CREATIVIDAD Texto de Alfredo Luis Aina,

Departamento de Óptica, Universidad Complutense, Zaragoza-Biescas Agosto 2010.

Presentación y resumen. La creatividad es un componente fundamental de la actividad científica que sin embargo no recibe ninguna atención ni en la formación del científico ni en su trabajo profesional. Normalmente la creación se entiende como patrimonio del arte o la literatura y la invención o innovación como propias de la empresa. Sin embargo la creatividad es esencial para la investigación científica. En estas notas se reflexiona sobre el valor de la creatividad en la ciencia, se propone reconocerla como parte fundamental de la ciencia y se pretende fomentarla.

Sobre cambio, creatividad e innovación. La generación de nuestros padres (o abuelos), nacidos en las primeras décadas del siglo XX probablemente sea única en la

historia al haber experimentado un cambio radical sin precedente. Han pasado de una sociedad básicamente rural, aislada e inalterada durante siglos, a la comunicación instantánea a escala mundial y la popularización de los vuelos transoceánicos. Durante siglos el futuro era la repetición del pasado, siendo el mayor valor la experiencia de los mayores. Por el contrario nosotros hemos heredado una cultura de cambio constante, donde nada permanece y la experiencia no tiene valor para un futuro

impredecible. Se estima que el 90% de los científicos que han pasado por el mundo en toda su historia están vivos. Por lo tanto la creatividad no es sólo algo que nos ataña como científicos sino que será una actitud personal y social necesaria para vivir en un mundo continuamente cambiante.

¿Creatividad en Física? Rara vez se asocia la idea de creatividad al trabajo científico. La razón puede estar en la visión lógico-deductiva en la que se suelen presentar los contenidos de una ciencia. Prevalece la idea de que las leyes y fenómenos naturales son dados, inalterables. El científico, en un papel relativamente pasivo, descubre las leyes naturales preexistentes como producto de su superior inteligencia aplicando el llamado método científico. Creo que esta visión es fundamentalmente falsa. Todo lo contrario, hay mucho espacio para la creatividad en ciencia. Las leyes de la naturaleza no son preexistentes, no están escritas en ninguna parte, son creaciones humanas. En muchas situaciones coexisten teorías distintas que explican los mismos hechos experimentales. Hay muchísimos fenómenos que son explicados tanto por la física cuántica como por la física clásica. De hecho la física cuántica es propicia a la proliferación de interpretaciones distintas. Otro ejemplo típico es la coincidencia de la óptica electromagnética, geométrica y cuántica para la explicación de muchos fenómenos. Un mismo problema puede tener muchas soluciones, unas más sencillas y otras más complejas, unas más sugerentes y otras más

áridas, etcétera. Los hechos experimentales dejan mucho espacio para crear leyes y teorías. Se crean los problemas. Los problemas de los que se ocupa la ciencia no están escritos en ninguna parte. Encontrar un buen problema es quizás la parte más creativa del trabajo científico. Un ejemplo burdo pero ilustrativo: para el 99.9% de los humanos de todos los tiempos ha sido y es irrelevante si el cielo nocturno es el mismo todos los días o si cambia de un día para otro. No hay frontera entre lo que está bien explicado y lo que no, entre lo que es un problema y lo que no lo es. Para empezar, una primera componente creativa está en determinar qué son hechos experimentales. Su búsqueda, obtención e interpretación son creaciones de científicos interesados en un problema nuevo, que no existía antes. La propia visión es un acto creativo. Frente a los mismos estímulos no todos percibimos lo mismo ni obtenemos las mismas conclusiones. Se crean las soluciones. Casi por definición los científicos se ocupan de problemas cuya solución no se conoce. Es decir, no hay una fórmula magistral para resolver problemas. Por lo tanto la resolución de problemas es un acto creativo, es un salto al vacío en un proceso necesariamente no lógico. Quizás el punto clave es que realmente no hay un método científico. Los métodos de demostración racionales se aplican después de los descubrimientos, nunca antes. Si hubiera un método científico quizás ya estaría todo descubierto. La investigación sería un proceso rutinario de aplicación del método.

Cualquiera puede ser creativo. La creatividad no es cuestión de genios. Se suele relacionar creatividad y ciencia con mucha inteligencia o con un talento especial. Incorrecto. La creatividad no es exclusiva de los muy inteligentes ni de genios. Incidentalmente, no se sabe muy bien lo que es la inteligencia y por ello se han definido muchas, entre ellas la inteligencia creadora, como capacidad de hacer proyectos personales y llevarlos acabo. La creatividad está al alcance de todos en todas las actividades, científicas, personales, etcétera. Es una actitud que se puede aplicar a todo lo que hagamos. No se trata de ser mejor que los demás, sino de mejorarnos nosotros mismos y lo que hacemos. Creerse creativo. Las creencias que tenemos influyen decisivamente en nuestro comportamiento. Si creemos que no podemos hacer algo no lo haremos, sobre todo porque ni siquiera lo intentaremos. Un paso necesario para ser creativo es darse permiso para serlo, confiar en uno mismo, perder el miedo al error (ver más abajo). Ser diferente. Por definición la creatividad excluye imitar a otros. Debemos aplicarnos a lo que más nos guste con nuestras reglas, a lo que pensemos que nos sale mejor, lo que nos distingue de los demás. La creatividad no se puede imponer, debemos centrarnos en aquello que nos interese. La creatividad se nutre de la pasión por ser diferente.

Ser irracional. La creación suele ser fruto de la intuición, que es la capacidad de tomar decisiones sin el concurso deliberado del razonamiento lógico. La intuición es contraria a la lógica y por ello insustituible para resolver problemas. En un episodio de la serie Star Trek Mr. Spock* como paradigma de la racionalidad reconoce las ventajas del pensamiento no racional terrícola cuando el capitán Kirk le vence al ajedrez tridimensional. De hecho, si observa como analiza y resuelve problemas notará que tras un período de estudio y recopilación de información empieza a imaginar posibles soluciones y formas de demostrarlas. Sólo aplica la lógica o racionalidad una vez que ha imaginado la solución y su demostración y pretende comprobar su validez.

* ¿No hay doctorado en Vulcano? ¿O es que el título de Dr. está reservado a los malvados?

Etapas de la creatividad Curiosidad/objetivos/percepción. El motor necesario de la creatividad es tener interés en algo, tener objetivos, cuantos más y más diversos mejor. Es crucial tener problemas abiertos, objetivos que cumplir. Eso hace que percibamos el mundo de acuerdo con esos objetivos, nos hace estar atentos para percibir lo que nadie más percibe. Es sorprendente lo poco que percibimos de lo que nos rodea. Cosas que vemos todos los días somos incapaces de recordarlas: casas, comercios frente a los que pasamos todos los días, o por ejemplo la sombra de la tierra, la ha visto infinidades de veces pero no se ha dado cuenta.

Estudio. No podemos crear en una disciplina que no conocemos. Aunque a veces lo parezca, la creación no se produce sólo por azar. Es el resultado del esfuerzo continuado y planificado. La inspiración debe encontrarnos preparados.

Esto es en definitiva estudiar física. Se trata de entrenar nuestro inconsciente para que tenga recursos con lo que trabajar cuando busquemos y resolvamos problemas. El estudio se parece al entrenamiento en el deporte. Se trata de hacer instintivas tareas que son muy complejas y poco naturales.

La vertiente indeseable del estudio es que se interiorizan supuestos, sobreentendidos, grandes éxitos previos que invitan a repetir las fórmulas de siempre. Las creaciones en general y los avances científicos en particular, incluyendo los más sorprendentes, no se producen de la nada. Siempre parten del trabajo previo de otros. La novedad es ver de otra forma lo que todo el mundo tiene delante de los ojos, en combinar de forma distinta ideas que ya existen. Por eso es necesario saber qué se ha hecho en el pasado sobre nuestro problema. Incubación. Hay que dar tiempo al inconsciente a asimilar nuestro estudio, procesarlo según nuestra visión diferenciada y elaborar una solución via la intuición. De vez en cuando hay que alejarse de los problemas para que los árboles no nos oculten el bosque. Por ello es conveniente trabajar simultáneamente en varios problemas distintos alternativamente. Que trabaje el inconsciente. La creatividad es una actividad esencialmente no racional, inconsciente. La lógica se pone después del descubrimiento. Por ello debemos darle a nuestro inconsciente la oportunidad de trabajar para nosotros. Algunos autores han señalado la importancia de las tres bes, “bus, bed, bath”, como muestra de lo

imprevisible en creatividad. Experimentos recientes recogidos en la bibliografía parecen demostrar que el sueño o facilita el descubrimiento y el aprendizaje.

Separar creación de análisis. De acuerdo con todo lo anterior un factor básico es separar la creación del análisis racional/lógico. Espere lo inesperado. Es muy común que los descubrimientos sean inesperados para el propio descubridor (Cristóbal Colón es un buen ejemplo). Al tener la creatividad un factor irracional es imposible prever exactamente qué problema vamos a resolver. Solución y problema suelen crearse a la vez. Sea flexible y esté abierto a todas las opciones que le sugiera su imaginación. Trabaje en su idea. Una mala idea puesta en práctica es mejor que una buena idea en un cajón. Póngase a trabajar en sus ideas aunque no sean perfectas, aunque no sepa donde conducen. Desconfíe si las ideas le surgen muy fácilmente, se sentirá tentado a no trabajarlas y morirán sin haber descubierto todo su valor. Las etapas típicas en la creación se pueden resumir en la forma

Planteamiento—estudio—incubación—creación—análisis lógico—trabajo

Factores necesarios No hay que temer los errores. Un factor clave es perder el miedo al error. De los errores se aprende. En procesos en los que se sabe el resultado puede pretenderse eliminar errores, pero eso es imposible en creación o innovación. Si hay un método científico es el de prueba-error y vuelta a empezar sabiendo algo más. No evite reconocer errores, asuma responsabilidades, no escurra el bulto. Cuando presente su trabajo a los demás no les pregunte qué les parece. Pregunte qué está mal, qué quitarían, qué falta.

Persistencia. La constancia en los objetivos es crucial. Nada sale a la primera, encontraremos obstáculos y cometeremos errores, pero el que resiste gana. Por ello es crucial que sus objetivos sean realmente propios y deseados. En especial no dejarse desanimar nunca por expresiones como “eso ya está hecho...” o “eso no conduce a nada...” a las que desafortunadamente suelen ser muy aficionados los “compañeros”.

Estrategias Llevar un diario. Hay que anotar cualquier idea que se nos ocurra, por muy descabellada que parezca. Una característica de las ideas innovadoras es que al principio no parecen razonables, precisamente porque son innovadoras. Que sea el tiempo el que coloque cada idea en su lugar. Anotarlo todo sin censuras en el cuaderno. No arrancar hojas si pensamos que nos hemos equivocado, mañana podemos darnos cuenta que no estábamos equivocados. Cuéntelo. Escriba o cuente a los demás (a su abuela, a sus peluches) lo que hace, lo que piensa para desnudar sus prejuicios y desvelar sus errores, las fallas de sus argumentos, para hacer explícito lo implícito.

Grafismo. Es muy conveniente hacer esquemas gráficos, figuras, dibujos, diagramas, mapas, etcétera. Las representaciones gráficas hacen que las ideas estén más vivas y fluidas, relacionándose con otras ideas.

Problemas abiertos. Tener en mente consciente o inconscientemente varios objetivos y problemas abiertos, asumidos como propios y personales, facilita la absorción de datos, ideas y estímulos del exterior. Nos permite estar abiertos y receptivos.

Dualidad individualidad/grupo. Las ideas son el última instancia de personas individuales, pero en el proceso que las produce el trabajo en grupo puede ser determinante. Incluso un individuo solo puede simular el trabajo en grupo extendiendo el trabajo en el tiempo. Lo que hoy nos parece poco importante la próxima semana nos

puede parecer una gran idea. Esto está relacionado con la llamada fertilización cruzada, combinar aportaciones de varias personas o de una en varios instantes de tiempo.

Trabajo en equipo. Para que un grupo sea creativo la jerarquía debe desaparecer o quedar reducida a un mínimo (no confundir jerarquía con liderazgo). La responsabilidad debe estar repartida. La información debe fluir en todos los sentidos sin restricciones. La comunicación debe ser abierta y fluida, sin trabas, aunque haya posturas antagónicas (que pueden ser muy positivas). En la fase de creación está prohibido criticar las ideas de los demás, todas deben tenerse en cuenta hasta la fase final de análisis. Las mejores ideas suelen ser la que necesitan más tiempo para ser aceptadas.

Reuniones. Para que una reunión sea eficaz debe convocarse con tiempo suficiente. Todos los asistentes deben conocer con antelación los objetivos (quizás resumidos en una sola frase), la duración y quizás algo de información relevante. De esta forma los convocados trabajarán de forma inconsciente en los objetivos desde la misma convocatoria. Sabiendo la duración los asistentes podrán ajustar sus planes y no estarán en la reunión pensando en cuándo acabará. Durante la reunión tiene que haber un organizador. Se deben apuntar las ideas en una pizarra sin descartar ninguna. Idealmente debería haber alguien ajeno al tema que aporte una visión ingenua, desde fuera, fresca. También un representante de los interesados en el resultado final. Forasteros. Escuche a los forasteros, los invitados, la gente de fuera para enriquecerse con sus puntos de vista. Ellos verán cosas que usted no ve. Tranquilidad. Contra lo que se suele creer, la tensión y la presión no suelen conducir a buenos resultados. En especial la creación necesita tiempo para las fases de estudio, incubación y análisis que deben respetarse. Si nos apresuramos corremos el riego de acudir al pensamiento común.

Romper con la rutina. La rutina es enemiga de la creación. Procure romper con ella haciendo cosas nuevas. En ciencia este papel lo pueden cumplir la asistencia a congresos o estancias de investigación, aunque la ruptura con la rutina no tiene porqué ser solo de carácter científico. Viajes, cursos variados pueden ser muy útiles.

Interdisciplinaridad. Lo que aprendemos de un tema puede ser trasladado a otro (soluciones en física cuántica sirven para óptica y viceversa) y en cualquier caso nuestra actividad en otros temas puede ser un desencadenante de ideas en otro tema distinto por analogía.

Cuestionarlo todo. Cualquier supuesto debe ser encontrado y cuestionando. El problema debe ser desnudado. Hay que dudar de lo que nadie duda. Disminuir la certeza que tenemos sobre lo que son las cosas (o mejor dicho, lo que nos parecen ser) aumenta nuestro conocimiento de lo que pueden llegar a ser. Preguntar ¿por qué? Es un abridor de mentes y fuente de ideas.

Desaprenda. Creer que se sabe todo, que todo está hecho es mortal para la creatividad. Convénzase de que es un ignorante (realmente lo es) y que puede dejar de serlo si se lo propone. Sea un principiante. La mente de un novato está llena de posibilidades nuevas, de cosas que podrían ser y que no están en la mente del que se cree experto. Según un dicho Zen “A la mente del principiante se le presentan muchas posibilidades; a la del experto, pocas”. Despídase. Cuando tenga unas horas o días libres simule que acaba de ser despedido, que ha dejado su trabajo o sus estudios. Vague pensando en qué hacer con su futuro,

piense en lo que le gustaría haber cambiado de su trabajo, lo que lamenta no haber hecho. Después readmítase.

Chistes. La creatividad es como un chiste. La conclusión sorprende (la risa es una señal de sorpresa) pero concuerda lógicamente con las premisas, aunque de una forma que nunca hubiéramos esperado, nueva, original.

Frases célebres Las frases célebres suelen ser de atribución dudosa. Como lo que importa es el contenido, he preferido omitir la autoría y representar los presuntos autores por sus imágenes de forma desordenada. ------------------------- ☺ Los conceptos científicos son creaciones libres del espíritu humano. Y, al contrario de lo que se podría creer, no son únicamente determinados por el mundo exterior. ☺ Creatividad es permitirse cometer errores y arte saber cuales conservar. ☺ Todo lo que podía inventarse ya se ha inventado (1899). ☺ No he fallado nunca, he encontrado 10000 formas de que no funcione. ☺ Una experiencia nunca es un fracaso, pues siempre viene a demostrar algo. ☺ He fallado una y otra vez en mi vida, por eso he conseguido el éxito. ☺ Equivócate, equivócate y vuélvete a equivocar pero cada vez equivócate mejor. ☺ Hace planes el montañés y le salen todos al revés. ☺ Si no puedes resolver un problema es que estás siguiendo las reglas. ☺El que busca no debe dejar de buscar hasta tanto que encuentre. Y cuando encuentre se estremecerá, y tras su estremecimiento se llenará de admiración y reinará sobre el universo. ☺ La suerte favorece a las mentes preparadas.

Bibliografía

Usted puede ser lo bueno que quiera ser, Paul Arden Pienses lo que pienses piensa lo contrario, Paul Arden Ideas para tener ideas, Agustín Medina Si funciona cámbialo, Franc Ponti, J. M. Ferrer-Arpí Serendipity, Guzmán López Pasión por innovar, Franc Ponti, Xavier Ferrás Creativity in Science and Engineering, Ronald B. Standler Re-think: piensa diferente, Nigel May Barlow Intuición estratégica, William Duggan De la guerra, Carl von Clausewitz Sleep inspires insight, U. Wagner, S. Gais, H. Haider, R. Verleger, J. Born, Nature vol. 427, p. 352, 22 enero 2004. On Making the Right Choice: The Deliberation-Without-Attention Effect A. Dijksterhuis, M. W. Bos, L. F. Nordgren, R. B. van Baaren, Science Vol. 311 no. 5763 pp. 1005-1007, 17 febrero 2006: