Hagan lo que Jesús les diga…Jn. 2,5

Solemnidad Patronal en honor a la

Parroquia Inmaculada ConcepciónTorococo-Mitón-Cruz Verde

Pres id ida por e l

Excmo. Mons. Vicente Ramón Hernández Pena

I

Inmaculada Concepción de la Bienaventurada

Virgen María

Torococo, 08 de diciembre de 2010CLVI años de la proclamación del Dogma por S.S. Pío IX

Monición de Entrada

¿Quién causa tanta alegría? LA CONCEPCIÓN DE MARÍA. Que viva, María Inmaculada!!! Queridos hermanos: Sean todos bienvenidos. Hoy celebramos la Inmaculada Concepción de María, la que desde el primer instante de su vida existe sin pecar. Una fiesta grande en la Iglesia Universal…María, en el evangelio, habla poco. Calla mucho. Sigue su camino, sin seguridades humanas, con la perplejidad de los que viven sólo de Dios. Pero concentra en su seno la vitalidad de amor y de esperanza de los creyentes de todos los tiempos.Y será nuestra Madre, y nos ayudará a entender algo más de la maternidad sobre la Iglesia, de nuestra propia comunidad parroquial de Torococo-Mitón y Cruz Verde, llamada a engendrar nuevos hijos de Dios cuanto más entregada esté a su Señor.Alegrémonos con nuestro Dios, porque, por María, ha hecho maravillas en nosotros. ¡Qué viva María Inmaculada!

RITOS INICIALESReunido el pueblo, el Presidente de la asamblea con los ministros va al altar, mientras se entona el canto de entrada.

CANTO DE ENTRADA

Cuando llega al altar, el sacerdote con los ministros hace la debida reverencia, besa el altar y, si se juzga oportuno, lo inciensa. Después se dirige con los ministros a la sede.Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan, mientras el sacerdote dice:

EN EL NOMBRE DEL PADRE, Y DEL HIJO, Y DEL ESPÍRITU SANTO.

El pueblo responde:Amén.

SALUDOEl Presidente, extendiendo las manos, se dirige al pueblo con la fórmula siguiente:

LA GRACIA Y EL AMOR DE JESUCRISTO, FRUTO PURÍSIMO DE MARÍA, ESTÉ CON TODOS USTEDES

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

El sacerdote, el diácono, u otro ministro idóneo, puede hacer una monición muy breve para introducir la misa del día.A continuación se hace el Acto Penitencial.

II

El presidente invita a los fieles al arrepentimiento:

MARÍA SE ENTREGÓ COMPLETAMENTE A LA ACCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO. Y NOS INDICA QUE DEBEMOS HACER LO QUE EL SEÑOR NOS DIGA. PERO SOMOS REBELDES Y NO SABEMOS DARNOS COMPLETAMENTE NI A DIOS NI A LOS DEMÁS. RECONOZCÁMONOS PECADORES.

Se hace una breve pausa de silencio.

Después el Presidente dice:

HIJO DE DIOS, QUE, NACIDO DE MARÍA, TE HICISTE NUESTRO HERMANO… El Pueblo canta:

SEÑOR, TEN PIEDAD.

El Presidente dice:

TÚ QUE VINISTE A VISITAR A TU PUEBLO CON LA PAZ…

El Pueblo canta: CRISTO, TEN PIEDAD.

El Presidente dice:

TÚ QUE VINISTE AL MUNDO PARA SALVARNOS…

El Pueblo canta: SEÑOR, TEN PIEDAD.

El presidente concluye con la siguiente plegaria:

DIOS TODOPODEROSOTENGA MISERICORDIA DE NOSOTROS, PERDONE NUESTROS PECADOS Y NOS LLEVE A LA VIDA ETERNA.

El pueblo responde:

Amén.

III

A continuación, se entona para el himno del Gloria.

GLORIA A DIOS EN EL CIELO,

y en la tierra paz a los hombres

que ama el Señor.

Por tu inmensa gloria

te alabamos,

te bendecimos,

te adoramos,

te glorificamos,

te damos gracias,

Señor Dios, Rey celestial,

Dios Padre todopoderoso.

Señor, Hijo único, Jesucristo.

Señor Dios, Cordero de Dios,

Hijo del Padre;

tú que quitas el pecado del mundo,

ten piedad de nosotros;

tú que quitas el pecado del mundo,

atiende nuestra súplica;

tú que estás sentado a la derecha del Padre,

ten piedad de nosotros;

porque sólo tú eres santo,

sólo tú Señor,

sólo tú Altísimo, Jesucristo,

con el Espíritu Santo

en la Gloria de Dios Padre.

Amén.

IV

Acabado el himno, el Presidente, con las manos juntas, dice:

OREMOS

Y todos, junto con el Presidente, oran en silencio durante unos momentos.

Después el Presidente, con las manos extendidas, dice la oración colecta.

La colecta termina siempre con la conclusión larga.

ORACIÓN COLECTA

SEÑOR DIOS NUESTRO,

QUE PARA REGIR A TU PUEBLO

HAS QUERIDO SERVIRTE DEL MINISTERIO DE LOS

SACERDOTES,

CONCEDE A ESTOS DIÁCONOS DE TU IGLESIA

JOSÉ MIGUEL, JOSÉ MANUEL, JEAN CARLOS,

AMILCAR JOSÉ Y JAVIER ALEXANDER

QUE HAN SIDO ELEGIDOS HOY PARA EL PRESBITERADO

PERSEVERAR AL SERVICIO DE TU VOLUNTAD

PARA QUE, EN SU MINISTERIO Y EN SU VIDA,

BUSQUEN SOLAMENTE TU GLORIA EN CRISTO.

ÉL, QUE VIVE Y REINA CONTIGO

EN LA UNIDAD DEL ESPÍRITU SANTO Y ES DIOS

POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS.

Al final de la oración el pueblo aclama:

Amén.

V

LITURGIA DE LA PALABRA

Los lectores van al ambón y proclaman solemnemente cada una de las lecturas, que todos escuchan.

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro del Profeta Jeremías (1, 4-9)

El Señor me dirigió estas palabras: “Desde antes de formarte en el seno materno, te conozco; desde antes de que nacieras, te consagré profeta para las naciones”.

Yo repuse: “¡Ay, Señor mío! Mira que no sé hablar, que soy un muchacho”. El Señor me contestó: “No digas soy un muchacho, que a adonde yo te envíe, irás y lo que yo te mande, lo dirás. No les tengas miedo, que yo estoy contigo para librarte”, oráculo del Señor.

El Señor extendió la mano y me tocó la boca; y me dijo: “Mira: yo pongo mis palabras en tu boca”

Palabra de Dios.

Todos aclaman:

Te alabamos, Señor

SALMO RESPONSORIAL Sal. 88

R. PROCLAMARÉ SIN CESAR LA MISERICORDIA DEL SEÑOR

He encontrado a David, mi servidor;con el óleo santo lo he consagrado.Mis manos serán su apoyoy mi brazo será su fuerza R.

Mi fidelidad y mi gracia estarán con ély en mi nombre se acrecentará su poder.Él me podrá decir: “Tú eres mi padre,el Dios que protege y que me salva” R.

VI

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la segunda carta del Apóstol San Pablo a los Corintios (4, 7-15)

Hermanos: El tesoro del ministerio lo llevamos en vasijas de barro, para que se vea que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no proviene de nosotros. Nos aprietan por todos lados, pero no nos aplastan; estamos apurados, pero no desesperados; acosados, pero no abandonados; nos derriban, pero no nos rematan; en toda ocasión y por todas partes, llevamos en el cuerpo la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo. Mientras vivimos, continuamente nos están entregando a la muerte, por causa de Jesús; para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. Así, la muerte está actuando en nosotros, y la vida en ustedes. Teniendo el mismo espíritu de fe, según lo que está escrito: Creí, por eso hablé; también nosotros creemos y por eso hablamos; sabiendo que quien resucitó al Señor Jesús también con Jesús nos resucitará y nos hará estar con ustedes. Todo es para nuestro bien. Cuantos más reciban la gracia, mayor será el agradecimiento, para gloria de Dios.

Palabra de Dios.

Todos aclaman:

Te alabamos, Señor

Sigue el ALELUYA o el canto antes del evangelio. Mientras tanto, si se usa incienso, el sacerdote lo pone en el incensario.

INTERLECCIONAL

Después el diácono (o el Presidente) va al ambón, acompañado eventualmente por los ministros que llevan el incienso y los cirios, y en el ambón hace la proclamación solemne del evangelio.

EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Juan (20,17-23)

Al atardecer de aquel día, el primero de la semana, estando cerradas, por miedo a los judíos, las puertas del lugar donde se encontraban los discípulos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: "La paz con vosotros."

Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor. Jesús les dijo otra vez: "La paz con vosotros. COMO EL PADRE ME ENVIÓ, ASÍ LOS ENVÍO YO." Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: "Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos."

Palabra del Señor

VII

Todos Aclaman:

Gloria a ti, Señor Jesús.Terminada la proclamación del evangelio el Obispo lo besa, diciendo en secreto:

Las palabras del Evangelio borren nuestros pecados.

Prosigue la misa como de costumbre. Se dice o no el Símbolo de la fe, según las rúbricas, se omite la oración universal.

CON EL CORAJE QUE NOS DA LA FE DE LA VIRGEN MADRE, OREMOS CONFIADOS LOS UNOS POR LOS OTROS. UNÁMONOS A LAS INTENCIONES, DICIENDO: ESCÚCHANOS, SEÑOR.

• Por la Iglesia. Que, como María, espere con gozo y confianza la llegada del Hijo de Dios. OREMOS.

• Por el papa, por nuestro obispo, por todos los pastores de la Iglesia. Que nos enseñen a ver en María un camino de fe, de amor a Dios y de perseverancia en la oración. OREMOS.

• Por los gobernantes de las naciones. Que eviten los conflictos y busquen sin cansancio los medios para encontrar la paz y la solidaridad. OREMOS.

4. Por los más necesitados. Por quienes ven cómo sus vidas transcurren en la miseria. Que encuentren en los cristianos la acogida que necesitan. OREMOS.

5. Por nuestra Parroquia. Que la obra de evangelización que se emprende produzca frutos y seamos fieles a la voluntad del Padre, para que sean palpables en nuestro mundo los signos visibles del Reino de los cielos. OREMOS.

6. Para que Dios nos regale un hijo sacerdote o una hija religiosa. Para que las comunidades sean bendecidas a la intercesión de nuestra excelsa patrona: María Inmaculada. OREMOS.

MIRA, SEÑOR, A QUIENES NOS ACOGEMOS BAJO LA PROTECCIÓN DE LA MADRE DE TU HIJO Y, GRACIAS A SU ORACIÓN, ACOGE NUESTRAS SÚPLICAS. POR JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR.

LITURGIA EUCARÍSTICA

VIII

1. Señor, con María Inmaculada, potente contra el mal, reconocemos que eres la fuerza para iluminar las realidades. Por eso recibe estas luces de la mano de los hijos de Mitón. Ellos vienen con su Madre a agradarte eternamente.2. Señor, con María Inmaculada, fuente de nuestra alegría, nos postramos ante ti, porque la verdadera felicidad viene de ti únicamente. Con Ella, se presenta el sector María Auxiliadora con estas frutas; porque una muestra de tu amor es que nos das todo lo que realmente necesitamos.

3. Señor, con María Inmaculada, madre de misericordia, adoramos tu misterio de amor y sensibilidad ante las carencias humanas. Por eso, los sectores N.S. del Carmen y Santísima Trinidad traen a tu altar cajas con ropas, para tus hijos más necesitados. Que tu misericordia venga sobre nosotros como lo esperamos de ti.

4. Señor, con María Inmaculada, madre de la esperanza caemos rendidos ante tus promesas. Venimos tus hijos de los sectores San Pedro y San Pablo a presentarte estas golosinas, sonrisas de nuestros niños. Protege a todos los infantes de nuestra parroquia desde el mismo momento de su concepción.

5. Señor, con María Inmaculada, madre de la divina gracia, reconocemos que tú eres el Santo de los santos, el Agraciado; por ello recibe de los sectores Divina Misericordia, San Benito y de la Comunidad N.S. de la Zerpa estas cajas de velones; símbolo de la luz perenne ante el Sagrario. Que cada uno de ellos represente nuestra vida que desea iluminar el camino de otros.

6. Señor, con María Inmaculada, discípula del Señor, nos sentamos a la Mesa de tu Palabra y al Altar de tu sacrificio; por ello, tus hijos de los sectores Santa María Goretti y El Buen Pastor te presentan esta tela con la que se embellecerá tu altar y el lugar que hemos reservado para ti.

7. Señor, con María Inmaculada, madre de la Iglesia, nos unimos al amor de tu Esposa por ti. Cada celebración es única e irrepetible. Por eso, los sectores Corazón de Jesús y Rosa Mística traen ante ti estas telas, con la que tus sacerdotes se engalanarán en el servicio que prestan a tu Majestad y a nuestra propia salvación.

8. Señor, con María Inmaculada, auxilio de los cristianos, agradecemos el don precioso de la intercesión de la Mujer vestida de Sol; así tus hijos de San Francisco y San Onofre presentan estos alimentos para el remedio temporal de los necesitados de nuestra comunidad parroquial.

9. Señor, con María Inmaculada, reina de la paz, reconocemos que la pureza de esta Madre es símbolo de paz verdadera; por ello, tus hijos de San Isidro, traen a tu Mesa estas hojas que se utilizan tanto, para el conocimiento y desarrollo de las actividades que siguen estimulando el crecimiento de la fe de tus hijos e hijas.

Acabada la procesión de las ofrendas los ministros colocan en el altar el corporal, el purificador, el cáliz y el misal; mientras tanto puede ejecutarse un canto apropiado.

IX

CANTO DE OFERTORIO

El Presidente se acerca al altar, toma la patena con el pan y. manteniéndola un poco elevada sobre el altar. dice en secreto:

Bendito seas, Señor, Dios del universo,por este pan,fruto de la tierra y del trabajo del hombre,que recibimos de tu generosidad y ahora te presentamos;él será para nosotros pan de vida

Después deja la patena con el pan sobre el corporal.Si no se canta durante la presentación de las ofrendas, el Presidente puede decir en voz alta estas palabras; al final el pueblo puede aclamar:

Bendito seas por siempre, Señor.Después deja la patena con el pan sobre el corporal. El diácono, echa vino y un poco de agua en el cáliz, diciendo en secreto;

El agua unida al vinosea signo de nuestra participación en la vida divinade quien ha querido compartir nuestracondición humana.

Después el Presidente toma el cáliz y, manteniéndolo un poco elevado sobre el altar, dice en secreto:

Bendito seas, Señor,Dios del universo, por este vino,fruto de la vid y del trabajo del hombre,que recibimos de tu generosidad y ahora te presentamos;él será para nosotros bebida de salvación.

Después deja el cáliz sobre el corporal.Si no se canta durante la presentación de las ofrendas, el Presidente puede decir en voz alta estas palabras; al final el pueblo puede aclamar:

Bendito seas por siempre, Señor.

A continuación, el Presidente, inclinado, dice en secreto:

Acepta, Señor, nuestro corazón contritoy nuestro espíritu humilde;que éste sea hoy nuestro sacrificio y que sea agradable en tu presencia,Señor, Dios nuestro.

Y si se juzga oportuno; inciensa las ofrendas y el altar. A continuación el diácono inciensa al Presidente, a los concelebrantes y al pueblo.Luego el Presidente, de pie a un lado del altar, se lava las manos, diciendo en secreto:

Lava del todo mi delito, Señor, limpia mi pecado.

X

Después, en el centro del altar y de cara al pueblo, extendiendo y juntando las manos, dice la siguiente fórmula:

ORAD, HERMANOS,PARA QUE, TRAYENDO AL ALTARLOS GOZOS Y LAS FATIGAS DE CADA DÍA,NOS DISPONGAMOS A OFRECER EL SACRIFICIOAGRADABLE A DIOS, PADRE TODOPODEROSO.

El pueblo responde:

El Señor reciba de tus manos este sacrificio, para alabanza y gloria de su nombre, para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.

Luego el Presidente, con las manos extendidas, dice la oración obre las ofrendas.La oración sobre las ofrendad termina siempre con la conclusión breve.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

TÚ HAS QUERIDO SEÑOR,

QUE TUS SACERDOTES SEAN MINISTROS DEL ALTAR Y

DEL PUEBLO;

TE ROGAMOS QUE, POR LA EFICACIA DE ESTE

SACRIFICIO,

EL MINISTERIO DE TUS SIERVOS TE SEA SIEMPRE GRATO

Y DÉ FRUTOS PERMANENTES EN TU IGLESIA.

POR JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR.

El pueblo responde:Amén

El presidente comienza la plegaria eucarística con la Anáfora. El presidente prosigue la Anáfora con las manos extendidas:

PREFACIO I DE LAS ORDENACIONES

CRISTO, SACERDOTE ETERNO

V. El Señor esté con ustedesR. Y con tu espíritu

V. Levantemos el corazónR. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

XI

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

EN VERDAD ES JUSTO Y NECESARIO, ES NUESTRO DEBER Y SALVACIÓNDARTE GRACIAS SIEMPRE Y EN TODO LUGAR,SEÑOR, PADRE SANTO, DIOS TODOPODEROSO Y ETERNO.

QUE CONSTITUISTE A TU ÚNICO HIJOPONTÍFICE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNAPOR LA UNCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO,Y DETERMINASTE, EN TU DESIGNIO SALVÍFICO,PERPETUAR EN LA IGLESIA SU ÚNICO SACRIFICIO.

ÉL NO SÓLO CONFIERE EL HONOR DEL SACERDOCIO REALA TODO SU PUEBLO SANTO,SINO TAMBIÉN, CON AMOR DE HERMANO,ELIGE A HOMBRES DE ESTE PUEBLO,PARA QUE, POR LA IMPOSICIÓN DE LAS MANOS,PARTICIPEN EN SU SAGRADA MISIÓN.

ELLOS RENUEVAN EN NOMBRE DE CRISTO EL SACRIFICIO DE LA REDENCIÓN,PREPARAN A TUS HIJOS EL BANQUETE PASCUAL,PRESIDEN A TU PUEBLO SANTO EN EL AMOR,LO ALIMENTAN CON TU PALABRA Y LO FORTALECEN CON LOS SACRAMENTOS.

TUS SACERDOTES, SEÑOR,AL ENTREGAR SU VIDA POR TI Y POR LA SALVACIÓN DE LOS HERMANOS,VAN CONFIGURÁNDOSE A CRISTO,Y HAN DE DARTE ASÍ TESTIMONIO CONSTANTE DE FIDELIDAD Y AMOR.

POR ESO, NOSOTROS, SEÑOR, CON LOS ÁNGELES Y LOS SANTOS,CANTAMOS TU GLORIA DICIENDO:

Santo, Santo, Santo…

PLEGARÍA EUCARÍSTICA I

CANON ROMANO

El sacerdote, con las manos extendidas dice:

CP PADRE MISERICORDIOSO, XII

TE PEDIMOS HUMILDEMENTE POR JESUCRISTO, TU HIJO, NUESTRO SEÑOR,

Junta las manos y dice:

QUE ACEPTES Y BENDIGAS

Traza una sola vez, el signo de la cruz sobre el pan y el vino conjuntamente, diciendo:

ESTOS DONES, ESTE SACRIFICIO SANTO Y PURO QUE TE OFRECEMOS,

Con las manos extendidas, prosigue:

ANTE TODO, POR TU IGLESIA SANTA Y CATÓLICA, PARA QUE LE CONCEDAS LA PAZ, LA PROTEJAS,LA CONGREGUES EN LA UNIDAD Y LA GOBIERNES EN EL MUNDO ENTERO,CON TU SERVIDOR EL PAPA BENEDICTO XVI,CONMIGO, INDIGNO SIERVO TUYO,Y TODOS LOS DEMÁS OBISPOS QUE FIELES A LA VERDAD, PROMUEVEN LA FE CATÓLICA Y APOSTÓLICA.

CONMEMORACIÓN DE LOS VIVOS

[Pbro. Amilcar] Acuérdate, Señor, de tus hijos sacerdotes José Miguel, José Manuel, Jean Carlos, Amilcar José y Javier Alexander.

Junta las manos y ora unos momentos por quienes tiene intención de orar. Después, con las manos extendidas, prosigue:

y de todos aquí reunidos, cuya fe y entrega bien conoces; por ellos y todos los suyos, por el perdón de sus pecados y la salvación que esperan, te ofrecemos, y ellos mismos te ofrecen, este sacrificio de alabanza, a ti, eterno Dios, vivo y verdadero.

CONMEMORACIÓN DE LOS SANTOS

Con las manos extendidas prosigue:

XIII

[Pbro. José Manuel] Reunidos en comunión con toda la Iglesia, veneramos la memoria, ante todo, de la gloriosa siempre Virgen María, Madre de Jesucristo, nuestro Dios y Señor; la de su esposo, San José; la de los santos apóstoles y mártiresPedro y Pablo, Andrés,

[Santiago y Juan, Tomás, Santiago, Felipe, Bartolomé, Mateo, Simón y Tadeo; Lino, Cleto, Clemente, Sixto, Cornelio, Cipriano, Lorenzo, Crisógono, Juan y Pablo, Cosme y Damián,]

y la de todos los santos; por sus méritos y oraciones concédenos en todo tu protección.

Con las manos extendidas prosigue el presidente:

CP ACEPTA, SEÑOR, EN TU BONDAD, ESTA OFRENDA DE TUS SIERVOS, Y DE TODA TU FAMILIA SANTA; TE LA OFRECEMOS TAMBIÉN POR TUS HIJOSQUE HAN SIDO LLAMADOSAL ORDEN DE LOS PRESBÍTEROS;CONSERVA EN ELLOS TUS DONESPARA QUE FRUCTIFIQUEN LO QUE HAN RECIBIDO DE TU BONDAD.

Extendiendo las manos sobre las ofrendas, dice:

CC BENDICE Y SANTIFICA, OH PADRE, ESTA OFRENDA, HACIÉNDOLA PERFECTA, ESPIRITUAL Y DIGNA DE TI, DE MANERA QUE SEA PARA NOSOTROS CUERPO Y SANGRE DE TU HIJO AMADO,

XIV

Cuerpo

JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR.

Junta las manos.En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor han de pronunciarse con claridad, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

EL CUAL, LA VÍSPERA DE SU PASIÓN,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue:

TOMÓ PAN EN SUS SANTAS Y VENERABLES MANOS,

Eleva los ojos.

Y, ELEVANDO LOS OJOS AL CIELO, HACIA TI, DIOS, PADRE SUYO TODOPODEROSO DANDO GRACIAS TE BENDIJO, LO PARTIÓ, Y LO DIO A SUS DISCÍPULOS DICIENDO:

Se inclina un poco.

TOMAD Y COMED TODOS DE EL,

PORQUE ESTO ES MI CUERPO,

QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego sobre la patena y lo adora haciendo genuflexión. Después prosigue:

DEL MISMO MODO, ACABADA LA CENA,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, dice:

XV

SangreTOMÓ ESTE CÁLIZ GLORIOSO EN SUS SANTAS Y VENERABLES MANOS, DANDO GRACIAS TE BENDIJO, Y LO DIO A SUS DISCÍPULOS, DICIENDO:

Se indina un poco.

TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL,

PORQUE ESTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE

SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y

ETERNA,

QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS

Y POR TODOS LOS HOMBRES

PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.

HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora haciendo genuflexión.

Luego dice:

ESTE ES EL SACRAMENTO DE NUESTRA FE.

El pueblo responde:Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. ¡Ven, Señor Jesús!

POR ESO, PADRE, NOSOTROS, TUS SIERVOS, Y TODO TU PUEBLO SANTO,

XVI

AL CELEBRAR ESTE MEMORIAL DE LA MUERTE GLORIOSA DE JESUCRISTO, TU HIJO, NUESTRO SEÑOR; DE SU SANTA RESURRECCIÓN DEL LUGAR DE LOS MUERTOS Y DE SU ADMIRABLE ASCENSIÓN A LOS CIELOS;TE OFRECEMOS, DIOS DE GLORIA Y MAJESTAD, DE LOS MISMOS BIENES QUE NOS HAS DADO, EL SACRIFICIO PURO, INMACULADO Y SANTO: PAN DE VIDA ETERNA Y CÁLIZ DE ETERNA SALVACIÓN.

Prosigue:

MIRA CON OJOS DE BONDAD ESTA OFRENDA Y ACÉPTALA, COMO ACEPTASTE LOS DONES DEL JUSTO ABEL, EL SACRIFICIO DE ABRAHAM, NUESTRO PADRE EN LA FE, Y LA OBLACIÓN PURA DE TU SUMO SACERDOTE MELQUISEDEC.Inclinado con las manos juntas, prosigue:

TE PEDIMOS HUMILDEMENTE, DIOS TODOPODEROSO, QUE ESTA OFRENDA SEA LLEVADA A TU PRESENCIA, HASTA EL ALTAR DEL CIELO, POR MANOS DE TU ÁNGEL, PARA QUE CUANTOS RECIBIMOS EL CUERPO Y LA SANGRE DE TU HIJO, AL PARTICIPAR AQUÍ DE ESTE ALTAR, Se endereza y se signa, diciendo:

SEAMOS COLMADOS DE GRACIA Y BENDICIÓN.

CONMEMORACIÓN DE LOS DIFUNTOS [Pbro. José Miguel] Acuérdate también, Señor, de tus hijos Obispos, Presbíteros, Diáconos de esta Iglesia Particular y familiares de los recién ordenados sacerdotes,que nos han precedido con el signo de la fe y duermen ya el sueño de la paz.Junta las manos y ora por unos momentos por los difuntos por quienes tiene intención de orar.Después, con las manos extendidas, prosigue

A ellos, Señor, y a cuantos descansan en Cristo, concédeles el lugar del consuelo,de la luz y de la paz.

XVII

Junta las manosCon la mano derecha se golpea el pecho diciendo:

[Pbro. Jean Carlos] Y a nosotros, pecadores, siervos tuyos,

Con las manos extendidas prosigue:

que confiamos en tu infinita misericordia, admítenos en la asamblea de los santos apóstoles y mártires Juan el Bautista, Esteban, Matías y Bernabé,

[Ignacio, Alejandro, Marcelino y Pedro, Felicidad y Perpetua, Águeda y Lucia, Inés, Cecilia, Anastasia,]

y de todos los santos; y acéptanos en su compañía, no por nuestros méritos, sino conforme a tu bondad.Junta las manos y prosigue:

Por Cristo, Señor nuestro, por quien sigues creando todos los bienes, los santificas, los llenas de vida, los bendices y los repartes entre nosotros.

Toma la patena, con el pan consagrado, y el cáliz y, sosteniéndolos elevados, dice:

CC POR CRISTO, CON ÉL Y EN ÉL, A TI, DIOS PADRE OMNIPOTENTE, EN LA UNIDAD DEL ESPÍRITU SANTO, TODO HONOR Y TODA GLORIA POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS.

El pueblo aclama:Amén.

RITO DE LA COMUNIÓN

XVIII

Una vez que ha dejado el cáliz y la patena, el Presidente con las manos juntas, dice:

ANTES DE PARTICIPAR EN EL BANQUETE DE LA EUCARISTÍA, SIGNO DE RECONCILIACIÓNY VÍNCULO DE UNIÓN FRATERNA,OREMOS JUNTOS COMO EL SEÑOR NOS HA ENSEÑADO:

Extiende las manos y, junto al pueblo, dice:

Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre;venga a nosotros tu reino;hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día;perdona nuestras ofensas,como también nosotros perdonamosa los que nos ofenden;no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.

El presidente, con las manos extendidas, prosigue él solo:

LÍBRANOS DE TODOS LOS MALES, SEÑOR Y CONCÉDENOS LA PAZ EN NUESTROS DÍAS, PARA QUE, AYUDADOS POR TU MISERICORDIA,VIVAMOS SIEMPRE LIBRES DE PECADO Y PROTEGIDOS DE TODA PERTURBACIÓN, MIENTRAS ESPERAMOS LA GLORIOSA VENIDA DE NUESTRO SALVADOR JESUCRISTO.

Junta las manos.El pueblo concluye la oración, aclamando:

Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.

Después el presidente, con las manos extendidas, dice en voz alta:

SEÑOR JESUCRISTO, QUE DIJISTE A TUS APÓSTOLES:"LA PAZ OS DEJO, MI PAZ OS DOY",

XIX

NO TENGAS EN CUENTA NUESTROS PECADOS, SINO LA FE DE TU IGLESIA Y, CONFORME A TU PALABRA, CONCÉDELE LA PAZ Y LA UNIDAD.

Junta las manos

TÚ QUE VIVES Y REINAS POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS.

El pueblo responde:

Amén.

El presidente, extendiendo y juntando las manos, añade:

LA PAZ DEL SEÑOR ESTÉ SIEMPRE CON USTEDES,

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

Luego, si se juzga oportuno, el diácono, o el Presidente, añade:

En la alegría de Cristo Sacerdote, pueden darse el abrazo de la paz.

Todos, según la costumbre del lugar, se dan la paz.Después toma el pan consagrado, lo parte sobre la patena y deja caer una parte del mismo en el cáliz diciendo en secreto:

El Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, unidos en este cáliz, sean para nosotros alimento de vida eterna

Mientras tanto se canta o se dice:

CORDERO DE DIOS

A continuación el Presidente, con las manos juntas, dice en secreto la oración siguiente:Señor Jesucristo, Hijo de Dios vivo,que por voluntad del Padre,cooperando el Espíritu Santo,diste con tu muerte la vida al mundo,

XX

líbrame, por la recepción de tu Cuerpo y de tu Sangre,de todas mis culpas y de todo mal.Concédeme cumplir siempre tus mandamientosy jamás permitas que me separe de ti.

El Presidente hace una genuflexión, toma el pan consagrado y, sosteniéndolo un poco elevado sobre la Patena, lo muestra al pueblo, diciendo;

ÉSTE ES EL CORDERO DE DIOS, QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO. DICHOSOS LOS INVITADOS A LA CENA DEL SEÑOR.

Y, juntamente con el pueblo, añade:

Señor, no soy dignode que entres en mi casa,pero una palabra tuyabastará para sanarme.

El Presidente comulga y dice en secreto:

El Cuerpo de Cristo me guarde para la vida eterna.

Y comulga reverentemente el Cuerpo de Cristo.Después toma el cáliz y dice en secreto:

La Sangre de Cristo me guarde para la vida eterna.

Y bebe reverentemente la Sangre de Cristo.

CANTO DE COMUNIÓN

Después toma la patena o la píxide, se acerca a tos que quieren comulgar y les presenta el pan consagrado que sostiene un poco elevado, diciendo a cada uno de ellos:

El Cuerpo de Cristo

El que va a comulgar responde:

Amén.

Acabada la comunión, el diácono, el acólito, o el mismo presidente, purifica la patena sobre el cáliz y también el mismo cáliz; si se prefiere puede hacerse en la credencia después de la ceremonia.

Si el presidente hace la purificación, dice en Secreto:

Haz, Señorque recibamos con un corazón limpio

XXI

el alimento que acabamos de tomar, y el don que nos haces en esta vida nos aproveche para la eterna.

Después el presidente puede ir a la sede. Si se juzga oportuno, se pueden guardar unos momentos de silencio o cantar un salmo o cántico de alabanza.Luego, de pie en la sede o en el altar, el Presidente dice:

OREMOS

Y todos juntos con el Presidente; oran en silencio durante un momento, a no ser que el silencio ya se haya hecho antes. Después el Presidente, con las manos extendidas, dice la oración después de la comunión.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

TE PEDIMOS, SEÑOR,

QUE EL SACRIFICIO QUE TE HEMOS OFRECIDO

Y LA VÍCTIMA SANTA QUE HEMOS COMULGADO

LLENEN DE VIDA A TUS SACERDOTES Y A TUS FIELES,

PARA QUE, UNIDOS A TI POR UN AMOR CONSTANTE,

PUEDAN SERVIRTE DIGNAMENTE.

POR JESUCRISTO, NUESTRO SEÑOR.El pueblo responde:

Amén.

Las manos son el medio de transmisión de la gracia y del poder. Es tradición, venerar las manos del recién ordenado sacerdote, pues sus manos son de Cristo y para Cristo; y al besarlas, besamos a Cristo rindiéndole el mejor de los regalos a su misericordia al concedernos un nuevo sacerdote. Por tal motivo, finalizada la Solemne Eucaristía los nuevos Sacerdotes se acercarán para que todos nosotros besemos sus manos ungidas y consagradas.

RITO DE CONCLUSIÓN

Bendición final y despedidaXXII

En lugar de la bendición acostumbrada, puede decirse la siguiente bendición. El diácono puede hacer la invitación:

Inclínense para recibir la bendición. Y, seguidamente, el Obispo, con las manos extendidas sobre los ordenados y el pueblo, pronuncia la bendición:

EL DIOS QUE DIRIGE Y GOBIERNA A LA IGLESIAMANTENGA SU INTENCIÓNY FORTALEZCA SU CORAZÓNPARA QUE CUMPLAN FIELMENTE EL MINISTERIO PRESBITERAL.

El pueblo responde:Amén.

El presidente continúa:

QUE ÉL LES HAGA SERVIDORES Y TESTIGOS EN EL MUNDO DE LA VERDAD Y DEL AMOR DIVINO,Y MINISTROS FIELES DE LA RECONCILIACIÓN.

El pueblo responde:

Amén.El presidente continúa:

QUE LES HAGA PASTORES VERDADEROS,QUE DISTRIBUYAN LA PALABRA DE LA VIDA Y EL PAN VIVO,PARA QUE LOS FIELES CREZCAN EN LA UNIDAD DEL CUERPO DE CRISTO.

El pueblo responde:

Amén.El presidente bendice al pueblo diciendo:

Y LA BENDICIÓN DE DIOS TODOPODEROSO, PADRE, HIJO Y ESPÍRITU SANTO, DESCIENDA SOBRE USTEDES.

El pueblo responde:

Amén.

Luego el diácono, o el mismo presidente, con las manos juntas, despide al pueblo, diciendo:

Con la alegría de haber participado en esta celebración. Pueden ir en paz.

XXIII

El pueblo responde:

Demos gracias a Dios.

Después el Presidente besa con veneración el altar, como al comienzo, y, hecha la debida reverenda con los ministros, se retira a la sacristía.

XXIV