Toros 2012

30 de abril de 2012

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Nuestra ‘Fiesta’Nuestra ‘Fiesta’

TOROS 2012ESPECIAL

E Comentario aparte merece el festival APADEFIM que su-gerido por aquel peculiar taurino llamado Cesáreo Yagüellevó a cabo Andrés Hernando. Fueron diez y seis los fes-

tejos de esa naturaleza los que cumplieron fielmente con la de-nominación de benéficos por estirpe, dedicación y aportacióneconómica. No vamos a desglosar en este breve espacio cada unade aquellas convocatorias anunciadas a principios de la tempo-rada taurina, pero sí apuntar algunos nombres que prestigiaronel festival y la felicidad que aportaban a los “niños del doble amor”cuando los toreros visitaban el centro de acogida y los internosaclamaban a sus ídolos favoritos. Carteles formados con torerosde la idiosincrasia, la fama y el prestigio de Andrés Hernando,

Curro Romero, Rafael de Paula, El Viti, Paco Camino, GregorioSánchez, Angel Teruel, Curro Vázquez, José María Manzanares,Antoñete, Jaime Ostos, Andrés Vázquez, Diego Puerta, RobertoDomínguez, Paquirri, Paco Alcalde, Enrique Ponce, El Cali, Pa-lomo Linares, Chicuelo.... Diez y seis.

Aquellos festivales gozaban del más alto prestigio y consi-deración de todo el ámbito taurino mundial. El recinto sego-viano acogía excelentes entradas que aportaban dividendos alas arcas de la semivacía economía de la entidad benéfica. Apor-taba dinero y cariño hacia unos seres que sabían apreciar y agra-decer el gesto de los toreros y de quienes colaboraban a la her-mosa obra.

PABLO PASTOR

PPAABBLLOO PPAASSTTOORRPeriodista taurino / Director del suplemento

1166 eemmoottiivvooss yy ggrraannddiioossooss ffeessttiivvaalleess,, eenn ssuu ttiieemmppoo llooss mmááss ssiiggnniiffiiccaattiivvooss ddee EEssppaaññaa

C umplir las bodas de oro en cualquier disciplinade la vida, matrimonio, trabajo, hábitos y cos-tumbres..... es un símbolo de apreciable consi-

deración, siempre y cuando el transurrir de ese tiempomarcado por el reloj de la personal trayectoria de un mor-tal, haya deparado mayores momentos de felicidad quede tragedia o sinsabores. En el caso del torero segovianode La Velilla, Andrés Hernando, han sido, que uno sepa,un vivir en armonía familiar, personal y profesional.

Andrés Hernando ( 26-2-1937), asumió el papelprotagonista de torero comenzando su devenir con du-ras pruebas hasta catapultarse como matador de torosen Segovia el 1 de julio de 1962 y pelear como los másbravos y a veces hasta virtuoso para conseguir el sueñodel éxito permanente, constante y definitivo. Su reti-rada que en su caso fue definitiva aunque después to-reara varios relevantes festivales, fue también en el bi-centenario coso taurino segoviano el 5 de octubre de1974. Doce años vigente y muchos otros más de per-manente evocación y bellas efemérides para contar.

Ahora, dentro de un par de meses el cincuenta ani-versario de aquel doctorado en tauromaquia cuandoVictoriano Valencia en presencia de El Viti intercam-biaba los trastos de torear para investir al neófito de ma-tador de toros. Han pasado 50 años. Pasarán muchosmás y viva la imagen de emotividad de aquella corridade toros segoviana con eun torero segoviano comopunto de mira.

Andrés Hernando está en posesión de numerososreconocimientos taurinos y de otros emblemáticos porsu relevancia, como la cruz de oro de la Beneficencia,pero sobre todo el cariño que le profesó el aficionado pro-pio y ajeno de todas las aficiones europeas y americanas.Andrés se hizo querer, Andrés es querido, admirado,respetado, considerado y recordado.

Los cincuenta años de alternativa tienen el refrendode una conmemoración que aquí en Segovia, sobretodo, se va a celebrar por todo lo alto. Nosotros y demomento a través de este monográfico dedicado a tuquerida persona, proclamamos la sincera felicitacióncon un elocuente y pregonado a la luz de los tiempos¡va por usted, maestro!

Cincuenta años de alternativa:medio siglo de hermosas

experiencias de Andrés Hernando

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El Festival de ApadefimPrimer paseillo como matador de toros. Plaza de Toros de Segovia, 1 de julio de 1962. Su alternativa / EL ADELANTADO

3toros201230 de abril de 2012

La fecha del 23 de junio de 1964 tiene un alto signifi-cado en la proyección del diestro segoviano de La Ve-lilla. Pormenores que se comentan en este especial,

determinaron que Hernando ocupara lugar en tan rele-vante festejo. Las Ventas registró un lleno absoluto con nu-merosos segovianos plenos de ilusión por ver torear y triun-far a su paisano. Presidió el Jefe del Estado, general FrancoFueron toros de Atanasio Fernández y el éxito llegaría conel segundo toro de la tarde, primero del lote de Andrés Her-nando. Lo comentó Antonio Díaz-Cañavate, crítico de ABC.

Hernando empieza su faena de muleta recogiéndolepor bajo. El toreo por bajo apenas lo vemos más que en es-tos momentos iniciales. Prontamente desaparece por elimperio de los dos pases. Y el toreo por bajo, cuando se hacebien, como lo ha hecho Andrés Hernando es tan bello ydifícil como puede serlo un natural o un redondo. Pero, enfin, pedirlo es como pedir peras al olmo. Andrés Hernandolo abandona y se dispone a torear al natural. Todos, abso-lutamente todos los toreros actuales torean o intentan to-rear al natural, a todos, absolutamente a todos, los toros. Yesto es imposible, y por esta imposibilidad, la mayoría delos pases no son naturales. Son o su remedo, o su carica-tura. Verdaderos pases naturales, vemos poquísimos.

Hoy hemos visto los suficientes en la faena de AndrésHernando. Y como el pase, el auténtico pase natural es deuna belleza total y esta belleza engendra una fuerza, la

La famosa corrida de beneficenciade Las Ventas con un Andrés

Hernando triunfador PABLO PASTOR

24 de mayo de1967. Corridade labeneficienciade Madrid.Hernando y ElCordobes enhombros tras eléxito obtenido/ PABLO PASTOR

fuerza del arte, y esta fuerza tira del entusiasmo del público.Tira. Tiene tirón. Sobrecoge, exalta, alegra los ánimos. Laplaza entera aclama al torero de Segovia. Arcos del prodi-gioso acueducto de su tierra, fueron sus pases naturales,que no prodigó por fortuna. Pases naturales sin la trampadel medio pase ni el cartón del falso oropel. Pases natura-les, en los que el toro iba toreado con la naturalidad, el tem-

ple, el dominio, la suavidad y el valor necesarios, para quesean completos, cabales, no caricatura ni remedo. A la fa-ena le sobró un pase circular comenzado de espaldas. Fuecomo una nube que oculta al sol. Andrés Hernando entraa matar con agallas y mata de una estocada. El tirón de lafuerza del arte puro de torear se ha impuesto. Se le otor-gan las dos orejas por unanimidad.

Fue el 23 de junio de 1964 alternando con ‘El Cordobés’ y ‘Gabino Aguilar’

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Andrés Hernando vistió el traje de lucespor última vez en la plaza de toros de Se-govia el domingo 6 de octubre de 1974,

Día de la Provincia, recinto taurino testigo de sualternativa doce años antes. Se lidiaron toros deRamón Matías con El Viti de padrino y RobertoDomínguez como testigo. El Viti cortó una orejade su primero siendo aplaudido en el otro, y Ro-berto Dominguez oreja y vuelta al ruedo en lossuyos.

Andrés Hernando, aguantando la descom-puesta embestida de su primero, hizo faena sobrela mano derecha. Se mostró valiente y mató de unaestocada. Hubo petición de oreja y vuelta al ruedo.Al quinto de la tarde, el de su despedida como ma-tador de toros, negro bragado de nombre ‘Invitado’de 440 kilos de peso, le dio magníficos lances a laverónica. Brindó al público y a su mujer, siendomuy ovacionado. Gran faena sobre ambas manos,mostrándose con grandes facultades físicas. Esto-cada entera para dos orejas.

Una vez finalizado el festejo, Andrés Her-nando compareció en el centro del ruedo, dondesu padre y su hijo Andrés procedieron al ritualde cortarle la coleta, en medio de una gran ova-ción. Antes de retirarse de la plaza, el diestro re-cibió obsequios para él y su hijo entregados porun grupo de niños de la Asociación de Subnor-males.

Despedida de Andrés Hernandocomo matador de toros

PABLO PASTOR

5 de octubre de 1974. Plaza de Toros de Segovia. Andrés Hernando se corta su coleta. Su padre y su hijo Andrés ‘autores’ del hecho. / P.P

Fue en Segovia el 6 de octubre de 1974, ‘Día de la Provincia’

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Una vez retirado de los ruedos como mata-dor de toros, ya que durante años despuésvestía de corto para torear festivales, espe-

cialmente los de Morata de Tajuña y APADEFIMde Segovia, alma mater de este festejo que durantediez y seis años gozó de tremendo impulso y po-pularidad. Esposo de Sonsoles Aboín, hija de ga-nadero de bravo, se interesó por esta faceta de lafiesta de toros y pronto comenzó a captar el am-biente y naturaleza de lo que era y representaba eltoro de lidia y sus connotaciones. Junto a la familiaAboín, formó una ganadería denominada ‘Sonso-les Aboín de Hernando’. Poco después, creó otrohierro con productos de la primera ganadería condenominación ‘Hermanos Hernando Aboín’ y des-pués el correspondiente a ‘Peñatella’ con reses pro-cedentes de Hermanos Martín Berrocal, puroNuñez Rincón y punta de vacas y semental Salva-dor Domecq.

Fue lidiando novilladas y becerradas y años mástarde, novilladas picadas y un debú con cuatreñosen corrida de toros celebrada en Valsaín en 2008con esta terna: Lima de Estepona, López Díaz y Ga-briel Picazo. Un éxito artístico y ganadero. Se man-tiene una bonita tradición que data de muchos añosatrás, la referida a los añojos que se lidian en la po-pular becerrada de la Asociación de Camareros deSegovia y Provincia, de uno de los hierros ganade-ros de Hernando.

En la actualidad, aunque bajó el número de re-ses debido a las circunstancias por la que atraviesala cabaña española, cuenta con ciento ochenta va-cas de vientre, seis sementales y cincuenta ejem-plares entre utreros, erales y añojos. La amplitud de‘Peñatella’ con buenos pastos y abundante caudalfluvial, permiten una sana crianza de reses bravasque Andrés Hernando y sus vaqueros mantienencon atenta dedicación y mucha ilusión en su futuro.

Andrés Hernando, ganadero de bravo PABLO PASTOR

Andrés Hernando en la actualidad en su finca ‘Peñatella’. Ante la cámara de utreros y un grupo de vacas y sementales. / PABLO PASTOR


Los lidiadores que nacen lejos de las cunas delarte de torear y sus áreas de influencia tienenun mérito añadido con respecto a los que na-

cen en un ambiente más favorable o más cercanoa toros, toreros y toreos.

Mérito añadido porque es algo así como la teoríay la práctica. Es como iniciarse en el colegio a los10 o a los 6 años. Sin duda, en igualdad de ilusio-nes y condiciones en niños y jóvenes que intentanser toreros, hay más posibilidades de interpretarlos primeros lances a una becerra en Cádiz o Sevi-lla que en Cantabria o Soria.

Las lógicas en acontecimientos, realidades o es-tadísticas son como son, aunque haya excepcionespara todos los gustos y disgustos.

Sí, tienen mucho mérito, y tengo mucho respetoa los lidiadores que sin antecedentes o sin raíces -o casi- han llegado y se han mantenido suficientestemporadas en ferias y carteles de tronío. Como elsegoviano Andrés Hernando, por ejemplo.

Nuestro común amigo Pablo Pastor, me pideuna colaboración para su extraordinario taurinoanual del diario El Adelantado. Este año 2.012 lodedica al 50 aniversario de la alternativa de Andrés.Merecida dedicatoria.

Merecida porque sus comienzos fueron largosy difíciles. Merecida porque tuvo demasiadas vici-situdes y cogidas. Merecida porque se mantuvoocho temporadas en la parte media o media alta delescalafón superior alternando con las figuras de suépoca en las plazas y ferias más relevantes del ca-lendario taurino.

Figuras de esa o de cualquier otra época porqueestaban en la cima los Puerta, Camino, El Viti, ElCordobés, o toreros anteriores como Antonio Bien-venida y posteriores como Palomo Linares.

Sí, tiene mucho mérito ocupar un espacio muydigno en la prodigiosa década de los sesenta.Andrés Hernando lo consiguió a base de afición,constancia y pundonor.

Su vocación es imperecedera e integral. Enefecto, además de torero que llegó a salir tres vecespor la Puerta Grande de Las Ventas, desempeña conacierto y criterio facetas como la de ganadero, em-presario o mentor. Y ejerciendo siempre con latemplanza castellana. Es curiosa y especial la apor-tación de Segovia al historial torerista.

Por un lado destaca la apasionada inventiva deVictoriano de La Serna. Torero de estilo majestuosoy genuino, con pellizcos agitanados en el duende ymisterio que cierra y encierra el arte de torear comoprincipal fuente sentimental de inspiración paraexquisitos artistas y creadores de pinturas, escul-turas, músicas o letras.

Por otro lado el arrojo y la voluntad de AndrésHernando. Torero con hechuras para una concep-ción del toreo clásico y épico. Y ejemplar para quie-nes sigan sus pasos desde el origen a sus logros.

ÁNGEL ARRANZEEssccrriittoorr

Camino, Hernando y El Cordobés. 1965 inauguración de la Plaza de Toros de Brihuega. / EL ADELANTADO

Esta crónica también quiere ser un homenaje a los necesariostoreros de su corte, sitio y capacidad. Andrés es un torero condetalles preciosistas a pies juntos manejando capotes y mule-tas. Los estoques le privaron de más cotización y más salidasa hombros.

De todas las maneras, son los dos toreros castellanos, o paraser exactos, dos de los pocos toreros castellanos con remi-niscencias sureñas. La Serna parece tener conexión con la ca-dencia de la Bahía de Cádiz. Hernando con el aire sevillano.Espero y deseo que el novel Víctor Barrio sea el tercer torerosegoviano que forma parte de una utópica terna con cate-goría para triunfar en los más exigentes cosos del planeta delos toros.

Termino con una anécdota -tengo bastantes- en la plaza detoros de Burgo de Osma-Ciudad de Osma, mi lugar de naci-miento. Andrés estuvo muchos años organizando la feria; ycon él o sin él, hicieron el paseíllo torerazos de los sesenta ysetenta. El último día se celebra una becerrada para los mo-zos -y de vez en cuando mozas- del pueblo. No recuerdo conexactitud la temporada; el caso es que Enrique Martín Arranz-no, no somos familia- había toreado la novillada del día an-terior y se quedó para hacer de director de lidia en la bece-rrada. Yo, en el callejón, ya me había olvidado de mi mo-destísimo paso por los ruedos. Dos de los becerros salieron

ideales apara dibujar el toreo. Cojo un capote, Enrique memira como a un intruso, me voy a los medios, me siento agusto en un quite por chicuelinas. Enrique cambia el gesto.En el otro becerro más apropiado, mi quite es por verónicas.En el burladero me dice Andrés: no sabía que tenías esas ma-neras, si quieres te doy varias novilladas y el año próximo laalternativa.

Pero yo ya tenía un buen trabajo, veintiséis o veintisieteprimaveras y novia formal, como se decía entonces. Le di lasgracias, no tomé en consideración la propuesta. Por la nochefuimos a tomar embutidos caseros a la bodeguita de un pa-riente mío. Y lo que sigue es lo más importante: Andrés, En-rique y yo mismo, hablamos de lo dificilísimo que era ser to-rero. Había que hacer algo. Aquellas fueron las primerasconversaciones sobre la necesidad de rehacer escuelas tauri-nas, de hacer una cooperativa para ajustar precios de trajes,utensilios, etc.

Unos años después, parte de los hipotéticos y pionerosproyectos de aquella merienda se fueron realizando con la co-laboración más o menos intensa de los tres anecdóticos pro-tagonistas.

En fin, Andrés Hernando es un hombre de bien y un tau-rino polifacético con méritos y recorridos añadidos para te-nerlos en cuenta. Un abrazo a ti y a tu gente. Enhorabuena.

toros2012

Andrés Hernando: el mérito añadido


Corría el año 1957, ya ha llovido, y un segoviano de la Velillade Pedraja que tenia ilusión por ser alguien en el mundo deltoro, se presenta acompañado por su banderillero Manolo

Serrano, a la finca del abulense Sanchez Monge, que por aquel en-tonces tenia ganadería de bravo, en una finca próxima a Ávila.

Y en esa misma primavera le presenta Manolo a D. EnriqueAboin, otro ganadero abulense vecino del anterior, donde tienta ensu finca de Fresneda, finca de bravo sita a cinco km. de la capitalabulense, y quien se lo iba a decir a él, que en ese momento se con-vertiría en un futuro muy cercano en un abulense más.

Ya por aquel entonces yo, que era un chavalin frecuentaba conmi padre aquella finca de muy buenos recuerdos donde D. Enriqueme decía que yo iba a ser torero, y recuerdo que por la festividad deReyes me echaban juguetes en su casa, en lo que es hoy el Hotel Pa-lacio Los Velada de Ávila.

En ese momento, Andrés era apoderado por Alfonso de la Torre,el cual invitó a Juanito Martinez para preparar su debut con caba-llos en Vista Alegre, y cuando este le vio en el campo, dijo "este em-pieza por donde otros terminan", por lo preparado que veía a Andréspor esas fechas.

Torea 10 tardes en Vista Alegre, siendo apoderado por DomingoDominguin.

Continuaría viniendo a tentar a Fresneda, en casa de D. En-rique que tenía de lo de Bernaldo de Quirós, habiéndose fijado yaen su hija Sonsoles, con la que acabaria casándose.

En aquella casa también coincidiría con Enrique Martin Arranz,al que conoció cuando éste iba de maletilla a la finca de SanchezMonge, terminando el mencionado y famoso Martin Arranz, quese anunciaba como "El Pasmo" en los festivales que toreaba, tra-bajando en casa de D. Enrique Aboin varios años.

Al final de aquellos tentaderos, lo que es la vida, conver-tiría a aquel segoviano que llego con pretensiones de ser figura deltoreo, en un abulense de adopción.

Tomó la alternativa en su Segovia el 1 de julio de 1962, conVictoriano Valencia y El Viti con toros de Manuel Arranz y de Cha-rro. Cortando tres orejas y saliendo a hombros, alcanzando su ma-yor éxito en la Beneficencia del 64 en Las Ventas, alternando conel fenómeno de la época, Manuel Benitez el Cordobés.

Ese aldabonazo le hace torear por encima de cuarenta tar-des los siguientes años, con grandes éxitos y fuertes cornadas de to-ros de Miura, Guardiola, German Gervas, Montalvo, Perez Angoso,Abdón Alonso y algún otro.

Confirma en Méjico en l.967, año en el que debuta en Ávilaen el coso de la carretera de Sonsoles en la corrida de inauguracióndel mismo con Victoriano Valencia y Manuel Benitez El Cordobes,cortando cuatro orejas y saliendo a hombros.

En el 68 torea ocho tardes en Barcelona donde tuvo un grancartel e indulto a Potrico de Pablo Romero, cortándose la coleta enel 74 en Segovia, cortando dos orejas a su último toro de RamosMatías con El Viti y Roberto Domínguez.

Tras casarse con Sonsoles Aboin, que estudiaba en Valla-dolid, hija de D. Enrique "un señor" y Dª Anita "una santa", comomuy bien los calificó siempre Andres a sus suegros ya fallecidos,extremo éste que yo ratifico, se afinca en nuestra ciudad.

En principio compra ganado a Ocejo Infante y lo lleva a Fres-neda, y en el 77 compra su finca de Peñatella en el término de Mar-

Andrés Hernando, abulensede adopción

Una tarde triunfal en 1965. Año de grandes éxitos / EL ADELANTADO

JUAN CARLOS NAVAS GÓMEZPPrreessiiddeennttee ddee PPllaazzaa ddee TToorrooss ddee ÁÁvviillaa yyVVooccaall ddee CCoommiissiióónn RReeggiioonnaall TTaauurriinnaa CCyyLL

lin, muy próxima a nuestra ciudad, y adquiere ganado de su primo Jose Luis Martin Berrocal, de la Dcoronada de Nuñez Hermanos, manteniendo este encaste en la actualidad.

Este año se celebra el 50 aniversario de su alternativa en Segovia, y desde estas líneas decir que An-dres fue un muy buen torero que manejo el capote de maravilla y que se embraguetó con muchos to-ros en una época muy difícil donde había una pléyade de figuras como El Viti, Camino, Ordóñez, Puerta,o El Cordobés y otros muchos que hacían muy difícil ponerse en lo más alto del escalafón, pero queél a base de tesón logro codearse con esos monstruos, algo que en un segoviano-abulense, del que enSevilla decían que toreaba como si fuese de Despeñaperros para abajo por el gracejo que tenia ma-nejando los engaños, que mas que un castellano parecía sevillano, hizo posible por el valor y el buentoreo que desarrolló.

En la actualidad vive feliz en su Ávila de adopción, teniendo 3 hijos y 6 nietos, rodeado de amigosy de su ganado, y es feliz haciendo lo que siempre le gustó.

TODA UNA GRAN Y ENTRAÑABLE PERSONA. Quien se lo iba a decir un día cuando llegó acci-dentalmente a la finca de Fresneda, aquí muy cerquita de la capital y conoció a Sonsoles.


En la edición monográfica de El Adelantado quese dedica a Andrés Hernando, con motivo deconmemorar este año el cincuenta aniversario

de su alternativa, no podía faltar una referencia a la de-cisiva participación del diestro Segoviano en el Festi-val de Apadefim. Fue su impulsor, en 1973, junto conotras personas del mundo taurino, y la iniciativa delos componentes de la Junta Directiva de la Asocia-ción.La significación actual de Apadefim, asociaciónpionera en el mundo de la discapacidad en Segovia eintegrada hoy en la Fundación personas, que es la ma-yor institución regional prestadora de servicios para laDiscapacidad Intelectual en todos los ámbitos y eda-des, no puede entenderse sin la permanente colabo-ración que se recibe de instituciones y personas quie-nes, con sus distintas posibilidades, han dado lo mejorde su generosidad para el desarrollo e impulso de laAsociación.

Sin duda, una de las personas que está siemprepresente en esta historia de Apadefim, iniciada porun grupo de padres y amigos hace casi cincuentaaños, es Andrés Hernando. Su iniciativa, impulso yapoyo, ha permitido celebrar XVI ediciones del Fes-tival Taurino, destacando, ante todo, que gracias a suprofesionalidad, conocimiento del mundo del toreo,sus relaciones y su generosidad, se mantuvo comoun festival de primer nivel en el mundo taurino Se-goviano y de los más significativos en el calendariotaurino español.

Andrés no escatimó esfuerzos y dedicación, lo queunido a sus relaciones personales y amistades conse-guidas en su larga y exitosa trayectoria como matadorde toros, le permitió conformar unos carteles del pri-mer nivel, que proporcionaban una verdadero atrac-tivo para todos los aficionados Segovianos, a veces, tanfaltos de espectáculos como estos donde poder satis-facer sus gustos.

La primera edición del festival fue durante 1973,continuando anualmente hasta 1987, y, finalmente,con la última celebración, en 1989. La complejidadpara organizar estos festivales implicaba correr ries-gos ‘empresariales’ de gran importancia, que, graciasa iniciativas como las de Andrés Hernando, pudieronsolventarse; él mismo, conocedor de estas dificulta-des, se ofreció en la primera edición para cubrir las ca-rencias y eventualidades que surgieran, comprome-tiéndose a que si el festival resultaba deficitario lasconsecuencias las pagaría de su bolsillo.

El primer festival celebrado en 1973, contó con uncartel de primerísimo nivel, formado por: GregorioSánchez, Jaime Ostos, Curro Vázquez, Andrés Váz-

ANTONIO TAPIAS DOMÍNGUEZ

PPrreessiiddeennttee ddee AAppaaddeeffiimm

Andrés Hernando toreó el festival Apadefim en 1975 / EL ADELANTADO

toros2012

Andrés Hernando y el festival de Apadefim

quez y Andrés Hernando. En los años sucesivos participaronlas primeras figuras del toreo, entre otros: Diego Puerta, el Viti,Curro Vázquez, Roberto Domínguez, Paco Alcalde, Parrita,José María Manzanares, ‘Paquirri’, Curro Romero, ‘El Cali’,Paco Camino, Ángel Teruel, Palomo Linares, Antoñete, Fer-nando Lozano, Rafael de Paula, Julio Robles, Manuel Vidrié,Yiyo, Joao Moura, José Luis Palomar….y un largo etc. La parti-cipación popular, la presencia de personas con discapacidad in-telectual en el coso, auténticos aficionados a los toros, y la so-ciedad en general, hicieron de estos festivales auténticoseventos en la vida social de Segovia, que estará siempre pre-sente en nuestra memoria. Las exigencias administrativas y lafalta de seguridad, entonces, del viejo coso segoviano obligó aque el Festival de 1987 se celebrará en una plaza de toros portá-til, que se instaló en Nueva Segovia; eso si, después de haberobtenido el oportuno permiso, con certificación de arquitectosuperior sobre seguridad, póliza de seguros para los especta-dores y documentos acreditativos de asistencia sanitaria y li-cencia gubernativa.

Aquellas obligaciones complicaban mucho las cosas a quie-nes colaboraban en la celebración, poniendo mucho entusiasmopero que no pudo superar las cortapisas existentes, impidiendosu celebración en 1988. Se hizo una última edición en 1989, conmucho éxito; ese año se unió a los dos aplazamientos, por las in-clemencias meteorológicas, la desaparición en el programa defiestas de la tradicional corrida del día de San Pedro; celebrán-dose ese día, 29 de junio, el Festival con respuesta masiva del pú-

blico, agotándose las tres mil entradas que se pusieron a la venta.Aquella fue la XVI edición y última del Festival Taurino, que

gozó de gran prestigio, y a cuya brillantez contribuyeron 52 ar-tistas - toreros, novilleros y rejoneadores - y al que daban am-biente y color la banda de música de Coca, las mulillas de Cabe-zuela y las jóvenes amazonas segovianas que hacían el despejede plaza. Todos los participes rivalizaron en generosidad: Losdiestros, que solo recibían un recuerdo; los ganaderos, quevendían los toros a precios de verdadera amistad; y el público,que siguió con fidelidad y entusiasmo el Festival año tras año.

Apadefim, con toda su dimensión en el mundo de la Dis-capacidad Intelectual, ha participado y estado presente en to-dos los hitos y eventos que se han producido en Segovia desdesu creación, como parte integrante de su sociedad. En este con-texto, y dentro del anecdotario, la última edición del Festival Tau-rino fue coetánea del nacimiento de la Televisión Segovia (‘te-lesegovia’) y el día de su primera emisión, como impulso delfestival que se celebraría seis días después, Pablo Pastor rea-lizó su primera entrevista en la ‘tele local’ al matador de torosAndrés Hernando, precisamente con motivo del festival tau-rino de Apadefim. Esta generosidad y cariño que siempre nosdemostró, hace que sintamos un absoluto agradecimiento yque Apadefim / personas quiera hoy, más que nunca, testi-moniarle a él y a su familia, nuestro agradecimiento por cuantocontribuyó al desarrollo y consolidación de la Asociación, me-diante su mejor generosidad y profesionalidad en un mundoen el que era, y es, un auténtico maestro.


Dentro de su exitosa carrera taurina, la relación del matador de torossegoviano Andrés Hernando con la plaza de toros de Valencia tuvouna doble vertiente. De un lado, en su faceta de novillero y matador

de toros. Y, ya años más tarde, en su condición de empresario de la plaza. Fueésta una gestión de tres intensos años que acabó resultando tan complicadacomo laboriosa y polémica. Con todo, a lo largo de todo este lapso de tiempoAndrés dejó el sello de persona cabal e íntegra, ganándose el respeto de losaficionados por su seriedad y hombría de bien, a pesar de todos los impon-derables y, problemas e incidencias que tuvo que lidiar, valga la expresión.

Empezando por su faceta como torero, su debut como novillero en Va-lencia tuvo lugar la tarde del 16 de agosto de 1959. En aquella ocasión se li-dió un encierro de Fermín Bohórquez y Andrés compartió cartel con los es-padas valencianos Antonio Rúa y Miguel Lloret Miguelillo. Ambos resultaronheridos, por lo que el segoviano tuvo que acabar con el encierro en solitario,lo que hizo con oficio y solvencia. Fruto de esta actuación, fue repetido el do-mingo siguiente. En esta ocasión los utreros lidiados lucieron la divisa de Es-cudero Muriel. Y en esta ocasión le acompañaron en el paseíllo Andrés Co-loma Clásico, hijo del matador de toros alcoyano del mismo nombre y apodoy el coletudo de la localidad de Oliva Paco Pastor. Como incidencia desta-cada del festejo, durante la lidia del 5° de la tarde el estoque que manejabaClásico saltó al tendido e hirió levemente a un espectador. Ya seis años mástarde, se produjo el debut de Andrés Hernando como matador de toros enel centenario coso valenciano. El hecho tuvo lugar en la feria de Julio de laciudad del Turia, ciclo del que salió como triunfador, ya que en sus dos com-parecencias acabó saliendo a hombros por la puerta grande.

DOBLE PUERTA GRANDE La primera de ellas tuvo lugar el día de Santiago,25 de julio, fiesta grande en la ciudad. De chiqueros saltaron al albero valen-ciano ejemplares de Fermín Bohórquez. Abrió plaza el rejoneador ÁlvaroDomecq, quien fue ovacionado. Luego la tema de a pie estuvo compuestani más ni menos que por César Girón, Curro Romero. Sus compañeros sefueron de vacío pero Hernando se entretuvo en cortar tres orejas tras unaactuación plena de entrega y poder, que acabó por entusiasmar a los aficio-nados valencianos. Seis días más tarde se cerraba la feria con la lidia de latradicional corrida del hierro de Eduardo Miura, hierro elegido desde an-taño para poner punto y final a los festejos feriales. En esta ocasión, el terce-to de actuantes estuvo integrado por Curro Girón, hermano de César, el bra-vo aragonés Fermín Murillo y Andrés Hernando. Cada uno de ellos cortó lasdos orejas y el rabo de uno de los ejemplares que les cupieron en suerte, sa-liendo al final de la corrida en volandas por la puerta grande. El coletudo se-goviano asustó a los espectadores por su entrega y valor. Pisó terrenos inve-rosímiles y se arrimó de una manera espeluznante, dejando que los pitonesde sus oponentes le rozasen la taleguilla en dos desplantes espeluznantesque fueron inmortalizados por las cámaras de los fotógrafos de la época.

A pesar de estos dos resonantes éxitos, Andrés tuvo que esperar dosaños para verse anunciado de nuevo en el coso valenciano. Y es que no vol-vieron a colgarle en los carteles hasta la tarde del 23 de julio de 1967. En estaocasión, de nuevo se enfrentó a toros del ganadero Fermín Bohórquez. Elmismo ganadero rejoneó un ejemplar del hierro de su propiedad, y en lamal llamada lidia ordinaria tomaron parte junto al segoviano el linarenseJosé Fuentes, quien cortó una oreja y José Manuel Inchausti Tinín. Hernan-do encabezó la terna y se llevó una oreja en el esportón tras mostrarse tanserio como profesional.

Su triunfo le abrió las puertas a la feria de julio el año siguiente. Un cicloque se alargó hasta el domingo 4 de agosto, fecha en la que de nuevo se en-frentó al tradicional encierro de Eduardo Miura, con el que se clausuraba elabono. Abrió plaza el rejoneador Fermín Bohórquez quien lidió a caballo uncuatreño de su propio hierro y a pie el cartel estuvo completado por el ma-drileño Dámaso Gómez y Agapito García Serranito, a quien más tarde unafortísima voltereta sufrida en la plaza de toros de Benidorm dejó inválidopara la profesión. Y de nuevo anunciaron a Andrés Hernando para enfren-tarse a los legendarios toros de Eduardo Miura en la feria de julio de 1969.En esta ocasión, el espectáculo principió con la actuación del rejoneadorportugués José Samuel Lupi. Luego intervinieron en la lidia el sevillano Jai-me Ostos, quien fue premiado con una oreja y el salmantino SebastiánMartín Chanito. Andrés también se llevó una oreja en el esportón, triunfan-do a base de profesionalidad, coraje y valor. Supo en todo momento buscarlas vueltas y resolver las complicaciones que le presentaron sus oponentes.

Y dos años más tarde el torero segoviano hizo su último paseíllo en elcoso valenciano. En esta ocasión el día de la Virgen, 15 de agosto de 1971.Los toros elegidos fueron del hierro luso de Branco Nuncio y Andrés enca-bezó una terna que completaron el torero de Consuegra Vicente Punzón,quien fue premiado con una oreja, y Juan Carlos Beca Belmonte.

AL FRENTE DE LA PLAZA Diecisiete años después de su último paseíllocomo matador de toros en Valencia, Andrés volvió a esta ciudad, en estecaso en calidad de empresario de la plaza. Lo hizo formando equipo de laempresa Valencia Taurina SA, en calidad de consejero delegado. Una socie-dad de la que formaba parte junto con José Manuel de Luz, hijo del quefuera durante muchos años cirujano jefe de la enfermería del coso valen-ciano, Felipe de Luz, y del propietario de la cuadra de caballos de la plaza,el que fuera novillero Paco Peris. La nueva empresa se hizo cargo de la pla-za a mitad de la temporada 1988, concretamente en el mes de junio, unavez concluida la etapa de autogestión. Concursó frente a otra propuesta de

Andrés Hernando en ValenciaENRIQUE AMAT CCoommeennttaarriissttaa yy eessccrriittoorr ttaauurriinnoo

Hernando abrió la puerta grande en Valencia el día de Santiago de 1959. /EL ADELANTADO

un grupo encabezado por Victorino Martín. Ganó conun pliego en el que ofrecían tres años y medio de con-trato, y con un canon de 52 millones de las antiguas pe-setas. Al tomar posesión de la plaza, Andrés declaró:"Vamos a devolver al coso valenciano su condición deplaza de temporada". Su primera labor fue organizar laferia de julio. Un ciclo al que acudió mucho público yen el que se presentó como novillero en Valencia Enri-que Ponce, en la que fue la temporada de Manili. Aque-lla temporada organizó, novilladas sin picadores, de-sencajonadas y cómico taurino aparte, un total de sietecorridas de toros, ocho novilladas y dos festejos de re-jones. Valencia Taurina completó también la tempora-da 1989. Un año en el que la lluvia perjudicó y muchola feria de Fallas. Tanto es así, que por primera vez enmuchos años se suspendieron los festejos programa-dos para los días 18 y 19 de marzo en sesiones de maña-na y tarde. De aquella feria sobresalió un gran encierrode Victorino Martín y la originalidad del planteamientode una corrida mixta con Curro Romero, Rafael de Pau-la y el novillero Julio Aparicio. A causa de la lluvia y lassuspensiones y la lluvia la feria arrojó unas cuantiosaspérdidas económicas. Y de la feria de Julio en la ciudadlos aficionados todavía se acuerdan por la extraordina-ria presentación como novillero de Finito de Córdobaante un encierro de Galache, así como la vuelta a Va-lencia de una divisa legendaria como Pablo Romero. Latemporada consistió en doce corridas de toros, dosmixtas, doce novilladas picadas y un festejo de rejones.Valencia Taurina siguió al frente del coso valenciano enel año 1990, pero en esta ocasión con nuevos socios, yaque a Andrés Hernando le acompañaron en su gestiónLuis Álvarez y Alfonso Domínguez. Esta fue una tem-

porada polémica en los despachos pero triunfal en loartístico. Las fallas ofrecieron unos carteles de lujo, y elpresupuesto del ciclo se situó en los 170 millones depesetas, lo que revela que Andrés no escatimaba es-fuerzos para dar al coso valenciano todo su esplendor.Fue la de la alternativa de Enrique Ponce, hecho quetuvo lugar el día 16 de marzo. Una temporada en la queel día de 18 de marzo Roberto Domínguez inmortalizóun toro de Aldeanueva alternando con Espartaco y Li-tri. Luego, en la feria de Julio, sobresalió la corrida deldía 28. Esa tarde Enrique Ponce, ante la caída del cartelde Roberto Domínguez y El Soro, tuvo que enfrentarseen solitario a un encierro de Galache remendado contres ejemplares de El Toril. Y es que en la desencajona-da previa de las corridas dos astados de Galache se ma-taron en el ruedo al salir de los cajones, por lo que lacorrida hubo de ser remendada. En tarde lluviosa, eltorero de Chiva resolvió el compromiso con holgura ysu carrera salió catapultada. El año acabó con un ba-lance de catorce corridas de toros, una mixta, trece no-villadas picadas y dos corridas de rejones. La gestión deAndrés en Valencia continuó en la feria de Fallas de1991, y siguió hasta el mes de junio. Luego, en vísperasya de la feria de Julio, se vio obligado a abandonar laplaza por problemas de todo tipo, en los que él tuvomuy poco que ver. Sus socios abandonaron el barco yAndrés, a pesar de su disposición de tirar para adelan-te, tuvo que desistir. Pero siempre dio la cara, afrontólos problemas por derecho y gallardía y, a pesar de tododejó un gran cartel entre los aficionados valencianos,quienes le recuerdan con cariño y afecto. Hasta el mo-mento esa temporada había organizado ocho corridasde toros, siete novilladas y un festejo de rejones.

Triunfó como torero y estuvo tres años al frente de la misma como empresario


‘‘SSEENNSSAACCIIOONNAALL ÉÉXXIITTOO DDEE AANNDDRREESS HHEERRNNAANNDDOOQQUUEE EENN SSUU AALLTTEERRNNAATTIIVVAA,, CCOORRTTOO TTRREESS OORREEJJAASS YYRRAABBOO’’..

Andrés Hernando. De rosa y oro. Hay en su cara unasonriente satisfacción que se acentúa con los fuer-tes aplausos con que le reciben sus paisanos. Todo

llega. Su primer toro en de Arranz y atendía por el nom-bre de ‘Generoso’. De salida Andrés le fija en unos lancesy enseguida en tablas le torea a la verónica de forma mo-numental. Primera ovación grande que se repite en el pri-mer quite.

Se ovaciona el acto del doctorado. Victoriano Valenciale cede los trastos con solemnidad. Abrazos efusivos y en-horabuena de El Viti, compañero testigo. Brinda al públicoal que él quiere de corazón, y agradece todas sus exigen-cias. Unos extraordinarios doblones preparatorios acredi-tan a este torero ya hecho.

Y la tela escarlata a la izquierda que en estos meneste-res es la de la verdad: Buenos naturales aguantando bienel paro, y el de pecho sacando con gallardía la muleta porlos cuartos traseros.

Consigue con la derecha extraordinarios redondos enlos que el bicho va pegado a la muleta. Ovación. Nueva se-rie de naturales de clase. Redondos y de pecho. Molinete dela casa. Adornos toreros. Alegría, dominio de la profesión ydesplantes que se ovacionan. En la primera igualada una casientera muy bien puesta. Descabella, hay petición unánimede oreja que se concede y vuelta triunfal que ha de repetirante el entusiasmo del cónclave.

En la arena el sexto, ‘Escopetero’, de Charro de Murga.Se le vio clase desde que salió. Hay el elemento toro bravoque necesita el torero. El toro del escándalo. Anotamoscuatro verónicas inmensas. Temple, mando y ajuste fue-ron sus tres componentes. Vuelve a repetir la faena en elprimer quite y las ovaciones atruenan. ¡Aquí hay torero!

I de Julio de 1962, la alternativaPABLO PASTOR

Casta y torería aportó la figura torera de Andrés Hernando / EL ADELANTADO

Transcribimos la excelente crónica del por entonces crítico taurino de este diario Ángel Fernández Pacheco

toros2012

gritan a nuestro lado alguien que no había lo que era el jamónserrano.

Brinda a su padre. En los medios, principios de faenainmensa. Dobla al bicho, que se come la muleta de formaextraordinaria. Todo un curso de toreo preparatorio quese ovaciona y olea fuerte. Pausa. Derechazos de escán-dalo y el de pecho. Con la izquierda naturales de maravi-lla tirando del toro majestuosamente y rematando con elde pecho. La faena toda es un dechado de aciertos que se

aclaman constantemente. Las series de naturales, re-dondos, adornos y molinetes la dan categoría de inmensay las ovaciones no cesan. Media en lo alto y descabello apulso a la primera sueltan las válvulas del entusiasmo ge-neral y total flameo de pañuelos que piden las orejas delbravo toro. La presidencia desde un principio las conce-dió, el público pidió el rabo y con los tres trofeos en lasmanos dio la vuelta en hombros y así le llevaron triun-falmente por la puerta grande hasta el hotel.


El ser humano arracima su vida en torno al signifi-cado de pocas palabras. La vida entera de un torero-con claros espacios de triunfo siendo joven aún-

se puede mirar desde muchas alturas o desde muchassimas, unas veces desde el triunfo -la gloria, decimos-pero también desde el sufrimiento y el dolor. Por todoeso luchan los hombres que dedican, a este arriesgadoarte, un tiempo de sus vidas, no muy extenso por las exi-gencias de la profesión, desde el punto de vista físico eincluso desde el anímico , que les señala marcadamente.

Andrés Hernando, a quien traté con amistad cercanay sincera durante sus años de torero activo, pasó por esasescalas que van del triunfo al sufrimiento, porque notodo es oropel y ovaciones, sino tiempos de esplendor yde sufrimiento concatenados con naturalidad y vividoscon mucho sosiego y recia autenticidad. La resignaciónpara un torero luchador es otra cosa. Y Andrés Hernandoha sido un luchador desde la cuna y lo será hasta el fi-nal. Optimista ante la vida y enterizo ante ella según sepresentaba: en unos momentos sonriente, en otros dedolor y apartamiento.

Tuve la fortuna de tenerle siempre como amigo y hoyaún perdura nuestra amistad, que no me hace desco-nocer sus defectos, que los tiene, pero que quedan eclip-sados por sus valores positivos. Sin embargo la dispari-dad de actividades, nos obligan a no vernos; nos limitana tener apenas alguna conversación telefónica y a des-pedirnos siempre con un ¿cuándo nos vemos?.

Recuerdo muy bien cuando vivía en la madrileña ca-lle de Menéndez Pelayo y mejor aún en la más recientede la Avenida de Mediterráneo, la que conoció su épocade triunfos ¡y de dolores!, apenas a un centenar de me-tros de la anterior y en la misma manzana en la que yovivía. Su madre, que adoraba a sus tres hijos. Andrés erael único varón, era una mujer excepcionalmente senci-lla, bondadosa y laboriosa. Era una madre castellana ycon ello está todo dicho. El padre del torero era puro pancandeal, cordial y laborioso, siempre estaba trajinando.Todos me recibían en aquella casa con mucho amor alque yo trataba de corresponder. Yo, entonces, no teníaresponsabilidades en el distrito, que vendrían después,pero lo que no cabe duda es que ser del Barrio de Pací-fico imprimía carácter. Por eso puedo dar fé de que enel hogar del torero la bondad y el trabajo, unido a unaexquisita hospitalidad, eran sacrosantos.

Andrés, que nació en La Velilla el 26 defebrero de 1938, dejó luego las Tierras de Segovia por-que la familia habría de buscar nuevos horizontes enese Madrid que ha acogido a tantos miles de segovianos.Pero el torero jamás ha abandonado su cuna y siempretiene presente su segovianía.

Seguro que otras firmas os dirán de Andréscomo artista. Yo prefiero hablar de sus valores, de su en-tereza para sobrellevar con gallardía las adversidades,que no han sido pocas y que nos ponen ante un templehumano ejemplar. Por que en Andrés Hernando eso queconocemos como la "gallardía de los toreros", sin fal-tarle nunca, se ha manifestado más en el dolor propio,en la ayuda a los demás, en la comprensión hacia losque le ayudaban cuando estaba en activo y se equivoca-ban. Por ello sus subalternos le respetaban y le queríancon sincero afecto. De verdad era el maestro y…el amigo.Recuerdo con cuanta devoción me hablaban de él suspeones: Manolo, que vivía en el mismo barrio, El Rubio,todo corazón y respeto, Corbelle, sabedor y sacrificado,todos los que trabajaron con él sintieron el efecto de suequilibrio y su bondad, sin dejar de ser exigente, comola dura brega de la vida en común demandaba.

Ciertamente, llegó la gloria. Que buscó conahínco y consiguió con sacrificio y dolor producido enmuchas tardes de Barcelona, de Pamplona, de Sevilla….yde Madrid, donde el albero amarillo se tiñó de rojo. Tam-bién en América, que sus comentaristas omiten con de-

Con nombre propio. Andrés Hernando, Maestro de la vida

(lucha, dolor, gloria, amor)ANTONIO HORCAJO

EEssccrriittoorr

Uno de los amores de Andrés Hernando: Apadefim. Festival 1984, los toreros junto a niños del ‘doble amor’. / EL ADELANTADO

masiada frecuencia, habiendo conseguido allí tardesmemorables y ¡cómo no! Jornadas de dolor y de hospi-tales. Andrés Hernando ha tenido muy presente comocompañero al dolor, lo que templó el acero de su reciapersonalidad. Recuerdo una tarde de Toledo, me pareceque fue en junio, eso seguro, del año 1967. Del año noestoy seguro y no tengo tiempo de mirar papeles de ar-chivo. Había llegado a la plaza de las afueras de la Ciu-dad Imperial, contento como un chico con zapatos nue-vos, aunque lo que estrenó fué un coche reciénimportado, verde claro, precioso. Le había conducido élmismo. Volvió a Madrid en ambulancia. Y aquello sig-nificaba un frenazo en la temporada que se ofrecía bri-llante. De lo que sí estoy seguro es del año de la cogidade Sevilla, 1966, antes en Barcelona un Mihura le mandóal campo a reponerse para seguir luchando.

Cuando tenía que recuperarse de algún percance casisiempre -yo creo que siempre- se recluía en Morata deTajuña. Allí, una familia que atendía la centralita de telé-fonos, le daba cobijo. Alguna vez le acompañé en suspaseos por la campiña, las viñas y los olivos que re-corríamos en animada charla -que no se me olvide, conAndrés nadie se aburre- él llevaba, invariablemente, unabola de goma, del tamaño de una de pin-pon, apretán-dola constantemente con en la mano para fortalecer losmúsculos. Otras veces con una pesada barra de hierromacizo, forrada de cuero negro, como su fuera una fusta-lógico estando en el campo- que, en mi novatada, mesoltó para que yo la cogiera sin saber su peso. Aún deberesonar en Morata mi exabrupto. Aquellos eran ejerci-

cios cansados y dolorosos.El dolor. En Andrés el dolor era un peaje que

había que pagar y lo hacía en silencio y con mucha dig-nidad y disciplina. Se entregaba por entero a su profe-sión y ello le obligaba, para no defraudar nunca, a es-forzarse en todos los terrenos. Buen cristiano y hombrecabal, tenía paciencia para soportar y comunicaba a losque le rodeaban un optimismo que extrañaba en unhombre joven, aureolado por la gloria, mimado por lospúblicos que valoraban justamente esas lecciones deconformidad. Sabía sonreír siempre, tanto en el triunfo,lo que no es difícil, como en los momentos menos afor-tunados, donde todo se hace más cuesta arriba por lasilusiones que se siegan.

Respetuoso con el público se esforzaba por sa-tisfacerle, pero haciendo las cosas con cabeza, ademásde con el corazón como exige todo riesgo. El arte salíasiempre porque era consustancial con él. En cierta oca-sión charlamos sobre cómo se veía desde el ruedo la al-garabía de la masa. Su respuesta fue tajante: "Conmuchísimo respeto y valorando acaso más que los aplau-sos el silencio cuando solo se oye tu voz animando altoro. Oír el silencio, como en Sevilla o en Madrid, es algoextraordinario. Allí el único que lo puede romper erestú y tú entrega".

He hablado antes del dolor, y me interesa ahoraresaltarlo por cuanto cincuenta años después de un ini-cio el dolor ha dejado más poso, como crisol de la vidade un hombre cabal, que las algarabías y los aplausosque pronto se desvanecen sin dejar huella. El dolor delos demás en Andrés Hernando ha estado muy presenteen su entrega a los que han necesitado su ayuda: los an-cianos de Morata, los segovianos de Apadefim a los quese ha entregado siempre generosamente. Se volcaba,sonreía y trabajaba por los demás.

Andrés Hernando ha tenido muchos amoresimportantes: su bondadosa madre, su laborioso padre,sus hermanas, su Tierra Segoviana, el toreo, sus ami-gos verdaderos, sus hijos a los que adora y ¡¡¡Sonsoles!!!.Aún recuerdo, amigos, vuestra boda en la iglesia de pie-dra de Torrelodones. Habéis recorrido un largo caminojuntos. ¡Que Dios os siga bendiciendo!.

[ ]”La Velilla, Pedraza, Morata deTajuña y Apadefim grandesamores de Andrés Hernando.Este año estarán presentes ensu merecido homenaje

Carteles de la Feria de SCarteles de la Feria de SToros de

El Cortijillo

Miguel Abellán

Leandro

Antonio Nazaré(confirmará)

1010mayo jueves

Toros deMontalvo

Uceda Leal

David Mora

Esaú Fernández(confirmará)

1111mayo viernes

Rejones. Toros de

Luis Terrón

Andy Cartagena

Sergio Galán

Leonardo Hernández

1212mayo sábado

Toros deVellosillo

Matías Tejela

Miguel Tendero

Juan del Álamo

1313mayo domingo

Toros deManolo González

Miguel Abellán

Arturo Saldívar

Víctor Barrio

1818mayo viernes

Toros deTorrestrella

Juan Bautista

Matías Tejela

El Payo

1919mayo sábado

Toros dePeñajara

El Fundi

Uceda Leal

Rubén Pinar

2020mayo domingo

Toros deAntonio Bañuelos

Zotoluco

Diego Urdiales

Morenito de Aranda

2121mayo lunes

Rejones.Toros de

Los Espartales

Pablo Hermoso de MendozaDiego VenturaFrancisco Palha,

(confirmará)

2626mayo sábado

Toros deBaltasar Ibán

Fermín Spínola

Serafín Marín

Rubén Pinar

2727mayo domingo

Novillos deGuadaira

Alberto Durán

Gómez del Pilar

Damián Castaño

2828mayo lunes

Toros deLas Ramblas

Julio Aparicio

El Fandi

Miguel Ángel Perera

2929mayo martes

Feria Feria del Artedel Arte

y la y la CulturaCultura

Rejones.Toros de

Benítez Cubero

Fermín Bohórquez

Moura hijo

Raúl Martín Burgos

33junio domingo

Toros deValdefresno

Curro Díaz

César Jiménez

David Mora

55junio martes

Corrida de Beneficencia.Toros de

Núñez del Cuvillo

Morante de la Puebla

José María Manzanares

Alejandro Talavante

66junio miércoles

12 30 de abril de 2012toros2012

San Isidro 2012San Isidro 2012Todas las corridas

comenzarána las 7 de la tarde

Corrida dela Prensa. Torosde El Montecillo

Manuel Jesús "EL CID"

César Jiménez

Iván Fandiño

1616mayo miércoles

Novillos deBuenavista

Conchi Ríos

Tulio Salguero

Gonzalo Caballero

1414mayo lunes

Toros deEl Ventorrillo

Julio Aparicio

Curro Díaz

Ángel Teruel(confirmará)

1515mayo martes

Toros de Victoriano del Río

Sebastián Castella

José María Manzanares

Alejandro Talavante

1717mayo jueves

Toros deAlcurrucén

El Cid

Sebastián Castella

Miguel Ángel Perera

2222mayo martes

Toros de JuanPedro Domecq

Morante de la PueblaCayetanoJuan Pablo Sánchez

(confirmará)

2323mayo miércoles

Toros de Núñezdel Cuvillo

Sebastián CastellaDaniel LuqueDiego Silveti

(confirmará)

22 44mayo jueves

Novillos deFuente Ymbro

Sergio Flores

Javier Jiménez

Fernando Adrián

2525mayo viernes

Toros deCarriquiri

Frascuelo

Ignacio Garibay

Javier Castaño

3030mayo miércoles

Toros deJosé Escolar

López Chaves

Fernando Robleño

José María Lázaro

3131mayo jueves

Toros deCuadri

Rafaelillo

Javier Castaño

Luis Bolívar

11junio viernes

Toros deAdolfo Martín

José Luis Moreno

Juan Bautista

Iván Fandiño

22junio sábado

Toros deLas

Ramblas

C U -

RRO

(Rejo-neo)

TorosdeD.

LuisTerrón

2828mayo

Toros de Puertode San Lorenzo

El Cid

Daniel Luque

Thomas Dufau(confirmará)

77junio jueves

Toros deVictorino Martín

Diego Urdiales

Antonio Ferrera

Alberto Aguilar

88junio viernes

Toros deEl Torreón

El Cordobés

Rivera Ordóñez

El Fandi

99junio sábado

Rejones.Toros de Castillejo

de Huebra

Rui Fernandes

Sergio Vegas

Moura Caetano

1010junio domingo



Fueron años de infancia los que recuerda Andrés Hernando comotiempo de felices recuerdos que tuvieron incidencia en su natalLa Velilla y en Pedraza donde junto a otros infantes jugaron, co-

rrieron y apuntaron su incipiente interés por el juego del toro. Luego,durante años después, el torero siendo ya renombrado artífice del artede torear, visitaba estas dos entrañables poblaciones para evocar he-chos pasados y convivir afectuosamente con muchos de sus habitan-tes. También como empresario taurino y ganadero fue impulsor de losfestejos taurinos de fiestas.

La Velilla y Pedraza, simbiosis de nostalgia, de cariño e imborra-bles anécdotas y vivencias que al cabo de tantos y tantos años perma-necen fieles en la memoria de este personaje que en el presente 2012cumple sus bodas de oro con el doctorado de matador de toros.

Los homenajes han comenzado. El pasado día 17 fue el invitado es-pecial de la Tertulia Taurina de Segovia. El día 1 de julio, conmemora-ción de su cincuenta aniversario de alternativa, habrá misa de gracias yalmuerzo abierto de homenaje al diestro. Después, ese mismo día, acasopor la tarde festejo taurino o fiesta taurina en el bicentenario coso sego-viano. Y en Pedraza se piensa en ofrecer uno de los dos supuestos fes-tejos de las fiestas septembrinas al maestro Hernando como homenajede sus paisanos. Incluso se apunta a la posibilidad de que el torero actúecomo componente del cartel en la lidia de un becerro.

La Velilla y Pedraza, dos lugares segovianos de hondo sabor emo-tivo por las sugerencias, la historia y los recuerdos. Hermosos lugarescon muralla guardián de sus naturales tesoros, castillo presidiendo lafortaleza, calles y entorno de belleza singular y, centros de un nostál-gico pasado para quién ahora disfruta del afecto, respeto y admiraciónde todos los segovianos en especial.

Ya hemos comentado la importancia y emotividad que sustentaron el que fuera considerado mejor fes-tival taurino del calendario español. Fueron diez y seis ediciones con las principales figuras de cada res-pectivo momento torero. Los más relevantes diestros aceptaban complacidos el figurar en el cartel que

todos los años al comienzo de la primavera se anunciada como plataforma sentimental y económica de laAsociación de Padres de Deficientes Físicos y Mentales. Era un día grande desde que comenzaba el ritual delapartado de las reses, la visita al centro de algunos de los componentes del acrtel y, fundamentalmente du-rante el desarrollo del festejo. Como ilustración de este comentario, sirvan algunas imágenes del tradicionalfestival APADEFIM, cuyo recuerdo perdura en el tiempo de manera muy especial.

toros2012

Pedraza y laVelilla, lugaresafines a Andrés

Hernando

El FestivalApadefim, 16

emotivos festejosPABLO PASTOR

PABLO PASTORNacido en La Velilla, correteó siendo niñopor la cercana Pedraza jugando al toro

1. Paseillo con ‘El Viti’, Camino, Curro Romero, Andrés Hernando y Alcalde. 2. Emotivo por desaparición detres componentes de la fotografía: Julio Robles, Antoñete y nuestro compañero Fernando Peñalosa. 3. Gru-

po de toreros con niños de Apadefim. 4. Pablo Pastor entrevistando a Antoñete con Pablo Lozano al fondo.5. Otra emotiva imagen del festival. Curro Romero con un niño de la Asociación. Observen al fondo la presen-cia de Manolo Lozano y Antonino Sanz. El ritual del paseillo en la bella Plaza Mayor de Pedraza, una tarde de toros

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Desde este punto geográfico segoviano llamado Escarabajosa deCabezas, enviamos el mensaje de afecto, admiración y respetoal maestro Andrés Hernando con motivo de cumplir este año

sus bodas de oro con la potestad que confiere el doctorado en tauro-maquia. Nuestra vinculación con Andrés data de hace muchos años,de cuando comenzó a organizarnos espléndidos festejos taurinos queahora sigue manteniendo aportando ganado bravo de su propia gana-dería, la de Peñatella, y conformando carteles de gente válida que nosdepara momentos de mucha emotividad y que sabemos aceptar contalante de amistad y afición a la fiesta de toros.

Esta villa ya venía disfrutando de diferentes festejos taurinos, re-cordando como efeméride muy importante, que fue aquí, en esta po-blación segoviana, donde debutó ante un becerro el que años despuésse constituyera en figura grande del toreo, Julián López "El Juli". Ac-tuó junto a otro jovencísimo aspirante llamado Antonio José Lorite. Am-bos tenían diez años de edad y ambos demostraron unas maneras,unos sentimientos y un valor desmedidos. Lo recordamos con enormecariño y admiración.

Escarabajosa de Cabezas tiene como norma fundamental saberagradecer los servicios y la dedicación de gentes que vienen de fuera yque con el tiempo se constituyen en gente propia. Quién aporta es-fuerzo, ilusión y un hacer las cosas bien, tiene en este pueblo segovianouna permanente acogida llena de afecto y amistad. Y Andrés Hernandoes una de esas personas que se han hecho querer y a quién manifes-tamos esa amistad irreversible y nuestro apoyo en lo que sea menes-ter. Andrés Hernando desde la veteranía que le otorga su edad, bienllevada por cierto, y su cotidiano quehacer profesional en las facetas deganadero de bravo y empresario taurino, cumple ahora cincuenta añosde su alternativa, cuya conmemoración recuerda aquel 1 de julio de1962 en la plaza de toros de Segovia. Este año, Dios mediante, cuandoen este pueblo se lleven a cabo sus festejos taurinos, le será rendido elhomenaje de admiración y respeto que su potestad de hombre y de to-rero merecen. Felicidades, maestro.

La popular becerrada denominada de los Camare-ros hasta el cambio de Asociación de Camarerosde Segovia y Provincia, arrancó en 1923 y fue ins-

titucionada años más tarde, en 1928. Se creó para de-leite de los profesionales del gremio de hostelería en suaventura torera y para destinar un dinero a obras bené-ficas, Hospital de la Misericordia, San Vicente de Pauly Hermanitas de los Pobres. La plaza se llenaba de ma-nera invariable. El atractivo emanaba de ver anuncia-dos en los carteles personajes de la esfera popular se-goviana como Cándido, Nicomedes García o GermánElías. Se agotaban las entradas desde días antes de lafecha del festejo.

Por aquellos tiempos las firmas comerciales cola-boraban de forma directa en la preparación de la bece-rrada. Eran muchos quienes deseaban aportar dineropara patrocinar becerros y formar la vistosa caravanapublicitaria. Incluso llegaban numerosos ofrecimien-tos para dirigir la lidia. Recordamos entre otros a Yiyo,Julián Maestro, Bolita o Rafael Matute.

Pero las becerradas tenían también otros alicien-tes añadidos y sensaciones emotivas desde tres mesesantes. En cierta época, cuando era secretario IreneroAlvárez, quién junto a Gonzalo ‘El Resti’ y Ramón Ba-llesteros, contactaron con Andrés Hernando para ad-quirir los becerreros de su ganadería, anunciada como"Peñatella", asentada en tierras abulenses. Desde en-tonces se organizaba una fiesta campera en dicha fincacon motivo de la elección de los añojos y pasar un díagrande con un gran tentadero y suelta de vaquillas conparticipación de quienes iban a formar cartel y otros va-lientes espontáneos que saltaban al ruedo. El maestroabría de par en par las puertas de ‘Peñatella’ y las de suestima y consideración. Ochenta invitados disfrutába-mos de una jornada realmente inolvidable. En una deesas fiestas ‘El Bola’ dio la primera lección torera a su

hijo ‘Bolita’. Allí vimos torear siendo aún niño a Gon-zalo Hernando, sufrir revolcones a diversos colegas dela hostelería segoviana, pero también aplaudir algunas"faenas" de los más avezados.’El Bola’, ‘El Tigre’, ‘ElViejo’, ‘Placita’, ‘Sixto’, ‘Jacinto’ o ‘El Pernales’..... AndrésHernando en todo momento atento a todo, nos acon-sejaba con su potestad de conocedor en la materia, losbecerros con mejores nota y hechuras para la becerrada.Desde entonces se fue creando una amistad sincera ycuajada por las muestras de afecto mutuas entre AndrésHernando y componentes de nuestra Asociación. Haceunos cuatro años, gente nueva en nuestra Asociación,planteó un posible cambio de ganadero para la bece-rrada. Mi deber como presidente era exponer en unaasamblea esta propuesta. Previamente, yo, en el mesónde Cándido se lo comenté a Hernando, a quién aseguréque mientras yo fuera el presidente de la Asociación deCamareros de Segovia y Provincia, por gratitud y reco-nocimiento, su ganado continuaría formando parte delos carteles de la becerrada. Pero la sorpresa se produjocuando se planteó el asunto en la asamblea y tras unavotación, hubo mayoría absoluta en depositar y ratifi-car la confianza en Andrés Hernando y seguir contra-tando sus reses bravas. La popularidad del maestro, semanifiesta en muchos momentos de convivencia, pun-tuales como permitir a los componentes de los carte-les de la becerrada ir a su finca para observar los bece-rros contratados y escuchar consejos deltorero-ganadero, pedir posar junto a su figura en el ca-llejón de la plaza de toros de Segovia para fotografiarse...Un cúmulo de sensaciones emotivas y de puro afecto.Enhorabuena al maestro Andrés Hernando de parte deesta Asociación de Camareros de Segovia y Provinciay, naturalmente, nos sumamos al proyectado home-naje, merecido en alto grado, por el cincuenta aniver-sario de tu alternativa. Gracias, maestro.

Al maestro, AndrésHernando desdeEscarabajosa de

Cabezas

La becerrada de loscamareros

ÁNGEL MARTÍNAAllccaallddee ddee llaa VViillllaa

PABLO MARTÍN PPrreessiiddeennttee ddee llaa AAssoocciiaacciióónn ddee CCaammaarreerrooss ddee SSeeggoovviiaa

Desde hace muchos años los becerros son de la ganadería de‘Peñatella’ de la que es titular Andrés Hernando

Andrés Hernando junto a los populares ‘Piculí’ y ‘Blas’ de la cuadrilla bufa. Año 1972. / EL ADELANTADO

Emilio de Frutos ha toreado varios festejos en Escarabajosa de Cabezas


Dos imágenes que se mani-fiestan por los nexos de fa-milia y que tienen un de-

nominador común: La fotografíade Andrés Hernando tiene una re-ferencia de 12 de junio de 1960, eldía en que Hernando toreaba unanovillada en Segovia. Junto al to-rero un grupo de aficionados se-govianos entre los cuales recono-cemos a Germán Elías, IsidoroAlvárez, José Benito y Lope Ta-blada padre e hijo.

La segunda fotografía exacta-

mente treinta años después,cuando Gonzalo Hernando, elhijo del maestro, quería ser to-rero. Un excelente muletazo enun tentadero refrenda las buenasmaneras toreras. Después, ya losaben, debú con picadores enCantalejo junto a El Juli, percancemuy serio y retirada obligadapero manteniendo el espíritu to-rero del que está impregnadoGonzalito, ahora, propietario deuna excelente cuadra de caballosde carreras.

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Momentosemotivos quese recuerdancon nostalgia

y cariño

Va por Usted maestro

PABLO PASTOR

JOSE MARÍA PÉREZ DE COSSIOEEssccrriittoorr

1. Andrés Hernando junto al pintor Lope Tablada de Diego y algu-nos aficionados segovianos una tarde de toros en Segovia. 2.

Gonzalo Hernando en una muestra de excelente toreo al natural en suetapa de novillero.

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No me perdonaría el ausentarme en la cele-bración de los cincuenta años transcurri-dos desde que el torero Andrés Hernando

tomase su alternativa. Los toreros nunca dejan deserlo, incluso después de que los ruedos les des-pidan con tristeza sabiéndose huérfanos de tar-des inolvidables, Es por esto por lo que puedo afir-mar el como Andrés Hernando ha sido y es unatorero del que Segovia puede con justicia enor-gullecerse.

Como presumo sin temor a equivocarme, queeste escrito formará parte de los muchos que ami-gos y aficionados le dedicarán, no pretendo en elmismo plasmar lo que fue su trayectoria en ese,por difícil, misteriosoarte del toreo. Algo sitengo que decir al res-pecto, y es el que si dealguien puede hablarseen cuanto a entrega ytenacidad, es de este se-goviano nacido en LaVelilla de Pedraja. Sutranscurrir por los rue-dos fue redactando unaperegrinación cosidacon hilos de oro y san-gre, sin que en ningúnmomento se arrugaseel traje de luces con elque su corazón se vestíasin tomarle las medidasde las cornadas con lasque tuvo que firmar elcertificado que acredi-tase el no dejar pen-diente ninguna deudapor dolorosa que estafuera. En la tauroma-quia, aparte del oficioque se ha de tener paradominar al toro, hacenfalta tres verdades y unmisterio: verdades sonla inteligencia, el valor yla voluntad fundamen-tal de sumergirse en losterrenos del arte. Elmisterio se alimentadel sentimiento y elduende. Ninguno deestos ingredientes lefueron ajenos a estemaestro del que me honro con su amistad.

Dicho lo cual y remitiéndome a lo dicho conanterioridad, es decir, sin pretender detenerme enanécdotas, ni detallar su quehacer profesional, mequedo como compendio de todo cuanto de élpodría decir, en una serie de verónicas de las quepude disfrutar un día de San Pedro en la Plaza deSegovia, Verónicas que mí memoria ha retenidocon esa frescura que producen los sucesos extra-ordinarios cuando salen a nuestro encuentro enuna temprana edad.

Me llevó a aquella corrida Don Fernando Elíasun día de San Pedro, junto a su hijo. Don Fernandoera un aficionado cabal y lo suficientemente en-tendido como para saber distinguir la lana de laborra. Subimos a un autobús que salía desde elAzoguejo hacia la Plaza de Toros sumergidos enun olor a puros encendidos con la misma convic-ción, con la que el Acueducto se bañaba en esasluces regaladas por Segovia cuando es fiestagrande en todos y cada uno de sus arcos.

Aposentado en la grada, toda mi curiosidad seveía desbordada por ese espectáculo que se mepresentaba por primera vez. Las primeras vecesson las que dibujan los tatuajes más auténticos enla memoria; estos son los que nos acompañaránde a perpetuidad entrelazándose con las primerasveces que la vida nos va regalando, para confor-mar las cuentas del rosario más fervoroso de nues-tra existencia.

Describir los pormenores de todo cuanto acon-

teció en la Plaza, impactando esas partes delcuerpo que sin ser paralelas acaban confluyendoen el infinito, requeriría un relato extenso y hondo.

Aquí y ahora, para evitar esa extensión a la quealudo, elijo el palo, como se dice en el flamenco,de aquellas verónicas en las que Andrés supotransmitir toda la sabiduría y el sentido de la me-dida aposentada en sus manos, después de reco-rrer la distancia que existe entre la cabeza y el co-razón. La montera embridando una cabezaabsorta en improvisar intuiciones que reclama-ban recursos, y el corazón latiendo ignorante delreloj que presidía la plaza con más autoridad quela que ostentaba el palco presidencial. El tiempo

no tiene pañuelos másque para despedir, lloraro gozar cuando revolo-tea por encima de geo-metrías difíciles de com-prender, dado que hande bregar con dos puña-les que inventan mala-barismos para que lamuerte y la vida se mi-ren a los ojos sin hacersetrampas.

Enfoco pues miprosa hacia aquellasverónicas para orlar lafelicitación que el ma-estro Hernando mereceen este homenaje de oroy admiración. La veró-nica supone la culmina-ción del toreo de capote.Es su máxima expresióny un compendio de difi-cultades. Torear a laverónica con verdad yaseo, implica una ma-estría que solo a muy po-cos les es concedida. Laverónica requiere del to-rero una conciliación deelementos muy difícilesde compaginarse en elbreve espacio de tiempoque dura su ejecución.En ella el valor se dibujacon trazos finos y preci-sos para torear despa-cio, para ser capaz deaguantar el recorrido

del toro, cerca de las entrañas que es donde anidael miedo, sin mover las piernas ni un solo centí-metro, es decir, con las zapatillas atornilladas enel albero. Hay en la verónica, cuando se ejecutacon solemnidad, una infinita torería, la maravi-llosa demostración de cómo debe el matador con-juntar el movimiento de su cuerpo, de su cinturay su pecho, de sus brazos y sus hombros, de susmanos y sus muñecas, y de sus piernas, su ca-beza y su barbilla. Sincronizando con precisióntodo este complejo escorzo, para alentar al capoteque, no resignándose a arrastrarse por el suelo seinventa alas intentando tocar la sublimidad delcielo. Una excelsa verónica debe ejecutarse des-pacio, olvidándose del tiempo para que este nointerrumpa el meterse en la línea del toro, en suterreno. Se configura como un grito que invocasela inspiración creadora que recorre al torero dearriba hacia abajo y al toro de derecha a izquierda.Entonces las luces de su terno resplandecen y elmilagro pare esos silencios alimentados por la ad-miración. Este ha sido, con mayor o menor aciertoexpresado, mi regalo al maestro que supo en unmomento de mi vida hacerme descubrir las for-mas y los colores con los que el alma se tiñecuando están cargados de verdad y honestidad.Después de ello su amistad también ha sido unaverónica de afecto, y por mi parte de gratitud porhaber sabido cultivar esa amistad por su parte contanta delicadeza como yo he pretendido lo fuerapor la mía.

Y, Hernando al respetable con un ‘Va por Ustedes’

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1188 toros2012 30 de abril de 2012

M O M E N T O S E M O T I V O S A T R A V É S D E L A F O T O G R A F Í A

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Han sido tantos y de profundo sabor taurino, que nos complace de manera sensible sobre todo, el reflejar en estas páginas parte de los muchos momentos que se produjeron con in-tensidad en la vida del maestro Andrés Hernando. En este sentido homenaje que le brindan sincera y hondamente quienes le admiraron, respetaron y consideraron en su tiempo de

actividad torera, y después y ahora igualmente manteniendo los conceptos de alta estima y amistad, ese brindis austral, sideral y sobre todo humano, lleva consigo el deseo de salud, largavida y mucha felicidad. ¡Va por usted, maestro!. 1. Con un grupo de segovianos al pie del Acueducto, junto a su ‘mercedes’. Fernández Pacheco, Aurelio, Luis... 2. Un cordial grupo con Ma-nolo Caracol, sus guitarristas y flamencos. 3. En el palco de las Ventas con el Cordobés cumplimentando al General Franco. 4. En el Mesón de Candido junto al ilustre Mesonero Mayor deCastilla. 5. Andrés Hernando cumplimentando al Papa en un saludo muy torero 6. Un abrazo de amistad y torería con ‘El Viti’. 7. Andrés Hernando junto a su esposa Sonsoles y su hijoAndrés en el Ayuntamiento de Segovia tras ser pregonero de las Ferias y Fiestas ciudad de Segovia 8. Homenaje en el centro segoviano de Madrid. Entre otros, Marqués de Lozoya, Presidentedel Centro, Presidente de la Diputación de Segovia, el doctor Teófilo Hernando, Rafael Narbona, Ramón de Cea, Antonio Hernández Asiaín y Ángel Sanz Aranguez. 9. 1964. Andrés Hernandoganó el trofeo ‘Manolete’ de la importante feria taurina de Linares. 10. Con Fernando Dominguez y Tilu. 11. En su peña taurina segoviana con algunos de sus miembros.

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Constituye para mí y para nuestra Asocia-ción Taurina Parlamentaria una gran sa-tisfacción poder colaborar con motivo de

la celebración del cincuenta aniversario de la al-ternativa del gran Maestro de la tauromaquia elsegoviano Andrés Hernando. Su trayectoria pro-fesional es de sobra conocida por todos los afi-cionados con triunfos sonados en las plazas másimportantes como Madrid, Sevilla y Barcelona,en las que realizó memorables faenas como enmuchas otras plazas.

Su toreo profundo y auténtico a la vez que va-riado y artístico llenó de calidad muchas tardesde toros a partir de su alternativa el 1 de julio de1962 en la Plaza de Segovia, su tierra natal, hastasu retirada oficial que no de verdad en 1973.

Y digo que no fue una retirada de verdadpuesto que Andrés siguió toreando festivales ypor supuesto en las plazas de campo y puedo darfe de ello ya que, precisamente, en 1983 siendoAlcalde de Ciudad Rodrigo y con motivo de unfestival benéfico que organicé en la plaza propie-dad del Maestro Pedro Martínez ‘Pedrés’, llaméa Andrés para que toreará dicho festival junto conel propio ‘Pedrés’, Curro Romero, SantiagoMartín ‘El Viti’, Jaime Ostos y José Luís Ramos.Fue el 20 de agosto de aquél año y Andrés estuvoimpecable con un novillo de Matías Bernardos‘Raboso’.

Después siempre que he coincidido conAndrés hemos recordado aquella gran tarde en laque no sólo se puso el cartel de "no hay billetes"si no que hubo hasta reventa de entradas, algoinsólito en aquella plaza. Y Andrés, como siem-pre, simpático, alegre y sobre todo sincero se ex-tiende en detalles de su larga y dilatada trayecto-ria profesional. ¡Qué tiempos aquéllos!.

Mi amistad con Andrés y con su esposa, tam-bién gran aficionada y parlamentaria de Madrid,Sonsoles Aboín, se ha ido consolidando estos úl-timos años, a través de nuestra Asociación tau-rina Parlamentaria, de la que Sonsoles es miem-bro activo y Andrés nuestro asesor taurino.

La última vez que he visto a Andrés torear fueprecisamente el 17 de junio de 2011, en la FincaMedianillos de Victoriano de Río, en Guadalix dela Sierra, don de nuestra Asociación celebró unajornada campera. Allí, alternando con Víctor Ba-rrio y los parlamentarios Pío García Escudero yJuan Manuel Albendea, dos grandes políticoscomprometidos con la Fiesta, Andrés dio un re-cital de toreo clásico a la vez que brillante.

Después, intervinimos juntos en una confe-rencia - coloquio en Sepúlveda, el 14 de enero deeste año, donde Andrés, alternando de nuevo conVíctor Barrio y los que le acompañábamos en lamesa, destacó por su gran conocimiento de la tau-romaquia, su evolución y los problemas que laafectan, que no son pocos.

MIGUEL CID CEBRIÁN

PPrreessiiddeennttee AAssoocciiaacciióónn TTaauurriinnaa PPaarrllaammeennttaarriiaa

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Andrés Hernando, un torero de verdad

Sin embargo, con personas como Andrés, enamoradosde la Fiesta, pero sin ceguera alguna, es posible afrontarcon rigor y con seriedad un futuro que más que incierto sepresenta complicado, muy complicado, todo ello acrecen-tado por una crisis que está repercutiendo muy negativa-mente, como el propio Andrés explica con gran claridad.

Precisamente, en este 50 aniversario de su alternativa, quecoincide con la de otros grandes toreros como Andrés Vázquezy ‘El Cordobés’, es un buen momento para reflexionar sobre porqué los toros no tienen la pujanza y el atractivo de aquellos años.Yo creo que los maestros de entonces que siguen totalmente lú-cidos y con una gran experiencia a sus espaldas, tienen muchoque decir ante los problemas que nos afectan.

Pero en fin, no es el momento de las cavilaciones sinode celebrar este gran acontecimiento del 50 aniversario deAndrés Hernando como matador. Que va a celebrar en ple-nitud y con una familia de la que se siente orgulloso, en laque también su hijo Gonzalo, que aunque quiso ser torero,no pudo seguir por un gravísimo percance, triunfa ahoraes los hipódromos, con sus caballos de carreras, pertene-cientes a una yeguada que lleva el histórico nombre de‘Hernando - Aboín’. Dos apellidos ilustres unidos parasiempre.

Enhorabuena Andrés y que disfrutes con los tuyos y contodos los que te admiramos y queremos, esta entrañable ehistórica efeméride de tu aniversario.

1.Ciudad Rodrigo, Festival taurino 1983. Curro Romero, El Viti, Pedres, Jaime Ostos, José Luis Ramos y Andrés Hernando. 2. Fiestacampera en ‘Medianillos’, finca ganadera de bravo de Vitoriano del Río. Entre otros, Andrés Hernando, Víctor Barrio y los políticos PíoGarcía Escudero y Juan Manuel Albendea, con el ganadero y otros invitados.

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Los recuerdos se agolpan por lointeresante, taurino y emo-tivo, referidos a diversos en-

cuentros fijados en la finca gana-dera de bravo “Peñatella”. Por esesacro lugar dedicado a la crianza deltoro bravo, han pasado infinidad detoreros, se han iniciado numerosospuntos de inflexión y de nacidas ilu-siones toreras, se ha disfrutado defiestas de alto contenido taurino,tentaderos, toros a puerta cerrada,almuerzos de hermanamiento, ter-tulias..... Peñatella era lugar de reu-nión de estamentos taurinos através de asociaciones, peñas, tore-ros y taurinos, siempre en tono deamistad y concordia. La Segoviataurina ha tenido una notable inci-dencia con eventos llevados a cabocon la anuencia del maestro de LaVelilla. Tentadero, almuerzo y va-quillas, por ejemplo.tenaderos, he-rraderos, faenas camperas, tertu-lia.... Vivencias que pudierondisfrutar muchos personajes y afi-cionados segovianos. Los de la Aso-ciación de Camareros en su díagrande en ‘Peñatella’. Toreros sego-vianos, todos. Amigos, muchos.

Siempre con Andrés Hernando di-rigiendo el “cotarro” e incluso mos-trando una vez su potestad toreraante la vaquilla. O su hijo Gonzalo,antes y después del percance deCantalejo. Quién tuvo retuvo. Laamplia superficie de puro camposerrano de “Peñatella”, acogedora,saludable, frondosa de monte bajoy de perfecto hábitat para la cría debravo, siempre visionada, contro-lada y aplicada a su función vital porel ganadero y su gente experta en lamateria. Ganado bravo proceden-cia nuñez y domecq. Quinientas oseiscientas cabezas entre vacas, se-mentales, utreros, erales y añojos.Andrés no quiere lidiar cuatreños,por el coste, me supongo. Pero lasdiferentes camadas tienen salidahacia diferentes puntos geográficosde la zona centro para ser lidiadas.De ahí el esmero y la permanenteatención prestada.

‘Peñatella’ cuenta ahora con uninmueble edificado a lo grande conaportaciones importantes y unacogedor hábitat ornamentadocon profusión de detalles artísti-cos. Cuadros, figuras, decoración

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De tentaderos y fiestas en PeñatellaPABLO PASTOR

La historia de este torero se-goviano precursor de otrasvenideras trayectorias tore-

ras de diferentes paisanos, esta ba-sada en el pundonor, el valor, unalto grado de inteligencia natural y,por supuesto, de enorme toreríabien interpretada en los ruedos.Fue un torero muy pecuiar a quiénse admiraba por su presencia físicaentre disciplente y gallardo conuna no muy alta estatura, lo quehacía que transmitiera mayor en-canto .

Andrés Hernando nació en LaVelilla el 26 de febrero de 1938. Hijode taxista emigrado a la capital deEspaña, pariente cercano de la fa-milia de Martín Berrocal y sin an-tecedentes taurinos familiares.Nos comenta pormenores: La

PABLO PASTOR

El maestro Hernando recientemente toreando una vaquilla a campo abierto en su finca de Peñatella

muerte de Manolete en 1947, des-pertó mi ego torero sin saber el por-qué y para qué. La cuestión fue queuna peña taurina de Albacete meinvitó a un tentadero y tras ímpro-bas gestiones para encontrar uncapote y una muleta viajamoshasta el lugar del tentadero. Las va-cas me pegaron volteretas y másvolteretas puesto que yo no sabíani torear de salón. Un personajepresente, Alfonso del Toro, que fuenovillero a quién una grave lesiónen un codo le retiró del toreo,apunto que yo tenía valor y decidióayudarme. Comenzamos a entre-nar en el parque del Retiro y prontollegaron las primeras novilladas. Abase de arrimarme y jugármela acada momento, cortaba orejas y ra-bos todas las tardes. La verdad esque me arrimaba una barbaridad.Fue cogiendo sitio al novillo eral,entendiendo las embestidas, in-

terpretando el toreo que llevaba enla cabeza y así, iba logrando mejo-rar la técnica y suplir algunas ca-rencias mediante las enseñanzasteóricas y prácticas que acumu-laba en los ruedos.

EL DEBU CON PICADORES Fue el24 de junio de 1954 en Chinchón.Al año siguiente me presenté enVista Alegre donde estuve bien yme repitieron cuatro veces. Desdeese momento me apoderó Domin-go Dominguín. Fueron corriendolos años hasta el 58 donde la suerteme resultó esquiva en forma de trescornadas seguidas antes de debu-tar en Madrid. Le dije a Dominguínque no era el momento propicio,ya que no estaba del todo recupe-rado, pero se empeñó y por mi par-te hice un esfuerzo tremendo, perono salieron las cosas como a mí mehubieran gustado. Por entonces yo

tenía ya un gran cartel y mucho am-biente tras triunfar en Vista Alegre,Barcelona y Zaragoza. En Las Ven-tas esa tarde puse el cartel de “nohay billetes”. Casualmente, esa tar-de Victoriano Valencia cuajó su fa-mosa faena al novillo ‘Carpeto’, dePalha, y la gente salió hablando deél. Fechas después, toreé otra tardecon Luis Alfonso Garcés quiéncuajó dos enormes faenas cortan-do tres orejas. La verdad es que notuve suerte en Madrid. Actué cincotardes sin cortar una sola oreja. Tandecepcionado estaba, que decidícortar y retirarme. Estaba absoluta-mente falto de moral y motivación.

LA REAPARICIÓN Pensaba y da-ba vueltas al asunto, hasta quetomé una nueva dimensión en miestima de torero. No podía ser unfracasado, mi carrera no podía nidebía terminar así. Para mi, la vida

no tenía sentido sin torear. Recu-peré la moral y regresé. Esa autoes-tima, ese nuevo pensamiento, esecúmulo e valores sobre todo esti-mulantes, me hizo sentir un hom-bre nuevo. El fundamento de miforma de pensar y profundizar enconceptos humanos y toreros, sebasaba en entender que por enci-ma de todo estaba el sentimiento.Tenía valor y me arrimaba comopocos, pero no lo sentía. Un torerotiene que expresar sus sentimien-tos, comunicar éstos a través de latauromaquia propia. Cuando esesentimiento además transmite fue-ra de tu propio halo, llega al aficio-nado. Cuando estás convencido, sete coge el toro incluso no te hiere.La cornada va en el pensamiento.El toro sabe muy bien a quién tieneque respetar, y por eso se somete.Para mi entender, el valor está en lacabeza, en la mentalización.

De la velilla a la fama a través del toreo

de alto nivel y amplia capacidadmoradora. ‘Peñatella’ se revitalizópara dar morada a sus ilustres pro-pietarios, la familia Hernando-

Aboín, cuya nomenclatura va au-mentando a medida que vienen almundo nuevas criaturas. Andréscon seis hijos, Gonzalo próxima-

mente primerizo. Felicidad y saludes el deseo que quines queremos aesta saga tan vinculada con Sego-via y Avila.


Una de las gestas más relevantes de Andrés Hernando, tuvolugar en Barcelona en una corrida de toros que había levan-tado gran expectación, pues se iban a lidiar astados de la fa-

mosa ganadería de Hijos de Pablo Romero, vistas con antelación porunas fotografías publicadas en medios de comunicación catalanes.La crónica de agencia y que publicó El Adelantado de Segovia al díasiguiente, decía así:" Barcelona. Seis toros de Hijos de Pablo Romerobien presentados. Al toro ‘Potrico’, lidiado en sexto lugar, se le per-donó la vida a petición unánime del público, por la bravura excep-cional que había desarrollado. Al segundo se le dio la vuelta al ruedo.Dámaso Gómez, aplausos y dos orejas con tres vueltas al ruedo’. Li-meño, oreja y pitos. Andrés Hernando, ovación en su primero. Enel último estuvo muy torero y valiente y se adornó aprovechando labondad de la res, a la que no la dio muerte a petición unánime delpúblico.

Torero, amigo y admirado Andrés: Se que este año se cumple el cin-cuenta aniversario de tu alternativa como matador de toros y he que-rido en el recuerdo sumarme a tu merecido homenaje. ¡ Cómo pasa

el tiempo!. Recuerdo la primera vez que toreamos juntos. Fue en nuestraquerida Segovia el día 3 de octubre de 1958. el cartel estaba formado porJosechu Pérez de Mendoza, Andrés Hernando y Victoriano de la Serna.Cartel puramente segoviano. A pesar de la fecha tan inusual, había unagran expectación por el festejo y la plaza se llenó.

Recuerdo tu figura, tu garbo y valor. Tu dominio sobre el toro. Tu en-trega. Ya se adivinaba el torero que llevabas dentro y que con el paso deltiempo te convertirías en un importante matador de toros. Tu constan-cia, tu afición, tu querer ser junto a las grandes cualidades que poseías, tecondujeron a convertirte en la figura que fuiste. Recuerdo que tu manerade torear llena de majeza, temple y naturalidad, tenía el sabor que marcala diferencia de quienes llevan el toro dentro. Además te ponías en el sitioante el toro y desde ahí sabías desarrollar tu tauromaquia, que era lo difí-cil. Recuerdo también otras tardes importantes en que toreamos juntos,como mi debú en Madrid acompañados por Martín Sánchez "Pinto" y contoros de Albaida. ¿ Recuerdas como derribaban aquellos toros a los caba-llos y picadores en el tercio de varas?. Pienso que fue una época dura deltoreo y que supimos superar y sacar adelante.

Ahora todo parece como un sueño. De algo que iluminó la vida y lamarcó para siempre y que de seguro quisiéramos volver a repetir.

Felicidades una vez más y un fuerte abrazo. Tu amigo Victoriano.

El viernes último celebrose en un céntrico hotelmadrileño una comida en honor del matador detoros Andrés Hernando, que no fue un banquete

vulgarmente rutinario, sino con la doble originalidadde ser organizado por escritores que deseaban cadauno entregarle un libro propio y dedicado no al torero,sino al hombre sin el traje de luces. La convocatoriapara tan simpático acto de sincera hermandad la fir-maron, entre otros personajes, Gregorio MarañónMoya, Juan de Avalos y Gregorio Javier, encabezándolaRafael Narbona, quién a los postres, subrayó que elhomenaje de los escritores no era al torero, sino al serhumano. Le siguieron en el uso de la palabra, tras lalectura por José Bódalo de sendos sonetos de GerardoDiego y Rafael Morales, el marqués de Lozoya, los doc-tores Teófilo Hernando y Sanz Ramos y Antonio Hor-cajo, descollando todos la hombría de bien y la cali-dad humana de Hernando, quién finalmente dio lasgracias con emoción por el homenaje de auténticacordialidad hacia su persona.

Dos antecedentes pueden aducirse, al respectoen la capital de España; uno, hace medio siglo a JuanBelmonte, y otro, del que se cumple ahora un cuartode centuria a Manolete,.En 1913, siendo novillero demoda el que había de ser rival artístico de Joselitoel Gallo, sus más íntimos amigos, a los que conocióen el desaparecido café Fornos, en la calle Alcalá,frente a la de Sevilla, le organizaron un banqueteaquel verano en un elegante restaurante de El Re-tiro. La convocatoria , firmada por los escultores Se-bastián Miranda y Julio Antonio, el pintor Julio Ro-mero de Torres y los escritores Ramón del ValleInclán y Ramón Pérez de Ayala, proclamaba que eltoreo no era de más baja jerarquía estética que lasbellas artes y se sentaban algunas afirmacionesartísticas, que rimaban con el toreo revolucionariodel Terremoto de Triana, al que Valle Inclán solía de-cir: ‘¡Juanito, no te falta más que morir en el ruedo!’,a lo que Juan contestaba filosóficamente: ‘DonRamón, se hará lo que se pueda’. La comida, de mu-cha resonancia, tuvo un curioso prólogo. El dueñodel lujoso establecimiento había preparado un es-quina del amplio salón para el novillero y sus ami-gos bohemios, con objeto de no privar de los mejo-res sitios a su habitual y aristocrática clientela. ValleInclán protestó violentamente, llamando a gritos:‘¡Bellaco, gran bellaco!" al propietario del restau-rante, exigiendo se les trasladara al sitio de honor,

lo que se llevó a cabo con protestas de los despeja-dos.

En 1944 estaba Manolete en el cénit de su vidaprofesional. Aquella temporada, el 6 de julio, en lacorrida de la Prensa madrileña, con un toro sobrerode la ganadería lusitana de Pinto Barreiro, consumóuna lidia maravillosa, de la que escribió aguda-mente en el diario Arriba, R. Capdevila-CelestinoEspinosa-que había observado en los tendidos lapresencia de muchos poetas, como si presintieranque aquella tarde Manolete se iba a salir del lienzoy de la talla, del cuadro y de la escultura - del campode la plástica- para entrar en los confines vagoro-sos de la lírica. El 11 de diciembre, en Lhardy, juntoa la Puerta del Sol, se le ofrenda una memorablecena, al final de la cual Francisco Casares, secreta-rio de la Asociación de la Prensa, leyó adhesiones deEduardo Aunós, Juan Ignacio Luca de Tena, CésarJalón "Clarito"... Luego un inefable torneo poéticoa cargo de Adriano del Valle- "Si del Guerra la sen-tencia, la estampa de Lagartijo- Agustín de Foxá- "Qué le dio esa elegancia de Califa sin trono de Al-manzor, que es desdén y nobleza".- Alfredo Mar-querie- " Miércoles de Ceniza es tu faena, ya loanuncia el mechón sobre tu frente- y José María al-faro- " Clavado por las mismas zapatillas, que nohan de cero el aire con las suelas". Después habla-ron elocuentemente José María Pemán, RaimundoFernández Cuesta , Samuel Ros, Pedro Mourlane,Rafael García Serranoy Javier Millán Astray. Mano-lete que vestía traje corto negro y camisa con cho-rreras, con sobriedad sentenciosa, típicamente cor-dobesa, dio las gracias, entre palabras y lágrimas.

COMENTARIO ANEXO No figura en la crónica, pe-ro consta que además de los citados personajes, estu-vieron presentes en el acto de homenaje el marquésde Lozoya, Antonio Horcajo y el locutor segoviano deradio Madrid, José Bermejo quién leyó varios telegra-mas de adhesión. En cuanto al libro dedicado por ca-da uno de los autores, firmaron Teófilo Hernando, Vi-cente Silió, Francisco de Cossío, marqués de Lozoya,Rafael Narbona, Gregorio Marañón, Juan de Avalos,Gerardo Diego, Guillermo Luca de Tena, Rafael Mora-les, doctor Sanz Ramos, Gregorio Javier, Rafael Cam-pos de España, Sebastián Bautista de la Torre, PedroBlanco, Ricardo García "K-Hito", doctor Harold Ló-pez y Antonio Horcajo.

El 23 de mayo de1968, Andrés

Hernandoindultó a Potrico

Carta de admiración ycariño a Andrés Hernando

Homenaje de losescritores a A.Hernando

PABLO PASTOR

VICTORIANO DE LA SERNA MMaattaaddoorr ddee ttoorrooss

Reproducimos el artículo que firmó en La Hoja del Lunes deMadrid, Antonio García-Ramos por su gran interés histórico.

La Tertulia Taurina de Segovia rindió homenaje al maestro Andrés Hernando el 17 de abril del presente año. / EL ADELANTADO

Andrés Hernando en un muletazo por alto a ‘Potrico’, el toro de PabloRomero indultado en Barcelona.

24 30 de abril de 2012publicidad

Toros 2012

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