Los dioses griegos Su apariencia es igual a
las de los seres humanos.
Eran inmortales, no pasaban enfermedades y eran eternamente jóvenes.
Tenían sentimientos humanos como el amor o la envidia.
Vivían en el monte Olimpo.
Tenían un inmenso poder, pero todos, incluso su rey que se llamaba Zeus estaban sometidos al destino.
Sus relaciones con los hombres se basaban en un pacto (trato), a cambio de que les adoraran ellos protegían a su ciudad.
ZEUS Tras su victoria, Zeus (Júpiter)
es proclamado rey de los dioses y, tras casarse con su hermana Hera, reparte su reino entre sus hermanos; a Poseidón le cedió el reino de los mares, a Hades el mundo subterráneo y para sí mismo el mundo de los cielos. Por este motivo se le representa con el rayo, un águila y un cetro.
En su honor se celebraban los Juegos Olímpicos cada cuatro años en su santuario de Olimpia.
HADES Hades (Plutón), dios del
inframundo casado con
Perséfone al que se
representa como un dios
implacable, pero no malo,
que deja entrar las almas en
su reino, pero no salir.
DEMÉTER
Deméter (Ceres), diosa de la
agricultura, representa la
fertilidad de los campos
cuando su hija Perséfone la
visita durante seis meses, y la
esterilidad cuando su hija la
abandona.
PERSÉFONE
Perséfone es hija de Zeus y
de Deméter. La joven
doncella, también
llamada Kore, es raptada
por Hades que la obliga a
casarse con él, y se convierte
en la reina del Inframundo.
HERMES Hermes (Mercurio) es el
dios de la magia, de la buena suerte, del arte de robar, de los comerciantes y la picardía.
Se le representa con alas en su sombrero para poder desplazarse con rapidez.
También es un joven hermoso y amable que protege a los atletas.
Características de los mitos Son una forma primitiva de explicar el mundo a través de
historias inventadas.
Se desarrollan dentro de una tradición.
Son atemporales, se sitúan fuera del tiempo y de la historia.
Los personajes de los mitos son siempre dioses o seres
superiores a los hombres que influyen en el destino de
éstos.
El mito del rapto de Perséfone y el origen de las cuatro estaciones
Perséfone fue raptada por Hades, mientras recolectaba
flores junto con algunas ninfas (diosas de la naturaleza).
Hades la llevó al inframundo y la convirtió en reina del
mismo.
Deméter desesperada salió en su búsqueda sin éxito, y
trajo la hambruna y caos a la Tierra.
Zeus envió a Hermes a rescatar a Perséfone y obligó a
Hades a devolverla.
El rapto de Perséfone y las cuatro estaciones
Hades, mediante engaños, logró que Perséfone comiese
algunas semillas de granada.
Por cada una de estas semillas, Perséfone debió volver un
mes al año al inframundo.
Cuando Perséfone se marchaba al inframundo, la tierra se
marchitaba y no crecía vegetación alguna.
Y cuando ella estaba junto a su madre, Deméter, todo
volvía a florecer.
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