Revista del Seminario Padre Manyanet – Medellín Año XXXVII / Boletín digital Nº 24 –Enero

2013

“Debemos ser religiosos fecundos” P. Jesús Díaz Alonso, S.F. – Superior General

SUMARIO Seminario Padre

Manyanet

Editorial

P. Oscar Alberto Pulido S.F

“En el principio creó Dios los cielos y la tierra…un viento de Dios aleteaba por encima de las aguas” (Gn 1,1-2)

Iniciamos un nuevo año escolar, y con ello nuestro seminario se llena de la alegría de los nuevos y antiguos jóvenes, que en el aspirantado y noviciado han decidido vivir su experiencia vocacional. Realmente, se siente el Espíritu de Dios en estos inicios, animando con su presencia la respuesta vocacional y generosa de estos jóvenes que quieren discernir junto a la comunidad formadora, sus deseos por seguir a Cristo en nuestro pequeño y amado Nazaret de Medellín.

P. Cándido (director espiritual), Hno. Orlay, viceprefecto de aspirantes, Hno Miguel Ángel (ayudante de aspirantes- destinado a Roma), Hno Felipe (ayudante de noviciado-destinado a Roma) y este servidor P. Oscar, damos la bienvenida a todos los hermanos novicios y aspirantes, y esperamos que podamos ser orientadores y acompañantes, del proceso formativo que se nos ha encomendado por parte de la Congregación.

A todos los hermanos de Congregación, les pedimos oraciones y también presencia activa en este seminario, para que todos nos sintamos responsables de promover las vocaciones en nuestra Congregación. Ya saben que la presencia física ayuda a motivar los procesos formativos.

Sean todos bienvenidos a su casa de Medellín y que todo lo que hagamos por las vocaciones, nos haga dignos de ser bendecidos con la perseverancia y con nuevas vocaciones. Esta súplica la elevamos a nuestro Santo Fundador y a nuestros hermanos mártires, y que ojalá todos sintamos en todo momento el aleteo del Espíritu en todas nuestras Delegaciones para que crezcan y perseveren nuestros formandos.

¡Sí Señor, tuyos somos!

3

¡Completamente Internacionales!

4

Por una

identidad Nazarena

16

La experiencia de ser

formador 5

Noti-Vivencias

23

La visión del P. General

19

¡Sí Señor, tuyos somos!

Por el Hno. Iván Ceriani, N.S.F.

l pasado Domingo 26 de

Enero, ha tenido lugar en

nuestro Seminario Padre

Manyanet de Medellín, la

celebración Eucarística con

motivo de las primeras

profesiones religiosas de los

hermanos que el período

pasado realizaron el año

canónico del noviciado,

profundizando, de esa

forma, su fervoroso deseo

de consagrar su vida al

servicio de las familias, bajo

el carisma propio de nuestro

Instituto.

La Eucaristía fue presidida

por el Padre General, quien

en reiteradas oportunidades

recordó a los neo profesos la

importancia de la fecundidad

en la vida consagrada.

también los hermanos

escolares de la comunidad de

Chía, renovaron sus votos, y

en consecuencia, dieron

nuevamente su “Sí” firme y

seguro ante el buen Señor.

“Debemos ser religiosos

fecundos, para que de ese

modo, podamos contagiar la

alegría del Evangelio a las

familias”.

En el marco de la primera

profesión de los hermanos

Jorge, Miguel, Brayan, Diego,

Carlos, Reniel y Nelson Felipe;

E

¡Completamente internacionales! Por el Hno. Iván Ceriani, N.S.F.

unto con las profesiones

religiosas, la Congregación da

gracias a Dios y celebra, el

ingreso al noviciado de cuatro

nuevos candidatos a la vida

religiosa en nuestro Instituto.

Todos provienen de países

diferentes: Hno Carlos, de Brasil;

Hno Franklin, de Venezuela;

Hno Salvatore, de Italia; y el

Hno Iván, de Argentina.

La ceremonia de inicio del período

canónico del noviciado, ha tenido

lugar en la capilla de la casa de

retiros del Seminario Padre

Manyanet, presidida por el Padre

General, y en la que se hicieron

presentes los sacerdotes de las

comunidades de Medellín,

Putumayo, Chía y el P. Ettore,

Delegado de Venezuela.

Los cuatro hermanos firmando el acta

de inicio del Noviciado

P. Hernando (Delegado), HH. Franklin e Iván, Padre General, HH.

Carlos y Salvatore, P. Oscar (Maestro) y P. Cándido (Dir. Espiritual)

Un nuevo noviciado, con

nuevos jóvenes que desean

madurar en profundidad, su

intención de consagrar sus

vidas al servicio de la Iglesia

en las familias, y abrazar

nuestro carisma de tal

manera que ellos mismos

hagan carne el anhelo del P.

Manyanet: “Hacer de cada

hogar un Nazaret”.

Un nuevo noviciado, nuevos

integrantes, nuevas

ilusiones, pero un mismo

protagonista: Cristo.

El mismo Señor que cada

año nos acompaña y nos

bendice con sinceras y

generosas almas que

desean formar parte de

nuestra gran familia y

extender el amor a

Jesús, María y José por

todo el orbe.

¡DEMOS GRACIAS A

DIOS!

J

VIVENCIAS

La experiencia de ser formador Por el Hno. Orlay Meza, S.F.

El hermano Orlay, recién llegado desde la comunidad del

escolasticado de Chía, nos cuenta cómo vive sus primeros

pasos como formador y miembro de la comunidad

formativa de esta santa casa.

La experiencia de ser

formador de aspirantes es

una aventura maravillosa

que requiere mucha

responsabilidad. Esta labor

permite fomentar la unión

familiar entre los jóvenes,

procurando potenciar sus

valores, dones, cualidades y

talentos, pero sobre todo, el

crecimiento continuo en

sabiduría y gracia delante de

Dios y de los hombres

(Cf. Lc. 2, 40).

Para ello se requiere formar

integralmente al joven

aspirante en todas las

dimensiones que constituyen

su vida, especialmente en lo

referente a lo humano,

espiritual, intelectual y

familiar, profundizando en la

fe mediante la lectura asidua

de la Sagrada Escritura, en la

contemplación del Misterio

del Evangelio de Nazaret y

en la práctica de la

responsabilidad y caridad.

El fin de este acompañamiento

del Vice-prefecto de aspirantes

es permitir que el joven

descubra su propia vocación, ya

que el aspirantado es un centro

de orientación vocacional en

donde se ofrecen todas

herramientas para tal propósito,

y para que los candidatos vivan

con madurez su compromiso

cristiano adquirido por el

bautismo.

Actualmente en nuestro

aspirantado de Medellín se

encuentran 20 jóvenes

inquietos por descubrir cuál es

su misión como cristianos y

profundizar en su vocación a la

vida religiosa.

Son 20 jóvenes valientes

que han decidido decirle si

al Señor y comprometerse

más seriamente con el

seguimiento de Cristo

llevando un mensaje de

esperanza al mundo y

siendo luz para otros

jóvenes.

Yo, como su acompañante

en este proceso, pido la

asistencia del Espíritu

Santo para poder realizar

la delicada tarea de

orientar paternalmente a

estos 20 decididos jóvenes

por los senderos del

modelo perfecto de la

familia de Nazaret.

Camino hacia la montaña

Por Franco José Miranda Barraza, A.S.F.

L apóstol san Pablo, comparó el seguimiento

de Cristo como una carrera atlética donde

“Todos los deportistas se entrenan con mucha

disciplina. Ellos lo hacen para obtener un

premio que se marchita…” (1 Corintios 9: 25).

Hoy quiero realizar una comparación de mi

tiempo de descernimiento durante este período

de aspirantado.

Tuve la oportunidad de ingresar al Seminario

Padre Manyanet a principios del 2013 con

mucha expectativa, y abierto a aprender de

este camin, la vida religiosa. Debo confesar

que los primeros meses fueron de mucha

confrontación y lucha interna, puesto que

venía de un ritmo netamente laboral y

académico; me encontraba laborando en una

universidad privada en la ciudad de Bogotá

donde estaba radicado desde hace 4 años;

totalmente independiente. Cuando conocí

algunos integrantes del Seminario de Chía,

jamás imagine que iba ser parte de esta gran

familia.

Hoy que tengo la oportunidad de hacer un pare

(stop) y escribir sobre mi experiencia en esta

“carrera atlética” me atrevo a compararla con

la experiencia del alpinista que desea

conquistar la cima de una montaña. Al

momento de iniciar el ascenso

experimentamos que todo lo que llevamos

puesto nos pesa y estorba; esa sensación la

viví al descubrir que es necesario dejar a un

lado las prevenciones y los prejuicios, estar

dispuesto a dejarse guiar y moldear el carácter

E a través del servicio y la fraternidad.

Durante mi experiencia laboral eran muy

pocas las actividades grupales, y eso fue una

de las áreas más duras para mi experiencia

en el aspirantado, y más cuando las

diferencias de edad y regionales son muy

diferentes a las tuyas. Aprendí a dejar a un

lado el orgullo, la autosuficiencia por la

fraternidad y el trabajo en comunidad.

Además, aprendía a colocar al servicio de mis

compañeros de camino los conocimientos en

inglés y sistemas.

Para esta segunda etapa 2014, espero

aprender de Jesús, su entrega y servicio a

Dios sin descuidar a mi prójimo; de María, su

devoción y fidelidad a las promesas de Dios

meditándolas en mi corazón sin descuidar

que él tiene control de todo y de José, su

disponibilidad y sencillez para el servicio sin

dejar a un lado las responsabilidades de la

vida fraterna.

La cima será la primera estación y primera

experiencia para conquistar muchas más.

En el presente artículo, el joven Franco nos comparte su historia en el

Seminario Padre Manyanet desde que ingresó hace ya un año. En él, pone de

manifiesto cuáles son sus objetivos, proyectos y dificultades a la hora de

emprender el camino hacia la plena configuración con Cristo.

VIVENCIAS

“Todo hombre desea por naturaleza

conocer” (Metafísica, Aristóteles; I, I). El punto

clave radica, en que lo más difícil de ver en

profundidad por parte del propio ser humano,

es uno mismo; el mundo interior en el que se

edifica todo nuestro ser social y comunitario.

Pocos son los momentos en los que el

hombre de hoy detiene sus pasos para revisar

el camino recorrido, y aún menos, para

dedicarse a observar el contexto en el que nos

desarrollamos como hijos de un Dios que nos

ama más que a nada, y que se encuentra

constantemente a la espera de nuestra felicidad

en su amor.

El día 18 de enero, hemos comenzado los

ejercicios espirituales de preparación para las

nuevas profesiones, las renovaciones de los

votos y de inicio del noviciado de este año.

Junto al P. Sebastián Lee, predicador, la

Congregación nos propuso ahondar en nuestra

propia realidad interior, conocer cómo somos a

nuestros propios ojos, qué factores de

autolimitación y cualidades existen en nuestra

vida, qué provoca en nosotros el sistema social

donde estamos inmersos como hombres de

Dios, como religiosos y futuros sacerdotes.

La condición religiosa hace que seamos

como árboles, nos decía el predicador.

Por nuestra vocación a una vida

obediente, en todo momento estamos a

disposición de la Congregación, para que los

superiores puedan enviarnos donde se nos

necesite, donde podamos servir desde nuestra

pequeñez a esta familia y en ella, a la Santa

Madre Iglesia. Es por eso que, como los

árboles al ser trasplantados necesitan de una

buena raíz, los religiosos también necesitamos

una raíz fuerte y sólida, que no es otra más

que Cristo, motivo y fundamento de nuestras

vidas.

Debemos echar raíz en el Señor; para poder

crecer fuertemente y dar buenos frutos para

Dios y su Iglesia. Ese es uno de los puntos en

los que nuestra vocación ha de fermentar y

crecer: ser fecundos.

¡Conócete a ti mismo!

Por el Hno. Iván Ceriani, N.S.F.

Somos llamados desde el seno del hogar

de Nazaret a una vida casta, pobre y

obediente para ser fecundos, para contagiar la

alegría del Evangelio a las familias, para

edificar los corazones de nuestros hermanos;

para ser el reflejo del amor que existía entre

Jesús, María y José.

El ser humano, por su propia naturaleza

es un ser social. Es así como cada uno de

nosotros estamos insertos en un sistema

social, que desde niños va marcando nuestro

modo de ser, nuestra personalidad y nuestro

obrar. Precisamente en estos días, el P.

Sebastian nos ha acompañado en el

reconocimiento del sistema que rige nuestra

vida social. Debemos conocer cómo es el

sistema en el que nos desarrollamos, para

poder conocernos así a nosotros, y hacer

frente a los condicionamientos que el mismo

nos propone, y que inconscientemente uno

acepta, limitando su obrar a lo que los

parámetros del mismo nos indican como

bueno, normal y modelo a seguir.

El mundo en el que vivimos persigue estrellas,

reconocimientos, adulaciones.

Quien no entra en el casillero

merecedor de estrellas, recibe manchas,

burlas, desplazamiento de su entorno,

marginación. Ese es el sistema del mundo, y

en este mundo, perteneciendo a este

sistema, es cuando el Señor nos llama y nos

dice: “Ven, sígueme.”, y nosotros

respondemos. Pero para poder seguirlo con

firmeza en el mundo, debemos conocer bien

al mundo y al sistema en el que se

desarrolla la vida en él. El hombre puede

desear transformar cualquier realidad según

su propio querer, puede intentar modificar la

realidad según cierto parámetro o gusto

personal; pero siempre existirá una realidad

que excede la propia voluntad, y es la

voluntad de Dios. Ésta se manifiesta más

allá de nuestro querer, y es a merced de ella

por quien hemos de trabajar.

Lo que nos llena, no es el sistema que

rige el orbe, sino el Señor, que ha venido al

mundo para salvarnos, y se sirve de nuestra

propia pobreza, de lo que el sistema me dice

que son defectos, carencias, anormalidades,

para obrar con su inmenso amor y dar

buenos frutos.

Detener el tiempo de nuestras vidas,

para conocerse uno mismo, no es tarea fácil,

hermanos. Existe un tiempo, del cual

participamos, y que muchas veces no somos

conscientes. Un tiempo en el que se produce

un hito determinado, del cual posteriormente

todo lo demás participa, a lo largo de toda la

vida del hombre; y en los religiosos; en la

vida consagrada, es el descubrimiento del

amor de Dios. Ese amor, ha de transformar

toda nuestra realidad para conducirnos

siempre al lugar de donde hemos partido; a

ese llamado que cada día ha de resonar en lo

profundo de nuestras almas: “Ven, Sígueme”,

y que nosotros, enamorados en su amor y

prestos a su servicio, hemos de decir: “Señor,

Tu que me llamaste un día, llámame de nuevo

hoy”.

Somos hombres, llamados por Dios a

su servicio, desde un mundo complejo que

rodea nuestra existencia, y donde debemos

obrar acorde a su voluntad, en el amor a los

hermanos y en la seguridad de sabernos

amados por Dios tal cual somos, y eso es lo

que nos hace especiales. No necesitamos

más estrellas, no necesitamos

reconocimientos, no necesitamos más

premios que el de portar en nuestro corazón

un amor recibido por gracia de Dios, del cual

somos responsables y custodios, y por el cual

hemos de trabajar y servir a los demás,

todos los días de nuestra vida; hasta que el

buen Dios nos llame un día a su encuentro, y

descansemos finalmente, en Jesús, María y

José.

Que el Señor bendiga nuestra familia

eternamente.

“Allí donde estén mis pies, estará mi corazón”

Cada uno de los integrantes de nuestro pequeño Nazaret de Medellín, presenta su persona y su

propósito para este año en comunión fraterna.

Nuestra comunidad para este año

Hola, soy el Hno. Orlay Meza, S.F., vengo del “Seminario Padre Manyanet” de Chía,

y este año me han encomendado la formación de los aspirantes y postulantes.

En el Colegio Padre Manyanet de Medellín, me desempeño como profesor de religión en

el grado 7º y 9º.

Para este año me propongo crecer en conocimientos en lo que es menester a la

formación junto al P. Oscar en el seminario y fortalecer mi vida de entrega al Señor.

Un gran saludo para todos los lectores de “Vivencias”, agradezco inmensamente que

compartan con nosotros algunos acontecimientos que suceden en nuestra casa.

Para los que aún no me conocen, soy el Hno.Miguel Ángel Méndez, S.F. Soy

hermano escolar y adelanto estudios en Medellín, mientras me preparo para ir a Roma

para iniciar como tal mis estudios teológicos; así que, mientras esté en esta casa, mi meta

es prepararme adecuadamente para lo que me espera y aprender lo que más se pueda

del P. Oscar, en cuanto a lo que tiene que ver con formación.

¡Hola a todos! Soy el Hno. Nelson Felipe Gallo Ortiz, S.F. tengo 20 años,

vengo de Manizales (Caldas) y llevo 3 años de haber ingresado a esta preciosa familia,

a saber, la Congregación de Hijos de la Sagrada Familia, Jesús, María y José. No

obstante, después de haber finalizado mis estudios como aspirante, postulante y

novicio, me he decidido a profesar mi seguimiento radical a Cristo a través de los votos

de pobreza, castidad y obediencia. Además, en mi nueva condición como hermano

escolar, la congregación me ha pedido realizar los estudios teológicos en la comunidad

de Roma (Italia), en donde de seguro, me esperan nuevos retos y metas que alcanzar.

Es evidente, que el hecho de incorporarme a una nueva cultura, con diferente idioma,

ideologías, gastronomía, costumbres y todo en cuanto implica el modo de vida en

Italia, es de gran emoción para mí. Sin embargo, me propongo a aprovechar al máximo

de mis estudios y de todas aquellas cosas que me puedan hacer mejor persona y mejor

cristiano. Además, espero sin lugar a dudas, dejar en alto el hermoso país de donde

vengo y poner al servicio de la comunidad mi humilde disposición.

Hola, soy el Hno. Salvatore Fusci, N.S.F. Vengo de Caccamo, Sicilia; Italia. Hace

2 años ingresé a la Congregación en el Seminario Internacional “Nazaret” de Roma.

Cursé mis estudios filosóficos y teológicos en la Pontificia Universidad Lateranense de

Roma. Comencé la licenciatura en teología pastoral bíblico-litúrgica en la Universidad

Pontificia Salesiana de Roma. Para este año me propongo crecer en el amor al carisma

propio de nuestro Instituto.

Hola, soy el Hno. Iván Ceriani, N.S.F, de Argentina; tengo 22 años y cursé mis

estudios filosóficos en la Pontificia Universidad Católica Argentina.

Para este noviciado, me propongo en primer lugar estar presto a las transformaciones

que el Señor, por medio de los superiores, quiera hacer en mi persona para ser un buen

religioso y digno Hijo de la Sagrada Familia; y en segundo lugar, edificar mi espíritu en el

estudio y el trabajo, de tal manera, que toda mi vida sea el reflejo de la alegría y el

amor que caracterizaba a la comunidad de oración, trabajo y acción de Nazaret.

Hola, soy el Hno. Franklin Javier López Núñez N.S.F. Nací en Venezuela-

Edo Carabobo, provengo de la parroquia Jesús María y José, con mi familia vivimos en

el Socorro, Valencia, como una familia llena del amor de Dios.

Ingresé al seminario San José Manyanet, Caracas-San Bernardino, en 2011, culminé

mis estudios de Filosofía en la universidad para religiosos y religiosas ITER. Ya logrado

este paso al noviciado con gran trabajo y perseverancia, espero poder crecer como

persona, conocer más de lleno la gracia que Dios ha derramado en aquel hombre que

dio su vida por Nazaret, SAN JOSE MANYANET, y alcanzar aquello por lo cual Dios me

ha llamado, ser profeta de la familia, hacer de cada hogar un Nazaret.

Soy el Hno. Carlos Alexandre Cruz, NSF. Vengo de la ciudad de São Paulo,

Brasil. Tengo 29 años. En el inicio del año 2012 fuí admitido a la Congregación de los

Hijos de la Sagrada Familia. Ahora, en el año 2014, fui admitido al noviciado,, el cual

está localizado en la ciudad de Medellín, Colombia.

La gran expectativa que interpela mi alma, es la posibilidad de consolidar y

profundizar mi identidad manyanetiana, configurando mi espiritualidad y devoción a

la Sagrada Familia de Nazaret.

Soy Franco José Miranda Barraza, vengo de la ciudad de Barranquilla y

actualmente me encuentro en mi segundo año de filosofía. Esta etapa ha sido de

mucho crecimiento espiritual y familiar. Espero que el 2014 Dios siga

sorprendiéndome y que jamás deje de asombrarme por lo que Dios hace, ha hecho y

hará en mí y por mí; espero poder ofrecer toda mi devoción y caminar en su libertad.

Soy Víctor Alfonso Champutiz, estoy en segundo años de filosofía. Para este año

quiero seguir descubriendo mi vocación por medio del discernimiento vocacional brindado

por el Seminario Padre Manyanet. Unas de mis metas es ser un Hijo de la Sagrada Familia y

hacer de cada hogar un Nazaret, para que como San José Manyanet, pueda ser un profeta

para las familias.

Soy Jhonatan Javier Mora Tisoy, vengo de Santiago, Putumayo, tengo 20 años y

actualmente estoy en la etapa de aspirantado en el Seminario Padre Manyanet; curso

segundo semestre de filosofía. Para este 2014 espero crecer a nivel espiritual y formativo

con el fin de conocer más de la Congregación y de nuestro Santo Fundador, San José

Manyanet. Por último, aprender y aprovechar al máximo las oportunidades que nos

brindan tanto el Seminario como la Universidad para un gran crecimiento personal,

comunitario y espiritual.

Soy Carlos Herney Cuadros Vallejos, tengo 19 años y vengo de Ipiales, Nariño.

Actualmente curso segundo semestre de filosofía en la UPB. Desde mi ingreso al

Seminario me he sentido muy a gusto esperando siempre perseverar en este camino, el

cual he comenzado a recorrer. Espero para este 2014 crecer en sabiduría y

espiritualmente, enriqueciéndome con mis estudios además, afianzarlos con buenas

calificaciones y resultado en mi etapa de aspirantado y postulantado. Ahora sigo adelante

ya que el camino a la cima es muy duro pero en lo alto la vista es genial.

Soy Carlos Marino Caicedo Ruano, tengo 21 años y vengo del corregimiento la

Victoria, Ipiales, Nariño. Actualmente me encuentro en mi segundo año de filosofía del

aspirantado y estoy muy contento de estar en el Seminario. Para este nuevo año

empiezo con muchas ganas para continuar el camino de discernimiento de mi

vocación, es lo más importante que he elegido para ser un testigo fiel de Jesucristo

Nuestro Señor.

Soy Agustín Jansasoy Jansasoy, vengo de Santiago, Putumayo y aspiro compartir

ideas o conocimiento y tener una buena amistad con todos y seguir el camino de Dios.

Soy Félix Alirio Fuertes Champutiz, tengo 18 años y vengo del corregimiento la

Victoria, Ipiales, Nariño. Actualmente estoy cursando primer semestre de filosofía en la

UPB (Universidad Pontificia Bolivariana) desde el primer día que ingresé al Seminario

Padre Manyanet me he sentido muy agradecido y contento con todas las personas que

viven en este pequeño Nazaret.

Soy Carlos Mauricio Rodríguez Fuel, tengo 20 años. Desde mi infancia he

contado con el apoyo de mi familia, en especial de mi madre, que estuvo ayudándome en

mi ciclo académico durante mi vida. Por algún tiempo me vi obligado a suspender mis

estudios debido a una enfermedad que sufrió mi madre, la cual le impidió trabajar por

tres años los cuales tuve la necesidad de asumir la responsabilidad de sustentarla. Por la

gracia de Dios tuve una experiencia que me acerco más a Él y ahora espero formarme

primero como persona y seguir adelante con este propósito, el cual dejo en sus manos.

Soy Camilo Esteban Jansasoy Tisoy, aspirante del Seminario Padre Manyanet.

Espero de este año 2014 crecer a nivel espiritual, reafirmar mi vocación en el trascurso

de este año, servir a Dios mediante la obediencia, castidad y pobreza; compartir con mis

hermanos aspirantes, superiores y todas las personas que se encuentran en mi

alrededor, ser un buen hijo de Dios,y seguir el camino que él tiene preparado para mí.

“Alabada sea la Sagrada Familia”.

Soy Jaime Andrés Morales, vengo del corregimiento la Victoria, Ipiales, Nariño.

Estudié en el Colegio Mixto la Victoria. Y espero esta año 2014 conocer e indagar sobre la

vida religiosa y a la vez, seguir si es posible, el ejemplo de servicio de nuestro Señor

Jesucristo.

Hola, mi nombre es Heiner David Gomez Muriel, tengo 17 años y estoy cursando

el 1º año de Filosofía en la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín.

Ingresé al seminario este año y me encuentro muy a gusto. Me propongo para este ciclo,

continuar este discernimiento vocacional de la mano de la comunidad religiosa que nos

acompaña cada día.

Soy Geovanny Estivent Hernández Alvares, tengo 19 años estudio en el colegio

Padre Manyanet cursando el grado 11. Mi expectativa es llegar a ser sacerdote y terminar el

grado 11. Quise ingresar a esta comunidad porque creo que Dios quiere que trabaje con las

familias y ayude a los necesitados.

Soy Andrés Camilo Caucalí Varela, tengo 15 años y vengo de la ciudad de Bogotá.

Actualmente estoy cursando Décimo grado en el Colegio Padre Manyanet de Medellín.

Espero para este 2014 ser un hombre íntegro y de gran ayuda para la sociedad, ya que

este es el ideal por el cual estoy aquí.

Hola, soy Manuel Antonio Romero Espitia, tengo 17 años y estoy cursando el

grado 11º en el Colegio Padre Manyanet de Medellin.

Ingresé al seminario el 18 de enero de 2013 y desde ese momento comparto mi vida de

entrega al señor, junto a mis hermanos en este pequeño Nazaret.

Para este año me propongo cursar bien mi escolaridad y prepararme para la universidad,

a la ve que también me propongo crecer en el amor a la Sagrada Familia de Nazaret.

Soy Daniel Antonio Caicedo Tobón, tengo 15 años y vengo de un pueblo de

Antioquia que se llama Cisneros. Estoy en el Colegio Padre Manyanet de Medellín curso el

grado 10°. Mi objetivo es ganar el año para cursar al grado 11 y seguir fortaleciendo mi

vocación en el seminario Padre Manyanet.

Soy Ever Estevan Zapata Cano. Tengo 15 años, ingresé al seminario este año y

estoy muy contento de estar acá .Estudio en el colegio Padre Manyanet de Medellín

curso el grado 9. Estoy en el seminario porque quiero seguir el camino religioso y

conocer a Dios más de cerca. Muchas gracias por darme esta oportunidad de estar

aquí compartiendo este estilo de vida.

Soy Edward Sebastián Zapata Cano tengo 14 años ingrese al seminario el 23

de enero del 2014 junto con mi hermano Ever. Estudio en el Colegio Padre Manyanet

de Medellín curso el grado 9 mi expectativa para este año es pasar al grado 10.

Hola, soy Mario Esteban Espinoza Rúa, tengo 15 años y estoy cursando el grado

10º en el Colegio Padre Manyanet de Medellín.

Ingresé al seminario en 2013 y para este año me propongo finalizar mi año de estudios y

continuar alimentando mi vocación a la vida religiosa, amando cada día a Jesús, María y

José.

Soy Wilson Alexander Monsalve Cardona, tengo 14 años estudio en el Colegio

Padre Manyanet de Medellín, curso el grado 10. Mi expectativa para este año es que me

vaya bien en el colegio y seguir con mi vocación sacerdotal y nunca desanimarme por

cualquier cosa que me incomode.

Soy Ferney Yamid Henao Vásquez tengo 14 años vengo de Cisneros, estudio en

el Colegio Padre Manyanet de Medellín y estoy cursando el grado noveno; mi meta para

este año es pasar al grado decimo y continuar en la comunidad de los Hijos de la Sagrada

Familia.

Nos une nuestra vocación, nuestro espíritu y

carisma ; nos une Nazaret, y hacia él caminamos.

VIVENCIAS

Por una identidad nazarena

Por el Hno. Carlos Alexandre Cruz, N.S.F.

PORTUGUÉS

Palmilhar os caminhos do ano de 2014

é um desafio grandioso que, ao mesmo

tempo, traz a doçura de uma experiencia

vocacional e vivencial para todos aqueles que

se dispõem a doar um pouco de si mesmos

em favor das familias.

Preparar-se para abracar a vida religiosa é

uma experiencia que me interpela

diariamente. A formação é exigente e

demanda algum tempo de estudo e trabalho.

À guisa de problematização desse

tema, me coloquei a pensar o que significa o

ano de noviciado em mina vida. Cheguei a

uma conclusao nada original: consolidar e

aprofundar minha identidade nazarena e

Manyanetiana.

Lembremo-nos, por exemplo, de que

os cristãos da igreja primitiva tinham

características que lhes eran próprias e que

os distinguia de outros grupos sociais: “Se

mantinham constantes no ensinamento dos

apóstolos, na comunhão, na fração do pão e

nas orações; subiam diariamente ao templo

com perseverança e com um mesmo espirito,

partiam o pão nas casas e tomavam o

alimento com alegria e simplicidade de

coração, louvando a Deus e gozando de

simpatia de todo o povo” (At 2, 42-47).

Transitar los caminos del año 2014, es un

desafío grandioso que al mismo tiempo, trae la

dulzura de una experiencia vocacional y

vivencial para todos aquellos que se disponen a

donar un poco de sí mismos a favor de las

familias.

Preparase para abrazar la vida religiosa,

es una experiencia que me interpela

diariamente. La formación es exigente, y

demanda algún tiempo de estudio y trabajo.

A modo de cuestionar ese tema, me

dispuse a pensar lo qué significa el año de

noviciado en mi vida. Llegué a una conclusión

nada original: consolidar y profundizar mi

identidad nazarena y Manyanetiana.

Recordemos, por ejemplo, que los

cristianos de la Iglesia primitiva, tenían

características que les eran propias y que los

distinguía e otros grupos sociales: “Se

mantenían constantes en la enseñanza de los

apóstoles, en la comunión, en la fracción del pan

y en las oraciones; subían diariamente al templo

con la perseverancia y con un mismo espíritu,

partían el pan en las casas y tomaban el

alimento con alegría y simplicidad de corazón,

alabando a Dios y gozando de la simpatía de

todo el pueblo” (Hch 2, 42-47)

ESPAÑOL

PORTUGUÉS

Assim, percebo que o Filho da Sagrada Família

também tem características que o “marcam”

enquanto religioso. A principal delas é o amor

pela família, o zelo e disposição em trabalhar

por essa instituição, tendo por modelo a

Sagrada Família de Nazaré

Outra característica que destaco é a

alegria. Não existe Filho da Sagrada Família se

a alegria estiver oculta. A alegria é um

sentimento que vem da própria Sagrada

Família, a qual, mesmo nas adversidades,

mantia a serenidade e a alegria de “ser

família”.

Uma ultima dimensão que pontuo é a

disposição em renunciar a si mesmo em favor

da família. Esta, talvez, seja a característica

mais difícil de ser experienciada, afinal, deixar

sua pátria em busca de uma formação sólida e

que dê instrumental para um diálogo maduro

com a sociedade modierna, não é tarefa das

mais simples. Mas a renúncia de si não pára

por ai! Professar e viver os votos religiosos de

castidade, pobreza e obediência, exige do

religioso profunda experiência de

autoconhecimento e intimidade com Deus.

Enfim, todos os dias ao Filho da

Sagrada Família convém aprofundar sua

experiência com Jesus Cristo em Nazaré, a fim

de consolidar sua identidade como religioso e

consagrado. A alma do Filho da Sagrada

Família é sempre “Desidéria”, desejosa de

caminhar uma vez mais e fazer de todos os

lares um autentico Nazaré.

ESPAÑOL

Así, percibo que un Hijo de la Sagrada Familia

también tiene características que lo “marcan” en

cuanto religioso. La principal de ellas, es que el

amor por la familia, el celo y disposición a

trabajar por esa institución, teniendo por modelo

la Sagrada Familia de Nazaret.

Otra característica que destaco es la

alegría. No existe un Hijo de la Sagrada Familia si

la alegría está oculta. La alegría es un

sentimiento que viene de la propia Sagrada

Familia, la cual, aún en las adversidades,

mantenía la serenidad y la alegría de “ser

familia”.

Una última dimensión que puntúo, es la

disposición a renunciar a sí mismo en favor de la

familia. Esta, tal vez, sea la característica más

difícil de ser practicada finalmente; dejar su

patria en busca de una formación sólida y que de

instrumental para un dialogo maduro con la

sociedad moderna, no es tarea de las más

simples. Pero la renuncia de sí, no pasa por ahí!

Profesar los votos religiosos de castidad, pobreza

y obediencia, exige de un religioso, profunda

experiencia de autonocimiento e intimidad con

Dios.

En fin, todos los días al Hijo de la

Sagrada Familia, le conviene profundizar su

experiencia con Jesucristo en Nazaret, a fin de

consolidar su identidad como religioso y como

consagrado. El alma de un Hijo de la Sagrada

Familia es siempre “Desideria”, deseosa de

caminar una vez más y hacer de todos los

hogares un auténtico Nazaret.

Ejercitando nuestro espíritu

con el Santo Viacrucis

Por el Hno. Nelson Felipe Gallo Ortiz, S.F.

La experiencia de abandono, confianza y

patrocinio en el Señor, fue un aspecto

contundente y de gran énfasis, dentro de la

amplia temática que desarrollamos a lo largo de

los ejercicios espirituales, dirigidos por el P.

Sebastián Lee. En este sentido, ¿qué cosa mejor

que finalizar los mismos, en el clima reflexivo y

conmovedor del Santo Viacrucis?

Pues bien, como es conocido, la realización de

este acto de piedad, proporciona a quien lo

practica, la posibilidad de meditar todos aquellos

padecimientos y desprecios que Jesús tuvo que

asumir por nosotros, según vamos avanzando

por el espacio de 14 estaciones en las que se

estructura.

En nuestro caso, y con el fin de sacar mayor

provecho de los beneficios del conjunto del

Santo Viacrucis y los ejercicios espirituales;

distribuimos cada estación en diversos puntos

de la casa y en el marco de una disposición

penitente, y algunos cantos de perdón;

pedimos al Señor que nos acompañe por

donde quiera que vayamos, especialmente en

nuestros momentos de oscuridad, aflicción y

dolor; pues sólo al aprender de Él, que es

manso y humilde de corazón, somos capaces

de alcanzar fortaleza en medio de la

calamidad.

La visión de nuestro

Padre General Por el Hno. Iván Ceriani, N.S.F.

1. Estimado Padre Jesús: ¿Cuál es la realidad

por la que atraviesan las vocaciones a la vida

consagrada en el mundo entero, según su

parecer?

Pues hay una gran variedad de situaciones según

los continentes, países, contextos familiares y

religiosos… un dato claro es, sin embargo, la

disminución en Europa, una cierta estabilidad en

América Latina y un despunte importante en Asia-

Oceanía y en África. Ciertamente habría que matizar

pero las estadísticas generales muestran que la

“geografía vocacional” va en esa dirección.

2. ¿Qué considera necesario para trabajar en el

resurgimiento de una primavera de vocaciones?

Antes que nada la oración insistente y confiada al

Señor como Jesús nos pide en el evangelio: “Rogad

al dueño de la mies que envíe operarios a la mies”

(Lc 10, 2). Y, unido a la oración confiada, el

testimonio y la coherencia de la propia vida

personal, comunitaria y familiar. Como religiosos, por

nuestro estilo de vida sencillo y fiel, debemos

suscitar preguntas, ser profetas que iluminan el

presente y dan esperanza para el futuro, enamorar a

los demás con la alegría y felicidad de nuestros

corazones, por la entrega de nuestra vida y la

fraternidad comunitaria. Mostrar a Jesús,

acompañar, escuchar, estar… y también, cómo no,

programar itinerarios catequéticos, seguimiento

personalizado, dirección espiritual… en fin, todo lo

que ayude, en palabras del Papa Francisco a:

“¡Despertar al mundo, siendo testimonio de un modo

distinto de hacer, de actuar, de vivir!”.

3. ¿Cuál es la realidad por la que atraviesan y

las respuestas que brindan los jóvenes de

nuestros colegios en el trabajo pastoral-

vocacional?

La respuesta no puede ser uniforme pues hay

variantes determinadas por el país, el entorno

familiar, educativo y social de los propios

colegios etc. Pero puede decirse, a nivel general,

que se trabaja la pastoral con los chicos, junto a

los laicos, adaptada a las edades; integrada en

todo el proceso formativo de las escuelas como

un elemento fundamental del mismo; en relación

con las grandes celebraciones y tiempos

litúrgicos de la Iglesia; promoviendo la

experiencia espiritual y la dimensión catequético-

sacramental; en colaboración con las famílias.

Se hacen esfuerzos muy valiosos por presentar

la vida como vocación, para preparar “el terreno

interior” que favorezca una respuesta

generosa…pero ésta no es, en la mayoría de los

casos, la que quisiéramos. Sin embargo

seguimos sembrando, buscando nuevas formas

de lenguajes y de hacer las cosas que ayuden a

vivir la experiencia de encuentro con Cristo en la

comunidad.

En esta primera edición del año, compartimos con ustedes,

hermanos, una cálida entrevista al P. Jesús Díaz, S.F., en la

que nos muestra su mirada paternal y emprendedora ante

las diferentes circunstancias por las que atraviesa nuestro

Instituto como de la Iglesia toda.

“Debemos ser profetas que

iluminan el presente y dan

esperanza para el futuro”

4. ¿Qué proyectos tiene usted, que dirige el

timón de nuestro Instituto, para con las

vocaciones religiosas? ¿Cuál cree usted que es

la causa de tantas deserciones a la vida

consagrada?

El proyecto primero es ser un buen religioso capaz

de ofrecer el testimonio veraz de una vida feliz en

Cristo y en Nazaret, nuestra familia. Y, desde el

servicio actual, desarrollar el mandato capitular

que expresan los Acuerdos del XXII Capítulo

General cuya Prioridad n. 1 es: “Potenciar la

Pastoral de las vocaciones y asegurar la formación

de los religiosos”. No está resultando “fácil”, pero

continuamente se anima a cada religioso y a los

responsables más directos de la promoción

vocacional y acción pastoral a desarrollar los

programas establecidos en cada delegación y se

ofrece la ayuda necesaria para ello.

Respecto a la segunda pregunta no podemos

olvidar que la vocación es un misterio y también la

respuesta a la misma. Es cierto que no debemos

renunciar a nuestro testimonio personal y

comunitario pero lo es también que son muchas las

variantes a la hora de explicitar porqué unos

continúan su vida consagrada y otros, en

ambientes de formación y procesos similares, lo

dejan. Puede influir una estructura psicológica

debilitada por la mentalidad actual, la “cultura

líquida” que nos envuelve y atrapa en sus

postulados de inmediatez y superficialidad, el

miedo a los compromisos “para siempre”, la

incapacidad de asumir la propia realidad sin

renunciar al ideal soñado, dificultades en la vida

comunitaria…

“Es esencial seguir subrayando el valor esencial

de la familia como fundamento de la vida

personal, y garantía de la estabilidad y bienestar

social”

5. ¿Qué elementos esenciales son necesarios

a la hora de trabajar con las familias de hoy

en día y las duras realidades que afrontan?

Es esencial seguir subrayando el valor esencial

de la familia como fundamento de la vida

personal y garantía de la estabilidad y bienestar

social; potenciar y favorecer la unidad de la

misma para afrontar las dificultades de todo tipo

que ha de afrontar; cultivar el diálogo y el respeto

mutuo mientras se camina en la realización de

un proyecto de vida común; complementar el

trabajo de la educación de los hijos,

particularmente en el ámbito de la fe, ofreciendo

espacios de encuentro, crecimiento,

esparcimiento... y, en cualquier situación,

acompañarlas como sacerdotes y religiosos

educadores para que puedan vivir su propia

vocación al matrimonio y desarrollar el

protagonismo pastoral que les corresponde en la

Iglesia.

6. Como su sucesor: si tuviera que preguntarle

cómo actuaría San José Manyanet hoy en día

ante las realidades familiares, ¿qué me

responderia?

Creo que, en primer lugar, actuaría sintiéndose muy

cercano a la realidad de las familias y, desde esa

cercanía, les propondría, con la convicción de buscar

lo mejor para su vida matrimonial y familiar, un

camino de vida que pasa por asumir y vivir la

dimensión cristiana y sacramental en el horizonte

último de la santidad.

Les diría, no lo dudo, “Miren a Nazaret y sigan el

sublime y cercano ejemplo de Jesús, María y José”

que supieron, en circunstancias nada fáciles, fiarse

de la Palabra de Dios, acogerla en el corazón y

caminar aceptando la voluntad de Dios en sus

propias vidas. Creo que también les recordaría el

papel fundamental que tienen como primeros

educadores de sus hijos y transmisores de la fe con

la vivencia, celebración y práctica de la misma en la

propia familia.

7. En nuestro camino de formación, vamos

conociendo a Desideria y a su amor por el hogar

de Nazaret. ¿En qué consiste para un Hijo de la

Sagrada Familia, vivir como Desidera?

En caminar siempre hacia la meta de la santidad del

propio estado, poniendo los medios adecuados para

alcanzarla.

“Desideria” es sí, deseo de santidad, pero, al mismo

tiempo, esfuerzo, lucha, compromiso, sacrificio… por

vivir todos aquellos valores y actitudes que ayudan a

alcanzar la meta de todo cristiano y religioso. No

olvides que el solo “deseo”, por puro que sea, no

basta si no va acompañado de la fuerza de la voluntad.

8. ¿Cuáles son las delegaciones con más

necesidad de un resurgimiento vocacional? ¿Cree

posible superar la situación en tiempo no muy

lejano?

España, Estados Unidos… todas las delegaciones,

incluso Colombia donde, gracias a Dios, hay un buen

número de candidatos y de formandos, tienen

necesidad de un “resurgimiento vocacional”. Podemos

y debemos mantener la esperanza y alimentarla con un

compromiso concreto en favor de las vocaciones pero

la realidad, particularmente en algunos lugares, no es

halagüeña. El Espíritu nos irá guiando y ofreciendo

“signos” de los nuevos modos de responder a la

llamada de Dios; debemos estar atentos a leerlos sin

miedo y a poner la centralidad en la persona y en la

dimensión profética de nuestra vida religiosa así como

en la capacidad de renovar las estructuras. Por otro

lado, como recuerdan las Constituciones “cada

religioso ha de sentirse responsable del crecimiento de

la Congregación y colaborar… con la oración y el

testimonio de una vida personal y comunitaria alegre

y gozosa en el Señor”.

9. Al ver que el buen Señor nos está dando

vocaciones ¿cómo responder a esta situación y

sobre todo con buenos formadores para que

dichas vocaciones encuentren unan adecuada

formación?

Lo que hemos vivido aquí estos días, en el

seminario P. Manyanet de Medellín, es hermoso,

esperanzador y también un gran desafío para

todos. Queremos poner todos los medios para que

en las casas de formación se viva un ambiente

sereno en el que cada cual, según su misión,

asuma el compromiso de responder a la llamada

del Señor con agradecimiento y se esfuerce en la

construcción de la comunidad, tarea de todos.

Cada uno ha de hacerse, poco a poco,

responsable de su propia formación orientado y

acompañado por los formadores. No se puede

formar a los religiosos sin tener en cuenta, en

palabras del papa Francisco, “su vida, su

experiencia, su mentalidad, su contexto cultural.

Este es el camino".Hay que formar el corazón sin

olvidar que, hacerlo, es un “trabajo artesanal” en el

que hay que tener en cuenta también a quién van a

ser enviados.Los formadores, a quienes agradezco

su entrega generosa, lo saben muy bien.

10. ¿Cuáles son las inquietudes de un superior

general a la hora de escoger formadores?

Los religiosos que, conociendo los propios límites,

asumen con alegría la tarea de acompañar y dirigir

el proceso formativo en las diferentes etapas,

tienen el apoyo y la ayuda de toda la comunidad (y

la guía del Directorio de Formación). Son religiosos

profundamente humanos y con las ideas muy

claras para orientar en un camino de fidelidad y

felicidad, sin edulcorar falsamente sino con un

profundo realismo y conocimiento de la persona.

La formación es un reto permanente que pide sí

una actitud siempre renovada para acompañar,

guiar, orientar, iluminar… pero, sobre todo, un

amor extraordinario a Jesucristo, a su Palabra

revelada en los Evangelios, al carisma que nos legó

el P. Fundador, a la Iglesia y a la Congregación,

nuestra madre…, un amor capaz de generar vida,

ilusión y esperanza en cada formando y de

acompañarle en su proceso de discernimiento,

crecimientoy madurez. Los formadores y los

formandos han de ser sostenidos por la oración de

toda la Congregación.

11. ¿Cuál cree que ha de ser el papel de los

laicos en los colegios?

Los laicos que trabajan junto a nosotros han de

asumir el protagonismo que como bautizados les

corresponde. No debe haber “luchas” entre

religiosos y laicos; todos somos bautizados y

seguimos la vocación que hemos recibido de Dios.

Juntos debemos vivir y anunciar el evangelio y

colaborar para que la familia y la sociedad sean

cada vez más humanas. El P. Fundador fue

también pionero en este punto y consideró que la

espiritualidad de Nazaret debía vivirse en la familia.

“Preciosa joya de familia” es una clara reflexión e

invitación a vivir cristianamente la vida familiar

según el modelo de Jesús, María y José en

Nazaret.

Después de esta larga entrevista del nuevo director

de la revista “Vivencias” (que, por cierto, queda muy

bien tanto en los contenidos como en la

presentación de los mismos) solo queda decir, con

las palabras del P. Fundador: “Ánimo, pues, y

adelante!” a ti Iván, a Salvatore, Carlos y Franklin

así como a todos los aspirantes y formandos de la

Congregación. Les dejo las palabras del beato

mártir Pedro Ruíz: “Ahora que tengo 22 años es

cuando más me gusta la vida religiosa; es una

vida envidiable de cualquier modo que se la

mire. Agradezco a Dios que me ha llamado a

serlo y les agradezco a mis padres que no

hayan puesto ningún estorbo a mi vocación”.

Amad profundamente a Jesús, a María, la Virgen y

a San José y encontraréis la felicidad en vuestra

vida… y espero alegrarme el próximo año con

vuestra profesión religiosa.

¡ALABADA SEA LA SAGRADA FAMILIA!

Los formadores y los

formandos han de ser

sostenidos por la oración de

toda la Congregación.

Noti-Vivencias Enero 2014

17- I- 2014 Llegada de los postulantes a Medellín, listos

para comenzar el retiro de preparación para su inicio del noviciado.

El Postulante Salvatore, ya había llegado a la ciudad de Bogotá,tres días antes y aprovechó, junto al P. Sebastian Lee, predicador, a

conocer las comunidades de Bogotá.

20 – I- 2014 Comienzo de la semana de retiro, destinada a la preparación de los hermanos novicios para su profesión de votos, los

escolares para su renovación, y los postulantes para su inicio del noviciado.

El retiro ha sido predicado por el P. Sebastian Lee, S.F. quien ha hecho de esta semana un verdadero tiempo de

recogimiento y reflexión junto a la Sagrada Escritura y sus grandes experiencias y

conocimientos en su vida sacerdotal-ministerial.

23- I- 2014: Llegada del P. General a la ciudad de Medellín para presidir las ceremonias de

profesión de votos y de inicio al noviciado. El P. Jesús, no solo se limitó a estar

presente para las ceremonias, sino que luego pasó 3 días más junto a nosotros compartiendo su tiempo con la comunidad

del Colegio Padre Manyanet y con todo el alumnado.

En preescolar, ha tenido un encuentro muy significativo con los niños, donde cantó

junto a ellos y brindó su paternal afecto a los pequeños.

24- I- 2014: Festejamos en comunidad un nuevo aniversario de vida del aspirante Carlos

Cuadros. En el momento de la cena fraterna, aprovechamos para cantar,

festejar y reir todos juntos en familia.

25- I- 2014: Llegada de los familiares de los hermanos

neo-profesos a la comunidad del Seminario, en medio de la alegría de celebrar tan

inmensa gracia de Dios para las familias, hemos compartido entre todos con gran gozo, la estancia de todos ellos en nuestra santa

casa 26- I- 2014: Celebramos, junto a todas las familias y

sacerdotes presentes en nuestra casa, el

cumpleaños del aspirante Heiner López, en el

marco de un día tan importante.

A las 9.00 am, se dio inicio al noviciado de los

entonces postulantes: Carlos Cruz, Salvatore

Fusci, Franklin López e Iván Ceriani.

A las 11.45 hs, comenzó la Eucaristía en la

que profesaron los hermanos novicios de

2013, y renovaron sus votos los hermanos

escolares de la comunidad de Chía.

.

A las 14.30 hs, se procedió a pasar al

Restaurante de las instalaciones del

Colegio Padre Manyanet, donde

compartimos un almuerzo fraterno.

Por la noche, los hermanos neo-

profesos y los nuevos novicios, salieron

a cenar pizza, junto a su padre

maestro. Se ha compartido un

momento muy agradable y placentero

entre hermanos.

31- I- 2014: Toda la comunidad del Seminario, tanto hermanos novicios, como aspirantes, compartieron la primer jornada deportiva

comunitaria en las instalaciones del Colegio Padre Manyanet, celebrando la alegría de

vivir como hermanos. Luego del partido de fútbol, compartimos una limonada bien fresca para luego celebrar

la Eucaristía todos juntos.

Luego del deporte, debíamos alimentarnos

bien; por lo que el Hno Salvatore nos deleitó

con una auténtica pizza italiana. ¡Deliciosa!

GRACIAS POR COMPARTIR NUESTRA ALEGRÍA!