Guardiola de Berguedà

Monasterio de Sant Llorenç (siglos vii-xxi)

Ajuntament de Guardiola de Berguedà

Abril de 2013DL B. 7960-2013

© Diputación de BarcelonaEdición y producción: Gabinet de Premsa i Comunicació de la Diputació de Barcelona

Texto de esta edición: Servei de Patrimoni Arquitectònic Local (SPAL). Diputació de Barcelona

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El lugar de Sant Llorenç

El monasterio de Sant Llorenç se encuentra al norte del núcleo urbano de Guar-diola de Berguedà, en el valle de Brocà. Se alza sobre una meseta de la ladera este de la sierra de Gisclareny, desde la que se domina un paisaje de terrazas cubiertas de prados que descienden hasta encontrar los valles del Llobregat y del Bastareny. Se accede por un camino que sale, a mano izquierda, de la carretera C-1411, que une Guardiola con Bagà.

El conjunto monástico después de la restauración de 2008.Foto: Paisajes Españoles. SPAL, septiembre de 2008.

El monasterio y su entorno a principios del siglo xx. Foto: Joan Ribera. SPAL, 1927.

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El antiguo monasterio de Sant Llorenç prop Bagà

La primera comunidad monástica que hubo en el sitio conocido como Sant Llo-renç prop Bagà [San Lorenzo cerca de Bagá] estaba formada por eremitas que ocuparon las cuevas y los abrigos naturales del despeñadero. El lugar fue elegido por la abundancia de agua y por su posición estratégica. Muy cerca edificaron una pequeña iglesia, fechada por los historiadores hacia el siglo vi o vii, de la que se conservan algunos restos. La iglesia que ha llegado a nuestros días se realizó en diversas fases constructivas a partir del siglo x, cuando se establecieron en el lugar los monjes de la orden benedictina. La concepción original de la planta está emparentada con la de las basílicas carolingias: edificio de tres naves y planta rectangular con cubierta cerámica sostenida por una armadura de madera que descansaba sobre columnas centrales. Un modelo muy característico que se ge-neralizó desde finales del siglo x a imitación de la iglesia de San Pedro de Cluny, y que tuvo una amplia difusión en Cataluña durante todo el siglo posterior. En el caso de Sant Llorenç, además, la occidentalización del santuario provocó que la puerta principal se abriese en la fachada de levante, precedida de un pórtico de poderosos cimientos, sobre el que se debía levantar un campanario que se cita en la documentación.

Estado hipotético del monasterio y su entorno, con los molinos, antes de 1428. Interpretación: A. López Mullor y A. Caixal, Infografía: Certum. Colaboración: J. Grabau. SPAL, 2008

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Reconstrucción hipotética del conjunto monástico antes de 1428. Arriba, vista noreste; abajo, vista noroeste.

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La primera de las numerosas transformaciones del monasterio hay que situarla en los primeros decenios del siglo xi. Corresponde a la construcción del claustro, a cuyo alrededor se organizaron las dependencias monacales, como el hospital, el refectorio y la casa del abad. Una de las intervenciones más singulares de aquella etapa fue la construcción de sendas absidiolas en el extremo de poniente de las naves colaterales de la iglesia, cuyas ruinas se descubrieron en 1986. Durante el tercer cuarto del siglo xiii se construyó una tribuna que ocupa la mitad occidental de la nave central del templo. En su planta baja se rebajó el pavimento de la nave central, lo cual da a este espacio aspecto de cripta.

Visión desde el suroeste.

Visión desde el sureste.

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Proyecto de restauración: Antoni González, arqto. Alzados y plantas del conjunto. Dibujo: J. Grabau. SPAL, 2008.

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El terremoto que sacudió gran parte de Cataluña el día 2 de febrero de 1428, afectó gravemente a las edificaciones del monasterio, especialmente las dependencias monacales, derrumbándose una parte del claustro, el dormitorio de los monjes, la casa del abad y otras estancias. La iglesia, en cambio, pese a que sufrió por la sacudida, permaneció en pie en buena parte. A causa de las dificultades econó-micas por las que pasaba el monasterio, la reconstrucción parcial del conjunto se hizo esperar hasta la década de 1620, cuando ya hacía algunos años que había perdido la antigua condición de abadía para convertirse en priorato. Entonces, la iglesia no recuperó ni su volumen primitivo ni la riqueza espacial interior. La nave de mediodía se dividió en dos niveles mediante unas bóvedas que se situaron a la altura de la tribuna. La parte inferior de esta nave y la cripta románica fueron inutilizadas, y la parte superior de la misma nave y la tribuna, unidas, constituyeron el nuevo espacio litúrgico. La mitad oriental del antiguo templo se incorporó a las numerosas construcciones que se levantaron entonces: el priorato y una serie de dependencias agropecuarias, de las que alguna tomó como base los edificios del monasterio medieval.

A mediados del siglo xviii se derribó y cubrió de tierras la mayoría de los cuerpos periféricos construidos ciento veinticinco años antes, cosa que elevó considera-blemente el nivel de circulación en todo el conjunto. Como consecuencia de estas

La fachada principal desde el sureste, que se había edificado en el siglo xvii. El nivel del terreno ocultaba las estructuras inferiores.Fondo: J. Ribera. SPAL, 1921.

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Conjunto de la iglesia, la rectoría –donde después se construiría la casa de colonias– y el huerto (antigua balsa), visto desde el norte.Foto: J. Ribera. SPAL, 1942.

La iglesia y la casa de colonias desde el norte.Foto: J. Francés. SPAL, 1983.

transformaciones, el priorato quedó por primera vez exento del templo y reducido a un solo cuerpo de dimensiones regulares, de modo que adoptó la apariencia de una casa de labor de plata cuadrangular. La iglesia, la mitad de larga que la primitiva, con la parte alta de la nave norte construida en el siglo xix, es la que llegó a nuestros días.

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La intervención arquitectónica

La restauración promovida y financiada por la Diputación de Barcelona tuvo dos etapas: la primera, de 1982 a 1988, y la segunda, de 1996 a 2008. En una y otra se hicieron las excavaciones arqueológicas pertinentes, tanto de los espacios interiores como del entorno, con el fin de conocer el alcance de los restos ente-rrados dentro del perímetro original del monasterio, aunque por la parte de me-diodía la excavación no se ha completado de momento. En esta investigación se pudo constatar la existencia de un primer templo de planta rectangular, alejado hacia el sureste del templo actual y orientado de este a oeste, de tres naves con la cabecera recta, en la que se inscribía un ábside central de planta de herradura, que puede fecharse entre los siglos v y vii.

Las tumbas de la necrópolis que se le asocian tienen paralelos entre los siglos vi y x. El hecho es que el monasterio, en el año 898, estaba en pleno funcionamiento y actividad, como confirma una cita documental. También se descubrió la iglesia actual en toda su longitud, el claustro, la casa del abad y algunas dependencias monacales. Además de la investigación arqueológica, se llevaron a cabo los es-tudios históricos documentales y artísticos que ayudaron a completar la historia,

Vestigios de la necrópolis del sureste y de las ruinas de la primera basílica de Sant Llorenç prop Bagà (siglos V-VII). Foto: M. Baldomà. SPAL, 2002.

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no sólo del monasterio como monumento arquitectónico, sino también la de su dinámica de expansión económica y productiva, gracias a las edificaciones que han perdurado en el entorno, como las balsas y los molinos. Todo ello permitió reconstruir de forma ideal, en una maqueta, la extensión territorial del cenobio desde la colina donde se asienta hasta el río Bastareny.

Por lo que respecta a la intervención arquitectónica, en aquella primera fase de obras (1982-1988) se recuperó la altura interior original de las naves laterales de la iglesia al eliminar la subdivisión horizontal del siglo xvii, así como el espacio de la cripta, que se encontraba lleno de escombros, y se restauró el campanario, dotándolo de una nueva cubierta. La segunda fase de obras (1996-2008) per-mitió la recuperación del volumen inicial de la iglesia del siglo x (la segunda que construyeron los monjes en Sant Llorenç) y la contemplación del espacio interior tal y como estaba en el siglo xv, presidido por la tribuna-cripta de la nave central. También se restauraron las alas del claustro que quedaban en pie o en ruinas, pero remarcando el perímetro cuadrangular original, y el antiguo hospital, del que se recuperó igualmente el volumen primitivo. Así, por el camino de la recuperación material y, especialmente, por el camino de la recuperación del espacio arquitec-tónico, elemento esencial del monumento, el monasterio recobró el significado que había alcanzado en el pasado.

Interior del antiguo hospital del monasterio, situado a levante del conjunto, durante las excavaciones.Foto: Jordi Isern. SPAL, 1990.

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Ventana compuesta de sillares medievales esculpidos, colocada en el muro que había cerrado las ruinas de la basílica por levante entre 1625 y 2005.Foto: J. Francés. SPAL, 1984.

La misma ventana, recolocada en el muro sur del templo en 2008.Foto: M. Baldomà. SPAL, 06.09.2009.

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El conjunto monacal desde levante. Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

El interior de la iglesia, que se abre al visitante con el espacio excepcional de las naves y la tribuna.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

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Las naves central y sur desde el triforio construido en 2008. A la izquierda se ve el transparente del retablo de la Paz; al fondo, el nuevo retablo de San Lorenzo con la escultura de Emili Colom Comerma, que preside el altar desde 1990.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

El muro políglota del retablo de la Paz.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

Conjunto espacial que define el retablo de la Paz.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

Acceso a la tribuna desde la nave. Al fondo, el muro revestido con madera de ocume integra el triforio, desde donde se tiene una visión privilegiada de las naves y la tribuna.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

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Arriba, la parte inferior de la tribuna (la «cripta»), y abajo, vista general del interior del templo.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

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La abertura de mediodía, el transparente, que forma parte del retablo de la Paz. Diseño: A. González, arquitecto; palomas de mármol: Joan Mora, escultor.Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

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La gata «Liza» sobre el tejado del nuevo monasterio, obra de Joan Mora. Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

La celosía cerámica de la fachada de levante de la iglesia, obra de Joan Gardy Artigas. Foto: M. Baldomà. SPAL, julio 2008.

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Ficha técnica

Información básica de la actuación

Promoción: Diputación de Barcelona

Ejecución: Servicio de Patrimonio Arquitectónico Local

Etapa I (1982-1988)

Proceso de proyecto y obra

Arquitecto: Albert Bastardes PorcelColaboradores: Antoni González, Jordi Balari y Xavier Guitart, arquitectosConstructor: Jordi Rusiñol (Guardiola de Berguedà)Proyecto arquitectónico: 1982-1988Inicio de las obras: 19 de abril de 1983Finalización de las obras de la iglesia: julio de 1988

Etapa II (1990-2008)

Proceso de proyecto y obra

Arquitecto: Antoni González Moreno-NavarroDirección ejecutiva: Xavier Guitart Tarrés, Mireia Barnadas Ribas

y Joan Closa Pujabet, arquitectos; Fina Gener Sala y Marilena Gracia Suñé, arquitectas técnicas

Ingeniería: Dosbes (Josep Benavides y Joan Boixader)Esculturas: Joan Mora (Barcelona)Celosía: Joan Gardy Artigas (Fundación Llorenç Artigas. Gallifa)Restauración de piedra: Anna Cusó (ECRA)Restauración de madera: Marc Orduña (Barcelona)Constructor: Fernando Guitart (Pendís Bagà, S.L. Bagà)Trabajos de cerrajería: Gerard Mas (Acertec. Bagà)Trabajos de fontanería: Instorn Bagà, S.L. (Bagà)Trabajos de carpintería: Joan Camps (Igualada)Trabajos de aluminio: Feli Aluminis (Berga)Mármoles: Segalia Cerdanya, S.L. (Puigcerdà)Piedra travertino: Pedra Banyoles, S.L. (Mata-Porqueres, Girona)Cubiertas de cobre: Forja Capellas (Sant Feliu Sasserra)Cristalería: Vidres Solsona (Solsona)

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Inicio de las obras: 29 de junio de 2001Finalización de la restauración de la iglesia y de algunos elementos del

monasterio: 22 de julio de 2008

Investigación histórica (1982-2008)Excavación arqueológica: Albert López Mullor y Àlvar Caixal MataColaboradores: Javier Fierro, Mercedes Juan, Jordi Amigó, Josep Maria Vila,

Pere Cascante y Judit PuigInvestigación documental y artística: Jordi de Bolòs, Anna Castellano,

David Galí, Raquel Lacuesta, Maria José Sureda

MusealizaciónDiseño: Antoni González y Olga de la Cruz (BbCR)Diseño gráfico: Quim Boix (BbCR)Ejecución maqueta: Maquet-Barna

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Visión del claustro desde el suroeste.

Visitas

Horario de verano (julio y agosto):sábados, domingos y festivos, de 11 a 14 h y de 17 a 19 h

Horario de invierno (septiembre a junio):sábados, domingos y festivos, de 11 a 14 h

Cerrado los días 25 y 26 de diciembre

Visitas concertadas

Servei de Patrimoni Arquitectònic LocalTel. 934 022 171 y 934 022 472

Gerència de Serveis d’Equipaments, Infraestructures Urbanes i Patrimoni ArquitectònicServei de Patrimoni Arquitectònic LocalComte d’Urgell, 18708036 BarcelonaTel. 934 022 171 i 934 022 472s.patrimonial@diba.cat · www.diba.cat/spal