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DE PLAZA DE MAY0 ABUELAS PUBLICACIÓN DE LAS ABUELAS DE PLAZA DE MAYO POR LA IDENTIDAD, LA MEMORIA Y LA JUSTICIA AÑO XIX • Nº 177 • NOVIEMBRE 2018 La sala Martín Coronado del teatro San Martín fue el espacio elegido para una noche mágica. Abuelas, nietos, bisnie- tos, familiares y amigos de tantos años de lucha se reunieron para celebrar los 41 años de la Asociación. “Nos quisieron matar y nos sembraron”, dijo la Estela de Carlotto al millar de personas presentes en el auditorio, entre quienes había va- rias personalidades, pero sobre todo esos hombres y mujeres que hoy, gra- cias a la búsqueda incansable, pudieron recuperar su verdadera identidad y que han tomado la posta para encontrar a los otros 300 que aún no lo han hecho. Abrió la velada el querido León Gieco con su guitarra y su armónica, acompa- ñado al piano por Luis Gurevich. “Si hay alguien para quien cantarle es un honor, es para ustedes, gracias por invitar- me”, dijo León, que entre otros interpre- tó el tema que musicaliza el documental El Camino de Santiago, de Tristán Bauer —presente en la sala— sobre la desapa- rición, búsqueda y muerte de Santiago Maldonado. “No lo pensábamos hacer pero vi que está Sergio, el hermano de Santiago”, explicó León. “Cuenten con- migo siempre”, les dijo a las Abuelas al despedirse y Manuel Gonçalves, anima- dor del acto junto con Lorena Battistiol, bromeó: “Le escribiste una canción her- mosa a Juan (Cabandié), hay otros 127 nietos que estamos esperando una can- ción, entiendo que te vas porque ahora te vas a poner a escribir”. Luego siguió el tradicional repaso del año: la alegría de haber recuperado cuatro nietos; los fallecimientos, el re- cuerdo especial para Raquel Marizcu- rrena, una de las fundadoras de Abuelas y de Madres; los logros judiciales como las condenas del juicio sobre el Hospital Militar de Campo de Mayo, la revocación de la absolución del represor Eduardo Al- fonso y el juicio en el que en Paraná se juzgó a tres médicos responsables de las apropiaciones de los hijos de Raquel Negro y Tulio Valenzuela (ver pág. 3). También participó de la fiesta el actor Martin Slipak, integrante de Teatro por la Identidad y colaborador de Abuelas des- de que tenía 11 años, hace 19 años, cuan- do fue parte de la primera obra del ciclo, A propósito de la duda. Y la nieta Adriana Garnier, encontrada a fines del año pasa- do, subió al escenario junto con su abue- la Blanca para cantar “La cumparsita”. “Yo soy bastante audaz y ella me sigue”, dijo Blanca, de 87 años. “Estoy eterna- mente agradecida a las Abuelas, a todos los que hacen esto, gracias a ellas estoy acá y soy Adriana Garnier Ortolani, hija de Edgardo Garnier y Violeta Graciela Ortolani y nieta de Blanca”, remarcó Adriana en el que fue uno de los mo- mentos más emocionantes de la noche. A continuación fue el turno del coro Vocal consonante que cantó dos temas de Silvio Rodríguez y acto seguido entró a escena el trovador cubano quien cantó las clásicas Pequeña serenata diurna y otra que hacía mucho que no tocaba, Só- lo el amor, “para ellas”, dijo, “que cumplie- ron 41 años de amor perdurable”: “Sólo el amor convierte en milagro el barro / sólo el amor alumbra lo que perdura”. “Las lágrimas hay que transformarlas en lucha, en resistencia y en esperanza. Muchas de nosotras decimos gracias a pesar del dolor porque podemos dejar algo a la posteridad para que esta histo- ria no se repita, para el Nunca Más. Hay que tratar de revertir todo lo malo, sin violencia pero con una gran fuerza, la fuerza está en nosotros”, dijo Estela casi al final del acto. Por las y los desapareci- dos, por la lucha de las Abuelas, por Me- moria, Verdad y Justicia, el encuentro terminó con los sentimientos a flor de piel y todos cantando juntos la maravillo- sa canción de María Elena Walsh, Como la cigarra. (sigue en pág. 5) 41 ANIVERSARIO LA NIETA RESTITUIDA CLAUDIA DOMÍNGUEZ CASTRO CUENTA CÓMO VIVE EL JUICIO POR SU APROPIACIÓN Pág. 3 ESTELA DE CARLOTTO FUE LA INVITADA PRINCIPAL DE UN IMPORTANTE FORO DE DDHH EN EL PAÍS AZTECA Pág. 7 ETCHECOLATZ CONDENADO A PERPETUA POR LOS CRÍMENES COMETIDOS EN EL CENTRO CLANDESTINO PUENTE 12 Pág. 6 MENDOZA MÉXICO LESA HUMANIDAD “SÓLO EL AMOR ALUMBRA LO QUE PERDURA” Estela entrega el pañuelo de Abuelas a Silvio Rodríguez. MARIANO PORTAS Bajo el lema #41AñosDeAmor, Abuelas conmemoró su funda- ción en un acto que sirvió para juntar fuerzas y seguir trabajan- do para restituir la identidad a los nietos que faltan. “Muchas de nosotras decimos gracias a pesar del dolor por- que podemos dejar algo a la posteridad para que esta historia no se repita, para el Nunca Más” (Estela) El encuentro terminó con los sentimientos a flor de piel y todos cantando juntos la maravillosa canción de María Elena Walsh, Como la cigarra

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D E P L A Z A D E M A Y 0ABUELAS

PUBLICACIÓN DE LAS ABUELAS DE PLAZA DE MAYO POR LA IDENTIDAD, LA MEMORIA Y LA JUSTICIA

AÑO XIX • Nº 177 • NOVIEMBRE 2018

La sala Martín Coronado del teatro San Martín fue el espacio elegido para una noche mágica. Abuelas, nietos, bisnie-tos, familiares y amigos de tantos años de lucha se reunieron para celebrar los 41 años de la Asociación. “Nos quisieron matar y nos sembraron”, dijo la Estela de Carlotto al millar de personas presentes en el auditorio, entre quienes había va-rias personalidades, pero sobre todo esos hombres y mujeres que hoy, gra-cias a la búsqueda incansable, pudieron recuperar su verdadera identidad y que han tomado la posta para encontrar a los otros 300 que aún no lo han hecho.

Abrió la velada el querido León Gieco con su guitarra y su armónica, acompa-ñado al piano por Luis Gurevich. “Si hay alguien para quien cantarle es un honor, es para ustedes, gracias por invitar-me”, dijo León, que entre otros interpre-tó el tema que musicaliza el documental El Camino de Santiago, de Tristán Bauer

—presente en la sala— sobre la desapa-rición, búsqueda y muerte de Santiago Maldonado. “No lo pensábamos hacer pero vi que está Sergio, el hermano de Santiago”, explicó León. “Cuenten con-migo siempre”, les dijo a las Abuelas al

despedirse y Manuel Gonçalves, anima-dor del acto junto con Lorena Battistiol, bromeó: “Le escribiste una canción her-mosa a Juan (Cabandié), hay otros 127 nietos que estamos esperando una can-ción, entiendo que te vas porque ahora te vas a poner a escribir”.

Luego siguió el tradicional repaso del año: la alegría de haber recuperado cuatro nietos; los fallecimientos, el re-cuerdo especial para Raquel Marizcu-rrena, una de las fundadoras de Abuelas y de Madres; los logros judiciales como las condenas del juicio sobre el Hospital Militar de Campo de Mayo, la revocación de la absolución del represor Eduardo Al-fonso y el juicio en el que en Paraná se juzgó a tres médicos responsables de las apropiaciones de los hijos de Raquel Negro y Tulio Valenzuela (ver pág. 3).

También participó de la fiesta el actor

Martin Slipak, integrante de Teatro por la Identidad y colaborador de Abuelas des-de que tenía 11 años, hace 19 años, cuan-do fue parte de la primera obra del ciclo, A propósito de la duda. Y la nieta Adriana Garnier, encontrada a fines del año pasa-do, subió al escenario junto con su abue-la Blanca para cantar “La cumparsita”. “Yo soy bastante audaz y ella me sigue”, dijo Blanca, de 87 años. “Estoy eterna-mente agradecida a las Abuelas, a todos los que hacen esto, gracias a ellas estoy acá y soy Adriana Garnier Ortolani, hija de Edgardo Garnier y Violeta Graciela Ortolani y nieta de Blanca”, remarcó Adriana en el que fue uno de los mo-mentos más emocionantes de la noche.

A continuación fue el turno del coro Vocal consonante que cantó dos temas de Silvio Rodríguez y acto seguido entró a escena el trovador cubano quien cantó las clásicas Pequeña serenata diurna y otra que hacía mucho que no tocaba, Só-lo el amor, “para ellas”, dijo, “que cumplie-

ron 41 años de amor perdurable”: “Sólo el amor convierte en milagro el barro / sólo el amor alumbra lo que perdura”.

“Las lágrimas hay que transformarlas en lucha, en resistencia y en esperanza. Muchas de nosotras decimos gracias a pesar del dolor porque podemos dejar algo a la posteridad para que esta histo-ria no se repita, para el Nunca Más. Hay que tratar de revertir todo lo malo, sin violencia pero con una gran fuerza, la fuerza está en nosotros”, dijo Estela casi al final del acto. Por las y los desapareci-dos, por la lucha de las Abuelas, por Me-moria, Verdad y Justicia, el encuentro terminó con los sentimientos a flor de piel y todos cantando juntos la maravillo-sa canción de María Elena Walsh, Como la cigarra. (sigue en pág. 5)

41 ANIVERSARIO

LA NIETA RESTITUIDA CLAUDIA DOMÍNGUEZ CASTRO CUENTA CÓMO VIVE EL JUICIO POR SU APROPIACIÓNPág. 3

ESTELA DE CARLOTTO FUE LA INVITADA PRINCIPAL DE UN IMPORTANTE FORO DE DDHH EN EL PAÍS AZTECAPág. 7

ETCHECOLATZ CONDENADO A PERPETUA POR LOS CRÍMENES COMETIDOS EN EL CENTRO CLANDESTINO PUENTE 12Pág. 6

MENDOZA MÉXICO LESA HUMANIDAD

“SÓLO EL AMOR ALUMBRA LO QUE PERDURA”

Estela entrega el pañuelo de Abuelas a Silvio Rodríguez.

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Bajo el lema #41AñosDeAmor, Abuelas conmemoró su funda-ción en un acto que sirvió para juntar fuerzas y seguir trabajan-do para restituir la identidad a los nietos que faltan.

“Muchas de nosotras decimos gracias a pesar del dolor por-que podemos dejar algo a la posteridad para que esta historia no se repita, para el Nunca Más” (Estela)

El encuentro terminó con los sentimientos a flor de piel y todos cantando juntos la maravillosa canción de María Elena Walsh, Como la cigarra

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2 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * NOVIEMBRE 2018

El triunfo de Jair Bolsonaro en Brasil con-firma una vez más la avanzada de la de-recha en la región, pero esto no nos debe sumir en la desazón.

Las Abuelas sabemos de los avances y los retrocesos de la historia. A lo largo de 41 años de lucha, hemos padecido la desaparición y muerte de nuestros hijos, la apropiación de nuestros nietos, la per-secución política y la anulación de todas las garantías constitucionales.

Aún así, logramos el regreso de la de-mocracia, el juicio a las Juntas Militares y comenzamos a restituir la identidad a nuestros nietos y nietas. Más temprano que tarde volvimos a sufrir la burla del poder que premió a los genocidas con las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, y esto junto al crecimiento de la pobreza empujado por el neoliberalismo: ajuste e impunidad siempre han ido de la mano.

En ese contexto, no obstante, siempre acompañadas por otras organizaciones y tantos amigos solidarios, seguimos tra-bajando sobre la memoria de nuestro pueblo, sobre la necesidad de justicia y el reconocimiento de nuestros derechos.

Con los años llegaron los avances tan esperados: los derechos para las mayo-rías, la anulación de las leyes de impuni-dad y la posibilidad de juzgar a los crimi-nales de lesa humanidad, más de una dé-cada de políticas inclusivas…

No fue suficiente. Algo faltó. Hace tres años, en la Argentina, la oligarquía nue-vamente se adueñó del poder y se dedi-có a lo que sabe hacer: multiplicar sus privilegios a expensas de la miseria del pueblo. Lo mismo ha ocurrido en Brasil.

Amparada por un poder judicial cómpli-ce que atenta contra el normal funciona-miento de la democracia, la derecha bra-sileña dio primero el golpe institucional

contra la presidenta Dilma Rousseff y luego dejó fuera de carrera a Lula, el fa-vorito en las encuestas.

Bajo una acusación que no fue debida-mente probada, con irregularidades en todo el proceso, Lula se convirtió en pre-so político y fue proscripto. Su “crimen” fue tratar de erradicar la pobreza y el hambre en su país, buscar la justicia so-cial y la igualdad.

Nuestra región vive horas de incerti-dumbre y dolor. Puede resultar desola-dor, pero no hay otro camino que seguir luchando con la certeza de que el trabajo sostenido volverá a dar sus frutos, con-fiando en el valor de la palabra, en reco-nocernos en las otras y en los otros, en la comunicación como espacio de debate y construcción más allá de los medios ma-sivos de desinformación. Sigamos lu-chando.

A B U E LA SD E P L A Z A D E M A Y 0

COMISIÓN DIRECTIVAPresidentaEnriqueta Estela Barnes de CarlottoVicepresidentaRosa Tarlovsky de RoisinblitSecretarioAbel Pedro MadariagaProsecretariaAída KancepolskiTesoreraBuscarita Imperi RoaProtesoreroCarlos Leonardo Fossati

Vocales1° Sonia Herminia Torres de Parodi2° Carmen Ledda Barreiro3° Delia Giovanola de Califano4° Clelia Deharbe de Fontana 5° Manuel Gonçalves Granada6° Selva Lorena Battistiol7° Juan Pablo Moyano8° Miguel SantuchoOrgano fiscalizadorSabino Abdala FalabellaIntegrantes HonorariasBerta Schubaroff, Haydeé Vallino de Lemos y Luisa Bertrans de Barahona

MENSUARIOAño XIX, nº 177, noviembre 2018Registro de Propiedad nº 342098DirectoraEstela Barnes de CarlottoJefa de redacciónClarisa VeigaSecretario de redacciónGuillermo WulffRedacciónNatalia MonterubbianesiColaboradores permanentesRep, Pablo Wybert, Gabriela KoolenColaboran en este númeroIgnacio Sala / ANCCOM, Katy García

DiseñoRaúl Belluccia, Diego GorzalczanyFotosMariano Portas, Prensa Espacio Memoria y DDHH, Sebastián Balangione, Elvira Rec-chia, Julieta Colomer / ANCCOM, IBERO, Paula Sansone

Abuelas de Plaza de MayoVirrey Cevallos 592 PB 1 (CP 1097)Tel. 4384-0983 Mail: [email protected] CórdobaDuarte Quirós 545, piso 3, dpto. C, Edificio “El Foro” (C.P. 5000).Tel./fax (0351) [email protected] La PlataCalle 8 Nº 835, Galería Williams, piso 6, oficina 1 (C.P. 1900).Tel. 0221 4 25 [email protected] Mar del PlataBolívar 3053 7º “C”, edificio “Tango”. Tel. (0223) 4963029 [email protected] RosarioLaprida 563 - Of:CTel: (0341)4476776 //4484421Lunes y jueves de 10 a 19 hsMartes, miércoles y viernes de 10 a 14 [email protected] AyacuchoHugo Bauer; Sucre 2373, CP 7150Tel. 02296 45-1370; Cel. 0249 15421-4192

Centro de atención por el derecho a la identidadAv. Corrientes 3284 4º HTel.: [email protected] por la IdentidadEspacio Memoria y Derechos Humanos Av. del Libertador [email protected]

Comisión Nacional por el Derecho

a la Identidad (CONADI)

Dir. 25 de Mayo 552, 9° piso, CABA.

Tel. 011 4312 6684 / 0800 222 CONADI

E-mail: [email protected]

www.conadi.jus.gov.ar

Más información:

www.abuelas.org.ar/nodo

Región del Noreste Argentino (NEA)

Resistencia (Chaco): Gabriela Barrios,

453222/223,

[email protected]

Posadas (Misiones): Lucía Amarilla,

0376-154-336661, posadaskiss@yahoo.

com; Graciela Franzen, 03764-657790;

Yolanda Urquiza, 03764 688460/

4435664.

Formosa (Capital): Alejandra María Ca-

rrizo, (0370) 4428543, (0370) 4210084,

[email protected]

Región Patagonia Norte y Sur

Tolhuin (Tierra del Fuego): Andrea

Cervantes, (02901) 15476620,

[email protected]

Rawson y Trelew (Chubut): Claudio

Fernández, (0280)4632464,

[email protected]

Comodoro Rivadavia (Chubut): Darío Os-

car Mattei, 0297-154256605,

[email protected]

Cipolletti (Río Negro): Silvia Preiss,

(0299) 4782843,

[email protected] /

[email protected]

General Roca (Río Negro): Rita Rodrí-

guez (0298) 4423111, (0298) 4245102,

[email protected]

Viedma (Río Negro): Néstor Busso,

(02920) 15471923,

[email protected]; Oscar

Meilan, (02920) 15601737,

[email protected];

Guadalupe Gaitán, (0290) 15368202,

[email protected]

Neuquén (Capital): Cecilia Gianfrancis-

co, Mayra Peralta (0299) 15613 0080,

[email protected]

San Martín de los Andes (Neuquén):

Gabi Garibaldi, Calle Cnel Diaz 474 (al

fondo) (8370) San Martín de los Andes

Los Lagos del Sur (Río Negro): esta red

integra las ciudades de San Carlos de

Bariloche, Villa La Angostura y El Bolsón.

Mariana Bettanin, 02944-52-4790,

[email protected]

Esquel (Chubut): Graciela Rojana y Ma-

tilde Murúa, (02945) 15-469020,

[email protected],

[email protected]

Río Gallegos (Santa Cruz): Lic. Santiago

Puca Molina y DCV. Adrián Ariel Rosica,

(02966) 420486, [email protected].

ar, [email protected]

Santa Rosa (La Pampa): Rita Pais,

02954-665445, [email protected];

Marta Candia (02954) 556938,

[email protected]

Región del Centro

Santa Fe (Capital): Mónica Marraffa,

(0342) 4121276, (0342) 154478575,

[email protected];

Gustavo López Torres,

[email protected]

Bahía Blanca (Prov. Buenos Aires): Ana-

bel Bustos, (0291) 5740975,

[email protected]

Paraná (Entre Ríos): Registro Único de

la Verdad (Comisión Provincial de la Me-

moria), 0343- 4234310 (L a V, 7 a 13 hs.),

[email protected],

[email protected]

Baradero (Buenos Aires): Graciela Lagar

y Gabriela Dolcemelo, 03329-551904,

[email protected]

Tres Arroyos (Buenos Aires): Jorge Pou-

sa, (02983) 15-501976; Carlos Sánchez;

[email protected]

Azul (Buenos Aires): Luz Ramallo,

(02281) 15-405738; Dr. Francisco Saba-

lúa, [email protected],

[email protected]

Olavarria: SUTEBA Comisión por la

memoria, 02284442237,

[email protected]

Bolívar: Isabel Peralta, 0231415515213,

[email protected]

Región de Cuyo y Córdoba

Mendoza (Capital): Movimiento Ecumé-

nico por los Derechos Humanos (MEDH),

4230037, [email protected]

San Rafael (Mendoza): 0260-4421937/

0260 4564620, [email protected]

HIJOS San Rafael y General Alvear: Ja-

vier Fagetti, [email protected]

San Luis (Capital): Lilian Videla, (0266)

442-4156, [email protected]

San Juan (Capital): Marcela Oliva, 0264

154433471, marceoliva12@ gmail.com

Villa María (Córdoba): Jesús Chirino,

0353 155698132, [email protected]

Río Cuarto (Córdoba): Martín Capa,

(0358) 154826434 / (0358)

154329488,

[email protected],

[email protected]

Región del Noroeste Argentino (NOA)

San Miguel de Tucumán (Tucumán):

Alejandra García Aráoz, (0381)

4308068, [email protected]; Ca-

rolina Frangoulis (Comisión Hermanos

de HIJOS) 0381-156098278, (0381)

424-5400

Salta (Capital): Humberto Colautti,

(0387) 154667644,

[email protected]

San Salvador (Jujuy): Nora Ferreyra,

0388-4316128; 0388-4198438,

[email protected],

[email protected]

Catamarca (Capital): Noemí Toledo,

(0383) 154733321,

[email protected]

Santiago del Estero (Capital): María Jo-

sé Venancio, (0385) 15-5945994; Belén

Silvero, (0385) 15-4982416; Andrés

Argañaras (0385) 4975394,

[email protected]

RED POR EL DERECHO A LA IDENTIDAD

EDITORIAL

EL ÚNICO CAMINO ES SEGUIR LUCHANDO

Si tenés dudas sobre tu identidad, llamá a las Abuelas

011 4384-0983

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NOVIEMBRE 2018 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * 3

En agosto de 2015, Claudia Domínguez Castro supo que es hija de Gladys Castro y Walter Domínguez. Pudo saber, tam-bién, que nació en cautiverio en marzo de 1978 y que sus Abuelas viven, al igual que ella, en Mendoza.

Su padrino, el ex militar y agente de in-teligencia del destacamento 144 Segun-do Héctor Carabajal, fue quien la entre-gó al matrimonio compuesto por Julio Bozzo y Antonia Reitano, quienes la ano-taron como hija propia. Los tres están siendo juzgados por estos delitos.

Claudia supo tempranamente que no era hija de Bozzo y Reitano pero recién en la facultad sus dudas se hicieron más fuertes, cuando sus compañeros le pre-guntaban si no sería hija de desapareci-dos. “Fue la primera vez que realmente sentí esa palabra”, explicó ante el Tribunal. Pero, reconoció: “Tenía miedo hasta de buscar información. En esos años estaban las campañas de Abuelas y yo comencé a asociar toda la información que tenía”. Cuando la contactaron desde la CONADI a raíz de diversas denuncias, aceptó vo-luntariamente hacerse el análisis.

En Identidad en Construcción, el pro-grama de Abuelas que se emite por La Imposible, Claudia repasó su declaración en este nuevo juicio y las expectativas de acercarse a la verdad.

¿Cómo preparaste tu testimonio? No preparé mucho, fue contar lo que ha-bía sido mi vida hasta el momento de en-terarme. Ir resolviendo las dudas, o no resolverlas. Situaciones que se iban dan-do en el plano de mi “familia de crianza” que no me llevaron a hacerme un ADN de forma voluntaria pero sí a que en el

momento en que me llamaran por telé-fono para “invitarme” de manera volun-taria pudiera decir: “Bueno, listo, estas dudas que tuve durante toda la vida por distintos motivos tenían una lógica y un sentido”. A la verdad que tenía incorpo-rada, le puedo ir agregando más señales o dando significados a partir de otras co-sas que se van resolviendo, más que na-da con respecto al imputado Carabajal. Tenía dudas en el aire y las terminé de ratificar el primer día de audiencias cuando se leyó su legajo. A partir de ahí ya se resolvió el 50 por ciento. El otro 50 será parte de que él pueda hablar o no.

¿Qué has podido reconstruir?Más que nada el lugar que Carabajal ocu-paba dentro del aparato represivo. Él era C3, personal civil de inteligencia, agente secreto. Cosa totalmente contraria a las que les decía a sus hijos y que a mí me lle-gaba. Eso se fue ratificando también con las actividades un poco turbias o raras, como siempre le llamé a las que se dedi-caba pero sin saber fehacientemente cuáles eran, pero que estaban relaciona-das con actividades que esta gente si-guió haciendo aún en democracia. Por

ejemplo, recuerdo que trabajaba en un grupo que acompañaba camiones que no sé qué llevaban y terminó preso en San Rafael un tiempo. Esas cosas ilícitas que uno las interpreta ahora. En ese momen-to no sabía, era militar pero estaba de ci-vil. Ni siquiera los hijos podrían haber de-finido a qué se dedicaba el padre. Esas son las cosas que fui aclarando con el co-rrer de los días luego de mi ADN positivo. Esas son las actividades que tenían clara relación con mi entrega y también con to-da la impunidad posterior. De lo que re-cuerdo de la dictadura cívico-eclesiásti-ca, él pertenecía a una parroquia, era ca-tequista y ahí había muchas personas, incluyendo al abogado que ahora lo de-fiende. Compartíamos campamentos. Ahora algunos están detenidos, se co-mentaba que estaban ahí al cubierto. Son desilusiones. Durante muchos años per-tenecí a Acción Católica, fui a misa, hice campamentos, a mi primera hija la bauti-

cé e hice la comunión ahí. Ahora no pue-do creer dónde estuve metida, había un real encubrimiento.

Sin esta complicidad habría sido impo-sible tu apropiación.Claro, yo recuerdo una situación de que me presentó a uno de los curas en aquel momento, que creo que falleció, al que le dijo: “Esta es mi ahijada, de la que yo le hablé, ¿se acuerda?”. “Ah, sí”, contestó. Ahora entiendo el “ah, sí”. Él compartía la mesa familiar, traía gente que no sabía-mos quién era. Eso es lo que he ido agre-gando y ratificando.

¿Carabajal podría llegar a tener alguna información de cuál fue el destino de tus padres? Yo creo que sí, él debe saber desde el momento que los secuestran, al menos el destino de mi mamá hasta que me tie-ne. Pero generalmente, y también son sensaciones, las personas que dejaban un niño eran las que también habían par-ticipado. Éramos el botín en relación di-recta con ese secuestro, o con haber da-do información. Digo esto porque di-

ciembre es el mes en que secuestran a mis padres y es en ese mes que él les ofrece (a los apropiadores) por primera vez un niño que estaba a punto de nacer. Él relata que el papá había fallecido en un accidente y la mamá estaba por dar a luz pero no lo iba a cuidar.

¿Tu mamá estaba de seis meses?Sí, de seis meses. Él me estaba reser-vando para que fuera entregada.

Sabía claramente dónde estaba tu ma-má.Claro, sí. No sé si eso lo podrá decir. Tene-mos información de pasillo de que sus hi-jos están insistiendo mucho para que por favor diga la verdad. Sus hijos se están desayunando de todo esto también re-cién ahora. Tengo la suerte de seguir con el mismo vínculo y lazo a pesar del dolor con algunos que lo han podido entender, nos acompañamos cada uno desde su lu-gar. Otros no lo pueden aceptar y te su-ponen culpable. Uno respeta ese duelo que tienen que hacer ellos ahora.

Este juicio ayudará a comprender que hay responsables.Este juicio va a ser un antes y un des-pués. Yo estoy abierta. Hoy cuento una historia y mañana es totalmente distinta. Uno va agregando sensaciones, verda-des. Porque, por ahí, a pesar de que él no diga ciertas cosas hay otras verdades que van surgiendo en el camino, que es-cuchás de sus hijos o de otras personas que te van agregando información. An-tes no tuviste posibilidad de hablarlas.

MENDOZA

“ESTE JUICIO VA A SER UN ANTES Y UN DESPUÉS”La nieta Claudia Domínguez Castro declaró en el proceso contra su entregador, el ex agente de Inteligencia Segundo Héctor Ca-rabajal, y sus apropiadores, Julio Bozzo y Antonia Reitano.

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PARANÁ

MÉDICOS CONDENADOSEl Tribunal Oral en lo Criminal Fede-ral de la ciudad de Paraná condenó a Miguel Torrealday a nueve años de prisión, y a sus socios, David Va-instub y Jorge Rossi, a seis años, por la apropiación de los mellizos Valenzuela Negro.

“Es la primera vez que se juzga en Entre Ríos la responsabilidad civil durante la última dictadura cívico militar”, destacó la nieta restituida Sabrina Valenzuela Negro, quien aún sigue buscando a su hermano.

El 2 de marzo de 1978, Raquel Ne-gro dio a luz a los mellizos en el Hospital Militar de Paraná, en cauti-verio, pero a los pocos días fueron trasladados al IPP, propiedad de To-rrealday sus socios. La beba ingre-só como Soledad López y el niño como NN López.

“Carabajal pertenecía a una parroquia y ahí había muchas perso-nas, incluyendo al abogado que ahora lo defiende”

“Tenía dudas y las terminé de ratificar el primer día de audien-cias cuando se leyó el legajo de Carabajal”

La nieta Claudia Domínguez Castro.

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4 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * NOVIEMBRE 2018

En el Centro Cultural Córdoba, la filial lo-cal de Abuelas celebró un nuevo aniver-sario del nacimiento de la Asociación. En el escenario, Sonia Torres y Horacio Ver-bitsky fueron entrevistados por el perio-dista Alejandro Mareco, dialogaron so-bre el proceso de acumulación que, con avances y retrocesos, condujo al logro de políticas de memoria, verdad y justi-cia, y destacaron la importancia del mo-vimiento de derechos humanos.

Tras la presentación de Mareco, Sonia tomó la palabra: “Demasiados halagos para una sola persona —dijo—. Soy una de las tantas madres que perdieron a sus hijos y nietos. No soy una mujer he-roica. Soy una madre del pueblo a la que le robaron sus hijos y nieto”. Agregó que han pasado 42 años desde que empezó la búsqueda de su hija Silvina embaraza-da de seis meses y medio y su esposo Daniel Orozco, secuestrados y desapa-recidos durante la dictadura.

Sobre Verbitsky, Sonia contó que lo leía desde el principio en Página/12 y un día lo visitó en su estudio. “Pensaba que se-ría un lugar fastuoso, amplio, pero en realidad era más bien un refugio lleno de libros y una foto con Perón”, comentó, a lo cual el periodista y presidente del CELS señaló que ahora sumó la foto con Néstor Kirchner.

Verbitsky evocó que en aquellos años tenía contacto con la abogada de la filial de Abuelas, Marité Sánchez, y otros le-trados dedicados a los DDHH, como Ma-ría Elba Martínez, con quien realizaron una denuncia contra el arzobispo Raúl Francisco Primatesta por el robo de be-bés que fue cajoneada. 

“No hay duda de que la Iglesia es cóm-plice de la dictadura porque si hubiera salido a decirle a los militares que deja-ran de matar, no habría 30 mil desapare-cidos, 500 niños robados y 52 embara-zadas baleadas con sus niños en la pan-

za”, puntualizó Sonia y agregó: “Mi nieto cumplió el 14 de junio pasado 42 años. Y lo voy a encontrar antes de partir”.

Sonia relató que Madres y Abuelas de-jaron de lado las diferencias y priorizaron la búsqueda de sus hijos y nietos. “Tuvi-mos adversidades, pudimos zanjarlas, y aquí estamos. Nos gusta trabajar desde

el amor porque el odio no construye na-da”, enfatizó y recordó que Irma Ramac-ciotti y Otilia Lascano de Argañaraz, fa-llecidas, fueron cofundadoras de la filial de Abuelas.

La figura de Emilio Mignone, la tarea del CELS para desbloquear el silencio lo-cal y dar a conocer en el exterior lo que estaba pasando, la labor de la cordobesa Adriana Lesgart, la persistencia de las Madres, los hábeas corpus, el testimonio de Sara Solarz de Osatinsky, fueron al-gunos de los recuerdos que compartió Verbitsky, quien, tras analizar el actual período democrático, el Juicio a los Jun-tas y los objetivos del gobierno de Alfon-sín, opinó que se trató de “un proceso gradual, de acumulación que no cesó a pesar de todos los contratiempos”.

Precisó que cuando llegó a la presiden-

cia Néstor Kirchner había más de un centenar de militares detenidos y que fue la lucha de los organismos lo que le permitió llevar adelante su política de derechos humanos. Sonia, en tanto, con-tó que a veces les preguntan si son “kir-chneristas” y ellas responden que sí. Aun cuando tengan diferencias, “fueron los Kirchner los que nos escucharon y pu-sieron en marcha las políticas de memo-ria verdad y justicia”, sostuvo.

Sobre el final, ambos dejaron un men-saje para los jóvenes. Sonia manifestó que es “muy optimista”: “La prueba está en la última marcha del 24 de marzo donde las tres cuartas partes de las co-lumnas eran jóvenes. Y eso de alguna forma reivindica la lucha de nuestros hi-jos que ya no están”, resaltó. Para Ver-bitsky “ya se ha producido el relevo ge-

neracional, sobre todo en la mitad feme-nina de la sociedad”. “El movimiento iniciado por Ni Una Menos está llamado a modificar las relaciones de poder en la Argentina, del mismo modo que fue la aparición la clase obrera como actor po-lítico a partir del 17 de octubre de 1945, y la aparición del movimiento de dere-chos humanos desde la primera ronda de las madres en 1977”, expresó. El cie-rre del acto fue musical. La cantora Lu-ciana Juri interpretó un repertorio del fo-lklore latinoamericano que el público compensó con el aplauso.

Abuelas Córdoba realizó su conmemoración de estos 41 años de lucha con una entrevista abierta a Sonia Torres y Horacio Verbitsky.

“SOY UNA MADRE DEL PUEBLO A QUIEN LE ROBARON SUS HIJOS Y NIETO”

FILIALES

Sonia Torres y Horacio Verbitsky.

“El proceso de memoria, verdad y justicia fue gradual y no cesó a pesar de los contratiempos” (Verbitsky)

“Fueron los Kirchner los que nos escucha-ron y pusieron en marcha las políticas de memoria verdad y justicia” (Sonia)

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Poesía y DDHHEn el marco de los 41 años de Abuelas, en el Teatro El Alambique de la Ciudad de Buenos Aires se llevó a cabo la pri-mera jornada del ciclo “Poesía y Dere-chos Humanos” donde estuvieron pre-sentes la Abuela Delia Giovanola y la nie-ta restituida y legisladora porteña Victoria Montenegro, además organiza-dora del encuentro. El objetivo es “refle-jar cómo la poesía y la cultura son herra-mientas útiles para seguir la búsqueda de tantos nietos que aún falta encon-trar”. La velada inicial contó con la parti-cipación de los poetas Leandro Gabilon-do, Marta Loiácono y Patricia González López, quienes recitaron obras propias.

Nieto en la escuelaEl nieto restituido Guillermo Amarilla Molfino visitó la Escuela Nro. 10 del D.E 8vo. dentro del proyecto pedagógico “Tejiendo Identidades” que desde ESI, Formación Ética y Ciudadana, Ciencias Sociales y Literatura busca reflexionar sobre el derecho a la identidad. Junto a los docentes, los chicxs leyeron los tex-tos de Ovillo de Trazos e Identidades en-contradas publicados por #Abuelas, vie-ron producciones de Paka Paka y Canal Encuentro y reconocieron las formas de transmisión de la memoria familiar a tra-vés de la relación entre nietos y abuelos. Una bella experiencia para aplaudir y pa-ra compartir.

Historia oralLa Red por la Identidad de Esquel parti-cipó en las VIII Jornadas de Historia de la Patagonia en Viedma con la ponencia “La reconstrucción de la historia local con trabajos de memoria y de testimo-nios orales”, desde la cual se relató el trabajo de la Red para reconstruir la his-toria de Esquel durante el terrorismo de Estado. La identificación de dos desapa-recidos, la señalización de sitios signifi-cativos de la ciudad, las actividades ar-tísticas, culturales y deportivas —como La Carrera de Miguel—, entre otras ini-ciativas con la comunidad, formaron parte de la ponencia presentada por los integrantes del nodo esquelense.

Capacitación en MendozaOrganizado por Abuelas, el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos de Mendoza y la filial local de SADOP, se realizó el taller “Derecho a la Identidad. Una conquista irrenunciable”, coordina-do por la responsable de Educación de Abuelas, Irene Strauss, y los especialis-tas Pablo Salinas, Viviana Beigel, Adela Fernández, Graciela Volman y Alicia Boggia. La capacitación, que se exten-dió durante dos jornadas, estuvo dirigida a docentes pero abierta al público en general. Los asistentes entregarán próximamente sus trabajos para obte-ner el certificado con puntaje corres-pondiente.

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NOVIEMBRE 2018 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * 5

Fue una noche mágica, de abrazos, de recuerdo de las que ya no están y esperanza por los que aún nos falta encontrar. Música, palabras sentidas, muestras de apoyo e imágenes que nos quedarán en la memo-ria. Aquí un puñado de ellas.

41 AÑOS DE AMOR

ANIVERSARIO

León Gieco, junto al pianista Luis Gurevich, cantó temas como Cinco siglos igual y La memo-ria. También recordó su acercamiento a los organismos de derechos humanos en el retorno de la democracia y evocó la figura de Mercedes Sosa, referente artística y cultural de aquel momento. “¿Qué hicieron con Santiago?”, preguntó León antes de despedirse entre aplausos emocionados.

En uno de los pasajes más emotivos de la noche, Adriana Garnier Ortolani, la nieta 126, com-parte el escenario con su Abuela Blanca. Ambas ya habían sido las caras de nuestro último spot televisivo titulado “El abrazo”. En esta ocasión se animaron a un tango que fue ovaciona-do de pie por toda la sala y Adriana, al concluir, se refirió a la importancia de colaborar con la difusión y con la búsqueda.

La sala Martín Coronado del Teatro San Martín, con el hermoso dibujo de Viviana Bilotti en el escenario, desbordó de amor las dos horas y media que duró el acto. Lorena Battistiol y Manuel Gonçalves, maestros de ceremonia, agradecieron a las instituciones que ayudaron en el evento, recordaron a las Abuelas fallecidas y repasaron los logros conseguidos durante el último año.

Berta Schubaroff se divierte en la previa del espectáculo en el espacio asignado a familiares. Por allí pasaron también periodistas, amigos y curiosos que quisieron compartir y estar cerca de las Abuelas en su día. Rosa, Buscarita, Chela, Delia, Sonia, Ledda, Aída, Alba, Estela, las Ma-dres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, Lita de Familiares y el resto de los organismos, todas y todos estuvieron en el teatro.

Martín Slipak y su desopilante monólogo que fue parte del ciclo 2017 de Teatro por la Iden-tidad. Titulado “Estar en cartel” y escrito por Alejandro Lifschitz, su texto, brillantemente interpretado, se ríe de los clichés que nos habitan en estos tiempos de redes sociales e insa-tisfacciones permanentes. En reconocimiento de su colaboración, Martín recibió el simbólico pañuelo de las Abuelas.

El trovador Silvio Rodríguez confesó que aún siente temor al subir a escena y afirmó que la invitación a participar del festejo le resultaba un honor y que se sentía muy emocionado. La política apareció en su música con “Viene la cosa” —“Y la cosa en el mundo viene mal”, dejó en claro— y “Tonada del albedrío”. La gente lo despidió de pie en lo que fue un adelanto de su multitudinario show en Avellaneda.

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6 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * NOVIEMBRE 2018

Por Ignacio Sala / ANCCOMEl primer juicio a represores por los crí-menes cometidos durante la última dic-tadura cívico militar en Puente 12 y Co-misaría de Monte Grande, Partido de Es-teban Echeverría, llegó a su fin. La causa investigó los delitos de lesa humanidad cometidos contra 125 personas entre 1974 y 1977, 64 de las cuales permane-cen desaparecidas. Los imputados que llegaron al banquillo fueron: Miguel Os-

valdo Etchecolatz, José Félix Madrid, Guillermo Horacio Ornstein, Ángel Sa-lerno, Carlos Alberto Tarantino, Federico Antonio Minicucci, Nildo Jesús Delgado, Alberto Faustino Bulacio y Daniel Fran-cisco Mancuso. Otros cinco fallecieron antes del debate oral y uno fue apartado por incapacidad.

Etchecolatz y compañía recibieron una catarata de abucheos al ingresar a la sa-la AMIA mientras que retratos de sus víctimas los miraban desde las sillas. Luego de las formalidades, el juez co-menzó a leer una casi interminable lista de crímenes perpetrados por los impu-tados. Inimaginables, estremecedores.

“Se condena a Miguel Osvaldo Etche-colatz a la pena de prisión perpetua”. Fue la primera sentencia leída por el tri-bunal. Erguido e impaciente, Etcheco-latz besaba un crucifijo al escuchar su veredicto. “Homicidios agravados por alevosía y premeditación; violaciones

sexuales y abusos deshonestos reitera-dos; privaciones ilegales de la libertad; torturas, amenazas y tormentos; perse-cuciones seguidas de muertes”. La sala se fundió en aplausos y abrazos. Familia-res, allegados, militantes y hasta periodis-tas unidos por el alivio y la sensación de —siempre insuficiente y tardía— justicia.

Federico Minicucci, ex jefe de Infante-ría de La Tablada, también recibió per-petua por ser autor del secuestro de 14 personas, un homicidio y reiteradas vio-laciones. Luego fue el turno de los ofi-ciales de Monte Grande: Nildo Delgado, siete años y seis meses; Alberto Bulacio, ocho años, y Daniel Mancuso, seis años, por el secuestro y desaparición de 13 personas.

El tribunal absolvió de todos sus car-gos a José Félix Madrid y Guillermo Ornstein, ex subinspectores de la Policía de Buenos Aires, como también a Car-los Alberto Tarantino y Ángel Salerno,

agentes de la fuerza. “¡Qué vergüenza! ¡Cómplices! ¡Corruptos! ¡Inoperantes!”, gritaron los presentes. Los silbidos, en señal de reprobación, fueron un trémolo.

“Una sentencia salomónica. Por un la-do, se condenó a Etchecolatz y Minicuc-ci con todo el rigor que corresponde. Y un trato diferenciado para con el resto, cuyos crímenes no son considerados de lesa humanidad”, explicó el abogado querellante, Pablo Llonto. Justicia e im-punidad en un mismo veredicto.

Para Miguel “el Tano” Santucho, por su madre, Cristina Navajas y su tía Manuela Santucho, desaparecidas en julio de 1976, se consiguió justicia. Los de Cris-tina y Manuela fueron casos que decan-

taron en la condena de Etchecolatz. Sin embargo, tanto él como la totalidad de los presentes en Comodoro Py subra-yaban en cada diálogo la injusticia por las cuatro absoluciones.

“Fue una tomada de pelo. Se trataron de causas con más de cien víctimas y condenaron sólo a dos genocidas. Con otros tres fueron laxos y absolvieron al resto. Pero vamos a seguir, como lo hici-mos siempre. Es importante que la so-ciedad sepa qué hicieron. Que el país sea su cárcel, esa es la verdadera con-dena”, afirmó Santucho, quien además busca a su hermano nacido en cautive-rio. Diez de las 125 víctimas de este jui-cio se encontraban embarazadas al mo-mento de su secuestro. Los acusados no sólo no se arrepintieron de sus crí-menes, sino que tampoco brindaron in-formación sobre el paradero de esos ni-ños y niñas, hoy hombre y mujeres, que sus familias aún continúan buscando.

LESA HUMANIDAD

SABOR A POCO EN COMODORO PYEn la causa Puente 12 el TOF 6 condenó a cinco genocidas pero otorgó la absolución para otros cuatro. Secuestros, violaciones, homicidios y desapariciones al por mayor.

Etchecolatz recibió una catarata de abu-cheos al ingresar a la sala mientras que los retratos de sus víctimas lo miraban desde las sillas

“Se trató de causas con más de cien vícti-mas y condenaron sólo a dos genocidas, con tres fueron laxos y absolvieron al resto” (Santucho)JU

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Brigada de San JustoEn La Plata sigue su curso el juicio por los delitos de lesa humanidad cometi-dos en el centro clandestino Brigada de San Justo. El Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nro. 1 de esa ciudad escuchó tres declaraciones vinculadas con el se-cuestro y la desaparición de Mónica Ma-ría Lemos y Gustavo Antonio Lavalle: las de Adriana Herminia Lavalle y Ariel Fran-cisco Lavalle —hermanos de Gustavo— y de la sobreviviente Liliana Mabel Zam-bano. Mónica, embarazada, y Gustavo, fueron secuestrados con su hija María, de un año y tres meses, el 21 de julio de 1977, y llevados a la Brigada. Mónica dio a luz en los primeros días de septiembre de 1977 en el Pozo de Banfield. Su hija recién nacida, María José, fue apropiada y recuperó su identidad en 1987.

Conversatorio internacional“DDHH en el derecho internacional y el valor del testimonio en instancias judi-ciales y su aplicación en museos de me-moria”, así se tituló el panel realizado en la Casa por la Identidad del que partici-paron el juez Sergio Torres, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Co-rreccional Federal Nº 12, a cargo de la in-vestigación de la Megacausa ESMA, y el jurista Emmanuel Decaux, profesor emérito de Derecho de la Universidad Panthéon-Assas Paris II y miembro del Comité contra las Desapariciones Forza-das de la ONU. “A los países que intenta-ron olvidar sus crímenes no les fue bien, las consecuencias del pasado afectan el presente”, subrayó Decaux. La mesa con-tó con la moderación del coordinador del equipo jurídico de Abuelas, Alan Iud.

Homenaje en ChacoMarcela Molfino y Guillermo Amarilla, y su hermano Rubén Amarilla, secuestra-dos el 17 de octubre de 1979 y desapa-recidos, serán recordados en las dos pri-meras “Esquinas de la Memoria” en Re-sistencia. Guillermo, hijo de Marcela y Guillermo, cuya identidad le fue restitui-da en 2009, participó del reconocimien-to junto a otros familiares y referentes de DDHH. Mauricio, uno de los herma-nos de Guillermo, sostuvo: “Elegimos este recordatorio para nuestros viejos junto con el tío Juanca, porque las esqui-nas son un punto de encuentro, donde se juntan los amigos, y una referencia para ubicarse, y las ‘Esquinas de la Me-moria’ tienen ese significado, se trata de la posibilidad de encontrarse con los amigos, los amores, en una identidad y dirección”.

Insólita decisiónAbuelas lamentó a través de un comuni-cado las declaraciones del intendente de la localidad santafesina de San Gena-ro, Gastón Marconcini, quien aseguró que vetaría la ordenanza que denomina “Abuelas de Plaza de Mayo” a una plazo-leta de la ciudad, desconociendo la vo-luntad del Concejo Deliberante. Lleva-mos 41 años de búsqueda pacífica y amorosa. Nos resulta ofensivo que el je-fe comunal utilice el instrumento del ve-to para pasar por encima de la decisión de otro poder del Estado. Esperamos que revea su postura y aproveche la oportunidad para explicar a su comuni-dad la importancia de sostener viva la llama de la memoria y sumar su granito de arena para el encuentro de los casi 300 hombres y mujeres que aún viven con una identidad falsa.

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El genocida Etchecolatz junto al resto de los imputados.

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NOVIEMBRE 2018 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * 7

En el marco del 75° aniversario de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México (Ibero), la titular de Abuelas Es-tela de Carlotto fue la oradora central del 13° Foro de Derechos Humanos. En la casa de estudios jesuita, su participa-ción resultó inspiradora para la comuni-dad educativa. A continuación, los prin-cipales pasajes de su conferencia “Bús-queda de verdad y justicia a través de las décadas. ¿Cómo enfrentar y termi-nar con la práctica de la desaparición forzada en América latina?”.

“Hacía seis meses que nuestras her-manas, las Madres de Plaza de Mayo, habían convertido la orden policial de ‘circular’ en ‘la ronda de los jueves’. Pero aquel jueves de 1977 una madre pregun-tó: ‘¿Quién está buscando a su nieto o tiene a su hija o nuera embarazada?’. Un grupo comprendimos que debíamos or-ganizarnos para buscar a los hijos de nuestros hijos y fundamos Abuelas de Plaza de Mayo.

Presentamos escritos, recorrimos or-fanatos, nos entrevistamos con autori-dades. La respuesta fue el silencio. Mientras la dictadura agitaba su campa-ña ‘los argentinos somos derechos y hu-manos’, las Abuelas aportamos archivos a la nómina de 5.566 casos de desapari-ción que todos los organismos eleva-mos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA. Y nos lanzamos al mundo a difundir nues-tra búsqueda.

Los datos que recogíamos demostra-ron la existencia de una práctica siste-mática de apropiación de bebés. El 19 de marzo de 1980 logramos nuestra prime-ra restitución. Entre 1980 y 1983 locali-zamos a cinco niños más. A la vez inicia-mos averiguaciones para saber si existía algún elemento de la sangre que permi-tiera probar la pertenencia familiar de un individuo.

En Estados Unidos visitamos a un gru-po de científicos. ‘Lo que piden es posi-ble, pero nunca se hizo’, nos dijeron. Un año más tarde, con la ‘primavera demo-crática’ en la Argentina, habían logrado la técnica para identificar a nuestros nietos.

En 1994 se sancionó en Argentina la ley N° 24.321 que incorporó la figura de ‘desaparición forzada’ en la legislación. Fue un hito importante en un largo cami-no de los organismos no sólo de mi país sino de toda la región.

Ya en 1981 quedó constituida la Fede-ración Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos Desapareci-dos (FEDEFAM), siendo Abuelas miem-bro fundador e integrante hasta hoy.

Avanzamos comprendiendo la grave-dad de la desaparición forzada y con ella la violación de otros derechos. Durante los años 80, nuestras iniciativas logra-ron resoluciones de la OEA, de la ONU,

del Consejo de Europa, hasta que en 1992 la ONU adoptó la Declaración so-bre la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas. En el medio, en 1994, América se convirtió en la primera región en contar con una Convención contra las desapariciones.

Han sido pasos vitales pero insuficien-tes. Los casos del pasado —que para quienes buscamos desaparecidos con vida es presente— en buena parte no han sido resueltos, y ante los casos ac-tuales, vemos que los Estados no han adoptado las medidas necesarias.

Entre las causas de esta persistencia de las desapariciones está la falta de-mocratización de las Fuerzas de Seguri-dad así como la intervención de las FFAA en seguridad interior. Además continúan existiendo sistemas judiciales que, en vez de investigar, encubren. La impunidad es un incentivo para que con-tinúen los crímenes. Ustedes, en Méxi-co, lo saben bien.

La pregunta de esta charla es una pre-

gunta sobre cómo terminar con la impu-nidad. Lo fundamental es la organización y unidad de las víctimas. También es im-prescindible que estas luchas no que-den solo en los familiares. Tenemos que quebrar la indiferencia. La solidaridad in-ternacional es un pilar fundamental.

Es indispensable buscar alternativas legales. Si la justicia rechaza las denun-cias, debemos volver a presentarlas. En Argentina, en 1998 conseguimos que el ex dictador Videla fuera detenido por haber montado un ‘Plan Sistemático de Apropiación de Niños’.

Quiero detenerme en esta experiencia. En 1985, Videla y los ex dictadores fue-ron condenados en el ‘Juicio a las Jun-tas’, aunque no por todos sus crímenes. Nosotras ya buscábamos 500 nietos, pero la justicia, con sus arbitrariedades, solo consideró 11 casos. Los jueces ab-solvieron a los genocidas por las apro-piaciones porque consideraron que eran... ¡muy pocos casos!

Luego vinieron las leyes de impunidad, pero éstas no amparaban el robo de ni-ños. Así, durante años, paradójicamente las únicas desapariciones que continua-ban investigándose eran las de nuestros nietos. Hasta que un día, un grupo de abogados nos propuso abrir una nueva causa contra Videla por la apropiación de nuestros nietos. Ahora se trataba de decenas, nadie podría decir que eran ca-sos aislados.

La impunidad había dejado un resqui-cio. Sin embargo, para que terminara de caer, faltaba el impulso político que llegó cuando Néstor Kirchner asumió la presi-dencia en 2003. Esto permitió que el Parlamento y la Corte ordenaran reabrir las investigaciones por nuestros 30.000 desaparecidos.

Cuando dimos nuestros primeros pa-sos no teníamos idea que estábamos construyendo un derecho. A medida que avanzamos, aparecieron problemas que tratábamos de solucionar. Cada solu-ción, a su vez, traía nuevos interrogan-tes. Y así, sin proponérnoslo, fuimos de-sarrollando las herramientas que hoy están disponibles para la garantía del derecho a la identidad en todo el mundo.

Pero no sólo hemos obtenido avances a nivel normativo. Logramos la creación de un Banco Genético; conseguimos nuevos métodos de identificación a tra-vés de ADN; creamos un Archivo Bio-gráfico Familiar para preservar las histo-rias de los desaparecidos, un área que acompaña a las personas con dudas so-bre su origen, un Centro de Atención por el Derecho a la Identidad...

Párrafo aparte merece la política co-municacional de nuestra institución. Por un lado, nuestro objetivo es que se acer-quen los nietos que estamos buscando. Y por otro, lograr la conciencia social so-bre el delito de la apropiación y la nece-sidad de Memoria, Verdad y Justicia pa-ra asegurar la no repetición de los crí-menes. Ha sido un trabajo de docencia, tejiendo redes, articulándonos, aprove-chando espacios y generando nuestros propios medios.

Hoy nuestra experiencia, como la de tantas organizaciones hermanas, puede ser adaptada a las distintas realidades donde tristemente se siguen cometien-do crímenes gravísimos.

El panorama en la región no es alenta-dor. El triunfo en Brasil de un candidato de ultraderecha ha sido un duro golpe. Se están afianzando regímenes que no ofrecen ninguna garantía a los más des-poseídos y que cercenan nuestras de-mocracias.

Son tiempos peligrosos y preocupan-tes. Debemos mantenernos alertas y fir-mes en nuestras convicciones, no pode-mos permitirnos retrocesos en dere-chos humanos. Por nuestros pueblos y por la memoria de nuestros hijos, segui-remos luchando. No estaremos solas. Somos millones las y los que queremos un mundo más justo, en paz, donde el amor le gane al odio.

“Cuando dimos nues-tros primeros pasos no teníamos idea que estábamos constru-yendo un derecho”

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La presidenta de la Asociación disertó en México sobre la lucha de los organismos en América latina contra la práctica de la desaparición forzada.

CONFERENCIA

“LA IMPUNIDAD ES UN INCENTIVO PARA QUE CONTINÚEN LOS CRÍMENES”

“Avanzamos com-prendiendo la grave-dad de la desapari-ción forzada y con ella la violación de otros derechos”Estela durante su conferencia.

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8 * ABUELAS D E P L A Z A D E M AY O * NOVIEMBRE 2018

Nuevamente, el Espacio Memoria y De-rechos Humanos formó parte de la tradi-cional Noche de los Museos, y allí, la Ca-sa por la Identidad de Abuelas abrió sus puertas para que la gente pueda cono-

cer nuestra lucha.A las muestras permanentes que rela-

tan cada aspecto del trabajo institucio-nal, se sumó “Participación + Identidad = Escuela Pública”, un proyecto realizado por alumnos y docentes de Educación Plástica de los distritos 19 y 21 de la Ciu-dad de Buenos Aires que incluyó una instalación en la planta alta de la Casa con dibujos y fotografías de los chicos, y la proyección en el auditorio de una bella y dura animación realizada por ellos mis-mos, con ayuda de la Escuela de Cine de Avellaneda, acerca del bombardeo a Pla-za de Mayo de 1955, un crimen de lesa

humanidad que sigue impune. “Hay es-peranza”, afirmó la nieta restituida Victo-ria Montenegro al culminar la presenta-ción del proyecto junto a sus coordina-dores y a sala llena.

Mientras tanto, en otra sala, se desa-rrollaron partidas simultáneas de aje-drez, abiertas al público, con el cierre musical del grupo “Tocada movida” y sus divertidas canciones alusivas al juego-ciencia. En el hall de entrada, integrantes de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad distribuyeron materiales del organismo a lo largo de toda la noche, al igual que los colaboradores de Abuelas que ofre-

cieron a los visitantes las publicaciones y los pines institucionales.

A las 21.30 se exhibió el documental El camino de Santiago, de Tristán Bauer, sobre la desaparición y muerte de San-tiago Maldonado. La nieta Lorena Battis-tiol, junto a Giselle Tepper, de Hijos Capi-tal, presentaron la película junto al guio-nista Omar Quiroga y el productor Juan Chávez. “Díganle a otras personas que la vean”, pidió Quiroga a los espectadores para seguir haciendo funcionar el “boca en boca” –no se estrenó en el circuito comercial– y que el mensaje le pueda lle-gar a más personas aparte de las 40 mil que ya la vieron. “Ojalá mucha más gente la pueda ver”, dijo Lorena Battistiol, al término del filme, “y ojalá algún día po-damos saber la verdad”.

Además de la Casa por la Identidad, se sumaron a la Noche de los Museos el Centro Cultural Haroldo Conti, el Sitio de Memoria ESMA, la Casa de la Militancia de Hijos, el Archivo Nacional de la Me-moria y el ECuNHi. Luego de la intensa lluvia que cayó sobre la zona metropoli-tana todo el sábado, miles de jóvenes y familias con niñas y niños recorrieron el predio, cuyos trabajadores aprovecha-ron la jornada para dar visibilidad a la si-tuación de ajuste y desfinanciamiento que viene aplicando el Gobierno nacio-nal sobre el Espacio Memoria.

NOCHE DE LOS MUSEOS

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MILES DE PERSONAS VISITARON LA CASA POR IDENTIDAD Muestras, películas, música y hasta ajedrez, por quinto año con-secutivo el espacio de Abuelas en la ex Esma recibió a visitantes de todas las edades comprometidos con la memoria.

“Ojalá mucha más gente pueda ver El camino de Santiago y ojalá algún día poda-mos saber la verdad” (Lorena Battistiol)

“Tenemos una búsqueda urgente”, escribió Lorena en una instalación.

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TXI EsquelEl grupo de Teatro por la Identidad Es-quel realizó dos presentaciones de Epí-grafes, de Pedro Patzer, en la Comarca Andina del paralelo 42. Una de las fun-ciones fue en la Escuela 788 del Paraje Entre Ríos, en la localidad de Lago Puelo, en el marco de las jornadas artísticas Es-TuArte. Al día siguiente la obra tuvo lu-gar fue en el bar La Torre café con feria, que depende de la cooperativa de traba-jo Empresa Social de Salud Mental. La Red pudo de esta manera seguir acer-cando el mensaje de Abuelas a más co-munidades de la Patagonia.

Abuelas en OhioColumbus, capital de Ohio, fue sede de una serie de actividades por el derecho a la identidad y la búsqueda de los nietos. Organizadas por la Red de Canadá/EU, incluyeron la exposición de la muestra “La Lucha Escrita: la solidaridad extran-jera puesta en palabras”, charlas para los estudiantes, la proyección del documen-tal ¿Quién soy yo? y el panel “Derechos Humanos e Identidad” con la presencia de académicos del Columbus State Community College y Héctor Rombola, referente de la Red e impulsor de la muestra de cartas.

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