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    CAPTULO12

    El control de la violencia:enfrentar el terrorismo y laviolencia no ortodoxa

    El 26 de febrero de 1993, un furgn cargado de explosivos explot en el parqueaderosubterrneo del gigantesco World Trade Center en la ciudad de Nueva York. Esta masiva explosinprodujo un crter de 900 metros cuadrados en el garaje y llen de humo el piso 110 de la torre

    norte. La explosin, el fuego y el humo produjeron seis muertes y mil heridos. Este ataque,posteriormente atribuido a los extremistas islmicos del Oriente Medio, fue quiz el msespectacular de los 431 ataques terroristas de carcter internacional ocurridos en ese ao.Despus de declinar en un 25 por ciento en 1994, el terrorismo mundial volvi a aumentar a 440ataques en 1995; el ms impresionante de estos incidentes en aquel ao fue probablemente elocurrido el 20 de marzo en el metro de la ciudad de Tokio cuando fue atacado con gas venenosopor los miembros del culto japons denominado Aum Shinrikyo produciendo la muerte de docepersonas e hiriendo y afectando 5.500 ms, incluidos varios extranjeros, en el primer usoimportante de armas qumicas por parte del terrorismo': El ataque terrorista al World TradeCenter (junto con los planes de amenazas de destruir tambin los tneles Holland y Lincoln, y eledificio de las Naciones Unidas en la misma ciudad de Nueva York) yel ataque de gas al metro de laciudad de Tokio, ponen de relieve la amenaza del terrorismo tanto para los analistas que buscanuna explicacin para ello como para los gobernantes que tratan de encontrar sus soluciones.

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    Como se indica en la figura 12.1, aun cuando se ha registrado una modesta disminucin enel terrorismo internacional (esto es, el terrorismo en que participan los ciudadanos o el territoriode ms de un pas) desde mediados de la dcada de los 80, la incidencia de tales actos siguesiendo alta". En 1995, por ejemplo, hubo casi cien ataques a intereses estadounidenses alrededordel mundo. La explosin de un camin de gasolina afuera de una instalacin militar de los Estados

    Unidos en Dharn, Arabia Saud, en junio de 1996 en que murieron 19 miembros del personalestadounidense en esa base y donde qued un crter de 35 pies, fue un duro recordatorio de lavulnerabilidad de los puestos y las bases de ese pas que sirven sus diversos compromisosalrededor del mundo.

    Como lo recuerdan a menudo los titulares de primera plana de los diarios del mundo, elterrorismo contina siendo una preocupacin a nivel global. Sin embargo, existe un considerabledesacuerdo en lo que constituye el terrorismo y cules son las respuestas indicadas para combatireste problema. Este captulo se propone ir ms all de los titulares de prensa y explorar elfenmeno con mayor profundidad". El marco de anlisis incluye la discusin sobre planteamientos

    respecto a la definicin, las tendencias del terrorismo internacional y los dilemas respecto a laforma de combatir este tipo de violencia poltica.

    Existe un inters particular en analizar el terrorismo tal como se presenta a travs de lasfronteras nacionales sin embargo, existe tambin el tema del "terrorismo de Estado" practicadopor algunos gobiernos contra sus propios ciudadanos y que puede o no extenderse ms all de susfronteras, como tambin la violencia perpetrada por grupos dentro de una sociedad en contra delorden civil. En realidad, el terrorismo domstico tal como el efectuado por el partido de lostrabajadores kurdos contra objetivos gubernamentales turcos y el ataque con bomba en 1995 alEdificio Federal de los Estados Unidos en Oklahoma City, parece ser que estn aumentando enrelacin con el terrorismo internacional, tal como se vio en el captulo 8, en forma similar. a comolas guerras civiles tienden a desplazar las guerras interestatales. Existen crecientes esfuerzos porparte de la comunidad internacional para atender tanto el terrorismo en su dimensin externacomo interna y el problema de controlar en general la "violencia no ortodoxa". Estos esfuerzos serelacionan con otras preocupaciones globales, esto es, con la promocin de los derechoshumanos, tema analizado en el captulo 9 y el cual se tratar nuevamente en este captulo.

    Naturaleza y magnitud del problema

    ASPECTOS DE SU DEFINICIN

    Entre los acadmicos, los abogados y los gobernantes no existe un acuerdo generalrespecto a una definicin precisa de terrorismo ; en realidad, un estudio establece que entre 1936y 1981 el trmino tuvo 109 definiciones diferentes y desde ese ao han aparecido muchas otras".Esto se debe en parte a que el trmino est cargado de mucha emotividad ha llegado a ser unepteto que los oponentes se lanzan uno a otros. No todos estarn de acuerdo en que todos losincidentes que se han identificado necesariamente constituyen actos de terrorismo. Se ha dichoque una persona que para unos es un terrorista, para otros es un apstol y un luchador de lalibertad. De acuerdo con la lgica, los revolucionarios estadounidenses que participaron en la

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    Fiesta del T en Bastan, podran haber sido considerados como terroristas, al menos en opinin delas autoridades britnicas que ellos estaban tratando de derrocar. En la misma forma, YasserArafat y sus seguidores en la Organizacin para la Liberacin de Palestina, OLP, en su lucha contrala ocupacin israel de lo que ellos consideran como su patria, pelean porque su grupo ha sidohipcritamente denominado por los lderes israeles Menahem Begin y Yitzhak Shamir como

    asesinos terroristas. Los mismos Begin y Shamir se han involucrado en actos violentos comolderes de los movimientos secretos previos a la independencia de Israel (los movimientos Irgun yel grupo Stern) que lucharon contra los ingleses y los rabes en los ltimos aos de dcada de los40.

    Sin embargo, si se acepta el punto de vista de que "un terrorista es para otro un hroe dela liberacin nacional" y de que la distincin es completamente arbitraria y depende de qu ladose coloque el analista, entonces cualquier acto de violencia puede ser excusado y legitimizado encuanto cualquier persona invente una justificacin. Adems de ser una receta para el caos y laanarqua, este tipo de lgica ignora el principio de que no todos los actos de violencia son

    igualmente aceptables y condonables. Como mnimo ciertos actos tales como el infame asesinatoy lanzamiento al mar de quien est confinado a una silla deruedas, el seor Leo Klinghoffer, un judo estadounidense pasajero en el barco Achile Lauro durante la toma de este transatlntico en1985 por parte de palestinos, parece tan brbaro e insensible a los estndares universales de lagente civilizada que es posible razonablemente sealar este acto como de naturaleza "terrorista'".

    El terrorismo puede definirse tanto desde una perspectiva legal como poltica. Encualquier forma, la definicin debe ayudar a establecer ciertas distinciones crticas entre lo que esuna "insurgencia" justificable y el terrorismo, y debe captar la profundidad de la ansiedad y elterror para el cual est diseado un acto de esta naturaleza con el fin de producir tal situacin enel objetivo. Un autor define el terrorismo en los siguientes trminos:

    La amenaza, la puesta en prctica o la promocin de la fuerza comoobjetivos polticos por parte de una organizacin o una o variaspersonas cuyas acciones estn dirigidas a influir sobre las actitudespolticas o las disposiciones polticas de un tercero, siempre que laamenaza, prctica o promocin de la fuerza est directamenteorientada hacia : (1) no combatientes, (2) personal militar noinvolucrado en ese momento en acciones de combate o en papelesde preservacin de la paz, (3) combatientes, si stos violanprincipios judiciales de proporcionalidad, necesidades militares ydiscriminacin, o (4) regmenes que no han cometido violacionesexecrables de los derechos humanos que se asimilen a los crmenes

    juzgados en el proceso de Nremberg. Ms an, el acto en s mismoplantea un conjunto de imgenes que sirven para denigrar a lapoblacin hacia la cual va dirigido mientras tiendensimultneamente a fortalecer al individuo o al grupo".

    Una definicin ms simple considera que el terrorismo es "el uso de la violencia conpropsito de ejercer una extorsin, coercin y publicidad para una causa poltica'". Es definicinsugiere que el terrorismo conlleva como mnimo una combinacin de tres elementos: En primer

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    lugar, el terrorismo ordinariamente incluye la amenaza o el uso real de violencia no convencional -un tipo particular de violencia, espectacular, que viola los usos sociales aceptados y que se diseacon el propsito de golpear en forma tal de obtener una publicidad e infundir el terror-o Engeneral, los terroristas no observan en forma alguna "reglas" de combate (tal como la regla queestablece la Convencin de Ginebra respecto al tratamiento de los prisioneros de guerra); no

    existe virtualmente lmite alguno sobre el grado y el tipo de violencia que estn preparados aejercer!". Adems de la instalacin de bombas y los atracos, sus tcticas incluyen el secuestro, elasesinato y hasta inyeccin de sustancias letales (en 1978, un periodista blgaro fue apualado enel metro de Londres con una sombrilla que contena un txico mortal derivado del castor). Talesactos ni siquiera son costosos: los terroristas en potencia necesitan solamente poseer valor de unallamada telefnica, toda vez que pueden amenazar con cometer cualquiera los actos indicados y,si se les cree, logran el efecto deseado.

    En segundo lugar, el terrorismo se caracteriza no solamente por la violencia noconvencional sino tambin por una violencia motivada polticamente. El contexto poltico deterrorismo lo distingue del mero comportamiento criminal, como un robo armado o asesinato delhampa, que si bien pueden ser en todos sus aspectos tan extravagantes o tan espectaculares, detodas maneras estn basados principalmente en motivos que no son de orden poltico; esto es, enmotivos que no son de carcter pblico sino privado. Ordinariamente no se calificara a la mafiacomo una organizacin terrorista, aun cuando estas organizaciones generalmente se venenvueltas en el trfico internacional de drogas y otras actividades criminales, y con frecuenciaenlazadas con los grupos terroristas. Comnmente, sin embargo, la mafia desarrolla susactividades sin motivaciones polticas reconocibles". Sin embargo, la distincin se hace un pocoms difusa en el caso del asesinato de funcionarios del gobierno como aquellos llevados a cabopor parte del cartel de Cali, en Colombia, toda vez que este ltimo ha sido bsicamente unaorganizacin igual a la mafia, y que conspira en forma criminal para obtener dinero a travs delcomercio de las drogas y paralizar la aplicacin de la ley a travs del terror en un procesomediante el cual se amenaza la viabilidad poltica de toda una nacin. Este tipo de organizacionescuasi-polticas, criminalmente relacionadas con el terrorismo, tambin encontradas en algunaspartes de Italia y de otros pases, han sido denominadas "narcoterroristas" y han atrado unaamplia respuesta internacional. Pero incidentes como el del Achile Lauro y otros indicados aprincipios de este captulo, son quiz ms claramente motivados por propsitos polticos que vandesde la aprobacin de un Estado independiente hasta la eliminacin de la influencia de unacultura extranjera en una regin, hasta la transformacin total de una sociedad en el campopoltico y econmico. Es posible debatir si estas metas son legtimas y si las ofensas de tipo"poltico" cometidas en busca de tales metas deben ser castigadas de la misma manera que lasofensas "criminales", pero en cualquier caso es necesario entender la naturaleza poltica inherenteal terrorismo.

    Una tercera caracterstica distintiva del terrorismo, y que se deriva de las dos anteriores,es la naturaleza casi incidental de los objetivos contra los cuales se orienta y ejecuta la violencia.Esto es, los blancos inmediatos del terrorismo -ya sean personas o propiedades, civiles o militares-generalmente tienen tan slo una relacin indirecta con las metas globales que lo impulsan, pero

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    representan un golpe potencial considerable. En algunas oportunidades los objetivos sonindividuos cuidadosamente seleccionados -lderes empresariales conocidos, funcionarios delgobierno o diplomticos- como sucedi en 1975 con los ministros del petrleo en la reunin de laOPEP en Viena, quienes fueron tomados como rehenes por el famoso terrorista internacionalllamado "Carlos El Chacal"; en otras oportunidades los objetivos son personas sin rostro, masas no

    descritas, hombres de la calle, mujeres y nios como ha sucedido en las matanzas indiscriminadasocurridas en aeropuertos, almacenes de departamento y otros lugares pblicos. En cualquier caso,las vctimas se escogen por su valor simblico y son solamente peones que utiliza la violenciaterrorista con el propsito de alcanzar una audiencia ms amplia y presionar por la obtencin delas concesiones deseadas.

    Es posible aumentar un cuarto ingrediente al terrorismo, que tiene que ver con lanaturaleza de los perpetradores de tal violencia. Con algunas reservas, sin embargo, puedeargumentarse que el terrorismo organizado es una actividad esencialmente ejercida por actoresno estatales. Esta es por lo general la tctica de grupos externos a quienes se les ha negado un

    status de legitimidad y de aquellos dbiles y frustrados polticamente (por ejemplo, la faccinislrnica del Hizbollah en el Lbano o el Ejrcito Republicano de Irlanda en Irlanda del Norte),quienes ven el terror como la mejor herramienta para enfrentarse a ejrcitos y fuerzas policialesnumerosas de los gobiernos de las naciones-Estado o como el mejor medio de desacreditar losgrupos rivales que pueden haber renunciado a la violencia".

    Entonces, es necesario preguntarse, qu es lo que motiva a estos jvenes miembros de unaorganizacin terrorista a amarrarse al cuerpo cientos de libras de explosivos, cruzar unacongestionada calle y explotarse a s mismos en un bus repleto o cerca de uno de ellos, comosucedi en varias ciudades de Israel a raz de las elecciones de 1996. Es ste el acto de un locofantico o de un "soldado" que se ha diseado su propio papel? Es la violencia terrorista racionalo irracional segn los estndares mencionados en el captulo 8? Ciertamente, quienes explotaronlas bombas en el bus de Jerusaln queran distorsionar y poner fin al proceso de paz entre israelesy rabes, creando el terror en forma tal que el pueblo de Israel votara contra los lderesconsiderados demasiado conformistas a efecto de provocar represalias tan fuertes por parte deIsrael que llevaran a los rabes a perder toda esperanza respecto al proceso de paz. El jovenextremista israel que asesin al primer ministro Rabin en 1995, probablemente tena unasintenciones similares". Teniendo en cuenta el organizado adoctrinamiento y las frustracionespropias de las injusticias percibidas continuamente, los jvenes terroristas pueden estarconvencidos de las ventajas tcticas de sus actos y de su lugar final como hroes o mrtires en el

    cielo. Por lo tanto, los actos terroristas generalmente estn bien planeados y orientados a alcanzarresultados especficos an a los ms altos costos personales. El costo puede ir ms all de lo quecualquier persona "normal" estara dispuesta a pagar".

    Por supuesto, es verdad que a menudo los gobiernos acuden a la violencia y a la fuerzaarmada, tanto internamente como parte de una funcin de polica o externamente como parte deuna funcin de "defensa" o "seguridad". Aun cuando ciertas formas excesivas de violenciautilizadas por las autoridades se conocen en algunos casos como "terrorismo de Estado"-en

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    particular la tortura sistemtica y la represin que el gobierno hace contra los disidentes dentro desu propia sociedad o los asesinatos o "juegos sucios" cometidos por las agencias secretas delEstado en el exterior- el concepto "terrorismo" normalmente no se aplica a acciones tomadas porlos cuerpos oficiales de los gobiernos. Por ejemplo, aun cuando algunos han dicho que ellanzamiento de la bomba atmica sobre Hiroshima en 1945 fue un acto de terrorismo -pues

    representa para ellos una violencia indiscriminada contra civiles inocentes -ste debe designarse,en forma ms precisa, como un acto de guerra interestatal. Debe agregarse que muchosgobiernos, al menos de manera indirecta, patrocinan y apoyan grupos terroristas. Siria, Irn y Libiahan sido acusados de dar refugio a terroristas en su territorio sin tener en cuenta los actoscometidos instndolos a que apoyen objetivos gubernamentales en la lucha contra Israel y contraOccidente en Oriente Medio".

    TENDENCIAS DEL TERRORISMO INTERNACIONAL

    El terrorismo no es un fenmeno nuevo. El origen de este trmino puede rastrearse alRgimen del Terror ocurrido durante la Revolucin Francesa en el siglo XVIII. Fue una balaterrorista la que prendi la primera guerra mundial con el asesinato del archiduque de AustriaFrancisco Fernando. Un ejemplo clsico de terrorismo prolongado es la lucha del EjrcitoRepublicano Irlands (IRA) para presionar a Gran Bretaa a que le otorgue la independencia aIrlanda, comenzando con la revolucin de Pascua en 1916 y continuando con el establecimientode la Repblica de Irlanda (Eire), para prolongarse hasta los tiempos actuales en Irlanda del Norte.

    Aun cuando el terrorismo no es cosa nueva, hoy en da constituye una gran preocupacinen muchos aspectos. La sociedad industrial moderna parece ser especialmente vulnerable ademostraciones espectaculares de violencia, dada la existencia de objetivos tan tentadores comolos aviones jumbo, las plantas nucleares y las redes de computador. La existencia de la tecnologade las comunicaciones modernas permite a los terroristas recibir publicidad inmediata a travs delos medios masivos de comunicacin y ello contribuye a un efecto epidmico alrededor delmundo. Esta misma tecnologa permite a los terroristas operar a escala mundial. Lossecuestradores de hoy en da, quienes colocan las bombas y los terroristas de diversas clases amenudo tienen estrechos vnculos internacionales que les permiten coordinar sus esfuerzos envarias regiones del planeta.

    El Departamento de Estado de los Estados Unidos ha estimado que durante la dcada delos aos 80 se presentaron casi 6.000 hechos de terrorismo internacional y entre 1990 y 1995 msde 2.500. Ya se pudo anotar en la primera parte de este captulo, tal como se refleja en la figura

    12.1, que a travs del tiempo se ha presentado una leve reduccin en los niveles anuales deterrorismo. El terrorismo se ha movido un poco de las tomas de rehenes y los secuestros hacia lacolocacin de bombas y otros tipos de asaltos. Irnicamente, a pesar de la frecuencia de losataques terroristas, la mayor parte de ellos resultan en pocas bajas personales. Durante la dcadade los 80, se presentaron cerca de 4.000 muertes resultantes de actos terroristas y cerca de11.000 heridos en su conjunto, lo cual indica que en promedio, hubo menos de una muerte y dosheridos por cada incidente!". El terrorismo es efectivo en trminos polticos no tanto por los

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    asesinatos y muertes masivas, sino por el efecto psicolgico de no saber cundo y en qucircunstancias se va a presentar el ataque y la muerte a causa de la capacidad de los atacantespara escoger objetivos altamente valiosos.

    Un anlisis cuidadoso de los actos de terrorismo regionales muestra que la mayor parte de

    los incidentes se presentaron en el Medio Oriente y en Europa occidental. Por ejemplo, amediados de la dcada de los 90 Europa occidental experiment el mayor nmero de casos deterrorismo con 272 incidentes en 1995 de los cuales solamente once resultaron en una o msmuertes; los asesinatos masivos en Europa por parte de francotiradores y fuerzas paramilitares sehicieron tambin evidentes durante la dcada de los aos 90 en la tremenda carnicera tnica quese present en la guerra de Bosnia. Despus de Europa, las regiones de mayor terrorismo fueron elMedio Oriente y Amrica Latina. El espectacular asesinato del primer ministro Rabin, una serie desuicidios por bomba de parte de palestinos en Israel, y los ataques a las fuerzas estadounidensesfueron las noticias ms importantes en esta materia; sin embargo, los militantes argelinos y losegipcios islmicos continua- ron una campaa contra lo que ellos consideraban era una represin

    poltica en sus pases, mediante el ataque a turistas e instalaciones gubernamentales.Como lo demostr el ataque terrorista al World Trade Center de la ciudad de Nueva York,

    el terrorismo ha aumentado en Amrica del Norte, aun cuando esta regin ha estadorelativamente exenta de ataques de esta naturaleza. Amrica del Norte ha sido la escena de unaserie de hechos y amenazas menores tales como (1) la expulsin de uno de los funcionarios de laembajada de Libia en lo que se consider un complot para asesinar a los activistas anti-Gadaffi enlos Estados Unidos en 1995; (2) los agentes salvadoreos pertenecientes a la extrema derecha queefectuaron terrorismo contra los opositores al rgimen en California en 1987, y (3) la detencin decinco disidentes sikhs por parte de las autoridades canadienses en un supuesto plan para colocaruna bomba en una avin de Air India que volaba de Nueva York a Nueva Delhi en 1986. Msfrecuentes que los incidentes en el territorio de los Estados Unidos, los ciudadanos y laspropiedades estadounidenses en el exterior han constituido objetivos del terrorismo internacionaly la mayor parte de ellos han tenido lugar en Amrica Latina, Asia y Europa occidental. Entre 1976y 1986 por ejemplo, los oficiales o las instalaciones estadounidenses en el exterior fueron atacadaspor terroristas en promedio una vez cada 17 das . Las otras nacionalidades ms victimizadasen los ltimos aos han sido los ingleses, los franceses, los israeles, los iraques y los libios .

    Una razn por la cual el terrorismo ha sido un objetivo popular a travs de los aos, es quecon frecuencia ste ha producido los resultados que buscaban los terroristas al menos en trminosde atraer una amplia atencin internacional hacia ellos y hacia sus causas. Por ejemplo, los

    bombardeos y otros actos de violencia llevados a cabo por varios grupos nacionalistas palestinosen el pasado, aun cuando tcnicamente no siempre tuvieron xito en alcanzar sus objetivospolticos, claramente ayudaron a que la palabra Palestina se hiciera familiar en todo el mundo.Adems, al atraer la atencin, el terrorismo a menudo ha obtenido los resultados esperados enforma concreta. Los terroristas generalmente han sido muy exitosos en lograr sus metasinmediatas, en relacin con los costos incurridos. Un estudio elaborado sobre 63 secuestros yoperaciones de barricada entre 1968 y 1974 produjo las siguientes estadsticas: los terroristas

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    tuvieron xito en 87 por ciento de los casos de toma de rehenes; se registr una probabilidad del79 por ciento de que todos los miembros del grupo terrorista participantes en una operacinpudieran escapar del castigo o de la muerte; se present un 40 por ciento de posibilidad de que almenos una parte de las demandas que se presentaban fueran atendidas; un 29 por ciento deprobabilidad del cumplimiento y el logro pleno de sus demandas, y prcticamente un ciento por

    ciento de probabilidad de que se obtuviera una importante publicidad para la causa que se estababuscando. Otro estudio mostr que los terroristas sufrieron bajas solamente en e114 por cientode los incidentes :

    A la inversa, muchas de estas estadsticas reflejan solamente un xito de corto plazo parael terrorista. Las causas ms grandes y las ltimas metas polticas rara vez se logran a travs de losmtodos terroristas. Como lo ha indicado un analista de estas materias: el terrorismo en realidadha producido un cambio poltico, pero ha tenido un efecto dura de solamente en muy pocascircunstancias, cuando los movimientos polticos masivos utilizan tcticas terroristas dentro delmarco de una estrategia ms amplia. No se cono ningn caso en la historia moderna en que unpequeo grupo terrorista haya tomado poder; la sociedad generalmente tolera el terrorismosolamente mientras se mantiene como una molestia . Como lo dijo en 1996 un transente que seencontraba sentado en una mesa de un caf en la calle cuando explot un camin en el distritocomercial d centro de Manchester, Inglaterra, Esto no funciona as. No tenemos miedo. Esto haque la gente sea ms firme en no ceder ante ellos .

    Aun cuando algunos grupos que tratan de buscar respetabilidad e influencia poltica hanrenunciado al uso del terrorismo (tales como la OLP y algunas facciones del Ejrcito RepublicanoIrlands a mediados de los aos 90), existen razones para que se mantenga preocupacin respectoa los actos terroristas. A pesar del gran regocijo respecto al surgimiento de movimientos prodemocracia alrededor del mundo y a la prdida de preeminencia de los gobiernos de un solopartido y de las economas planificadas, las aspiraciones de minoras tnicas y de otros gruposdentro de estas sociedades, reprimidas por lar tiempo, han salido de nuevo a la luz pblica,manteniendo los prospectos de una creciente violencia comunitaria y el recurso a los actosterroristas por parte de aquellos que buscan conseguir la secesin o que luchan por otras causas.De otro, las rpidas transformaciones sociales y econmicas a menudo se han asociado con laviolencia . La perspectiva utilizar el contra-terrorismo por parte de las autoridades estatales quebuscan mantener un orden a cualquier precio, se mantiene vigente. En frica, por ejemplo, se haincrementado la actividad terrorista dado que las divisiones tnicas, la deprivacin econmica ylos problemas de seguridad junto con gobiernos relativamente dbiles, alimentan tal actividad,incluyendo una milicia saqueadora y grupos paramilitares compuestos por jvenes desde los diezaos de edad.

    La poltica de combatir el terrorismo

    El terrorismo contina siendo una seria amenaza dada su violencia traumtica y el miedoque genera dentro y fuera de las fronteras nacionales. Los esfuerzos por combatir es problema sehan visto enfrentados con una variedad de fuerzas y de intereses competitivo: representadostanto por los actores no estatales como por los actores del tipo nacin-Estado. En esta seccin se

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    analizarn con ms detalle las motivaciones y demandas que subyacen al terrorismo y la polticaque rodea el intento por forjar un consenso mundial contra el mismo.

    LOS DILEMAS DE COMBATIR EL TERRORISMO

    El 9 de mayo de 1978, la polica italiana encontr el cadver, encogido y abaleado delantiguo primer ministro italiano Aldo Moro en la cajuela de un carro despus de semanas de unadesesperada bsqueda de sus secuestradores, quienes se haban identificado como las BrigadasRojas, grupo que intentaba transformar totalmente las instituciones oficiales de la sociedaditaliana. El gobierno italiano, compuesto por algunos de los ms estrechos amigos de Moro yantiguos colegas, haba declarado su posicin de no negociar ninguna de las demandas planteadaspor los terroristas y haba ignorado la conmovedora carta escrita por Moro rogando ayuda. AldoMoro, una de las vctimas ms conocidas de la historia del terrorismo, fue "juzgado y condenado"por el "Tribunal del Pueblo", y ejecutado por orden del mismo. (Los secuestradores de Morofueron sentenciados a prisin perpetua por la justicia italiana en 1983.)

    El caso de Moro pone de presente los complejos dilemas que pueden presentarse en elintento de controlar el terrorismo. El gobierno italiano fue ampliamente criticado por algunos porsu inflexibilidad al rehusar entrar en negociaciones respecto a la vida de un hombre de Estado. Sinembargo} los lderes consideraron que cualquier negociacin en esta situacin de coaccin} daralugar a repeticiones de esa naturaleza y colocara tanto a los lderes nacionales como al ciudadanocomn en un riesgo mayor. El horrorizante impacto del asesinato de Moro endureci a lasautoridades italianas en tal forma que cuando cuatro aos ms tarde las Brigadas Rojas ampliaronsus operaciones al campo internacional y secuestraron al general norteamericano de la OTAN[ames Dozier, el gobierno italiano rehus negociar y estableci una muy bien coordinada accin debsqueda que result en la liberacin del rehn y la muerte de los terroristas; dicha accintambin result en la disminucin de las Brigadas Rojas por cuanto la mayor parte de sus lderesfueron hechos prisioneros o salieron del pas; una organizacin que haba estado compuesta porcientos de personas estaba} pues} reducida a un puado de hombres.

    Aun cuando el xito de las autoridades italianos en combatir a las Brigadas Rojas pone demanifiesto las virtudes de adoptar una estrategia de lnea dura contra el terrorismo, los dilemas nohan quedado eliminados. Otros grupos italianos o de origen extranjero vinieron a llenar el vacoque produjo la desaparicin de las Brigadas Rojas"'. Las estrategias de lnea dura pueden o nodesanimar el terrorismo en ciertas reas especficas. No es claro tampoco que las negociaciones lofortalezcan y que ste salga de ellas ms vigoroso de lo que estara en otras circunstancias. Sin

    embargo, negociaciones mal concebidas pueden resultar en fracasos tremendos tal como sucedien el caso de los Irn-Contra, durante la administracin del presidente Reagan en los EstadosUnidos; sta fue una negociacin de rehenes (de oficiales de inteligencia y de periodistasestadounidenses secuestrados por militantes islmicos en el Lbano) que result equivocada (deun lado} al tratar de vender armas a Irn a cambio de que este pas influyera sobre los terroristaspara liberar a los rehenes y} de otro} al utilizar los ingresos provenientes de la venta de armas paraproporcionar ayuda ilegal a los rebeldes de la "Contra", nicaragense de orientacin derechista).

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    Combatir al terrorismo como una tctica poltica} resulta difcil por diversas razones.Muchos grupos terroristas estn estrechamente organizados en clulas en forma tal que unosmiembros no conocen la identidad de otros pertenecientes a otras clulas o la identidad deaquellos que comandan sus operaciones y, por lo tanto, cuando se les interroga o cuando se lestortura no pueden delatarlos". Para separar los grupos de planeacin de aquellos encargados de

    ejecutar las acciones terroristas se desarrollan estrategias muy cuidadosas y solamente los msaltos comandantes conocen a los diferentes miembros de la organizacin. Muchos pases entrenanunidades especiales anti-terroristas. As mismo, se emplean firmas de seguridad privada paraentrenar a los ejecutivos de las empresas y a los funcionarios del Estado sobre mtodos para evitarlos ataques terroristas. Muchas de estas directrices dadas a vctimas potenciales -tales comocambiar los horarios y las rutas al ir y regresar del trabajo- pueden llegar a ser planes tancomplejos como los utilizados por las clulas terroristas. Estos esfuerzos parece que valen la pena}aun cuando en algunos casos en la lucha contra el terrorismo se va ms all de ciertos lmiteshasta el punto de que algunos derechos humanos y civiles pueden quedar limitados y llegan apeligrar. Los gobiernos deben establecer un justo equilibrio entre los costos que produce elterrorismo y el costo de la represin poltica necesaria para ponerle fin. La poblacin desea versesujeta a requisas permanentes en los lugares pblicos y en sus propios hogares, o ver sus ciudadesllenas de patrullas militares? Puede una democracia sobrevivir utilizando tales sistemas? Tanproblemticos como pueden resultar polticamente estos asuntos} la poltica internacional decombatir el terrorismo se enfrenta a dificultades adicionales como se ver en los temas que setratan a continuacin.

    CONFRATERNIDAD" DE LOS TERRORISTAS:

    ACTORES, OBJETIVOS Y VNCULOS

    Quines son los actores ms importantes involucrados en el terrorismo, cul es suinterrelacin? Cules son sus metas y sus objetivos? Se ha podido establecer que el terrorismoorganizado es principalmente una tctica de "grupos externos", tales como las Brigadas Rojas, quebuscan desestabilizar en cualquier forma el orden existente. La distincin entre grupos terroristaspuede hacerse de acuerdo con sus metas, e incluira: (1) la creacin de nuevos Estados (porejemplo, los bosnios-serbios en la antigua Yugoslavia, los vascos en Espaa, los kurdos en Irn eIrak, los chechenos en la antigua Unin Sovitica y, en un momento dado, en 1970, el Frente deLiberacin de Quebec en Canad); (2) la destruccin de Estados existentes (por ejemplo, el grupoHamas y varias facciones del Frente Popular para la Liberacin de Palestina); (3) la liberacin de unterritorio del control de otros (por ejemplo, histricamente, las Fuerzas Armadas para laLiberacin Nacional de Puerto Rico y el Ejrcito Republicano Irlands); (4) la subversin contraciertos regmenes (por ejemplo, los grupo marxistas tales como el Nuevo Ejrcito del Pueblo deFilipinas, el M-19 y otros grupos guerrilleros en Colombia, Sendero Luminoso en Per); (5) laeliminacin de la influencia cultural extranjera de una determinada regin (por ejemplo, el grupoislmico Yihad], y (6) la transformacin total del orden poltico y econmico mundial (por ejemplolas Brigadas Rojas, la Faccin del Ejrcito Rojo que sucedi a la banda de Baader-Meinhoff en

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    Alemania durante la dcada de los 80, el ejrcito de Unidad Roja en Japn y el grupo AccinDirecta en Francia]".

    Con frecuencia las organizaciones terroristas sufren disensiones internas entre susmiembros respecto a las metas y a las estrategias, de tal forma que se originan facciones

    disidentes, como aquellas que se presentaron en el movimiento palestino y que pueden produciruna proliferacin adicional de grupos. Debido a frustraciones respecto a las expectativas polticasque no se han podido lograr, el movimiento palestino se ha desmembrado en grupos ms o menosinclinados a aceptar el terrorismo y ms o menos comprometidos con preceptos seculares (talcomo la OLP) o religiosos (como el Hamas). En un estudio emprico reciente sobre el tema delterrorismo en el Medio Oriente se examinaron los patrones de comportamiento y las prcticasrespecto a las metas de varios grupos terroristas, y se observ que dentro de las variables queafectan los objetivos estn, por ejemplo, la ideologa poltica, el tamao del grupo, la edad delgrupo, su localizacin y el tipo de accin terrorista a desarrollar. Algunos resultados sugirieron unarelacin sistemtica entre ciertos tipos de estas variables y la escogencia de las metas, siendo la

    gran mayora de ellas objetivos civiles ms que instalaciones gubernamentales. Dentro de logrupos islmicos o rabes, los terroristas de gran ideologa o teocrticos, orientaban sus accionescon mayor frecuencia hacia objetivos gubernamentales (instalaciones u oficiales], mientras que enlas facciones de grupos ya existentes y aquellos comprometidos con metas tales como laadquisicin de territorio, se observ una mayor inclinacin hacia los objetivos civiles. Por elcontrario, los grupos de extremistas judos se inclinaban a atacar objetivos civiles pero con menorintensidad, produciendo en promedio menos muertes) menor dao a la propiedad, toda vez quegeneralmente ellos operaban en territorio "amigo".

    La figura 12.2, basada en el estudio anterior, presenta una lista de los principales gruposdel Medio Oriente que desde 1968 han efectuado actos terroristas. All se muestra la frecuenciarelativa de los ataques por los diferentes grupos. A pesar del inters de lo terroristas por sobresaliry ser ms notorios, la mayora de estos actos se queda sin reivindicar, hecho que finalmentedificulta la lucha contra el terrorismo.

    La poltica relacionada con el control del terrorismo internacional se complica por el hechode que no todos los gobiernos del mundo se oponen al terrorismo o por lo menos porque no todoslo definen en la misma forma. En las sesiones de la asamblea general de las Naciones Unidas y enotros foros donde se ha discutido el control del terrorismo internacional, los Estados confrecuencia han tomado posiciones conflictivas entre s. En los primeros aos de la dcada de los70, Estados Unidos introdujo un borrador de convencin respecto al terrorismo mediante el cualse requera la extradicin y el pronto juicio a los atracadores y secuestradores, especialmente encasos en que los rehenes fueran funcionarios oficiales. En general los Estados Unidos y otros pasesindustrializados han favorecido el principio de que los terroristas son criminales y de que lacomunidad mundial comparte la responsabilidad de aprehenderlos y llevarlos a juicio, encontraste con los pases menos desarrollados que si bien deploran la muerte de vctimasinocentes, tienden a argumentar que el terrorismo es con frecuencia la nica arma disponible delopositor y que antes de prohibirlo deben adoptarse ciertas medidas para rectificar las injusticias

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    polticas y econmicas que da a da se perpetan, en particular provenientes de los pasesindustrializados y de sus aliados. Este ltimo argumento, por ejemplo, fue invocado para perdonarla violencia de la OLP contra Israel y para justificar el apoyo a grupos rebeldes en frica del sur. As mismo, los pases latinoamericanos y otros pases en proceso de desarrollo se mostraron tambinmuy preocupados acerca del derecho tradicional que tienen los Estados de ofrecer asilo a los

    "prisioneros polticos" que se encuentran huyendo y buscando un santuario poltico.

    El destino final de la propuesta estadounidense y de medidas similares para tratar con laviolencia no ortodoxa, se presenta ms adelante al examinar la respuesta internacional a esteproblema. Con frecuencia han sido los actores no estatales quienes han movido a la comunidadinternacional a aceptar en alguna forma los controles contra el terrorismo. No es posible describira cabalidad la poltica que envuelve el control de los secuestradores de aviones, por ejemplo, sinponer de presente el papel de una OIG como la Organizacin Internacional de Aviacin Civil (OIAC)y su colaboracin en la primera redaccin de un convenio contra el secuestro de aviones, ytambin el papel jugado por una ONG, tal como la Federacin Internacional de Pilotos de Lneas

    Areas, al influir sobre los gobiernos para que adoptaran medidas de seguridad area .msestrictas tendientes a cerrar el asilo a los secuestradores de aviones. Fue esta ltima asociacin -en esencia un sindicato transnacional- quien amenaz con no volar a pases que dieran asilo asecuestradores de naves areas, despus del brutal asesinato de un piloto a bordo de un avin deLufthansa Air Lines durante un secuestro en 1977. La accin de la Federacin, combinada con lapresin de parte de los Estados Unidos y de otros gobiernos result en una pequea piezasimblica, pero sin precedentes, consistente en una resolucin de la asamblea general de lasNaciones Unidas condenando el secuestro areo.

    La respuesta al terrorismo: regmenes anti-terroristas

    Individualmente, los pases pueden desarrollar ciertas medidas para combatir elterrorismo. Las tcnicas anti-terroristas incluyen los golpes inesperados a las bases terroristasantes de que este tipo de sujetos puedan actuar; efectuar golpes de retaliacin contra las basesdespus de los incidentes terroristas tanto para castigar como con propsitos de disuasin,mejorar los mtodos de obtencin de informacin en forma tal que se pueda penetrar y lograrsubvertir grupos terroristas fortificar y proteger algunos posibles objetivos terroristas, tales comolas embajadas y los aeropuertos y crear cuerpos elites de rescate y unidades contra-terroristascapaces de intervenir en casos de toma de rehenes y en otras situaciones crticas. (Ver la VisinLateral sobre "Los Grupos de Fuerza de Accin Inmediata y los Terroristas Nucleares" en laspginas 416-417). El xito de tales medidas vara en gran parte debido a las circunstancias, comolo descubrieron aquellos que trataban de dar con los rehenes en lugares tales como Irn y elLbano; raramente las bases terroristas se pueden aislar del entorno y atacarlas en pasesextranjeros puede producir serias consecuencias polticas.

    Dado el carcter internacional de gran parte del terrorismo contemporneo, seguramentelos esfuerzos unilaterales por parte de los gobiernos para combatir el problema no tienen tantasposibilidades de xito como el que tendran si actuaran en forma conjunta y concertada. Como

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    sucede con las normas sobre el control de armas, los pasos dados para controlar el terrorismointernacional se han orientado principalmente a la elaboracin de tratados": Las instituciones judiciales nacionales e internacionales juegan un papel muy importante, toda vez que no esposible luchar con el terrorismo a menos que se efecten los juicios, los arrestos, las extradicionesy el excarcelamiento de los ejecutores. Bajo la ley internacional, los Estados han tenido la libertad

    de decidir si devuelven a los fugitivos buscados por otros Estados, y los acusan en sus propiostribunales o si, por el contrario, los dejan libres. Solamente si un Estado tiene un tratado deextradicin con otro Estado, incurre en la obligacin de entregar a los fugitivos; sin embargo, escomn que estos tratados no obliguen a la entrega de los acusados de crmenes "polticos".Dentro de muchas limitaciones, el concepto de la responsabilidad mundial por prevenir ciertosactos perversos y crueles de terror y la aprehensin de los terroristas, poco a poco ha ido lograndoaceptacin en los ltimos aos. Aun rivales tan extremos como los Estados Unidos y Cuba se hanpuesto de acuerdo sobre la necesidad de controlar el secuestro y el asesinato, de proteger a losdiplomticos y de extraditar y abstenerse de otorgar asilo a los terroristas.

    La creciente preocupacin mundial acerca del terrorismo se hizo evidente despus de lamasacre de atletas israeles por parte de comandos palestinos en los Juegos Olmpicos de Munichen 1972. Esto condujo a esfuerzos para prevenir tanto el secuestro como el asesinato, sobre todode las personas a quienes se denomina como internacional mente protegidas (diplomticos y otrosrepresentantes de los pases). En 1973la asamblea general de la ONU aprob una resolucin sobreel status de tales personas y la Convencin sobre la Prevencin y el Castigo de Crmenes contra lasPersonas Protegidas Internacionalmente, incluyendo los agentes diplomticos, la cual se presentpara ratificacin en el mismo ao. Tambin en la ONU fue establecido el Comit sobre TerrorismoInternacional. Despus de muchos aos de debate -en particular respecto al papel del terrorismoen las luchas de deliberacin nacional-, en 1979 se redact la Convencin Internacional contra la

    Toma de Rehenes; durante la dcada de los 80, ms de 40 pases, incluyendo los Estados Unidos,firmaron el Convenio que aun cuando reconoce los derechos de los movimientos de liberacinnacional, establece que los Estados estn obligados a juzgar o extraditar a todo aquel resonsablede la toma de rehenes

    Existen otras tres convenciones desarrolladas por la Organizacin Internacional de Aviacin Civil yespecialmente dirigidas hacia los crmenes relacionados con el transporte areo. La Convencin deTokio de 1963 obliga a los pases signatarios a liberar en forma segura los aviones secuestrados as como sus pasajeros y miembros de tripulacin que ingresen dentro de sus fronteras. LaConvencin de La Haya de 1970 va ms lejos y obliga a que los Estados extraditen o juzguen a los

    secuestradores que estn bajo su custodia. La Convencin de Montreal de 1971 ampla lostrminos previstos en la Convencin de La Haya para incluir no solamente los secuestradoresareos sino cualquier persona que cometa actos de sabotaje contra aeropuertos o aviones entierra, y autoriza a la Organizacin Internacional de Aviacin Civil a suspender los vuelos a pasesque no cumplan con estas normas. Estas convenciones han sido solamente la primera etapa en eldesarrollo de un rgimen internacional para el control del secuestro de aeronaves : . Acuerdosadicionales de carcter multilateral prohben el secuestro de navos, el robo de material nuclear, el

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    uso del correo para el envo de explosivos y otras sustancias peligrosas, y el trfico ilcito denarcticos. Ciertos vacos en los temas cubiertos por estas normas y el hecho de que muchosEstados no han ratificado an estas convenciones, restan efectividad a la legislacin internacionalen esta rea. Sin embargo, un nmero cada vez ms creciente de gobiernos, estn ratificandoestos acuerdos, aunque sea slo por el temor de las consecuencias potenciales de no firmados,

    sobre todo, en lo relacionado con las amenazas del terrorismo nuclear .

    Algunas organizaciones internacionales del tipo OIG han ido ms all para prohibir ciertostipos de prcticas terroristas. En 1976, por ejemplo, en el Consejo de Europa (compuesto por lamayor parte de los pases de Europa occidental], se decidi que no se aceptarn las motivacionespolticas como excusa para la indulgencia respecto al castigo o a la extradicin de terroristas quecometan ofensas en las cuales se utilicen elementos letales, aun cuando algunos pases europeosno ratificaron el acuerdo y algunos de ellos plantearon ciertas reservas sobre el alcance de susobligaciones".

    Adicionalmente a las respuestas de carcter legal, los Estados han compartido lasinnovaciones tecnolgicas orientadas a contrarrestar el terrorismo. En los aeropuertos y en otrosedificios pblicos alrededor del mundo se han instalado sistemas y mquinas para la bsquedaelectrnica y se han dado avisos preventivos respecto a fallas en la seguridad y en la vigilancia. Losmovimientos de los terroristas son perseguidos mediante agencias de polica internacional, talescomo Interpol, y mediante la informacin en las bases de datos de los computadores, la cualintercambian los Estados". Por supuesto, ninguna de estas medidas garantiza el xito contra elterrorismo; la polica italiana ignor las advertencias turcas respecto al terrorista queposteriormente dispar contra el Papa Juan Pablo II en 1981, y en otro caso se ignoraron ciertasadvertencias en un incidente macabro aunque poco conocido, ocurrido en 1977 y del que se darazn enseguida:

    Nuestro mundo moderno es tan complejo y tan cercanos los mrgenes deerror que pueden producir las fatalidades de los terroristas en tragediasimprevisibles. La explosin de una bomba de tiempo en la floristera delaeropuerto de Gran Canaria en marzo de 1977 por un grupo terrorista pococonocido y que buscaba la independencia de las Islas Canarias de Espaa,fue la responsable de que se desviara el trfico areo hacia el aeropuerto deSanta Cruz de Tenerife. All se estrellaron dos inmensos jumbos, ambosdesviados a Tenerife, producindose el mayor desastre de la historia de laaviacin civil".

    Un signo modesto pero esperanzador del creciente reconocimiento mundial respecto a lanecesidad de controlar la violencia no ortodoxa se present dos meses despus del caso delAchille Lauro. E19 de diciembre de 1985, la asamblea general de la ONU, por primera vez, y porunanimidad, aprob una resolucin de amplia condena a todas las formas de terrorismo. Laresolucin "en forma inequvoca [conden] todos los actos ... de terrorismo en cualquiermomento y cualquiera que sea la persona que los cometa" y "[deplor] profundamente la prdidade vidas humanas como resultado de tales actos terroristas". Al mismo tiempo, convoc a todaslas naciones del mundo para "abstenerse de organizar instigar, colaborar o participar en actos de

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    terrorismo en otros Estados o consentir en actividades dentro de su territorio dirigidas a larealizacin de tales actos". La resolucin lleg hasta el punto de incluir un acuerdo nico, aunqueun poco vago, sobre la definicin del terrorismo como actos "que ponen en peligro o acaban convidas inocentes, vulnerando las libertades fundamentales y perjudicando la dignidad del serhumano". El problema contina siendo el de encontrar un acuerdo universal en la aplicacin de los

    principio generales a casos especficos":

    Existen razones para considerar que el esfuerzo mundial contra el terrorismo es al menosparcialmente exitoso. El nmero de secuestros areos y su tasa de xito 'se ha reducidosustancialmente en el curso de las dos dcadas pasadas, y los episodios ms recientesinvolucraron fundamentalmente a dos individuos que deseaban huir de un Estado a otro ms queestar empeados en la obtencin de concesiones polticas. Sin embargo, aunque en la dcada delos 90 se han presentado algunos actos terroristas que han sido ampliamente difundidos, tambinse ha registrado una disminucin general en el nmero total de incidentes terroristas reportadosdesde mediados de la dcada de los 80. Es difcil saber si esta tendencia se puede atribuir al

    endurecimiento de las normas contra el terrorismo a nivel mundial, a un cambio en las tcticasterroristas o a otros factores, y continuar o si por el contrario es de esperar que puedacontrarrestarse en el futuro.

    Conclusin

    En el propsito de combatir el terrorismo se pueden utilizar varios enfoques que van desde laspolticas nacionales unilaterales hasta la construccin de un rgimen de carcter mundial, y desdeel despliegue de fuerza altamente visible hasta un enfoque mucho ms discreto, basado en la

    diplomacia detrs del escenario con trabajos de inteligencia. Por otra parte la lucha contra esteflagelo de la humanidad puede ir desde acciones dirigidas hacia los gobiernos patrocinadores delterrorismo hasta acciones orientadas a los grupos terroristas propiamente dichos. Pero las tcticasde contra-terrorismo fallan en muchos casos dado que no enfrenta la raz del problema y, por lotanto, los alivios son slo momentneos.

    Los grupos que emplean tcticas terroristas tienen una gran variedad de motivaciones Aun cuandoalgunos grupos son casi completamente nihilistas y abogan por cambios arrolladores querepresentan la destruccin total de las instituciones sociales, otros estn animados porpreocupaciones ms limitadas y hasta persuasivas, aun cuando sus mtodos pueden ser altamente

    objetables. Si la humanidad espera alcanzar la meta de mantener la paz y reducir la violenciafsica en el mundo -ya sea en la forma del terrorismo mediante luchas armadas msconvencionales-, es poco probable que se tenga xito . orientarse tambin hacia los asuntosrelacionados con la justicia y a lo que se ha dado en llamar la violencia estructural esto es, elhambre, la carencia de servicios de salud otras formas de deprivacin econmica que puedenmatar y mutilar tanto como las balas y que con mucha frecuencia sirven de fundamento paraacudir al camino de la violencia. Por lo tanto, los dos prximos captulos se dirigirn a analizar lostemas de la economa internacional, orientando la atencin en primer trmino al funcionamiento

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    de la economa mundial como un todo y posteriormente hacia el desarrollo econmico de lassociedades menos desarrolladas.

    VISIN LATERAL

    GRUPOS DE FUERZA DE ACCIN INMEDIATA Y TERRORISTAS NUCLEARES

    En realidad es difcil plantear una visin de esta coyuntura en la historia estadounidense,pero todava hay ocasiones, incluso ahora, en que trabajar para el gobierno puede seremocionante. Consideremos por ejemplo un ejercicio de entrenamiento secreto en elDepartamento de Energa -Operacin espejismo de oro- que se mont en Nueva Orleans enoctubre de 1994. Cientos de cientficos nucleares que normalmente estn confinados a loslaboratorios, se pierden en el barrio French Quarter llevando maletines con detectores escondidosde radiacin mientras una serie de camionetas alquiladas, llenas de elementos electrnicos de altatecnologa, circulan por las calles y aviones dotados con cmaras fotogrficas sobrevuelan el lugar.Despus de tres das encontraron lo que buscaban: armas atmicas simuladas, escondidas en una

    base naval cercana.

    Existe algo ms sobre estos juegos, que el simple hecho de dar a los empleados oficiales laoportunidad de jugar a [ames Bond. El objetivo es probar el grado de preparacin de un equipo detrabajo secreto, organizado para combatir la posibilidad -y la eventualidad, dicen algunos- deterrorismo nuclear en los Estados Unidos. Bienvenido a la inseguridad, sera el nuevo calificativoque aparecera en la edicin de la posguerra fra.

    Hasta ahora, y se espera que as suceda por mucho tiempo, el espectculo de que elgobierno de los Estados Unidos se vea chantajeado por terroristas nucleares ha sido el tema delibros, pelculas (incluida una ... de John Travolta) y ... comerciales orientados a llamar la atencindel pblico por parte de candidatos presidenciales necesitados de atencin. Por supuesto, elatractivo de las armas nucleares para los terroristas es obvio: si la meta consiste en desestabilizarla sociedad y en atraer la atencin del pblico hacia una determinada situacin, un hongo dehumo produce un mayor impacto que las bombas colocadas en camiones y los ataques con [gas]sarn ...

    El Cuerpo de Bsqueda de Emergencias Nucleares (Nest por sus siglas en ingls)establecido en 1975, despus de que un extorsionista amenaz con volar la ciudad de Boston conun instrumento nuclear a menos que se le pagaran US$200.000, ha evaLuado 110.000 amenazas yse ha movilizado para atender cerca de 30 de ellas; tal como sucedi con el incidente de Bastan,todas las amenazas han resultado falsas. Sin embargo, el cuerpo de bsqueda es algo ms que unequipo de las fuerzas especiales de alta tecnologa. En el remoto lugar denominado Pajarito, en elcomplejo de laboratorios de armas nucleares de los Alamos, localizado en el estado de NuevoMxico, 17 cientficos utilizan la tecnologa que pueden encontrar en los anaqueles de losalmacenes Radio Shack y el tipo de combustibles lquidos que se venden en el mercado negro paraconstruir bombas hechas en casa. Para desmantelar un modelo de instrumento, los cientficos

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    primero deben saber exactamente las diversas formas que se pueden dar a un elemento con estetipo de construccin; hasta ahora este grupo ha ensamblado ms de una docena ...

    En varios escenarios de juego, el cuerpo de bsqueda de emergencias nucleares se haimaginado a s mismo presentando al presidente de los Estados Unidos las peores alternativas de

    su vida. Tomar algunas de ellas podra llevarse slo unos minutos. En un escenario aparentementeplausible, existe un diez por ciento de probabilidad de que si el Nest trata de desactivar unabomba con una carga de diez kilotones, y sta llega a explotar, prcticamente arrasara con 10.000ciudadanos. Puede ser un consuelo bastante pobre para los sobrevivientes saber que el gobiernotiene unas instalaciones especiales de emergencia para esta eventualidad en el Centro MdicoMetodista de Oak Ridge en el estado de Tennessee.

    Algunos cientficos nucleares como John Nuckolls, director asociado en el laboratorio deLivermore del Departamento de Energa del gobierno estadounidense, considera que el equipo depreparacin nuclear de Estados Unidos finalmente tendr que unirse a otros laboratorios en elexterior y establecer una fuerza internacional de cuerpos de bsqueda de emergencias nucleares."La destruccin de cualquier ciudad del mundo por terroristas nucleares puede amenazar todas lasnaciones y ciudades", dice l. Si esto es as, todos nosotros somos rehenes potenciales.

    Fuentes: Douglas Waller, "Counterterrorism: Nuclear Ninjas, A New Kind of Swat Team HurtsAtomic Terrorists", Time, 147, no. 2 (January 8,1996). pp. 38-40. 1996 TIME Inc. Reimpreso conpermiso.

    RESUMEN

    1. Existe gran desacuerdo respecto a cules son los grupos y cules las acciones y actividadesque se pueden considerar de naturaleza "terrorista", con el argumento que se escucha a menudode que "un terrorista es para otra persona, un hroe de la liberacin nacional".

    2. Sin embargo, conceptualmente el terrorismo tiende a caracterizarse al menos por treselementos comunes: (1) involucra la amenaza o el uso real de la violencia no convencional,diseada tanto para golpear como para obtener publicidad o causar el terror; (2) est motivadopolticamente; y (3) los objetivos inmediatos o las vctimas, ya sean personas o propiedades,usualmente tienen una relacin indirecta con los grandes propsitos que impulsan tal violencia.Podra agregarse una cuarta caracterstica: la tendencia de quienes ejercen el terrorismo a seractores no estatales, esto es, "grupos al margen", a quienes se ha negado un status legtimo yquienes buscan afectar y subvertir en cierta forma el orden establecido.

    3. Algunos gobiernos participan al menos indirectamente en actividades terroristas, bien seaa travs de agencias clandestinas o mediante el envo de armas u otras formas de apoyo a losgrupos terroristas. Las prcticas anti-terroristas adoptadas por los gobiernos tambin puedenllegar a asimilarse con los mtodos terroristas que ellos se proponen reprimir, y pueden plantearproblemas de carcter moral acerca de adelantar o no negociaciones con los terroristas y respectoa los derechos civiles de los ciudadanos.

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    4. Aun cuando el terrorismo no es un fenmeno nuevo, en la era contempornea ha venido aconstituirse en una preocupacin ms seria, debido a la creciente vulnerabilidad de la sociedad acausa de la existencia de las comunicaciones y a la tecnologa en los viajes que permite a losterroristas operar a escala mundial y extender sus redes ms all de las fronteras nacionales.

    5. La frecuencia de los actos terroristas disminuy durante la dcada de los 90 encomparacin con la de los aos 80, cuando en promedio se reportaron 500 incidentes anuales; sinembargo, el nmero de incidentes sigue siendo alto. Los pases de Europa occidental, el MedioOriente y Amrica Latina han sido los principales focos de ataques terroristas, y las propiedades yciudadanos estadounidenses siguen siendo objetivos primordiales junto con, los europeos, losrabes y los israeles. Se ha observado cierta tendencia a la disminucin de los asaltos y lossecuestros, y al aumento de los atentados con explosivos y otros tipos de asalto. Los actosterroristas generalmente resultan en pocas bajas humanas a pesar de la horrible naturaleza delfenmeno.

    6. La seleccin de los objetivos y de los mtodos puede variar de un grupo terrorista a otro, ylos patrones de comportamiento se ven afectados por factores tales como la ideologa del grupo,su tamao, su edad y su localizacin.

    7. Si bien los terroristas en general han tenido xito en alcanzar sus metas inmediatas enrelacin con los costos incurridos, sus grandes aspiraciones rara vez se logran plenamente. staspueden ir desde la creacin de un pas propio hasta la eliminacin de la influencia culturalextranjera proveniente de una determinada regin o hasta la transformacin del orden poltico yeconmico mundial. Actualmente, a los problemas del terrorismo pueden agregarse las revueltasde carcter poltico y socio-econmico en varias partes del mundo.

    8. Los esfuerzos por combatir el terrorismo se complican por el hecho de que los gobiernoscon frecuencia tienen puntos de vista conflictivos sobre la materia y algunos de ellos,particularmente en lo que se relaciona con las actividades terroristas que tienen lugar en el mundoen desarrollo, argumentan que el terrorismo es un arma legtima de los oprimidos. Sin embargo,poco a poco ha venido ganando aceptacin el concepto de una responsabilidad mundial paracombatir el terrorismo. Hoy en da existen numerosos tratados que se relacionan con lossecuestros areos y otros aspectos propios de, terrorismo. Otro campo de cooperacinmultilateral tiene que ver con el hecho de compartir los recursos policiales y las tecnologas devigilancia. Existe un amplio y difundido inters entre los gobiernos en limitar el potencial de losataques terroristas de tipo nuclear y de otros conducentes a la destruccin masiva.

    LECTURAS RECOMENDADAS

    Diversos grupos de investigacin revisan cuidadosamente las tendencias del terrorismointernacional; en particular dos de ellos preparan informes con frecuencia citados en la literaturasobre la materia, stos son: U.S. State Department's Office Of Counter-Terrorism (en su seriePatterns of Global Terrorism) yel Rand Corporation's Program on Poltica. Violence (en sus seriesChronologies of In terna tional Terrorism y Trends in lntetnational Terrorism). Ver tambin David

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    E. Long, The Anatomy of Terrorism (New York: The Free Press, 1990J Edward R. Mickolus,International Tetrotistn in the 1980s: A Cbronology of Events (Ames, Iowa: Iowa State UniversityPress, 1989); Per Baltzer Overgaard, "The Scale of Terrorist Attacks as a Signal of Resources",Journal of Conflict Resolution, 38 (December 1994), pp. 452-478; y las revistas Terrorism: AnIntemationol Journal y Journal of Terrorism and Political Violence.

    Un buen tratamiento conceptual del terrorismo se encuentra en los siguientes trabajo: Leonard B.Weinberg y Paul B. Davis, Introduction to Political Terrorism (New York McGraw-Hill, 1989) DonnaM. Schlagheck, International Tetroiism: An Introduction to the Concepts and Actors (Lexington,Mass.: Lexington, 1988); Todd Sandler, John T. Tschirhart, y Jon Cauley, "A Theoretical Analysis of Transnational Terrorism", American Political Science Review, 77 (March 1983), pp. 36-54; MichaelStohl, ed., The Politics of Terrorism, 3ra ed. (New York: Marcel Dekker, 1988); Robert O. Slater yMichael Stohl eds., Current Peispectives on International Teirorism (Basingstoke, N.H.: Macmillan,1988); Michael Aaronson, "Terrorism or Freedom Fighting? A Minefield of International Relations",International Relatiotis, 8 (November 1986), pp. 611-634; Leonard Weinber "Turning to Terror:The Conditions Under Which Political Parties Turn to TerroristActivities", Comparative Politics, 23(December 1991), pp. 423-438; Paul Wilkinson Terrorism and The Liberal State, 2a ed: (London:Macmillan, 1986); y David A. Charters, ed., The Dead1y Sin ofTerrorism: Its Effect on Democracyand Civil Liberty in Six Countries (Westport, Conn.: Greenwood Press, 1994).

    Entre los diversos enfoques para estudiar el anti-terrorismo, ver Brunos Frey, "FightingPoliticalTerrorism by Refusing Recognition", Joutnal of Public Policy, 7 [April/June 1987) pp. 179-188;

    Nehemia Friedland, "Fighting Political Terrorism by Refusing Recognition: A Critique of Frey'sProposal", Journal of Public Policy, 9 [April/June 1898), pp. 207-216 Robert A. Friedland, ed.,Teiroiism, 2 vols., Serie 1, Vol. 6 (Dobbs Ferry, N.Y.: Oceana Publications, 1992); Henry H. Han,Terrorism and Political Violence: Limits and Possibilities of Legal Control, Series 2, Vol. 1 (DobbsFerry, N.Y.: Oceana Publications, 1992); y Burleigh Taylor Wilkins, Terrorism and CollectiveResponsibility: Points of Conflict (London: Routledge, 1992).

    Sobre otros aspectos del terrorismo, ver David Rapaport, ed., Inside Terrorist Organizations(NewYork: Columbia University Press, 1988) Gabriel Weimann y Conrad Winn, The Theater of Terror: Mass Media and International Terrorism (White Plain , N.Y.: Longman, 1994); Francis P.Hyland, Armenian Terioiism: The Past, the Present, the Prospects (Boulder, Colo.: Westview Press,1991); David Pion-Berlin, "Of Victims and Executioners: Argentine State Terror, 1975-1979",International Studies Quarterly, 35 (March 1991), pp. 63-86; Robert P. Clark, The BasqueInsurgents (Madison, University of Wisconsin Press, 1984); J. Bowyer Bell, The SecretArmy: AHistoryof the IRA, 1916-1970 (Cambridge, Mass.: MIT Press, 1974); Helena Cobban, The PalestinianLibeiation Organization: People, Power, and Politics (New York: Cambridge University Press, 1984);

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    Jacobo Timerman, Prisoner Without a Name, Cell Without a Number (New York: Knopf, 1981);Brian M. Ienkins, "Will Terrorists Go Nuclear?", Orbis, 29 (Fall1985), pp. 507- 515; LawrenceFreedman, y otros, Terrorism and International Order (London: Routledge y Kegan Paul, 1986); yTed Robert Gurr, ed., Violence in America, 2vols. (Newbury, Calif.: Sage, 1989.)

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