LTERNO

numero 1 año 1

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Revista digital

EDITORIAL

DIRECTORIODiseño / Alejandra L. Naranjo Katya M. Pantoja

Edición / Alejandra L. Naranjo

Colaboradores / Ana Salazar Katya M. Pantoja Alejandra L. Naranjo

Correción / Jorge Rodríguez Castro

Darle vida a una revista hoy en día se parece tanto a parir en conjunto, como probar que uno no puede quemarse si deja la mano sobre la estufa. Lo sé, exagero un poco, pero estas analogías sirven para que se den cuenta del trabajo que nos ha costado este número, sobre todo si pensamos que la labor de parto ya tiene más de seis meses.

Somos un grupo joven que ama los gatos y nos desvivimos por la literatura, el cine, la tecnología y todo lo que tenga que ver con el arte. Quizá por eso creemos que nuestros lectores no pueden ser otros que los que la realidad nos hace llegar. Ojalá disfruten esta edición electrónica que aparecerá cada 15 días, esperamos que sin falta.

Atentamente: el grupo hermosísimo de Alterno

INDICE

Ojo Verde 3Sentido Alternativo 6

Applícate 9Círculo de ideas 11

Cartonera 14Lente alterno 15

JO ERDELa semana pasada, mientras navegaba por la

Internet, me topé con una revista (Organic Gardening Magazine) que trataba acerca de llevar una vida más saludable por medio de los alimentos orgánicos, entonces me pareció bastante interesante tocar el tema. No pretendo enseñarles a realizar todo un huerto en su patio trasero, ni técnicas para mantener sus hortalizas saludables. Ni yo misma soy experta en el tema. Pero mientras conocemos más sobre esto y aquello, no está de más saber dónde podemos encontrar productos orgánicos, como la soja texturizada, que no podemos obtener del patio trasero de nuestra casa (al menos que tengas un vivero-granja atrás de tu casa, entonces sí). Por eso me he tomado el tiempo de hacer una breve búsqueda de tiendas, o eventos que se realizan aquí en nuestro pequeño y bonito Colima, en los que podrás encontrar alimentos orgánicos y libres de transgénicos.

por Alejandra Naranjo

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“La Mercadería” es un pequeño, valga la redundancia, mercado que promueve el comercio local, tradicional y obviamente, orgánico. Se establece en el andador constitución del centro de Colima, afuera de la Artería, todos los segundos sábados de cada mes, desde la mañana hasta las 2:00 pm.

“Verde Colima” es un grupo ambientalista que promueve el cuidado y la protección del medio ambiente en conjunto con los ciudadanos y el gobierno. Cada segundo sábado de cada mes se colocan en el Parque de la Piedra Lisa de 4:00 pm a 8:00 pm, y si vives en Villa de Álvarez también puedes ir, porque se colocan en el Jardín de la Villa, el tercer sábado de cada mes, con el mismo horario.

Y si vives hasta Comala ¡No te apures! Porque también hay algo para los que viven más retirado de la urbe. El tianguis “La comuna” es perfecto para ir a surtirte de mermeladas y helados completamente naturales, puedes ir a tomar un rico café o simplemente a escuchar la música en vivo que te ofrecen en lo que te decides a comprar algo. Se establece en Nogueras, el último sábado de cada mes, de 10:00 am a 3:00 pm en el Centro Cultura Nogueras.

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Ahora, si no eres de esos que les gusta caminar o llevas una vida muy apurada, también tienes otra opción en Gaia Nutrición Organ, una tienda totalmente orgánica. Se sitúa en la Plaza San Carlos, en Colima, Colima.

No importa qué lugares visites o dónde compres tus productos, lo importante es que te asegures que son orgánicos, que no dañan al medio ambiente y que estarán en armonía con tu cuerpo. Los productos que consumimos hoy en día, están cada vez más invadidos por la “nueva tecnología” de los transgénicos y cada vez sabemos menos acerca de lo que realmente le estamos introduciendo a nuestro cuerpo. Pero no es imposible encontrar alimentos verdaderamente naturales, sólo es cuestión de saber buscar. Excusas hay muchas. Recuerda que para estar en tranquilidad con uno mismo, también se debe estar en sintonía con la naturaleza.

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Sentido lternativo

Febrero se torna un mes torturoso para los anti-san valentínes cuya tranquilidad mental sienten invadida por los bombardeos romanticursis que llegan desde la publicidad televisiva hasta el círculo social cotidiano, donde el anhelo de la llegada del catorce de febrero es más que inminente.

Cuando por fin es el día, uno se dispone a ver la tele y encontrar una buena película para matar el tiempo (solo o en compañía, si es que a su acompañante también le disgusta ese ritual de amor y amistad) se da cuenta que todo gira en torno a cupido y cuyo fastidio no puede ser peor .

En materia de cine, sería una buena ocasión recurrir a un pequeño maratón de películas clásicas, fuera de los parámetros del día de san Valentín. Aunque la fecha ya halla caducado, el mes sigue corriendo y la temática no cambia así que puedes aplicar esto para el próximo año.

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por Katya Pantoja

1.Un perro andaluz Francia, España.Dir. Luis Buñuel Act. S. Marevil, P. Batchell.

2. 2001: Odisea en el espacio Estados Unidos.Dir. Stanley KubrickAct. Keir Dulleu, Gary Lockwood

3. El padrino IEstados UnidosDir. Francis Ford CoppolaAct. Marlon Brando, Al pacino, J. Caan

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4.Pulp FictionEstados UnidosDir. Quentin TarantinoAct. Uma Thurman, John Travolta, Samuel L. Jackson, Bruce Willis

5. La Naranja MecánicaGran BretañaDir. Stanley KubrickAct. Malcolm McDowell, Adrienne CORRI, Patrick Magee

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APPlícate

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En esta ocasión te presento 5 aplicaciones que, si no cambiarán tu vida de manera positiva, por lo menos pasarás un buen rato.

Carrot Esta es una divertida aplicación que se encarga

de que termines tus pendientes por medio de un divertido juego. Es sencilla y fácil de usar, sobre todo porque si no llegas a lograr lo apuntalado, esta aplicación se enojará contigo y se pondrá de mal humor. No quieres que te griten, ¿verdad?

ShazamSi eres adicto a la música, ¡esta aplicación te

encantará! Es verdaderamente útil si quieres saber el nombre de alguna canción, o por ejemplo, el nombre del intérprete. Tiene un modo sencillo de operar que entenderás rápidamente. ¿Qué esperas para conseguirla?

por Ana Salazar

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Sleepbot/Sleepcycle¿Eres de esas personas a las que les gusta dormir?

Pues esta aplicación hará que tu sueño sea aún más placentero, te dará consejos útiles para dor-mir, además de que podrás poner música de rela-jación, marca tus horas, y detecta los movimientos.

Infinite storm¿Te gusta la paz, la meditación? Esta es una apli-

cación que está cien por ciento dirigida a la rela-jación, ya que simula los sonidos de la lluvia y lo mejor es que es completamente gratis. ¡Pruébala!

1Password LastPassEsta aplicación guarda todas tus contraseñas

en un solo programa, sólo tienes que recordar una contraseña y todas las demás estarán muy bien guardadas. Así que ya no hay excusas para olvidar tus contraseñas.

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CIRCUL DE IDEAS

¿A poco nunca pensaron que la vida puede ser como un chicle? Yo lo descubrí hace días cuando accidentalmente pisé un chicle en el patio de la escuela. Alcé la patita solamente para ver el horror de color rosa que se estremecía mientras mi zapato iba en subida. ¡Guácala!

Piénsenlo bien, la vida se parece tanto a los chicles. Hay un montón de variedades como de sabores, igual que las personas. De hecho, puedo asegurarles que mi vecina es una niña Bubbaloo, por su consistencia rellenita y su corazón de sabor a fresa; o qué tal la chica Trident de mi salón, con sus dientes blancos y su aroma a moras que me encanta; también he visto al tipo Clorets que fuma como chimenea, al skato Adams que se la pasa haciendo locuras, incluso, he pensado que yo podría ser un IceBreakers por lo chaparro y curiosito.

Lo que sí llama la atención es que, independientemente de la clase de chicle que seamos, siempre estamos destinados a la tragedia. Venimos al mundo a cumplir un propósito (¿el pretexto para un beso, disimular el aliento cuando comimos algo pestilente, calmar la ansiedad?), y una vez cumplido, somos reducidos a una bola gomosa que ha perdido todo el sabor.

“La vida como un chicle” por Tenoch Peregrino

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Piénsenlo un momento, somos arrojados al mundo una vez que el sabor se acaba. Y nos volvemos parias de ese mundo, el deshecho, la travesura de algún fulano. Entonces nos convertimos en villanos: nos pegamos al cabello de alguien, a la puerta de algún carro, a la suela del zapato de aquel infortunado que transita sin ver el suelo. Somos la desagradable sorpresa cuando nos tocan y todavía nuestro cuerpo de goma emana su asquerosa consistencia. Y viene la mueca de asco, el ceño se frunce y sólo queda apostar porque ese chicle no haya sido consumido por la persona más repulsiva de la tierra.

La vida hoy transcurre como un chicle. Mis pasos vacilantes son como los de aquel chicle pegado debajo del escritorio del profesor, ese chicle que es el perfecto testigo, pues reposa en la oscuridad: un chicle que aguarda el momento en que la mano se deslice por debajo y encuentre no sólo el horror, sino los vestigios de una historia. La vida transita como chicle y me intriga pensar: ¿Cuánto nos ha masticado la vida? ¿Aún tendremos sabor?

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“Los días”por Alejandra L. Naranjo

El día huele a palmera, a lienzo explayado. Los días huelen, como los retoños de flores, los árboles frescos y aire dulzón de las mañanas. Se levanta la marea, observo la espuma en la arena. El sol me agrieta la piel. El viento huele a sueños, a utopías y fantasías. Olfateo las conchas y siento en mis dedos la rugosa dureza de los cangrejos. Mis pies se hunden en la arena fría y maleable, un aire gélido recorre mi piel. Sonrío. Cierro los ojos; el día vuelve a oler a lo inexpresable. Pienso en Jalisco, en los rayos del sol que aterrizan agresivos, contra mi piel desprotegida. Pienso, sin estar consciente, en mis manos. Las muevo curiosa. Me desconozco. Mis mejillas se vuelven una cascada salada, me identifico con el mar de inmediato. El aire me acaricia los cabellos cafés y me levanto. Miro el reflejo del sol en el mar y medito en los días. Pienso que huelen a almohada empapada, a recuerdo húmedo, a cigarros y silencios eternos. Dejo mis huellas diminutas en lo inmenso de la arena, las cuento sin pensar en los números que pronuncio en mi mente. Una melancolía inexpresable me invade la columna vertebral. Cierro los ojos y mis comisuras se deforman hasta formar una débil sonrisa. El cielo me cae en las clavículas. Me desvanezco con el suspiro del viento sobre mi rostro…

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“Cedartianguis” por Miguel Pimentel

CARTONER

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LENTE ALTERN

Sin títulopor Yunuen Feregrino

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Sin títulopor Alejandra L. Naranjo

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