· Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo...

96
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA MISIÓN MÉDICA CUBANA ESTADO ARAGUA COMPORTAMIENTO DEL INFARTO AGUDO DEL MIOCARDIO EN EL MUNICIPIO JOSÉ ÁNGEL LAMAS. 2007. Autores: Dra. Katia Ivia Prado Almaguer Especialista de primer grado en Medicina General Integral. Máster en Urgencias Médicas en APS Dr. Enrique Únzaga Pestano Especialista de primer grado en Medicina General Integral. Máster en Enfermedades Infecciosas Tutora: Dra. Marlen Álvarez Delgado Especialista de primer grado en MGI Máster en Medicina Bioenergética y Natural Profesora Asistente Asesora: Dra. Sonia Pestano Reyes Especialista de primer grado en Salud Ocupacional Profesora asistente

Transcript of  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo...

Page 1:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MISIÓN MÉDICA CUBANA

ESTADO ARAGUA

COMPORTAMIENTO DEL INFARTO AGUDO DEL MIOCARDIO EN EL

MUNICIPIO JOSÉ ÁNGEL LAMAS. 2007.

Autores:Dra. Katia Ivia Prado AlmaguerEspecialista de primer grado en Medicina General Integral.Máster en Urgencias Médicas en APSDr. Enrique Únzaga Pestano Especialista de primer grado en Medicina General Integral.Máster en Enfermedades Infecciosas

Tutora: Dra. Marlen Álvarez DelgadoEspecialista de primer grado en MGIMáster en Medicina Bioenergética y NaturalProfesora Asistente

Asesora: Dra. Sonia Pestano ReyesEspecialista de primer grado en Salud OcupacionalProfesora asistente

Page 2:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

ÍNDICE

CAPÍTULO PÁGINA

INTRODUCCIÓN 1

MARCO TEÓRICO 5

OBJETIVOS 34

PROCEDIMIENTOS Y MÉTODOS 35

ANÁLISIS Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS 39

CONCLUSIONES 49

RECOMENDACIONES 50

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 51

Resumen

Page 3:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Se realizó un estudio observacional, descriptivo de corte transversal en pacientes

ingresados con diagnóstico de Infarto Agudo del Miocardio en la unidad de

cuidados intensivos del Centro de Diagnóstico Integral ¨Luchadores por la salud

de Lamas¨, del Estado Aragua, con el objetivo de caracterizar el comportamiento

de esta patología, teniendo en cuenta algunas variables epidemiológicas, durante

el período comprendido desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2007. El

universo estuvo constituido por el total de pacientes que ingresaron con ese

diagnóstico (13) durante ese período. La información se obtuvo a través de la

revisión de las historias clínicas. Los resultados de la casuística fueron semejantes

al comportamiento epidemiológico de la enfermedad en cuanto a edad, entre 61 y

80 años (53.85%), el sexo masculino predominó (69.23%). Se destacaron la

hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la

enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

presente en el 100% de los casos estudiados. Predominaron los de cara inferior

(46.15%) y la insuficiencia cardiaca como complicación (38.46%), la mortalidad fue

alta (69.23%). Se sugirió insistir en el control de los pacientes con factores de

riesgo, así como instruirlos sobre los síntomas precoces del infarto para su rápido

tratamiento y continuar realizando actividades de promoción de salud para

promover estilos de vida saludables.

Palabras claves: INFARTO AGUDO DEL MIOCARDIO, ESTUDIO

EPIDEMIOLÓGICO.

Page 4:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

I. INTRODUCCIÓN

Las enfermedades cardiovasculares constituyen la principal causa de muerte en el

mundo. En el año 2005, causaron alrededor del 30 por ciento del total de las

muertes a nivel mundial. Son causa de la mitad de las muertes en Europa, y el 40

porciento de las muertes en los Estados Unidos. En la actualidad, el 31 por ciento

de todas las muertes en América Latina y el Caribe son causadas por las

enfermedades cardiovasculares y dentro de éstas, el Infarto Agudo del Miocardio

(IMA) ocupa un lugar significativo.(1)

Se pronostica que en América Latina, durante la primera década del siglo XXI,

las enfermedades cardiovasculares causarán 20.7 millones de muertes. Cerca del

23 porciento de estas muertes ocurrirán en personas menores de 60 años, lo que

representa un indicador de muerte prematura, que puede ser prevenida. Por lo

que hoy más que nunca, la prevención y temprana detección de estas

enfermedades representa un aporte significativo para mejorar la calidad de vida de

las personas. (1,2)

Según la Guía Europea para la Prevención Primaria de las Enfermedades

Cardiovasculares, aprobada en noviembre de 2006 por el Comité Asesor y

Coordinador en Ciencia de la European Heart Association, la prevención primaria

se define como la orientación dirigida a individuos sin enfermedad cardiovascular

conocida. El primer objetivo de la prevención, es evitar la aparición de los factores

de riesgo. Según esta guía, el médico debe educar a sus pacientes para que

Page 5:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

adopten hábitos de vida sanos que impidan que esos factores se intensifiquen.

Esta educación debe estar orientada a todo el grupo familiar. (3)

Idealmente, la prevención de los factores de riesgos empieza en la niñez. Prevenir

el tabaquismo en los niños y adolescentes es un objetivo fundamental. Otra meta

importante es evitar el sobrepeso y la obesidad en los niños y los adultos; el

sobrepeso es un elemento central de otros males, por ejemplo, la hipertensión

arterial, la diabetes y el sedentarismo. Se debe recomendar a los pacientes y sus

familias que disminuyan la ingesta de colesterol y grasas saturadas de origen

animal, empleando, en su lugar, aceites vegetales, y adoptando el hábito de comer

raciones más pequeñas.

Los altos niveles de colesterol LDL (colesterol malo), los altos niveles de

triglicéridos, los bajos niveles de colesterol HDL (colesterol bueno) son un factor

de riesgo en la enfermedad cardiovascular. La Diabetes: este desorden del

metabolismo de la glucosa incrementa el riesgo de las enfermedades

cardiovasculares como el infarto. Los fumadores tienen concentraciones

significativamente más altas de colesterol, triglicéridos y colesterol LDL (malo). (4)

Según los datos del registro ARIAM (Factores de riesgo para infarto agudo de

miocardio), realizado en el 2006, se confirma que los factores de riesgo como la

hipertensión arterial, el trastorno de las grasas y la diabetes, sin olvidar que

también la obesidad, el sedentarismo y una historia familiar con enfermedad

coronaria se asocian con el infarto agudo del miocardio. (5)

Page 6:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

El infarto agudo del miocardio es la necrosis isquémica del músculo cardíaco, que

generalmente es consecuencia de la brusca reducción de la perfusión coronaria a

un segmento miocárdico. Su patogénesis está relacionada con la presencia de un

trombo intraluminal que se desarrolla sobre una placa ateroesclerótica complicada

y que desencadena la oclusión total de la arteria implicada en la mayoría de los

casos.

El síntoma característico es el dolor retroesternal (85% de los casos), opresivo,

intenso, con sensación de muerte inminente, con irradiación al cuello, hombros,

maxilar inferior, brazo izquierdo o ambos brazos (borde cubital). Con frecuencia se

irradia al dorso. Habitualmente dura más de 30 minutos, puede prolongarse por

varias horas. Aparece en el reposo o durante el esfuerzo y no se alivia ni con el

reposo ni con los vasodilatadores. Generalmente se acompaña de reacción

adrenérgica o vagal. (6)

Cabe destacar, además, que alrededor del 30 por ciento de los pacientes con

infarto agudo de miocardio fallece antes de recibir atención médica;

aproximadamente el 10 por ciento muere durante la internación, y entre el 4 y el

10 por ciento en la evolución posterior. (1, 7,8)

Por eso resulta imprescindible que la persona infartada llegue a un centro

asistencial lo más rápido posible, ya que se cuenta con una “ventana de tiempo”

para poder rescatar al corazón de su muerte. Cuanto más tiempo pasa, menos

posibilidades hay.

Page 7:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Ante la sospecha de un infarto agudo del miocardio las acciones que se deben

realizar en forma inmediata consisten en reconocer las señales, suspender toda

actividad, acostarse aunque sea en el piso, y llamar al servicio de emergencia o

trasladar a la persona afectada hasta el centro de salud más próximo. (9)

Es mucho lo que se ha investigado y publicado sobre enfermedades

cardiovasculares y, especialmente, sobre infarto. Pero más allá de los avances

que se han obtenido, los especialistas no dejan de insistir en la necesidad de

tomar conciencia acerca de la importancia de modificar el estilo de vida. En ello,

aseguran, estaría la clave para vivir más años y con mayor calidad.

En Venezuela, en el año 2007, las enfermedades cardiovasculares constituyeron

la primera causa de muerte, y de ellas el 30 % correspondió al IMA, de igual

manera se comportó la incidencia de este evento en nuestra comunidad, pues con

la llegada de la Misión Barrio Adentro II, se instauró el Centro de Diagnóstico

Integral (CDI) como parte del servicio de atención médica, en el cual se ha podido

observar la alta frecuencia de este fenómeno; lo que unido a todo lo anterior nos

ha motivado a realizar una investigación dirigida a caracterizar el comportamiento

del infarto agudo del miocardio en el municipio José Ángel Lamas, desde el 1 de

enero al 31 de diciembre de 2007, basándonos en una serie de variables que nos

permitan obtener resultados que nos ayuden a conocer mejor el comportamiento

del mismo, así como dirigir nuestro trabajo prioritariamente a la prevención y

diagnostico precoz, además que le permita a los médicos que laboran

directamente en los consultorios populares conocer los factores de riesgo que

mayormente se asocian a la entidad, y de esta forma poder modificarlos. Este

Page 8:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

trabajo servirá además como un material complementario en el estudio de los

estudiantes de Medicina Integral Comunitaria de nuestro municipio ya que por

primera vez se realiza una investigación que incluya los elementos antes

mencionados.

Page 9:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

II-MARCO TEÓRICO

 Infarto Agudo del Miocardio: Es el término utilizado para describir los cambios

necróticos agudos del miocardio debidos a la privación de forma repentina y

catastrófica del aporte sanguíneo coronario durante un período de tiempo

suficiente, resultado casi siempre de una oclusión coronaria aguda (trombosis,

hemorragia subíntima, o rotura de placa de ateroma). (11)

La OMS estimó que en el año 2002 el 12,6 por ciento de las muertes a nivel

mundial se debieron a una cardiopatía isquémica, que es la principal causa de

muerte en países desarrollados y la tercera causa de muerte en países en vías de

desarrollo, después del SIDA e infecciones respiratorias bajas. En Cuba esto se

comporta de forma similar siendo esta la causa de muerte número 1 en la

población activa. (1,2)

La creación de Unidades Coronarias ha contribuido a disminuir el índice de

mortalidad hospitalaria pero con poca influencia en la mortalidad global, pues el 60

% de las muertes por IMA son precoces y ocurren fuera del hospital, de ahí el

desarrollo de unidades coronarias móviles en todo el mundo incluido nuestro país

para acortar el tiempo entre el inicio de los síntomas y la instauración de un

tratamiento precoz y especializado de esta patología. (12)

Page 10:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

La enfermedad coronaria es más frecuente en hombres de mediana edad. Las

mujeres pasan, como media, de diez a quince años más que los hombres, sin

sufrir una enfermedad cardiaca, pero a medida que envejecen las mujeres

alcanzan a los hombres. De hecho, las mujeres tienen más probabilidades de

sufrir angina que los hombres. Por lo que se refiere a la edad, los índices de

supervivencia por ataques cardiacos son similares en hombres y en mujeres, pero

las mujeres jóvenes tienen un mayor riesgo de muerte por infarto que los hombres

de la misma edad. Los motivos de esto no están claros. (7,8)

Los estrógenos, que parecen proteger al corazón, pueden tener algo que ver, y

puede ser que muchas mujeres jóvenes que sufren ataques cardiacos tengan

niveles de estrógenos inferiores

Las mujeres más jóvenes con enfermedad cardiaca a menudo no tienen los

mismos síntomas que sus homólogos masculinos y es menos probable que se les

diagnostique correcta o agresivamente. De hecho, es menos probable que los

síntomas aparezcan como una angina típica y se hacen a menudo más pruebas a

las mujeres que a los hombres para detectar problemas gastrointestinales. (13)

Los fumadores de entre treinta y cuarenta años tienen un índice de ataque

cardíaco cinco veces mayor que el de los no fumadores de este mismo grupo de

edad. Fumar cigarrillos puede ser el responsable directo de al menos un 20% de

todas las muertes anuales, o de alrededor de 120.000 muertes anuales. Fumar

puros puede aumentar el riesgo de muerte temprana por enfermedad cardiaca,

aunque las evidencias son mucho más concluyentes para los cigarrillos. (4,14)

Page 11:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Una serie de estudios ha demostrado ahora que, reducir las LDL (el llamado

colesterol malo) y los niveles totales de colesterol y potenciar los niveles de HDL

(el llamado colesterol bueno) mejora la supervivencia y previene los ataques

cardiacos. Dependiendo de los factores de riesgo, las personas deberían intentar

llegar a los siguientes niveles de colesterol:

Niveles totales de colesterol: 200 mg/dl o inferiores.

Niveles de colesterol LDL: 160 mg/dl o inferiores. (Cuanto menos mejor).

Niveles de colesterol HDL: 45 mg/dl para hombres y 50 mg/dl para mujeres,

siendo aproximadamente 60 el objetivo (Cuanto más alto mejor).

Niveles de triglicéridos: 200 mg/dl o inferiores. (Aunque hay pruebas que

sugieren que las personas deberían alcanzar niveles por debajo de los 100

mg/dl para reducir el riesgo de enfermedad cardiaca)

Valores para personas con dos o más factores de riesgo de enfermedad cardiaca:

Niveles LDL : 130 mg/dl o inferiores.

Valores para personas con una enfermedad cardiaca existente:

Niveles LDL de menos 100 mg/dl. Se cree también ahora que los niveles

elevados de otros lípidos, incluyendo las lipoproteínas (a) y

apolipoproteínas A-1 y B son importantes indicadores de riesgo cardiaco.

La apolipoproteína B, por ejemplo, puede resultar un indicador muy preciso

del riesgo enfermedad cardiaca en mujeres. (3,6)

Page 12:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

La presión arterial alta, o hipertensión, ha demostrado ser una causa de

enfermedad coronaria desde hace mucho tiempo. Algunos estudios indican que la

normal-alta pone al paciente en un riesgo mayor de sufrir episodios cardiacos y

embolia, aunque otros sugieren que el riesgo existe principalmente en las

personas diabéticas. (4,15)

Las personas sedentarias tienen al menos el doble de posibilidades de sufrir un

infarto frente a aquellas que hacen ejercicio de forma regular. El ejercicio aeróbico

moderado practicado de forma regular beneficia al corazón de diferentes formas.

Por ejemplo, caminar deprisa tiene las siguientes ventajas:

Baja la frecuencia cardiaca y la presión arterial

Mejora el colesterol

Baja los niveles de azúcar en sangre

Abre los vasos sanguíneos y, en combinación con una dieta sana, puede

mejorar los factores de coagulación sanguínea.

Reduce el estrés y mejora el humor.

Algunos estudios indican que para la mayor protección cardíaca, lo que cuenta no

es la duración del ejercicio, sino la cantidad total diaria de energía gastada. Por

tanto, la mejor forma de hacer ejercicio puede consistir en cortos periodos de

ejercicio intenso. Incluso las personas ancianas con angina inestable o que han

sufrido con anterioridad un ataque cardiaco pueden beneficiarse de un programa

estructurado de ejercicio. Los ejercicios que entrenan y refuerzan los músculos del

pecho pueden ser también muy importantes para pacientes con angina. (4,16)

Page 13:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Debe hacerse hincapié en que el ejercicio agotador puede ser una situación de

riesgo de angina e infarto para estas personas. Asimismo, las actividades que

impliquen subir los brazos por encima de la cabeza pueden implicar riesgo, y las

personas que sufren de angina de pecho nunca deben realizar ejercicio después

de comer.

Las personas que tengan factores de riesgo para enfermedad cardiaca deben

buscar la autorización y el asesoramiento médico, y la prescripción de un

programa detallado de ejercicios. Todo el mundo, incluyendo las personas sanas,

deben observar su cuerpo, haciendo caso de las molestias que puedan sentir

mientras realizan ejercicio. (17)

Los infartos de miocardio de corazón representan un 60% y las embolias un 25%

de muertes en personas diabéticas. Un estudio de 1998 informó que los pacientes

con diabetes de tipo 2 y sin historia de enfermedad cardiaca tienen el mismo

riesgo de un ataque cardiaco a los siete años que los no diabéticos que sufren una

enfermedad cardiaca.

La resistencia a la insulina a largo plazo, incluso sin diabetes tipo 2, parece tener

efectos dañinos significativos para el corazón. Este trastorno se produce cuando

los niveles de insulina son de normales a elevados, pero el cuerpo es incapaz de

usar la insulina para regular el metabolismo del azúcar en sangre y guardarlo para

obtener energía. En tales casos, el cuerpo compensa esto aumentando los niveles

de insulina (hiperinsulinemia), que a su vez aumentan los niveles de triglicéridos y

reduce el colesterol HDL. Normalmente, la insulina estimula la liberación de dos

Page 14:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

sustancias, la endotelina y el óxido nítrico, que son importantes para mantener

elásticas y abiertas las arterias. La resistencia a la insulina puede causar un

desequilibrio en estas sustancias. (4,10)

La obesidad está relacionada con la hipertensión, la diabetes, los niveles altos de

colesterol y la falta de ejercicio físico, todos ellos factores contribuyentes al infarto

de miocardio. La obesidad abdominal ("curva de la felicidad") supone un riesgo

mayor. De hecho, un estudio en el 2000 afirmaba que los hombres con una cintura

de más de 90 cm. y niveles altos de triglicéridos (más 2 mmol/L) corren un riesgo

mayor de desarrollar enfermedad cardiaca en los cinco años siguientes.

La obesidad en los niños es un factor de riesgo de futuros problemas cardiacos

mayor que una historia familiar de enfermedades cardiacas. Las personas que

presentan sobrepeso en la mitad de su vida, pueden no reducir completamente el

riesgo de enfermedad coronaria más adelante, incluso aunque pierdan el exceso

de peso. Las personas con sobrepeso u obesas tienen unos niveles elevados de

proteína C reactiva, una sustancia indicadora de un proceso inflamatorio y un

marcador de la enfermedad cardíaca. (4, 18, 19)

Los expertos creen ahora que las grasas pueden tener tanto efectos nocivos como

beneficiosos. Tanto si son nocivas o beneficiosas son ricas en calorías.

Todo el mundo debería limitar e intentar evitar las siguientes grasas:

Grasas saturadas, predominan en productos animales, incluidos la carne y

los productos lácteos. (Los llamados aceites tropicales, como el de palma,

Page 15:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

coco y mantequilla de cacahuete, también son ricos en grasas saturadas.

Sin embargo, no existen evidencias sobre sus efectos en el corazón).

Los ácidos transgrasos, que son creados durante un proceso que pretende

estabilizar los aceites polinsaturados para evitar que se enrancien y para

mantenerlos sólidos a temperatura ambiente. Las grasas hidrogenadas se

usan en la margarina sólida y en muchas comidas rápidas y productos

horneados. (La margarina líquida no está hidrogenada).

La atención pública se ha centrado principalmente en los posibles beneficios de

las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas en los aceites vegetales. Los

investigadores están más interesados, sin embargo, en los bloques más pequeños

de ácidos grasos incluidos en estos aceites llamados ácidos grasos esenciales.

Los estudios indican que un equilibrio sano de todos estos ácidos grasos son

esenciales para la vida:

Ácidos grasos Omega-3.

Ácido alfalinolénico (las fuentes incluyen el aceite de colza, semillas de

soja, aceite de linaza, aceite de oliva y muchos frutos secos y semillas). Los

estudios indican que protege el corazón. El aceite de oliva virgen estuvo

asociado en un estudio con una presión arterial más baja. Muchos estudios

han señalado los frutos secos, que contienen fibra y ácidos grasos omega-

3, como especialmente beneficiosos para el corazón, ya que hacen

disminuir el colesterol LDL y el total sin aumentar los triglicéridos.

Los ácidos docosahexaenoicos(DHA) y los eicosapentanoicos (cuyas

fuentes son el pescado graso y la leche materna) pueden no tener muchos

Page 16:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

efectos en el colesterol, pero pueden beneficiar el revestimiento de los

vasos sanguíneos (endotelio) y así mejorar el flujo sanguíneo.

Ácidos grasos Omega-6. Clasificados además como ácidos linoleico, o

linólicos, las fuentes incluyen aceite de linaza, maíz, semillas de soja y el

aceite de colza.

Ácidos grasos Omega-9: la fuente es el aceite de oliva.

Algunos expertos recomiendan mantener una ingesta relativamente alta de grasas

monoinsaturadas y poliinsaturadas (sobre un 32% del aporte calórico), con una

ingesta de grasas saturadas no superior al 8%. Otros creen que se debe hacer

una dieta muy pobre en grasas, representando un 20% de la dieta y, de ellas, sólo

un 4% saturadas. Otros expertos recomiendan cantidades de grasas entre los dos

extremos. (4, 14, 17)

Las comidas muy ricas en hidratos de carbono tienden a desencadenar episodios

de angina, probablemente por incrementar los niveles de insulina. Un estudio

sugirió, de hecho, que el azúcar podría ser, en las mujeres, un factor de riesgo

más importante que las grasas. Los cereales integrales y las frutas y verduras

frescas (especialmente las de hoja verde oscura), son muy importantes. Son ricas

en fibra, vitaminas y otros nutrientes importantes que protegen el corazón. Las

sustancias químicas naturales de los tomates, ajos, nueces, manzanas, cebollas,

vino y té parecen ofrecer protección para el corazón.

El estrés mental es un importante desencadenante de angina de pecho, igual que

el estrés físico. Los episodios de estrés agudo se han asociado con un riesgo

Page 17:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

mayor de trastornos cardiacos graves, como las alteraciones del ritmo cardiaco, e

incluso la muerte por estas causas en personas con enfermedad cardiaca.

El estrés puede afectar negativamente al corazón de varias formas:

El estrés repentino aumenta la acción bombeadora y la frecuencia cardiaca

y hace que las arterias se contraigan, y por tanto supone un riesgo de

obstruir el flujo sanguíneo que va al corazón.

Los efectos emocionales del estrés alteran el ritmo cardiaco y suponen un

riesgo de arritmias graves en las personas con alteraciones previas del

ritmo cardiaco.

El estrés hace que la sangre se espese (probablemente preparándose para

una lesión posible), aumentando las probabilidades de que un coágulo

sanguíneo obstruya las arterias.

El estrés puede avisar al cuerpo de que libere grasas al torrente sanguíneo,

aumentando los niveles de colesterol, al menos temporalmente.

El estrés puede llevar a un aumento de los niveles de homocisteína.

En las mujeres, el estrés crónico puede reducir los niveles de estrógenos.

Los acontecimientos estresantes pueden hacer que los hombres y las

mujeres que tienen niveles relativamente bajos del neurotransmisor

serotonina (y por tanto, un riesgo mayor de depresión o rabia) produzcan

más cantidad de ciertas proteínas del sistema inmune (llamadas

citoquinas), que en cantidades elevadas causan inflamación y daño celular.

El estrés causa un aumento repentino y temporal de la presión arterial,

aunque los efectos a largo plazo no se conocen del todo.

Page 18:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Depresión. Los estudios indican que la depresión puede tener efectos biológicos

adversos sobre el sistema inmune, la coagulación sanguínea, la presión arterial,

los vasos sanguíneos y palpitaciones. La depresión puede incluso alterar el

cumplimiento del paciente en el tratamiento para la enfermedad cardiaca. En un

estudio de 30 años de seguimiento, se demostró que los hombres que sufrían

depresión clínica tenían un mayor riesgo de enfermedad coronaria y de infarto de

miocardio que los que no estaban deprimidos, manteniéndose el incremento del

riesgo durante décadas. Cuanto más severa sea la depresión, más peligro existe

para la salud, aunque algunos estudios indican que una depresión leve, con

sentimientos de desesperación, sufrida durante años puede dañar el corazón aún

en personas sin ningún otro signo de enfermedad cardiaca. (4,17)

Los efectos del alcohol en la enfermedad coronaria varían dependiendo del nivel

de consumo. Las evidencias sugieren que un consumo ligero o moderado (uno o

dos vasos al día) actúan como protectores para el corazón. Los beneficios

parecen ser mayores en las personas con alto riesgo de enfermedad cardiaca y

son menores en las personas que no presentan riesgos. El consumo ligero o

moderado de alcohol puede incluso reducir el riesgo de muerte súbita de origen

cardiaco y proteger de la enfermedad coronaria a las personas con diabetes de

inicio tardío. Sin embargo, tomar grandes cantidades de alcohol pueden elevar la

presión arterial, desencadenar arritmias y dañar al músculo cardiaco. Los

bebedores de fin de semana tienen un riesgo significativamente más elevado de

urgencias cardiacas.

Los estrógenos parecen tener muchos beneficios para el corazón:

Page 19:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Protegen contra el colesterol no saludable, triglicéridos y otros niveles de

lípidos.

Puede tener acciones directas en los vasos sanguíneos, relajándolos y

abriéndolos y manteniendo liso su interior.

El estrógeno es también un antioxidante. Ayuda a neutralizar los radicales

libres de oxígeno.

Los efectos de los estrógenos en la presión arterial no están claros; los

anticonceptivos orales, por ejemplo, parecen aumentar ligeramente la

presión. Dos estudios realizados en 1999 afirmaban, sin embargo, que el

estrógeno suplementario reducía la presión arterial durante la noche en

mujeres con presión normal.

El estrógeno también afecta a muchos factores de coagulación sanguínea

del hígado; reduce la viscosidad de la sangre (espesor) y puede mejorar la

fibrinólisis, el proceso natural de destrucción de los coágulos sanguíneos.

Los efectos de los estrógenos en la coagulación, sin embargo, son

complejos, ya que también hay un aumento conocido del riesgo de sufrir

tromboembolismo (coágulos sanguíneos que obstruyen un vaso) en las

mujeres que toman estrógenos.

Tras la menopausia, los niveles de estrógenos disminuyen de forma espectacular.

No obstante, la terapia sustitutiva hormonal para las mujeres postmenopáusicas

es problemática. Una serie de estudios han afirmado que los sustitutos de los

estrógenos ayudan a evitar que desarrolle desde el principio la enfermedad

cardiaca. Ni el tratamiento sustitutivo de estrógenos ni los estrógenos combinados

Page 20:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

con progestinas parecen detener la progresión de la enfermedad cardiaca en

mujeres que ya muestran signos de ella. De hecho, los estudios también han

mostrado que el riesgo de ataque cardiaco y embolia es ligeramente mayor en los

dos primeros años de tratamiento. Sin embargo, el riesgo disminuye a

continuación y en un estudio en el cuarto y quinto año, las pacientes con terapia

sustitutiva de hormonas sufrían menos episodios cardiacos. Las razones de este

riesgo más elevado pueden deberse a las acciones de los estrógenos al aumentar

el riesgo de coágulos sanguíneos y posibles efectos proinflamatorios en

determinadas mujeres.

Los factores genéticos están relacionados con el aumento de probabilidades de

desarrollar importantes factores de riesgo (por ejemplo, diabetes, obesidad e

hipertensión arterial). Una variante genética llamada apoliproteína E4 (Apo64)

afecta a los niveles de colesterol, especialmente los relacionados con la

enfermedad cardiaca.

Manifestaciones clínicas

Algunos pacientes presentan manifestaciones prodrómicas caracterizadas por

dolor similar al de la angina clásica, pero en reposo o con escasa actividad física,

razón por la cual se pudieran interpretar como angina inestable. Menos del 10%

de los pacientes hospitalizados por angina inestable desarrollan infarto agudo del

miocardio pero el pródromo más predictivo es un patrón de angina inestable. De

los pacientes con infarto agudo del miocardio que presentan síntomas

prodrómicos, un 25% lo hacen entre 1 a 4 semanas antes. En el 75% restante, los

Page 21:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

síntomas preceden al ingreso en una semana o menos. De este último grupo, el

20% ha presentado pródromo en las últimas 24 horas. Los pacientes con IMA

suelen presentar sensación de malestar o agotamiento junto con el resto de la

sintomatología.  (20, 21)

Las características semiológicas clásicas del dolor del IMA son las siguientes:

localización precordial o retroesternal, aparece en reposo o durante actividad física

escasa, de carácter opresivo, intenso, con duración mayor de 30 minutos, no se

calma completamente con el reposo ni con los nitratos vasodilatadores, puede

irradiarse a los hombros, más frecuentemente el izquierdo y al resto del miembro

superior izquierdo.  Otros sitios de irradiación como la mandíbula, cuello y región

dorsal o interescapular. La actividad física y el estrés mental intensos son

desencadenantes del dolor en una minoría de pacientes (10 a 15%)

En algunas oportunidades el dolor del infarto agudo del miocardio esta localizado

en el epigastrio o bien en las regiones antes mencionadas como áreas de

irradiación. Cuando el dolor se localiza en epigastrio y se acompañan de nauseas

y vómitos, pueden diagnosticarse erróneamente múltiples trastornos abdominales

y este hecho origina confusión diagnóstica. (6)

La presentación del infarto agudo del miocardio cambia sustancialmente con el

incremento de la edad; el dolor torácico es menos frecuente en personas de edad

avanzada. El infarto agudo del miocardio en los ancianos puede expresarse con

sintomatología de insuficiencia cardiaca aguda o empeoramiento de una

insuficiencia preexistente. También puede manifestarse como pesadez en el

Page 22:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

precordio, debilidad general acentuada acompañada de sudoración profusa o

sincope, nauseas y vómitos.  Es importante destacar que en pacientes diabéticos

y/o ancianos el infarto agudo del miocardio puede ser asintomático.

Frecuentemente los pacientes con infarto agudo del miocardio se aprecian

ansiosos e intranquilos y su expresión facial es de angustia, algunos llevan su

mano a la región precordial (signo de Levine) y su piel se presenta pálida, fría y

sudorosa. Estas manifestaciones son más acentuadas en los pacientes con shock

cardiogénico que además presentan cianosis. Cuando la perfusión cerebral esta

comprometida, el paciente se encuentra confundido y desorientado. (6, 22)

Pulso Arterial: puede oscilar entre la bradicardia y la taquicardia. Por lo general el

pulso es regular y rápido, sin embargo, puede ser también irregular por la

presencia de latidos ventriculares prematuros. 

Presión Arterial: los pacientes con infarto agudo del miocardio no complicado

presentan presión arterial normal. Algunos previamente hipertensos ingresan con

presión arterial elevada, otros previamente normotensos pueden presentar

elevación de la tensión arterial que se atribuye a descarga adrenérgica. Pacientes

con disminución del gasto cardiaco y agotamiento de los mecanismos

compensatorios pueden ingresar con disminución de la presión del pulso,

reducción de la presión arterial sistólica y leve aumento de la presión arterial

diastólica. Cuando la disminución del gasto cardiaco es más severa, los pacientes

presentan franca hipotensión arterial con o sin shock cardiogénico. Más del 50%

de los pacientes con infarto agudo del miocardio inferior tienen incremento de la

Page 23:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

actividad parasimpática y cursan con hipotensión arterial, bradicardia o ambas. Sin

embargo, este último grupo de pacientes también puede presentar hiperactividad

adrenérgica con hipertensión, taquicardia o ambas.  (5, 23)

Temperatura y Respiración: La mayoría de los pacientes con infarto agudo del

miocardio extenso pueden presentar fiebre a las 24 o 48 horas del mismo. La

temperatura comienza a elevarse a las 4 a 8 horas y puede tardar en resolverse a

los 5 ó 6 días. La frecuencia respiratoria se eleva discretamente poco después de

instalado el infarto agudo del miocardio.

Pulso Venoso: Generalmente la altura y la forma del pulso venoso yugular es

normal, aún en presencia de insuficiencia ventricular leve o moderada. Los

pacientes con infarto agudo del miocardio complicado con shock cardiogénico

presentan elevación del pulso venoso yugular.

Pulso Carotideo: El pulso carotideo puede ser de poca amplitud lo que sugiere

disminución del volumen latido. El pulso alternante es una manifestación de

severa disfunción ventricular izquierda. El hallazgo de un soplo carotideo ocurre en

los pacientes con aneurisma aórtico disecante y ateroesclerosis carotidea.

Área precordial (inspección y palpación): El impulso apexiano generalmente no se

detecta en las personas sanas pero se hace evidente a la inspección y palpación

en la hipertrofia y dilatación del ventrículo izquierdo que provoca el

desplazamiento del impulso apical por fuera de la línea media clavicular. La

palpación de frémito puede ser manifestación de una ruptura del septum

interventricular. La dilatación del ventrículo derecho (VD) puede producir un latido

Page 24:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

sistólico paraesternal izquierdo. Por otro lado, el taponamiento cardiaco por

ruptura de la pared libre del ventrículo puede producir aumento del área de

matidez precordial. 

Auscultación cardiaca: La auscultación cardiaca puede ser normal, sin embargo

pueden observarse variaciones: El primer ruido (R1) puede ser hipofonético o

inclusive inaudible en la fase aguda del infarto agudo del miocardio. El

desdoblamiento del primer y segundo ruidos puede ser causado por bloqueos de

la conducción intraventricular. El segundo ruido (R2) cardiaco se desdobla

fisiológicamente en inspiración profunda. Sin embargo la auscultación de un

segundo ruido único con desdoblamiento paradójico en la espiración y con

reforzamiento del componente pulmonar constituye un signo temprano de

disfunción del ventrículo izquierdo o bloqueo de rama izquierda.    El tercer ruido

(R3) refleja disfunción ventricular izquierda con elevación de la presión de llenado

ventricular. Su aparición en la fase aguda del infarto agudo del miocardio es un

signo de mal pronóstico. El R3 también aparece por incremento del flujo

transmitral debido a insuficiencia mitral o por comunicación interventricular que ha

complicado al infarto agudo del miocardio. El tercer ruido de la disfunción

ventricular o de la insuficiencia mitral cuando se acompaña de taquicardia causa la

impresión de ritmo de galope.  El R3 y R4 que se originan en el ventrículo

izquierdo se auscultan en la punta. Si se originan del ventrículo derecho se

auscultan mejor en el borde paraesternal izquierdo y se intensifican con la

inspiración.  El R4 esta casi siempre presente en los pacientes con infarto agudo

del miocardio que tienen ritmo sinusal y se auscultan mejor en el borde

Page 25:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

paraesternal izquierdo y ápex. El R4 es más frecuente en pacientes con infarto

agudo del miocardio que tienen disminución de la distensibilidad del ventrículo

izquierdo y elevación de la presión diastólica final, aún en presencia de disfunción

sistólica del mismo. No obstante tiene valor diagnóstico limitado porque se

ausculta en la mayoría de los pacientes que tienen cardiopatía isquémica crónica y

también en algunos adultos mayores sin cardiopatía isquémica. 

La pericarditis que acompaña al infarto con onda Q, produce un frote pericárdico.

Dicho frote es audible en 6 a 30 % de los pacientes con infarto agudo del

miocardio y en mayor porcentaje en los infartos transmurales; generalmente

aparecen al segundo o tercer día del evento, pero también pueden aparecer

tardíamente. El frote de aparición tardía (3 meses), asociado a manifestaciones de

pericarditis es característico del síndrome postinfarto de Dressler.

Examen pulmonar: El paciente generalmente luce eupneico pero la ansiedad y el

dolor pueden causar taquipnea. La insuficiencia cardiaca o el embolismo pulmonar

que complican al infarto agudo del miocardio también producen taquipnea. La

percusión pulmonar es normal excepto cuando el derrame pleural se presenta en

casos de infarto del ventrículo derecho con hipertensión venosa sistémica y el

embolismo pulmonar. La auscultación pulmonar es normal en el infarto no

complicado. Los signos auscultatorios pulmonares de la insuficiencia cardiaca

izquierda y el edema agudo de pulmón son los siguientes: estertores finos

bilaterales de inicio basales que pueden ascender según la severidad de la

insuficiencia cardiaca. Pueden aparecer sibilancias en algunos casos de

embolismo pulmonar. 

Page 26:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Otros hallazgos clínicos: en el lóbulo del pabellón auricular se puede encontrar un

pliegue diagonal (surco de Sokolof-Frank) cuya presencia se ha asociado a la

enfermedad coronaria.

Abdomen: puede haber confusión diagnóstica con patología del aparato digestivo

debido a la presencia de epigastralgia, nauseas y vómitos. Puede estar presente

hepatomegalia en pacientes con insuficiencia cardiaca derecha. Latido epigástrico

y/o supraumbilical, puede encontrarse en pacientes con aneurisma de aorta

abdominal. 

Extremidades: historia de claudicación intermitente y hallazgos físicos de

enfermedad arterial periférica son indicativos de ateroesclerosis sistémica; así la

disminución de los pulsos arteriales y trastornos tróficos de la piel en los miembros

inferiores puede estar asociado a enfermedad coronaria. La palpación de los

pulsos en los miembros superiores puede ser útil en el diagnóstico diferencial del

aneurisma aórtico disecante. (6)

Estudios paraclínicos

Electrocardiograma (ECG): el análisis del ECG convencional de superficie, 12

derivaciones, constituye junto con la clínica, la base fundamental del diagnóstico y

decisiones terapéuticas claves en el Infarto agudo de miocardio. 

La posibilidad de salvación del miocardio avanzado y por tanto de un mejor

pronóstico clínico, esta ligada al inicio temprano de las medidas terapéuticas

modernas. Así, el intervalo entre el inicio de los síntomas y el de la terapia, o el

Page 27:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

tiempo transcurrido entre el contacto del médico y el inicio del tratamiento debe ser

óptimamente breve. Uno de los retardos inaceptables consiste en el retraso del

trazo electrocardiográfico, de allí que una primera recomendación en este sentido

es la organización de sistemas de reacción rápida, sin obstáculos, que garantice

un ECG de buena calidad técnica, al primer contacto con el paciente, sea en el

domicilio, el traslado o al ingreso al centro de emergencia. Un ECG normal de

inicio no descarta la presencia de un infarto de miocardio; ocasionalmente los

cambios pueden aparecer unas horas después. 

El cambio normal puede ser alteración de la amplitud y morfología de onda T: una

onda T alta y acuminada de las derivaciones de la zona que resulta infartada. Esta

morfología de la onda T es de breve duración y puede estar ausente. En algunos

casos la morfología de la onda T en el ECG inicial puede ser negativa y profunda;

este tipo de onda T puede aparecer al inicio o en el curso evolutivo del infarto de

miocardio. 

El siguiente cambio consiste en desviación del segmento ST. En el infarto Q el

desnivel es positivo. En condiciones fisiológicas puede existir un desnivel normal

del segmento ST positivo que alcance hasta 2 mm en las derivaciones

precordiales V1 a V3. Este tipo de cambio ha sido denominado "patrón de

repolarización precoz", tiene un ascenso suave y continuo desde el punto J hasta

el inicio de la onda T y no registra significado clínico.  (6, 24-28)

El desnivel patológico supera las dimensiones de las desviaciones y se registra

en por lo menos dos derivaciones contiguas. La presencia de este tipo de

Page 28:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

morfología asociado a la clínica es requisito necesario suficiente para el inicio de

la terapia de reperfusión: trombolisis o intervención coronaria percutánea. 

El éxito para restablecer el flujo va seguido de una rápida resolución del desnivel

positivo del segmento ST. El sentido de la desviación del segmento ST contribuye

al diagnóstico diferencial con el infarto no-Q, en el cual se registra desviación

negativa, ninguna desviación o desviación transitoria del segmento ST. Otra forma

de presentación del infarto Q puede ocurrir con alteración del segmento ST y con

alteración del complejo QRS, usualmente con modificaciones de la onda T. 

La aparición de una nueva onda Q patológica con criterios por ECG de onda Q

patológica (> 25% de la R y duración > 0,04 seg) constituye el signo

patognomónico del infarto Q. Una onda Q es el registro, en la superficie corporal,

de potenciales intracavitarios que se hacen evidentes cuando la pared ventricular

infartada no tiene actividad eléctrica demostrable en el ECG convencional. A esta

condición se le ha denominado "Zona Eléctricamente Inactivable" (ZEI) y es

inespecífica en cuanto se refiere al origen de la zona de inactivación. 

Dentro de las causas de ZEI se mencionan: necrosis, inflamación, isquemia,

reacción cicatrizal. La onda Q anormal puede aparecer en el ECG o puede

registrarse en trazos sucesivos. El infarto de ventrículo derecho se diagnostica

desde el punto de vista electrocardiográfico, por la aparición del desnivel del

segmento ST en las derivaciones precordiales derechas: V2R, V3R, V4R; esta

alteración puede tener una breve duración (24 a 48 horas) y puede acompañar al

infarto que se localiza en la pared inferior del ventrículo derecho. Un infarto dorsal

Page 29:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

o posterior produce aumento en la amplitud de las ondas R en las derivaciones

precordiales V1, V2, V3 o puede diagnosticarse por desnivel positivo del segmento

ST en las derivaciones posteriores V7, V8, V9. 

La onda Q persiste en el tiempo en la mayoría de los casos; en algunos,

particularmente el infarto de pared inferior, puede desaparecer en el transcurso de

meses o años. 

El desnivel positivo del segmento ST persiste durante la fase crónica y puede ser

expresión de una zona discinética con expansión o aneurisma del VI.  ( 24, 26, 27)

Estudios recientes han evidenciado una estrecha relación entre el contaje de

neutrófilos y la enfermedad arterial coronaria severa e Infarto agudo del miocardio

observada en angiografía coronaria. Estudios prospectivos en pacientes

hospitalizados por dolor precordial evidenciaron que la presencia de leucopenia y

neutrofilia relativa sirvieron como marcadores tempranos del evento. (7,24,25)

Por otro lado, la presencia de neutrofilia relativa (neutrófilos > 65%) durante las

primeras 12 horas de inicio de los síntomas esta directamente relacionada con el

desarrollo de insuficiencia cardiaca congestiva (ICC) en estos pacientes.

Proteína C reactiva: niveles mayores de 3 mg/L indican riesgo mayor de eventos

coronarios.

Fibrinógeno: niveles elevados al ingreso están asociados a un incremento en el

riesgo de eventos coronarios intrahospitalarios.

Page 30:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Con la necrosis de la célula miocárdica se liberan enzimas y otras sustancias

intracelulares, siguiendo un patrón temporal, con sensibilidad y especificidad

variables para el diagnóstico de necrosis miocárdica. Entre las enzimas están: las

creatininfosfoquinasa (CK) y su isoenzima (CK-MB), Aminotranferasas oxalacética

(AST) y pirúvica (ALT), y deshidrogenasa láctica (LDH). También se liberan

proteínas como la troponina y la mioglobina. 

Creatininfosfoquinasa (CK): esta enzima se eleva en las primeras 4 a 8 horas

iniciales del infarto, retornando a sus valores normales en 48 a 72 horas. La

determinación de CK es de poca utilidad debido a su baja especificidad, ya que

puede estar elevada en gran variedad de patologías como miositis, accidente

cerebro-vasculares, hipotiroidismo, etc. Es por ello que se prefiere la

determinación de la isoenzima MB, la cual es específica de tejido miocárdico. Sin

embargo, procesos diferentes al infarto (cirugía cardiaca, miocarditis,

electrocardioversión) pueden elevarla. Un radio de CKMB:CK > 2.5 sugiere infarto

del miocardio . 

Isoenzima (CK-MB): los niveles de CK-MB, determinados por electroforesis, son

marcadores enzimáticos muy utilizados para establecer el diagnóstico de necrosis

miocárdica. Su elevación ocurre entre 5 a 6 horas del inicio del dolor coronario, su

máximo aumento a las 24 horas y con retorno al rango normal a las 48 a 72 horas.

Posee una sensibilidad del 55% a 60% y mayor especificidad en el diagnóstico

que las aminotranferasas y LDH. La isoforma CK-MB2 aumenta precozmente,

entre 1 a 6 horas de inicio del dolor, y retorna al valor normal a las 38 horas.

Posee buena sensibilidad diagnóstica.  

Page 31:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Aminotranferasas (AST y ALT): estas enzimas se elevan a las 8 a 12 horas del

comienzo de los síntomas, con su concentración pico a las 18 a 36 horas y retorno

a sus valores normales a los 3 a 4 días.  

Deshidrogenasa láctica (LDH): se eleva entre las 24 a 48 horas del inicio de los

síntomas, con pico a los 3 a 4 días y retorno a su valor normal a los 8 a 14 días.  

La elevación de las enzimas antes descritas indica la presencia de necrosis

miocárdica, en cuyo caso estamos en la presencia de un cuadro de infarto agudo

del miocardio y no de angina inestable. Así, se ha demostrado que en situaciones

de necrosis miocárdica mínima, estas enzimas están ligeramente elevadas. Por

otro lado, existen condiciones clínicas en las cuales también hay elevación de

éstas enzimas: necrosis de otros tejidos (Ej. Accidentes cerebro vasculares),

cardioversión y desfibrilación eléctrica, inyecciones intramusculares, ejercicio

extremo, miopatías, cirugía cardiaca y no cardiaca, hepatopatías, congestión

hepática, ICC, hipotiroidismo, insuficiencia renal crónica (IRC). 

Troponinas: son proteínas constituyentes estructurales de la fibra miocárdica

contráctil, con peso molecular entre 22.500 y 33.000 daltons. Las tres troponinas

(I, T y C), pasan a la circulación sanguínea cuando existe isquemia miocárdica.

Las formas proteicas T e I existen también en el músculo esquelético, pero se

diferencian de las cardiacas por su estructura aminoacídica permitiendo así la

distinción inmunológica entre ambas. De tal manera que, cuando se aplican

métodos inmunológicos sensitivos, los niveles detectables alcanzados entre las 3

y 6 horas de estas troponinas sugieren necrosis miocárdica y excluyen el

Page 32:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

diagnóstico de angina inestable. Actualmente existen, además de los métodos

cuantitativos, formas de determinación cualitativas de troponinas (positivo o

negativo) utilizando técnicas inmunoenzimáticas de rápida detección: 15 minutos

Mioglobina: es una proteína de bajo peso molecular, determinada mediante

radioinmunoanálisis (RIA) o inmunoaglutinación de partículas de látex en placa.

Comienza a detectarse en la sangre de los pacientes con infarto agudo del

miocardio y alcanza su pico máximo varias horas antes que la CK y la CK-MB

independientemente de la técnica utilizada .  

Evaluación no invasiva: el estudio de la función miocárdica ventricular es un

elemento fundamental en el tratamiento de todo paciente con enfermedad

coronaria. La fracción de eyección (FE) del ventrículo izquierdo (VI) es un

indicador pronóstico más adecuado que el número o extensión de arterias

coronarias obstruidas.

Ecocardiografía: el análisis ecocardiográfico de la anatomía y función cardiaca son

de particular importancia en la evaluación del paciente con infarto agudo del

miocardio. El examen con ultrasonido de modo M y bidimencional con Doppler

cardiaco puede realizarse en el servicio de emergencia, en la unidad de cuidados

intensivos y en la habitación del paciente. La detección de la cinesia anormal no

es específica, pero puede ser útil en la evaluación del mecanismo de producción

de sus complicaciones mecánicas. Los siguientes hallazgos sugieren la presencia

de infarto agudo del miocardio: a. Disfunción sistólica del VI; b. Disfunción

diastólica del VI; c. Insuficiencia mitral; d. Ruptura del septum interventricular; e.

Page 33:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Ruptura de la pared libre del ventrículo y taponamiento cardiaco; f. Derrame

pericárdico; g. Trombos intracavitarios. 

El ecocardiograma es un medio útil para establecer la presencia de isquemia

residual provocada por el esfuerzo físico o farmacológico; su presencia se asocia

a un riesgo mayor.   Extensas zonas de isquemia reversible tienen valor pronóstico

y sirven como guía para el tratamiento óptimo del paciente. ( 16,24)

Tomografía de Esfuerzo con Isonitrilos-Tecnesio-99m: los estudios gammagráficos

de perfusión miocárdica con Talio 201 se utilizan desde hace más de una década

para el diagnóstico y seguimiento de la enfermedad coronaria. Estas

exploraciones están indicadas en aquellos pacientes en quienes la prueba de

esfuerzo no es concluyente y también para la valoración, pronóstico y seguimiento

de los enfermos ya diagnosticados de cardiopatía isquémica. 

Diagnóstico Diferencial:

a) Procesos cardiovasculares:

-Angina inestable.

-Embolismo pulmonar agudo

-Aneurisma disecante de la aorta.

-Pericarditis aguda.

b) Procesos respiratorios:

-Neumotórax espontáneo.

c) Procesos digestivos:

-Ulcera peptica perforada.

Page 34:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

-Rotura esofágica.

-Pancreatitis aguda.

-Cólico biliar.

-Hernia hiatal.

-Esofagitis. (6)

Cuidados prehospitalarios: en la fase más precoz el paciente a menudo

experimenta intenso dolor y es muy susceptible de sufrir una parada cardiaca. Sin

embargo, con frecuencia el paciente tarda más de una hora en solicitar ayuda. Los

Sistemas de Emergencia tienen un papel clave en el manejo del Infarto agudo de

miocardio y la parada cardiaca, el objetivo principal de los cuidados de emergencia

prehospitalarios es aliviar el dolor y prevenir o tratar la parada cardiaca,

procurando un rápido acceso al Hospital. Se debe proceder de forma rápida a

administrar oxígeno, monitorizar, realizar un electrocardiograma (ECG),

administrar Nitroglicerina sublingual (NTG), administrar lo antes posible 200-500

mg de ácido acetilsalicílico. Si hay elevación del segmento ST (> 1 mm.) asociada

a dolor anginoide de más de 30 min. De duración que no cede con nitroglicerina

sublingual, la probabilidad de infarto es mayor del 90 % y debe procederse al

traslado inmediato del paciente a la unidad coronaria, acelerando

simultáneamente la estrategia de reperfusión elegida. Canalizar una vía venosa

iniciando el tratamiento con NTG en perfusión si no existe contraindicación, y

aliviando el dolor y la ansiedad con opiáceos.

Coincidiendo con la llegada del enfermo a la unidad coronaria debe monitorizarse

continuamente una derivación electrocardiográfica con clara identificación positiva

Page 35:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

de la actividad auricular y ventricular. Si no se ha efectuado con anterioridad, hay

que realizar un ECG completo (incluyendo las derivaciones V3 R-V4 R) y se deben

extraer muestras para la determinación de enzimas (CK, CK-MB) y de otros

parámetros generales (estudio de la coagulación, hemograma, glucemia,

creatinina plasmática e Ionograma). A lo largo de los primeros 2-3 días, el ECG

debe repetirse diariamente y siempre que se detecten arritmias o se sospeche

isquemia. Las determinaciones de CK y CK-MB se repiten cada 8 horas durante el

primer día y cada 24 horas en los 3 días siguientes. En pacientes ingresados

tardíamente deben determinarse la LDH total y las isoenzimas al ingreso, a las 48

y a las 72 horas. Debe disponerse lo antes posible de una radiografía de tórax,

que se realizará sin trasladar al enfermo. Durante la fase aguda, el tratamiento del

infarto no complicado se dirige a limitar de su tamaño, reducir el dolor e iniciar la

profilaxis con medidas que favorezcan la supervivencia y la capacidad funcional a

corto o largo plazo.

Reperfusión miocárdica con fibrinolíticos: el factor tiempo es el determinante

principal de la eficacia de la fibrinólisis, el beneficio es máximo si se aplica en la

primera hora tras comenzar el dolor y sigue siendo significativo durante las

primeras 6 horas. Durante las 6-12 horas primeras, la fibrinólisis reduce

ligeramente la mortalidad, pero a partir de las 12 horas es ineficaz y

potencialmente deletérea (riesgo hemorrágico). (29-33)

Complicaciones

Arritmias ventriculares: durante las primeras 24-48 horas la incidencia de

extrasístoles ventriculares es prácticamente constante.

Page 36:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Arritmias supraventriculares: alrededor de una tercera parte de los pacientes con

infarto presentan taquicardia sinusal en algún momento de la fase aguda. Otra

arritmia supraventricular relativamente frecuente es la fibrilación auricular. El flúter,

la taquicardia auricular y la taquicardia de la unión AV son mucho menos

frecuentes.

Bradicardia y trastornos de la conducción: la bradicardia sinusal es la arritmia más

frecuente de la fase aguda del infarto, especialmente en los posteroinferiores. (33)

Insuficiencia cardiaca: si la pérdida de miocardio provocada por el infarto supera el

25 % de la masa ventricular total, se producen manifestaciones de insuficiencia

cardiaca aguda. (34-35)

Hipotensión secundaria a infarto de ventrículo derecho: más del 30 % de los

infartos posteroinferiores muestran extensión de la necrosis hacia la pared

posterior y septal del ventrículo derecho, que el 5-10 % de los casos cursa

Con hipotensión grave y congestión sistémica.

Rotura cardiaca: la rotura del corazón es responsable del 15 % de las muertes

totales por infarto, y el riesgo de que ocurra es menor cuando se realiza

reperfusión precoz.

Rotura de la pared libre ventricular: provoca el 10 % de la mortalidad total del

infarto. Puede ocurrir entre el primer día y las 3 semanas, pero es más frecuente

en los primeros 4 días.

Extensión del infarto: consiste en un nuevo proceso Isquémico de propagación

lateral de la necrosis dentro de la misma zona infartada, que se produce antes de

que haya concluido la cicatrización del infarto previo, lo que agrava la disfunción

ventricular y provoca una nueva curva enzimática.

Page 37:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Es importante comprender que el Síndrome coronario agudo, en cualquiera de sus

formas, y dentro de este, el infarto agudo del miocardio, no es más que un suceso

agudo que asienta sobre una enfermedad crónica, la enfermedad coronaria

aterosclerótica. Por tanto, el tratamiento integral del no acaba cuando se

consiguen controlar los factores que lo han precipitado o la isquemia miocárdica y

sus consecuencias. Se deben, desde el diagnóstico, iniciar estrategias a largo

plazo destinadas a intervenir sobre los factores determinantes de la enfermedad

subyacente (aterosclerosis) y sobre las secuelas que ha producido en el corazón.

Las evidencias sobre las que se asientan las actividades preventivas de los

pacientes con enfermedad coronaria han demostrado de manera consistente su

capacidad de aumentar la supervivencia y calidad de vida . En el control de los

factores de riesgo modificables asienta la base racional de las medidas de

prevención secundaria destinadas a enlentecer, detener o hacer regresar la

enfermedad y a disminuir la incidencia de eventos. Las secuelas del infarto agudo

del miocardio, pueden provocar cambios cardíacos estructurales que favorezcan

su deterioro funcional progresivo o eventos agudos (arritmias) que deterioran la

situación clínica de los pacientes y su calidad de vida. También las intervenciones

preventivas deben dirigirse a detener los cambios adversos o evitar los sucesos

agudos. (4,14,23)

En consecuencia, las medidas de prevención secundaria en los pacientes que han

desarrollado un Síndrome Coronario Agudo se pueden dividir en tres tipos:

Cambios en los hábitos de vida que se comportan como factor de riesgo

coronario.

Page 38:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Medidas destinadas a controlar los otros factores de riesgo coronario

individuales (bioquímicos o fisiopatológicos).

Intervenciones específicas:

a) uso de terapias farmacológicas profilácticas destinadas a reducir el

riesgo de eventos isquémicos o a promover una adecuada evolución de las

secuelas

b) implantación en los casos indicados de programas de rehabilitación

cardíaca. (4)

El seguimiento de los pacientes que han desarrollado un infarto agudo del

miocardio es una faceta esencial para realizar una eficaz prevención secundaria

de la cardiopatía isquémica. Esta labor no sólo deber ser realizada por los

cardiólogos, sino que deben participar de una manera activa los médicos de

atención primaria. Independientemente de que una de las principales funciones de

los servicios de atención primaria sea la prevención primaria y secundaria, la

experiencia nos dice que en terapias crónicas o en intervenciones no

farmacológicas la proximidad y la disponibilidad del médico son fundamentales, si

bien cada protocolo de actuación debe basarse en la disponibilidad de medios de

la unidad de cardiología y de atención primaria.

Page 39:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

II-OBJETIVOS

Objetivo general

1. Caracterizar el comportamiento del infarto agudo del miocardio en

pacientes ingresados en el centro de Diagnóstico Integral Luchadores por

la Salud de Lamas, municipio José Ángel Lamas, estado Aragua, durante

el período comprendido del 1 de enero al 31 de diciembre de 2007.

Objetivos específicos

1. Determinar la incidencia de Infarto Agudo del Miocardio según edad y sexo.

2. Identificar los principales factores de riesgo asociados con el Infarto Agudo

del Miocardio.

3. Describir las formas de presentación, complicaciones y localización

topográfica más frecuentes de esta muestra.

4. Determinar el estado al egreso de los pacientes infartados en el periodo de

estudio.

Page 40:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

IV-METODOS Y PROCEDIMIENTOS

Se realizó un estudio observacional, descriptivo y de corte transversal en la unidad

de cuidados intensivos del Centro de Diagnóstico Integral ¨Luchadores por la

salud de Lamas¨, del estado Aragua, para caracterizar el comportamiento del

infarto agudo del miocardio en los pacientes ingresados en el periodo

comprendido entre el 1 de enero al 31 de diciembre del año 2007.

El universo estuvo constituido por el total de pacientes que ingresaron con este

diagnóstico durante ese periodo (13 pacientes).

Para esta investigación se revisaron las historias clínicas de los pacientes que

ingresaron con este diagnóstico en ese período de tiempo, se recogieron una serie

de variables como: edad, sexo, factores de riesgo, manifestaciones clínicas al

ingreso, complicaciones, localización topográfica y estado al egreso.

La recogida de los datos fue realizada por la autora en su tiempo libre, previa

selección de las historias clínicas de los pacientes y vaciada en un documento de

recolección de datos. (Anexo 1).

Definición de términos y parámetros

Infarto agudo del miocardio: Es el término utilizado para describir los cambios

necróticos agudos del miocardio debido a la privación de forma repentina y

catastrófica del aporte sanguíneo coronario durante un período de tiempo

suficiente, resultado casi siempre de una oclusión coronaria aguda (trombosis,

hemorragia subíntima, o rotura de placa de ateroma). (6)

Bases para el diagnóstico:

Page 41:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Desarrollo súbito, pero no instantáneo, de molestias torácicas anteriores

prolongadas (mayor de 30 minutos), que pueden producir arritmias,

hipotensión, choque o insuficiencia cardiaca. Raramente indoloro,

enmascarado con signos de insuficiencia cardiaca congestiva, síncope,

enfermedad vascular cerebral o choque.

Electrocardiografía: elevación o depresión del segmento ST, inversión

simétrica de ondas T y ondas Q de necrosis.

Elevación de enzimas cardiacas (CPK-MB, Troponina T o troponina I,

mioglobina, TGO, LDH).

Aparición de anormalidad segmentaria del movimiento de la pared por

técnicas de imágenes. (6)

Operacionalización de las variables:

OperacionalizaciónVariable Tipo de

variableEscala Descripción Indicador

Edad Cuantitativa Menor de 40 años40-60 años61-80 añosMayor de 80 años

Según grupo de edad

Porcentaje de pacientes con IMA

Sexo Cualitativa Nominal

MasculinoFemenino

Según sexo de referencia

Porcentaje de pacientes con IMA por sexo

Factores de riesgo

Cualitativa Nominal

TabaquismoHipertensión arterialDislipidemiaDiabetes mellitusObesidad

Según responsabilidad de ocurrencia de enfermedad coronaria

Porcentaje de pacientes que ingresan con IMA

Manifestaciones clínicas

Cualitativa Nominal

Dolor precordialDisneaSudoracionesFrialdad

Según las características del cuadro clínico

Porcentaje de pacientes que ingresan con IMA

Page 42:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

H.T.AHipotensiónNáuseasVómitos

Complicaciones del IMA

Cualitativa Nominal

ArritmiasRotura cardiacaShock cardiogénicoInfarto del ventrículo derechoInsuficiencia cardiacaInsuficiencia valvular

Según curso evolutivo de la enfermedad

Porcentaje de pacientes que ingresan con IMA

Localización del IMA

Cualitativa Nominal

InferiorLateralAnteroseptalAnterior extenso

Según las características del electrocardiograma

Porcentaje de pacientes que ingresan con IMA

Estado al egreso Cualitativa nominal

FallecidoVivo

Según condición al egreso

Porcentaje de pacientes que ingresan con IMA

Definición de caso: se definió a todo paciente IMA con criterios clínicos,

enzimáticos y/o electrocardiográficos.

Los resultados se expresaron en frecuencias absolutas y relativas y se mostraron

en tablas para su mejor comprensión.

Métodos Teóricos:

Análisis y síntesis: El método analítico-sintético se utilizó para el

conocimiento profundo de la información obtenida a partir de los

instrumentos aplicados y de la bibliografía revisada; así como para resumir

los aspectos esenciales de las mismas.

Inducción-deducción: Se utilizó para realizar inferencias entre lo general y lo

particular a partir de la información obtenida por los instrumentos aplicados,

Page 43:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

así como mediante la búsqueda bibliográfica que sirvió de fuente a esta

investigación. Estos métodos permitieron elaborar juicios y conclusiones de

utilidad durante el desarrollo de la investigación.

Procesamiento estadístico:

Se creó una base de datos para el procesamiento estadístico de los resultados

arrojados por la investigación. Los datos obtenidos se procesaron y analizaron

utilizando el programa SPSS versión 10 para Windows 2000, se calcularon

promedios y porcentajes

Page 44:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

V-ANÁLISIS Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS

Comportamiento del Infarto Agudo del Miocardio en el municipio José Ángel

Lamas.

Tabla 1: Distribución de pacientes infartados según grupos de edad en el Centro

Diagnóstico Integral de Lamas.2007

Grupo de edad (años) No. %

<40 0 0

40-60 4 30.77

61-80

>80

7

2

53.85

15.38

Total 13 100.00

Fuente: Historias clínicas.

Al analizar la distribución de la muestra estudiada según grupos de edades,

encontramos que el 53.85% de los pacientes corresponden al grupo 61-80 años,

el segundo en orden de frecuencia al grupo 40-60 años seguido por los mayores

de 80, con un 30.77% y 15.38% respectivamente, como se muestra en la Tabla 1.

En un estudio realizado en Matanzas, el 43.04% tenía 70 años y más. (36)

En España el estudio RICVAL realizado con 1124 pacientes, arrojó una edad

promedio de 65 años (37), así como el registro PRIMVAC realizado en ese mismo

país, en el cual el 56,3% de los pacientes tenían 65 años y más. (38)

Resultados similares se obtuvieron en las investigaciones realizadas por Suárez

Rodríguez (39) y Badui -Rangel. (40).

Page 45:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Tabla 2: Distribución de los pacientes infartados según sexo.

Sexo N %

Masculino 9 69.23

Femenino 4 30.77

Total 13 100.00

Fuente: Historias Clínicas

De los 13 pacientes infartados, que representan la muestra de estudio, 9 fueron

del sexo masculino y 4 correspondieron al sexo femenino para el 69.23 y 30.77%

respectivamente (Tabla 2).

Suárez Rodríguez y colaboradores en su estudio acerca del comportamiento del

infarto agudo del miocardio en una unidad de cuidados intensivos encontraron

resultados similares a los nuestros, en su estudio el 82,3% de los pacientes

correspondía al sexo masculino y el 17,7% al femenino. (39)

Badui y Rangel encuentran en el trabajo realizado un predominio de un 80% del

sexo masculino sobre el femenino. (40)

En el estudio RICVAL el 76,1% de los infartados correspondió al sexo masculino y

un 23,9% al femenino. (37)

El estudio IBERICA refleja resultados similares, donde el sexo masculino estuvo

presente en el 62,5% y el femenino en el 37,5%. (41)

Page 46:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Un estudio realizado en Colombia se corresponde con nuestros resultados, en el

que hubo predominio del sexo masculino con un 66,2%, estando presente el sexo

femenino en un 33,8% del total de pacientes infartados. (42)

Page 47:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Tabla 3: Distribución de los pacientes infartados según principales factores de riesgo.

(n=13)

Factores de riesgo No. %

Hipertensión arterial 11 84.61

Dislipidemia 9 69.23

Tabaquismo 7 53.85

Diabetes-Mellitus

Obesidad

4

3

30.77

23.08

Fuente: Historias Clínicas

Como se observa en la Tabla 3 los factores de riesgo de mayor incidencia fueron

la hipertensión arterial, en 11 de los pacientes estudiados para un 84.61% y las

dislipidemias en 9 pacientes para un 69.23%. El tabaquismo y la diabetes mellitus

estuvieron presentes en el 53.85 y 30.77% respectivamente y la obesidad solo en

el 23.08%.

Los resultados de este estudio coinciden con los reportados en investigaciones a

nivel mundial, que señalan que la hipertensión arterial se encuentra presente en

más del 50% de la población adulta y en relación con el infarto agudo del

miocardio, encuentran que el 60% de los infartados son hipertensos. (23)

Un estudio presentado en las sesiones anuales de la American Heart Association

en noviembre de 2006 (FAME), con 200 pacientes, detectó una incidencia del 92%

en los pacientes infartados (6); semejante fue el resultado del estudio IBERICA

donde el 42% de los hombres y el 61% de las mujeres, eran hipertensos. (41)

Page 48:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

El estudio realizado por Badui y Rangel no coincide con nuestra casuística ya que

reportó a la hipercolesterolemia como el factor de riesgo de mayor incidencia para

un 81% (40); en el IBERICA presentaban aumento del colesterol el 41,1% de los

estudiados. (41)

La diabetes mellitus estuvo presente en el 36,3% de los pacientes estudiados en

nuestra muestra. En el RICVAL el porciento fue mayor (46,8), en el IBERICA fue

de un 33,6%.

Page 49:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Tabla 4: Distribución de los pacientes infartados según las manifestaciones

clínicas.

(n=13)

Manifestaciones clínicas No. %

Dolor precordial 13 100.00

Sudoración

Frialdad

9

9

69.23

69.23

Disnea 8 61.54

Hipertensión arterial 8 61.54

Hipotensión 3 23.08

Fuente: Historias Clínicas

En la población estudiada el dolor precordial fue la manifestación clínica más

frecuentemente encontrada, en el 100% de los casos, seguido por la sudoración y

la frialdad, presentes en el 69.23% respectivamente, como se muestra en la tabla

4.

Suarez Rodríguez y colaboradores, encontraron que el dolor fue la forma de

presentación mas frecuente en la muestra por ellos estudiada, presente en el

81,5% de los estudiados. (39)

Resultados similares se obtuvieron en Matanzas donde el 83,7% de los pacientes

infartados presentó dolor precordial como manifestación clínica. (36)

El estudio realizado por O' Doherty M y colaboradores evidencio que un 100 % de

los pacientes estudiados presentó dolor precordial. (20)

Page 50:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Tabla 5: Distribución de pacientes infartados según topografía del infarto agudo

del miocardio.

Topografía N %

Cara inferior 6 46.15

Anterior extenso

Anteroseptal

Lateral

4

2

1

30.77

15.39

7.69

Total 13 100

Fuente: Historias Clínicas

Desde el punto de vista topográfico, se aprecia en la tabla 5 que la cara inferior fue

la más afectada en un 46.15% de los pacientes, la segunda localización mas

frecuente fue la anterior extensa en el 30.77%.

Suárez Rodríguez encuentra en sus estudio que la cara inferior fue afectada en el

51,1% (39), otras descripciones coinciden en que los infartos de cara inferior son

los más frecuentes (34); el estudio RICVAL señala un 46,4% (37) y el realizado en

Colombia coincide con un 49,7%. (42)

Otros estudios difieren del nuestro ya que predomina la afección de la cara

anterior del ventrículo izquierdo. (40,41)

Page 51:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Tabla 6: Distribución de los pacientes infartados según complicaciones.

Complicaciones N %

Insuficiencia cardiaca 5 38.46

Shock cardiogénico

Arritmias graves

2

1

15.39

7.69

Otras. 1 7.69

Fuente: Historias clínicas

En la tabla 9 se observa que la insuficiencia cardiaca fue la complicación más

frecuente en este grupo de enfermos portadores de IMA, la cual estuvo presente

en el 38.46%, seguido del shock cardiogénico y las arritmias graves en el 15.39 y

7.69% respectivamente.

Esta investigación refleja resultados similares a los descritos en otros estudios

donde la insuficiencia cardiaca es valorada como la complicación mas frecuente

de las muestras estudiadas. (6, 27)

En el estudio realizado en Matanzas el 33,72% de los casos sufrió insuficiencia

cardiaca como complicación del IMA. (36)

En el RICVAL la insuficiencia cardiaca fue la más frecuente, encontrándose en el

42% de los pacientes complicados. (37)

En los estudios GUSTO-1 e ISIS-3 se reporta una incidencia de esta complicación

de solo un 5 y 7% respectivamente. (8,42)

Page 52:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Tabla 7: Distribución de los pacientes infartados según su estado al egreso.

Estado al egreso N %

Vivo

Fallecido

4

9

30.77

69.23

Total 13 100.00

Fuente: Historias Clínicas

Según refleja la tabla 7, del total de pacientes ingresados por IMA, 9 fallecieron

para un 69.23 % de la muestra.

Consideramos que encontramos una letalidad alta al igual que los resultados de

Suárez Rodríguez quien encontró una letalidad de un 66.5%. (39).

En el estudio realizado en Matanzas la mortalidad fue inferior, de un 33.7% en los

infartados. (36)

Page 53:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

VI- CONCLUSIONES

La mayoría de los pacientes infartados correspondieron al grupo de edad

entre 61-80 años, sexo masculino.

Predominando como factor de riesgo la hipertensión arterial.

El dolor precordial fue la manifestación clínica más frecuentes, siendo la

insuficiencia cardiaca la complicación que con mayor frecuencia se

presentó, predominaron los infartos de cara inferior.

La letalidad en los estudiados fue alta.

VII-RECOMENDACIONES

Page 54:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Dispensarizar los pacientes con factores de riesgo para el infarto agudo del

miocardio, con el objetivo de mejorar su calidad de vida y evitar la aparición

de este evento.

Hacer énfasis en los síntomas precoces del infarto agudo del miocardio en

los pacientes con peligro del mismo, con el objetivo que sea detectado a

tiempo para su tratamiento precoz.

Realizar actividades de promoción de salud para lograr estilos de vida

saludables.

VIII-REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Anuario estadístico. MINSAP, 2005.

Page 55:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

2. Cuba, Ministerio de Salud Pública. Dirección Nacional de Estadística. Informe

Anual Estadísticas Vitales. Ciudad de La Habana: MINSAP;2005.

3. Backer G, Ambrosioni E, Borch-Johnsen K, Brotons C, Cfkova R, et al. Guía

europea de prevención cardiovascular en la práctica clínica. Tercer grupo de

trabajo de las sociedades europeas y otras sociedades sobre prevención

cardiovascular en la práctica clínica. Rev Clin Esp 2006; 206 (1): 19-29.

4. Guías de la Sociedad Española de Cardiología en prevención (factores de

riesgo) y rehabilitación. Rev Esp Cardiol. En prensa

5. Aguayo de Hoyos E, Reina Toral A, Colmenero Ruiz M, Barranco Ruiz M, Pola

Gallego de Guzmán MD, Jiménez Quintana MM y Grupo ARIAM. Factores de

riesgo para el Infarto Agudo del Miocardio. Datos del registro ARIAM. Med

Intensiva 2006; 23 280-287

6. Farreras P. y col. Medicina Interna. 14 Edición. Madrid España. Ediciones

Harcourt 2000: 67.

7. Bermejo J, Segovia J, Heras M, Alfonso F. Resumen de los ensayos clínicos

presentados en las Sesiones Científicas Anuales de la American Heart

Association (Chicago, Estados Unidos, 12 al 15 de Nov 2006) Rev Med Cardiol

2007; 60 (2): 157-167.

8. ISIS-3 (Third International Study of Infarct Survival). Collaborative Group: ISIS-

3 Lancet 1992; 339: 753.

9. Alegría E, López-Bescós L, Cabadés A, San José JM. Normas de actuación en

el paciente con infarto agudo de miocardio. Rev Esp Cardiol 1994; 47 (supl 1):

72-76

Page 56:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

10.Colegio de Médicos del Distrito Metropolitano de Caracas. Med Caracas 2007.

11.Fernández Ortiz A. Fisiopatología del infarto agudo del miocardio. Papel de la

rotura y trombosis de la placa aterosclerótica. Rev Esp Cardiol 2005; 52 (Supl

1): 13-23

12.Pane GA, Salness KA. A survey of participants in a mass CPR training course.

Ann Emerg Med 2007; 16: 1.112-1.116

13.Ma Sweeney JC, Cody M, O Sullivan P, Elberson K, Moser D, Garvin B.

Women early warning symptoms of acute myocardial infarction. Circulation

2003; 108: 2619-2623.

14.Claver E, Curos A, Ayerbe Jl, Serra J, Mauri J, Nofrerías EF,et al. Variables

clínicas predictoras de enfermedad del tronco común en grado de alto riesgo

con un primer episodio de síndrome coronario agudo. Rev Esp Cardiol 2006;

59 (8): 794-800.

15.Coco A. control de la hypertension arterial en España. Resultados del estudio

control pres 98. HTA 1998; 15:298-307.

16.García Díaz F, Vázquez García R, López-Cuerco J, Díaz Ortuño F. Valoración

pronóstica de pacientes postinfarto mediante ecocardiografía bidimensional, los

potenciales tardíos ventriculares y la sensibilidad barorrefleja. Rev Esp Cardiol

2002; 51: 27-34.

17.Ross R: Atherosclerosis and inflamatory disease. N Engl J Med 1999; 340:115.

18.Van der Hoeven JG, Waanders H, Compier EA, Van der Weyden PK, Meinders

AE. Evaluation of an emergency medical system. The prognosis in patients with

Page 57:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

an out of hospital cardiac arrest. Acta Clin Belg 2004; 44: 511

19.The International Study Group. In-hospital mortality and climical course of

20,891 patients with suspected acute myocardial infarction randomised

between alteplase and streptokinase with or without heparin. Lancet 1990; 336:

71-75.

20.O'Doherty M, Tayler DI, Quinn E, Vincent R, Chamberlain DA. Five hundred

patients with myocardial infarction monitored within one hour of symptoms. Br

Med J (Clin Res Ed) 1993; 286: 1.405-1.408

21.Bosch X, Fernandez-Aviles F. H del IMA no complicado. Rev. Esp Cardiol

2004; 47(8) (supl 1): 9-26.

22.Muller JE: Circadian variation and triggering of cardiovascular event. Vasc Med

1999; 12:35.

23.Alderman, MH. Cuantificación del riesgo cardiovascular ante hipertensión. Clin

Cardiol N Amer, 1995; 14(sup 1 4):9-40.

24.Arós F, Loma-Osorio A. Diagnóstico del infarto agudo del miocardio en el

servicio de urgencias. Valor y limitaciones de la clínica, el electrocardiograma y

las pruebas complementarias. Rev Esp Cardiol 2000; 52 (Supl 1): 39-45

25.Barrabés Riu JA, García-Dorado D, Martín JA, Coma Canella I, Valle Tudela V.

Papel de las exploraciones no invasivas en el manejo de la cardiopatía

isquémica. III. Estimación de la viabilidad miocárdica. Rev Esp Cardiol 1997;

50: 75-82

Page 58:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

26.Canto JG, Rogers WJ, Bowlby LJ, French WJ, Pearce DJ, Weaver WD. The

prehospital electrocardiogram in acute myocardial infarction: is its full potential

being realized? National Registry of Myocardial Infarction 2 Investigators. J Am

Coll Cardiol 2005; 29: 498-505

27.Llerena L. IMA en pacientes jóvenes. Rev Cub Med 1988; 27(3):58-64.

28.Bosch X, Echanove I, San José JM, Cabadés A. Asistencia al paciente con

Infarto Agudo de Miocardio. En: Asín Cardiel E, Cosín Aguilar J, Del Río J,

editores. Normas de actuación clínica en Cardiología. Madrid: Sociedad

Española de Cardiología, 2005; 132-149

29.Becker LB, Pepe PE. Ensuring the effectiveness of community-wide emergency

cardiac care. Ann Emerg Med 2002; 22: 354-365

30.Kereiakes DJ, Weaver WD, Anderson JL, Feldman T, Gibler B, Aufderheide T

et al. Time delays in the diagnosis and treatment of acute myocardial infarction:

a tale of eight cities. Report from the Pre-hospital Study Group and the

Cincinnati Heart Project. Am Heart J 1990; 120: 773-780

31.Quevedo RC, Stern MP, Mitchel B, Arredondo B, Martinez S, Seoane M.

Myocardial Infarction in a low income area in Mexico city. Prevalence and

clinical characteristic. Arch Med Res 1995; 26: 233-238.

32.Dracup K, Alonzo AA, Atkins JM, Bennett NM, Braslow A, Clark LT et al. The

physician's role in minimizing prehospital delay in patients at high risk for acute

myocardial infarction: recommendations from the National Heart Attack Alert

Program. Working Group on Educational Strategies To Prevent Prehospital

Page 59:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Delay in Patients at High Risk for Acute Myocardial Infarction. Ann Intern Med

1997; 126: 645-651

33.Boersma E, Maas AC, Deckers JW, Simoons ML. Early thrombolytic treatment

in acute myocardial infarction: reappraisal of the golden hour. Lancet 2004;

348: 771-775

34.Gray AJ, Redmond AD, Martin MA . Use of the automatic external defibrillator-

pacemaker by ambulance personnel: the Stockport experience. Br Med J 2007;

294: 1.133-1.135

35.De Luna AB, Coumel P, Leclercq JF. Ambulatory sudden cardiac death:

mechanisms of production of fatal arrhytmia on the basis of 157 cases. Am

Heart J 1999; 117: 151-159

36.Reyes IS, Escobar N, Álvarez N. Mortalidad por infarto agudo del miocardio en

una unidad de cuidados intermedios. Rev Cub Med 1997; 36(2): 112–116.

37.Cabadés A, Valls F, Echanove I, France M. Estudio RICVAL. El infarto agudo

del miocardio en la ciudad de Valencia. Datos de 1124 pacientes en los

primeros 12 meses del registro (diciembre de 1993-noviembre de 1994). Rev

Esp Cardiol 1997; 50: 383-396.

38.Cabadés A, Echanove I, Cebrian J, Cardona J, et al. Características, manejo y

pronóstico del paciente con infarto agudo del miocardio en la Comunidad

Page 60:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Valenciana en 1995: resultados del registro PRIMVAC. Rev Esp Cardiol 1999;

52: 123-133.

39.Suárez JC, Rodríguez L, Govea CL. Comportamiento del infarto agudo del

miocardio en la unidad de cuidados intensivos. Enero–diciembre del 2000. Rev

Cub Med 2002; 41(1): 25–28.

40.Badui E, Rangel A. IMA en adultos jóvenes. Presentación de 142 casos. Arch

Inst Cardiol Mex 1993; 63: 529-537.

41.Moreno C, Turumbay J, Garcia V, Ezpeleta E, Manrique A, et al. El infarto de

miocardio en la población de 25-74 años de Navarra. Incidencia, letalidad y

tratamiento en el periodo 1997-98. Estudio IBERICA. Gac Sanit 2002; 16: 7–

32.

42.Bodoya A, Diez DI, Loaiza JA, Valencia JM, Vergel MA, Castaño O. Estudio

descriptivo sobre infarto agudo del miocardio en el hospital de Caldas entre

1996-2002. Col Med 2004; 35(3): 127–131.

43.Newby LK, Rutsch WR, Califf RM, Simoons ML, Aylward PE, Armstrong PW et

al. Time from symptom onset to treatment and outcomes after thrombolytic

therapy. GUSTO-1 Investigators. J Am Coll Cardiol 2006; 27: 1.646-1.655

44.García E, Elízaga J, Pérez-Castellano N, Serrano JA, Abeytua M et al. Primary

angioplasty versus systemic thrombolysis in anterior myocardial infarction. J

Am Coll Cardiol 2003; 33: 605-611.

Page 61:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

45. Iglesias ML, Pedro-Botet J, Hernández E, Solsona JF, Molina L, Álvarez A et al.

Tratamiento fibrinolítico en el infarto agudo de miocardio: análisis de los

tiempos de demora. Med Clin (Barc) 2004; 106: 281-284

46.Vallejo Uribe G O, Ledesma-Feret JA, Arriage-Navas R. Incidencia y mortalidad

posterior a trombolisis con estreptocinasa. Rev Mex Patol Clin 2001; 48 (2): 78-

82.

47.Ellis SG, Ribeiro da Silva E, Heyndrickx G, Talley JD, Cernigliaro C, Steg G et

al. Randomized comparison of rescue angioplasty with conservative

management of patients with early failure of thrombolysis for acute myocardial

infarction. Circulation 2003; 90: 2.280-2.284

48. Ramos Perves O, Ferrer A, Nápoles Riaño A, Echevarría Solany JC.

Trombolisis e infarto agudo del miocardio en la unidad de cuidados intensivos

Hospital Clínico Quirúrgico Docente Dr. ¨Joaquín Castillo Duany¨ MEDISAN

2000; 4(2): 22-28.

49.Cruz JM. Managing acute myocardial infarction: clinical implications of the TIM

study. Eur Heart J 1999; 1 (Supl F)

50.Balsano F, Rizzon P, Violi F, and the STAI group. Antiplatelet treatment with

ticlopidine in unstable angina: a controlled multicenter trial. Circulation 1990;

82: 17-26

51.CAPRIE Steering committe. A randomized blinded of clopidogrel versus

aspirine in patients at risk of ischaemics events. Lancet 1996; 348: 1.329-1.339

Page 62:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

52. ISIS-1 (First International Study of Infarct Survival) Collaborative Group.

Randomised trial of intravenous atenolol among 16027 cases of suspected

acute myocardial infarction: ISIS-1. Lancet 1986; 2: 57-66

53.The MIAMI Trial Research Group . Metoprolol in acute myocardial infarction:

patient population. Am J Cardiol 1985; 56: 1G-57G

54.Roberts R, Rogers WJ, Mueller HS, Lambrew CT, Diver DJ, Smith HC et al, for

TIMI Investigators. Immediate versus deferred beta blockade following

thrombolytic therapy in patients with acute myocardial infarction. Results of

TIMI II-B Study. Circulation 1991; 83: 422-437

55.Ciruzzi M, Rozlosnik J, Pramparo P, et al. Estudio FRICAS. Factores de riesgo

para infarto agudo de miocardio en la Argentina. Rev Arg Cardiol 1996; 64(2):9-

40.

56.Bermejo J, Segovia J, Heras M, Alfonso F. Resumen de los ensayos clínicos

presentados en las Sesiones Científicas Anuales de la American Heart

Association (Chicago, Estados Unidos, 12 al 15 de noviembre 2006). Rev Med

Cardiol 2007; 60(2): 157-167.

57. .Almeida D, Brandi S. Manual de Cardiología Clínica. Tomo 1. 2da edición.

Caracas: Universidad Central de Venezuela. Consejo de desarrollo científico y

humanístico. Fondo Andrés Bello; 1995.

58.Álvarez B, Luque M, Martell N, López M. Alto riesgo cardiovascular por el

inadecuado control de los factores de riesgo de hipertensos españoles en

Atención Primaria en España. Rev Clin Esp 2006; 206: 477 – 484.

Page 63:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

59.Medrano J, Cerrato E, Boix R, Delgado M. Factores de riesgo cardiovascular

en la población española: metaanálisis de estudios transversales. Med

Clin(Barc) 2005; 124(16):606-612.

60.Yusuf S, Hawken S, Ounpvu S, et al. Effect of potentially modifiable risk factors

associated with myocardial infarction in 52 countries (The INTERHEAT study)

case control study. Lancet 2004; 364: 937–952.

61.Cosín J, Hernández A, Rodríguez L, Zamorano JL, et al. Valoración de riesgo

cardiovascular en grupos de población. Comparación de los sistemas Score y

Framingham en pacientes hipertensos. Rev Clin Esp 2006; 206:182 – 187.

62.Fácila L, Bertomeu-González V, Sanchos J, Boda V, J Núñez J, et al. Niveles

de glucemia en pacientes no diabéticos. ¿Es un factor pronóstico en el

síndrome coronario agudo? Rev Clin Esp 2006; 206: 271 – 275.

63.Murga N, Pérez MP, Mazan P, García A. Un nuevo proyecto: enfermedad

cardiovascular en la mujer. Rev Esp Cardiol 2006; 59: 99-104.

IX- ANEXOS

Page 64:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Anexo I: Documento para la recolección de datos de las historias clínicas

Edad (años):

Menor de 40

40-60

61-80

Mayor de 80

Sexo:

Femenino

Masculino

Factores de riesgo:

Tabaquismo

HTA

Dislipidemia

Diabetes Mellitus

Obesidad

Manifestaciones clínicas:

Dolor precordial

Disnea

Sudoraciones

Frialdad

HTA

Hipotensión arterial

Page 65:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo

Náuseas

Vómitos

Topografía según electrocardiograma:

Inferior

Lateral

Anteroseptal

Anterior extenso

Complicaciones:

Arritmia

Rotura cardiaca

Shock cardiogénico

Infarto del ventrículo derecho

Insuficiencia cardiaca

Insuficiencia valvular

Estado al egreso:

Vivo

Fallecido

Page 66:  · Web viewSe destacaron la hipertensión arterial y la dislipidemia como factores de riesgo asociados a la enfermedad (84.61%) y (69.23%) respectivamente, el dolor precordial estuvo