Historia de Chile Periodo Parlametario(TOMO I) - Julio Heise Gonzalez

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El' l' ()o 1 del 6 de luhude 1831"J'rque "en secaoo depesquisas haba empleados decididos por laopostcinquetrammttianlosnombres de los prncpidOl para que se pusierana salvo. Por aofueque Balmaccda no klgraotrocon .greyl que alltftor Novoa".M'0\'100 NO\'O:l fue arrestado porque no quiso ocultarse. Lamayorparte de- la poblacin defenda la causa parlamentaria. Se tratabade hacer realidadlademocraciay defenderel gobiernode gabinete. 1\despecho de los halagos y de las amenazas este ideal se abri pasoen todoslos estratos sociales.3.LAen ld revolucin de 1891Desde enero de 1890 el delicado instinto femeni no intuy el t r-gico trastorno que iba a producirse en el pas. Con entereza yper severancia. ya menudo con ms decisin y entusiasmo que lospropios YQroncs. estimularon. en animadas tertulias polticas. la re-sistencia a la dictadura. 1\ lolargo de todoel ano1890. noche a no-che, minianen susuloncs alosckknsorndela Constitucin y delparlamentario. Con l"In cora;c Ytemeridad ocultaban )'prottgl.ln a los politic05 de la oposkin.La&IC60ras babl.anfcn1lUldouna lipsecrmyCf2n partidariascdltadasdel blindoo constituaoo.11 -noI Luis Orrqo L.uco---.Rcun1.1D fondos,.1uxiholl p.1f.1lostublcvad05; hasta proclamas rcwIUOOIUIr1.1S en loscwrte1cscon gf.1\ 'Cpeligro. pues de cUas fueron nn.. das ab crcelpublka ymecmd.1s romo reos. .MUI'Aado1RmanIfiestalas a_de b _ potitlCOS qoe hnweadbo de.. fCl-"hl publicado enEl FI'rf'OUfriI. dd 24 de ICptiembrede 18ljl1 ,balll drubro d&Doru-,a. de'"diddlcclon uc!u-;j\;1 en los lugues Ct"""'gudo!, .11 cultod"lllO '\0\' S_ que1IIndept"lldencu enrcc1men espmtcalunode dogmas fun dametJl;,1e\ de J, Iglesl;I;que en virtud de est;l mdepcn-denoa-queo at ributo de toda sooedad pcnt'CtoI- correspondepnvan-vamente a los :\IZ00I'poSabur o cerrar los templo,ordenar. pruhlbu \C;l lfic;lr los act os religiosos que seH'nhquen dentrode susdgrdorecmto.f C'ngo ha mhllla x'r\u;s,on de qtH: ls rug;ltll';I; lJUl 'oC han 11l'(:h"611 S;llIt'oIJedo. Joan E. Laprngu\MENT RI0 1B61-1925gmvitacin, porque interpretan a minorias animadas dedecisiny de extraordinario espritu combativo.Lahistoria de los partidos desde 1925hasta nuestros das revela,pues, ungradodeindisciplinay desorganizacin que superaen muchoa cualq 'en otra poca de nuestra historia poltica. La ausencia deuna clara orientacin doctrinaria en los grupos partidarios, m quecaracterstica del parlamentarismo, lo es de nuestro actual rgimenpresidencial.Por desgraciael exPresidente Eduardo Frei- noha resuelto(la Constitucinde1925) el problema de :laestabilidadministerial. porquealaintervencindel parlamentoha sucedidola menos responsablede ladirectivade lospartidospolticos encuyo senoactan muchosque nohanreoibido un mandato popular expreso, ni son responsables pblica yle-galmente por sus actos. El Presidente, por su parte, necesita ajustar oadaptar sus gabinetesalaopininde lospartidos, si quiere gobernar constos, condicin esenial en un rgimen democr tico.tEn estrecha relacin con estas observaciones de Frei estn lacorruptela del "cuoteo", en virtud de lacual lospartidos polticos im-ponen al Jefedel Estadoel nombre de los ministros, yla costumbredel "pase" que las directivas de las agrupaciones partidarias debenotorgar a los postulantes a ministros. Esta ltima costumbre polticaque aparece entre nosotros el ao 19.12 envuelve la facultad de re-tirar losministros del gobierno. Tanto"el pase", como"el cuoteo" hanproducido noslo rotativa ministerial,sinoque, lo que es msgrave, hanconducidoadestacar enel gobiernoal militante ms audaz ycomba-tivo y no al ms preparado. Estos vicios se han acentuado muchoms en la etapapresidencial quea lo largo del parlamentarismo.Lamanifiestaausenciadeorientacindoctrinariase expresa tambinen "la doble militancia" yen laheterogeneidadpoltica de las combi-naciones COn que han gobernado los Jefes de Estado del perodopresidencial.BastaCOn recordar los gobiernosdelos seores PedroAguirre Cerda,Juan AntonioRos, Gabriel GonzlezV. y Carlos Ibezdel Campo.En el primer gabinetede 'PedroAguirre encontramos al radical Pe.dro E. Alfonso (Interior) juntoal socialista Carlos A. Martnez (Tie-rras yColonizacin) . En el segundo gabinete colaboraron el radicalGuillermoLabarca H. (Defensa) juntoal socialistaOsear SchnakeV.(Fomento). En el cuarto ministerio figuran los socialistas Schnake y8Eduardo Fre: Los partidos polticos"290urcVICA1>... . P', f . '.n(: HI U ''',Branchi Gundin junto a los radi cales [uvenal lI ema nde/. I DdemaNacional ] y Alfon so Quinta naBurgos(Agricult ura).En la administracin de Juan A. Riov colaboraron sociahstav comoOsear Schnakc o polti cos de tendencia socializante como Guillermodel Pedregal junto a liberal es como Ern esto Barros [arpa. Artu roMatteLarrain yOsvaldo Vi al Vial yal comunista '\ l anuel HidalgoPlaza .En el gobierno de Ga briel Conzlez Videla -en su primer 111 1nsrero-. aparecen el liberal GuillermoCorrea Fuenzalida (J usl1ClJ ,el conservador Manuel Bulnes Sanf nentcs {Defensa} junto a Carlo-Contreras Labarca yVctor Contrerav Tapia. ambos cornuructav. enObras Pblicas yTierras y Color nzacinn. recpcctivamente Eu l ' SIl:mismo gabinete se dcsi;no al liberal Ferna ndo Claro Sa1:Js en Salu .bridad yal comunista Miguel Concha cn Agricult ura. I':ll el wgllndo gabin et c de la adnunist raci n Conzalez V, figuran l orgl \ kssandri R. juntoal oseS. Salas; CcrmanVcrgaraDonosoenRelauone-,yAlberto Baltra en Ecouomia. En el cuarto minister io cncontramocadosconservadores : LuisFelipe: Letelie t (Jus ticia) \ Gui lkrrllo\ 'arasContreras (Salubridad) ron el socialista " rmando \Ialk t S I Fdura cin l .En la segunda aduuuetracmn de' Ca rloslbaezdel C UlIpUact aroncomo min ist rosde Hacienda politicesde tandispares tendencta,doctrinarias romoCullcrmcdel Pedr egal. Jorg"Prat F. . Fc1I JX' HerrerayOsear Herrera Palacios; en Relaciones Robcrtu AldunateLen yOsear Fellncr; ('11 Econonna Arturo Zl ga Latonc \ 1.UI \Correa Prieto ; en Murena, ClodorrumAhncvdaDi ego I. t U \ crgara.en Justicia, En rique' \l out! Fumo [socialista f y Manann FouteutlaVaras (liberal ); en Traba jo. Lcandro MorenoGarrido .\ Eduardo Yaez Zavalac j di' Idrotativd En n:tlC1011 ron ni,]mater ia esnccesariutambn-nrecti ficarlaImagent radioona! de' nuestroperodo parl amentar io. 1':11 esta etapa de nuestro devcnvolvinuentoinstitucional el ,uego pohnco entre gobiernocpovicicn St" produjoconabsoluta regularid ada t ravcsde los votos de confianza ydece n-sura a los mini stros. COIl el lo '\lO descartaba toda posibilidad de pch.grosastensiones enlos conflicto, deintereses, transformando-ea utom-ticamente las opiniones divergentes en OplTllOnes mayoritarias, En 13etapa parlamentaria (1861-1925) e-con la sola excepclOn de la crisispolti ca provocada por Balmacedael ao 18Ql - no\t' produjeron ten-sie nes poltica s de importancia. Las crisis nurusteriales, a mane ra devlvulas de escape. salvaban cualquier tipo de tensin. Flbs descm.291I H_I U rulolJO'UI ."NUIU" 186/-/925pe6ablln laImporblRtisima fuoclOn de salvar lasccnnadccones. deconducir _lasfuerzas polticas discrepl.Dtes a soluciones de armona,de auttnha conviveeca dtrDOCrtica.I nanunamos atentamente la tarea cumplida por los gobiernosparlamentanosllegamos alaconclusindeque -apesardela robtiwmmisktbl. oprttisammte por obr; ded1a- cada una de lasadmi-D1stnoones tuYOUIl:iI claraorientaci n que se: rdleja enlaunidad deacdn de lalabor gubrmati"'2 . los Jefesde Estadocambiaban a susuunistros de acuerdo con las ma)OIas parlamentarias. En cualquierproyeetode ky intervenan. por rq:1a ~ r a l . vanos ministros : unoptq)illrabael mensaje'; a susucesor ccrrespcnda discutirlo en lares-pectiV'lll Comisin; untercer ministro10 defenda enel Congreso. y, fi-nalmente, sola ocurrir que 3 un cuarto ministro lecorresponda r-mar el decreto promulgatorio.Esta situacI6n dejaba toda la acci n gubernativa prcticamenteen manosdel Presidente de la Repblica . Esste quien da alatareagubernativa del parlamentarismolanecesaria unidad y ladebidacon-tinuidad .Es de toda evidenciaque -debidoprecisamente a la rotativa mi-nisterial- na unidad y esa continuidad no podan procurarla ni lospartidos pcliticos ni los ministros. Ahora bien. si los mandatarios sehubseran limitado a presidir l no a gobernar, habra sido imposibleesaunidad deaccin. Tres sonlascircunstancias que bcilitarona losrefes del ejecutivoesaefectiva contmuidadque dieron a sulabor gu.bernativa : 1.0La escasa diferencia doctnnaraque acusan los distintosputidospolticos, 2.0Elhechodequedetentara el poder unasolaclasesoeial, l' l .o La rotativammutenal .J... ~ n b d esque-enabierta contradiccncon lasideas general .menteaceptadas-, foeron las deficiencLas del propio mecanismo par-Iamentano as quepenniberonalos JefesdeEstado hacer un gobierneefectivo.Desde el punto de vista estemo l formal, el parlamentarismosehaCIa efectnooconel cambiodel gabinete; peroenla realidad de loshechos el Jefe del EstadointeMnia juntealosministros oenausen-nadeellos, Insistiendoenlos proyectos del gobierno hasta conseguirsu aprobacin. Fedenco Ercizunz yOerm n Riesco dirigieron per.sonalmalte nuestras relaciones exteriores, )'en los momentos dificilesactuaronaun porsobreel ministerio. Aespaldasdel canciller EliodoroY.ez, el Presidente Riesco discuta ylograba acuerdos con el emba o[adcr argentino. Es indudable que Pedro Montt ejerci tambin ladilUCi6n efectiva del gobierno. Otro tanto podemos decir de losgobiernos deRam6nBarros Luce y deJuan LuisSanfuentes.Lospresidentes emplearon varios recursos para lograr el controlefectivodel gobiernoy paracontrarrestarlos efectos queejerciansobrela acci6n gubernativa los aspectos negativos que tuvo nuestro parla.mentarismo. comolostiene cualquier otro estile de vida pblica ,Si se prolongaban demasiado las gestiones para salvar una crisisminterial provocada por mayori.as divergentes, los jefesdel ejecutivopeccediana organizar gabinetes deadministraci n.Comolosdistintos grupos polticos acusaban pocasdiferencias doc-trinarias ycomo, por otro lado, todos formaban partede una mismaclasesocial. fue posible al ejecutivo presentar los proyectos de leyenun rgimen deAlianu. para que fructificaranen unode Coahcin, oviceversa. sin que la rotativa ministerial influyera en lasuerte delproyecto, ya que los ministros a menudo no tenan el tiempo nece-sario para imponerse de todoslos asuntos pendientes.Los mandatariosdejabanque las combinaciones y partidossedispu-taran libremente los cargos ministeriales. 1..0 que a ellos interesabaera impulsar sus proyectos yprocurar realizar sus programas . El eje-rutive hubo de ingeniarse p.ara contrarrestar los efectos que sobre lamarchadel gobierno produca la inestabilidad ministerial.Esas comodesdeel gobiernode PedroMontt, losJefesde Estadodescubrieron que las crisis de gabinete permitan intensificar el tra-bajo, Lospartidos polticos se desentendandelosministresditnisicna-nos. 10que permita a stos resolver muchos problemas. Lacrisis.lejosde paralizar la administracin, permita un trabajo ms intenso.Losparlamentarios no tenan inters en atacar a un ministerio yacensurado yaprobaban proyectos de cierta importancia. a veces conel nico propsito de que esos proyectos no aparecieran como labordel nuevogabinete.El ministeriopresididopor Ismael Tocomal. que renunci el 8deagosto de 1912. aprovech esta situacin. Mientras los polticos ge:s-tionaban una nueva combinacin de gobierno. el Presidente BarrosLoco ylos ministros dimisionarios apresuraban el despache de im-portantes proyectos de le}', comoel que aumentabalossueldos de lasFuerzas Armadas yel que creaba la Caja de Emisin, encargada deregular el circulante por medio de la emisin debilletes contra eldepsitoenorode 12 peniquespor peso. Esta leytuvopor objetocon-trolarla inflacin.En laorganizacindelosministerios seobservaotra modalidadca-racterstica de la poca. El Jefedel Estado procura mantener un mi-1H1PEllI'llD J' RJ MEIlIT""RIl /lil /112,nitoo amigoa trav de. variosgabinetes de distintas tendencias poli -tica a fin de que este a igoprovoque la crisis cuando el gabineteno agr-Idaba al Primer Mandatario. Enel lenguaje polticodelapocastepersona] seconoca conel nombred "ministrocrisero", .porquese le destacaba paraprovocarlacrisis, otambinsele apodaba"huevode nidal'. aludiendo al huevo huero que se deja para que sobre lanide la gallina!OEl "ministrocrisero" continuaba a trav s de variosgabinetes has-taque -descubierto el juego- se le eliminaba precisamente para darroaor estabilidadal ministerio.E Presidente Errzuriz destac asuamigo el diputadoIiberal porRancagua Cachapoal ~ Maipo Francisco J. Herboso Espaa comomini trocrisero", quien mantuvola cartera de Justicia e Instruccinen los siguientes ministerios :Silva Cruz- PugaBorne (77 de junioal 2 deseptiembrede 1899).Sotornayor -Errzuriz (2deseptiembreal 13 de juniode 1899).Errzuriz - Errzuriz(13 de junio al 11 de octubre de 1900).Femndez Albano - Errzuriz (11de octubre al 3de noviembrede J900). ySnchez Fontecilla - Bello Codesido (3 de noviembre al 27 dediciembre de1900l.El presidencialismo criolloconsagrado en la Carta de 1925no halogrado e ta flexibilidad. Aparece como un rgimen de permanentesconflictos entre lo poderes ejecutivo ylegislativo. En los 47aos deexperiencia presidencialista las tensiones entre estos dos poderes p-blicoshansidoun rasgo esencial de lavida poltica chilena. Loscon-flictosemanan de la misma Constitucin, que carece de los mecanis-mosnecesarios parasalvarlos. Arturo Alessandri P. y losconstituyentesde 1925. ugestionados por las tendencias estatistas vautocrticas delaprimera postguerra, consagraron unautoritarismo presidencial absor-bente, un verdaderoautocratismoque hace imposible un sano equili-bno entre lospoderes. El presidencialismovigente desde 1925ostentacaracteresmucho ms rgidos, msexagerados que laorganizacin po-ltica portalianaconsagrada en el Estatuto de ]8B.Si ala'luzde laexperiencia historica comparamos nuestrosistemaparlamentario con el r gimen presidencial establecido en la Consti-tucinde1925llegaremos a las siguientes comprobaciones:. ~ o M a n u : l Rivas Vicua : Historia poltica ). parlamentaria de Chile. Tomo J.PagIna tl. Santiago. 1964. Edicinne. de laBiblioteca Nacional.29 ..u .P ,ULAMr:N"TAJt ISMO. ESCUELA ChICADr: LPUEI LOCK ILEN"O1.0Ambos sistema s han pretendido el ejercicio prcticode la de-mocraciay esfuerza reconocerque, entiemposnormales, ellohaocu-rrido leal y efecti vamente.2. Enmomentos de tensin. encambio, el sistema parlamentari oha salido merar parado . Este sistema presupone el apoyo popular auna determinada linea poltica: tan prontocomo cambiade opininel pueblo, cambia o debe cambiar su lneapoltica el propio gobierno.3. En el parlamentarismoel Jefedel Estado nopuedesalirseconla suya con medida s voluntariosas. Sus ministros representa n a lamayoria de los Cuerpos Legislanv.. os.4. En el r gimen presidencial los gabinetes no estn integradose-cernoocurraenlaetapa parlamentaria- por laspersonalidades msdestacadas y de mayor experiencia dentro del mundo poltico. ElPrimer Mandatario prefiere escoger a sus secretariosde estado entrepolticos amigos ydciles. enalgunos casosdesconocidos, que empie-zan la vida pblica con su designacin como ministros.,.0Enel presidencialismoel jdedel ejecutivoman tiene asusmi-nistros ent erament e subordinados a su poltica y a menudo sueletratarlos con indi ferencia. Prefiereel consejoylaasesora deamigospersonales o de expertos. Es el caso de Dario Sainte-Marie en lasegunda administracin de Ib ez; Dario Poblet e en el gobierno deGabri el Oonelee Videla yel ciudadano espaol Joan Oarcs en laadministracin de Salvador Allende. Esta caracterstica vale tambinpara el presidencialismonorteamericano, modeloclsicodeestaformade convivencia poltica. Pocos norteamericanos yprcticamente nin-gn extranjeroconocen los nombresde los ministros queintegran elgabinete de Richard Nixon; en cambio, todo el mundo conoce aKssnger, amigoyconsejerodel Presidente.AlgoparecidoocurraconWrlson, Roosevelt y Kennedy.6.Enel rgimenparlamentarioexisteuncontacto institucionalizadoentre el ejecutivoylaoposicin. El gabinete tieneel deber constitu-cionaldeasistir alas deliberaciones delCongreso. Silocensu randeberenunciar. En el rgimen presidencial el gobierno toma importantesdecisiones. al margen de la opinin parlamentaria.7. En el presidencialismoel Primer Magistrado de la Nacin nonecesitaexplicar regularment esusactuacionesysuposicin. Sueleha-cerlo a travs de conferencias de prensa odiscursos por televisin oenconcentracionespblicas.Puede reduciral mnimumopostergar lasaclaraciones sobre cualquier terna delicado, omitiendo la corwocato-naaconferenciadeprensao eludi endopreguntas. Enel presidencialis-monose- da undebate formal entregobiernoy oposicin . Predomina2q 5c:scl1llMmcD1le .la au1Ptidad yal aIpDoI ea- el simple caprichocid Piaidatte. Enel bbo. la 6....hnria de ... actoI cid qecutiYO serealiza l6rIo a ttavs de la prmsa.8. Deah b cstJaontinariaimportanciapoIitic:aquedoempefaalaprema al un.qunmpresdmciaI : el la nicaautoridadcon dere::ho plCpDtal. SinprtDSa vadadctamente libre', el sistema presidencialpuecIt Depl fa1mtntr alms arbitrario autocn.tismo.9, lA Constitucin de1925 ha supriaDdounadelas tarasmedula10 cid Conpao:sufwxin fisca1izaclo12. Ha ck:sapera:idolatapan-sabilidad politica de los ministros. Laactual estrnctur; poIitica re.praattaun predominioiocontramstabledel ejecutivo el Parla-"""to.10.0Enabinta contradiccin conlos ms elementales principtosdemocrticos, el arto 5-4de laConstitucin-que reglamenta el vetopresidencial- permiteal ejecutivoobtener la aprobacibn de sus pro-yectos de ley con sloun tercio de uno delos Cuerpos Legislativos.El Congruonopuede legislarsinla aprobacindelPresidente. ame-nosque pueda re-unir un voto mayoritario de lasdos terceras partespara contrarrestar el vete opuesto a sus leyes. Pedro Aguirre Cerdagoberncon una mayora opositora tanto en el Senado como en laamarade Diputados, El mecanismodel veto ie permiti la aproba-cin de numerosas e importantes leyesque no contaban con las sim-patasde aamayoa opositora. Dentro delaestructurapleidencialistael veteconducealsometimientoincondicional delCongresosi laopa-sK:i6n DOcuenta con los dos: kmasde los eepsesentantes, oal sorne-tinUentointondiciooaI del de la Rq>ublica si laoposi cincuenta con esos dos tercios.n,oEn un rgimen prcidmcial rqular se pretendeconseguir unequilibrioentrelos pode:m, asegurandoun mximodeindependenciaeeeeel qet:ubYOY el kgislab\'O. Esta independencia noecste entre:naIOtrnI FJteeeen sus manos mudus m:is facultades k .plativas . que el Congreso; ms del 75%de la actividad legislativacerrespccdeal Pmidentedela Repblica. El veto. comoquedadicho,lepermiteal ejecutivo imponer su voluntad; tiene en sus manos lainiciativa Qclmiwen proyectes de ley quesigni hquen gastos; esdue-l\ode13 legislatura estracrdinariay dispone, adems, dela institucinde13s uqmeiaa., Rotoel equilibrio entre 10$poderes legislativoyqecubvo, el presidencialismoha llegadoauna situacinabsolutamenteaDormal : la eventual presindeunsolo individuo -el [efedel Estado-sobre- la voluntad mayoritaria de la colectividad.296EL PLUIJ:NTISlCO, U CIIUAcv sc, PE LPllt.LOCH ILENOTodas estas limitaciones del mecanismoconsti tucional pueden lle-pra producir tres consecuencias funestas para la vida del organis-mo social :a ) Al exaltar el autoritarismo val hombre fuerte los ciudadanossedejan arrastrar por el caudillo Poltico. Se desechan los principios;olvidando el hecho elemental de que en la conciencia social debegravitar mucho msun buen principioque el mejor delosestadistas.b ) Comoconsecuenciadetodoloanterior, elcuerposocial terminaimperceptiblemente por considerar los derechos individuales ysocia-les como una concesinomerceddel Jefedel Estadoy nocomo unaestrictaaplicacinde la ley, yc) El usoexcesivode autorid ad por parte del ejecutivoha produ-cido siempre resultados negativos para la paz pbl ica. Slo el equi-librio, la armona ntima deambos poderes -el ejecuti vo yel legis-l:ltivo-, producenunasanaJI robustavidapoltica.El presidencialismocriolloha rotosinduda el equilibrioentre lospoderes pblicos, condicin medular paralaestabi lidad del grupo so-cial. Un considerable sector dela ciudadana-incluyendoa numero-sos constituyentes del ao 1925- noha reparadoeneste hecho. Su-gestionados por el estatismo de la primera postguerra, levantaron.consciente o inconscientemente. la bandera de un gobierno fuerte JIautoritario.En las elecciones presidenciales realizadas bajo el impe rio de 1JConstitucin de 1925, el fenmenoesclaramen te percept ible.." rturoAlessandri Palma , en 1932;JuanAntonioRos, en 11)42;Ca rlos lbeedel Campo, en 1952; JorgeAles.sandri Rodrguez, en 1958, fueronele.vadosa la primel'2 magistratura de la Nacin comosmbolos de ungobierno fuerteyautoritario.Desde 1925todos los Jefes de Estado -pero muyespecialmenteJuan A. Ros, Ca rlos Jbez del Campo, Jorge Alessaodr Rodrguezy Eduardo Fre Mcntalva-, lamentaba n no contar con suficientesatribuciones. Todos ellos estimaban necesario aumenta r las facul ta-des presidenciales consagradas en el Estatuto Poltico. Juan Ant onioRos logr en parte este propsito por enmienda constitucional del21 de noviembre de19+1.11UPOf Ley nmero 7.727 se aprob tstll romh tllOOnal qut bmita lanidativa perlamtntan. en loI altos pblicos. Tambin disminuy \alatribud onts c1t1 Parlame-nto e indirtaDle-ntt aumtnt las del Peder Ejeocuti.'olaRdonnl Constieuoonal 511 llt ionada porI..tyN.O 17.284de .Hdemerodt 1970.Por n taenmitnda constitu('ionalti nontttsita aut orizacinptn. ausm-hnt del plb hasta pordlas.29 7IOPO,ul.un 70'110 SI lasKforma\ immuada" JlOr los pKsldentn IbiJ(:z, Alessandr, Frase hubiesenfonl'llllilJldo, nocabeLa menordudadeque ellas ha-bOansido aprobadas, graCias alpublico favorable al auton-t.lmmo prt idcooal que se !lUlllhesta enChile' desde11)2,. el parlamentarismode la pnmera prquerta, el Congresoera el\ roindiscutiblemas directodel pueblo: el verdaderodepositariode lapllltananona!. El presdeecenmc-quesurgeentre nosotrosdespun de- la Gran CUC'TUque se- \igoriza a partir de la.iegunda conflali:racKln mundul-hanansformado alejecutivo enel cen-trode La \1da p blica. enel deposuariodela pchtjca nacional, en elIllCO poder publicoque toma iniciativav. El Congresodesempea unpaprl rada \ l mas plSI\"O; nou,111,1 de aconsejar, de enmendar.de nt'pr o consennruuciatrvas presidenciales. Siempre encontra-mosalCongrewenactituddecspcl"llr que el letedel Estadorespondacon Illlclatl\'a\ Iorrnales a las preferencias pchncav expresadas por losparlamenrarioc.OI\'el'iOS hicturt"-i hall trastrocado-el1 la forma mdicada-, las rela-ciones ejecutllo.lrgl\lativo. Lov problemas iOCiJ.!cs r econmicos handetcrmlnado una expansin de la actividad del ejecutivo que se reflel;' en 1,1\ responsabilidades que k utorga la Consntucion. El Jdedel Estado('\ll'lIta, ..demav, con unpcrtantcc resurtes cxtracoustrtucjc-uales par;, Impolln-.e sobre d Congreso. Dndc luego. al llegar al poder tiene la\Tnlal;' de contar con un progr,iIll,1 CU\a realizacintienederecho at'xIglr la que loIlel'o ;,I poder . Adems tienea sudISfK"K"IOIl medio, de publicidad -pren\a, radiostelevisi n-e quekpernutcn obtenerpopular parasus Finalmente, el ejecunvo nene amplia facultad para disponer, or -foillllUlr \ dnlgnar lo que ce ha dado en llamar "mandos medios".Frente a te autocratunso presidenCial el Congreso se ha transfor-mado en una npeeie de foro destinado a plantear pbhcarnente ac-tltudes deapoyuode cnnca. de Iamentacsones ode aplausos queca-recen de toda vntuahdadque chocan avperamente con las pKtennenes pmldtnelalcs. El ejecutivo siempre parece a la ofemi\'a; elParlamento, encambeo, ,1 la defermvaenunaactitudmedrosa.Los propiOS Cuerpo, Legisutil()\ 110 han tornado clara concienciade esta verdadera capltis diminutio. Desde que se sancion la CartAFundamental de hasta la Reforma Consntucional que sanciony reglament 1,1 delegacin de la potestad Icgidati\'3., el Parlamento,de hecho, ha delegado Na potestad a todos los [efes de Estado. Sehan dictado numerosas Ic:yt, que por una parte disminuyen las facultarlt"i del poder por ntuaumentan I;,\ del ejecutivo.P I. P"-' "nCl'p; 1.1l ctvrca DU. Pl 'E l l .0 enuf .NnDe esta suerte, nuestro reglmen presidencial ha demostrado unaevidente falta de flexibil idad que se agudiza -a menudo en trm-nos deplorables- debido a nuestra condicin de pasen desarrollo.(o] anhelo de modificar rpidament e las estruct uras econmico-socia-les a fin de mejorar los niveles de vida de la poblacin produce unestadocrnicodetensiny conflictosdetodaespecie, queenalgunoscasos hanllegado a lmit es peligrosos.Lamadurez cvica del pueblochilenoha permi tidoque el presiden-cialismocriollono sellaya tran sformadoenabierta dictadura. El patriotismo yla cultu ra poltica de nuest ros gobernantes yde nuestraclasedirigente han servido de norma reguladora. para la solucin delosgraves\- frecuent esconflictos}. problemasde toda especiequehacreado v sigue generando la Consti tucin de1( 2) .Aunque el presidencialismocriolloreservaal Jefe del Estadocotilafacultadprivativa ladesignacindesusministros,todoslos presidentes,desde el ao 1925 hasta nuestros dias, han esti mado que ms alldeestaatribucin discrecional estel sentir mayoritariodelaopininy de los grupos politi ces.Lomismoha ocurridocanlasotras facultades quelaConsti tucindel 25otorgaal jefedel ejecutivo. Estas poderosas atribuciones siem-pre han sido ejercitadas con prudencia, con ecuanimi dad ycon unhondo senti do democrtico, procurando no romper la armona y lacolaboracin entre los poderes pblicos.Se ha llegado al convencimie nto de que una autentica posturademocrti callevaimplcita una concienciasocial decolaboraci nydeconfianza, unaleal predisposrona nolesionar, ni siquiera a a magarlas atribuciones ylos der echos de otros poderesdel Estado. Peroesprincipalmente elconvencimient odequeesnecesariogobernar conelasentimi ento de los gobernados el que ha permitido morigerar, engran medida , el autocrati smo preside ncial consagrado en la Cartade 1925.Entodos los paises quepractican el rgimenpresidencial - incluso enlos Estados Unidos- se ha iniciado una reaccin en orden a crearlos mecanismos legales } constitucionales que penni tan salvar o C().negir los inconvenientes sealados. Entre las medidas tomadas parafrenar el autocrati smo presidencial se han propuestolassiguientes:a 1Ent regar la solucin de los conflictos ejecutivo-congresodirec-tamente al pueblo a travs de la consulta popul ar o plebiscito, quese procura hacer lo ms frecuente posible., H.... I I ... .... NPTUIO J861-1925b) lJ"nbunal Constitucional. queromo finaliet.d concretaIPOIYn los problmwentomoalainterprdJcindelos preceptosdela Carta- Fundamental.e) La dckpdndelapotetadItpsbtiva, que responde al anhelode modificar r.lpidamente determinadas estructuras, puticulan1K'ntelas ecGDmico-adnurnstr.lti\".1s. enpalK5endesarrollecomoel nuestro .d) LadolUC1on del Congresopor una vezen cada periodo preencasode conflictograveentre el eiecuevo). el legislativo.paraquee) electoradosepronunoe sobre lasdncrepancias entre amobao poderes.e "\sI rorno sepensa -enlaetapa parbmentaria- que era nece-sanoorpnwr la tiscaliz2cindel Congreso sobre el poder ejecunvopara ponerdiqueal abuso delos votos decensura, ahora sepiensaqueesorganizar en alguna forma la responsabilidad poltica delPresidente ydesus ministros para poner dique a la prepotencia delejecutivoy paraevitar laestrangulacinde lalabor legislativadel Par-lamento. Lascontroversias ylas violentas tensiones ent relos poderestendran una vlvulade escapecon laposibilidad de que la mayoraparlamentaria pudieradeshacersede unoovares ministrosque ensugestinadministrativa desacertada noestn interpretando el senti r dela opinin pblica,f) Laindependenciade ambos poderesdescansa actualmentesobreel sufragiode un cuerpo electoral que no es el mismo para la elec-cin presidencial para la parlamentaria. Esta situacin se llgT'llVllpor la dUT'llclOn del mandato. distinta pala el Jefe del Estado, paT'lllos senadores y paT'll losdiputados. Aunque ambos poderes emanandel pueble, noreflejan exactamentelamISmaopinin,que natcralmen.te \".1na de un momento a otro. La renovaci n parcial del Senadopermite que permanezcan ensuseno reprnmtantes de opmKJnes quenotuvieronel favor electoral enlos comiaos que renovaron totalmen-telacamaT'll deDIputados. Se piensaque UIUmanera de salvarestosmconYe'ntentes es realizarlasejecocnes parlamentarias conjuntamenteronlas prntdencialn,l El p.rfdrrwntdrilrno )' LJ ddminiltnlC'in I'bliCdOtracritica inlwtlhcada que seha formulado al parlamentansmo h-beral hasidoIII desorgllmzacinl lacorrupcin admmistrativas. Afirmacinmuyrepetida, cuyaveracidadnadieha podidoprobar. Enesteaspecto, comoen muchos otros, nos encontramos frente a una ghlI:.rahzacina todas luceserrnea. peromuyexplicable en todotrnsitodeuna a otra poca.lOOParadesacreditar una formade convivencia histrica endeclinaci nno esnecesarioqueexistan realmentelos hechosnegativos. Bastanunoscuantos casos de excepcin para que nazca ysedifunda la leyenda.Estasurgeespon tnea cada vezqueapareceuna voluntadcotectvsdevivirunnuevoestilo. Entodo gruposocialsecreaunestadoespiritualdestavorable a las estructuras consagradas y una postura incondicio-nalmente favorable a las nuevas formas. Semejante estado espintualcolectivo es singularmente propicio para la difusin de armacion.sdepura invencin. sin fundamento alguno . El choque entre las for-mas histricas tradicionales y las nuevas hace surgir --con perfectabuenafe- estasafirmaciones. Precisament ela buena fe permitequeellas aparezcan como si fueranla mismarealidad ,Dentro de la dinmica del desenvolvimiento histrico las leyendasdesempe an un importantsimo papel: contribuyen en gran medidaal triunfo del nuevoestilo. Ellaspermi tenacoger lanuevapoca comorestauradora de la honradez, como encamacin del progreso social,poltico yeconmico. Papel , este, decisivopara el triunfo delanee-va idea, de la nueva poca, del nuevo rgimen. Pinsese sloen laemancipacinhispanoamericanay lacantidad deleyenda s antiespaolasque debieron inventar nuestros prceres para llevar adelante la inde-pendencia. Lo mismoocurrienla Revolucin Francesa . Lahistori o-grafa contempornea ha demostradoque al producirseeste trastornopoltico noexista en Fran cia ni postracineconmicani abusos porpartedel rey, ylaimagen deste romo soberanoarbitrarioest muylejos de correspo nder a la realidad .Exactamenteel mismo fenmenoseprodujoenChilealrededor delao 1924, que marca el trnsit o entre la etapa parlamentaria y lapresidencial. Doso tres casos de corrupcinadministrativa denuncia-dos por el gobierno militar de 1924hicieron posible crear laleyendade la desorganizacin ydescomposicin de la administracin pbli cadel periodoparlamentario. Nodebemos, por tanto, extraamosde quelaspromocionesqueprotagonizarondichotrn sitohayancreado esale-yenday contoda buenafe la hayanidentificado conla realidad .Pero yaestamos a casi medio siglode la etapa parlamentaria yesnecesarioquelacienciahistricahagalasrectificaciones correspondien-tes. Un estudio objetivo de este problema nos permite llegar a laconclusin de que la administracin pblica entre 1861y 1925. enmochosaspec tos, tuvouna organizacinyuna actua cin muysuperioraladel actual periodo presidencial. Basta unligeroexamen dela rea-lidad histrica para llegar al convencimiento de que la administra-cin pbl ica entre 1861y 1925_ lejos de encontrarse desquiciada yso1H_. . fI Prlo P"'l""" ....... '0 l/l611(115CO.m!ID,pida- ment una verdadera fuerza nacional que puso alpalS I abrigo de lasperturbaciones y cambios polticos que pudieranhaberle acarreado las rotativas ministeriales.ConantenondadalaRevoluci nde 1891, era lavoluntaddel Jefedel Estadolaqut pm:lominabaen laprovisi nde loscargos pblicos.Conel munfode IJ, causacensttucional, el control de b administra-cinpblica pasodemanos del Presidentede la Repblicaala delosjefes de partidos politices . Esta situaci n se consolid a partir delgobiernedeCermnRescc. Larealidad histnca nos demuestra quetantolos rnandatanos como los jefesde partidos respetaron )' prner-varen. en gnleral. el prestigio. ha respetabilidad yla continuidad deLa admineeracion publica. que present en la etapa parlamentariauna estructura slidamente organizada.Atravs de la prensa o directamente laopinin pblica tambi nintervena, denunciando ycondenando enrgicamente cualquiera irre-gularidad en los serviciospblicos. Enel verano de 1912el pueblodeMuJchen sancion a Carlos East, administrador de los servicios deagua potable . Esteempleadode la Direccinde Obras Pblicas habiacometidodiversosabusosqueirritaronalosvecinos hasta el puntodeobligarloa renunciar el cargo}' asalir de laciudad. Presionadopor laopinin pblica. el jefede estos serviciospresentsurenuncia, conce-bida enlos ugurentes t rminos :Ibb.lldome becheenteramente ocho6oal pueblode !\.fulchn, porlasincorrecciones, abusos, torpezas comendas. accedo a losdeseos manifnt.oos.lI mi porel pueNoen masa ,.presentola Indeclinable de mipuest o deadmlO15trador del agua potable de Carlos East .lukhcn. 2-de febrero deJlHZ.Al X1'Jor Inspector pt:ral deHidraultea. SantLa(O.11Los funclOnanoseran. en general, competentes )" honestos. ApesarO.I 11". I I.L .uloPO ..... UMf ..rnlO 186J-/92>I 11, . I' 9 6, l I ~ l I f ' I u n.ioDO PUl nU"'tu, u I MJ/ ')!:;/ ,4 / f... ,