Trabajo de Campo Etnográfico

28
TRABAJO DE CAMPO ETNOGRÁFICO ¿Qué hacen los/as antropólogos/as?

Transcript of Trabajo de Campo Etnográfico

Page 1: Trabajo de Campo Etnográfico

TRABAJO DE CAMPO ETNOGRÁFICO

¿Qué hacen los/as

antropólogos/as?

Page 2: Trabajo de Campo Etnográfico

LA ETNOGRAFÍA

Page 3: Trabajo de Campo Etnográfico

Enografía

Enfoque

Método

Escritura

Guber, Rossana. Método, Campo y Reflexividad.

Page 4: Trabajo de Campo Etnográfico

ETNOGRAFÍA COMO ENFOQUE

Es una concepción y práctica de conocimiento que busca comprender los fenómenos sociales desde la perspectiva de sus miembros.

Los sujetos pueden dar cuenta de lo que piensan, sienten, dicen y hacen con respecto a los eventos que los involucran.

Adoptar un enfoque etnográfico es elaborar una representación coherente de lo que piensan y dicen los nativos.

Page 5: Trabajo de Campo Etnográfico

ETNOGRAFÍA COMO MÉTODO

Es el conjunto de actividades que se suele designar como “trabajo de campo”.

Las principales técnicas son la observación participante y las entrevistas no dirigidas.

El/la investigador/a parte de una ignorancia metodológica: cuánto más sepa que no sabe más dispuesto/a estará a aprender la realidad en términos que no sean propios.

Page 6: Trabajo de Campo Etnográfico

ETNOGRAFÍA COMO TEXTO

Descripción textual del comportamiento de una cultura particular resultante del trabajo de campo.

El/la antropólogo/a intenta representar, interpretar o traducir una cultura o determinados aspectos de una cultura para otros/as lectores/as.

Page 7: Trabajo de Campo Etnográfico

BREVE HISTORIA DEL TRABAJO DE CAMPO ETNOGRÁFICO

Page 8: Trabajo de Campo Etnográfico

LOS INICIOS: FINES SIGLO XIX – PRINCIPIOS DEL XX

Las figuras del recolector de la información y el analista experto se encontraban separadas: la información provenía de comerciantes, misioneros o funcionarios, de material traído por viajeros o colecciones de anticuarios.

En 1888 Alfred Haddon encabezó la primer expedición a Oceanía para obtener material sobre costumbres de los aborígenes y de especies fito-zoográficas.

En 1913 Rivers realizó un estudio entre los Toda de la India y expresó “la necesidad de investigaciones intensivas en una comunidad en al que el trabajador vive por un año o más y estudia cada detalle de la vida y la cultura”

Page 9: Trabajo de Campo Etnográfico

MALINOWSKI: FUNDADOR DEL TRABAJO DE CAMPO

La teoría funcionalista sostenía que las sociedades están integradas en todas sus partes y que las prácticas, creencias y nociones se sus miembros guardan alguna “función” para la totalidad.

El trabajo de campo fue la expresión metodológica de esta forma de ver la cultura.

“Los Argonautas del Pacífico Occidental” (1922)

El etnógrafo debe tener propósitos científicos y conocer la etnografía moderna, vivir entre la gente que estudia y aplicar una serie de métodos de recolección de datos.

Page 10: Trabajo de Campo Etnográfico

•Es decir, su normativa y aspectos de la estructura, se recurría al método de documentación estadística (interrogando sobre genealogías, registrando detalles de la tecnología, dibujando patrón de asentamiento)

Para reconstruir el ESQUELETO

de la sociedad

•Es decir, los imponderables de la vida cotidiana y el comportamiento típico, el investigador debe estar cerca de la gente, observar y registrar al detalle las rutinas

Para recoger lo que constituye la CARNE y la

SANGRE

•Es decir, el punto de vista del nativo, sus formas de pensar y sentir era necesario aprender la lengua y elaborar un corpus o documentos.

Para comprender la MENTALIDAD

NATIVA

Page 11: Trabajo de Campo Etnográfico

Poco después de haberme instalado en Omarakana (islas Trobriand), empecé a tomar parte, de alguna manera, en la vida del poblado, a esperar con impaciencia los acontecimientos importantes, a las festividades, a tomar interés personal por los chismes y por el desenvolvimiento de los pequeños incidentes pueblerinos; cada mañana, al despertar, el día se me presentaba más o menos como para un indígena. Cuando salía de la mosquitera, encontraba a mi alrededor la vida del pueblo que se ponía en marcha, o bien a la gente ya muy avanzada en sus trabajos diarios, según la hora y según fuese la estación en que comenzaban las labores tarde o aquella en que las comenzaban temprano, con arreglo a la prisa que corría al trabajo. En mis paseos matinales por el poblado podía ver detalles íntimos de la vida familiar, del aseo, de la cocina y de las comidas; podía ver los preparativos para el trabajo del día, a la gente emprendiendo sus diligencias, o a grupos de hombres y mujeres ocupados en tareas artesanales. Las peleas, las bromas, las escenas familiares, los sucesos en general triviales y a veces dramáticos, pero siempre significativos, formaban parte de la atmósfera de mi vida diaria tanto como de la suya. Debe tenerse en cuenta que los indígenas, al verme constantemente todos los días, dejaron de interesarse, alarmarse o autocontrolarse por mi presencia, a la vez que yo dejé de ser un elemento disturbador de la vida tribal que me proponía estudiar, la cual se había alterado con mi primera aproximación, como siempre ocurre en las comunidades primitivas cuando llega alguien nuevo. De hecho, como sabían que estaba dispuesto a meter las raíces en todo, incluso allí donde un indígena bien educado no osaría hacerlo, acabaron por considerarme como parte integrante de la vida, una molestia o mal necesario, con el atenuante de las reparticiones de tabaco.

Page 12: Trabajo de Campo Etnográfico

La presencia del investigador en el campo era la única fuente confiable de datos, pues sólo estando allí podía el etnógrafo vincularse con ese pueblo.

Destacó el estudio de la lengua como una de las claves para penetrar en la mentalidad indígena.

Se podía distinguir entre la cultura real y la cultura ideal: entre lo que la gente hace y lo que la gente dice que hace. El campo de acceso sería distinto: la presencia y la observación en un caso y la palabra en el otro.

Hacia fines de los ‘30 el trabajo de campo se había consolidado como una actividad eminentemente individual, realizada en una sola cultura.

Page 13: Trabajo de Campo Etnográfico

TRABAJO DE CAMPO EN LA CIUDAD

Robert Park y Thomas, de la escuela de Chicago, entendieron que se podía aplicar la misma metodología en las ciudades

Grupos caracterizados por la marginalidad económica, política, cultural y jurídica: los “sin techos”, las bandas callejeras, los delincuentes, las prostitutas, los delincuentes, los inmigrantes.

Page 14: Trabajo de Campo Etnográfico

ESTUDIOS DE COMUNIDAD Y CAMPESINADO

El estudio de migrantes rural-urbanos derivó en el estudio de la pobreza urbana.

Page 15: Trabajo de Campo Etnográfico

AÑOS `60

Con los procesos de descolonización, los nuevos gobiernos africanos y asiáticos contaban con sus propios intelectuales.

Se inician procesos de reflexión sobre lo que implica hacer etnografía en la propia sociedad y con esto sobre el lugar y la mirada del etnográfo/a.

La tarea de familiarizarse con lo exótico se revirtió en exotizar lo familiar.

Page 16: Trabajo de Campo Etnográfico

ETNOGRAFÍA

“Es un método de investigación social, aunque sea de un tipo poco común puesto que trabaja con una amplia gama de fuentes de información. El etnógrafo, o la etnógrafa, participa, abiertamente o de manera encubierta, de la vida cotidiana de personas durante un tiempo relativamente extenso, viendo lo que pasa, escuchando lo que se dice, preguntando cosas; o sea, recogiendo todo tipo de datos accesibles para poder arrojar luz sobre los temas que él o ella han elegido estudiar.”

Hammersley y Atkinson. Etnografía. Métodos de Investigación

Page 17: Trabajo de Campo Etnográfico

REFLEXIVIDAD

Reconocer el carácter reflexivo de la investigación social que somos parte del mundo social que estudiamos

Trabajar con el conocimiento que tenemos reconociendo que puede ser erróneo y someterlo a un examen sistemático

Cualquier investigación social que toma la forma de observación participante implica participación en el mundo social, por eso se hace necesario reflexionar sobre esa participación.

Hammersley y Atkinson. Etnografía. Métodos de Investigación

Page 18: Trabajo de Campo Etnográfico

VIAJE DEL/A ANTROPÓLOGO/A Implica que el viajero antropológico tiene que estar

consciente de que su pesquisa consiste no sólo en establecer una relación momentánea entre un investigador y su material de estudio, de construir una relación unilateral sujeto cognoscente-objeto por conocer. Por un lado, el viaje antropológico es como cualquier viaje, experiencia personal y también formas científicas de reunir información, de ponderar sus partes, de reformular las preguntas e hipótesis iniciales, de presentar los resultados de la pesquisa en la que intervienen, como en cualquier viaje, los miedos y las ansias, las simpatías y las antipatías, las predisposiciones afectivas, perceptivas y teóricas del viajero, además de sus experiencias de viaje previas

Krotz, Esteban. Viaje, trabajo de campo y conocimiento antropológico

Page 19: Trabajo de Campo Etnográfico

MÉTODO Y EXPERIENCIA En tanto método científico, mediante el trabajo de

campo se intenta “caracterizar descriptivamente el modo de vista de otros”, plasmándose los resultados en las notas de campo, en grabaciones, fotografías, filmaciones, libros, artículos.

En tanto experiencia, este es una vivencia auto-trans-formadora, un “volver a nacer”, que cambia al etnógrafo internamente. Es un “rito de paso que afirma ceremonialmente su idoneidad como etnógrafo”.

El trabajo de campo en sí involucra, en su núcleo, la observación participante; “sugiere la peculiar combinación de subjetividad y objetividad, aventura y trabajo, romanticismo y pragmatismo”, el compromiso y el distanciamiento, la capacidad de establecer lazos y la de disolverlos, el participar y el observar.

J. L .Peacock: Método

Page 20: Trabajo de Campo Etnográfico

LOS ARGONAUTAS DEL PACÍFICO OCCIDENTALBronislaw Malinowski

Page 21: Trabajo de Campo Etnográfico

Imagínese que de repente está en tierra, rodeado de todos sus pertrechos, solo en una playa tropical cerca de un poblado indígena, mientras ve alejarse hasta desaparecer la lancha que le ha llevado.Desde que uno instala su residencia en un compartimento de la vecindad blanca de comerciantes o misioneros, no hay otra cosa que hacer sino empezar directamente el trabajo de etnógrafo. Imagínese, además, que es usted un principiante, sin experiencia previa, sin nada que le guíe ni nadie para ayudarle. Se da el caso de que el hombre blanco está temporalmente ausente, o bien ocupado, o bien que no desea perder el tiempo en ayudarle. Eso fue exactamente lo que ocurrió en mi iniciación en el trabajo de campo en la Costa Sur de Nueva Guinea. Recuerdo muy bien las largas visitas que rendí a los poblados durante las primeras semanas y el descorazonamiento y la desesperanza que sentía después de haber fallado rotundamente en los muchos intentos, obstinados pero inútiles, de entrar en contacto con los indígenas o de hacerme con algún material. Tuve períodos de tal desaliento que me encerré a leer novelas como un hombre pueda darse a la bebida en el paroxismo de la depresión y el aburrimiento del trópico. (…) Imagínese luego haciendo su primera entrada en una aldea, solo o acompañado de un cicerone blanco. Algunos indígenas se agrupan a su alrededor, sobre todo si huele a tabaco. Otros, los más dignos y de mayor edad, permanecen sentados en sus sitios. Su compañero blanco tiene su propia forma rutinaria de tratar a los indígenas y no entiende nada, ni le importa mucho la manera en que uno, como etnógrafo, se les aproximaría. La primera visita le deja la esperanza de que al volver solo las cosas serán más fáciles. Por lo menos, tales eran mis esperanzas.

Page 22: Trabajo de Campo Etnográfico

Volví a su debido tiempo y pronto reuní una audiencia a mi alrededor. Cruzamos unos cuantos cumplidos en pidgin-English, se ofreció tabaco y tomamos así un primer contacto en una atmósfera de mutua cordialidad. Luego intenté proceder a mis asuntos. En primer lugar, para empezar con temas que no pudieran despertar suspicacias, comencé con la tecnología. Unos cuantos indígenas se pusieron a fabricar diversos objetos. Fue fácil observarlos y conseguí los nombres de las herramientas e incluso algunas expresiones técnicas sobre los distintos procedimientos; pero eso fue todo. Debe tenerse en cuenta que el pidgin‑English es un instrumento muy imperfecto para expresar las ideas y que, antes de adquirir soltura en formular las preguntas y entender las contestaciones, se tiene la desagradable impresión de que nunca se conseguirá completamente la libre comunicación con los indígenas y en un principio yo fui incapaz de entrar en más detalles o en una conversación explícita con ellos. Sabía que el mejor remedio era ir recogiendo datos concretos, y obrando en consecuencia hice un censo del poblado, tomé notas de las genealogías, levanté planos y registré los términos de parentesco. Pero todo esto quedaba como material muerto que no me permitía avanzar en la comprensión de la mentalidad y el verdadero comportamiento del indígena, ya que no conseguí sacarles a mis interlocutores ninguna interpretación sobre esos puntos, ni pude captar lo que llamaríamos el sentido de la vida tribal. Tampoco avancé un paso en el conocimiento de sus ideas religiosas y mágicas, ni en sus creencias sobre la hechicería y los espíritus, a excepción de unos cuantos datos superficiales del folklore, encima mutilados por el uso forzado del pidgin‑English.

Page 23: Trabajo de Campo Etnográfico

LOS NUEREvans-Prichard

Page 24: Trabajo de Campo Etnográfico
Page 25: Trabajo de Campo Etnográfico
Page 26: Trabajo de Campo Etnográfico
Page 27: Trabajo de Campo Etnográfico

TRISTES TRÓPICOSClaude Lévi-Strauss

Page 28: Trabajo de Campo Etnográfico

Odio los viajes y los exploradores. Y he aquí que me dispongo a relatar mis expediciones. Pero, ¡cuánto tiempo para decidirme!... Hace quince años que dejé el Brasil por última vez, y desde entonces muchas veces me propuse comenzar este libro; una especie de vergüenza y aversión siempre me lo impedía. Y bien, ¿hay que narrar minuciosamente tantos detalles insípidos, tantos acontecimientos insignificantes? La aventura no cabe en la profesión del etnógrafo; no es más que una carga; entorpece el trabajo eficaz con el peso de las semanas o de los meses perdidos en el camino; horas ociosas mientras el informante se escabulle; hambre, fatiga y hasta enfermedad; y siempre, esas mil tareas ingratas que van consumiendo los días inútilmente y reducen la peligrosa vida en el corazón de la selva virgen a una imitación del servicio militar... No confiere ningún galardón el que se necesiten tantos esfuerzos y vanos dispendios para alcanzar el objeto de nuestros estudios, sino que ello constituye, más bien, el aspecto negativo de nuestro oficio. Las verdades que tan lejos vamos a buscar sólo tienen valor cuando se las despoja de esta ganga. Ciertamente, se pueden consagrar seis meses de viaje, de privaciones y de insoportable hastío para recoger un mito inédito, una nueva regla de matrimonio, una lista completa de nombres ciánicos, tarea que insumirá solamente algunos días, y, a veces, algunas horas. Pero este desecho de la memoria: «A las 5 y 30 entramos en la rada de Recife mientras gritaban las gaviotas y una flotilla de vendedores de frutas exóticas se apretujaba contra el casco». Un recuerdo tan insignificante, ¿merece ser fijado en el papel?