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Con el calor del estío vacacional cuando
muchos se encuentran disfrutando del sol,
tumbados en la arena de las playas, o guare-
cidos a la sombra de la copa de un árbol,
sentados en algún banco público de cualquier gran ciu-
dad, llega a tus manos, amable lector, un nuevo núme-
ro de La Merced-Caminos de Liberación, pronto te
habrás dado cuenta de que no es un número más, no
busques en él las firmas y las secciones habituales.
Atrás quedan los fastos conmemorativos del octavo
centenario de la fundación de la Orden de la Merced,
en los que toda la Familia Mercedaria se ha volcado
participando activamente de los mismos. Ahora esta-
mos en una fase de recuento, de asimilar todo lo vivi-
do. Para que sigáis conociéndonos un poquito más,
hemos visto oportuno ofreceros un monográfico de las
distintas ramas que forman la gran Familia de la Mer-
ced en España, en vuestro entorno más inmediato.
La tradición mercedaria refiere que San PedroNolasco, el fundador, tuvo un sueño, la visión del
olivo. Los grandes cronistas mercedarios del Siglo de
Oro, entre otros Alonso Remón y Tirso de Molina,
tomaron sus plumas para escribir, con caballerosidad y
originalidad, esta visión dejando para la posteridad
bellas páginas literarias. En ellas leemos que cierta
noche, estando Nolasco dormitando fue sorprendido
por un sueño: le pareció encontrarse bajo el cobijo de
un olivo de grandiosas dimensiones. Desde allí divisó
a un grupo de hombres bondadosos custodiando el
árbol para que nadie pudiera dañarle. Mientras tanto,
otro grupo, provistos de hachas y otros instrumentos se
apresuraban a cortar el árbol, a talar con saña sus
ramas. Pero cuanto más se esforzaban en conseguirlo,
más reverdecían y crecían nuevos tallos y ramas, el
olivo crecía más y más. Hasta aquí el sueño. Historia-
dores, teólogos, tratadistas de carisma mercedario, etc.
se apresuraron a interpretar el sueño, fueron varias las
versiones que dieron para encontrar sentido a este mito
mercedario. Algunos hallaron en él tres actitudes: cari-
dad, piedad y misericordia. Otros, como el P. Interiánde Ayala, tratadista del arte mercedario, recomendó el
olivo para la iconografía de San Pedro Nolasco. Lle-
gados al siglo XX se vio un nuevo símbolo: el añoso
tronco del olivo sería la Orden de la Merced, plantado
en el siglo XIII, las ramas serían las distintas congre-
gaciones e institutos mercedarios que han surgido y
reverdecido a lo largo de la historia, floreciendo, aso-
ciados a la Orden y nutriéndose de la misma sabia
redentora. Así, el olivo mediterráneo, longevo, de hoja
perenne, con tronco grueso y retorcido, de color grisá-
ceo o plateado, se convierte en símbolo de la Familia
redentora de Nolasco. De su fruto exprimido, la acei-
tuna, surge el óleo santo, bálsamo para la vida presen-
te y viático para el tránsito a la futura. Una bella alego-
ría con la que rápidamente nos identificamos.
Las distintas ramas del olivo mercedario son las que
presentamos hoy en nuestra revista. Cada una surge en
un momento histórico concreto, con sus propios funda-
dores y sus matices carismáticos particulares. Algunas
han sufrido a lo largo de su historia horribles podas:
martirios, guerras, desamortizaciones… pero no han
podido aniquilarlas, ni se han secado, siempre han
reverdecido unidas al tronco. Todas transitan por el
mismo camino, siguiendo las huellas de Cristo Reden-
tor, todas gozan del cobijo de la misma Madre, María
de la Merced, y todas apelan a un primer fundador
(patriarca) común: San Pedro Nolasco. Consagrados o
laicos, todos los mercedarios y mercedarias trabajan en
la misión redentora, viviendo en comunión fraterna,
luchando por un mundo más justo y más fraterno, en el
que se pueda vivir en libertad.
LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193 2
LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN. Nº 193 • AÑO 40 • 2019La revista de la Familia Mercedaria desde 1918Dirección: Mario Alonso Aguado c/ Belisana, 2 • 28043 Madrid.Secretaría y archivo: Leoncio López. [[email protected]]Administración: Serge Ndayisaba.Consejo asesor: J. Ignacio Postigo, José Avilés, Carmen Quirós, AlejandroRobertson, Miguel Ángel Aguado, Simón Rementería, Isabel Prieto, Mony Aguilar.Edita: Provincia Mercedaria de Castilla [www.mercedarios.net]Belisana, 2 • 28043 • Madrid. Teléfono: 91 300 29 72 Diseño y maquetación: Fernando Bernabé
Imprime: Gráficas Arias Montano.Depósito Legal: M–40.283–1980 . ISSN–1577–5062Responsable página web: Leoncio López.
[www.mercedarios.net/caminosdeliberacion][http://www.odemih.com/es/biblioteca–virtual/publicaciones–seriadas]
Esta revista publica cinco números al año, uno de ellos en forma de calendario.Todas las colaboraciones y artículos escritos aquí, son gratuitos y desinteresados.La Merced – Caminos de Liberación no comparte necesariamente las opinionesvertidas en sus artículos. La responsabilidad de los mismos compete única yexclusivamente a sus autores.
Saludo director de la revista.
Mario Alonso.
Saludo provincial de castilla.
Justo Linaje.
Mercedarios.
Enrique Mora.
Mercedarias contemplativas.
Mª Josefina Legarreta.
Monjas de la Orden de la Merced
(federación). Mª Mercedes Cutiño.
Religiosas de la Orden de la
Merced. María Dorita López.
Mercedarios descalzos.
Agustín Devesa del Prado .
Fundadores y fundamentos de
nuestra familia. M.A. Aguado.
Mercedarias descalzas.
Ángel Martín Roldán .
Mercedarias misioneras de
Barcelona. Mª Carlina Zambrano.
Mercedarias de la caridad.
Mª Pilar Gallego.
Mercedarias del Santísimo Sacra-
mento. Mony Aguilar Velasco.
Mercedarias misioneras de
Bérriz. Carmen Quirós.
Página vocacional.
Fernando Ruiz.
Infomerced.
en portada
Jesús, en los evangelios, en varias ocasio-nes se refiere al “fruto” como a aquello quevisibiliza la autenticidad del seguimiento,del ser verdaderos discípulos, de que elReino ya está entre nosotros: “por su frutolos conoceréis”, “un árbol bueno da frutosbuenos”... Pues la Familia Mercedaria enEspaña ha mostrado esta realidad con cre-ces, dando no solo muchos y variados fru-tos, sino dándolos de extraordinaria cali-dad.
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3. saludo director de la revista
La Visión del Olivo, el Sueño de Nolasco
MAyO/juNIO • 20193
Mario alonso aguado
LA MERCED - CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193
evangelizadora y sacramental: iglesias, estudios, misionesy variadas obras de misericordia impregnadas y derivadasde la misión fundante.
El advenimiento –por no decir descubrimiento– para lavieja Cristiandad de la novedad de un ‘mundo desconoci-do’, lo que hoy llamamos América, hizo que los frailes de laMerced se aventuraran a la missio ad gentes, al ser una delas cuatro órdenes a las que se les confió esta misión.
Hoy estos frailes de la Merced están extendidos por laparte mediterránea europea (España e Italia), por la mayo-ría de los países americanos (16 países), por centro África(Camerún, Angola y Monzambique) y la asiática India.Siempre se dijo y nos gusta recordar que los frailes de laMerced son pocos, mas hácenlo bien.
De su quehacer hoy de estos frailes destaca –más alláde la tarea común de todos los religiosos de la Iglesia cató-lica– su intención de seguir siendo merced, esto es, estaren el mundo de frontera, en aquellos lugares y situacionesa donde al ser humano le es difícil mantener su dignidad dehijos de Dios, libre y con fe esperanzada y allí crear, soste-ner y potenciar cauces de redención (de liberación, de rein-serción, de nueva oportunidad). Las obras concretas sonmuchas y variadas: acogida de emigrantes; prevención,acompañamiento y reinserción de presos; proyectos demuy distinta índole contra la exclusión social; apoyo a loscristianos perseguidos…
La clave del ser y devenir de estos frailes, hijos deMaría de la Merced sigue siendo la misma: vivir la «entra-ñable misericordia del Señor» para «visitar» y «redimir» asu pueblo.
mercedarios.net
Los principios o inicios de cualquier empresa huma-na que supera el agotamiento desgastador de lostiempos tienen una importancia fundamental, puesa ellos se vuelve y se regresa una y otra vez para
hallar la ‘esencia’ o el alma que le permita mantener suidentidad entre los lógicos y necesarios cambios en laaventura de su avance por la historia.
la Merced, por ello, tiene que volver su mirada al cora-zón de un hombre cristiano del siglo XIII, San Pedro Nolas-co, que sintió la inspiración celestial de la Virgen María yque, junto con otros compañeros, con los permisos y apo-yos de la sociedad y de la Iglesia, fundó una fraternidad decaridad (año 1218) y con ella una institución de misericor-dia: el Hospital de santa Eulalia de Barcelona.
Este grupo de hombres carismáticos, los primeros frai-les de la Merced, fueron el origen de este movimiento caris-mático de la Iglesia llamada Familia religiosa mercedaria.Asumieron como misión hacer la merced de rescatar (redi-mir) a los cautivos pobres arrojados a la desesperación –ala pérdida de la fe que se decía entonces– en las mazmo-rras musulmanas de una Hispania dividida y guerreadaentre moros y cristianos. Exhortaban, pues, la solidaridadsocial (pedían limosna), corrían el riesgo de cruzar la fron-tera, intentaban mantener en su fe a los cautivos, estabandispuestos a quedar como rehenes por la libertad del pobrey, en lo que podían, rescataban cautivos cristianos paradevolverles su dignidad y libertad de hijos de Dios.
Los frailes de la Merced como orden religiosa se fue ins-titucionalizando (confirmación pontificia en 1235) y más alláde su peculiar carisma o misión específica, se puso, comotodas las órdenes, al servicio de la Iglesia en la misión
mercedarios
4 MAyO/juNIO • 20195
Fr. JusTo linaJE EnriquE Mora, instituto Histórico orden de la Merced.
Qué bien suena y cuán necesaria es hoy día la FAMILIA. También la
MERCEDARIA! Llenémosla de contenido.
En este nuestro mundo planificado, robotizado, sofisticado… –hasta
en lo personal– se echa de menos el otro soplo de nuestro complejo ser
humano: los afectos, los sentimientos, el amor; “las razones del corazón
que a la mente” y a lo técnico le cuesta tanto entender y asimilar.
Hoy lo familiar suena, se publicita y se vende, también en el ámbito
religioso.
La FAMILIA te define, te forma, te apoya, te defiende, te ayuda, se
apiña y celebra sus gestas y sus fiestas embarcándose en proyectos
comunes, imprescindibles.
Mientras elegimos a los amigos, la FAMILIA nos viene dada. –¡Gra-
cias a Dios!–
¿FAMILIA MERCEDARIA? Todo lo que huela a Merced, misericor-
dia y liberación. Un gesto, una imagen, el hábito, la cofradía… Y rever-
dece el olivo de Nolasco.
Ellos, los fundadores, son dignos de admiración. Su obra continúa
entre nosotros, sus seguidores.
Acercarse al Dios de los cristianos resulta siempre liberador. En la patera, en la acogida,
en la cercanía, en la clausura y en la enseñanza, en la promoción social y en la dignidad huma-
na… estamos haciendo Merced.
La FAMILIA MERCEDARIA, con María, es paloma de esperanza tras el diluvio devasta-
dor.
Merced huele a frescura y olivo.
“El Señor envió la redención a su pueblo” y os invitamos a celebrarlo en FAMILIA MER-
CEDARIA.
FAMILIA MERCEDARIA
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saludo provincial de castilla
de Trento, y por deseo de la Comunidad,cierra la Clausura, se emiten los Votosreligiosos, toman el velo negro y se haceentrega de las Constituciones. A partirde este momento son Mercedarias deVida Contemplativa con Clausura Papal.
En 1897, el P. Valenzuela, merceda-rio, hace unas nuevas Constitucionespara las Monjas, en las que dice que:“pueden y deben dedicarse a la ense-ñanza de la juventud”.
A tenor de este punto, la Comunidadde Bilbao, el 3 de noviembre de 1922,abre un pequeño Colegio, separadototalmente de la Clausura, al que sóloaccedían unas pocas monjas, conser-vando la Comunidad el mismo régimenclaustral anterior.
Como respuesta a la Constitución“sponsa Christi” del año 1950, del PapaPío XII, se entró a tomar parte de laFederación de Monjas Mercedarias deEspaña y se adoptó la Clausura Consti-tucional.
El año 1970 se trasladó la Comuni-dad a las afueras de la ciudad en buscade un espacio más amplio y más tranqui-lo, a Lañomendi (Loiu). En esta décadade los 70 tuvo lugar en nuestro Monaste-rio el primer Encuentro Intermercedario.También a nivel de la Federación se tra-bajó en la renovación de las Constitucio-nes según el Concilio Vaticano II. Al pre-sentarlas para su aprobación, el Prefectode la Sda. Congregación, CardenalEduardo Pironio, nos ordenó a determi-narnos personalmente por Vida Apostóli-ca o Vida Contemplativa, pues consideróque ambas no eran conciliables con elvolumen de apostolado que teníamos ennuestras comunidades.
Era la noche del 1 al 2 de agostodel año 1218 cuando la Sma.Virgen, nuestra Madre, se hacepresente a Pedro Nolasco
para encargarle una misión por deseode su Hijo, y suyo propio: la redenciónde los cautivos cristianos que no teníanvaledor y estaban en peligro de perdersu Fe al no poder soportar la opresión ymalos tratos de que eran objeto comocautivos de los moros. En este ambien-te de fervor redentor–mariano que seexpande por Barcelona y sus contornos,nace María, de la familia de los Cerve-lló, noble de cuna y más aún por lagrandeza de su alma.
Fue el año 1265, el 25 de marzo,cuando María de Cervelló y sus compa-ñeras son admitidas a la Orden Merce-daria en calidad de hermanas allegandolimosnas para las redenciones y aten-diendo a los cautivos libertos en el Hos-pital de Sta. Eulalia.
Pronto, por decreto del Papa Bonifa-cio VIII, habrán de adoptar las normasclaustrales dirigidas a todas las mujeresconsagradas. A partir de este momento,la historia nos sumerge en un dolorososilencio sobre la vida de la segundarama de la Merced, las Monjas Merce-darias.
Más tarde se tiene noticias de distin-tos Monasterios de Mercedarias en VidaContemplativa participando del 4º Votode la Orden con su oración y sacrificioescondido.
A principios del siglo XV, los Merce-darios fundan un gran convento en Bur-ceña (Baracaldo, Vizcaya) que fue ricoen santidad, letras y acción liberadora.
Al influjo espiritual de Burceña sevan formando pequeños grupos demujeres piadosas que se sienten llama-das a participar en su carisma. Fuegrande el número de Beaterios que sur-gieron en esta región.
En 1520 se reunieron varios de estosBeaterios para vivir vida conventual,asentándose en la calle Somera de la villade Bilbao. En 1567 se trasladaron a laotra orilla de la ría en busca de más sole-dad y silencio para su vida de oración.
El 19 de marzo de 1621, el Rvmo. P.Fray Melchor Rodríguez de Torres,mercedario, secundando la normativa
La respuesta de las comunidadesfue: 5 comunidades continuaron laFederación, 9 comunidades optaron porel Apostolado y 1, la de Lañomendi (Bil-bao) optó por mitades entre Vida Apos-tólica y Vida Contemplativa. Esta mitadque se inclinó por continuar con el Apos-tolado se unió al resto de los Monaste-rios de esta opción formando la Congre-gación de Religiosas de la Orden de laMerced, y la otra mitad, optó por volvera la Vida Contemplativa. Así el año 1978retomando la tradición contemplativa denuestra Orden y restaurándola con lanormativa del Vaticano II, con la graciade Dios y la ayuda de quienes valorabanla presencia de la Contemplación ennuestra familia Mercedaria, pusimos enmarcha este género de vida que aunquevivo, iba debilitándose en nuestra Ordeny que encabezó la M. Gloria de Mª Gan-goiti. Comenzamos 13 hermanas y ya alaño se nos unieron otras dos. Poco apoco, contando siempre con la gracia yayuda de Dios y la cercanía maternal deMaría nuestra Madre que tanto necesita-mos siempre, pero especialmente enaquellos primeros momentos, seguimoscaminando ofreciendo a la Iglesia y alMundo de hoy el servicio redentor de laentrega de nuestras vidas desde elsilencio orante de nuestros Monasteriosde España y América.
Las innumerables esclavitudes denuestro mundo irrumpen en nuestrocorazón cada día haciéndose clamorredentor ante el Señor. Romper cade-nas, llevar la libertad de Cristo a todoslos corazones es el motor que nosimpulsa en la entrega
www.mercednoja.org
Monasterio de Ntra. Sra. De la Merced y de la Stma. Tri-nidad en Málaga, fundado en 1893 con monjas procedentesdel convento de san Fernando de Madrid. EL convento fueiniciativa de Dª Mercedes Bisso y Vidal, natural de Mála-ga, que dedicó todos sus esfuerzos para conseguir unacomunidad que atendiera un colegio gratuito que alfabetiza-ra el barrio. En 1955, el monasterio se integró en la Federa-ción, manteniendo el colegio hasta el año 2001.
Monasterio La Merced – Luz de Dios, en Sto. Tomás deMilpas altas (Guatemala), fundado en 1996, por la M. MªLuz Cid y Cid, perteneciente al convento de la Asunción deSevilla. Duros fueron los primeros momentos en los que,durante un año, llegó a quedarse ella sola, pero su perseve-rancia fue premiada con creces, convirtiéndose hoy en unmonasterio floreciente con 28 monjas de distintas etapasformativas. Las monjas además de la vida contemplativahacen ornamentos litúrgicos y ejercen su apostolado concatequesis y atención espiritual a grupos juveniles. Fue eri-gido canónicamente en el año 2009. De este monasterio hanacido tres fundaciones:
Monasterio María de la Merced en San José–Mixco, fun-dado en 2011. Ejercen su labor apostólica en un pequeñocentro escolar de infantil y primaria, situado en zona de grannecesidad social. Están a la espera de su erección canónica
Monasterio La Merced de María en Tilarán – Guanacas-te (Costa Rica). Su fundación se llevó a cabo el 11 de febre-ro de 2012. Se dedican a la elaboración de ornamentos litúr-gicos.
Monasterio Santa María de Cervellón, en Santa Rosa(Guatemala), fundado en julio 2016, además del trabajo enla huerta, se dedican a bordados litúrgicos y atienden lacatequesis de un coro infantil.
mercedariasdegongora.blogspot.com/
Las monjas de la Merced son la rama femenina de lafundación de san Pedro Nolasco que veneran comoprimera religiosa mercedaria a santa María de Cer-vellón.
En el s. XIX, en la restauración de la Orden, la clásicavida de las monjas de la Merced (beaterios medievales evo-lucionados a conventos según las disposiciones del Conci-lio de Trento), sufre un cambio decisivo. La Orden repiensasu carisma. Se introduce –por necesidad social de laépoca– una ampliación del 4º voto, reducido hasta entoncesa la limosna y a la oración por las redenciones; permitiendoy potenciando la enseñanza de la juventud en los monaste-rios. De ahí surgen los primeros colegios en los conventos.
Nuestra vida, por tanto, se caracteriza por una vida con-templativa, con apostolado dentro del ámbito del monaste-rio, viviendo una Clausura Constitucional. Una forma devida tan tradicional en la Iglesia (primeros beaterios), comopeculiar, alternando, en santo equilibrio, nuestra vida deoración con un apostolado de redención.
La publicación en el año 1950 de la constitución Apostó-lica “sponsa Christi” va a ser determinante para el nacimien-to de nuestra Federación en 1955, que, como todo aconte-cimiento de la historia de la Iglesia, ha tenido sus luces ysus sombras, viendo su momento más floreciente con laadhesión de algunos conventos de mercedarias descalzasa los ya numerosos de mercedarias calzadas; y, por el con-trario, sus capítulos más dolorosos a partir de 1980 con losdistintos abandonos y escisiones.
Después de este devenir histórico, la Federación hoy,cuenta con ocho monasterios: cuatro en España, y cuatro, apartir de las fundaciones en 1996, en Centroamérica:
Monasterio de San José en Sevilla, fundado en el año1625 como monasterio de Mercedarias Descalzas, con mon-jas procedentes de los conventos de Lora del Río y Fuentesde Andalucía. Pertenece a la Federación desde el año 1964.En 1966, la comunidad abrió un colegio para párvulos, queha ido evolucionando hasta albergar hoy todas las etapasformativas. Actualmente constituye la sede federal.
Monasterio de la Purísima Concepción en Madrid, funda-do en 1665, con cuatro monjas procedentes del monasteriode Lora del Rio y una de Osuna. Tiene su origen en un bea-terio medieval y creció al amparo del convento de los Mer-cedarios Descalzos de Santa Bárbara de Madrid. Hoy tieneun colegio con las etapas de infantil y primaria.
Monasterio Ntra. Sra. de la Estrella en Miguelturra (Ciu-dad Real), fundado en 1682, como convento de merceda-rías descalzas por monjas procedentes del Monasterio deGóngora (Madrid) y de Lora del Río. Su fundación está liga-da a una leyenda mariana a la que se atribuye el nombre delMonasterio. En 1961 las monjas pasan a ser mercedariascalzadas, y a formar parte de la Federación. En el año 2002,gracias a su filiación fáctica al convento de La Merced – Luzde Dios de Guatemala, se revitalizó la comunidad. Hoymantiene, en el ámbito del monasterio, un colegio de E.Infantil, Primaria y Secundaria.
LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193 6
mercedarias contemplativas monjas de la orden de la merced
7 MAyO/juNIO • 2019
Mª JosEFina lEgarrETa, superiora de noja (Cantabria). Mª MErCEdEs CuTiÑo riVEra, Madre Federal.
zando. Algunas deciden quedarse en laFederación, un pequeño grupo volver a laclausura papal, mientras que el resto, lamayoría, comprenden que volver a los orí-genes conlleva una vida más apostólica,donde el carisma liberador de los orígenesa imitación de Pedro Nolasco y María deCervellón, pueda vivirse con más radica-lidad, sin las trabas de la clausura.
Este grupo mantiene los votos solem-nes, y la Iglesia reconoce el carisma libe-rador mercedario en su vocación apostó-lica. Le da el nombre de Orden de Nues-tra Señora de la Merced Instituto de Reli-giosas. Por eso siguiendo las huellas deNolasco, vivimos en carisma redentor, alservicio de la Iglesia a través de las obrasde misericordia, atendiendo a los signosde los tiempos, realizando actividadesque tengan carisma redentor.
Y hoy lo hacemos desde la escuela,la acogida de niñas abandonadas, amujeres con dificultades físicas y psíqui-cas, la atención integral a familias de unbatey en Santo Domingo donde se procu-ra la ayuda en todas sus necesidades,pero de un modo especial a los niños y alos jóvenes, sin descuidar la atención alas mujeres en una sociedad tan machis-ta. Pero siempre abiertas a nuevas cauti-vidades.
En todas las actividades como Nolas-co y María de Cervellón descubrimos elrostro de Cristo Redentor. NuestrasComunidades están en España, México,Santo Domingo y Guatemala. La CasaGeneral tiene su sede en Madrid.
hecho de haber cambiado su patroní-mico por el de Fray Juan Bautista“del Santísimo Sacramento”.
La Descalcez Mercedaria conociósus años de esplendor, sobre todo enel siglo XVIII. Graves acontecimientoshistóricos –la Revolución Francesa ylas guerras napoleónicas, las transfor-maciones sociales, el anticlericalismo,entre otros– le infligieron hondas heri-das y numerosas pérdidas personalesy profesionales de las que, lenta y fati-gosamente, empezó a rehacerse haciael 1886 con su restauración. Vinoluego el “aggiornamento” proclamadoy exigido por el máximo acontecimien-to del siglo XX: el Concilio Vaticano II.Los tiempos son otros, y distintos losusos y costumbres, amén de la con-cepción de la vida; y, sin embargo, per-manece, renovado, el carisma merce-dario original, servicial y liberador.
Los Mercedarios Descalzos, comotoda la Familia Mercedaria, tienen hoy,como siempre, encomendado el caris-ma encarnado por Pedro Nolasco yactualizado por sus fundadores y fun-dadoras.
La esclavitud –como siempre– estáen el origen mismo de la condiciónhumana. Cautivos son los pobres, losmarginados, los descartados, los igno-rados, los oprimidos en todos los órde-nes de la vida (familiar, laboral, social,de salud). El cautiverio está allí dondelos hombres viven algún modo deopresión: ideológica, económica,social, política, educacional. El carismamercedario no defiende ni predica unespiritualismo descarnado, sino que,sabedor de que la gran propuesta de la“encarnación” es la ley de la que hoyse llama solidaridad y antes fraternidadcristiana, se pone siempre de parte delas víctimas. Sabe que, defendiendo laliberación del hombre -ya sea en lapastoral penitenciaria, en los colegioso en la pastoral de enfermos, emigran-tes y desheredados de la fortuna-,defiende la verdad, porque si, según lamáxima evangélica, “la verdad os harálibres”, también es cierto que la libertadnos hace verdaderos.
www.mercedariosdescalzos.org
LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193
religiosas de la orden de la merced
zas volver al origen, a la suma pobre-za del Evangelio, a las fuentes deldesasimiento y la oración sin traumasni rupturas. Reforma desde dentro,pues La Merced había sido para él lareferencia única y definitiva desde sumás tierna infancia: “nada fuera de laorden”, sería su lema. Así se lo mani-fiesta a la condesa de Castellar –pro-tectora de la Reforma– cuando ésta leentrega la Bula papal que autorizabala “Recolección”. “Él no quiere unareforma separada de su religión, sinosujeta en todo a los generales y Pre-lados”, comunica la condesa de Cas-tellar al Maestro General de la Orden,el P. Monroy.
En el Capítulo General de Guada-lajara (1603), una vez escuchadostodos los Capitulares, el P. General,Maestro Monroy, atendiendo a la Bulapapal, proclamó las conveniencias dela “Reformación” y se manifestó –anteel estupor de algunos– como un con-vencido y ferviente defensor de lamisma.
Pedro Nolasco puso en pie unejército de pacíficos redentores decautividades y miserias. La acciónliberadora de aquellos defensores dela libertad del hombre hablaba de laMerced como de una Orden eminente-mente activa, en convivencia, dentrode la Iglesia, con otras Órdenes esen-cialmente contemplativas.
Fray Juan, hombre íntimo, deapartes, manso de corazón y habitadopor la pasión mística, introdujo en losRecoletos de la Merced Descalza unimprescindible fermento contemplati-vo. De ahí, la importancia concedida ala oración, a la Eucaristía y a la lectu-ra de la Palabra de Dios. De su devo-ción al Sacramento redentor da fe el
En Barcelona, a comienzos delsiglo XIII un mercader, PedroNolasco, inspirado por laSantísima Virgen María puso
en pie todo un ejército de hermanosredentores consagrados al servicio delos descartados de aquella sociedadfundando la Orden de la Merced alservicio de la Redención de Cautivos.
Del fértil árbol plantado por PedroNolasco surgió pujante, en el sigloXVII, una rama nueva y renovadora, lade los “recoletos”, o “reformados”, o“descalzos”. Fue el 8 de mayo de1603, cuando Fray Juan BautistaGonzález, Fray Juan Maroto y FrayLuis de Escobar, cambiaron el hábitode Observantes a Descalzos. Su pro-motor y alma fue Fray Juan BautistaGonzález, hombre sencillo, sobrio yhumilde, habitado por la pasión refor-madora y mística.
Si los de Pedro Nolasco erantiempos de cruzada, de castillo y cate-dral, tiempos de cristiandad, tiemposde “guerra santa” contra los enemigosde la fe, la vida de Fray Juan se inscri-be dentro de aquella ingente floraciónde santos, teólogos eminentes, funda-dores y reformadores, misioneros ymísticos, que produjo el Siglo de Oroespañol, en el que los héroes delmomento no eran los virtuosos deldeporte, los adoradores del cuerpo oidólatras del dinero, sino los héroes,los hombres de letras y, sobre todo,los santos
La Orden de la Merced, implantadaya en América había alcanzado unaépoca de glorioso esplendor. Sinembargo, Fray Juan Bautista –hom-bre de búsqueda– lamentaba lapobreza espiritual ambiente y anhela-ba con toda su alma y todas sus fuer-
P. Armengol Valenzuela escribe unasConstituciones para las monjas merceda-rias en las que señala posibles obrasapostólicas en consonancia con el caris-ma mercedario. La realidad de la historianos indica que las mercedarias estabandeseando volver a su vida apostólica ini-cial. En 1901 alguno de los monasterioso conventos abre un colegio, apenashabían pasado cuatro años, y en pocosaños le siguen la mayoría. Esto conser-vando todavía la clausura papal.
Y llegamos a 1955; el papa Pio XIIabre la puerta a la clausura constitucionale invita a los monasterios o conventos afederarse.
En 1957 es aprobada por la SagradaCongregación la Federación de MonjasMercedarias de España. Pocos añosmás tarde, el Concilio Vaticano II, invita ala Vida Religiosa a renovarse volviendo alos orígenes y a vivir según las circuns-tancias y lugares. Pronto se inicia en laFederación un estudio serio y profundopara dar respuesta a lo que la iglesiadeseaba de la Vida Religiosa. En esebuscar el camino Monseñor Pironio, Pre-fecto de la Sagrada Congregación deReligiosos, nos orienta y nos indica queteniendo en cuenta el origen de la Ordeny la historia vivida, cada una debe discer-nir desde la oración cual es el camino.
Y así, a principios de los años ochen-ta, Roma nos indica que es necesarioescoger entre Vida Apostólica o seguir enla Federación con reducción de las activi-dades apostólicas que estábamos reali-
Cuando se me pide que escribaun artículo para decir quienessomos, lo primero que se meocurre pensar que es algo muy
fácil, además, de corto y sencillo. Bastaescribir lo que dicen las Constituciones:
“un instituto de votos solemnes yvocación apostólica”. Por tanto un rasgocontemplativo y un rasgo activo.
Completándolo con:“la Mercedaria quiere, a través de un
ministerio activo, ofrecer a los hombresun gesto de liBEraCiÓn. una contem-plación que se abre hacia la actividad, yuna actividad que se arraiga en la con-templación. Y mira a María como prototi-po de entrega y de liBEraCiÓn.”
Pero esto no cubre una página, y máscuando se tienen siglos de historia, poreso voy a extenderme un poco más, ycontar de la manera más sucinta quesepa algo de esa historia, dando así res-puesta a los que se decidan a leer esterelato.
En los albores del siglo XIII nace laOrden de la Merced, Pedro Nolasco,oye el clamor de los cautivos de su tiem-po y siguiendo la inspiración de nuestraMadre de la Merced entrega su vida a laredención de cautivos y funda la Ordende la Merced.
Unos años más tarde María de Cer-vellón, junto con otras mujeres, con per-miso del P. General de la Orden pronun-cian sus votos religiosos, quedando asíincorporadas a la Orden de la Merced.Vivirán el carisma y la espiritualidad de laOrden a través de la oración y ayudandoen las obras de redención que realizanlos frailes mercedarios. Éste es el origende nuestro Instituto de Religiosas de laOrden de la Merced (Mercedarias O.M.)
El paso del tiempo no apagó nunca elcarisma de estas mujeres consagradasde origen apostólico. Sí es verdad que laforma de vida fue cambiando, pero siem-pre bajo la guía o el mandato de la Igle-sia a través de sus representantes. Es elpapa Bonifacio VIII y más tarde el Con-cilio de Trento quien les impone la clau-sura.
En esa obediencia a la Iglesia pasanlos siglos y llegamos al final del siglo XIX.En 1897 el Maestro General de la Orden
MAyO/juNIO • 20199
mercedarios descalzos
MarÍa doriTa lÓPEZ, superiora general. agusTÍn dEVEsa dEl Prado, superior general.
4. beata mariana de
Jesús y las mercedarias
descalzas
Mariana de Guevara y Romeronace en Madrid el año 1565. Es de fami-
lia acomodada, pues su padre era pelete-
ro de Felipe II y pronto queda huérfana
de madre. A pesar de los intentos frustra-
dos de su padre no contrajo matrimonio y
en 1598 eligió una vida penitente. Su
director espiritual fue el P. Juan Bta. que
iluminó sus pasos hasta su muerte.
Afrontando graves tormentos y enferme-
dades se traslada a vivir a una pequeña
casa vecina al convento de Sta. Bárbara
de la villa de Madrid. En 1613 recibe el
hábito de terciaria de la Merced impues-
to por el P. Felipe Guimerán, Maestro
General y un año más tarde profesa el 20
de mayo. Vivió dedicada a las obras de
caridad hacia enfermos y necesitados y
su fama de santidad se conocía en la Villa
y Corte. Fallece el 17 de abril de 1624.
Pio VI la beatificó solemnemente en el
Vaticano el 25 de mayo de 1783, y fue
proclamada copatrona de Madrid. La
azucena madrileña, tras el cierre de su
proceso espera la pronta canonización.
5. lutgarda mas i mateu
y las mercedarias
misioneras de barcelona
Nace en 1828 en una masía catalana
del “Pla de Barcelona”. Al morir su padre,
y tras años de trabajo, su madre decide
trasladarse a Barcelona. Allí conoció la
misión del P. Antonio Mª Claret y las
luchas del movimiento obrero que estaban
trasformando la sociedad. Pronto nació en
el corazón de Lutgarda un amor a la Mer-
ced, pues frecuentaba su Basílica de Bar-
celona y la figura de Sta. María de Cer-vellón se convirtió en un modelo a seguir.
El P. Pedro Nolasco Tenas, mercedario
exclaustrado, dirigirá el sueño de Lutgar-da que comenzó en 1859 con las primeras
religiosas terciarias mercedarias de Barce-
lona con dedicación a la enseñanza, como
forma de redención. El proyecto se había
iniciado, pero Lutgarda se ausenta para
cuidar a su anciana madre. Al fallecer ésta,
es aceptada por Sor Mercedes Bartra e
ingresa en 1861 como postulante, pero la
muerte le llega durante el noviciado y tras
tomar el hábito blanco y profesar en esta-
do agónico, entregó su vida al Señor el 9
de agosto de 1862 como Sor Mª Dolores.
6. beato Juan nePomuceno
zegrí y las mercedarias
de la caridad
Nace el 11 de octubre de 1831 en
Granada. Desde su infancia profesa una
especial devoción a la Virgen de las Mer-
cedes. Ingresa en el seminario en 1850 y
es ordenado sacerdote en 1855. Su
ministerio lo ejerce como docente, párro-
co, cura castrense y predicador numera-
rio de su Majestad, entre otros cargos. En
1869 dirige sus pasos a Málaga como
vicario general y director de la casa de
misericordia de Sta. M. Magdalena y san
Carlos. Allí tomará contacto con los sec-
tores más pobres y desfavorecidos. Esta
experiencia le llevará a fundar la Congre-
gación de las Hermanas de la Caridad de
Ntra. Stma. Madre de la B. V. M. de las
Mercedes en 1878 en la Iglesia de san
Ildefonso de Granada. Su misión: ejercer
todas las obras de misericordia espiritual
y corporal en la persona de los pobres.
Unas falsas acusaciones contra su perso-
na le llevarán a tener que alejarse de la
congregación. Finalmente, tras años de
silencio y restituido a su ministerio
murió en 1905 cuatro años después de
alcanzar la congregación la aprobación
pontificia.
7. Vble. maría del
refugio aguilar y
las mercedarias del
stmo. sacramento
Del estado de Guanajuato (México)
nace Mª del Refugio el 21 de septiembre
de 1866. Obligada por su padre, contrae
matrimonio con Ángel Cancino con el
que tiene dos hijos. Tras enviudar con tan
solo 22 años profesa como terciaria fran-
cisca. Pero su vocación se cruzará con el
proyecto del P. Vicente María Zarago-za, confesor del colegio de su hija. El
proyecto de fundar en 1910 el Apostola-
do de Jesús Eucarístico con un colegio.
Con la ayuda del P. Alfredo Scotti,Maestro General de la Orden de la Mer-
ced, se comenzará a redactar de una
manera formal las constituciones de esa
congregación naciente. El 15 de junio
recibe la aprobación de Roma cambiando
el nombre por: Apostolado del Stmo.
Sacramento. Y el 11 de julio de 1925 son
1. san Pedro nolasco y
los mercedarios
Los datos históricos de los orígenes del
Santo patriarca de la orden mercedaria son
escasos. Sabemos que fue un mercader en
la ciudad de Barcelona a finales del siglo
XII. Y que su actividad laboral desembocó
en una obra carismática movida por inspi-
ración divina. La situación precaria que
vivían los cristianos cautivos en Berbería y
el riesgo de renegar de su fe a cambio de
conseguir la libertad, alimentó con fuerza
la empresa de Pedro Nolasco fundando en
1218 en la catedral de Barcelona con
patrocinio real, la Orden de santa María de
la Merced, Redención de cautivos. El hos-
pital de Santa Eulalia fue el primer “cená-
culo mercedario” donde, junto a María, la
Madre del Redentor, los mercedarios,
practicando las obras de misericordia,
recogían las limosnas de los fieles que des-
tinaban íntegramente a pagar los rescates
de los cautivos cristianos pobres. Murió
haciendo suyo el Evangelio: Porque estu-
ve en la cárcel y me visitasteis.
2. santa maría
de cerVellón y
las mercedarias
El rostro femenino de la obra de PedroNolasco pronto tuvo eco en mujeres que,
consagrándose a Dios, querían llevar a
cabo la misión redentora en bien de los
cautivos. María nace en torno al 1230 en
el seno de la familia de los Cervellón. La
llamada de Dios irrumpe en su vida y viste
el hábito mercedario el 25 de mayo de
1265, según las fuentes, de manos del P.
Corvera.
Es así como, ella y el grupo de mujeres
que se adhirieron a la familia mercedaria
dan al carisma el rostro femenino. Ella
representa para las mercedarias un modelo
a seguir de misión redentora desde su con-
dición de mujer apoyando con su oración,
pidiendo limosna y asistiendo a los cauti-
vos en las necesidades corporales. La
misericordia se encarnaba en las manos de
las monjas mercedarias que entregaban sus
vidas como Cristo la entregó por nosotros
para nuestra liberación. En Barcelona la
siguen invocado como María del Socospor ser patrona de navegantes.
3. Vble. Juan bautista del
stmo. sacramento y los
mercedarios descalzos
Nació en la mercedaria Villa de Huete
(Cuenca) en 1554. Siguiendo el ejemplo
de sus dos hermanos mayores quiso en
1571 ingresar en el convento de Olmedo.
Pronto destacó en virtud y entre sus deseos
siempre existía ver a la orden de la Merced
reformada conforme a los tiempos. Tras su
paso misionero por el convento de Quito
en Lima es destinado al convento de los
Remedios de Madrid donde nacería la des-
calcez mercedaria. Quiso una reforma sin
rupturas, por eso, desde el inicio puso su
proyecto en manos del Maestro General el
P. Monroy y la Condesa de Castellar. El
8 de mayo de 1603 profesaron los tres pri-
meros descalzos fundando ese mismo año
el convento de la Almoraima (Cádiz) y El
Viso del Alcor (Sevilla). En 1621 se decla-
ró la separación de la Orden bajo el
gobierno de un vicario general. Considera-
do como uno de los grandes místicos de su
tiempo el 5 de octubre de 1616 murió en el
convento de Santa Bárbara (Madrid) en
presencia de la Beata Mariana de Jesús,
su dirigida.
agregadas a la Orden redentora para pasar
a llamarse: Hnas. Mercedarias del Stmo.
Sacramento. Muere por unas fiebres tifoi-
deas el 24 de abril de 1937.
8. beata margarita mª
lóPez de maturana y las
mercedarias misioneras
de bérriz.
María Pilar (Margarita María de
religiosa) junto a su hermana gemela
(Leonor), nacen en Bilbao en 1884. En
1903 ingresa en el Monasterio de la Vera-
Cruz de Bérriz (País Vasco) para iniciar el
noviciado. El 10 de agosto tomó el hábi-
to de la Orden de la Merced y emitió sus
primeros votos en 1904. Al poco tiempo
empezó a trabajar en el Colegio, donde
estuvo más de veinte años, siendo monja
de clausura. Margarita es una adelantada
del gran movimiento misionero que sur-
gió en España en 1914, creando en 1920
la “Juventud Mercedaria Misionera”. En
1924 el Monasterio de Bérriz presenta al
Maestro General su deseo misionero
obteniendo dispensa de la clausura para
iniciar una misión en China en 1926. En
1930 se lleva a cabo la transformación de
la comunidad de Bérriz en Instituto con-
servando el título y los privilegios de la
Orden de la Merced. El 21 de julio de
1934 y tras un cáncer falleció. Su beatifi-
cación fue el 22 de octubre de 2006.
LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193 1110
fundadores y fundamentos de nuestra familia
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MiguEl ÁngEl aguado, Mercedario.
La Orden de Santa María de laMerced tiene su fundación enla ciudad de Barcelona el 10de agosto de 1218. Hoy, ocho-
cientos años después, la semilla plan-tada por San Pedro Nolasco siguedando abundantes frutos de caridad,justicia y libertad a través de las distin-tas maneras de vivir el carisma merce-dario.
Una de esas formas es la ramafemenina que está integrada por muje-res que quieren vivir libremente estavocación y cuyo origen se remonta alos inicios de la Merced, siguiendo laestela de la primera monja merceda-ria: Santa María del Socorro o deCervellón.
Fragmentada la Orden femenina enun rico e inmenso puzle compuesto pordiversas ramas, nos vamos a deteneren las Mercedarias Descalzas. Sus ini-cios coinciden prácticamente con elestablecimiento de la Orden de Des-calzos de Nuestra Señora de la Mer-ced, fundada en 1603 por el venerablefray Juan Bautista del SantísimoSacramento. Catorce años después,en 1617, surgieron las monjas merce-darias descalzas con la fundación del
convento de la Pura y Limpia Concep-ción de Lora del Río (Sevilla).
Ambas ramas de la descalcez–masculina y femenina– han perdura-do hasta nuestros días, no con pocosavatares, y continúan siendo testigosde la Merced en una sociedad alejadade Dios y con menor libertad. Porque,desde la libre elección, las monjas dela Merced Descalza eligen una vidacontemplativa dentro de la clausura,orando y trabajando para ser lámpa-ras encendidas en un mundo cada vezmás oscuro.
Hoy, las monjas mercedarias des-calzas siguen dando testimonio desdelas clausuras y sus comunidadesestán presente en tanto en Andalucíacomo en Castilla. En el sur de España,la vida contemplativa perdura en losconventos que poseen en las localida-des sevillanas Marchena y Osuna, asícomo en Arcos de la Frontera, provin-cia de Cádiz. En la zona norte deEspaña, las monjas descalzas de laMerced tienen presencia en los con-ventos que poseen en Toro, provinciade Zamora y en la ciudad de Santiagode Compostela. Todos estos conven-tos están llamados a crear una nueva
federación para asegurar su continui-dad tal y como lo ha ordenado laSanta Sede.
El provenir de estos conventosestá en la subsistencia de los mismosa partir de la incorporación de nuevasvocaciones. En particular, el conventode Marchena ha fundado una nuevacasa en la India, mientas que el con-vento de Arcos tiene otra fundación enKenia.
Un futuro esperanzador que pasapor la federación y la subsistencia deestos cenobios gracias a la venta dedulces y a la ayuda y caridad de losvecinos y feligreses que frecuentanestas casas.
En sus conventos, las monjas de laMerced descalza viven la clausuradesde su propia libertad, rezan por elmundo y mantienen vivo el legadomercedario de Santa María de Cerve-llón y de la Beata Mariana de Jesús,que alentó la reforma femenina y quedejó abundantes frutos de una particu-lar “santidad” en figuras de la descal-cez como Sor Juana de Cristo, SorMaría de la Antigua o Sor Paula deJesús Nazareno.
mercedarias.marchena.net
LA MERCED - CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193
Antecedentes
María de Cervelló, inmersaen el clima de caridad cre-ado en Barcelona por losfrailes redentores de cauti-
vos, se sintió atraída por el empeñoliberador, y se convirtió en el consuelode los pobres, de los enfermos y delos cautivos, en el Hospital de SantaEulalia. Allí conoció a las grandes pri-meras figuras de la Orden Mercedariaagrupadas en torno a San PedroNolasco.
María de Cervelló pidió el hábitoblanco de la Merced y emitió su profe-sión religiosa como hermana de laOrden el 25 de mayo de 1265. (Sedesconoce la causa y la época en quedesapareció el Beaterio de Religiosasde la Merced en Barcelona).
En la crónica que escribió el P.Mercedario fray José Antonio Garí(16 de julio de 1864), hace referenciaa la falta de Religiosas Mercedarias enuna ciudad que fue cuna de laORDEN, y que los barceloneses recla-maban por los signos de caridadredentora que Santa María de Cerve-lló y compañeras hacían en la ciudad.
La Revolución IndustrialPor los años 1832 y a lo largo de
los siglos XIX-XX vive Barcelona unproceso de modernización y creci-
miento industrial: migraciones, creci-miento urbano y con ello, aumento dedesigualdades sociales… Si la situa-ción económica y política era conflicti-va, no era menos la religiosa.
Dentro de este contexto de des-igualdades, del movimiento obrero, dela falta de reconocimiento a la digni-dad de la mujer, y de la falta de valo-res morales y cristianos (incluida laexplotación de los niños), surge porlos años 1854 una joven barcelonesallamada Lutgarda Mas i Mateu, quepor inspiración de María de la Mercedy ayudada por el P. Pedro NolascoTenas, quiso restaurar, la rama feme-nina de la merced con una nuevaexpresión del Carisma: “Liberar de laesclavitud que conlleva la ignorancia”.
El deseo de la Virgen, anunciadopor Lutgarda, se hace realidad
El 30 de agosto 1860 se instala enla casa de San Gervasio el primergrupo de mujeres formado por: Mer-cedes, Rita, María Ana, Rosa yFrancisca: siendo la gran ausenteLutgarda, que por motivos de saludde su madre, tuvo que aplazar suentrada a la comunidad. En este díaqueda erigido canónicamente el con-vento, según consta en el Obispadode Barcelona.
El 21 de noviembre de 1860, fiestade la Presentación de la Virgen, seinauguró solemnemente, en el pueblode San Gervasio, el nuevo estableci-miento de enseñanza, que dotado depequeña Iglesia y edificio adecuado,situado cerca de la Bonanova, correráa cargo de las cuatros primeras mer-cedarias.(diario de Barcelona, 24noviembre 1860).
Lutgarda entra a formar parte dela primera comunidad el día 22 deabril de 1861. Agradece profunda-mente haber sido aceptada como laúltima postulante en la comunidad deTerciarias Mercedarias fundada gra-cias a su fe, esperanza y amor al pró-jimo, concretamente, a sus ansias deliberar a la mujer de la esclavitud de laignorancia.
Como todos los grandes, nunca hizoalarde de ser ella la fundadora. Mueresiendo novicia el día 9 de agosto del1862 (hace su Profesión religiosa “inartículo mortis”). Fue una estrella fugazpara Ntro. Instituto, dejando el mensajede María y la primera comunidad mer-cedaria misionera.
Hoy su intuición se extiendepor cuatro continentes: Europa,América, África y Asia.
“El carisma no es una perla precio-sa que hay que guardar, el carisma esuna experiencia de Dios que llena ytransforma la persona hasta el extre-mo de sentir necesidad de comunicar-lo (elemento permanente), necesidadde hacer algo de determinada maneraa favor de los hermanos, de manifes-tarla y traducirla en determinadosministerios, (elemento mutable).(Curia General, Roma, 1981.pág. 62.)
Para nosotras mercedarias misio-neras la finalidad de nuestro institutoes el anuncio del Reino de Dios y lapromoción del ser humano, donde lascircunstancias de ignorancia, de injus-ticia, de opresión y las estructurasesclavizaste atentan contra su digni-dad e impiden la aceptación de la fe oprovocan su pérdida. (Const. Art.8).
www.mercedariasmisioneras.org
13 MAyO/juNIO • 2019
mercedarias misioneras de Barcelona
ÁngEl MarTÍn roldÁn, Historiador. universidad de sevilla. MarÍa Carlina ZaMBrano, superiora general.
mercedarias descalzas
12
La Congregación de HermanasMercedarias de la Caridad fuefundada el 16 de Marzo de1878 por el Beato Juan Nepo-
muceno Zegrí y Moreno en la ciudadde Málaga.
El P. Zegrí –sacerdote diocesano–nació en Granada el 11 de Octubre de1831. Fue ordenado sacerdote el día 2de Junio de 1855, y ejerció su ministe-rio sacerdotal en dos pueblos de laprovincia de Granada: Huétor Santi-llán y Loja; en el año 1869 fue nom-brado Vicario general de la diócesis deMálaga, cargo que compaginó coninnumerables actividades de docen-cia, predicación y gobierno. Desde elcomienzo de su vida sacerdotal secaracterizó por su pasión por la evan-gelización; es cierto, que aunque con-taba con una excelente preparaciónintelectual para tareas especializadas,su carisma fue siempre la pastoral.Fue un gran apóstol muy implicado enobras de caridad, buscando siemprela promoción humana, el desarrollo delas personas y su formación cristiana;su corazón compasivo se sintió impac-tado por los problemas sociales de sutiempo (pobreza extrema, analfabetis-mo, explotación, carencias materialesy espirituales de todo tipo…), e inspi-rado por la Virgen de la Merced, a laque se dirigía con especial cariñocomo su “sin igual Madre y protecto-ra”, decidió fundar una Congregaciónde Hermanas que se dedicaran,desde la vivencia de la Caridad cristia-na, a paliar de diferentes formas todasaquellas necesidades y carencias.
Nos dejó un lema: “Todo para elbien de la humanidad en Dios, porDios y para Dios”; un carisma, que hoyhemos definido como: “Servicio decaridad redentora en todas sus for-mas, en orden a la plena liberación delser humano”; y una misión: “vivir lacaridad, ejerciendo todas las obras demisericordia espirituales y corporalesen la persona de los más pobres”.
Superados los primeros proble-mas, la Congregación, que nació enMálaga, se fue extendiendo por todaEspaña, y a los 10 años contaba con50 “establecimientos de caridad”,
como definía el P. Zegrí sus obrasapostólicas; en el año 1910 comenzósu expansión misionera en AméricaLatina y el Caribe, África y Asia. Hoyestá formada por 760 Hermanas,extendidas por 4 Continentes y 19 paí-ses, y un gran número de laicos conlos que compartimos carisma, espiri-tualidad y misión.
Desde los primeros tiempos nues-tra Congregación se ha caracterizadopor el sentido humanizador que lashermanas imprimían a su misión, y porla vivencia de una caridad más libera-dora que asistencial. El P. Zegrí incor-poró espiritualmente la Congregacióna la Orden de la Merced el 9 de Juniode 1878, asociándola al carácterredentor que distingue a la Orden enla Iglesia; así la caridad mercedaria habuscado siempre la liberación integralde los seres humanos, incluso en épo-cas en que las instituciones de caridaden España propiciaban un asistencia-lismo a ultranza.
El P. Zegrí acariciaba un sueño,que hoy sigue siendo el anhelo detodas las Mercedarias de la Caridad:“Curar todas las llagas, remediartodos los males, calmar todos lospesares, desterrar todas las necesida-des, enjugar todas las lágrimas. Nodejar en todo el mundo un solo serabandonado, afligido, desamparado,sin educación y sin recursos”.
Siguiendo este espíritu universal yla pasión pastoral del P. Fundador, laCongregación, urgida siempre por laCaridad, ha ido dando respuestas a lolargo de la historia a diversas necesi-dades sociales y eclesiales que hansurgido a lo largo de sus 141 años deexistencia: A los primeros asilos yorfanatos siguieron las escuelas gra-tuitas, hospitales antituberculosos, clí-nicas, prisiones, residencias de ancia-nos, colegios, obras sociales, casassacerdotales, casas de espirituali-dad…
Hoy la Congregación siguehaciendo vida su carisma de Caridadredentora en medio de una sociedadcada vez más necesitada de gestosde merced y de misericordia. Viveatenta a las nuevas esclavitudes ypobrezas del mundo y quiere respon-der buscando nuevas formas de pre-sencia, sobre todo en la atención a lamujer marginada. La voz del P. Zegrísigue inspirando nuestra misión: “Lacaridad no concluirá mientras hayaun solo dolor que curar, una sola des-gracia que consolar, una sola espe-ranza que derramar en los corazonesulcerados; mientras haya regioneslejanas que evangelizar, sudores queverter y sangre que derramar parafecundar las almas y engendrar laverdad en la tierra”.
www.mercedariasdelacaridad.org
LA MERCED - CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193 14
libertad y el servicio; pues la eucaristíaes el sacramento que hace hombres ymujeres libres y liberadores.
Fray Alfredo Scotti –fraile merce-dario lleno de espíritu mariano reden-tor– guía, fortalece y anima a Maríadel Refugio en la fundación; ella des-cubre la protección y la Merced deMaría, regalo de Dios, por lo cual pidesu adhesión a la Orden de la Merced,y desde 1925 esta Congregación esEucarística y Mercedaria. El CristoRedentor de Nolasco es el Cristo quelibera, sana, acoge, perdona, que sequeda por siempre con nosotros sehace pan que se parte y se dona.
Asociarse a la Orden mercedariaes mucho más que un buen deseo enMaría del Refugio; es, sobre todo,una manera de sentir la vida y desituarse ante ella. Es una manera demirar de frente a la cautividad paraofrecer redención a manos llenasdesde la caridad que nace de la ora-ción contemplativa ante el CristoRedentor presente en la eucaristía.Por eso la condición de mercedaria deMaría del Refugio no es un añadidoartificial o circunstancial; forma parte
de la naturaleza de su ser y acompa-ña necesariamente el carisma y elestilo de vida de toda la congrega-ción, unidas a toda la familia merce-daria que comparte el mismo carismay espiritualidad. Éste es el deseo másgenuino de la María del Refugiodesde el momento que solicita contodo empeño e ilusión su agregacióna la Orden mercedaria. La advoca-ción de María de la Merced aporta lacongregación todo un estilo de vidacomprometida con los cautivos.
María del Refugio supo leer enclave de fe la realidad dura y opacade su tiempo y salir al encuentro, enactitud samaritana, para visitar y libe-rar. En un principio sintió como unhachazo la falta de libertad de laincultura y la miseria intelectual. Ledolía sobremanera la falta de oportu-nidades de los niños y niñas paralabrarse un futuro prometedor. Poreso su acción carismática se centrósobre todo en la enseñanza comouna llave que abre la puerta de la for-mación y prepara a los hombres ymujeres para la vida y su libertad.
Hoy, Cristo Redentor nos mueve aser Merced, ternura de Dios a llevar laBuena Nueva de Liberación a dar voza los sin voz, sin importar raza, nipueblo, ni nación.
María del Refugio al sentirse pro-fundamente amada por Dios deseabaque todos le conocieran y le amaran;que cada uno fuera imagen de Dios ydesde la ciencia y el conocimiento for-maran, en lo profundo del corazón, unsagrario para el Redentor.
En el año 2010, centenario de lafundación de la Congregación, lashermanas como signo de fraternidadmercedaria, acogen a las 7 hermanasEsclavas Mercedarias del SantísimoSacramento de Marchena, Sevilla,Pía Unión fundada por el P. EmilioFerrer, ercedario Descalzo, que esta-ba en peligro de extinción.
Hoy, este carisma eucarístico Mer-cedario, se extiende con gran entregay amor liberador por África, América yEuropa, haciendo eco del amor libe-rador de Cristo.
es-es.facebook.com/hmssesmo/
Somos un pequeño retoño delÁrbol de Nolasco con solo109 años de historia Merce-daria.
María del Refugio Aguilar yTorres fundó La congregación el 25de marzo de 1910 en la ciudad deMéxico. Nació el 21 de septiembre de1866. Fue bautizada el 24 de septiem-bre, fiesta de Nuestra Madre de laMerced. Por obediencia a sus Padrescontrajo matrimonio a los 20 años.Tuvo dos hijos. Quedó viuda a los 22años, y tiempo después consagró suvida a Cristo. El 24 de abril de 1937terminó su peregrinación terrestre. LaIglesia la ha proclamado Venerable.
María del Refugio fue una mujercon entrañas de misericordia. Unamujer con especial sensibilidad hacialos necesitados. Le llamaban el“Ángel de la sociedad”.
Mujer profundamente eucarística,comprende que su vivencia de laeucaristía debe prolongarse en unacontinua acción de gracias, y hacesuyo el proceso de “transformaciónpascual”. Practica las obras de mise-ricordia visitando a los presos, a losenfermos, procurando que los mori-bundos reciban los auxilios espiritua-les, curando heridos en tiempo deguerra y ayudando a cuantos necesi-taban de su escucha o de ayuda espi-ritual o material.
Otra dimensión importante en suvida, y que desarrolla posteriormentecomo fruto de su conversión interior,es el gran amor hacia los niños yjóvenes, que más tarde serán el obje-tivo de su obra, dedicando una aten-ción especial a los más pobres y a losque sufren.
Su propuesta educativa tiene dosmatices característicos: la centralidadde Cristo Redentor en su misterioeucarístico como plenitud del hom-bre; y María de la Merced, mujer libe-radora, que acepta participar en elplan de la redención inaugurado enCristo. Más tarde la congregación lla-mará a esta propuesta formativa“Educación liberadora”, que tienecomo objetivos promover y defenderla fe, educar para la comunión, la
mercedarias del santísimo sacramentomercedarias de la caridad
MAyO/juNIO • 201915
Mª Pilar gallEgo, Historiadora Mercedaria C. MonY aguilar VElasCo, superiora Provincial de España.
MAyO/juNIO • 201917
“un retoño brota del árbol sieteveces secular de orden Mercedaria”(B. Margarita “nuestro Espíritu i”)
Sentimos un profundo agrade-cimiento a Dios porque ha idotejiendo con nosotras nuestrapequeña historia. A ella vol-
vemos siempre para recuperar lasfuerzas, la ilusión, la pasión primera.En ella encontramos:
1. El viejo tronco mercedario: elconvento de clausura, de la Vera Cruzde Bérriz, País Vasco, España, funda-do en 1542.
2. Beata Margarita Mª López deMaturana, (1884-1934), monja deBérriz, que tuvo la llamada misioneracomo actualización del carisma mer-cedario, compartida y seguida por lashermanas de dicho monasterio.
3. El dinamismo del Espíritu: laIglesia aceptó la transformación enInstituto Misionero, en 1930, siendoPapa Pio XI, que dijo: “Sepan las Her-manas de Bérriz que con ir a misionesse acrecentarán más en buen Espírituy en vocaciones”.
Nuestra vocaciónSomos en la Iglesia una comuni-
dad de mujeres que hemos tenido unaexperiencia profunda de fe y de amora Cristo y hemos sentido el atractivode su Persona y de su obra salvadora.
A esta llamada hemos respondidoeligiendo vivir nuestra entrega alPadre en un Instituto religioso misio-nero de Derecho Pontificio, con uncompromiso de vida y una misión.
Nuestra misiónQueremos prolongar, por el testi-
monio, servicio y anuncio del evange-lio, en nuestro mundo de hoy, el estilode vida de Jesús y su misión: revelaral Padre y construir la fraternidad.
La realizamos con unas tareas pre-ferentes:
• Evangelización de los que no hanoído hablar de Jesús o apenas loconocen.
• Compromiso evangélico con losoprimidos y marginados.
• Actividades que atacan la raíz dela injusticia.
• Educación de jóvenes y adultospara ser agentes de evangelización,en la construcción de un mundo segúnlos valores del Reino de Dios.
Nuestra particularidadVivimos nuestra vida y misión con
el modo peculiar que expresa y sellanuestro cuarto voto mercedario reden-tor: “permanecer en la misión, si loexige el bien de nuestros hermanos yhermanas, cuando hubiere peligro deperder la vida”, siendo signo comuni-tario de su merced y misericordia.
Familia MMBSomos familia, con laicos y laicas
que sienten que el carisma de la libe-ración les da sentido a su vivir cristia-no y humano; de edades diversas,actividades muy diferentes..., pero conuna vocación común: vivir su ser cris-tiano desde la espiritualidad MMB. Lashermanas y los laicos y laicas MMB,estamos presentes en los cinco conti-nentes.
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LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193
CarMEn quirÓs, Mercedaria M.B.
FErnando ruiZ, Mercedario.
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página vocacionalmercedarias misioneras de Bérriz
LA MERCED – CAMINOS DE LIBERACIÓN • nº 193 18 MAyO/juNIO • 2019
INFOMERCEDINFOMERCED
500 AÑOS DE LA ORDEN DE LAMERCED EN MÉXICO
Los religiosos mercedarios tuvieron un papel muy destacado enel momento del descubrimiento y posterior evangelización deMéxico. Destaca, entre otros, la figura del misionero merceda-rio Fray Bartolomé de Olmedo, capellán de Hernán Cortés.El pasado 22 de mayo, en la Parroquia de la Merced, de Tijuana,México, se celebró una solemne eucaristía de acción de graciasque rememoraba tal efeméride. Al término de la misma se impar-tió una conferencia que puso de relieve la vida y obra del P.Olmedo.
NUEVA FEDERACIÓN DE MONASTERIOS DEMERCEDARIAS DESCALZASEn la Curia General de los religiosos mercedarios descalzos, de Las Matas(Madrid), se reunieron los días 22-24 de mayo, las Madres Comendadoras delos monasterios de mercedarias de vida contemplativa existentes en España. Elfin del encuentro fue el tratar del futuro de esos monasterios autónomos quepasa por la unión, federándose entre ellos. Seguirán para ello las directrices delPapa Francisco en su Constitución Apostólica “Vultum del quaerere”, sobre lavida contemplativa femenina. Los monasterios de mercedarias descalzas que integrarán la futura federaciónson los siguientes: el de Marchena (Sevilla) y su fundación en La India, el deOsuna (Sevilla), el de Arcos de la Frontera (Cádiz) y su fundación en Kenia, elde Toro (Zamora), y el de Santiago de Compostela, en Galicia. A estas sietecomunidades descalzas se unirán otros dos monasterios autónomos de la ramacalzada: el de Lañomendi, en el País Vasco, y el de Noja, en Cantabria. A ellosse sumará un tercero de Colombia. Coordinó el Encuentro, en calidad de Asesor, a petición de la CIVCSVA (Confe-deración para Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica)Don José-Andrés Fernández Farto, capellán del monasterio de mercedariasdescalzas de Santiago de Compostela.
PASION MERCEDARIA, HISTORIA Y PATRIMONIO ARTÍSTICOEn Sevilla, la Archicofradía Sacramental de Pasión junto a la Fundación Cajasol,ha editado el magnífico libro coordinado por José Roda Peña con la colabora-ción de un destacado grupo de historiadores. Su título: “Pasión, Historia y Patri-monio”, su contenido: el devenir histórico de la hermandad de Pasión, que enSevilla posee hondas raíces mercedarias, y el rico patrimonio mercedario que elcorrer de los siglos ha ido incrementando y enriqueciendo, con el sello distintivodel escudo de La Merced en muchos de sus casos. El Arzobispo de Sevilla, el Presidente de la Fundación Cajasol y el HermanoMayor de la Archicofradía Sacramental de Pasión, realizan diversas presentacio-nes del libro destacando, entre otras conmemoraciones, el octavo centenario dela fundación de la Orden de la Merced. Este volumen, de 374 páginas, se vereforzado al final del mismo con una exhaustiva bibliografía. Interesante resultael capítulo referido a la historia de esta archicofradía en el Convento Casa Gran-de de la Merced sevillana de c.1539 a 1840. Sus imágenes titulares, hoy en laiglesia de El Salvador, atraen la devoción y despiertan íntimos sentimientos reli-giosos a cuantos se acercan a ellas, especialmente en la Semana Santa sevilla-na. A la bellísima imagen de Nuestro Padre Jesús de la Pasión, obra del granMartínez Montañés, quintaesencia de la humildad y de la tristeza más serena yreverenciada, se une el dolor de la Virgen María: la imagen de Nuestra Madre ySeñora de la Merced, obra del genial Sebastián Santos Rojas, del año 1966.Una talla mariana de pasión, de hondo dolor contenido, y de una templada mira-da revestida de dulzura. La Madre del Redentor que se torna, toda Ella, enRedentora de Cautivos.Por otro lado, el viernes 5 de abril, se presentó en la capital de Guatemala el libro“Joyas del nazareno. Cinco siglos de Jesús de la Merced en el arte guatemal-teco”. Elaborado por la Parroquia de la Merced, antiguo templo colonial de losreligiosos mercedarios, y editado por la Universidad Rafael Landívar y la edito-rial Cara Parens. Una publicación muy bien presentada que muestra el pasadoy el presente de una devoción mercedaria cristífera, que desde Centroaméricase ha difundo por gran parte del mundo latino manteniéndose muy viva en laactualidad.
EL P. JESÚS IBAÑEZ Y SUS “FRASES CÉLEBRES”Desde su atalaya de Los Peñascales, en la Sierra de Madrid, el P. Jesús Ibánez Murugarren nos lanza un nuevo libro: “Fra-ses Célebres. Temas diversos y Buen Humor”. 331 páginas que nos dedica “Con la esperanza ilusionada de que esta selec-ción de frases, procedente del pueblo llano y de importantes pensadores, pueda ser útil y agradable a toda clase de lectores”.Lectura ideal para amenizar el letargo estival y mitigar los rigores del calor. Frases amenase instructivas, deleitar aprovechando al más puro estilo de Tirso de Molina.
HISTORIA DE LA ORDEN DENUESTRA SEÑORA DE LA MERCED
EN PALMA DE MALLORCA.Formado el nº 12 de la Colección “Instituto Histórico PadreFaustino Decoroso Gazulla” acaba de aparecer en granvolumen de 907 páginas con el título “la orden de nues-tra señora de la Merced en Palma de Mallorca”. Su autores el historiador mercedario P. Joaquín Millán Rubio,autor de numerosas monografías de diversa índole, perotodas ellas bajo el común denominador de la Merced.La Historia aparece agrupada en dos grandes bloques decapítulos, cuya separación marca un antes y un despuésentre la exclaustración del convento y su posterior restau-ración, hasta nuestros días. Un libro imprescindible paraconocer a fondo la Merced de Palma, ilustrado con intere-santes fotografías que enriquecen el texto y amenizan sulectura.
LA FERIA DEL LIBRO DE MADRID Y LAS FIRMAS DELP. ALEJANDRO FERNÁNDEZ BARRAJÓNLa pasada Feria del Libro de Madrid, en el emblemático Parque del Retiro, contó conla presencia del P. Alejandro Fernández Barrajón en una de las casetas. En ella, elP. Alejandro firmó ejemplares de sus obras a los lectores que lo solicitaban, entreellas su última publicación: “El Paso detenido. reflexiones de un caminante”. La Edi-torial PPC, en el nº 219 de su colección Sauce, ha editado este libro de reflexionescerteras, con referencias autobiográficas, y con una fuerte carga de intimismo quellega a lo más profundo de cuantos se imbuyen en su lectura.
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