El Angel de Jehov y la Trinidad por tuhermano martes, 20 de octubre del 2009 a las 01:49 guardado en El Ser Divino

El Angel de Jehov y la Trinidad por Pablo Santomauro La doctrina del Angel de Jehov es fascinantemente instructiva. Es de lamentarse que poco o nada se ensea de ella en las iglesias del mundo moderno. Grandes hombres de Dios han escrito sobre la doctrina, y poco es lo que yo puedo agregar a lo ya dicho. El Dr. Ron Rhodes ha hecho un trabajo estupendo sobre el Angel de Jehov, sistematizando la doctrina en su libro Cristo antes del Pesebre (Christ Before the Manger, Baker, 1992). A modo de introduccin, veamos algunos conceptos presentados por el Dr. Rhodes. El Angel de Jehov es un personaje que hace su aparicin por primera vez en Gnesis 16. Es el personaje que se le aparece a Agar, la sierva de Sara, y le dice: Multiplicar tanto tu descendencia, que no podr ser contada a causa de su multitud (Gn. 16:10). Esta promesa, ya desde un comienzo debera capturar la atencin de cualquier estudiante de la Biblia. No solamente requiere el atributo de omnisciencia por parte del personaje que la pronuncia, sino que el atributo de omnipotencia tambin es necesario para poder cumplir la promesa. Teniendo en cuenta esto, veamos brevemente tres puntos importantes: 1) El Angel de Jehov es Jehov. 2) El Angel de Jehov es una persona diferente a

otra, tambin llamada Jehov. 3) El Angel de Jehov es Jesucristo. 1) El Angel de Jehov es Jehov. a. Vayamos al captulo 3 de Exodo. All el Angel de Jehov se aparece a Moiss desde la llama de fuego en una zarza. El Angel le da a Moiss la misin de liderar y sacar al pueblo de Israel fuera de Egipto. Cuando Moiss le pregunta por su nombre, el Angel de Jehov se identifica con el nombre de Yo soy el que soy (Ex. 3:14). Todos sabemos que ste es el nombre con que los judos, ms adelante, reconocieron a Dios. Se trata del famoso tetragramaton que los judos teman siquiera pronunciar, el JHWH. Es el nombre que significa El que ha sido, el que es, y el que siempre ser, el Eterno. La versin actual es Jehov, ya con las vocales de Adonai intercaladas entre las consonantes. El punto aqu es que el Angel de Jehov es Jehov. b. Veamos otro pasaje, Gnesis 22: Aqu Dios habla con Abraham y le ordena tomar a su hijo Isaac para ofrecerlo en sacrificio (Gn. 22:1). Cuando Abraham est a punto de hacerlo, el Angel de Jehov lo detiene y le ordena no hacerlo, y entre sus palabras encontramos, Porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste tu hijo (Gn. 22:12a). Conclusin lgica: rehusar el hijo a Dios es equivalente a rehusar el hijo al Angel de Jehov. c. Recuerda el lector cuando Jehov se le apareci en sueos a Jacob en Bet-el (Gn. 28)? Jacob se duerme y suea con la escalera apoyada en tierra que se extenda hasta el cielo. En el extremo superior de la escalera hay alguien que le

dice a Jacob: Yo soy Jehov, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que ests acostado te la dar a ti y tu descendencia (Gn. 28:13). Bien, si leemos Gnesis 31:11-13, vamos a encontrar que el Angel de Jehov le dice a Jacob: Yo soy el Dios de Bet-el, donde t ungiste la piedra, y donde me hiciste un voto. Una vez ms, vemos que Angel de Jehov se identifica como Jehov. 2) El Angel de Jehov es una persona diferente a otra, tambin llamada Jehov. a. Visin de Zacaras. Aqu encontramos al Angel de Jehov intercediendo por Jud frente a Jehov: Respondi el ngel de Jehov, y dijo: Oh

Jehov de los ejrcitos, hasta cundo no tendrs piedad de Jerusaln, y de las ciudades de Jud, con las cuales has estado airado por espacio de setenta aos? Y Jehov respondi buenas palabras, palabras consoladoras, al ngel que hablaba conmigo[subrayado nuestro] (Zac. 1: 1213). Ntese aqu la presencia de dos personajes perfectamente definidos, Jehov y el Angel de Jehov. b. Veamos tambin en el siguiente captulo de Zacaras, la presencia del Angel de Jehov y de otra persona llamada Jehov:

Me mostr el sumo sacerdote Josu, el cual estaba delante del ngel de Jehov, y Satans estaba a su mano derecha para acusarle. Y dijo Jehov a Satans: Jehov te reprenda Y Josu estaba vestido de vestiduras viles, y estaba delante del ngel (Zac. 3:1-3).

El punto es que el Angel de Jehov es una persona diferente a otra, llamada Jehov. 3) El Angel de Jehov es Jesucristo. Escuchemos la promesa que el Angel de Jehov le hace a Abraham en Gnesis 22:

De cierto te bendecir y multiplicar tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que est a la orilla del mar, y tu descendencia poseer las puertas de sus enemigos. En tu simiente sern benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste a mi voz (Gn. 22:17-18).Ningn ngel (recordemos que los ngeles son seres creados Sal. 148:2,5) puede hacer tal promesa. Para ello se necesita poseer los atributos de omnisciencia y omnipotencia. El primero se requiere para tener conocimiento del futuro, y el segundo para que la promesa se haga realidad. Como todos sabemos, tanto la omnisciencia como la omnipotencia son atributos nicos e incomunicables de Dios. Si recorremos el Antiguo Testamento vamos a encontrar que el Angel de Jehov tiene ciertas caractersticas muy peculiares. Por ejemplo: 1. Tiene la autoridad para perdonar pecados (Ex. 23:21), algo que es prerrogativa absoluta de Dios (Dn. 9:9; Mr. 2). 2. Acepta Adoracin (Jos. 5:14). 3. Demanda adoracin (Ex. 3:5). Slo Dios es digno de adoracin (Mt. 4:10; Ap. 22:8). 4. Acepta sacrificios (Jue. 13:19-23).

Cmo explicamos todas estas similitudes? La respuesta est en la doctrina de la Trinidad. El Angel de Jehov es Jesucristo, la Segunda Persona de la Trinidad. Esta es la conclusin inevitable a la que llegamos luego de conocer que la invisibilidad de Dios Padre es establecida en Juan 1:18, 4:24, 5:37; 1 Timoteo 1:17, 6:16; Hebreos 11:27, etc., y que el Espritu Santo tambin es invisible (Jn. 3:8, 14:17). Corresponde sealar enfticamente que cuando indicamos que el Angel de Jehov es Jesucristo, bajo ningn concepto entendemos que Jesucristo es un ngel o un ser creado. La palabra usada, malak, significa mensajero, y si bien se usa tambin para mensajeros humanos, la connotacin sobrenatural y divina es ms que obvia en los pasajes referentes al Angel de Jehov. Si reconocemos que existe una unidad y una cohesin indudable entre el Antiguo y el Nuevo Testamento, tenemos que aceptar la realidad de que Jesucristo pre-encarnado es la imagen del Dios invisible en el Antiguo Testamento. Una multitud de similitudes entre el Angel de Jehov y la persona de Jesucristo apoyan esta doctrina. Ambos tienen ministerios similares tales como comisionar, consolar, liberar a los cautivos, proteger a los siervos de Dios, comunicar o revelar verdades, portar grandes promesas, interceder por la gente de Dios, etc. Sumado a esto, la ausencia total del Angel de Jehov en el Nuevo Testamento, nos ayuda a concluir que el Angel de Jehov es nuestro amado Seor Jesucristo. Habiendo visto suscintamente estas

tres puntos propuestos por Ron Rhodes, pasamos ahora a ver algunas narraciones bblicas con su correspondiente anlisis. Algunos ejemplos analizados. 1. El Angel de Jehov llama a Moiss (Ex. 3).

Apacentando Moiss las ovejas de Jetro su suegro, sacerdote de Madin, llev las ovejas a travs del desierto, y lleg hasta Horeb, monte de Dios. Y se le apareci el Angel de Jehov en una llama de fuego en medio de una zarza; y l mir, y vio que la zarza arda en fuego, y la zarza no se consuma. Entonces Moiss dijo: Ir yo ahora y ver esta grande visin, por qu causa la zarza no se quema. Viendo Jehov que l iba a ver, lo llam Dios de en medio de la zarza, y dijo: Moiss, Moiss! Y el respondi: Heme aqu (Ex. 3:1-4).Observemos que: @ El Angel o Mensajero de Jehov aparece en (dentro de) una llama de fuego en medio de una zarza (v.2). @ El fuego no es el mensajero. El mensajero es una presencia dentro del fuego. @ Durante la conversacin entre el personaje y Moiss, los trminos Angel de Jehov, Jehov y Dios, son usados alternativamente son intercambiables. @ La transicin de el Angel de Jehov (v.2) a Jehov (v.4) prueba la identidad de ambos, y el intercambio de Jehov a Elohim en el v. 4 es ms que reveladora. El mensajero en la zarza es identificado como Jehov y como Elohim.

@ El Targum inserta las palabras el Mensajero de antes de Jehov en el v.4 porque es demasiado obvio que el Mensajero que aparece en el v. 2 es el Jehov del v. 4, el mismo que aparece en forma humana en la zarza ardiente. Si el lector se toma el tiempo para abrir su Biblia y leer todo el pasaje de Exodo 3:1-15, podr definitivamente captar el espritu de la apotetica conversacin que se dio entre Moiss y el Mensajero de Jehov. Conclusin: El Angel de Jehov es Jehov, una persona diferente al Padre. 2. El Angel de Jehov es enviado por Jehov delante de Israel (Ex. 23:21).

He aqu yo envo mi Angel delante de ti para que te guarde en el camino, y te introduzca en el lugar que yo he preparado. Gurdate delante de l, y oye su voz, no le seas rebelde; porque l no perdonar vuestra rebelin, porque mi nombre est en l (Exodo 23:20-21).El punto aqu es que este Angel o Mensajero tiene la potestad de perdonar pecados, y slo Dios puede hacer tal cosa. Esto es suficiente para revelar su naturaleza divina (Deidad). Pero si esto fuera poco, Jehov dice en el mismo versculo: porque mi nombre est en l. La importancia de esta declaracin no puede ser pasada por alto. Para los judos de la poca, el nombre de Dios era una revelacin de su naturaleza divina. Tal era as, que Dios y su nombre eran prcticamente trminos sinnimos. La frase mi nombre est en l significa que la esencia de Jehov era posesin del mensajero. En el Antiguo Testamento, el nombre de alguien

revelaba el carcter de esa persona. El nombre de Dios slo puede estar en alguien que posee la misma naturaleza de Dios. Esto, aadido a las otras evidencias bblicas que forman el mosaico, nos ensea que el Angel de Jehov es una persona divina que se revel en el Antiguo Testamento. 3. Josu adora al Prncipe del Ejrcito de Jehov (Josu 5).

Estando Josu cerca de Jeric, alz sus ojos y vio un varn que estaba delante de l, el cual tena una espada desenvainada en su mano. Y Josu, yendo hacia l, le dijo: Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos? El Respondi: No; mas como Prncipe del ejrcito de Jehov he venido ahora. Entonces Josu, postrndose en tierra, ador; y le dijo: Qu dice mi Seor a su siervo? (Jos. 5:1314) Es obvio que la aparicin del Prncipe del ejrcito de Jehov es una aparicin del Angel de Jehov, Segunda Persona de la Trinidad, ya que cuando Josu lo adora, l acepta adoracin. No se trata del arcngel Miguel como algunos insinan, ya que los ngeles de Dios no aceptan adoracin. Un judo ortodoxo me deca que la accin de Josu de adorar, no necesariamente significaba adoracin porque la palabra usada, shakha, tambin se usa para hacer venia o presentar reverencia, y no necesariamente implica adoracin. Yo le respond que la palabra shakhatambin se usa para denotar adoracin. En muchos casos la ltima palabra en el significado de una palabra (valga la redundancia) la tiene el contexto. Contexto sigue siendo el prncipe de las reglas

hermenuticas. En el versculo 15, el Prncipe del ejrcito de Jehov le dice a Josu que se quite el calzado de sus pies, porque el lugar donde est es santo. La similitud con Exodo 3:5 es imposible de pasar desapercibida, donde Dios le dice a Moiss que se quite el calzado porque el lugar que pisa es tierra santa. Lo que en ambas situaciones hace que la tierra sea santa es la presencia de Dios. Un ngel no puede exigir tal demanda. Claramente, la palabra shakha en esta instancia, significa adoracin. 5. Manoa y el Angel de Jehov (Jue. 13). Veamos ahora el desarrollo de acontecimientos en el captulo 13 de Jueces: los

v.3. El Angel de Jehov se aparece ante la mujer de Manoa. v.6. La mujer de Manoa no est segura de si vio a un varn de Dios o un ngel de Dios. v. 8. Manoa ora a Dios para que enve de nuevo al varn de Dios. v. 9. Cuando el Mensajero aparece de nuevo, lo hace ante la esposa de Manoa. Manoa no est presente. v.v.10-13. La mujer va corriendo a traer a Manoa queda establecido en la conversacin que el mensajero es un hombre, al menos en forma. v.16. Manoa no sabe que est frente al Angel de Jehov. v.17. Manoa le pregunta cul es su nombre. v.18. El mensajero contesta: Por qu preguntas por mi nombre, que es admirable? El texto hebreo es iluminante en este verso. La palabra hebrea

para admirable es Pele, la misma que Isaas 9:6 usa como uno de los ttulos del Mesas. La llave de toda esta narrativa es esta palabra admirable un ttulo que pertenece slo a Dios. v.19. Manoa sacrifica un cabrito en ofrenda a Jehov. v.20. El Angel de Jehov sube en la llama del altar ante Manoa y su mujer, los cuales se prostraron en tierra ante el milagro. Difcilmente esta postracin puede interpretarse como simple reverencia. La actitud es de adoracin frente el milagro (v.19) que hizo el Mensajero (Angel) de Jehov. vv.21-22. Manoa exclama: Ciertamente moriremos, porque a Dios hemos visto. Lo que Manoa vio fue una manifestacin de Dios en forma humana. La conclusin lgica de este pasaje es que el Jehov que acept el sacrificio y la ofrenda, el que hizo el milagro, y el que prometi un hijo, era el hombre que convers con ellos en toda la narrativa. El Mensajero de Jehov no fue ni ms ni menos que Jehov en forma humana. En el contexto ms amplio, el peso de la evidencia establece que se trata de Jess antes de su Encarnacin. La doctrina del Angel de Jehov es uno de los pilares principales de la doctrina de la Trinidad. Uno de los argumentos principales utilizados por los antitrinitarios de toda procedencia y color, es la verdad bblica de que Dios es uno. Este concepto ha sido abusado de tal forma que han concebido la idea de que no puede existir una

pluralidad de personas en el Ser de Dios. Yendo contra toda la evidencia, han aislado esta verdad del resto de la Escritura, se han negado a reconocer la existencia de la revelacin progresiva a travs de la Biblia, y han abusado de la falacia de la evidencia selectiva o parcial (deshechar evidencia contraria a la posicin que se sostiene). Por otra parte, ya es costumbrismo en los defensores de la doctrina de la Trinidad basar sus planteos mayormente en el contexto del Nuevo Testamento. Esta es una estrategia comprensible puesto que la evidencia ms ntida y abundante por la Trinidad se encuentra en las pginas del Nuevo Testamento. Adems, un principio hermenutico clave es que el Antiguo Testamento se debe interpretar a la luz del Nuevo Testamento. Sin embargo, en este caso y otros, conviene excavar, as como el arquelogo meticulosamente busca pedazos del pasado, en la revelacin de Dios dada a los antiguos judos porque ella trasciende el tiempo y nos comunica valiosa informacin que el Nuevo Testamento, por s solo, no nos provee. Cuando hacemos esto, nos encontramos con tesoros inapreciables como la doctrina del Angel de Jehov, que si bien no prueba en s la doctrina de la Trinidad, por cierto sienta las bases para ella al mostrar que existen por lo menos dos personas que comparten la esencia de la Deidad. Este es un golpe desvastador para cualquier antitrinitario. Aun no he conocido un antitrinitario que pueda refutar la evidencia por la pluralidad de personas en la Deidad en el Antiguo Testamento con cierta medida de respetabilidad en sus razonamientos. Por ejemplo, una estratagema conocida es decir que el Angel de Jehov era simplemente un

ngel. Lo que destruye la explicacin es que ningn ngel puede hablar en primera persona, o sea, usar el divino YO sin cometer una blasfemia. Algunos llegan a argumentar que si Hageo es llamado el enviado (malak) de Jehov (Hag. 1:13) en ocasin de su mensaje a Jud, el llamado Angel de Jehov en Jueces 2:1-5, por ejemplo, pudo haber sido simplemente un profeta errante que le habl a la nacin. Esta interpretacin cae en lo absurdo porque toma un pasaje escrito siglos ms tarde, cuando Israel ya no era una teocracia, y lo interpola en el tiempo de los Jueces esto es un claro anacronismo. En ningn momento durante el perodo de los Jueces los profetas fueron llamados Mensajeros (malak) de Jehov. Es obvio que el contexto histrico, as como el literario, no permite tal interpretacin. Algunos comentarios judos como el Targum de Jonatnllegan a insertar la frase As dice Jehov en el texto de Jueces 2:1. Lamentablemente para su credibilidad, tal frase no existe en ningn manuscrito hebreo o de la Septuaginta. La doctrina del Angel de Jehov, acoplada con ciertos pasajes del Antiguo Testamento que describen la naturaleza multi-personal de Dios, pulveriza la idea de que slo hay una persona llamada Jehov y destruye los argumentos de liberales, arrianos, unitarios, musulmanes, etc. Tambin es un golpe mortal a la hereja de los modalistas, quienes para negar la evidencia tienen que decir que el Angel de Jehov es nada ms que una manifestacin del Padre. Esta desafortunada idea se derrumba porque una manifestacin siempre debe ser, por definicin, una extensin de la misma naturaleza del manifestado. Las apariciones del Angel de

Jehov no fueron fenmenos pticos como las imgenes hologrficas de Disneylandia. La cosa se complica aun ms para los modalistas, porque ellos ensean forzosamente que Jess es la manifestacin visible del Padre pero si nadie lo ha visto antes de que Jess naciera, como dicen ellos, cmo es que aparece en el Antiguo Testamento? La palabra hebrea para aparecer (Gn. 18:1-2; Jue. 13:3) indica que estas apariciones fueron manifestaciones literales de Dios en cierta clase de forma fsica. Se le vio y se le escuch como se ve y escucha a un ser humano, un hombre. No fueron visiones de la mente, sino apariciones fsicas detectables con los ojos y los odos. Para los trinitarios no hay aqu ningn problema con esto, ya que por inferencia lgica y por testimonio bblico, el Jehov que se aparece a muchos personajes en el Antiguo Testamento, es Jesucristo, segunda Persona de la Trinidad. Como Dios (Jehov) es multipersonal, es posible que una de las personas de la Deidad pueda ser vista mientras que las otras dos no. Para nosotros, Juan 1:18 no presenta ninguna contradiccin cuando se le confronta con las apariciones de Dios en el Antiguo Testamento. Pero si Dios es una sola persona (unipersonal) como los unicitarios creen, se encuentran en un callejn sin salida. La piedra de tropiezo para el unicitario es la idea de que Dios pudo tomar forma fsica antes del nacimiento de Jess, ya que ellos niegan que Jess existi antes de su concepcin en el vientre de Mara, pero eso no es lo que el Antiguo Testamento ensea. Las conversaciones entre el hombre y Dios registradas en la Biblia son tan naturales en estilo y contenido por la sencilla

razn de que Dios apareci, la mayora de las veces, en forma humana y habl como los humanos hablamos unos con otros. Las conversaciones fueron tan normales que slo pueden admitir una forma fsica humana de Dios delante de ellos. Cmo reconcilian esto los unicitarios con Juan 1:18 que dice que a Dios jams nadie le ha visto? Simplemente no pueden hacerlo. Pero los trinitarios sabemos que sta es una referencia al Padre. Para los unicitarios constituye una vergonzosa derrota porque ellos ensean que Jess es el Padre. Reiteramos, para poner punto final: 1) El Angel de Jehov es Jehov. 2) El Angel de Jehov es una persona diferente a otra, tambin llamada Jehov. 3) El Angel de Jehov es Jesucristo.

Habitaba el Espritu Santo en los santos del A.T.? por tuhermano domingo, 04 de octubre del 2009 a las 01:27 guardado en Estudio

Santos del AT: Habitados por el Espritu? OT Saints: Indwelt by the Spirit? Mircoles, 23 de septiembre 2009 (Por Mark Zhakevich) Mientras asista a la fiesta de los Tabernculos, Jess exclam: Si alguno tiene sed, venga a m y beba. El que cree en m, como dice la Escritura, de su interior corrern ros de agua viva. El apstol Juan comenta que Esto dijo del Espritu que haban de recibir los que creyesen en l; pues an no haba venido el Espritu Santo, porque Jess no haba sido an glorificado (Juan 7:37-39). La ltima parte de este versculo ha generado no poco debate en la historia de la iglesia. En qu sentido el Espritu no haba venido? (Literalmente en griego, el Espritu no estaba.) Aunque algunos ven este texto como apoyo a una falta de la morada del Espritu Santo en los creyentes del Antiguo Testamento, hay tres razones de por qu podemos afirmar la morada del Espritu en los santos

del Antiguo Testamento: la regeneracin, santificacin, y la atribucin de poder. Regeneracin

la

La regeneracin puede ser definida como un acto secreto de Dios en la que imparte la vida espiritual nueva a nosotros [1], y este proceso es la obra del Espritu Santo (Juan 3:3-8). Si la depravacin es universal (Rom 3:9-23) y la justificacin es aparte de las obras (Rom. 3:20), entonces los santos del Antiguo Testamento (por ejemplo, No y Abraham) fueron justificados nicamente por la obra del Espritu Santo (Gen 6:9, Romanos 4:3). De lo contrario, cmo se justifican los individuos antes de Cristo? El Espritu Santo siempre ha sido el agente de la regeneracin. Aunque el Antiguo Testamento no se menciona explcitamente el uso de terminologa NT de la regeneracin,[2] Larry Pettegrew observa que la circuncisin de su corazn (Deut. 10:16, 30:6: Ezequiel 44:7, 9) es la referencia a la regeneracin del AT. [3] Deuteronomio 30:6 muestra que el amor de Dios es el resultado de un corazn circuncidado. Del mismo modo, en 1 Juan, el amor a Dios es un subproducto de la comunin con Dios, que se produce despus de la regeneracin. Efectivamente, Juan est diciendo a menos que sea nacido de Dios, no puede amar a Dios. En el Antiguo Testamento, la circuncisin del corazn preceda al amor a Dios, en el NT, la regeneracin precede al amor por Dios, los cuales son el resultado de la labor del agente de la regeneracin: el Espritu Santo.

Santificacin La morada del Antiguo Testamento tambin es afirmada por las vidas santas de los santos del Antiguo Testamento. Arthur Pink resume el proceso

completo e instantneo de la regeneracin, que resulta en la santidad, de esta manera: La regeneracin consiste en un cambio radical de corazn, porque existe implantado una nueva disposicin como la base de todos los ejercicios santos; la mente que es renovada, los efectos alzados, y la voluntad de emancipacin de la esclavitud del pecado.[4] Despus de que el Espritu Santo regenera, es difcil imaginar que El dejara a ese individuo confiar en su propia capacidad de producir el fruto del Espritu. Pablo ensea que nadie puede vivir por la ley de Dios a menos que el Espritu de Dios viva dentro de l o ella (Romanos 8:2-17, Glatas 5:16-26). Un vistazo a las vidas de los santos del Antiguo Testamento confirma que no anduvieron en los deseos de la carne. Gnesis 6:9 presenta a No como un era perfecto en sus generaciones" que camin con Dios. Del mismo modo, Job se describe como libre de culpa, justo, temeroso de Dios, y apartado del mal (Job 1:1, 8; 2:3). Hebreos 11 es una galera de santos del Antiguo Testamento que vivieron en el poder del Espritu. Puesto que la regeneracin y la santidad son obras del Espritu, cualquier prueba en curso de una vida santa tambin debe hacerse en el poder del Espritu Santo. Leon Wood amablemente resume esta verdad cuando dice ,ya que estos santos del Antiguo Testamento. . . . Permanecieron en una condicin regenerada, debe haber sido el Espritu Santo, que los mantena as.[5]

Puesto que la fe es un don de Dios (Ef 2:8) y la santificacin es una obra de Dios (Flp 2:12-13), la manifestacin continua de los frutos del Espritu en un santo del AT lleva a la conclusin de que el Espritu moraba en la persona, produciendo el fruto

que es agradable a Dios y demostrando una fe genuina. Poder La obtencin de poder del Espritu Santo de los santos del Antiguo Testamento para el ministerio es la prueba final de la morada. Existen numerosos ejemplos en el Antiguo Testamento que demuestran que el Espritu viene sobre ciertos hombres para el ministerio. Los ejemplos se pueden dividir en tres categoras: la artesana, la administracin, y la profeca. xodo 31:1-5 describe Bezaleel siendo lleno del Espritu de Dios con el propsito del arte en el tabernculo.Jueces, reyes y gobernantes civiles tambin fueron llenos del Espritu de Dios para llevar a cabo las tareas administrativas requeridas de ellos. Sansn fue escogido por Dios para resistir a los filisteos (Jueces 14:19). Josu fue capacitado por el Espritu para ayudar a Moiss en la direccin de los hijos de Israel (Nmeros 27:18). 1 Samuel 16:13 describe a David bajo la gua del Espritu del Seor despus de su ungimiento como rey de Israel. Los profetas tambin eran llenos del Espritu de Dios (2 Crnicas 15:1-7, Mic 3:8) y profetizaron, resucitaron muertos (1 Reyes 17:17-24), y realizaron obras sobrenaturales (2 Reyes 1:10). Estos milagros glorificaban a Dios y fueron realizados en el poder del Espritu.

El significado de Juan 7:39 Si la regeneracin, la santificacin, y el poder afirman la morada en los creyentes del AT, cul es el

significado de Juan 7:39? Cul es el significado de el Espritu aun no haba venido? Jess est diciendo que en comparacin con las prximas obras del Espritu, Su actividad previa haca parecer como si El no estuviera activo en la tierra. Leon Morris escribe que no hay nada que podamos comparar con la actividad de la poca apostlica. En ese entonces El espritu estaba de una manera que nunca lo haba estado antes.[6] HF Woodhouse aade que el poder revelado en Pentecosts fue tan amplificado que era como si hasta entonces el Espritu no haba actuado.[7] Woodhouse hace una analoga con un atleta que despus de funcionar muy bien en un juego se dice que ha llegado o que era desconocido hasta ahora. Esto no significa que el atleta nunca haba jugado o lo haba desempeado con xito, sino que su rendimiento actual es mucho mejor que sus competiciones anteriores, era como si fuera desconocido hasta ahora.[8]Del mismo modo, aunque el Espritu haba actuado en el pasado, su efusin y la actividad explosiva en Pentecosts se vuelve mucho ms grande que se puede decir que l no estaba activo en la misma medida. Por ejemplo, l es (1) el Consolador, (2) un testimonio de Cristo, y (3) el que glorifica a Cristo. [9]Estas tres funciones fueron iniciadas despus de la ascensin de Jess. En el Antiguo Testamento, el Espritu de Dios nunca es descrito como el Consolador,[10] o un testigo y glorificador de Cristo. Atestigua la muerte y la resurreccin de Jess a travs de las Escrituras, los apstoles y la iglesia.[11] Asimismo, el Espritu no puede glorificar a Cristo en toda la medida hasta despus de la ascensin. Todos los eventos relacionados con la misin de Cristo fueron completados y ahora el Espritu Santo tena todos los acontecimientos histricos de la

redencin, para referirse en Su obra de regeneracin, santificacin, y en la obtencin de poder a las personas y la glorificacin de Cristo, de modo que ahora funciona como nunca lo haba hecho antes. El Espritu Santo no estaba en el sentido de que no era tan majestuosamente activo en el Antiguo Testamento como lo sera despus de la ascensin. Tanto el AT y NT presentan al Espritu Santo como el nico agente de regeneracin en el plan de redencin, el nico agente de la santificacin obrando en los corazones de los creyentes del AT y NT, trayendo conviccin de pecado y produciendo autnticos adoradores de Dios y como el nico agente de obtencin de poder, permitiendo a los santos de ambos testamentos vivir vidas santas que son aceptables para Dios. Se sigue cumpliendo esta funcin en nosotros hoy como lo haba hecho desde el principio del tiempo. La extensin de su obra en los creyentes ha aumentado, pero Siempre estaba en los creyentes y entre los creyentes. * * * * * * ENDNOTES: NOTAS: * * * * *

[1] Wayne Grudem, Systematic Theology: An Introduction to Biblical Doctrine (Grand Rapids, Mich.: Zondervan Publishing House, 2000), 699. [2] Nacer de Nuevo aparece siendo la terminologa utilizada en el Nuevo Testamento para describir la regeneracin por el Espritu Santo. Cf. John 3:3, 7; 1 Peter 1:3, 23. Juan 3:3, 7, 1 Pedro 1:3, 23. [3] Larry D. Pettegrew, The New Covenant Ministry of the Holy Spirit, 2nd ed. (Grand Rapids, Mich.: Kregel Publications, 2001), 26 [4] Arthur W. Pink, The Holy Spirit (Grand Rapids, Mich.: Guardian Press, 1970), 49. El Espritu Santo (Grand Rapids, Michigan: Guardian Press, 1970), 49. [5] Leon Wood, The Holy Spirit , 70.

[6] Leon Morris, The Gospel According to John (Grand Rapids, Mich.: Wm. B. Eerdmans Publishing Co., 1971), 427. [7] HF Woodhouse, Hard Sayings-IX: The Holy Ghost Was Not Yet Given, Theology 67 (1964): 311. [8] Ibid. [9] Gary Fredricks, Rethinking the Role of the Holy Spirit in the Lives of Old Testament Believers, Trinity Journal 9, no.

Por qu el nmero 666 es usado como un smbolo del Anticristo?

Dr. David R. Reagan Hay tres buenas razones por las que este nmero fue usado. La primera es el hecho de que en las Escrituras, el nmero del Hombre es 6, porque el Hombre fue creado en el sexto da. En contraste, el nmero de Dios es el 7, porque representa culminacin y perfeccin, dado que en el sptimo da de la creacin, Dios descans de Su obra, la cual El declar que era buena o perfecta. Ahora bien, en el lenguaje hebreo, los superlativos se expresan repitiendo la palabra o frase, siendo definitivo tres veces su repeticin. Es por eso que, cuando Isaas vio al Seor elevado y exaltado en el Templo, oy a los serafines cantando, "Santo, santo, santo

es el Seor de los ejrcitos" (Isaas 6:1-3). El nmero 666, por lo tanto, representa el nmero del Hombre llevado a su zenit. El uso de este nmero es muy apropiado porque durante la Tribulacin, Satans trabajar para exaltar a su hombre, el Anticristo, como el Mesas del mundo. Adems, en esa poca habr en la tierra una trinidad demonaca que representar las aspiraciones Humansticas del Hombre Satans enmascarado como Dios, el Anticristo pretendiendo ser el Mesas y el Falso Profeta imitando el papel del Espritu Santo sealndoles el falso Mesas a la gente. La segunda razn por la que se usa el nmero 666 es debido a su simbolismo en la mentalidad juda. La Biblia nos dice que en el ao en el que el Rey Salomn recibi 666 talentos de oro, l le volvi su espalda a Dios y se obsesion con mujeres, caballos y dinero (1 Reyes 10:14 y 2 Crnicas 9:13). Por eso, en la historia juda, el nmero 666 vino a significar apostasa. La tercera razn por la que el nmero 666 es usado, est relacionada con el hecho de que tanto en el hebreo como en el griego, las letras del alfabeto tambin significan nmeros. Esto hace posible sumar un valor numrico para cada nombre. El nombre del Anticristo sumar 666 ya sea en griego o hebreo (o quizs en ambos) y ser, por lo tanto, una expresin de la apostasa definitiva

presentndose a s mismo como un sustituto del verdadero Mesas. Nota de tu hermano: Es necesario considerar que el nmero seis pertenece al hombre, pese a su cada, es decir, pertenece al hombre pecador. Esto nos lleva a pensar que la plenitud del hombre pecador ser manifiesta en el anticristo, no en vano se le llama hombre de pecado hijo de perdicin Cristianismo primitivo creia en jesus dios Confesiones de fe paleocristianas Dignas de estudiarse y meditarse, las he encontrado releyendo por aqu y all entre mis libros de autores cristianos primitivos. Es de notar que no se menciona la expresin Trinidad (que por lo mismo no menciono yo en mi credo en esta WEB, aunque es una enseanza acorde con la Escritura), si bien se afirma la Divinidad de Cristo, ya que ste trmino teolgico -Trinidad- se acuara algunos siglos ms tarde. "Sed sordos, pues, cuando alguno os hable aparte de Jesucristo, que era de la raza de David, que era el Hijo de Mara, que verdaderamente naci y comi y bebi y fue ciertamente perseguido bajo Poncio Pilato, fue verdaderamente crucificado y muri a la vista de los que hay en el cielo y los que hay en la tierra y los que hay debajo de la tierra; el cual, adems, verdaderamente resucit de los muertos, habindolo resucitado su Padre, el cual, de la misma manera nos levantar a nosotros los que hemos credo en El su Padre, digo, nos resucitar, en Cristo Jess, aparte del cual no tenemos verdadera vida" (Ignacio de Antioquia, Carta a los Trallianos 9) "La Iglesia, extendida por el orbe del universo hasta

los confines de la tierra, recibi de los Apstoles y de sus discpulos la fe en un solo Dios Padre Soberano universal que hizo los cielos y la tierra y el mar y todo cuanto hay en ellos (Ex 20,11; Sal 145,6; Hech 4,24; 14,15), y en un solo Jesucristo Hijo de Dios, encarnado por nuestra salvacin (Jn 1,14), y en el Espritu Santo, que por los profetas proclam las Economas y el advenimiento, la generacin por medio de la Virgen, la pasin y la resurreccin de entre los muertos y la asuncin a los cielos (Lc 9,51) del amado (Ef 1,6) Jesucristo nuestro Seor; y su advenimiento de los cielos en la gloria del Padre (Mt 16,27) para recapitular todas las cosas (Ef 1,10) y para resucitar toda carne del gnero humano; de modo que ante Jesucristo nuestro Seor y Dios y Salvador y rey, segn el beneplcito (Ef 1,9) del Padre invisible (Col 1,15) toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra y en los infiernos, y toda lengua lo confiese (Fil 2,10-11). El juzgar a todos justamente (Rom 2,5), los espritus del mal (Ef 6,12) y los ngeles que cayeron y a los hombres apstatas, impos, injustos y blasfemos, para enviarlos al fuego eterno (Mt 18,8; 25,41), y para dar como premio a los justos y santos (Tit 1,8) que observan sus mandatos (Jn 14, 15) y perseveran en su amor (Jn 15,10), unos desde el principio (Jn 15,27), otros desde el momento de su conversin, para la vida incorruptible, y rodearlos de la luz eterna (2 Tim 2,10; 1 Pe 5,10)." (Ireneo de Lin, Contra las Herejas, Libro I, 10:1)

"Por nuestra parte conservemos la Regla de la Verdad, que se resume en lo siguiente: Hay un solo Dios Soberano universal que cre todas las cosas por medio de su Verbo, que ha organizado y hecho de la nada todas las cosas para que existan (2 Mac

7,28; Sab 1,14) (127), como dice la Escritura: Por la Palabra del Seor se afirmaron los cielos y sus estrellas con el Espritu de su boca (Sal 33[32],6); y tambin: Todo fue hecho por l, y sin l nada ha sido hecho (Jn 1,3). Nada de lo que existe se excepta, sino que el Padre ha hecho todas las cosas por s mismo, las visibles y las invisibles (Col 1,16), las sensibles y las inteligibles, las temporales en vista de una Economa y las sempiternas y eternas (2 Cor 4,18) (128). No las hizo por medio de Angeles o de Potestades separadas de su voluntad; pues el Dios de todas las cosas no necesita de ellos; sino que hizo todas las cosas por medio de su Verbo y de su Espritu, las ordena, gobierna y da el ser a todas. El ha hecho el mundo, pues el mundo es parte del universo; l plasm al hombre (Gn 2,7). Este mismo es el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob (Mt 22,29; Ex 3,6), sobre el cual no hay ningn otro Dios, ni Principio, ni Potestad ni Plroma. El mismo es el Padre de nuestro Seor Jesucristo (Ef 1,3), como adelante probaremos" (Ireneo de Lin, Contra las Herejas, Libro I, 22:1) "Todas las Escrituras, los profetas y el Evangelio, predican abiertamente y sin ambigedades -a quienes puedan escuchar, aunque no todos crean-, que existe un solo y nico Dios, el cual, excluyendo a cualquier otro Dios, por medio de su Verbo hizo todas las cosas, visibles e invisibles, del cielo y de la tierra, peces del mar y animales de la tierra, como hemos probado usando las mismas expresiones de las Escrituras. Toda la creacin de la que formamos parte da testimonio, por medio de las cosas que extiende ante nuestros ojos, de que uno solo es el que las hizo y gobierna. Siendo as, se mostrarn necios quienes se ciegan ante una manifestacin tan clara y se rehsan a ver la luz de la predicacin; sino que se

encarcelan a s mismos, de modo que mediante explicaciones tenebrosas de las parbolas, cada uno de ellos piensa haber encontrado a su propio Dios" (Ireneo de Lin, Contra las Herejas, Libro II, 27:2) "... los cuales con cuidado guardan la vieja Tradicin, creyendo en un solo Dios Creador del cielo y de la tierra y de todo cuanto se encuentra en ellos (Ex 20,11; Sal 145,6; Hech 4,24; 14,15), y en Jesucristo su Hijo, el cual, movido por su eminentsimo amor por la obra que fabric (Ef 3,19), se someti a ser concebido de una virgen, uniendo en s mismo al hombre y a Dios. Sufri bajo Poncio Pilato, resucit y fue recibido en la luz (1 Tim 3,16). De nuevo vendr en la gloria (Mt 16,27; 24,30; 25,31) como Salvador de todos los que se salvan y como Juez de los que son juzgados, para enviar al fuego eterno (Mt 25,41) a quienes desfiguran su verdad y desprecian a su Padre y su venida" (Ireneo de Lin, Contra las Herejas, Libro III, 4 LA HEREJIA UNITARIO-SOCINIANA Una refutacin de la teologa de Mario Olcese LA HEREJIA UNITARIO-SOCINIANA Una refutacin de la teologa de Mario Olcese Parte 1 por Pablo Santomauro Junto con los beneficios que trajo el advenimiento del internet concerniente a la propagacin del Evangelio, tambin vinieron aparejadas ciertas desventajas. Entre ellas, la oportunidad para que falsos maestros como el apologista sectario Mario Olcese difundan sus peligrosas distorsiones de la Escritura. Olcese es un ferviente promotor de la hereja Sociniana, hereja sta que haba permanecido olvidada por siglos. Hoy, el monstruo levanta su cabeza gracias a la facilidad de

propagacin que el internet provee. Es a travs de sus blogs que Olcese confunde a muchos cristianos nuevos en la fe o pobremente discipulados. Es por ello que hemos considerado necesario encarar una refutacin sistemtica de sus falsas enseanzas. El Socinianismo es una seria desviacin de la verdad bblica. Niega la Deidad plena de Cristo, la predestinacin, el pecado original, la incapacidad total del hombre para lograr salvacin, el sacrificio sustitucional de Cristo y la justificacin por fe. En el Socinianismo la salvacin es lograda por obras, algo similar al catolicismo romano. Pero su distintivo principal es el rechazo de la definicin ortodoxa de la Trinidad. En esta teologa, Dios es unipersonal y la existencia de otras personas en su esencia es una imposibilidad. Dios es uno, no slo en esencia sino tambin numricamente. De acuerdo con los socinianos, Jess, a pesar de ser slo un hombre durante su estada en la tierra, puede ser llamado Dios en el sentido de que ha recibido de Dios toda potestad en el cielo y en la tierra, lo que lo transforma en una especie de hombre deificado. Los socinianos creen que no existe una relacin entre lo infinito y lo finito, por lo tanto la encarnacin de lo divino no es posible, i.e., ninguna persona divina puede unirse a una persona humana porque la unidad entre dos individualidades no es posible. En otras palabras, Jess no pudo poseer dos naturalezas, la humana y la divina juntas. Tampoco existi en ninguna forma antes de su nacimiento, o sea, no fue preexistente. Su existencia comenz en el momento que naci de Mara.

Precisamente, el tema de la preexistencia de Cristo es el tema del artculo donde Mario Olcese pretende refutar esta doctrina cristiana y que se titula: Preexisti Jess en el cielo antes de nacer en Beln? A continuacion iremos presentando los argumentos de Olcese seguidos por nuestra refutacin en letras azules.

Para refutar ciertos argumentos, en algunos casos slo proveemos el link correspondiente donde nosotros ya hemos escrito artculos relacionados con el tema. En otros casos, ha sido necesario presentar la refutacin en toda su extensin. Reitero, nuestras refutaciones sern en azul. Comenzamos con el encabezamiento del artculo de Olcese: PREEXISTIO JESUS EN EL CIELO ANTES DE NACER EN BELEN? Olcese escribe: Desde los albores del cristianismo la iglesia ha debatido sobre Cristo, su naturaleza, y su relacin con el Padre. Los debates comenzaron algunos siglos despus de la muerte de Jess. En los concilios de Nicea (325 D.C), y de Constantinopla (381 D.C). En estos dos concilios se elaboraron la Deidad del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo (La Santsima Trinidad). Podemos decir entonces que la Trinidad fue desconocida por Cristo y sus seguidores hasta el siglo IV de la Era Cristiana. Respuesta: La Trinidad: Un Dogma de Errores y Contradicciones? En este artculo dirigimos al lector a la seccin subtitulada: El Surgimiento y Desarrollo de la Doctrina [de la Trinidad]

1 Corintios 8:6 Olcese escribe: Pero, realmente concuerdan Cristo y sus apstoles con los concilios del siglo IV? La Biblia tiene otra historia que contarnos, pues sorprendentemente Pablo s revela quin es el nico y verdadero Dios. El texto clave de Pablo est en 1 Corintios 8:6, que dice: Para nosotros

(los apstoles y creyentes en general), sin embargo, slo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para l; y un seor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de l. Observemos que para Pablo, slo uno es Dios, el Padre. Tambin aade que uno es nuestro Seor o Mesas rey, el Seor Jesucristo. Es clarsimo que para Pablo, Cristo no es el nico Dios; es, ms bien, el nico Seor o Jefe de los hombres que se convierten a l. Es la cabeza de la iglesia, la cual somos todos nosotros, los bautizados por inmersin. Respuesta: Ensea 1 Corintios 8:6 que Jesucristo no es Dios? 1 Timoteo 2:5 Olcese escribe: Ahora bien, veamos este otro texto paulino. Est en 1 Timoteo 2:5, y que dice as: Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres Jesucristo hombre. Observe nuevamente lo que est diciendo Pablo. l dice que slo hay un Dios, y adems, un solo mediador entre ese Dios y los hombres llamado Jesucristo. S, Jesucristo es mediador entre usted y Dios, por tanto Jesucristo no es Dios! l es Mediador, no Dios! l est en medio de usted y Dios como el Abogado. Estas declaraciones de Pablo resultaran contradictorias si en verdad existiese la Trinidad, no le parece a usted, lector? Respuesta: Olcese usa aqu el mismo argumento de los arrianos (el Socinianismo es un tipo de arrianismo). Si Jess como mediador no puede ser Dios (Deidad), siguiendo la misma lgica de Olcese tampoco puede ser hombre. Tal razonamiento es obviamente errneo. Desde la perspectiva de la Escritura, Jess puede mediar entre Dios y el hombre precisamente porque l es ambos, Dios y hombre. Fue

nicamente como hombre que Cristo pudo representar a toda la humanidad y morir como los hombres mueren. Sin embargo, desde que Cristo era tambin Dios (Deidad) su muerte tuvo un valor infinito y suficiente para proveer redencin por todos los pecados de la humanidad (He. 2:14-16; 9:11-28). En consecuencia, slo la muerte del perfecto Dios-hombre pudo realmente mediar entre la humanidad pecadora y Dios. [Nota: Hemos incluido "Deidad" entre parntesis inmediatamente luego de "Dios", para diferenciar los trminos correctamente. Esto se debe a que cuando Olcese escribe Dios, l entiende solamente el Padre.] Ensalada de versos de Olcese Olcese escribe: Adems, Pablo les dice a los corintios que Dios es cabeza de Cristo (1 Corintios 11:3). Ntese que Pablo dice que Cristo tiene una cabeza (superior en rango) que es Dios. Esto significa que Cristo tiene su Dios. Tambin se lee en Efesios 1:17: Para que el Dios de nuestro Seor Jesucristo, el Padre. Y tambin concuerda con Pedro, quien escribi: Bendito el Dios y Padre de nuestro Seor Jesucristo. (1 Pedro 1:3). Pero lo interesante del caso es que el propio Jess admite tener Su Dios en Juan 20:17: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios, y vuestro Dios. Y en Mateo 27:46 leemos: Jess clam a gran voz diciendo: Dios mo, Dios mo, por qu me has desamparado?. Pero an ms sorprendente es que en cielo, el entronizado y glorificado Jess sigue afirmando tener Su Dios (4 veces!). Lalo en Apocalipsis 3:12 donde dice: Al que venciere yo le har columna en el templo de mi Dios, y nuca ms saldr de all; y escribir sobre l el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusaln, la cual desciende del cielo de mi Dios, y mi nombre nuevo. Esta reiteracin de la frase de mi Dios pareciera advertirnos en contra de la doctrina de la

Trinidad. El hecho que Jess siga teniendo su Dios en el cielo demuestra que l no es el nico Dios Verdadero. Respuesta: En estas desafortunadas anotaciones, Olcese comete las falacias tpicas de los antitrinitarios arrianos. Primero, supone errneamente que superioridad en rango equivale a superioridad en naturaleza. Nosotros ya hemos tratado con este razonamiento pueril en otras publicaciones. Otra falacia cometida por Olcese es la falacia de categora, por lo que falla en reconocer las dos naturalezas de Cristo inferidas en la Biblia. Antes de su encarnacin, Cristo slo tena una naturaleza divina (Jn. 1:1). A partir de su encarnacin (Jn. 1:14) Cristo tom naturaleza humana. Desde su humanidad (Fil. 2:6-8) es correcto y natural que Cristo reconozca a su Padre como mi Dios, ya que Jess fue en todo semejante a sus hermanos (He. 2:17). En su condicin de humano, Jess reconoce a Dios como lo hacemos los humanos. Sin embargo, en su condicin o naturaleza divina, Jess nunca podra referirse al Padre como mi Dios, ya que Jess fue plenamente igual al Padre en lo relacionado con su naturaleza divina (Jn. 10:30). Juan 17:3 Olcese escribe: Y esta conclusin se extrae de la misma declaracin de Jess en Juan 17:3, donde se lee: Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el nico Dios verdadero y a Jesucristo a quien has enviado. Ntese que es Jess quien est hablando ac. l afirma que la vida eterna consiste en conocer slo a Su Padre como el nico Dios Verdadero, y a l (Jesucristo), como el enviado del Padre. Jess no est diciendo que la vida eterna consiste en creer que el Padre y l son El nico Dios Verdadero, y menos an, que una Tercera persona est comprendida en se nico Dios Verdadero.

Es, pues, necesario escudriar Las Escrituras, y en particular, cada palabra de Jesucristo mismo en cuanto a la relacin que tiene l con Su Padre. Respuesta: Prueba Juan 17:3 que Jesucristo no es Dios? Juan 14:28 Olcese escribe: Jess ensea que Su Padre es mayor que l. Esto es muy importante, pues si el Padre es mayor que Su Hijo, luego ste es menor que Aquel. El texto que sealaremos es Juan 14:28, en donde Jess dice: porque el Padre mayor es que yo. Algunos Trinitarios han argumentado contra este texto diciendo que Cristo hablaba como hombre, y por eso afirm ser menor que Su Padre. Pero: Acaso no es de esperar que todo hombre sea menor o inferior a Dios?No sera esa una declaracin innecesaria en un hombre, y por dems ridcula? Pero yo creo que lo que Jess quiso ensear es que su relacin con Su Padre es de permanente sujecin y de obediencia, como de alguien que no es igual a Dios. Incluso en la eternidad, Jess seguir sujeto a Su Padre (Leer 1 Corintios 15:28). Adems, Jess tambin recalca esta superioridad del Padre diciendo: Mi Padre que me las dio, es mayor que todos. (Juan 10:29). Respuesta: Porque el Padre mayor es que yo (Jn 14:28) Significan estas palabras que Jesucristo no es Dios? Lucas 8:43-46 Olcese escribe: Si Cristo es Dios, no es de esperarse que sepa todo? Pero Jess no lo sabe todo! Y si no lo sabe todo, es porque no es el nico Dios verdadero. Recuerde que slo Dios lo sabe todo y nada ignora. Pero Jess si ignor (e ignora)

ciertas cosas. Por ejemplo: l no supo quin le haba tocado su manto o tnica. Su pregunta fue: Quin me ha tocado? (Lucas 8:43-46). Respuesta: Olcese se refiere aqu al episodio en que la mujer que padeca de flujo sanguneo por doce aos fue sanada cuando se acerc por detrs y toc el borde del manto de Jess. Jess en ese momento pregunt quin le haba tocado. Olcese aprovecha el relato bblico para aducir que Cristo ignoraba y aun ignora ciertas cosas, ergo, no puede ser Dios. El razonamiento de Olcese ignora que los Evangelios siempre presentan a Jess en total control de su poder divino de sanidad. No existe en la Escritura un solo caso donde la gente poda acercarse a Jess, tocarlo y sanarse sin su conocimiento. El contexto indica que Jess quiso que esta mujer se diera a conocer. Olcese, muy sospechosamente, no toma en cuenta los versculos que siguen al pasaje que l cita, o sea, vv.47-48. En ellos vemos que la mujer finalmente confiesa su fe y Cristo le dice: Hija, tu fe te ha salvado; ve en paz. De esta forma Cristo mostr una vez ms el poder de Dios en accin y al mismo tiempo hizo posible la integracin de esta mujer a la sociedad, ya que por la naturaleza de su afliccin, posiblemente era considerada inmunda. No se trat de ninguna ignorancia de parte de Jess, sino que el Seor oblig a la mujer a dar testimonio pblico de su fe. De otra forma, el milagro hubiera pasado desapercibido. El hecho de que la mujer se acerc a l en forma subrepticia, se debi precisamente a que por su enfermedad la ley levtica la declaraba ceremonialmente inmunda (Lv. 15:25-30). Como dicen en ingls: Nice try Mister Olcese. Marcos 13:32 Olcese escribe: Tambin en otra ocasin Jess afirm no saber el da del fin del siglo y de su segunda venida. Categricamente dijo: Pero de aquel da y de la hora

nadie sabe, ni aun los ngeles que estn en el cielo, ni el Hijo, sino mi Padre. (Marcos 13:32). Respuesta: Cmo puede Jess ser co-igual con el Padre si l mismo manifest que slo el Padre sabe el da y la hora de su Segunda Venida (Mr. 13:32)? Juan 1:18 Olcese escribe: El apstol Juan dijo: A Dios nadie le vio jams; el unignito Hijo, que est en el seno del Padre, l le ha dado a conocer. (Juan 1:18). Recordemos que Juan vio a Jess personalmente, y sin embargo l dice que a Dios nadie lo ha visto jams. Esto quiere decir que Juan no crey jams que Cristo fuera Dios. Si Cristo era Dios, no pareceran contradictorias las palabras de Juan? Slo quedan dos opciones: O era Jesucristo Dios, o no lo era. Si lo era, entonces Juan se equivoc, y su evangelio no es confiable. Respuesta: Olcese usa aqu lenguaje confuso, y como es tpico de su teologa, lo que dice no tiene el menor sentido. La doctrina de la Trinidad ensea que la segunda Persona de la Deidad tom para s una naturaleza humana pero conservando su naturaleza divina enteramente (Jn. 1:14; Fil. 2:5-11). Cuando Juan dice que a Dios nadie le vio jams es una referencia al Padre; una criatura de cinco aos entiende eso, pero no Olcese. Las conclusiones de Olcese aqu son derivadas de su absurda presuposicin. Para l, el hecho de que Jess tuviera una naturaleza humana lo descalifica para ser Deidad. Esto es coherente con la teologa sociniana, la cual ensea que una esencia es correspondiente con una individualidad, por lo tanto no puede haber una unin entre dos individualidades. En el pensamiento sociniano esto equivale a que una persona Divina no puede estar unida a una persona humana. Por supuesto que no existe en la Escritura ninguna base para este tipo de especulacin. Por ltimo, cuando Olcese dice que Slo quedan dos opciones: O era

Jesucristo Dios, o no lo era, comete la falacia del falso dilema. Esta consiste en ofrecer solamente dos posibilidades, obligando a la persona a contestar de un modo u otro, cuando en realidad existe una tercera (o ms) alternativa. En este caso especfico, la alternativa bblica nos ensea que Jesucristo es Dios y Hombre simultneamente. Defensa de la doctrina de la Trinidad frente a los unicitarios Pastor Edwin Recinos En el Sur de California tuvimos hace unos aos un resurgimiento de los unicitarios, o "slo Jess" y "apostlicos" como les llamamos comnmente. Un compaero de la facultad lleg a clase un da muy impresionado y un poco confundido porque haba cado en sus manos un librito distribudo por un pastor llamado Rafael Rodrguez quien era el principal promotor de ese "renacimiento" unicitario en esos das. El librito fue escrito por Gordon Magee y el ttulo era: "Esta Cristo en la deidad, o est la deidad en Cristo?" Esto me provoc en aquellos da a escribir al respecto varias razones en forma de folleto para que fueran utilizadas por los miembros de nuestra congregacin al ser hostigados por unicitarios que trataban de confundirlos. Estos razonamientos tienen ms de 15 aos de haber sido escritos. Edwin A. Recinos EL MISTERIO DE LA PIEDAD

Los unicitarios, o unitarianos como les llamo yo (ver Nota al pie), ensean que el Padre se encarn en el Hijo. De esa manera errada interpretan la Palabra de Dios cuando dice que Dios se manifest en carne. Cuando la Biblia nos habla del misterio de la piedad se refiere a la encarnacin del Verbo eterno. Hay quienes se burlan de la enseanza Bblica que nos muestra al Padre, al Hijo y al Espritu Santo como tres personas individuales, y quienes son el mismo Dios. Quienes esto hacen, o no han podido, o simplemente han escogido no entender la enseanza bblica. En 1a. Timoteo 3:16 se hace alusin al misterio de la piedad: "Y sin contradiccin grande es el misterio de la piedad, Dios ha sido manifestado en carne..." Quien es el que se ha manifestado en carne sino el Verbo Divino preexistente y coexistente en Dios desde la eternidad? Juan 1:1 dice: "En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios." El Verbo es Jesucristo, y su eterna existencia queda demostrada en este solo verso.

Recordemos que la Biblia no fue inspirada para confundir, sino para establecer claramente las verdades que Dios desea que todo hombre conozca.

La Biblia es muy clara. Si Dios dice en su palabra que en el principio el Verbo era con Dios, entonces esa es la verdad. Es el Verbo Divino, El Unignito, el que desde el principio era con Dios el que descendi y se encarn. Juan 1:14 dice: "Y aquel Verbo fue hecho carne, y habit entre nosotros (vimos su gloria, gloria como la del unignito del Padre), lleno de gracia y de verdad." Estos pasajes dejan bien claro lo siguiente: Primero, que Dios se encarn. Segundo, quien se encarn fue la persona del Hijo, el Verbo divino . Y tercero, se hace ver claramente que existe El Padre y el Hijo. No dice que el Padre se encarn, ni tampoco dice que el Verbo sea el Padre mismo, sino que fue el unignito Hijo del Padre quien se encarn. As, pues, queda establecido que el misterio de la piedad alude la encarnacin del Hijo de Dios, el Unignito del Padre, (El Verbo divino y eterno). LA DOBLE NATURALEZA El error unitariano, se refiere al Padre simplemente como una de las "naturalezas" de Jess, despojndole de personalidad propia. Esto tratan de establecerlo en su explicacin de "la doble naturaleza" de Jesucristo. Ciertamente ensear que el Padre sea solamente una "naturaleza" y no una persona es negar decididamente lo que el texto sagrado nos dice.

Todo cristiano debe conocer que Jess posea dos naturalezas, es decir, una naturaleza humana y una naturaleza divina. Una de esas naturalezas se refiere a su deidad y existencia eterna, y la otra a su humanidad, a partir de su encarnacin. Jess es el Verbo divino encarnado, el unignito Hijo del Padre, el cual desde el principio estaba con Dios y era Dios. Durante su ministerio terreno Jess se despoj a si mismo de su gloria divina y tom forma de siervo por lo cual lo veremos obrando como siervo en obediencia a la persona del Padre durante su ministerio. La naturaleza humana de Jess es aquella que comienza en Beln de Judea en donde el naci y creci como verdadero hombre y as ejerci su ministerio en la tierra. Por esa razn reconocemos que tan real es la naturaleza divina como la naturaleza humana del Seor Jesucristo. Todo esto lo establece claramente Filipenses 2:6-8: "..el cual, siendo en forma de Dios, no estim el ser igual a Dios como forma a que aferrarse, sino que se despoj a si mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en condicin de hombre se humill a si mismo..." La misma terminologa o lenguaje que usa la Biblia debera aclarar toda duda y confusin. Por qu cree Ud. que este verso dice que no estim ser igual a Dios? Puede Ud. darse cuenta que si se hablase del Padre no habra necesidad de decir que no estim ser igual? Quien es este que no estim ser igual a Dios

sino el eterno Hijo de Dios? Luego dice que se despoj a si mismo (de su gloria externa) tomando forma de siervo...semejante a los hombres, y estando en condicin de hombre se humill a si mismo. El Hijo eterno se despoj de su gloria externa y se encarn, y estando en esa condicin, como hombre, vivi, sinti, ministr, obedeci, sufri y muri como tal. No es que no haya podido asumir su gloria divina en cualquier momento, sino que escogi por amor a los que habra de salvar, vivir y morir en el calvario como el perfecto sustituto de la humanidad. en 1a. Timoteo 2:5 dice: "Porque hay un solo mediador entre Dios y los hombres; Jesucristo hombre." Dios es uno. Esta es la verdad que confirma la Biblia. Pero tan cierto es que hay un solo Dios como que existe El Padre, El Hijo, y El Espritu Santo, y los tres son parte de ese nico Dios. El Hijo es quien se encarn, y de quien dice la Biblia que es el nico mediador entre Dios y los hombres. Concluimos, pues, en que Jesucristo es verdadero Dios y verdadero hombre. Y en esto no debera haber confusin.

EL UNITARIANISMO PERSONALIDAD

NIEGA

LA

Una persona es un ser que posee y expresa individualidad, inteligencia, voluntad y

emociones propias, que acta individualmente y tambin interacciona con los dems. Escrituralmente, encontramos que el Padre, el Hijo, y el Espritu Santo son personas, ya que poseen y expresan individualidad, inteligencia, voluntad y emociones propias. Mas aun; interaccionan el uno con el otro. El unitarianismo pretende negar que el Padre y el Hijo sean personas, aunque tienen conciencia separada de si mismos de tal manera que hablan el uno con el otro, obedece el uno al otro, ruega el uno al otro, y ora el uno al otro. Pretenden que el Padre no sea sino solamente la naturaleza divina de Jess, y por ende el Hijo sea solamente la naturaleza humana, dejando al Espritu Santo en un cierto limbo, y negando lo que las Escrituras aciertan en el lenguaje mismo que revelan a la persona del Padre, y del Hijo y del Espritu Santo. Se ha puesto Ud. a pensar en que si uno tiene conciencia separada del otro, entonces se tienen dos personas? No puede Ud. ver que los evangelios nos muestran a Jess como el Verbo encarnado, enviado del Padre y que no son "naturalezas" sino personas tanto el Padre como el Hijo? Jesucristo naci, vivi y muri como hombre porque el es la encarnacin del Verbo eterno, el Hijo unignito del Padre. Por tanto es Dios y hombre. Su naturaleza divina y su naturaleza humana esta ampliamente establecida en la Biblia. Pero nunca se establece en la Biblia

que El Padre, El Hijo y El Espritu Santo sean tres "naturalezas" adentro de Jess. Tanto El Padre, El Hijo, y El Espritu Santo son escrituralmente personas, claramente manifestando su individualidad. Nuestro Dios es uno, y no hay otro fuera de el, las Escrituras destacan enfticamente la unidad divina del Padre, Hijo y Espritu Santo, pero nunca despojan al Padre, al Hijo o al Espritu Santo de la individual personalidad que claramente denota el lenguaje que se usa en los cuatro evangelios. Esa es la verdad. YO Y EL PADRE UNO SOMOS En Juan 10:30 leemos: "Yo y somos."Estableciendo el texto Hijo como el Padre son un aunque mantienen su individual el Padre uno que tanto el mismo Dios, personalidad.

Sin embargo, cuando el unitarianismo interpreta Juan 10:30"...Yo y el Padre uno somos...", tuerce el claro significado de las palabras no solo en este texto sino en todo el contexto en que se dieron. Usan estas palabras para asistir a la teora de que Jess es la misma persona que el Padre. Pero convenientemente han oscurecido el contexto en que se dieron estas palabras de Jess. En los versos 29 y 30 del mismo capitulo leemos: "Mi Padre me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. Yo y el Padre uno somos."

Al hablar de sus ovejas, Jess alude al Padre como aquel que se las dio. Puede Ud. distinguir a una persona de la otra? Luego sigue diciendo el Seor Jess que de la mano de su Padre nadie las puede arrebatar, y es entonces cuando expresa la unidad que hay entre el y el Padre, sin confundir la una persona con la otra, ya que claramente las reconoce individualmente. Jesucristo reafirma que hay un solo Dios aludiendo la unidad que hay entre el y El Padre. El Padre, El Hijo y El Espritu Santo son el Dios nico. Que hermosa verdad! Si la manera unitariana de interpretar textos fuera aplicada a otros pasajes, entonces tendran muchos problemas al interpretar el texto siguiente: "...para que todos sean uno; como t, oh Padre en m, y yo en ti, que tambin ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tu me enviaste. La gloria que me diste, yo les he dado para que sean uno, as como nosotros somos uno." Juan 17:21-22 La palabra uno en este texto se refiere obviamente a una unidad compuesta, y es la misma que se usa en Juan 10:30 en donde Jess afirma la unidad del Padre y el Hijo, pero sin desmentir a la persona de cada uno dentro de esa unidad. El Padre, El Hijo, y El Espritu Santo son tres personas y un mismo Dios. La unidad de los creyentes es de voluntad y armona con Dios, pero no puede decirse que

los creyentes todos son una misma persona, ya que cada creyente es una persona individual, aunque todos son parte de una entidad nica que es la iglesia. El Padre, el Hijo y el Espritu Santo son la unidad perfecta de un solo Dios. DIOS MIO, DIOS MIO.... En Mateo 27:46 leemos : "...Dios mo, Dios mo, Por qu me has abandonado?.." Cuando el unitarianismo trata de explicar este pasaje, se debate por encontrar la forma de explicar como una "naturaleza" le habla a la otra dentro de un mismo cuerpo.