Robinson Mora Montecino (Linares 1947), estudia Artes Plásticas en la Universidad de Chile. En 1971 se radica en Coyhaique, capital de la Región de Aisen, en la Patagonia Chilena, donde desarrolla su obra pictórica ejerciendo parale-lamente la docencia. En el país expone colectivamente desde Arica a la Antártica y , en forma individual, desde Copiapó a Punta Arenas, incluida una exposición antológica en el Museo Nacional de Bellas Artes. En el exterior ha participado, entre otras muestras, en las Bienales de Sao Paulo y Alejandría, realizando además cinco exposiciones individuales. Ha obtenido más de quince premios y distinciones, entre ellos el Premio de la Crítica. En los tres años recientes ha presentado exposiciones individuales en Concepción, Temuco, Valparaíso,Chile Chico, Cochrane y Guadalajara.

“En otras ocasiones me han solicitado que hable desde esta misma posición, física y simbólica, y con un mismo objetivo: interpretar-analizar unas obras-expresiones o productos artísticos (conceptos a gusto), aunque variando el objeto-bien cultural a contemplar-analizar-interpretar.

Pues bien, en esta ocasión, este ejercicio gustoso, ha sido también tenso y difícil, un tanto agotador; ahora bien, lo gustoso sin agotamiento no gusta tanto.

¿Por qué la tensión, por qué la dificultad? Porque a medida que contemplaba las obras, el silencio y la ausencia de referentes se iba apoderando de mí; estas ausencias causaron las dificultades indicadas. El cuadro sólo cabía dentro del cuadro, sólo el cuadro desde sus límites hablaba. Difícil hablar por tanto desde lo que él no es.

ROBINSON MORA

por Mario Samaniego SastreDecano de la Facultad de Artes, Humanidades y Ciencias Jurídicas y Sociales, de la Universidad Católica de Temuco

Fotos del artista: gentileza www.portaldelarte.cl

Este ejercicio ha sido agotadoramente constructivo para un no pintor: ejercicio de enseñanza sobre la naturaleza de las artes y en mi caso de la filosofía y las ciencias sociales. Ejercicio que enriquece los límites, diálogos e inconmensurabilidades entre estas distintas producciones humanas.

Me explico: para este no pintor, tres son los resortes que existen para establecer un enunciado sobre un cuadro (otra cosa es la vivencia de la relación con el cuadro, sólo sentida, no comunicada y menos articulada en los límites del lenguaje). Uno primero es lo que podría denominarse una hermenéutica sociocultural de la obra. La obra como hija de su tiempo y como dadora de sentido a su tiempo; el texto y el contexto, el discurso y la acción. Segundo, la estética como construcción teórico-conceptual referida a lo bello y al arte, ello por formación profesional. Tercero, aunque suene a estética

kantiana y por lo tanto no fuera un tercer resorte, la sensibilidad como instancia con potencialidad para articular un enunciado sobre la obra. Habría un cuarto facilitado por el hecho, el simbolismo indicado en la quinta o sexta línea leída, de representar esta facultad y por tanto vincular la obra con los desempeños que se generan y desarrollan en ésta.

La tensión y gustoso agotamiento, proviene del luminoso descubrimiento que estas obras provocan: los cuatro resortes entran en crisis. Ninguno de ellos puede hablar sobre lo que aquí contemplamos. La crisis de los resortes devienen en un silencio inmenso, tal como la inmensidad de la luz y formas de los cuadros de Robinson Mora.

Imagen TÓleo sobre tela75 x 65 cm.2006

Imagen CTAÓleo sobre tela120 x 112 cm.2007

Mirador MFÓleo sobre tela120 x 112 cm.2004

Imagen TLRÓleo sobre tela75 x 65 cm.2005

Panorama CCVÓleo sobre tela75 x 65 cm.2005

Registro DÓleo sobre tela75 x 65 cm.2006

Pictoscopio CTÓleo sobre tela75 x 65 cm.2005

Imagen CWÓleo sobre tela120 x 112 cm.2006

Panorama JNSÓleo sobre tela120 x 112 cm.2007

ElementosÓleo sobre tela120 x 112 cm.2007

Galería Trece: Av. Nueva Costanera 3980, Santiago Teléfono: 378 1981 galeria13@galeria13.cl www.galeria13.cl

Fotografía: Patricia Novoa