LA_TAPADA_LIMEÑA

26
LA TAPADA LIMEÑA La Tapada Limeña

Transcript of LA_TAPADA_LIMEÑA

Page 1: LA_TAPADA_LIMEÑA

LA TAPADA LIMEÑA

La

Tapada

Limeña

Page 2: LA_TAPADA_LIMEÑA

.

Fueron una presencia original, de libertad, coquetería prohibición y juego de seducción.

Es un personaje original e inolvidable “La Tapada Limeña”.

Las tapadas no se vieron en ninguna otra ciudad del Perú ni de América.

Con su célebre traje de saya y manto, aparecieron casi con la fundación de Lima.

Page 3: LA_TAPADA_LIMEÑA

Escena ColonialSalón de tertulias.

Se bailaba Minué y Mazurca.

Óleo de Teófilo Castillo Pintor peruano.

Page 4: LA_TAPADA_LIMEÑA

“Tapada limeña, era la denominación que se usaba para designar a la mujer limeña, en la época del virreinato del Perú y los Primeros años de la República”.

“Se le denominó así, debido a que dichas mujeres, tapaban sus cabezas y caras con ricos mantones de seda que llamaban: Saya y Manto, dejando al descubierto tan sólo un ojo”.

Jorge Basadre Historiador

Sobre su origen se ha dicho que es moro, por las innegables semejanzas que guardan con los trajes que cubren el cuerpode las musulmanas, aunque sobre esto no hay pruebas concluyentes.

Page 5: LA_TAPADA_LIMEÑA

Tapada

Óleo sobre papel

 Mauricio Rugendas Pintor Alemán. (1802-1852)

Page 6: LA_TAPADA_LIMEÑA

La saya era un vestido para visitas de día, hecho en seda muy fina negra, castaña, azul o verde. Las cubría de los pies a la cintura, contorneaba las caderas. de modo que demostraran todas sus formas.

El manto era como una toca de seda negra, atada a la cintura subía por la espalda hasta encima de la cabeza, cubriendo el rostro enteramente, de modo que no permitiera ver sino un ojo y en algunos casos los brazos.

Para asegurar la saya se usaba un cinturón que la ceñía al talle .No era extraño que algunas menos agraciadas usaran caderas postizas que exageraban sus dotes naturales.

Page 7: LA_TAPADA_LIMEÑA

Tapadas en la Alameda. Mauricio Rugendas

Page 8: LA_TAPADA_LIMEÑA

El juego de insinuación, el símbolo de clandestinidad, acaso de una incipiente libertad femenina, llamaron la atención de los visitantes que pasaron por la ciudad, durante los 300 años en que duró el “reinado” de la tapada Limeña.

Por debajo de la falda se podía ver el pequeño pie que también hizo famosas a las antiguas limeñas. Eleganteszapatos de raso, medias de seda ,“aprisionaban” el delicado pie.

Page 9: LA_TAPADA_LIMEÑA

Tras el manto podría esconderse una hermosa mujer, una abuelita joven o una mujer que ha sido atacada por la viruela.Este misterio hacía que los jóvenes limeños derrocharan galantes versos hacia ellas, porque no sabían si es que serían correspondidos.Muchas veces algún “don Juan” luego de lanzar su mejor repertorio de piropos se vio defraudado al descubrir bajo aquellas prendas las facciones de una no muy agraciada doncella.

Page 10: LA_TAPADA_LIMEÑA

“La saya se hace de diferentes telas según la jerarquía de los rangos y la diversidad de las fortunas.

Sólo en Lima se las puede hacer y las limeñas pretenden que es preciso nacer en Lima para poderla llevar”

Flora Tristán 1838

Page 11: LA_TAPADA_LIMEÑA

Escena a pleno día

Acuarela de Leonce Angrand Pintor francés atribuible a Pancho Fierro y viceversa

Page 12: LA_TAPADA_LIMEÑA

Escenas tan raras como divertidas; en las que algún marido descubría al final que estuvo seduciendo a su propia novia o esposa.

Pintorescas escenas, que dieron lugar a que el poeta limeñoManuel Ascencio Segura escribiera picarescas comedias ensu obra satírica:“La saya y el manto” que luego se escenificabanen los teatros de Lima, para el deleite de la población .

Esta especie de torneo, en el que los “conquistadores”, tratabande encontrar una belleza angelical y aquellas féminas vestidascomo para que los galanes adivinasen su suerte.

Page 13: LA_TAPADA_LIMEÑA
Page 14: LA_TAPADA_LIMEÑA

Esta forma de vestir de nuestra limeña de antaño, vivió sus mejores épocas en las corridas de toros, las procesiones, los Portales de la Plaza Mayor, a las once de la mañana en la calle de Mercaderes o Acaso en la Alameda de los Descalzos.

O quizás en bello lugar del bajopontino barrio del Rímac, donde los atardeceres de los fines de semana eran testigos del garbo y belleza de quienes se escondían bajo tal vestimenta.

Page 15: LA_TAPADA_LIMEÑA

Caballeros y Tapadas en la nueva Alameda del Rímac.

Page 16: LA_TAPADA_LIMEÑA

““Nuestras abuelas, que eran más risueñas que las cosquillas, supieron hacer de la vida un carnaval constante.Las antiguas limeñas parecían fundidas en un mismo molde.Todas ellas eran de talle esbelto, brazo regordete y con hoyuelo,cintura de avispa.

Pie chiquirritico y ojos negros, rasgados, habladores como unlibro y que despedían más chispas que volcán en erupción”” .

Page 17: LA_TAPADA_LIMEÑA

““Y luego una mano, ¡que mano, Santo Cristo de Puruchuco! .

Digo que no eran dedosLos de esa mano,Sino que eran claveles De a cinco el ramo””.

Page 18: LA_TAPADA_LIMEÑA

““Con saya y manto una limeña se parecía a otra, como dos gotas de rocío o como dos violetas, y déjome de frasear y pongo punto, no qué hasta dónde me llevarían las comparaciones poéticas””.Ricardo Palma.Tradiciones Peruanas. “La conspiración de la saya y el manto”

Con el tiempo las variedades de los trajes fueron de la mano con el clima político, que las tapadas aprovechaban para favorecer a sus caudillos.

Page 19: LA_TAPADA_LIMEÑA

Acuarela dePancho Fierro

Pintor costumbristaMulato limeño.

Page 20: LA_TAPADA_LIMEÑA

Las “tapadas” limeñas también tuvieron que enfrentarse a ciertos moralistas Virreynales, quienes consideraban que al estar “tapadas” las limeñas con el manto y la saya, incurrían en una especie de inmoralidad, atentando contra las buenas costumbres.

Se dictó una ordenanza dada por el cuarto Virrey del Perú. A esta prohibición se unieron luego otros virreyes, quienes durante sus respectivos gobiernos, expidieron iguales decretos.

La historia dice que inclusive la Iglesia quiso intervenir en esta situación y en un Concilio, se trato de prohibir el ingreso de las damas a los templos.

Page 21: LA_TAPADA_LIMEÑA

Prohibidas de asistir a las procesiones con dicha vestimenta bajo pena de sufrir la excomunión.

El alboroto que armaron las limeñas fue tal que los Virreyes y el Arzobispo, tuvieron que dar marcha atrás; lográndose solamente que las“ tapadas” asistiesen “destapadas” o sea sin usar manto, a las festividades religiosas.Aducían que el refulgente sol capitalino, quemaba su suave piel. Además querían mantener su privacidad a la hora de prestar algún servicio humanitario, permaneciendo en el anonimato.

Page 22: LA_TAPADA_LIMEÑA

Tapada en el templo

Rugendas

Page 23: LA_TAPADA_LIMEÑA

El manto fue reemplazado por la manta, que impediría para siempre a las limeñas volver a esconder el rostro.Años más tarde, la influencia andaluza haría suplantarla

por la mantilla.

La vestimenta de la “tapada limeña” poco a poco se fueperdiendo en el curso de la historia de la Lima antigua;esfumándose todo ese romanticismo al que dio lugar.

Fue relegada por la moda francesa en boga.

Page 24: LA_TAPADA_LIMEÑA

MANTA

Fotografía

Page 25: LA_TAPADA_LIMEÑA

Presentación:V. Galdos del Carpio.

Page 26: LA_TAPADA_LIMEÑA