    a ama la

    justicia, en La Atalaya del 1 de noviembre de 2008.

    implican limpieza y pureza. Pues bien, sunombre es santo porque

    el es santo, es decir,

    est

    a totalmente separado de todo pecado osuciedad. Se da cuenta? Quienes lo acusande la maldad deshonran su santo nombre.

    El tema central de la Biblia gira en torno alReino de Dios y a c

    omo este gobierno limpia-

    r

    a el nombre del Todopoderoso. De hecho, ellibro de Ezequiel lo subraya cuando en re-petidas ocasiones dice: Las naciones ten-dr

    an que saber que yo soy Jehov

    a (Ezequiel

    36:23; 37:28; 38:23; 39:7). No les quedar

    aotra alternativa: simplemente tendr

    an que

    saber que

    el es Jehov

    a. En otras palabras, lasmedidas que Dios va a tomar obligar

    an a to-

    das las naciones a reconocer que

    el es quienafirma ser: Jehov

    a, el Se

    nor Soberano cuyo

    nombre representa todo lo santo, puro y lim-

    pio.Las naciones tendr

    an que saber que yo

    soy Jehov

    a es una promesa recurrente queconsuela a quienes anhelan ver el fin de lasinjusticias y el sufrimiento. Dentro de poco,Jehov

    a cumplir

    a su palabra y limpiar

    a su

    nombre de tanta deshonra. Adem

    as, acabar

    acon la maldad y con quienes la promueven,pero dejar

    a con vida a quienes respeten su

    nombre y lo que implica (Proverbios 18:10).No le gustar

    a saber c

    omo acercarse a este

    Dios santo y amador de la justicia? (Salmo37:9-11, 28.)

    ACERQUESE A DIOS

    Las naciones tendr

    an que saberque yo soy Jehov a

    LECTURA BIBLICA RECOMENDADA PARA ESTE MES:

    Ezequiel 39 a Daniel 3

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    22/32

    22 LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    Su economa se basaba principal-

    mente en la agricultura, la ganadera y

    el trueque. En la Biblia se mencionanmercados pr

    oximos a las puertas de las

    ciudades. En Jerusal

    en haba una Puer-

    ta de las Ovejas, una Puerta del Pesca-do y una Puerta de los Tiestos (Nehe-m

    as 3:1, 3; Jerem

    as 19:2). Puede que

    estos nombres se debieran a la mer-canc

    a que se vend

    a en sus alrededo-

    res. Tambi

    en se mencionan la calle de

    los panaderos de Jerusal

    en y algunosart

    culos de comercio (Jerem

    as 37:21).

    Y qu

    e hay del valor de las mercan-cas? Cierto comentario b

    blico aclara:

    Los precios [...] fluctuaron a trav

    es delos siglos, y es dif

    cil averiguar cu

    anto

    pudo haber costado un artculo par-

    ticular en cierto lugar y durante ciertaepoca. Aun as

    , se sabe por la Biblia

    y otras fuentes antiguas que los pre-cios estaban sujetos a la inflaci

    on. Bas-

    ta con ver la variaci

    on del costo deuna mercanc

    a habitual: los esclavos.

    En el siglo XVIII antes de nuestra era sepagaban 20 piezas de plata probable-mente siclos por un esclavo. Al menosas

    ocurri

    o con Jos

    e (G

    enesis 37:28).

    Trescientos a

    nos despu

    es se pagaban

    30 siclos (

    Exodo 21:32). En el siglo VIIIantes de nuestra era, un esclavo costa-ba 50 (2 Reyes 15:20). Y doscientosa

    nos m

    as tarde, ya bajo el Imperio per-

    sa, los precios se dispararon a 90 sicloso incluso m

    as. Todo parece indicar que

    la inflaci

    on no es un mal moderno.

    C

    omo se comerciaba en el antiguo Israel?

    RELIEVE DEUN MERCADO

    DE FRUTAS DeA Picture Library / Art

    Resource, NY

    En el Imperio persa, los reyes estable-cieron un servicio de correo que seencargaba de la correspondencia ofi-cial. En el libro b

    blico de Ester se des-

    cribe c

    omo funcionaba dicho servicio:Y [Mardoqueo] procedi

    o a escribir en

    el nombre del rey Asuero y a sellar conel anillo de sellar del rey, y a enviardocumentos escritos por mano de loscorreos a caballo, montados en caba-

    llos de posta usados en el servicio real,hijos de yeguas veloces (Ester 8:10).En el Imperio romano exist

    a un siste-

    ma similar para la correspondencia decar

    acter militar y administrativo.

    Las cartas personales, como las que

    escribi

    o el ap

    ostol Pablo, no se en-

    tregaban por estos medios. La genterica pod

    a permitirse enviar el men-

    saje con un esclavo. Sin embargo, lamayor

    a de las personas ten

    an que

    recurrir a conocidos, a veces inclusoa extra

    nos, que viajaban en la direc-

    ci

    on deseada. Cualquiera poda servir

    de mensajero: familiares, amigos, sol-dados, comerciantes... Era crucial, portanto, que la persona fuera confiable

    para que el mensaje llegara intacto.La Biblia parece dar a entender que Pa-blo envi

    o algunas de sus cartas con

    otros cristianos (Efesios 6:21, 22; Colo-senses 4:7).

    LO SABIA?

    C

    omo se enviaba la correspondencia en tiempos b

    blicos?

    MENSAJERO PERSA

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    23/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 23

    S, varios millones por todo el mundo. Forman

    el gran grupo de predicadoras de las buenas nue-vas del Reino de Dios que se profetiz

    o en Salmo

    68:11, donde Jehov

    a dice: Las mujeres que anun-cian las buenas nuevas son un ej

    ercito grande.

    Con todo, el ministerio que llevan a cabo estastestigos de Jehov

    a es muy distinto del de las mi-

    nistras de otras religiones. En qu

    e se diferencianambos ministerios?

    Para empezar, se dirigen a p

    ublicos distintos.

    Las mujeres que ejercen el sacerdocio, sobre todoen las iglesias de la cristiandad, asumen puestosde liderazgo dentro de su religi

    on. As

    pues, su

    principal auditorio son miembros de su reba

    no.En cambio, las ministras religiosas de los Testigospredican fuera de la congregaci

    on, a todo el que

    encuentran mientras evangelizan de casa en casao en cualquier otro lugar.

    Otra caracterstica diferenciadora es el papel

    que desempe

    nan dentro de la congregaci

    on. Lasministras de la cristiandad y otras religiones diri-

    gen a los miembros de su congregaci

    on y los ins-truyen en la doctrina. Las Testigos nunca ense

    nan

    en la congregaci

    on cuando hay varones bautiza-dos presentes. Solo lo hacen los superintenden-tes, hombres que han sido nombrados maestros(1 Timoteo 3:2; Santiago 3:1).

    En la Biblia,

    unicamente los varones aparecen alfrente de la congregaci

    on. Y las instrucciones que

    elap

    ostol Pablo dio a otro superintendente cristia-no llamado Tito apoyan esa idea. Por esta raz

    on

    te dej

    e en Creta escribi

    o Pablo, para que [...]

    nombraras hombres mayores en ciudad tras ciu-dad. (Tito 1:5, nota.) A continuaci

    on indic

    o que

    el superintendente tena que ser hombre libre de

    acusaci

    on, esposo de una sola mujer (Tito 1:6).El ap

    ostol dio instrucciones parecidas en una car-

    ta pastoral que le envi

    o a Timoteo. Si alg

    un hom-bre est

    a procurando alcanzar un puesto de supe-

    rintendente, desea una obra excelente dijo.El superintendente, por lo tanto, debe ser irre-prensible, esposo de una sola mujer, [...] capacita-do para ense

    nar. (1 Timoteo 3:1, 2.)

    Pero por qu

    e solo los varones pueden ser su-perintendentes en la congregaci

    on? Pablo expli-

    c

    o: No permito que la mujer ense

    ne, ni que ejer-za autoridad sobre el hombre, sino que est

    e en

    silencio. Porque Ad

    an fue formado primero, luegoEva (1 Timoteo 2:12,13). En otras palabras, el or-den en que Dios cre

    o a la primera pareja indica en

    qui

    en quer

    a

    el delegar la labor de ense

    nanza ysuperintendencia.

    Puesto que Jesucristo es el Lder de todos los mi-

    nistros de Jehov

    a, ellos siguen su ejemplo. Seg

    unel disc

    pulo Lucas, Jes

    us iba viajando de ciudad

    en ciudad y de aldea en aldea, predicando y de-clarando las buenas nuevas del reino de Dios.Y qu

    e hicieron sus disc

    pulos cuando los envi

    o a

    realizar ese mismo ministerio? Recorrieron elterritorio de aldea en aldea, declarando las bue-nas nuevas. (Lucas 8:1; 9:2-6.)

    De igual modo, los ministros de Jehov

    adelaac-tualidad tanto hombres como mujeres parti-cipan con entusiasmo en el cumplimiento de laspalabras de Mateo 24:14. All

    Jes

    us predijo: Estas

    buenas nuevas del reino se predicar

    an en toda latierra habitada para testimonio a todas las nacio-nes; y entonces vendr

    a el fin.

    NUESTROS LECTORES QUIEREN SABER

    Tienen ministras religiosas los testigos de Jehov

    a?

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    24/32

    LAS imponentes Monta nas Blancas, o Levk `aOr e, de la isla de Creta van desapareciendoen la distancia. Un grupo de trece amigos viaja-mos en barco rumbo a una islita que emergede las profundidades del mar Mediterr

    aneo.

    Estamos deseosos de emprender nuestro re-corrido de predicaci

    on por la isla de Gaudos,

    un puntito en el mapa que marca lo que seconsidera el extremo sur del continente eu-ropeo.

    Parece que el viaje sera agradable, pues hoy

    es un caluroso da de verano. Pero intensas ra-chas de viento no tardan en agitar el mar.El barco se mece como un corcho entre lasolas, y siento que todo da vueltas. Esto me re-cuerda la fuerte tormenta que sorprendi

    o al

    ap

    ostol Pablo cuando viajaba por estas aguas.En aquella

    epoca, el nombre de la islita era

    Cauda (Hechos 27:13-17). Solo espero que lle-guemos a puerto sanos y salvos.

    Por fin divisamos nuestro destino! Gaudoses un macizo rocoso con acantilados que se

    precipitan al mar. Se podra decir que pareceuna meseta, con una altura aproximada de300 metros (1.000 pies) y sin monta

    nas que so-

    bresalgan. La mayor parte de sus 26 kil

    ometroscuadrados (10 millas cuadradas) est

    a cubier-

    ta de densos pinares y matorrales. En algunaszonas hay enebros costeros que crecen hasta lamisma orilla.

    En cierto momento de su historia, la isla lle-g

    o a tener unos 8.000 habitantes. Pero en la ac-

    tualidad, la cifra no alcanza ni los 40. Es comosi la civilizaci on moderna se hubiese olvidadode Gaudos. Y aunque muchos buques cisterna

    y de carga surcan estas costas, la conexi

    on ma-rtima con la isla de Creta a menudo sufre

    retrasos o cancelaciones por culpa del maltiempo.

    Nosotros vamos a llevar a los isle

    nos unmensaje alegre y animador. Les hablaremos deun futuro mejor: vida eterna con salud perfec-ta. Estamos a punto de atracar y tenemos mu-chas ganas de desembarcar para hablar de esta

    firme esperanza.

    Las cuatro horas y media de tra-ves

    a no han sido muy placenteras

    que digamos. Nuestros p

    alidos ros-tros nos delatan. Nada mejor queun sue

    necito y un caf

    e para repo-

    CARTA DE

    GRECIA

    Predicando enPredicando enla frontera sur de Europala frontera sur de Europa

    Cabo Tripiti, considerado el punto m

    asmeridional del continente europeo

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    25/32

    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 25

    nernos! Tras un breve repaso del viaje del ap

    os-tol Pablo y de una oraci

    on llena de sentimien-

    to, estamos preparados para empezar.

    Los lugare

    nos son amigables y hospitalarios.Nos invitan a pasar a sus casas y quieren que

    comamos o bebamos algo. Adem

    as de darleslas buenas noticias bblicas, agradecemos suhospitalidad ayud

    andoles de diversas mane-

    ras. Por ejemplo, mientras conversamos con lase

    nora de un negocio, uno de nosotros, que es

    electricista, se fija en que un aparato el

    ectricoest

    a estropeado y se ofrece a repararlo. Este ges-

    to alegra mucho a la se

    nora, quien aceptanuestras publicaciones b

    blicas y nos felicita

    por la labor que hacemos. Otra mujer est

    a tanagradecida que nos dice: Lo que ustedes ha-

    cen es obra de Dios, y no de los hombres. De locontrario no habran venido a esta isla remotapara hablarnos de la Biblia.

    La gente aprecia mucho las publicacionesb

    blicasquele entregamos. Un se

    nor acepta las

    revistasLa AtalayayDespertad! que le ofrece-mos y nos pide m

    as lecturas para los meses de

    invierno. Otro hombre que tiene un negociono solo quiere publicaciones para

    el, sino tam-

    bi

    en para que sus clientes las lean. Nos da sudirecci

    on de correo para que le enviemos las

    revistas todos los meses. Una familia se sor-prende al ver que su isla se menciona en la Bi-blia y acepta gustosa nuestras revistas.

    Aunque la respuesta positiva de los residen-tes nos anima, esta visita trae recuerdos tristesa algunos del grupo. Cerca de la bah

    a de Sara-

    kiniko hay un edificio que en su da fue el

    hogar de exiliados polticos. A finales de la

    d

    ecada de 1930, un testigo de Jehov

    a llama-do Emmanuel Lionoudakis estuvo desterradoaqu

    por su labor de evangelizaci

    on.1A la Gau-

    dos de esa

    epoca se la ha descrito como unaisla est eril donde solo haba mortferos escor-piones, un lugar donde muchos [...] mor

    an

    por el hambre, la miseria o la enfermedad.Con raz

    on se le llamaba la isla de la muerte.

    1 La biografa de Emmanuel Lionoudakis aparece en

    La Atalaya del 1 de septiembre de 1999, paginas 25 a 29.

    Emmanuel se alimentaba de lo que pescaba.Y como era el

    unico Testigo que hab

    a en la

    isla, se mantena muy ocupado predicando a

    los exiliados pol

    ticos. Ver el lugar donde

    el es-tuvo hace unos setenta a nos es especialmenteemotivo para su hija, su yerno y su nieta. El ins-pirador ejemplo de este cristiano nos motiva aser leales y seguir activos en la predicaci

    on.

    Para los exiliados, Gaudos no fue un paraso

    turstico. En cambio, nosotros hemos pasado

    un fin de semana muy agradable predicandoen cada rinc

    on de la isla. Hemos dejado en ma-

    nos de los afables isle

    nos 46 revistas y 9 folle-tos. A

    un no nos hemos ido y ya tenemos ga-

    nas de volver a verlos!Casi sin darnos cuenta, ha llegado la hora de

    partir. Pero una vez mas, el mal tiempo se pone

    en contra nuestra, y el ferry de las cinco de latarde no puede salir. As

    que embarcamos a

    medianoche, listos para otro viaje movido,pero no zarpamos sino hasta las tres de la ma-drugada. Tras ser sacudidos por las olas duran-te unas cinco horas, llegamos a Creta. Y aun-que estamos exhaustos cuando pisamos tierrafirme, tenemos la satisfacci

    on de haber dado a

    conocer el nombre de Jehov

    a en la isla deGaudos (Isa

    as 42:12). Todos sentimos que el

    esfuerzo vali

    o la pena. Pronto ol-vidaremos los incidentes del viaje,pero en nuestros corazones queda-r

    an grabados para siempre los bue-

    nos recuerdos.

    Placa en memoria de los exiliados y el edificiodonde viv

    an en la bah

    a de Sarakiniko

    GentilezadeHelle

    nicPost

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    26/32

    26 LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMBRE DE 2012

    EL SUAJILI lo hablan unos 100 millones de personas en almenos doce pases de Africa central y oriental.1 Se trata delidioma oficial de varias naciones, como Kenia, Tanzania y

    Uganda. Tambi

    en es la lengua franca de las tierras vecinas, lo

    cual facilita el comercio y la comunicaci

    on entre distintospueblos.

    El suajili ha contribuido en gran manera a unificar la pobla-

    ci

    on de

    Africa oriental. Y es que tan solo en Tanzania se ha-blan al menos 114 lenguas tribales. Para que se haga una idea

    de lo que esto implica, imagnese que a una distancia de entre

    40 y 80 kil

    ometros (25 y 50 millas) de su casa, la gente habla

    un idioma completamente diferente al suyo. Para colmo, enalgunos casos, quienes comparten un idioma se agrupan enapenas unas cuantas aldeas. C

    omo se comunicar

    a con estas

    personas? He aqu la ventaja de tener una lengua en com

    un.

    Los orgenes del suajili

    Al parecer, este idioma ya se hablaba para el siglo X, perono se puso por escrito sino hasta el siglo XVI. Quienes lo

    aprenden no tardan en darse cuenta del sabor

    arabe que trans-

    1 Este idioma tiene variantes en estos pases.

    SE DA A CONOCER EL NOMBRE DE DIOS EN SUAJILIPara muchos, el nombre de este idioma evoca im agenes de Africa y de animalessalvajes deambulando por las llanuras del Serengueti. Lo cierto es que hay

    mucho por descubrir sobre esta lengua y sus hablantes.

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

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    LA ATALAYA 1 DE SEPTIEMB RE DE 2012 27

    mite. De hecho, aunque la mayor parte de su

    vocabulario es de origen africano, al menosun 20% proviene del

    arabe. No sorprende

    que durante varios siglos se usara el alfabetoarabe en su escritura.

    Curiosamente, el suajili emplea hoy da el

    alfabeto latino. A qu

    e se debi

    o ese cam-bio? Qu

    e ocurri

    o? Para conocer la respuesta,

    nos remontaremos a mediados del siglo XIX,cuando llegaron a

    Africa oriental los prime-

    ros misioneros europeos que deseaban llevarel mensaje de la Biblia a la gente del lugar.

    La Biblia llega aAfrica oriental

    En 1499, durante la

    epica expedici

    on ma-rtima de Vasco da Gama por el extremo sur

    del continente africano, los misioneros por-tugueses fundaron una misi

    on en Zanz

    bar

    y as introdujeron el catolicismo en

    Africa

    oriental. Sin embargo, al cabo de doscientosa

    nos, la oposici

    on de los lugare

    nos oblig

    o a

    los portugueses y su religi

    on a abandonar lazona.

    Pasaran otros ciento cincuenta a nos hastaque la Palabra de Dios volviera a abrirse paso

    en esta parte del continente. En esta ocasi

    on,la llev

    o un misionero alem

    an, Johann Lud-

    wig Krapf. En 1844, cuando arrib

    o a Momba-sa (Kenia), el islam era la religi

    on que impe-

    raba en la costa oriental africana, aunque

    muchas de las tribus del interior segu

    anaferradas a sus creencias animistas tradicio-nales. Krapf cre

    a que era importante que to-

    dos tuvieran acceso a la Biblia.

    As que no perdi

    o el tiempo. Se puso ma-

    nos a la obra y estudi

    o suajili. En juniode 1844, al poco de llegar, emprendi

    o la dif

    -

    cil tarea de traducir la Biblia a este idioma. Pordesgracia, al mes siguiente sufri

    o un duro

    golpe: muri

    o su esposa con la que llevabacasado dos a

    nos, y unos d

    as despu

    es, su hi-

    jita. Pese a tan dolorosa p erdida, prosigui o sulabor de traducci

    on. En 1847 se publicaron

    los primeros tres captulos del libro de G

    ene-

    sis, que se convirtieron en el primer docu-mento impreso en suajili.

    Krapf fue el primero en usar el alfabeto la-tino para el suajili. Por qu

    e lo hizo? Entre

    otras cosas, porque razonaba que el alfabetoarabe solo supondr

    a un obst

    aculo para los

    europeos que mas adelante tuvieran que

    aprender el idioma. Adem

    as, pensaba que elalfabeto latino les facilitara a los indgenasel aprendizaje de las lenguas europeas. Aunas

    , algunos siguieron usando el alfabeto

    ara-

    be por muchos a

    nos; hasta se publicaronciertas porciones de la Biblia en este sistemade escritura. Lo cierto es que el alfabeto latino

    &

    Pub

    licadaenJournaloftheAmerican

    OrientalSociety,vol.1,num

    .3(1847)

    Traducci

    on al suajili de G

    enesis 1:1-3por Johann Krapf (1847)

    Pases de

    Africa

    donde se hablasuajili

    Uganda

    Kenia

    Tanzania

    Rep.Dem.

    delCongo

    Ruanda

    Burundi

    Zanz

    bar

    Zambia

    Mozambique

    Malaui

    Sud

    an Etiopa

    Somalia

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    28/32

    ha sido de gran ayuda para muchos estudian-tes de suajili, quienes, al igual que numerososmisioneros, agradecen el cambio.

    Ademas de emprender el innovador pro-

    yecto de traducir la Palabra de Dios al suajili,Krapf allan

    o el camino para futuros traducto-

    res, pues cre

    o la primera gramatica suajili y

    un diccionario en ese idioma.

    El nombre de Dios en suajili

    En un principio, cuando se publicaron lostres primeros cap

    tulos de G

    enesis, el nombre

    divino se haba traducido meramente como

    Dios Todopoderoso. Hacia finales del si-glo XIX fueron llegando a

    Africa oriental dis-

    tintos hombres que continuaron la labor detraducir la Biblia completa al suajili. Entre es-tos se cuentan Johann Rebmann, WilliamTaylor, Harry Binns, Edward Steere, FrancisHodgson y Arthur Madan.

    Es interesante que en algunas de estasprimeras traducciones, el nombre divinono solo aparec

    a en lugares aislados, sino por

    todas las Escrituras Hebreas. Los traducto-res con base en Zanz

    bar lo vertieron como

    Yahuwa, mientras que los de Mombasa lo tra-dujeron comoJehova.

    En 1895 vio la luz la primera Biblia comple-

    ta en suajili. Durante las siguientes d ecadasaparecieron otras traducciones, pero algunasno tuvieron una distribuci

    on muy amplia.

    A principios del siglo XX se hicieron grandes

    esfuerzos por estandarizar el idioma en

    Africaoriental. Esto llev

    o a que en 1952 se produjera

    la Biblia mas distribuida actualmente en esta

    lengua: la Swahili Union Version. Como resul-tado, Yehova se convirti

    o en la forma m

    as

    aceptada del nombre de Dios.

    Lamentablemente, como aquellas prime-ras traducciones dejaron de imprimirse, elnombre divino fue cayendo en el olvido.En algunas Biblias modernas brilla por su au-sencia, mientras que en otras se mencionasolo en algunos vers

    culos. En la Union Ver-

    sion de 1952, por ejemplo, apareci

    o apenasquince veces, y en su revisi

    on de 2006, esta ci-

    fra se redujo a once.1

    Aunque esta traducci

    on omite el nombredivino casi por completo, cabe destacar que

    en una de sus paginas introductorias indica

    con claridad que el nombre de Dios es Jeho-v

    a. Esto ha contribuido a que las personas

    que buscan la verdad aprendan el nombre denuestro Padre celestial en su propia Biblia.

    Ahora bien, aqu no acaba todo. En 1996 se

    public

    o la Traducci

    on del Nuevo Mundo de lasEscrituras Griegas Cristianas en suajili. Se tra-ta de la primera traducci

    on que restituye el

    nombre de Dios a los 237 lugares donde apa-rec

    a originalmente de Mateo a Revelaci

    on

    (Apocalipsis). Este minucioso trabajo se vio

    1 Aparece en G

    enesis 22:14;Exodo 6:2-8 (dos veces);

    17:15 (como Yahweh); Jueces 6:24; Salmo 68:20; 83:18;Isa

    as 12:2; 26:4; 49:14, y Jerem

    as 16:21.

    arribaalaizquierda:gentilezadeNationalLibraryofScotland

    Fragmento del captulo 1 de Mateotraducido al suajili con caracteres

    arabes (1891)

    Distintas formas del nombre divino en dos de las primeras traducciones al suajili

    P arrafo de las p aginas introductoriasde la Swahili Union Version

    donde aparece el nombre de Dios

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    29/32

    culminado con la publicaci

    on en 2003 de

    la Traducci

    on del Nuevo Mundo de las SantasEscrituras, la Biblia completa, en suajili. En to-tal y hasta la fecha se han impreso unos

    900.000 ejemplares.

    Al fin, el nombre de Dios ya no est a sepulta-do por t

    tulos o relegado a una simple nota

    aclaratoria de un pr

    ologo. Cada vez que las

    personas de buen coraz

    on que hablan suajili

    leen el nombre de Dios que aparece mas de

    siete mil veces en la Traducci

    on del NuevoMundo, se sienten m

    as cerca de

    el.

    Ademas, esta traducci

    on emplea un suajili

    moderno y de facil comprensi

    on para todos

    sus hablantes de

    Africa oriental. Tambi

    en ha

    eliminado algunas ideas err

    oneas que se ha-b

    an introducido sutilmente en muchas otras

    traducciones. De este modo, los lectores pue-

    den confiar en que tienen ante sus ojos pala-

    bras correctas de verdad, tal y como fueron

    inspiradas por nuestro Creador, Jehov

    a Dios

    (Eclesiast

    es 12:10).

    Son muchos los que han expresado su agra-

    decimiento por la Traducci

    on del Nuevo Mun-do en suajili. Vicent, un evangelizador de

    tiempo completo de 21 a

    nos de edad, dijo:Me puse contentsimo al ver que utiliza un

    suajili tan sencillo y que ha vuelto a poner el

    nombre de Dios donde otras traducciones lo

    haban quitado. A Frieda, madre de tres hi-

    jos, se le ha hecho mucho mas f

    acil explicar

    las verdades bblicas con esta traducci

    on.

    Desde sus modestos comienzos, la labor de

    traducci

    on de la Biblia al suajili se ha prolon-

    gado por mas de ciento cincuenta a

    nos. Jes

    us

    declar

    o que haba dado a conocer el nombre

    de su Padre (Juan 17:6). En la actualidad, gra-

    cias a la Traducci

    on del Nuevo Mundo en suaji-li, los m

    as de 76.000 testigos de Jehov

    a de

    Africa central y oriental que hablan ese idio-

    ma tambi

    en dan a conocer con entusiasmo el

    nombre de Dios.

    Muchos se beneficiande la Traducci

    on

    del Nuevo Mundode las Santas Escriturasen suajili

    29

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    30/32

    HAS tenido alguna vez muchsimas ganas

    de conseguir algo?1... Eso le ha pasado atodo el mundo. Pero est

    a bien mentir

    para conseguirlo?... Claro que no. Eso lohar

    a alguien codicioso. Veamos c

    omo un

    hombre llamado Guehaz se qued

    o sin

    nada por culpa de su codicia.El era el ayu-

    dante de Eliseo, un profeta del Dios verda-dero, Jehov

    a.

    Eliseo y Guehaz vivieron hace muchotiempo, unos mil a

    nos antes de que Jes

    us,

    el Hijo de Dios, naciera en la Tierra. Jehov

    autiliz

    o a Eliseo para hacer milagros. La Bi-

    blia cuenta que

    el san

    o a Naam

    an, un im-portante jefe del ej

    ercito sirio que ten

    a

    lepra. Hasta ese momento, nadie haba po-

    dido curarlo de esa terrible enfermedad.

    Cuando Eliseo haca milagros para ayu-

    dar a la gente, nunca aceptaba dinero acambio. Se te ocurre por qu

    e?... Porque

    saba que esas obras maravillosas en reali-

    dad las haca Jehov

    a. Por eso rechaz

    o el oro,

    la plata y la ropa de calidad que Naam

    an,content

    simo por haber sido sanado, quiso

    regalarle. En cambio, Guehaz se mor

    a de

    ganas por quedarse con ese regalo.

    Despu

    es de que Naam

    an se fue, Guehaz

    se ech

    o a correr detr

    as de

    el sin que Eliseo

    se enterara. Sabes qu e le dijo Guehaz aNaam

    an?... Que Eliseo lo hab

    a enviado a

    pedirle un par de prendas de ropa para doshombres que hab

    an venido de visita.

    1 Si le est

    a leyendo el artculo a un ni

    no, haga una pausa tras

    los puntos suspensivos y permita que responda.

    DE PADRES A HIJOS

    Perdi

    o todo por codicioso

    30

  • 7/31/2019 Valora Dios a las Mujeres?

    31/32

    Qu

    e mentiroso! Guehaz se invent

    o esa

    historia porque quera quedarse con lo

    que Eliseo haba rechazado. Claro, Naam

    an

    no lo saba, as

    que con mucho gusto le dio

    lo que peda y m

    as. Qu

    e crees que pas

    o

    luego?...Cuando Guehaz

    regres

    o a casa, Eliseo le

    pregunt

    o: De d

    onde vienes?.

    De ninguna parte, le respondi

    o. PeroJehov

    a ya hab

    a informado de todo a Eliseo.

    As que el profeta le dijo que lo que hab

    a

    hecho estaba muy mal.

    Guehaz se hab

    a quedado con dinero

    y ropa que no le pertenecan. Por eso,

    Dios lo castig

    o con la lepra que antes ha-ba tenido Naam an. Cu al piensas quees la lecci

    on?... Algo que aprendemos es

    que no est

    a bien inventarnos historias queno son ciertas para conseguir lo que quere-mos.

    Guehaz se invent

    o una historia que era

    una mentira.Sabes por qu

    e lo hizo?... Por-que era codicioso. Quer

    a algo que no era

    suyo y, para obtenerlo, minti

    o. Eso le cost

    o

    caro: estuvo muy enfermo el resto de suvida.

    En realidad, la lepra no fue lo peor. Qu

    epiensas que fue?... Que rompi

    o su

    amistad con Dios. Nunca cometa-mos el mismo error! Es mucho me-jor ser buenos y compartir lo quetenemos con los dem

    as.

    LECTURA BIBLICA

    2 Reyes 5:5, 20-27; Judas 21

    Juan 15:10

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