PACIO D
JOSE SARAMAGO: BRILLANTE
SÍNTESIS DE LITERATURA YPOLÍTICA
Introducción
A pesar de las críticas, los ptemiosNobel aún son los reconocimientos
más distinguidos en ciencia, liferaturay economía a nivel mundial. Así, añocon año vemos desñlar entre los ga
lardonados a eminentes científicos de
las distintas áreas que la AcademiaSueca estimula y cuyas contribuciones
en el avance de la física, la química, lamedicina y la economía son componentes fundamentales pata edificarelconocimiento, que el hombre ha venido construyendo desde el tiempo delas grandes civilizaciones de la anti
güedad. Dentro de este notabilísimoconjunto se incluye a los literatos. Laliteraturaes un campo que va,en cierto sentido, mucho más allá de la cien
cia, va a la esencia humana, en donde
se albergano soto elconocimientodelmundo, sino la sensibilidad e imagi
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Leticia Heuas Gómez"
"Si la voz "" -fí'w de algo, mivoz es vuestra voz "José Saramago a los indígenas tn Acteal, México, 1998.
nación exclusivas del ser humano. Ser
literato es permitirsela posibilidad depenetrar en el alma del hombre pormedio de la palabra, pero es también
dejar hablar a aquellos a quienes noles está permitido.Y cuando por medio de la literatura les damos voz, ésta
se vuelve compromiso social. El presente ensayo intenw reflexionar, a pro
pósito de José Saramago, quien obtuvo el Premio Nobel de Literatura en
1998, acerca de las posibilidades dediclio arte en el terreno de un quehacer social que busca condiciones de
equidad y justicia paralos pueblosdesplazados del mundo posmoderno.
I. El literato y la literatura
Además de un magistral dominio dela lengua, Siuamago es portador de unpensamiento social que reivindica alser humano, que pone por delante la
dignidad existencia]. Este escritor noutiliza la palabra como adorno literario, la usa para expresar voces que detan poco escuchadas parecen olvidarse por quienes participan en la fiestadel progreso, es decir, los países ricoso las clases pudientes de los paísespobres. El autor apunta:
".. .las miserias del mundo están ahí,
y por tanto, sólo hay dos modos dereaccionar ante ellas. O entender queuno no tiene la culpa y por tanto encogerse de hombros y decir que noestá en sus manos remediarlo, o bien,
asumir que aun cuando no está ennuestras manos resolverlo, hay que
coraporrarnos como si así lo fuera."{LaJomada, diciembre 3,1998)
La obra literaria de José Saramago
• Ceairo ¡it Estudias de ¡a Universidad, UAEM.Paseo Talhcan 1402, Ciudad Universilaxia, Tohua,
Méxko. C P. 50110. Tekjax (72) 14 55 51.Correo eliclrónico: [email protected]
J 6 S ¡ sarama h r i I l a n i t s i n t l i t -e r p a l ! t i c o
se encarga de hablar por los oprimidos. Nadie le pide el compromiso, loasume como principio ético. La literatura dejade ser así palabrería elegantey se convierte en artilleríade los pueblos que no se quieren ver ni siquieraa ellos mismos.
Saramago forma parte de los escritores con una postura social y política
muy cercana a los humildes. En suslibros se encuentran las vivencias de
los no importantes según el criterioanglosajón, de aquellos que son considerados como "grises" en socieda
des apuradas por el éxito económico,por el prestigio social o por el afán dedominiopolítico. Don José, por ejemplo, el personaje central de su novelamás reciente, Todos los nombres (."Mía-
guara, 199li)es cualquier don José, es
un don José con un apellido indeterminado, un don José que podemosencontrar en todas nuestras pequeñas
ciudades. Don José no es un protagonista ai e.stilo norteamericano, no gana,
no mata, no tortura, no engaña; pero
representa la esencia de su propio
mundo y Saramago lo relata con lamisma sencillez que don José lo haría
para sí mismo. Ese es el genio deSaramago, permitirnos entrar enla autenticidad cultural de nuestros pueblos.
El primer escritor de habla portu
guesa premiado con el Nobel utilizano la palabra simple,la que describe yexplica el acontecer terrenal, sino laque manifiesta la riqueza y profundidad de los sentimientos de hombres ymujeres, cuya expresión a veces sólolos literatos alcanzan a interpretar. La
narrativa de Saramago, que se carac
teriza por contar con enormes recursos imaginativos, forma parte de lomás destacado dentro de la literatura
mundial de este siglo.Saramago nació en 1922 en una al
dea de Ribetejo, en Portugal, hijo de
una familia de labradores y artesanos.Inició en 1947 su carrera literaria, al
mismo tiempo que militó en las filasdel partido comunista portugués. Laconjunción de ambos hechos permi
VWk IKOUdIOUMO.Uli
tió al escritor revelar, además de sus
amplias dotes literarias, una reciaconvicción política, que ya perfilaba un
hondo compromiso con Itjs oprimidos. La maj'or parte de sus obras reflejan este contenido.Saramago tieneen su haber una treintena de obras,
entre crónica, novela, poesía, cuento,teatro, y hasta una serie denominadaCuadernos de Lanzarole, lugar de lasCanarias donde actualmente él reside.
Casi todos sus textos han sido tradu
cidos al español y a la mayoría de los
idiomas.
Por su contenido político y social,las obras más polémicas de tal autorson: Leiwitadn do chao {Alisado düsuelo,
1980), novela que denuncia la represión salazarista contraioscampesinosylos sindicatos agrarios de su país; OEtmgellso segundo Jesns Cristo {Elenange-
liosegún Jesncrisío, 1991) texto que cau
só gran escándalo y por la que el escritorportugués fuevituperado por lasautoridades oficiales de la iglesia católica; Ensaio sobre a c^neira {Ense^sobre la cunera, 1995)que es una fábulasobre la falta de humanidad en el
mundo actual. La novela más reciente.
Todos osnomes (IJodos los nombres, 1998)
evocalamaquinima burocrática ala quese enfrenta el hombre común en una
sociedadprofundamente identificadacon las jerarquías de poder.^
Desde 1979, Saramago ha sido distinguido con un gran número de reconocimientos en su país nand y en elextranjero. En Portugal ha obrenidonueve, entre los que se incluyen elPremio de ia Asociación de Críticos
Portugueses por^J NaVr, 1979;el Premio de ia Ciudad de Lisboa por la
nové-A Aleadodelsiielo,m 1980;el Premio Dterario del Municipio de Lisboa
por la obra El memorial delconnento, en1982; el Gran Premio de Novela de la
Asociación Portuguesa de Escritores
por Elevan^os^ímJesncrisío, en 1992.Asimismo, en Italia e Inj^aterra obtu
vogalardones porlasnovelas /_¿t muertedeRicardo Reis yAleadodelsuelo. Por eltotal de su producción literaria ha acumulado cinco reconocimientos, el úl
timo de ellos es el Nobel de Literatu
ra. Igualmente, en Francia se le otorgó en 1991 la condecoración de Caballero de la Orden de las Artes y lasLetras Francesas y en su país de origen se le nombró Comendador de laOrden Militar de Santiago de Espada
(1985).El escritor portugués que no llegó a
terminar sus estudios universitarios ha
sido nombrado Doctor Honoris Cansa
por la Universidad de Turín (Italia,1991), por la Universidad de Sevilla(España, 1991) y por la Universidadde Manciiester (Inglaterra, 1994). Haimpartido conferencias en 15 países
de Europa, América y África, desdeHamburgo hasta La l-Iabana, pasando por los países nórdicos y ios Estados Unidos, siempre con auditoriosávidos de un discurso literario nove
doso y polémico como lo es el deSíUramago.
Es evidente que lahechura de nue.s-ti'o autor no es casual, en él se sinteti
zan brillantemente la destreza litera
ria y la convicción política. Tanto laobra como los premios recibidos revelan una trayectoriaconsecuente con
una idea política y social central: elpermanente compromiso con los oprimidos del mundo. El Premio Nobel
lomerece porsus letras, pero tambiénpor sus convicciones. Los poetas no
son inmunes a las condiciones de in
justicia de nuestros pueblos. A vecesson sus únicos portavoces auténticos.
1. Lalista complet» inctiiyt;: poesía,cróak'a,
viajes, Lealio, ciiaduraos, cuento y iiovelil.
Un total de 28 obias publicada*.
CIENOIA ERSO SUM 97
El mejorejemplo de ello son las palabras dichas por Saramago en su visitaa Chiapas, México, en 1997: "Me lle
vo no sólo el recuerdo, me llevo la
palabramisma... la p;ilabr,i Chiapas nofaltaráni un solo día en mi vida" {Laremta, 1997). Estas frases significanmudio más de lo que a la letra se lee,ahondemos un poco más en la sensibilidad social que el autor expresa através de ellas.
II. El literato y la política
Cuando la literatura se levanta ante la
injusticiasocial o ante la opresión política, no sólo tiene una enorme cali
dad, sino que trasciende sus propioslímites y promueve la conciencia so
bre lo humano. No es casual que,porlo menos en América Latina, las opiniones más respetadas sobre los regímenes políticos provengíui de escritores. Octavio Paz en México yPabloNeruda en Chile, son ejemplos de escritores que ejercieron una crítica, aveces la única posible, hacia gobiernos opresivos. Su respectiva obrapoética y literaria ha ocupado un lugardistinguido en las letras latinoamericanas, tanto por su calidad como porla posición políticade los autores. Vivimos los poemas de Neruda, pero almismo tiempo recordamos sudignísimo papel frente a la dictadura.Octavio Paz nos mostró con su es
pléndida prosa nuestra auténticamexicanidad, además de que todosrecordamos su intachable posiciónante el gobierno de Díaz Ordaz en
octubre de 1968.
Los artistas de esta ralla participanen la denuncia del estado de injusticiade nuestros pueblos a través delapostura política y social que asumen ensu producción literaria desde el momento en que tras ella hayuna identi
ficación con las colectividades marginadas.Existe, por tanto,un alto gradode humanismo en su apreciación delos hechos, algo casi impo-sible paraquienes toman las decisiones en el te
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rreno político, o para las ciencias encargadas de estudiar este ámbito, La
visión de mundo es expresada conmucha más sensibilidad en la literatu
ra, que la remitida por el cúmulo deinformaciones convencionales, siem
pre permeadas por las estructuras económicas o políticas vigentes y domi-nsintes. Ese tipo de observación es laque Saramago llevóa cabo en Acreai,Chiapas,en 1997.
En marzo de ese año, al darse a co
nocer la visita de Saramago a México,
un vocero del gobierno mexicano ad
virtió al novelista que "... se limitaraa hablar sobre cuestiones específicasde literatura." Y agregó después;"Mientras se mantenga dentro de lasleyes de México, tierra en la que responderá mudias preguntas,no fendríiproblemas" (Turdó, 1998). Una ame
naza ciara hacia la posición políticaque el escritorasumiría al conocerporcuenta propia la situación de Chiapas,y que sólo pudo expresar al salir delpaís. Ya en el exterior, Saramago dijosobre ese estado del sureste mexica
no: "... nunca, aún cuando como es
critor imaginocosas terribles, lie creído que podía vivir así un pueblo." Yopinó sobre laguerra: "... cuando unbando es un ejército paramilitar, protegido por las fuerzas armadas regulares, yamenaza con un arsenal al otro
bando, que es un pueblo indígena,gente que no tiene ni aguapara beber,eso, eso no es una guerra. Hay un solo
bando confrontado" {fbid'). La sencillez, pero al mismo tiempo la hondurade susobservaciüne.s, podrían constituir un enorme legajo de estudiossobre esa realidad, sin embargo, sóloSanimago puede explicarlo así, conesabrillante síntesis políticay literaria.
También hablóde que el pueblodeMéxico "... tiene que reclamai- a sugobierno una paz justa y digna... nopuede quedarse parado, dejando quelos gobernantes lo decidan todo, hayque bajarala calle... no estoypidien
do un levantamiento sino simplemen
te que las conciencias se manifíesten-
estoy pidiendo una insurrección moral, desarmada, étnica..." (Líí V,£visla,
1997). Era evidente que el gobiernomexicano no permitiría la difusión deestas ideas. Lo cual muestra la gran
censura que todavía existe. Pero ade
más, indica el temor de las autorida
des por las opiniones del Nobel de literatura. Advertido así, e inviado a
México a la xix Feria Internacional
del Libro, se limitó a hablar de litera
tura. Ante esto surgen varias preguntas: ¿Puede expresarse así la obra de
Saramago?, ¿su producción artística
carecede concienciasocialypolítica?,¿es que sus novelas no vierten ideassobre la sociedad, sobre el poder, osobre las misenas de este mundo? Las
respuestas podrían sintetizarse en quesin todo ello no existiría la literatura
de este escritor. La advertencia del
gobierno mexicano refleja una visiónpobre acerca de las posibilidades de
la literatura actual, uno de los ejem
plos más distinguidas lo constituyelaobra deJosé Saramago.
Los espacios de la literatura no se
circunscriben al autor del libro y ailector del mismo, sino que su poderde expansión puede llegara cualquierámbito, incluyendo el político. No esgratuita la actuación de gobiernos represivos frente a la referida manifestaciónartística, sinoque esconsecuente con la rigidez de las estructuras
políticas que los sostienen.Por todo lo anterior los indígenas
de México podrían decir: "Gracias,Saramago, tu x'oz en el mundoes nuestra voz silenciada en este país". !&
HEMEROGRARCAS
La joniíiclíi, Méxicu, diricmbri! 3, 15S)8.
iiiiiudo.i;s/lafi:vÍ5la/numl25/
texios/chiapal
Tutdó, Marcela (1998). ImpV/www.psyche-
nnVegqnte.coni/iiUmeroS/
ji'8e_satíiiiia^o_eii_iiii'XÍOJ