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Existen diferentes factores que

causan el mal aliento como

puede ser los problemas

gástricos, falta de higiene

bucal, enfermedades de las

encías, dieta inapropiada,

estreñimiento, fumar, diabetes,

indigestión, mal

funcionamiento hepático,

goteo postnasal o estrés.

Igualmente, puede

aparecer la halitosis o

mal aliento después de

una comida

abundante en ajo,

cebolla o de especies.

En cualquier caso,

aquí te ofrecemos

unos trucos que te

ayudarán a

combatirlo.

1 Come sano.

Come bien, come sano. Si

gozas de buena salud

reduces drásticamente las

posibilidades de padecer

halitosis.

2 Evita alimentos de sabor

fuerte.

Evita comer alimentos de

sabor `fuerte´: cebolla,

ajo, pimienta, quesos, etc.

Productos como el café, el

té, el tabaco y alcohol

pueden contribuir a que

tengas mal aliento.

3 Cepillar después de cada comida.

¡Cepíllate los dientes después de cada

comida y antes de dormir! Después de

comer y mientras estamos dormidos se

acumulan en nuestra boca un

elevadísimo número de bacterias que

pueden producir mal aliento, la mejor

manera de acabar con ellas es lavándose

los dientes.

4 Acuérdate de cepillarte la lengua.

Cepíllate la lengua cuando te laves los

dientes, ya que la concentración de

bacterias es muy alta. También deberías

complementar el cepillado con enjuague

bucal e hilo dental.

5 El agua, una aliada.

Bebe mucha agua. Aunque no lo creas,

el agua ayudará a reducir tu mal aliento.

6 Toma caramelos o chicles.

Para disimular la halitosis puedes recurrir a

caramelos o chicles.

7 No abuses del café

Reduce todo lo que puedas el consumo de

sustancias como el tabaco, el café o el

alcohol. Tu boca te lo agradecerá y tú

también.

8 Acude al

dentista.

¡No olvides visitar

al dentista por lo

menos una vez al

año!

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