Revista Savios del Toreo nº59

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Homenajes Fundación Escalera del Éxito Homenajes Fundación Escalera del Éxito 4 de mayo de 2010 4 de mayo de 2010 w ww ww w. .s sa ab bi io os sd de el lt to or re eo o. .c co om m Año XIV - N. o 59 JULIO - AGOSTO - SEPTIEMBRE 2010 68 Páginas de Cultura Taurina 68 Páginas de Cultura Taurina Distribución personalizada Don Salvador Sánchez-Marruedo, Don Andrés Amorós Guardiola, Doña María Dolores Navarro Ruiz, Don Pío García-Escudero, Don Leopoldo Sánchez Gil y Don Santiago Martín Sánchez «El Viti».

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Revista cultural taurina

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Homenajes Fundación Escalera del ÉxitoHomenajes Fundación Escalera del Éxito44 ddee mmaayyoo ddee 2200110044 ddee mmaayyoo ddee 22001100

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Año XIV - N.o 59 JULIO - AGOSTO - SEPTIEMBRE 2010 68 Páginas de Cultura Taurina68 Páginas de Cultura Taurina Distribución personalizada

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2. Don José María Aznar López.– Presidente Partido Popular3. Don Samuel Romano Flores.– Ganadero de reses de lidia4. Don Livinio Stuyck Candela (in memoriam).– Empresario taurino5. Don Manuel Navarro Salido.– Matador de toros6. Dinastía «Bienvenida».– Matadores de toros

7. Don Rafael Sánchez Ortiz «Pipo» (in memoriam).– Empresario - Apoderado taurino8. Don Víctor Puerto.– Matador de toros9. Don Esteban Rivas Martín.– Empresario10. Don Víctor Mendes.– Matador de toros11. Don Victorino Martín.– Ganadero de reses de lidia12. Don Juan Andrés Garzón Durán.– Ganadero de reses de lidia

13. Don Matías Prats Cañete.– Periodista cronista taurino14. Dinastía «Dominguín».– Matadores de toros15. Don Rafael Campos de España.– Periodista cronista taurino16. Don José Carlos Arévalo Díaz de Quijano.– Periodista cronista taurino17. Don Lucio Sandín.– Matador de toros

18. Don Luis Francisco Esplá.– Matador de toros19. Doña Sonsoles Aboín Aboín.– Ganadera de reses de lidia; Don Andrés Hernando.– Matador de toros20. Don José Cubero «Yiyo» (in memoriam).– Matador de toros21. Don Carmelo Espinosa Yebra.– Matador de toros - Propietario restaurantes «La Giralda»22. Don Álvaro Domecq Romero.– Rejoneador de toros23. Don José Antonio Campuzano.– Matador de toros24. Don Enrique García Asensio.– Director de la Orquesta Filarmónica

Escalera del Éxito es el reconocimiento del esfuerzo humano… Esel símbolo del triunfo en cualquiera de los aspectos nobles de lavida... Pero en la base de este Trofeo, y esto es lo importante, hayunas personas que recuerdan ese trabajo y ese triunfo... Unaspersonas que reconocen que nuestro sacrificio no fue baldío...Unas personas que aplauden el esfuerzo que supone siempresubir con Éxito los peldaños de la Escalera de nuestra vida.

S.A.R. Doña María de las Mercedes de Borbón y de Orleáns, Condesa de Barcelona, recibe de Don Salvador Sánchez-Marruedo, Presidente, el primer homenaje Escalera del Éxito.

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25. Don Jaime Ostos Carmona.– Matador de toros26. Don Rafael Puente-Villegas.– Director Gerente de la Comunidad de Madrid en Asuntos Taurinos27. Don Mariano Pérez Morterero.– Primer triunfador «Los Sabios del Toreo»28. Don Sebastián Palomo Linares.– Matador de toros 29. Don Ramón Sánchez Aguilar.– Cronista taurino30. Doña Cristina Sánchez.– Matador de toros31. Don Fermín Murillo Paz.– Matador de toros

32. Don Manuel García-Miranda y Rivas.– Embajador de España - Presidente del Casino de Madrid33. Don Antonio Chenel «Antoñete».– Matador de toros34. Don Manuel Molés.– Periodista cronista taurino35. Don Miguel Flores.– Matador de toros36. Don Andrés Vázquez.– Matador de toros37. Don Pedro Martínez «Pedrés».– Matador de toros38. Don Félix Colomo Díaz.– Matador de toros

39. Don Agapito García «Serranito».– Matador de toros40. Don Dámaso González.– Matador de toros41. Don Juan Palma Hernández.– Periodista cronista taurino42. Don Pierre Arnouil.– Periodista cronista taurino43. Don Alberto Lopera «Loperita».– Matador de toros - Periodista taurino44. Don Miguel Cid Cebrián.– Doctor en Derecho45. Don Antonio Méndez Moreno.– Ganadero de reses de lidia

46. Don Ángel Escribano Heras.– Primer Teniente Alcalde San Sebastián de los Reyes47. Don Victoriano del Río Cortés.– Ganadero de reses de lidia48. Don Jorge García de Lorite.– Director Gerente de la Comunidad de Madrid en Asuntos Taurinos49. Don Gustavo Pérez Puig.– Director Teatro Español de Madrid50. Don Gregorio Lozano Sánchez.– Matador de toros51. Don Tomás Campuzano.– Matador de toros52. Don Marcelino Moronta.– Presidente de la plaza de toros de Madrid

53. Don José Belmonte.– Dinastía Belmonte - Matadores de toros54. Don José María Álvarez del Manzano y López del Hierro.– Alcalde de Madrid55. Don Máximo García Padrós.– Cirujano Jefe de la plaza de toros de Madrid56. Doña María Teresa Rivero.– Presidenta del Rayo Vallecano57. Don Marco Antonio Ramírez Villalón.– Empresario plaza de toros de Morelia - México58. Don Pío García Escudero.– Coordinador General del Partido Popular59. Don Antonio Briones Díaz.– Ganadero - Presidente Hoteles Tryp

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60. Don Rafael Ramos Gil.– Secretario General Técnico del Ministerio del Interior61. Don Manuel Martínez Flamarique «Chopera».– Ganadero de reses de lidia y empresario taurino62. Don Enrique Múgica Herzog.– Defensor del Pueblo63. Doña Peñuca de la Serna (Dinastía de la Serna).– Pintora taurina64. Don Antonio Mingote Barrachina.– Académico y dibujante65. Don Fernando Vizcaíno Casas.– Doctor en Derecho y escritor66. Don Jesús Ovelar Calvo.– Presidente Ecumad - Ibertoro

67. Don Agustín Marañón Richi.– Primer Director Gerente Comunidad de Madrid Asuntos Taurinos68. Don Javier Sánchez Arjona.– Ganadero de reses de lidia69. Don Higinio-Luis Severino Cañizal.– Abogado, ex-ganadero y empresario teatral70. Don Rafael Berrocal Rodríguez.– Bibliógrafo71. Don Ramón Vila Giménez.– Cirujano Jefe de La Real Maestranza de Sevilla72. Don Ángel Acebes Paniagua.– Ministro de Justicia73. Don José Luis Ruiz Solaguren.– Empresario de hostelería

74. Don Miguel Padilla Suárez.– Director General de la U.N.E.D. - Madrid75. Don Manuel Fraga Iribarne.– Presidente Xunta de Galicia76. Don Mariano Aguirre Díaz.– Presidente Real Federación Taurina de España77. Don Juan Antonio Gómez-Angulo.– Secretario de Estado para el Deporte78. Don Roberto Domínguez Díaz.– Matador de toros79. Don Fernando Fernández Román.– Director Programas Taurinos Radiotelevisión Española80. Don Juan Silva Berdús.– Depositario perpetuo - «Los Sabios del Toreo» - Revista cultural taurina

81. Don Santiago Estrada Sáiz.– General del Cuerpo de Ingenieros Politécnicos del Ejército82. Don Juan Barranco Posada.– Matador de toros, periodista-crítico del diario «La Razón»83. Doña M.ª Pilar López Partida.– Alcaldesa - Presidenta de Valdemorillo84. Don José Luis Carabias Sánchez-Ocaña.– Periodista - Cronista taurino85. Don Benjamín Bentura Remacha.– Periodista - Fundador de la revista «Fiesta Española»86. Don Francisco Camino Sánchez.– Matador de Toros87. Don Lorenzo Gallego Castuera.– Compositor y director de la Banda de Música de Las Ventas de Madrid

88. Don César Palacios Romera.– Pintor taurino89. Don Ignacio de Cossío y Pérez de Mendoza.– Dinastía de los Cossío - Escritores taurinos90. Don Jaime González Sandoval «El Puno».– Matador de Toros91. Don José Luis Suárez-Guanes Ybáñez.– Escritor, historiador taurino92. Don Santiago de Santiago.– Escultor93. Don Federico Martín Bahamontes.– Ciclista, primer español ganador del Tour de Francia 195994. Don Francisco Corpas Brotons.– Matador de toros

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95. Don Federico Carlos Sainz de Robles.– Abogado y ex presidente Trib. Supremo y C.G.P. Judicial96. Don Vidal Pérez Herrero.– Fundador editor de la «Agenda Taurina Vidal»97. Don Pedro Núñez Morgades.– Defensor del Menor en la Comunidad de Madrid98. Doña Jacqueline Álvarez Rodríguez.– Licenciada en Diplomacia y Relaciones Internacionales99. Don Fernando Cuadri Vides.– Ganadero de reses de lidia100. Excelentísima Señora Doña Cayetana Fitz-James Stuart y de Silva.– Duquesa de Alba101. Don Francisco Romero López «Curro Romero».– Matador de toros

102. Don Eduardo y Don Antonio Miura Martínez.– Ganaderos de reses de lidia103. Don José Julio García Sánchez.– Periodista, cronista taurino104. Don Elías Rodríguez Varela.– Periodista - Presidente Grupo Abaira - Vicepresidente Bosques Naturales105. Don Juan Lamarca López.– Presidente de la plaza de toros de Las Ventas106. Don Jean Grenet.– Alcalde de Bayona - Presidente diputados taurinos parlamento francés107. Doña Conchita Cintrón.– Rejoneadora de toros108. Don Enrique Cornejo Fernández.– Empresario y productor teatral

109. Doña Paloma San Basilio.– Cantante española de nivel internacional110. Don José María Montilla Álvarez.– Matador de toros111. Don José Serrano Carvajal.– Presidente de la Asociación Universitaria Taurina el Birrete112. Don Felipe Díaz Murillo.– Director Gerente de la Escuela de Tauromaquia de Madrid113. Don Antonio Purroy Unanua.– Catedrático de Producción Animal114. Doña Yolanda Barcina Angulo.– Alcaldesa - Presidenta de Pamplona115. Don José Pedro Gómez Ballesteros.– Director Gerente de la Comunidad de Madrid de Asuntos Taurinos

116. Don David Shohet Elías.– Fundador del Premio Literario Taurino «Doctor Zumel»117. Don Arturo Pérez-Reverte.– Académico, escritor y periodista118. Don Hubert y Doña Françoise de Yonnet.– Ganaderos de reses de lidia119. Don Julio Aparicio Martínez.– Matador de toros120. Doña Mercedes Valverde Candil.– Directora de los Museos Municipales de Córdoba121. Don Joaquín Bernadó y Bartoméu.– Matador de toros122. Don Juan Carlos Navas Gómez.– Presidente plaza de toros de Ávila - Vocal Com. Reg. Tau. Castilla y León

123. Don José María Moreno Bermejo.– Bibliófilo taurino124. Don Juan José Gómez Álvaro.– Director propietario «Jotacinco»125. Don Agustín Díaz Yanes.– Director de cine y guionista126. Don José Miguel Arroyo Delgado.– Matador de toros127. Don Ángel Nieto Roldán.– Campeón del Mundo de Motociclismo «12+1»128. Don Fernando del Arco de Izco.– Antólogo de Manuel Rodríguez Sánchez «Manolete»129. Don Jean Paul Fournier.– Alcalde de Nimes - Francia

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129. Don Daniel J. Valade.– Delegado Cultura y Tauromaquia de Nimes - Francia130. Don Alfredo Landa Areta.– Actor de cine y teatro131. «Manolete» (in memoriam).– Depositario perpetuo: Don Rafael Soria Molina.– Matador de toros132. Don César Alierta Izuel.– Presidente Ejecutivo de Telefónica133. Don Carlos Herrera Crusset.– Periodista, principalmente de radio - Escritor134. Don Sabino Fernández Campo.– Conde de Latores, Grande de España y Tte. General Honorífico135. Don Ignacio González González.– Vicepresidente Primero y Portavoz del Gobierno de la C.M.

136. Don Rafael Finat Riva.– Conde de Mayalde - Ganadero de reses de lidia137. Don Adolfo Suárez Illana.– Abogado - Aficionado práctico138. Don José Iturmendi Morales.– Decano de la Facultad de Derecho U.C.M. - Fundador «Laudatio Taurinorum»139. Don Alfonso Ussía Muñoz-Seca.– Periodista y escritor140. Don Adolfo Martín Escudero.– Ganadero de reses de lidia141. Don Juan Antonio Sagardoy Bengoechea.– Catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social142. Don Matías Prats Luque.– Licenciado en Derecho y Periodismo, presentador de Noticias 2 en Antena 3

143. Don Ramón López-Vilas.– Catedrático Derecho Civil y Magistrado Tribunal Supremo Justicia (excedente)144. Don Edward L. Romero.– Embajador de los EE.UU. en España 1998-2001145. Don Luis María Anson Oliart.– de la Real Academia Española. Presidente de «El Imparcial»146. Don Bruno Delaye.– Embajador de la República Francesa en España147. Don Joaquín Criado Costa.– Director Real Academia Córdoba de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes148. Don Miguel Ángel Moncholi Chaparro.– Doctor en periodismo por la UCM149. Don Luis González Novillo.– Director-Propietario de Luis & Tachi

150. Don Carlos Gómez Arruche.– Teniente General Jefe del Mando Aéreo General151. Don Fernando Sánchez Dragó.– Ensayista y novelista152. Doña María de los Ángeles Sanz Fernández.– Presidenta peña taurina «Las Majas de Goya»153. Doña Teresa Gimpera Flaquer.– Actriz de cine154. Doña María de los Ángeles Grajal López.– Médico especialista en neumología155. Doña Pilar Vega de Anzo.– Presidenta peña taurina «Los de José y Juan»156. Doña Cristina Moratiel Llarena.– Ganadera de reses de lidia

157. Padre don Ángel García Rodríguez.– Presidente Asociación Mensajeros de la Paz158. Doña Laura Valenzuela.– Actriz de cine159. Don Vicente del Bosque.– Seleccionador de la selección de fútbol de España160. Don José Bono Martínez.– Presidente del Congreso de los Diputados161. Don Vicente Zabala de la Serna.– Periodista-Cronista taurino162. Don José Luis Lozano Martín.– Torero, empresario, apoderado y ganadero de reses de lidia163. Don José Ortega Cano.– Matador de toros6 • sabiosdeltoreo.com

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164. Don José Luis López Ferrero.– Director-Propietario Marisquerías López Ferrero y Mecenas de sus V Trofeos Taurinos165. Doña María José Ruiz López.– Licenciada en Bellas Artes. Académica de la Real Academia de Córdoba166. Don Juan Iranzo Martín.– Doctor en Economía. Director General Instituto de Estudios Económicos167. Don Emilio Morales Jiménez.– Presidente de la Peña Taurina el 7 y Vicepresidente de la Peña Los Cabales168. Doña Rosa Basante Pol.– Académica de número de la Real Academia Española de Farmacia y Presidenta de los Premios Dr. Zumel169. Don Francisco Ruiz Miguel.– Matador de Toros170. Don Leopoldo Sánchez Gil.– Presidente Club Cocherito

171. Doña María Dolores Navarro Ruiz.– Concejala Presidenta Junta Municipal de Arganzuela - Ayuntamiento de Madrid172. Don Andrés Amorós Guardiola.– Catedrático Literatura Española Facultad de Filología Universidad Complutense de Madrid. Escritor

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Alcalá, 423 (semiesq. c/ Arturo Soria) - 28027 MadridAPARCAMIENTO PROPIO, ENTRADA POR ARZOBISPO CÓS, 6Teléfs.: 91 742 85 98 - 91 742 93 85 - Fax: 91 742 59 68

Patrocinador de los Trofeos Taurinos «Feria de San Isidro»

de Mayor Tradición en Madrid

7 - X - 1970

XXIV Premios Taurinos San Isidro 2010

Reunido el jurado presidido por José María Álvarez del Man-zano y sus vocales: Miguel Ángel Moncholi, Tomás SerranoGuío, Ramón Sánchez Aguilar, Salvador Sánchez-Marruedo,José Pedro Gómez Ballesteros, María Dolores Navarro Ruiz,Juan José Gómez Álvaro, Juan José Gómez Canora, Gonza-lo Cristóbal Bescós, Patricia Navarro, Emilio Carpintero y Ma-nuel Muñoz Infante.

Decidieron que los premios que otorgan a la Feria de SanIsidro, dejar desierto el de triunfador de la Feria y Mejor Fae-na, los restantes recayeron en:

Feria de San IsidroMejor Estocada: Eugenio de MoraMejor Novillero: Juan del ÁlamoMejor Rejoneador: Leonardo HernándezMejor Toro: Frijonero de Hijos de Celestino Cuadri, lidiadoel 23 de mayoGanadería Mejor Presentación y Juego: Puerto de San Lo-renzo«A la Torería», Rafael Campos de España: Daniel Luque«Un romántico del Toreo», Rafael Sánchez «Pipo»: MercedesValverde

El jurado ha decidido premiar por su actuación, a los mata-dores de toros: Rafael Rubio «Rafaelillo» (9 de mayo), SergioAguilar (27 de mayo) y Fernando Robleño (28 de mayo).

Feria AniversarioTriunfador de la Feria: Juan BautistaMejor Toro: Pudoroso núm. 22 de Victoriano del Río, lidia-do el 3 de junio.

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NOTA DE REDACCIÓNLas opiniones y datos reflejados de información cultural-taurina, es responsabilidad de sus autores.

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XXIV Premios Taurinos San Isidro 2010 .................................................. 7Pipo V ................................................................................................................. 10España, sus plazas de toros ..................................................................... 12Carlos Arruza y su ascendencia vallisoletana (II) ........................... 14Nuevas revisiones de la tauromaquia Mexicana… (XIII) .................. 16Escuela cordobesa ........................................................................................ 18Con el dedo en la llaga… ............................................................................. 20Toro de lidia ..................................................................................................... 23Reflexiones sobre el futuro de los EE.TT. (II) ..................................... 24La torería gitana .......................................................................................... 26Mi pregón en la Feria de Córdoba 2008 (VIII) ....................................... 28Salamanca, tierra mía ................................................................................. 31La mujer en los toros .................................................................................. 32Crónica de los Homenajes ...................................................................... 34El arte del toreo y Córdoba al fondo (III) ............................................ 46En Uruguay, un monumento a la sin razón (I) ...................................... 48LX Aniversario Fundación Peña Taurina «El 7» ................................... 50La música en los toros ................................................................................ 51Toreros en la cocina .................................................................................... 52La obra taurina de Mariano Benlliure .................................................... 55¡Torero! Los toros en el cine .................................................................... 56Tauromaquia añeja ........................................................................................ 57La Guerra de los Botones y la Rebelión de las Masas ..................... 58a partir de aquí… «El Toreo©» páginas del ayer y hoy ................... 60Misceláneas ..................................................................................................... 67

SUMARIOJulio - Agosto - Septiembre 2010

Fundador Director EditorSalvador Sánchez-Marruedo

Coordinador GeneralPoul Christiansen de Querol

Secretaria de DirecciónClaudia Starchevich Araujo

Asesor BibliográficoBerrocal Libros Antiguos

Asesor ArtísticoJosé Miguel Palacio

Asesor JurídicoMiguel Ángel Hernández H.Asesor Taurino/Literario

Daniel DaudetFernando López MeleroAsesores MaquetaciónSalvador Sánchez VegaAlfredo Casado Manso

Asesor Página webMiguel Ángel CárdenasDirector de LogísticaÁngel Díaz Arroyo

Amigos ColaboradoresArturo Pérez-Reverte

Benjamín Bentura RemachaDiego Alfonso LedesmaFernando García Bravo

Higinio-Luis Severino CañizalHiginio Severino de Vega

Ignacio de Cossío y Pérez de MendozaIgnacio Ramón García Gómez

Joaquín Criado CostaJosé Francisco Coello UgaldeJosé Julio García SánchezJosé Serrano Carvajal

Juan Carlos Navas GómezJuan Silva Berdús

Lorenzo Gallego CastueraLucrecia Enseñat BenlliureLuisa Moreno FernándezMiguel Ángel «Pipo V»

Muriel FeinerPablo Ramos Colorado

Pilar Carrizosa y Susana CarrizosaRafael Carvajal RamosRamón Sánchez AguilarTomás García-Aranda

FotografíaJesús Carrera AparicioVerónica Domínguez

FotomecánicaMonoComp, S.A.

Cartagena, 43, 1.° • 28028 MadridImprime

EDIGRAFOSVolta, 2 • 28906 Getafe (Madrid)

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El pintor César Palacios, con su dibujo fácil y directo, halogrado que sus valoradísimas obras cuelguen en mul-titud de países.

Con más de 60 exposiciones realizadas en óleo, dibujos,carboncillo y predominio de temas taurinos, está en toda lageografía española: Museo Taurino de Madrid, Ronda, Va-lencia, Ciudad Real… en el extranjero: Galería Barbizon -Houston, Texas (EE.UU.); Galería Hotel Ágora - Bayona(Francia); Galería Ulrike - Heidelberg (Alemania); Space Ecu-revil - Arlés (Francia); Padespa’s - Nîmes (Francia).

Su caso es único y, por el momento, irrepetible. Porque elpintor taurino madrileño puede presumir de muchas cosas.

Su popularidad y prestigio en los ambientes artísticos, noestrictamente relacionados con la fiesta, es enorme.

También ha logrado «casi» vivir de la pintura, «un milagro enEspaña», como dice. Pero su mayor orgullo, y de lo único quepresume, además de su casticismo, es de su tarea como are-nero de la Plaza de Toros de Las Ventas, la más importantedel mundo, ha hecho el paseíllo entre sesenta a ochenta tar-des al año, desde 1974, sintiéndose como un torero, se ex-plica, al ir con su rastrillo y espuerta entre toro y toro.

Sobra decir que este artista, modesto y sencillo como per-sona, es un enamorado de la Fiesta.

«Los toros poseen grandes atractivos para un pintor: la luz,el colorido, el ambiente, la estética, etcétera», señala; «esoes lo que yo capto e intento plasmar y transmitir después conmis obras».

Se le puede ver trabajando continuamente en la Plaza delas Ventas los lances de todas las corridas.

Ha colaborado en libros: «El Quijote en el Café Gijón, IVCentenario»; desde 1997 al 2007, con el Excelentísimo Ayun-tamiento de Madrid, realizando en diez volúmenes la tem-

porada y San Isidro de esos años con sus dibujos y textosde José María Moreno; «Tauromaquia de las Extremidades.Un pincel en la arena»; «Apuntes del natural de Edgartorre»;«El Toro de Lidia» de Gráficas Carrasco; «El Toro visto porCésar Palacios» y «Tauromaquia Sentida», colección «Los Sa-bios del Toreo» de la Fundación Escalera del Éxito.

Ha ilustrado muchas otras obras: «Baraja Taurina en 1999»y la de «Heraclio Fournier en 2000»; «Enciclopedia Toros y To-reros, Tauromaquia de la A a la Z»; «Catálogo de la Asambleade Madrid»; «Los Toros en el Arte» de José Luis Morales.

Colaborador de revistas: «El Ruedo», Enciclopedia Toros yToreros, Programa Oficial de la Plaza de Toros de las Ven-tas, Diario La Razón, Agenda Taurina de Vidal Pérez Herre-ro, Toresma y Los Sabios del Toreo, entre otras muchas co-laboraciones.

Pintores contemporáneos más representativos del panorama taurino

Les presento… LA TAUROMAQUIA DEMiguel Ángel«Pipo V»

César Palacios en su estudio.

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César Palacios

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También ha participado en infinidad de conferencias y co-loquios, es socio de honor de la Peña «El 7», «El Puyazo»,Club Internacional Taurino, entre otras.

Colaborador de Libros: Los Libros de la Casa española,«Han volado el toro del coñac» de Ángel Palomino; «Comolos ángeles quisieran torear» de Miguel Flores; «El toro de li-dia» de Juan Carlos Navas; Premios literarios Doctor Zumel,fundado por David Shohet; «Valencia de Alcántara y las Fies-tas de Toros» de Juan Silva; «Tauromaquia Añeja», Colección

Los Sabios del Toreo de Fernando García Bravo. Premios,menciones y condecoraciones desde 1969, son innumera-bles, está en posesión de dos medallas, bronce en pintura ydibujo en Salamanca y segundo premio en pintura en Éibar,y desde entonces llegamos a 1999: «Premio Goya» de la Fun-dación Goya; pintor «Puerta Grande», Madrid 2001; medallade plata «Mérito Taurino» de la Real F. T. de España, Madrid2002; «Escalera del Éxito» de la Fundación del mismo nom-bre en 2003…

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Villafranca de los BarrosVillafranca de los Barros

Badajoz

Juan Silva Berdús Musicólogo

Escalera del Éxito 80

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L a moderna y actual plaza de toros de Villafranca de los Ba-rros, no es el primer coso con que contó tan bella locali-dad pacense, toda vez que existen antecedentes recogidos

en la prensa del año 1894, que en junio de dicho año se inau-guró la plaza de toros de Villafranca de los Barros con la lidia denovillos de la ganadería de Álvaro Jaraquemada, vecino de Fre-genal de la Sierra, por los novilleros Francisco Iglesias «El Apa-recido» y Francisco Suárez «El Huérfano».

Con un aforo de 5.000 espectadores y un ruedo de 43 metrosde diámetro, la Plaza Auditorio de reciente construcción, cuyasobras comenzaron en el año 1987 bajo la dirección y supervi-sión del arquitecto Ángel Gamero, fue inaugurada, siendo alcal-de de la ciudad José Espinosa Bote, el día 18 de julio de 1992 conel siguiente cartel: toros de Gabriel Rojas para los diestros: JuanAntonio Ruiz «Espartaco», César Rincón y Miguel Báez «Litri». Elprimer toro en pisar el ruedo del coso villafranqués atendía porPaquetillo, y estaba herrado con el número 88.

Hecho curioso a destacar en esta moderna plaza de toros es queel palco presidencial está ubicado en los tendidos de sol. En esascondiciones, muchos serán los designados para presidir las co-rridas, y, pocos, muy po cos, los que acepten tan ostentoso car-go en plena solanera.

Lejos han quedado los tiempos del «Gue rra», cuando pregona-ba por doquier, que las corridas de toros requerían sol y moscas.

Exteriores y escalinata de acceso a la plaza.

❮❮ Panorámica interior de la Plaza de Toros -Auditorio de Villafranca de los Barros.(Fotografía cortesía de Arturo Díaz.) Detalle de la fachada principal y puerta central.

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Carlos Arruzay su ascendencia vallisoletana (II)

José Luis GaliciaPintor y poeta

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…, más conocido por Joselito, que paradesgracia de los aficionados mexicanosno llegó a torear en este país.

Estaba José Ruiz Arruza en Méxicoy su novia Cristina en España; enaquella época era poco frecuen-

te el casarse por poderes, Cristina yJosé así se casaron y Cristina CaminoGalicia embarcó para México a reunir-se con su marido. A los cuatro años decasada Cristina quedó embarazada, quefue la primera bendición tan esperada,José le dijo con gran cariño y decisión:«Tú sabes la gran ilusión que tenía deser padre, pero también sabes quequiero que mis hijos sean españoles yque nazcan en España, así que antesde que sea tarde, debes embarcar paraEspaña», estamos en el año 1915, lógi-camente solo se viajaba a América enbarco.

Así fue, y en España nació un her-moso niño al que pusieron por nombreJosé y al que todos llamarían Pepe.

En 1918, volvió a quedar embaraza-da, y otra vez se repitió todo, Cristinaviajó a España donde nacería Manuel,Manolo. Volvió a quedar embarazadapor tercera vez, de un niño al que pon-dría por nombre Carlos; una amiga lehizo el «favor» de informarle que se ru-moreaba que su marido tenía una«aventurilla» con una «aventurera»; ¿ver-

dad? ¿mentira? el caso es que Cristina,celosa no comunicó a José su embara-zo hasta el quinto mes, diciéndole:«José, si me embarco ahora quizá naz-ca el niño en el barco, sietemesino, enfin tu decides», y José ante el riesgo quepodían correr su mujer y su hijo, concierta tristeza dijo: «Bueno, que le va-mos ha hacer, que nazca aquí, siempreserá español, pues es de padres espa-ñoles, de abuelos, bisabuelos y tatara-buelos españoles», y tenía razón, y na-ció Carlos Arruza. Ahora pongo porejemplo a Don Juan Carlos, Rey del Rei-no de España, español nacido enRoma. Carlos fue bautizado en Méxicoteniendo como padrinos a Manuel yAna, dos españoles que allí vivían.

Ya saben ustedes que en caso de quea los padres les ocurra una desgracia,los padrinos, de ahí este nombre, se-rán los nuevos padres del niño y de élcuidarán. Padres españoles, padrinosespañoles, en México se criaron y cre-cieron estos tres hermanos siempremuy unidos, Pepe, Manolo y Carlos.Cuando Carlos llegó a la mayoría deedad, podía según la ley elegir nacio-nalidad; hemos de aclarar que el Go-bierno mexicano nunca reconoció alGobierno del General Franco, puespara él, el único Gobierno con el quemantenía relaciones era el Gobiernoespañol republicano en el exilio, lo cual

no era extraño pues México acogió –nose sabe la cifra exacta– se habla de me-dio millón de españoles exiliados, quepor cierto fueron los que con su es-fuerzo y entusiasmo hicieron progre-sar a tan amado País.

Por segunda vez se le escapaba,como agua en cesta, la posibilidad deser Carlos español oficialmente.

Ser español no consiste en que tunombre figure en un documento, serespañol consiste en llevar a España enel alma y en el corazón, ser español esamar a toda España, alegrarse de lobueno que le ocurra y sufrir sus des-gracias, Carlos amaba ardientementetodo lo español, lo cual no quiere de-cir que no amase también entrañable-mente lo mexicano. No era un corazóndividido, pues todos tenemos padre ymadre y todos los amamos con un mis-mo amor y un único corazón.

En fin, no se trata de narrar aquí lavi da de Carlos Arruza, sí de decir quese casó con una española, como supadre y como su padre tuvo un hijotorero, gran torero, llamado ManuelRuiz Vázquez, Manuel Arruza, nacidoen 1955.

Sí quiero resaltar que en esta her-mosa tierra de Valladolid, quizá por te-ner tantos y tantos grandes hombres,no se dedica a recuperar o a ensalzarcomo se debe a muchos de ellos; últi-

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mamente parece que se ha iniciado uncambio, y por fin se reconoció a ungran pintor universal, ni que decir tie-ne que me estoy refiriendo a Eduardo,así firmaba, igual que Rafael, igual queMiguel Ángel, ¿apellidos? Sancio, Buo-narroti, García Benito, Eduardo GarcíaBenito.

El gran poeta León Felipe siempre seconsideraba de Valladolid, verdad esque nació en un pueblecito de la pro-vincia de Zamora, más el pintor «El Gre-co» nacido en Creta es uno de los pin-tores más españoles que existen, quienmejor comprendió este país, ahí están«El entierro del Conde de Orgaz» y «Elmartirio de San Mauricio», así Arruzafue de familia vallisoletana, siempre enMéxico le consideraron un torero es-pañol, y en España un torero mexica-no, la verdad es que en España, los afi-cionados imparciales y admiradores desu toreo también decían que era un to-rero español. No olvidemos que en elaño 1945, Arruza no estaba en su to-reo por debajo de «Manolete», es más,quizá era más popular, pues ante la se-riedad, muy digna de «Manolete», se im-ponía la arrolladora simpatía, los gestosgenerosos, la sencillez y la humildadde su personalidad, todos los manole-tistas, menos «Manolete», no queríanque hubiese otro torero que le «pisase»a su ídolo, y bueno era para distan-ciarlo decir que era mexicano, país lle-no de rojos, que no querían ver a Fran-co ni en pintura.

La verdad incontestable es que en Es-paña se hizo gran torero, y en Españase le reconoció como pareja insustitui-ble de «Manolete».

Arruza era apolítico, como «Manole-te», solo entendían de toros, bien esverdad que Carlos sentía una admira-ción sin límites por su tío León Felipe,antifranquista. Seguían el consejo queentonces daban todas las madres a sushijos: «Hijo, si quieres vivir tranquilo note metas en política».

Un año emblemático fue el de 1945,donde se entabló una dura competen-cia entre «Manolete» y Arruza.

Los dos grandes toreros por encimade los demás, eran los que acaparabantodos los comentarios, todos los elogiosy algunas mal intencionadas críticas; eneste año Arruza toreó 108 corridas (cor-tando 77 rabos), «Manolete» 71, detrásvenían Pepín Martín Vázquez, Pepe LuisVázquez, Domingo Ortega y Luis Mi-guel Dominguín, hasta 47 es padas más,para darse cuenta de los grandes tore-ros que ejercían ese año; el excelso An-tonio Bienvenida toreó 2 corridas.

Sobre el peso de los toros, los quemás pesaron estaban en los 650 kilos,y los que menos 420, pudiendo decirque la media era de unos 530 kilos; de-bemos decir que en ese tiempo las re-ses se alimentaban de lo que comíanen el campo, no había trigo para lagente, y no había pienso para los to-ros, y menos para engordarlos.

Eran toros ya hechos, de gran movi-lidad, a ningún torero se le ocurría mi-mar al toro, y tenía que responder congran presteza, se movían con la rapi-dez de las lagartijas y no daban tiem-po a componer la figura ni a dar pa-

seitos delante del toro, como si estu-viesen en un desfile de modas, que porcierto algunos toreros ya hacen el pa-seíllo en estos eventos, no quiero nipensar lo que dirían toreros como Bel-monte, Ortega o «Manolete».

Cuando se habla de si los toros gran-des o chicos son más fáciles de torear,a «Manolete» se la achaca de haber to-reado toros chicos; Manuel Mejías Bien-venida dice: «Para mí no hay toro chiconi toro grande. Yo he fracasado con to-ros chicos y triunfado con toros gran-des, y lo mismo se triunfa y se fracasacon uno que con otro, y lo mismo temata uno que otro, lo importante es queembista bien, y que sean como quieran».Por cierto, a muchos grandes toreros losmató un toro chico, como a «Manolete».

Se cuenta que el primer contrato im-portante que tuvo Arruza en España,se selló de la siguiente manera: Pagés,empresario le dijo:

—Vengo a ofrecerle algunos puestosen mis carteles.

—Aceptado. Contestó el torero.—Las corridas serán en Gijón, San

Sebastián, Valladolid, Málaga, Sala-manca.

—Aceptado, voy a anotar dónde to-rearé. En una tarjeta de visita que porallí se encontraba, anotó los nombresde estas ciudades.

—Las fechas ya se las iremos diciendo.—Como a usted le parezca.—¿Qué precio quiere cobrar?—Lo que le parezca justo.—¿Le parece bien 20.000 pesetas por

corrida? Es lo que cobran otros toreros.—Muy bien.—Le mandaré un contrato con lo ha-

blado.—No hace falta, contestó Arruza, su

palabra vale más que una escritura.—Muchas gracias.

Y con un apretón de manos se cerróeste primer contrato.

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José Francisco Coello UgaldeDoctorado en HistoriaDirector del Centro de EstudiosTaurinos de México, A.C.

Nuevas Revisiones de laTauromaquia Mexicanadesde el siglo XXI (XIII)

Fermín Espinosa «Armillita», forjador de Un Gran Imperio

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…, las cuales despertaban luego de lar-ga pesadilla matizada de planes, bata-llas y luchas diversas por el poder.

S in embargo, el toreose mantenía al mar-gen de todos estos

síntomas, como casi siem-pre ha ocurrido. Fermín, aligual que otros toreros, ibareafirmándose como cabe-za principal de su genera-ción, en la cual cada quiénrepresentó una expresióndistinta que siempre sostu-vo el interés de la afición,la misma que gozó épocasconsideradas como rele-vantes en grado máximo.Al romperse las relacionestaurinas entre México y Es-paña, se gestó un movi-miento auténtico de nacio-nalis mo taurómaco, el cualalcan zó estaturas inolvida-bles. Fermín permeó a talgrado aquel espacio que suquehacer vino a ser cosaindispensable en todas lasplazas donde le contratan,garantizando la papeletapues su compromiso fuenunca defraudar.

Que tuvo enemigos, todogran personaje los acumu-la. Se le señalaba frialdadmecánica en sus faenas, unmando de la técnica porencima de la estética, as-pec to que no prodigaba amanos llenas por no ser untorero artista. Pero no sedaban cuenta de que cual-quier gran artista primeroforja su obra en planteamientos quevan rom piendo el recio bloque o dan-do color a un lienzo blanco, enormedificultad a la que se enfrenta hasta el

mejor de los pintores. Y así, cualquiertorero plantea su faena moldeando ymandando al toro. Dominándolo enconsecuencia.

Fermín, ya lo he dicho, tuvo en to-dos sus enemigos animales a los queentendió y «dominó» en su plena di-mensión. Por eso, el trauma de Bailaor

nunca pasó por su mente. Bailaor fueel muro que detuvo la carrera de otrotorero considerado «poderoso»: JoséGómez Ortega «Joselito» aquel 16 de

mayo de 1920 en Talaverade la Reina. Curiosamentellegó a decirse que, paraver a Juan Belmonte –pa-reja de José– había queapurarse, pues cualquierdía lo mataría un toro. Juanse suicidó en 1962 víctimade la soledad. En cambio«Joselito» o «Gallito» quiendemostraba con su toreoser indestructible ante losbureles, fue liquidado poruno de ellos.

Armillita ya no solo pa-recía llenar, llenaba todoslos perfiles de un gran to-rero que España conocióen una proporción menora la de México. Sin embar-go, en nuestro país es don-de alcanza estaturas mayo-res. Sólo cuatro cornadas,una de ellas en San Luis Po-tosí, el 20 de noviembre de1944 desequilibran el con-cepto de invencible quehasta entonces se tenía deél. En 1949, precisamenteel 3 de abril, se retira comolos grandes encerrándosecon 6 punteños, en la pla-za capitalina, dejando testi-monio de su grandeza alejecutar 18 diferentes qui-tes, banderilleando a tresde los seis toros. Sus faenasno brillaron tanto porqueaquella fue una tarde en laque el viento se apoderó

por completo del escenario y pocopudo vérsele. Sin embargo, «hubo do-blones, naturales, pases de la firma, depecho, de pitón a rabo, el de la muer-

…con su capote de lujo la tierra hispana lo consagró.

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Continuará

te, el cambio por delante, los de tirónpara cambiar de terreno, los trinchera-zos rematados rodilla en tierra…», comonos dice «Paco Malgesto» en el libro «Ar-millita. El maestro de maestros. XXVaños de gloria», del año 1949.

Años después tuvo necesidad de re-gresar, demostrando que seguía sien-do tan buen torero como antes, madu-ro, dueño de sí mismo. ConchitaCintrón al escribir «¿Por qué vuelvenlos toreros?» los encuadra dentro deesa búsqueda por las palmas, pero so-bre todo por el placer de sentir que na-die ha ocupado el lugar que dejarondesde su retirada. Fermín pasaba por

un mal momento, pero aun así fue ca-paz de mostrar su poderío.

Con el paso de los años y ya en elretiro definitivo fue llamado a participaren infinidad de festivales siendo unode los últimos el que se celebró el 18de noviembre de 1973 en la plaza detoros México que resultó inolvidablepues alternaron con él figuras comoLuis Castro «El Soldado», Silverio Pérez,Alfonso Ramírez «Calesero», Fermín Ri-vera y Jorge Aguilar «El Ranchero».

Muere el 6 de septiembre de 1978 enla ciudad de México, habiendo nacidoel 3 de mayo de 1911 en Saltillo, Coa-huila.

Sus hijos Manuel, Fermín y Miguelhan perpetuado la dinastía en diferen-tes proporciones y de ellos se esperaque la cuarta generación se aliste en elsiglo XXI. Fermín Espinosa, 1.a genera-ción; Fermín Espinosa Saucedo, 2.a ge-neración; Manuel, Fermín y Miguel, 3.a

generación, todos con el sello de lacasa Armilla constituyen una de las fa-milias taurinas que viene heredando laestafeta en armónico cumplimiento ge-neracional, como ha pasado con otroscasos: los «Litri», los «Bienvenida», los«Girón», los «Rivera de Aguascalientes»,los «Solórzano», los «Caleseros», los «Váz-quez de San Bernardo».

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Ídolo de la afición por el arte y el embrujo.

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Fue ello de julio de 1960 cuando se vis-te por primera vez de luces en un festi-val en la Maestranza de Ronda, juntoa su paisano Gabriel de la Haba «Zu-rito» que también se presenta en pú- blico.

E n los días previos se enfrenta aunas reses bravas en un tenta-dero de Gavira, recibiendo más

de treinta revolcones; en Ronda, ni si-quiera un roce, y el resultado, el másinesperado y alucinante: tres apéndi-ces, paseo en hombros hasta el hotel,y el nacimiento de la leyenda (que con-tinuaba la más clásica cordobesa) de«Los niños cordobeses», que revolucio-nan el devenir taurino de la época porjuventud, buen hacer y repetitivos triun-fos. En 1961, tras sonados éxitos, la pa-reja se presenta con picadores, conti-nuando la racha de victorias hasta queen octubre, el día del Pilar, en Linares,es herido de gravedad (lo que le haceperder varias actuaciones), lo que seconvertirá en una constante en su vidaprofesional. Nueva herida grave en1962 en Vista Alegre, que le interesa elrecto, por lo que le administran la ex-tremaunción. En contra de lo que sepodría esperar, estas heridas graves ycontinuadas, no le amilanan, antes bienle acicatan en la prosecución de unacarrera cimentada en el valor y el or-gullo de sentirse torero.

Llega 1963 y su presentación en Ma-drid, el 15 de septiembre, y un novillo deSánchez de Terrones le abre la cara ydiez días después, en la misma plaza, unnovillo de Galache le destroza el trián-gulo de Scarpa y la femoral. Nueva ex-tremaunción y a sumar numerosas pér-didas de contratos. En mayo, junio,agosto y octubre de 1964 vuelve a Ma-

drid alternando con«Copano», «El Pireo»,«El Formidable», Sil-verio, José Luis Ba-rrero, José Fuentes yVicente Punzón enla lidia de reses deBaltasar Ibán, Val-verde, Víctor y Ma-rín, A. Pérez. El 30de agosto recibe enTarazona de Aragónuna nueva grave he-rida de las astas deuna res de Lamamiéde Clairac, y vueltaal carro de las pér-didas de actuacio-nes, aunque llega a

presentarse cuarenta y cuatro tardes.En 1965 y de las manos de «El Cor-

dobés» con el testimonio de «El Pireo»y reses de Manuel Arranz (4), CarlosNúnez (1) y duque de Pinohermoso (l),recibe la alternativa en la recién inau-gurada plaza cordobesa de Los Califas,el 25 de mayo. Fue la primera alterna-tiva que se concedió allí, la primera que

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Rafael Carvajal RamosIngeniero Técnico NavalBibliófilo TaurinoPresidente del «Rincón de los Artistas Cordobeses»

“El Puri”(Pasión Tor

era)

(II)

Escuelacordobesa

Alternativa de «El Puri» con «El Cordobés» y «El Pireo».Córdoba 25-5-1965.

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otorgaba «El Cordobés», y Agustín reci-bió la primera oreja que se ha conce-dido en ese coso. La siguiente tardeque se viste de luces fue el 18 de julio,para confirmar alternativa, actuandocon Palmeño y Luis Parra «El Jerezano»y ganado de Murteira Grave; vuelvenuevamente a La Corte en varias oca-siones. Pero es el año 1967 el que su-pone un auténtico triunfo en su carre-ra, hasta el punto de que fue repetidoen Las Ventas hasta en cinco ocasiones.Junto a Jumillano protagonizó las co-rridas posteriormente conocidas comodel Cartel Histórico. Madrid ha reco-nocido la categoría torera de «El Puri»en una serie de homenajes que vandesde aquel famoso celebrado en elrestaurante Garby el ya lejano 1961cuando aún lucía de novillero, y en elque loaron al diestro los señores Si-güenza, Lozano, Sevilla, Remacha, Dá-vila, Sicilia… en nombre y representa-ción de estamentos tan diversos comoel ejército, letras, pintura, mundo tau-rino y deportivo, etc., hasta el conce-dido en el aniversario del ya citado Car-tel Histórico o el azulejo que en laplaza de Las Ventas anuncia las cuatropuertas grandes (años 63-66-67-68) delde Córdoba.

El 12 de octubre de 1970 en Monto-ro (Córdoba) se retira como matadorde alternativa, y entra a las órdenes desu paisano Antonio José Galán comobanderillero durante las temporadas 71-72-73 y 74. En sus confesiones, asegu-ra «…Las peores cornadas no me lasdieron los toros, sino los apoderados;unos porque se aprovechaban y otrosporque no eran profesionales…». Y en-tre éstos y las pérdidas que le ocasio-naron unas malas inversiones, le deja-ron en una situación ruinosa; parahacer frente a las obligaciones contraí -das con los bancos, le llevaron a estasituación de renuncia, pues de subal-terno tendría más actuaciones, con loque podía hacer frente mejor a suscompromisos. Una vez saldadas todassus deudas, vuelve a tomar los dora-dos de matador el 29 de mayo de 1975,alternando con Fernando Tortosa y «ElHencho», y la actuación a caballo deFermín Bohórquez, en la lidia de resesde Clemente Tassara y Manuel ÁlvarezGómez.

Agustín Castellanos «El Puri» es comoel ave fénix, que renace cada tarde desu infortunio sin que su espíritu se re-sienta. Heridas, muchas de ellas gravese incluso de extrema gravedad; tropie-zos económicos, problemas con apo-derados, aprovechamiento de gerentesde plazas, y otras adversidades, han lle-nado sus carnes de cicatrices y su es-píritu de un regusto de amargura, perono han conseguido cerrar su puerta porla que chorrea a borbotones la simpa-tía, la honradez y la bondad. Un pe-queño gran hombre que, como capitalindestructible, alardea de su orgullocomo torero.

Sus éxitos por las más importantesplazas, hicieron que su nombre sona-se bastante, y los públicos de Madrid,Bilbao, Córdoba, Aragón... aplaudieronlas actuaciones de este matador que seencaramó a lo más alto como noville-ro y que se curtió en la desgracia antelos toros.

Una cogida de «El Puri».

«El Puri» a la salida del Sanatorio de Toreros saluda al doctor Guinea.

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Higinio Severino de Vega Abogado-Empresario

En la tierra de los califas (II)

Con el dedo en la llaga...

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A mi querida Susana, unagran mujer y extraordinariamadre, con cariño.

D ejamos el anterior artículo so-bre la magnífica Córdoba ha-blando de cómo mi padre se

hizo con la organización de la Feria dePozoblanco, pero no entré en materiasobre la simpática y casi novelística si-tuación que se dio en dicha feria. Algoque sí que haré en esta segunda y úl-tima parte.

Tal fue el revuelo ocasionado por elcartel, que nuestro ingenuo alcalde,Luis García Tirado anunció efusiva yprolongadamente por radio y prensa elgran cartel que os recuerdo estaba for-mado por Puerta, Camino y Mondeño,y los Peralta por delante.

Dicho alcalde llamaba con frecuen-cia a mi padre para que le enviase lapropaganda, cosa que él no hacía, loque causó que el regidor se convier-tiese según trancurrían las semanas enun hombre angustiado y preocupado.

Hasta el punto de que llegó septiem-bre, y no estando los carteles en la calleaún, teniendo en cuenta la cercanía dela corrida, llamó a mi padre y quedaronurgentemente el 15 de septiembre. Enaquella reunión, le indicó que Paco Ca-mino, de forma inusitada y sorprendentehabía aceptado torear en la misma fe-cha en Francia. El alcalde preguntó:

«¿Y entonces, cuál es el cartel definiti-vo?» «Puerta, Limeño, Mondeño y los Pe-ralta por delante», le contestó mi padre.

Dicho esto, el alcalde, ingenuo comoos comentaba se quedó tranquilo, peropara su desgracia, no era el último «sus-to» que le deparaba el destino, unas ve-ces aciago y otras cuando menos som-brío. Como en esta que nos ocupa.

El día 20, es decir, tan solo cuatrodías antes del festejo, el alcalde se que-dó «helado» cuando al aparecer mi pa-dre con la propaganda, pudo compro-bar como de los carteles habíandesaparecido como por arte de bilibir-loque Puerta, Mondeño y los Peralta.

Aunque montó en lógica cólera, quepoco después quedó reemplazada poramarga desazón y profunda preocupa-ción, dada la inminencia del festejo, nole quedó otra que tragar con el cartelque se le presentó.

Cartel que fue el siguiente: Para eldía 24, cinco novillos de Higinio LuisSeverino, el primero para la extraordi-naria y casi pionera rejoneadora por-tuguesa Gina María, y los cuatro res-tantes para el diestro local RafaelMontero «Rafaelete» y el jovencísimoManuel Benítez «El Cordobés».Día 25, seis toros de Escudero Calvo

Hermano (Albaserrada) para César Gi-rón, Victoriano de La Serna y José Mar-tínez Limeño. Día 26, espectáculo tau-rino musical «Toros y Castañuelas». Ydía 27, siete novillos de la ganaderíade Luis S. Cañizal, de Salamanca (Tam-bién mi padre, que usaba su segundonombre y segundo apellido por si aca-so le salían mal los toros de la prime-ra corrida, para que la gente no se leechase encima al ver que era el mismoganadero. Una prueba más de la pica-resca y del ingenio que tenía mi padre,aunque algo me dice que el alcalde nopensaría igual que yo…) para el rejo-neador Álvaro Domeq (hijo), y los ma-tadores Rafael Montero «Rafaelete» (to-rero por cierto según me cuentan, congran clase, pero limitado físicamentepor tener amputados tres dedos del piederecho. Hoy tan meritorio torero esun importante industrial creador y pro-pietario de la gran empresa de dulcesProductos Montero), Baldomero Mar-tín «Terremoto de Málaga» y Manuel Be-nítez «El Cordobés».

A pesar de todos los contratiempos«surgidos» y del total y absoluto cam-bio en los carteles iniciales, la Comi-sión de Fiestas reconoció abiertamen-te que era una programación tanatractiva como extraordinaria, pues in-cluía dos tardes al «Cordobés», que poraquellas fechas ya estaba consideradocomo un gran fenómeno y un toreroabsolutamente revolucionario, así comoa «Rafaelete», ídolo del Valle de los Pe-

droches, y que contaba con el devotoapoyo de las buenas gentes de Pozo-blanco y alrededores, algo que sueleocurrir en toda España con los toreroslocales, muy queridos y apoyados porsus vecinos. Y por último, gustó la in-clusión de Terremoto de Málaga, figu-ra de los novilleros, y que ese año to-reó más de 100 novilladas, así como lapresentación del gran rejoneador jere-zano, Álvaro Domeq (hijo).

La publicación local El Cronista delValle salió a la luz el día 22 de sep-tiembre, y en ella, la comisión de fies-tas puso un recuadro destacado, titula-do «Las Corridas de Feria, extraordinarioprograma taurino para los días 24, 25,26 y 27 de septiembre», y después deenumerar los carteles con todo lujo dedetalles, dio a conocer a la afición lasiguiente nota oficial: a última hora deldía 20 quedaron ultimados los cartelespara los espectáculos taurinos que hande celebrarse durante nuestra feria yque por su importancia han entusias-mado a toda la afición vallesana, comoobservarán nuestros lectores, a pesar detodos los contratiempos que fueron sur-giendo a última hora, vencidos con ungran tesón por parte del empresario Hi-ginio Luis Severino Cañizal y del al-calde Don Luis García Tirado. Por pri-mera vez en la historia de nuestra feriase presenta un programa taurino tanatrayente como numeroso y es de espe-rar que todos los pueblos de la comar-ca han de aprovecharse para presen-ciarlo. De Córdoba se espera igualmentegran afluencia de público. Firmado: LaComisión de Fiestas de Pozoblanco.

Fue tal la expectación que se produ-jo por la programación que en un solodía se vendieron 3.500 abonos, y el día27 sucedió algo inesperado, que dio lu-gar a una situación tensa, pero con cier-tos tintes cómicos. Esto fue lo siguiente:A Pozoblanco habían llegado aficiona-dos de toda Andalucía y a las 11 de lamañana ya quedó vendido todo el afo-ro. Pero ante la multitud congregadacon el fervoroso deseo de presenciarel festejo, mi padre convenció al alcal-

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de para sacar a la venta 1.000 entradasmás, que se agotaron de inmediato. Milentradas sin numerar, porque las nu-meradas ya estaban todas vendidas.Posteriormente se vendieron otras1.000, y a la plaza no pudo entrar ni laBanda de Música.

Las protestas del público fueron atro-nadoras, dada la «estrechez» a la queestaban sometidos, pero finalmente lacorrida se dio y los ánimos se calmaronante el rotundo éxito de los artistas.

Al día siguiente, mi padre dio un do-nativo de 50.000 pesetas para obras be-néficas de la localidad, pues a pesar dela jugada que le hizo al alcalde, quecomo comenté en el anterior artículonunca tuvo intención alguna de llevara cabo el cartel gracias al que logró ha-cerse con la feria frente a los pliegosde otros empresarios, mi padre siem-pre fue y es hombre de buen corazón.

Y esto, queridos lectores fue lo quesucedió en Pozoblanco, en la históri-

ca feria de 1960. Feria que se viviócon pasión, con interés, con sangreespañola, sangre y espíritu que 800años de invasión musulmana no pu-dieron borrar, ni doblegar por com-pleto.

Ni siquiera en la extraordinaria Cór-doba, que fue el corazón de su ImperioOccidental.

«Se viste de sangre y oro, nuestra es-pañola bandera. No hay oro para com-prarla, ni sangre para vencerla.»

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Juan Carlos Navas GómezPresidente Plaza de Toros de ÁvilaVocal de la Comisión Regional Taurina de Castilla y LeónEscalera del Éxito 122

Toro de lidiaJosé Luis Pereda - La Dehesilla

C omienza la historia de este hie-rro ganadero del empresarioonubense al dividirse la gana-

dería de Juan Bautista Conradi en 1952,uno de cuyos lotes le correspondió aAmparo Conrado, que al año siguientelo vende a Saturnino Pérez Alonso, quecompra un lote de vacas a Juan PedroDomecq y Díez y otro al marquesde Villamarta, eliminando lo ante-rior de Conrado. Posteriormente,en 1958, adquiere hembras y se-mentales de Escudero Calvo, Clai-rac, Juan Pedro Domecq, ÁlvaroDomecq y Lisardo Sánchez. En1959 es vendida la ganadería porsu viuda a Manuel Ucha de Jerez,y este en 1965 la vende a RafaelBeca Gutiérrez, del cual pasa en1979 a José Luis Martín Berrocal yque en 1980 le vende a José LuisPereda 100 vacas y dos sementa-les puro origen Núñez.

Antes, en 1975, José Luis Pere-da había comprado un lote de 30vacas y un semental para estre-narse como ganadero, lo que ter-minaría eliminando al comprar lode Berrocal.

Carlos Núñez, que era amigo deAntonio Ordóñez, hablaba de to-ros con José Luis Pereda, y un díaCarlos Núñez les comentó que supadre el gran Carlos Núñez, el quecompró lo de Rincón, comprabauna ganadería, le echaba semen-tales de los suyos y lo vendía. Asípasaría con la ganadería que lecompró a Curro Chica y le echósementales de Núñez y con el hie-rro de la D coronado terminaríallegando a manos de José Luis Pe-reda, cuando estos toros eran lospreferidos de la figura de la épo-ca como fue Manuel Benítez «ElCordobés». Así terminaría cayendo enmanos del ganadero onubense una par-te importante de lo que más le gusta-ba al «Cordobés».

El onubense también compraría unlote de 25 hembras a Juan Pedro Do-mecq pero según me cuenta el gana-dero, de las mismas nada más llegar semurieron la mitad y de las otras docequedarían solo dos o tres, por lo que suencaste a pesar de lo que digan es úni-camente Núñez.

Sus cinco mil Has en once fincas tie-nen como santo y seña la finca de laDehesilla, donde el ganadero tiene elcuartel general.

En la actualidad los hierros de la casason el de José Luis Pereda y el de la De-hesilla, este último en la Unión, y amboscon unas 400 vacas de vientre cada unadel mismo encaste y 36 sementales delos que destacaría a Violento n.° 100 in-dultado por Joselito y que da unos to-ros extraordinarios, aun así el ganadero

lo paró un año pues dos productossuyos lidiados en Sevilla y Huelvano le habían gustado al exigenteganadero; también Culito, núm. 39indultado en Huelva por Finito yque lo da muy bueno, así comootros sementales muy importantesen la actualidad como Facultades,Zapatito, Contrahecho, Desafío oSaladero entre otros.

Aunque la realidad es que si lasganaderías en sus comienzos lassuelen hacer sementales determi-nados, tendríamos que decir queen esta los más emblemáticos fue-ron Ratoncillo de procedencia Vi-llamarta y Enamoroso de proce-dencia Rincón.

Pereda ha logrado de un encas-te, aunque no hipermétrico, hacerun tipo de toro bajo, hondo y se-rio, que la cabecera valga para pla-zas de primera.

Él, exige que el toro tenga mo-vilidad y raza. Como él me dijo,cuando el toro se para la fiesta separa, y en esa difícil alquimia halogrado un toro que aunque esfrío de salida como buen Núñez,en la muleta ya en los tentaderosexige a sus vacas que tengan du-ración y ese tranco más que ca-racteriza a lo Núñez y que será loque va a tratar de transmitir a lavez de su bravura: que el animaltenga clase y nobleza.

Este hombre hecho en la dure-za de la vida y su hijo son los actualespropietarios de una de las ganaderíasprocedencia Núñez de las que mere-cen la pena en el campo de bravo.

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Reflexiones sobre el futuro de los EE. TT. (II)

Ignacio Ramón García GómezVeterinario de EE.TT. Comunidad de Madrid

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…concepto erróneo de lo que es un ani-mal y más concretamente el toro bravo.

Amar a los animales, es sin duda uncomportamiento, muy de nuestros días,y el mundo urbanita que hoy en díapredomina, admira y toma como refe-rencia el amor, a veces desmedido ycasi siempre mal valorado, a los ani-males. Nuestro entorno diario ve cómo,según avanza nuestro poder económi-co y adquisitivo, nos rodeamos de másnúmero de mascotas y animales exóti-cos, y se revela no solo como unamoda sino como una necesidad denuestro subconsciente, el mantener ala naturaleza cerca de nosotros y ha-cerla tan nuestra como si de un ser hu-mano más se tratara.

Quizás como un fiel reflejo del en-torno al que pertenecemos.

Pero en cambio, observamos un in-correcto comportamiento, aquel quemantiene y desarrolla, un nivel de asi-milación entre el mundo animal y nues-tra humanidad más cercana. Cada vezmás humanizamos los comportamien-tos animales, dotándolos de adjetivosy caracteres solo atribuibles a la espe-cie humana. Los animales lloran, estántristes, sienten este agravio, son cons-cientes de este daño, sufren… son fra-ses que sin duda oímos en nuestro en-torno cuando se habla de los animalesy más aún cuando se relacionan connuestra actividad taurina. Pero, todosellos, olvidan algo esencial, son ani-males con todo lo que ello implica.

Amar a los animales no es dotarlosde sentimientos y, mucho menos, hu-manizarlos con respuestas a situacio-nes reales, como si de personas se tra-tara. Amarlos es saber y conocer suscomportamientos, querer, respetar ymantener su entorno, y lo más impor-tante saber que son animales y tratar-les, manejarles, criarles y aprovechar-les con el respeto y la dedicación quesu ser les merece. La muerte es sobretodo el final de la vida y como tal hade ser un fiel reflejo de la existencia, yen especial atención cuando es unavida formada en la propia naturaleza,siendo esta integración la que hace me-recedora de la muerte que tiene y quede forma asimilada han experimenta-do en todo su medio.

La defensa de nuestra fiesta la basa-mos muchas veces en el lema de quesin ella, el toro bravo desaparecería. Yes totalmente acertada si bien, en mimodesta opinión debemos de apoyar-la en fundamentos más aclaratorios dela verdadera riqueza que supone laproducción del toro de lidia.

La producción del toro de lidia pre-senta algunas características dignas demención.

La primera de ellas la reserva de va-riabilidad genética; en el código gené-tico de nuestros toros se encuentra elorigen de la base donde se expresa lavariabilidad de la especie bovina, el uroafricano y especialmente el uro euro-peo, como tronco común de desarrollo

de nuestra vacas actuales, se encuentraen el germen del toro bravo. Duranteel pasado siglo XX se desarrollaron nu-merosos intentos de recuperar esta razaprimordial, para de esta manera salva-guardar el origen de los bóvidos ac-tuales y ser la reserva ante posibles des-apariciones indeseadas, ¡quién le iba adecir a estos investigadores centroeu-ropeos que es el toro bravo el reser-vorio de esta variabilidad!

En segundo lugar la dehesa; comoecosistema propio de nuestro entornobasa su existencia en la cría extensivadel toro bravo y con ella una riqueza deflora y fauna, que debe su existencia ala propia existencia de la ganadería bra-va. El buitre leonado, la cigüeña negrao el idolatrado lince, encuentran en ladehesa el espacio idóneo para su críay supervivencia, y de forma recurren-te la dehesa debe su persistencia, cui-dado y explotación a la producción dela cabaña bovina brava.

Y para terminar la producción deltoro de lidia, se produce en áreas decoincidencia con zonas desfavorecidasde progreso y son en numerosas oca-siones pilar fundamental del desarro-llo económico de estos espacios geo-gráficos.

Estos tres conceptos, variabilidad ge-nética, conservación del medio am-biente y desarrollo de zonas desfavo-recidas son características propias dela producción del toro de lidia y soncuriosamente los tres pilares en los que

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se sustenta la política agraria comúneuropea (comúnmente conocida comoPAC). Pero, coincidencias de la vida, asu vez, son los tres argumentos más re-petidos, y más deseados y solicitadospor los lobbies ecologistas a la hora decriticar el desarrollo ganadero europeo.Quizás estos ecologistas no sepan quecon sus argumentos están defendiendoal toro de lidia, pero lo que nosotros sídebemos conocer es la riqueza denuestra prueba más importante paradefender nuestra fiesta, el toro bravo.

El toro bravo, ha estado, está y esta-rá en continua evolución. Desde los orí-genes de la cabaña brava, hasta nues-tros días, la actuación de nuestrosganaderos está en la búsqueda del torode sus sueños, y esta búsqueda es elmotor de la evolución del toro. La va-riabilidad de los encastes actuales, ra-mificados de los encastes fundaciona-les, exponen una riqueza de valoresdifíciles de encontrar en otras especies.Pero este tesoro tiene unos peligrosque ensombrecen el futuro de nuestracabaña, y no me refiero solo a la pro-pia existencia antes mencionada deri-vada de la persistencia o no de la fies-ta de los toros, sino más bien al caminoen que se desarrolle esta fiesta. Los en-castes comerciales, deseados en nu-merosas ocasiones por el triángulo depoder formado por Empresario-Gana-dero-Apoderado están arrinconando yponiendo en serio peligro la existenciade la diversidad de comportamientosde nuestro elenco de encastes. Pueden,y de seguir así los montajes de los fes-tejos taurinos, van a desaparecer estir-pes y líneas de toro bravo.

La toreabilidad, concepto eminente-mente comercial, se está imponiendoen un toro moderno, que huye de brus-quedades, de peligros innecesarios y defuerza en su movilidad. Por lo mismo,el tercio de varas pierde protagonismoy pasa de la D a la V, se ha cambiadola palabra Dale por la orden de Vale.

Se pierde lucha contra inteligencia, segana técnica contra arte, se ganan cén-timos y se pierden los euros, y con ellouna conclusión irrebatible, se pierdenespectadores y con ello perdemos to-dos, y el futuro se hace negro zaíno.

Pero, ¿porqué este desarrollo del toroactual, de relativo fácil manejo, débil yde buena toreabilidad? Esta es la se-gunda de las preguntas, en las que ensu respuesta nace una nueva reflexiónsobre el futuro de los EE.TT.

Para responder a esta pregunta, de-bemos de despojarnos de la búsquedade una solución única, que a modo depastilla milagrosa solucione la patolo-gía que nos aflige. Y así, para empezara encontrar el camino hacia un futuromás esperanzador, debemos conocer lasituación actual en muy dispares as-pectos, pero con un tronco básico y co-mún denominador de muchos de ellos.La fiesta de los toros es un NEGOCIO.

La producción del toro de lidia havisto incrementado año a año el nú-mero de cabezas herradas, en una pro-gresión que ha sido inversamente pro-porcional al terreno destinado para su

crianza. Más animales en menor espa-cio generan una densidad que perjudi-ca el aprovechamiento de los recursosnaturales, obligando a la introducciónde alimentación externa que la mayo-ría de las veces supone un gasto adi-cional difícilmente soportable por elganadero. Por este motivo, el aporteadicional se centra en etapas finales dela producción, en la consecución demorfologías acordes con el destino delos animales, resultando animales obe-sos con delimitada adaptación a la car-ga extra de peso en la génesis de sucomportamiento que crea animales en-debles en el ruedo, de reducido reco-rrido y debilidad en el enfrentamiento.

Pero en este campo, el futuro es es-peranzador, la introducción de nuevasgeneraciones de ganaderos, con unaformación académica de base, muchosde ellos con Ingenierías y licenciaturasuniversitarias están aportando planifi-caciones más adecuadas a estas situa-ciones generando desarrollos producti-vos homogéneos en el tiempo llegandoincluso a incorporar conceptos aplica-bles a la medicina deportiva.

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Los toros de Castellano. Unión de Bibliófilos Taurinos, 1990.

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Joaquín Rodríguez Sánchez«Cagancho» (Hijo)

Cuando el genial Joaquín Rodríguez«Cagancho» vivía su otoño torero, irrum-pe en los ruedos su hijo, quien pasósilenciosamente por el toreo sin causarimpresión y sin fuerza comunicativa.No transmitía, dicho según la moder-na usanza de los críticos taurinos. Lefaltó impulsos de «valor y de arte» parainteresar a los aficionados y hacerlesvibrar como buen calé, a semejanza delo mucho que hizo su progenitor. Tam-poco gozó de las influencias de sucuna, que fue Sevilla. Nace el 5 de ju-nio de 1927 y estoquea su primer be-cerro en 1943, en una fiesta escolar. Esemismo año viste por primera vez de lu-ces, el 8 de septiembre, en la Plaza deRonda, «La de los toreros machos», al-ternando con Cayetano Ordóñez Arau-jo «Niño de la Palma» (hijo) y PepínMartín Vázquez.

En Madrid, se presenta el 15 de agos-to de 1946, estoqueando astados dedon Manuel y don Ildefonso Marañón,con Luciano Cobaleda y el mexicanoJosé Antonio Mora «Chato Mora», quiendebutaba también. Al no contar con elarte y la personalidad que atesoraba elpatrimonio paterno, le faltó decisiónpara alcanzar alturas taurómacas e in-teresar a los públicos. Se quedó en cafécon leche. En busca de nuevos hori-zontes, en 1955, decide marchar a Mé-xico. En aquellas latitudes tampoco lo-gró sobresalir entre el coro de solistas,y de regreso, en España, toma la alter-nativa, el 24 de julio de 1960, en la Pla-za de San Feliu de Guixols (Gerona),de manos de Antonio Ordóñez anteManuel Jiménez «Chicuelo» (hijo) y to-ros de la ganadería de don AbdónAlonso. La sequedad de atractivos to-reros obliga a decir, a modo de ciertahumorada corregida de Campoamor:

«Ya sé, ya sé que con formal empeño,soñastes con triunfar, pero fue todo unsueño».

De nuevo vuelve a tierras aztecas;donde torea algunas corridas por losEstados. Después de actuar el 2 de sep-tiembre de 1965, en Nogales, junto conChano Ramos, para lidiar toros de lavacada de San Carlos, no hay noticiade que torease más. En México, su úl-tima esperanza, fija su residencia.

Francisco Vega de los Reyes (Curro Puya)«Gitanillo de Triana»

El toreo, como la copla cuando eshonda, tiene raíces. El toreo por veró-nicas de Curro Puya arraigó en el fa-vor entusiasmado de los públicos, por-que tuvo hondura. Francisco Vega delos Reyes, hijo de un herrero, en su de-

cir torero, al igual que el martinete quese escapa de la fragua, era exclusivo ypersonal, bello y emotivo.

Sus gentes de Triana, el barrio sevi-llano que le vio nacer, el 23 de di-ciembre de 1903, le llamaban «CurroPuya», nombre con que llegó al ámbi-to taurino, aunque en los carteles figu-rara siempre «Gitanillo de Triana». Nohabía cumplido los 16 años, cuandodio sus primeros capotazos a un novi-llo desmandado en las afueras de Tria-na, acompañado de su amigo JoaquínRodríguez «Cagancho». Atendía su tra-bajo en la fragua paterna, cuando se lepresenta la ocasión de asistir al tenta-dero de la ganadería de don NarcisoDarnaude, en la finca Bárcena. Repitesuerte en las vacadas de Moreno San-tamaría y de don Antonio Flores, antela presencia del matador de toros JuanBelmonte, el rejoneador Antonio Ca-ñero y el escritor taurino Fernando Gi-llis «Claridades». El vaticinio de tan com-petente tribunal examinador fuepositivo.

El manejo maravilloso del capotilloque dibujaba instintivamente perfilesde bella plasticidad, le allanó el cami-no del toreo. Viste de luces por prime-ra vez, el 18 de mayo de 1924, en laIsla de San Fernando, en novillada sinpicar, alternando con Manuel Fernán-dez Cádiz, para dar réplica a reses deFélix Gómez, de El Bosque. Con su es-treno llega su bautizo de sangre al re-sultar cogido y herido en una pierna.Repite en el mismo ruedo, el 15 de ju-nio, e inicia una buena campaña porplazas andaluzas. La fragua había que-dado olvidada, el sueño sacudido, so-naba y resonaba el bronce de la admi-rable raza, repiqueteando en los vuelosdel capote, cogido por las manos mo-renas del gitanillo de Triana. Capoteque era como una rosa, nacida en unbúcaro de barro cocido.

José Julio García SánchezEscritor - Periodista

Escalera del Éxito 103

La ToreríaGitana

La ToreríaGitana

«Yo no soy un torero de clase, soy una clase de torero»

Francisco Vega de los Reyes (Curro Puya)«Gitanillo de Triana».

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En su presentación ante la afición hispalense, en la tem-porada de 1925, el capote de «Curro Puya» parece la rosaagitada por el viento de la gracia, como algo que tiembla deplacer, como algo que dibuja en el aire burbujas irisadas,como algo impulsado por el misterio de inspiración divina.¡Gitanería torera! En el maestrante albero sevillano, Francis-co Vega de los Reyes «Gitanillo de Triana» lidia novillos deMolina, procedentes de Urcola, acompañado de Andrés Mé-rida y de Joaquín Rodríguez «Cagancho». El rocío de su to-reo tiene en el replicar mañanero del éxito, su mejor recla-mo, y repite tres tardes más en el ruedo de la Maestranza.

En Madrid, se presenta el 30 de julio de 1926, y deja verla armoniosa urdidumbre de su calidad torera. El cartel locompleta «Lagartijo» y Julio Mendoza con novillos de Co-quilla y del duque de Tovar.

La alternativa, aspiración de todo aquel que se dedica altoreo, la recibe el 28 de agosto de 1927, en la Plaza del Puer-to de Santa María. «Quien no ha visto toros en el Puerto, nosabe lo que es un día de toros», dijo en cierta ocasión Jose-lito, según reza un mosaico en la misma plaza. El cartel deaquel día, estaba compuesto por Rafael «El Gallo» y JuanBelmonte, con toros de Concha y Sierra. ¿Se puede pedirmás? El toro de la alternativa, de nombre Vigilante, era decapa berrendo en negro.

Los aficionados, que saben que no pueden faltar jamáslas torerías gitanas, que siempre hace falta un torero gitanoen el escalafón de la torería andante, por el atractivo que

tienen, por cuanto ejecutan en los ruedos los gitanos inspi-rados, reciben con expectación al nuevo matador de toros.

El mismo cartel de toreros del día de la alternativa, se ofre-ce en la Plaza de Madrid para el refrendo de su doctorado,el 6 de octubre de 1927. En esta ocasión, los toros proce díande la divisa colmenareña de don Julián Fernández, antes dedon Vicente Martínez. Gitano de hermosa estampa, con eltemperamento estético a flor de piel, nunca descomponíala figura y logró consolidar su toreo de arte puro, lento y ar-monioso. Ya sabemos que cuando un gitano dice, allá vaun poquito de esencia, todo el mundo boca abajo. Esa fuela razón de que los públicos se le entregaran a «Curro Puya»,pues plasmó la verónica de la que era un artífice, con ma-nos bajas y lance largo, con el espíritu melancólico e indo-lente de su raza. Con un fondo de musicalidad en tiempode Habanera. Compases adormilados, soñados, desmaya-dos. Todo, hecho con el marchamo de su personalidad ar-tística. Paseó la innata elegancia de su raza por los ruedosde todas las latitudes.

La musa de Gerardo Diego vio así la verónica de «CurroPuya»:

«Lenta, olerosa, redondala flor de la maravillase abre cada vez más honda y se encierra en su semilla.

Como huele abril y mayo, ese barrido desmayo, esa plaza de desgana,ese gozo, esa tristeza,esa rítmica belleza, campana del sur, campana».

Continuará

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Mi pregón en la Feriade Córdoba 2008José Serrano Carvajal

Prof. Dr. Facultad de Derecho

Escalera del Éxito 111(VIII)

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Y los poetas de Córdoba se estremecen«Por la gloria de Cañero / que le re-nueva el linaje / laureles de oro de oca-sos / deshoja Góngora padre.

Manuel Rodríguez «Manolete» entre la historiay la leyenda

Mis primeros años taurinos estuvie-ron presididos por la visión de una fi-gura del toreo. El diestro cordobés Ma-nuel Rodríguez «Ma nolete». Acaso unode los toreros que más han calado enla socie dad española, ayudando a se-ñalar los contornos del tiempo que letocó vi vir. Indudablemente porqueaquella época y su pueblo, necesitabandel héroe como elemento definidor desu propia esencia, de su verdadera na-turaleza. En una reacción comprensi-ble frente a peligros foráneos.

Aquí está el fundamento del misteriode este torero. Miembro de una lar gadinastía, unido por lazos de sangre yde parentescos colaterales con lo másflorido de la tauromaquia cordobesa.Nacido el 4 de julio de 1917 en la cunade aquel Rafael Pérez de Guzmán, hijode los condes de Villamanrique que si-multaneó su puesto en la caballería consu afición de torero.

Terminando por igualarse en el fir-mamento taurino con la gloria de lostres Rafaeles («Lagartijo», «Guerrita» y «Ma-

chaquito»). Dándole más esplendor a suciudad que el que le dieron antaño losOmeyas. Recreando unos nuevos Cali-fas la magnificencia de su mejor época.

Para los niños de mi entorno, fue«Ma nolete» el héroe legendario que ne-cesitábamos en unos momentos histó-ricos en los que se mezclaban leyen-das gloriosas con los atisbos imprecisosde futuras dificultades, que podríamospalpar, especialmente en sus últimosaños de vida.

Por todo ello, siempre he sentido de-voción por la figura señera que ana li-zamos, motivo por el que me he intro-ducido en la larga biografía que loacompaña.

Estos estudios, unos realizados apa-sionadamente en los momentos cum-bres de sus triunfos o en el de la glorio-sa tragedia de Linares, otros reflexi vos,agudos, considerándolo en su conjun-to, deteniéndose en el significado desu forma de interpretar la lidia, hastasu culminación como actor desta cadodel drama de la historia.

Todos nos han hecho revivir los re-cuerdos de la niñez, idealizándolo enalgunos momentos. Sólo lo vi en con-tadas ocasiones, en Málaga, en Grana -da, en Córdoba, porque se pudo per-mitir el lujo de no ser torero de miciu dad natal, sólo toreó ocho tardes.

Aunque nos hemos recreado con lasimpresiones de los que han actuado enprofundidad sobre su significado.

La conclusión a la que se llega: lamagnitud del papel que le tocó inter -pretar en el mundo de los toros. Co-rrochano es a nuestro juicio el que des-de la pura interpretación de su toreo,nos dejó escrita la filosofía del mismo.

Era el maestro Corrochano un histo-riador de la fiesta, un crítico de talen-to literario nada proclive al halago, unescritor en suma del que hemos cogi-do el sentido de «Ma nolete», herederode Belmonte, aquel que al retirarse delos toros dejó vacío el sitio que ocupó,pese a que muchos toros se lo dispu-ta ron a cornadas. En el que no pudoentrar Espartero al que echó un torode Miura, ni la sabiduría de «Gallito»que en la única incursión que realizó aes tos terrenos sucumbió a la tentación.«Ma nolete» convirtió este paseo en unejercicio diario.

Termina Gregorio Corrochano coninterpretaciones posteriores, que se hanhecho con cierta ligereza. Al partir deun método muy utilizado por los in-vestigadores del Derecho comparado.Usando la bella lección de tauroma quiaque nos legó Santos López Pelegrín«Abenamar» en «la Tauroma quia de Pa-quiro».

Definía el maestro: «Se iba a los torosen rectitud, con la muleta en la mano iz-quierda». Subrayamos en rectitud para laruta que aconseja Montes y para dife-renciarla de los que quiebran la rectapara ir al pitón contrario. Si el ir al pi-

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tón contrario es una necesidad, un re-curso para que embista un toro tar do,a «Ma nolete» no le hacía falta este re-curso, «Ma nolete» lo resolvía tomandodecidido el terreno del toro, adentrán-dose hasta donde hiciera falta, como elque asalta una fortaleza, y allí dentropeleaba y los toros le embestían en rec-titud, como quería Montes, el de la másbella y escolástica Tauromaquia. Aca sole separaba de Montes el no respetar eldeslinde de los terrenos del toro y deltorero; por eso lo cogieron tanto, comoal «Espartero», como a Belmonte, por-que son terrenos vedados, en los quehay que entrar a lo furtivo. Despuésobedecía ciegamente a Montes.

Con estas palabras podemos desem-bocar en una extraña definición de unaortodoxia diferente a la clásica, peroque se ha correspondido con la revo-lu ción de los terrenos. Pero sabiendo,admitiendo y ejerciendo que en el nue-vo toreo, la verónica es la reina del ca-pote y el natural el rey de la muleta.

Entrando en los terrenos del toro,pero sin bufonadas ofensivas para elarte de torear. Manteniendo el templey la gallardía, en una nueva forma deeje cutar las suertes.

Especialmente la suprema, la de lahora de la verdad, la que define laprofesión de matador de toros, la quepuede llevar con posibilidad al ho lo-causto, la verdaderamente trascen-dental. En la que él fue el verdaderomaestro.

Pepe Luis Vázquez, el que más toreócon él y por tanto el que más lo co no-ció como torero, mantiene que en és-tos tuvo «Ma nolete» sus más incondi -cionales partidarios, y en cuanto a laforma de matar realza la lentitud. Ra-fael Duyos, uno de sus grandes pane-giristas cantó en el verso:

«Entrar a matar sin trampa con clási-cos fervores y en astas de un miureñolo dio todo ¡la vida!»

José Luis Suárez Guanes, conde delValle de Pendueles: «Una entrega que lollevaría a la muerte cuando ejecutabaen Linares la suerte suprema del to reoque él magnificó».

Estas citas sirven de base a la teoríaque dibuja a «Ma nolete» en la triple ver-tiente de ídolo de las masas, héroe li-terario y ejemplo para los toreros. Decada una de estas circunstancias exis-ten suficientes ejemplos como para quese tenga que aceptar.

El fundamento de la primera, está enel significado de muchas de sus ac tua-ciones taurinas, conquistando plazasque podrían parecer que le estaban ve-dadas. La faena al séptimo de Villa-marta el 20 de abril de 1941 con Pe-pote Bienvenida, Juanito Belmonte yPepe Luis Vázquez. El sobrero de Cu-rro Chica que le da una de las corna-das más graves de la temporada; el torode A. P. en la Monumental de Barcelo-na el 21 de marzo, el de Alicante en1943, las temporadas americanas, es-pecialmente en México, la faena al toroRatón de Pinto Barreiro el 6 de julio de1944, dos orejas a costa de una co gida,antes los dos toros de Pamplona el día10 de julio.

Estas actuaciones, especialmente lasde 1946 en México, las de 1944 y 1945en España, lo elevaron a la categoríade torero universal, al que todos lospú blicos rindieron sus favores. En unaplaza de temporada como la de Méxi -co, toreó cuatro tardes en una semanay la quinta fue suspendida por las au-toridades. Cinco toros en Lima en quin-ce días, siendo el primero que le diouna nueva dimensión a la fiesta.

En relación con el «Ma nolete» héroeliterario, ya nos hemos dedicado a es-tudiar el significado de la enorme apor-tación de los intelectuales a re saltar aesta figura del toreo. La cumbre a mijuicio llega a su vida, en la cena deLhardy el 11 de diciembre de 1944. Lomejor de la literatura es pañola del mo-mento rodean al Arcángel que es comolo define José Vi cente Puente, que res-ponde al reto de los hombres del pen-samiento con la postura más torera queconocen los siglos, va a la cena comovisten de ca lle los toreros.

Lo esperan Agustín de Foxá para ha-blar de sus verónicas, Alfredo Mar que-ríe del torero junto al toro, José MaríaAlfaro del estoque y la muleta, Adrianodel Valle de su cuna, Víctor de la Serna,Edgar Neville, Joaquín Cal vo Sotelo, Ca-milo José Cela, todos los que significa-ron algo en aquel Madrid abriendo uncamino que se ensanchó con otros es-critores posteriores como Rafael Gar-cía Serrano o Fernando Vizcaíno Casas.

Especialmente se desbordó esta ad-hesión tras la culminación del dramade Linares. Durante muchos años ypese a los cambios que fue sufriendola tauromaquia y hasta los gustos de

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«Manolete», rematando un pase natural a un torode Miura en Barcelona. Copia, existente en el MuseoTaurino de Córdoba, está coloreada a mano.

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los aficionados, «Ma nolete» pasó a la in-mortalidad, a aquel lugar que quedareservado para los toreros que han al-canzado la gloria.

Como excepción a este homenaje delos intelectuales hispanos, un hechoque nosotros hemos tratado en exten-sión, las afirmaciones del premio Nóbelde literatura Ernest Herningway sobrela figura de «Ma nolete». Levantándoseuna dura polémica, que no es el mo-mento de reproducir, aunque sí reafir -mar, los perfiles de la contestación aira-da de Gregario Corrochano en «Cuan dosuena el clarín», la mesura y objetivi-dad no exenta de firmeza, de RafaelGarcía Serrano y Andrés Amorós.

Salvado el papel de Antonio Ordó-ñez, el maestro ineludible que admiróal Arcángel. Nos queda analizar el des-liz, la indiscreción creemos que invo -luntaria, acaso por falta de sensibilidadpara comprender el significado que«Ma nolete» tenía para muchos españo-les, mucho antes de haber entrado enla leyenda. Actuación comprensible deaquel experto en generalidades que notuvo ocasión para profundizar en eltema, pero que como hemos dicho envarias ocasiones, pese a su generalidady al respeto que le tuvieron los es paño-les, recibió una respuesta de los tresautores citados y de otros más. La deCorrochano dura y si se quiere agria,la de García Serrano cariñosa pero se-ria, en el seno de una mutua corrientede comprensión, lo que no es obs tácu-lo para decirle que no se podía opinaratrevidamente contra un mito y hacer-lo imprudente e injustamente.

Andrés Amorós desde la mesura re-cuerda que no se puede actuar con du-reza si no se realiza un análisis com-pleto de los hechos.

Córdoba encontró a su héroe, el quenació en sus entrañas. La España quesufre unos años de prueba, cerrada porla incomprensión de fuera, renace enuna mística extraña que siempre ha ca-

racterizado a nuestro pueblo en los mo-mentos difíciles y de ello, como diceFernando Vizcaíno Casas, manan unosdeseos de vivir, arrimando el hombro,estrechando los cinturones «con insen-sato optimismo, con injustificada fe»,una parte importante de aquel op timis-mo de aquella fe, surgía de la visión deun héroe que era especialmen te un to-rero singular.

Su muerte en las astas de un toro deMiura de nombre Islero, al entrar a ma-tar como él lo hacía, por derecho, mar-cando los tiempos, fue la culmina ciónde una vida estoica, cuya mayor virtudfue el componente senequista, grave yresponsable, con algo de tristeza.

No pudo olvidar las características deesta filosofía moral, de esta ética, quese desbordaron en el período de influ-jo más universal de la escuela, con supaisano Séneca. E intentó responder almodelo de hombre perfecto que se en-trega en el ejercicio de sus funciones,convirtiéndose en el prototipo, no sólotaurino de una época, en la que se ad-miraron una serie de valores en tre losque destacan los morales. Especial-mente el del deber cumplido, el de laobra bien hecha. De ahí las caracterís-ticas de la estocada, de la que una yotra vez iremos repitiendo que lo llevóal holocausto, pero en el seno del es-toicismo ya convertido en senequismopor virtud del filósofo de la nueva Stoa,del nuevo pórtico, Lucio Anneo Séne-ca, el de la virtud y el bien que adap-tó esta escuela filosófica a su tiempo.Como lo intentó Manolete con el toreo,aceptando su destino sin miedo a la le-yenda de una divisa, cuando un torode la misma había matado a su tíoabuelo «Pepete» en la plaza de toros deMadrid.

De su entierro, donde el marqués dela Valdivia, le impuso la Gran Cruz deBeneficencia –que el Gobierno le habíaconcedido a título póstumo. Los moti-vos, en el Decreto de otorgamiento, las

muchas veces que gratuitamente habíaactuado en las corridas de Beneficen-cia y en las organizadas para pa liar losresultados de las grandes catástrofes,como en el caso del incendio de San-tander. Su concurso desinteresado almantenimiento del Hospital Pro vincialde Madrid, le fue reconocido con lacondecoración y con la placa de lapuerta principal de Las Ventas– se pue-de decir que fue el acontecimiento quemás resonancia tuvo en la Nación es-pañola. Mucho más que otros su cesoscomo los de la condena de la ONU oel final de la Guerra Mundial. VizcaínoCasas da el dato: «Los periódicos ago-taron sus tiradas; esas tira das que nose habían agotado...» y cita los dos he-chos que acabamos de re saltar.

En correspondencia con esta situa-ción se desbordaron los poetas, aque-llos que lo habían acompañado en lanoche gloriosa de Lhardy de finales de1944, Arcángel recibió otro homenajedel que siempre he destacado las es-trofas de Agustín de Foxá:

Me llevarán los minerosen hombros, ellos que saben

tanto de la tierra y tienenmanos de profundidades.

Quisiera terminar con otros versos,los de Rafael Duyos, que tantas vecesoí recitar a Pepe González Marín.

Él era el viento que al pasar exitacon su taurina voz devastadora.

Él era el sol con alamar de auroray el río mismo que a rondar invita

con espuma de amor, su ciudad moray la piedra romana, emperadora

y envidia fue del puente y la mezquita.Parco en reír, discreto en elocuenciamucho hablar de él sería irreverencia.Pregonó la muleta más que el hombre.La historia a la leyenda dio su fuero

y así fue «Manolete»: un mito, un nombreManuel Rodríguez Sánchez ¡un torero!

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Higinio-Luis Severino CañizalAbogadoex-ganadero-apoderado-empresario

Escalera del Éxito 69

Alfonso Navalón¿¿EEll mmeejjoorr ccrrííttiiccoo

ttaauurriinnoo ddeell ssiigglloo XXXX?? (I)

Salamanca, tierra mía

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A «el amo mariano», comolo llamaba Alfonso, amigo,paisano y propietario delGrupo MRS, Hotel DoñaBrígida y Diario Tribuna deSalamanca.

N o es fácil condensar en una pá-gina las vivencias y estrecha eintensa relación de 50 años de

amistad, pero intentaré ceñirme lo másposible, detallando lo más destacadode nuestras andanzas taurinas.

Nos conocimos en la década de losaños 50, en unos carnavales de CiudadRodrigo a donde yo iba habitualmentey me hospedaba en casa de un granamigo de mi familia: el tratante «figu-ra» de ganado mular y caballar, Saha-gún Curto donde alternábamos con esagran persona y hoy flamante propieta-rio de los hoteles Conde Rodrigo, Ce-ferino Santos Alcalde, íntimo amigo deAlfonso y mío.

La finca El Berrocal del padre de Al-fonso fue el lugar adecuado donde ac-tuábamos los dos en los tentaderos, losque continuábamos en mi finca deFuenlabrada en la que estando pre-sente el alcalde de Olmedo de Capa-ces, municipio de la Dehesa, conocidopopularmente como el Sr. Antonio,concertamos un festival para las fiestasdel Patrón San Jorge en el que con no-villos de Agustín Sánchez Manzanera,ganadero de San Felices de los Galle-gos, actuamos mi cuñado, el matadorde toros Paquito Muñoz, Alfonso y elarticulista, resultando exitoso y con losbeneficios para las obras de la parro-quia. Curiosamente el sobrero fue li-diado por mi fraternal amigo El Prínci-pe Gitano quien asiduamente iba a mifinca de Fuenlabrada en su gran ilusiónde ser torero. Y Alfonso y yo lo acom-pañamos en su debut profesional en laplaza de toros de Zamora, siendo em-

presario Máximo Robledo, donde ac-tuó mano a mano con Pepe Somoza,en festejo controvertido con interven-ción de la Benemérita.

Os diré que a los naturales de Ciu-dad Rodrigo, se les ha conocido siem-pre con el apelativo de «los farinatos»,embutido famoso y específico de la ciu-dad mirobriguense, y como Alfonso eranatural de Fuentes de Oñoro, pueblode la comarca fronterizo con Portugal,yo bauticé a mi amigo con el sobre-nombre de «El Farinato de la Raya»,dado que en esa zona en vez de decirfrontera usaban siempre el término dela «Raya con Portugal».

En contrapartida a lo anterior y dadoque yo nací en Vitigudino, Alfonso mellamaba «El Charro de la Gudina».

Desde entonces nunca perdimos elcontacto y en un viaje a mi querida Ve-nezuela organicé un festival benéficoen la plaza de toros de Barquisimetoen el que actuamos el matador de to-ros mexicano, gran amigo mío y po-derdante, Joselito Huerta, Alfonso y yo.Y mi amigo se quedó en aquellas tie-rras 30 días invitado por mí e impre-sionado de la afición existente en Sud-américa, y de la atención que recibimosdel ex matador de toros español exi-liado, Cayetano Pastor, propietario deuna ganadería brava y una sensacionalfinca limítrofe con la playa de Chichi-riviche, a la que acudíamos con fre-cuencia a realizar los tentaderos encompañía de mi fraternal amigo RafaelSánchez «Pipo».

De vuelta a España y entusiasmado elmirobriguense de la actividad taurinavivida en el otro continente, olvidó susestudios de derecho y su tuna univer-sitaria y comenzó a pensar en hacersecrítico taurino ya que sus amplios co-nocimientos del toro eran un acicatemás para esa ilusionante tarea.

El año 1962 mi gran amigo Benja-mín Bentura Remacha, crea una revis-

ta taurina semanal, denominada Fies-ta Española, que tuvo gran predica-mento en aquella época y en la queyo colaboraba en todos sus números,y se me ocurrió decirle a Alfonso queescribiera algunos artículos, lo que asíhizo, y los firmaba con el pseudóni-mo «Farinato». Ese fue su inicio y sulanzamiento, pues al poco tiempo Víc-tor de la Serna lo nombró crítico tau-rino del diario Informaciones de Ma-drid, con un éxito inenarrable, hastael extremo de que en la feria de SanIsidro en la plaza de toros de Las Ven-tas se vendía el diario y se agotabaúnica y exclusivamente por las cróni-cas de Navalón.

Pero Alfonso, hombre controvertidoy polémico tenía un handicap que leperjudicó notoriamente en su profe-sión, y ese era que en sus crónicas pun-zantes y con gran sabiduría taurina, in-cluía ácidos comentarios sobre losdistintos personajes del mundillo tau-rino y adyacentes, lo que yo le recri-minaba continuamente, pero nuncahizo caso al respecto, y ello le creóenemistades por doquier.

Ello dio lugar a que cuando se casóla hija de nuestro íntimo amigo EliseoMoro Giraldes en la capital charra, Eli-seo me llamó por teléfono desde su re-sidencia de Vitoria para decirme quetenía un gran problema con la obliga-da invitación de Alfonso porque si elcroquis que se pone en el hotel con ladistribución de mesas y nombre de losasistentes, no podía poner el nombrede Alfonso, pues si lo veían el Niño dela Capea (con quien no se hablaba porsus críticas adversas personales) y uníntimo amigo del torero de Tejares ca-sado con la hija del propietario de unfamoso hotel taurino bilbaíno, enton-ces se irían del evento.

Y para evitar esa contrariedad, en elreferido croquis, omitió su nombre ypuso Higinio Luis Severino y familia.

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Aprendiendo a torear

Luisa Moreno FernándezBibliófilaVicepresidenta del Club «Rincón de los Artistas Cordobeses»

La mujer en los toros. En defensa de La Fiesta

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L a suerte de banderillas es una delas más lucidas de la lidia, pormás que su eficacia esté cada vez

más en entredicho. El torero cita al toroa cuerpo limpio, sin engaños con quetaparse, y clava los palos en el morri-llo para probar casta y acometividad(¿no están suficientemente probadas enel caballo?). En la actualidad, las ban-derillas son arpones adornados en sedao papel, de vistoso colorido. Anterior-mente eran una especie de dardos lan-zados a mano, que arrojaban los es-pectadores. Más tarde (s. XVII) eran loslidiadores quienes, con la capa sujetaen la mano izquierda para llamar laatención del astado, trataban de clavarel arpón.

Se les ha denominado de muy di-versos modos: arpones, arponcillos, avi-vadores, espabiladores, rehiletes, gara-pullos, palos, palitroques, banderolas,banderillas, alegradores… En mi mo-desta opinión, ni alegran ni avivan oespabilan al animal, ya disminuido enel peto del caballo y la puya, antes al

contrario, lo castigan y quiebran aúnmás, tras la carrera de acometida y elquiebro en el embroque. No olvidemosque las banderillas son una de las suer-tes de quiebro, características del toreonavarro y aragonés que se practicabaen contraposición al toreo artístico delSur.

Muchas de las formas de banderi-llear no se practican en la actualidad,por desuso, y sobre todo por falta depráctica de los toreros. Este iguala alponerse frente al toro para provocar laarrancada al animal. Una vez llega a sualtura bajará las manos y clavará pordelante en el morrillo (y no en los cos-tados, en la cintura o en el suelo), eje-cutando como hazaña lo que se deno-mina «asomarse al balcón», o sea, mirarperpendicularmente al morrillo para sa-lir apoyado en los palos. Los adornos,jugueteos y carreras previos a la con-junción son especialmente festivos peropara nada necesarios.

Las banderillas son de lujo (con eladorno de papel más vistoso y costo-

so), cortas (utilizadas solamente en lasuerte al quiebro), largas (se usan entodas las suertes), negras (en desuso,como castigo o afrenta a los toros man-sos) y de fuego (ya desterradas).

Insisto en que la suerte de banderi-llas es muy vistosa, y aunque comotodo en el toro tiene su riesgo, no es delas suertes más peligrosas, aunque elhombre y el toro se enfrentan cara acara, sin impedimento de trebejos, yque un buen par debe clavarse reuni-do y en todo lo alto.

Los banderilleros han de cumplir sumisión con prontitud, que no con lige-reza, para no restar tiempo a su direc-tor, ya que la brevedad es lo que con-viene al maestro, que es quien debetorear, y ellos están para servir a su to-rero. Cuando banderillea el matador, amodo de lucimiento, escoge a su an-tojo la forma de ejecutar la suerte, se-gún convenga a su facilidad y estilo ya las condiciones del toro. Pero siem-pre lo hará por la cara si no quiere de-gradarse con los palos.

BANDERILLAS A LA ME-DIA VUELTA.– Es el modomás fácil, y puede hacerse dedos maneras. Una, colocán-dose el torero detrás del toroa corta distancia, lo llama conuna voz o chocando los pa-los, y cuando el animal vuel-va la cabeza (antes de quegire el cuerpo) clava los rehi-letes y sale por pies. Otra: salede largo, también por detrásdel toro, que podrá estar pa-rado o levantado, y al llegarcerca hará el llamamientoechándose un poco al ladopor donde quiera hacer lasuerte para que el toro le vea,y clavará como en el caso pri-

Cite para la suerte de banderillasal Sesgo, de F. Boronat y Satorre. Madrid.

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mero. Es un modo de parearen que el torero va hacia eltoro, como en los casos si-guientes:BANDERILLAS AL SES-

GO.– Es mucho más expues-to y de verdadero mérito. Enla antigüedad, el torero se co-locaba detrás y cerca del torosin que éste le viera, se iba ala cabeza, clavaba, y salía porpies. En la actualidad, se co-loca frente al bicho, que es-tará algo terciado con las ta-blas, le llama, y arrancapronto, casi en línea recta, cla-va los palos al llegar a la ca-beza y sigue el viaje.BANDERILLAS AL RECORTE.– El to-

rero sale a encontrarse con el toro y alllegar al centro de la suerte, cuando elanimal humilla, recorta haciendo el ne-cesario quiebro de cuerpo, retrasa susalida quedándose casi pegado al cos-tado del toro y de espaldas al testuz deéste, y cuando el animal da la cabeza-da se clava él mismo los palos, ya queel banderillero tendrá la mano del ladodel toro vuelta atrás con el codo alto,y la otra, pasando por delante de supecho, va a igualar a las puntas de lasbanderillas, que quedan clavadas deatrás a delante.BANDERILLAS AL RELANCE.– Apro-

vechando la salida de un toro despuésque le han puesto otro par, o cuandoviene empapado en un capote, llegara su terreno, cuadrar y meter los bra-zos cuarteando.BANDERILLAS DE COSTADILLO.–

(Que no de sobaquillo, como vulgar-mente se les denomina). El banderille-ro corre hacia el toro gazapón o para-do y clava en el costado, quedando lasmás de las veces descolgadas y siempredesprendidas. Eso no es poner bande-

rillas. Es ridiculizar al banderillero yperjudicar al matador, que se encon-trará un toro rabioso por los picotazos.

Se puede banderillear cuando es eltoro el que va hacia el torero, con loque hay cruce de terrenos. Entonceslas banderillas se pondrán.BANDERILLAS A TOPACARNERO.–

Usada ya desde antes del s. XVIII (enaquella época se colocaban de una enuna). En la «Cartilla» de Osuna se des-cribe: estará el diestro con la banderi-lla en la mano, le llamará cara a cara,poniéndose en perfil, le dejará dar elgolpe retirándose con prontitud dos pa-sos atrás y ejecutará el compás que-brado a la izquierda, tanto que los dosmovimientos parezcan uno en su lige-reza. Es un precedente del Quiebro, yla forma más difícil de ejecutar la suer-te, resultando por ello la más lucida.BANDERILLAS DE PECHO O A PIE

FIRME.– Es la suerte a Topacarnero. Eltorero se coloca a distancia del toro yde cara a él. Ya venga levantado, ya ci-tándolo, lo obliga a que parta. Tendráparados los pies y cuando el toro lle-ga a jurisdicción y humille, hará un

quiebro con gran ligereza, y ya fueradel embroque se cuadrará y meterá losbrazos, con lo que el remate es segu-ro y sin necesidad de salir con pies,aun con toros boyantes, por quedarfuera de jurisdicción.BANDERILLAS AL QUIEBRO.– Par-

tiendo de las dos anteriores, fue crea-ción de Antonio Carmona «Gordito» en1858. A cuerpo limpio y a pie firme, secita al toro, y al llegar éste a jurisdic-ción, el diestro hace un gesto de diri-girse hacia un lado, para que el torotuerza o quiebre su viaje, y pasa ceñi-damente junto al torero, que no ha va-riado su posición primitiva, clava y salecaminando.BANDERILLAS AL CAMBIO.– Es el

mismo Quiebro, ejecutado con bande-rillas de lujo, que por el volumen queles da el recargo de sus adornos, sir-ven para efectuar un verdadero cam-bio en la trayectoria del toro, sirvien-do ellas de verdadero engaño (sinengaño no hay cambio), lo que no su-cede con las banderillas normales.

Continuará.

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Suerte de banderillas al cuarteo, de F. Boronat y Satorre.Madrid.

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LLeeooppoollddoo SSáánncchheezz GGiillSalmantino de nacimiento, colaborador deportivo en la Gaceta Regional de Salamanca y en Radio Sala-manca y Radio Popular, realizando una encomiable labor y se le concede por parte del inolvi-dable Juan Antonio Samaranch, la insignia de oro y brillantes de la Federación Española.Ingresa en el Cuerpo de Registradores de la Propiedad, profesión que ejerce en la actuali-

dad, profesor en la Universidad de Deusto de «Derecho de la Propiedad Inmobiliaria», y de-cano territorial de los registradores de Castilla y León y del País Vasco.Posee la cruz de San Raimundo de Peñafort de 1.a clase y la medalla de oro del Colegio

de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de España.Su afición al periodismo del deporte lo alternó con el de los toros, en radio, prensa, crí-

tica y coloquios en Salamanca y Bilbao, lo que le avala no solo como profesional de los me-dios, sino como un excelente aficionado.Y no contento con tanta actividad y trabajo, al ser presidente actual del Club Taurino Cocherito de Bil-

bao le caen sobre sus hombros cien años de responsabilidad con los actos de celebración del centenario.Leopoldo, tu trabajo y afición te han traído hasta aquí a recoger tu muy merecida EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo,, que

en nombre de la Fundación te entrega un salmantino universal, Santiago Martín «El Viti».

170

44 ddee mmaayyoo ddee 22001100 HHoommeennaajjeess Fundación Escalera del Éxito

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Por Ramón Sánchez Aguilar

MMaarrííaa DDoolloorreess NNaavvaarrrroo RRuuiizzMadrileña, castiza del Paseo de las Delicias,

mejor dicho de «la Arganzuela», como normal-mente decimos los nacidos en los barrios cas-tizos de la capital. Licenciada en Derecho por la UniversidadComplutense de Madrid, se inició en políti-ca en nuevas generaciones del Partido Po-pular, más tarde Presidenta de las Juventu-

des de Arganzuela, Vicepresidenta de la Regional de Madridy miembro de la Junta Directiva Regional del PP.Tras ejercer varias responsabilidades, José María Álvarez

del Manzano cuenta con Lola para las elecciones de 1999como concejala más joven del Ayuntamiento, y vuelve a serincluida en la lista del PP por Alberto Ruiz Gallardón, pre-sidiendo la Junta Municipal del Distrito de Tetuán, y actual-mente es Concejala Presidenta del Distrito de Arganzuela.Su afición ha sido la Fiesta Nacional a la que dedica par-

te de su tiempo y cariño.Varios premios taurinos en su haber: «Bienvenida a la To-

rería», «Madroño de Albero», «Romántico del Toreo» - RafaelSánchez «Pipo» y pertenece a los jurados taurinos: Feria deSan Isidro Ayuntamiento de Madrid, Diario ABC, Club Fi-nanciero Génova, Centro Riojano, Club Allard, Wellington,Jota Cinco y Gabana 1800.Hasta aquí, María Dolores Navarro, has conseguido la

EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo 171, pero con tu juventud, te quedan mu-chas cosas buenas por hacer; en nombre de la Fundaciónte hace entrega Pío García-Escudero, EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo 58.

171

AAnnddrrééss AAmmoorróóss GGuuaarrddiioollaaNace en Valencia, ciudad que más artistas en todas sus fa-cetas ha dado España.Desde el maestro Serrano, autor del Himno a Valencia, So-

rolla, Benlliure, Blasco Ibáñez, Joaquín Rodrigo, Maestro Pa-dilla, Lladró, José Iturbi, Concha Piquer, Rafael Duyos y otrosmuchos han sido los que han ofrecido sus artes y su glo-ria a España para triunfar y ser reconocida en otras tierras.El mundo del toro no podía ser menos: los hermanos Fa-

brilo, Granero, Vicente Barrera, «El Choni», Montoliu, Enrique Ponce…Catedrático de literatura española en la Facultad de Filología de la Uni-

versidad Complutense de Madrid, autor de más de 160 libros dedicadosa la novela, relato, teatro, libreto de ópera, ensayo, crítica literaria y tau-romaquia.Infinidad de premios. Entre otros: Nacional de Crítica Literaria, Fas-

tenraht de la Real Academia Española, Nacional de Ensayo, Premio delas Letras Valencianas…Ha sido Director Cultural de la Fundación Juan March de Madrid, Di-

rector de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, Director General delInstituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música del Ministerio deCultura, Director de la Institución «Alfonso el Magnánimo» de Valencia y ac-tualmente colabora en la emisora es.radio y crítico taurino del Diario ABC.Andrés, la EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo,, la tienes ganada y nosotros, contigo, tam-

bién ganamos… Es Salvador Sánchez-Marruedo, que como Presidente dela Fundación te hace entrega de tu EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo 172.

172

4 de mayo de 2010 Homenajes FFuunnddaacciióónn EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo

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Natalia Gómez de Enterría de Soria y Gabriel Soria Gamito.

Antonio Martín Monseco, Jesús Soria Medina y Juan Lamarca López.

Pilar Carrizosa Mesa, Jaime González Sandoval y José María Moreno Bermejo.

Rosa Basante Pol y Santiago Ayala Garcés.

María Dolores Navarro Ruiz, Salvador Sánchez-Marruedo y Andrés Amorós Guardiola.

Miguel Ángel Martín Serrano, María del MarSánchez de Martín, María Ángeles Grajal López y María Ángeles Sanz Fernández.

Leopoldo Sánchez Gil y Jesús Rico Almodóvar.

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Carmelo Espinosa Yebra, Miguel Flores y Agustín Marañón Richi.

Macarena Fernández Lascoiti y Jaime Bosqued Biedma.

Isidoro Lorenzana Rodríguez, Juan María García-AndradeZapatero y Carlos Santiago Díaz-Valero.

Carmen Lladó de Sáez de Retana y Juan Sáez de Retana Rodríguez.

Cristina Moratiel Llarena, Juan Iranzo Martín y Silvia Gutiérrez Pérez.

Andrés Amorós Guardiola y Auxiliadora Cuaresma de Amorós.

Ignacio Sánchez Balbás, José Pastor Díaz, Mario GalvacheGómez y Mari Carmen Santa María de Sánchez.

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María Ángeles Sanz Fernández y María Dolores Vega de Sánchez-Marruedo.

Francisco Galán Sánchez, Juan Manuel BuesoMartínez y Juan Luis Penna.

José Luis Vázquez Padura, José LucinioFernández López y José Julio García Sánchez.

Tomás García-Aranda, Margarita Peces deGarcía-Aranda y Fernando Saiz de Gali.

Joaquín Marqueta Melús, Gabriel de la Casa,Andrés Ortega Martín-Pajares, Carmen Torres de

Varela, Mercedes de Moreno Abenza, IsidroVarela Leandro, Ambrosio Moreno Abenza y

Francisco Soriano Iglesias.

Justo Avilés Ruiz, Muriel Feiner Friedman y Domingo Estringana Sanz.

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Andrés Ortega Martín-Pajares, María Dolores Navarro Ruiz y Claudio Cornejo.

Marlén Fernández Bernal y José Luis Carabias Sánchez-Ocaña.

Ángel Díaz Arroyo y Santiago Martín Sánchez «El Viti».

María Dolores Navarro Ruiz, Vidal Pérez Herrero, CayetanaHernández de La Riva.

Francisco Benjumea Jiménez, Francisco CastellanoMuñoz y Ángel Mateo Rodríguez.

David Shohet Elías, Teresa Ferrer de Shohet, Mari Carmen García de Martín, Santiago Martín Sánchez «El Viti» y LeopoldoSánchez Gil.

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Juan Pablo Sánchez Monforte, Eduardo Hernández Hernández,Ignacio Osendi Cuervo y Juan Sánchez-Imizcoz.

Isidro Varela Leandro, Carmen Torres de Varela, Mercedes de Moreno Abenza y Ambrosio Moreno Abenza.

Fernando García Bravo, Santiago Martín Sánchez «El Viti», Gumersindo Galván Hernández y Joaquín Marqueta Melús.

María Ángeles Grajal López, Mari Carmen García de Martín, Ramón Sánchez Aguilar

y César Palacios Romera.

Maruchi de Castro Aguado, Gonzalo Sánchez Hernández, Beatriz Badorrey Martín y Ángel Sonseca Rojas.

Atanasio Candelas Moreno, Pilar Moreno de Candelas,Rosario Cruz de Berzal y Juan Berzal Arranz.

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Antonio Torres García, Teresa Ferrer de Shohet, Isabel de Becerril Heredero de Torres y David Shohet Elías.

Ignacio Sánchez Balbás, Mari Carmen Santa María de Sánchez,Federico Montero García, Mari Carmen de Santa María,

José Luis Santa María y García de La Chica y Jesús Santa Maríay García de La Chica.

Pío García-Escudero, Cayetana Hernández de La Riva, María Dolores Navarro Ruiz y Ramón Sánchez Aguilar.

Vidal Pérez Herrero, María Dolores Vega de Sánchez-Marruedo, Salvador Sánchez-Marruedo y Ramón Sánchez Aguilar.

Rosa Sanz Ruiz de Novalvos, Santiago Martín Sánchez «El Viti», Salvador Sánchez-Marruedo, Rosa Basante

Pol y Juan Iranzo Martín.

Pío García-Escudero, Fernando Claramunt López y Fernando del Arco de Izco.

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Ramón Rodríguez Sanz, Rosario Rodrigo y Francisco Serrano Gil.

Pilar Ramos, Antonia Pérez de García y Antonio Tomás García.

Jesús Soria Medina, Juan Lamarca López y Ángel Sánchez Castilla.

Ladislao Rubio Borox, Santiago Martín Sánchez «El Viti» e Isabel Vázquez de Rubio.

Miguel Gonzalo Liquete, José Luis RodríguezReyero, Luis Casado Morante.

Gabriel de La Casa, Pedro Cañas y Santiago Martín Sánchez «El Viti».

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Santiago Martín Sánchez «El Viti», Vidal Pérez Herrero y Gabriel de La Casa.

José María Moreno Bermejo, Jaime González Sandoval y Andrés Amorós Guardiola.

Ramón Sánchez Aguilar, Leopoldo Sánchez Gil y Nicolás Fuentes López.

Miguel Flores, María Dolores Navarro Ruiz y CayetanaHernández de la Riva.

Miguel Ángel Martín Serrano, María del Mar Sánchez de Martín y Salvador Sánchez-Marruedo.

Salvador Sánchez Vega, María Dolores Vegade Sánchez-Marruedo y Rosa Sanz Ruiz de Novalvos.

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Salvador Sánchez Vega, María Dolores Vega de Sánchez-Marruedo y Salvador Sánchez-Marruedo.

Jesús Santa María y García de La Chica, Mari Carmen Pintos de Santa María, José Pastor Díaz, Evaristo Pérez Hernández,Evencio Pastor Delgado y Mario Galvache Gómez.

Juan Manuel Bueso Martínez, Ángel MateoRodríguez, Francisco Galán Sánchez,

Francisco Castellano Muñoz, Jesús Ignacio Torres Paño, Ignacio García Gómez

y José María Martínez Palomar.

Poul Christiansen de Querol, Pedro Cañas, Claudia Starchevich Araujo, Salvador Sánchez-Marruedo,

Montse Gamo Martín-Crespo y Ángel Díaz Arroyo.

Juan Lamarca López, Santiago Martín Sánchez «El Viti», María Dolores Navarro Ruiz, Manuel Torres López, José Luis Carabias Sánchez-Ocaña, Gonzalo Sánchez Hernández y Leopoldo Sánchez Gil.

Gabriel de La Casa, Santiago Martín Sánchez «El Viti»,Andrés Ortega Martín-Pajares, Joaquín Marqueta Melús

y Gumersindo Galván Hernández.

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José Antonio González Lana, Cristina Hernández López, Santiago Martín Sánchez «El Viti», María Dolores Gallego

de González, Alicia Hernández Cruz y José Gallego Gómez.

José Gallego Gómez, Ramón Sánchez Aguilar, José LuisCarabias Sánchez-Ocaña, Salvador Sánchez-Marruedo y José María Moreno Bermejo.

Rafael Ramos Gil, José Gallego Gómez, María Dolores Gallego de González y Pío García-Escudero.

José Gallego Gómez y Claudia Starchevich Araujo.

Ángel Monje Clemente, Pilar Guardiola Flores y Reyes Monje Clemente.

Carmen Lladó de Sáez de Retana, Isabel Gijón Calvo, María DoloresGallego de González, Monserrat García-Albea Ristol, José GallegoGómez, Alicia Hernández Cruz, Paloma Camiña Mendoza y Cristina Hernández López.

Salvador Sánchez-Marruedo, José María Moreno Bermejo, José Gallego Gómez.

RRoommáánnttiiccoo ddeell TToorreeoo -- JJoosséé GGaalllleeggoo GGóómmeezzEn el preámbulo de la entrega de la EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo,, tuvo

lugar un entrañable Homenaje, con la entrega de un Galar-dón donde figura la leyenda: Reconocimiento «Románticodel Toreo» - Rafael Sánchez «Pipo» a Don José Gallego Gó-mez por su aportación y entrega a la Fiesta. Fue entregadopor José M.a Moreno Bermejo y Salvador Sánchez-Marruedo,en nombre de todos los asistentes al acto y amigos que sesumaron a tan emotivo reconocimiento.

RECONOCIMIENTO

«ROMÁNTICO DEL TOREO» - Rafael Sánchez «Pipo»

A Don José Gallego GómezPor su aportación y entrega a la «Fiesta»

4 de mayo de 2010

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…cada vez toma más auge y se con-vierte en espejo y paradigma para lasdemás plazas.

Sería prolijo entrar no ya en describirsino en enumerar siquiera las numero-sas ganaderías cordobesas y andaluzas,en las que los criadores, más que cui-dar, miman a las reses desde su naci-miento.Ahí están, en las dehesas de la capi-

tal, las ganaderías de Ramón Sánchez yde los Hermanos Centeno (ésta en Al-colea), en Pozoblanco y Villaharta lade «Jaralta», en Guadalcázar la de Gre-gorio Herrero Sánchez de Puerta, enBelmez la de los Hermanos Puerta, enHornachuelos la de Curro Doblas Al-calá, en Palma del Río la de Herederosde Félix Moreno Ardanuy, en Montoroy Villa del Río la de Eliseo Morán, enPeñarroya-Pueblonuevo la de «La Cas-tilleja» –de Antonio García Galán– y enCabra la de Pallarés, por citar sólo al-gunas.

❖ ❖ ❖Tras la aceptación del toreo por los

Austrias y la prohibición por los Papas,es con la llegada del toreo a pie cuan-do Córdoba despunta con esta activi-dad del arte de la tauromaquia y consus toreros, que sentencian cuando ha-blan por su inteligencia y su sentidocomún.De los alrededor de seiscientos hom-

bres de luces cordobeses de nacimien-to o de adopción, sería interminable larelación de los toreros que Córdoba hadado a la «fiesta nacional»; baste recor-dar a Panchón, a «Pepete», a «Bocane-gra» y a «Conejito» entre otros muchosde los de antes. Y de los que afortu-nadamente viven, un saludo desde aquía Rafaelito «Lagartijo», Fernando Torto-sa, «El Barquillero», Agustín Castellanos«El Puri», José M.a Montilla, ManuelCano «El Pireo», Gabriel de la Haba «Zu-rito», Rafael Jiménez González «Chiqui-lín», Florencio Casado «El Hencho», JuanSerrano «Finito de Córdoba», FermínVioque, José Luis Moreno, Sergio Sanz,José Luis Torres, Andrés Luis Dorado,

Alejandro Castro, Reyes Mendoza, Ju-lio Benítez, Rey Vera, Agustín Parra «Pa-rrita», Enrique Ponce y algunos más.El monstruo cordobés de la fiesta fue

Manuel Rodríguez Sánchez «Manolete».Se puede decir que con él empieza, sino el toreo moderno, sí el estilo mo-derno de torear. Quietud, elegancia enla acción, manos bajas, temple con lamuleta y certeras estocadas configuranla esencia de su arte y de su persona-lidad, de su elegancia y de su honra-dez.Cuentan que, como en sus estocadas

firmes se entregaba hasta la muerte, alsalir de la obnubilación de la aneste-sia, unas horas antes de fallecer en elhospital de Linares, le dijo a Rafaelito«Lagartijo»: «Sobrino, esto me pasa a mípor tonto». Pero no, no era tonto, fueun torero íntegro.En un hipotético diálogo creado por

José Peña entre un intelectual y «Ma-nolete», éste declaraba que en el ruedosu única idea era «ajustar mi faena anteel noble animal a lo que dictaba mi ca-beza e incluso mi corazón; y sabía quelo había conseguido cuando desde laarena lograba yo –decía– transmitir alpúblico esa impresión». Fijando las za-patillas en el albero se proyectaba has-ta el tendido una especie de hilo invi-sible que ataba al torero con el públicoy el bravo y bello animal en medio deambos. Precisamente por ello, le dijoel hipotético intelectual, «usted teníaque acabar como acabó; y por ello meatrajo siempre su figura; [...] en su ver-ticalidad haciendo juego con la hori-zontalidad del toro y encontrándose enel punto medio de unas coordenadasque sólo saben hallar los grandes ar-tistas, centraba yo el secreto último delarte de Cúchares».Como he pasado mi vida profesional

enseñando esa preciosa inutilidad quese llama Literatura, e investigando so-bre ella, he de recordar desde aquí, congusto y regusto, a autores que han cul-tivado el tema taurino.Por lo que a Córdoba atañe, no po-

demos pasar por alto a Pío Baroja en La

feria de los discretos, ni a Camilo JoséCela en Primer viaje andaluz, ni a Ge-rardo Diego en La suerte o la muerte.Poema del toreo, ni a Mario López enNostalgiario andaluz y Universo de pue-blo, ni a Antonio Gala en Piel de toro yCharlas con Troylo, ni a Juan MoralesRojas en Romance de toro y torero yCampo de Vista Alegre, ni a Pablo Gar-cía Baena en Lectivo, ni a SalvadorGonzález Anaya en Los naranjos de laMezquita, ni a Miguel de Unamuno enPoemas de los pueblos de España (Cór-doba), ni a Mariano Roldán en Ley delcanto, ni a Rafael Duyos en El toreo deCórdoba. A todos ellos los ha analiza-do en un precioso estudio la profeso-ra Porro Herrera, compañera y amigaentrañable.

❖ ❖ ❖No puedo, ni debo, ni quiero con-

cluir este pregón sin referirme a unoshechos que tuvieron por escenario anuestra ciudad en los años 2006 y 2007y que dieron gloria sin precedentes a lafiesta de los toros. Una «gloria in ex-celsis».El 5 de octubre de 2006 por primera

vez en la Historia un torero pronun-ciaba una conferencia sobre toros enuna Real Academia. Y eso fue dondetenía que ser: en la Córdoba torera. Yel 2 de noviembre de 2007 un toreroingresaba como Académico Corres-pondiente de una Real Academia, paralo que había sido nombrado el 3 demayo de ese año. Y eso fue donde te-nía que ser: en la Córdoba torera. Eltorero, en ambos casos, era D. EnriquePonce Martínez y la Academia, la Realde Córdoba, de Ciencias, Bellas Letrasy Nobles Artes.El 2 de noviembre de 2007 tuvo lu-

gar en Córdoba lo que la prensa uná-nimemente calificó como el «aconteci-miento del año». Y no fue para menos.Por primera vez en el mundo y en laHistoria un torero ingresaba en unaReal Academia. Este honor fue com-partido por el Excmo. Sr. D. EnriquePonce Martínez y nuestra Real Acade-mia, que lo llamó a formar parte de su

El arte del toreo y Córdoba al fondoXX Pregón Taurino de la Feria de Córdoba, 2009 (III)

Dr. Joaquín Criado CostaDirector de la Real Academia de CórdobaEEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo 114477

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Sección de Nobles Artes, por la villagiennense o jaenera de Navas de SanJuan, donde tiene su residencia fami-liar.Con él, con Ponce, entraba en las Rea -

les Academias el toreo como arte ycomo técnica ensamblados, o la técni-ca al servicio del arte de torear, que noson conceptos plenamente coinciden-tes pero sí muy próximos. Entraba ennuestra Real Academia un torero conlos méritos aquilatados de Enrique Pon-ce, cordobés de corazón y cordobés dedevoción unido por amistad a grandesintelectuales de la España de hoy, quienademás de sus méritos taurinos estáadornado de innumerables calidadeshumanas, que lo hacen paciente, bon-dadoso y tranquilo, que lo hacen serun diestro «de pundonor y de ver-güenza» torera.El evento mereció preciosos artícu-

los de Antonio Burgos y de Albert Boa -della entre otros, e hizo que se dierancita en Córdoba, además de los qui-nientos invitados, más de dos centena-res de autoridades nuestras y foráneasde primera línea y personalidades delmundo de la intelectualidad y de lostoros y que se acreditaran sesenta y cin-co medios televisivos, radiofónicos yperiodísticos españoles y extranjeros–incluido «El Tomate» y las revistas delcorazón– que difundieron la noticia pormedio mundo.Poco después la Real Academia se-

villana de Bellas Artes elegía Académi-co a Curro Romero. Algo tendrían quever en ello la Duquesa de Alba y laMarquesa de Méritos, qué duda cabe.En Sevilla no fue el primer intento.Veinte años antes mi amigo el ilustreprócer José Hernández Díaz, que en laciudad de la Giralda fue todo menosreina madre y superiora de las escola-pias, se propuso junto con otros Aca-démicos que el diestro Pepe Luis Váz-quez ingresara en la Real Academia desu presidencia, propuesta fallida porlas presiones en contra de otro grupode Académicos que consideraban queel hecho entraría en la más rechazableheterodoxia y frivolidadEse año de 2007 mis amigos toleda-

nos Pablo Ortega y Pepe Montero, em-

presarios que mucho tienen que vercon aquella plaza de toros, me invita-ron a la corrida del «Corpus» en la im-perial ciudad y Ponce, antes de unamuy prolongada cena que tuvimos conPaloma Cuevas, mi esposa, mi herma-no, Victoriano Valencia y otros amigoscomunes, me hizo el honor de brin-darme la muerte del segundo toro desu lote que le proporcionó las dos ore-jas, brindis que me emocionó por loinsólito del hecho para mí y por las fe-licitaciones que recibí de Clotilde Cal-vo –propietaria de la ganadería Bue-navista– y de la viuda del diestroManolo Vázquez, vecinas de asiento enbarrera.No se nos oculta que otras Reales

Academias de Bellas Artes son ya pro-picias a aumentar sus filas con artistasdel toreo. Pero sin duda esa gloria co-rresponderá siempre... ¡a la Córdobatorera!

❖  ❖  ❖La Feria de Nuestra Señora de la Sa-

lud, del 22 al 30 del mes florido, en queEl Arenal se viste de lunares y faroli-llos de mil colores y sus casetas aco-gen a naturales y foráneos, en que laalegría desbordante fluye por los cata-vinos y las tapas, por los sombreros ylas peinetas, no es sino el remate deun mes de mayo en el que se sucedenla fiesta de las Cruces, la Cata del Vinode Montilla-Moriles y el Festival de losPatios. Un mes de mayo pletórico decordobesismo, del más puro cordobe-sismo, que es la gracia y el salero, elser, el saber y el hacer de la Córdobaeterna que será en el 2016, a no du-darlo, Capital Cultural de Europa.

❖  ❖  ❖Y de la feria... ¡a los toros! Llega una

multitud diversa y pululante dispuestaa abarrotar la plaza, a irisarla con man-tones de manila en los cuerpos de las

guapas y garbosas cordobesas y a cu-brir las testas masculinas con el típicosombrero cordobés. A disfrutar con lasartísticas faenas de los diestros y conlos trofeos al torero preferido, ese titánartista que lucha con el toro, con el pú-blico, con la crítica, con los medios decomunicación, con las circunstanciasde la lluvia y del viento a veces… yhasta puede que con los compañeros ycon la presidencia. Y en el centro de la plaza, con la fi-

gura perfecta y equilibrada del redon-del… hierático como un héroe clási-co…, el torero o el novillero o elrejoneador, ganándole la vida a lamuerte cada día y soñando con los tro-feos, con la puerta grande o con lavuelta al ruedo, sí, con la vuelta al rue-do, pues como decía el maestro PacoCamino, en Córdoba merece la penadar la vuelta al ruedo sólo por ver lascaras de las mujeres cordobesas en lostendidos. ¡Qué guapas, señores, québelleza de mujeres!Rafael Duyos, en este fragmento de

su poema «El toreo de Córdoba», se pre-gunta por el toreo de esta tierra y élmismo da la respuesta, poema que yoaprovecho para convocar a ustedes, atodos ustedes, a las corridas de toros yde rejones, a las novilladas y a la be-cerrada del año del Señor de 2009.

¿Qué es el toreo de Córdoba?¿Es arte, es valor, es ciencia…?¿Es un cante por serranassin bulería embustera…?¿Qué es el toreo de Córdoba?¿No hay quien pregonarlo sepa?

❖  ❖  ❖¿Qué es el toreo de Córdoba?¡Todo en Córdoba es respuesta!

Yo, señores, he terminado. ¡Brindopor una feliz Feria taurina!

Miguel Molina, Joaquín Criado, MercedesValverde y Federico Roca.

El director de la Real Academia deCórdoba, Joaquín Criado pregona la FeriaTaurina de Córdoba. Lo hizo en el Circulo

de la Amistad ante un concurrido auditorioque disfrutó del dominio de la palabra y la

escritura de Criado.

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En Uruguay, un monumento

a la sinrazón (I)

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—¿Qué será esto? ¡Me parece unacancha de fútbol abandonada! –dijouna porteña mientras desde el ruedola miraba sin poder creer lo que aca-baba de escuchar. Esto me pasó mientras tomaba mate

dentro de la majestuosa plaza de torosen ruinas de Colonia del Sacramento, enUruguay, después de saltar la barrera, li-

teralmente, entre mi pasión por la Fies-ta y el atractivo turístico, y pese a las ad-vertencias de las autoridades locales deno hacerlo bajo peligro de derrumbe.Viajar sin conocer mucho del lugar

al que vas tiene su encanto, al menospara mí. Descubrir de a poco lo queno está a la vista del turista común, ad-mirar, comer, oler, tocar, sentir, conec-

tar tus sentidos con el lugar; hacerlotuyo. Eso es lo que disfruto cuando via-jo. Y en esta ocasión, cuando fui a Co-lonia, lo hice de la misma manera, perocon un objetivo principal: conocer laPlaza de Toros… y sin imaginar lo quedescubriría a partir de mi deseo.La pequeña y europeísima Colonia

es el reflejo de los conflictos entre la

Úrsula Sánchez RochaAntropóloga Social

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España y el Portugal de finales del si-glo XVII, cuando estos países pretendíanextender sus fronteras hasta donde pu-dieran. Balcones aflorados, calles es-trechas y empedradas que desembo-can en el Río de la Plata, el encantadorfaro que ilumina a los navegantes des-de 1857 y el barrio histórico, que desde1995 es Patrimonio de la Humanidad,son el escenario perfecto en el que seenmarca la historia de la Plaza de To-ros, un monumento, sin duda, a la sin-razón.Y es que el gobierno de José Battle

y Ordóñez, presidente de Uruguay endos periodos entre 1903 y 1915, marcóla historia de su país y también la de latauromaquia en Sudamérica. Durante su gobierno, Battle llevó a

la cúspide del «bienestar» a Uruguay yhasta hubo quien equiparara al terruñocon un lugar muy europeo. Transfor-mó al país en una de las naciones másprogresistas y estables económica y po-líticamente de América Latina; entreotras cosas por ser uno de los prime-ros países en establecer el derecho al

divorcio, el sufragio femenino y el sis-tema educativo gratuito, obligatorio ylaico. Y en este ambiente de prosperidad,

ya cerca del siglo XX, se desarrolló, en lasafueras de la ciudad, el «Real de San Car-los», un complejo para los turistas que vi-sitaban Colonia, principalmente de laprovincia de Buenos Aires. Por su cer-canía con esa ciudad, desde siempre Co-lonia ha sido visitada y también habita-da por porteños, a tal grado que en untiempo existió la idea de construir unpuente para unir las dos ciudades.El complejo, concebido por Nicolás

Mihanovich, empresario argentino, con- templaba la construcción de un hotelcon casino, una cancha de frontón depelota vasca, una central eléctrica y…una Plaza de Toros. Del casino sólo seconstruyó el anexo y en el frontón serealizaron dos campeonatos mundialesy no se utilizó más.Por cierto, habría que destacar que

en Uruguay la permisión de las corridasde toros tuvo corta vida. En 1776 seconstruyó en Montevideo, la capital, el

primer recinto para espectáculos tauri-nos, que funcionó durante cuatro años.Más tarde, en 1785, se levantó otro cosoen la misma ciudad que sólo perma-neció funcionando un año y lo que lesiguió fue un circo armable en dondese celebraron un centenar de corridas. En 1885 se edificó, también en la ca-

pital, la Plaza de la Unión, la más im-portante y grande del país, construidacon dinero de más de doscientos ac-cionistas y con capacidad para docemil espectadores. Fue ahí donde em-pezó la línea mortal de la tauromaquiaen Uruguay, y es que en 1888 el mata-dor Joaquín Sanz Almenar, conocidocomo «Punteret», fue cogido de muer-te por Cocinero, tratando de banderi-llarlo sentado en una silla, lo que ter-minó con la fiesta en el país, porconsiderar su osadía como un suicidio.En un sobresalto inesperado de la di-

cha línea mortal en el monitor de laFiesta, en 1935 se aprobó una nuevaley que permitía las corridas única-mente en Colonia.

Continuará

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Sábado 15 de mayo de 2010 (San Isi-dro), como viene siendo habitual todoslos años, se celebró un almuerzo en elque a «plaza llena» se entregaron los:Premios Santiago de Santiago, Me-

jor Escultor del Mundo y Socio de Ho-nor a Perpetuidad de la Peña «El 7». Tro-feo «Toro Luna».Acto-Homenaje dedicado al Colegio

Oficial de Veterinarios de Madrid, re-presentados por su Presidente Don Fe-lipe Vilas Herránz«El 7 de oro» máxima distinción de la

Peña «El 7» que le fue impuesto al ex-celente matador de toros, José PedroPrados «El Fundi».

TRIUNFADORES SAN ISIDRO 2009Corrida de Toros: Ganadería de José

Escolar Gil. Torero a caballo: PabloHermoso de Mendoza. Matador de To-ros: Sebastián Castella.

FERIA DEL ANIVERSARIO 2009Matador de Toros: Luis Francisco Es-

plá. Triunfador Feria del Aniversario antesu despedida de la afición de Madrid.

MENCIÓN ESPECIALCortador de Toros: José Manuel Me-

dina Vara de Arévalo (Ávila). Triunfa-dor Nacional de XXIX Memorial JoséM.a de la Fuente «Pinturas» de Medinadel Campo (Valladolid) Primera Enti-dad Nacional de Cortes de España.

PREMIOS SAN ISIDRO 2008, que porcausas justificadas no pudieron ser en-tregados en la anterior edición:Corrida de Toros. Palha, Joao Folque

de Mendoça. Matador de Toros. Mejorfaena de la Feria: Manuel Jesús «El Cid».Nuestra más cordial enhorabuena a

su Presidente Emilio Morales Jiménezy a los homenajeados.

LX Aniversario Peña Taurina «El 7»

De izquierda a derecha:Domingo Rodríguez González,Emilio Morales Jiménez,Presidente, quien abre el actodel LX Aniversario de la PeñaTaurina «El 7», Epifanio RubioBorox, Manuel Jesús «El Cid»,Ladislao Rubio Borox y sentado Rafael Finat Riva.

Uno de los momentos más emotivos de la entrega de premios, fue la imposición de «El 7 de Oro» (máximadistinción de la Peña «El 7» a un Matador de Toros), a José Pedro Prados «El Fundi», por su hijo, José Luis Prados Escolar.

Ladislao Rubio Borox entrega a Manuel Jesús «El Cid» su trofeo.

Luis Francisco Esplá, uno de los homenajeados

con Emilio Morales.

En el centro, el ganaderoJosé Escolar, recibe su

premio de manos de DavidShohet en presencia de Emilio Morales.

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Lorenzo Gallego Castuera Ex-Director de la Banda de Música de Las Ventas de Madrid • Escalera del Éxito 87

� � � � � � � � �� � � � � � � � � �La Música en los Torosy la Música de los Toros

E s posible que algunos de los queseguís mi página músico-torerano sepáis nada, o acaso muy

poco de quién fue en el mundo de lostoros el espada bilbaino Martín Agüe-ro, a quien el músico aragonés, nacidoen Cariñena, el maestro José Franco Ri-bate, durante nueve años al frente de laBanda Municipal de Bilbao, compusoun precioso pasodoble para celebrar suéxito en la Feria de Logroño del año1925, inspirada pieza musical que co-mentaré a continuación, no sin antesdeja ros una breve pincelada torera delbravo y buen estoqueador bilbaino.Martín Agüero Ereño nació en Bil-

bao el 3 de febrero del año 1902, pre-sentándo se en Madrid como novilleroel 24 de julio de 1923, alcanzando deinmediato uno de los primeros pues-tos del escalafón novilleril, lo que lellevaría a tomar la alter nativa el 31 deagosto del siguiente año en la plaza detoros de Málaga, de manos del pintu-rero Manuel Jiménez «Chicuelo», en pre-sencia de Luis Fuentes Bejarano.El 7 de julio de 1925 confirma su doc-

torado en Madrid con toros de don An-tonio Pérez, acompañándoles en el car-tel los diestros Ricardo Anlló, «NacionalII» y Braulio Lausín «Gitanillo de Ricla»,toreando su última corrida el 21 de sep-tiem bre de 1930 en Logroño, cuya yadesaparecida plaza de toros de «LaManzanera» está íntimamente ligada alpasodoble que le escribiera y dedicarael maestro Fran co Ribate en 1925, fechaen la que dirigía la Banda Municipal deBilbao.

Y sería tan bellí-sima plaza de toros,cuyo arabizante es-tilo arquitectónicoya no pueden con-templar los aficiona-dos riojanos, mudotestigo de un espe-cial brindis torero,que a la postre fueorigen de la com-posición del torerí-simo pasodoble ti-tulado: «Agüero».Logroño, capital

de La Rioja, celebratradicionalmente,con grandes corridas de toros, la festi-vidad de su Santo Patrón San Mateo.Transcurre el año 1925, y en uno desus festejos taurinos está anunciado elvaliente diestro vasco Martín Agüero.La Banda de Música encargada de

ame nizar las corridas de ese año no esotra que la Municipal de Bilbao con sudirector José Franco Ribate al frente.Martín Agüero, sabedor de que tan

celebrada Banda de Música es la en-cargada de amenizar los festejos, unavez hecho el preceptivo saludo a la Pre-sidencia, se encaminó hacia el tendidoocupado por los músicos, a los que, enel más correcto vascuence brindó lafaena del primero de sus toros. Faenaque resultó ser una de las más com-pletas que el espada bilbaino realizaraen el coso de «La Manzanera», y quefue rematada, como en él era costum-bre, con uno de sus soberbios volapiés.

Cuando el diestro, con la oreja de suenemigo en la mano, se dirigió a salu-dar a sus paisanos músicos, éstos conel azoramiento propio del momento,no supieron como corresponder albrindis del torero; tan solo el maestroFranco Ribate pare ció tener la sufi-ciente serenidad y aplomo para solu-cionar tan apurada y compro metida si-tuación. Y lo hizo de la manera másairosa y elegante posible. Así, diri -giéndose al diestro y devolviéndole lamontera, le anunció, en perfecto vas-cuence, que en recuerdo de su brindisy de su memorable faena, se compro-metía, públicamente, a escribirle y de-dicarle un pasodoble torero. Así fuecomo surgió y afloró al pentagramauno de los pasodobles más bellos, mástorero y mejor compuesto de cuantosintegran el repertorio de la música tau-rina.

Una gran estocada.

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© Fotos: 2006, Julio Aparicio

Susana CarrizosaColaboradora de Diario 16. Redactora en TVE del programa Informe Semanal.Responsable de la Comunicación Interna de la entidad aseguradora MAPFRE.Presentadora del programa Positrón en TVE.Colaboradora fija de la revista de información generalVivir Nuevos Tiempos, especialmente en la sección de entrevistas y cocina con famosos. Toreros en

Miguel Báez y Espuny «Litri»DNI TaurinoOrigen: Gandía (Valencia).5 de octubre de 1930. Alternativa: Valencia, 12 de octubre de 1949 Padrino: Joaquín Rodríguez «Cagancho».Testigo: Julio Aparicio Toros de Antonio Urquijo.

«He curioseado por todos los hornillos de España»

Cocina de confianzaMenúPrimer plato: bacalao con papasPostre: compota de membrillo

Ingredientes del primer plato

1 cebolla julianaajo machacado con pielperejillaureltomillopimienta blanca y negra6 patatas medianas (nuevas raspadas o viejas peladas)

1 kg de bacalao desalado

Finca de Peñalosa. Sevilla

Hornillos de EspañaMiguel Báez nos esperaba en su finca de Peñalosa, situada a 35 kilómetros de Sevilla, para preparar un bacalao con pa-

pas. Así, llegamos al refugio taurino del diestro gracias a Tomás Campuzano, que nos sirvió de cicerone en su todo terreno.Si no… todavía estamos dando vueltas. El templo de don Miguel Báez está en medio de la nada. Por el camino de senda pe-dregosa, un enjambre de árboles, un vaivén de curvas, curvas y más curvas, una historia interminable, y por fin llegamos.

PreparaciónPaso 1

Se parten las papas en rodajas conun grosor de un dedo y se echan enagua. En una cazuela, echar aceite ge-nerosamente hasta que cubra, comomínimo, el fondo de la misma. Enhari-nar el bacalao y freír. Retirar el baca-lao y aprovechar el aceite para hacerel sofrito. Colar dicho aceite y añadir,picadito, cebolla, ajo, laurel y tomillo.

Paso 2

Una vez que este sofrito esté doradi-to, añadir las papas, remover, dejar unpar de minutos y echar agua. Cuandola papa esté blandita, se echa el baca-lao. Añadir sal al gusto. Mientras cue-ce, no más de 10 minutos, se quitan lasramas de tomillo porque su aroma yaestá impregnando el guiso y, sin em-bargo, resultan molestas a la hora deservir este plato.

Ingredientes del postre

1 kg de membrillo entero con piel,azúcar

PreparaciónAntes que nada hay que preparar la

carne del membrillo. Para ello, se ponea cocer la pieza durante 20 minutos.Dejar enfriar. Abrir y retirar la pulpa.Añadir el azúcar en la misma propor-ción que la pulpa: lo que pese la pul-

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la CocinaPilar Carrizosa

Licenciada en Ciencias de la Información. Actualmentedirige y presenta la sección de «La escapada»

en el Informativo Madrid Hoy, cada jueves a las 23:30 h.,de Onda 6 Televisión. Edita un blog en el diario digital:

www.periodistadigital.com, en la sección de viajes«Piérdete y disfruta». Escribe en las revistas

Muchoviaje y Tiempo (viajes).Dirigió y presentó el programa de viajes «Corazón Viajero», con viajes y famosos.

pa, se pesará de azúcar. Con cucharade madera, dar vueltas a fuego lento almenos durante media hora.

CompotaIngredientes del postre

membrillo pelado y a tacos, canela,limón,cáscara de limón,azúcar,

PreparaciónEn una cazuela, echar el membrillo

y el resto de ingredientes con agua has-ta que los cubra, para dejarlos cocer afuego lento hasta que el membrillo estéblando. Ir probando para rectificar deazúcar al gusto.

Enamorado de la cocinaLa finca de Miguel Báez no es la

mansión de Manderley, ni está Rebecapor allí ni el ama de llaves pululando,pero lo parece. No se oye una mosca.De repente, un perro sale de la nada yladra. Nos marca el camino, abrimosun portalón y entramos. En medio dela penumbra se escucha un televisor.Asoma la cabeza del diestro que, comoSegismundo en su torre, ni nos ve yestá pegado al aparato. En un laberin-

to de sillones está extasiado anotandounas recetas de un cocinero conocido.Nada, ni pestañea. ¿Nos habrá visto? Nole afecta el saludo. Otro saludo. Ni poresas.

Truco

Si es nueva, la papa va raspada por-que conserva más sus vitaminas; perosi es vieja, va pelada. Por otro lado, elbacalao debe desalarse 24 horas y sinel lomo. Si las porciones que tenemosson muy gruesas, serán necesarias en-tonces 48 horas.

De repente entra en sí, acaba de ano-tar el último matiz de la fórmula de unsofrito. Es cuando se hace la luz. En eseinterminable salón en tonos vino granreserva, las cabezas de toro añejas vigi-lan desde la pared sin decir ni pío, nose atreven. El maestro, ya con cuerpodefinido y recuperado de su momentá-neo letargo culinario, nos devuelve elcumplido y dice a una señora de setentay tantos largos y a su hija, que estabanpor allí faenando con un mandilillocada una: «Avé, un poco queso yvino pa esta gente, joé, oztia».Mientras el maestro prepara los

ingredientes, la mujer entrada encanas, bajita y regordeta no hacemás que muecas y gestos, y apro-vecha un momento que el dies-tro se ha dado la vuelta partien-do un trozo de cebolla: «Ay, eztehombre, menoz ma que me voya jubilá, me tiene loooca». Su hijasonríe y muestra la mella perono dice nada. Llevan toda lavida viviendo allí como perso-nal de servicio del diestro, re-signadas, pero sabiendo que elhombre en el fondo es buenagente. «Cohone –interviene el mata-

dor de repente– ¿dónde estánmis cushillo?, ¡pero los quecortan, leshe! Os iba a prepa-rar unas perdices pero estánmá congelá que la madre que

lah parió. Pero… ¿es que era hoy cuan-do veníai? Te voy a matá niña –me dicea mí– que por un instante me veocomo blanco de un lanza-cuchillos deferia. No he preparao estos bichos por-que pensé que veníai mañana».Como es un hombre de recursos, in-

mediatamente sale al quite: «Venga, ven-ga, cambio de menú. Os voy a prepa-rá un bacalao con papas, que me saledivino; ademá, es con lo que sorpren-do a mis amigos cuando vienen a casa».

Continuará

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C asi treinta años después de lasprimeras figuras en barro queestudiamos en el número ante-

rior, en 1909, Benlliure retoma el temadel folclore y se introduce en el mun-do del baile flamenco: su carácter sen-sual, voluptuoso, cargado de picardíasexual lo recrea en una serie de «Bai-laoras», que bailan al son de diversospalos festeros. Para las dos primeras se inspiró en

«La Pinrelitos», gitanilla andaluza deunos 15 años, que vio bailar en un ta-blao flamenco en Cádiz. Según testi-monio del propio escultor, su arte «erael instinto mismo de la danza», lo quele llevó a tomar sin cesar apuntes desu actuación tanto por el dominio es-tético que desplegaba como por el rit-mo tan sugerente que desprendía subaile. La gracia de sus movimientos, suchispa, el clima de su actuación, la vi-vacidad de su arte, la ondulación de sumantón, sus giros, fueron captados ensucesivos y rápidos apuntes para po-der darles forma en barro y trasladar-los más tarde al bronce y al mármol. Esta primera «Bailaora», también co-

nocida como «La Pinrelitos», cinceladaa tamaño real en mármol italiano deSevarezza, fue un encargo del Club Es-pañol de Buenos Aires. Viajó a la ca-pital de la Plata en 1910, para mostrar-se en la Exposición Internacional deBellas Artes, celebrada con motivo del

Centenario de la Revolución Indepen-dentista Argentina. Don Mariano plasma en la escultura

el instante en que la gitana marca en-simismada los tiempos del compás deun palo festero, ¿un caracol?: su movi-miento ondulatorio acorde con los pun-teados leves y la melodía cadenciosade la música, y la presencia del mantón,podrían confirmarlo. Toda ella gira entorno a una espiral ascendente acen-tuada por el remolino que forman losvolantes de su traje. Doblado el cuer-po, parece que va a retorcerse en unode esos giros voluptuosos de baile an-daluz. El brazo derecho se extiende ha-cia delante y hacia arriba, mientras el iz-quierdo se dirige hacia atrás, como paraunirse luego sobre la cabeza en arcocerrado; los dedos de las manos seaprietan, nerviosos, para dejar oír loscaracterísticos pitos. El pecho se eleva,espléndido y palpitante; uno de los piesque calzan el recortado zapato anda-luz, se levanta del suelo y descubre elcomienzo de la pierna torneada, que-dando así la figura apoyada en un solopie, en el equilibrio inestable de la dan-za. La cara, admirablemente modelada,muestra los labios contraídos por unasonrisa; los ojos se entornan picares-cos, sombreados por las largas pesta-ñas. La realidad palpita en toda la fi-gura, que parece que va a moverse, acambiar de posición ante nuestros ojos.

Lucrecia Enseñat BenlliureArquitecto y Directora del Archivo Benlliure

La obra taurina de Mariano Benlliure

El ambiente que rodea La Fiesta:majas, músicos y bailaoras (III)

Archivo Benlliure: Bretón de los Herreros, 66 • 28003 Madrid • Tel.: 914 422 417, Fax: 913 990 [email protected]

Bailaora, 1909, marmol, Club Español de Buenos Aires (Argentina)

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¡Torero! Los Toros en el Cine

Muriel FeinerPeriodista-Escritora y Fotógrafa

Una vez más la Fiesta, nuestrafiesta, ha inspirado a un ex-tranjero a retratar el mundo del

toro en la gran pantalla. En este caso esGünter Schwaiger, austriaco de naci-miento, pero residente en España des-de hace unos años, quien se ha lanza-do al ruedo ibérico con cámara en ristrepara reflejar sus impresiones de estesingular mundo. Con un importantehistorial cinematográfico, Schwaiger seha animado a filmar «ARENA, un viajeal mundo taurino en el siglo XXI». Afortunadamente en este caso, el di-

rector y productor es un gran aficiona-do y así pudo realizar un magnífico tra-bajo. El mismo Schwaiger explicó quepartió de la idea de descubrir los mo-tivos que pudieran impulsar a un jovenen este siglo XXI a ser torero. Explicaque el guión se escribía en parte sobrela marcha. En palabras del director: Lotenía que improvisar como el diestro,su faena en el ruedo. La misma diná-mica de la película me llevaba de unsitio a otro, pero no sabía siempre deantemano a dónde me dirigía.

Seguía los pasos de jóvenesy también maduros profesio-nales como Juan Guerrero,Juan «Johann» Duque, DanielMenes «El Dani», su padre,Iluminado Menes (actual ma-yoral de la Escuela de Tauro-maquia de El Batán) y el pin-toresco personaje, MarianoAumente «El Campero», novi-llero muy «curtido». Lógicamente Schwaiger em-

pezó a buscar sus respuestasen la Escuela de Tauromaquiade Madrid: Pero otras cosas,como el viaje a Cali, con el jo-ven novillero y estudiante dela escuela madrileña, Johann,fue una decisión importantehecha de la noche a la ma-ñana. También el fascinanteperiplo del equipo por elmundo del toro incluye unasextraordinarias entrevistas configuras tan importantes comoJosé Antonio «Morante de laPuebla», José Ignacio UcedaLeal, el colombiano Luis Bo-lívar y el francés SebastiánCastella, entre otros, que se-gún el director «simplementese cruzaron en mi camino yfacilitaron mi trabajo muchísimo». La gran afición del director y el azar

del mundo del toro también le llevópor fortuna a la plaza de toros de Bar-celona, para presenciar el encuentro deJosé Tomás con el toro Idílico de la ga-nadería de Núñez del Cuvillo, con elque el diestro de Galapagar realizó unahistórica faena culminada con el in-dulto de Idílico.Con varios premios en su haber por

anteriores trabajos, Schwaiger está co-sechando un triunfo más con su nue-vo documental «ARENA», de enormeinterés tanto para los que son aficio-nados como para los que no lo son.

Un nuevo documental sobre La Fiesta, «Arena»,

de mano de un extranjero

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L a conducción del ganado bravo,bien para ser encerrado con des-tino a la lidia o bien para ser sa-

crificado en los mataderos, con fre-cuencia han dado incidentes cómicos,cuando no escenas desagradables, prin-cipalmente en comarcas, en alguna delas cuales era costumbre arraigada con-ducir el ganado de lidia por las callesde la población, y en otras era necesa-rio hacerlo así por el lugar en que sehallaba situada la plaza o el mataderopúblico.Claro que esto de los toros desman-

dados, turistas, por unas horas, de lavida municipal, sería un capítulo muylargo de contar, por ser innumerableslas que se recuerdan que han formadollevándose a la carrera por delante, enun San Fermín improvisado a la caza ycaptura de un balcón o una reja sal-vadora. Tiempo habrá en otro mo-mento para hacer una recopilación detodos lo sucesos curiosos de esta ín-dole que recoge la historia de la tau-romaquia.Hace ya algunos años, y eso fue el

día 23 de enero de 1928 en Madrid. Enlas primeras horas del día un toro bra-vo, propiedad de Luis Bermúdez, deunas 30 arrobas, bien armado y de cua-tro años, que al parecer formaba partede una punta de ganado (doce cabe-zas), que iba conducido con el restode las reses desde Carabanchel para elmatadero convenientemente custodia-do por vaqueros y una parada de ca-bestros, se dio a la fuga.No obstante los esfuerzos de los va-

queros que por todos los medios tra-taban de detener a la res, no pudierondarle alcance desapareciendo veloz-mente con dirección al centro de la po-blación, penetrando en ella por la cues-ta de San Vicente hasta llegar a la Plazade España, corneando a varias perso-nas. Continuó su paseo por la calle deLeganitos, llegando a la de San Vicen-te y Palma, hasta entrar en la Correde-ra Alta de San Pablo, donde la presen-cia del cornúpeto produjo enormepánico entre los comerciantes y el pú-blico que en aquella hora se encontra-ban adquiriendo comestibles para eldía.

El toro ya embravecido, embestía atodo cuanto se movía a su paso, de-jando un rosario de heridos, seguía sucarrera por toda la Corredera, a pene-trar por la Gran Vía (entonces Condede Peñalver) por una de las calles queparten de la del Desengaño.La sorpresa del público que con los

gritos daban la voz de alarma a los tran-seúntes que no se percataban del pe-ligro llegó a los oídos del matador Die-go Mazquiarán «Fortuna», que pasabapor la Gran Vía acompañado de su es-posa.

«Fortuna», al advertir lo que ocurría yhaciéndose cargo, se despojó del ga-bán, le dio unos lances al toro, a fin depararle y sujetarlo para evitar que nocausase más desgracias. Cerca del lu-gar donde se celebraba la «lidia» se en-contraba el Casino Militar, solicitandoel diestro que le trajeran una espada.Le trajeron un espadín, pero no servíapor ser la hoja muy flexible. Mandó aun muchacho en un automóvil a la ca-lle Valverde, donde tenía su domicilio,para que le dieran un estoque. Quince minutos, aproximadamente,

tardó el muchacho en traer el estoque,durante los cuales el diestro continuólanceando al animal entre ovaciones dela muchedumbre. La escena se desa -

rrollaba en el número 13 de la calle,esquina a la calle del Clavel. Las acerasy los balcones estaban completamen-te llenos de público que presenciaba«la lidia improvisada». Al llegar el muchacho con el estoque

fue recibido con una gran ovación, alas que siguieron otras por algunos pa-ses que daba el matador para cuadrarla toro. Entró a matar, dando media es-tocada. El diestro dio dos lances más,sacó el estoque y se dispuso a desca-bellar. Por fin la res rodó por los ado-quines al segundo intento.

«Fortuna», en pie y al lado de la resmuerta, saludaba conmovido ante laimponente ovación. Desde los balco-nes las gentes agitaban los pañuelospidiendo la oreja, y a esta solicitudse unieron cuantos habían presen-ciado el hecho. Entre vítores, variosde los presentes levantaron en hom-bros al diestro y le pasearonpor laGran Vía llevándole en volandas has-ta el café Regina, donde esperaba sumujer.A iniciativa de los comerciantes de la

zona, se solicitó para el diestro la Cruzde Beneficencia, que le fue impuestapor el diestro Nicanor Villalta, el día 11de octubre de 1928, en el ruedo de laplaza de toros de Madrid.

Tauromaquia AñejaFernando García BravoDocumentalista Taurino

Una faena en la Gran Vía de Madrid

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Estos largos días del mes de mayo,de camino a la taberna taurina endonde he visto las corridas de

San Isidro, he pensado varias veces enla película francesa titulada «La Guerrade los Botones», en las peleas entre dosbandas infantiles y en el botín de losganadores que arramplaban con todoslos botones de las ropas de los venci-dos. Por eso, uno de los bandos deci-de acudir a la nueva batalla desnudosy el más chiquitín de todos ellos meditaen voz baja: «Si lo sé no vengo». Eso eslo que han debido pensar el noventapor ciento de los diestros que han acu-dido a hacer el paseíllo en Las Ventasdel Espíritu Santo. Si lo sé no vengo.Unas veces por los toros, otras por losvientos y las más por la cuadriculadamentalidad de la mayoría de los es-pectadores que parecen contagiadosdel deseo minoritario de sufrir y sufriren lo que se llama Fiesta Española. De-moledor sentimiento de frustración en-cuadrado en una jaula de líneas para-lelas como si de una ciencia exacta setratara, en la que nada se deja a la ins-piración, al sentimiento. Para esta ma-yoría de espectadores-sufridores-imita -dores de viejas doctrinas anarquistas niuna buena palabra ni un aplauso y, mu-cho menos, un pañuelo blanco y albo-rotado. Rojo y negro. Grana y catafal-co, como decía Fernández Román.¡Qué horror! Como el público cambiacasi totalmente en los festejos ecues-tres, en estos se dieron los triunfos apo-teósicos y las salidas a hombros del yaconsagrado Diego Ventura y de la re-velación de este año, Leonardo Her-nández. De entre los nueve novillerosque actuaron en este San Isidro desta-ca la figura del salmantino Juan del Ála-mo que ya apuntó la temporada ante-rior en varias plazas, sobre todo, creorecordar, en Santander.Los problemas gordos vinieron con

las corridas de toros que es a las que

asisten los titulares de los abonos. Solouna figura de estos tiempos no quisoacudir a la Mayor Feria del Mundo: En-rique Ponce. Lleva veinte años al fren-te de esta guerra y ya no necesita acu-dir desnudo para que no le quiten losbotones. No voy, sin más explicacio-nes. No quiero torear en Bilbao unmano a mano con «El Juli», Pablo Cho-pera, prefiero que nos acompañe Man-zanares. Y yo también. Me parece másredondo el cartel.Y si, como enotros tiempos, lacorrida fuera deocho toros y seañadiese al paseí-llo a Castella, miel sobre hojuelas.Como también comprendo que no qui-siera sustituir a José Tomás en los car-teles de Madrid. Son veinte años de ma-tador de toros y en la cumbre.«Lagartijo», cuando se retiró, cosechólos más ruidosos escándalos de su vida

en plazas como Madrid, Barcelona, Bil-bao o Zaragoza. La gente es capricho-sa y cruel. Los otros dos ausentes obli-gados fueron José Tomás, por culpa dela publicitada cogida de Aguascalien-tes, y José Mari Manzanares, por suoperación de disco. No quiero decirque salieron ganando pero no se tu-vieron que desnudar porque no se vis-tieron ni de luces ni de sombras.Y el caso es que a mí me parece que

por el portón bajo los sillones de pie-dra en donde se sentaba al general Mi-llán Astray, el legionario que aplaudíaa los toreros con su sola mano, salierontoros de buena condición, los impre-sionantes de Dolores Aguirre, los deAlcurrucén, Los Bayones, Puerto de SanLorenzo, Juan Pedro Domecq, la pre-ciosa e imponente corrida de Fernan-do Cuadri y algunos más sueltos y losconcretos de Vellosino, cinqueños pa-sados, Samuel Flores, Palha, los dosque correspondieron a Francisco JavierCorpas, o los del Marqués de Domecqque sustituyeron a los de Adolfo Mar-tín. Los veterinarios de Madrid, para cu-rarse en salud, no pasan una y hay ve-ces que arriesgan lo suyo, como, porejemplo, con el tercero de Núñez delCuvillo que no pesaba lo que piden losanalfabetos del trapío y se le protestóde salida. Está de moda lo del miau yel pico. Sardinas de pico. Luego fue eltoro que aguantó cinco quites de ver-

dad, con mediadocena de lancescada uno, y fueaplaudido en elarrastre. Los torosbuenos de Alcu-

rrucén y Puerto de San Lorenzo le co-rrespondieron en exclusiva a ManuelJesús Cid y en premio a que no ligó niuno solo de tan notables ejemplaresfue premiado con la sustitución deManzanares en la corrida de Juan PedroDomecq, la de la cogida de Julio Apa-

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La Guerra de los Botones y la Rebelión de las Masas

La Fiesta de los Toros, gracias a Dios,

no es una ciencia exacta

Benjamín Bentura RemachaPeriodista… y Fundador de la revista Fiesta Española, Escalera del Éxito 85

«La guerra de los Botones», dirigida por Yves Robert, 1962.

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ricio, en la que no quiero insistir pues-to que todo el mundo sabe ya cómofue y no creo que le haga ninguna gra-cia que se lo repitan a la familia de Ju-lio, al propio torero, al resto de los to-reros y a los buenos aficionados. Enesta corrida salió el toro artista y la sa-tisfacción inundó el balconcillo de latelevisión Plus. Erael decimotercerode los toros que «ElCid» toreaba entreSevilla y Madrid y,por fin, cortó una oreja que, según al-gunos comentaristas, lo tapa todo. Unaoreja a precio de oro. También han cor-tado trofeos Curro Díaz, me gusta, Ra-faelillo, Fernando Cruz, Perera, …pocacosa. La gente está cabreada y bastaque le toquen el tambor para que seponga en pie de guerra. Ortega y Gas-set decía que todo lo bueno de Espa-ña viene del pueblo. Los de pueblo es-tamos muy, muy cabreados. Lo malotambién se lo transmitimos a la FiestaEspañola. Son tiempos a lo Churchill:sangre, esfuerzo y lágrimas. Pero el to-reo es grandeza.Llegó esa grandeza aunque solo fue-

ra con el capote en recuerdo de aque-lla de Ortega Cano y Julio Robles y deJosé Arroyo «Joselito» y Enrique Poncecon los toros de Samuel Flores. En al-guna ocasión se le ocurrió a Curro Ro-mero no coger la muleta y torear a untoro solo con el capote. Lo de la espa-da ya vería luego como lo resolvía. PeroCurro, como su homónimo Puya, el je-rezano Paula y otros artífices del toreode capote era torero de un lance solo:la verónica. Morante de la Puebla esmás largo y más atrevido. Ya se hancantado sus virtudes como consumadointérprete de la verónica y ahora hayque hablar de la chicuelina por deba-jo de la faja. Puerta, don Diego, subíala mano de entrada y se envolvía des-de el hombro a la taleguilla, Caminobajaba un poco las manos y giraba conuna armonía impar, «Chicuelo», su in-ventor, era bajo de estatura y se fundíacomo un caramelo en el amplio percal,y Morante ha comprimido todas las vir-tudes y ha sintetizado el vuelo de unamariposa con acordes del descriptivomúsico Mussorgsky. Con fuerza, contemperamento, sintiendo al calor en susvenas y transmitiendo esos sentimien-tos a los tendidos. El sevillano DanielLuque, osado y valeroso, quiso darle laréplica al poeta con su mismo verso.¡Qué atrevimiento! En otro toro, Caye-tano, que, como su hermano Francis-

co con Ponce y «Joselito», se había que-dado en estatua de mármol ante el vi-brante tercio de quites, abrió la caja delos truenos y lanzó primero el gran re-lámpago de una larga afarolada parasujetar el capote a la espalda y ligarunas recias gaoneras. Se encendió laluz sobre la noche cenicienta de los fi-

nales taurinos de laprimavera madrile-ña. Dicen que conpoco nos conten-tamos en casa de

los pobres. Es que estábamos arruina-dos y han abierto el Banco de los torosy nos han concedido un crédito paracontinuar en la lucha de ser aficiona-do y pagar nuestras eternas hipotecastaurinas. Más de sesenta años llevo yoy no me he comido una rosca.He citado lo de los miau y los picos.

Hacer el gato en Madrid es natural. An-tes la mayoría de los madrileños erangatos. Lo del pico tiene más guasa yviene de largo. Allá por el año 1963 seretiró como banderillero Joaquín Del-gado Morales, sevillano nacido en 1905,apodado «Joaquinillo», siempre subal-terno de calidad y en cuadrillas comolas de Solórzano, Villalta, Vicente Ba-rrera, Pepe Luis y Pepín. A Pepe Luis yPepín no creo que sea necesario queles ponga apellidos. En agosto de eseaño de 1963 iba en la cuadrilla de JoséFuentes, a quien le aportaba su gransabiduría torera. «El Pipo», apoderadode Fuentes y luego suegro, quería que«Joaquinillo» siguiera dándole leccionesal torero y ayudar al retirado de la can-

dente en su escaso jubileo y le propu-so que fuera con el de Linares comomozo de espadas. Así se hizo y, en unade las tardes que el sevillano Joaquín leservía las espadas a Fuentes, desde lostendidos se oyeron voces repetidas de¡pico! ¡pico! a cada cite del diestro li-narense, que, enrabietado, se fue paralas tablas y le pidió a «Joaquinillo» lapuntilla para cortar el vuelo de la mu-leta. Inútil. Volvió al toro con la mule-ta cercenada y se volvió a oír el mis-mo soniquete: ¡pico! ¡pico! Dice AndrésAmorós, hecho más al florete del salóndel ensayo que a las bombas de las trin-cheras de la crítica, que el público deMadrid es duro. Se queda corto. Es ma-ca bro, demoníaco, gótico negro y vam-piresco. Recuerdo que en otros tiempos,cuando amenazaba lluvia, revolotea-ban a ras de la arena del ruedo de LasVentas golondrinas y murciélagos. Losmurciélagos se han quedado y las go-londrinas, aquellas, no han vuelto. Es-toy por asegurar que hoy Antonio Bien-venida no sería el torero de MadridTerminó San Isidro en el invento del

aniversario. Varios aniversarios podía-mos citar. El caso es que el remate fuea los sones de «La Marsellesa» con laenésima confirmación de Castella y otrocastigo de la presidencia madrileña parano permitirle salir a hombros, y la re-novación de Juan Bautista bajo los arcosde la puerta grande. Los naturales llo-rosos de Abellán, hoy sin novia, y otrotriunfo de los «núñez» de los Lozano consu hierro de «El Cortijillo». Al menos, ladespedida ha sido esperanzadora.

Los toreros de Madrid ayer y hoy

Joaquín Delgado «Joaquinillo» y Salvador Sánchez-Marruedo.

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Miguel Molina Castillo, presidente de la Tertulia «El Casto-reño» del Real Círculo de la Amistad, organiza en su edi-ción XXI el Pregón Taurino 2010 y amenizado por la ban-da de música Agrupación Musical «Cristo del Amor». JoséToscano, crítico taurino y director de la revista Toreros

de Córdoba, presentó al disertador. Y Córdoba vivió su pró-logo más intenso con el pregón, pronunciado por el italia-no Gaetano Fortini, quien habló al público asistente de suforma de ver la Fiesta Nacional, tan vilipendiada en los úl-timos tiempos.

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Pregón de la Feria Taurina de Córdoba 2010«Pregón Taurino a la italiana»

El presidente del Club Taurino de Milán (Italia) Gaetano Fortini ensalza la Fiesta

� De izquierda a derecha: José Toscano, crítico taurino, hizo lapresentación de Gaetano Fortini, presidente del Club Taurinode Milán, quien pregonó la Feria de Córdoba 2010 en el Real Cír-culo de la Amistad, sede de la Tertulia El Castoreño, que presi-de Miguel Molina Castillo.

� De izquierda a derecha: Miguel Molina Castillo toma la palabradespués que el Presidente Federico Roca de Torres del Real Cír-culo de la Amistad abriera el acto del Pregón Taurino 2010

� Gaetano Fortini durante su magnífica intervención, Miguel Mo-lina Castillo, Federico Roca de Torres y José Toscano Chaparro.

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Maestro Lorenzo Gallego CastueraCompositor y Director de la Banda de Música de Las Ventas de Madrid, EEssccaalleerraa ddeell ÉÉxxiittoo 87.

Un fuerte abrazo, Juan José Rodríguez de la Fuente. Aficionado

Treinta y dos años en las Ventas, ¡ninguna tarde ha faltado…!con su bello repertorioclamores ha levantado.

Había que ver al Maestro, con su batuta en la mano; desgranando Pasodoblesmuy garboso y espigado.

Hoy la afición de Las Ventas con tristeza se ha quedado… porque al Maestro Castuera los años le han jubilado.

Hombre de gran corazón, con mucho encanto y solera así es como yo le veo a¡Don Lorenzo Gallego Castuera!

El libro titulado «El Cartel tau-rino, la Sociedad y los Toros»(1920-1940), cuyo autor es Án-gel Sonseca, constituye un hitoen la recopilación de cartelestaurinos históricos. Es la se-gunda parte del que ya se pu-blicara anteriormente y queabarcaba una época anterior. Este acto cultural taurino se ce-lebró, según se aprecia en lafotografía, en la Junta Munici-

pal de Distrito de Arganzuela de Madrid, gracias a su Con-cejal-Presidente, Dña. María Dolores Navarro Ruiz, que ofre-ce así una muestra más de su responsabilidad hacia susvecinos y ciudadanos que mantienen su afición a la FiestaBrava y la estiman como un alto valor. Al fondo de la foto-grafía se encuentra de izquierda a derecha: Vidal Pérez He-rrero (editor de la Agenda Taurina), José M.a Moreno Ber-

mejo (Vicepresidente de la Unión de Bibliófilos Taurinos),M.a Dolores Navarro Ruiz (Concejal-Presidente Junta Muni-cipal de Distrito de Arganzuela) y Ángel Sonseca (Autor dela obra).

El Cartel taurino, la Sociedad y los Toros

Asistentes al acto escuchan a la banda de música Agrupación Musical «Cristo del Amor».

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Pilar Carrizosa Más Información: 649 43 01 42

«Un lujo para el paladar, el mundo del pata negra», preten-de descubrir al viajero un mundo de sensaciones, parandoy dejándose llevar por los maravillosos paisajes, pueblos yrincones escondidos salpicados de cultura y folklore quecoronan al mundo del ibérico que discurre desde Salaman-ca, Extremadura y Huelva, saboreando la cuna del «porcinomás codiciado» por puntos turísticos donde tiene lugar laproducción de lo que se llama «el caviar de España». Este paseo por los puntos más significativos donde nace,

vive y se desarrolla el gorrino, revela los secretos más por-cinos, elaboración y producción, propiedades del «honora-ble», y los lugares más interesantes para poder degustarloen hoteles-bodega con las mejores armonías de vinos. Como guinda de oro a esta escapada, no podía faltar el to-

que gastronómico donde aparecen los diez chef mejores deEspaña, quienes han confeccionado a su antojo y en exclu-siva para este libro una receta de lujo para poder prepararen casa y sorprender con unas auténticas obras de arte enforma de bodegón culinario, que los insignes cocineros: Fe-rrán Adriá, José Mari Arzak, Martín Berasategui, Carmen Rus-calleda, Salvador Gallego, Joan Roca, Andoni Ruiz Aduriz,Andrés Madrigal, Pedro Subijana y Cándido López, han te-nido a bien preparar con especial cariño.

FICHA TÉCNICA: Pilar CarrizosaColaboradora desde hace más de dos años con los ar tícu-

los «Toreros en la cocina», y autora con su hermana Susanadel libro del mismo nombre, es Licenciada en Periodismo,por la Facultad de Ciencias de la Información de la UCM. Autora de los libros «Toreros en la Cocina» y «Piérdete y dis-

fruta» (Editorial El Tercer Nombre). Escribe reportajes de viajes en las revistas más represen-

tativas del sector de nuestro país, y colabora en el Grupo In-tereconomía, en la emisora Intereconomía Radio. Ha dirigido y presentado durante 5 años la sección de «La

Escapada» sobre turismo rural, en los informativos de Onda6 TV (Grupo Vocento).

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UN LUJO PARA EL PALADAR, el mundo del pata negra…

Pasodoble a Victorino MartínEn el Hotel Colón de Béjar, se presentó el Pasodoble dedicadoa la ganadería de Victorino Martín, que lleva por título el nom-bre de este ganadero.Abel Moreno, prestigioso compositor de obras taurinas y pro-

cesionales, había compuesto esta obra y tenía pendiente la en-trega a Victorino; ambos se desplazaron a Béjar y dentro de lasX Jornadas Culturales que todos los años organiza la Asociaciónde Amigos de la Plaza de Toros de Béjar, Abel Moreno hizo so-nar esta obra, interpretándola personalmente a piano, para des-pués escuchar la versión orquestal. El éxito fue total. Abel en-tregó la partitura a Victorino Martín, quien la recogió y elogió. Uno de los más importante ganaderos del mundo ya tiene obra

que le inmortalice. Abel Moreno, Victorino Martín y José Álvarez-Monteserín.

El libro titulado «Andanzas y visiones taurinas», de la Asociación de Amigos de la Plaza deToros de Béjar es el primer libro de tres que se están preparando con el ánimo de publicarel segundo el año 2010 y el tercero en el 2011, coincidiendo con el III Centenario de la Pla-za de Toros de Béjar «La ancianita». El libro consta de 25 artículos inéditos taurinos, escritos por 25 aficionados procedentes del

mundo del periodismo, ingeniería, medicina, abogacía, empresa, radio y TV, etc. Todos ellosde renombre dentro del mundo de la cultura taurina.El libro fue presentado por José Álvarez-Monteserín, Presidente de esta Asociación. En re-

presentación de los autores hizo una glosa del libro el catedrático de la Escuela de Ingenie-ros de Béjar, Javier Ramón Sánchez, para después intervenir el Alcalde de la Ciudad Cipria-no González, quien merecidamente elogió a los autores y a la Asociación editora de la obra.Al final se regaló un libro a todos los asistentes al acto, que llenaron el salón. El libro es

de distribución gratuita y está impreso por Gráficas Bretón de Béjar.

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Nos complace una vez más dar a co-nocer a nuestros lectores los últimoshomenajes celebrados por «La TertuliaAmigos del Conde de Colombí»; se ce-lebraron respectivamente el 16 de mar-zo, 15 de abril y 20 de mayo de este2010. El primero recayó en el gran restau-

rador Pablo Guzmán Estrada, propie-tario del restaurante «Casa Pablo», deAranjuez, en consideración a su granamor por la Fiesta, a su generoso senti-

do de la amistad y a la entrega con quedifunde la cultura taurina en su casa-museo dedicado a la Tauromaquia. El segundo de estos merecidos ho-

menajes fueron para los centenarios delClub Cocherito de Bilbao y a la GranVía madrileña, en las personas de Leo -poldo Sánchez Gil, presidente del ClubCocherito, y en el de los concejales delAyuntamiento madrileño, María Dolo-res Navarro y Tomás Serrano Guío, pre-sidentes de la Junta Municipal de Ar-

ganzuela y de la de Barajas, respecti-vamente, que representaban al alcaldede Madrid, Alberto Ruiz Gallardón.Y el tercero recayó en Francisco Ji-

ménez Martínez, creador y responsa-ble de las «mesas taurinas» que se ce-lebran en el Casino de Madrid, enconsideración a su gran amor por laFiesta.A todos ellos les fue impuesta, por el

presidente José M.a Moreno Bermejo,la insignia «Madroño de Albero».

Tertulia «Amigos del Conde de Colombí»Rindió homenaje a Pablo Guzmán Estrada,

Club Cocherito de Bilbao y la Gran Vía madrileña y Francisco Jiménez Martínez

Pablo Guzmán Estrada, recibe su insignia«Madroño de Albero».

Tomás Serrano Guío, José M.a MorenoBermejo, María Dolores Navarro yLeopoldo Sánchez Gil.

Francisco Jiménez Martínez, recibe suinsignia «Madroño de Albero».

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El maestro Luis Francisco Esplá y el dramaturgo Albert Boadella, mano a mano

en el Club Internacional TaurinoEl Club Internacional Taurino hizo entrega de sus tradicionalespremios anuales a dos notables personalidades: Albert Boade-lla recibió de manos de la presidenta, Muriel Feiner, un óleopintado en una paleta de pintor montada en un caballete, crea -do especialmente para la ocasión por el artista César Palacios,y el maestro Luis Francisco Esplá recogió la escultura diseñadapor Janel de manos de José Pedro Gómez Ballesteros.Al aceptar sus premios, Boadella habló sobre los valores de

la Tauromaquia y el diestro Esplá habló del valor y se refirió aJosé Tomás como ejemplo del mismo. Muriel Feiner cerró el acto con broche de oro al proclamar la

Fiesta de la Tauromaquia Internacional, recalcando su esenciamulticultural y universal frente a localismos e intransigencia.

Muriel Feiner, Presidenta del Club Internacional Taurino con los homenajeados Albert Boadella y Luis Francisco Esplá

en una fotografía para el recuerdo.

En la ya amplia nómina del rejoneo,desde 1954, ocupa un lugar de distin-ción Bernardino Landete, jinete conbuena doma y monta de los corceles;le fue fácil dominar el toreo ecuestre,con estilo campero sin alardes y caba-lladas. Sobrio en sus actuaciones, cen-trado en la lidia, encelaba y templabala embestida del toro con el buen tro-te del equino. Certero y fácil al clavarrejones y banderillas, realiza la reuniónajustada para clavar al estribo comodebe ser. Cuando se permitía clavar porel lado contrario, lo hacía de forma ai-rosa con limpieza en la ejecución. Supresentación en la Monumental de LasVentas, el 13 de mayo de 1955, feria deSan Isidro, fue cuando le reconoció laafición capitalina sus condiciones so-bradas, como jinete rejoneador y sunombre comenzó a sonar en el orbetaurino. En sucesivas temporadas au-mentó el número de actuaciones porlos distintos ruedos. En 1958, viajó aAmérica, con actuaciones en Colombiay Ecuador. En este país encuentra elamor y contrae matrimonio. Por en-tonces, en sociedad con el diestro Ca-yetano Ordóñez Araujo «Niño de la Pal-

ma» (hijo), organiza competiciones hí-picas sin abandonar sus actuacionescomo rejoneador.Vuelve en 1965 a España y reanuda

sus actuaciones en los ruedos, retornaa Ecuador al finalizar la temporada de1966, donde reside hasta 1972, en estetiempo participa en competiciones hí-picas y acogiéndose a la doble nacio-nalidad queda campeón nacional ecua-toriano. En 1968, formando equipoecuestre con el teniente Loroño y la se-ñorita Patricia Crespo, ganan la copade Naciones para Ecuador en el cam-peonato sudamericano celebrado enBuenos Aires. Además, queda subcam-peón individual en el mismo certamen.De regreso a España en 1972, tiene di-versas comparecencias en distintos co-sos durante los años 1973, 1974 y 1975,en algunas emparejado con su sobrinoJuan Manuel Landete. Entonces des-aparece de los ruedos hispanos, viveen Ecuador feliz y muy consideradodurante varios años; actualmente resi-de con su mujer y su hijo en Alicante.Su recuerdo como persona y rejonea-dor de buen estilo permanece entre laveterana afición española.

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Bernardino Landete, rejoneador y concursista hípico

Una loca afición por el toro y el caballo

El Duende de Embajadores

Autor

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Protagonista de la Fiesta Nacional 2010

De izquierda a derecha: Antonio Tejerina, Jaime Bosqued, Jesús Galera, José M.a Álvarez del Manzano, José M.a Moreno,Juan Iranzo, Jesús Bánegas, Salvador Sánchez-Marruedo, Pío García-Escudero, Ángel Gómez Escorial, Luis Espada, Vidal Pérez Herrero, Alfonso Osorio, M.a Ángeles Sanz, Pilar Vega de Anzo y Laura Tenorio

El jurado taurino del año 2010 reunido para deliberar sobresus Premios tras la celebración de la Feria de San Isidro, de-cidió por unanimidad conceder el IX Premio al Protagonis-ta de la Fiesta Nacional 2010, a la Excma. Sra. Dña. EsperanzaAguirre y Gil de Biedma. Los anteriores recayeron en el to-rero Enrique Ponce, Victorino Martín, Mario Vargas Llosa,Pepín Liria, Luis Francisco Esplá, «Rafaelillo», Jordi GarcíaCandau, Albert Boadella, Fernando Sánchez Dragó, Pío Gar-cía-Escudero y Francis Wolf. Así mismo, se concedió el V Premio a la Empresa o Enti-

dad destacada por su trayectoria empresarial-profesional en

relación con la Fiesta, al Club Cocherito de Bilbao, en suCentenario. Y el V Premio al Recuerdo de la Feria de San Isi-dro 2010; el jurado: Juan Antonio Sagardoy, presidente ho-norífico; Juan Iranzo, presidente ejecutivo; Vidal Pérez He-rrero, secretario; y los vocales José M.a Álvarez del Manzano,Jesús Bánegas, Jaime Bosqued, Sancho Dávila, Luis Espada,Pío García-Escudero, Ángel Gómez Escorial, José M.a More-no, M.a Dolores Navarro, Alfonso Osorio, Salvador Sánchez-Marruedo, M.a Ángeles Sanz, Antonio Tejerina, Laura Teno-rio, Pilar Vega de Anzo y Jesús Galera, se reunirá en fechaspróximas para deliberar sobre este V Premio.

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� José Méndez Santamaría, presidente dela Peña Taurina de Tenerife, grandísimoaficionado, que cuando puede salta el«charco» para reunirse con nosotros y re-galarnos su amistad… además de unos«buenos puritos». Es «cabal» de la ca-beza a los pies y fue nuestro homenaje-ado el 31 de marzo.

� La peña taurina «Los Cabales», rindió elmiércoles 28 de abril un sentido home-naje al presidente de la «Tertulia de Ami-gos del Conde de Colombí» y destaca-do bibliófilo taurino, José M.a MorenoBermejo. De izquierda a derecha JuanSáez de Retana, José Gallego Gómez yel homenajeado Sr. Moreno Bermejo.

� En plena Feria de San Isidro, un año más,y suman 21 los que se ha venido home-najeando a los doctores de la Plaza deLas Ventas. Como en años anteriores es-tuvo Máximo García Padrós, CirujanoJefe. Fue presentado por Emilio Mora-les y a continuación le dedicó su poesíaTomás García-Aranda, cerrando el actocon emotivas y sentidas palabras JuanSáez de Retana.

CîRDOBA 2016Ciudad Europea de la Cultura

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José Julio García

Es una gran mayoría quien conoce yadmira esta pintura de Picasso, peroson pocos los que saben de la anéc-dota que motivó su creación. El 11 deagosto de 1934, el matador de toros se-villano Ignacio Sánchez Mejías recibióuna cornada mortal que le infirió «Gra-nadino» de la ganadería de Ayala en laplaza de Manzanares (Ciudad Real,Esp.). Trasladado a Madrid al Sanato-rio del Doctor Crespo, al final de la ca-lle de Goya, esquina al paseo DoctorEsquerdo, falleció el día 13 siguiente. El tan considerado cuadro de Pablo

Ruiz Picasso titulado «Guernica», famo-so siempre, vuelve estos días a estar deactualidad por ser objeto de dos ten-dencias de pareceres distintos. Por unlado, la dirección del museo del Pradolo quiere sumar a sus fondos para ins-talarlo en el edificio del antiguo Museodel Ejército, que trasladado este últimoa su nuevo marco en el Alcázar de To-ledo, ha hecho que la mencionadasede anterior pase a depender de lagran pinacoteca nacional. La direccióndel Centro de Arte Reina Sofía, dondeestá el Guernica instalado, se niega atraspasarlo de ubicación alegando queel cuadro se halla en un estado delica-

do que no aconseja se mueva de suemplazamiento. El diestro Ignacio Sánchez Mejías,

hombre de cultura, había estudiado ba-chillerato y dos años de Medicina, erahijo de médico, además de amigo delos poetas y escritores de la generaciónde 1927, e incluso él mismo había es-crito y estrenado obras de teatro. Asi-mismo, contaba con la amistad de es-cultores como Mariano Benlliure ypintores como Picasso, Martínez deLeón, Roberto Domingo y otros. Fuemecenas del premio literario Ateneo deSevilla y cuando el fatal suceso quesegó su vida, todos sus amigos se vol-caron en dedicarle letras de recuerdoencendido y admiración. Tardará mucho tiempo en nacer, si es

que nace, un andaluz tan claro, tan ricode aventura. Y si los poetas y escritores

gastaron tinta en su recuerdo despierto,un pintor, Pablo Ruiz Picasso, mala-gueño y andaluz de corazón quiso tam-bién tributarle su particular homenaje yrealizó un boceto para dedicarle un cua-dro. Aunque todo quedó en proyectopor las circunstancias que se vivían enEspaña en 1935 y 1936, años anterioresa la guerra civil española. En 1939 seconvoca una exposición pictórica sobrelos horrores de la guerra en París, y enésta presentó Picasso un cuadro basadoen el boceto que ideó para dedicar a suamigo Sánchez Mejías. Y como habíasucedido el bombardeo que destruyó laciudad vasca de Guernica, así lo tituló.Un cuadro en el que aparece un toro yalgún motivo taurino más. Del bocetopara recordar al amigo torero muertosalió una pintura genial de reconoci-miento universal.

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Origen taurino del Guernica

«De Lumière a “Manolete”»(Editorial «Ediciones Sol y sombra»)

El Centro Riojano de Madrid en el inicio de la Feria de San Isidro 2010, haacogido la presentación «De Lumière a Manolete» de Muriel Feiner, autorade este libro, que dará al lector una visión amplísima de lo que las filmo-tecas recogen de nuestra Fiesta.Con la maestría de siempre, Muriel narra y recopila anécdotas y datos de

gran importancia que han sostenido su detallada presentación ante una aba-rrotada sala, donde nadie perdió detalle de cuanto pudo contarnos, apoyadapor imágenes que nos transportaban a esos momentos vividos en el cine,manteniendo en todo momento un alto interés entre los asistentes; desdeCantinflas, actor que siempre quiso que aparecieran en sus películas pasa-jes taurinos, hasta la última versión, no vista en España de «Manolete».Libro de un gran contenido que une dos facetas del arte como son el cine

y el toreo. No siempre fueron bien realizadas las películas, como nos ha contado, pero

no cabe duda que Muriel ha realizado una labor de investigación y docu-mentación que no debe faltar en la biblioteca de cada aficionado.Nuestra enhorabuena a Muriel Feiner, por deleitarnos con este su último

libro publicado, como venimos revista tras revista de LLooss SSaabbiiooss ddeell TToorreeoodisfrutando con sus artículos «Torero! Los Toros en el Cine».

Muriel Feiner presentando su libro «De Lumièrea “Manolete”».

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En la plaza de toros de Las Ventas, desde su inauguración en1931, han ocurrido infinidad de sucesos interesantes y gran-diosos. Desde el primer rabo concedido en esta plaza a JuanBelmonte –hasta el triunfador de la pasada temporada Se-bastián Castella–, pasando por las apoteósicas actuacionesde «Manolete», Pepe Luis, Antonio Bienvenida, la despedidade Marcial Lalanda, «El Cordobés», Luis Miguel Dominguín,Palomo Linares y tantos y tantos otros, las muertes por co-gida en la plaza de Félix Almagro, Pascual Márquez, «El Coli»y Antonio González «Campeño», el aficionado ha tenido oca-sión de disfrutar del buen toreo, de muchos momentos deemoción y alguno de tristeza. Pero entre tantos miles de co-rridas celebradas hay una que no será con toda seguridadla mejor pero que el aficionado y gentes de los pueblos deMadrid recuerdan con alegría y nostalgia a pesar de los añostranscurridos; la llamada «Corrida del Siglo».¿Qué aficionado no recuerda que aquel año de 1982 se

vivieron momentos importantes como la visita del Papa JuanPablo II, el primer gobierno del PSOE, la apertura de la ver-ja de Gibraltar, o el drama valenciano por la rotura de lapresa de Tous? Seguro que no se ha olvidado de la corridadel siglo.Feria de San Isidro. Entre otros Juan Mora, Manolo Váz-

quez, Curro Romero, «Antoñete», «Paquirri», Roberto Domín-guez, Rafael de Paula… en fin, todas las figuras del mo-mento y casi terminando la feria, el miércoles 2 de junio seanuncia una corrida de Victorino Martín para Francisco RuizMiguel, Luis Francisco Esplá y José Luis Palomar. Y a partirde aquí, la apoteosis de las actuaciones de los toreros y laemoción dada por los toros de Victorino. Orejas para lostres, ovaciones, vueltas al ruedo que premiaban una laborencomiable de los tres espadas que dejaron en el ruedo todasu capacidad de aquellos momentos: la maestría de un RuizMiguel curtido en mil batallas con las «alimañas» del gana-dero de Galapagar, la alegría, disposición y unos grandestercios de banderillas de un juvenil Luis Francisco Esplá yel esfuerzo, valor y ánimo de José Luis Palomar que no con-sintió dejarse ganar la batalla. Después, el paseo por el rue-do en hombros, inenarrable, rodeados de «capitalistas», nocomo ahora que uno solo carga con el torero triunfador, y

al final esa salida por la Puerta Grande donde esperabancientos y cientos de personas sorprendidas por aquella gran-diosidad de un merecido triunfo.Fotografías, entrevistas, cualquier cosa que decían aquellos

«héroes», era importante. Todo lo acontecido aquella tardepermanece en la memoria de todo aquel que vio la corridaen la plaza, del que la vio en televisión –hasta dos veceshubo que retransmitirla por su importancia, caso único enla historia–, y del que no la vio, porque a fuerza de ser re-petida por los aficionados muchos creían haberla visto.Todos los actuantes coparon los «Premios Mayte», que eran

los únicos premios que en aquellos momentos se otorga-ban: Pobretón, Victorino Martín, mejor toro de la feria; RuizMiguel, triunfador de la misma; Luis Francisco Espla, mejortercio de banderillas; José Luis Palomar, mejor quite y has-ta «El Rubio de Quismondo», picador de la cuadrilla de RuizMiguel, mejor picador.Hoy, en los años actuales, no imaginamos una afición tan

exaltada, toreando calle de Alcalá arriba, como aquella le-jana tarde de mil novecientos ochenta y dos, vimos al serioy exigente público de Madrid.En la actualidad, los tres espadas, retirados, viven felices

y ocupados en sus negocios pero soñando con aquella tar-de tan importante para sus carreras que figurará para siem-pre en la Historia de la plaza de toros de Las Ventas.

Ramón Sánchez AguilarCronista Taurino

Escalera del Éxito 29Misceláneas

Corrida del siglo

Nuestro agradecimiento a J. L. L. FERRERO, amante de la cultura taurina y patrocinador de Misceláneas.

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Tertulia Taurina «El Castoreño» Real Circulo de la Amistad de Córdoba

Miguel Molina Castillo, Presidente de la Tertulia «El Castoreño»,impone la Insignia de Oro a Salvador Sánchez-Marruedo,

Presidente de la Fundación Escalera del Éxito, sellando el actocon un fraternal abrazo.

De izquierda a derecha: José M.a Portillo Fabra,Secretario de la Tertulia «El Castoreño»;

Salvador Sánchez-Marruedo recibe el diplomadonde se le nombra Socio de Honor;

Gaetano Fortini, Presidente del Club Taurino de Milán (Italia) y Miguel Molina Castillo.

La Junta Directiva de la Tertulia Taurina «El Castoreño», acordó nombrar a Don Salvador Sánchez-Marruedo, Socio de Honor de la misma, así como concederle su Insignia de Oro, que otorgan a quie-nes se distinguen de forma especial en los distintos ámbitos de nuestra «Fiesta». El acto tuvo lugar a la conclusión del Pregón Taurino de la Feria 2010, en el Real Círculo de la

Amistad de Córdoba.