Luis Barragán-Matiana González Silva
-
Upload
karen-aguilar -
Category
Documents
-
view
223 -
download
2
Transcript of Luis Barragán-Matiana González Silva
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
1/38
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
2/38
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
3/38
LU S
B RR GN
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
4/38
na
p sin
hecha arquitectur
Matiana Gonzlez Silva
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
5/38
Primera edicin en Cfrculo de Anc: 1998
Produccin: CONSEJO NACIONAL PARA
LA
CULTURA
Y
LAS
ARTES
Direccin General
de
Publicaciones
D.R.
1997, Direccin General
de
Publicaciones
Calz. Mxico Coyoacn 37
Xoco, CP 333
Mx
ic
o, D.F.
ISB 970-18-0741-3
Impres
o y hecho en Mxico
NDICE
, INTRODUCCI
N
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
VIAJES E INFLUENCIAS......... . . . . .
. . . . . .
1
EL
CO
MIENZO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
L MADUREZ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
1
EL URBANISTA.
..........
.............. 2
TRES OBRAS
L CUA DRA SAN CRISTBAL
I967). . . . . . . .
2
CONVE
TO
DE LAS
CAPUC
IIINAS SACRA-
ME TARIAS 1952 .................... . . 3
CASA LUIS BARRAGN 1947) . . . . . . . . . . . . . . 3
7
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
6/38
INTRODUCC
N
Quienquiera que haya estado en un espacio creado por
el arquitecto Luis Barragn Morfin
pu
ede pe
rf
ectamen-
te d
ar
fe de esto: pocos sentimie
nt
os existen tan inten-
sos como estar
en un
sitio que l haya proyectado y la
inm
ensa pasin d e que supo imbuir a sus
es
pacios de-
sencadena al recorrer sus obras verdaderas cascadas de
emoc in. Estar e
nt r
e sus
mur
os es gozar la infinita sen-
sibilidad de un hombre
qu
e supo manejar la sutil
di f
e-
rencia que
ge
nera en la atmsf
era un
centmetro ms o
un centmetro menos de ve
ntan
a.
Nacido en Guadalajara en 1902 en el seno de una
familia acaudalada culta y relig iosa Luis Ba
rr
agn se
co
nvirti con el
tiempo en un
arquitecto a pabullante y
enigm ti
co qu
e compuso espacios
pri
vilegi jardines
9
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
7/38
, entend1
la
impo1 tanria del sol: en un u1 bamsta
que
chsei1 fracciona mientos, que imagin fuclllts y cons
truyo monumentos.
Un hombre
intenso que nc para
s una nueva manera de percibil la ida y en sntesis pe1-
fena, fmm de sus vivencias y de su alma esos mundos
distintos
que
son sus obras.
A Luis Barragn lo distingue su concepcin de
la
arqmtectur a. En sus obras
de madm
ez se halla la convic
cin de
que
vale la pena construir elementos cuya nica
func1n es lograr
que
surja la poesa, y se
encuentra
ade
ms
esa
determinacin de los futuros habitantes de sus
proyectos que lo impulsa a inventar
para
ellos una nue
va fm ma de vivir. Con una aguda percepcin de los esta
dos de nimo, este arquit ecto construy complejos uni
versos en
que
cada elemento est
pensado
en funcin
de cmo lo percibe una persona viva ysiempre en movi
miento. En su
bsqueda de
unidades completas, Ban-a
gn
diseaba tambin los muebles y los ms pequct1os
detalles de sus obras; y al encontrar el punto exacto de
confluencia entre lo previamente calculado y lo
que
sur
ge espontneamente con la vida, cre atmsferas envol
ventes y utopas que se conc
retan en
los muros, los va-
cos y la luz.
10
El uso del color, los espacios abier tos que conser
van
siempre
un espritu privado, la luz filtrada y la geo
metra que a fin de cuentas resulta sutilmente alterada,
fueron
elementos
que Barragn
introdto
en sus obras.
Cuando las modas indicaban
que
haba que construir
enormes ventanales, l reinvent la importancia del mu
ro, y mientras el internacionalismo dominaba
en
to
dos los continentes, el arquitecto mantuvo su raigambre.
A lo largo de su carrera, Barragn plasm en arquitectura
todo su complejo mundo
interior y tambin
, su
propia
historia.
VIAJES E INFLUENCIAS
Cuando
en 1980 Luis Barragn recibi el premio Pritz
ker, considerado la mxima presea en el mundo de la ar
quitectura, seal
en
su discurso
el
carcter autobiogr
fico de sus obras. Y si esta arquite ctura
no
es ms
que
un
fragmento vital de este tapato que pas sus aos ms
fructfferos en la ciu
dad de
Mxico, quiz
pueda
hallarse
el origen de sus creaciones en el itinerario personal de
Luis Barragn. Hay que asomarse a la
hacienda
enclava-
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
8/38
da en la sierra donde Luis pasaba prcticamente todas
las vacaciones, y a esa Guadalajara que vivi Barragn,
con sus afanes de ciudad cosmopoli ta y que al mismo
tiempo defenda su aire de provincia. Tambin debe pen-
sarse en los amigos, y recordar algunos viajes en los que
el
arq ui t
ecto recogi muchas de sus influencias.
En
1925, cuando Barragn tena veintitrs aos y
justo
al
terminar
sus
estud
ios
de
ingeniero
en
la univer-
sidad, parti rumbo a Europa en
un
viaje crucial. Se ace r-
c a la cu ltura francesa, tan importante entonces para
Guadalajara , y conoci
en
Pars a Ferdinand Bac,
un
ar-
quitecto,
jardinero
y poeta
que
le mostr sus libros y sus
obras. Barragn record si
empre
su profunda impre-
si
n
al conocer los jardines
de
Bac y escuchar las ideas
de un hombre convencido
de
la necesidad de rescatar e l
espritu mediterrneo . Durante ese primer viaje a Eu-
ropa, naci tambin la admiracin de Barragn hacia
aquellos moros espaoles que , con un chorrito de agua
y una banca, crearon el paraso en los maravillososjardi-
nes de la Alhambra.
a obra de Bac, sumada al recorrido que hizo Ba-
rragn por el sur de Espaa, le descubrieron lo que te-
nan
en
co
mn
los r
an c
hos
de
la familia Barragn y las
12
casas y patios andaluces: un clima parecido y un sol que
brillaba con semejante intensidad. l
entab
lar las
ana
lo-
gas, advirti tamb in que eran absurdos los esfuerzos
por construir espacios
admirab
les, si la
arq uitectura no
permaneca
arra
i
gada
en la
propia
c
ultur
a y en un clima
espec
fi
co.
Ms tarde, Luis Barragn emp rendi o tros viajes:
visit Nueva York, fue otr as veces a Europa, recorri M
-
xico y viaj a Calif
orn
ia .. Pero fueron sin
duda
dos los
recorridos que ms le impresionaro.1 . El primero, del
que
ya hemos hablado, y el
que
realiz
por
el norte
de
frica,
en
donde descubri
que
era posible prolongar el
suelo en las paredes. Admirador de la relacin que se
da
ent re un pueblo y su arquitectura, observ en Marrue-
cos
cmo
los habitantes eran parte integral de las ciud
a-
des, y le maravill ese escenario en que la
gente
se con-
funda con los camellos y los gruesos muros fabricados
de tierra.
A pesar de habersido siempre sensible a los nuevos
esmulos, en la o
bra
de Barragn es dificil encontrar
refer
encias formales a las
co
nstrucciones que admir.
Sus influencias se hallan ms bien veladas y aluden so-
br
e
todo
a las sensaciones
que
d
espertam
n
en
el autor.
13
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
9/38
Tanto en los espacios abiertos
rodeados
de muros
y con
una
apertura siempre confinada que parecen evo
car los atrios conventos mexicanos del siglo
XVI, como
en la sutile7.a de los estmulos la sensualidad rabe
en
Espaa que Barragn aprovech
en
el seno mismo de
sus casas, el arquitecto
retom
sus vivencias
con
espritu
propio y con sus filtros y gustos personales.
Sin t
emor
al contraste, Barragn s
um
al arte ver
nculo su refinamiento aristocrti
co
, y adere?. los sitios
religiosos y puros con una sensualidad atrevida,
que
no se muestra abiertamente pero que s
permea
cada
rincn.
En
todas sus obras est presente
su
obsesin por
la belleza, y su espritu
que
parece
no haber
tenido tra
bas
para
dar cabida a las ms extremas fantasas.
EL COMIENZO
Antes de partir a Europa, Luis Barrag n no haba cons
truido
nada. A su regreso, comenz su trabajo de arqui
tecto y
cre
unto con algunos am igos un estilo comn.
Adems
de
compartir con Ignacio Daz Morales, Pedro
Caste
ll
anos y Rafael Urza la mayora
de
los el
ementos
4
formales
de
sus primeras obras, Barragn
encontr en
ellos
eco
a su admiracin por
Ferdinand
Bac y el gusto
por los materiales
e
las construcciones vemculas que
haba conocido en la sierra e Mazamit.la.
En las casas que Barragn proyect en Guadalajara
entre 1927 y 1935, se
encuentran
elementos
que
ms
tarde
abandon del todo. Las referencias claramente
moriscas
en
la casa
e
Gustavo
R.
Cristo, la
madera
tor
neada de los barandales e muchas escaleras y en espe
cial los arcos, son caractersticos
de
esta primera etapa
que
en general es mucho menos
depurada
y se encuen
tra ms sujeta a influencias concretas.
En los muros, Barragn introdujo azulejos form
singulares huecos triangulares, mientras que
n
la casa
de don
Efran Gonzlez Luna ug con los distintos
pb -
nos de la fachada
para
hacer el marco de una ventana.
Las lneas se quebraron y
aunque
el
color
comenz a
aparece r, todava su funcin no era eminentemente ar
quitectnica sino ms bien un aadido sobre la cons
truccin.
A pesar de estas diferencias, desde sus primeros tra
bajos Barragn mostr enorme maestra
para
medir las
emociones
que generan
sus obras. Dio
cuenta
de
su ca-
15
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
10/38
pacidad para imbuir al ambiente de
un
toque
ensoado
y un tanto irreal que puede encontrarse a
todo
lo largo
de
su carrera y aderez sus obras
con
un particular ma
nejo de la luz la que habitualmente ilumina de manera
indirecta o se filu-a por vidrios amarillos que dan al es
pacio mayor profundidad.
Con
los muros chaparros que se prolongan desde
una
alta
pared
para conforma
r
una
divisin ntima
con
la importanci a de las escaleras los espacios amplios
de
s-
tinados a libros las aristas muy claras en los muros y la
sensacin de confinar el alma
para
luego soltarla y dejar
la volar Luis Barragn empez a disear.
Adems
de
lograr que los espacios cerrados
de
las
casas se abstrajeran del mundo y formaran
una
atmsfe
ra propia Barragn puso especial cuidad o en el diseo
de los
ardines
y los sitios abiertos que por lo general ro
C an sus construcciones.
En
los patios de la casa Cristo
el arquitecto f01j
un
interesantsimo uego
de
concate
naciones mientras
que
en la casa Gonzlez Luna experi
ment con jardines selvticos. Y si bien las referencias a
Bac son aqu quiz demasiado obvias el kiosko perdido
entre las plantas revela el inters por
introducir
en la n
a-
turaleza
una
intencin
human
a al tiempo
que
aparece
16
un
delicado juego con la fuente que surge
de
este kios
ko y co
nduce por
tejas invertidas chorritos de agua.
Por otro lado la utilizacin de tejas en los techos de
las primeras casas de Guadalajara hace pensar que Ba
rragn se acerc desde entonces a
una
nueva arquitectu
ra mexicana nacida
en
los pueblos
pero
pensada para
la ciudad. Y aunque en ese sen tido
en
los primeros aos
Barragn
no
encontraba
todava su
propuesta
en
nin
guna
casa de Guadalajara cay en el folklorismo o la
burda
receta nacionalista.
Fue tambin
en
esta poca c
uando
Luis Barragn
dio sus primeros pasos en el diseo urbano. Asociado
con su hennano JuanJos hizo del parque
de
la Revolu
cin un sitio alegre y a ireado
que
al mismo tiempo pa
rece
resguardado
.
Con
el
empleo
de
concreto aparente
teido
de
rojo y amarillo el arquitecto dej ah la huella
de
una
sensibilidad que conoci en Parfs
cuando
en
925
visit la famosa exposicin de las Artes Decora ti
vas. Y si bien esa platafom1a circular
con
ligeros baran
daJes de tubo metlico y
aque
l techo redondo
que
surge
de una
co
lumn
a
al centro
son signos
de
que en ese mo
mento
Barragn no tena muy claro su camino a pesar
de
las variaciones estilsticas y
de
haber
se acercado
al
17
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
11/38
peligroso inicio del manierismo, en este
parque
fue ca
paz el autor de obtener
buenos
resultados y conset>Tar la
solidez.
En 1935 Barragn se mud a la ciudad de Mxico, y
en su
produccin
arquitectnica
se produjo
tambin un
cambio drstico. Impresionado por la inmensa ciud
ad
y
guiado por el descubrimiento de elementos moder
no
s,
por unos
pocos aos se acerc a
una
de las grandes
corrientes
de
la arquitectura mundial y proyect, con
sumo cuidado, casas y edificios de grandes ventanales,
amplios espacios y
un acomodo que
segua los precep
tos
de
la llamada arquitectura racional.
Fue sta la
etapa
ms prolfica de Barragn. I lizo
edificios, casas para renta
, estudios
de pintores
..
Con
ventanas recortadas por la he nera y construcciones ms
bien ligeras, el arquitecto lleg entonces a una
etapa
de
enorme xito y marcada direccin comercia
l
LA MADUREZ
Pero
ninguna moda ni la rpida produccin se acerca
ban
al espritu de Barragn
quien
,
harto
de sus clientes,
18
un
buen
da decidi abandonar los proyectos arquitec
tnicos para aventurarse en los de bienes races. Y fue
precisamente
al deshacerse
de
la necesidad de
cumplir
encomiendas , cuando empez la etapa en
que
cre sus
obras de
madurez
inusitada.
Barragn tena
cuarenta
y tres aos y posea ya
un
enorme
a c e ~ T o cultur-al. Haba proyectado en Guadala
jara
obras
que
recordaban
las construcciones tradicio
nales
de
Mxico y del Mediterrneo, y tambin haba
probado el sabor de la modemidad. Deline entonces
su
propuesta
ms ntima: una arquitectura
que
est en
el punto exacto
de con
fluencia
entre
la ms
comp
l
eta
innovacin y una larga tradicin mexicana que hall
en
Luis Barra gn la
manera
de seguir renovndose.
Dos grandes amistades se volvieron importantes
influencias en aquel momento: Jess Reyes Ferreira,
Chucho Reyes , un
pintor que
desbordaba vida en sus
gou ches
sobre papel de china y que comparti con el ar
quitecto su sensibilidad por los colores y sus agudas an
tenas
para
descubrir, en lo popular, un
arte
universal; y
Mathias Goeritz, otro hombre
intenssimo
que
incursi
o-
n en prcticamente todas las artes plsticas, y quien ms
tarde realizada junto con Barragn las TmTes de Satlite.
19
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
12/38
Con
nimo tan seguro que no le importaba aventu
rarse en empresas que parecan suicidas, tras aba
nd
onar
el inte
rn
acionalismo , lo
primer
o que hizo Barragn
fue el fraccionamiento Jardines del
Pedr
egal
de
San
n
ge
l.
Asociado con
Jo
s Bustamante , el arquitec to com
pr un terreno cubierto de lava, eni gmtico
y
cautiva-
dor pero tambin completamente inh s
pi t
o.
El fraccion
amiento
result
una
ver
dad
era innova
cin como arquitectura de paisaje. B
ar rag
n di
se
sus
ca lles y
con
la admiracin que le producan esas rocas
negras e impone ntes, proyect la plaza del acceso para
que se escurriera entre las pied ras . n los ' jardines tipo
mantuvo la fuerza
de
la lava al colocar slo lo indispen
sable
para dar
al sitio
un
aire habitable y enun ci reglas
n o
siempre respetadas- ,
que
indicaban el porcenta
je de espacios abiertos
que
se deban d ejar en todas las
casas.
Pero
fue sin du da su propia casa la
que
si
gn
ifi
c
en
la obra de Luis Barragn el descubrimie
nt
o
de un
len
guaje completamente personal. Construida en 1947 en
la calle Francisco Ramrez de Tacubaya, en la ciudad de
Mxico, la casa muestra la concrecin, por fin, de toda
una vida en tensin interior. Ah, cataliz por
medio
de
20
los muros la ebu llicin de
un
alma en la que convivan
las pasiones ms encontradas y transmiti al espacio la
tensa relacin de
un
a honda religiosidad y el hedonis
mo. La
apare
nte ser
en
idad de esta casa enc ierra a un
hom
bre
sometido a los ms opuestos y drsticos conflic-
tos y tambi
n
a un verdadero cr
eado
r capaz de
co
n
s-
truir
un
universo nuevo.
Tras
la
geometr
a e n
apa
ri
encia perfecta h
ay
siem
pre un toq ue que quiebra la burbuja de la simplicidad y
en el Ouir del aire
una
energa que
encuentra
su lugar en
Jos
amp
lios espacios cargados de misterio. Los gruesos
muros, muy bien amarrados, contienen la emocin que
quiere
de
sbordarse, al tiempo que el espacio va marcan
do una pauta que ofrece momentos de delirio seguidos
de otros de
gran
paz . Con ese aspecto ocu
lt
o y a trayente
que se
desenvuelve co
nf
o rme se
recorren
los espacios, Y
con la concepcin, radicalmente nueva, de
ll
evar la mo
numentalidad a una escala hogarea, la casa
de
Francis
co Ramrez es un sitio que desprende pasin, en el ms
enigmtico sentido de la palabra.
En su casa, Barragn descubri
adems
el placer de
vivir fundido con sus o
br
as.
La tr
ansformaba siempre,
mova Jos
mu
ebles
qu
e haba diseado l
mismo-
y
21
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
13/38
en la azotea
experiment
con las paredes hasta
lograr
el
anhelado
punto de apertura todava confinada. Tam
bin ahf
Barragn uliliz
por primera
vez colores bri
llantes
en
los muros, logrando
que
el color se convirtiera
no
en un aadido,
sino
en factor clave de la composi
cin. Gracias a la variacin de un rosa la
pared
abando
naba t
odo
asp
ecto
masivo, y
por
los
co
lores el espacio
l
ograba
d
esdob
larse. Muchas
de
las
se
nsaciones
de
la
ca-
sa, su movimiento y su
profund
idad, se alcanzaron tam
bin u tilizando elementos cromticos, en cuyo manejo
Barragn
se
volvi un maestro.
Las casas que siguieron a la
propia
parecen presen
tar un a faceta ms de esa inmen
sa
riqueza que Barragn
co
menz en Tacubaya. En las escaleras
de
la casa Prieto
se encuentra la sensualidad de una caricia, mientras en
la casa Glvez los e n
or
mes espacios
se
ven acent uados
por
mu
ebles chaparritos y simples. En la casa G
il
ardi el
Lintin eo
de la e m
oc
in es desencaden
ado
por un rayo
de luz
qu
e al chocar
co
n el rojo
pi
nta el ambie
nt
e, mien
tras el a
gua
tambin se hace prese
nt
e
co
n sus re
fl
ejos y
su funcin ex
traa
, e n un estanque, de sutil variacin
en el suelo.
En
1952 Barragn
pro
ye
ct
ot
ra de
sus o
br
as maes-
22
tras, el convento de las
madres
Capuchinas Sanamen
tarias.
Como hombre profundamente
religioso y
en
constante
bsqueda de
las facetas espirituales
de
la exis
tencia, en el convento de las Capuchinas y muy especial
mente
en la capilla, Barragn
compuso
un espacio para
alabar a Dios que es al mismo tiempo una
me
loda en
raJ7 ada
en
la tierra. La capilla contiene esa
bsqueda de
lo
perenne
man
ifiesta
en toda
la
obra de
l
arqu
itecto; tie
ne el mistel io, la atmsfera
que
envuelve, los matices
de
luz y la inmensidad
guardada por
los
mm
os. Pc1o todo
con
tal intensidad,
que
hacen de la capilla un espacio
compl
eto
al
que
el
mundo
exterior
no
le hace falta.
Ba-
ragn l
ogr aqu una unidad s
li
da
y compleja,
que
da
al alma los ms grandes deseos de acercarse a la divini
dad y la eslimula
para
que, en ningn
momento
se ol
vide de los
sent
idos ni de la
se
nsib
ili
dad.
EL URBANISTA
El diseo urbano y la
ar
quitec
tu
ra de paisaj e
co
nstituye-
ron otro aspecto
fund
amen tal en la e tapa de madurez
de Barragn. En primer lugar y sobre todo, h
ay
qu
e men-
23
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
14/38
J
cionar
las
Torres
de Ciudad Satlite realizadas en 1957
en colaboracin con Mathias Goerit
z No
haba en ese
mo mento ninguna
obra
de esa naturaleza en Mxico.
Las esculturas
que adornaban
las
ca
lles de la cap ital no
podan calificarse
a
n como obras especficamente ur
banas ni haban sido pensadas co
mo
sta para mirarse
desde el automvil
Luis Barragn y Mathias Goeritz
crearon
las
Torr
es
de Satlite co
mo
un hito que da la bienvenida a una nue-
va
zona
de la c
iud
ad . Y des l
aron
todos los elementos
hasta l
ograr
esos enormes prismas de colores que an
hoy rodeados por completo de anuncios espectacula
res
mantienen
su
co
ntundente presencia y su abso
lu t
a
originalidad.
Las
Torres de Satlite tienen la escalajusta
para ser miradas desde pe rspec tivas siempre en movi-
mie
nto
.
l
avanzar hacia ellas parecen crecer
se
inte
r-
calan se cru zan y en su simpleza esconden su fuerza
apab
ullante.
En las afueras de la ciudad de Mxico Barra
gn pro-
yect tambin varios fraccionamientos . En Las Arb ole-
das erigi la conmovedora fuente del ebedero. En un
terreno
estrecho y largo
poblado
de eucaliptos gigantes
ide
su templo a la naturaleza:
una
simple pila ala
rg
a
da
24
1.
t
amb
in y el muro blanco colocado
con
maestra y sen
cillez. El tamao del
muro
es el preciso para alcanzar una
presencia propia y a la vez acentuar la grandeza de los
rbo
les mientras se crea sobre su sup
er
ficie
un
juego
co
n las so
mb r
as cambiantes de las hojas.
Cerca de ah Barragn constru y otra fuente pero
esta vez de
pr
esencia sulil y delicada. Como si quisiera
fundirse
co
n el agua y los e
norme
s
rbo
les en la fuente
del Cam panario el arquitecto coloc un muro ocre que
parece e
mb arra
rse sobre el
estanq
ue y envolvi el con
j
unt
o amorosamente
con
una palizada de troncos. El
chorro
que
cae es caudaloso y salvaje mientras el muro
parece
sereno y fantasmal. El entorno se
confund
e con
la arquitectu ra y ambos el
eme
ntos forman uh remanso
de paz.
Si los
rbo
les
generaban profunda adm
irac in en
Barragn para ellos proyect el ebedero y la fuente
del Campanario- la equitacin era
otra
de sus grandes
pasiones y a sta dedic el fraccionamiento Los Clubes
cuyos espacios se perciben mejor desde la cadenc ia
de
un albardn .
A
quien
es crean
que
la a
rquit
ec
tu r
a de Luis B
ar
ra-
g
n
era
so
br
e todo
mur
os s
li
dos este fraccionamiento
25
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
15/38
les
demostr
que el arquitecto
era
capaz
de
es
tirar
sus
propuestas
hasta el punto mismo del desgarre.
En
las
distintas
obras
de Los Club es Barragn
recort
la pared
para dejarla, a veces, en una simple uabe. As naci la
fuente de Los Amantes, una de sus obras ms atrevidas
por su geometra y su color caf, poro bri llante. Desde
un
punto
dado
la fuente parece ms
bien un
a pistola,
l
arga
y
potent
e,
mien
tras que
desde
otro
ngu
lo proyec
ta total tranquilidad, con el
agua
que se escurre a los la
dos y a donde pueden llegar a beber los caballos.
El mismo recurso de
abr ir en01-rnes
hueco
s lo aplic
Barragn
en
la Cuadra
San
Ctistbal,
que
se encuentra
tambin
en
Los Clubes. En ese magistral espacio abier
to, con su estanque de piso inclinado, su chorro y la sutil
variacin de colores de las paredes que confinan el aire,
e l arquitecto recort el
muro
rosa con el propsito
de
mostrar su
aprecio por
la
espontaneidad
y el de
dejar
es-
capar de sus
ambientes
para simplemente,
ir
a
pascar
al
campo.
A pesar de que tiempo despus todava se constru
yeron
obras
con las firmas
de
Luis Barragn y Ral Fe
ITera, muy probableme
nte
la ltima
que en
realidad
proyect
este a
rquitecto
fue la casa Gilardi ,
en
1976.
6
Despus enferm y tras muchos a ti
os
con el mal de Par
kinson, Barragn muri en 1988.
Desde
en
tonces,
para muchos arqu
itectos mexica
nos
l
os
aspectos formales de la
obra de
Bat-ragn se con
virtieron
en
una receta que
parece garantizar
e l xito.
Un muro slido de textura rugosa y algn col
or
brillan
te, con una p ila y quizs una fuente, son suficientes para
califi
car
una obra de estilo Barragn , aunque se
trat
e
s
lo de frmulas vacas sin ninguna
emocin
y sin pro
puesta. Ignacio Morales, otro gran
arquitecto
y cn
tratiable amigo de Luis Barragn, dijo alguna vez que
el mejor homenaje a este arquitecto era precisamente,
no cop
iarlo. Y
tambin
es
un homenaje exp
l
orar en
sus
obras
aque
ll
o que las hace
tan
fuertes y vibrantes.
La
arquitectura
de Luis Barragn es la de un hom
bre enorme que mantenindose arraigado en la tierra
co
ntempl el cielo; y al
mirar
la distancia que lo separa
ba
,
er
igi los muros, l
as
rejas y estanques,
para
abrazar el
aire y crear su guaridas sin perder
por
ello
inm
ensidad.
Luis Barragn realiz construcciones que todava
palpitan. Arquitectura que seduce e invita y que, como
todos los mundos interiores, siempre so rp rende y
nu n
ca
se deja
conocer
del t
odo. Obras
cuya
genia
lid
ad
vie
27
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
16/38
ne
precisamente
de la
forma en
que Luis Barragn im
primi en ellas su alma apasionada ysu deliciosa capaci
dad para crear belleza, laberintos cargados de
inten
cio
nes,
monumentos
en donde vivir.
TRES OBRAS
LA
CUADRA SAN
CR
I
ST
BAL 1967)
En 1967,
co
n la
co
laboracin de Andrs Casillas, Luis
Barragn proyec
t
la casa de la familia Egerstrom y,jun
to a e lla, la famosa cuadra San Cristbal, un magnffico
sitio destinado a albergar cabal los, con su estanque su
fuente y esos muros que encierran el aire y
crean
hacia
dentro un espacio cuyo techo perfecto es el mismo cielo.
Ubicada en el fraccionamiento Los Clubes, la cua
dra se ha convertido en el paradigma de los sitios abier
tos que construy Barragn. En ella, el arquitecto resu
mi su visin de l espacio, y form un lugar en que el
al
ma encuentra el
punto exacto de li
bertad
resguardada.
En
la cuadra Barragn
tom
la at
idez
como materia
prima y recordando
los desiertos de Mxico, supo sacar
de
la ti
erra bruida
la
poderosa
fuerza
de
este espacio.
8
En una transformacin inusitada, el
ar quit
ecto convir
ti
el
suelo en
grandes muros
que
poco
a
poco se
cerra
ban sobre sf amarrando hacia el interio r la tensin ge
nerada
y
tomando
del suelo rosado sus colores.
A diferencia de las casas de Barragn, donde a cada
paso se
descubre
un lu
gar nu
evo y diferente, en la cua
dra la grandeza proviene de la
unidad aunque
no
por
e
ll
o
ti
ene
m
enos
riqueza. La
abertura
precisa, el lu
gar
del estanque, y la manera en que los mu ros retroceden
o evitan tocarse
dejando
caer e
nt r
e ellos un su tilsimo
hililO de lu
z
llenan el sitio de una locuacidad plena de
variaciones, y comprim
en
ah la
co
mplejidad de la vida.
La
cuadra
parece
siempre
nueva segn el lu
gar
don
de uno est, a pesar
de
que desde cualquier punto se
percibe completa. Mientras no caiga el ch
orro
el estan
que parece agua
dormida
, destacando las
dos
aberturas
verticales en el
muro
del
fondo
que, al tiempo
que
po
nen el
acento en
la cont
un d
encia del enorme volum
en
dejan salir por ahf las pacas
de
pastura. Pero en el mo
mento
qu e se enciende la fuente, la superficie empieza
a tintinea r, y el chorro
se
vuelve punto fundamental de
r
eferenc
ia. Los dos en
ormes
huecos en el muro rosado,
suficie
nt
eme
nt
e altos
pa r
a
que
p
or
abajo pasen los ine-
29
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
17/38
tes, recuerdan sie
mp r
e
el
mundo exterior,
mientras
que
enfren
te, bajo
un
cut i
oso
techo indinado
qu
e
remite
sin
ms a los tejados propios de
las haciendas, se
encierran
los
bien
c
uid
ados caballos.
La
cuadra
Sa
n Cristbal es, ade ms, tan elegante y
r
eple
ta de lujos
co
mo
un
palacio
europeo
au
nqu
e le
fal
te adorno y mu es tre total austeridad. Pero ju stamente
al
dar
cab ida
co
n tanta
propiedad
a sus
queridos
hu
s
pedes, caba
llos
y
inetes
,
pu
ede deci rse
que
aquf el piso
de
tierra es ms
elegante que
c
ualquier mrmol
, y que a
las pa redes no les falta ningn recubrimiento que
no
sea el puro
enjarre
con color.
Por lo
dems
, la cu
adra
no se encuentra
so
la, sino
que se halla fnlimamente relacionada
con
la casa
que
al
berga a la familia Egerstrom. La casa misma es la bisagra
que
comunica
la cuadra
con
la calle, a la vez que mues
tra
su
salida hacia el patio frontal, se
asoma
por la sala
hacia el sit io donde estn los caballos.
Desde fuera, lu
ego
de traspasar la puerta que mira
hacia la ca lle, se lle
ga
a
un
enorm e patio
que run
ge -
mo vestfbulo y
donde
el arquitecto comenz a experimen
tar con lo rido, lo auste ro y lo e legante . Rodeado del
verde
exuberante de
los campos, el
patio
de
piso
de
pie-
dra volcnica presta serenidad al alma, la deja libre e in
vita a caminaral frente, intrigada por la visin recortada
del chorro que cae sob
re el
estanque. Antes, se alza la ca
sa, blanca, simple y segura,
co
l
ocada
a
un
lado de la pie
dra del sue lo y prolongando ahf la pureza de trneas. Y
por
la pequea puerta de un
extremo
como si quisiera
gu
ar
dar
bien
el secre
to
, se llega al
rea
de la a
lber
ca
qu
e
es,
como
la cuadra, ntima y privada, genial,
sem
it
echad
a.
CONVE TO
DE LAS
CAPUCH
I
S
SACRAMENTARIAS 1952)
Un peregt;no que
recorriera
el mundo en busca del
lugar ideal
para rezar
,
seguramente
se
detendra
en la
cap
ill
a del
convento de
las
madres Capuchinas
Sacra
mentarias
. Podra pasar ahf horas y horas, pero tendra
problemas para
saber si eso que
ha
sta
entonces
ha lla-
mado
Dios
no
es,
en
la capilla, sino
el
espacio mismo, y no
podra distinguir si t
odo
lo complejo de una fe religiosa
no es a qu eq
uip
arable al simple estar, dentro de l aire.
Aunq
ue en efecto, Luis BatTagn proyect la capi
ll
a
para
dar
a las monjas
el
sitio
perfecto
dond
e al
abar
a
3
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
18/38
su Dios este espacio cautiva tambin a quien no profe sa fe
catlica. Y si
puede
decirse
que
cualquier religin atrae
al hombre
porque
le hace pensar
que
con ella alcanza lo
imposible eso mismo es certero
para
describir esta ca
pilla:
un
espacio
que
parece estar abstrafdo del
tiempo
y
donde flotan juntos el misterio la terrenalidad la bs
queda
de la grandeza y el anhelo
de
inmortalidad.
Proyectada
en
19
52
la capilla es la
expres
in per
fecta
de una
honda religiosidad vuelta palpable. Los
muros
anaranjados
dan calidez al aire y la cruz
tambin
color
naranja
apenas se distingue y parece flotar. Y
mientras Barragn
uega
como un mago con la luz la al
tura del techo y las proporciones revelan por su
parte
que
la capi lla es el lugar ms cercano de lo que uno ima
gina como divinidad.
Entrar a la capilla es descubrir al fondo tres
super-
ficies lisas doradas y brillantes el retablo de Mathias
Goeritz
donde
la luz rebota
en
puntos asimtricos. Son
dos las fuentes
que hacen
llegar el so l hasta este a
lt
ar
ilumin
ando
a su paso la
cap
illa.
Una
es la
gran
ventana
detrs
del coro y en
un segundo
piso frente a la cual
un
a
ce losfa blanca recorta en cuadritos el impacto de luz.
La
otra
es
el toque maestro
del
arquitecto
qui
en
del
am-
32
plio espacio
de ngu
los rectos extrajo un apndice
que
rompe la ortogonalidad y encajona al fondo un vitral de
vidrios amari
ll
os. Desde ahf los rayos salen a la cap illa
sin ms explicacin
generando
hacia el interior vibra
ciones
por dems
inquietantes mientras los muros for
man una quilla de ngulo pronunc
iado
que muestra la
manera en que es te a rquitecto abandonaba esq uemas
para
crear
el
mayor
misterio.
Fiel a su idea
de
c
onceb
ir sus obras
como
la crea
cin no
slo de
un espa
cio sino tambin de un modo de
vivir en la capilla todos los objetos son obra de Barra
gn . Las bancas el atril los candelabros y hasta los man
teles del altar y las ropas
que
viste el sacerdote al oficiar
su misa fueron diseados por e l arquitecto.
Adems
de ser una unidad la capilla es parte del
convento de monjas enclaustradas que fue remodelado
por Barragn y en el
que
ste proyect tambin la en tra
da
c
on
su patio. Y para estas madres
que
ams van a
dar
un paseo
en
el patio
centra
l Barragn rescat
un
troci
to de
mundo
. Con el cielo azul
delimitado por
los altos
muros con la bugambilia y la pila de piedra volcnica
que
con
tr
anq uilid
ad
deja escurrir el agua
l
arquitecto
consigui
que
las
capuchin
as
pudieran encontrar
en su
33
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
19/38
convento un rincn en donde rec ibir los estmulos
de
la
uatu raleza, al
ti
e
mp
o
qu
e perciben cien a li
benad qu
e
las impulsa a co
ntinuar
sus rezos.
El r esto del proyecto mues
tr
a cmo entendi Ba-
rragn la
vi
da e n el claustro. Y sin menos
pr
ec iar los as
pectos estticos, vale la pena resa
ltar
a
qu
el asp
ec
to fun
cional. Manten iendo siempre muy bien separada el rea
del enc
ierr
o, Ba
rr
agn p ens e n la man
era de
int
egra r
,
y a la vez mosua
rl
es su distancia, a los visitantes que even
tualm
ente
llega n al convento. Valindose de hermosas
celosas,
qu
e tambin aprovecha pata seguir jugando
co
n la lu
z
pa
ra qu
e l
os extraos llegue
n a la capilla o a
los locutorios donde vis itan a las monjas, el ar
quit
ec to
form
un
a ru ta a lterna
qu
e s in emb
argo
no
parece
tal.
Barragn
resgua
rd
celosame
nt
e la privacid
ad
del
claustro e hizo se
ntir
a los visitantes
que
hay cosas
que
no
deben
mirar. Y a
unque
los de fuem
pueden
ocasio
nal
mente
asistir a las misas, lo hace n siem
pre senta
d
os
en
una
c
ap
illa que se encuentra en
un
costado y desde
donde s lo pueden ver el altar. Sus
mir
adas no alcanzan
a l
as que
se
encuentran
en la nave
cent r
al y
s
lo
de
r
epe
nte , con la irrea lidad de un fantasma, se asoma a
lo lejos el h
bito
largo de
alguna capu
c
hin
a. Y si a la at-
34
m
s
f
era
atemporal
de
esta
ca
pilla aa
dimo
s los ca
nto
s
de las monjas y la sensacin de que
ha
y algo reservado
slo a l
os
iniciados, el rito re
li
gioso y la atmsfera toda
se hace n ms
imp
one
nt
es, ms sugerentes, todava ms
ricos.
CASA
LUIS
BARRAGN
1947)
Se ha dicho siempre que las casas que los arquitectos
pr
oyectan
para
s, son una
mu
estra
de
su crea tividad sin
atadur
as, y tambin, muchas veces, sus
obras
maestras.
Y si alguien requiriera demostrar la premisa, bien hara
en remitirse a la casa de Luis Barragn,
qu
e e l arquitec
to
proyect en 1947.
En su casa, Barragn anduvo con cuidado y midi
muy bien cada cen tmetro de
co
nstrucc in. P
ero
so
br
e
t
odo
volvi palpable aquella idea de
qu
e los muros exi
s-
ten
pa
ra conslituir espacios, y alcanz el perfecto equili
brio
entre la co
mpo
sicin
vi
sual dete
rminad
a y el lu
gar
como
totalidad.
Barragn
co n
tuvo con los
mu r
os el sutil equilibrio
de
pasion
es
contraria
s
qu
e
an
id
aba
n en
su
alma, y en
35
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
20/38
una
combinacin de soltura e intimidad
construy
para
l un conjunto elaborado que tambin dej ca
mpo
a la
espontaneidad. Con su particular sensibilidad hacia las
emociones el arquitecto c
re adems un mundo
co
m
pleto nico y cautivante en el que cada lugar halla en su
espacio la corre lacin
co
n el estado de nimo que por lo
general le corresponde: tranquilidad
en
el c
uarto
para
dormir
concentracin
en
la biblioteca
recogimiento en
el comedo r salvajismo en su jardn exuberante.
La casa donde vivi hasta su muerte Luis Barragn
se encuentra en una calle de casas bajas alineadas e
ir r
e
levantes. De este entorno extrajo
el arquitecto
su
prime-
ra leccin: la casa no grita su genialidad sino
qu
e sin
claudicar de su propia pro
puesta
supo integrarse co n
maest
ra en el entorno y ser
siendo
ella un el
emento
ms de la calle Francisco Ramrez.
El nuevo mundo com ienza en
el
interior tras el za-
gun qu
e sirve
de prembul
o y
prepara
el espdtu
para
la sorpresa que pronto encontrar: una casa que se en-
vuelve a s misma un manejo envidiable de la luz de lo
ce
rrado
y lo abierto de la
re
lacin deljardn con la casa
de los altos espacios y las puertas chaparritas y anchas.
Madera
co
lores brillantes y lfmpido blanco; luz
matiza
-
6
da
ad ornos y muebles en ntima un in para formar un
universo cuyas partes distintas conforman una unidad
slida y congruente.
En la casa
de Barragn
la
sorpresa
es en efecto el
ingrediente que sabe
quebrar
la
sededad
y el slido an
claje de la construccin; al imaginar la vida sie
mp r
e e n
movimiento el arquit
ecto
plane los recorridos y fue
presentando
a
cada
paso
un
a visi
n
desconocida.
Del
zagun
largo y abstrado se llega a un vestbulo
dotado
de
alegria por un muro
rosado
y de aire por el
hueco que abre la escalera desde
donde
el blanco de los
muros y la luz intensa hacen parecer que se asciende ha
cia el ciel
o mientras
q ue abajo
podas puertas pequeas
agrupadas de dos en dos puede
ll
egarse al resto de la
co
nstruccin.
Barragn conduce
por la casa sabe que pronto apa
recer un espacio distinto sugestivo y cada vez ms ori
ginal. a geometra
es
maravillosa llena de enigmas li-
geramen
te transfigurada y sin develar el or igen
de
su
grandeza. En la estancia de altos techos las largusimas
vigas de madera parecen acomodarse
co
n los
muros
de
abajo unos que llegan hasta
ar
riba convirtindose en
trabes y otros ms bajos que dividen simplemente el es-
37
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
21/38
pacio y
que
por
ci
eno
Barragn concibi
cuando
la
casa
ya
estaba
constru
ida. El ventanal que mira al jardn
muestra
sus cuatro vidrios suspendidos
en
el aire
mien
tras que a trs en la biblioteca aparece una pizpireta es-
ca
lerita
que
parece volar.
Cuartos doblados
en esc uadra espacios en los que
hay que
dar
vuelta
ha
sta alcanzarlos quebrar quebr-ar el
muro co
mbinarlo
esu
echar
el espacio
para
lu
ego
vol
verlo mucho ms amplio La casa de Barragn es de una
riqueza inigualable: se vive se siente se mira y obsena;
se disfruta
sentado en
uno de sus muebles o caminan
do
para
descubrir
nuevos puntos de vista.
Un palio encerrado
un
estanque el estudio de Luis
Barragn. La emocin lo recubre todo el trasfondo de
cada pared
de
cada piso ycada ventana. Describir siem
pre
ser muy poco slo la vida vuelve e
ntendib
le
qu
hace
de
esta casa un lugar
pleno
de sentimiento.
38
Casa Gonzlcz Luna Guadalajara 1928.
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
22/38
tri
......
o
V
:B
:::
...
O
O
C
O
;:3
o
ii
t:.O
e:
C'$
V
...
O
o
...
O
...
~ o o
-.:;
O
.,
...
.5
E
C
......,
9
:
o
8
;
S
e
I:J
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
23/38
o
u
S(
E
.
-e
-e
"'
e
l
o
o
u
]
E
.
l
o
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
24/38
To
es
de
Ciudad Satlite ciudad d e Mxico. 19 7. Ptoyectadas e n colaboracin
co
n Mathias
Coe
ti tz
Fuent e d el Bebedero ciudad d e Mxico 1959.
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
25/38
Fuente del Campanario ciu
d d de
lxiro 1959.
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
26/38
'
9
;
o
e
S
l
0
o
'
:
l
S
.
g
?i
g
a:
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
35/38
Casa Luis
Barnpn
1947.
Mientms el techo parece ser siempre ms alto
una
pizpireta escaleJ;ta
de
madera aparece
peb
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
36/38
Cauluis Barngin.
I J.I7
.
Cuidadoso
no
slo del espacio sino tambin de los detalles ms pequeos,
Barragn dise
un ingenjoso juego de pos
g
os en la ventana
ele un
o de los
cuartos.
Casa l uu Burgin , I H7.
Cochera
2
Zagun
3 Vestfbulo
4 Cocina
Antccomedor
6
Comedor
7 Sala
8
Biblioteca
9
Patio
1 Estudio
Vestlbulo estudio
12 Oficinas
13
Jardln
14
Bailo
1'1 IIIC I
ni \
e J.
o
13
o
o
o
o
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
37/38
e .ul Bmg:in, 1 147.
1
Recmara
2 Bano
3 Estancia
1
Cuano de servicio
2 Bru o
3 Servicios
4 Azotea
Segundo y tercer niveles.
Esta obra se tet min de imptimit
en
el
mes
de mar
w de
199
en Talleres Grficos d e Mxico,
Av . Canal del None nm .
RO,
CP 06280 Mxico, D.F .
ron
un tit
-
7/25/2019 Luis Barragn-Matiana Gonzlez Silva
38/38