LA NATURALEZA DE LA EDUCACIÓN

CONTENIDO La Educación es un proceso de Hominización La Educación es un proceso de Socialización La Educación es un proceso de Culturización Jeroglíficos- Resonancia Psíquica- Símbolos La Naturaleza de la Educación

LA EDUCACIÓN ES UN PROCESO DE HOMINIZACIÓN

Hominizar es hacer hombre al hombre. Es procurar que sus capacidades latentes se actualicen y luego se afinen y también es dotarlos de actitudes y atributos que le permitan alcanzar una vida plena. Cuando esta finalidad se consigue, diremos que el ser humano está realizado como ser humano, en el verdadero sentido de la expresión. Porque ser humano no es poseer únicamente la figura humana, sino desarrollarse en sentido psicológico y espiritual.

Pero la capacitación de los valores es la faceta que completa y redondea el proceso de hominización. Importan el descubrimiento y la aprehensión del bien, la belleza, la verdad, la justicia, Dios, la persona humana, la utilidad, etc, y la adhesión a estos valores. Ellos forman la dimensión axiología del ser humano.

LA EDUCACIÓN ES UN PROCESO DE SOCIALIZACIÓN

El mundo de la socialización es el mundo del grupo humano, aquel en que las personas se mueven estableciendo contactos entre si, teñidos de mayor a menor cordialidad, dando simpatía , creando lazos solidarios, o bien en el que ocurren por el contrario, situaciones repetidas de aversión, antipatía, alejamiento de los demás, discriminación, incluso donde no prima el sentido de comunidas, sino el “pecking order”.

Socializar posee un doble sentido.I. Es un proceso que lleva al ser humano dentro de una

sociedad en la cual ha nacido, y a hacerlo del modo mas positivo posible.

II. Es un proceso que, a la inversa, fortalece la hominización del nuevo ser.

LA EDUCACIÓN ES UN PROCESO DE CULTURACIÓN

Lo denominamos “culturación”, dicho vocablo lo hemos de entender como lo contrario de “aculturación”, que es la imposición, desde afuera, de una cultura extraña, la cual nada dice al sentir de los miembros de un grupo social.

Culturación es la asunción lenta y amorosa de la cultura del propio grupo por las nuevas generaciones y la toma de posición ante ellas, que pueda hacer de plena adhesión y contribución a su crecimiento, o de critica a algunas de sus partes o a su conjunto.

La educación ha de entregar a las nuevas generaciones de la cultura del ámbito social al que advenido. De todos los objetos y hechos que nos rodea. Desprende del más leve análisis que de ellos se haga. Los objetos y actos culturales poseen una triple estructura:

I. Parte física o temporo-espacial.

II. Resonancia sicológica.

III. Referencia a uno o más valores.

I. La parte física es accesible a nuestros sentidos, podemos observarla sensorialmente.

II. La Resonancia sicológica en nosotros lo podemos sentir porque se halla en nuestro interior, pero no la podemos percibir por nuestros sentidos.

III. La misión de la educación es que las nuevas generaciones capten lo inviables, o sea, la referencia a los valores, así como se dé en ellas la resonancia sicológica correspondiente.La educación en cuanto en proceso de culturación, debe lograr, para las nuevas generaciones y se convierten en símbolos, plenos de significado.

JEROGLIFICOS -RESONANCIA SIQUICA- SIMBOLOS

Sólo la magia del educador puede alcanzar éxito en tan ardua tarea, y por “educador” estamos aludiendo a los padres, a los familiares, a los amigos, a los maestros. Abrir el ojo a la conciencia a la significación de los objetos y acciones culturales, es decir, a sus relaciones con los valores, es el esfuerzo más transcendental que le cabe a quienes educan. Y sólo de esa manera es que las culturas se preservan y pueden expandirse y modificarse con nuevas creaciones.

Cuando este empeño fracasa, las generaciones nuevas quedan desconectadas de su ambiente social y de la cultura de él existente. Son entonces seres que no le ven sentido a los objetos y a las acciones de su cultura, incluso los desprecian y llegan a ostentar una actitud iconoclasta frente a ella, o bien buscan tales significaciones en formas foráneas. Y esto es lo que viene generaciones, sino por culpa de la “educación” que viene recibiendo, una educación que no cumple ni lejanamente con el proceso de culturación que le es propio.

Los jóvenes así formados (o mejor dicho , deformados) por una falsa educación que sólo les trasmite los conocimientos de las diversas ciencias, pero deja de lado todas las formas de la otra cultura, obtienen una visión gravemente recortada de su mundo cultural. Captan solo una minúscula porción de él, a saber, las ciencias (que, además, no son propias, sino de carácter universal) y no ven otros sectores de la cultura, los que mejor trasuntan la personalidad del grupo humano al cual pertenecen. No nos extrañe por tanto, que mucho de estos jóvenes se adhieran a formas ajenas y abominen de lo propio. Nadie ama lo que no comprende, y nadie comprende lo que no ha vivido ni se le ha enseñada a vivir.

Y esto resulta trágico en los profesionales que las Universidades preparan, se vuelve horrendo en las entidades formadores de magisterio, pues los maestros por el sentido de su profesión (formadores de niños, adolescentes y jóvenes) tienen por esencia en su carrera la asunción de la cultura como un componente apodíctico irrenunciable: ningún maestro puede hacer culturación en pro de sus educandos ( y por lo mismo , no puede educar) , si él mismo no ha sido culturado y no es culto . Nadie puede dar lo que no tiene.

LA NATURALEZA DE LA EDUCACIÓN

La herencia kantiana, reforzada con el historicismo de Dilthey, explica la constitución de la Filosofía de la Educación como interpretación de la acción y del pensamiento educativo, conformándose como “filosofías” de la educación. Para abocar finalmente en una “filosofía de las filosofías de la educación” o filosofía analítica de la educación. Pero existe otra posibilidad: la Filosofía de la Educación entendida como filosofía práctica, al modo del saber ético en Aristóteles; es decir, un saber de la acción educativa constituido desde la formalidad teleológica o del fin.

A la altura de nuestra época, la educación es algo muy complejo, porque en ella se dan tres líneas esenciales de acción:

El desarrollo de las capacidades corpóreas, psicológicas y espirituales del ser humano (hominización).

La interrelación con el ámbito social (socialización); y La recepción de la cultura y la toma de posición ante ella por los

educandos (culturación).