Trastorno Limite

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  • La Rev is ta de la Fundac i Pr ivada d A juda i Inves t igac i de l Tras tor n L mi t de la Persona l i ta t

    Septiembre 2007 N16

    AACCAAII-- TTLLPPAssociaci Catalana dAjuda i Investigaci

    del Trastorn Lmit de la Personalitat

    ENTREVISTA: Dr. Marc Ferrer. Hospital de la Vall dHebrn

    CONSIDERACIONES SOBRE LOS TRASTORNOS DE LAPERSONALIDAD: Prof. Dr. Nstor M. S. Koldobsky

    INTERVENCIN FAMILIAR EN EL TLP: Dolores Mosquera

    Y DE LOS HERMANOS QUE?: Diana Molina

  • editorial

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    SUMARIO

    EDITORIAL ......................................................................................3

    NOTICIAS ........................................................................................4

    DIFUSIN

    Los trastornos de la personalidad - Dr. Koldosbsky .............6Intervencin Familiar - Dolores Mosquera ..........................10Y de los hermanos Que? - Diana Molina............................13

    ENTREVISTA

    Dr. Marc Ferrer ........................................................................15

    EXPERIENCIAS

    Taller de Teatro Terapia - Quim Dalmau ..............................16

    PERSONAL....................................................................................17

    SERVICIOS DE LA FUNDACIN ACAI-TLP ...............................22

    DIRECCIONES Y ASOCIACIONES ......................................23/24

    Ficha Tcnica

    Revista perteneciente a la Fundacin ACAI-TLPPresidenta: Marina Foret JimenoDireccin: Junta de la Fundacin ACAI-TLP Portada: annimo

    FUNDACI ACAI-TLP

    Miembro de la FECAFAMM

    Miembro de AEF-TP

    Ronda General Mitre n 65 3 2 08017 Barcelona [email protected]

    www.sin-limite.net www.acai-tlp.com

    Depsito legal n B 14057-2002

    ENTIDADES COLABORADORAS

    Fundaci La CaixaFundaci Un Sol MonFundaci MafreFundaci RoviraltaCatsalutICASSDiputaci de BarcelonaFeafesLaboratorios EsteveLaboratorios PfizerLa CaixaBancajaInmobiliaria ColonialIbercarreraIbertecnoGrupo ZabalaDiners ClubCAM

    AMPLIANDO HORIZONTESACAI existe para contribuir a la mejora de la calidad de vida de los afectados por un TLP y a la de sus familiares. Siendo msambiciosos, el objetivo final de nuestra Fundacin es la estabilizacin total, y decimos estabilizacin porque no nos atrevemosan a utilizar la palabra curacin, no tan slo de nuestros asociados, sino tambin de cuantos padezcan este trastorno, sean dedonde sean y sean conscientes o no de que lo tienen.Si no creyramos que, de alguna forma, aunque sea muy despacio, estamos contribuyendo a este fin, disolveramos la Fundacin. Sinembargo, cada vez son ms los testimonios esperanzadores que vamos recibiendo, pero dado que siguen siendo muchas las vidasdestrozadas que se quedan por el camino, seguimos insistiendo a todos los niveles para que se incremente la investigacin y se pro-fesionalicen ms los tratamientos, matizando al milmetro los diagnsticos y facilitando terapias especficas sin sobremedicacin, talcomo ya se est haciendo en algunas unidades especficas de la red hospitalaria pblica y en algn que otro centro privado.Cuando decimos a todos los niveles nos estamos refiriendo por supuesto a Catalunya a travs de ACAI, pero tambin al restode Espaa mediante la AEF-TP, Asociacin Espaola de Familiares de afectados por Trastornos de la Personalidad que hemosdecididamente contribuido a crear, a Europa como miembros recientes que somos de EUFAMI, Federacin Europea deAsociaciones de Familiares de personas con Trastornos Mentales y a todos los pases de habla hispnica con la difusin y elimpulso al portal www.sin-limite.net.En ACAI hemos incorporado a nuestro pequeo equipo una directora mdica, antigua colaboradora nuestra y con una gran expe-riencia, cuya principal misin es poner y mantener al da todos los servicios que la Fundacin presta a sus asociados.Sin pretender entrar aqu en detalles, mencionaremos como novedad los talleres especficos de una sola sesin que se han empe-zado a impartir a familiares, con el objetivo de ampliar sus conocimientos en reas concretas, y reducir as el enorme desgaste fami-liar y ayudar a paliar tanta tristeza. Otra novedad, esta vez para los TLPs que estn o quieran entrar en el programa de insercinlaboral, es la posibilidad de realizar un proceso de orientacin acadmica o profesional previo a la insercin que permita dirigir alos interesados al tipo de trabajo ms indicado para ellos.En la AEF-TP colaboran ya diez asociaciones que se han ido creando recientemente en diversas ciudades, y cuya relacin figura enla contraportada de esta revista. La idea es mejorar la atencin que cada entidad presta a sus asociados, pero, sobre todo, lo quepretendemos es poder utilizar cuando sea preciso la fuerza que dan los nmeros en las ms altas instancias polticas del pas.Dado que por ms asociaciones locales que se vayan creando va a ser imposible cubrir todo el territorio nacional, y como losproblemas de los afectados y de sus allegados no entienden de geografa, hemos llegado a un acuerdo con la Presidencia de FEA-FES (Federacin Espaola de Familiares de Enfermos Mentales) para que, en cualquiera de sus cerca de doscientas delegacionesen Espaa, cualquier TLP pueda abrir una puerta y encontrar tras ella personas que conocen y comprenden su problema y pue-dan ayudarlo a buscar una solucin eficaz y prxima.En cuanto a la organizacin europea EUFAMI (www.eufami.org), hace dos meses escasos que hemos sido aceptados, a travs de laAEF-TP, como miembros en representacin de los TLPs espaoles. En este foro lo que queremos es aprender cmo han resueltootros pases problemas que ellos pueden haber ya tratado, mientras nosotros an estamos buscando cmo afrontarlos. Tambin que-remos elevar an ms el tono de nuestras reivindicaciones, para denunciar a nivel comunitario todo el dolor y toda la impotenciacon los que tenemos que lidiar aqu.Sobre el portal www.sin-limite.net no hace falta volver a insistir. Ahora estamos iniciando la fase de divulgacin del mismo, para queasociaciones, profesionales, universidades y todos cuantos puedan estar interesados en esta patologa, procedentes de cualquier pasde habla hispana, vayan incorporando y manteniendo los contenidos que estimen interesantes y que puedan dar respuestas, porejemplo a los numerosos correos electrnicos que recibe diariamente la web master del portal solicitando informacin y ayuda depersonas de centro y sudamrica.Por ltimo, queremos resaltar que en este nmero de nuestra revista contamos con un excelente artculo de difusin sobre los tras-tornos de la personalidad, escrito por el Dr. Koldobsky, profesional de prestigio internacional en dicho campo; igualmente intere-sante es la entrevista realizada al Dr. Ferrer, responsable del Programa de TLP del Hospital de la Vall dHebrn. La Psicloga DoloresMosquera nos explica su modelo de intervencin familiar y en otro artculo la tambin Psicloga Diana Molin aborda la problem-tica tan poco tratada que presentan los hermanos de los pacientes, y proporciona pautas a los padres sobre como afrontar esta situa-cin. Gracias al escrito de Quim Dalmau podemos ver cmo el teatro puede ser una potente herramienta para acercarse al trastor-no y, como siempre, personas afectadas nos cuentan sus experiencias y nos llenan de esperanza con sus escritos.

    Os saludamos con el afecto de siempre y desde aqu os deseamos mucho nimo en nuestra lucha.

    La Junta

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    I JORNADA SOBRE EL TRASTORNO LMITE DE LAPERSONALIDAD

    El da 11 de Mayo tuvo lugar en Barcelona la JornadaTRASTORNO LMITE DE LA PERSONALIDAD; UNDESAFIO PROFESIONAL, organizada conjuntamentepor la Seccin de Psicologa Clnica y de la Salud delColegio Oficial de Psiclogos de Catalua y laFundacin ACAI-TLP.La jornada, dirigida a psiclogos, mdicos, psiquiatras, yotros profesionales relacionados con el trastorno, supu-so un gran xito de asistencia (250 personas), lo que cer-tifica el momento de auge que experimenta y el intersque suscita esta patologa entre los profesionales de laSalud Mental.

    Se presentaron las siguientes ponencias:

    Del tratamiento o demanda al matiz teraputico.Equipo responsable del Programa del Trastorno Lmitede la Personalidad del Servicio de Psiquiatria delHospital Universitario de la Vall dHebron, formado porel Dr. Marc Ferrer Vinardell, Mdico Psiquiatra, JosepLlus Matal Costa, Oscar Andin Prez y Laura Alvarez-Cienfuegos Cercas, Psiclogos.

    Aplicacin de un programa estructurado para per-sonas con trastorno lmite de la personalidad y susfamiliares.Dolores Mosquera, Psicloga y directora de dos centrosde psicologia en A Corua.

    Neuroimagen y trastorno lmite de la personalidad.Dr. Miquel Gasol, Mdico Psiquiatra y Jefe de la Unidadde Trastornos de la personalidad del Hospital General deCatalua.

    Hospital de Da, un recurso teraputico parapacientes con TLP.Araceli Rousaud Pars, Psicloga de la Unidad deTrastornos de la personalidad del Hospital General deCatalua.

    ASAMBLEA DE FAMILIARES DE ACAI-TLP

    El 6 de Junio tuvo lugar en la sala de actos de la Casadel Mar la Asamblea de Familiares de la FundacinACAI-TLP. El acto sirvi de presentacin de la recinincorporada Directora Mdica, Sra. Mnica Lavilla, queformar parte del equipo con la funcin de coordinarlos diferentes dispositivos de la Fundacin. Se realiz unbalance de las actividades realizadas durante el ltimoao y se presentaron las nuevas lneas de actuacin.Entre ellas, destacar en cuanto a la atencin a los fami-

    liares la continuacin de los Grupos de ayuda mutua(GAM), la oferta trimestral del Seminario Psicoeducativo,la novedad de los Talleres Psicoeducativos (sesiones for-mativas de 2h. que versarn sobre temas monogrficosde inters) y las nuevas propuestas de conferenciasdivulgativas en la Casa del Mar. Respecto a las activida-des para personas con TLP, la incorporacin de un servi-cio de Orientacin Profesional y/o Laboral, que se sumaal servicio de Insercin Laboral, en funcionamientodesde hace ya algn tiempo.Se presentaron tambin las grandes cifras del presupues-to del ao en curso y, por ltimo, se hizo un llamamien-to a todos los asociados para que colaboren ms estre-chamente con la Junta.

    MESA REDONDA SOBRE TRASTORNO LMITE EN LAVEJEZ

    El da 4 de Julio tuvo lugar en el Colegio de Psiclogosde Barcelona una mesa redonda organizada por la sec-cin de Psicogeriatra y la Fundacin ACAI-TLP. Su obje-tivo fue intercambiar informacin sobre la incidencia deltrastorno lmite de la personalidad en la poblacin geri-trica y reflexionar sobre los mecanismos de deteccin eintervencin ms adecuados en esta edad.

    X CONGRESO INTERNACIONAL DE LA ISSPD(Sociedad Internacional para el Estudio de losTrastornos de la Personalidad)

    Del 19 al 22 de Septiembre tendr lugar en La Haya el XCongreso Internacional que organiza la ISSPD, y querene un gran nmero de ponencias y profesionalesespecializados en los trastornos de la personalidad(genetistas, neurobilogos, psiclogos del desarrollo,psicoterapeutas, psiquiatras) que presentarn las ltimasnovedades respecto a la gentica, a las relaciones que seestablecen entre gentica y entorno, respecto a la plasti-cidad del cerebro y a las nuevas perspectivas de trata-miento psicoteraputico y psicofarmacolgico. Este ao,el Congreso versa sobre el desarrollo y la variabilidad dela personalidad y sus trastornos.

    Conferencias en La Casa del Mar

    Nuestra Fundacin organiza peridicamente conferen-cias divulgativas gratuitas dirigidas a los asociados deACAI en La Casa del Mar, c/Albareda n 1-13.Prxima ConferenciaMircoles 3 Octubre a las 1900h.Dr. Subir Alvarez. Hospital Duran i Reynals. FSSB.UDAI-TLP Experiencia de 2 aos y proyectos futuros.

    INCORPORACIN DE ACAI -TLP A EUFAMI(Federacin Europea de Asociaciones de Familiaresde personas que sufren Enfermedades Mentales)

    A principios del 2007 la AEF-TP (Asociacin Espanyolade Familiares de afectados por Trastornos dePersonalidad), de la cual es miembro la Fundacin ACAI-TLP, estableci contacto con la EUFAMI (EuropeanFederation of Associations of Families of People withMental Ilness) con la intencin de entrar a formar partede ella. En la reunin del comit ejecutivo del 20 al 22de abril se di luz verde a su incorporacin. Este pasosignifica el reconocimiento europeo del trastorno lmitey abre nuevas posibilidades de cara a la investigacin ya la difusin, todava minoritarias respecto a otras enfer-medades mentales. Este ao, la EUFAMI celebra su 4Congreso Europeo, que tendr lugar del 14 al 16 deSeptiembre de 2007 en Tourn, Polonia, con el lemaHacia una mayor calidad de vida. Se puede consultar elprograma en www.eufami.org

    CONSTITUCIN DE LA ASOCIACIN APAI-TLP EN PER

    En Per se ha constituido la asociacin (APAI-TLP),destinada a atender a las personas afectadas de TLPy a sus familias, presidida por la Srta. Carmen BertaVallejos San Miguel.Entre sus iniciativas, destacar la organizacin del II ForoVirtual Internacional sobre Salud Mental, especficamen-te dedicado este ao al Trastorno Lmite de laPersonalidad, en colaboracin con la Fundacin ACAI-TLP, el Departamento de Educacin UGEL 3 y el Hospitalde la Vall D Hebrn.

    CONTACTO EN ARGENTINA

    Argentina tiene un punto de referencia en Buenos Aires,en el Gabinete del Dr. Pablo Gagliesi.C/ Malasia Belgrano, num. 857,Telfono: [email protected]

    INSTITUTO ARGENTINO PARA EL ESTUDIO DE LAPERSONALIDAD Y SUS DESRDENES (IAEPD)

    El Instituto Argentino para el Estudio de la Personalidady sus Desrdenes (I.A.E.P.D.), presidido por el Dr.Nestror Koldobsky, constituye un punto de referenciapara los profesionales interesados en los trastornos depersonalidad no solo en Latinoamrica, sino en Espaa.El objetivo general del Instituto es el abordaje de losaspectos psicolgicos, biolgicos y sociales relacionadoscon la Personalidad y sus Desrdenes.www.iaepd.com.ar

    II VIDEO CONFERENCIA ESPAA- PEREl pasado mircoles 25 de Abril tuvo lugar el II ForoVirtual Internacional sobre Salud Mental, auspiciado porel Ministerio de Educacin Peruano y con la colabora-cin de la Fundacin ACAI-TLP, el Hospital Vall dHebrny la Asociacin Peruana APAI-TLP. En esta ocasin eltema vers sobre el Trastorno Lmite de la Personalidady pudo ser seguido por participantes de varios paseshispanohablantes.La iniciativa cont con la colaboracin desinteresada dela Compaa T-Systems, que facilit el espacio y el soft-ware necesario para tal acontecimiento.Desde Barcelona, se presentaron las siguientes ponen-cias mediante video conferencia en directo:

    Introduccin al TLP. Trastornos de personalidad

    inductores de violencia.Dr. Marc Ferrer Vinardell. Psiquiatra Coordinador delprograma de Trastorno Lmite del Servicio de Psiquiatradel Hospital Universitari de la Vall dHebrn.

    Los trastornos de la personalidad y la conflictivafamiliar.Ps. Josep Llus Matali Costa. Psiclogo. Coordinador dePsicologa del programa de Trastorno Lmite delServicio de Psiquiatra del Hospital Universitari de laVall dHebrn.

    Aspectos Psiquitricos- legales de los trastornos depersonalidad.Dr. Francisco Collazos Snchez. Psiquiatra.Responsable del programa de Psiquiatra Transculturaldel Servicio de Psiquiatra del Hospital Universitari dela Vall dHebrn.

    Asociaciones y familias.Sra. Marina Foret Jimeno. Presidenta de la FundacinACAI-TLP.

    PRESENTACIN DEL NUEVO PUNTO DE ENCUENTROPARA FAMILIARES Y AFECTADOS POR TRASTORNOLMITE EN BANYOLES (GIRONA)

    La Fundacin ACAI-TLP y el Ayuntamiento deBanyoles inaguraron el da 3 de Mayo en la Sala deActos del Ayuntamiento de esta cuidad, un nuevopunto de encuentro en la provincia de Gerona parafamiliares y personas con TLP. Elisabeth Sogorb,Psicloga de ACAI, realiz una ponencia sobre ElTrastorno Lmite de la Personalidad y sus conse-cuencias.

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    Los Trastornos de la Personalidad (TP) tienen una presen-

    cia y un peso enorme en los ltimos 50 aos, ya sea por

    su influencia en la sociedad como por la demanda los

    pacientes con TP que realizan a los servicios de salud.

    La preocupacin por esta realidad, los TP y su efectos

    llev a que en el desarrollo los modelos multiaxiales

    (varios ejes) de clasificacin de las enfermedades menta-

    les, los TP fueran ubicados en un segundo eje o grupo

    (por Ej. en el del DSM de la Sociedad Norteamericana de

    Psiquiatra).

    Son conocidas las dificultades que ofrecen los pacientes

    con TP para un enfoque y el tratamiento institucional

    (internados o externados).

    Los TP, son formas persistentes, rgidas y desadaptativas,

    que tienen determinadas personas de conducirse, lo que

    limita su adaptacin creativa al medio. Estos trastornos

    (T) generan dificultades en la relacin consigo mismo y

    con los dems, inconvenientes que originan desajustes

    personales, laborales, familiares y sociales.

    Han tenido un avance enorme en los ltimos cincuenta

    aos, no porque no fueran considerados histricamente

    (se lo hizo desde la antigedad). Sucede que durante

    mucho tiempo predomin la idea de que los TP eran de

    difcil solucin; se los rechazaba para su tratamiento por-

    que este tipo de trastornos no siempre reconoce su pade-

    cer, su patologa o generan dificultades para quienes los

    tratan. Se manifiestan fundamentalmente en las relaciones

    interpersonales. Quienes lo sufren, muchas veces mortifi-

    can, manipulan, inclusive agreden a su medio ambiente

    familiar, laboral o a las amistades y tambin al terapeuta.

    Se hace entonces difcil el abordaje teraputico de perso-

    nas que son egosintnicas - que no reconocen su padeci-

    miento los que en numerosas oportunidades culpan al

    medio ambiente o a la sociedad de su situacin.

    No sabemos si estos cuadros han aumentado en nmero,

    pero lo que s podemos decir es que las grandes conmo-

    ciones sociales, especialmente a partir de la segunda gue-

    rra mundial, como las migraciones, el sufrimiento, la gue-

    rra, los campos de concentracin, los vertiginosos cambios

    econmicos y sociales fueron determinantes de la apari-

    cin de significativos desajustes de la personalidad. Estos

    desajustes existieron siempre, pero tal vez se hacen ms

    notables porque muchos de los rasgos de la personalidad

    patolgica, como la violencia, la bsqueda de sensaciones,

    las conductas de bsquedas impulsivas, drogas, alcohol, la

    bulimia y la anorexia, los suicidios y parasuicidios y la

    agresin al medio, se hacen muy notorias en la sociedad

    actual, una sociedad rpidamente cambiante y muy exi-

    gente para con sus miembros.

    Influyen en su aparicin y desarrollo los aspectos biolgi-

    co-constitucionales (el temperamento), los psicolgicos de

    distinto tipo (abuso fsico y psicolgico, abuso sexual,

    negligencia, abandono) y sociales (grandes cambios brus-

    cos, en general con aumento de la pobreza, el desarraigo,

    la violencia y el avance de las comunicaciones, con su

    carga de violencia y aculturacin).

    Las conductas desadaptativas se observan ms frecuente-

    mente en el grupo que va de los 20 a 30 aos, que tienen

    abuso de sustancias, internaciones previas y familias dis-

    funcionales, como antecedentes generales. Por tanto el

    seguimiento de estas variables en los TP permite adecuar

    el vnculo y el abordaje teraputico temprano con el fin de

    neutralizar posibles desajustes conductales durante el tra-

    tamiento.

    Entre el 2000-2007 los motivos de ingresos de muchos de

    los pacientes derivados al Instituto Argentino para el

    Estudio de la Personalidad y sus Desrdenes IAEPD,

    www.iaepd.com.ar fueron las conductas desadaptativas

    severas, en general por labilidad afectiva y descontrol de

    impulsos (acting out: droga, alcohol, intento de suicidio,

    automutilacin), agresividad. De los 1957 pacientes ingre-

    sados un 8,07 % fueron adictos y un 7,81% tuvieron pato-

    logas duales (adiciciones y otras patologas, predomina-

    temente TP): de la totalidad de ingreso son tomados al

    azar 76 pacientes internados, tuvieron como motivo de

    internacin ms significativos: 7,6 % esquizofrenia,

    18,24% T del nimo; 25, 84 % adicciones y duales. En este

    grupo la presencia de TP asociados fue: esquizoide

    2,28%; evitativo 8,36%; depresivo 15 ,72 %; dependiente 8

    ,36%; histrinico 1,52 %; antisocial 2 ,04%; narcisista 7 ,60;

    agresivo 5,32%; compulsivo 0,76%; pasivo-agresivo 2

    ,28%; masoquista 5 ,32; esquizotpico 0,76; bordeline 6

    ,84%; paranoide 5,32% (muchos pacientes tenan ms de

    un TP).

    Las cifras anteriores son fro reflejo de las patologas de

    ingreso, sin embargo cuando enfocamos los motivos de

    ingreso individuales vemos: M, con severos cortes en

    ambas muecas; A amenaza a su novio con un arma; R

    con un episodio micropsictico de percepcin de hostili-

    dad y agresin en su edificio de apartamentos; J con

    intento de robo para satisfacer sus bsqueda de drogas;

    I por encontrarse conduciendo su moto, en una rueda, de

    noche a 150 Km. por hora; I en un estado desesperado de

    tristeza por sensacin de abandono, hace grandes inges-

    tas de alcohol y se automutila con cigarrillos encendidos.

    Estas conductas se sostienen en el tiempo o son cambian-

    tes, pero determinan las serias desadaptaciones de estos

    individuos en el campo familiar, social y personal. Sus

    familias, severamente desajustadas, han venido buscando

    respuesta a estas serias dificultades por aos. Familias y

    pacientes estn vidos de explicaciones y de evitar el

    sufrimiento, lo que logran en muchas oportunidades con

    la aplicacin de sencillos proyectos de psicoeducacin,

    que el equipo teraputico realiza con ellos. Las familias

    tambin han sido el motor en la formacin de las asocia-

    ciones de padres de enfermos con TP, las que han jugado

    un rol fundamental para que los Estados, los servicios de

    salud, las gerenciadoras de salud y la sociedad toda se

    preocupe de asistir a estos pacientes, que si son abando-

    nados, integran el alto porcentaje de discapacitados por

    alteraciones en la salud mental.

    Actualmente decimos que hay una integracin de aspec-

    tos que son biolgicos- psicolgicos- sociales. Los biolgi-

    co- constitucionales pueden englobarse en lo que se

    llama temperamento, formas de estabilidad psquica, for-

    mas de relacionarse tempranas, que tienen mucha carga

    biolgico-gentica y que se estructuran muy dinmica-

    mente con los factores externos. Antes se consideraba que

    las familias o el medio eran los exclusivos determinantes

    en los TP; hoy sin subestimar su enorme significacin

    como causa de los TP, se ve tambin, sustentado por una

    profusin de trabajos cientficos serios, que en el desarro-

    llo de los TP se da una interrelacin de ida y vuelta,

    donde tambin la persona con sus alteraciones va gene-

    rando su propio nicho social, sus relaciones con los

    dems y la reaccin de aquellos a sus conductas o com-

    portamientos disfuncionales. El hecho que muchas fami-

    lias hayan tenido participacin en la causa de estos tras-

    tornos, no significa que en el aqu y ahora los estemos

    culpando y estigmatizando, sino que en la mayora de las

    oportunidades debemos incluirlos en el proceso del trata-

    miento, donde juegan un rol muy positivo.

    Los factores temperamentales que persisten en el tiempo,

    se manifiestan a veces con caractersticas clnicas P. Ej.,

    en el trastorno lmite o borderline de la personalidad, de

    alta incidencia entre los TP como el descontrol de

    impulsos, la labilidad afectiva, la ansiedad extrema, persis-

    tente, inmotivada y los episodios micropsicticos. Estas

    caractersticas clnicas o rasgos tienen un correlato biol-

    gico cada vez ms claro. Los factores se van complicando

    en el proceso del desarrollo e, interrelacionados con la

    influencia de una familia o el medio tambin disfuncio-

    nales, van comprometiendo el proceso de aprendizaje

    afectivo, cognitivo y conductal, lo que se traduce en noto-

    rias dificultades en la relacin familiar, con los pares, con

    la sociedad y consigo mismo. Aparecen en la niez como

    factores de riesgo y adquieren su pleno desarrollo como

    TP en la adolescencia y en la adultez temprana.

    Las estadsticas, producto de estudios epidemiolgicos,

    demuestran que los TP alcanzan aproximadamente al 2%

    ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LOS TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD

    Prof. Dr. Nstor M. S. Koldobsky

    Profesor Asociado de Psiquiatra de la Facultad de Ciencias Mdicas de la Universidad

    de La Plata,Argentina

    Director de la Carrera de Post-grado de Especialista en Psiquiatra y Psicologa

    Mdica de la Facultad de Ciencias Mdicas de la Universidad de La Plata, Argentina.

    los pacientes con TP

    Vicepresidente de la Rama Latinoamericana de la ISSPD (International Society for

    Study of Personality Disorders)

    Director del IAEPD (Instituto Argentino para el Estudio de la Personalidad y sus

    Desrdenes Email: [email protected] Sitio Web: www.iaepd.com.ar

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    difusin

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    de la poblacin pero su incidencia va cambiando de

    acuerdo al medio bajo estudio. En consultorios, aproxi-

    madamente es del 10%, mientras que en internacin

    puede oscilar entre el 30 y 50% y ms del 50% en institu-

    ciones de menores y en la crcel. Este porcentaje es ms

    notorio en los pases que han podido desinstitucionalizar

    a otros cuadros clnicos como esquizofrenia, depresin

    crnica, etc.

    Los TP son altos consumidores del presupuesto de salud

    pblica, por la sintomatologa propia, las conductas de

    alto riesgo, por su comorbilidad - muy alta - y por la pre-

    sencia de trastornos por somatizacin.

    Actualmente se sostiene que hay un TP cuando se consi-

    dera que la personalidad ya est formada su inicio se

    ubica alrededor de los 18 aos, aunque algunos autores

    hablan de trastornos previos como los trastornos pre-

    borderline que ocurriran mucho ms temprano. Estos

    cuadros pre as como otros que ocurren en la infancia

    como los trastornos de hiperactividad y dficit atencio-

    nal, los trastornos de conducta, la conducta oposicional,

    son objeto de tratamiento en s mismos pero constituyen

    factores de riesgo para el desarrollo de un TP; su abor-

    daje temprano se constituye en prevencin del desarro-

    llo posterior de TP, muchos de ellos graves. Hay una

    fuerte de acuerdo, pues no hay suficientes trabajos de

    investigacin que lo corroboren, que la madurez tarda

    encuentra a las personas con TP con una disminucin

    de las manifestaciones clnicas, an en forma espontnea

    (sin tratamiento). Es muy importante el rol que tienen las

    situaciones traumticas en el desarrollo de los factores

    de riesgo y de los TP.

    Los TP se dividen en tres grandes grupos, conocer las

    caractersiticas de los TP que los componen, especial-

    mente de aquellos rasgos que son de alto valor predic-

    tivo para que exista un TP, son de mucha utilidad para

    los profesionales y la poblacin en general, para detec-

    tarlos prontamente, por supuesto evitando el uso des-

    pectivo o estigmatizante.

    Uno de los grupos es el de los extraos o excntricos, que

    incluye a la personalidad paranoide, personalidad que se

    caracteriza por la desconfianza extrema; la personalidad

    esquizoide, donde hay una introversin y un aislamiento

    social aceptados por el paciente, y las formas esquizotpi-

    cas, que se caracterizan por la extravagancia en el pensa-

    miento, en su conducta o en la forma de relacin. Estos

    cuadros se consideran muy ligados a lo que se llama el

    espectro esquizofrnico.

    El segundo grupo, los emocionales o errticos, que tiene

    mucha significacin social y que se ve como un serio pro-

    blema del yo y de la interrelacin personales, es el grupo

    donde participa el T lmite o borderline de la personali-

    dad, que se destaca por una profunda inestabilidad en

    todos los aspectos de su vida, en especial en las relacio-

    nes interpersonales. El otro cuadro del grupo es el de T

    narcisista, caracterizado por una exaltacin patolgica de

    su vala personal, una autoestima exagerada, patolgica a

    lo que se une una tendencia a la subestimacin y manipu-

    lacin de las personas cercanas. Habitualmente son indi-

    viduos desconsiderados, desvalorizantes de los otros;

    muchas veces participan de la agresin familiar o de la

    desmoralizacin de sus empleados. Un tercer cuadro de

    este grupo es el de los T histrinicos de la personalidad.

    Se incluyen personas que tienen una exaltacin de la

    necesidad de ser atendidos, considerados, de tener un rol

    significativo en el medio donde se desenvuelven.

    Procuran ser el centro de la vida en las diferentes situa-

    ciones, por lo general son superficiales y cambiantes en

    todos los aspectos de su vida: en los afectos, en sus cono-

    cimientos y en el nivel cultural: tocan y dejan. Por lti-

    mo, en este grupo estn los T antisociales en los que hay

    que considerar dos aspectos muy importantes, aquellos

    individuos con conducta antisocial especfica y dentro de

    estos, un segundo grupo sumamente peligroso e intere-

    sante, conformado por individuos que tienen conducta

    antisocial, pero a la que agregan una insuficiencia del des-

    arrollo de los valores, especialmente en cuanto a no com-

    prender las normas sociales. Son individuos que no tienen

    por lo general, ni culpa ni remordimiento y que, en con-

    secuencia, si actan en un medio antisocial o criminal, se

    comportan como personas sumamente peligrosas. A este

    ltimo grupo corresponde la psicopata.

    Un tercer grupo est ligado a lo ansioso. Este grupo est

    ms cercano a conductas neurticas, pero sus trastornos

    los han acompaado durante toda la vida. Est integra-

    do por el trastorno evitativo; estas personas evitan situa-

    ciones sociales por miedo al reproche, a la crtica, a la

    desvalorizacin. Un segundo cuadro es el trastorno

    dependiente, son individuos muy dependientes de un

    cercano, al que entregan el conjunto de su vida y proyec-

    tos; estas personas a quienes el dependiente entrega su

    vida- son de un carcter y un yo ms fuertes, van ocu-

    pando y resolviendo cada vez ms aspectos de la vida

    del paciente, proceso en el que estos pierden cada vez

    ms su autonoma e independencia como personas. Por

    ltimo, estn los T de tipo obsesivo-compulsivo que, sin

    ser trastornos obsesivos compulsivos, por carecer de

    ideas obsesivas y compulsiones francas, presentan ras-

    gos de rigidez, de obstinacin, de una estrictez absoluta

    a las normas y en todos sus actos, un detallismo exage-

    rado, que a veces es muy til para organizar su vida per-

    sonal y de trabajo, pero cuando las condiciones cambian,

    se desestabilizan, mortifican a quienes estn a su lado y

    a sus familias por su excesiva escrupulosidad y orden. El

    T obsesivo compulsivo de la P tiene significativa presen-

    cia en la consulta externa.

    Hay otros TP que no estn en las clasificaciones interna-

    cionales pero no dejan de existir ni de ser interesantes,

    como por ejemplo, el pasivo-agresivo, dado en individuos

    que silenciosamente se oponen a rdenes, a indicaciones,

    rechazan las jerarquas, posponen la realizacin de sus

    tareas con el fin de entorpecer o molestar, tal vez por

    resentimientos o por inaceptacin de la autoridad. Est

    tambin lo que se llama personalidad depresiva, que es

    un TP muy discutido, que no est incorporado a los

    manuales internacionales por existir gran diversidad de

    opiniones al respecto. A este cuadro lo caracterizara los

    aspectos cognitivos, fundamentalmente el pesimismo cr-

    nico y la consideracin de lo inalcanzable de sus proyec-

    tos de vida.

    Los TP se asocian en numerosos casos entre ellos. Son

    muy pocos los individuos que tienen un slo TP, hay indi-

    viduos que presentan hasta ocho. Muchos de los trastor-

    nos estn emparentados con T afectivos y ansiosos, o par-

    ticipan activamente en el consumo de sustancias.

    Presentan muchas veces, otras conductas acting out o

    conductas de bsqueda e impulsivas como la anorexia, la

    bulimia, el alcoholismo, el suicidio y la autoagresin.

    Estas conductas acting out o conductas actuadas, son

    formas que utilizan los individuos para descargar sus

    impulsos, calmar sus angustias y enfrentar la desespera-

    cin que produce algn abandono reciente o la imposibi-

    lidad de concretar proyectos. La auto-mutilacin o auto-

    agresin es un ejemplo de ello, se da en individuos que

    se cortan, se lastiman o intentan el suicidio, son actos no

    caprichosos, que en la mayora de las ocasiones tienen

    como objetivo la bsqueda de ayuda y en otras, calmar la

    profunda angustia interior. Estas conductas tienen corre-

    lato biolgico.

    Los pacientes que no aceptan el tratamiento o que no

    reconocen su sufrimiento, concurren al mdico por las

    dificultades ocasionadas por la comorbilidad o por las

    consecuencias de sus conductas (impulsados al tratamien-

    to por esposas, familias, patrones o jueces). Estas asocia-

    ciones obligan a dos cosas, primero a tratarlas con las tc-

    nicas teraputicas habituales, y en segundo lugar, cuando

    se hace adecuadamente el diagnstico y se reconoce la

    presencia de TP asociados, es el momento de proceder a

    un tratamiento apropiado para ese TP. La presencia de

    patologa asociada permite al profesional tratante estable-

    cer, durante su tratamiento, las bases de una adecuada

    relacin o alianza teraputica, lo que facilita posterior-

    mente el abordaje del TP asociado. El tratamiento es tam-

    bin importante que se realice con las familias, que por lo

    general sufren mucho y tienen incomprensin de lo que

    est pasando y utilizan metodologas inadecuadas para

    relacionarse, incrementando en algunos casos los proble-

    mas que se suscitan.

    Los tratamientos de los TP hoy en da son tratamientos

    integrados. No hay pacientes con TP a los que no se les

    haya prescripto un psicofrmaco, a veces con razn y

    otras, sin ella. Los cuadros asociados deben ser tratados

    integralmente con las tcnicas que corresponden: la

    depresin, la ansiedad, la crisis de pnico, las adicciones.

    En los TP se dice que hay dos aspectos significativos: los

    que tienen relacin con lo temperamental, con base bio-

    lgica y los que tienen relacin con lo interpersonal con

    bases psicosociales. Por ejemplo los aspectos cognitivos

    en el espectro esquizofrnico, muchas veces responden a

    dosis bajas de neurolpticos atpicos que actan en los

    sntomas positivos, cognitivos (desorganizacin del pensa-

    miento, autorreferencia, extravagancia) y en aquellas acti-

    tudes semejantes a los sntomas negativos: abandono, ais-

    lamiento, desinters. En los trastornos borderline de la

    personalidad, es donde ms se han estudiado los correla-

    tos biolgicos y el tratamiento farmacolgico. En estos

    pacientes el tratamiento psicofarmacolgico ayuda en los

  • difusin

    11

    difusin

    10

    aspectos temperamentales como la inestabilidad afectiva,

    el descontrol de impulsos, la ansiedad y los episodios

    micropsicticos. Pero los psicofrmacos no resuelven los

    problemas interpersonales y conductuales, que tienen

    que ver con la otra muy importante vertiente en el trata-

    miento de estos pacientes, el tratamiento psicosocial, que

    incluye la utilizacin de diversos mtodos teraputicos, en

    diferentes etapas y a lo largo tiempo (ms de un ao), en

    un marco muy estructurado (firme) donde se pueden esta-

    blecer el contrato teraputico, estimular la motivacin del

    paciente y poner en prctica diferentes tcnicas en forma

    progresiva. El tratamiento se mide en general por la fun-

    cionalidad personal, familiar, laboral, educativa y social

    que alcanzan estos pacientes con el mismo.

    Los equipos teraputicos que tratan estos pacientes deben

    tener alto nivel de preparacin, estabilidad emocional, y

    organizacin para el manejo de la agresividad, manipu-

    lacin y el conflicto, as como la sensacin permanente de

    abandono, soledad y dao que tienen estos pacientes.

    INTERVENCIN FAMILIAR EN EL TLPDOLORES MOSQUERA. PSICLOGA CLNICA DELCENTRO LOGPSIC

    El da 10 de Mayo tuvo lugar en el marco de las charlas

    mensuales de difusin que organiza la Fundacin ACAI-

    TLP, una conferencia a cargo de la Psicloga Dolores

    Mosquera, de la cual les ofrecemos un resumen a conti-

    nuacin. Esta reconocida psicloga gallega ha sido pio-

    nera en Espaa en el tratamiento especfico del

    Trastorno Lmite de la Personalidad. Es autora de diver-

    sas publicaciones y manuales sobre el tema y ha disea-

    do un Programa de Tratamiento de corte eclctico para

    el tratamiento del trastorno lmite de personalidad, en el

    que combina sabiamente elementos de diferentes enfo-

    ques psicoteraputicos, y que utiliza en los centros que

    dirige en Galicia

    En la Intervencin familiar en el TLP destacan los pro-

    blemas de relacin que se intensifican en el entorno,

    familiar por:

    los lazos afectivos

    las relaciones viciadas

    la falta de lmites

    las dificultades en la comunicacin

    los roces de la convivencia

    el desgaste emocional por ambas partes (se acaba

    la paciencia, reina la saturacin, la frustracin, la desespe-

    ranza, la rabia, el rencor..)

    Las personas con TLP son conocidas por presentar reac-

    ciones desproporcionadas. Estas reacciones se se conta-

    gian en muchas ocasiones por la dificultad para compren-

    der lo que ocurre. Los familiares pueden adoptar compor-

    tamientos similares a la persona afectada de TLP.

    Se presta atencin al papel de los familiares?

    Hasta hace poco era relativamente frecuente que

    el paciente acudiese solo a consulta

    A veces acuda acompaado pero se mantena al

    marten a los familiares, no se peda su opinin o su visin

    de la situacin

    Muchos comentan que cuando intentaban buscar

    orientacin y/o pautas reciban crticas o silencio la mayor

    parte de las veces

    Otros comentan que se sentan culpabilizados,

    que sentan que se les haca responsables de la aparicin

    del trastorno

    Otros, que son los que ms me preocupan se

    dedican a buscar culpables, causas y a protestar acerca de

    las experiencias previsas y del trato recibido). Aunque

    esto es comprensible en muchos caos, no es de utilidad

    para ninguna de la partes implicadas

    En los ltimos aos, la familia est adquiriendo un

    papel importante en la intervencin (anteriormente lo

    tena pero era casi exclusivamente el de causante del

    problema). El cambio es positivo pues cuando no se

    tiene en cuenta:

    Se puede perder informacin importante que

    puede ayudar al paciente

    Los allegados se sienten ignorados y frustrados.

    Esto puede repercutir en mayores interferencias en el tra-

    tamiento (dudar del terapeuta, de la terapia, de las tareas

    que se proponen, hacer interrogatorios para saber qu se

    est trabajando en terapia o qu dice el terapeuta, )

    No se interviene en la comunicacin ni en la rela-

    cin familiar

    Es relativamente frecuente que sean los familiares los que

    establecen el primer contacto para solicitar informacin.

    Esta primera toma de contacto suele coincidir con una cri-

    sis (tras un intento de suicidio, una autolesin profunda,

    un estallido emocional que finaliza en la rotura de obje-

    tos, una agresin) o tras recibir el diagnstico. Se suele

    dar de manera desesperada y en ocasiones desbordada.

    Este desbordamiento suele ser producto de la impoten-

    cia y de la frustracin, de no saber qu hacer para mane-

    jar la situacin. En este sentido, es importante tener en

    cuenta que es frecuente que la desesperanza se transfor-

    me en enfado y esto haga que la manera de pedir ayuda

    y de apoyar al paciente sea contraproducente y excesiva-

    mente crtica es que hay que ser imbcil, mira que cor-

    tarse las venas, a quien se le ocurre!, si no le puedes

    atender hoy me voy a otro centro

    Algunos de los problemas que encontramos con relacin

    al paciente que acude a vernos son:

    Generalmente acude en crisis o despus de

    mucho tiempo de gestacin (por lo tanto la informacin

    estar sesgada y variar en funcin del estado de nimo

    del paciente y de la situacin en la que se encuentre)

    Caos emocional y cognitivo

    Dificultad para verbalizar lo que siente o para

    describir lo que le pasa

    Variedad de respuestas emocionales y conductuales

    Amplio historial clnico con frecuentes ingresos y

    numerosos diagnsticos

    Fracasos previos que hacen que el paciente acuda

    reacio y con desconfianza (aunque quiera ponerse bien y

    recibir ayuda)

    Mecanismos de defensa

    Algunos de los problemas que nos encontramos a nivel

    asistencial son:

    Falta de recursos

    Falta de profesionales formados y/o interesados

    en el tema (dispuestos a atender a estas personas)

    El supuesto mal pronstico (para qu intentarlo

    si son difciles y el resultado suele ser negativo?)

    La supuesta falta de adherencia a los tratamientos

    Las reacciones contratransferenciales

    Los mitos

    En muchos casos, por la desesperacin y la preocupacin,

    los familiares temen la reaccin del paciente y tienden a

    sobreprotegerlo o controlarlo en exceso. Esto repercute

    en ambas partes. Otras caractersticas frecuentes en los

    familiares de personas con TLP son:

    Variabilidad emocional y conductual

    Variabilidad en la forma de percibir al paciente y

    el problema

    Tendencia a ver al paciente como el problema

    y/o tratarle como a un enfermo independientemente de

    cmo se sienta y acte. Ejemplo la semana pasada se

    quera morir y ahora pretende salir tan tranquila, quiere

    volver a clase pero no puede porque est enferma

    Miedo a que el paciente se quede solo, a que se

    mate, a que haga alguna burrada

    Cambios de criterio frecuentes

    Dificultad para aplicar y mantener las pautas que se

    indican en terapia no pude porque tena miedo a que ,

    decirlo es muy fcil pero hacerlo no, t no vives con l

  • difusin

    13

    difusin

    12

    Conductas impulsivas en situaciones extremas o crticas (tendencia a actuar sin pararse a pensar en las posi-

    bles consecuencias)

    Problemas para fijar y/o mantener lmites

    Dependencia emocional variable

    Codependencia (adiccin a los problemas del paciente)

    Divergencia entre progenitores (el paciente recibe constantemente mensajes contradictorios y cambiantes)

    Tendencia a convertir las soluciones en nuevas quejas

    En el tratamiento intervienen dos psiclogos, uno de ellos trabaja con la persona afectada, y el otro con la familia.

    Conviene tener en cuenta los siguientes aspectos bsicos en la intervencin:

    Indagar acerca de la relacin e interaccin existente entre el paciente y los familiares

    Identificar pautas redundantes que no estn funcionando (es frecuente que lleven aos aplicando pautas muy

    similares a pesar de que no son efectivas)

    Ser neutral, ayudarles a ellos a serlo

    Recordar que los familiares tambin necesitan ayuda: se tiende a pedirles en exceso y sienten que se les da

    poco a cambio

    Psicoeducacin:

    Ayudarles a discriminar entre rasgos del trastorno y rasgos de personalidad del paciente

    Proporcionar pautas y estilos de comunicacin adaptados al paciente, a la familia y a situaciones especficas

    (es importante ayudarles a diferenciar entre una crisis, un momento intenso y un momento de desahogo)

    Existe una tendencia de los familiares a convertir soluciones en nuevas quejas, quizs debido al miedo a que si valo-

    ran las cosas que cambian, se vuelva atrs o haya un retroceso. Por tanto, hay situaciones a evitar:

    Confrontaciones y escaladas entre los miembros de la famlia y paciente

    Ultimatums como nica alternativa posible

    Tomar medidas drsticas sin aviso previo

    Aprovechar un acercamiento o un estallido del paciente para pedirle cambios o decirle todo lo que se lleva

    acumulando desde hace tiempo

    En definitiva aunque es comprensible preguntarnos las causas y seguir realizando investigacin, a nivel familiar es importante

    buscar soluciones, cmo mejorar. En cuanto a las reacciones, es importante entender e intervenir en los factores que las desen-

    cadenan ms que intentar entender la reaccin en s.

    Diana Molina. Psicloga Clnica del centro TLP TRACTAMENTSEspecializada en trastornos de la personalidad, ha recibido formacin en Terapia Dialctico-

    Conductual en los Estados Unidos y en la actualidad ejerce su prctica profesional en el HospitalGeneral de Catalunya interviniendo con las familias y en su centro privado, en Barcelona.

    Y DE LOS HERMANOS QUE?Cuando en una familia hay un miembro con TLP Cmo afecta a los hermanos? Cmo podemos protegerlos? Cmo

    se lo decimos? Estas son preguntas que suelen hacer los padres de hijos que tienen trastorno lmite de la personalidad

    y que tienen hermanos.

    Los hermanos, igual que los padres, necesitan una explicacin que les ayude a entender y actuar delante de las con-

    ductas errticas, cambiantes y a menudo caprichosas que muestra su familiar. Determinar como les afecta depende de

    diferentes elementos: cuanto tiempo de su vida ha girado en torno a la del TLP, qu tipo de problemas presentaba y

    que actitud han adoptado los padres.

    A veces han vivido en casa un ambiente conflictivo derivado de un hermano difcil que cuando era pequeo se carac-

    terizaba por sus rabietas, hacer algo ms que travesuras y tener a los padres siempre pendientes de l y que al llegar

    a la adolescencia se desborda totalmente. En otros casos su infancia ha discurrido de una forma bastante normal por-

    que los problemas del TLP aparecen por primera vez en torno a la adolescencia.

    El tipo de problemas concretos que aparezcan tambin es importante. Por ejemplo si la problemtica dominante son

    ataques de ira, cambios emocionales abruptos, conductas rebeldes y oposicionistas, consumos de sustancias es muy

    probable que los hermanos experimenten sentimientos muy contradictorios. Ven a su hermano como el culpable de su

    malestar, pero a la vez sienten pena y desconcierto por lo que le sucede. Pueden ocultar sus propias necesidades para

    no dar ms problemas a los padres, compensarlos por todo lo que el otro no hace e intentar hacer una vida lo ms

    normal posible. La relacin entre los hermanos puede ser distante porque sin entender lo que le sucede al otro, tome

    partido por los padres a los que ve sufrir una y otra vez por lo que el TLP hace. Como vemos vivir en casa es duro,

    pero no lo es menos la relacin con el exterior. Socialmente es muy probable que se sienta avergonzado, sienta que

    no vive en una familia normal y prefiera callar sobre lo que pasa en casa.

    Algo ms fcil es cuando la problemtica del TLP es menos actuadora ya que es probable que el grado de ruptura en

    la familia no sea tan intenso y se le vea ms como un enfermo. Los hermanos se sienten tan desconcertados como

    los padres, sufren viendo que su hermano no sale hacia delante, pero la comunicacin entre los hermanos es ms pro-

    bable que se mantenga sobre todo en aquellos momentos en que el paciente se muestra ms accesible.

    Por ltimo la actitud de los padres tambin influye. Hay padres que responsabilizan en exceso a los hermanos, que les

    piden que medien en los conflictos, que cubran las dificultades o las carencias del TLP, que lo vigilen, en resumidas

    cuentas, que los hacen aliados suyos para que ayuden en el problema que tienen en casa. Los padres de forma incons-

    ciente los implican en el conflicto que ellos mismo no saben solucionar. A veces esta funcin es aceptada por los hijos

    y les acerca a los padres, pero les aleja del hermano, perdiendo as la relacin fraternal. No obstante ayudar a los

    padres, sus sentimientos hacia ellos son contrarios. Les duele el sufrimiento de los padres, pero tambin les duele sen-

    tir que los padres slo se ocupan del otro y ellos siempre estn en un segundo plano.

    En otras ocasiones los hermanos rechazan este papel y reivindican su espacio propio. Si los padres no estn sobrepa-

    sados entienden la crtica y modifican su forma de actuar. En los casos en que los padres no pueden desprenderse del

    problema del TLP, los hermanos pueden decidir vivir en casa con una mnima implicacin emocional, como si viviesen

    en una pensin y soar con el momento en que puedan vivir independientes.

    Estas situaciones y otras parecidas hacen que los padres sufran por sus otros hijos y se plateen como protegerlos.

    Primero hay que intentar desdramatizar la situacin. Como dice un refrn cada familia es un mundo, lo cual quiere

    decir que cada familia tiene unos condicionantes y condiciona de una manera a sus miembros. Slo en el a largo plazo

    El dia 8 de Octubre a las 19h. tendr lugar en el Aula Magna de la Universidad deMedicina de Lleida una conferencia a cargo de la Psicloga Dolores Mosquera con el ttulo

    Mitos y realidades del TLP.

    PARA MS INFORMACIN CONTACTAR CON LA ASOCIACION PONENT TELF: 973 221019

    O BIEN EN: [email protected]

    Universidad de Medicina de Lleidac/ Rovira Roure n 44. Lleida.

  • entrevista

    15

    difusin

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    ENTREVISTA AL DR. MARC FERRER

    El Dr. Ferrer es Psiquiatra, Coordinador del Programa de Trastorno Lmite de la Personalidad del Servicio

    de Psiquiatra del Hospital Universitario Vall dHebrn de Barcelona. Este programa se inici hace un par

    de aos a partir de la constatacin de que muchos de los adultos diagnosticados de Trastorno por Dficit

    de Atencin que estaban recibiendo tratamiento en el hospital, tambin padecan TLP. El Dr. Ferrer admi-

    te que se consideraba a si mismo un psiquiatra ms bien biologicista hasta que realiz en 2006 la forma-

    cin en Terapia Dialctico Conductual (Marsha Linehan) en Estados Unidos. El modelo le sedujo por su

    sentido comn y sus bases slidas y desde entonces est apostando por aplicarlo en la unidad.

    Segn nos comenta, el TLP se considera una patologa compleja cuyo desarrollo va ligado al proceso de maduracin del sistema nervio-

    so central. Segn el Modelo Neuroconductual se considera que en los primeros aos de vida (aproximadamente hasta los 6 aos) existe

    una alta vulnerabilidad neurolgica que si va acompaada de ciertos estresores ambientales (como el maltrato fsico, la negligencia, el mal-

    trato psicolgico, la ausencia de modelos educacionales estables), puede favorecer el desarrollo del trastorno. Segn este Modelo, un 50%

    de la causalidad sera gentica y el resto ambiental. Por eso es fundamental la actuacin en esa franja de edad de 0 a 6 aos.

    Que tipo de intervencin sera la mejor para la prevencin en esas edades?

    Se ha visto que cuanto antes tenga lugar en el entorno del nio/a un tipo de dinmica familiar desfavorable, ms negativamente puede influir

    en su neurodesarrollo, por tanto es importante ayudar las familias a funcionar de otra manera, a desarrollar otro tipo de dinmicas. La

    Psicoeducacin ayuda mucho. Las familias deben reforzar su rol de padres por encima del de psiclogos o amigos.

    Cree usted que la escuela es una fuente de deteccin en la franja 0-6 aos?

    Se detecta ms en la adolescencia, antes es difcil. Las urgencias hospitalarias hoy en da suelen ser la forma de deteccin ms habitual, no

    tanto las escuelas.

    En los Estados Unidos existe el Teen Screen, que es un programa impulsado por la Universidad de Columbia, pensado para detectar con-

    ductas suicidas y parasuicidas en los adolescentes. Si detectan un adolescente con autolesiones, lo envan directamente al centro de salud

    mental correspondiente.Aqu tambin hay que apostar por hacer un sistema preventivo eficaz y que los chavales con problemas no pasen

    en el colegio por raritos sin ms, hasta que llega una urgencia.

    Estn especializadas las urgencias hospitalarias espaolas con protocolos de actuacin especficos para personas con TLP?

    De momento se trata ms de iniciativas personales que de protocolos establecidos. En el Vall dHebrn tenemos la voluntad de que pro-

    gresivamente el Programa de TLP se enfoque hacia la gente joven (entre 14 y 20 aos). Esto evitara muchas intervenciones posteriores.

    Se debera diagnosticar un TLP en la adolescencia?

    No disponemos de pruebas validadas, ni datos concluyentes. Podemos diagnosticar la existencia de un trastorno de conducta y de ciertos

    rasgos lmite de personalidad. Esto debera orientar una intervencin especfica que minimice la expresin de un futuro TLP. Ms impor-

    tante que la etiqueta, que podra ser estigmatizante, es tratarlo como lmite.

    Qu han podido estudiar respecto a la comorbilidad con otros trastornos?

    La mayor comorbilidad la hallamos con el Trastorno por uso de sustancias. En segundo lugar, con el Trastorno por Dficit de Atencin e

    Hiperactividad.

    Por eso, adems de las pruebas habituales hacemos una evaluacin del Trastorno por Dficit de Atencin e Hiperactividad, que en la edad

    adulta se ha visto que tiene muchos sntomas como la impulsividad o la inestabilidad emocional que se pueden identificar errneamente

    como TLP. Nuestros datos indican que un 40% de los pacientes cumplen criterios para los dos trastornos. La evolucin sin tratar del TDAH

    puede condicionar la expresin de rasgos de personalidad como la impulsividad. Adems, la respuesta farmacolgica al TDAH es muy

    buena, y eso produce un gran alivio a la persona.

    Se pueden considerar autolesiones los piercings o los tatuajes?

    Conviene no caer en la excesiva psiquiatrizacin. Se trata de manifestaciones culturales ms que de conductas autolesivas. S lo son los

    atracones de comida, los atracones de drogas o alcohol, etc.

    sabremos el efecto que tales vivencias ha tenido en los hermanos. Presuponer de entrada que su repercusin es nega-

    tiva, es dar por hecho la debilidad del resto de los hijos y tener una visin parcial de la vida de familia, dado que el

    todo es ms que la suma de las partes. En segundo lugar mencionaramos tres principios de actuacin:

    a) no implicar a los hermanos en los problemas creados por la persona con TLP, salvo cuando sea imprescindible.

    Pensemos que es bueno que la relacin entre hermanos se mantenga y como no se puede hacer que los problemas

    desaparezcan, si es necesario descargar la situacin familiar all donde se pueda. b) crear con ellos una relacin ajena

    a los problemas familiares, compartiendo reas de relacin propia.

    c) tolerarles la expresin de sentimientos negativos hacia el hermano TLP con el objeto de reconocerles aquello que

    sienten.

    Por ltimo la cuestin relativa a cmo se le dice que su hermano tiene TLP. Si estos son mayores, una vez los padres

    han entendido el trastorno estn en condiciones de explicarlo con las mismas palabras con las que a ellos se lo trans-

    mitieron. El panorama es diferente cuando los hermanos son menores al que tiene el trastorno y es difcil hablarles en

    trminos propiamente adultos, pero por otra parte han presenciado situaciones poco habituales como idas y venidas

    a urgencias, crisis de nervios, amenazas de autolesiones y a los padres desbordados o deprimidos frente a las dificul-

    tades de su hermano.

    El momento en que los padres se plantean comunicarlo al resto de hijos es cuando existe seguridad respecto al pro-

    blema, es decir, cuando hay un diagnstico. Este abre una nueva etapa y es lgico que de ella se beneficien todos los

    miembros de la familia: el paciente como actor de su trastorno, los padres que se han visto directamente implicados y

    los hermanos que lo han vivido de forma indirecta pero tan confundidos como los dems.

    Seguidamente daremos algunas pautas que nos pueden ser de utilidad siempre que nos planteemos como decrselo a

    los hermanos y estos sean adolescentes o dudemos de que enfoque adoptar:

    Se debe partir del relato que hace nuestro hijo: de lo que le preocupa, molesta, duele, o enfada. Intentar ver que dice y que no dice. Puede que aquello que no dice sea debido a que se siente culpable osienta que es injusto con la situacin. Darle nombre es empezar a ayudarle a vivir en la situacin que le ha toca-

    do, quitarle fuerza y desdramatizar sentimientos negativos que le pueden hacer sentirse malo.

    Hay que descargarlo de culpa y validar sus emociones y la forma en qu acta, aunque habr otras ocasio-nes en que lo adecuado ser sealarle formas alternativas de actuar.

    Distinguir entre el trastorno y la persona. Destacarle los puntos positivos del hermano con TLP, aquellas acti-vidades, actitudes que han compartido. Se tratara de mostrarle que su hermano con trastorno es algo ms que un

    hermano conflictivo.

    Depende de la edad del interlocutor es mejor evitar la palabra trastorno y hablar de dificultades para noponerse nervioso o algo parecido, pero que conecte con el relato que nos haya hecho previamente.

    Hay que fomentar la aceptacin del hermano tal y como es, con sus puntos fuertes y dbiles. En la medida de lo posible y siempre relacionndolo con su relato hay que hablarle de una forma realista, peroesperanzadora de las dificultades de su hermano. Por ejemplo decirle que es muy posible que su hermano siga

    teniendo crisis, pero saber como actuar ayudar a que estas cada vez sean menos intensas.

    Sera conveniente darle algunas pautas que le ayuden a protegerse de determinadas conductas por las que sesiente especialmente dolido y cuya reaccin puede hacer empeorar las cosas.

    En ciertos casos en que sentimos que nuestro hijo es muy responsable, hay que descargarle de la necesidad deser de una forma determinada, ya que se pueden sentir en la obligacin de callar y comportarse bien para evitar

    crearnos problemas aadidos.

    Esta serie de pautas son vlidas con respecto a como comunicarlo y tambin son actitudes vlidas para ayudar a los

    hermanos a enfrentar sus dificultades con el TLP. Slo nos queda aadir que para que la comunicacin funcione es

    necesario que haya una congruencia entre lo que se dice y como se dice, dado que el 70% de la comunicacin es

    no verbal. Slo si somos autnticos podremos ayudar a nuestros hijos y esto no se puede ensear en un artculo, es

    algo que se transmite de forma natural cuando creemos en lo que estamos diciendo.

  • personal

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    experiencias

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    UNA PROPUESTA CAMBIAR ES POSIBLELo sientes

    Lo intuyes

    Lo sabes

    La necesidad de un cambio se afirma en tu interior, quiz la duda y el

    temor te detienen. Puedes intentar cambiar el rumbo de tu camino.

    Un camino es slo una orientacin, no es nico, ni fijo. Tampoco es para

    siempre. Frente a la encrucijada, tu eleccin puede ser otra. Pocas cosas

    en la vida son tan permanentes como el cielo la tierra. Todo lo dems,

    incluidos los seres humanos, cambia. Tu camino tambin puede cambiar.

    Por eso es bueno el desapego y no aferrarse a lo conocido y seguro. Dejar

    que la vida fluya y se encamine hacia los cambios. Prestar atencin a las

    indicaciones o seales del camino.

    En el movimiento constante est la renovacin. Ella se da en la naturale-

    za, en la mente y en el espritu.

    El camino va buscando su propio sentido, a veces con armona, otras con

    tropiezos. Justamente cuando ocurre un tropiezo.....ha llegado el momen-

    to de escuchar el mensaje del camino: es necesario tomar otra direccin.

    Lo que te da inseguridad es tener que abandonar un recorrido al que ya te habas acostumbrado. pero el hbi-

    to te hace perder el goce de la travesa, y perder la oportunidad de transitar por otros recorridos, donde tal

    vez encuentres aquello que an sin saber, estas buscando y necesitando.

    Por eso no temas, no huyas cuando sobrevenga un cambio.

    No te obstines en mantener una posicin, que ya no es conveniente.

    Es necesario que seas flexible y te adaptes a las circunstancias. Aunque al principio te cueste entenderlo, los

    cambios siempre son para mejorar y evolucionar hacia una instancia superior de desarrollo.

    Lentos o vertiginosos, pacficos o violentos, deseados o no, los cambios son los motores del progreso. Evitan

    que te estanques o te marchites. Hacen que la abundancia y afluencia de bienes pasen por tu puerta, plante-

    ndote oportunidades.

    El movimiento es la mxima manifestacin de la vida y de la prosperidad.

    Por el contrario, la rutina significa estancamiento.

    Por eso, decdete a iniciar ese camino, entrgate al movimiento y mira con otros ojos el curso de la vida. Ella

    misma te seala el momento adecuado para actuar con creatividad.

    El camino es un acto de fe, nace de la puja entre lo viejo y lo nuevo. No hay motivopara arrepentirse de la transformacin. I Chinq . Hexagrama 49

    El teatro es una herramienta fantstica para trabajar la propiaexpresividad. La base del inters de este trabajo se sostiene enque el cuerpo humano, sus emociones y pensamientos, estnperfectamente constituidos para la expresin, y fatalmenteconstruidos para la retencin. Es evidente que esta expresivi-dad tiene que ir acompaada de unos mrgenes que no la des-borden. Igual que un ro, el agua tiene que bajar, pero necesi-ta unas orillas para que esta bajada sea lo que tiene que ser,fuente de vida.El smil del pantano tambin nos puede ayudar. Cuando un rose desborda o es porque ha llovido demasiado o es porque undique se ha roto. Ambas cosas nos hablan de exceso.Evidentemente, dentro del ciclo normal de la naturaleza, losdesbordamientos del ro han dado lugar a fuentes de riqueza,ya que se han sabido aprovechar, bsicamente, porque soncclicos en una determinada frecuencia; es decir, se han podi-do ordenar. No quiero referirme a los desastres naturales, queson inexplicables y que, en todo caso, si son para bien, losern en un futuro demasiado lejano como para poder superarlos daos y el dolor que provocan en el nuestro aqu y ahora.Siguiendo con este smil, el otro caso que tenemos es el deldique que se rompe, la causa del cual puede ser un diquedefectuoso o por una fuerza empujante del agua. Sea lo quesea, se termina rompiendo la barrera de sostn y sale toda elagua de golpe, provocando debastacin y desastre.Pues bien, con la expresividad pasa lo mismo. Las emocionesretenidas sin ninguna va de escape, sin unos mrgenes cons-truidos para que puedan expresarse lbremente, reciben est-mulos continuamente y luchan para salir del lugar en dondehan sido retenidas. Si pasa el tiempo y no les hacemos caso,acabarn rompiendo la barrera que las aisla y saldrn de cual-quier forma, excepto, de la forma deseada. Las consecuenciasson ampliamente conocidas para todos. Herir, o a los dems oa uno mismo, y la consecuente culpabilidad que este acto com-porta. Y, este es el ciclo que no se para nunca, a no ser quetengamos en cuenta, sea de la manera que sea, el cuidado deestas emociones, necesidades y pensamientos, y su expresin.En esta sociedad donde imperan los valores econmicos porencima de todo, tenemos una cultura de la expresividad absolu-tamente dirigida a las conveniencias profesionales. Una expresi-vidad retenida a favor de una posicin social o profesional deter-minada, la cual ya lleva estipulada, de antemano, cual es el codi-go de comunicacin. Este hecho, mina de base la espontaniedadnatural de la persona y, sobretodo, su propia relajacin.Aunque no nos sintamos incluidos en este mundo econmico,culturalmente estamos dentro desde que nacemos, porquenuestra sociedad europea es de esta manera.El tener una enfermedad psquica, como el tener cualquier

    enfermedad que perjudique el funcionamiento normal de lapersona en esta sociedad, conlleva, todava, una expresividadms retenida, pero, al mismo tiempo, da, por fuerza, un puntode vista diferente de la vida y, seguramente, una cierta relativi-zacin de cosas aparentemente importantes para el resto dela gente. Este hecho, para mi, abre una puerta a una expresi-vidad especial y diferente, sobretodo, ms genuina.Es por esta razn que me interesa hacer este trabajo. Primero,para que los alumnos tomen contacto con su propia expresivi-dad: tanto corporal, como emocional, como mental. Y, despus,para que aprovechen este espacio para poner en prctica suexpresin de la manera que ms les guste; evidentemente, uti-lizando el teatro, que es la va que yo les puedo ofrecer ydonde tengo las herramientas para ayudarlos. Paso a describircomo se estructura el plan de trabajo:

    1. El cuerpo y la voz.- el objectivo es establecer un contac-to ms ntimo con nuestro cuerpo y con su mecanismo deexpresin, el movimiento y la voz. Darse cuenta de como estoyfsicamente, de como tengo la respiracin y de como trabajar-la, de donde tengo las tensiones y de como es mi posicin cor-poral. El cuerpo es la base de toda expresividad, es lo que seve.

    2. Herramientas teatrales.- improvisaciones donde se gene-ran situacions ficticias y, por tanto, comportamientos adecua-dos a esa situacin. Objetivos comunes que obligan a trabajargrupalmente y no individualmente. Trabajamos conceptoscomo: el aqu y ahora, la espontaniedad, los lmites, la modifi-cacin y los personajes. Este ltimo como herramienta deexpresin especfica basada en: que es lo que quiero mostrary que es lo que no quiero mostrar.

    3.La creacin.- se trata de abrir un espacio libre de creacinteatral o escnica, donde los alumnos son libres de expresar loque quieran. Siempre, evidentemente, despus de haber adqui-rido un lenguaje teatral comn.

    4.La integracin de las experiencias.- esto forma parte de lamecnica de la clase. El objetivo no es pasar de un ejercicio aotro sin ms, sin pararse a reconocer qu ha pasado en mi oqu ha modificado en mi un determinado ejercicio. Esto sirvepara prestar atencin a cuales son los movimientos internos quesuceden cuando pongo mi expresividad en accin. Bien, este esel programa base de este taller. Espero que podamos jugar jun-tos. De hecho, el teatro no es ms que un juego que, si lo toma-mos en serio, nos puede llevar a terrenos de expresividad y deauto-conocimiento nuevos, de una manera ldica y creativa.

    TALLER DE TEATRO TERAPIA Por Quim Dalmau i Tarifa

  • personal

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    personal

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    Hola, me llamo Mamen.

    Me diagnosticaron (despus de muchos aos sin saber que era lo que me pasaba) TLP. Realmente se pasa mal. He

    pasado por la terapia de Iconos y por la consulta del psiquiatra y de la psicloga durante muchos aos. Sigo con

    las consultas de ambos pero mucho mas espaciadas en el tiempo. Tengo 35 aos y hace 4 que no he tenido una cri-

    sis (malditas crisis, verdad????). Yo quera compartir con vosotros que uno de los momentos ms importantes den-

    tro de este proceso fue la primera vez que asist a una terapia con ms personas diagnosticadas de TLP. Mis crisis,

    mis vacos eran algo comn entre nosotros, algo que entendamos slo nosotros y que desde luego te ayuda a no

    sentirte un bicho raro...Imaginaros...alguien que entiende realmente de que le hablas cuando le comentas que sien-

    tes un vaco... Me gustara que les transmitierais mi bienestar, mi estabilidad a todas las personas que la estn bus-

    cando ya que se puede conseguir. El camino es duro pero tiene sus recompensas, la mayora de veces a largo plazo,

    pero lo importante es que las hay. Gracias por ayudarnos a sentirnos mejor.

    Testimonios

    Al Departamento de Conductas Adictivas del Hospital de la

    Santa Creu i Sant Pau de Barcelona. Barcelona, 9 de marzo

    de 2006.

    Hay sentimientos que no se pueden expresar con palabras,

    mi satisfaccin y agradecimiento que hoy quiero hacer

    constar, no se pueden definir.

    Me gustara dar las gracias a todo el equipo del

    Departamento de Conductas Adictivas del Hospital de

    Santa Creu y Sant Pau, Barcelona. A todos ellos que me

    han ofrecido apoyo durante mi ingreso para desintoxicar-

    me. Hoy, que ya puedo pensar, serena y tranquila, ver las

    cosas con perspectiva y distancia y valorar el proceso tan

    importante que he emprendido, realmente un despertar a

    la vida, consciente y feliz de volver a ser yo misma, limpia

    de sustancias y deseosa de continuar mi caminito, llevar

    una vida sana, sin olvidar, pero, que todo esto ha sido

    posible a la ayuda de todos los profesionales del Hospital

    de Sant Pau, que han llegado a mi interior, han desvelado

    mi espritu de lucha, de curacin, por ser todos ellos, por

    encima de todo, grandes personas humanas, capaces de

    escuchar, de cuidar y entender a los enfermos, al pie del

    can en todo momento, con serenidad y firmeza. ... en

    ningn momento nos han tratado a mi y los otros compa-

    eros como enfermos, es ms, nos han transmitido esperanza en esta dura lucha y nos han hecho ver que fuera nos

    espera un mundo y personas para querer .

    Tenemos una enfermedad, y desde la aceptacin podemos curarnos, con el tratamiento adecuado y constancia.

    Ahora que ya puedo pensar, contar hasta tres antes de responder, ser paciente...digo BASTA de evasiones y huidas,

    hace falta enfrentarse a las cosas y mi conducta de antes, la huida, la evasin a travs de sustancias, no conduce a

    nada, es alargar el proceso que tarde o temprano tenemos que afrontar si queremos optar por vivir dignamente y

    con calidad.. Ya toca empezar y no dejar el camino hacia DELANTE.

    Me gustara transmitir un grito de esperanza y animar, desde mi experiencia a todos aquellos que tienen conductas

    adictivas, a mis compaeros de ingreso, a seguir luchando. No mentir, el camino es largo y duro, como todas las

    cosas que valen la pena en esta vida, pero es una inversin de futuro. S!! ES POSIBLE salir, yo lo estoy haciendo.

    Llevo 21 aos con esto.

    Por qu tendimos a recorrer a sustancias como el alcohol, las drogas, las pastillas, que slo hacen que enrarecer la

    conducta y personalidad? El placer inmediato que proporcionan es tentador, son sustancias seductoras y gratifican-

    tes pero ADICTIVAS. Evitemos , desde la conciencia los posibles factores que nos han llevado a consumir (entorno,

    pareja, familia, compaias, situaciones, tipos de vida .... ) y alejmonos. Busquemos la raiz del problema, basta de

    sustancias, pedazos, hay que ir a la esencia.

    Las dependencias no son buenas y tenemos que ser muy conscientes de esto y evitar relaciones poco sanas. Nosotros

    somos el 100% responsables de nuestra vida.

    Espero no volver a caer , pero si esto sucede, libre de culpabilidad, humildemente, llamar a la puerta del Hospital

    de Sant Pau.

    MUCHAS GRACIAS

    Quiero comunicarles que desde el mes de febrero estoy cursando la carrera universitaria de Letras Hispnicas, cosa

    que jams habra logrado sin el apoyo de ustedes. Est bien que el hecho de tener TLP y resolverlo de alguna mane-

    ra se debe a mi fuerza de voluntad y al trabajo del terapeuta, pero yo tengo muy presente cuando estuve a punto

    de mandarlo todo al diablo por la informalidad del psiquiatra, sus groseras, un poco de falta de tica y el hecho de

    haber metido al consultorio sin preguntarme antes, a dos estudiantes de medicina, ustedes siempre estuvieron ah

    para decirme que siguiera, que no descansara, que buscara vas alternativas, etc. Al final lo que hice fue quedarme

    con el mismo terapeuta, pero gracias a la paciencia de ustedes y a sus e-mail exig mis derechos, exig puntualidad

    y tica y consegu que el Dr. me atendiera en su consulta privada, cobrndome solo un porcentaje de lo que nor-

    malmente cobra por sesin. A lo que voy es que si no estuvieran ustedes, yo con todo y terapeuta, no podra hoy

    estar en la universidad y nunca me cansar de agradecerles por esto.

    Les mando un beso y el ms fuerte de los abrazos.

    M A R I M A R Mxico

    Marzo 2007

  • personal

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    personal

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    APREND Y DECID

    Y as despus de esperar tanto,

    un da como cualquier otro decid triunfar.

    Decid no esperar a las oportunidades

    sino yo mismo buscarlas;

    Decid ver cada problema

    como la oportunidad de encontrar una solucin;

    Decid ver cada desierto

    como la oportunidad de encontrar un oasis;

    Decid, ver cada noche

    como un misterio a resolver,

    Decid ver cada da

    como una nueva oportunidad de ser feliz.

    Aquel da descubr que mi nico rival

    no eran mis propias debilidades;

    y que en estas est

    la nica y mejor forma de superarnos.

    Aquel da dej de temer a perder,

    y empec a tener no ganar.

    Descubr que no era yo el mejor,

    y que quizs nunca lo fui,

    me dejo de importar quien ganara o perdiera.

    Ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer,

    Aprend que el mejor triunfo que puedo tener,

    es tener derecho de llamarle a alguien amigo

    Descubr que el amor es ms que un simple estado,

    el amor es una filosofa de vida ,

    Aprend que debo de dejar de ser un reflejo,

    de mis escasos triunfos pasados,

    y empec a ser mi propia tenue luz de este presente.

    Aprend que de nada sirve ser luz,

    si no vas a iluminar el camino de los dems.

    Decid cambiar tantas cosas....

    Aprend que los sueos son solamente para hacerse rea-

    lidad.

    Desde aquel da ya no duermo para descansar,

    ahora simplemente duermo para soar....

    Walt Disney

    La tarde se precipita srdida,

    como fin de ao,

    sobre el mantel de la ciudad:

    oscura golondrina.

    Cuntos vmitos, cuntos coches,

    habr deparado la noche:

    la persona que yo fui se pasea

    pescada

    por las redes de las aceras.

    Sobrio de sombras, la ciudad me

    advierte de su amenaza:

    sus navajas tangibles me heran:

    amo a los borrachos pues yo

    tambin, picado por los panales

    de abejas, me sacaba, perro de m,

    confiado al vrtigo del vino.

    ( Jos Mara Raya Snchez)

    S que ests ah.

    Lo descubr en el mismo momento

    En que me diste a Luz.

    Pero la luz no est nunca asegurada.

    Hay que levantarse por la maana temprano

    Y acudir al sanatorio de la vida,

    Al enjambre de las calles musulmanas

    -Que escalan hasta a las cpulas de los abetos-

    Y descuelgan las bolas de los sin techo

    Que hunden el nimo de los bienaventurados.

    Slvese quin pueda, rezan los polinomios

    De las calles, el aguafuerte no consigue limpiar

    El lienzo de una ciudad, la gran ciudad.

    Jos Mara Raya Snchez

    Tierna es la infancia,

    Desbrozada por mil calles,

    Cabalgada sobre el tiempo.

    La hiedra no ha muerto

    Pero espero que su desnudez

    Recoja lentamente la fogata.

    Primeros cumpleaos,

    La piata de caramelo sabe a fuego.

    ( Jos Mara Raya Snchez)

    La indeterminacin de la lluvia cae sobre todo el pas,

    No perdona a los hijos del Diablo y eso me hiere,

    He tropezado tantas veces sobre la hierba mojada,

    Y ella nunca me ha regalado un mnimo de almidn.

    La gente corre para guarecerse de ella

    Echando de menos quizs algn mosquito,

    Que nos chupe la sangre y la diarrea,

    Que nos devuelva el santo verano,

    y su toldo de amor y cario,

    mientras el cncamo se rompe intilmente.

    Media vida sorbida por el miedo

    Media la tarde con su fragor de calles,

    Fragancia de perfumes, que se ahogan

    En el agua, que no perdona a nadie.

    Jos Mara Raya Snchez

    POEMAS DE LA AORANZA

  • direcciones

    23

    servicios

    22

    SERVICIOS DE LA FUNDACIN ACAI-TLPAcogida, informacin y asesoramiento a personas con TLP y sus familiares.

    Orientacin e insercin laboral para personas con TLP.

    Cursos psicoeducativos para familiares y personas que conviven con el TLP.

    Conferencias divulgativas.

    Asesora jurdica.

    Grupos semanales de ayuda mutua (GAM).

    PRXIMAS ACTIVIDADES PSICOEDUCATIVAS PARA EL NO-TLP

    18 de Septiembre:

    Inicio del Grupo de Ayuda Mtua (GAM).

    Conduccin: Elisabeth Sogorb.

    Duracin: 5 meses

    Horario: Martes de 1830 a 1930h.

    Precio: 60 euros

    10 Octubre:

    Seminario Psicoeducativo para No-TLP

    Conduccin: Mnica Lavilla.

    Duracin: 7 semanas

    Horario: Mircoles de 1900 a 2100h.

    Precio: 80 euros

    5 de Noviembre:

    Taller Psicoeducativo sobre Codependencia

    Conduccin: Mnica Lavilla

    Duracin: 2h.

    Horario: Lunes de 1900 a 2100h.

    Precio: 20 euros

    3 de Diciembre:

    Taller Psicoeducativo sobre Validacin

    Conduccin: Mnica Lavilla

    Duracin: 2h.

    Horario: Lunes de 1900 a 2100h.

    Precio: 20 euros

    SERVICIOS PARA LA PERSONA CON TLP (gratuito)Servicio de Orientacin Profesional

    Servicio de Insercin Laboral

    Psicloga e Insertora Laboral: Natalia Castn

    FEAFES

    Federacin Espaola de Ayuda a Familiares

    de Enfermos mentales

    www.feafes.org

    ASOCIACIONES DE FEAFES CON GRUPOS DE AYUDAFAMILIAR AL TP

    Catalua - FECAFAMM.

    www.familiarsmalaltsmentals.org

    Associaci Ponent Lleida

    Teulerias n6, Entresuelo - 25004 Lrida

    Tel. 973 221 019

    Presidente Jordi Masana

    www.salutmentalponent.com

    Valladolid - FEAFES EL PUENTE

    C/ Tajahierro s/n. Colegio Juan Martn. El Empecinado.

    47009 Valladolid

    Tel. 983 356 908 Fax 983 335 327

    [email protected]

    http://usuarios.discapnet.es/border/

    Lusi Romero Huerta, coordinador Grupo de Trabajo TLP

    Segovia - AMANECER

    C/ Altos de Piedad, s/n - 40002 Segovia

    Tel. 921 431 608

    [email protected]

    Pamplona - ANASAPS

    Asociacin navarra para la Salud Mental Pamplona

    C/ Rio Alzaina, n 20 trasera - 31006 Pamplona (Navarra)

    Tel. 948 248 630 - Fax 948 240 336

    [email protected]

    www.anasaps.org

    Extremadura - FEAFES APENESMER

    Avd. Reina Sofa, s/n - 06900 Mrida (Badajoz)

    Tel. 924 300 457

    [email protected]

    Psicloga: Ester Moreno

    Zamora - FEAFES ZAMORA

    C/ Redondela, n 1 nave D 13 - 49027 Zamora

    Tel. 980 536 831

    [email protected]

    Mlaga - AFESOL

    Asociacin de Familiares de personas con Esquizofrenia

    de la Costa del Sol

    C/ Las Flores, 6 - Edif. Polica Nacional - 2

    9631 Arroyo de la Miel (Mlaga)

    Tel. / Fax 952 566 758

    [email protected]

    www.afesol.org

    Tenerife - FEAPES

    Juan Romero n 28 local 3B y 1F -

    38008 Santa Cruz de Tenerife

    Tel. 922 294 180 / 922 205 215 - Fax 922 205 258

    [email protected]

    La Corua - Centro Logpsic

    Avenida de Sada y contornos n 5 2 C - 1

    5160 SADA (La Corua)

    Tel. 981 622 400

    [email protected]

    www.centrojogpsic.com

    Psicloga: Dolores Mosquera

    ACAI-TLP Girona

    Centre Cvic de Banyoles

    c/Barcelona, n54

    17820 Banyoles (Girona)

    Telf: 972 58 07 41

    [email protected]

    ACAI-TLP Lleida

    c/Teulerias, n6, entlo.

    25004 Lleida

    Telf: 973 22 10 19

    [email protected]

    [email protected]

    www.salutmentalponent.com

    Para informacin y reservas

    llamar al Telf: 93 203 52 25

  • Asociacin Espaolade Familiares de Afectados por Transtornos de Personalidad

    Registro Nacional de AsociacionesInscrita en Junio 2005Grupo 1 / seccin 1

    NIF G 84776418

    C/ Magallanes n 15 1 oficina n 128015 Madrid T. 91 448 32 81

    [email protected]

    ORIG. REVISTA ACAIAcai