Murray Edelman

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Murray Edelman La construcción del espectáculo político. 2 La construcción y los usos de los problemas sociales. Los problemas como construcciones ideológicas Los problemas sociales constituyen un tema supremo en el discurso político, se publica sobre sus causas consecuencias, etc., pero pocas veces son resueltos. Los problemas entran en el discurso y por lo tanto en la existencia como refuerzo de las ideologías, no porque estén allí y sean importantes para el bienestar. Ellos significan quienes son virtuosos y útiles, quienes peligrosos e inadecuados, que acciones serán recompensadas y cuales penadas. Construyen a las personas como sujetos con tipos particulares de aspiraciones , autoconceptos y miedos, y originan creencias sobre la importancia relativa de acontecimientos y objetos. Son críticos en la determinación de quienes ejercen la autoridad y quienes la aceptan. Construyen áreas inmunes a la preocupación porque no son vistas como problemas. Al igual que los líderes y los enemigos, definen los contornos del mundo social, no el mismo para todos, sino a la luz de las diversas situaciones desde las cuales las personas responden al espectáculo político. Las condiciones perjudiciales que no se convierten en problemas Si los problemas sociales son construcciones, es evidente que las condiciones que perjudican a personas no necesariamente se convierten en problemas. Peter Bachrach ha denominado “no decisiones” a tales fenómenos. A veces se producen porque grupos políticos

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Murray EdelmanLa construcción del espectáculo político.

2 La construcción y los usos de los problemas sociales.

Los problemas como construcciones ideológicasLos problemas sociales constituyen un tema supremo en el discurso político, se

publica sobre sus causas consecuencias, etc., pero pocas veces son resueltos.Los problemas entran en el discurso y por lo tanto en la existencia como

refuerzo de las ideologías, no porque estén allí y sean importantes para el bienestar. Ellos significan quienes son virtuosos y útiles, quienes peligrosos e inadecuados, que acciones serán recompensadas y cuales penadas.

Construyen a las personas como sujetos con tipos particulares de aspiraciones , autoconceptos y miedos, y originan creencias sobre la importancia relativa de acontecimientos y objetos. Son críticos en la determinación de quienes ejercen la autoridad y quienes la aceptan. Construyen áreas inmunes a la preocupación porque no son vistas como problemas. Al igual que los líderes y los enemigos, definen los contornos del mundo social, no el mismo para todos, sino a la luz de las diversas situaciones desde las cuales las personas responden al espectáculo político.

Las condiciones perjudiciales que no se convierten en problemasSi los problemas sociales son construcciones, es evidente que las condiciones

que perjudican a personas no necesariamente se convierten en problemas. Peter Bachrach ha denominado “no decisiones” a tales fenómenos. A veces se

producen porque grupos políticos poderosos pueden bloquear la consideración de las prácticas con las que ellos se benefician, pero esta forma de no decisión por lo general tiene poca vida. Los casos mas duraderos parten de premisas ideológicas tan difundidas que no se las reconoce como ideológicas.

Comúnmente hay consenso acerca de las prácticas de larga data, solo un pequeño subconjunto de ellas se convierte en problemas, probablemente no las mas perjudiciales. La influencia de las noticias puede hacer que sobre ciertos problemas, que no están el lista, recaer la inmunidad ante la observación y la crítica. El resultado es la ceración de fe en la sensibilidad moral de los regímenes y los individuos, tachando los procesos que suscitarían interrogantes sobre tal sensibilidad.

Los problemas como beneficios Los problemas que aparecen en las noticias pueden estar presentes durante

largos períodos o solo intermitentemente ausentes.El fracaso de la búsqueda de una solución eficaz proviene de una contradicción

profunda. El problema de algunos es el beneficio de otros.¿Cuál es el sentido político de términos que subrayan los problemas y ocultan

los beneficios? Ellos silencian los conflictos de intereses entre los grupos sociales. También dan la seguridad de que la preocupación por los problemas está ampliamente

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difundida. De estos modos las formas lingüísticas moderan la intensidad del conflicto social.

El lenguaje es vital para la maniobra política y la construcción de la subjetividad.

La exposición a las contradicciones facilita el enmascaramiento de la ineficacia de las soluciones y los beneficios que algunos grupos derivan del fracaso.

Los problemas como formulaciones ambiguasUn tema central es la diversidad de significados intrínsecos de todo problema

social, que parten de la gama de preocupaciones de los diferentes grupos.El problema se vuelve lo que es para cada grupo precisamente porque sus rivales

lo definen de modo diferente. Un problema es un significado con los siguientes rasgos:1) Se centra en el nombre de una condición indeseable o que amenaza el bienestar.2) Las actividades gubernativas que un foco racionaliza comprenden una secuencia de formulaciones y acciones ambiguas que cambian y son generalmente inconsistentes entre si porque son respuestas a diferentes intereses de grupo.3) Este bricolage de acciones y formulaciones verbales a veces mejora la condición de las personas o no, pero algunas consecuencias de las políticas perseguidas son siempre inversiones del valor formalmente proclamado de la actividad.

Una política es un conjunto de respuestas contradictorias, cambiantes y diversas a un espectro de intereses políticos. Pero su nombre es un fenómeno distinto con otra función, que les ofrece una base para ignorar las inconsistencias a las personas inclinadas a hacerlo. El nombre de las políticas reasegura, refleja y racionaliza las pautas ideológicas dominantes. Describen los logros, ocultan las vacilaciones de la acción y las estrategias contraproducentes que minimizan, cancelan o invierten las pretensiones de éxito.

La construcción de razones para los problemasLas explicaciones de los problemas sociales que persisten son notables por la

diversidad de causas e ideologías a las que apuntan. Culpan instituciones, clases, a los que sufren o a los que se benefician; pueden localizar la causa de un problema. Pueden ser concretas o abstractas.

Evocar el origen de un problema es atribuir culpas y elogios, Cada origen reduce la cuestión a una perspectiva y minimiza o elimina las otras. Cada uno refleja una ideología y racionaliza un curso de acción.

Una explicación perdura como correcta si refuerza y refleja la ideología dominante de la época. La “duración” de una explicación depende en parte de la aceptabilidad de la premisa ideológica que implica. Como un problema social no es una entidad verificable sino una construcción que promueve intereses ideológicos, su explicación tiene que ser parte de del proceso de construcción.

La explicación para un problema social crónico nunca puede recibir un apoyo gral, tienepor función intensificar la polarización y mantener el apoyo de los adherentes en amboslados.Las razones extraen adhesión mediante la evocación de un espectáculo que muestra a sus rivales como amenazas. Lo típico es que una explicación de una condición perturbadora sea más importante para los militantes que la posibilidad de eliminar esa condición: esta aparece como aparece como la evocación retórica de un futuro improbable de alcanzar.

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Cualquier afirmación acerca del origen de un problema rechaza de modo implícito otros orígenes.

Las posiciones en la opinión expresada favorecen la estabilidad social pues reafirman y rectifican lo que todos ya saben y aceptan. Es vital la persistencia de problemas irresueltos con significados conflictivos.

Lo que favorece la inestabilidad es la expresión de consenso y no la de oposición. Cuando no es necesario defender los enunciados se los puede cambiar.

No es probable que el lenguaje sobre los orígenes convierta a una persona a una ideología contraria a la que sostiene. Sus efectos consisten en agudizar las cuestiones, en polarizar la opinión. La construcción de problemas y de sus razones refuerza las escisiones sociales convencionales. El resultado político: las nuevas formas no convencionales de la acción política son excluidas del discurso común.

La construcción de autoridadesEl lenguaje es también una justificación para investir de autoridad a personas

que afirman tener competencia. La disposición a suspender el propio juicio a favor de alguien considerado capaz de manejo exitoso crea autoridad.

La definición del problema crea autoridad, status, utilidades y apoyo económico, y los niega a los competidores.

La construcción de problemas para justificar solucionesExiste un vínculo entre problemas sociales e intentos de resolverlos. Pero la

característica de este vínculo es que la solución viene primero, cronológica y psicológicamente. Quienes favorecen un curso de acción gubernamental buscaran vincularse con un problema para obtener el máximo apoyo. Este proceso no es necesariamente conciente.

El vínculo entre problemas y soluciones es una construcción que transforma una preferencia ideológica en una acción racional gubernamental.

La construcción de gestos como solucionesSiempre hay personas que se benefician con la creencia de que un problema se

resolvió. Cuando estas son muchas u ocupan posiciones estratégicas, un régimen tiene incentivos para describir como solución cualquier desarrollo asociado con el problema.

Lo más común es la puesta en vigencia de una ley que promete resolver el problema aunque probablemente no lo logre.

Una alternativa es presentar un desarrollo que beneficia a un grupo como si fuese útil para todos.

Aceptar las interpretaciones oficiales de las acciones publicitadas sobre temas alejados de lo cotidiano es una fuente de legitimación. Esto se comprende debido a la ambigüedad de las acciones gubernativas.

En política no hay prueba de la pertinencia de las acciones. Una respuesta a un problema libera a los grupos involucrados para negociar de acuerdo con sus recursos. El lenguaje ambiguo es un signo y un facilitador de la negociación.

La perpetuación de los problemas por medio de políticas para apalearlosLa construcción de los problemas lleva consigo un efecto perverso: ayuda a

perpetuar las condiciones definidas como el problema, desenlace que proviene de los

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esfuerzos por superar una condición cambiando la conducta de los individuo, mientras se preservan las instituciones que generan esa conducta.

Los problemas como negaciones de otros problemasEl surgimiento de un problema puede distraer la atención pública respecto de

otro. Tal ocultación es una propiedad del discurso público y una explicación de que el público acepte una cuestión como legítima.

El discurso sobre problemas sociales y su manejo político tiene varios niveles de significación. Es un dialogo sobre condiciones nombradas y sobre los cursos adecuados de acción, pero puede ser un enunciado latente de cuestiones mas perturbadoras.

Lo que explica la atención a los problemas políticos no depende de su gravedad sino de su atractivo dramático.

Las noticias transmiten alguna información encubierta sobre el conjunto de problemas de los que el público tiene conciencia, incluso cuando la intención sea abordar algo específico.

Las noticias construyen los mundos, las historias, etc. Dando las bases sobre lo que debe preocuparnos o lo que debemos ignorar. Los temas periodísticos desplazan a otros y toman su significado de otras noticias. Poco sorprende que los grupos de interés traten de moldear las noticias, pues crean un mundo dominado por un conjunto de problemas es también crear apoyos para cursos de acción específicos.

Los usos de los problemas sociales invisiblesLa prueba de algunos problemas es la experiencia de sus victimas, otros se

conocen por los reclamos de los que tienen interés en publicitarlos.Hay afirmaciones que no pueden encontrar confirmación en la experiencia de

nadie pero igual logran apoyo. Lo típico es que sean mas eficaces para obtener apoyo político que los problemas que si pueden ser examinados, porque tales afirmaciones no tienen contrapruebas.

La definición de los acontecimientos como crisis Los términos problema y crisis inducen aquiescencia con las privaciones.

Despiertan la expectativa de que los otros toleraran esas privaciones. Problema connota una condición resistente a la solución fácil. Una crisis anuncia inestabilidad lo que significa que habrá que soportar nuevas formas de privación durante un tiempo.

Es frecuente que una crisis sea un episodio de una larga secuencia de problemas similares, es una creación del lenguaje utilizado para describirla; su aparición es un acto político.

Los problemas y las crisis racionalizan políticas perjudiciales para los que se encuentran en desventaja. Los resultados clasistas de la rotulación de una crisis no son deliberados. Provienen de una estructura desigual de oportunidades y de la ideología que refuerza esa estructura desigual.

Las audiencias como creadoras de problemas socialesEl que una situación sea un problema social depende de que una parte

ponderable del publico lo acepte como tal. Una característica de la atención pública reside en su capacidad de estar presente y ausente: para ser selectiva.

El que las muchas personas que prestan poca o ninguna atención a las noticias dependen del efecto que le atribuyen a esas noticias. Ellas proporcionan información

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que permite actuar a las personas sobre la base de sus intereses. Una perspectiva sugiere que la preocupación por las noticias esta mas cerca de una forma de subyugación que de una ayuda a la autonomía.

La devaluación de la experiencia cotidianaLas noticias sobre asuntos públicos consisten en relatos de acontecimientos

alejados de la vida cotidiana. Escuchar o leer noticias es vivir un mundo con el que no se tiene contacto cotidiano, la mayor parte de las experiencias cotidianas no forman parte de las noticias. La construcción de los problemas públicos denigra las preocupaciones de la existencia cotidiana y el bienestar personal para realzar construcciones que se originan en informes sobre el espectáculo político. Llaman la atención sobre las pocas probabilidades de éxito en la modificación de las condiciones sociales y sobre la irrelevancia de la sensibilidad personal. Desalienta la resistencia a las condiciones inmanentes y racionaliza la aceptación del mundo tal como es.

Los problemas sociales como textos: proliferación, borradura, huellas y suplementos

Diversas construcciones y usos de los problemas sociales actúan en conjunto y no como única influencia. Se evocan recíprocamente, se complementan racionalizan o califican entre si.

Cada acción o termino lleva las huellas de otros, construyendo un conjunto de escenas y signos explosivos que se mueven en direcciones impredictibles y que irradian interminablemente las acciones y el lenguaje que definen su significado evocando otros actos y términos suplementarios.