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1 TRANSFORMACIONES EN LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA A PARTIR DEL USO DE LAS TIC EN ESPACIOS EDUCATIVOS EN LOS ESTUDIANTES DEL GRADO UNDÉCIMO CINCO DE LA INSTITUCIÓN EDUCATIVA DE MARÍA EN EL MUNICIPIO DE YARUMAL – ANTIOQUIA HOMER ALONSO HINCAPIÉ RUIZ UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA SECCIONAL MEDELLÍN FACULTAD DE EDUCACIÓN MAESTRÍA EN EDUCACIÓN MEDELLIN 2015
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TRANSFORMACIONES EN LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA A PARTIR
DEL USO DE LAS TIC EN ESPACIOS EDUCATIVOS EN LOS ESTUDIANTES DEL
GRADO UNDÉCIMO CINCO DE LA INSTITUCIÓN EDUCATIVA DE MARÍA EN EL
MUNICIPIO DE YARUMAL – ANTIOQUIA
HOMER ALONSO HINCAPIÉ RUIZ
UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA SECCIONAL MEDELLÍN
FACULTAD DE EDUCACIÓN
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
MEDELLIN
2015
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TRANSFORMACIONES EN LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA A PARTIR
DEL USO DE LAS TIC EN ESPACIOS EDUCATIVOS EN LOS ESTUDIANTES DEL
GRADO UNDÉCIMO CINCO DE LA INSTITUCIÓN EDUCATIVA DE MARÍA EN EL
MUNICIPIO DE YARUMAL – ANTIOQUIA
HOMER ALONSO HINCAPIÉ RUIZ
Proyecto final para optar al título de Magister en Educación
Asesor
Milton Daniel Castellano Ascencio
UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA SECCIONAL MEDELLÍN
FACULTAD DE EDUCACIÓN
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
MEDELLÍN
2015
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Nota de aceptación
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Firma del jurado
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Firma del jurado
Medellín, noviembre de 2015
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DEDICATORIA
Dedica este trabajo a Dios que fue mi fortaleza y me brindó todos los medios para que esta meta
tan importante en mi vida se hiciera realidad.
A mi familia, a la institución educativa, a mis estudiantes quienes compartieron esta experiencia
tan enriquecedora.
A la Universidad de San Buenaventura, quien con sus docentes y asesores orientó este proceso
de formación personal y profesional.
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AGRADECIMIENTOS
Se quiere dar un especial y fraterno agradecimiento a mis compañeros docentes y estudiantes que
fueron el soporte más visible en los procesos investigativos y la razón evidente para movilizar este
proyecto de investigación y transformación.
También a todos los compañeros de estudio que participaron de una u otra forma en la construcción
de las teorías y la búsqueda de la información, que conceptualizó la estructura y el soporte del
proyecto.
A los docentes de la Universidad de San Buenaventura, quienes con su apoyo y asesorías constantes
definieron las líneas a seguir para hacer realidad un proyecto que vincula la humanización del
conocimiento en línea directa con el rol docente.
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CONTENIDO
Pág.
INTRODUCCIÓN 10
CAPÍTULO I 14
1. CONSIDERACIONES GENERALES DEL PROYECTO 14
1.1 ANTECEDENTES 14
1.2 DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA 22
1.3 OBJETIVOS 26
1.3.1 Objetivo general 26
1.3.2 Objetivos específicos 26
1.4 JUSTIFICACIÓN 26
CAPÍTULO II 31
2. CONSIDERACIONES TEÓRICA SOBRE LAS TRANSFORMACIONES
DE LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA A PARTIR DEL
USO DE LAS TIC EN ESPACIOS EDUCATIVOS 31
2.1 PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA 31
2.1.1 Definición 31
2.1.2 Características de lectura y escritura 35
2.1.3 Dinámicas de las prácticas de lectura y escritura en el contexto escolar. 39
2.1.4 Características y dinámicas de las prácticas de lectura y escritura en
contextos educativos medianos por TIC 45
2.2 TRANSFORMACIONES PEDAGÓGICAS EN CONTEXTOS
EDUCATIVOS 51
2.2.1 Las transformaciones pedagógicas en los escenarios escolares:
hacia una mirada crítica de la inclusión de las TIC en el aula de lenguaje 56
2.2.2 Transformaciones pedagógicas en el espacio escolar para hablar de la
lectura y la escritura como prácticas socioculturales 63
2.2.3 Transformaciones pedagógicas en contextos educativos desde la
relación lectura, escritura, escuela y TIC 67
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CAPÍTULO III 74
3. DISEÑO METODOLÓGICO 74
3.1 TIPO DE INVESTIGACIÓN 74
3.2 CONTEXTOS Y SUJETOS 75
3.3 TÉCNICAS E INSTRUMENTOS DE RECOLECCIÓN DE
INFORMACIÓN 77
CAPÍTULO IV 81
4. ANÁLISIS DE LA INFORMACIÓN 81
4.1 CONCEPTUALIZACIONES GENERALES DE LAS TIC Y DE LAS
PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA 83
4.1.1 Concepciones sobre las Tic en docentes y estudiantes 83
4.1.2 Concepciones sobre lectura y escritura en los docentes y estudiantes 86
4.2 DINÁMICAS QUE COBRAN LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y
ESCRITURA DEBIDO A LA PRESENCIA DE LAS TIC EN LOS
CONTEXTOS EDUCATIVOS 90
4.3 LAS TRANSFORMACIONES DE LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y
ESCRITURA DEBIDO A LA PRESENCIA DE LAS TIC 102
5. CONCLUSIONES 115
5.1 RECOMENDACIONES 118
6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 119
7. ANEXOS 122
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RESUMEN
El siguiente proyecto de investigación tiene como tema las transformaciones en las prácticas de
lectura y escritura a partir del uso de las TIC en espacios educativos desarrollado en la Institución
Educativa de María del municipio de Yarumal – Antioquia y específicamente con los 29 estudiantes
del grado 11- 5 (Técnico de comunicación digital) donde se ha venido presentando dichas vivencias
y transformaciones que hacen que leer y escribir tome distintas concepciones y prácticas de acuerdo
a la influencia de las TIC en diferentes momentos escolares.
Es así, que se tiene como objetivo general comprender las transformaciones que generan las TIC
en las prácticas de lectura y escritura en los estudiantes de la I.E de María del municipio de
Yarumal, con el fin de abrir la ruta de trabajo conceptual, metodológica y analítica para llegar a
dar reflexión e interpretación a las distintas observaciones y prácticas evidenciadas en el trabajo
investigativo; el cual pasa desde una revisión pormenorizada de antecedentes referidos a la cuestión
estudiada, la descripción del problema, la formulación de la pregunta investigativa hasta llegar a la
construcción de un marco referencial que permite a la luz de los autores dar argumentaciones y
aclarar teorías.
Para dar estructura al proceso, se establece como diseño metodológico una investigación con un
enfoque cualitativo con método hermenéutico para alcanzar altos grados de comprensión,
interpretación, reflexión y análisis riguroso para poder evidenciar a razón de descripciones de
momentos, comportamientos y prácticas de estudiantes y docentes las distintas percepciones y
transformaciones que se han creado en las prácticas de lectura y escritura con la presencia de
elementos tecnológicos. Para ello, se tienen como herramientas de recolección de la información
entrevistas tanto a estudiantes como a docentes y observaciones a partir del registro detallado de
eventos en el diario de campo, con el fin de indagar sobre las distintas percepciones, concepciones
y procesos que se ha generado a partir de la cuestión investigada. Desde estos momentos se pasa a
consolidar categorías conceptuales que permiten crear y cruzar información, que después se
contrasta a partir de argumentaciones, conceptualizaciones y autores para llegar al análisis de la
información.
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Por último, se establece como conclusión central los distintos contrastes que se suscitan en las
prácticas de lectura y escritura a partir de las TIC, donde se visualizan en ciertos momentos como
actos rutinarios, esquemáticos y cargados de meras conceptualizaciones y normatividades
lingüísticas y en otros instantes se ponen en práctica como escenarios prácticos que configuran
altos grados de cultura y sociedad, haciendo que leer y escribir en la escuela rompa las barreras de
lo académico para llegar a tratamientos de mayor consciencia, libertad y formación.
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INTRODUCCIÓN
Las nuevas formas de abordar las prácticas educativas en los actuales contextos escolares hacen
que los roles de cada uno de los miembros escolares se tornen diferentes y tomen posturas de
acuerdo a las modificaciones y transformaciones que la sociedad moderna ha ido implementado
de acuerdo a procesos culturales, sociales, políticos y académicos; lo que acredita que docentes y
estudiantes vivencien en cada una de las prácticas escolares distintos momentos que promueven
otras formas de entender, realizar y poner en juego los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Entre esas transformaciones se ve las TIC como un factor primordial que ha propiciado ambientes
diferentes donde se recrean otras maneras de dinamizar saberes, de intercambiar conceptos y de
crear espacios de interacción movibles, donde educandos y docentes experimentan distintos
momentos para percibir cada una de las realidades donde están sumergidos.
Por lo tanto, una de las prácticas de mayor recurrencia en los contextos educativos que se han visto
afectados y permeados son las prácticas de lectura y escritura. En la actualidad los mecanismos de
producción e interpretación de los textos se han movilizado en muchos de los casos en ambientes
digitales, lo que constituye procesos de transición no solamente en mecanismos, instrumentos y
herramientas, sino también en la manera de abordar, socializar y transmitir la información. Esto
propicia que la formación de educandos y docentes se vea tocada de una u otra forma, sin decir que
es negativo o positivo, simplemente hay una presencia visible de otros elementos que condicionan
y dan mayor andamiaje a la hora de construir las interacciones académicas.
Por ello, el leer y el escribir en las nuevas formas de entender los contextos escolares mediados por
las TIC hacen que se presenten diversidad de transformaciones en todas las dimensiones; lo cual
es un reto para los docentes actuales, ya que conceptos como didáctica, pedagogía, aprendizaje,
enseñanza y formación se articulan en otras direcciones y con otras intencionalidades que hacen
que educar y formar sea no solamente un espacio social, cultural y educativo sino también
tecnológico, debido a que para insertar de forma coherente las herramientas tecnológicas en las
aulas regulares, se requiere la presencia de un docente mediador y que promocione visiones
integradoras donde la producción e interpretación de textos sean promovidos como construcciones
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culturales, con altos grados de subjetividad y producto de lo social; y no como simples procesos
mecánicos, codificados y alejados de realidades.
Desde este panorama se presenta un proceso investigativo enmarcado dentro de las
transformaciones de las prácticas de lectura y escritura a partir de las TIC en los espacios
educativos, donde se tiene como sujetos participantes los 29 estudiantes de 11- 5 del técnico en
comunicación digital que hacen parte de la media técnica de la Institución Educativa de María en
el municipio de Yarumal – Antioquia, los cuales evidencian una notable aceptación y
disponibilidad para incluir sus prácticas escolares en los distintos medios y herramientas
tecnológicas (redes sociales, celulares, tabletas, computadores, etc) que constituyen un cambio
creciente en la construcción de textos y la forma de abordarlos, y también en la manera de
relacionarse y de interactuar en el contexto social.
Partiendo desde esta línea, es necesario establecer un tópico problemático que interrogue a razón
de las transformaciones que genera las TIC en las prácticas de lectura y escritura en los estudiantes.
Esto suscita un conjunto de interrogantes e inquietudes de manera específica que dan desarrollo al
proceso de investigación tales como: ¿qué dinámicas comprenden las prácticas de lectura y
escritura en contextos educativos determinados por las TIC?, ¿qué características tiene los procesos
de lectura y escritura cuando hay o no presencia de las TIC? y ¿qué transformaciones de tipo
pedagógico se evidencia alrededor de las prácticas de lectura y escritura debido a la presencia de
las TIC?
Por consiguiente, se propone como objetivo general comprender las transformaciones que generan
las TIC en las prácticas de lectura y escritura en los estudiantes de la I.E de María del municipio
de Yarumal, con el fin de descubrir de acuerdo a los procesos de investigación, trabajo de campo
y análisis de información las distintas dinámicas que se suscitan en las prácticas de lectura y
escritura en contextos educativos determinados por las TIC; y así lograr de forma coherente
analizar las transformaciones en los actos de leer y escribir dadas por la presencia de las TIC, las
cuales permitan establecer de manera reflexiva y con una visión comprensiva y crítica el
determinar las distintas transformaciones de tipo pedagógico que se evidencia alrededor de las
prácticas de lectura y escritura debido a la presencia de las TIC.
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Es así, que se enmarca la estructura conceptual del proyecto y permite vislumbrar la ruta
investigativa, conceptual y metodológica para suscitar posibles alcances a razón de la temática y
los objetivos propuestos, donde el diseño metodológico está centralizado con un enfoque
cualitativo y un método hermenéutico para dinamizar proceso de comprensión e interpretación de
la información que está basada en las transformaciones de las prácticas de lectura y escritura a
partir de las TIC.
Para dar cuenta de estos aspectos que hemos mencionado el texto cuenta con cinco apartados que
proporcionan un acercamiento a la problemática que hemos establecido. En esa medida, el primer
capítulo contiene las consideraciones generales del proyecto donde se muestra el tema, los
antecedentes, la descripción del problema, la formulación de la pregunta de investigación, los
objetivos y la justificación; esto permite al lector ubicarse en cuanto a la temática, el análisis y la
reflexión que se pretende llevar a cabo. Así mismo, clarifica la importancia de la investigación y
dimensiona los alcances de la misma. Además, el lector encontrará, en esta parte, el rastreo hecho
por el investigador acerca de otros trabajos realizados que muestran el estado actual de la cuestión.
En el segundo capítulo se encuentra las consideraciones teóricas sobre las transformaciones de las
prácticas de lectura y escritura a partir del uso de las TIC en espacios educativos, donde se
muestran las categorías de análisis y la argumentación de la temática, lo cual se comprenderán a la
luz de los autores.
En el tercer capítulo se realiza la caracterización de la investigación, allí se define la metodología
a trabajar y su enfoque, se describen la población participante, los instrumentos utilizados para la
recolección de información y el método de análisis de la misma.
El cuarto capítulo corresponde al análisis de la información, se divide en tres partes que se
encuentran relacionadas con los objetivos de la investigación. En el primer apartado, se presentan
las conceptualizaciones y concepciones que los sujetos participantes tienen referido a las prácticas
de lectura y escritura y a las TIC en sus contextos educativos; en el segundo, se muestran las
dinámicas que cobran las prácticas de lectura y escritura debido a la presencia de las TIC en los
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contextos educativos y, en el tercero, se determina las transformaciones de las prácticas de lectura
y escritura debido a la presencia de las TIC. Este capítulo cuenta con reflexiones hechas por el
investigador respecto a los datos obtenidos en el trabajo de campo donde se seleccionan algunos
fragmentos de las entrevistas y observaciones obtenidas con los sujetos investigados, con el fin de
hacer un análisis y reflexión que esté en línea directa hacia las transformaciones de las prácticas de
lectura y escritura a partir de las TIC.
Por último, el proyecto se cierra con las conclusiones como pasaje que permiten obtener mayores
comprensiones, análisis y enfatizar otras preguntas que pueden suscitar la continuidad del trabajo
investigativo.
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CAPÍTULO I
1. CONSIDERACIONES GENERALES DEL PROYECTO
El proyecto de investigación tiene como tema las transformaciones en las prácticas de lectura y
escritura a partir del uso de las TIC en espacios educativos como premisa central para lograr
entender y reflexionar sobre algunas concepciones, ideas, procesos y comprensiones que
educandos y docentes experimentan cuando está la presencia de algunos dispositivos electrónicos
en los espacios escolares. Para alcanzar la suficiente interpretación se realiza un rastreo
bibliográfico que contextualice la investigación y dé punto de partida al proceso de análisis.
1.1 ANTECEDENTES
Para poder dar soporte teórico y sustentar los diferentes conceptos del proyecto de maestría
denominado: Transformaciones en las prácticas de lectura y escritura a partir del uso de las TIC
en espacios educativos; se hace necesario conocer y analizar distintas propuestas que se han
presentado en diferentes momentos que están relacionados con el tema central del proyecto o en
alguna de sus categorías fundantes a razón de los nuevos ambientes de enseñanza – aprendizaje
que se han dinamizado debido a la presencia e implementación de las TIC
Después de realizar el rastreo bibliográfico en el ambiente académico hispanoamericano se
pudieron hallar los siguientes proyectos que de una u otra forma dan sentido al planteamiento ya
señalado, teniendo grandes aportes que nutren las ideas y consolidan categorías, acercan teorías,
conceptos y prácticas para permitir vigorizar nuevos datos que son contrastados y analizados;
posibilitando otras perspectivas y cosmovisiones que argumenten de manera coherente la propuesta
que se investigará en la Institución Educativa de María (Yarumal - Antioquia). A continuación se
relacionan las propuestas que se han presentado y que son afines al foco investigativo:
A nivel internacional se encuentra el proceso desarrollado por La Universidad de Ciencias
Empresariales y Sociales, en el departamento de Investigación de Proyecto en el país de Paraguay;
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planteó una propuesta investigativa denominada: Las Nuevas Tecnologías de la Información y la
Comunicación (NTIC) aplicadas a la educación de grado. El cual fue propuesto por el docente
Gonzalo D. Peña en octubre de 2008 y tuvo como objetivos los siguientes: a) Caracterizar el
concepto de nuevas tecnologías de información y comunicación (NTIC) aplicadas a la educación,
poseído por los alumnos de grado de UCES. b) Establecer las principales fortalezas y debilidades
que los alumnos adjudican al uso de nuevas tecnologías en la educación de grado. c) Entender las
nuevas tecnologías que -desde la perspectiva de los alumnos- generan un mayor y menor valor
agregado al proceso de aprendizaje.
En España, directamente en la Universidad Autónoma de Barcelona la investigadora Pilar Cámara
Serrano (2006) investiga acerca de: El uso de una plataforma virtual como recurso didáctico en la
asignatura de filosofía; este trabajo pretende develar cómo el uso de las NTIC influyen en la
retención de información conceptual significativa y en su comprensión por parte de los alumnos de
primero de bachillerato, demuestra que el uso de una plataforma virtual permite a todos los agentes
de la comunidad educativa nuevas posibilidades de trabajo e interacción tanto generales como en
el campo particular de cada asignatura, en donde los alumnos se sientan protagonistas del
aprendizaje de la filosofía y participen más directamente en dicho proceso, dado que las NTIC que
se utilizan, les permite en todo momento una mejor comunicación con la profesora, así como tener
una visión global más clara y siempre actualizada de los derroteros por los que irá transcurriendo
la asignatura; a su vez, esta investigación demuestra que la incorporación de las TIC influyen
positivamente en la manera en que los alumnos afrontan el aprendizaje de los conceptos filosóficos
y también, el desarrollo del pensamiento crítico característico de toda reflexión realizada en el
marco de dicha disciplina.
También en el mismo país se encuentra la investigación realizada por Lan Stewart (2011): El
lenguaje chat: Efectos de los avances tecnológicos sobre la ortografía española, ésta investigación
centró su interés en el lenguaje del chat como el resultado de los avances tecnológicos y su
tendencia universal. Para esta investigación utilizaron las salas de chat como el contexto que le
proporcionó los datos que ayudaron a estudiar la influencia que impulsó la creación de Lenguaje
de chat; y a diferencia de la investigación realizada por Blanco Rodríguez (2002), que analizó las
características del lenguaje del chat, Stewart (2011) por su parte se propuso verificar las tendencias
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que tiene el lenguaje del chat hacia un lenguaje de chat universal. El investigador llega a la
conclusión de que en el lenguaje del chat las diferencias dialectales se mantienen a lo largo de la
charla y lenguaje, que no hay un movimiento hacia una ortografía unificada en el lenguaje sala de
chat, y que los datos regionales muestran, sin embargo, que los usuarios, por ejemplo en Argentina,
emplean una ortografía que es más consistente con los españoles, usuarios de la Real Academia,
mientras que en México y en España tienden a desviarse en una amplia gama de formas.
Oscar Morales y Norelkys Espinoza (2003) de la Universidad de los Andes Venezuela con su
artículo investigativo denominado: Lectura y escritura: coexistencia entre lo impreso y lo
electrónico, presentan algunos argumentos y propuestas que sustenten la idea de que es posible,
viable y, además, necesaria, la coexistencia de los textos impresos y los textos electrónicos en el
aula de clases para desarrollar la lectura y la escritura, formar lectores autónomos, críticos,
productores de textos competentes y profesionales preparados para los retos y los constantes
cambios que impone la sociedad actual. Para ello, inicialmente se definen la lectura y la escritura
desde el punto de vista psicolingüístico, como procesos constructivos; seguidamente, se presentan
las ventajas y desventajas del uso del texto impreso y del texto electrónico; posteriormente, se
indican algunos ejemplos que demuestran que es posible usar armoniosamente ambos formatos de
textos; luego, se describen algunas experiencias didácticas en las que ha sido posible la coexistencia
armoniosa; y finalmente, se precisan algunas conclusiones que se derivan de estas reflexiones.
También se encuentra el artículo investigativo llamado Nativos e inmigrantes digitales en la
escuela de Daniel Cassany y Gilmar Ayala (2008) desarrollado en la Universitat Pompeu Fabra
(Barcelona). Dicho artículo hace parte de las investigaciones desarrolladas por el grupo Literacitat
Crítica con el proyecto de investigación titulado Descripción de algunas prácticas letradas
recientes. Análisis lingüístico y propuesta didáctica, (HUM2007-62118/FILO; 2007-2010), del
Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2004-2007, del
Ministerio de Educación y Ciencia. Daniel Cassany es el investigador principal del mismo y Gilmar
Ayala uno de sus doctorandos. El artículo explora las actitudes, las destrezas y los hábitos en el uso
y el consumo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) que presentan
diferentes generaciones de españoles, a partir de la famosa metáfora de Marc Prensky sobre los
nativos y los inmigrantes digitales. Además de presentar, desarrollar y criticar esta metáfora, se
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aportan datos de otras investigaciones recientes de varias disciplinas (ciencias del lenguaje,
educación, informática), para fundamentar la tesis de que se está produciendo un cambio cultural
profundo en las formas de acceso, circulación y construcción de la información y del conocimiento,
que afecta de modo directo a la actividad en las escuelas.
La última parte del texto describe esta situación y aporta algunas ideas para avanzar en la búsqueda
de una educación que integre las TIC de modo más decidido en las diversas materias curriculares
y que trace puentes entre lo que los chicos hacen con las TIC fuera de la escuela y lo que tienen
que aprenden dentro de la misma.
Kenia Lugo de Usategui de la Universidad Bolivariana de Venezuela – Caracas con su
investigación: El proceso de lectura de hipertextos, ¿una nueva forma de leer?; consistió en un
estudio de caso llevado a cabo en el año 2002, a través del cual se realizó la descripción y el análisis
del proceso de lectura de hipertextos de un grupo de lectoras al realizar búsquedas de información
en Internet. El mismo tenía como finalidad determinar el grado de efectividad con que las lectoras
accedían a información al leer un hipertexto y conocer la influencia del grado de experiencia de
lectura de textos impresos de las mismas en la lectura de los hipertextos. Entre sus objetivos
específicos se encuentra: observar la postura y la actitud emocional de las lectoras ante los
hipertextos, observar si las lectoras demostraban tener objetivos claros durante la lectura de
hipertextos, conocer el grado de dependencia de las lectoras de la información visual; indagar en
las habilidades cognitivas que desarrollaron las lectoras, indagar en el proceso de comprensión de
los hipertextos, determinar la influencia del conocimiento de la estructura y características de los
hipertextos en su proceso de lectura y explorar en las estrategias utilizadas para leer los hipertextos.
Según los resultados de la investigación, leer hipertextos constituye una experiencia diferente, no
una nueva forma de leer. El lector es quien construye el significado a partir de sus conocimientos
previos, por lo que al leer hipertextos, el acto de lectura en sí, no cambia, sino que es el soporte y
la presentación del texto, lo que origina nuevas formas de acceder y de enfrentarse a la información.
Este estudio plantea que no se debe oponer la lectura de textos impresos frente a la de los
hipertextos, ya que el surgimiento de una nueva tecnología no implica necesariamente la
desaparición ni la sustitución de tecnologías anteriores. Se cree que el cambio será gradual y que
ambos medios convivirán de forma paralela durante muchos años.
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En el mismo país, el Profesor Oscar Alberto Morales (2004) del Departamento de Investigación de
la Facultad de Odontología de la Universidad de Los Andes, Mérida, Venezuela presenta en la
Conferencia plenaria dictada en las Primeras Jornadas Internacionales de Reflexión sobre la Tarea
Educativa el documento: La lectura, la escritura y las nuevas tecnologías como factores de
exclusión escolar: propuesta para su transformación, el presente sintetiza algunos de los
planteamientos presentados en una conferencia plenaria dictada en las Primeras Jornadas
Internacionales de Reflexión sobre la Tarea Educativa. La Educación en el Siglo XXI: Los Desafíos
ante los Procesos de Marginalización y Exclusión Social. Tiene como propósito alertar sobre los
mecanismos de exclusión que imperan en el sistema educativo, reproducidos mediante la
enseñanza de la lectura, la escritura y el uso de las nuevas tecnologías. Consecuentemente, presenta
algunas propuestas para transformar esta realidad desde la escuela que tenemos, con los recursos
de que disponemos. Se concluye resaltando la necesidad de mejorar la formación de quienes
intervienen en el proceso educativo.
En otra línea de investigación se encuentra el trabajo denominado: TIC y aprendizaje colaborativo:
el caso de un blog de aula para mejorar las habilidades de escritura de los estudiantes
preuniversitarios presentado por Guadalupe Álvarez y Lorena Bassa (2013) de la Universitat
Oberta de Catalunya España. En este estudio se ha observado que los blogs en español orientados
a la comprensión y producción textual aún carecen de instrumentos y materiales que favorezcan
los procesos cognitivos necesarios para la elaboración colaborativa de nuevos conocimientos.
Frente a esta situación, se analizó un caso específico de uso de blogs de aula en una universidad
argentina, en el cual se han puesto en práctica estrategias didácticas para favorecer el trabajo grupal
en torno a las actividades de escritura. El análisis de este caso provee una base empírica relevante
para reflexionar sobre el aprendizaje colaborativo en actividades de escritura en blogs. La
metodología desarrollada en dicha investigación fue de enfoque cualitativo y encuadrable en el
método de estudio de casos (Vasilachis de Gialdino, 2007). En particular, se llevó un estudio de
caso descriptivo.
Al nivel nacional se puede dar referencia al proyecto presentado por Universidad Pedagógica
Nacional de Colombia - Departamento de Lenguas; cuyo autor fue Henry González Martínez
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(2004) el cual tuvo como nombre: Ambiente hipermedial para el aprendizaje de la literatura y el
desarrollo de la comprensión y producción de texto a partir del mini cuento. El cual tenía como
objetivo incorporar las tecnologías de información y la comunicación en la creación de un ambiente
de aprendizaje para el desarrollo del discurso estético y la didáctica de la literatura que tenga como
referente el mini cuento. Hasta el momento se han beneficiado del proyecto estudiantes
universitarios de lengua y estudiantes de básica secundaria de tres instituciones educativas
distritales. Actualmente está en la fase de aplicación de la experiencia en educación básica primaria.
Además, se puede dar mención al proyecto realizado en la Universidad Nacional de Colombia
realizado por Zambrano (2009): Lenguaje y Nuevas Tecnologías para aprender co-construyendo
en educación, cuya muestra de investigación es de 42 estudiantes del grado 10°1 de un colegio
distrital en la localidad de Usme de la ciudad de Bogotá, y su objetivo es mejorar las habilidades
metacognitivas de dichos alumnos en los procesos comunicativos de oralidad y escritura a través
del tópico generador del cine; intenta abrir nuevos espacios de comunicación a través del texto
narrativo, el arte, las TICS y el cine, para que los jóvenes se expresen, vivencien y se enriquezcan
en la interacción con los otros; realiza un análisis semiótico narratológico que dá cuenta de las
diversas partes que conforman la estructura de los relatos producidos por los jóvenes, descubriendo
el sentido y el significado que estos adquieren al poner al signo en relación con el objeto exterior
que representa.
Y a nivel regional - local, específicamente en la municipalidad de Angostura se tiene proyectos de
referencia relacionados con línea de investigación con la propuesta: La lectura y la escritura
dinamizada a partir de las TIC. Uno de ellos es el de la docente Marcela Palacio Mesa, en su
Centro Educativo Gabriela Mistral que enfatizó con toda la comunidad educativa en su trabajo de
tesis final en el año 2007, sobre la importancia de la renovación y la aplicación correcta del plan
de área de humanidades y lengua castellana vinculado con las nuevas tecnologías de la informática
y la comunicación. Tuvo como propósito primordial el realizar y el aplicar diferentes estrategias
pedagógicas y curriculares que permitieran no solamente el fortalecimiento de la lectura y la
escritura de los estudiantes del grado quinto, sino que a través de la transversalizaciones de
actividades y conceptos se alcanzará a actualizar en altos grados el plan de área de español pues
se observó que había grandes deficiencias en los contenidos generales, los logros y las
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competencias que los educandos deberían conocer y proyectar en su formación académica y en
inserción del mundo tecnológico.
Por otro lado, se analizó una propuesta realizada en el año 2010 por el docente Luis Emilio Pulgarín
de la Institución Educativa de María llamada: La lectura como agente dinamizador de los procesos
pedagógicos y educativos, la cual enfatizaba sobre los factores negativos y las expectativas de las
y los alumnos del grado noveno de la Institución Educativa de María, del municipio de Yarumal
frente a su proceso lector, ya que se muestran apáticos hacia la lectura y como consecuencia los
resultados en pruebas ICFES y del SABER son muy bajos, puesto que no manejan las competencias
lectoras: interpretativa, argumentativa y propositiva. Además se hace un análisis para mostrar que
las prácticas pedagógicas actuales no están acordes con los lineamientos curriculares vigentes,
presentándose una gran brecha entre la teoría y las prácticas actuales, en lo concerniente al trabajo
didáctico de la lectura en el siglo XXI, en Colombia.
Todos estos proyectos, propuestas, artículos y teorías que se han relacionado sirven como soporte
y dan significación a la realidad que se aborda en la Institución Educativa De María del municipio
de Yarumal, particularmente en el grado 11 – 5 técnico en comunicación digital a razón de las
transformaciones que generan el uso de las TIC en las prácticas de lectura y escritura.
Es así, que es válido promover el proceso investigativo para comprender las prácticas de lectura y
la escritura generadas por el uso de las TIC con el fin de reevaluar, analizar, reflexionar, interpretar
y develar su estado y su proyección a nivel teórico, práctico y reflexivo para los entornos del aula
escolar moderna, la cual está acompañada por las nuevas realidades hipermediales.
Quedan como conclusiones generales después de realizar los registros e investigar los diferentes
antecedentes que no se encontró algún trabajo que integre directamente los elementos:
transformación, lectura, escritura, TIC y espacios educativos que la presente propuesta
investigativa pretende desarrollar; característica que lo diferencia de los trabajos investigativos
antes reseñados.
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Cabe resaltar, que cada trabajo mencionado y revisado comparten algunos elementos y
componentes de orden investigativo y metodológico como los siguientes:
• La lectura y la escritura como procesos fundantes en el fortalecimiento cognoscitivo y
categorías transversales en todos los saberes y disciplinas.
• Reconocimiento de los ambientes virtuales en los aprendizajes dentro del aula escolar.
• Leer y escribir como habilidades en constante transformación en contextos y comunidades
determinadas.
• La lectura y la escritura como actividades difíciles y tediosas. Los sujetos las prefieren de forma
digital.
• Las TIC dentro de los entornos escolares emergen y proponen nuevos enfoques pedagógicos-
didácticos para la construcción de espacios de aprendizaje.
• Las TIC en la lectura y escritura plantean nuevas estrategias pedagógicas y actividades y la
figura de un docente interactivo, creativo, reflexivo, crítico y humano (anfibio).
• La lectura y la escritura son dos habilidades que se fundamentan desde temprana edad, las
cuales se deben de ir perfeccionado en todos los años escolares
• El trabajo educativo debe integrar de manera obligatoria la realización de equipos de trabajo
docente, como espacio de reflexión y de encuentro que abre momentos para la consolidación
de nuevas ideas.
• Las nuevas tecnologías son una premisa para todas las áreas del saber y que deben estar
enmarcadas en los diferentes proyectos y propuestas de los docentes.
• El internet no es solo una herramienta para entretener sino para abrir espacios culturales, de
dinamización y fortalecimiento de competencias humanas – académicas.
• Los programas de áreas deben estar sustentados de acuerdo a las necesidades, particularidades
y contexto.
• Cada opción o herramienta que brinda las nuevas tecnologías de la informática y la
comunicación deben de tener un sentido pedagógico para acercarlas a los estudiantes.
• Aceptación y promoción de la lectura y la escritura en dispositivos tecnológicos.
22
1.2 DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA
Los procesos académicos en todos los niveles que actualmente se lideran en las instituciones
educativas se ha venido replanteando cada vez más con el fin de reconocer y poner en contexto las
diferentes prácticas que están surgiendo en todos los componentes escolares, y, específicamente de
orden lingüístico, como los procesos de lectura y escritura alrededor de todas sus concepciones y
como éstas están permeadas por factores tecnológicos.
Por tal razón, es necesario que todos los asuntos educativos y cognitivos estén fundamentados en
planes, proyectos y propuestas de orden comunicacional, donde más que cumplir con principios de
actualización, renovación, virtualidad y vigencia de acuerdo a la normatividad y exigencias de la
sociedad actual, cumplan con espacios pedagógicos, críticos y reflexivos para formar seres
problematizadores y que involucren su accionar cognoscitivo a razón del desarrollo cultural.
Es así, que la propuesta investigativa surge en la localidad de Yarumal – Antioquia, en la Institución
Educativa De María, en el grupo 11- 5 Técnico en Comunicación Digital donde conviven 29
estudiantes, que de una u otra forma vienen experimentando distintas prácticas académicas a la
hora de socializar, reconocer y comprender el conocimiento y utilización de la lectura y la escritura
en todas sus dimensiones, particularmente en el uso de las TIC dentro del área de lengua
castellana, donde se incluye todas las percepciones y transformaciones que los sujetos han
efectuado debido al reconocimiento y existencia de nuevas tecnologías que hacen parte viviente
del aula de clase y de las instituciones educativas.
Se puede afirmar de forma comprensiva que las transformaciones que han surgido en las prácticas
de lectura y escritura por el uso de las TIC han sido diversas entendiéndolas de manera positiva y
negativa, según las concepciones y puesta en práctica de las misma a la hora de generar ambientes
de aprendizaje y fomento de los actos de leer y escribir.
Es así, que en la población objeto de estudio se ve reflejado en los distintos espacios y momentos
institucionales el aumento de nuevas prácticas a partir de dispositivos mediales que posibilitan
ciertas transformaciones de la lectura y la escritura; que se ven reflejadas en manejo de códigos
23
comunicacionales diferentes (palabras - expresiones), propias de las redes sociales y de los
ambientes virtuales (chat, whatsapp); además, presencia notable de errores ortográficos,
desmotivación por el acto de leer (libro tangible), preferencia por la escritura y lectura digital, bajos
niveles de motivación académica; cabe resaltar que algunos estudiantes que integran rutinariamente
en su vida escolar algunos dispositivos tecnológicos, en ocasiones muestran facilidad en la
elocuencia y oralidad.
Esta presencia de las TIC en los contextos escolares también ha permitido evidencia algunos
comportamientos repetitivos a la hora de interactuar los estudiantes tales como: conductas
discriminatorias entre sujetos - grupos por la no práctica de algunas acciones o por el no compartir
las mismas tecnologías, discriminación social y cultural de acuerdo a la marca o gama del
dispositivo de comunicación (celular), inconformidades por los ambientes, realidades y sujetos que
los rodean; y distribución diferenciada en los lugares de descanso, debido a que los momentos de
compartir social se han limitado a un espacio señalizado por grupos de estudiantes determinados
que promueven la interacción con los celulares y tablet; alejando la movilidad corporal, el juego y
las relaciones interpersonales.
Los anteriores aspectos que no deben de señalarse ni buenos ni malos, sino que son puestas en
común de nuevos escenarios para abordar y consolidar momentos reflexivos en los roles docentes,
con el objetivo de construir y desarrollar estrategias que vinculen de manera asertiva dichos
cambios en la lectura y la escritura; que si no son analizados y comprendidos se convertirán en
dificultades sociales y académicas a nivel macro y que afectarán de una u otra forma el desarrollo
de los saberes en las distintas disciplinas.
Cabe resaltar, que los medios hipermediales dentro de los ambientes escolares y de forma
específica en el grupo de estudio pueden llegar a que dichos sujetos partícipes de dichos ambientes
tornen en sus prácticas un desinterés por el uso estándar del código escrito y del habla; lo que en
ocasiones minimiza el proceso efectivo de la comunicación interpersonal (diálogos), pues se ve
afectado por la falta de análisis, comprensión e interpretación de mensajes, deficiencias en la
escucha y poca retroalimentación sin que se haga mucho por mejorar dicha problemática. Esto
debido, a que la escuela actual y específicamente los docentes no están provistos en su mayoría de
24
prácticas educativas que permitan el desarrollo de la virtualidad como una estrategia y no como un
fin, haciendo que en ocasiones los estudiantes y docentes tengan rivalidades, pues los modelos
pedagógicos modernos tienen grandes desfases para involucrar humanísticamente lo tecnológico
dentro de los niveles curriculares y metodológicos; por ello, se ve lo tecnológico como algo
ofensivo y como un virus en las aulas de clase, que atenta en muchos casos con la formación o por
lo menos con la disciplina de las aulas de clase.
Además, porque se ha dejado de lado el uso de las TIC como espacio innovador y recreador de
aprendizajes dentro y fuera del salón de clase, para solo establecer tareas rutinarias y secuenciales
que han minimizado el interés y el buen desarrollo de los estudiantes en el fortalecimiento de la
lectura y la escritura; ya que los dispositivos tecnológicos para muchos agentes educativos se han
vuelto negativos y no son utilizados para promover construcciones sociales y académicas con
mayor interactividad, sino que propician meramente conceptos desligados de la práctica y de las
realidades cercanas de los estudiantes.
Por ende, los procesos de aprendizaje y socialización no responden a las necesidades e intereses de
la comunidad educativa, haciendo que las tareas académicas sean solo resultados y no un proceso
dinámico donde la interacción y la valoración constante se retroalimenta para lograr al fin un
fortalecimiento de la interpretación de cualquier situación o texto.
Esta situación anterior puede presentarse de forma comprensiva porque algunos docentes y
directivos docentes manifiestan temor por salir de los esquemas y los modelos tradicionales, ya
que en ciertas situaciones se carece de espacios reflexivos y de apropiación del área, lo mismo que
el compromiso con el proceso de formación integral en pro de la formación de sujetos culturales.
Esto, puede ser una constante, ya que dichos educadores están sumergidos en los mismos
paradigmas y tradiciones educativas; alejando al estudiante de dinámicas virtuales como es el
acceso al internet, el tratamiento pedagógico de PC, celulares, Tablet y demás dispositivos y
programas que puedan dinamizar las prácticas de la lecto escritura; y se acepten de forma reflexiva
las transformaciones de las misma.
25
Teniendo en cuenta lo anterior, es necesario comprender las nuevas realidades de educar no solo
en lo tangible sino en lo virtual para promover espacios integrales donde el valor de la
comunicación, la interpretación textual y la dinámica del código escrito perduren en la secuencia
de un progreso latente para los estudiantes y los forme como seres críticos a razón de la buena
utilización de las distintas herramientas y dispositivos que circundan en la actualidad, donde las
habilidades básicas (leer, hablar, escribir, escuchar) abran el camino hacia el desarrollo de un ser
crítico y en constante renovación.
Es necesario, hacer todos los esfuerzos posibles para lograr que los sujetos lean y escriban de
manera reflexiva, puesto que estos actos harán de ellos sujetos abiertos a los cambios, únicos,
diferentes unos de otros, con sentimientos y pensamientos diversos pero con capacidad de convivir
en sociedad.
En síntesis, las problemáticas más notables a la hora de establecer las prácticas de lectura y escritura
a partir de las TIC están directamente relacionadas con la contrastación que se hace en los espacios
educativos con los dispositivos electrónicos, los cuales en ciertos momentos tienen un tratamiento
con enfoque pedagógico que posibilita prácticas vivas, recreadoras de cultura y de expansión
social, donde se ven las TIC como una herramienta mediadora y facilitadora de saberes y de
intercambio de significados; pero en otros momentos, se entienden dichos dispositivos como
trasgresores de lo tradicional, que instrumentalizan la formación escolar y que alejan la relación
entre docentes, estudiantes y conocimientos. Esto hace, que leer y escribir en la escuela esté en
continuo cambio y debate, pues las prácticas se constituyen en la diversidad de lo digital versus lo
tangible, sin mirar que muchas veces solo se ha cambiado de herramienta de producción (lápiz a
computador).
Todo el rastreo y descripción anterior de la situación problema, hace que surja la siguiente pregunta
de investigación: ¿Qué transformaciones genera las TIC en las prácticas de lectura y escritura en
los estudiantes de la I.E de María del municipio de Yarumal?
Partiendo de este tópico macro se generan otros interrogantes e inquietudes de manera específica
que dan ruta al proceso de investigación, por consiguiente, se proponen las siguientes preguntas:
26
• ¿Qué dinámicas comprenden las prácticas de lectura y escritura en contextos educativos
determinados por las TIC?
• ¿Qué características tiene los procesos de lectura y escritura cuando hay o no presencia de las
TIC?
• ¿Qué transformaciones de tipo pedagógico se evidencia alrededor de las prácticas de lectura y
escritura debido a la presencia de las TIC?
1.3 OBJETIVOS
1.3.1 Objetivo General
Comprender las transformaciones que generan las TIC en las prácticas de lectura y escritura en los
estudiantes de la I.E de María del municipio de Yarumal.
1.3.2 Objetivos específicos:
• Describir las dinámicas que se suscitan en las prácticas de lectura y escritura en contextos
educativos determinados por las TIC
• Establecer las transformaciones en los actos de leer y escribir dadas por la presencia de las TIC
• Determinar las distintas transformaciones de tipo pedagógico que se evidencia alrededor de
las prácticas de lectura y escritura debido a la presencia de las TIC.
1.4 JUSTIFICACIÓN
Las prácticas de lectura y escritura son procesos que evolucionan y se transforman diariamente en
los distintos espacios educativos gracias a las tendencias y cambios que el mundo actual
experimenta, haciendo que la producción e interpretación textual sea resultados de múltiples
factores tanto sociales, culturales, ideológicos como también tecnológicos; ya que las nuevas
generaciones han incorporado de manera positiva o negativa las TIC como una herramienta más
27
para posibilitar los ambientes de enseñanza y aprendizaje. Esto hace, que estudiantes y educadores
transformen sus prácticas a partir de nuevas formas de relación, comprensión y reflexión debido a
la presencia notable del andamiaje tecnológico que acredita otras maneras de ver y actuar en la
escuela, y por lo tanto, otras formas de acceder y producir textos.
Partiendo de la anterior concepción, el proyecto está dirigido y concebido en el marco de los
estudiantes de los grados undécimos, específicamente el grado undécimo cinco – técnico en
comunicación digital, que comprende 29 alumnos; pero bajo sus criterios de construcción, es un
instrumento filosófico encaminado a consolidarse en toda la Institución Educativa de María, pues
es una temática de relevancia en el mundo moderno, donde se debe conjugar la globalización y
transversalización de saberes.
Se ha escogido este grupo de estudio, porque se notó en sus prácticas sociales y escolares en los
distintos espacios y momentos institucionales el aumento de nuevas prácticas cognitivas y
relacionales a partir de dispositivos mediales que caracterizan transformaciones de la lectura y la
escritura con el marco de las TIC, lo que hace que constantemente se presenten transformaciones
o modificaciones en los escenarios donde confluyen los saberes; específicamente a la hora de hacer
las prácticas de lectura y escritura, pues se ha renovado estos momentos generando ocasiones
problemáticas, pues se contradicen los ambientes tradicionales de lo escolar, para pasar a ambientes
virtuales, donde se conjugan múltiples tareas de lectura y escritura, que rivalizan con lo estándar;
para buscar otros escenarios que en ocasiones pueden ser más provechosos a la hora de generar
reflexión y construcción de posibles conocimientos.
Es así, que se desea comprender realidades, formas de comportamiento y maneras de socializar
saberes a razón de espacios culturales y académicos vinculados a las TIC; con el fin de entender su
valor positivo o negativo en las prácticas de lectura y la escritura, permitiendo espacios de
interpretación cultural a la hora de ver las aulas de clase y sus distintas cotidianidades con un
enfoque abierto a la utilización concreta y constante de los dispositivos tecnológicos que son
productos de la nueva sociedad virtual.
28
En cuanto al maestro y a los impactos que este proyecto promueve, desea ser un instrumento guía
de reflexión que vincula de manera eficiente las relaciones y transformaciones que circundan los
mundo de la lectura y la escritura en los marcos de las TIC, enfatizando lo mismo en aspectos
didácticos y pedagógicos que se necesitan para develar prácticas educativas que renueven espacios
y estructuren diferentes miradas de los actos de educar.
En un amplio plano de argumentación se justifica la tesis en cuanto desea entender y comprender
los roles del docentes y del estudiante en los nuevos espacios de lecto-escritura que se están
generando por las distintas prácticas educativas encarnadas en lo tecnológico, reconociendo desde
una mirada cualitativa sus incidencias en los escenarios de formación cognitiva, las interacciones
entre grupos, los cambios de códigos comunicacionales y las transformaciones de leer y entender
las producciones de cada sujeto.
Lo anterior, no deben de señalarse como buenos ni malos, sino que son puestas en común de nuevos
escenarios para abordar y consolidar momentos reflexivos en las actuales prácticas, con el objetivo
de plantear y desarrollar estrategias que vinculen de manera asertiva dichos cambios en la lectura
y la escritura, que si no son analizados y comprendidos se convertirán en dificultades sociales y
académicas a nivel macro y que afectarán no solo a una disciplina (lengua castellana) sino a otros
saberes; pues dicha temática es de orden transversal y afecta directamente las prácticas
institucionales, grupales e individuales.
Algo que no se puede negar es que lo digital ha llegado a la escuela y permanecerá por siempre;
realidad que bien orientada y con una visión crítica, social y cultural puede acrecentar de forma
notable la formación de seres comprensivos y reflexivos con la misma humanidad; pero en la
mayoría de los casos, las TIC se insertaron solamente como instrumentos de automatización de
prácticas escolares, donde son entendidas como un todo; es decir, la meta de la supuesta buena
educación, ya que esta “sociedad regida por el imperativo tecnológico, donde cada desarrollo y
avance de la técnica se celebra como la solución definitiva de los problemas de la humanidad”
(Sancho, Juana y otros. 2008, p. 10); y no se está enfocando como un medio metodológico y
estratégico, que ayude a docentes y estudiantes a dar solución a las problemáticas culturales,
29
sociales, políticas y cognoscitivas que realmente promuevan un cambio y transformación por otras
realidades que apunten a la igualdad, la equidad y la justicia en todos los campos del ser humano.
Es aquí, donde la investigación se torna de gran relevancia en los procesos de enseñanza y
aprendizaje de la lectura y la escritura, pues se desea comprender y develar las rutinas más regulares
que se presentan dentro del aula de clase a razón de estas dos habilidades en concordancia con el
uso de las TIC; explorando y describiendo que las mismas para que generen conocimientos
significativos y se integren correctamente al mundo escolar deben de ser desarrolladas y
promovidas en ambientes posibilitadores de estrategias y metodologías que muestren el camino
hacia el desarrollo social e integral de los estudiantes; y no se ven dichos dispositivos electrónicos
como el fin único de la tarea de educar, es decir, la solución de los problemas cognoscitivos,
pedagógicos, didácticos y hasta sociales de la escuela.
De esta manera, el proyecto de corte cualitativo, quiere aportar en el campo de la didáctica frente
a la lecto – escritura, pues desea en los primeros momentos avanzar hacia las comprensiones,
teorizar y contrastar como son las relaciones de estudiantes, educadores y TIC, descubriendo las
prácticas que están sumergidas en dicho contexto escolar; para que en un segundo momento se vea
el proyecto como un conjunto de posibles respuestas y al mismo tiempo de interrogantes que
puedan servir para renovar espacios y prácticas escolares, donde la lectura y la escritura trasciendan
los hechos de la mera codificación e interpretación, para llegar a la construcción de herramientas
que movilicen los mundos locales y globales; haciendo posible otras realidades, gracias a que leer
y escribir sean prácticas vivas y vitales para la generación de individuos reflexivos, autocríticos y
comprometidos con los cambios.
En esta misma línea, y como tercer factor de incidencia del proyecto busca a largo plazo en ser
una propuesta de acción y de intervención en los sujetos y contextos señalados, para aplicar
diversas actividades y talleres que puedan ser elementos para consolidar estrategias pedagógicas
articuladas con las TIC, para diagnosticar y ver los pro y contra de estos dispositivos, cuando se
conglomeran dentro de los contextos escolares y la disciplina de lengua castellana estén permeado
con dichos ambientes hipermediales. Esto con el fin de comprender que efectivo o productivo
puede ser o no ser la virtualidad dentro de las distintas actividades y ejercicios académicos que
30
genera el docente a razón de la socialización de conocimientos; también que útil puede ser para los
estudiantes el desarrollo progresivo de las tecnologías para la promoción de un posible sujeto
crítico y renovador de sus realidades futuras.
En conclusión, el presente trabajo de investigación pretende marcar diferencia a nivel local en el
campo educativo, porque hace que por primera vez en el contexto donde se desarrolla los sujetos
se dé la bases de cómo son las posibles transformaciones que generan las TIC en las prácticas de
lectura y escritura, mostrando de manera descriptiva distintos momentos conceptuales,
metodológicos y analíticos que tienen como idea fundante el reflexionar y comprender como
influye la tecnología en los contextos escolares; determinando espacios, ideas, reflexiones y formas
de ver, actuar y comprender el mundo por parte de los estudiantes y docentes a la hora de movilizar
espacios que sean significativos y que tengan como pilar reconocer que las herramientas
tecnológicas enfocadas desde factores humanísticos podrán ser instrumentos que posibiliten el
camino hacia la renovación de ambientes y prácticas educativas en continuó replanteamiento,
creando en consecuencia, lo que para Freire es “la Educación Problematizadora que niega el
sistema unidireccional propuesto por la Educación bancaria, ya que da existencia a una
comunicación de ida y vuelta, y elimina la contradicción entre educadores y educandos. Ambos,
educador y educandos, se educan entre sí mientras se establece un diálogo en el cual tiene lugar el
proceso educativo. Con la Educación Problematizadora se apunta claramente hacia la liberación y
la independencia, pues destruye la pasividad del educando y lo incita a la búsqueda de la
transformación de la realidad, en la que opresor y oprimido encontrarán la liberación
humanizándose” (Freire, 2008, p. 32).
31
CAPÍTULO II
2. CONSIDERACIONES TEÓRICA SOBRE LAS TRANSFORMACIONES DE LAS
PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA A PARTIR DEL USO DE LAS TIC EN
ESPACIOS EDUCATIVOS
2.1 PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA
2.1.1 Definición
Los diferentes espacios que se generan en el mundo actual están dinamizados por diferentes
prácticas educativas que convergen dentro del entorno escolar y de los demás espacios sociales y
culturales donde se desarrollan experiencias de vida de cada individuo; por consiguiente, se puede
ahondar que en las líneas educativas existen y se complementa un conjunto de procesos cargados
de cultura y significado de acuerdo a los contextos históricos y sociales, y uno de ellos está
albergado en las prácticas de lectura y escritura que se promueven desde los primeros años de vida
del ser humano, propiciando momentos de arraigo con lo cultural, para entender y visualizar los
porqués de su realidad.
Es así, que para dar significación a las prácticas de leer y escribir se hace necesario entender sus
concepciones y cómo éstas han tomado una reconfiguración a partir de las distintas realidades
históricas, sociales, académicas y culturales que se han desarrollado a lo largo del evolucionar del
hombre; por ello, es determinante las apreciaciones que hace Emilia Ferreiro (2001) en su libro:
pasado y presente de los verbos leer y escribir”, donde muestra las reconfiguraciones que se han
dado en la escuela a partir de estas prácticas y han pasado por múltiples definiciones que las han
limitado muchas veces a factores meramente mecánicos o técnicas mentales que favorecen de una
u otra forma la adquisición de un saber.
Desde este punto, hay que clarificar que la lectura y la escritura van más allá de la decodificación
y la copia. Son procesos sociales que dan identidad a grupos y les permiten dar significación a sus
distintas prácticas, permitiendo entender y reflexionar sobre su mundo, tal como entiende la
32
alfabetización Ferreiro donde centra dicho proceso como “un continuo que va desde la infancia a
la edad adulta y, dentro de ésta, un continuo de desafíos cada vez que nos enfrentamos con un tipo
de texto con el cual no hemos tenido experiencia previa” (Ferreiro, 1997, p. 4).
Es importante señalar las aportaciones de Moráis (2001) quién enuncia que el “El binomio lectura-
escritura es indisociable, sólo hay lectura allí donde hay escritura. La lectura es un medio para
adquirir información y la escritura es un medio de transición de información, por consecuencia
forma parte de un acto social” (Moráis, 2001, p. 97). Por lo tanto, queda claro que leer y escribir
no es simplemente trasladar el material escrito a la lengua oral; leer significa interactuar con un
texto, comprenderlo y utilizarlo con fines específicos y escribir, como una práctica activa para la
organización del contenido del pensamiento para que otros comprendan el mensaje.
Desde aquí, se puede argumentar o poner en discusión que dichas prácticas (leer y escribir) como
escenarios socioculturales depende, en gran medida, de la posibilidad de participar en su uso con
personas que las conoce y las utiliza en contextos – comunidades sociales definidas donde prima
la interacción entre los individuos, acreditándose como condición necesaria para aprender a
convivir y hacer historia.
Lo que aleja ideas o teorías que es solo un proceso mental individual, que se constituye a lo largo
de la vida como sistema mecánico y productor de significados que luego se ponen en consideración
con el otro (sociedad) y otros textos; olvidando que estos procesos y sus relaciones se dan en
contextos culturales, históricos e institucionales en línea directa con los demás sujetos que
movilizan las ideas de aprendizaje a través de la participación y los vínculos de afectividad que
permiten conocimiento, saberes y habilidades aportadas por los participantes en los eventos de
interacción, discusión acerca de la pluralidad de las formas, usos, prácticas, propósitos y creencias
sobre la escritura y la escritura. Éstas últimas como actividades sociales que muestran la diversidad
del sujeto a la hora de dar perdurabilidad a sus experiencias y de compartirlas con sus pares
(sociedad) para conformar historia y movilizar espacios culturales, que con seguridad generaran
otras lecturas en pro o en contra de lo vivido, lo leído y lo escrito.
33
Desde esta mirada hay otras perspectivas que apoyan los conceptos de lectura y escritura de una
forma más renovada, práctica, cultural y social como es el aporte presentado por Freire (1996) en
su texto La importancia del acto de leer donde argumenta: que “el aprendizaje de la lectura y la
escritura como un proceso íntimamente ligado al mundo de los alfabetizados, como un instrumento
de crítica y liberación en el que el verdadero sujeto es quien aprende. Lejos de las prácticas
meramente mecánicas del «ba-be-bi-bo-bu», como él mismo dice, Freire defiende la actitud
creadora en la quien enseña ayuda, orienta, a ese «sujeto» verdadero que se adueña críticamente de
su destino” (Freire, 1996, p. 81).
l tener una ruta conceptual de la visión de lo que refiere los actos de la lectura y la escritura, se
puede avanzar hacia la consolidación del entendido referido a las prácticas que ellas conllevan no
solo en contextos escolares, sino en los distintos ambientes que intervienen los individuos para
comunicarse.
Por ello, así como se entienden dichas prácticas como “prácticas sociales” (Lerner, 2003) éstas se
conciben dentro de la escuela como un conglomerado de actividades que promueven el desarrollo
de escenarios pedagógicos que buscan insertar al estudiante o cualquier agente educativo un ser
lector o escritor; formando una cultura por la lecto-escritura donde se liberen de ideales
tradicionalistas de solo reproducción de información, para llegar a momentos bien definidos hacia
la comprensión e inserción de los textos en la vida de cada estudiante.
Por consiguiente, la idea de práctica de leer y escribir no solo es un hecho de promoción de lo
mismo, sino que expande su objeto hacia la consolidación de una escuela que abre las puertas a la
comunidad y que moviliza su accionar hacia el desarrollo de habilidades en grupo, para que cada
ejercicio educativo sea permeado por las prácticas lectoras y escriturales, que en un principio fueron
entendidas como un “procesos de enseñanza de saberes para la adquisición de una técnica: técnica
del trazado de las letras, por un lado, y técnica de la correcta oralización del texto, por otra
parte”(Ferreiro, 2000, p. 34).
Es claro, que aquellas prácticas deben ser planeadas, coordinadas y ejecutadas por los docentes con
un sentido de responsabilidad a la hora de emprender la dura tarea de movilizar ambientes
34
transformadores y renovadores que permitan la liberación de leer y escribir e involucrar a cada
miembro social que interviene en la escuela en una comunidad de lectores y escritores. Sin
embargo, para cumplir este desafío es necesario reconceptualizar el objeto de enseñanza y
construirlo tomando como referencia las prácticas sociales de la lectura y la escritura, para esto es
necesario hacer que la escuela funcione como una comunidad integradora de experiencias de vida
en vínculo y contraste con las experiencias del texto, para buscar respuestas a los problemas que
necesitan resolver, tratando de encontrar la información para comprender mejor algún aspecto del
mundo que es objeto de sus preocupaciones.
Se necesita pues hacer de la escuela un ámbito donde la lectura y la escritura sean prácticas vivas
y vitales, donde leer y escribir sean instrumentos poderosos que permitan repensar el mundo en el
que viven y reorganizar el propio pensamiento, donde interpretar y producir textos sea una
cotidianidad que dinamiza y articula los saberes disciplinares hacia la significación; ya que es
fundamental que docentes y estudiantes se conecten en líneas de pensamientos divergentes,
propios, posibilitadores y generadores de prácticas socio-culturales alejadas de la esquematización
y la uniformidad no solo del pensar sino del hacer, para poder engendrar caminos de diferencia y
liberación, que encarnen de verdad unos momentos de lectura y escritura que dignifiquen cada
sujeto, de acuerdo a sus grados de ver e interpretar sus realidades, como factores decisivos a razón
de la responsabilidad y el respeto por lo otro.
Por todo lo anterior, cada práctica de lectura y escritura se enmarca es situaciones didácticas, que
van desde un encuentro personal con el texto, con el autor, sus escenificación y pasa por los
registros, producciones textuales, mapas conceptuales, relecturas, talleres y construcción de
mundos posibles; que albergan las distintas interpretaciones de cada realidad. De esta manera, se
pasará a dar encuentro vivo con la cultura y la sociedad, entendiendo fielmente los diferentes
contextos que suscitan los pensamientos de cada sujeto; pues un acto de leer y escribir, no solo
debe generar una visión, debe encarnar las diferentes miradas (tradiciones, costumbres, valores,
manifestaciones) de cada individuo, lo que asegura mayor riqueza y valor a la hora de movilizar
dichas prácticas escolares.
35
Este proceso integra un conjunto de planificaciones docentes que aseguran que el alumno es un
sujeto que aprende y enseña; y por ende debe ser dueño de sus decisiones y con mayor expresión
de la palabra. Por ello, la acción educativa se posibilita como un lugar generador de pensamiento
y reflexión sobre el mismo entorno, como lo argumenta Rodari, G. (1985) cuando es citado en el
texto las prácticas de lectura y escritura como ejes de la Formación docente y sus implicancias
didácticas “una práctica docente que comparta el deseo y el compromiso de democratizar los usos
de la palabra. (Carrió, M., Ochonga, M., & Codesal, A. 2004, p. 9).
En síntesis, se asumen la lectura y la escritura como una prácticas generadoras de cambio y
promoción de movilidades educativas y pedagógicas a razón de la reflexión, la autodeterminación,
la autorregulación y en la puesta en común de diferentes mundos posibles que abran espacios para
la crítica y la producción escrita y oral a partir de la diversidad, que solo se verá dignificante para
el ser de educando cuando se integre como una práctica liberadora y consciente en su ser.
Desde aquí, y al ya dar claridad a los conceptos de lectura y escrituras desde diferentes miradas y
dando prioridad a perspectivas socioculturales, se puede adentrar el fragmento conceptual a otras
ideas que condensen las características propias de los actos de lectura y escritura en escena directa
con ambientes sociales y escolares donde prime la interacción, el vínculo y los juegos culturales
que se dan en la escuela y fuera de ella a la hora de leer y escribir.
2.1.2 Características de lectura y escritura
La lectura y la escritura son procesos socio – cultural, esto hace que sean prácticas netamente de
intercambio e interacción con los demás, pues permite vincular mundos, realidades, pensamientos,
conocimientos y generar historia que se va constituyendo paulatinamente en el gran tejido de la
comunicación y el lenguaje, que luego se socializa y se transmite a las nuevas generaciones
(comunidad).
Es aquí, donde los contextos escolares y dando primacía a la escuela, deben de generar espacios de
coherencia, congruencia y propiciar la diferencia de cada sujeto (estudiante) para adentrarlo de la
mejor manera a la magia de la palabra y de la comunicación escrita y oral, que lo constituirá como
36
un ser en continua evolución y desarrollo social, cultural, político y académico aportando en la
medida de sus condiciones experiencias y saberes en pro de la riqueza individual, colectiva y el
sentido de respeto por lo otro. Ya que la lectura y la escritura, no debe existir en la escuela solo
para ser enseñadas y aprendidas sino que deben estar como prácticas ligadas de lo social y lo
cultural, que permanecen y se promueven de acuerdo a las interacciones con los demás,
permitiendo la comprensión y la reflexión; derrotando los ideales tradicionales que las ven como
factores obligantes para ascender en niveles educativos de forma individual y que llegan hacer
excluyentes por el solo hecho de no dominar los simples códigos.
Asimismo, esta lectura y escritura según Lerner (1996) permite “adentrarse en otros mundos
posibles. Indagar en la realidad para comprenderla mejor, es distanciarse del texto y asumir una
postura crítica frente a lo que se dice y lo que se quiere decir, es sacar carta de ciudadanía en el
mundo de la cultura escrita...” (Lerner, 1996, p. 5). Por ende, estos actos siempre deben de proponer
espacios de discernimiento, que aseguren la propuesta de un ser múltiples, creador, imaginario,
reflexivo, social y preocupado por las realidades no solo de su ser, sino del prójimo y su contexto
local y global.
Por lo tanto, la lectura y la escritura conjugan un conjunto de actos que siempre están en el círculo
vital de las palabras, como lo acreditan Octavio Paz al decir que “el hombre es un ser de palabras”
(Muñoz, y otros. 2006, p. 31) que, por ende, buscará asociarse y tratar de comunicar sus ideas de
una u otra forma, con el hecho de entender y repensar sus ideas de mundo.
Cuando los contextos educativos promueven su ideal en la lectura y la escritura se podrá pensar
que no solo se interesan por la asociación de términos académicos que respondan solo a sistemas
de planeación sino que confrontan lo cognoscitivo con lo social y se puede dar herramientas para
comprender el porqué de las situaciones y realidades que acontecen.
Desde este punto, se podrá clarificar las características de leer y escribir tales como los elementos
que generan condiciones para crear los rasgos distintivos que permitan contextualizar dichas
prácticas que no solo son procesos meramente escolares sino que albergan un amplio espectro
37
social, pues lo educativo sale del limitante de los centros educativos y se pueden ver en otros
espacios que van desde la familia hasta niveles profesionales.
Por consiguiente, es bueno reconocer algunas características que residen en los actos de leer y
escribir, una de éstas es que son producto de altos niveles de alfabetización que aseguran la
utilización del código escrito y le permite descodificarlo en contextos sociales particulares para
luego reconocer los contextos globales. “Está claro que estar "alfabetizado para seguir en el circuito
escolar" no garantiza el estar alfabetizado para la vida ciudadana. Las mejores encuestas europeas
distinguen cuidadosamente entre parámetros tales como: alfabetizado para la calle; alfabetizado
para el periódico; alfabetizado para libros informativos; alfabetizado para la literatura (clásica o
contemporánea); etc. Pero eso es reconocer que la alfabetización escolar y la alfabetización
necesaria para la vida ciudadana, el trabajo progresivamente automatizado y el uso del tiempo libre
son cosas independientes. Y eso es grave. Porque si la escuela no alfabetiza para la vida y el
trabajo... ¿para qué y para quién alfabetiza? ” (Lerner, 1996, p. 3).
Lo anterior, es un concepto soportable en todos los tópicos, pues una de las labores sociales y
culturales que puede generar la escuela y los diferentes ambientes escolares en educar para la vida
y la libertad, de nada vale un conjunto de saberes y conceptos en las mentes de cada sujeto, sino
tienen el valor y el significado para sus vidas y sus experiencias cotidianas; es decir, no están
conectadas con sus realidades, por lo tanto no cumple con el hecho de cautivar y ser relevantes, ya
que lo deseado es reproducir pensamientos estatales, económicos y de grandes grupos imperantes,
para crear los seres de acuerdo a su idea de mundo convirtiéndose en prácticas de leer y escribir
obligadas, rutinarias, esquemáticas, sin sentido y si horizonte, lo que se ve reflejado en las actitudes
de cada estudiante.
Para eliminar esto, la escuela no será el recinto reclusorio de mentes y cuerpos sino el espacio del
encuentro con la vida, con el otro, con la diferencia, el cambio y la reflexión; desde acá, el leer y
el escribir serán prácticas recurrentes, distintas y con un alto nivel cultural, pues se verán como
escenas cotidianas, que nacen y se constituyen en el interior de cada persona en lo más profundo
de sus ideales, perspectivas y posturas de mundo.
38
Otro elemento característico, es que leer y escribir surge en espacios sociales (barrio, familia,
escuela, etc), los cuales persiguen con propósitos algunas veces didácticos que los sujetos aprenden
los conocimientos que necesitan para emplearlos en su vida futura, donde se escribe para estar en
contacto con alguien distante y leer para conocer otro mundo posible y pensar sobre el propio.
Lamentablemente, en las prácticas que se ven de acuerdo a las distintas observaciones e
investigaciones la mayoría de veces estos ambientes tiene como prioridad enseñar a leer y escribir
de forma instrumental alejando la interacción y el pensar desde otros puntos; desconociendo que
debe ser algo dinámico y que evoluciona de acuerdo a las tendencias y corrientes culturales e
históricas, ya que en algunos ambientes escolares se ha pasado de unos procesos tradicionales de
solo información y datos, sin necesidad de comprensión e interpretación de contextos y realidades;
para enfrentar ahora ambientes tecnológicos donde leer y escribir cobra otro significado y sus
prácticas confluyen en momentos mediales que determinan otros mecanismos para avanzar hacia
la significación.
Los anteriores elementos conceptuales sigue confirmando que leer y escribir va más allá del hecho
mecánico de asignar significados a las palabras y dar comprensión a los mismos; estos actos se
promueven en ambientes de comunicación social, que son producto de muchos factores tanto
familiares como sociales, que asimilan un conjunto de experiencias aleatorias que tienen su ser en
el momento que se puede tomar estos actos para no solo informar sino para trascender y perpetuar
los conocimientos, pues uno de los objetivos de las prácticas de lectura y escritura es comunicar y
socializar la historia y la vida, de allí, que sean legado y patrimonio individual y colectivo para
construir y reconstruir experiencias y momentos de la sociedad. Además, tiene el factor de abrir
espacios para la imaginación y la ficción, pues gracias a los textos se pueden adentrar cada sujeto
a diferentes mundo posibles, que se dan gracias a la creatividad y al sentir que se plasma en cada
palabra, constituyéndose en las manifestaciones culturales y sociales de una comunidad.
Es importante, entonces, que el proceso de enseñar se reconceptualice con otras miradas, que
apunten a la promoción y desarrollo de lecturas y escrituras liberadoras, donde se tenga en cuenta
las características que se han mencionado en este pasaje conceptual, con el fin de construir posibles
culturas lectoras dentro y fuera de la escuela apropiándose docentes y estudiantes de “la herencia
cultural que involucra el ejercicio de diversas operaciones con los textos y la puesta en acción de
39
conocimientos sobre las relaciones entre los textos, entre ellos y sus autores, entre los autores
mismos, entre los autores, los textos y su contexto.” (Lerner, Delia. 1996, p. 1).
Por último, para entender las características sociales que pueden ser reconocidas en el ser de la
escuela referidas a las prácticas de leer y escribir; hay que ver la escuela como una comunidad de
lectores y escritores, que acuden espontáneamente a los textos buscando respuesta para los
problemas que necesitan resolver, tratando de encontrar información para comprender mejor algún
aspecto del mundo que es objeto de sus preocupaciones.
De esta manera, el alumno podrá interpretar y producir sus textos para darse a conocer y emprender
acciones que den crédito a otras formas de compartir la idea de mundo que pueda tener; y que
tendrá sentido si el objeto de la enseñanza está cubierto por un docente que abra argumentos hacia
la sociedad y la conformación de ciudadanos culturales con roles definidos con altos niveles de
reflexión y transformación constante.
2.1.3 Dinámicas de las prácticas de lectura y escritura en el contexto escolar.
Cuando se habla de prácticas de lectura y escritura dentro del mundo escolar es fundamental ver
dichos procesos en ambientes liberadores y en espacios dialogantes donde docentes y estudiantes
converjan en una idea de reconocimiento de saberes y de construcción de momentos significantes
que movilicen cada experiencia hacia la comunicación y el desarrollo de prácticas colectivas, que
busquen el encuentro entre el ser y el hacer en una misma red de construcciones y reflexiones que
aseguren en gran medida el fortalecimiento de los códigos escritos y orales dispuestos en cada
manifestación de los educandos.
Por ello, la dinámica de un proceso educativo permeado por la humanización del conocimiento
integra un conjunto de ideas que va más allá de enseñar, aprender y educar, gira a razones de
comprensión, reflexión y especialmente de formación para la vida y la libertad de los sujetos, dando
primacía a la existencia y reconocimiento de lo otro – la diferencia, que sea factor decisivo para
promover una forma de educación holística, que asegure no la reproducción sino la movilización
de saberes y experiencias para generar ambientes de transformación y dignidad para docentes y
40
estudiantes. Éstos como promotores de cultura, capaces de dialogar en línea horizontal y
desarrolladores de nuevas propuestas para una formación donde sea participativa e incluyente,
como lo afirma Freire (1987) cuando habla de que “sin el diálogo no existe posibilidad de cambiar
el modelo vertical y autoritario de la educación dominante y, por consiguiente, tampoco la relación
social que se ha establecido durante siglos entre oprimidos y opresores, entre dominados y
dominadores. En este modelo no existe diálogo; la educación es vertical, autoritaria, bancaria; la
información es apilada, acumulativa, no hay convocatoria al interrogación, a la duda, a la
generación de ideas y reflexiones sobre la realidad que vive y en la que vive el ser humano” (Safar,
2001, p. 154).
Queda claro entonces, con dicho aporte que para avanzar en una educación abierta y de grandes
rasgos críticos y reflexivos, es fundamental abrir las prácticas escolares en todos sus niveles hacia
la liberación del pensar o a una revisión y construcción crítica del mundo y constructor de ideales
diversos, que entienda la pluralidad y pueda ver otras opciones o realidades para movilizar sus
saberes; ya que las prácticas educativas van más allá de la puesta de metodologías y estrategias
pedagógicas que promuevan el libre desarrollo del pensar, del actuar y del construir ideales
distintos a cada contexto social y cultural; pues gira a razones donde el docente esté llamado a
generar relaciones multidimensionales con sus estudiantes para fortalecer los elementos de la
comunicación y alejar ejercicios encasilladores que solo provocan en la mayoría de los casos que
las actitudes y habilidades del aprendiz decaigan y se aumenten los hastíos por aprender a razón de
la opresión y de la autoridad excesiva que solo buscan minimizar los ideales del ser humano y
mostrar éxitos farsantes de qué aprender es solo estar disciplinado.
Desde acá, se pueden construir concepciones para profundizar en las dinámicas, prácticas,
ejercicios, metodologías, pedagogías, espacios y momentos que deben enmarcar los actos de leer
y escribir fuera de lo tradicional y los estandarizado que solo miden rangos de producción e
interpretación textual sin reconocer en muchos casos contextos culturales y momentos internos de
cada sujeto y ambiente o aula escolar; pues como lo cita Delia Lerner (1996) en su texto: ¿Es
posible leer en la escuela? donde argumenta que “el tratamiento de la lectura que suele hacerse en
la escuela es peligroso porque corre el riesgo de “asustar a los niños”, es decir, de alejarlos de la
lectura en lugar de acercarlos a ella; al poner en tela de juicio la situación de la lectura en la escuela,
41
no es justo sentar a los maestros en el banquillo de los acusados porque ellos también son víctimas
de un sistema de enseñanza” (Lerner, 1996, p. 3).
De igual manera sucede con los procesos de enseñanza y aprendizaje de la escritura, que se hay
limitado a solo las normatividades ortográficas, a la producción rígida y temeraria y a la poca
utilización de géneros literarios que den mayor libertad a cada estudiante; lo que hace que sus
habilidades sean reducidas y el acto de escribir sea casi diseñado por el docente.
Es aquí, donde la idea de leer y escribir en lo escolar debe tomar fuerza, pues es importante en la
actual realidad combinar de forma coherente y sin la necesidad de deslegitimar sistemas de
enseñanza las diferentes formas de educar o procesos educativos existentes, pues cada uno en
mayor o en menor parte otorgan conceptos valiosos a los actos de leer y escribir en la escuela, para
abordarlos como prácticas que son vitales dentro del aula que deben de ser promovidas, animadas
y promocionadas a partir de dinámicas de inclusión, recreación y socialización permanente; para
que se haga en líneas de diálogo y creación mutuo, donde los actos liberadores estén presentes y
den articulación a las palabras y manifestaciones que cada estudiante construye en ese espacio de
sabiduría colectiva y de respeto por el otro; evitando caer solamente en juegos de evaluación,
castigo y competencia para llegar a espacios de mayor reflexión y sentido.
No se puede obviar, que una de las prácticas más recurrentes dentro de la lectura y la escritura es
la existencia de lo digital, como lo menciona Cassany (2000) “lo digital posibilita el desarrollo de
comunidades basadas en cualquier tipo de propósito o actividad, más allá de las “fronteras”
tradicionales. la diversidad de canales y códigos comunicativos que incluye el medio digital, así
como su gran velocidad de transmisión , que permite grados casi simultáneos de interactividad, son
las causas del notable dinamismo que presentan dichas comunidades, que nacen, crecen y mueren
o evolucionan a un ritmo mucho más alto que las presenciales. Respecto a la integración de códigos,
cabe destacar que lo digital integra todo tipo de lenguajes y formatos (habla, escritura, imagen
estática y en movimiento, infografía, reproducción virtual, etc.), con lo que se convierte en un
poderosísimo sistema multimedia de representación y comunicación de datos” (Cassany, 2000, p.
4).
42
Es así, que los procesos educativos enfatizados en las TIC se hace necesario que sean resignificados
con una mirada crítica y liberadora de tendencias que amarran al individuo en su pensamiento y lo
oprimen en sus acciones; es aquí, donde la tarea del educador es esencial para modificar tales
conceptos, alejando como lo afirma Freire (2003) “el simplismo, ya que el profesor simplista
considera que los educandos no comprenden y entonces reduce la verdad a una verdad a medias,
es decir, a una falsa verdad” (Freire, 2003, p. 33).
Por ello, la invitación es propiciar contextos educativos no simplistas sino simples, que aseguren
la inteligibilidad en todo momento, para que formar en lo tecnológico no rebase lo humano, sino
que asegure una combinación gradual entre la cultura, lo social y lo comunicativo (digital) con una
visión democrática. Es evidente que la lectura y la escritura viajen en todos los senderos, pues no
debe haber parámetros o calificativos para desmeritar lo digital o lo analógico, los dos sistemas
pueden generar oportunidades para renovar y recrear significados; lo posibilitador es movilizar una
educación que propicie la elección y dé la oportunidad de visualizar todas las perspectivas
intelectuales, sociales, culturales y políticas.
Para llevar dichas prácticas hacia espacios reflexivos y de construcción es importante que estén
observados y trabajados bajo momentos diversos, donde el ser de estudiante con sus pares
determinen de una u otra las formas didácticas de cómo deben de ser sus abordajes; esto puede
lograr minimizar en muchas de las ocasiones las fuentes fundantes que están establecidas y
estructuradas dentro del sistema escolar, cargado de parámetros temáticos, metodológicos y
evaluativos ya establecidos, que en ocasiones pueden ser buenos y en otros son decadencias de una
educación monótona y pasiva.
Por lo anterior, las dinámicas que pueden construir un ideal distinto de los actos de escritura y
lectura con una perspectiva dialogante serán aquellas que puedan ofrecer los siguientes espacios y
significados:
Relación de docentes y estudiantes con horizontes de renovación constante donde cada uno
construye y diversifica con el otro sus interpretaciones y producciones textuales; donde se movilice
43
ideas a razón de la pluralidad y el reconocimiento de que puede existir otras formas de ver, enseñar,
interpretar y actuar en el mundo.
Ejercicios de una nueva forma de pensar, actuar y construir relaciones entre saberes y sujetos, lo
que involucra visiones culturales, sociales e históricas; implicaría entonces para “la pedagogía un
trabajo reconstructivo y uno reconstructivo –crítico en lo que está en juego es un proyecto de
hombre” (Muñoz y Runge, 2005, p. 365), que se configure como un sujeto libre, democrático,
reflexivo y autorregulador de sus actos, sin necesidad de juzgar y estandarizar prácticas humanas,
sino al contrario un ser humano dignificante de su ser, sus prójimos y los contextos que lo rodean.
De esta manera, la visión del mundo se alejará de ideas bancarias y de subordinación para avanzar
hacia escenas de humanización, siempre en la línea del respeto por la otra realidad.
Estas nuevas formas de pensar las realidades que a diario entran en juego en los escenarios
escolares no deben de ser ajenas a las innovaciones y herramientas tecnológicas que
constantemente invaden y se constituyen en medios y formas para movilizar no solo los
conocimientos sino las relaciones con los otros y con el mundo; permitiendo otras maneras de ver,
pensar y actuar en la actual sociedad; ya que dichas elementos tecnológicos configuran unas nuevas
ideas de mundo y de hombre, que si no se saben enfocar por parte de familia, escuela y sociedad
se cae a espacios reiteradamente de estandarización, dominio y sujeción que aleja la humanización
para caer en la automatización.
Por ello, la aceptación y aprovechamiento de las TIC como escenarios de formación y significación
de los saberes para movilizar otras formas de pensar y repensar los procesos académicos,
específicamente las prácticas de lectura y escritura a partir de la virtualidad y la interactividad en
articulación con dimensiones humanas debe procurar al máximo la idea de lo humano – cultura
antes que lo tecnológico; de lo contrario la herramienta se convertirá en un medio y en un fin de
todo acto. Desde esta visión, (Feenberg, 1991) “la tecnología no es un destino sino un escenario
de lucha. Es un campo de batalla social, o quizás una metáfora mejor sería un parlamento de las
cosas en el que las alternativas civilizatorias debaten y deciden” (Sancho y otros, 2008, p. 11).
44
Hace reflexionar sobre la importancia de abrir espacios para insertar de forma social las TIC, sin
la necesidad de invadir lo cultural y hacer que las prácticas escolares caigan en un mero
automatismo, que aleja a los sujetos de lo verdadero y significativo, para caer en mundos
perfectamente artificiales que estandarizan los pensamientos; haciendo que la sociedad sean una
reproducción de actos inconscientes y sin ninguna pregunta por la existencia de lo otro. Por
consiguiente, las TIC dentro de los contextos escolares pueden ser una perfecta herramienta para
construir pensamientos, saberes, ideales, progresos, diferencias, críticas, reflexiones y dinamismo
social; siempre y cuando se entiendan como estrategias para formar seres libres y autónomos, que
tengan conciencia por lo que se está ofreciendo, que sepan discernir entre lo bueno y lo malo según
el momento; y que puedan argumentar una vida conceptual y práctica en mucho de los casos sin
las TIC (desconectados).
Alejar la idea de que “El docente fundido en el método, reducido a ser un robot enseñante” (Pineau
y otros, 2005, p. 47) para posibilitar ideas y métodos variados sobre la enseñanza y el aprendizaje
de leer y escribir en los actuales ambientes culturales, donde más que acumular recetarios temáticos
y metodológicos se pueda privilegiar la espontaneidad y la libertad de cada relación entre docentes,
estudiantes y textos; sin olvidar que puede estar en marcos culturales y sociales diversos; donde se
de miradas a la comunicación como base inicial y terminar de todo espacio académico, que respeta
y construye hilos de cercanía con el otro, posibilitando la diversificación de puntos de vista en cada
conocimiento de la mano con lo social y lo cultural.
Estas anteriores dinámicas, que pueden estar dentro de los centros educativos de la actualidad o
que para otros es solo una utopía podrán generar prácticas de leer y escribir más significantes,
replanteando los ideales y políticas gubernamentales, siendo procesos de relevancia para cada
sujeto y puedan de diferentes maneras reflexionar y construir mundos posibles a través de procesos
libres y acompañados por senderos de diálogo, comunicación y donde cada textos escrito y leído
sea la representación viva de individuo y no de un sistema.
45
2.1.4 Características y dinámicas de las prácticas de lectura y escritura en contextos educativos
medianos por TIC.
Cada momento de la historia conlleva un reto para el ser humano dentro de sus procesos de
socialización, cultura y desarrollo intelectual que lo asumen en distintas prácticas y relaciones
tanto consigo mismo, con los otros y su entorno; por ello, la actual sociedad debe procurar que
responda de forma asertiva y reflexiva a los vigentes cambios globales que se están acreditando
por la creciente manipulación, desarrollo y aplicación de distintos dispositivos tecnológicos que
sean convertidos en necesidades sentidas para vivir, actuar y pensar las distintas experiencias que
pueda tener cada individuo en sus vidas cotidianas; lo que hace que las relaciones sociales y las
formas de acceder a los saberes estén en continuo cambio y transformación, donde se privilegia la
eficacia, la multimedia e intangibilidad de los procesos tanto culturales, sociales como académicos.
Por estas razones, la escuela no está ajena de lo que el mundo global está experimentando y cada
vez más se involucra y reproduce elementos y prácticas propias de las TIC, para responder a las
exigencias y necesidades que los estudiantes en la actual sociedad digital están reclamando.
Aunque muchos de los procesos que se están llevando a cabo para insertar dichos ambientes no
son lo más adecuado, pues de acuerdo a observaciones escolares, prácticas, charlas, textos de
referencia e investigaciones educativas concluyen que en algunas ocasiones están convirtiendo los
escenarios educativos en solo espacios para el entretenimiento, la poca reflexión, la abundancia de
información sin análisis, el aprovechamiento exagerado de elementos tecnológicos y no de
metodologías, la comunicación vertical y las carentes deficiencias de muchos enseñantes para
incorporar de forma positiva las herramientas informáticas que son propias de la cultura estudiantil.
Por consiguiente, esta época de trascendentales cambios, de la globalización y de incertidumbre
social, hace que la idea de educar se transforme en todos los factores tanto curriculares,
administrativos, culturales, sociales, académicos, etc. Por ello, tal como lo describe Giroux (1999)
“el desafío al que se enfrentan los educadores y estudiantes, representa parte de un desafío mayor
para desarrollar y sostener las culturas públicas democráticas, para conseguir que se hagan
explícitas sus metas morales y políticas que funcionan en sus prácticas y desarrollen pedagogías
que se encarguen críticamente de demostrar como el conocimiento está relacionado con el poder
46
de la autodefinición y transformación social” (Romero de Castillo, 2002, p. 95). Es así, que el
camino hacia lo nuevo está tocando las puertas tanto de docentes como estudiantes y sociedad en
generar, lo que es importante es abrir dicho horizonte a nuevos espacios de formación y recreación
de saberes, donde prime lo humano antes que lo tecnológico, haciendo que las TIC, sean solo
herramientas de trabajo y posibilitadores de ambientes cargados de imaginación, creatividad e
interacción, sin necesidad de convertirlas en la solución y panacea de la educación.
Lo digital ha llegado a la escuela y la está transformando; algo que bien orientado y con una visión
crítica - social, puede acrecentar de forma notable la formación de seres comprensivos de
realidades y reflexivos con la misma humanidad; pero en la mayoría de los casos, las TIC se
insertaron solamente como instrumentos de automatización de prácticas escolares, donde son
entendidas como un todo, es decir la meta de la supuesta buena educación; pues esta “sociedad que
está regida por el imperativo tecnológico, donde cada desarrollo y avance de la técnica se celebra
como la solución definitiva de los problemas de la humanidad” (Sancho y otros, 2008, p. 1.); y no
están enfocando como un medio metodológico y estratégico, que ayude a docentes y estudiantes a
dar solución a las problemáticas culturales, sociales, políticas y cognoscitivas; que realmente
promuevan un cambio y transformación por otras realidades que apunten a la igualdad, la equidad
y la justicia en todos los campos del ser humano.
Cabe resaltar, que las nuevas tecnologías han captado un interés exorbitante en cada sujeto y lo ha
vislumbrado a un nuevo mundo donde su ideal de pensamiento se reduce a la mera utilización de
la herramienta; endiosando la misma como la fuente de información, comunicación, diálogo y
progreso en todas las líneas. Aquí, los actores educativos han caído en tal error, lo que hace que las
actuales instituciones educativas se estén supuestamente preparando y educado para la tecnología.
Es aquí donde toma valor los diálogos de Daniel Cassany (2008) que ha referido en su texto:
Nativos e inmigrantes digitales, donde afirma: “Hoy en día, nuestros hijos, nuestros alumnos y
nuestros jóvenes están aprendiendo de manera informal, fuera de la escuela, por su cuenta, un
conjunto de habilidades y técnicas de acceso, manipulación y circulación de la información, que
muchos padres y madres, maestros y adultos ignoramos. Lo que ha provocado todo este revuelo
47
son las TIC (las denominadas Tecnologías de la Información y la Comunicación), pero está claro
que los protagonistas más importantes somos las personas” (Cassany, 2008, p. 54).
Por esto, el accionar y el continuo desarrollo de las tecnologías en la escuela es por los diferentes
y múltiples usos que específicamente los estudiantes hacen de las mismas, pues son ellos los que
navegan en el infinito mundo de la virtualidad, pasando desde el chat, las redes sociales, los
mensajes de textos, los emoticones hasta llegar a juegos en líneas y el derroche de información que
trae el camino de la web. Por consiguiente, las realidades cognoscitivas, sociales y culturales del
individuo escolar esta permeado por dichas prácticas, ya que su conocer se da a través de lo digital
y los posibilita a crear, inventar y compartir experiencias, que los llevan a encontrarse con otros
mundos culturales que los constituyen como unos nuevos integrantes de sociedades alternas donde
aprenden y socializan nuevos códigos y procesos comunicativos; permitiendo que los actos del
lenguaje circulen en múltiples corrientes, donde son capaces de hablar, escribir, dibujar y jugar; ya
que pueden desarrollar la destreza de cumplir varias tareas al mismo tiempo, y por ello, la
comunicación gira a razón de varios interlocutores o espacios simulados.
A partir de las anteriores reflexiones se puede hacer un panorama de cuáles son las características
y dinámicas que suscitan las prácticas de lectura y escritura en ambientes escolares mediados por
las TIC y que son muestra viviente de que la cultura, la sociedad y la misma educación va
evolucionando de acuerdo a los momentos históricos del ser humano, que son propios y creados
por los mismos sujetos en la búsqueda de su perfeccionamiento y consolidación de diferentes
espacios comunicativos para generar perpetuidad y consolidarse como seres diversos y
constructores diarios de experiencias y procesos que ya sean positivos o negativos los resignifican.
En consecuencia, la lectura y la escritura en los ambientes hipermediales hacen que estén
disponibles para cambios tanto en sus forma como en su fondo; pues se reconfigura los actos de
enseñabilidad en otros ambientes y prácticas, donde los estudiantes en la mayoría de casos pasan
de ser pasivos a tener un rol activo, pues son los que proponen producciones e interpretaciones
textuales de acuerdo a sus necesidades de información y de comunicación, que en gran cuantía se
producen en redes sociales.
48
Esto genera, unas características particulares en los procesos de enseñanza y aprendizaje que deben
de ser enfrentadas y asumidas por los docentes, ya que se generan conocimientos a partir de la
exploración, la confrontación, la inmediatez, la diversificación de los mismos y la fluidez de miles
de canales de información que carecen de significación; pero fortalecidos en datos e imágenes.
En esta línea de argumento, es bueno mencionar las realidades que se suscitan dentro del mundo
de la escritura y la lectura, pues se ha generado lo que muchos autores y en especial Cassany (2008)
el concepto de “hipertextualidad la que sustituye a la linealidad de la prosa en el papel: leer pasa a
ser algo todavía más interactivo y exigente, puesto que el lector ya no sigue el camino “obligatorio”
trazado por el autor, sino que debe tomar decisiones encadenadas a partir de los vínculos (links)
que se le presentan y que le llevan automáticamente a otros documentos o partes del mismo escrito.
Ante el mismo documento, los lectores ya no leen ni los mismos fragmentos ni en el mismo orden,
tampoco tienen los mismos objetivos ni mucho menos obtienen la misma interpretación. La lectura
adquiere todavía más complejidad y diversidad” (Cassany, 2008a, p. 58).
El concepto anterior, permite reflexionar como es la lectura en la actualidad, la cual ha cambiado
vertiginosamente en todos sus niveles, pues se pasó del leer en la biblioteca, la escuela o en
cualquier otro sitio, donde se tenía como referencia solo uno o dos textos para abordar; para pasar
a un sin número de textos que van y vienen de acuerdo a los intereses momentáneos, constituyendo
tiempos y significados diferentes de acuerdo a las apropiaciones que el lector (nativo digital) desea.
Además, “la escritura deja de ser el modo único de representación del conocimiento” (Cassany,
2008b, p. 59).pues se da gran valor a las imágenes (fotos, videos, pinturas, íconos, etc) que
comunican un sinnúmero de ideas y significados para cada sujeto, las cuales se pueden ir
modificando en tiempo real y construyen nuevos textos que giran en todas las dimensiones,
alejando cada vez más la escritura lineal y en prosa; para constituirse en un escenario que cambia,
se transforma tanto en sus grafías como en su significado.
En consecuencia, dando una mirada más reflexiva y crítica ante este panorama frente a los actos
de leer y escribir vinculados por la presencia de las TIC, lo cual permite generar un repensar
pedagógico que debe no solo de responder a una buena utilización de las misma sino que es un reto
49
lingüístico para que los estudiantes centren sus producciones y sus lecturas en significados, en el
discernimiento, en el análisis y la reflexión; con el fin único de hacer perdurar no autómatas sino
seres humanos escritores y lectores de sus realidades locales y externas, propiciadores de
interactividad responsable y hacedores de prácticas críticas y reflexivas de sus entornos a partir de
cada palabra o manifestación abordada y construida.
Es aquí, que la idea de educar en la actual sociedad no se debe dejar llevar por ilusiones mediáticas
y adornos tecnológicos, que no producen significación y reflexión, sino que instrumentaliza todos
los actos de enseñanza y aprendizaje; y ahí caen los procesos de lectura y escritura, que cada vez
se alejan de la interpretación, el análisis, la criticidad, la intertextualidad, la reflexión, la
multiplicidad, la producción textual, la riqueza léxica y la comunicación eficaz para caer en
espacios monótonos que arrogan miles de datos y que esclavizan al estudiante.
Por consiguiente, los diferentes escenarios escolares están llamados a superar la visión de
acumuladores de aparatos en diferentes aulas sin enfocar la herramienta desde una perspectiva
pedagógica, donde se pase a articular los saberes, procesos de formación y el desarrollo reflexivo
de todos los docentes, que permitan socializar el universo cultural que contienen las TIC con lo
local; haciendo que los miembros escolares reciban, clasifiquen y discriminen el conglomerado de
información que brindan las herramientas en una crítica capaz de ver los pro y contra de las mismas.
Ya que de nada vale, la reproducción constante de contenidos, sino no hay un enfoque didáctico y
reflexivo de los saberes; se caería a las mismas rutinas, solo cambiaría el tablero por una pantalla,
y la idea debe ser diferente solo generaría mayor esquematización y producción de seres
reproductivos de ideologías y consumidores de un sistema.
El llamado es dar un giro a dicho modelo, para que cada ambiente con pertinencia escolar permita
recrear “la formación del juicio crítico, reflexivo y creativo como asunto de base para la formación
de sujetos” (Muñoz y Runge, 2005, p. 365), los cuales más que simple usuarios de tecnología sean
sujetos cargados de decisiones y disposiciones para no solo leer y escribir en estos dispositivos,
sino que sean seres reflexivos que hagan un discernimiento de la información, la lleven a la
multiplicidad de saberes y pongan limitaciones; de esta forma la tecnología podrá ser una alidada
50
de la pedagogía, que permita salir de tradiciones para buscar caminos diferentes que serán
construidos y orientados tanto por estudiantes como por docentes.
Una idea básica, en las prácticas comunicacionales mediadas por las TIC dentro de contextos
educativos es la autoformación y la autorregulación como conceptos que se refieren a cómo un
estudiante puede ejercer control sobre sus propias respuestas y comportamientos para perseguir
metas y vivir de acuerdo con normas, donde estén vinculadas claramente las emociones los
pensamientos, actuaciones, criterios morales y las expectativas de otros sujetos.
Es así, que la formación entre sujetos es algo fundamental, pues dentro de esas características que
lo deben de permear en los ambientes tecnológicos – educativos debe de prevalecer la puesta en
marcha de espacios libres, autónomos, independientes y constructivistas donde cada sujeto sea
consciente y se autorregule de acuerdo a sus roles y visiones del mundo, que será la fuente para
que la base de la lectura y la escritura se torne en procesos placenteros y multiplicadores de
conocimientos. Además, ese docente, no solo será un transmisor de información, códigos y
expresiones ya sean de libros o la internet; sino que es capaz de reflexionarla, interrogarla y
rechazarla para que en la socialización dentro del aula de clase, él pueda ser el primer junto con
sus estudiantes de dinamizar la formación hacia el respeto cultural y el reconocimiento de los
diferentes ritmos de aprendizaje.
Por último, más que problematizar la escuela a razón de la implementación de las TIC en los
distintos escenarios escolares es fortalecer una formación integral de corte humanístico que
movilice diariamente los roles del docente y del estudiante en unas mismas líneas de acción y de
importancia, para que la lectura y la escritura que es vida social, cultural y cognoscitiva de todo
acto del ser humano, tengan visiones transformadoras y de conciencia en cada sujeto; eliminando
la reproducción y la esquematización de sus momentos, para llegar a renovar su accionar a partir
de otros medios tecnológicos, que también deben de ser intervenidos y orientados de la mejor
manera a función no de la represión y prohibición sino hacía el uso pedagógico, viéndolos como
herramientas que resignifican los contextos y producen otros nuevos significados. Claro está,
coordinando sus implementaciones en la búsqueda del reconocimiento y diferenciación de cultura
e identidades.
51
Por ello, así como lo sustenta Delia Lerner (1991) “lo necesario es hacer de la escuela un ámbito
donde lectura y escritura sean prácticas vivas y vitales, donde leer y escribir sean instrumentos
poderosos que permiten repensar el mundo y reorganizar el propio pensamiento, donde interpretar
y producir textos sean derechos que es legítimo ejercer y responsabilidades que es necesario
asumir. Lo necesario es, en síntesis, preservar el sentido del objeto de enseñanza para el sujeto del
aprendizaje, lo necesario es preservar en la escuela el sentido que la lectura y la escritura tienen
como prácticas sociales para lograr que los alumnos se apropien de ellas y puedan incorporarse a
la comunidad de lectores y escritores, para que lleguen a ser ciudadanos de la cultura escrita”
(Lerner, 1991, p.1).
2.2 TRANSFORMACIONES PEDAGÓGICAS EN CONTEXTOS EDUCATIVOS
Las realidades actuales son fruto de los distintos momentos culturales, sociales, políticos y
educativos que las sociedades han creado y generado en las diferentes épocas de desarrollo
humano; por ello, se presentan tendencias que marcan los ritmos de entender, saber e interactuar
en contextos determinados, propiciando corrientes filosóficas y educativas que establecen
paradigmas de todo tipo para posibilitar posibles cambios a la hora de generar conocimiento y
específicamente de formar el ciudadano deseado.
En estos momentos de crisis y cambios constantes en el desarrollo humano y cultural que se está
dando por la pluralidad de ideas, filosofías, corrientes y demás conceptos alrededor de la escuela,
el educador y el estudiante es bastante válido entender las distintas dinámicas que suscitan los
contextos educativos en la modernidad que son fruto viviente de las nuevas configuraciones y
reconfiguraciones que el hombre ha hecho con su ser y con los demás, que permite unas tendencias
de relación que tienen marca de cambio y de alejamiento de los paradigmas tradiciones en los
panoramas de educación, formación y procesos de enseñanza y aprendizaje.
Estas nuevas miradas de abordar el mundo y concebir al ser humano hacen que la escuela de hoy
está entre la espada y la pared, pues siendo una institución netamente tradicional, esquemática y
transmisora de ideas establecidas, se desea que ella y sus agentes entren en nuevas corrientes y
52
tendencias sociales, culturales y tecnológicas que van en contravía de su ideal constitutivo haciendo
que de una u otra manera se promuevan transformaciones de todo índole, y uno de ellos es lo
pedagógico; donde se juega un rol primordial el accionar del educador como un ser constructor de
saber pedagógico y reflexivo, que debe de procurar ser capaz de ser un individuo anfibio y lleno
de contraste, que aunque está ligado a sistemas educativos debe movilizar espacios de crítica,
autodefinición y promoción de una cultura liberadora a partir de su quehacer en el aula.
Aquí toma fuerza la idea de transformación pedagógica entendidas como un conjunto de formas
didácticas, académicas y sociales enfatizadas en renovaciones curriculares, ambientes
tecnológicos, promoción de la virtualidad, acceso al conocimiento, lúdica, reconocimiento del otro,
trabajo colaborativo, destrezas y habilidades, liderazgo, inclusión, discernimiento de información,
el aula fuera de la escuela, aprendizaje en la virtualidad, juego de roles, herramientas esquemáticas,
el estudiante líder y promotor de sus saber y muchas más maneras de abordar lo tradicional y lo
novedoso a partir de diferentes escena educativas que deben de girar en línea directa con la
formación de un sujeto – estudiante capaz de discernir las distintas informaciones que el nuevo
mundo trae y primordialmente capaz de leer realidades, interpretar historias y analizar ambientes
de trabajo – aprendizaje, donde no caiga en la mera transmisión de datos, la rutina académica y el
desarrollo de un conjunto de “competencias” que le otorga un sistema educativo, que solo hará que
se clasificado, etiquetado y dosificado.
Por ello, docente y estudiante tienen un papel primordial para acrecentar una educación en la actual
generación del cambio y la transformación donde sean sujetos proactivos, autónomos, liberadores
y críticos con la actual visión del mundo y de escuela; ya que lo fundamental es que sepan dialogar
con lo diferente, lo acepten o lo rechacen con criterios definidos y posturas que apunten a la
colectividad, para convertir las aulas de clase en escena vivas de lo humano, lo cultural y lo social
permitiendo que las innovaciones en los contextos educativos no sean sinónimos de adaptación,
acomodación y simple asimilación, sino que sean un conjunto amplio de reflexión, atención y
muchas veces de indignación por lo que se observa y lo que sucede.
Un buen concepto que apoya la discusión conceptual es presentado por Martha Petersen (2004) en
su texto José María Mardones. Desafíos para recrear la escuela donde afirma que: “La escuela de
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hoy debe, sin olvidar su labor funcional dentro del sistema productivo, redefinir su función social.
No puede ser sólo proveedora de eficaces ejecutivos y técnicos para la economía neoliberal. Tiene
que ser creativa, ayudar a formular nuevas utopías e ideas generadoras de una sociedad solidaria
en la que todos tengamos lugar” (Petersen, 2004, p. 75). Aquí, se vislumbra la importancia y el
reconocimiento al sujeto, su interacción con los ambientes, sus necesidades, relaciones, sus
esencias, dinamiza los factores de liberación social, reconoce el valor de lo cultura, resalta la
práctica y la teoría, promueve las transformaciones y da significación a los hechos de comprensión
en todos los fenómenos que circundan los diferentes individuos.
Por ende, el transformar en la educación si puede ser positivo y generar el suficiente diálogo entre
lo nuevo y lo tradicional, donde los actos pedagógico que encarne el docente a la hora de suscitar
la formación de cada estudiante esté permeado por lo humano antes que cualquier corriente,
política, ideal o aparato tecnológico pues la pedagogía va mucho más allá de una disciplina, una
técnica o unas herramientas didácticas, se engendra su accionar a razón del sujeto y de la
reflexiones que se puedan hacer de acuerdo a lo que la rutina escolar y los momentos de formación
traen, para trascender en cambio, en teorización y beneficio común en pro de proceso
transformadores de aprendizajes coherentes, significativos y para la vida.
Es aquí, donde la definición de escuela dada por Paulo Freire, tomada de Las guías pedagógicas
para la convivencia escolar (2013) toma gran acogida pues la conceptualiza de la siguiente manera
"Escuela es... el lugar donde se hacen amigos. No es edificios, salas, cuadros, programas, horarios,
conceptos. Escuela es, sobre todo, gente. Gente que trabaja, que estudia, que se alegra, se conoce,
se estima. El/la directora es gente. El/la coordinador/a es gente, el profesor, la profesora es gente,
el alumno, la alumna es gente, y la escuela será cada vez mejor en la medida en que cada uno/una
se comporte como colega, como amigo, como hermano. Nada de islas cercada de gente por todos
lados. Nada de convivir con las personas y descubrir que no se tiene a nadie como amigo. Nada de
ser como block o ladrillo que forma la pared. Importante en la Escuela no es solo estudiar, no es
solo trabajar, es también crear lazos de amistad. Es crear ambientes de camaradería. Es convivir,
es sentirse “atada a ella”. Ahora, como es lógico…. en una escuela así va ser fácil estudiar, trabajar,
crecer, hacer amigos, educarse, ser feliz. Es así como podemos comenzar a mejorar el mundo.
(Mosquera y otros. 2013, p. 8).
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Si docentes y comunidad en general instauran en cada una de sus prácticas educativas dichas
reflexiones las innovaciones y contingencia escolares podrán ser sorteadas con facilidad y tendrá
como escena fundante la construcción de un proyecto de vida para cada agente escolar, que no
apunte a proyectos de nación sino a concepciones de vida, gustos, distinciones y formas de ver y
entender las realidades. No hay nada de mayor importancia y de mayor transformación pedagógica
que pueda hacer un docente en sus contexto escolar que posibilitar la idea y el valor en práctica de
la libertad, pues con ella los corazones se abren hacia el discernimiento, la justicia, el amor por la
diferencia y la aceptación de lo otro.
Pero hay que ser realistas, hoy en día la situación es bastante diferente, en una sociedad cuya
organización responde a los criterios de la economía de mercado, apelar a la formación de la
responsabilidad y a la moralidad como criterio de formación de sujetos es difícil; ya que la
institución educativa de ahora está ligada en muchos de sus accionares a la formación de sujetos
subordinados que cumpla con lo que se genera en la rapidez que el mundo trae, haciendo que el
hecho de transformar sea un acto solo de diseñar y crear para responder a una sociedad consumista
y cargada de competencias, desigualdades y procesos repetitivos que en gran medida desean reducir
y subordinar a razón del poder de la minoría y acrecentar la pobreza, abriendo brechas de inequidad
e injusticia.
En numerosas ocasiones todos los agentes que contiene la escuela actual se encuentran frente
exigencias contradictorias. Por una parte, la escuela cumple una función reproductora del sistema
social contribuyendo a la adaptación de los alumnos a esa sociedad en la que ha de vivir. Por otra,
se le pide a la escuela que colabore en la renovación cultural, así como en la transformación de las
formas de la vida sociales a través de movimientos críticos.
Por ello, los contextos educativos son una contradicción diaria en la que en momentos se pide
libertad y al instante se esclaviza. Lo único por hacer es movilizar concepciones de cambio desde
las individualidades; es decir, docentes y estudiantes que se salgan de la línea limitante para
alcanzar espacios creativos y transformación que derriben con su pedagogía crítica muchas de las
aberraciones de la escuela alienada e injusta.
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Desde aquí, la tarea educativa de generar y reflexionar transformaciones pedagógicas crea muchos
interrogantes específicamente para el docente, pues se está dentro de una escuela cambiante
producto de una sociedad de peligros y de riesgos donde cada momento está controlado,
automatizado y vigilado porque se privilegia la razón frente a la humanización que pueda generar
la pedagogía y su expansión frente a lo histórico, cultural y social de cada individuo.
Dichos interrogantes o desafíos que tienen los educadores, los estudiante y la misma escuela a
razón de las transformaciones que se crean en estas nuevas formas de abordar las realidades y crear
sociedades del conocimiento los señala y puntualiza Martha Petersen (2004) como los siguientes:
“¿Cómo educar en el multiculturalismo de la igualdad de los diferentes?, ¿Cómo vivir críticamente
la tradición y tener convicciones serias? y ¿Cómo educar en lo funcional sin olvidar las dimensiones
humanísticas del saber?” (Petersen, 2004, p. 76).
Estas cuestiones y muchas más que quedan en el tintero serán en la medida de lo posible resultas a
través de espacios de innovación pedagógica que sean movilizados y encarnados por los mismo
docentes para enfrentar los duros retos de formar en lo actual. Solo desde una visión humana y
pedagógica de los actos de cognición y convivencia se podrá avanzar hacia el reconocimiento de
la dignidad personal del otro en la diferencia, donde se forme a las actuales generaciones con una
alta capacidad de juicio y discernimiento.
Por último, hablar de transformaciones pedagógicas es hablar de nuevas formas de generar cambio,
debate, discusión y avanzar hacia otras realidades que constituyan una idea de hombre distinta, que
sea no producto de una escuela esquemática sino de una escuela incluyente capaz de respetar ritmos
y formas de pensamiento, que se harán gracias a una visión y función distinta del docente, que más
que un simple funcionario del sistema de opresores y oprimidos sea un ser humano comprometido
por lo diferente, que piense en lo sociocultural como idea generadora de una comunidad académica
abierta, que enfrente de manera crítica las nuevas concepciones de educación y los distintos sistema
tecnológicos que se acreditan en la actualidad como actos indispensables para enseñar y aprender;
donde se pueda asegurar que lo nuevo en la escuela no es necesariamente lo relevantes y
significante para formar al hombre del mañana.
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Es notable destacar que la teoría crítica encarnada en la formación con sentido y con coherencia
para los actuales contextos escolares podrá generar posibles resultados en todos los niveles
cognoscitivos y sociales cuando se inserten concepciones de educar distintas a la que se tiene
entendida en esta modernidad; ya que solo se quiere ciudadanos que reproduzcan otros sistemas de
forma directa y cíclica sin salirse de los parámetros de lo “normal”. Se desea entonces, líneas de
acción diferentes donde se entienda y se comprenda que más que una estudiante – máquina es un
ser humano con altos niveles de ideas, saberes, pensamientos, sueños, ideales y posturas que
propicia y respeta la cultura de lo otro.
Como comentario conclutorio y que abre sendero al siguiente punto conceptual es básico decir que
es muy positivo muchas de las concepciones propuestas por Paulo Freire y los sustentos propios
de la pedagogía crítica para abonar hacia las transformaciones de espacios escolares, donde los
sujetos sean visto como agentes promotores de conocimientos capaces de enseñar en mutua
relación dialógica, donde se erradique la idea de invasión cultural y se cree idearios para la
construcción de las diferencias en pro del respeto hacia proyectos de vida cualesquiera que sean y
se proyecte la formación hacia la renovación constante del pensamiento, para que educador y
educando sean agentes de reflexión, cambio y desarrollo social, aceptando que siempre va
cohabitar momentos de aprobación y represión; pero que bien entendidos son el nicho del
pensamiento y del cambio.
2.2.1 Las transformaciones pedagógicas en los escenarios escolares: hacia una mirada crítica de la
inclusión de las TIC en el aula de lenguaje
“La educación implica una responsabilidad para con el lenguaje puesto que el lenguaje es
ese don que nosotros hemos recibido y que tenemos que transmitir. E implica una responsabilidad
con los nuevos, es decir con esos seres humanos que, en el lenguaje de todos, tiene que tomar la
palabra, esa palabra que es palabra futura e inaudita, palabra aún no dicha, palabra por venir.
Introducir a los nuevos en el lenguaje es, por lo tanto, dar la palabra, hacer hablar, dejar hablar,
transmitir la lengua común para que en ella cada uno pronuncie su propia palabra” (Larrosa,
2001, p. 428)
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Las prácticas educativas actuales de los docentes en muchas de las ocasiones no están
internalizadas y contextualizadas a los cambios que han generado la globalización y el avance
acelerado de las TIC, en el aprendizaje de los estudiantes y el desarrollo constante de nuevas formas
de comunicación virtual, debido a que están inmersos en ideas analógicas y tradicionales que son
propias de su estructura mental, cultural e histórica de educación que han recibido y ofrecido; por
ello, las transformaciones pedagógicas que se promueven en los escenarios escolares en muchas
ocasiones están fuera de foco y no apuntan a las verdades y realidades que viven los estudiantes,
pues no están integrando intereses, necesidades y particularidades de cada agente escolar y solo
han basado su pedagogía a meros instrumentos didácticos y no a repensar sus prácticas de aula,
reflexionarlas y llevarlas a la teorización constante.
Desde este panorama hay que decir que la escuela se encuentra en muchas divergencias debido a
los cambios constantes en que se desenvuelve y a los ideales políticos y estatales que
lamentablemente tiene que responder para seguir reproduciendo la voz de la mayoría. Esto, también
afecta las visiones de educador y de estudiante pues están en caminos en ocasiones diversos,
alejados y contradictorios que no complementan la idea de forma hacia la integración, la
humanización y el desarrollo social de las actuales generaciones.
Mucho de lo anterior, se da por la revolución tecnológica, especialmente en informática y
telecomunicaciones, los contextos escolares (escuela, universidad) han dejado de poseer el
monopolio del conocimiento que por siglos ostentaron; hoy en día es posible que el estudiante
aprenda más y mejor, fuera de la escuela que en el interior de las aulas; ya que docentes y el mismo
sistema educativo tiene grandes desfases para involucrar e incluir acertadamente las TIC al mundo
escolar, pues han visto estás herramientas como simples aparatos que extienden la voz y la imagen
del educador, sin darles una mirada pedagógica, crítica, reflexiva y significativa para los actos de
aprender.
Para dar contraste a estas realidades y centrar las TIC como un agente promotor de nuevas
transformaciones pedagógicas y de escenarios escolares activos y liberadores es necesario
definirlas como: “las TIC son los instrumentos técnicos que giran en torno a los nuevos
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descubrimientos de la información. Medios eléctricos que crean, almacenan, recuperan y
transmiten la información de forma rápida, y en gran cantidad, y lo hacen combinando diferentes
tipos de códigos en una realidad hipermedia. Comprenden una serie de aplicaciones de
descubrimiento científico cuyo núcleo central consiste en una capacidad cada vez mayor de
tratamiento de la información” (Cabero, 1998, p. 198).
Esto, argumenta que las TIC exclusivamente en su concepto limitante se refieran a simple sistemas
electrónicos e informáticos que procesan información pero que han llegado a la vida cotidiana del
ser humano y de la escuela y ha evolucionado las relaciones personales, las formas de aprender y
de construir saberes gracias al don comunicativo que las mismas generan transformando
ampliamente las formas de leer, escribir, escuchar y hablar; por consiguiente el lenguaje, pues se
pasa como lo afirma Cassany (2000) “de lo analógico a lo digital” (Cassany, 2000, p. 1) cambiando
la forma de relación con las palabras, los significados y está las mismas imágenes; ya que se abre
un mundo de versatilidad e innovación difícil de abordar en su totalidad, que acredita unas nuevas
maneras de comunicación donde el texto se convierte un múltiples hipervínculos que dan la idea
de una gran red de conceptos, significados y posturas alejando lo tangible para llegar a lo intangible
donde los mensajes se tornan dispersos, con finalidad diferente y para múltiples receptores.
Desde acá, la visión del actual educador de aula de lenguaje es fundamental y apremiante para
constituir las TIC no como un enemigo visible del lenguaje y de sus diferentes complementos
(gramática, oralidad, textualidad, ortografía, lectura, escritura, etc) sino como una opción para
movilizar y socializar los aprendizajes a partir de la innovación y el desarrollo multimodal de los
saberes, entendiéndolas como transformaciones pedagógicas que bien orientadas suscitan un
sendero de cambio y renovación para los actos comunicativos; siempre y cuando las TIC no sean
trabajadas y desarrolladas como una extensión más del docente o lo más preocupante que lo
eliminen completamente.
Por lo tanto, incluir elementos tecnológicos en la escuela y específicamente en los ambientes de
aula a nivel de lenguaje pueden ser una buena opción para avanzar hacia miradas profundas de
desarrollo reflexivo de los estudiantes permitiendo altos niveles postura crítica ya que si hay
apropiación pedagógica del docente de lenguaje y encamina el trabajo formativo de sus estudiantes
59
hacia la libertad, el discernimiento y la retroalimentación la transformación de los escenarios
escolares llegará a buen término, pues estos nuevos entornos educativos facilitan al estudiante el
acceso a diferentes recursos de aprendizaje, le permiten la participación en situaciones educativas
tanto individualizadas como grupales; además, le proporcionan herramientas para realizar tareas
de resolución de problemas; le posibilitan formas más creativas de aprendizaje, en donde puede
interactuar tanto con el medio, como con el material y con otras personas, “el tercer entorno no es
sólo un nuevo medio de información y comunicación, sino también un espacio para la interacción,
la memorización, el entretenimiento y la expresión de emociones y sentimientos. Precisamente por
ello es un nuevo espacio social y no simplemente un medio de información o comunicación”.
(Echavarría, 2000, p. 18).
Por lo tanto, los desafíos de la escuela son bastantes amplios y confusos, pues así, como las TIC
pueden ser una excelente opción para generar conocimiento y diferencia, es importante señalar que
en la actualidad se encuentra la otra cara de la moneda, donde estas herramientas tecnológicas han
desplazado los buenos actos de formación, han deshumanizado y creado desiertos escolares, donde
la automatización e individualización son carta blanca de los sistemas educativos, pues se ha
entendido que educar en lo tecnológico es simplemente llenar las aulas de computadores y tabletas
para movilizar otros ambientes de aprendizaje y hacer que el docente cumpla con unas horas de
capacitación en lo digital.
De esta manera, las TIC se convierten en monstruos escolares que rompen la relación de docentes,
estudiantes y saberes debido a que se vuelven medios, propósitos, fines y metas del todo el proceso
escolar, error grande que elimina todo acto pedagógico; y principalmente aleja la formación de un
sujeto crítico y reflexivo para acercar la instrucción y la reproducción de un sujeto pasivo y
conforme.
No se puede decir que las TIC son buenas o malas todo depende de las funciones que se desarrollen
con las mismas, pues tienen las dos miradas; lo deseado es que sean espacios tecnológico –
pedagógicos posibilitadores de saberes y de comunicación, que permita el acercamiento cultural y
social a partir de su gran versatilidad para proponer nuevos espacios de lingüísticos, más flexibles
e informales; nuevas formas de acceder, producir y transmitir información; nuevos entornos de
60
aprendizaje no limitados únicamente al aparato electrónico, sino que transciende a otros espacios
de convivencia, humanización y recreación de la palabra en sus múltiples expresiones en un juego
entre lo analógico y lo digital.
Para incluir las TIC en el aula de lenguaje a partir de miradas críticas es importante que los docentes
reflexionen constantemente su práctica pedagógica y recuperan la imagen del educador intelectual,
crítico, capaz de discutir y de analizar de una manera minuciosa la realidad en que vive; un
intelectual transformativo que como dice el escritor y pensador Giroux (1997) “Se pronuncie contra
algunas injusticias económicas, políticas y sociales tanto dentro como fuera de las escuelas, y
paralelamente se esfuerce para crear las condiciones que proporcionen a los estudiantes la
oportunidad de convertirse en ciudadanos con el conocimiento y el valor adecuados para luchar,
con el fin de que la desesperanza resulte poco convincente y la esperanza algo práctico”
(Giroux,1997, p. 66).
Un educador capaz de tomar decisiones y de luchar por los ideales que debe perseguir una buena
educación, sin dejarse vencer por prejuicios que lo único que logran es convertirlo en instrumento
para la esclavitud de las futuras generaciones, movilizar de nuevos actos de palabra, que se atreva
a innovar y crear ambientes tecnológicos que pueden ser promotores no de rutinas sino de reflexión
y avance social, para que no solo promueva el acceso a conocimientos sino a la comprensión de
realidades y el descubrimiento de actitudes de cambio, que con seguridad generaran
transformaciones pedagógicas en los distintos escenarios escolares.
Esto debido a que los nuevos entornos educativos que pueden devenir de lo tecnológico suelen ser
más flexibles y abiertos, en donde se recupera la centralidad del estudiante y de los procesos de
aprendizaje permitiendo que sean ellos quienes decidan `y propongan sus acciones bajo la lupa del
respeto y la responsabilidad; sin querer decir con esto, que estos nuevos ambientes sustituyen los
procesos de enseñanza y aprendizaje que se llevan a cabo en el aula presencial, sino que más bien,
los acompaña y complementa.
Al respecto no sólo se trata de transmitir información y conocimiento sino de aplicar las nuevas
tecnologías a la educación, donde se diseñe ante todo nuevos escenarios donde los estudiantes
61
puedan aprender a moverse e intervenir en el nuevo espacio telemático que exigen nuevas formas
de enseñar y aprender, por lo que se hace necesarias nuevas alfabetizaciones que permitan
incorporarlas al aula de clase de manera crítica, y así puedan contribuir a la formación de los
sujetos.
Desde aquí los docente del aula de lenguaje no solamente estarán encargados de posibilitar
ambientes de comunicación, enseñar la historia de la lengua, conformar grupos de escritores y
lectores en el aula, analizar la literatura universal, crear mundo posibles, sistematizar la ortografía
y la gramática, sino que estarán llamados a ser un participe más de los ambientes tecnológicos, para
acercarse a las realidades de sus estudiantes y conocer de la mano la idea de que no solo se escribe
y se lee desde lo tradicional sino que se puede comunicar la palabra – el lenguaje a partir de otras
dimensiones que en ocasiones pueden ir en contravía de lo estandarizado por el mismo lenguaje.
Por ello, las palabras de Cassany (2000) cobran valor cuando afirma que: “Pero si entendemos el
entorno digital –tal como lo hemos presentado– como una extensión de las potencialidades del
lenguaje, creo que debe enfocarse su enseñanza de un modo más profundo. Puesto que la escritura
digital empieza a ser ya tan importante como la analógica –y su futuro es incuestionable–, la
alfabetización tendría que dar prioridad o equivalencia a lo digital respecto a lo analógico. La clase
de lengua escrita tendría que hacerse en buena parte con computadoras. Y si el lenguaje escrito es
el instrumento fundamental de las asignaturas científicas, también resulta relevante que las ciencias
naturales y experimentales usen tecnología digital para el desarrollo de sus contenidos. Si cualquier
maestro es maestro de lengua, si saber física significa poder hablar y escribir de física, es indudable
que el maestro de física tiene que poder usar la computadora con sus alumnos en clase” (Cassany,
2000, p. 9).
Esto siempre y cuando se dé con una mirada crítica y pedagógica, pues no se puede caer en que lo
tecnológico es lo último en la enseñanza y en el aprendizaje que salvará a la escuela de sus
dificultades y hará que el docente se renueve en su misión y visión, retirando de los esquemas de
transmisión que históricamente se le ha otorgado.
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Todo lo anterior, debe redundar en reflexiones y consciencia de lo que se está haciendo en la
escuela para insertar las TIC en los procesos educativos y las transformaciones pedagógicas que
han venido desarrollando los educadores de lenguaje para movilizar la formación de sus estudiantes
a partir de esta nueva forma de acceder al conocimiento. Por consiguiente, la mirada crítica que
deben de tener los docentes para involucrar positivamente las TIC no puede quedar al margen de
ciertos supuestos, prejuicios o indignaciones, pues debe ir más allá; específicamente a la
renovación de prácticas educativas y la consolidación de saberes pedagógicos que acrediten una
labor rigurosa, compleja y con un alto sentido social.
No se puede rechazar las nuevas realidades que experimentan las aulas de clase ni hacer negación
a las mismas, lo importante es discernir lo que cada contexto y novedad trae en búsqueda del bien
y del fortalecimiento de lo comunicativo – social, pues más que alejar lo tecnológico se debe
reconocer que por el sólo hecho de ser los recursos tecnológicos parte de la vida de los estudiantes,
es importante considerarlos como motivadores, detonantes de creatividad y ayudantes de los
procesos cognitivos.
Es fundamental entonces, orientar la inclusión de las TIC a la vida cotidiana y a la educación de
los sujetos, pues mientras éstas cambien en él, la forma de ver el mundo y apoyen la elaboración
de varias tareas, es indispensable ubicar y mantener una postura crítica para saber emplearlas de
manera correcta. Al respecto dice Liguori (1995), “Ante esta situación, las instituciones educativas
enfrentan el desafío no sólo de incorporar las nuevas tecnologías de la información como
contenidos de la enseñanza, sino también reconocer y partir de las concepciones que los niños y
los adolescentes tienen sobre estas tecnologías para diseñar, desarrollar y evaluar prácticas
pedagógicas que promuevan el desarrollo de una disposición reflexiva sobre los conocimientos y
los usos tecnológicos” (Liguori,1995, p. 9).
Esto para no caer en concepciones instrumentalistas que consideran las TIC como meras
herramientas mecánicas facilitadoras de ciertas labores, sino también, para generar con ellas,
nuevos espacios formativos que permitan discusión y reflexión y a su vez, ayuden a los estudiantes
a ser participantes activos del proceso de enseñanza y aprendizaje, autónomos, responsables y
revolucionarios.
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En conclusión, uno de los personajes de la historia que tiene grandes responsabilidades frente al
proceso educativo es el docente, el cual está llamado a renovar sus prácticas escolares y enfrentar
las nuevas maneras de acceder y producir conocimientos, y una de ellas, son las TIC, las cuales
han producido un giro rotundo a los actos de aprendizaje, de interrelación entre sujetos, promoción
de otros estilos de lenguaje, otras miradas culturales y sociales que han creado dentro del aula
regular ambientes diferentes y contradictorios, que aseguran dinámicas distintas a la hora de
relacionarse el sujeto con el mismo, con el otro y su entorno. Ello, hace que un docente inquieto y
creativo genere en la cotidianidad de su labor distintas transformaciones pedagógicas que son fruto
de su reflexión, su experticia, su renovación y principalmente su preocupación por el otro; ya que
su acción pedagógica es el de entregar herramientas cognitivas, culturales y sociales para que el
estudiante del hoy sea capaz de enfrentar el mañana con una mirada crítica, inquietante y seguro
de que no hay nada seguro.
2.2.2 Transformaciones pedagógicas en el espacio escolar para hablar de la lectura y la escritura
como prácticas socioculturales
La vida educativa tiene in conjunto de configuraciones y características que la limitan y al mismo
tiempo permite su desarrollo y transformación, haciendo que los individuos se puedan adaptar,
movilizar y formarse a razón de interacciones culturales, sociales y académicas que los van
acreditando en distintos escenarios históricos y culturales, para entrarlos a prácticas constitutivas
como lo son la lectura y la escritura, como dos grandes herramientas que promueven la
perdurabilidad, el reconocimiento del otro y la significación de mundo posibles.
Pero para que se dinamice tales procesos hay que entender que esas prácticas son fruto de unos
espacios o contextos escolares que no solo se acreditan a meros lugares, recursos o mobiliarios que
son instrumentos y medios para recrear la formación sino que son escenas vivientes de los actos
de educar que pasan más allá de las barreras de la familia, el barrio, la sociedad y hasta la misma
escuela ya que las prácticas de lectura y escrituran son realizaciones y construcciones que se
desarrollan desde distintos tópicos, miradas, espacios y condiciones socioculturales.
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Para entender entonces los espacios escolares es bueno reconocer que “uno de los elementos clave
en la configuración de la cultura escolar de una determinada institución educativa, junto con la
distribución y usos del tiempo y los discursos y tecnologías de la conversación y comunicación
utilizados, es la distribución y usos del espacio, o sea, la doble configuración de este último como
lugar y como territorio. La constitución del espacio como lugar, ese «salto cualitativo» que implica
el paso desde el espacio al lugar, es el resultado de su ocupación y utilización por el ser humano.
El espacio se proyecta, se mira o se imagina, el lugar se construye. Es, pues, una construcción
realizada a partir del espacio como soporte siempre disponible para convertirse en lugar, para ser
construido y utilizado” (Fernández, 1984, p. 14-15).
Desde esta concepción, se puede hablar que cualquier escenario es susceptible para promover la
formación humana y la socialización de saberes, y por ende ser pedagogizado para distintas
dinámicas académicas, sociales y culturales como los actos de leer y escribir que son una instancia
cruzada por tensiones históricas, sociales y políticas que continuamente van en línea de nuevas
narrativas que construyan una epistemología y una metodología acordes a las acciones basadas en
aspectos socioculturales que son producto de las diferentes interconexiones e interacciones de los
seres humanos con la necesidad de trascender, transmitir y proyectar su ser, hacer y saber hacía las
realidades y hacía los demás individuos.
Estas dinámicas en los espacios escolares permiten recurrentemente que existan transformaciones
pedagógicas que son el resultado de múltiples interacciones, momentos, herramientas, escenas,
aprendizajes y enseñanzas que presentan los individuos (docentes - estudiantes) para posibilitar
cualquier intercambio cultural, social y académico que acrecientan los contactos entre los sujetos
y hacen que el lenguaje se torne activo y prometedor de experiencias que se interpretan, se leen, se
escriben y se transforman en cada tramo de la vida con el objetivo de dar significación y
reconocimiento a las prácticas de leer y escribir.
Cabe resaltar que los espacios escolares de manera explícita e implícita son el cúmulo de
transformaciones y evoluciones no son culturales sino cognoscitivas que requiere de un docente
humanizador de espacios que tenga como su función aplicar paulatinamente metodologías
innovadoras que proporcionen a los alumnos herramientas para integrar conocimientos nuevos con
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los ya adquiridos, escribiendo y leyendo sus clases como un laboratorio donde todos los estudiantes
tengan la posibilidad de participar, donde los materiales se adapten al educando y no viceversa,
para responder a necesidades particulares dependiendo del contexto.
Es aquí, donde se puede hablar de la lectura y la escritura como prácticas aferradas a lo social y lo
cultural como lo cita Francisco Cajiao (2013) en el libro leer para comprender, escribir para
transformar donde define dichas prácticas como “una forma de conocer lo que nos rodea, más allá
de lo que puede apreciarse a simple vista. Se puede, penetrar en lo que otros seres humanos saben
y piensan, sin importar si están vivos, si están presentes, si pertenecen a nuestra misma cultura o si
dejaron su rastro hace miles de años. Por eso, leer y escribir son el vehículo esencial de toda
construcción humana en tanto que permite no solamente comunicarse con otros, sino apropiarse de
otras experiencias y comprender lo que otros comprendieron en su momento y en sus circunstancias
particulares. De esta manera, se puede explorar los aspectos más insospechados de la historia del
mundo y de la humanidad, y dar inicio a la construcción de nuevos mundos interiores…leer y
escribir deben ser ejercicios del espíritu, antes que habilidades mecánicas o mecanismos de
desciframiento de signos convencionales” (Cajiao, 2013, p. 56).
Evidentemente, la lectura y la escritura con los nuevos espacios escolares y en las distintas
transformaciones pedagógicas serán prácticas mejores cuando se vean como capacidades de
descubrir significados que abra un abanico de toda una variedad de formas expresivas que permita
a estudiantes y docentes ser comunidades de significado, donde se pueda dejar huella en el tiempo
y en el espacio como el objeto que enriquezcan la propia vida de la escuela y la vida de sus
miembros. Esto se vuelve visible cuando lo cultura y lo social se torne relevante y fundamental en
las nuevas formas de educar que actualmente se están configurando, pues se permite espacios de
diálogo entre experiencias y palabras, lo que hace que se pueda comprender a otros y ser entendido,
porque existe el valor y la conexión entre la realidad y el lenguaje; como elementos esenciales para
que el medio sociocultural se amplíe y se abran dimensiones universales para transformar el
mundo, liberarlo, entender lo social y crear otras concepciones de la vida.
Entonces, el hablar de la lectura y la escritura como prácticas socioculturales se pueden ver formas
recurrentes de transformar, ver y comprender las realidades que están ligadas a procesos de
66
interacción desde el nacimiento y se consolidan en los ambientes de encuentro con el contexto y
con los demás; y que se van estructurando dentro de las prácticas de una comunidad.
Estás prácticas son esencialmente sociales que surgen y cambian dentro de las distintas escenas
que la historia provee y que con frecuencia el individuo no se da de cuenta de los cambios culturales
que va depositando a lo largo de su vida con el hecho de escribir y leer; pero en el transcurrir de su
vida se vuelven escenas vivientes que se tornan en cultura, saber y manifestación de toda una
comunidad.
A lo anterior, es bueno tener en cuenta lo que dice Cassany (2006): "leer y escribir no son solo
tareas lingüísticas o procesos psicológicos, sino también prácticas socioculturales. Leer exige
descodificar la prosa y recuperar los implícitos, pero también darse cuenta del significado que cada
comunidad otorga a una palabra" (Cassany, 2006, p. 10).
Desafortunadamente, la última línea que otorga Cassany es evidente y tiene en mucha tela para
cortar, pues la realidad que viven los actos de leer y escribir en los espacios escolares son esos; ya
que se ha visto estas prácticas como meros procesos de codificación y descodificación de signos,
sin ir más allá del texto, alejando al estudiante de los significados, las realidades, historias, vidas y
mundos que cada palabra trae debido a que no se da importancia o simplemente no se sabe llegar
a los verdaderos sentidos de la lectura y la escritura, que primordialmente es el abrir el horizonte
de la comprensión y la interpretación; indagando no solo por el texto sino por el autor, su
pensamiento, sus historias, su comunidad y todo el cúmulo de sustancia que puede otorgar la magia
de la palabra.
Por consiguiente, aprender a leer y escribir, entre otras cosas, es precisamente entender más allá de
las palabras, entendiendo quién lo dice, en qué contexto, con qué intención y para quién lo dice. Es
aquí, donde la función del docente liberador de estas prácticas puede hacer verdaderas
transformaciones pedagógicas pues puede hacer que sus estudiantes y demás comunidad permitan
ver que la lectura y la escritura como prácticas socioculturales les permitan ir más allá de lo obvio,
penetrar en mente oculta de los demás seres humanos y del mismo universo.
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Como idea conclutoria y problematizadora de este pasaje, se puede decir que realmente la poca
significación y transformación que están dejando las prácticas de lectura y escritura en los espacios
escolares y principalmente a los educandos puede ser por la deficiencia en el cómo se enseña a
leer y escribir, cómo se aprende y qué significa. O tal vez lo mejor sería no enseñar, para que no
ocurra lo mismo que ha ocurrido en la historia de estas dos prácticas esenciales para la vida del
hombre que han sido sistematizadas y estandarizadas como procesos secuenciales, limitantes y
alienantes a la repetición, otorgando factores meramente rutinarios; alejado la crítica, la compresión
y la libertad para las mismas prácticas; ya que en muchos casos la vida educativa las ha limitado
solo a un contexto, a unos textos y a unos autores eliminado rotundamente el valor de la diferencia,
de que los estudiantes tiene su bagaje cultural y social y que a lo mejor pueden aportar mayor saber
que simplemente la tradición y la imposición de agentes escolares que buscan en su proceso el
control no solo de cuerpos sino de mentes.
2.2.3 Transformaciones pedagógicas en contextos educativos desde la relación lectura, escritura,
escuela y TIC.
Al hablar de transformación se puede decir que en la gran mayoría de la práctica y la teoría hay
que dar referencia al docente, pues es el docente el que está llamado a la tarea de humanizar, de
suscitar en el otro lo mejor de sí mismo y de promover espacios escolares con mayor libertad,
justicia e igualdad para hacer que las prácticas de enseñanza y aprendizaje de cualquier saber estén
construidas como ideas fundantes que transversalizan la cultura y la sociedad; pues sin lo
sociocultural puede ser difícil la promoción de los contextos escolares como verdaderos ambientes
de significación y desarrollo de los individuos basados en principios de reconocimiento y
oportunidad para todos, donde los conocimientos no sean verticales o circulares sino que procedan
en distintas direcciones a razón de los interés y particularidades de cada sujeto que desea formarse,
expandir cultura e interpretar las realidades circundantes que a diario lo afectan y que son parte de
su esencia vida como partícipe de una comunidad.
La intención no es poner la mayor responsabilidad al docente, pues la escena educativa tiene
múltiples factores, acciones y agentes; pero es de reconocer que el objeto y labor social, política y
cultural de un educador es posibilitar un conjunto de condiciones escolares, pedagógicas y
68
didácticas que permitan al estudiante no solo acoplarse y adaptarse al mundo moderno sino darle
las herramientas para que sea capaz de desenvolverse de esa acomodación escolar, y hacer que no
solo este allí, sino que pueda criticar, comprender y por qué no, indignarse por lo que ve, hace y
piensa.
Por lo tanto, se podrá ver transformación en los contextos escolares cuando haya una metamorfosis
del papel docente que implicará un gran esfuerzo de formación inicial y continua, un deseo de
cambio constante, un amor hacía su labor, un hacedor de cultura, un promotor de la diferencia y un
gran socializador de las TIC. Estos nuevos roles, que aunque se vean utópicos harán que la escuela
no sean un recinto de instrumentos, herramientas y seres humanos sino un contexto sociocultural
que vislumbre en cada práctica la idea de transformar, de formar y de hacer que los estudiantes
sean seres provistos de conocimiento y vivencia a razón de comprender e interactuar en la sociedad;
y lo más importante es que sean educandos que puedan movilizar sus comunidades hacia sentidos
comunes, de respeto, igualdad y coherencia entre sus acciones y pensamientos, dando las
herramientas necesaria para que reflexione sobre los actos que el mundo moderno trae.
Desde esta perspectiva, una de las ideas que mayor cimiento puede tener para alcanzar tal
imaginario son las prácticas de lectura y escritura, pues son ellas las encargadas de repensar,
interpretar, develar y entender los mundos que circulan la complejidad de los contextos escolares;
pues si docentes y estudiantes hacen función de las mismas harán que el término escuela salga de
las barreras y se extienda a momentos y otros espacios sociales; aquí, es donde llegan las
transformaciones pedagógicas, debido a que las prácticas lectoras estén íntimamente ligadas con la
significación comunicativa y cultural; y no necesariamente a procesos de evaluación, ni a enseñar
valores, ni otro tipo de conocimiento escolar.
De esta forma, se garantiza que los estudiantes vivan experiencias gratas de lectura y escritura, sin
que ellas sean simples preprocesos para llegar a otros saberes o momentos evaluativos que generan
castración no solo cognoscitiva sino también social, pues se empieza a configurar hechos de
competitividad y discriminación; ya que deseado por este tipo de contexto escolar no es llenar los
espacios con dotación y herramientas tecnológicas sino hacer que el niño o niña ingresen al tejido
social y a la vida colectiva a partir del mismo ingreso del lenguaje que se verá reflejando en la
69
puesta en práctica de los actos de leer y escribir liberadores y encarnados para reconocer al otro y
la existencia de otros mundos, otras expectativas, otros modos de ser y otras angustias,
convirtiéndolo en un activo social y cultural; es decir, ingresará al mundo de lo plural.
Nuevamente aquí, se da relación directa entre la escuela y las prácticas de lectura y escritura como
elementos básico para que junto de la mano de estudiantes y docentes se conecten en una línea
humana que garantice no la enseñanza de conceptos sino la promoción de prácticas culturales que
puedan hacer del individuo un ser formado en la libertad, en la crítica, en lo vivido, en lo
experimental y en lo deseado que deja huella.
Esto ocurre cuando hay una buena conexión entre escuela, docentes, estudiantes, lectura y escritura,
de lo contrario seguirá viendo dichas prácticas de formación escolar como simples procesos para
cumplir con estándares, evaluaciones, rutinas, exámenes y aprendizajes de conceptos y costumbres;
viendo la lectura y la escritura como habilidades para adquirir conocimientos útiles para el mundo
práctico o el mundo académico en un tiempo y espacio determinado, eliminado en gran porcentaje
la significación y el encuentro con lo otro, el otro y el texto mismo. “Frente a esta situación, la
contextualización y las prácticas deben ser revisadas y cuestionadas ya que los sujetos proceden de
un ámbito sociocultural específico que les da herramientas de interpretación, pero la situación de
la escuela y la enseñanza presentan un escenario artificial desnaturalizado que, a veces, puede
entorpecer la lectura y los aprendizajes y confundir las evaluaciones. (Cassany y Ayala, 2008, p.
66).
Lo que hace que las transformaciones pedagógicas sean muy alejadas a las realidades del estudiante
y se limiten solo a la utilización de herramientas y artefactos tecnológicos que solo harán que se
encadenen los actos educativos y específicamente la lectura y la escritura a simples clases
magistrales que codifican la mente del individuo para repetir lo que se desea escuchar.
En este espacio de argumentación, se cae a un concepto que retumba los espacios escolares y que
con una buena orientación y responsabilidad social se convierten en nichos para abrir otras formas
de hacer transformaciones pedagógicas coherentes y significativas dentro de los contextos
escolares como son las TIC; pero no vistas solo de la visión de inclusión a la enseñanza sino como
70
un elemento dinamizador de prácticas, de procesos comunicativos, acceder de cultura y promotor
de comprensión de realidades que dé el carácter innovador desde una perspectiva mucho más
amplia e integral, donde la combinación de los medios tecnológicos adecuados y un diseño
didáctico basado en las necesidades específicas de aprendizaje de acuerdo al contexto, será lo que
caracterice la práctica educativa que responda a las demandas de la sociedad del conocimiento.
Por ende, otro elemento constituyente del hilo de relaciones entre la escuela, la lectura y la escritura
en los contextos escolares para dar mayor develaciones a las transformaciones pedagógicas que se
pueden vivenciar son las TIC como escenas de la actual modernidad social, cultural y educativa
que pueden aportar de manera positiva a un cambio al mismo sistema educativo; pues si el docente
se capacita, es estudioso, reflexivo, consciente del alcance que estás pueden tener en la formación
y es un crítico de su mismo saber pedagógico, podrá plantear dinámicas de trabajo más innovadoras
y llamativas que motive a sus estudiantes a vivir su proceso de aprendizaje.
En este sentido puede inferirse además, que éstas herramientas tecnológicas no se pueden ver como
un reemplazo del docente y que puedan minimizar la lectura y la escritura a simples expresiones
carentes de significado y valor gramatical. Al contrario, cuando hay buena apropiación y reflexión
del docente las TIC se pueden convertir en un aliado educativo y pedagógico para avanzar hacia la
cognición, la comprensión, el análisis y la recreación de los conocimientos y las experiencias
sociales ya que son una plataforma de interacción y poder comunicativo que docentes y estudiantes
tienen a su disposición para entrar y comprender cultura, transmitir datos, reflexionar sobre
informaciones, dar interactividad a procesos mentales, promover mundos literarios distintos,
generar mundos posibles, y hasta pueden de manera autónoma que los estudiantes se hagan cargo
de sus procesos de aprendizaje. Todo ello, bajo la idea de la libertad; entendida bajo la práctica de
la responsabilidad social, donde se educa para la vida y el discernimiento de la textualidad que
circunda.
Para el desarrollo de dichas habilidades y dar mayor asidero a las transformaciones pedagógicas
que puede construir el docente en la relación entre lectura, escritura, escuela y TIC es primordial y
urgente formar al estudiante bajo un pensamiento crítico que le permita buscar información en el
ciberespacio, así como evaluarla para comprobar su veracidad y de esta manera poder construir
71
nuevos aprendizajes, pues al pensar críticamente se aceptan o rebaten argumentos que más adelante
podrán ser aplicados en diversos campos del conocimiento. Al respecto afirma Pepino (2009 ) en
su texto: Lectura y pensamientos críticos: Estrategias para desenvolverse en el ciberespacio: “El
pensamiento crítico supone reflexionar sobre la importancia, veracidad y aportación de lo que se
ha leído” “el proceso crítico se comprende como una herramienta interpretativa que permite
discriminar lo útil de lo inútil, lo falso de lo comprobable, lo superfluo de lo necesario y, también,
favorece evaluar el propio conocimiento y la necesidad, dado el caso, de ampliarlo o profundizarlo.
Particularmente valioso para atender a las competencias indispensables para afrontar el océano de
información al que es posible tener acceso en la araña virtual” (Peppino, 2009, p. 7).
A través de este pensamiento crítico se contribuye al desarrollo de la habilidad para hacer análisis,
inferencias, interpretaciones, explicaciones, reflexiones y autorregulaciones de la información
encontrada en el mundo digital; así como formar un criterio propio de acuerdo o desacuerdo frente
a la misma, para luego construir posturas críticas cuyo eje central sea la emancipación y la
transformación.
Por lo tanto, hablar de TIC directamente hay que relacionarlo con la escuela y con las prácticas de
lectura y escritura, pues es en este contexto escolar con fluye la actual utilización masiva de
herramientas tecnológicas para promover procesos de enseñanza y aprendizaje de cualquier índole,
sin pensar que ello debe ir más allá del simple manejo de la herramienta; requiere profesionalismo,
preceptos éticos y humanización continua por parte del docente para que realmente el sistema
educativo se transforme hacia visiones pedagógicas que busque dar soluciones a los mismos
estados de opresión para proyectar idearios de vida con mayor posibilidad, justicia, análisis y
replanteamiento de lo ya establecido.
Esto hará, que la mayor relación entre escuela, lectura y escritura bajo la línea de la inserción
escolar de las TIC sea que docentes, estudiantes, familias y demás comunidad que hacen parte del
contexto escolar asuma roles y posturas determinadas que le llevaran a comprender sus contextos,
a partir del lenguaje oral, escrito, hipertextual o multimedial; donde se pase el plano meramente de
la codificación y descodificación de códigos para dar un significado o ser un activo de las redes
sociales y seguir estándar de miles de agentes virtuales para ir más allá; ir a la indagación, la
72
reflexión, la crítica de lo que se está viendo, escribiendo, leyendo y siguiendo para caer en espacios
de problematización y cuestionamiento de la información proporcionada; para luego adquirir y
construir argumentos sólidos, claros, reflexivos y que involucre al bien común para el
mejoramiento del mundo diario.
En consecuencia, se espera que los docentes y la escuela actual entendida como cualquier contexto
escolar susceptible de ser provisto de educación sea integradora de herramientas tanto tangibles
como intangibles, donde se pueda habitar en mundo reales y digitales sin necesidad de discutir
sobre quien puede generar mayores transformaciones, pues la máxima es que docentes y
estudiantes sean los encargados de hacer que cada mundo tenga su valor y relevancia sin necesidad
de desniveles y roturas metodológicas que solo dar complejidad y cierran las prácticas de lectura y
escritura en círculos viciosos que no permiten el encuentro, la promoción y reconocimiento de lo
sociocultural que es factor primordial de la vida escolar; y por lo tanto, de la lectura y la escritura.
Lo fundamental, es que se saca los contextos escolares de las visiones tradiciones y esquemáticas,
ya que como lo argumenta Cassany (2008) lo que ocurre en las escuelas: los nativos digitales se
aburren. Lo que les ofrece la escuela no solo no les interesa, sino que a sus ojos puede parecer algo
totalmente obsoleto y carente de significado para sus vidas. Tengamos en cuenta algo importante:
no se trata solo de unas técnicas o del uso de unos recursos tecnológicos (la copia y la lectura y la
escritura de papeles versus la comunicación en línea y la lectura de pantallas). Estamos hablando
de formas diferentes de acceder, usar, construir y diseminar la información y el conocimiento. Se
trata de un cambio cultural transcendental. (Cassany, 2008, p. 66).
A modo de conclusión, lo que realmente hace que haya transformación en la actual escuela es que
el docente cambie sus mirada académica por una mirada social y cultural, que vea que la lectura y
la escritura no son mecanismos que se aprenden y quedan memorizados como simples códigos sino
que van más allá, son experiencias vivas y directas con la sociedad. Son detonadoras de múltiples
manifestaciones que van desde lo político hasta lo histórico para dotar al ser humano de una carga
de sentimientos, emociones, realidades y palabras que permite generar oportunidades para
relacionarse con el mundo y con el ser humano en general.
73
Este escenario, en la actual modernidad se hace necesario ver en el marco de las TIC guardan una
estrecha relación con los acontecimiento que circundan los contextos escolares y las prácticas de
lectura y escritura; pues ellas han creado espacios de interactividad, movilidad de información, lo
digital y la visión de un hombre – estudiante que se desarrolla en varios espacios y tiempos con
agentes y momentos dispersos; que lo básico por hacer, es que los maestros los posibiliten con
herramientas no solo tecnológicas sino humanas que los saquen de ser consumidores de
información y se conviertan en actores e intérpretes dicha información para luego transformarla en
conocimiento, lo cual los dotará de la mejor habilidad para el ser humano actual: la reflexión.
“Leer noticias, cuentos o curiosidades científicas tal día de la semana, por ejemplo, contribuye a
familiarizar con ciertos géneros y a consolidar los hábitos de lectura; situaciones puntuales –
como escribir un mensaje por correo electrónico a un alumno de otra escuela- que se
desarrollan en un tiempo muy breve pueden contribuir a consolidar ciertas prácticas de
comunicación por escrito; secuencias de situaciones de lectura –como leer cuentos de
determinado escritor o de cierto subgénero, por ejemplo. Pueden extenderse durante unas
semanas y contribuir a consolidar quehaceres del lector tales como seguir a un autor o
establecer relaciones intertextuales…el entrecruzamiento de estas diferentes temporalidades
permite a los alumnos realizar simultáneamente diferentes aproximaciones a las prácticas –
participar en un mismo periodo actos de lectura y escritura dirigidos a diversos propósitos- así
como volver una y otra vez a lo largo del tiempo a poner en acción un cierto aspecto de la
lectura o la escritura- escribir, reescribir, releer, transcribir, resumir…-, a retrabajar un tema,
un género o un autor”(Lerner, 2001, p. 5).
74
CAPÍTULO III
3. DISEÑO METODOLÓGICO
3.1 TIPO DE INVESTIGACIÓN
La investigación se asumió desde un enfoque metodológico cualitativo, donde existe “un común
denominador que se puede situar en el concepto de patrón cultural que parte de la premisa de que
toda cultura o sistema social tiene un modo único para entender cosas y eventos” (Colby, 1996, p.
14) Esta cosmovisión, o manera de ver el mundo, afecta la conducta humana. El estudio de los
modelos culturales - que son marcos de referencia para el actor social y que están construidos por
el inconsciente, lo transmitido por otros y la experiencia personal- son entidades flexibles y
maleables que se tornan en el objeto de estudio de lo cualitativo.
En términos generales, “la investigación cualitativa trata de identificar la naturaleza profunda de
las realidades, su estructura dinámica, aquella que da razón plena de su comportamiento y
manifestaciones. De aquí, que lo cualitativo (que es el todo integrado) no se opone a lo cuantitativo
(que es sólo un aspecto), sino que lo implica e integra, especialmente donde sea importante”
(Martínez Miguelez, 2006, p. 128).
Es importante que para abordar nuestra temática objeto de estudio La transformación de la lectura
y la escritura con base a las TIC en espacios educativos, el enfoque pertinente que nos permita
interpretar y comprender la temática, sea el enfoque hermenéutico como lo afirma Heidegger citado
por Packer “es el más apropiado para el estudio de la acción humana, involucra un intento de
describir y estudiar fenómenos humanos significativos de manera cuidadosa y detallada, tan libre
como sea posible de teorías” (Packer, 1985, p. 1-2).
Por lo anterior la investigación tendrá como centro el describir, reflexionar, interpretar y
comprender un fenómeno (TIC, lectura y escritura) que acontece en el espacio educativo; se trata
pues de comprender las distintas transformaciones que otorgan dichas herramientas tecnológicas
en la construcción y producción de textos en todos los niveles.
75
Esto hace que el investigador realiza un arduo trabajo de observación e interpretación,
características propias del método hermenéutico, que tiene como propósito principal “descubrir los
significados de las cosas, interpretar lo mejor posible las palabras, los escritos, los textos, los
gestos, y en general, el comportamiento humano, así como cualquier acto u obra suya, pero
conservando su singularidad en el contexto de que forma parte” (Dilthey citado por Martínez, 2006,
p. 102); por lo tanto, el accionar de la investigación tratará de reflexionar sobre las influencias que
propician las actuales formas de ver, hacer y concebir los actos de escribir y leer.
3.2 CONTEXTOS Y SUJETOS:
Según Tamayo y Tamayo (1997) “El contexto se define como la totalidad del fenómeno a estudiar
donde las unidades de población posee una característica común la cual se estudia y da origen a los
datos de la investigación” (Tamayo y Tamayo, 1997, p. 114) En el caso de esta investigación en
particular, el contexto y los sujetos con la que se ha limitado se determinan en la de la Institución
Educativa de María (Yarumal - Antioquia), la cual cuenta con 3.800 distribuidos en 5 sedes
ofreciendo el servicio educativo desde preescolar hasta la media académica y técnica. La sede
principal ofrece el nivel de secundaria en tres jornadas (mañana, tarde y nocturna), de forma
específica y para limitar la población observamos la jornada de la tarde con 780 estudiantes que
oscilan entre 12-18 años de edad, con estratos socio- económicos entre los rangos de 1 a 4. Cabe
resaltar que la institución cuenta con 100 docentes y 8 administrativos.
A nivel cultural se observa que los estudiantes que integran la institución manifiestan distintos
comportamientos de forma heterogénea, donde se está alejando los esquemas tradicionales,
conservadores y religiosos que culturalmente se le acreditan al contexto de la región del norte
antioqueño; y se encuentran influenciados por muchas corrientes sociales que son fruto de las
vivencias en los distintos escenarios urbanos, tecnológicos, académicos, musicales y religiosos que
la actual pluriculturalidad asegura en los distintos ambientes sociales y escolares.
De forma particular se toma como sujetos directos de la acción de la investigación los estudiantes
del grado 11-5 del técnico de comunicación digital, conformado por 29 estudiantes (24 mujeres –
76
6 hombres) con edades que oscilan entre los 15 a 18 años. Además los 14 docentes que les imparten
las distintas disciplinas, que se discriminan de la siguiente manera:
8 mujeres 8 especialistas
6 hombres 4 especialistas y 2 magister
Y los 4 directivos que de una u otra forma influyen en cada sujeto en sus comportamientos y
percepciones sociales, pedagógicas, culturales, tecnológicas y académicas; discriminados de la
siguiente manera:
2 mujeres 1 especialista y 1 magister
2 hombres 4 especialistas
Es importante señalar, que dichos estudiantes en sus contextos familiares, culturales y sociales
manifiestan realidades similares; pues se han desarrollado en unos mismos escenarios culturales y
han tenido acercamientos desde sus primeros años de infancia (barrios y escuelas). Lo que puede
observarse de forma heterogénea en niveles medianos es el factor económico, pues oscilan en los
estratos 2 y 3 (bajo y medio).
Los sujetos que se incluyen en la investigación permiten tener una aproximación más real de las
diferentes prácticas que día a día se vivencian en los distintos grupos a razón de las
transformaciones de la lectura y la escritura en el marco de las TIC, ya que presentan rasgos
característicos a la hora de interactuar, construir y desarrollar sus prácticas escriturales y lectoras a
partir de medios hipermediales, debido a que han consolidado maneras de abordar y construir
escenarios de comunicación diferentes a los patrones de normalidad, por presentar algunas de las
siguientes problemáticas que surgen por la presencia de las TIC en espacios educativos:
discriminación social y cultural de acuerdo a la marca o gama del dispositivo de comunicación
(celular), manejo de códigos comunicacionales diferentes, presencia notable de errores
ortográficos, facilidad en la elocuencia y oralidad, desmotivación por el acto de leer, poco interés
por la escritura tradicional y preferencia por la digital, bajos niveles de motivación académica,
77
interrogación (crítica) constate por las realidades y sujetos que los rodean, promoción de redes
sociales, entre otros.
Los anteriores conceptos y aseveraciones se dan por las observaciones constantes que se han
realizado con el grupo objeto de estudio en las distintas actividades académicas establecidas en el
área de lengua castellana a nivel de institución y de aula de clase; para buscar comprender y
reflexionar sobre el valor de las TIC dentro del quehacer cotidiano y las transformaciones que han
dado a los actos de leer y escribir.
Cabe anotar, que los sujetos que hacen parte propia de dicha investigación a razón de las
transformaciones de las prácticas de lectura y escritura generadas por los ambientes tecnológicos
cumplen con los siguientes criterios y características, que los hacen sujetos propicios y latentes
para ser investigados y comprender sus fenómenos en relación con la temática general:
• Promueven en su cotidianidad el uso frecuente de las TIC (celulares, tabletas, redes sociales,
etc).
• Están en los rangos de edad entre los 14 y 18 años.
• Cursan los grados décimos y onces1, específicamente en la técnica de comunicación digital.
• Los actos de leer y escribir están permeados por la puesta en práctica de lo tecnológico, es
decir, privilegia la lectura y la escritura digital.
• Inquietos y críticos por los ambientes de aprendizajes cambiantes, minimizando lo tradicional
y lo esquemático.
3.3 TÉCNICAS E INSTRUMENTOS DE RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN.
Según Hernández Sampieri y otros (2006) en “la recolección de datos implica elaborar un plan
detallado de procedimientos que conduzca a reunir datos con un propósito específico” (Hernández
Sampieri, y otros. 2006, p. 310), que permita reunir la información de manera más variable, con
1 La investigación partió cuando los estudiantes se encontraban cursando el décimo (2014), actualmente los educandos se
encuentran finalizando el grado undécimo del técnico en comunicación digital.
78
alto grado de comprensión contextual y teniendo como base los espacios y prácticas cercanas de
cada estudiante o individuo participante de la investigación.
Teniendo en cuenta lo anterior, y bajo los preceptos emanados por el consentimiento informado
para cumplir con las consideraciones éticas de la investigación y el aval del departamento de
Formación Humana y Bioética de la Universidad (anexo1) para el estudio, análisis, indagación e
investigación con los estudiantes; se tendrá como parámetro de recolección los instrumentos de
observación y entrevista.
La observación participante: (anexo2) se considera adecuada la técnica de observación, ya que
según Busot (1988) “es una forma de percibir hechos y fenómenos en forma directa y facilita la
confiabilidad deseada en el proceso, pues permite describir los acontecimientos y constatar lo que
ocurre” (Busot, 1988, p 287). Estas observaciones son llevadas a cabo de forma directa en distintos
ambientes donde circulan estudiantes y docentes con el fin de captar particularidades como hechos,
situaciones, conductas y eventos propios que propician el problema investigado; para luego
registrarlas en el diario de campo como el instrumento fundante para dar análisis, secuencia y
sistematización a cada hecho y momento observado.
“La observación es la técnica clásica primaria y más usada por los investigadores cualitativos para
adquirir información. Para ello, el investigador vive lo más que puede con las personas o grupos
que desea investigar, compartiendo sus usos, costumbres, estilo y modalidades de vida. Para lograr
esto, el investigador debe ser aceptado por esas personas, y sólo lo será en la medida en que sea
percibido como "una buena persona", franca, honesta, inofensiva y digna de confianza. Al
participar en sus actividades corrientes y cotidianas, va tomando notas de campo pormenorizadas
en el lugar de los hechos o tan pronto como le sea posible. Estas notas son, después, revisadas
periódicamente con el fin de completarlas (en caso de que no lo estén) y, también, para reorientar
la observación e investigación” (Martínez Miguelez, 2006, p 138).
La entrevista semiestructurada: (anexo3) se selecciona dicha técnica como un elemento cualitativo
que permite analizar y comprender a través de la interacción verbal entre dos o más personas con
el fin de conocer una temática determinada. En la entrevista se producen focos de interés a través
79
del intercambio de opiniones, estableciendo una relación directa entre investigador y población
objeto de estudio, para hallar compresiones culturales, sociales e individuales sobre las ideas,
supuestos y creencias de los procesos de lectura y escritura que han sido transformados con las
actuales tecnologías.
Para la planeación de la entrevista se manejarán como instrumento una guía de preguntas abiertas
con el ánimo de avanzar al foco de estudio en niveles de acercamiento y confianza.
Desde estos dos instrumentos se podrá indagar sobre las percepciones que se tiene de TIC, proceso
de enseñanza- aprendizaje, lectura y escritura, significación dentro de las diferentes prácticas
escolares.
Para el análisis y contraste de datos se promueve la interpretación y reflexión donde se conciban
las diferentes prácticas en concordancia de la cotidianidad de cada sujeto y su vinculación a los
procesos referenciales como las TIC en la lectura y la escritura; así se mirarán los supuestos y se
podrá obtener algunos comprensiones de realidades y sugerir rutas de trabajo a razón del tópico
investigado. Para ello, se harán transcripciones, codificaciones, diagramas y mapas conceptuales
que permitan visualizar las realidades, sus características, sus sujetos y las acciones de los mismos;
constituyéndose así, un plan de análisis (anexo4) y un mapa categorial (anexo5).
De forma específica para el análisis de la información, en primer lugar, se aplicó las entrevistas
semiestructuradas a los sujetos investigados, algunas fueron grabadas con videocámara o con
grabadora de voz, atendiendo y respetando las preferencias del entrevistado; luego, se realizó la
transcripción en un procesador de texto de los diálogos entablados, para poder hacer una lectura
detallada de las respuestas dadas y poder codificarlas correctamente, ubicándolas a su vez, en una
matriz categorial que toma en cuenta las siguientes categorías: prácticas de lectura y escritura,
transformaciones pedagógicas, características de lectura y escritura, dinámicas en las prácticas de
lectura y escritura, contextos educativos y TIC.
En la matriz de categorización, se incluyeron las notas de campo, producto de las observaciones
que se encuentran registradas en el diario de campo realizadas por el investigador en el aula clase.
80
Para realizar este procedimiento y permitir cruzar información de la matriz categorial a través de
convenciones se emplea el programa “office Excel”, donde se efectúa un análisis manual y
minucioso de cada uno de los componentes recolectados y luego se confrontan con los referentes
teóricos que sustentan la presente investigación.
Para las reflexiones realizadas se hizo uso de igual manera del método hermenéutico, que para
Miguel Martínez Miguelez “en sentido amplio, éste es un método que usa, consciente o
inconscientemente, todo investigador y en todo momento, ya que la mente humana es, por su propia
naturaleza, interpretativa, es decir, hermenéutica: trata de observar algo y buscarle significado. En
sentido estricto, se aconseja utilizar las reglas y procedimientos de estos métodos cuando la
información recogida (los datos) necesiten una continua hermenéutica, como sería el caso, por
ejemplo, del estudio del crimen organizado, de la dinámica del narcotráfico, de los sujetos
paranoicos, etc., donde la información que se nos ofrece puede tratar expresamente de desorientar
o engañar. Sin embargo, estos métodos tienen un área de aplicación mucho más amplia: son
adecuados y aconsejables, siempre que los datos o las partes de un todo se presten a diferentes
interpretaciones” (Martínez Miguelez, 2006, p. 135).
Gracias a este método, permite la comprensión del problema investigativo para evidenciar,
describir e interpretar las razones que sustentan las respuestas, permitiendo así la comprensión del
contexto y de la realidad a la que pertenecen los sujetos investigados.
81
CAPÍTULO IV
4. ANÁLISIS DE LA INFORMACIÓN
En este apartado se presenta el resultado del análisis de la información obtenida a través de las
observaciones – diarios de campo y de las entrevistas aplicadas a docentes y estudiantes del grado
11- 5 (Técnico en comunicación digital) de la Institución Educativa de María (Yarumal - Antioquia;
esto con el fin de dar respuesta a la pregunta problematizadora que orienta la presente investigación:
¿Qué transformaciones generan las TIC en las prácticas de lectura y escritura en los estudiantes de
la I.E de María del municipio de Yarumal? Y, en la misma línea de argumentación, presentar los
avances prácticos y teóricos referidos a los objetivos que enrutaron la línea de trabajo investigativo
y conceptual, para llegar a unas posibles aseveraciones y afirmaciones que están articuladas desde
miradas contrastadas entre realidades, contextos, conceptos, apreciaciones y fundamentos de
autores.
Por ello, aquí se encuentra tanto la interpretación de los argumentos dados por los entrevistados,
como fragmentos textuales conseguidos por las múltiples observaciones que se hicieron a los
sujetos de estudio. La información obtenida se ubicó en una matriz categorial que responde a las
siguientes categorías: prácticas de lectura y escritura, TIC, dinámicas de lectura y escritura,
contextos educativos, transformaciones pedagógicas y características de lectura y escritura. Todo
con el fin de hacer un análisis detallado, secuencial y procesal para cruzar los datos obtenidos y
sacar fragmentos significativos que posibiliten alcanzar altos grados de argumentación, debate
conceptual y discernimiento de la información.
La información de este pasaje analítico se presenta en tres (3) apartados, que se asumen como una
forma de abordar los objetivos de esta investigación: el primer momento introduce aspectos
generales de las TIC frente a las prácticas de lectura y escritura, tratando de comprender las
consideraciones, conceptualizaciones y aspectos generales que alberga la investigación; el segundo
apartado analítico trata de las dinámicas que se suscitan en las prácticas de lectura y escritura en
contextos educativos determinados por las TIC; y el tercero apartado se evidencia las
82
transformaciones no solo de tipo pedagógico a razón del docente sino las que se presentan alrededor
de las prácticas de lectura y escritura debido a la presencia de las TIC.
De esta forma, desde el análisis se hace un tratamiento de los objetivos y se establece un proceso
interpretativo para dar posibles argumentos y sustentaciones a la luz de la conceptualización y la
contrastación entre fragmentos de diarios y entrevistas. Por consiguiente, se mostrarán algunos
fragmentos conceptuales contrastados con los distintos aportes de autores, lo cual permite presentar
el marco referencial como fuente de argumentación, debate y comprensión de las realidades
investigadas en cada momento; para luego pasar a la definición y puesta en práctica del diseño
metodológico que da el horizonte para el trabajo de campo realizado.
Además, para profundizaciones y especificaciones se invita al lector a las referencias
bibliográficas, anexos y portafolio de evidencias, que muestran el paso a paso del procesamiento y
análisis de la información.
Es importante mencionar, para efectos de claridad en el análisis y en la presentación de los datos,
que la información suministrada por los docentes y por los estudiantes se presenta cursiva, alineado
a la derecha, entre comillas y al final entre paréntesis se indica el código asignado a cada
participante. De la siguiente manera: Entrevistas: (A+nro= docente) y (B+nro=estudiante). Diarios
de campo: (D+nro). Los números son consecutivos comenzando desde el 1. Para mayor claridad
presentamos el siguiente ejemplo:
“Las TIC empiezan a tomar auge cuando viene el internet y con ellas están
en las computadores y en los celulares” (A2).
Es importante señalar que para dar claridad al análisis, cada uno de los fragmentos seleccionados
de los instrumentos aplicados a los sujetos participantes, y después de haber pasado por el plan de
análisis y categorización de información, se escoge las categorías de acuerdo a su valor conceptual;
para luego analizarlas, debatirlas y argumentarlas a través de los aportes conceptuales que brinda
los autores y contrastar dichos conceptos a razón del trabajo de campo y su importancia con el tema
central de investigación.
83
4.1 CONCEPTUALIZACIONES GENERALES DE LAS TIC Y DE LAS PRÁCTICAS DE
LECTURA Y ESCRITURA
Como espacio introductorio y antes de señalar la profundidad de este apartado analítico -
conceptual es bueno conocer algunas apreciaciones que tienen los docentes y estudiantes frente a
conceptos de la investigación que son la columna vertebral del marco referencial como son las TIC
y las prácticas de lectura y escritura, gracias a las entrevistas y observaciones realizadas en el
proceso de indagación y trabajo de campo.
Los docentes y estudiantes entrevistados y observados señalan diferentes conceptos y temáticas a
razón de los aspectos generales investigados, pasando por definiciones conceptuales y algunas otras
de acuerdo a su experiencia; lo cual ha permitido el acceso a una diversidad de concepciones que
hacen variado y con mayor sustento el análisis; pues se pasan por muchas subjetividades, que
posibilitan los encuentros entre diferentes mundos, posibilidades y razones de entender y ver las
distintas transformaciones que se han generado en los ambientes escolares por la presencia de las
TIC en las prácticas escolares y, específicamente, en las prácticas de lectura y escritura.
4.1.1 Concepciones sobre las TIC en docentes y estudiantes
De esta forma, se analiza el término TIC de acuerdo con las multiplicidad de concepciones que se
evidenciaron a la hora de codificar, estudiar y categorizar la información. Las siguientes
definiciones permiten entender como este término está encasillado de acuerdo a las funciones,
experiencias y realidades que vive tanto el docente como el estudiante.
Los siguientes dos fragmento ubican las TIC dentro de un esquema más relacionado con el
dispositivo – herramienta electrónica como se evidencia a continuación:
“Las TIC empiezan a tomar auge cuando viene el internet y con ellas están
en los computadores y los celulares” (B2).
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“La idea es que si usted tiene un recurso TIC al frente usted sea un agente
activo frente a ese recurso, usted pueda interactuar con el recurso” (A2).
Aquí, se puede visualizar como los estudiantes y docentes en la escena diaria de un contexto escolar
piensan que la inserción de las nuevas tecnología a la educación se ven solamente como un
dispositivo más, que entra a suplir algunas necesidades de orden material o de recurso; enmarcando
el concepto a través de la limitación que se puede generar por su uso; ya que, al analizar un poco
más, se puede entender que en un alto grado las TIC se utilizan solo como un material más para
añadir en la escena escolar y no le dan la suficiente primacía a la herramienta, para pasarla de lo
físico y lo virtual a lo pedagógico y formativo; que podrá tener eco cuando los docentes empiecen
a visualizar sus prácticas a través de la mediación y la orientación no solamente conceptual sino
también humana y social.
Retomando la idea básica de los dos fragmentos citados, se puede visualizar unas posibles
problemáticas a la hora de ver las TIC con una visión tan cerrada; pues obviamente al entrar un
dispositivo al aula de clase genera transformaciones, ya sea malestar, inconformidad, disposición
o gusto. Pero al definirlo de forma tan cerrada, es porque en muchas ocasiones no se evidencia la
habilidad y la práctica para involucrarlo como una herramienta de mediación y apoyo pedagógico,
que puede expandir las distintas prácticas escolares y asegurar algunos movimientos, que no son
necesariamente positivos o negativos; pero, si no hacen que el estudiante y el docente se movilicen
en sus prácticas y saberes pedagógicos de una manera integral, formativa y social, se verán siempre
como aparatos electrónicos, que no lograr cumplir funciones pedagógicas.
Esta forma de ver las TIC tienen que saberse entender y tener la capacidad de análisis suficiente
para reconocerlas como una de las tantas concepciones que existen dentro del panorama escolar, y
que no son ni buenas ni malas, sino que son la muestra viva de experiencias, formas y actitudes
frente a las mismas herramientas tecnológicas. Por ello, es necesario conocerlas, diferenciarlas y
discernirlas para entender de donde se propone un diálogo, concepto, teoría o una puesta educativa.
85
Así, como se conceptualizan las TIC como un elemento técnico, electrónico y de simple uso
instrumental dentro del aula de clase; también se puede encontrar otras definiciones que instalan
concepciones diferentes como la siguiente:
“Las TIC tienen una fortaleza grandísima que es ee… que el aula se vuelve
más interactiva y más motivadora, de alguna manera el estudiante se
familiariza, les encanta, la tecnología siempre les ha fascinado al nativo”
(A3).
Partiendo de lo antes expuesto, se entiende dicho concepto más allá de la definición para entrar en
campos de funcionalidad y desarrollo; permitiendo que haya procesos secuenciales que son la
muestra viviente de la apropiación institucional (la que hacen docentes y estudiantes) hacia nuevas
prácticas, que paulatinamente se van vinculando en su cotidianidad, como elementos partícipes de
los procesos de enseñanza y aprendizaje de una forma más consciente y liberadora.
Pues, se ven como prácticas más familiares, interactivas y con un sentido hacia el reconocimiento
de la existencia de lo otro, sin necesidad de desplazar o retirar la tradición; esto hace que se puedan
convivir en un mismo espacio diferentes formas de ver y abordar las TIC, sin la necesidad de verse
malo o sancionatorio, sino que puede ser una forma de avanzar hacia la inclusión y la articulación
de distintas prácticas, donde cada individuo sea respetado por sus posiciones y posturas a la hora
de trabajar y poner en práctica dichas herramientas tecnológicas en el aula de clase.
Es decir, docentes y estudiantes ven las TIC en algunos momentos y lugares como referentes de
cambio y que su presencia está allí, y que pueden ser utilizadas como una prótesis del andamiaje
pedagógico del docente. Por lo tanto, son simples herramientas que no deben desplazar la figura
humana, sino ser complementos para activar las prácticas de formación, hacerlas abiertas,
propositivas y constitutivas de nuevos ambientes que integren lo local con lo global.
Cabe resaltar que, en el trabajo de campo, también se visualizaron algunas consideraciones que se
salen un poco del campo pedagógico y formativo a razón de las TIC; ya que algunos docentes y
estudiantes ven estas herramientas como simples dispositivos de comunicación y que tienen su
86
utilidad por su acceso a la internet y al completo que integran las redes sociales, limitando bastante
sus funcionalidades a espacios de consulta, conversaciones y entretenimiento, tal como se
evidencia en la siguiente cita:
“Las TIC son tecnologías de la información y el conocimiento sino
tecnología de las redes sociales porque la mayor parte del tiempo las
personas no utilizan las TIC para consultar sobre tema, sobre alguna noticia
y leerla realmente lo que predomina es Facebook, WhatsApp y otras redes,
Instagram” (B2).
Aquí, hay una clara definición, donde encierran dicho concepto a redes sociales y las ven como un
espacio primordial para generar aprendizajes y relaciones sociales; pero se debe mencionar que si
se queda en esta definición se pierde sentido pedagógico y se aleja muchas esencias de las nuevas
tecnologías como detonadores de cultura, interactividad, intercambio y posibilidad, que son
realidad cuando algunos docentes ven el trabajo con las tecnologías como otra opción de procesos
de formación y que se pueden integrar a las tradiciones escolares, para romper paradigmas y
prácticas que hacen ver lo tecnológico en la escuela como un agente invasor, trasgresor y dañino;
sin embargo, de una u otra forma, generan transformaciones que son clasificadas como positivas o
negativas de acuerdo a las subjetividades de cada persona y la forma de ver e interactuar en el
mundo o de entender la tecnología y las posibilidades de aplicación en el campo educativo.
4.1.2 Concepciones sobre lectura y escritura en los docentes y estudiantes
Cambiando de línea de análisis se entra al revisar las concepciones relacionadas con las prácticas
de lectura y escritura; retomando las apreciaciones más generales que están en continua presencia
en el contexto escolar, tanto por docentes como estudiantes que fueron observados, estudiados y
cumplieron con los rangos del trabajo de campo. Además, se clasifica su sustentación de acuerdo
con sus grados de subjetividades, que enmarcan la forma de abordarlas, verlas y concebirlas.
En el primer fragmento se evidencia una puesta por ver un proceso de lectura ligado a la
normatividad, lo secuencial y lo estructural; tal como se afirma a continuación:
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“La lectura se vaya volviendo también muy dinámica, muy didáctica y que
la lectura avance a lo intertextual y a lo critico. Retos en la escritura, lo
decía ahorita, conservar los manuales de estilo, respetar las normas
nacionales o internacionales que se quiere implementar, respetar la
ortografía, la gramática de modo que combinando estas dos cosas en lectura
y escritura se fortalezca el campo semántico, se fortalezca el campo
pragmático” (A2).
Esta idea de abordar los conceptos de lectura y escritura está limitada exclusivamente a darle el
valor a los niveles de interpretación (literal, inferencial, intertextual, crítico) y al respeto de las
reglas gramaticales y ortográficas de la lengua; donde así, una concepción que no puede ser
entendida como negativa o positiva, sino que es una puesta conceptual que nace seguramente de
los preceptos, experiencias académicas y del mismo mundo donde interactúa con dichas prácticas
de lectura y escritura.
Está concepción, se ve que en el universo escolar es bastante recurrente y que muchos individuos
la defienden y la proponen como la manera única de generar procesos de lectura y escritura; ya que
si se cumple como lo mencionado en el fragmento citado se ha logrado el objetivo de leer y escribir,
sin mirar que dichas habilidades albergan otras dimensiones, que no solamente están destinadas a
las maneras de escribir y leer correctamente; como conceptos culturales, sociales y de
representación de identidades de los sujetos, que trascienden las barreras del estilo y de niveles
para llegar a las prácticas más vivas, significativas y cargadas de sentido humano, que solo se
logran cuando se visualicen en el aula de clase como habilidades propiciadoras de cambio,
transformación y creatividad.
Es necesario, aclarar que las dos visiones de lectura y escritura pueden convivir perfectamente en
los contextos escolares sin la necesidad de negar o afirmar una y otra, sino que son muestra viviente
de las distintas conceptualizaciones que se han generado y que son prácticas cotidianas; que juntas
pueden articularse y proponer otras miradas para abordar y asumir la lectura y la escritura en la
escuela actual.
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Por consiguiente, los diferentes conceptos que dan similitud al señalado anteriormente son simple
tomas de decisiones para abordar y dar a conocer las prácticas de leer y escribir. Es así, que hay
conceptualizaciones y muestras prácticas que no les interesan tanto los reglamentos lingüísticos y
los niveles de interpretación; y van más allá de simples indicadores, para entrar como lo argumenta
Delia Lerner (1991) en prácticas más reales, vivas, sociales y reflejo de la cultura; donde leer y
escribir es abrir posibilidades y mundos alternos de comprensión, produciendo un cúmulo de
experiencias y movimientos subjetivos y propios de un ser o de una comunidad donde “Lo
necesario es hacer de la escuela una comunidad de lectores que acuden a los textos buscando
respuesta para los problemas que necesitan resolver, tratando de encontrar información para
comprender mejor algún aspecto del mundo...”(Lerner, 1991. p.1).
Por consiguiente, el definir con claridad dichas habilidades humanas es tan difícil como pretender
esclarecer la complejidad del pensamiento del ser humano; lo que es loable realizar y que se
muestra en este análisis de la información son los diferentes tópicos y tendencias que se suscitan
dentro de los espacios educativos, como el siguiente pasaje que entiende la lectura y la escritura
como una necesidad propia del aula de clase, que son definitivas para promover los aprendizajes y
garantizar la constitución de otros saberes:
“La lectura y la escritura fueron protagonistas en el espacio académico,
pues se constituyeron en la realización y construcción continúan en el
desarrollo de la clase. La lectura, fue primordial para poder seleccionar el
texto que permitiera dar origen al enunciado de la pregunta propuesta por
el docente; sin ésta habilidad, con seguridad el trabajo había sido para el
docente y los estudiantes totalmente deficiente, pues era imperante el leer
para lograr un texto coherente y dar vida al proceso de construcción; es
decir a una buena escritura” (D3).
Aquí, se ve reflejada la vida misma del leer y del escribir, pues se sitúan como prácticas cotidianas
claves y fundantes para que el docente y el estudiante las vean como protagonistas del proceso de
formación y sustento diario para fortalecer los vínculos con los demás saberes. Por ello, las
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prácticas de lectura y escritura son desde esta mirada un elemento clave e implícito dentro del
espacio escolar, que siempre perpetúan los saberes y las experiencias siendo herramientas para
socializar ideas, difundir prácticas, persuadir momentos y transformar miradas del mundo.
De aquí, surge una problemática incesante que se sigue viendo dentro de los contextos escolares,
como lo afirmado Daniel Cassany en sus múltiples textos; donde en la mayoría de veces se ve y se
entiende la lectura y la escritura como procesos mentales, esquemáticos, rigurosos, codificados,
interpretados, reproducidos y lineales que aseguran al estudiante la inserción y su estadía en el
mundo académico; pero no se entra a otros niveles, debido a que la tradición imperante de las aulas
de clase y de acuerdo a las observaciones, es la práctica tradición de los actos de leer y escribir, a
través de juegos de poder entre docentes y estudiantes; viendo dichas prácticas como obligantes,
desafiantes, tensionantes y llenas de opresión que solo busca un aprendizaje normativo, alejando
obviamente lo analítico, lo crítico y el sentido investigativo.
Desde estas apreciaciones se da línea de argumentación y análisis para determinar que el mundo
escolar gira frente a dos grandes referentes que transversalizan los actos de enseñar y formar, como
son las TIC y la lectura y la escritura; las cuales de manera integral y con las múltiples realidades
del mundo global crean diferentes opciones para abordar el acto educativo y acceder de una u otra
forma a los conocimientos.
Por ello, se crean distintas transformaciones y cambios tanto en lo social, cultural, educativo y
político que van influenciando de manera directa e indirecta los roles de estudiantes y docentes que
hacen que las prácticas de leer y escribir en las aulas de clases sean abarcadas desde otras miradas
holísticas donde se respeten individualidades, pero se movilicen ideas sociales y culturales a razón
de crear manifestaciones cargadas de imaginación y propiciadoras de transformaciones en
cualquier índole; ya que se vuelve explícito la libertad en los hechos académicos, pues estudiantes
y educadores se sumergen en aulas virtuales que propician otra forma de relacionar, teorizar y
comunicar ideas.
Desde este punto de vista, las TIC en las prácticas de lectura y escritura hacen que el docente actual
se pregunte por su práctica pedagógica, su saber, su reflexión y obviamente por su dominio de la
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tecnología; debido a que la presencia de herramientas tecnológicas suscita otras modalidades de
enseñanza que están determinadas por la aceptación de lo otro, lo diferente y lo que atenta contra
la norma. Pero es una realidad tangible que asegura no prácticas negativas ni positivas sino
procesos e ideas transformadoras que deben de ser comprendidas, investigadas y puesta en la
pizarra diaria de la reflexión pedagógica del docente.
Además, las prácticas de lectura y escritura se tornan en este escenario en muchas ocasiones como
prácticas que pueden atentar contra el control y la rigurosidad que siempre se les ha otorgado. Por
ello, el docente y el estudiante deben reflexionar sobre el uso de las TIC en sus actos de leer y
escribir, para no llegar a los extremos, pues es difícil ubicar una medición entre lo bueno y lo malo
cuando se habla de la tecnología. Lo primordial es propiciar ambientes físicos o virtuales pero con
altos grados de crítica, discernimiento y con intenciones de formación; de nada vale la reproducción
de ideas, palabras, expresiones y mundos, lo deseado es la comprensión y la criticidad de los
diferentes universos posibles de interpretación que pueda crear la escritura y la lectura; siempre y
cuando la escuela gire su visión para crear ambientes que estén cargados de libertad y desarrollo
humano.
En consecuencia, no se puede juzgar las definiciones y distintas maneras de ver dichos conceptos
en esta investigación, ya que son propios de agentes que circundan en las nuevas generaciones de
la comunicación y la tecnología; y que por lo tanto, sus idearios están cargados de subjetividades,
pues son fruto de sus prácticas y sus realidades. Por ello, no deben estar marcadas como buenas o
malas, simplemente son elementos conceptuales que emergen de su pensar y actuar; creando
tendencias y aseveraciones que son libres de respetar, discutir y discernir haciendo que se fortalezca
más el proceso hermenéutico.
4.2 DINÁMICAS QUE COBRAN LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA DEBIDO
A LA PRESENCIA DE LAS TIC EN LOS CONTEXTOS EDUCATIVOS
En este espacio se presentarán las diferentes dinámicas, posturas y puntos de vista que docentes y
estudiantes tienen en relación de las prácticas de lectura y escritura; para observar tareas,
tradiciones y momentos que se ven dentro de estas prácticas a razón de elementos tecnológicos en
91
el contexto escolar – aula de clase. Esto con el fin de describir e interpretar las realidades que se
suscitan en las actuales instituciones educativas frente a los actos de lectura y escritura mediados
por las TIC; de esta manera, se encontrarán afirmaciones y conceptos variados que permiten
múltiples comprensiones referidas a las dinámicas que circundan el mundo educativo y que hacen
que no haya unificación alguna de conceptos, sino que se abarca un abanico de posibilidades que
enriquecen la teoría para abordar distintas lecturas desde la mirada del educador y del estudiante.
Desde esta postura, se entra en el análisis a evidenciar en primer orden las concepciones de los
docentes que se tienen a razón de las dinámicas que se encarnan cuando el leer y escribir está
permeado por las TIC; por ello se tienen algunos fragmentos que circundan dicho tópico tales
como:
“La hora de leer no se trata de leer mucha información sobre un tema sino
de saber cuál de esa información es la que realmente aporta el
conocimiento” (A2)
“Hipervínculos de alguna manera nos llevan a profundizar en un tema” (A3)
Desde aquí se empieza a suscitar otras maneras de ver los procesos lingüísticos a partir del uso
cotidiano de las tecnologías dentro de las aulas de clase, pues se evidencia la existencia y manejo
recurrente de herramientas para proponer nuevas escenas educativas, que están ligadas a prácticas
tradicionales que han sido legitimadas por la escuela y por nuevas prácticas que se van insertando
a las metodologías de los docentes, para abrir panoramas de cambio, aprendizaje y desarrollo del
conocimiento a través de otros medios; haciendo que la didáctica esté en juego permanente, ya que
no solo es armonizar espacios y sujetos, sino abrir momentos para conjugar el uso correcto de un
dispositivo electrónico, que debe ser un apoyo más para el docente y no un obstáculo, que pueda
rivalizar con su práctica pedagógica.
Por ello, es importante que el docente sepa discernir las distintas concepciones que circundan
referente a las TIC, para entender posturas, ideas y prácticas que a diario son recurrentes para
conceptualizar y poner en práctica dichas herramientas tecnológicas, pasando desde los conceptos
92
instrumentales hasta las ideas y procesos que pueden contener innovación en la clase, significación
y acceso a la cultura.
Para lograr lo anterior, y hacer que convivan las distintas miradas referentes a las TIC es primordial
que se posibilite la manipulación consciente de los dispositivos, a través de la libertad en la escritura
y la lectura, donde los textos se bifurquen en las múltiples páginas web o ambientes virtuales, para
englobar los textos en millares de significados y mundos; que serán relevantes cuando el docente
sea un mediador entre lo tecnológico y lo pedagógico y pueda comprender que ninguna postura
referente a las prácticas de lectura y escritura y las TIC son sancionatorios o negativas, son solo
punto de partida para abrir el campo de la reconceptualización, el análisis, la interpretación y el
acompañamiento; pues lo humano y lo tecnológico no debe repelerse sino complementarse, porque
en la actualidad son un soporte para promover otros espacios de interacción, construcción y
desarrollo de los saberes, donde circunda de manera ágil y rápida un conjunto de tradiciones
culturales e informaciones que debe ser comprendidas y discernidas por los sujetos para abrir
panoramas que permitan comprender y criticar las realidades que circundan cada persona.
Así, las dinámicas que circundan lo tecnológico en la lectura y la escritura y que fueron cercanas a
las observaciones y el plan de trabajo investigativo circundan en los nuevos roles que el docente
está experimentando, pasando de la pizarra tangible a la digital; orientando su proceso de enseñanza
en plataformas virtuales, donde las individualidades son permanentes, los textos se complementan
diariamente; los diálogos docentes y estudiantes se promueven a través de chat y foros que hacen
que leer y escribir sea un proceso constante, evolucionado, cambiante y donde las palabras toman
diferentes significados, pues van saltando entre vínculos, páginas, redes sociales, formatos entre
otros ambientes hasta diversificar los significados y las mismas palabras
Todo ello, se mueve y se desarrolla en instantes de una clase, lo que hace que estudiante y docente
reciban y generen al mismo tiempo un conjunto de proceso y posibilidades virtuales (redes sociales,
chat, imágenes, audio, videos, etc) que promueven el acceso de la información, proporcionando
mayores procesos de interacción y dinámicas como se analiza en la siguiente fragmento otorgado
por un docente:
93
“Una dinamización enorme y sobre todo en la escritura, el joven o el
estudiante empieza a expresar con mayor facilidad expresiones,
sentimientos, conocimientos, ¿Por qué? Porque se utilizan software libre
donde los llevan a ellos a interactuar con lo que a él le atrae en este momento
que es la imagen, el sonido, el movimiento, entonces vemos cuando
desarrollan crucigramas, sopas, cuando utilizan las herramientas
ofimáticas” (A4)
Desde aquí, se observa que las TIC están dentro y fuera de las instituciones educativas y se han
convertido en un elemento indispensable para generar prácticas escolares para recrear los
aprendizajes; pero al hacer un análisis con una visión hermenéutica para tratar de comprender
algunas dinámicas que son propias de las realidades educativas que crecen y se desarrollan en las
aulas de clase cuando el leer y el escribir están en el marco de las TIC, se evidencia un deterioro
creciente de las relaciones humanas entre los sujetos que interactúan con las herramientas
tecnológicas, no solo de estudiantes sino de los mismos docentes, viendo que lo humano se ha ido
poco a poco reemplazando como es el diálogo, la mirada, el tacto, la escucha y la oportunidad de
sentir al otro.
Esta condición de ser humano se entiende como la idea de ver al estudiante y al docente como un
ser íntegro, dimensional y cargado de emociones; que no es un agente académico, repositorio de
información y subordinado a la tecnología sino que es un individuo que es comprendido en su
proceso de formación como un ser diferencial, cambiante, con sentimientos y que fluye en su vida
diario tanto fortalezas como debilidades.
De esta manera, los contextos escolares podrán cambiar de perspectiva y llegar a la interpretación
de múltiples significados; donde se conjugue la rigurosidad y la complejidad de lo académico con
la emotividad necesaria para trascender y perdurar cada momento educativo y propiciar la
formación de estudiantes con altos niveles de significación en cada expresión construida tanto en
su oralidad y como su escritura.
94
En este momento analítico y desde una línea de argumentación que nace en el proceso investigativo
frente a las dinámicas reales que se crean referente a las TIC con las prácticas de escritura y lectura,
se puede sustentar y obviamente debatir los pro y contra de las herramientas tecnológicas, pues,
aunque son elementos casi indispensables para abrir el mundo del conocimiento y pueden ser una
buena herramienta didáctica para socializar, producir y trascender textos que pueden promover
libertad, autonomía y sentido crítico e investigativo.
También, hay que mencionar que las TIC se han convertido en un elemento que si no es concebido
con la suficiente pedagogía y reflexión puede derribar procesos formativos, disminuir los lazos
culturales, sociales y familiares, producir desorientaciones en la información y ser un elemento
distractor para que el docente cumpla con su labor social, humana, formativa, lingüística, política
y creativa dentro de la escuela y la misma sociedad. Todo esto se puedo generar cuando se vea las
TIC solo como un elemento tecnológico, cargado de instrumentalización, sin intencionalidad y
como un fin y no como un medio donde solo importa la reproducción de información sin la
suficiente depuración y significación que se debe tener para llegar a la comprensión y al manejo
consciente de las herramientas tecnológicas dentro de los espacios educativos.
Todo depende, como lo sustenta Daniel Cassany (2008), de que los maestros puedan desenvolverse
en todos los contextos o para empoderarse de las nuevas formas de ver y promover las corrientes
educativas que se producen a diario a partir del constate bombardeo que hace las TIC a la familia,
la sociedad y la escuela, con la finalidad de tomar lo positivo de dichas herramientas; y esto se
alcanza cuando los docentes se apropien de su saber y utilicen los dispositivos electrónicos como
un aliado más para generar didáctica, producir metodología y asegurar la humanización de los
procesos formativos; donde todo esté mediado por las buenas prácticas pedagógicas sin exceder en
la utilidad y el manejo de las herramientas.
Desde este campo, es positivo las TIC en lo educativo, pues bien direccionadas hacen los
estudiantes exploten con mayor facilidad todas sus habilidades, siendo proactivos, constructores
de saberes, con múltiples lecturas del mundo y generadores de ideas permitiendo la conversión del
estudiante tradicional al nativo digital como lo afirma Daniel Cassany (2008) en su texto Nativos
e inmigrantes digitales en la escuela, donde plantea que: “Los nativos digitales han desarrollado la
95
destreza de gestionar varias tareas al mismo tiempo, de manera simultánea o casi simultánea: es la
multitarea (multitasking). Por ejemplo, chatean con tres, cinco o más interlocutores a la vez, en
conversaciones diferentes; atienden el correo electrónico mientras se bajan música de la red o
consultan la Wikipedia, con diversas ventanas abiertas en la pantalla; mantienen una conversación
por Skype mientras leen una revista o revisan los comentarios recibidos en su blog.” (Cassany,
2008, p. 5).
Lo anterior se ve evidenciado en la investigación específicamente en las observaciones y en los
diarios de campo, que al hacer las lecturas y análisis de lo visualizado se nota en algunas clases
que los estudiantes, mientras están desarrollando un taller, una lectura, un texto o un ejercicio y
tienen a sus disposición una herramienta tecnológica (computador, celular, tableta, etc) son capaces
de cumplir cabalmente la actividad propuesta por el docente; pero pueden realizar varias tareas
virtuales en el mismo momento, pasando desde comentarios en redes sociales, consulta de
información en buscadores, mensajes de textos, conversaciones sincrónicas, observación y escucha
de videos hasta llegar a la compra de productos en línea.
Por consiguiente, el estudiante que está hoy dentro del aula de clase genera estas dinámicas que
son propias de nativos digitales, ya que cumplen multitareas de forma acertada y correcta,
propiciando un cambio relevante a los ambientes y contextos escolares, donde la rutina sea
cambiada para pasar al cumplimiento de espacios digitales, donde el docente se convierte en un
seguidor, orientador y guía del proceso formativo, capaz de mediar entre lo tecnológico y lo
pedagógico.
Claramente se evidencia que leer y escribir en los nuevos espacios escolares se convierte en un
acto transformador y novedoso, pues se pasa del tablero, la tiza, el cuaderno y el lápiz para llegar
a plataformas virtuales, donde se activa unas nuevas destrezas no solo de manejo de código
(gramática) sino el uso correcto de la herramienta tecnológica (plataforma). Aquí, el leer y el
escribir está orientado por múltiples agentes que pueden participar en el proceso ya que se puede
construir y reconstruir en instante, hasta llegar a la extensión del texto o simplemente a la
eliminación del mismo.
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Por consiguiente, las dinámicas que se suscitan dentro del aula de clase cuando se establecen
proceso de lectura y escritura casi son producto de aquellos docentes y estudiantes inmigrantes y
nativos digitales que crean las transformaciones no solo en la lectura y la escritura sino en muchos
ámbitos escolares, que hacen que las prácticas se reconfiguren a nuevos mundos digitales, con el
fin de hacer que los saberes fluyan de la misma manera que los educandos los perciben en su
cotidianidad, gracias a la cercanía con elementos tecnológicas, que son apropiados y adaptados de
forma abierta a cada momento escolar.
También los estudiantes, de acuerdo a este mismo tópico, han dado sus apreciaciones tales como:
“La escritura ya no es tangible sino intangible. En el computador logré
aumentar mi capacidad para escribir y también para leer porque podía
generar más textos” (B4)
Es importante señalar que no se puede ver el concepto de lectura y escritura en un solo cambio de
mecanismo y de instrumento (lápiz a teclado); pues no habría ninguna transformación y finalidad
de lo tecnológico en la creación de una dinámica hacia la construcción y desarrollo de prácticas de
lectura y escritura fundantes, creativas, significativas y productoras de significados conceptuales
en el marco de lo social y humano.
Por consiguiente, sin menospreciar estas ideas de leer y escribir en lo digital, lo real es que las TIC
dentro del mundo educativo se vea y se propongan como un acierto en lo educativo y de fácil
inserción dentro del aula de clase; ya que bien utilizadas y con la permanencia constante y
acompañamiento del docente y del padre de familia se podrá ver formación, buenas prácticas y
pertinencia entre los saberes que se movilizan en lo tradicional con los que circundan en la
virtualidad.
Lo que verdaderamente se puede afirmar, es que la vinculación entre lo humano y lo digital de una
manera libre, consciente y variada hace que los estudiantes promuevan la construcción de nuevos
significados gracias al desarrollo de proceso de lectoescritura cargados de movilidad, dinamismos
y concurrencia entre la simbiosis de un texto con su estructura gramatical (ortografía, signos de
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puntuación, sintaxis, coherencia, cohesión, etc.) y su estructura digital (hipervínculos, memes,
colores, imágenes, videos, multimodales, etc.).
Así mismo, los estudiantes y docentes con las TIC aseguran la diversidad en la información, los
datos y los saberes, con mayor ramificación en la información y con muchísimas más opciones a
la hora de analizar, producir e interpretar textos, ya que como se afirma en el siguiente concepto:
“El conocimiento lo puedo adquirir en cualquier momento pues la mayoría
del tiempo llevo mi celular conmigo y si tengo acceso a internet y si tengo
alguna duda sobre algún tema pues ingreso a un navegador, investigo y pues
ya resolví la duda. Y otro beneficio es que en las redes sociales y en internet
podemos encontrar muchísima información” (B2)
De esta manera, se ve otra forma de entender y concebir el mundo digital como un ambiente
cotidiano dentro del contexto educativo que cada vez más toma auge como un medio para acceder
a múltiples informaciones y asegurar multiplicidad de significados, enlazar realidades y contribuir
a la distribución de distintos datos. Esto no se puede negar, ya que el aula de clase se ve
directamente influenciada por dichas prácticas, donde se utilizan las distintas aplicaciones del
medio web solo como un proceso de entretenimiento, recopilación de información y expansión de
la misma; sin llegar a niveles de comprensión, análisis, argumentación y clasificación, haciendo
que leer y escribir sea una práctica de enunciados que apuntan a una comunicación dispersa, sin
suficiente coherencia y pobre de significado social.
Por ello, cuando se propone esas conceptualizaciones la figura del docente debe retomar su
propósito formativo para poder asegurar la inserción de un elemento tecnológico a la aula de clase,
con el fin de pasar de ser un tutor a convertirse en un mediador que socializa saberes y hace que el
estudiante trascienda sus proceso de aprendizaje entre lo tradicional y lo tecnológico; alcanzando
ideas de leer y escribir con diversidad de sentidos y propósitos, donde la interactividad que propone
la web sea utilizada no solo como elemento reproductor de información sino como escena viva
para la participación del estudiante en la producción e interpretación de nuevas realidades, jugando
98
un papel protagónico; pues lo deseado es que él maneja y oriente no solo el proceso lector sino
tecnológico.
Por ello, las actuales dinámicas a razón de leer y escribir son producto de múltiples retos, obstáculos
y revoluciones que se están generando a diario en los ambientes escolares; como lo sustenta Lugo
de Usategui: “Hoy nos encontramos frente a uno de los más grandes desafíos que se le han
presentado a la cultura escrita, porque como ya hemos dicho, las nuevas tecnologías de la
información están redefiniendo en cierta forma nuestras costumbres al leer o escribir” (Lugo de
Usategui, 2005, p. 5).
Esto no solo significa un cambio de herramientas de producción y de lectura de textos, sino que se
modifican las formas de interpretación, de ver las informaciones con la misma; ya que los
ambientes se tornan distintos y dispersos, las relaciones entre docentes y estudiantes cambian
haciendo que las prácticas de lectura y escritura no solamente estén estancadas en ciertos lugares
(biblioteca, libros, textos, aulas) sino que trascienda hacia múltiples realidades, momentos, lugares
y tiempos, que son la muestra viviente que lo tecnológico ha influido en leer y en escribir.
Pero todos estos conceptos hay que movilizarlos en distintas miradas, pues no se puede dar una
negación o afirmación contundente; pues todo se da debido a unos procesos y puntos de vista de
acuerdo a los contextos y manejos de experiencias; a la hora de descalificar un proceso es debido,
muchas veces porque rompe el esquema tradicional de lo escolar, haciendo ver una práctica como
negativa y que puede alejar o limitar otras prácticas que ya están establecidas por el sistema y que
son tomadas como ideas que van en contra de lo esperado por la formación escolar; como se
muestra en el siguiente fragmento, que es producto de las interpretaciones dadas por el trabajo de
campo – observaciones:
“TIC: se hace uso, muchas veces exagerado por parte de los estudiantes;
pues las tienen como una parte más de su dimensión corporal, ya que las
utilizan como un “cerebro alterno”. Es decir, todo lo que desconocen es
buscado y trabajado en sus dispositivos electrónicos, sin mirar
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confiabilidad, veracidad y fuentes primarias; cayendo a supuestos y
ambigüedades en sus procesos académicos” (D1).
También se presentan desde la misma óptica algunas apreciaciones dadas por los estudiantes en las
respuestas otorgadas en las entrevistas:
“Ya no estoy utilizando los signos de puntuación, y que ya me da pereza
leer; por ejemplo: un libro, porque no me llama la atención, me gusta es
más que todo leer en el medio virtual” (B3).
Los anteriores conceptos pueden tener muchas variantes, debates, argumentos y análisis; lo
fundamental es tomarlas con un alto sentido crítico y comprensivo, analizando sus posturas y
puntos de vista para lograr comprender la esencia misma de dichas prácticas y darles un trato
coherente, donde no se ven como aspecto negativos referentes a las TIC, sino como una
oportunidad más para indagar e investigar su existencia dentro del mundo escolar, analizando sus
pro y contra para encontrar puntos de equilibrio que permitan mejorar el quehacer docente y
diversificar las prácticas de lectura y escritura desde diferentes ángulos, sin necesidad de ver lo
tecnológico como negativo.
Cabe resaltar, que es importante conservar dentro de la rigurosidad de la lengua sus fundamentos
normativos y estructuras gramaticales; pero no se puede desconocer que la lectura y la escritura no
solo se enmarca en dichas condiciones, va más allá; debe trascender a lo lingüístico, lo social y
cultural; pues más que prácticas mecánicas son prácticas de identificación, de reconocimiento, de
promoción y de representación de realidades individuales y colectivas que están bajo el marco de
lo cultural.
Otro aspecto, que surge en las distintas observaciones y que sea considerado negativo por lo
estandarización del contexto educativo es lo relacionado con la lectura y escritura rigurosa,
científica, literaria y académica; ya que una gran parte de población escolar sustentan que se
minimizan dichas prácticas cuando se utilizan las TIC como elemento superficial y de poca
rigurosidad, ya que promueve según ellos, el leer y el escribir a partir de simples palabras, frases,
100
imágenes y videos; haciendo que los sujetos estén cargados de escuetos mensajes que varían de
significado a cada instante y produciendo en ellos un estado de complacencia y confort, sin mirar
más allá de lo que se contiene en cada mensaje distribuido.
Esto hace que dichos individuos no vean la necesidad de construir textos con altos niveles de
exigencia y que la lectura sea efímera y sin trascendencia a otros escenarios literarios.
Realmente estas consideraciones que son producto de los diferentes análisis de la información
tratada en el trabajo de campo, no puede ser juzgada como positiva o negativa, debe ser entendida
como una mirada comprensiva y con la suficiente reflexión para interpretar y analizar dichas
aseveraciones que son producto de los prejuicios y miedos que puedan existir por la presencia de
las TIC, y sin ahondar en cuestiones más de fondo que de forma; haciendo que las prácticas que se
recurren con los elementos tecnológicos en los contextos educativos se ven como negativos y que
generan problemáticas.
La idea esencial es ver dichas situaciones como simples transformaciones que se producen por la
presencia de las TIC dentro de la cotidianidad escolar y que por lo tanto, todo cambio genera
inestabilidad, ambigüedad, juicios, sanciones; como también genera proposiciones, estímulos,
reconocimientos y proceso de mejora. Es decir, las TIC son un elemento que genera de una u otra
forma incertidumbre.
Por ende, y de acuerdo a lo ya debatido, y viendo una idea que gira nuevamente a razón de aspectos
que dan rechazo a la presencia de las TIC dentro de la escuela, se presenta el siguiente concepto
establecido por un docente entrevistado, donde menciona:
“Los jóvenes de alguna manera se dejan permear por estos hábitos que de
alguna manera se podrían decir que son mal sanos para el avance de la
lectura y escritura, se podría decir de un retroceso; porque por ejemplo si
usted ve la forma como chatea un joven, el joven cada vez utiliza menos un
lenguaje menos rico, tranquilamente se acorta palabras, signos de
101
puntuación, signos ortográficos; es perezoso, es perezoso de alguna manera
para escribir” (A3)
Aquí, nuevamente se observa que en la mayoría de ocasiones las TIC son vistas por algunos
docentes como una herramienta que genera retroceso para la formación de los estudiantes y centra
su argumentación en conceptos relacionados con la estructura lingüística, la gramática y los grados
de motivación de los estudiantes cuando está la existencia de una herramienta tecnológica; viendo
la misma como un elemento distractor del aprendizaje que genera conflicto dentro del aula de clase
y que no asegura ninguna significación para el proceso de aprendizaje.
Estas ideas, que muchos docentes albergan sobre las TIC, no pueden ser descalificadas, son
producto de sus vivencias, miedos, prejuicios y formas de ver el mundo que con seguridad abren
más la brecha digital; ya que sus aportes encierran la tecnología como un enemigo de lo educativo
y no se detienen a comprender que las dinámicas escolares han cambiado y que por lo tanto, las
prácticas docentes deben más que señalar y castigar ofrecer oportunidades de transformación,
promover lo bueno y asegurar la inserción de los dispositivos electrónicos con altos grados
pedagógicos.
Desde esta multiplicidad de visiones, conceptualizaciones, transformaciones y dinámicas que están
presentes en las prácticas de lectura y escritura se puede concluir en este segundo pasaje que las
TIC generan múltiples cambios en todos las escenas educativas, que no deben de tener el
juzgamiento cerrado de ser buenas o malas; son posibilitadoras de otras maneras de abordar los
procesos de formación, que deben ser tomadas como mediadoras y recreadoras de las prácticas
escolares, para abrir la creatividad, la agilidad, el dinamismo y la construcción colectiva e
individual de docentes y estudiantes.
Queda claro que los medios electrónicos dentro de la plataforma educativa generan
transformaciones y la creación de otras actividades o dinámicas para asegurar y promover los
procesos de enseñanza – aprendizaje de cualquier saber; y mucho más frente a la lectura y a la
escritura; así como lo argumenta Octavio Henao Álvarez y Doris Adriana Ramírez (2006) en su
texto las tecnologías de la información y la comunicación en la lecto- escritura: “Las TIC
102
constituyen un poderoso agente de cambio para el rediseño de ambientes, condiciones, métodos, y
materiales didácticos; han hecho posible la aparición de nuevos enfoques pedagógicos distintos en
cuanto al funcionamiento de la escuela, los contenidos del currículo, el rol del maestro, y los
entornos de aprendizaje que se ofrecen al alumno”( Henao Alvarez y Ramírez, 2006, p.1).
Por último, la dinámica más contundente que se da frente a la lectura y la escritura dentro del marco
de las TIC, es que se convierten en prácticas recurrentes, constantes y diversificadas, con múltiples
significados y que se encaminan en gran porcentaje al abandono de lo impreso para llegar a textos
virtuales – semióticos cargados de imágenes, símbolos, signos, íconos, sonidos y videos que
ameritan una nueva forma de comprender, de educar, de formar y de ver el mundo.
4.3 LAS TRANSFORMACIONES DE LAS PRÁCTICAS DE LECTURA Y ESCRITURA
DEBIDO A LA PRESENCIA DE LAS TIC
Es notable que la lectura y la escritura se ha venido transformado paulatinamente debido a las
nuevas formas de acceder a la información y de generar comunidad lingüísticas en distintos
espacios y momentos que son producto del camino o ruta de lo tangible a lo digital; donde los
textos producidos y analizados son construcciones de las constantes interacciones de los distintos
ambientes tecnológicos como redes sociales, chat, foros, plataformas, wikis, blog, entre otros
espacios que han nutrido de una u otra forma la lectura y la escritura de dichos textos;
transformándolos hacia conceptos y movimientos de hipervínculos, audiovisuales, hipermodales,
imágenes y diversidad de significados que hacen que dichas prácticas estén permeadas por lo que
trae las TIC, que se puede encerrar en un concepto de novedad; expresión que alberga lo que puede
ser positivo o negativo, pero que de una u otra manera trae cambios en la forma de ver, actuar y
entender los nuevos mundos escolares y las nuevas prácticas educativas.
Una de las transformaciones que ha venido teniendo bastante auge en las aulas escolares en que se
ha pasado de lo impreso a lo digital, haciendo que tanto el leer y el escribir este cargado de
particularidades y detalles, donde cada individuo de acuerdo a sus subjetividades proporciona
múltiples significados y crea formas distintas de ver un texto; pues lo digital hace que haya
103
interacción, modificación y renovación de la escritura en todo momento, pasando no solo de la
longitud del texto sino de su forma micro y macro textual.
Además, los procesos de inserción comunicativa de los estudiantes dentro de lo digital se puede
decir que es efímera en ciertos momentos, pues pasan del video, al chat, de la lectura, a la escritura
de mensajes en redes sociales y de consulta de información al entrenamiento (juegos), lo que hace
que los procesos de producción e interpretación textual se vuelven momentáneos, bifurcados e
hipertextuales, que sin la suficiente orientación pedagógica no podrán llegar a la significación,
debido a que el estudiante por cumplir multitareas no cumple con ninguna. Esto debe ser
reflexionado por el docente y hacer que los ambientes educativos en lo digital sean verdaderos,
significativos donde se genere aprendizaje e interacción.
Esto hace que docentes y estudiantes tornen unos roles diferentes a la hora del accionar el proceso
de formación, pues ya no solamente están ellos y los saberes; sino que está de manera explícita
elementos tecnológicos, que hacen que las prácticas escolares se tornen diferentes y obviamente
que se haga un tratamiento especial para las mismas, ya que la escena de educar gira continuamente
en cambios, modificaciones y procesos no lineales sino en secuencias dispersas, que constituyen
un aprender variado y continuo; lo que afecta de una u otra forma la lectura y la escritura, como se
ven en los siguientes apartes que son tomados de las respuestas de docentes y estudiantes:
“Los cambios que yo observo relacionados todos al aprendizaje, es un
aprendizaje más sólido, más movido, hay unas prácticas pedagógicas que se
dinamizan totalmente. El docente lee con mayor asertividad, busca, lleva a
que el alumno indague, a que crea, a que construya, aprenden a escribir en
entornos virtuales” (A4).
Lo anterior evidencia una transformación de tipo metodológico a razón del rol del docente como
un motivador y estimulador de prácticas diferentes, que hace articular de forma clara y coherente
los ambientes tradicionales con espacios tecnológicos, permitiendo que las TIC se inserten de
manera positiva al contexto escolar, pues se observa que para dar cumplimiento a una idea
pedagógica con medio tecnológico, es que el docente está empoderado de su quehacer y de su
104
reflexión; y que está viendo lo tecnológico no como un fin primordial sino como un medio para
asegurar el acceso a la información y con seguridad al desarrollo de saberes. Por ende, el educador
es la figura primordial en la transformación de escenarios escolares a partir de las nuevas
tecnologías, pues es él quien de manera apropiada y reflexiva puede transversalizar la lectura y
escritura a mundo digitales sin perder la esencia, el significado y la rigurosidad que debe tener
dichas prácticas que son las que promueven en acceso directo a campos de formación más
complejos y profundos de los estudiantes.
Es dicho docente, quien de la mano de lo humano con lo tecnológico, pueda dar a comprender a su
comunidad educativa que lo bueno o lo malo de las nuevas formas de acceder a la información
depende exclusivamente del manejo que se le dé a los medios tecnológicos, teniéndolos como
herramientas que detonan la creatividad, la inteligencia, la diversidad y la consecución de otras
ideas hacia bien particular y social. Lo anterior solo es visible cuando la didáctica del docente se
salga de los ambientes de confort y logre tocar otras escenas no solamente materiales sino humanas
para alcanzar un manejo más adecuado de lo tecnológico en la escuela; y con seguridad ese cambio
didáctico y metodológico tendrá mucho de digital. Por consiguiente, como lo afirma un docente:
“El reto es la transformación de un imaginario colectivo, ya sobre un
escenario de lectura y escritura, se pasa de un imaginario cuadriculado
estancado en libros de texto en lo académico, en la imposición de currículo
sobre cualquier innovación y pasamos a ser la innovación de la actualidad,
es decir, donde el muchacho puede tener derroche de entretenimiento, de
velocidad de información en lo que se evidencia la fuerza de las palabras,
de la comunicación” (A4).
Esto posibilita, que hablar de lectura, escritura, pedagogía, didáctica, escuela y TIC se pueda dentro
de cualquier ambiente escolar, pues en ello se suscita de manera implícita las transformaciones,
que son los nuevos movimientos de entender y ver la formación de los sujetos desde otra
perspectiva, que pueda vincular lo social, lo cultural, lo académico y lo tecnológico en un recuadro
de ángulo abierto que permita activar habilidades cognitivas y afectivas de los educandos para que
105
de forma regulada y reflexiva interactúen con el leer y el escribir desde lo digital; desde una visión
holística y creadora de espacios educativos, llenos de crítica y sentido investigativo.
El tópico que se sustente en el pasaje citado hace ver de nuevo la figura del docente como un
encargado social, que gracias a su dominio profesional, puede permitir la existencia y vivencia de
lo tecnológico en la escuela en una misma línea de trabajo metodológico; pues como educador
podrá hacer que la lectura y la escritura puedan convivir, desarrollarse y tomar significado no solo
en el aula regular sino en el aula digital, siempre y cuando el docente y el estudiante sean aliados
de la compresión, la reflexión y la significación. Así habrá con seguridad una transformación
humana, social, cultural; y por ende un cambio a la hora de abordar prácticas de lectura y escritura
con sentido y cargadas de multiplicidad de elementos culturales y sociales, pues estarán bajo el
marco de la libertad.
Debido a esto, y como lo ha afirmado un estudiante en el trabajo de campo, se puede citar que:
“El ambiente cambia porque deja de ser tan monótono. Por eso digo que
puede convertirse en algo lúdico, ya que como pueden brindarle diferentes
tipos de texto y diferentes pues tipos de escritura de la persona, esa persona
puede leer e interpretar de una manera diferente a las otras y por eso se
convierte más en una actividad como un juego…como un juego de
concentración un juego de lógica en el que la persona crea su propio
contexto de lo que está leyendo y de lo que escribe por lo tanto de una
manera mejor” (B4)
Desde este aspecto conceptual y práctico, que se generaliza en las transformaciones de tipo
pedagógico, es comprensible que el trabajo en el aula de clase de estudiantes y docentes debe ser
un trabajo colaborativo, de relación directa y desarrollo de habilidades para poder alcanzar que lo
tecnológico cobre valor metodológico; para ir haciendo que las escenas educativas y las prácticas
de leer y escribir en lo digital se tornen verdaderas, significativas y cumplan con la idea de
comunicar para lograr trascender la palabra de lo digital a lo cultural; pues de nada vale el manejo
correcto de la herramienta y de las normas gramaticales si los textos no conversan con el
106
sentimiento individual de cada sujeto, ya que una idea primordial de escribir y leer es hacer que las
ideas, deseos costumbres, tradiciones y sentires se reflejen en cada mensaje; para abrir el panorama
de lo cultural, que debe ser lo esencial.
Por lo tanto, las TIC no deben de ser vista como un elemento que violente el contexto educativo,
deben ser entendidas y manejadas como herramientas que contribuyan a agilizar los procesos de
enseñanza y aprendizaje, para hacer que lo pedagógico se nutra más; ya que el docente debe
emplear dichas herramientas para recrear los conocimientos y asegurar el buen manejo de las
mismas; todo esto en el marco de la creatividad, la libertad, el juego, lo didáctico y lo metodológico,
que sustenta que las TIC deben de mostrar la posibilidad de la existencia de lo otro y que debe de
ser la oportunidad de ver el mundo educativo con otras miradas, sin alejarse de la esencia de formar;
pues de lo contrario se puede caer en ambientes meramente sistematizados y sin intencionalidad
pedagógica, donde lo textual se entiende como lo visual.
Esto y mucho más no se puede ocultar cuando se habla de tecnología dentro de lo escolar, ya que
esta nueva forma de interactuar en el mundo ha creado otras concepciones de ver lo pedagógico,
ya que se pasado de las realidades tangibles (presencialidad) para llegar a momentos de
individualización que gira en lo sincrónico y asincrónico (virtualidad).
Esto hace, que el texto sea leído y producido de forma diferente; naciendo así una forma
hipermedial, que circunda en un solo texto múltiples enlaces para otros textos, que ramifican las
interpretaciones y producen un juego de significados y contextos; ya que al hacer el análisis dentro
de la investigación referido al trabajo de campo, se visualiza que una de las tendencias más notorias
para que los estudiantes construyan sus textos es la experimentación en diversas páginas, donde a
través de pequeños fragmentos y sin respetar derechos de autor van construyendo y tejiendo un
nuevo texto, que permite dispersar un conjunto de mensajes, cargados de múltiples significados y
aspectos culturales; dependientes del navegador o sitio visitado.
A partir de aquí, se ve claramente otras de las tantas transformaciones, la cual se sitúa en el ideario
que tienen docentes y estudiantes para acceder y manipular información a través de las distintas
bases disponibles en la web, en el cual la esencia de la escritura es la copia de fragmentos sin la
107
suficiente toma de consciencia a la hora de su apropiación y manejo en otros ambientes académico
o sociales; lo que posibilita bajos niveles de producción y desarrollo de los textos, pues en lo
escolar, se ha privilegiado los dispositivos electrónicos como herramientas para acceder a la
información sin la suficiente depuración; ya que se ha limitado solo a lo automático y la producción
no de calidad y argumentación del texto sino a la cantidad.
Por consiguiente, y haciendo eco a lo anterior, es fundamental en las transformaciones que hoy se
suscitan dentro de los actos de leer y escribir el concepto de intertextualidad; en el cual “las
personas deben saber cómo seleccionar, relacionar y organizar información de múltiples fuentes,
pues cada día es menos posible que un sólo documento contenga toda la información existente
sobre un tema. Así, la lectura de un texto nos conducirá a muchos otros más, avanzando o
retrocediendo en la historia y la cultura” (Henao Alvarez, y Ramírez, 2006, p. 2).
Además, dichas transformaciones no solo se quedan allí, en la forma como abordar los textos a
través de las nuevas herramientas tecnológicas, también han transformado los ambientes sociales
y culturales a partir de las famosas redes sociales, que dentro de la escuela juegan un papel
primordial como lo aseguran estudiantes y docentes:
“Facebook es una red social, es un medio para escribir lo que pensamos lo
que vemos, y también lo que estamos viviendo, es un medio de lectura
escritura no tanto de compartir lo que somos si no de compartir lo que
pensamos” (B4).
“La utiliza directa de una red social (WhatsAap), lo que hace que haya un
ejercicio digital de la escritura y la lectura de una manera sigilosa frente a
la autoridad del docente, con el fin de establecer una comunicación virtual
con otras personas” (D4).
“Al finalizar, logran enviar las preguntas vía Facebook, no desearon
enviarlas por whatsAap, argumentado que en la red social todo el mundo
conocería sus preguntas, las resolverían y darían mayores comentarios.
Dicen que lo primordial, es que la mejor es la que tenga mayores “me
gusta”” (D3).
108
Estás nuevas formas de comunicación virtual han creado distintas concepciones sobre
comunicación y conocimiento, pues no solo son entretenimiento y diversión; también generan
espacios culturales y de saberes hasta el punto de construir comunidades intelectuales y de
resolución de procesos académicos; gracias a lo que menciona Ana María Peppino (2009) en su
texto lectura y pensamientos críticos: estrategias para desenvolverse en el ciberespacio: “la internet,
la famosa red de redes, ha hecho el sueño de reunir el conocimiento del mundo en un solo medio y
ha permitido el desarrollo de sistemas de comunicación mediada por la computadora y con ello el
surgimiento de las llamadas comunidades virtuales del conocimiento” (Peppino, 2009, p. 2).
Asimismo, los cambios que se han dado en los contextos escolares son infinitos a partir del uso
recurrente, práctico y cotidiano de las TIC en todos o en muchos de los espacios educativos,
haciendo que no solo se movilicen otras maneras de leer y escribir; la cuales se mezclan entre lo
físico y lo digital, entre la escuela regular y la plataforma virtual y entre los distintos espacios como
lo son las redes sociales, chat, WhatsApp y foros que han provocado una alto índice de lectura y
escritura a nivel social y no académico; constituyendo los textos a partir de pequeñas frases o
párrafos que son difundidos al instante, carentes de autoría y de manejo normativo de la lengua;
que además están cargados de múltiples significados gracias a sus imágenes, formas, detalles,
colores ya hasta videos que aseguran un derroche al lector de ambigüedades, sentidos, sentimientos
y provocaciones para seguir la escritura de otro texto similar.
Por lo anterior, hay nuevas formas de relacionarse y de constituir comunidad; así como también
de entender la puesta en marcha de procesos de tipo pedagógico, didáctico y procedimental que
hacen los docentes para poder capturar la atención de los educandos, que debe estar en línea directa
con lo tecnológico que las nuevas generaciones de estudiantes están formando.
Por ello, muchos docentes están propiciando nuevas formas de abordar las temáticas a razón de
las TIC y están saliendo de los métodos tradicionales; como se afirma en el siguiente fragmento
sacados de los diarios de campo:
109
“Los estudiantes en grupos de trabajo realicen por cada equipo una
pregunta estilo ICFES de algún fragmento del libro Cursillo de Mitología
Griega de forma digital, utilizando los ambientes de mensajería que pueda
tener los dispositivos tecnológico (celular - computador) presentes en el
aula de clase, para que se envíen las preguntas y tratan de resolverlas de
forma colectiva” (D3).
Con la anterior situación observada se ve que los docentes en su cotidianidad están haciendo lo
posible para ir en la misma línea de inserción tecnológica que sus estudiantes, con el fin de
promover otras formas y metodológicas, para hacer que el acto de educar y formar esté vinculado
y tenga como mediador algún elemento tecnológico, que genera cambio, transformación del
entorno y procesos creativos a razón del intercambio de lo digital con lo impreso.
Por ello, el ambiente escolar actual está cambiando, y éste cambio debe de ir de la mano con lo
pedagógico para poder que la implementación de las TIC sean vista como un medio que genera
otras posibilidades y dinámicas de aprendizaje y socialización; todo enmarcado en un ambiente
creativo y con un alto nivel de trabajo virtual, que indicara el desarrollo eficiente de la actividad
propuesta; pero que estará unido a lo humano, lo social y el respeto de lo otro.
Tampoco se puede decir que la utilización de dispositivos electrónicos en la clase generen cambios
sustanciales de calidad, humanización y desarrollo coherente de los aprendizajes de los estudiantes
y los roles de los docentes, pues esto no indica nada; ya que muchas veces las TIC se vuelven
distractores que camuflan directamente las intencionalidades de la clase, alejando la pedagogía y
la formación de los mismos estudiantes; ya que en muchos espacios escolares solo tiene las TIC
(computadores, tabletas) como aparatos electrónicos de alta tecnología, que solo son un muestrario;
pero en realidad son dispositivos que son subutilizados, no cumplen sino la función decorar el aula
de clase y su tarea digital se basa en ser simples buscadores de datos y generadores de más
individuos adictos a las redes sociales. Su labor pedagógica pasó a un segundo plano para
convertirse en simples servidores.
110
Por ello, si no hay unas asesorías pertinentes del docente frente el desarrollo de las actividades en
el marco de las TIC, se queda simplemente en automatizaciones que difieren demasiado de la
esencia de la formación y la educación; pasando solo a dar protagonismo a las tecnologías, el valor
del aprender se queda en el activismo y la reflexión del quehacer docente se puede distorsionar.
El anterior fragmento se ve evidenciado en la investigación realizada específicamente cuando
algunos docentes creen que utilizar un computador dentro del aula de clase es la una herramienta
de innovación y desarrollo pedagógico; donde solo pone a sus estudiantes a transcribir información
sin ninguna orientación y asesoría. En este espacio, como es claro, no hay reflexión, producción e
interpretación; solo se verifica la existencia de una dispositivos electrónico con un ser humano que
interactúan a través de la codificación de grafías, sin llegar a altos nivel de abstracción y análisis
que permita evidenciar un uso transformador de la escena educativa.
Cuando se habla de verdaderas transformaciones pedagógicas el docente no solo debe utilizar los
medios tecnológicos para modificar su labor, ya que éstos son solo medios y ayudas para enrutar
el trabajo académico; se debe ir más allá, con el fin cambiar posturas, miradas y darle mayor valor
no a la herramienta sino a los estudiantes; para alcanzar niveles de autonomía y responsabilidad
que apunten al fin primordial, la formación.
La figura del docente debe pasar de un activador del ejercicio, un técnico de la herramienta, un
orientador de sistemas y de un supervisor de la actividad; para llegar a ser un promotor de saberes,
cultura, movilidad, virtualidad y creatividad en el marco de la humanización, donde la información
que arroja el medio tecnológico sea un complemento para el discernimiento y la construcción de
conocimientos.
Por lo tanto, las TIC dentro del mundo escolar, no deben pasar desapercibidas, debido a que los
cambios son relevantes e importantes para todo los miembros de la comunidad educativa, ya que
las transformaciones son en todo índole y deben de ser tomadas por los docentes con la suficiente
conciencia, crítica y reflexión; que posibilite su inserción a la vida educativa y al desarrollo de
prácticas como la lectura y la escritura de manera pertinente, coherente y humana. Por lo anterior,
se torna viable la idea de Laura M Liguori (2000), donde sustenta: “La incorporación de las nuevas
111
tecnologías de la información y la comunicación en el campo de la enseñanza tiene consecuencias
tanto para la práctica docente como para los procesos de aprendizaje. Pero la determinación de
estas consecuencias no puede efectuarse sin el análisis de las condiciones políticas y sociales que
estructuran a las prácticas pedagógicas” (Liguori, 2000, p. 6).
Volviendo a la línea de argumentación y de análisis referida a las transformaciones en los actos de
leer y escribir con la presencia de las TIC, es básico comprender que el mayor factor en los
contextos educativos como un propiciador de cambio; como lo aprecian los docentes en los
siguientes fragmentos es la alfabetización digital:
“Alfabetizar los jóvenes, no quedarnos con la palabra que se escribe, si
escribe bien; esta la b y la v. Entonces pasar a dialogar y a construir con
ellos, vamos en estos términos formando, informando; y yo creo que se
puede hacer tanto con los docentes como con los jóvenes, porque si
queremos estar en tono con todas las generaciones y cerrar estas brechas
que nos están separando a nivel de comunicación. Entonces es una tarea y
responsabilidad de todos” (A4).
“El estudiante es un nativo digital, entonces tenemos que acomodar las
prácticas educativas a la forma como él percibe el mundo, la forma como él
adquiere el conocimiento y la información, en esta sociedad del
conocimiento y la información, entonces no entiendo porque algunos
docentes todavía se niegan a ese cambio, porque les da miedo es el
cambio”(A3).
“Entonces también a la hora de iniciar procesos de lectoescritura mediados
por TIC hay que formar no sólo el estudiante en la parte de conocimiento
sino también en la parte actitudinal” (A2).
Lo anterior, hace que los sustentos que promueve Daniel Cassany (2002) referidos a la
“alfabetización digital” tomen valor, pues, como lo sustenta los docentes en las entrevistas
realizadas, lo fundamental para promover ambientes tecnológicos dentro del aula de clase es la
alfabetización digital; esto hace que las prácticas sean diferentes y que las relaciones entre
112
tecnología y proceso académico tenga valor, pues se aleja de la mera entretención y utilización de
las herramientas para llegar a una verdadera y eficiente utilidad de la herramienta.
Pero para ello, hay que crear una cultura digital, donde estudiantes y docentes se preparen para las
nuevas formas de entender, generar y crear saberes, ya que las TIC dentro de los contextos escolares
y específicamente en la lectura y en la escritura propicia otras miradas y tendencias, pues, como lo
afirma Cassany (2002), “surgen nuevas prácticas comunicativas, con géneros (correo electrónico,
conversación o chat, página o sitio), estructuras (hipertexto, intertextualidad), registros (tecleado,
coloquial) y formas lingüísticas particulares. Como consecuencia, también evolucionan las
procesos cognitivos implicados en la interacción, la lectura o la escritura y se aventuran cambios
significativos en la cultura y las formas de pensamiento de las sociedades (expansión de la
democracia, incremento de la capacidad de comunicación y de las libertades, etc.)” (Cassany, 2002,
p. 1).
Algo fundante, y que se aleja de la alfabetización digital, es el solo mecanizar los actos de leer y
escribir a través de la herramienta tecnológica, sin llegar a la reflexión y la consecución de ideas
transformadoras y motivadoras; de nada vale la escritura y la lectura como un acto de reproducción,
de rutina y de automatismo; es decir, escribir y leer por escribir; sin un acto grado de significación.
El anterior pasaje se ve reflejado en la investigación, cuando los docentes proponen algunas
actividades de lectoescritura a través de computadores y tabletas solo utilizan dichas herramientas
como pantallas o elementos de tabulación de la información, ya que son ejercicios de consulta
mínima, de copiar y pegar textos a otros formatos, revisar un video sin ninguna intencionalidad
pedagógica, hacer comentarios sin conocer fuentes primarias y descargar información sin detenerse
a indagar, criticar, investigar y socializar sus procedencias, valores y significados en una
comunidad académica determinada. Esto hace, que las TIC, sean simples aparatos electrónicos sin
ningún proceso reflexivo, cambiante y promotor de pensamiento o simplemente de relación
comunitaria.
Por estas situaciones, es primordial entender los dos mundos que se crean en el aula a través de las
TIC, donde se hace una contrastaciones de realidades que circundan en los mismos ambientes, ya
113
que en momentos las prácticas de lectura y escritura se ven como prácticas cargadas de obligación,
represión y castigo donde se convierten los procesos en solo decodificación; y en otros instantes,
se ponen en juego como prácticas vitales y sociales que posibilitan actos de interés, renovación y
producción textual. Todo esto se da cuando el leer y el escribir dentro de lo tecnológico no tiene el
suficiente sentido formativo y pedagógico.
Las TIC no debe ser entendida como lo pedagógico, lo nuevo, lo metodológico, lo básico, lo
didáctico dentro de las clases; pues se cae a simples artificios y manipulaciones que alejan de la
verdadera esencia de las TIC; ya que éstas pueden ser un puente para armonizar y enrutar la escena
pedagógica y los actos de aprendizajes (no son todo, son una parte); debido a que se puede percibir
en algunas observaciones de campo que algunos estudiantes y docente creen que la formación y
las misma educación depende en la actualidad en un gran porcentaje si las clases están permeadas
por un elemento tecnológico, asegurando que la idea de aprendizaje y de aula para el porvenir de
la escuela será lo digital y el desarrollo de espacios en línea; pues están convencidos que el utilizar
un computador o un celular dentro del salón de clase y vincular con el proceso de enseñanza y
aprendizaje es la mejor forma de educar las presentes y futuras generaciones; sin detenerse a hacer
un análisis de los positivo y lo negativo de las herramientas tecnológicas y lo más preocupante es
que no han observado los aspectos sociales, culturales y personales que pueden suscitar la
exposición prolongada sin intención pedagógica del proceso educativo con las TIC.
En consecuencia y entrando al campo específico de la lectura y la escritura en lo tecnológico se
espera que el docente y los mismos estudiantes no lo tomen de una forma tan pasional y superficial,
sino que miren las TIC como un posibilitador y un medio para renovar y recrear las prácticas para
constituirlas como prácticas creativas, innovadoras, creadoras de mundos posibles y cargadas de
subjetividades y de idearios sociales; sin dejar a un lado la rigurosidad y la puesta en común de ser
la esencia viva del escritor y el lector, es decir, el estudiante. Entendiendo siempre que los modelos
tradicionales y ortodoxos de enseñanza del lenguaje deben de ser tomados desde otros enfoques,
pues cada sociedad trae nuevos conceptos así como lo argumenta Emilia Ferreiro: “Leer y escribir
son construcciones sociales. Cada época y cada circunstancia histórica dan nuevos sentidos a esos
verbos (Ferreiro, 2001, p. 13).
114
En conclusión, se demuestra así y con una visión socio-cultural, en la misma línea de argumento
de escritora Delia Lerner (1991) en su texto Leer y escribir en la escuela: lo real, lo posible y lo
necesario; las verdaderas transformaciones pedagógicas que se pueden otorgar en las prácticas de
lectura y escritura en la presencia de las TIC, se dan cuando en los contextos educativos (docentes
y estudiantes), vivencien en su cotidianidad dichas prácticas como procesos sociales y culturales,
cargados de subjetividades, que son la muestra visible de la tradición y del pensar propio de cada
sujeto, en las cuales se evidencia la necesidad de mostrar y compartir mundos, para luego construir
otros universos, que harán eco en la historia de los lectores; para trascender en la perdurabilidad de
los tiempos, siempre y cuando el leer y el escribir sean la esencia misma de la libertad y el desarrollo
de la autonomía plena de un ser, que quiere salir del espacios lineales y cuadriculados, para
comprender con otros ojos la esencia de cada palabra. Esto se hará gracias aquellos docentes que
construyan su constante reflexión pedagógica a partir de estilos de vida diferentes, que sean los
más parecidos a la felicidad de su educando.
115
5. CONCLUSIONES
Esta investigación pretendía responder a la pregunta problematizadora: ¿Qué transformaciones
generan las TIC en las prácticas de lectura y escritura en los estudiantes de la I.E de María del
municipio de Yarumal?; para intentar dar respuesta a este interrogante se reflexionó de manera
crítica sobre diferentes aspectos conceptuales, contextuales, metodológicos, pedagógicos e
investigativos para poder contrastar realidades y teorías de autores con el fin de entender y
comprender como las prácticas de lectura y escritura en los actuales contextos escolares se han
venido desarrollado a partir de los nuevos ambientes de aprendizaje que han generado las TIC;
donde su presencia ha hecho que los procesos de enseñanza y aprendizaje susciten nuevas formar
de relación, interacción y significación tanto en lo cognoscitivo como en lo social y cultural. Por
consiguiente el análisis efectuado arrojo las siguientes conclusiones:
En los actuales contextos educativos no hay unificación por parte de docentes y estudiantes en las
concepciones y prácticas relacionadas con la lectura y escritura; así, como también de las ideas y
definiciones que están instaladas a razón de las TIC. Por lo tanto, ésto hace que las miradas sean
difusas a la hora de comprender y dar valor a los mismos conceptos, lo que lleva a un sinfín de
prácticas y tradiciones que no pueden ser deslegitimadas o sancionadas, sino que tienen que verse
con un sentido comprensivo y reflexivo, para poder entender las diversas posiciones que se suscitan
dentro del aula en función del leer y el escribir permeado por las TIC.
Cabe resaltar que las definiciones y prácticas que más prevalecen son aquellas donde se ve la
lectura y la escritura como meras prácticas mecánicas, reproductoras y sistemáticas de códigos y
mensajes que son valoradas o rechazadas por niveles gramaticales y no por sus significados
contextuales, sociales y culturales. Esto hace que leer y escribir en la escuela sean simples actos
rutinarios, que, en ocasiones, no alcanzan a trascender de lo simbólico.
Lo mismo sucede con las TIC, las cuales se ven como simples artefactos que decoran y dan mayor
andamiaje a la estructura física de las aulas de clase, que son utilizados como simples medios que
reemplazan otros sistemas y se desconoce su valor pedagógico, comunicativo y formativo. Lo más
preocupante es que no se ven como un camino hacia un proceso formativo, sino que en ocasiones
116
se tornan como el fin único para lograr procesos de enseñanza y aprendizaje, perdiéndose la figura
del docente mediador y orientador para pasar a simples operadores y programadores.
En esta misma línea se ve que las TIC no se han vinculado directamente con los currículos de las
instituciones educativas, lo que hace que sean extrañas y no puedan tomar un valor pedagógico y
una misión formativa, que posibilite al educando discernir información, socializar saberes y
conformar nuevas redes de aprendizaje con altos niveles de reflexión y crítica.
Por lo anterior, los docentes se siguen viendo y actuando con prácticas pedagógicas tradicionales,
en donde su función es ser transmisores de información y cargados de protagonismo dentro del
acto educativo; alejando la idea de un contexto escolar promotor de pensamiento crítico, que es
constituido en una alto grado cuando las prácticas de lectura y escritura son prácticas vivas y
conscientes que están ligadas directamente al estudiante, el cual es el centro de la formación y
constructor de conocimiento a partir de sus intereses y necesidades.
Según los datos arrojados por esta investigación, se ve una brecha digital cada vez más marcada,
donde es notable las condiciones de nativos e inmigrantes digitales, haciendo que los procesos de
enseñanza y aprendizaje se tornen difusos, ya que se orientan procesos de educativos que no
responden a las generaciones actuales sino a sistemas ortodoxos y mecánicos cargados de
linealidad y sujeción tanto del cuerpo como del pensamiento ya que alejan la libertad del
aprendizaje y del pensamiento, para solo dar énfasis en la disciplina y el saber científico.
Por consiguiente, las transformaciones más notables dentro de las prácticas de lectura y escritura
circulan en las interacciones que se suscitan entre textos digitales que son producidos en redes
sociales, el conocimiento está abierto a todas las dimensiones, se acrecientan los repositorios
digitales, se diversifican los significados de las palabras (polisemia), se da valor a la imagen y se
propone otra codificación de la escritura (emoticones) y la lectura se torna bifurcada por
condiciones multimodales e hipermediales. Esto hace, que leer y escribir sea un reto constante, no
para los estudiantes sino para el docente quien tendrá que mediar entre las características,
intencionales, dimensiones y relaciones textuales que amplíen el horizonte crítico y de
convergencia entre lo tradicional y lo digital.
117
Otra transformación generada se propone en la idea de la producción e interpretación textual donde
a partir de las TIC se configuran como prácticas heterogéneas y plurales que son propiamente
ligadas a la individualización del ser y el pensar de los estudiantes, haciendo que el escribir y el
leer en lo digital es más un escenario subjetivo y cambiante que un proceso riguroso, estándar y
reproductor de solo expresiones amañadas a las ideologías de los docentes.
Estas modificaciones son solo producto del trabajo pedagógico que pueda efectuar el docente, el
cual en lo tecnológico debe ser un gestor y mediador de ambientes transformadores que miren su
quehacer desde lo formativo para lograr que las aulas de clase se movilicen hacia la interacción y
el desarrollo de prácticas escolar innovadoras y reflexivas, para constituir relaciones entre docentes
y estudiantes comprometidas con el ser, el hacer y el convivir enmarcadas en procesos tecnológicos
significativos donde el educar con las TIC sea una articulación entre lo humano y lo digital.
Desde este punto, es fundamental que los contextos educativos se renueven en todas las direcciones
para que junto con las TIC se puedan orientar procesos de producción e interpretación de textos
con intencionalidad social, crítica y generadores de otros pensamientos, que demuestren la esencia
de leer y escribir en la libertad de ideas; para poder formar seres propositivos, que den razones de
sus posturas y que tenga en su caminar la idea de transformación constante.
Es necesario que las prácticas de lectura y escritura sean procesos conscientes, humanos y
liberadoras del pensamiento de cada uno de los educandos para producir textos cargados de lo
social y lo cultural, que movilice la identidad de una comunidad y genere espacios reflexivos,
autónomos y cambiantes donde se llegue a la emancipación de los saberes entorno a la construcción
de nuevas realidades que enfrenten a cada individuo al desarrollo progresivo entre lo humano, lo
tecnológico y lo académico.
Se puede concluir que las TIC en la modernidad deben pasar de las visiones instrumentales a
entenderlas como un factor primordial para promover nuevas estrategias pedagógicas que aseguren
adecuadamente la inserción de las herramientas tecnológicas como medios para recrear y dinamizar
los procesos educativos que apunten hacia la formación de sujetos que reflexionan de su propio
118
quehacer y donde el docente sea un mediador entre lo tangible y lo digital; para que el escribir y el
leer en estos nuevos ambientes sean prácticas vivas, conscientes y productoras de autonomía.
5.1 RECOMENDACIONES
Para poder comprender y dinamizar las distintas transformaciones que se generan en las prácticas
de lectura y escritura a partir de las TIC en los espacios educativos es importante detonar en los
procesos formativos de pedagogías y didácticas correspondientes a la época generacional de los
estudiantes que sean innovadoras, motivadoras y dinamizadoras de los procesos de aprendizaje
donde los ambientes digitales sean articulados con los distintos espacios escolares, en una mezcla
de sociedad, cultura, familia y política donde los actos de educar se tornen en líneas de trabajo
proactivo que hagan que la figura del estudiante tome protagonismo y se convierta en eje central
del aprendizaje a partir de sus emociones, sentimientos e ideas de ver el mundo.
Por lo tanto, es importante para minimizar tal panorama que los docentes actualicen sus saberes
pedagógicos y específicos articulados como las TIC, para poder movilizar escenarios formativos
donde el aula de clase se convierta en una escena de reflexión, socialización y construcción de
ambientes críticos que serán realidad cuando las prácticas de lectura y escritura se transformen
hacia la renovación del pensamiento y apunten hacia la identidad de sujetos comprometidos con el
bienestar global y hacedores de herramientas tecnológicas con altos sentidos sociales, humanos y
cognoscitivos.
119
6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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122
7. ANEXOS
Anexo 1
123
Anexo 2
124
Anexo 3
UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA
MEDELLÍN
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
________________________________________________________________
INSTITUCIÓN EDUCATIVA DE MARÍA
Yarumal – Antioquia
Entrevista
Respetado Estudiante
Esta entrevista forma parte de una investigación educativa que pretende recoger las opiniones y
reflexiones que los estudiantes tienen sobre las transformaciones en las prácticas de lectura y
escritura a partir del uso de las TIC en espacios educativos.
Cabe resaltar, que ustedes como parte del proceso de investigación se les respetará el derecho al
anonimato y que no recibirán ningún tipo de pago por su participación. También, que la
información que proporcionen solo será para fines netamente académicos.
Objetivo
Comprender las transformaciones en las prácticas de lectura y escritura a partir del uso de las TIC
en espacios educativos por parte de los estudiantes de la I.E de María en el municipio de Yarumal
(Ant).
PARTE I: Datos generales
Fecha (dd/mm/aa): ______________________________________
Sexo: F ____ M ____
Edad: ____________
Grado: ______________________________________
PARTE II: Desarrollo de la entrevista
125
Las siguientes preguntas son la base para orientar la entrevista con los estudiantes, la cual se
efectuará de manera flexible, escuchando las diferentes opiniones y respuestas del docente a través
de un diálogo semiestructurado para alcanzar altos niveles de confianza. Se les pedirá el favor de
dar respuestas concretas que apunten directamente a la pregunta; además se solicita el permiso para
grabar el audio que permita evidenciar, registrar y dar análisis de la entrevista.
Preguntas Categorías
1. ¿En qué espacios y cómo adquirió sus conocimientos y
experiencias en el uso de las TIC?
- TIC
- Contextos escolares
2. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas en el contexto
escolares cuando se evidencia el uso de las TIC
aplicadas en prácticas de lectura y escritura?
- TIC
- Contextos educativos
- Prácticas de lectura y escritura
- Características de lectura y
escritura
3. ¿Qué prácticas de lectura y escritura son recurrentes en
los diferentes ambientes cuando están mediados por las
TIC?
- TIC
- Prácticas de lectura y escritura
4. ¿Qué dinámicas en los actos de lectura y escritura se
suscitan en el aula de clase cuando hay la presencia de
herramientas tecnológicas?
- TIC
- Contextos educativos
- Prácticas de lectura y escritura
- Características de lectura y
escritura
- Transformaciones pedagógicas
5. ¿Cómo utiliza los medios tecnológicos en las prácticas
de lectura y escritura?
- TIC
- Prácticas de lectura y escritura
6. ¿En qué medida la lectura y la escritura en ambientes
virtuales se ha transformado?
- Características de lectura y
escritura
- Dinámicas de lectura y
escritura.
- TIC
7. ¿Qué transformaciones ha sufrido sus actos de leer y
escribir cuando utiliza herramienta tecnológica?
- Transformaciones pedagógicas.
- Prácticas de lectura y escritura
126
- TIC
8. ¿Qué beneficios e inconvenientes te ha generado la
lectura y la escritura mediadas por las TIC?
- TIC
- Dinámicas de lectura y
escritura.
- Prácticas de lectura y escritura
9. ¿Qué tipo de exigencias como estudiante genera el
hecho de realizar prácticas de lectura y de escritura en
un contexto mediado por TIC?
- TIC
- Prácticas de lectura y escritura
- Dinámicas de lectura y
escritura.
10. ¿Qué opinión le merece el hecho de que los medios
tecnológicos han creado otras maneras leer y escribir?
- Prácticas de lectura y escritura
- Características de lectura y
escritura.
- Transformaciones pedagógicas
- TIC
- Contextos educativos
11. ¿Qué características particulares encuentra en los
textos que son producidos por medios tecnológicos?
- Características de lectura y
escritura.
- TIC
12. ¿Cuáles son los principales motivos para que algunos
estudiantes privilegien las prácticas de lectura y
escritura mediados por las TIC?
- Prácticas de lectura y escritura.
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC
- Contextos educativos
Muchas gracias
127
UNIVERSIDAD DE SAN BUENAVENTURA
MEDELLÍN
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
________________________________________________________________
INSTITUCIÓN EDUCATIVA DE MARÍA
Yarumal – Antioquia
Entrevista
Respetado Docente
Esta entrevista forma parte de una investigación educativa que pretende recoger las opiniones y
reflexiones que los docentes tienen sobre las transformaciones en las prácticas de lectura y
escritura a partir del uso de las TIC en espacios educativos.
Cabe resaltar, que ustedes como parte del proceso de investigación se les respetará el derecho al
anonimato y que no recibirán ningún tipo de pago por su participación. También, que la
información que proporcionen solo será para fines netamente académicos.
Objetivo
Comprender las transformaciones en las prácticas de lectura y escritura a partir del uso de las TIC
en espacios educativos por parte de los docentes de la I.E de María en el municipio de Yarumal
(Ant).
PARTE I: Datos generales
Fecha (dd/mm/aa): ______________________________________
Asignatura que dicta: ______________________________________
Años de experiencia: ____________
Sexo: F ____ M ____
Edad: ____________
Último título obtenido: ______________________________________
PARTE II: Desarrollo de la entrevista
128
Las siguientes preguntas son la base para orientar la entrevista con los docentes, la cual se
efectuará de manera flexible, escuchando las diferentes opiniones y respuestas del docente a
través de un diálogo semiestructurado para alcanzar altos niveles de confianza. Se les pedirá el
favor de dar respuestas concretas que apunten directamente a la pregunta; además se solicita el
permiso para grabar el audio que permita evidenciar, registrar y dar análisis de la entrevista.
Preguntas Categorías
1. ¿Qué sabe acerca de las TIC en contextos
escolares y su uso específico en las prácticas de
lectura y escritura?
- TIC.
- Contextos escolares
- Prácticas de lectura y escritura
2. ¿Qué cambios observa usted en las prácticas de
lectura y escritura con presencia de las TIC?
- Transformaciones pedagógicas.
- Prácticas de lectura y escritura.
- Características de lectura y
escritura.
- TIC
3. ¿Cómo influye las herramientas tecnológicas en
las prácticas de lectura y escritura?
- TIC
- Transformaciones pedagógicas.
- Prácticas de lectura y escritura.
4. ¿Cuáles son los principales motivos para que
algunos docentes incluyan las TIC en las
prácticas de lectura y escritura?
- Prácticas de lectura y escritura.
- TIC
- Transformaciones pedagógicas.
5. ¿Cómo ha transformado los actos de leer y
escribir tanto de docente y estudiantes a partir
del uso de herramientas tecnológicas?
- Transformaciones pedagógicas.
- Dinámicas de las prácticas de
lectura y escritura.
- TIC
- Contexto escolar
6. ¿Cuál es para usted la actitud más generalizada
del profesorado ante las TIC?
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC.
7. ¿Cuál es la actitud del alumnado cuando se
proponen prácticas de lectura y escritura
utilizando herramientas tecnológicas?
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC
129
- Dinámicas de las prácticas de
lectura y escritura.
- Contexto escolar
8. ¿Cuáles son las transformaciones lingüísticas
(gramática, ortografía, semiótica, semántica)
que están surgiendo en las prácticas de lectura y
escritura debido a la presencia de los medios
tecnológicos?
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC
- Prácticas de lectura y escritura.
- Características de lectura y
escritura.
9. ¿Cuáles son los grandes retos de los docentes
actuales ante la enseñanza de la lectura y la
escritura a través de las TIC?
- Transformaciones pedagógicas.
- Dinámicas de las prácticas de
lectura y escritura.
- Prácticas de lectura y escritura
- Contextos escolares
- TIC.
10. ¿En qué cambia la dinámica de la clase cuando
hay presencia de elementos tecnológicos?
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC
- Contextos escolares
11. ¿De qué manera las TIC están permeando su
proceso de enseñanza y aprendizaje?
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC
- Contextos escolares
12. ¿Qué beneficios e inconvenientes generan las
TIC en el quehacer docente y en su reflexión
pedagógica?
- Transformaciones pedagógicas.
- TIC
- Contextos escolares
Muchas gracias
130
Anexo 4
131
Anexo 5
