Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

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Revista de la Provincia "Nuesta Señora de la Esperanza" de los Hermanos de la Sagrada Familia en Argentina y Uruguay. Noticias y registro de varias de las actividades realizadas en la Provincia. En este número: II Encuentro de la Familia Sa-Fa, mensaje a los Hermanos del XVI Encuentro del Consejo General con los Hnos. Provinciales, ordenación sacerdotal del Hno. Juan Carlos León, pascua del Hno. Francisco Godino, 50 años de Vida Religiosa de los Hnos. Victorino Lázaro y José María de la Fuente, distinción “Divino Maestro” al Hno. José Lahoz, manantial “Hno. Adelsio”, Misa de Acción de Gracias por los 150 años de la Pascua del Fundador y los 125 años de los Hermanos en Uruguay, reunión de las Fraternidades Nazarenas, jornada de Directivos y Equipos de Animación, Caminos Nazarenos, XIX Encuentro de Catequistas Sa-Fa, InterSaFa 2014, AJEN 2014, “De cara al viento”, 10 puertas en la vida del Hno. Gabriel, ...

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Revista de la Provincia

Nuestra Señora de la Esperanza

diciembre de 2014

año IV - Nº 7

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I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

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Nos habla el Hermano Provincial

a portada de nuestra Revista “Esperanza” nos trae

una imagen que se nos ha vuelto familiar a lo largo

de este año jubilar del 150º aniversario de la Pascua

de Gabriel, nuestro Fundador, y de los 125º de la lle-

gada de su carisma a las orillas del Plata.

Múltiples y variadas han sido la formas de cele-

brarlo en nuestras Comunidades educativas. Cele-

braciones llenas de cariño y de amor con la que cada

comunidad o grupo Sa-Fa, cada aula o Colegio, quiso

dar a conocer la figura y presencia de Gabriel en la

historia y, consiguientemente, los motivos de agrade-

cimiento al Padre, por habernos dado tal Fundador e

iniciador del carisma que nos congrega y envía hoy a

transformar nuestro mundo por la educación y la li-

turgia.

Larga sería la lista de estas emotivas y hasta ori-

ginales expresiones, que van desde clases abiertas

con trabajos y dibujos conmemorativos; producciones

conjuntos de padres y alumnos; patios y galerías re-

bosantes de dibujos y murales alusivos; sentidas Eu-

caristías en templos o al aire libre; producciones

artísticas y literarias; placas y monumentos, hasta la

original producción de un cortometraje que más bien

terminó en largometraje de 90’ producido por un

grupo de alumnos convertidos todos ellos en circuns-

tanciales actores.

La presente entrega de la Revista da cuenta de al-

gunos de estos actos aunque seguramente faltarán

muchos, gracias a Dios, porque abundante ha sido la

manifestación de la vida. El hermoso Encuentro de la

Familia Sa-Fa en San Antonio de Arredondo, Córdo-

ba, fue una digna celebración provincial que llenó de

gozo, paz y sano fervor carismático a los afortunados

participantes.

Al mismo tiempo, recibíamos una extensa e ins-

pirada carta del Hno Juan Andrés Martos, nuestro

Superior General. En la misma, se nos invitaba a

acercarnos a la persona de Gabriel que –como él

mismo lo explicita– va más allá del mero conoci-

miento de su vida y de su obra. Se expresa en el

afecto, el sentimiento y la intuición que nos permite

sintonizar con su persona, asumir el proyecto que

Dios le inspiró y hacerlo presente en el mundo de

hoy.

Este “acercarse a su persona” va complementado

con una serie de “acercamientos” que son consecuen-

cia de aquel: acercarnos al carisma, acercarnos a su

modo de seguir a Jesús y a la Iglesia, acercarnos a la

manera de mirar del Hno. Gabriel, a la vida de los

Hermanos y laicos Sa-Fa que nos han precedido,

acercarnos a los niños y jóvenes, acercarnos a la fa-

milia.

Al año jubilar, que ya culmina, se le suman otros

motivos de agradecimiento como la pascua del Hno.

Francisco Godino celebrando la plenitud de su con-

sagración a los 81 años; el Encuentro de Provinciales

con el Superior General y su Consejo en Ambato

(Ecuador); la ordenación sacerdotal del Hno. Juan

Carlos para el servicio de nuestras Comunidades; los

50 años de vida consagrada de los Hnos. Victorino y

José María; la renovación de compromisos en las

Fraternidades Nazarenas, expresión de una vivencia

carismática discreta y real en la vida diaria, y la ce-

lebración eucarística de acción de gracias en la Ca-

tedral metropolitana de Montevideo por los 125 años

de la llegada de los Hermanos.

Seguramente nos queda afuera lo más importan-

te: la acción discreta del Espíritu en lo íntimo de ca-

da uno de nosotros, inspirándonos mayor entrega;

fortaleciéndonos en la vivencia del carisma con sen-

cillez y humildad; renovando nuestro deseo de llegar

a todos, entregándonos con alegría y sin reservas a la

misión eclesial del Instituto legado por Gabriel.

¡Te damos gracias, Padre bueno, por Jesús y en el

Espíritu Santo, por tanto don derramado en nuestras

vidas y en la Familia Sa.Fa, en este año jubilar!

L

HNO. NÉSTOR ACHIGAR, PROVINCIAL

Memoria agradeciday misión que se renueva

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Mensaje a los Hermanos delXVI Encuentro del ConsejoGeneral con los Hnos.Provinciales 5

Ordenación sacerdotal delHno. Juan Carlos León 9

Pascua delHno. Francisco Godino. 10

50 años de Vida Religiosadel Hno. Victorino Lázaro 12

50 años de Vida Religiosadel Hno. José María de laFuente 15

Distinción “Divino Maestro”al Hno. José Lahoz 18

Manantial “Hno. Adelsio” 20

CATEDRAL DE MONTEVIDEO

Santa Misa de Acción deGracias por los 150 años dela Pascua del Fundador ylos 125 años de losHermanos en Uruguay 21Hno. José María de la Fuente

CÓRDOBA, 1 Y 2 DE NOVIEMBRE

I I Encuentro de laFamilia Sa-Fa 22Rosario Llugain

CÓRDOBA, 7 DE JUNIO

Reunión de lasFraternidades Nazarenas 36

Noticias varias 37

PROGRESO, 6 DE DICIEMBRE

Jornada de Directivos yEquipos de Animaciónde la Provincia 38Rosario Llugain

La Aguilera 40Hno. José María de la Fuente

CÓRDOBA, 26 AL 28 DE JUNIO

Caminos Nazarenos 45

COLEGIO SAGRADA FAMILIA,

MONTEVIDEO, 9 DE AGOSTO

XIX Encuentro deCatequistas Sa-Fa 46Rosario Llugain -

Hno. José María de la Fuente

COLEGIO SAGRADA FAMILIA,

MONTEVIDEO, 30 DE AGOSTO

InterSaFa 2014 49Hno. Héctor da Rosa

Acampadas deEspiritualidad Nazarena 51

CÓRDOBA, FEBRERO DE 2014

“De cara al viento” 52Prof. José Toledo, Santa Lucía

Villa “Sagrada Familia” 53

10 puertas en la vidadel Hno. Gabriel 54Hno. Teodoro Berzal

In Memoriam.. . 66

Revista de la Provincia Nuestra Señora de la Esperanza - SUMARIO

Diciembre de 2014año IV - Nº 7

Equipoprovincialencargadode la revistaHno. José María

de la Fuente (Redactor

responsable),

Viviana Casih,

Leonor Auad,

Rosario Llugáin,

Javier Samudio (diseño

y armado).

Las opiniones vertidas

en los artículos firma-

dos son responsabilidad

de sus autores.

Para proponer artículos

para la revista contác-

tese con algún inte-

grante del equipo en-

cargado, en especial

con el Hno. José María

de la Fuente (en Uru-

guay) o con Viviana

Casih (en Argentina).

Diseñado con software

libre (Scribus, Gimp,

Krita e Inkscape sobre

LinuxMint).

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· DICIEMBRE 2014 · 5· # 7

Q UERIDOS> HERMANOS:

Al finalizar el XVI Encuentro del

Consejo General con los Hermanos

Provinciales, celebrado entre los días 13 al

20 de octubre, en la Comunidad de Ambato

(Ecuador), os enviamos el siguiente mensa-

je:

Hemos celebrado este Encuentro teniendo

presente algunos contextos que nos interpe-

lan: la crisis económica y de valores que afec-

ta al tejido social, la celebración del Sínodo de

la familia, las llamadas de la vida religiosa la-

tinoamericana, la situación de la Congrega-

ción y la celebración del 150 aniversario de la

muerte del Venerable Hno. Gabriel.

Estas tierras andinas de verdes laderas,

generosas en flores y frutos y ricas en huma-

nidad, nos evocan las colinas de las tierras

del Fundador que vieron nacer nuestra Con-

gregación. El recuerdo vivo del Hermano Ga-

briel ha estado muy presente en estas reu-

niones.

El lema: “Gabriel, quiero caminar contigo”,

que está motivando a nuestras Comunidades

y Obras en el 150 aniversario de su muerte,

también ha iluminado nuestra mirada a las

realidades que vive el Instituto. Queremos dar

continuidad a su familia que camina en co-

munión con la Iglesia y en solidaridad con la

causa de los hombres. Los Hermanos, unidos

a las demás vocaciones eclesiales, estamos

llamados a actualizar el compromiso evange-

lizador siguiendo a Cristo en comunidad.

Percibimos en los Hermanos el deseo de

querer caminar con el Hno. Gabriel para que

la vida congregacional que se ha extendido

por Europa, América, África y Asia se siga

alimentando de su legado y cada Hermano y

de cada Comunidad lo sienta como intercesor

y padre.

XVI Encuentro del Consejo General con los Hermanos Provinciales

AMBATO, ECUADOR, DEL 13 AL 20 DE OCTUBRE

Mensaje a los Hermanos

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XVI Encuentro del Consejo General con los Hermanos Provinciales

Con el Hno. Gabrielcaminamos en la profecía

Nos dejamos interrogar por la dimensión

profética en la vida del religioso Hermano. Es

una llamada que nos viene de fuera, gratuita,

“el amor de Dios ha sido derramado en nuestros

corazones” (Rm. 5,5), y nos pide transformar la

historia de acuerdo al proyecto de amor de

Dios sobre el mundo.

El descubrimiento de Dios como Padre y la

conciencia de nuestra condición de hijos,

constituyen la experiencia fundante de la vida

de fe, de la comunidad eclesial y de la frater-

nidad universal. La vida comunitaria será uno

de los elementos más significativos de la di-

mensión profética del Hermano. Ante un

mundo herido por el individualismo, la sole-

dad y la indiferencia, podemos ofrecer una ca-

sa abierta, acogedora y fraterna.

La vocación profética y mística de Jesús

estaba enraizada en su intensa vida de ora-

ción, de igual manera la dimensión contem-

plativa en nuestra vida nos hará capaces de

ver el mundo con la mirada compasiva de

Dios. Esta experiencia nos llevará a dar res-

puestas allí “donde la vida clama”, conscientes

de nuestros límites y debilidades pero confia-

dos en el don recibido por pura gracia.

Con el Hno. Gabrielcaminamos en la fe

La vivencia de la fe es el fundamento so-

bre el que se apoya la vida del Hermano, mar-

cada por la consagración a Dios que hicimos

con la profesión y que nos lleva a entregar la

vida cada día: vivimos en Él y para Él. Los vo-

tos son expresión de este desposeimiento y de

la capacidad de entrega amorosa en totalidad.

El Hermano también está tocado por la se-

cularización de la vida privada que vive el

hombre actual. Por ello es necesario un deci-

dido cuidado de la vida espiritual para mante-

ner el encuentro con el Dios cercano y

misericordioso. En este camino nos debemos

ayudar unos a otros, poniendo medios comu-

nitarios, pero también compartiendo la rique-

za de la fe entre nosotros y con otras perso-

nas.

El testimonio de fe que nos da el Hno. Ga-

briel, una fe confiada y comprometida, es un

estímulo para vivir nuestro proceso de poner

en las manos de Dios la vida entera.

Con el Hno. Gabrielcaminamos con esperanzahacia el futuro

Hemos analizado los desafíos que tenemos

que afrontar en los próximos años ante la evo-

lución del número de Hermanos en cada país.

En algunos países, la carencia de nuevas

vocaciones y la reducción de Hermanos nos

exigirán agruparnos en menos Comunidades

para favorecer la vida fraterna. Tendremos

que seguir preparando la continuidad del ca-

risma en la Familia Sa-Fa para mantener viva

la fuerza evangelizadora en las obras.

En otros países, la estabilidad del número

de Hermanos o el aumento de los mismos nos

llevarán a responder con nuestra misión en

lugares nuevos. Ello nos permitirá vivir la di-

mensión misionera, encontrar otras expresio-

nes al carisma e ir a nuevas fronteras.

Todo ello debe renovar en los Hermanos el

compromiso de trabajar por las nuevas voca-

ciones en todas las Provincias como una op-

ción prioritaria. Hemos de formar en la

disponibilidad para superar nacionalismos o

provincialismos y estar abiertos a nuevos mo-

dos de organizarnos. La solidaridad congre-

gacional ayudará a entender el Instituto como

un cuerpo apostólico, único, y facilitar la mo-

vilidad si fuese necesario.

Con el Hno. Gabrielcaminamos en el aprecio acada cultura

El Proyecto de Vida del Instituto nos re-

cuerda que debemos “aprender el 'lenguaje

cultural y antropológico de los pueblos y grupos

humanos' (cfr. EN 63) a los cuales somos envia-

dos, para llegar al corazón de las culturas”.

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XVI Encuentro del Consejo General con los Hermanos Provinciales

Deseamos valorar y estar abiertos a lo que

cada cultura nos ofrece: la herencia espiritual

de Asia, la hospitalidad y solidaridad de Áfri-

ca, el aprecio por la vida y la naturaleza de

América y la filosofía y experiencia de Euro-

pa. A todas queremos ofrecerles el don pre-

cioso de la espiritualidad nazarena y la

riqueza de la misión educativa como escuelas

de humanidad.

Desde la apertura de corazón podemos

discernir en comunidad cuáles son las expre-

siones más adecuadas para inculturarnos y

ofrecer el Evangelio. Para ello es necesario

cultivar la interioridad, la experiencia de la

Palabra compartida y el discernimiento que

nos permitan superar la dispersión, los mie-

dos y el desánimo.

Con el Hno. Gabrielcaminamos conresponsabilidad en laformación

“Como María y José en Nazaret, estamos

llamados a acoger nuestra vocación de Herma-

no, a cuidar su desarrollo y a ofrecerla al mun-

do” (PVI,IV).

El proceso de configuración con Cristo

como discípulos es un camino que dura toda

la vida. Lo recorremos personal y comunita-

riamente sobre todo en la vida fraterna de ca-

da día. Nos vamos convirtiendo en discípulos

del Señor en las situaciones que vive la propia

comunidad, en la comprensión y en el perdón,

asumiendo lo cotidiano, los éxitos y los fraca-

sos.

El Hno. Gabriel cuidó la formación huma-

na, académica, espiritual y carismática de los

Hermanos con sus visitas, sus escritos y reti-

ros. Os invitamos a que cada Hermano y cada

Comunidad local o provincial sea responsable

de poner los medios adecuados para la for-

mación permanente de modo que permitan

responder de forma evangélica a los nuevos

desafíos de las culturas.

Animamos a todos los Hermanos a ali-

mentar el espíritu de cuerpo y de familia en la

Familia Sa-Fa con algunas expresiones: cuidar

la cercanía con cada persona; interesarse por

la información del Instituto; fortalecer la for-

mación en el carisma propio y orar por todos

Colegio Sagrada

Familia de Ambato

(Ecuador).

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XVI Encuentro del Consejo General con los Hermanos Provinciales

los que vivimos la espiritualidad nazarena y la

misión Sa-Fa.

Con el Hno. Gabrielcaminamos en el usoevangélico de los bienes

Las dimensiones de encarnación e in-

culturación exigen el uso de los bienes ma-

teriales que son siempre bienes de la

Iglesia al servicio de la misión evangeliza-

dora. La comprensión de la finalidad de los

bienes eclesiales y la gestión con criterio

profesional y evangélico serán medios efi-

caces para el sostenimiento de la misión

del Instituto.

Como expresión de fraternidad y corres-

ponsabilidad en el uso de los bienes se hace

necesaria la participación comunitaria en la

administración, la colaboración en el trabajo

común, el estudio de balances y presupuestos

y la evaluación de la pobreza personal y co-

munitaria de los Hermanos,

La solidaridad con los necesitados nos pi-

de realizar acciones concretas. Invitamos a to-

das nuestras Comunidades a hacer un gesto

de solidaridad con alguna familia necesitada.

Será un modo de recordar nuestro compromi-

so con la familia en este momento en que la

Iglesia señala la pastoral familiar como prio-

ridad en la evangelización.

Agradecimiento

Agradecemos a todos aquellos que nos

han acompañado con su oración e interés du-

rante estos días.

Expresamos nuestro reconocimiento a los

Hermanos de la Comunidad de Ambato por

su fraterna acogida, así como las atenciones

de las Comunidades de Quito, Guaranda y

Puyo con quiénes hemos compartido algunos

momentos.

Que la Sagrada Familia y el Venerable

Hermano Gabriel nos acompañen y nos ben-

digan.

HERMANOS DE LA ADMINISTRACIÓN GENERAL

Y PROVINCIALES

AMBATO A 20 DE OCTUBRE DE 2014.

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E L SÁBADO 22 DE NOVIEMBRE, EN LA

capilla del colegio Escuti, el Hno.

Juan Carlos León fue ordenado

sacerdote por el obispo Auxiliar de Córdo-

ba, Mons. Pedro Torres que, junto a Mons.

Rovai y 8 sacerdotes, entre ellos dos de sus

hermanos: Ricardo-diocesano- y Alejandro

-salesiano-, concelebraron la emotiva cere-

monia.

La presencia de Hermanos de nuestra

Provincia y de Brasil, sus familiares,

miembros de las Fraternidades Nazarenas

y de la Asociación; docentes, alumnos y

exalumnos de las distintas comunidades

Sa-Fa, religiosos y religiosas, la JARC ( Junta

Arquidiocesana de religiosos Córdoba) y

amigos, acompañaron al Hno. Juan Carlos

en la celebración, cuidada en todos sus de-

talles, que se vivió en un clima de recogi-

miento y alegría y que fue animada por un

excelente coro.

Finalizada la ceremonia, y luego de re-

cibir personalmente el saludo de quienes

en una larga fila se acercaron, todos los

presentes fueron invitados a compartir un

ágape organizado en los patios del colegio.

CAPILLA DEL COLEGIO ESCUTI, 22 DE NOVIEMBRE

Ordenación sacerdotaldel Hno. Juan CarlosLeón

Ordenación sacerdotal del Hno. Juan Carlos León

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25 DE MAYO DE 1933 - 28 DE JULIO DE 2014

Pascua delHno. Francisco Godino

HNO. NÉSTOR ACHIGAR

Hno. Francisco Godino

E L DOMINGO 27 DE JULIO, POR LA TAR-

de, el Hno. Francisco, internado en

la enfermería de la Aguada desde

hacía varios años, tuvo un quebranto de sa-

lud con paro respiratorio incluido, que

obligó a una rápida intervención e interna-

ción en el sector de tratamientos intensivos

de la clínica del Círculo Católico. El lunes

28 a la noche sufrió una nueva afección

cardíaca de la que no pudo salir.

Dante Félix Godino Russi (Hno Francis-

co), nació el 25 de mayo de 1933 en Pozo del

Molle, localidad cordobesa ubicada a unos

171 kms al sudeste de la Capital provincial.

Hijo de una familia numerosa de 8 herma-

nos, su padre Luis Godino, mecánico y su

madre Ana Russi, casera. Ingresó al junio-

rato de Córdoba el 15 de agosto de 1946,

luego en Progreso el postulantado en 1949 y

noviciado en 1950.

Realizó su primera profesión religiosa en

Progreso (Uruguay) el 1º de marzo de 1951

y la Profesión Perpetua en febrero de 1956.

Desde entonces ejerció su apostolado en di-

ferentes colegios de Uruguay y de Argenti-

na.

Inició su tarea docente como maestro

primario en el Colegio Sagrada Familia de

Montevideo en 1952. Posteriormente estuvo

en Salto (1953-1955); estudiante en Córdoba

Con su grupo de clase 4ª

del Colegio Sagrada

Familia de Montevideo,

en el año 1961.

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Hno. Francisco Godino

en 1956 y nuevamente a Salto (1957-1959).

Los años 1960 y 61 lo encontramos en Mon-

tevideo de donde pasó a la casa de Forma-

ción del Escuti (1962-63) y de allí

a Minas (1964). En 1965 va

a Salto por 3ª vez. En

1966 y 67 en San José.

En 1968 y 69 lo en-

contramos en Tan-

dil por primera

vez.

Permanece dos

años en la escue-

la técnica de

Casilda (1970-

71) y regresa a

Tandil para una

estadía prolonga-

da entre 1972-1985

desempeñándose

como “pupilero”. En-

tre 1986 y 1990 cum-

ple diversas tareas

como “Inten-

dente” en

la casa

de for-

mación

del Es-

cuti. Después de un año en Buenos Aires,

1991, pasa a Uruguay, al Colegio San José

de Minas ocupándose del mantenimiento

del parque, reparaciones en el Colegio,

ganándose el aprecio de la Comunidad edu-

cativa por su disponibilidad y habilidad pa-

ra solucionar los pequeños problemas de

mantenimiento de la institución escolar. Al

cerrarse la Comunidad en el año 2008 pasa

a la enfermería de Aguada. El Colegio quiso

plasmar su afecto y el aprecio por su pre-

sencia dando su nombre a uno de los nue-

vos salones inaugurado en esos años.

Dotado de buenas condiciones pedagó-

gicas, exigente y flexible, se supo hacer

querer por sus alumnos, servicial, se carac-

terizó por el gusto por las actividades ma-

nuales, el cuidado de los espacios verdes,

tareas todas que sabía cumplir con eficacia

y a satisfacción de los interesados.

Hermano sencillo, fiel al ritmo comuni-

tario, vivió su seguimiento de Jesús en dis-

ponibilidad total al servicio del Reino en

diversas comunidades animadas por la sen-

cillez y laboriosidad de Nazaret dando tes-

timonio del poder infinito del Espíritu “que

hace crecer en la iglesia la vida nueva y

eterna de Cristo”. (C.25). ¡Que el Señor lo

tenga en su gloria! .

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¿ CÓMO SURGE LA VOCACIÓN EN MÍ? YO

diría que son varios los factores que

influyeron en una decisión como es-

ta. 1º La familia 2º La escuela y 3º La

cercanía de los Hnos. de la Horra.

La familiaTuve la suerte de nacer en una familia

cristiana, numerosa, cinco hermanos; una

familia humilde y trabajadora que junto con

la preocupación por la formación de sus hi-

jos siempre respetaron y apoyaron la deci-

sión de cada uno en lo que querían ser y

hacer el día de mañana.

La escuelaTuvo también una influencia especial. El

maestro Don Ángel, era de la Horra y había

sido educado por los Hnos. Muchas veces

hablaba de ellos y en su decir y hacer en las

clases dejaba picando una cierta curiosidad

por descubrir y saber algo más de los Her-

manos.

La cercanía de los Hermanos dela Horra

Esta fue posiblemente como la gota que

colmó el vaso. Pasar frecuentemente por la

Horra, conocer las instalaciones y a los

Hermanos, preguntar a propios y extraños

sobre la obra, quiénes eran y qué hacían o a

qué se dedicaban los Hermanos fue alimen-

tando el deseo de ingresar con los Herma-

nos. El 9 de marzo de 1959 a los 50 años de

la llegada de los Hermanos a España, hacía

mi ingreso en el aspirantado de la Horra

empezando así a dar los primeros pasos en

un camino lleno de incertidumbres, pre-

guntas, dudas y alguna que otras dificulta-

des que con el correr del tiempo y el buen

acompañamiento de los Hermanos forma-

dores y la gracia del Señor que nunca deja

de su mano a los que El llama, fui saliendo

y respondiendo a lo que el Señor quería de

mí. Entre La Horra, La Aguilera y el Postu-

lantado en Sigüenza pasaron 6 años durante

los cuales se fue afianzando y descubrien-

do lo que el Señor quería para mí.

El 8 de setiembre de 1964, a los

cien años de la Pascua del Hno.

Gabriel, y con la presencia de

mis padres y hermanos,

JEREMÍAS 20, 7

“Tú me has seducido,Señor. Y yo me hedejado seducir por Vos”

HNO. VICTORINO LÁZARO

Hno. Victorino Lázaro - 50 años de Hermano

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Hno. Victorino Lázaro - 50 años de Hermano

en una ceremonia muy especial, llena de

emociones y que nunca olvidaré, daba mi Sí

al Señor. Un sí que fue el primero pero no el

último. Un sí que en estos cincuenta años el

Señor me fue pidiendo de muy distintas

formas. Un sí cuando uno escucha como

Abraham: Sal de tu tierra, deja a tu familia

a tus padres y a tus hermanos y ve a otra

tierra que yo te voy a dar. Así salí, el 15 de

enero de 1965 para Argentina, 4 meses des-

pués del primer sí. Durante 49 años en Ar-

gentina y después de realizar los estudios

de Magisterio empecé a dar clase, primer

año en Institución Escuti y el 2º Año en el

Colegio San José de Tandil. En los cuatro

años siguientes, en el Taborín, por la maña-

na maestro en el primario y por la tarde es-

tudio del Profesorado en Filosofía y Peda-

gogía. Con el cumplimiento de distintas

responsabilidades era una forma de seguir

dando un sí a la voluntad del Señor expre-

sada, como dicen, en la voluntad de los Su-

periores. No siempre fue fácil la aceptación

por lo que uno se reconocía valer y fueron

los momentos en los que constataba la pre-

sencia del Señor y escuchar la voz que te di-

ce: “Yo estoy a tu lado, mi gracia te basta”.

Transcurrido ese tiempo, la obediencia con-

sideró que tenía que cambiar de aire y mi

destino fue la ciudad de Salto en la Repú-

blica Oriental del Uruguay para ser una

presencia de Hermano por esas tierras.

Hoy a la hora de agradecer al Señor por

mis 50 años de Vida Consagrada, no quisie-

ra olvidarme de la grata sorpresa que me

dieron con el canto de entrada en la Misa de

acción de gracias por lo que expresa y sin-

tetiza de los 50 años.

¡Qué detalle, Señor, has tenido conmigo!

Cuando me llamaste, cuando me elegiste,

Cuando me dijiste que Tú eras mi amigo,

¡Qué detalle, Señor, has tenido conmigo!

Te acercaste a mi puerta,

pronunciaste mi nombre;

yo temblando te dije: “aquí estoy, Señor”

Tú me hablaste de un Reino,

de un tesoro escondido,

de un mensaje fraterno

que encendió mi ilusión.

Yo dejé casa y pueblo por seguir

tu aventura;

codo a codo contigo comencé a caminar.

Han pasado los años,

y aunque aprieta el cansancio,

paso a paso te sigo, sin mirar hacia atrás.

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Hno. Victorino Lázaro - 50 años de Hermano

¡Qué alegría yo siento cuando digo

tu nombre!

¡Qué sosiego me inunda cuando oigo tu voz!

¡Qué emoción me estremece

cuando escucho en silencio,

Tu Palabra que aviva mi silencio interior!

Cuando miro hacia atrás, me admiro de

cómo el Señor me ha guiado siempre, y en

todos estos años he sentido cómo su Espíri-

tu me ha ido trazando caminos, así como mi

Congregación, en el servicio a la Iglesia.

Los caminos del Señor siempre nos llevan al

encuentro con los demás, en un descubri-

miento gozoso de sentirlos hermanos y her-

manas.

Celebrar estos 50 años de vida consa-

grada, es una ocasión favorable para dar

gracias por el infinito amor de Dios y de

sus designios de amor, por eso mi agrade-

cimiento íntimo a Él por el don de la vida y

por haberme llamado a esta vocación y mi-

sión y fortalecido por el don de la fideli-

dad.

Gracias a mi propia familia que me ha

dado una formación sencilla pero auténtica,

por los valores cristianos que me enseñaron

y donde he aprendido a amar a Dios. Un

gracias inmenso por su generosidad y sacri-

ficio de aceptar mi lejanía en tierra extran-

jera.

Gracias a mis formadores que me ayu-

daron en la etapa inicial y permanente en la

Vida Religiosa.

Gracias a todos mis superiores, los de

ayer y los de ahora que siempre me han

acompañado y me siguen acompañando con

sus oraciones y consejos.

Gracias a todos por los saludos recibi-

dos. Gracias a todos lejanos o cercanos que

me están acompañando en estas bodas y al

mismo tiempo me ayudan a dar gracias a

Dios por tantos beneficios que el Señor en

su bondad me ha regalado en estos 50 años

y que en verdad no son pocos.

Hoy con corazón agradecido puedo decir

que celebrar las Bodas de Oro, lejos de sen-

tir que la vida se escapa, es seguir cami-

nando con paz, sin prisas, pero sin pausas,

con una comprensión creciente hacia todos,

por eso con alegría inmensa entono como

María el Magníficat:

“Proclama mi alma la grandeza del

Señor, exulta mi espíritu en Dios mi Salva-

dor.”

Al final de todo hallaremos la ternura

insoldable de un Dios que es Padre y Madre.

Celebrar las Bodas de Oro es seguir di-

ciendo: “Aquí estoy, Señor, para hacer tu

voluntad”

Gracias, Señor. Gracias María. Gracias a

todos.

Page 15: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 15· # 7

Hno. José María de la Fuente - 50 años de Hermano

8 DE SEPTIEMBRE DE 1964

Sigüenza, Guadalajara,España. Noviciado “ElBosque”

HNO. JOSÉ MARÍA DE LA FUENTE

L A PALABRA ES UN HERMOSO DON QUE

permite expresarnos, transmitir

pensamientos y, en ocasiones, los

sentimientos. Son algunas posibilidades, pe-

ro, también, son límites y fronteras ya que,

con frecuencia, resulta imposible transmitir

por medio de ella la totalidad de lo sentido,

la plenitud de lo vivido, la profundidad de

lo sufrido y la grandeza de lo gozado.

Sintiendo con fuerza esta dificultad, qui-

siera que mis palabras de hoy fueran puen-

tes, palabras generadoras de encuentro;

desearía que fueran palabras agradecidas

que brotan del corazón y lleguen al co-

razón, rasgando, en cuanto sea posible, el

velo de la indiferencia o la costumbre.

Hoy me corresponde dar gracias. Es una

tarea diaria que debo ejercitar en cada ins-

tante de la vida. Dar gracias a Dios por la

existencia, por la hermosa aventura de la

vida que, no obstante sus dificultades y do-

lores, es un prodigio, un milagro, un miste-

rio, una maravilla que se renueva más allá

de lo imaginable y, ciertamente, más allá de

cualquier merecimiento.

Gracias por la fe, que llena la vida de luz

y le da sentido trascendente; por la fe que es

encuentro, regalo y ternura. La recibí en mi

hogar, día a día y sin estridencias, en el lento

goteo de gestos, palabras y coherencias.

Eran épocas en que la fe era mucho más

fuerte y cotidiana que ahora; estaba en las

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16 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

calles, en los paisanos, en la escuela, desde el

amanecer hasta la noche. Los toques de las

campanas nos acercaban la presencia de

Dios a lo largo del día: ángelus, Misa, rosa-

rio, toque de ánimas, etc, jalonaban la jorna-

da pública; en la casa, la bendición de la

mesa, el rezo del rosario, la visita de la ima-

gen de la Virgen María, el saludo en la casa

vecina: “Ave, María purísima. Sin pecado

concebida”. Las procesiones, novenas y roga-

tivas, asociadas al clima y al campo, a la dia-

ria incertidumbre de las cosechas y a la

historia milenaria de los pueblecitos y sus

gentes.

Entre las penurias diarias y tener lo in-

dispensable para la subsistencia, en el pue-

blo donde nací y pasé mi infancia, se vivía

la vida cristiana que impregnaba cada ins-

tante con la religiosidad sencilla y sentida

de los primeros cristianos. Dios estaba en

cada calle, plazuela, senda y camino, arroyo

o regato, cárcava y tierra de labor que com-

ponían el paisaje del pueblo.

Se rezaba al comenzar la escuela por la

mañana y al terminar de tarde con la visita

al Señor en la iglesia, guiados por el maes-

tro y las catequistas. En este ambiente, co-

mencé la escuela unitaria de chicos a los

seis años y, también, me hice monaguillo;

de alguna forma, ambos aspectos estaban

ligados y formaban parte de la vida infantil.

Radicado en esta historia personal de

encuentro y con la confianza que me da sa-

berme llamado y, por lo tanto, convocado a

Hno. José María de la Fuente - 50 años de Hermano

Page 17: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 17· # 7

Hno. José María de la Fuente - 50 años de Hermano

participar de la bella e inimaginable aven-

tura de la vida cristiana, dedicada a Dios y a

los niños en la educación, no obstante mi

realidad personal, hoy quiero dar gracias.

Gracias por las mediaciones que han he-

cho posible la respuesta al llamado, es decir,

a prolongar, Señor, tu mirada misericordio-

sa sobre los seres humanos, a trabajar para

humanizar la porción del mundo en la que

me muevo.

Gracias a mi familia que me regaló la fe

cristiana, que a lo largo de los días me dio

lo que más importaba: el cariño, el respeto,

la austeridad, la compasión, la coherencia,

ser agradecido, tratar de ser buena persona

y buen cristiano católico. En ti, Señor, buen

pagador, encontrarán su recompensa.

Gracias a muchas personas que me

acompañaron en el arduo sendero, a quie-

nes son amigos, a quienes me aconsejaron y

corrigieron.

Gracias a los ausentes, pero a la vez tan

íntimos y cercanos, que están más allá del

tiempo, a la derecha de Dios.

Permíteme, Señor, que exprese en voz

alta lo que tú ya sabes pero que hoy quiero

decirte de nuevo: desearía poder cumplir lo

que prometí, desearía vivir la gratuidad de

tu amistad que sigue contando conmigo.

Pero soy un hombre, débil y frágil y, por

ello, déjame arrepentirme de mis desvíos y

deficiencias. Cúrame, Señor, las heridas del

egoísmo y la autosuficiencia; camina a mi

lado, llévame de la mano, mantén mi co-

razón tierno y mis ojos compasivos.

En esta fecha sublimamos las emociones

y damos rienda suelta a la sensibilidad. Hoy,

como decía san Agustín, “saltan las chispas

del corazón de los amigos, expresadas en el

rostro, en la lengua, en los ojos, en mil ges-

tos de ternura”. Con el corazón restallante

de gozo y gratitud, y enriquecidas la mente

y el alma con la medida evangélica abun-

dante, remecida, colmada y rebosante, miro

el camino recorrido y doy gracias; miro ha-

cia el horizonte y pido fuerza para seguir

andando.

El futuro es, siempre, un futuro de espe-

ranza.

Esta es una fecha colmada de razones

para vivir.

Hermanos y amigos: vosotros entendéis

el lenguaje del corazón.

Arriba, de izq a

derecha: Hnos. Santiago

Elena, Carmelo Ruiz,

Manuel González,

Alberto Martin, José

Luis Miguel y Victorino

Lázaro.

Abajo, de izq a derecha

Hnos. Benjamín

Rodríguez, C.F. Jaime

-maestro de novicios,

T.C.F. Patricio

-provincial- y José

María de la Fuente.

Page 18: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

18 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

Distinción“Divino Maestro” alHno. José Lahoz

C OMO ESTABA PREVISTO, EL

VIERNES 19 de septiembre

se llevó a cabo la 38º en-

trega de las distinciones “Divino

Maestro” que otorga la CON-

SUDEC.

El presente año bajo

el lema: “Yo he venido

para que tengan Vida

y la tengan en abun-

dancia”, la celebra-

ción dio comienzo

con la Santa Mi-

sa de Acción de

Gracias presidi-

da por el Sr.

Presidente de la

Comisión Epis-

copal de Educa-

ción Católica,

Monseñor Héc-

tor Aguer, en la

Iglesia del Salva-

dor, a continuación el Acto Académico, en

el Salón de Actos del Colegio del Salvador.

Ante una nutrida concurrencia los se-

tenta y tres galardonados (laicos, sacerdo-

tes, religiosos, obispos) entre ellos nuestro

querido Hno José, recibieron esta distinción

junto a los seres queridos que los acom-

pañaron, en reconocimiento y gratitud por

su trayectoria y vocación educativa al ser-

vicio de la educación católica

El Presidente del CONSUDEC, P. Alberto

Bustamante, dirigió un mensaje a todos los

galardonados.

Semblanza de un Educador. . .

El Hno. José, Mario Humberto Lahoz es

un religioso, Hermano de la Sagrada Familia.

Nació el 9 de marzo de 1929, en la ciu-

dad de Rosario (Santa Fe), Ingresó a la Con-

gregación el 8 de septiembre de 1945,

realizó su postulantado en Progreso (Uru-

guay). Maestro Normal Nacional, Profesor

Distinción “Divino Maestro” al Hno. José Lahoz

Page 19: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 19· # 7

de Filosofía y Pedagogía; comenzó su acti-

vidad docente como maestro de grado en el

año 1946 en el colegio “San Vicente” de La

Unión (Uruguay). En la actualidad tiene 85

años y sigue educando...

Quizás ésta sea una de las características

típicas de la personalidad educativa del

Hno. José: siempre presente y cercano en

medio de la gente y los jóvenes, un hombre

siempre actualizado, un hombre que a lo

largo de muchas generaciones y aún hoy

permanece significativo para muchos...

Humilde, trabajador, libre, este apasio-

nado educador, siempre atento al corazón

de los jóvenes, pareció siempre “adelantar-

se” a los tiempos...

José ha sido capaz de enseñar muchas

ciencias diversas y ha provocado a muchos

jóvenes a desarrollar potencialidades que

ellos mismos ignoraban poseer...

Intuitivo, arriesgado, creativo, en cada

etapa de su vida, supo proponer novedades

que, respondiendo a las necesidades de los

jóvenes, los estimularan a amar la vida

comprometiendo la propia, tal como lo pro-

puso Jesús...

José, típico Hermano de la Sagrada Fa-

milia, siempre creyó en el valor educativo

de la familia. Por eso apoyó permanente-

mente a padres y madres a vivir con alegría

y entusiasmo su misión educativa... y cuan-

do fue necesario, él mismo supo hacer las

veces de padre y madre...

También por esta convicción, estuvo

siempre atento al “clima familiar” del ámbi-

to educativo: la escuela, el aula, el patio, la

casa de formación... todo debía “respirar”

cariño, cercanía, comprensión, y desde allí

no tenía miedo a proponer desafíos, exigen-

cias, límites.. .

El Hermano José, activo, inquieto, prác-

tico, supo estar atento a lo que la reflexión

de las ciencias y de la Iglesia iban aportan-

do al presente de nuestra historia. Todo pa-

recía interesarle: la política, el deporte, la

economía, el arte.. .

Ah, olvidábamos decirlo, nuestro Her-

mano José también es sacerdote al servicio

de la Congregación como es propio de los

institutos de Hermanos, pastor siempre dis-

puesto a la escucha, confesor siempre dis-

puesto a liberar conciencias para hacerles

sentir el amor misericordioso del Padre...

El Hermano José ha sido un gran regalo

de Dios a su Pueblo para revelarle su amor

creador, para hacerle sentir, desde el co-

razón de “hijos amados”, la potencialidad

creadora de todo hombre y de toda mujer y

la maravillosa condición de hermanos y

hermanas que nos hace “familia de Dios”.

Así, el Hermano José educador, se nos

presenta como un generador de vida, pro-

motor de lo mejor que hay en el corazón

humano cumpliendo aquello que nos en-

señó nuestro Fundador el Hno. Gabriel Ta-

borin: “El maestro religioso ilumina con sus

lecciones, da a conocer las verdades eternas y

educa los corazones en la virtud y, donde la

virtud reina, el orden y la paz reinan también

y de ellos deriva infaliblemente la felicidad”.

(Nuevo Guía de los HSF. 638).

Distinción “Divino Maestro” al Hno. José Lahoz

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20 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

Manantial“Hermano Adelsio”

PUBLICADO EN WWW.ELDIARIODETANDIL.COM, 21 DE MAYO DE 2014

P OR INICIATIVA DEL INTENDENTE MI-

guel Lunghi el reconocido Hno.

Adelsio será homenajeado en un ac-

to en que impondrán su nombre al manan-

tial del “Paseo de los Españoles”. Ese parque

público tiene conexión directa con la quinta

del Colegio San José, lo que simboliza los

lazos que desde la comunidad educativa de

esa institución se han forjado y consolidado

con nuestra ciudad.

El Hno. Adelsio Celestino Delfabro es,

sin dudas, uno de los artífices de este fuerte

vínculo entre la ciudadanía de Tandil y la

comunidad del Colegio San José.

Delfabro es uno de esos docentes que

han dejado marca indeleble en generaciones

de estudiantes, por su palabra oportuna, su

fuerte vínculo con el estudiantado, sólidos

conocimientos y cultura y un trato siempre

amable y contenedor, aún en las situaciones

más difíciles.

Docente desde 1954, antes de recalar en

Tandil ejerció en el Colegio de la Sagrada

Familia de Villa Urquiza (Buenos Aires),

luego en los Colegios de la Congregación

en Azul y Casilda (Santa Fe).

Este Maestro Normal Nacional tiene

además el título de Profesor de Física y Quí-

mica; graduado como Técnico en Conduc-

ción Educativa del Instituto Superior de La

Salle (Bs. As.) y de Maestro Superior Pasto-

ral y Catequesis, con certificado expedido

por el Instituto Superior de Pastoral y Ca-

tequesis de Francia.

En su vida religiosa y su carrera profe-

sional se ha desempeñado como Director

General del Colegio Sagrada Familia de Vi-

lla Urquiza y de Azul; Director General del

Colegio Técnico Sagrada Familia de Casilda,

Sacristán Mayor de la Basílica y Santuario

de Ars (Francia), Director del Instituto Su-

perior San José y Director del Nivel Prima-

rio del Colegio San José, ambos de esta

ciudad.

Como Director del Nivel Primario y del

Instituto Superior ha acompañado la for-

mación intelectual y espiritual de inconta-

bles ciudadanos de nuestra sociedad.

Asimismo, ha sabido ser puente entre

distintas instituciones de la ciudad, siempre

con las palabras justas para cada momento.

Una presencia que generó y genera

vínculos, con una perseverancia que re-

cuerda el afecto de los frailes fundadores

que decidieron desembarcar en nuestra ciu-

dad.

Homenaje al Hermano Adelsio Delfabro

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· DICIEMBRE 2014 · 21· # 7

Santa Misa de Acción de Gracias en la Catedral de Montevideo

CATEDRAL DE MONTEVIDEO, 29 DE NOVIEMBRE

150 años de la Pascua delFundador y 125 años delos Hermanos en Uruguay

HNO. JOSÉ MARÍA DE LA FUENTE

C ON LA ALEGRÍA EN LOS ROSTROS, EL

afecto en los saludos y gozo en el

corazón celebramos, en la catedral

de Montevideo, la Acción de gracias por los

150 años de la pascua del Vble. Hno. Ga-

briel Taborin, Fundador del Instituto; los

125 años de la presencia de los Hermanos y

el carisma nazareno en Uruguay y, también,

los 125 años del colegio Sagrada Familia en-

raizado en la Aguada de Montevideo.

Muchos y variados motivos para cele-

brar la Eucaristía bendiciendo a Dios por su

amparo, agradeciendo por su protección y

pidiendo que nos fortalezca para seguir

siendo fieles al carisma nazareno.

La ceremonia, presidida por el sr. Arzo-

bispo de Montevideo, Mons. Daniel Sturla,

y concelebrada por el sr. Obispo auxiliar

Mons. Milton Tróccoli y varios sacerdotes,

tuvo un marcado tono familiar de sencillez,

cercanía y devoción.

La cruz parroquial y el libro de la Pala-

bra abrieron la procesión de entrada, signos

de nuestra fe y apoyo nuclear de la voca-

ción de los educadores y evangelizadores.

La liturgia de las lecturas nos hizo pre-

sente la fiesta de Ntra. Sra. de la Esperanza,

patrona de nuestra provincia religiosa.

La procesión de las ofrendas nos llevó al

pasado fundacional del colegio y su lazo pe-

renne con el Instituto: presentamos el “ra-

bat bleu” y la señal (vulgo: chicharra) tan

entrañables para muchas generaciones de

Hermanos y alumnos. El pan y el vino fue-

ron ofrecidos por una familia, centro y ho-

rizonte de nuestra razón de ser y educar.

El sr. Arzobispo, en la homilía, hizo un

recorrido existencial de su experiencia vital

como alumno de los Hermanos. Su afectuo-

so recuerdo, su sencillez, profundidad y el

permanente reconocimiento de cariño a los

Hermanos fueron el marco más logrado de

nuestro lema: En la oración, el trabajo y el

amor: la paz.

Es bueno resaltar que, al recibir la “chi-

charra”, no pudo ocultar su satisfacción de,

por fin, poder manejar y hacer las consabi-

das señales recordando su niñez.

El coro del colegio acompañó la celebra-

ción con gusto y exquisitez en los cantos

religiosos y terminó entonando el Himno

del colegio.

La catedral desbordante de fieles fue, tal

vez, el mejor homenaje a nuestros antepa-

sados en el colegio y el acicate para los pre-

sentes de mantener los valores y virtudes de

la educación y evangelización “marca Sa-

Fa”.

“Si esta obra es cosa mía fallará, mas

si es obra de Dios, él sabrá hacerla cre-

cer” sigue diciendo el Vble. Hno. Gabriel

Taborin..

“Estén siempre alegres, oren sin cesar y den gracias a Dios en todaocasión; esta es, por voluntad de Dios, su vocación de cristianos.”

1ª TESALONICENSES 5, 16-18

Page 22: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

22 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

E N OCASIÓN DE LOS 150 AÑOS DE LA

Pascua del Hno. Gabriel Taborin, se

celebró y festejó el 1 y 2 de no-

viembre el II Encuentro Familia Sa-Fa en

San Antonio de Arredondo, Villa Sagrada

Familia, Córdoba. Congregados desde todas

las Comunidades Sa-Fa de la Provincia

Ntra. Sra. de la Esperanza, por Argentina:

Colegio Sagrada Familia, Bs.As.; Colegio

San José de Tandil; Colegio San José, de

Bell Ville, Colegio Gabriel Taborin y Cole-

gio Institución Escuti de Córdoba; Colegio

María de la Esperanza, Santa Lucía de Tu-

cumán; Comunidad Santa María, Las Moja-

rras, Catamarca. Por Uruguay: Colegio

Sagrada Familia, Montevideo; Colegio Sa-

grada Familia, Salto; Colegio San Juan Bau-

tista, Montevideo; Colegio Sagrada Familia,

San José de Mayo; Liceo Guadalupe, Cane-

lones. Además desde la Comunidad de Ma-

rau, Brasil, llegó uno de los Hermanos.

Todos invitados a compartir desde Nazaret,

lo que somos y tenemos, nuestras riquezas

y desafíos, las realidades que nos cuestio-

nan e interpelan. Fue preparado con el es-

fuerzo y dedicación de muchas personas, de

equipos de trabajo, de animadores, colabo-

radores e integrantes de la Fraternidades

Nazarenas.

CÓRDOBA, ARGENTINA, 1 Y 2 DE NOVIEMBRE

I I Encuentro dela Familia Sa-Fa

ROSARIO LLUGAIN, EQUIPO NAZARENO-TABORINIANO

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

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· DICIEMBRE 2014 · 23· # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

Con esta frase comienza la invitación

cursada a los invitados a participar del En-

cuentro:

“Vengan todos, hijos de la Sagrada Fami-

lia, para estrechar los vínculos que nos unen

en Jesús, María y José” .Ya cercanos al En-

cuentro Familia Sa-Fa del 1 y 2 de noviem-

bre en la Residencia Franciscana y Villa

Sagrada Familia, de San Antonio de Arre-

dondo, Córdoba, Argentina, te queremos

comunicar que dentro de las actividades or-

ganizadas para este Encuentro, hemos pen-

sado que el mismo tenga jornadas de

reflexión y recreación. Contaremos con la

presencia de Mons. Pedro Torres que nos

ubicará en “La realidad de la Iglesia Lati-

noamericana hoy”, luego el Pbro. Miguel

Ángel López iluminará estas realidades con

la ayuda de la Palabra “Parábola del Buen

Pastor” y por último el Hno. Aurelio Arreba

nos planteará: “Las respuestas que daría el

Hno. Gabriel hoy a los desafíos actuales”

Para que vayas preparando tu espíritu y

el de los compañeros de viaje, te propone-

mos algunas pautas para la reflexión previa:

• ¿Cómo estás viviendo las dificultades

que surgen de la tarea que realizas? ¿En

qué te interpelan?

• ¿Estás preparado y de corazón abierto

para recibir y compartir con los demás

un verdadero espíritu de familia?”

Ya en la tarde del día viernes 31 fueron

llegando uno a uno, los ómnibus que tras-

ladaron, desde los diferentes destinos, a los

casi 400 participantes. La algarabía, los sa-

ludos, la ansiedad por saber donde se ubi-

caría cada uno, fue ganando el espacio de

recepción de la Residencia Franciscana. Pe-

ro ya ubicados, nos pudimos ver los rostros,

recién a las 21 horas en la cena servida de

forma abundante y exquisita. Luego vino el

merecido descanso para retomar fuerzas y

estar listos para lo que vendría al día si-

guiente.

En la mañana del 1 de noviembre todos

reunidos en el salón espacioso y muy lumi-

noso, a pesar de la lluvia incesante y copio-

sa, comenzamos con el Encuentro. Vinieron

entonces las presentaciones por delegacio-

nes, las palabras de bienvenida, y la moti-

vación de buscar sentido y respuestas a los

desafíos que traemos, convencidos que

nuestro Carisma es Buena noticia en el co-

razón de las culturas.

Comenzó la exposición Mons. Pedro To-

rres quien, entre otras cosas, es vocero en

los medios de comunicación social en temas

referentes a la moral, especialmente a la

bioética, ecumenismo y el diálogo interreli-

gioso. El tema fue: “Los desafíos de la Igle-

sia actual en América Latina, a la luz de

Aparecida”.

Su charla estuvo basada en el Capítulo 2

del Documento de Aparecida, titulado “Mi-

rada de los discípulos misioneros hacia la

realidad”. Con una mirada teologal y pasto-

ral considera, con cierto detenimiento, los

grandes cambios que están sucediendo en

nuestro continente y en el mundo, y que in-

terpelan a la evangelización. Se analizan

Page 24: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

24 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

varios procesos históricos complejos, te-

niendo presente los niveles sociocultural,

económico, sociopolítico, étnico y ecológi-

co, y se disciernen grandes desafíos como la

globalización, la injusticia estructural, la

crisis en la trasmisión de la fe y otros. Allí

se plantean muchas realidades que afectan

la vida cotidiana de nuestros pueblos. En

ese contexto, considera la difícil situación

de nuestra Iglesia en esta hora de desafíos,

haciendo un balance de signos positivos y

negativos.

Una vez finalizada la exposición se divi-

dieron en grupos, teniendo como guía los

siguientes núcleos de interés: Familia –

Educación – Pastoral Juvenil – Pastoral Vo-

cacional – Carisma – Catequesis – Perife-

rias existenciales.

El trabajo en grupos tuvo estas pregun-

tas para ayudar a la reflexión y discusión.

1 . ¿Qué cosas me interpelan de la realidad?

2. ¿Cuáles son los desafíos de la realidad en

que vivimos?

3. En un afiche escribimos los desafíos co-

munes.

Luego vino el almuerzo compartido y

una oportunidad de intercambio y conoci-

miento. Ya en la tarde se comenzó con la

presentación del Fray Miguel Ángel López,

Franciscano-Conventual quien iluminó la

experiencia con el texto de la Parábola del

Buen Pastor. En un ambiente de oración,

reflexión y silencio, nos dijo: “Jesús, Buen

Pastor, enseña con su “ofrecimiento-dona-

ción” que quien se desprende de la vida por

amor a Dios y a los demás (prójimo) no la

destruye, sino que la lleva a su máxima po-

sibilidad, porque se hace semejante al Padre

en cuanto se expresa como don generoso y

gratuito de amor”.

Para finalizar este momento escuchamos

la canción: “Vida en abundancia”, cuyo es-

tribillo dice: “Yo vengo a traerte vida y vida

en abundancia, en abundancia. Yo soy el

camino, la verdad y la vida, vida en abun-

dancia, en abundancia”

Para culminar con las exposiciones fue

el Hno. Aurelio Arreba quien nos habló so-

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

Page 25: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 25· # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

bre: “Las respuestas del Hno. Gabriel a los

desafíos de hoy”. Los puntos más importan-

tes sobre los que disertó fueron: “¿Desde

donde responde Gabriel? Realidad externa y

mundo interior”. “¿Cómo responde y a qué

apunta Gabriel con su respuesta?” “Ante

nuestra realidad cultural de hoy ¿cuál es la

respuesta desde nuestro Carisma Nazare-

no”? Luego divididos en los mismos grupos

de la mañana, se trabajaron las siguientes

preguntas:

1 . De lo escuchado, ¿Cuáles serían las res-

puestas del Hno. Gabriel a los desafíos

de hoy?

2. Desde mi realidad, ¿qué respuestas sien-

to que puede darme el carisma del Hno.

Gabriel, hoy a mi?

3. Escribimos en un afiche las posibles res-

puestas desde la realidad de cada uno.

Para finalizar y dar sentido de pertenen-

cia, de adhesión al Carisma y de sentirnos

Iglesia, celebramos la Eucaristía, presidida

por Mons. Carlos Ñáñez. Allí llevamos todos

nuestros desafíos, deseos y esperanzas. Fue

una oportunidad para renovar nuestra iden-

tidad como Familia Sa.Fa. y como signo que

deseamos ser multiplicadores del mensaje

de salvación y continuadores cualificados de

la obra del Vble. Hno. Gabriel Taborin.

El cierre del día estuvo dado con un

fogón, donde no faltó el canto, el baile, la

participación activa, con un verdadero

espíritu de familia. (Foto N° 23).

El día 2 de noviembre nos trasladamos a

la Villa Sagrada Familia para continuar con

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26 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

nuestro Encuentro. Allí nos esperaban Cen-

tros de Interés para que cada uno eligiera y

participara de lo que se ofrecía. Los Centros

eran: Causa del Hno. Gabriel; Carpa Voca-

cional; Trata de Personas; Ecología; Adic-

ciones; Pastoral Familiar; Paseo por la

Quinta.

En una recorrida para cada uno de esos

Centro de Interés, evocando en el hoy la

preocupación constante del Hno. Gabriel

por las urgencias de su tiempo concreto, to-

dos los participantes fuimos escuchando el

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

Page 27: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 27· # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

mensaje que deseaban dejarnos. Fue así que

comenzamos con el canto: “Hace mucho

tiempo” y recorrimos uno a uno los diferen-

tes lugares. Ya para ir finalizando esta gran

Celebración, reunidos al borde del lago de

la Villa, se realizó un Signo Bautismal, don-

de los Hermanos presentes fueron tomando

una a una las vasijas con agua y utilizando

un ramito de plantas naturales, realizaron la

aspersión de todos los presentes.

Luego se inauguró el Vía crucis, se des-

cubrió una placa recordatoria y se colocó la

cruz que preside todo el predio. Así culminó

este II Encuentro de la Familia Sa-Fa.

Damos gracias al Señor porque el Hno.

Gabriel nos dejó la valoración de lo coti-

diano, la búsqueda de la fraternidad. Te

pedimos a imitación suya, seamos capaces

de ser humildes y sencillos, recrear ámbi-

tos a escala humana, actuar como Iglesia,

ser corresponsales y persistentes, escuchar

la voluntad de Dios aceptando su invita-

ción y venerando a la Virgen como él lo

hacía.

Page 28: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

28 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

1.- Familia

Interpela:

• Falta de amor expresado.

• Falta de compromiso individual en la

pareja.

• Escasa contención social para la pareja y

la familia.

• Falta de diálogo.

• La familia hoy no asume los roles inhe-

rentes a la formación cristiana.

• Familia = Reserva del Carisma Tabori-

niano.

• Falta de: entrega, presencia de la ma-

dre/padre (rol), tolerancia a la frustra-

ción, límites, encuadre

• Diversidad de las familias y cómo acom-

pañar a todas ellas adecuadamente.

Desafíos de la realidad:

• Acompañar desde el rol que cada uno

desempeña.

• Reforzar las oportunidades de "escucha"

a nivel familiar.

• Educar para formar familias que duren y

duren bien (enfrentar desafíos cotidianos).

• Reforzar lazos familiares (abuelos, tíos,

primos).

• Falta de visión misionera.

• Asumir paternidad responsable.

• Fortalecer la pareja desde lo simple y lo

cotidiano. Utilizando los medios de co-

municación social.

• Ser un verdadero testimonio.

• Salir al encuentro.

• Familia como reservorio del carisma ta-

boriniano.

• Familias corresponsales en la educación

de los hijos.

“Los desafíos de la Iglesia actual en América Latina,a la luz de Aparecida”

I . ¿Qué cosas me interpelan de la realidad?

I I . ¿Cuáles son los desafíos de la realidad en que vivimos?

Page 29: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 29· # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

• Familia apoyo a los Hermanos y directi-

vos Sa-Fa.

• Aprender a mirar las diferentes realida-

des.

• Revalorizar y contagiar valores: espe-

ranza, amor, encuentro, gestos, miradas,

respeto, aceptación, aprecio a la vida,

comunicación, diálogo

• Generar espacios para acercarnos al

otro.

• "Ser utópicos"

• Educar en valores

2.- Educación

Interpela:

• Integración familia-educadores.

• El uso no pedagógico de los recursos

tecnológicos.

• Mejor capacitación en la formación do-

cente.

• Valorización de la tarea docente.

• El consumo como un factor de diferen-

cia social

• Cómo manejar el exceso de información.

Desafíos de la realidad:

• La idea falsa de comunicación.

• La falta de identidad.

• La inmediatez.

• La sobredemanda a la escuela y al edu-

cador

• Valorar la escuela como lugar de apren-

dizaje, no de entretenimiento.

• Vida- oración- amor y compromiso- tec-

nologización, actualización permanente-

nuevas configuraciones sociales- afecti-

vidad- testimonio- inclusión- comparti-

da- laicos protagonistas- redes- trabajo

en equipo- mirar- escuchar- familia ac-

tual- misión compartida- valores cristia-

nos y nazarenos.

La educación como transformadora de la

realidad. Asumirnos como docentes con

lo que nos toca.

3.- Pastoral Juvenil

Interpela y desafíos de la realidad:

• Rezar por el otro. Dios nos ama.

• Denunciar la corrupción- Contagiar lo

comunitario.

• Ser testigos del evangelio. Jugársela. -

Sencillez.

• Espíritu de Familia. Escuchar. Compro-

miso.

• Inmadurez. Desconfianza

• Importancia de los medios.

• Invitar. Insistir. Delegar

• Recuperar Valores: Humildad. Respon-

sabilidad. Acompañamiento

4.- Pastoral Vocacional

Interpela y desafíos de la realidad:

• Formar raíces, por ejemplo: Fraternidad

Nazarena, Comunidad, Familia Sa-Fa

• Humanizar y desde nosotros formar y

fomentar valores.

• Humildad y entrega.

• Compartir y no competir.

• Amarnos e imitar a aquellos seres que

son ejemplos de la vida, tales como: La

Madre Teresa, Hno. Gabriel, Jesús.

• Preparar a los chicos para el mundo.

Formación permanente. Oración

• Personas comprometidas y responsables

que den el ejemplo desde lo sencillo y

austero

5.- Carisma

Interpela:

• ¿Acompañamos como debemos en dis-

tintos ámbitos?

• ¿Cada uno aporta positivamente desde

su rol?

• Generar espacios de diálogo fraterno y

de conocimiento.

Desafíos de la realidad:

• Acompañar como debemos desde los

distintos ámbitos en que participamos.

Page 30: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

30 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

• Aportar positivamente cada uno desde

su rol haciendo el mayor esfuerzo.

• Promover desde lo individual a lo gru-

pal, instancias de diálogo y de resolu-

ción de dificultades.

• Lograr que el carisma nazareno nos

atraviese en todo lo que hacemos.

• Conocernos más para querernos más y

así cuidarnos más.

• Crear verdaderas comunidades.

• Asumir el presente para construir el fu-

turo creativamente.

• Tener presente: Comunicación. Compro-

miso. Responsabilidad. Amor. Ánimo.

• Amar al prójimo con humildad, compro-

miso, paciencia, sencillez y persistencia.

6.- Catequesis

Interpela y desafíos de la realidad:

• Que la catequesis sea un encuentro con

Jesús vivo para el niño y su familia.

• No perder interés en la formación.

• Tomarse tiempo para la catequesis.

• Convertirnos en verdaderos testigos.

• Responder a la nueva realidad de familia

anunciando el evangelio que le llegue a

la vida.

• Poner acento en la oración como clave

de fortalecimiento de la fe

• Poner nuestra "obra" en la necesidad del

otro.

• Falta de compromiso desde la familia.

• Falta de conocimiento y de poner en

práctica los mandamientos.

• Perseverar con humildad, sencillez, en-

trega, compromiso y escucha.

• Encontrar nuevas estrategias para nue-

vas realidades.

• Tener una mirada atenta a lo que nos

quieran decir.

• Aceptar a través del amor.

• Ver al otro como es y aceptarlo con su

realidad.

• Evangelizar con la vida.

7.- Periferias existenciales

Interpela y desafíos de la realidad:

• Mirar con amor, mirarme y mirar a los

otros desde Dios.

• Volver a ser, búsqueda de volver a en-

contrarme.

• Cuidar la vida, cuidar la dignidad.

• Comprometernos, luchar con...

• Aceptar y amar el límite y el borde de

nuestras propias vidas y de la que nos

llama.

• Poder mirar, escuchar.

• Descubrirnos para descubrir.

• Ver y mirar más allá.

• Que acabe la periferia. Correr el límite

de lo posible.

• Cambiar la realidad en la que vivimos.

• Lo que nos sucede a unos, nos sucede a

todos.

• Encontrarse para poder ayudar a los

demás.

• "Ser callejeros":

• ¿Cómo generar Identidad Humana?

• ¿Qué es periferia existencial?

• Lo que tiene que ver con la vida que está

fuera de lo considerado "central".

• Lo que llama desde afuera a mirar dis-

tinto.

• Lo que dejamos al margen, no inclui-

mos, esta al costado de...

• Nosotros también somos parte de la pe-

riferia.

• Denunciar la falsa inclusión.- Lo que

circula, lo transversal.

• Lo que nos pide mirarnos unos a otros,

como miembros de una comunidad.

• Lo que nos hace preguntar: ¿Qué es el

centro?

• Romper el individualismo.

• Ver necesidades, recursos, canales para

responder la realidad.

• Invitación a ser una Iglesia de puertas

abiertas.

• Las periferias también tienen algo para

dar.

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· DICIEMBRE 2014 · 31· # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

“Las respuestas del Hno. Gabriel a los desafíos de hoy”

¿Qué respuestas siento que puede dar el carisma del Hno. Gabriel hoy a mivida?

1.- Familia

• Que el carisma del Hermano Gabriel nos

guíe a vivir en comunidades fraternas.

• Acompañar, cuidando y siendo testimo-

nio con nuestras acciones cotidianas.

• Que su fraternidad se refleje en nuestras

familias.

• Que nos guíe a profundizar la fe desde la

reflexión y el silencio.

• Proteger y cultivar la fe.

• Fomentar la oración.

• Consolidar el “núcleo familia”.

2.- Educación

• Perseverar en contextos adversos.

• Mantener una fe perseverante y sosteni-

da.

• Educar con una mirada desde lo huma-

no. Tener objetivos claros

• Obtener sabiduría de vida, desde el espí-

ritu de familia y fraternidad.

• Desde el punto de vista de la realidad

actual, estas respuestas mantienen una

total validez

• Fortalecer identidad, el diálogo, la com-

pañía, el cara a cara”.

• Aumentar tiempos de vínculos.

• Ofrecer referentes con valores e identi-

dad nazarena.

• Humanizar lo Nazareno desde la educa-

ción.

3.- Pastoral Juvenil

• Mirar, reconstruir, innovar los espacios

que tenemos de cuidado de la vida.

• Mirarse, dejarse acompañar, recons-

truirse, seguir repensando la vocación,

• Cultivar y amar la vocación.

• Vivir, confrontar, en la comunidad.

• Animarse, decidirse, entregarse, ínte-

gramente, humanizarse

• Centralidad de Cristo - Cultivar la fe

(pensándolo, haciéndolo, lográndolo)

• Relación con otros, con Dios, con uno

mismo.

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32 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

• Ser constructores de la buena noticia de

Nazaret.

• Salir a evangelizar. Misionar.

• Unidad en la familia nazarena.

• Ser constante en la oración.

• Formarse para ser individuo, “desmasifi-

car”.

• Ser persona formada para poder discer-

nir entre el bien y el mal.

• La rebeldía que nos impulsa a seguir

adelante por nuestros ideales.

• Rebelarse contra el consumismo.

4.- Pastoral Vocacional

• Que la fraternidad se refleje en las fami-

lias.

• Que nos guíe a profundizar la fe desde la

reflexión y el silencio.

• Cultivar la humildad y calidad de servi-

cio.

• Facilitar la formación vocacional: fami-

lia, profesión y vida religiosa.

• La transmisión con el testimonio de su

carisma nazareno en el medio cotidiano.

• Perseverar en el Espíritu Misionero.

• La transmisión de su vida a los jóvenes

para poder ser imitada.

• Transmitir su sencillez y gratuidad en

nuestro entorno familiar.

• Reconocernos hermanos en la diversi-

dad.

• Redescubrimiento del laicado.

5.- Carisma

Te pedimos Jesús que tengamos un co-

razón abierto como el Hermano Gabriel a

las realidades diversas, que vivamos de

puertas abiertas para incluir y que seamos

compasivos.

Señor, gracias por el don de la fe, que

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· DICIEMBRE 2014 · 33· # 7

I I Encuentro de la Familia Sa-Fa

marcó nuestro querido Hermano Gabriel

por medio de su perseverancia.

Señor, te pedimos que por intercesión

del Hermano Gabriel continuemos con

fuerza y alegría su carisma.

Ayúdanos Señor, junto a Gabriel, a edu-

car las conciencias desde el silencio, el

desprendimiento, la humildad, la oración y

el saber que necesitamos de los otros.

Gracias por abrirnos el corazón. Pedi-

mos que sepamos acompañar a quienes

optaron por vivir el servicio al estilo de

Gabriel.

“Construimos identidad, en el encuen-

tro con el otro desde la humildad”.

6.- Catequesis

• Gracias Señor por el encuentro, por des-

cubrir nuestra realidad en el diálogo con

el otro que sentimos “hermano”

• Por el regalo del carisma nazareno que

nos llega profundo a nuestras vidas.

• Queremos perseverar en el Espíritu Mi-

sionero.

• Mantener el espíritu de familia en todos

los ambientes.

7.- Periferias existenciales

• En el diálogo comunitario y fraterno

“cara a cara” las periferias se acercan,

nos hacemos familia.

• Cuidamos la vida propia y (ajena) del

otro para transformar la realidad.

• Estar atentos como Gabriel, desde la

realidad de cada uno a responder a

nuestro llamado.

• Desde nuestro lugar, ofrecer lo mejor

que tenemos.

• La entrega para cuidar la vida.

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34 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

InterSa-FaColegio Sagrada Familia de Montevideo, 30 de agosto.

XIX Encuentro de Catequistas Sa-FaColegio Sagrada Familia de Montevideo, 9 de agosto.

Page 35: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 35· # 7

Misión Nazarena de primaveraMariscala y Aiguá, 25 al 28 de septiembre.

Peregrinación a la tierra del Fundador27de junio al 18 de julio, Europa.

Peregrinación juvenil a la tierra del Fundador2 al 20 de septiembre, Europa. Alumnos del Bachillerato del

Colegio Sagrada Familia de Montevideo.

Reunión de Consejos Directivos y EquiposProvinciales y celebración de los 50 años deVida Religiosa de los Hnos. José María yVictorino6 de diciembre, Progreso.

Page 36: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

36 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

E L SÁBADO 7 DE JUNIO DE 2014 TUVO

lugar en el Colegio Gabriel Taborin

la reunión de las Fraternidades Na-

zarenas de la Provincia de Córdoba, asis-

tiendo a la misma los miembros de las

fraternidades Escuti, Bell Ville y Taborin.

En un clima de alegría por reencontrar-

nos se dio comienzo a las 9 hs la reunión

con la animación del Hno. Carlos Racco que

gentilmente aceptó nuestro pedido de su

servicio para esta ocasión.

En primer lugar el Hno. nos propuso un

gesto que consistió en escribir en pocas lí-

neas lo que considerábamos para cada uno

de los participantes un momento de alegría

de estos últimos tiempos, en consonancia

con lo que trataríamos después que era el

documento del Papa Francisco “Evangelii

gaudium”, posteriormente fueron deposita-

dos en una canasta y luego compartidos en

forma anónima estas frases que significa-

ban una alegría para el hermano que las

había volcado en el papel.

El Hermano nos hizo una explicación

del documento escrito por Francisco, donde

se toman para el análisis temas reales y nos

explica cuál sería el   camino actual para el

cristiano resumido en dos palabra “CONVER-

SIÓN PASTORAL” con la característica de estar

escrito en español.

Para   el desarrollo del tema   el animador

se valió de trozos tomados del documento

que plasmó en un pantalla y fue analizan-

dolo con el aporte de los presentes.

Es un documento que toca distintas rea-

lidades, la preferencia por los pobres, el rol

de la mujer en la Iglesia, los riesgos del

mundo actual frente al excesivo consumo,

el individualismo, etc.

Al cabo de la exposición y luego de una

oración de cierre el Hno. Carlos nos en-

tregó material para seguir trabajando el do-

cumento en nuestras reuniones   y además

nos dio un artículo escrito por Carlos María

Galli: “Las novedades de la Exhortación

Evangelii Gaudium, claves del pensamiento

pastoral de Francisco”.

Posteriormente compartimos el almuer-

zo a la canasta en un clima de alegría. Co-

mo sobremesa la Sra. Mónica Martínez

coordinadora del Equipo de Fraternidades

nos comentó algunas novedades en relación

al accionar del equipo próximamente, se

nos pidió reflexionar sobre los nombres de

CÓRDOBA, 7 DE JUNIO

Reunión de lasFraternidades Nazarenas

Reunión de las Fraternidades Nazarenas

Testimonio¿Qué significa para mí estar en laFraternidad?. . .

En primer lugar seguir el camino iniciado por mis hijos en

la congregación de Hermanos de la Sagrada Familia y poder

conocer y transmitir el carisma del Hermano Gabriel.. .

Él anduvo recorriendo muchos caminos, llevando el men-

saje y la palabra de Dios... , nosotros también podemos hacerlo,

tratando de mostrar a nuestro alrededor su carisma, el espíritu

de familia, los valores como la humildad, la honestidad, la pa-

ciencia, el amor a Dios y a nuestro prójimo.

Por otro lado el leer la Palabra de Dios en el evangelio, el

trabajo que hacemos de comentarla, interiorizarla, ver lo que a

cada uno nos dice y lo que nos deja, es una manera enorme de

crecer en la fe y así poder descubrir, cada uno, aunque de ma-

nera diferente, el camino para llegar a Él.

Es una ayuda para prepararnos cuando seamos llamados a

pasar a la otra vida y saber así que alguien nos está esperando

con los brazos abiertos como un padre siempre espera a sus

hijos.

JOSEFA APENDINO

Page 37: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 37· # 7

Reunión de las Fraternidades Nazarenas

algunas personas para la renovación del

equipo coordinador que se realizará próxi-

mamente, nos informó también sobre el II

Encuentro Familia Sa-Fa que se realizaría el

1 y 2 de noviembre en San Antonio de

Arredondo y se designaron dos personas

para preparar el informe de este encuentro

y se pidió si alguno de los presentes podía

dar testimonio por escrito de su experiencia

en la fraternidad.

Como segundo momento del encuentro

la Fraternidad Escuti preparó, con motivo

de la víspera de Pentecostés, un momento

que fue iniciado con una alabanza al Espíri-

tu Santo en forma de canción, luego leímos

la palabra Juan 20-19-21 , y   la trabajamos

con las preguntas de Lectio divina y finali-

zamos con la Oración por la vocaciones pa-

ra la Familia Sa-Fa.

Finalizado todo esto y con la alegría de

habernos encontrado nos despedimos no

sin antes compartir unos mates entre char-

las y novedades de nuestras familias.

Encuentro deAnimaciónVocacional

C ON ESTE ENCUENTRO SE PU-

so en marcha la “Obra de

las Vocaciones” en la Pro-

vincia, conforme a la decisión 2 del

IIª Capitulo provincial, celebrado en

Córdoba en marzo de 2014.   Se rea-

lizó en la Comunidad de Buenos Ai-

res el  5 y 6 de julio  y participaron:

Gastón Dabin y Mario Fernández

(Aguada), José María Díaz (San

Juan), Liliana Aceveda y Osavaldo

Menyou (San José de Mayo), Sandra

Suárez y Rodolfo Spagnuolo (Tan-

dil), Gustavo Pico (Escuti) acom-

pañados por los Hermanos Néstor

Achigar y Mamerto Sánchez. Un

momento relevante del encuentro

fue la narración de la vocación de

cada uno. Con la iluminación de

textos del 2º Congreso   Continental

latinoamericano de Vocaciones se

fueron descubriendo los elementos

constitutivos de la vocación. Final-

mente se decidió asumir la vocación

en la Familia Safa según el Proyecto

de Vida de la Provincia IV.2. para

ello se desea realizar durante el año

2015 jornadas vocacionales en to-

dos los ámbitos de la Provincia, a

fin de instalar el tema vocacional

con miras a favorecer una cultura

vocacional.

Belmont 2014

D EL 8 AL 12 DE JULIO SE

realizó en la comunidad

de Santa María el 2º en-

cuentro del itinerario de discerni-

miento vocacional, llamado “Bel-

mont”. Participaron Romina Maita,

Fátima Lagoria y Gabriel Chaile,

quienes fueron acompañados por

los Hermanos Valentín, Gastón y

Mamerto.

Hicieron una experiencia de vi-

da comunitaria, a la vez realizaron

una misión en dos barrios de la

localidad de Lampacito.

Allí visitaron las casas y realiza-

ron una celebración en la que parti-

ciparon las familias visitadas, en

noviembre se realizará el 3º en-

cuentro denominado “Belley”.

Equipo AnimaciónVocacional

E L 8 DE AGOSTO SE REALIZÓ

en la Aguada un encuentro

del equipo de animación

vocacional. Participaron los inte-

grantes del sector Uruguay; en esta

ocasión se integraron al equipo Ed-

gardo Duarte, Nelly Fagúndez y

Valeria Rial, participaron también

los Hermanos Néstor y Mamerto.   Se

desarrollaron 3 momentos:

• Lectura y reflexión de un frag-

mento del articulo “Animación

vocacional” de Walter Magni.

• Presentación y diálogo acerca

del “Itinerario Vocacional de la

Provincia” que se viene elabo-

rando entre los Hermanos.

• Preparación del bloque vocacio-

nal de la Jornada del 6 de di-

ciembre en la que participaran

los Consejos de Dirección y los

Equipos de Animación del sector

Uruguay.

Noticias varias

Page 38: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

38 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

Jornada de Directivos y Equipos de Animación de la Provincia

E L SÁBADO 6 DE DICIEMBRE, EN PRO-

greso, se realizó el Encuentro anual

de los Directivos y Equipos de Ani-

mación. Reunidos en torno a la Palabra

(Mateo 13, 44-50), se comenzó la jornada.

“El reino de Dios es como un tesoro escon-

dido en un terreno” “Es también como un

comerciante que anda buscando perlas fi-

nas”. “Es también como una red que se echa

al mar y recoge toda clase de pescado”. Para

la meditación se invitó a los participantes a

escribir y colocar en un cofre: “cuál es el te-

soro mejor guardado que tengo y que lo

pongo a disposición de la Comunidad de la

que soy parte”. Luego se escuchó la can-

ción: “Esto que soy, eso te doy”.

Al finalizar la oración, el Hno. Néstor

presentó el origen del Equipo de Anima-

ción Vocacional. Ayudado con un insumo

donde está detallado lo planteado en el

Proyecto de Vida del Instituto 2013, y don-

de se destaca el Capítulo IV: Descender al

corazón de nuestra vocación. En el Punto

2. Vocación en la Familia Sa-Fa, se puede

leer: “En el proceso de desarrollo y creci-

miento de la familia Sa-Fa vemos la nece-

sidad de discernir las diversas vocaciones

que hay en ella. ¿Cuál es mi misión y vo-

cación en la familia Sa-Fa, dentro de mi

contexto y originalidad? Para poder res-

ponder a esto hay varios caminos. Uno de

ellos fue la formación de este nuevo Equi-

PROGRESO, 6 DE DICIEMBRE

Jornada de Directivos yEquipos de Animaciónde la Provincia

ROSARIO LLUGAIN

Page 39: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 39· # 7

Jornada de Directivos y Equipos de Animación de la Provincia

po de Animación Vocacio-

nal que tiene entre sus co-

metidos:

• Elaborar y mantener ac-

tualizado el Proyecto de

pastoral vocacional.

• Organizar y animar las

actividades de pastoral

vocacional.

• Acompañar a los jóvenes

que muestran inquietu-

des vocacionales.

Una de las primeras ac-

tividades que tomaron como

equipo, fue la de instalar el

tema vocacional y para eso

buscaron motivar, a los dis-

tintos ámbitos de la Provin-

cia en orden a lo que se

llama cultura vocacional. En

esta misma línea uno de los

integrantes de este equipo

invitó a todos los presentes

a realizar un momento de

introspección y poder tra-

bajar en tres dimensiones

nuestra propia vida de bús-

queda, de camino hacia lo que somos hoy, y

así llegar a descubrir ¿dónde está mi co-

razón hoy? Divididos en los equipos de ani-

mación, que ya funcionan, se reflexionó y

se puso en común este trabajo. Las palabras

del Hno. Aurelio iluminaron todas las expe-

riencias humanas y alentó a continuar en

este camino de búsqueda permanente.

Para ir finalizando con este Encuentro

fueron entregados: un souvenir de parte del

Equipo de Animación Vocacional, luego la

lectura orante del Evangelio de cada día de

manos del Hno. Néstor; y la presentación,

del nuevo lema y logo para el 2015, con la

fundamentación correspondiente. Para el

año que viene: “Llamados a vivir Nazaret”,

acompañará nuestra vida en las Comunida-

des porque abre la posibilidad de acción

pastoral, que es una prioridad declarada por

el Papa Francisco “Año de la Vida Consagra-

da”.

La Celebración de la Eucaristía, presidi-

da por el recién ordenado Pbro. Hno. Juan

Carlos León, fue el broche que selló toda

esta jornada, pues festejamos que dos de

nuestros Hermanos que acompañan dife-

rentes Comunidades, celebraron sus 50 años

de Vida religiosa.

Palabras del Hno. Victorino Lázaro:

“Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.

Gracias, Señor. Gracias María, Gracias a to-

dos”.

Y el Hno. José María de la Fuente nos

compartía: “Hoy, como decía San Agustín,

"saltan las chispas del corazón de los amigos,

expresadas en el rostro, en la lengua, en los

ojos, en mil gestos de ternura". Con el corazón

restallante de gozo y gratitud... miro el cami-

no recorrido y doy gracias”.

Gracias en nombre de todas las Comu-

nidades que podemos compartir tanta vida

consagrada y entregada.

Page 40: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

40 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

La Aguilera

L E PARECIÓ UN ACTO NECESARIO, Y

que se debía a sí mismo, recorrer al-

gunos sitios claves de su vida. Fue

como sin querer, se decía, pero en el fondo,

lo necesitaba. Después de bajar del coche,

se dirigió hacia el convento y fue recono-

ciendo lo que había visto de adolescente,

aunque de pantalón corto, de acuerdo a la

época; puertas, paredes, claustros y las ad-

yacencias, como se decía, con los gallineros,

conejeras, patios (que ahora eran campos de

cebada), los caminos interiores de la finca,

las tapias centenarias, y también echando

de menos lo que había desaparecido por re-

modelaciones, arreglos o transformaciones.

¡Cuántas veces con sus guardapolvos gri-

ses, en una escala cromática de todos los gri-

ses posibles e imaginables, habían recorrido

aquel camino hacia la isla, en la charca, re-

zando el rosario, charlando animadamente

de sus pequeñas vidas, contándose sus temo-

res y esperanzas! Se le pasaban por la imagi-

nación las ilusiones de los compañeros que

anhelaban ser Hermanos y que tenían una

sincera necesidad de cumplir sus anhelos.

Había que estudiar duro y sin tregua. Se

sabía que, a quienes no tuvieran las califica-

ciones con “notable”, no les quedaban mu-

chas esperanzas de poder seguir para

frailecillos. Clases de mañana y de tarde, de

lunes a sábado, y en un horario extenso y

exigente. Allí no había excusas posibles: era

estudiar y trabajar. “Militia est vita hominis

super terram” decía el Hno. Chicote, y no

quedaban dudas de que era muy cierto. La

disciplina era como la de la milicia y, en al-

gunos casos, más severa. Te arreglabas como

podías y aguantabas o, de lo contrario, no

encontrarías muchas compasiones y zalemas

a tu alrededor. Sin embargo, ahora le parecía

que aquello fue aceptable en su tiempo y en

su lugar; al fin de cuentas, en sus pueblos y

en sus casas, no era muy diferente.

Volvió lentamente la vista hacia los

muros del convento, y una nostalgia pal-

pable se apoderó de sus recuerdos. Él

había sido feliz entre aquellas tapias que

los cercaban como un aprisco y los aisla-

ban de los males del mundo.. . “Las ase-

chanzas del maligno nos rodean día y

noche; hay que tener las armas siempre lis-

tas para la batalla contra el mal... sicut acies

ordinata” decía el Hno. Barbadillo, y ello

conllevaba unas Avemarías especiales al pie

de la cama antes de acostarse, todo con las

luces de las veladoras prendidas (lámparas

comunes pintadas de azul o rojo), que da-

ban al ambiente de los dormitorios un as-

pecto extraño, como de sala de baile, donde

sólo se apreciaban formas y siluetas que se

movían, antes del “Viva Jesús en nuestros

corazones: Por siempre jamás. Amén”. Y el

ruido de los jergones, y la sombra del Hno.

Pesquera paseando entre las filas de las ca-

mas.

¡Qué ganas de hablar algo con Ayuso, o

comentar el partido de fútbol con Ruiz, pe-

dirle un poco de raíz de regaliz a Escobar o

recontar las canicas ganadas en la jornada

jugando al gua, al cuadro o a las siete y me-

dia. Pero el silencio debía ser total y abso-

luto. Era el tiempo del gran silencio. “La

loca de la casa debe estar sujetada por la fre-

cuente meditación de las verdades eternas;

para ello el silencio y el recogimiento son im-

prescindibles. Un aspirante modesto y humil-

de será un excelente Hermano el día de

mañana” advertía el Hno. Barbadillo. Y en

el ejercicio de la culpa, los viernes al caer la

tarde, “me acuso de haber faltado al gran si-

lencio haciendo ruidos destemplados e invo-

luntarios”, “me acuso de haberle dicho a

Olmedo que hacía mucho frío”, y dichas fal-

tas al gran silencio nos perseguían como

una de las mayores iniquidades que podían

cometer los hombres...

La AguileraHNO. JOSÉ MARÍA DE LA FUENTE

Page 41: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 41· # 7

La Aguilera

Aquellos dormitorios, que eran salones

enormes, en invierno eran salas refrigera-

das bajo cero, en las inmensidades de la me-

seta y abiertas a todos los vientos de

Castilla. ¡Otra, qué fríos, Dios santo! Nues-

tros dedos, orejas y demás apéndices se

adornaban de mortificantes sabañones que

nos enloquecían de dolor y desesperación.

“Las mortificaciones tonifican y endurecen el

carácter, nos hacen hombres fuertes que so-

portarán los embates del enemigo y preser-

varán nuestra virtud a pesar de las insidias

del maligno: sacrificio, sacrificio...” nos acon-

sejaba el Hno. Barbadillo.

Y ahora que estaba volviendo de su visi-

ta, peregrinación había terminado siendo,

se agolpaban en su corazón recuerdos, ros-

tros, nombres, lugares y situaciones vividas

que nunca imaginó que se le hubieran gra-

bado en su vida hasta ese hondón del alma.

Nuevamente miró con delectación y

asombro, mezcla de cariño, nostalgia y cier-

ta sorna, la aguja del santuario bajo cuya

cúpula estaba “el santo que está en el aire”. Y

se dijo que allí había sido feliz; pasando ra-

ya, muy feliz.

¿Qué habría sido de tantos de aquellos

compañeros inquietos, tímidos, trabajado-

res, sencillos, pobres y buenos? ¿Qué

sueños se les habrían cumplido? Quizá Or-

tega sería gran futbolista del Atleti, Laguna

el torero triunfador de las Ventas, Valdivie-

so el ciclista admirado del Tour o de la

Vuelta, Baltanás estaría en las misiones del

fin del mundo predicando la fe cristiana,

Bombín en el espionaje más secreto, Curiel

como capitán de la fiel infantería, y hasta

Vallejo que quería ser un científico... Y así,

una lista interminable de nombre de mu-

chachos de pueblo, esencialmente buenos,

quizá por falta de oportunidades para ser de

otra forma.

“Los de pueblo no tenemos ciertos vicios y

desórdenes de las gentes de las ciudades,

donde el mal tiene campo abierto a sus per-

versiones y tentaciones engañadoras; lean al

P. Gracián y se darán cuenta de esto y mucho

más...” sentenciaba el Hno. Barbadillo.

Y sí, éramos de pueblo. La inmensa ma-

yoría de los pueblos cercanos de la Ribera

del Duero, algunos de pueblos más alejados

de la meseta, muy raros los de ciudades.

La primera vez que la mayoría veíamos

la televisión, fue en el salón parroquial,

“gentilmente cedido por el sr. Cura párroco, a

quien agradecemos y por quien elevaremos

nuestras oraciones”, en un partido de fútbol

de la Copa de Europa, nadie sabía cómo

funcionaba, y estuvimos un buen rato sólo

con sonido, sin imagen... y el Hno. Santove-

nia: “esto es como el cine, pero al instante, o

sea, que está ocurriendo ahora, no sé si me

entienden; el cine es ficción, esto es real, no sé

si me captan”. Y el Hermano le decía a Ni-

canor que sintonizara bien la tele, y noso-

tros, como parvulitos, esperando el desa-

rrollo de la parte técnica y ver aquella

maravilla moderna.

Panorámica del

monasterio y santuario

de San Pedro Regalado

en La Aguilera.

Page 42: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

42 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

La Aguilera

En el convento teníamos cine los sába-

dos de noche: el Gordo y el Flaco, Fanto-

mas, del oeste, vidas ilustres, vidas de

santos, patrióticas, etc.; dependía a qué

Hermano le tocaba elegir la película y ya

sabíamos si sería un tostón o algo intere-

sante... y el Hermano Herrera que tenía el

rollo de celuloide lleno de papelitos para sa-

ber cuando debía censurar algunas escenas

con el expeditivo método de poner un

cartón delante del foco... Éramos buenos

hasta decir basta.

A su memoria llegaron los recuerdos de

los paseos por los pinares o a las cuestas

cercanas, cuidando de no pisar los sembra-

dos para no recibir algún castigo de la vara

culebrera en la zona de las asentaderas... Y

el grupo de los que debían ir detrás del Her-

mano y en silencio todo el paseo por alguna

falta cometida, en todos los casos faltas me-

nores que ahora le hacían sonreír y casi reír

a carcajadas al recordarlas. Aquel túnel que

comunicaba los comedores con la despensa

y que invariablemente suponía una tenta-

ción casi invencible para no mandarse al

coleto algún sobrante de la mesa de los

Hermanos, pues de los muchachos sólo so-

braba el apetito... En el reparto rotativo de

los trabajos tocó al grupo de los “excusa-

dos” (baños) tomar a su cargo por una

quincena la recogida de las mesas y llevarlo

sano y salvo hasta la despensa... pero había

que pasar el túnel, y allí ocurrió que la na-

turaleza venció a la ascesis y los trozos de

dulce de membrillo, pequeños y náufragos,

pasaron del plato al gaznate en segundos.

Nadie vio nada, o eso pareció, pero en la

mañana vino la inquisición y con tribunal

incluido, la sentencia y el castigo fueron

fulminantes, tocó estar un mes mirando du-

rante los recreos la pared del monasterio y

contemplar, como distracción, las telas de

araña y sus moradoras. Y a fin de mes, en

las notas de formación, fue un cantar de ce-

ros que parecían las trompetas de Jericó.

A la memoria le vinieron las comidas en

el enorme comedor donde sentados por co-

rros, con un jefe de mesa, se hacían las par-

cas y austeras colaciones conventuales.

Siempre en silencio y oyendo vidas de san-

tos o libros de aventuras piadosas, aunque

algún Salgari se coló. Los domingos y fies-

tas de guardar, todos esperábamos el Bene-

dicamus Domino para soltar nuestra alegría

de adolescentes y charlas a más no poder,

preferentemente de fútbol, de espías, de

cohetes y de las trivialidades de nuestra vi-

da diaria. Y en la cena el silencio era mati-

zado con la lectura de la vida del santo del

día siguiente. Y antes, la lectura de algunos

puntos del Kempis. Y había que estar aten-

tos y de oreja alerta, pues invariablemente

después venía la pregunta del Hermano:

“Núñez, ¿qué santo es mañana?” Silencio,

susurros, ambiente de misterio y zozobra. Y

la respuesta contundente y desahogada, co-

mo un descargo de la conciencia: “San Juan

de Dios, virgen y mártir”. Y las risas sofoca-

das, temiendo lo peor, pero inaguantables.

“¿De dónde sacó esa majadería?” “Me lo dijo

Arreba”. “Por semejante falta de respeto,

Arreba comerá la sopa durante una semana

en el alfalfar”. Y allí se veía caminar con

tiento y equilibrio al culpable con su plato

de sopa al campo de alfalfa. Después de to-

do, nunca se nos ocurrió preguntar cómo se

sentía, cual infante hierático, diríamos hoy

que en una actitud tan ecológica... Los pe-

regrinajes con la sopa eran variados y dia-

rios: al comedor de los novicios, al comedor

de los escolásticos, al claustro del De pro-

fundis, a tal sitio o a tal otro: “de rodillas,

pide permiso y perdón, y agradece cuando lo

manden volver”. Siempre nos tratábamos de

usted, aun entre los compañeros. También

le vinieron a la memoria los comentarios

chuscos y las bromas de los amigos del

pueblo, la famosa cuadrilla de Los Ajos,

nunca igualada en Piñel, que no les cabía en

la cabeza cómo aquel amigo les llamaba de

usted, era la costumbre conventual, que si

costó adquirirla mucho más costó perderla.

Su mente se llenó de anécdotas, a cual

más inofensivas y sanas.

Él había venido a visitar el convento un

poco por curiosidad, otro poco por ver có-

mo estaba aquello, y algo por nostalgia,

aunque le costaba confesárselo. Y se dijo a

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· DICIEMBRE 2014 · 43· # 7

La Aguilera

sí mismo: Mira que éramos buenos. Senci-

llos, buenos, honrados, de pueblo... Aunque

cada tanto veíamos desfilar a algunos com-

pañeros con su maletilla de madera y cabiz-

bajos hacia su casa. ¡Le han echado! Y a

todos se nos atenazaba la garganta y el te-

rror circulaba por las filas temiendo la lla-

mada fatídica. Nunca nos pudimos despedir

de ninguno de ellos. ¡Qué terribles que eran

aquellos momentos! El temor y las dudas

nunca surgían por no animarse a seguir pa-

ra frailecillos; lo tremendo era que no te de-

jaran seguir. Y un suspiro se le escapó, y se

dijo a sí mismo con sorna y tristeza: y mira

ahora... tantas contemplaciones, tanta psi-

cología, tantas facilidades... y no queda casi

nadie. ¿Cuál es el efecto y cuál es la causa?

Y un gran silencio lo envolvió.

Hay momentos de la vida en que nos pa-

rece que volvemos hacia atrás y quisiéra-

mos vivir nuevamente aquello que ya pasó,

no para cambiarlo, sino por el placer de re-

vivirlo y sentir los pequeños detalles que

quedaron encarnados en nuestra alma.

¿Qué habrá sido de la huerta? Aquel terre-

no regado y mimado con nuestro trabajo

entusiasta, si era en horario de clase, no

tanto cuando era en horas de recreo. Allí

transportábamos en cajones el estiércol de

los gallineros; allí cavábamos la tierra y

plantábamos las hortalizas y verduras de la

estación, allí quedaban nuestros sudores ju-

veniles abonando los surcos. A la mayoría

nos gustaba trabajar en la huerta; al fin y al

cabo era nuestro medio ambiente en los

pueblos y cada cual quería demostrar que

sabía hacerlo como nadie: en mi pueblo se

hace así o asá, pues en mi pueblo a esto lo

llamamos de tal forma, esta herramienta es

para tal cosa, etc. ¡Cuántas tardes bregando

en la huerta!

Hasta que a alguien se le ocurrió la idea

fatal de hacer una incursión nocturna, du-

rante el recreo, después de la cena, al am-

paro de la oscuridad, aunque el patio tenía

unas lánguidas y mortecinas bombillas, pe-

ro en la huerta reinaba la oscuridad. Y hacia

allí, con sigilo y nocturnidad, nos dirigimos.

Cada cual echó mano a lo que pudo o supo

y sin miramientos se lo zampó velozmente.

Y así varias escaramuzas verduleras se fue-

ron sucediendo. Pero algo falló, o alguien

fue con el soplo. Una de las noches al ter-

minar el recreo e ir a la capilla para la ora-

ción antes de acostarnos, nos hicieron

poner en fila a lo largo de la pared del

claustro, y el Hermano Molpeceres paseó su

simpática sonrisa por la interminable fila y

fue haciendo salir de la misma a los que le

pareció, claro coincidían en que todos

tenían el calzado lleno de barro. Aquella

tarde se había regado a base de bien la

Aspirantes del año 1961

en La Aguilera.

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44 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

La Aguilera

huerta, y los incautos merodeadores noc-

turnos no se habían percatado de ese deta-

lle, mientras salían de su cobijo terrenal las

zanahorias, pepinos, puerros, guisantes, etc.

y pasaban a buen recaudo a los estómagos

siempre anhelantes de alimento de los bue-

nos aspirantes. Se acabaron las salidas noc-

turnas en busca de sustento y comenzaron

las salidas diurnas buscando raíces de rega-

liz, hasta que el paisaje empezó a quedar

como zona de bombardeo por los pequeños,

y no tanto, cráteres que hacíamos buscando

aquellos estimulantes palitos.. .

Y su mente lo llevó al lado de la huerta,

donde estaba la piscina que se usaba para

regar, y también para los baños veraniegos

y casi invernales, donde nos quedábamos

morados por el frío cuando llegaba la orden

de la higiene colectiva; cada uno trataba de

mojarse el bañador y no meterse al agua,

que estaba casi congelada, y al mismo tiem-

po esquivar al Hermano Antón que invaria-

blemente te pescaba y te lanzaba al agua sin

previo aviso y te quedabas buscando la res-

piración y la vida que se te iban fuera del

cuerpo. ¡Qué frío, Dios santo! ¡Qué afán de

higiene! Si la mayor parte del invierno y es-

taciones adyacentes nuestro cuerpo se

mantenía enjuto y saludablemente seco,

apenas mojadas las zonas visibles que el

Hermano de turno podía controlar. Si hasta

nos limpiábamos los dientes por turno y

cuando se ordenaba, de día y vez. Y la

manía de no dejar tomar agua, sólo en las

comidas y medido. Eran aspectos que ahora

se le antojaban ridículos y peligrosos, pero

que reconocía que le habían dado una for-

mación y un estilo de vida que ahora los

veía disciplinantes de la voluntad y que ca-

si, casi, los aprobaba, aunque con matices.

Sentado en el auto, y con la mano en la

llave de contacto, se quedó aún un rato mi-

rando las tapias del convento, el prado que

lo rodeaba hasta el arroyo, los álamos y las

junqueras, todo aquello que algún día fue

tan cercano y familiar y que ahora le pasaba

por la mente y por el corazón dejándole una

sensación tibia y cariñosa. Volvieron a pa-

sar rostros de compañeros que siguiendo

aquella idea llegaron a ser Hermanos. Al-

gunos, se daba por descontado, eran los

mejores muchachos del grupo, y ahora an-

daban por la India como Hermanos misio-

neros; otros estaban en América, otros se

quedaron en Europa. ¿Qué misterio había

en todas esas vidas? ¿Por qué ellos siguie-

ron y los otros tomaron por otros caminos?

¿Quién acertó y quién se equivocó? ¿Al-

guien acertó? ¿Alguien se equivocó? ¿Qué

hacía él allí, en ese mediodía ardiente de

verano, bajo el sol calcinante de Castilla?

Una fuerza extraña lo retenía en el

asiento sin decidirse a arrancar y volver a

casa. Fue consciente de los ruidos en la ca-

rretera cercana, que llevaba a los pueblos

vecinos de la Ribera, y a su mente acudie-

ron las estrofas del canto: “Llegad de la Ri-

bera/ venid pueblos devotos / venid y vuestros

votos / al santo presentad. / Es Pedro Regala-

do / es nuestro santo amado / venid, venid,

llegad.” Y vio claramente la Misa que se ce-

lebraba el 13 de mayo en la pradera del mo-

nasterio, las gentes sencillas y creyentes que

acudían de toda la comarca a pasar el día en

la romería, y después de la Misa era funda-

mental ir a tomar agua en la fuente del san-

to, dentro de las tapias del convento y al

final del paseo a la charca. Y en la tarde, ver

los espectáculos de gimnasia que traían los

Hermanos y alumnos del colegio de Madrid;

y ya en la noche la merienda-cena en la ar-

boleda de la isla. Ya mayo entrado, era una

gloria ver todo verde y florido como si Cas-

tilla en ese tiempo fuera un edén.

Casi no le daba la memoria para los re-

cuerdos que se agolpaban y bullían por ha-

cerse presentes con los mínimos detalles de

una actualidad insospechada.

Se dijo a sí mismo que volvería; seguro

que sí.

Y, al arrancar el auto, sintió una calma

que era muy parecida a la paz. Aún se veían

por el retrovisor las tapias del monasterio,

mientras enfilaba hacia la carretera de la

Esgueva. En esos momentos fue consciente

del tremendo bochorno; prendió el aire

acondicionado y se dispuso a gozar del pai-

saje y el ambiente de Castilla.

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· DICIEMBRE 2014 · 45· # 7

Caminos Nazarenos

E NTRE EL 26 Y 28 DE

JUNIO TUVO LUgar

en San Antonio el

encuentro “Caminos Naza-

renos”, de formación para

docentes y educadores de la

ASF. Fue una instancia bien

aprovechada por los casi 40

participantes que pudieron

disfrutar del encuentro in-

terpersonal informal, el

trabajo en grupos, los mo-

mentos personales y los

bien preparados tiempos de

oración, culminando con

una sentida celebración fi-

nal de la Eucaristía.

CÓRDOBA, 26 AL 28 DE JUNIO

Alejarse para acercarse

Testimonio“Alejarse para acercarse” fue la premisa con la que fui invitada a “Caminos

Nazarenos”. Debo admitir que acepté la propuesta con muchas dudas. Tantas ve-

ces uno piensa que lo que puede aportar a la utopía comunitaria en la que la Sa-

grada Familia nos invita a involucrarnos es ínfimo y más que insuficiente. Es así

como la motivación suele diluirse en miedos, incertidumbres e inseguridades.

Pensando en la experiencia a la distancia, puedo describirla como un momento

de intensa comunión intra e interpersonal. Fueron tres días de mucho frío pero

debo decir que la tibieza del encuentro con el otro abrigó más que la bolsa de

dormir. Y llega la hora del balance. ¿Qué dejo? Prejuicios personales, miradas

erróneas de una realidad cortada a medida. ¿Qué me llevo? Vínculos fortaleci-

dos, momentos para atesorar, ganas de contagiar entusiasmo y la claridad con la

que se compartió la propuesta del encuentro. Muchas gracias por la invitación!

VERÓNICA GIACCAGLIA

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46 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

E L 9 DE AGOSTO, EN EL COLEGIO SA-

grada Familia, de la Aguada, se rea-

lizó el XIX Encuentro de Catequis-

tas Sa.Fa. En el 150 aniversario de la pascua

del Vble. Hno. Gabriel Taborin, y en los 125

años de la llegada de los Hermanos al Uru-

guay, se invitó a los Catequistas de todo el

país, a través de la Vicaría de la Educación

de la Arquidiócesis de Montevideo, así co-

mo de AUDEC (Asociación Uruguaya de Edu-

cación Católica), y de la CEU (Conferencia

Episcopal Uruguaya) para participar de este

encuentro.

A dicha invitación respondieron afirma-

tivamente alrededor de 250 catequistas. El

salón de actos del colegio estaba totalmente

colmado de catequistas; la ambientación del

salón estaba de acuerdo al motivo del en-

cuentro, se habían colocado iconos y carte-

les con referencias al Vble. Hno. Gabriel

como catequista, la Sagrada Familia, los 125

años que está cumpliendo el colegio de la

Aguada, etc. Nos honró con su participa-

ción Mons. Orlando Romero, obispo eméri-

to de la diócesis de Canelones e impulsor y

creador del Oficio catequístico nacional. El

Encuentro estuvo animado por el Licencia-

do Luis M. Benavides, catequista, maestro,

escritor y Director de Primaria del Colegio

Sagrada Familia (Buenos Aires) miembro

del Instituto Superior de Catequesis de Ar-

gentina (ISCA) y de la Asociación Española

de Catequetas (AECA).

El temario giró en torno a “Metodología

catequística. ¿Cómo dar catequesis a los

niños y jóvenes de hoy?”. Este apasionante

análisis de la realidad pastoral de nuestro

medio y en estos tiempos despertó el in-

terés y el entusiasmo de los participantes

en el seguimiento de la exposición con total

COLEGIO SAGRADA FAMILIA, 9 DE AGOSTO

XIX Encuentrode Catequistas Sa-Fa

ROSARIO LLUGAIN - HNO. JOSÉ MA. DE LA FUENTE

XIX Encuentro de Catequistas Sa-Fa

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· DICIEMBRE 2014 · 47· # 7

XIX Encuentro de Catequistas Sa-Fa

atención y en la expresión de la aprobación

con reiterados aplausos y muestras de acep-

tación y aprobación. El horario fue exigente

y extenso y, a pesar del número, se desa-

rrolló con agilidad y comodidad.

“Apuntes para una espiritualidad cate-

quística para el siglo XXI” fue el elemento

cimentador de nuestra vocación de cate-

quistas. La metodología, los itinerarios, los

elementos pedagógicos tienen que estar

apoyados en la fe y en la oración, nuestra

tarea es evangelizar y para ello es necesa-

rio tener conciencia que somos herramien-

tas de la comunicación de Dios a los

hombres. Reflexionando sobre la Cateque-

sis de hoy, descubrimos que ésta tiene vital

importancia para la vida de la Iglesia. Los

catequistas somos protagonistas de una his-

toria antigua y nueva, a la vez. La cateque-

sis les ha dado un perfil de frescura a las

comunidades eclesiales y, sin duda, es uno

de los espacios del nacimiento de las voca-

ciones.

El Arzobispo de Montevideo, Mons. Da-

niel Sturla, presidió la celebración de la Eu-

caristía en la parroquia, y en sus palabras

transmitió el cariño, el reconocimiento y la

responsabilidad de la vocación del cate-

quista. Hizo referencias al Vble. Hno. Ga-

briel, y a varios Hermanos que le acompa-

ñaron durante su infancia como alumno de

los Hermanos. También el Obispo emérito,

Mons. Orlando Romero, dio al Encuentro

un aporte y apoyo cariñoso y cercano, ha-

ciendo el envío “ad gentes” al finalizar la

celebración.

La tarea de catequizar se convierte en

una constante actitud de vivir y estar en

sintonía con los tiempos y las mociones del

Espíritu Santo. La fe y la transmisión de la

fe son inseparables de la caridad y de todos

los valores evangélicos.

La foto grupal, en las escaleras de la pa-

rroquia, fue también una forma de apoyar-

nos y sentirnos comunidad catequística en

los diferentes lugares donde desarrollamos

nuestra misión.

Algunos aportes de Luis Benavides a la

Metodología Catequística:

“Hablar de método, muchas veces, signifi-

ca reducir o encuadrar la realidad, mucho

más, cuando se trata de realidades que hacen

a la interioridad del hombre y su proyección

hacia los demás o hacia Dios. Es por ello que

el hombre puede hablar de Método: como un

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48 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

camino para llegar hacia... y transmitirlo

también a otros.

Cuando se trata de Metodología Catequís-

tica, los límites de los métodos aparecen más a

la vista. Evidentemente, la adhesión de los ca-

tequizandos a la fe, a Dios, no depende, en úl-

tima instancia, del catequista; sino del

accionar de Dios y de la respuesta libre del

hombre a tal accionar. Una sólida espirituali-

dad y un testimonio de vida cristiana en el ca-

tequista constituyen el alma de todo método.

El catequista tiene que provocar, en la ca-

tequesis, el encuentro personal y comunitario

con Dios. Todo esto supone que el mismo ca-

tequista tenga un contacto asiduo y directo

con la Palabra. El catequista debe ser un gran

"escuchador" de la Palabra, ya que él es el

portador de un mensaje, que él mismo recibió

a su vez; por ello debe releerlo continuamente

para mantenerlo vivo en su corazón”.

Algunos testimonios de catequistas que

participaron de este Encuentro:

“La experiencia de participar en el En-

cuentro de catequistas 2014 fue fermental y

enriquecedora, desde todo punto de vista,

pues permitió repensar prácticas y dialogar

con los equipos pastorales de otros colegios,

compartiendo dificultades y aciertos.

La organización de la jornada tuvo pre-

sente todos los detalles, haciéndonos sentir

parte de la familia Sa-Fa. La conferencia fue

excelente y motivadora en sus propuestas;

llevada adelante por el carismático diser-

tante que nos permitió vivir en plenitud el

encuentro.

La Celebración Eucarística de cierre,

presidida por Mons. Daniel Sturla tuvo la

sencillez y la calidez característica de nues-

tro carisma nazareno-taboriniano, logrando

crear un clima íntimo y de comunión ver-

dadera con Jesús.

En síntesis, participar de este encuentro

fue vivir en comunidad “el hogar”, en la cali-

dez del encuentro; “el taller” en la tarea com-

partida y “el templo” en la alegría celebrada”.

“El encuentro removió acciones que se

vienen gestando en la labor de la cateque-

sis, como también refrescar el espíritu del

por qué y para qué de ellas. Como instancia

de formación permite interpelar o encua-

drar en qué medida lo que se está llevando

adelante, está cercano o lejano con el

quehacer de nosotros catequistas e institu-

ción. Recordar, remover, aprender, transfor-

mar acciones nuevas y sus propósitos fue el

aporte que brindó este Encuentro, así como

el re-centrar lo celebrativo en las mismas.”

Agradecemos al Señor por habernos da-

do esta oportunidad de festejar y celebrar

juntos, la llegada de los Hermanos de la Sa-

grada Familia al Uruguay. Fue una gracia de

Dios poder experimentar la fraternidad na-

zarena, el trabajo fecundo y la disponibili-

dad compartida.

XIX Encuentro de Catequistas Sa-Fa

Page 49: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 49· # 7

COLEGIO SAGRADA FAMILIA DE MONTEVIDEO, 30 DE AGOSTO

Convocados por el juego:magia de encuentro,vínculos y alegría

HNO. HÉCTOR DA ROSA

E L SÁBADO 30 DE AGOSTO DE ESTE

año, 2014, se realizó, en el Colegio

Sagrada Familia de Aguada, el In-

terSa-Fa anual de los primeros años de Li-

ceo de nuestras Comunidades educativas

del Uruguay. Concurrieron a la cita unos

350 alumnos y un grupo muy numeroso de

animadores juveniles, catequistas, profeso-

res, directivos, y varios Hermanos de dife-

rentes comunidades.

La convocatoria era a vivir un jornada

jugando. Un modo original de encuentro

entre chicos y chicas desafiando su creativi-

dad lúdica. Se los dividió en grupos y fue-

ron ubicados en tres patios el Colegio. En

cada patio estuvieron jugando toda la

mañana más de 80 participantes.

Los animadores juveniles se encarga-

ron de conducir la dinámica de una serie

de juegos previamente preparados por

ellos en los que sus compañeritos más pe-

queños debían desplegar su habilidad e

ingenio. La alegría de la música y la ani-

mación de consignas por altoparlantes

acompañaron el juego de los protagonistas

de la jornada.

InterSa-Fa 2014

Page 50: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

50 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

Las ya seculares estructuras del primer

Colegio Sagrada Familia en el Uruguay, se

llenaron de vida una vez más... En sus 125

años, el SAFA ha vivido muchas jornadas de

alegría. Pero en este año, en que el Papa

Francisco nos ha dicho que la alegría es el

signo del Evangelio que anunciamos los cris-

tianos, el InterSa-Fa ha sido una original res-

puesta a la exhortación del sucesor de Pedro.

En algunas de las evaluaciones realiza-

das con los integrantes de la jornada, pusie-

ron de manifiesto el valor del encuentro

con chicos y chicas de la misma edad pro-

cedentes de otros lugares, la sorpresa de vi-

vir un mismo estilo educativo, las similitu-

des y diferencias de los ambientes de los

que proceden, la amistad surgida con com-

pañeros desconocidos y la forma de com-

partir jugando. La mayoría se sintió a gusto,

y algunos reclamaron más instancias de

compartir la vida con otros compañeros de

lugares distintos.

Josefina expresa su vivencia de este mo-

do:

“Me llamaron mucho la atención todas las

personas que estuvieron allí, porque parecía

que nos conocíamos hace mucho tiempo. Me

dejó la sensación de querer volver a estar allí,

compartiendo momentos felices y divertidos…

A pesar de que todos pertenecemos a distintos

lugares, somos una GRAN FAMILIA, LA SA-

GRADA FAMILIA”.

Matías confiesa:

“No hubo nadie que realmente me llamase

mucho la atención, ya que todos fueron igual

de amables al presentarme las instalaciones y

todo eso. Todos me cayeron muy bien y los voy

a recordar por siempre y para siempre”.

Sofía subraya que con sus nuevos ami-

gos pudo divertirse “sin necesidad del celu-

lar o la computadora”...

Lucila nos recuerda que el InterSa-Fa

significa “jugar, divertirnos y dejar un men-

saje alegre y positivo en todos nosotros… En

todos esos pedacitos de mi vida, me aportó

alegría, amor, felicidad, compañerismo…”

Martina afirma que el InterSa-Fa ayuda a

“unirse con alegría… todos los primeros años

de liceos Sagrada Familia del Uruguay”.

Para Guillermina, el encuentro le “aportó

nuevas amistades, el saber que hay chicos

como nosotros en la comunidad y que viven

experiencias similares a las nuestras... Pienso

que Jesús estuvo presente en el InterSa-Fa…

se manifestó en la alegría de cada persona y

en la paz del encuentro”. Para Lorenzo la

presencia de Jesús “se manifestó en la unión

de todas las personas”. Federico lo descubrió

“sobre todo en la Misa”

Candela dice que la experiencia le en-

señó “a ser buena compañera y a trabajar en

equipo, y que todo es más divertido si lo ha-

cemos con amigos o personas a los que les te-

nemos mucho afecto y cariño”

“El InterSa-Fa me mostró nuevos amigos

con los que ahora comparto todos los días a

través de las redes sociales” expresa Julieta.

“No tenés que quedarte con un amigo, si-

no abrirme y conocer gente nueva”, reconoce

Agustín. “Me aportó nuevos amigos y poder

socializarmás”, dice Emilio.

Muchos descubren que Jesús estuvo

presente en la Misa, y Sofía, en particular,

“porque me sentí diferente en ese momento,

me sentí con calma. También en todos los

momentos que estábamos reunidos todos

juntos”. “Jesús nos acompaña en las malas y

en las buenas” dice Paula.

Educar es crear vínculos que sostengan

la vida de los hombres, de modo que pue-

dan convivir como una gran familia. Es el

sueño de Dios. Es el Reino, la propuesta de

Jesús. Es el carisma que nos legó Gabriel.

InterSa-Fa 2014

Page 51: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 51· # 7

Acampadas deEspiritualidad Nazarena

AJEN I I

E NTRE EL  14 Y 18 DE

AGOSTO  SE REAlizó

en Villa Sagrada

Familia la Acampada Juvenil

de Espiritualidad Nazarena

II (AJEN II). Unos 17 jóvenes provenientes

de distintas comunidades juveniles de Ar-

gentina vivieron esta experiencia donde

profundizaron la espiritualidad nazarena,

ayudados por un equipo de animadores me-

diante actividades de reflexión, intercam-

bio, trabajo, esparcimiento y celebración.

“Bajo el Techo de Nazaret”(AJEN educadores)

E L COMITÉ APOSTÓLICO Y LA PLANIFI-

cación Pedagógico Pastoral de la

ASF ofrecieron a la Comunidad

adulta de los Colegios Sa-Fa un encuentro

nuevo que aborde el corazón de la Espiri-

tualidad Nazarena denominado “Bajo el Te-

cho de Nazaret”, del  28 al 30 de agosto en

Villa Sagrada Familia.

Este espacio fue denominado “Bajo el Te-

cho de Nazaret” porque quiere resignificar

aquello del Evangelio: “… donde esté tu teso-

ro, allí estará también tu corazón” y la invi-

tación del Hno. Gabriel a colocar nuestro

corazón “bajo el   humilde techo de Nazaret,

en el hogar de esta familia Santa que reúne

todas las virtudes…” Participaron unos 46

adultos aproximadamente   y acompañaron

los Hermanos: Néstor, José, Mamerto y Juan

Carlos.

AJEN I : “Descubrir un tesorobajo el humilde techo deNazaret”

C ON ESTE LEMA SE REALIZÓ EN VILLA

Sagrada Familia la Acampada Ju-

venil   de Espiritualidad Nazarena I.

Entre el  10 y el 13 de octubre, 35 jóvenes

provenientes de comunidades juveniles de

Tandil, Buenos Aires, “Gabriel Taborin” y

Santa María vivieron una experiencia de

iniciación en la espiritualidad nazarena.

El equipo de animadores y acompañan-

tes ofreció un recorrido nazareno a partir

de la contemplación de nuestro cuadro ofi-

cial.

AJEN

Page 52: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

52 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

CÓRDOBA, FEBRERO DE 2014

“De cara al viento”PROF. JOSÉ TOLEDO, SANTA LUCÍA

S ER PARTE DEL ITINERARIO QUE OFRE-

cía “De cara al viento” fue una elec-

ción profundamente acertada. Desde

un primer momento generó incertidumbre

y el encontrarse con algo nuevo motivó a

tener expectativas positivas.

Encontrarse con un mismo y descubrir

el sueño de Dios en nuestras vidas fue lo

que iba guiando el camino. Y por cierto,

siempre en compañía de Nuestro Señor,

quien es la fuente que alimenta los sueños

más originales y, de un acompañante, una

persona que nos escuchó y nos ayudó en

cada momento del recorrido, alguien que

fue elegido por cada uno de los que comen-

zamos el programa.

Las propuestas en cada ficha de trabajo

nos invitaban a detenernos por unos ins-

tantes, a tener nuestro encuentro personal

con Dios y poder dar un salto hacia el des-

cubrimiento de ese sueño, ese plan único e

irrepetible para el que fuimos creados.

Volver a nuestra infancia, encontrarnos

con aquellos recuerdos de niños, esperan-

zarnos, pensar en nuestro trabajo diario,

reconocer una vocación y valorar la sexua-

lidad en la integridad y como un aspecto

importante de la vida para nuestras relacio-

nes humanas y con Dios, fueron las cosas

que trabajamos, oramos, meditamos, re-

pensamos y que también compartimos con

nuestros acompañantes.

Luego de un tiempo, volver a encontrar-

nos quienes decidimos decir sí a la conti-

nuidad del itinerario, fue algo especial, fue

reconocer el rostro de otros que siguieron el

mismo camino propuesto en el programa.

Esos momentos donde participamos las ex-

periencias vividas, las esperanzas encontra-

das, los rumbos tomados y la fe compartida,

fueron muy fructífero para todos. Sin lugar

a dudas no nos equivocamos en nuestra

elección, pues el itinerario nos ayudó para

acrecentar nuestra fe, a proponernos nue-

vas metas e ir concretándolas, pero sobre

todo a mirar nuestra vida, nuestra historia,

en definitiva, a ayudarnos a reconocer el

verdadero sueño de Dios para nosotros.

“De cara al viento” es una propuesta muy

enriquecedora, motivadora en la búsqueda

incesante de la Verdad de todos aquellos

hermanos que abren sus corazones para

sentir que el sueño de Dios para nuestras

vidas está en nuestra historia, en nuestros

quehaceres, en la vocación a la que hemos

sido llamados, y que es un regalo del mismo

Creador, en la espera, en las relaciones y

experiencias con nuestras familias, amigos

y todas aquellas personas que pasan por

nuestras vidas dejándonos una marca.

Caminar día a día “de cara al viento” sig-

nifica encontrar el plan de Dios en nuestra

historia, en la oración, en el trabajo, en la

esperanza, en las dificultades, en el amor al

Padre y a nuestros hermanos.

”De cara el viento“

Page 53: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 53· # 7

Villa Sagrada Familia

“Yo soy de sus sueños,un pujante brote. . .”

L A VILLA SAGRADA FAMILIA QUE TO-

dos conocemos, porque de seguro

en algún momento de nuestro cami-

nar por la vida en la Familia Sa-Fa hemos

realizado allí algún encuentro, retiro, jorna-

da, acampada, sigue sumando vida...

En esta tan querida casa de descanso y

reflexión hace un tiempo algunos laicos

acompañados por distintos Hermanos co-

menzaron a ofrecer encuentros de cateque-

sis de Comunión y Confirmación para algu-

nos niños que por distancia con la parro-

quia les resultaba dificultoso asistir a recibir

estos sacramentos.

Poco a poco, y de boca en boca fue cre-

ciendo la convocatoria, también crecieron

los grupos y la necesidad de catequistas .Así

se fueron sumando ex alumnos y colabora-

dores.

Hoy funcionan además de los grupos de

catequesis de Comunión y Confirmación

para niños y adultos, un incipiente grupo

juvenil y un grupo de oración, que sábado a

sábado comparten la Palabra y la Vida

Las celebraciones de Pascua, Pente-

costés, fiestas patronales, campamentos y

retiros para chicos y padres son motivos de

encuentro y evangelización.

Cada sábado, desde muy temprana la

tarde, van llegando los niños y adultos, y la

villa se viste de fiesta, de encuentro que ter-

mina al compartir la mesa de la Eucaristía.

¡Mucha alegría compartida en un senci-

llo clima Nazareno!

Page 54: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

54 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

T ODA PUERTA TIENE UN GRAN POTEN-

cial simbólico: es un lugar de paso.

Para quien atraviesa el umbral re-

presenta un cambio de situación. Una puer-

ta nos da siempre una doble perspectiva: un

adentro y un afuera, el interior y el exterior.

Una puerta define un espacio y abre a otro:

es el lugar donde se efectúan todos los mo-

mentos y los ritos de paso.

Vamos a fijarnos en diez puertas que

existieron en la vida del Hno. Gabriel Tabo-

rin (y que existen todavía hoy) y que nos

permiten acercarnos a algunos momentos

particularmente evocadores y significativos

de su trayectoria.

La puerta del cementerio deBelleydoux

La iglesia donde Gabriel dio los prime-

ros pasos como cristiano y donde sirvió co-

mo animador en los años de su juventud se

encontraba en medio del cementerio. La

iglesia parroquial actual, que representa to-

do el esfuerzo del pueblo de Belleydoux pa-

ra reconstruirse en todos los sentidos

después de la Revolución Francesa, fue

consagrada por Mons. Devie en 1833.

Así pues, la puerta del cementerio era el

lugar de acceso a la iglesia (una iglesia que

se encontraba en muy mal estado después

10 puertas en la vidadel Hno. Gabriel

HNO. TEODORO BERZAL

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

Page 55: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 55· # 7

de la destrucción de su campanario). En ella

recibió Gabriel los primeros elementos de la

doctrina cristiana y del aprendizaje de parte

de su párroco. En ella recibió la Primera

Comunión en 1810. Fue un momento clave

en su crecimiento humano y cristiano, que

él mismo describe muchos años después:

“Tuve el gozo de hacer la Primera Comunión

a la edad de 11 años en la iglesia de mi pa-

rroquia natal. Fue el día de la fiesta de la

Santísima Trinidad y me había preparado a

este acontecimiento con un retiro. Nunca se

ha borrado de mi corazón el día de mi prime-

ra comunión, y ha dejado en él felices y reli-

giosos recuerdos. … Mis padres, a quienes

profesaba el más tierno amor y que tanto me

querían, me sacaron del pueblo después de la

Primera Comunión para llevarme primero al

internado de Saint-Germain y después al se-

minario menor de Châtillon, donde perma-

necí algunos años” (Autobiografía).

En esa puerta podemos ver el final de la

edad infantil de Gabriel para pasar a los

años de su adolescencia y juventud en los

que descubre su vocación de Hermano, que

madura lentamente durante los estudios y

la práctica profesional concreta del magis-

terio en la casa familiar y de servicio a las

actividades pastorales de la parroquia.

En esa misma iglesia tuvo lugar otro

momento de ruptura y de salida, cuando

Gabriel a los 25 años decide abandonar su

pueblo natal para responder a la llamada de

Dios a la vida religiosa. “Había llegado el

momento marcado por la Divina Providencia

de que yo abandonara el mundo y mi pueblo

para abrazar la vida religiosa. No pudieron

detenerme ni las lágrimas de mis padres y

amigos ni las perspectivas de futuro que tenía

en el mundo. Pedí, pues, la bendición de mi

padre, de mi madre y también la de nuestro

Salvador en aquella iglesia de mi parroquia.

Allí derramé lágrimas acordándome de las

gracias que había recibido y de las funciones

que había desarrollado durante tanto tiempo

y con tanta satisfacción” (Autobiografía).

La puerta de la iglesia deLes Bouchoux

En la iglesia de Les Bouchoux tuvo lugar

para Gabriel el paso del estado de vida laical

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

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56 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

al estado religioso: desde entonces ya nunca

abandonaría el hábito religioso, aun sin ha-

ber pronunciado los votos hasta más tarde,

siempre se consideró un religioso. Para él

fue un paso decisivo que lo llevó además a

ser el Fundador de una Congregación reli-

giosa. Sus memorias manifiestan la altura

espiritual en la que vivió el acontecimiento

de su entrega total a Dios. Cuando salió de

la iglesia de Les Bouchoux vivió la intensa

alegría y la libertad de los hijos de Dios.

Ante él se abría una nueva vida dedicada a

guiar su comunidad dedicada a la educación

y al servicio de la iglesia.

El mismo lo cuenta así: “Por orden del

obispo de Saint-Claude tomé solemnemente el

santo hábito religioso en 1824, el segundo do-

mingo de octubre, en la iglesia de Bouchoux,

que está a una hora y media de camino de mi

pueblo natal. Me preparé a esta ceremonia

tan emotiva, junto con mis cinco compañeros,

con un retiro en la casa parroquial de Les

Bouchoux. El venerable P. Charvin, misione-

ro, canónigo y párroco de Les Bouchoux, fue

quien corrió con los gastos originados por

aquel retiro y por la ceremonia que lo siguió.

Para aquella circunstancia se reunieron al

menos ocho mil personas. Asistió mi familia

y un gran número de miembros del clero. To-

dos estaban conmovidos, sobre todo, al escu-

char el hermoso sermón pronunciado por el P.

Charvin sobre la verdadera libertad de los hi-

jos de Dios y sobre las inmensas ventajas que

ofrece la vida religiosa. Me resultaría difícil

describir la alegría interior que experimenté

y la belleza de una ceremonia tan conmove-

dora en la que yo era protagonista y que re-

sultaba totalmente nueva en aquellas

comarcas para nuestra gente que era, sin em-

bargo, tan religiosa. Ese día fue sin lugar a

dudas uno de los más hermosos y consolado-

res de mi vida. Conservo de él un grato re-

cuerdo, que jamás se ha borrado de mi

corazón. En seguida se presentaron mil cir-

cunstancias para desviarme de mi vocación.

Pero puedo afirmar que había prometido sin-

ceramente el día de mi toma de hábito entre-

garme al Señor para siempre, y nada pudo

desviarme de ese estado predilecto: antes hu-

biera preferido perder la vida. Dios por su

parte, en su infinita bondad, me ha manteni-

do en él hasta este momento, y en él moriré

por gracia suya.

Inmediatamente después de la toma de

hábito, volví a Saint-Claude con mis com-

pañeros. Nos confiaron inmediatamente el

servicio de la catedral y la dirección de las

escuelas, a las que acudían los niños de la

ciudad”. (Autobiografía)

La puerta de la escuela deSaint-Claude

Todavía hoy (y quizá con el mismo nú-

mero) existe la puerta de entrada a la es-

cuela, cuyo edificio había sido antes de la

Revolución Francesa un convento de Car-

melitas descalzos, y donde el Hno. Gabriel

empezó con sus Hermanos la actividad do-

cente en Saint-Claude (Jura). Cuando el

Hno. Gabriel cruzó por esta puerta por últi-

ma vez, estaba solo. Los “felices comienzos”

duraron solamente unos meses. En ese mo-

mento vivió toda la amargura del abandono

y al mismo tiempo la certeza de una llama-

da interior que lo daba fuerza para perma-

necer fiel y continuar su camino con la

incertidumbre de las circunstancias exte-

riores. Ante él se abría un período de prue-

bas y de fracasos, de vida itinerante y de

repetidos intentos de volver a formar su co-

munidad.

Él lo expresa de este modo: “Pero, por

desgracia, estos felices comienzos pasaron

con tanta rapidez como un relámpago. Dios

quería que esta obra pasara por el crisol de

una gran prueba, seguida de muchas otras

tribulaciones, las cuales han sido siempre a

través de los siglos la herencia y la marca de

las obras de Dios. Mis cinco compañeros,

aunque en el fondo eran gente buena, se de-

sanimaron como consecuencia de algunas

consideraciones de poco peso y me dejaron,

con otro Hermano, encargado de cerca de

trescientos alumnos, más el servicio de la ca-

tedral y el cuidado de nuestra pequeña casa.

Padecí esta humillante prueba, que era la

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

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· DICIEMBRE 2014 · 57· # 7

primera, con una gran resignación, diciéndo-

me: si esta obra es solamente tuya, es una

obra que ha nacido muerta; pero si es la obra

de Dios, él sabrá sostenerla frente a todos y

contra todos.

No pudiendo atender a tanto trabajo, fui

enviado por el obispo a Jeurre, una pequeña

parroquia cercana a Saint-Claude, de la cual

siempre he guardado un grato recuerdo”.

(Autobiografía)

La puerta del castillo deChampdor

En la puerta del castillo del barón Mon-

tillet de Champdor, hoy propiedad del

ayuntamiento y sede de sus actividades cul-

turales, debió tener lugar la escena que el

Hno. Gabriel narra en sus memorias. Esa

escena ocurrió durante la segunda perma-

nencia del Hno. Gabriel en esa localidad, en

el verano de 1831. El Hno. Gabriel mismo

admite que se trató de una sutil tentación y

de un momento de discernimiento. De un

lado estaba la posibilidad real de una vida

fácil, del otro la fidelidad a la llamada de

Dios, confirmada por la confianza que el

obispo Mons. Devie había empezado a dar-

le. El Hno. Gabriel percibe con toda claridad

la situación y no duda ni un instante en la

decisión que debe tomar. Ante él se abre el

horizonte de afianzar definitivamente su

fundación.

He aquí su relato: “En el castillo era real-

mente feliz según el mundo: una mesa sun-

tuosa, lujosos apartamentos, un trabajo que

me ocupaba apenas una hora al día, buena

paga, una renta para el futuro, y todo ello

asegurado por un documento en toda regla,

del que conservo aún una copia. Pero todo eso

distaba mucho de cautivar mi corazón. No

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

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58 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

hacía más que gemir, y me volví sombrío y

soñador. Estaba como el pez fuera del agua, y

trataba de volver a mi medio natural de vida.

Sin embargo, el barón me tomó afecto y

quería absolutamente que me quedara allí.

Me decía: Mire qué hermoso futuro le espera

en mi casa, no tengo mujer ni hijos, mis pose-

siones y rentas son grandes, tengo con qué

proporcionarle una buena posición; ¿Qué va

a sacar dando clases a los niños, si no es su-

frimientos y, la mayor parte de las veces, in-

gratitudes? ¿Qué va a sacar formando

Hermanos, sino crearse una infinidad de pro-

blemas y preocupaciones, además de cargar

con una gran responsabilidad? Además, ¿de

dónde va a sacar para mantenerlos? Hágame

caso y quédese aquí conmigo. No digo que es-

tas reflexiones no me afectaran; pero no pu-

dieron vencerme. En cuanto vi que la

tormenta, temida en un primer momento an-

te los acontecimientos políticos de 1830, no

tenía las fatales consecuencias previstas, en

seguida hice todo lo posible para volver in-

mediatamente a Belmont. Deseaba dedicarme

en cuerpo y alma a mi primera vocación, a la

que no había renunciado yendo al castillo de

Champdor. Por fin, después de mucha insis-

tencia, el barón consintió en dejarme mar-

char, pero no lo hizo de buena gana.

Consideró mi marcha como una ofensa per-

sonal y como un desprecio a sus ofertas, que

eran tan ventajosas para mí. Murió tres años

después de que yo saliera de su casa, donde

no permanecí ni siquiera un año.

Mi vuelta a Belmont suscitó gran alegría

entre la gente de bien…” (Autobiografía).

La puerta de la casa deBelmont

Durante once años el Hno. Gabriel entró

y salió por la puerta de la casa de Belmont

mientras su obra arraigaba: idas y venidas a

la iglesia parroquial, salidas y regresos de

viajes un poco más largos a Belley, a Lyon

para pedir limosna, a Hautecombe (al re-

greso de uno de esos viajes fue atacado por

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

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· DICIEMBRE 2014 · 59· # 7

un malhechor “una vez llegado a casa, le

agarró un temblor general de todo el cuerpo,

que, afortunadamente, no tuvo consecuencias

nocivas”, Vida). El Hno. Gabriel entregó la

llave de esta puerta de forma simbólica a

Mons. Devie en su primera visita con estas

palabras: “Es, Monseñor, el fundador, el padre

y el sostén de nuestra pequeña Congregación;

reciba pues la llave de este asilo de paz donde

nadie debe entrar si no se esfuerza en mar-

char por la práctica de las virtudes de las que

usted es el modelo”. (Palabras de homenaje).

La fundación del Instituto de los Herma-

nos de la Sagrada Familia se produjo cuan-

do en esta casa el internado de jóvenes se

transformó a lo largo de los años en Novi-

ciado: esa fue la “cuna” y el “núcleo de la

obra”. Las muchas entradas y salidas dan

una idea de la lenta transformación que se

produjo en esta casa para que el internado

de jóvenes se transformara en Noviciado de

una Congregación religiosa, dotada de un

nombre, de una regla de vida, un espíritu y

un dinamismo de crecimiento. Para el Hno.

Gabriel es el paso definitivo del “yo” al “no-

sotros”, y más aún a ser el animador res-

ponsable del grupo como Superior de por

vida.

“La parroquia de Belmont, cerca de Belley,

fue elegida para ser la cuna de nuestra Socie-

dad y para formar en ella nuestra primera

casa de noviciado. Llegué a ella en los prime-

ros días de noviembre de 1829. Fui muy bien

acogido por la respetable familia De Lauziè-

re, que me protegió y me hizo muchos favores

en varias circunstancias, porque estaba muy

interesada en que mi obra arraigara en ese

pueblo por el bien que podía hacer. Compré

una casa en Belmont y abrí en ella un inter-

nado, que fue autorizado por el Consejo Real.

Ese internado se convirtió en el núcleo de

nuestra obra” (Autobiografía).

La salida definitiva de la casa de Bel-

mont se produjo por una crisis de creci-

miento: la comunidad era demasiado

numerosa para albergarse en ella. Entre in-

ternos, postulantes, novicios y Hermanos

eran unas cincuenta personas. Se imponía

una ampliación de la vivienda y también un

acercamiento a la sede de la diócesis.

“La casa de noviciado de Belmont era ya

totalmente insuficiente para acoger a los

postulantes que se presentaban. Creímos que

sería mejor trasladar el noviciado a Belley;

comunicamos este proyecto a Mons. el Obispo

que aprobó gustoso esta idea. Pero era nece-

sario vender nuestra casa de Belmont y en-

contrar otra lo suficientemente espaciosa en

Belley. En ese momento la cosa pareció bas-

tante difícil. Sin embargo, llegamos a com-

prar el antiguo convento de las Hermanas de

Santa María, que pertenecía al hospital de

Belley. Fue el Sr. Sybuet, alcalde de esta ciu-

dad, quien en un documento privado nos hizo

esta venta. Contando con esta adquisición,

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

Page 60: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

60 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

vendimos nuestra casa de Belmont. Sintién-

dolo mucho nos despedimos de este lugar en

que habíamos permanecido once años” (Au-

tobiografía).

La puerta del palomar enel huerto del obispadode Belley

Grande fue la sorpresa del Hno. Gabriel

y de todo el grupo cuando llegados a Belley

se encontraron con que el contrato de com-

praventa del convento había sido anulado.

Fue un momento de extrema dificultad y de

incertidumbre.

“Nos vimos, pues, en la calle, con cerca de

cincuenta personas, tanto Hermanos como

novicios, y nuestra casa de Belmont ya estaba

vendida. ¿Qué hacer? Estábamos ante una si-

tuación semejante a la que sufrieron nuestros

Santos Patronos, María y José, cuando fueron

a Belén. Parecía que todos nos rechazaban, y

no encontrábamos una casa que comprar o

alquilar. El santo Obispo fue el único que se

compadeció ante nuestra dolorosa situación.

Si hubiese dependido de su corazón paternal,

nos habría hospedado en el palacio episcopal,

pero vio inconvenientes en ello. Le vino la

idea que en su huerto había una casita que

servía de palomar y nos lo cedió. El edificio

contaba sólo con dos habitaciones, un desván

y una bodega, y allí fue necesario alojarse 46

personas durante un mes, y acomodarse para

tener dormitorio, refectorio, cocina, capilla,

etc. En este estado de penuria, nuestros ene-

migos se reían de nosotros y esperaban nues-

tra inminente ruina. No podían ni siquiera

imaginar que un día íbamos a fijar allí mis-

mo definitivamente nuestra residencia y que

la Providencia nos reservaba uno de los más

hermosos solares y una de las más bonitas

casas de la ciudad episcopal” (Autobio-

grafía).

Podemos imaginar al Hno. Gabriel sa-

liendo todos los días varias veces de ese

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

Page 61: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

· DICIEMBRE 2014 · 61· # 7

edificio hasta lograr encontrar una casa pa-

ra la comunidad. El Hno. Federico, en la Vi-

da de Hno. Gabriel, da todo el alcance y

significado de ese acontecimiento: “Cuantos

estuvimos allí lo recordamos con admiración:

jamás se oyó ni a novicios ni a Hermanos

una palabra de queja; tampoco murmurar, ni

siquiera ligeramente, ni expresar desánimo

en medio de aquella situación de incomodi-

dad general, de extrema necesidad que se ex-

perimentaba día y noche. Aquel espíritu

estupendo hizo concebir las mejores esperan-

zas, de cara al porvenir de nuestra naciente

Congregación”.

La puerta de la basílica deSanta María la Mayorde Roma

El decreto de aprobación del Instituto

dice en su parte final: “Dado en Roma, en

Santa María la Mayor, el 28 de agosto de

1841, undécimo de nuestro pontificado,

Gregorio XVI”. Se sabe que esas expresio-

nes obedecen a la costumbre de fechar en

una de las basílicas mayores de Roma algu-

nos documentos pontificios. Para el Hno.

Gabriel la aprobación del Instituto quedó

así unida a la basílica construida para hon-

rar el título de “Madre de Dios” de la Virgen

María, que alberga la reliquia del pesebre

donde nació Jesús y cuyo arco de triunfo

está ornado por un magnífico mosaico con

escenas de la infancia de Jesús. La puerta de

esa basílica puede simbolizar ese momento

de apertura a la Iglesia universal del Insti-

tuto.

El Hno. Gabriel vivió con mucha espe-

ranza, pero también con inquietud su viaje

a Roma para pedir la aprobación del Insti-

tuto. En una carta enviada al Capellán y al

Vicesuperior de Belley dice: “Tengo la santa

esperanza de obtener esta gracia, esto ha sido

el principal y diría el único motivo de este mi

largo viaje; pero, por las razones dichas ante-

riormente, no creo que pueda volver con la

autorización de nuestro Instituto” (01-06-

1841).

Aunque no pudo obtener la aprobación

de la Regla, el hecho de que la Iglesia apro-

bara el Instituto fue para el Hno. Gabriel el

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

Page 62: Revista de la Provincia Ntra. Sra. de la Esperanza - #07 - diciembre de 2014

62 · DICIEMBRE 2014 · · # 7

cumplimiento de uno de sus deseos más

profundos y a la vez la posibilidad de darle

nuevas perspectivas. La experiencia del pa-

so por Roma dio al Hermano Gabriel una

dimensión más amplia y firme de su fe y al

Instituto que había fundado la posibilidad

de ponerse en sintonía con la Iglesia uni-

versal y de implantarse por todas partes. En

una carta a su amigo el P. Roland dice:

“Tengo aún algo más consolador que comuni-

carle. He viajado a Roma, permanecí en ella

tres meses. Tuve la dicha de ver al Padre

común de los fieles 14 veces y varias veces

hablé con él; me ha colmado de beneficios y

favores. Solemnemente ha autorizado por un

Breve nuestra Sociedad y la ha enriquecido

con indulgencias. No puedo contar estas cosas

sin sentirme emocionado por tantos favores.

Hace algunos años, y sobre todo en los co-

mienzos de nuestro Instituto, no pensaba que

nuestra Sociedad tan contrariada y sacudida

al principio, sería un día aprobada por el So-

berano Pontífice. Pero veo que cuando Dios

dirige las cosas, siempre resultan bien” (05-

10-1841). Y al Sr. Juan Bautista de Rossi

“Nuestro digno y santo Obispo ha recibido y

me ha remitido el Breve epistolar por el cual el

Soberano Pontífice reconoce nuestra Sociedad.

El Breve es hermoso; no podía desear una cosa

mejor; se lo enviaré más tarde cuando lo im-

primamos. En este Breve el Papa alaba nuestra

Sociedad y le desea toda clase de prosperida-

des, la bendice y recuerda el viaje que hice a

Roma para hacerla reconocer. Anuncia que

nuestras Reglas, aprobadas por Monseñor de

Belley, también lo serán por la Santa Sede,

después de un atento examen para agregar o

cambiar lo que creyere conveniente para nues-

tro bien y la gloria de Dios” (03-11-1841).

La puerta de la sacristía deArs

Si se conserva hasta hoy la sacristía y la

iglesia del Santo Cura es porque el pueblo

de Ars se opuso valientemente al proyecto

de construir en su lugar la nave central de

la basílica, como había sido proyectada.

En la pequeña sacristía, donde está el

confesionario usado por el santo Cura para

confesar a los hombres, se produjo la cono-

cida y emotiva escena entre el P. Vianney y

el Hno. Gabriel, cuando éste le llevo algu-

nos ejemplares de su libro El Ángel conduc-

tor de los peregrinos de Ars, recientemente

escrito. El Hno. Gabriel la narra así ante el

tribunal de la causa de beatificación del

Siervo de Dios: “Al día siguiente por la

mañana, habiéndome visto en la iglesia, me

hizo una señal para que lo acompañara;

tenía un aspecto de aflicción y de severidad

extraordinarias. Yo lo seguí hasta la sacristía,

cerró la puerta y me dijo muy agitado y ver-

tiendo abundantes lágrimas: "Amigo mío, no

lo creía capaz de escribir un mal libro: -“¿Có-

mo pues?”, dije. – “Es un mal libro, es un mal

libro. Dígame en seguida cuánto le ha costa-

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do y se lo reembolsaré, luego lo quemaremos".

Mi asombro era enorme y le pregunté de nue-

vo por qué ese libro era malo. "¡Es un mal li-

bro, es un mal libro!", replicó. - "Pero ¿por

qué, Padre?". -"Habla de mí como de un hom-

bre virtuoso, como si fuera un santo, mientras

que soy sólo un pobre ignorante, el más mise-

rable de los sacerdotes". - "Pero, Padre, yo he

mostrado este libro a sacerdotes cultos; Mon-

señor Devie ha visto todas las pruebas de im-

prenta y ha dado su aprobación, éste no

puede ser un mal libro". Sus lágrimas conti-

nuaban aumentando. "- Pues bien, suprima

todo lo que se refiere a mí, y entonces será un

buen libro". A mi vuelta de Ars, yo informé

inmediatamente a Monseñor de lo que había

pasado. "¡Qué lección de humildad nos da a

usted y a mí este santo sacerdote!", me dijo.

Mons. Devie había recordado al Hno.

Gabriel varias veces la importancia de en-

raizar el crecimiento de las virtudes en la

humildad. Quizá aquella lección del Santo

Cura dada a ambos fuera la más eficaz.

La puerta del monasterio deTamié

El proyecto del Hno. Gabriel sobre el

monasterio de Tamié era ambicioso: hacer

una segunda casa de Noviciado, una casa de

retiro para los Hermanos y para sacerdotes

y seglares, al que se añadiría un internado

para adolescentes.

Como le manifestó a Mons. Billiet, arzo-

bispo de Chambéry, deseaba idealmente que

fuera para él mismo y para otros la “puerta

del cielo”, como le decía en una carta del

28/02/1856: "Excelencia, llevo mucho tiempo

dándole vueltas en presencia de Dios en al

asunto de Tamier. Si pudiera comprarla y lle-

var a cabo los proyectos que tengo sobre esa

casa, creo que llegaría a ser la puerta del cie-

lo para muchas almas”.

Deseaba así dar un alma a aquel gran

edificio abandonado: “Como hemos dicho, el

convento de Tamié fue reparado, pero es un

cuerpo sin alma. Ya no hay en él sacerdotes,

la campana del convento no llama a los fieles

a la oración y al divino sacrificio; la puerta

del santuario está cerrada y los piadosos ha-

bitantes de las localidades vecinas no pueden

venir a rendir homenaje y adoración a Jesu-

cristo en el vasto y hermoso templo del con-

vento. Siente haber perdido a los misioneros

como sus abuelos sintieron haber perdido a

los religiosos, que eran la gloria y la riqueza

del valle. Las llaves del edificio las tiene el

guardián del lugar, el honrado Sr. Juan Favre,

hombre notable por sus principios religiosos

que siempre ha profesado. Este lugar bendito,

consagrado a la oración y a las buenas obras,

y en otro tiempo habitado por santos, ¿podía

permanecer en el estado de muerte en que se

hallaba después de la gran revolución y des-

pués de la partida de los misioneros? No, la

Providencia, guardiana de todas las cosas,

parece haber dispuesto todo para hacer llegar

de nuevo a este lugar la oración y la caridad,

para que sea morada de descanso de quienes

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quieran vivir, bajo la mirada de Dios, en me-

dio de este agradable retiro, siendo a la vez

útiles al prójimo” (Circular de 1857).

El Hno. Gabriel llegó a Tamié para fiesta

de la Ascensión de 1856 y tuvo que resig-

narse a venderlo en 1861, por varias razo-

nes externas e internas a la Congregación.

En vez de terminar sus días en esa “mo-

rada de descanso” tuvo que continuar com-

batiendo con sus Hermanos “en el llano”.

Como escribía al P. Abad de la Trapa La

Grâce-Dieu (Doubs) en el momento de la

venta: “Hoy este gran acto se completó con

la venta que hice a sus cuatro excelentes re-

ligiosos y que le anuncio. Espero que este

acto una para siempre a nuestras dos con-

gregaciones y que siempre sus miembros

sean verdaderos hermanos en Jesucristo, y

mientras los de la Sagrada Familia comba-

tirán en el llano, los bienaventurados hijos

de La Grâce-Dieu y de Tamié rezarán por

ellos en su querida soledad (12-10-1861).

Saber pasar del “llano” de la vida activa

a la “montaña” de la contemplación y regre-

sar nuevamente al combate de la vida ordi-

naria es un movimiento vital para el

crecimiento en la vida espiritual. Es cierto

que, como dice San Francisco de Sales, cada

uno debe florecer allí donde ha sido planta-

do. Pero es cierto también que en todo tipo

de vida se requieren lugares y momentos de

silencio, de oración y de contemplación,

aunque no sean muy prolongados para

quienes están llamados a continuar el com-

bate de la vida activa.

La puerta de la casa madrede Belley

Es ésta la puerta seguramente más fre-

cuentada por el Hno. Gabriel. Hay que re-

cordar además de las salidas y entradas de

la vida cotidiana, los muchos viajes del

Hno. Gabriel: para tratar asuntos del Insti-

tuto, para visitar las comunidades y escue-

las de los Hermanos…

El Hno. Gabriel mediante las diversas

transformaciones y ampliaciones de la Casa

Madre había logrado dar a la fachada de la

calle du Chapitre, donde está la puerta

principal, una cierta apariencia de casa reli-

giosa, sobre todo cuando en 1852 colocó

una gran cruz de hierro en la otra entrada

de la misma calle.

A esta puerta acudió asiduamente el

Hno. Gabriel para dar la bienvenida a las

personas que se acercaban a la comunidad,

sobre todo cuando se trataba de personas

relevantes, pero también cuando los postu-

lantes llegaban por primera vez y mantenía

con ellos una larga conversación de discer-

nimiento vocacional como lo establecía el

Nuevo Guía. Todos los Hermanos recorda-

ban después esos primeros momentos de

acogida en la casa, como también la llegada

de cada año para el retiro anual que estaba

reglamentada de esta manera: “En confor-

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

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midad con la Regla del Instituto, todos los

Hermanos acudirán cada año a la Casa de

Noviciado en la fecha indicada por el Supe-

rior General para las vacaciones y el retiro

anual. A su llegada a la Casa de Noviciado,

los Hermanos irán a depositar sus bultos, de-

bidamente etiquetados al recibidor o al lugar

que les indique el Hermano portero. Por el ca-

mino más corto se dirigirán a la capilla para

adorar al Santísimo, agradeciendo a Dios la

feliz llegada y pidiéndole la gracia de pasar

santamente las vacaciones y de comportarse

bien en el Noviciado. En ese momento harán

los propósitos que crean convenientes y los

pondrán bajo la protección de la Sagrada Fa-

milia con una breve pero ferviente invoca-

ción. Al salir de la capilla, se dirigirán al

despacho del Superior para presentarle sus

respetos y para recibir los avisos que tenga a

bien darles” (Circular de 1847). El recorrido

completo dentro de la casa, que puede verse

en la circular, representa casi un “camino de

iniciación” que el Hermano debía recorrer

cada año en el momento del retiro.

Podemos recordar además dos escenas

(entre otras muchas) que se produjeron an-

te esta puerta.

La primera se refiere a los días de la re-

volución de 1848. El Hno. Federico dice: “Lo

más que se hizo contra nuestra casa fue dar

algunos gritos destemplados, reunirse pe-

queños grupos alrededor de ella, apedrear

puertas y ventanas. Se celebraron algunas

reuniones populares, presididas por el aboga-

do Roselli Mollet, en nuestro comedor grande,

cuya utilización no se atrevió a negar el Fun-

dador. Durante una de estas reuniones, uno

de los vicarios de la parroquia envió una no-

tita al abogado, preguntándole qué opinión le

merecían las congregaciones religiosas. Res-

pondió que había algunas que no servían pa-

ra nada y que había otras útiles, como la que

había cedido el local para la reunión que es-

taban celebrando. A partir de aquel día no

volvieron a apedrear las ventanas ni se oyó

más grito de ¡abajo los Taborin!”

Y la segunda a la última salida de casa

del Hno. Gabriel los primeros días de no-

viembre de 1864 para ir a hacer unos días

de retiro a Lyon, como la cuentan las

Efemérides de la casa Madre: “Día 3: El doc-

tor Cyvoct viene por la mañana para volver a

ver al Rvdo. Padre y le parece que puede po-

nerse en viaje. El coche está listo y espera a la

puerta. El Sr. Párroco de Belley que tiene que

hacer un viaje a Lyon, va en el mismo coche

con el Hermano Celestino, que está encargado

de acompañar a nuestro Rvdo. Padre en su

viaje y de cuidarlo durante su estancia en

Lyon. Los principales Hermanos de la Casa

vienen en el momento de la salida a desear

un feliz y saludable viaje al Rvdo. Padre y no

es sin temor y aprensión que lo ven alejarse.

Los corazones están inquietos; no se atreven

entre ellos a intercambiar sus aprensiones y

sentimientos”.

Conclusión

Existen todavía hoy otras puertas que el

Hno. Gabriel atravesó varias veces, como la

de la capilla de Santa Ana en Belleydoux o

la del palacio episcopal de Belley. La inten-

ción de este escrito era detenerse en algu-

nas de ellas para recordar ciertos momentos

de paso, de transición, de transformación

que el Hno. Gabriel vivió, como cada uno de

nosotros.

Ante cada uno de esos momentos pode-

mos preguntarnos cuál era la situación an-

terior del Hno. Gabriel, qué motivaciones lo

animaban, qué circunstancias externas per-

mitieron el paso y cuál fue la situación que

se originó a partir de entonces.

Podemos dar un paso más midiendo

nuestra experiencia de vida con la del Her-

mano Gabriel. Esto nos permitirá no solo

tener un punto de referencia sino acostum-

brarnos a entrar en su dinamismo interior, a

tenerlo como maestro de vida, a armonizar

nuestras motivaciones profundas, nuestros

deseos, nuestras intenciones con las suyas

de manera que la forma propia de vivir el

evangelio que él tuvo inspire también la

nuestra en la actualidad.

BELLEY, OCTUBRE DE 2014

10 puertas en la vida del Hno. Gabriel

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In Memoriam.. .

La Pascua de Doña Olinda

E L MARTES 28

DE OCTUBRE

DIOS llamó

a sí a Doña Olinda

Castellani, mamá del

querido Hno. José

Mamerto.

Desde hace un

tiempo residía en

una casa de salud

cercana al Escuti

donde recibía la fre-

cuente visita de su

hijo y familiares.

Una súbita descom-

pensación provocó el

desenlace final siendo velada en la Capilla

de la Casa de Formación con sepelio en el

Cementerio de los Hermanos en S. Antonio.

Vecina afincada en Santa Rosa de Río

Primero, fue mujer de pueblo, de costum-

bres acendradamente familiares, de fe sen-

cilla y profunda. Madre de tres hijos y

abuela de varios nietos.

¡Que el Señor la guarde en su paz!

La Pascua de Doña Jesús

E L DOMINGO 2 DE NOVIEMBRE, DÍA DE

los Fieles Difuntos, a quienes ella

tenía muy presentes, el Señor llamó

a Dña. Jesús Gerván, mamá del Hno. Miguel

Vargas a su Casa.

Desde hacía tiempo venía peleando con

un cáncer que la llevó a ser tratada en San

Fernando del Valle de Catamarca. Viendo

que su mejora era insuficiente fue traída

nuevamente a su casita en Las Mojarras

donde pasó los últimos días rodeada del

afecto de sus hijos, hijas y demás familiares

y amigos.

Doña Jesús se caracterizó por ser una

mujer de fe, muy devota de la Virgen María

y de los santos, en especial de san Roque, y

una mujer muy sencilla, cercana, que gene-

raba amistad y confianza con todas las per-

sonas. Así integró a los Hermanos de la

Sagrada Familia como su propia familia.

Desde aquí la acompañamos con nuestra

oración y ella reza por nosotros.

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Brindis por los 125 años del colegio yentrega de medallas por los 20 años deservicio nazarenoColegio Sagrada Familia de Montevideo, 25 de julio.

Repercusiones en la prensa por los 150 añosde la pascua del Fundador y los 125 años delos Hermanos en el Uruguay

Ordenación Sacerdotal delHno. Juan Carlos LeónCapilla del colegio Escuti, 22 de noviembre.

Retiro de Fraternidades NazarenasCasa “Buen Pastor”, Florida, del 14 al 15 de junio.

Jornada del Consejo Directivo Provincial (C.D.P.)con los Directivos de las CooperativasMontevideo, 5 de agosto. Encuentro de las Fraternidades Nazarenas

Colegio San Juan Bautista, 15 de noviembre.

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SantaMisa

deAccióndeGraciasporlos

150añosdelaPascuadelVble.Hno.Gabrie

lTaborin

,los125añosdepresenciadelosHerm

anosenUruguay

ylos125añosdelcolegioSagradaFamilia

.Catedralde

Montevideo,29

denoviem

bre

Foto: Araceli OTTONELLO