Periodismo en Nuevo León

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 Leopoldo Espinosa Benavides    D    E    Ú    L    T    I    M    A    H    O    R    A    P   e   r   i    o   d   i    s    m    o   e    n    N   u   e   v    o    L   e    ó    n

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Periodismo en Nuevo León

Transcript of Periodismo en Nuevo León

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    Leopoldo Espinosa Benavides

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    Periodismo en Nuevo len

  • De ltima horaPeriodismo en Nuevo len

  • Reservados todos los derechos. Queda prohibida la reproduccin total o parcial de esta obra, por cualquier medio o procedimiento incluidos los electrnicos sin permiso escrito por parte de los titulares de los derechos.

    Zuazua Sur 105-2, CentroCP 64000, Monterrey, Nuevo Len(81) 8344 2970 y 71www.fondoeditorialnl.gob.mx

    D.R. 2010 Fondo Editorial de Nuevo LenFotografas de portada y separadores: Dreamstime.com

    ISBN 978-607-7577-64-5

    Impreso en Mxico

  • Leopoldo Espinosa Benavides

    De ltima horaPeriodismo en Nuevo len

  • nota del autor

    La mayora de los recursos grficos utilizados para ilustrar este libro proceden de Internet. Muchas son las fuentes que me han permitido servirme sin mayores limitaciones de los recursos all puestos generosamente a disposicin de todos. Gracias a ellas los lectores de este libro vern algunos rostros de nuestros periodistas e imgenes de nuestros peridicos, de los de antes y de los de hoy. Con el propsito de dejar sentada la correspondiente acreditacin de sus fuentes, expongo al final de la bibliografa los sitios de donde las tom. Como se sabe, una vez en la red una imagen puede aparecer en numerosas pginas. He tratado de tomarlas de sus websites originales, dentro de lo que me fue posible.

    agradecimientos

    Para la preparacin de este libro cont en distintos momentos con la generosa contribucin de los siguientes amigos: Nelly Cepeda Gonzlez, Daniel Dimas Segovia, Eloy Garza Gonzlez, Eduardo Gonzlez Cazares, scar Gonzlez Medina, Gloria Gonzlez Sols, Mario Nieves Cruz y Fermn Prez Aguilar.

  • prefacio

    ~por qu este libro?

  • Quien narra lo que ve, interpreta lo que narra,

    cuestiona lo que interpreta,y no se avergenza de cuestionar,

    se y slo ese individuo, puede aspirara ser un periodista.

    A las seis y media de la maana, de lunes a sbado, mis tres hermanos y yo debamos estar sentados a la mesa, baados y listos para desayunar con hambre, por supuesto y los libros en orden, para ir a la escuela. Mi padre, un estupendo qumico farmacutico, lea en silencio El Porvenir desde un cuarto de hora antes, y mi madre inundaba la casa con un delicioso e incon-fundible aroma de chorizo con huevo, caf hervido y riqusimas tortillas de harina, levantadas del comal todava infladas, que temprano amasaba con nata de leche de vaca en vez de la comn manteca Lirio.

    Una vez sentados, pap nos lea en voz alta las noticias ms relevantes, que previamente clasificaba, cerciorndose de que pusiramos atencin y engolando su voz cual locutor de radio en cabina tempranera. En aquella poca mi intuicin infantil me deca que los peridicos deberan tener propiedades digestivas o algo as, porque mi padre no tomaba ni una taza de caf si no tena a la mano el ejemplar del da. Su lectura era continua, interrumpida apenas unos breves momentos, los necesarios para desayu-nar, y en el camino a la lejana parada de los camiones urbanos, ya susten-tbamos un primer examen de conocimientos: l nos preguntaba algo de las noticias.

    Fue en mi casa paterna donde aprend que un peridico de ayer es lo ms viejo que puede existir. Pero tambin supe por boca de mi progenitor, que el peridico es la universidad de los pobres, concepto que despus escuchara

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    a otros hombres nacidos con el siglo XX, quienes tenan el concepto de que la universidad era inalcanzable para quienes no tenan dinero.

    As, entre la educacin familiar y las versiones extraoficiales, conoc la existencia y utilidad de los peridicos que informan y educan. Aunque me desarroll en un ambiente diverso y ni me percataba que poda apreciar las notas bien redactadas, distinguiendo lo trascendental en una edicin noti-ciosa con slo recordar el tono de voz de mi padre, me qued la costumbre de buscar siempre la manera de estar informado.

    No identifico la poca exacta en que comenc a acercarme a los periodis-tas, pero de lo que estoy seguro es que la impronta de trato cotidiano con el maestro Jorge Villegas y la necesidad de saber el origen de las cosas, herencia de mi madre, me llevaron al periodismo. No es ste el primer escollo que fabrico para impedirme descansar al trmino de mi trabajo cotidiano, pero lo hago con placer. Lo entiendo como el pago de la colegiatura a la escuela donde aprendo el oficio que ahora practico. El periodismo me ha aceptado, como a la mayora de los periodistas de mi generacin, sin tener una sola hora de estudio terico, aunque confieso que en los ltimos quince aos he estado ms tiempo ante a una computadora y cerca de una mquina rotativa de peridico, que frente a cualquier persona.

    El trabajo periodstico es homrico, sus costos de siembra rebasan por mu-cho a los beneficios de su cosecha. Por eso admiro a los periodistas profesio-nales y por esos hroes de aguda inteligencia y frrea voluntad para cerrar la edicin del da, me atrevo a escribir este libro, en el que seguramente hay involuntarias omisiones, pero considero que vale la pena hacer este ejercicio inicial de compilacin de nombres vinculados al periodismo local.

    Comenzar recordando al lector que el concepto de peridico naci mucho antes que la imprenta, pero el impacto de este invento fue tan grande que a aquella actividad y a sus representantes actualmente se les identifica como pren-

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    sa, en alusin a la mquina que imprime. Con el paso del tiempo se desarroll la tecnologa, y se termin clasificndo al peridico como prensa escrita, para diferenciarlo de la electrnica y de Internet, a la vez que desaparecan para tales usos el telgrafo, el teletipo e incluso el fax.

    Hay quien dice, como veremos ms adelante, que el periodismo es el her-mano menor de la literatura, pero su espritu es diferente y ms sus derivados o gneros como la noticia, el reportaje o la crnica, que deben ajustarse a la realidad, mientras que la literatura tiene otros fines y productos. Desde lue-go que hay vnculos y el ms cercano entre ambas actividades es la escritura. Le invito a que juntos veamos una fotografa instantnea de lo que ha sido el periodismo a travs de la historia. Y que al final hagamos una especie de zoom sintetizador sobre los periodistas de Nuevo Len.

    Para guardar el equilibrio que merece un tema de tal envergadura, en el eplogo de este cuaderno reproduzco mi artculo Pornografa periodstica, en el que intento sealar algunas distorsiones que padece el periodismo actual.

    Monterrey, verano de 2010

  • ndice

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    47

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    85156

    vivir entre noticiasla escritura Escritura y periodismo El periodismo y la literaturael negocio del periodismo Apuntes sobre la historia del periodismo El periodismo en Mxico El periodismo en Nuevo Len Desarrollo de los peridicos en Nuevo Len tica periodstica en materia electoral Peridicos locales desaparecidosmedios y organizaciones mediticas La radio La televisin Las organizaciones mediticaspornografa informativa El rating manda Antecedentes El amarillismo moderno viene de Estados Unidos La violencia vende

    catlogo biogrfico-profesionalfuentes bibliogrficas y de internet

    primera parte

    segunda parte

  • primera parte

  • vivir entrenoticias

  • El tiempo convierte en historia lo que otrora fue periodismoJos Acosta Montoro

    Vivimos la poca de la informacin; nos llega tanta, que necesitamos clasificarla para su correcta interpretacin, pues las noticias atiborran el ambiente. Pero intentar evadirnos aislndonos, sera absurdo; ni Robinson Crusoe, el nufrago de la genial novela de Daniel Defoe, se senta comple-tamente solo, porque una Biblia, de contenido noticioso retrasado en siglos, sustitua al peridico. Quienes dejan de leer o escuchar noticias para sentirse mejor, evaden una realidad que tarde o temprano los alcanzar, pues la causa siempre producir efectos, incluso si no tenemos conocimiento de su exis-tencia. Incomunicarse es pretender que el sol deje de brillar slo por cerrar las cortinas de casa.

    Saber lo que sucede es primordial necesidad del hombre. As lo recla-ma su naturaleza de homo sapiens. Para ilustrar esta tesis basta recapitular lo ocurrido en Pars durante la guerra franco-prusiana de 1870, cuando se impuso un cerco alemn que dur cuatro meses. El reclamo de la poblacin parisina era, despus del alimento, conocer las noticias, pues necesitaba sa-ber lo que suceda fuera de la ciudad sitiada. El malestar se agudiz en las dos ocasiones de sitio total que se mantuvieron tres semanas cada uno. Por las noches, los parisinos enclaustrados se arremolinaban frente al Ministerio del Interior a esperar la fijacin de boletines que implcita o indirectamente dieran alguna noticia. All se apreci con nitidez la necesidad por saber lo que pasaba en el mundo.

    Esta avidez por las noticias se manifest cuando los prusianos impidieron que el embajador norteamericano recibiera sus acostumbrados ejemplares se-manales del London Times. Empero, como Estados Unidos siempre ha sido

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    una nacin respetada, o temida, los alemanes permitieron que el embajador recibiera el peridico, a condicin de que no divulgara su contenido. Ellos saban que la ignorancia es insoportable una vez que se tiene conciencia de ella, que era una ms de las formas de torturar a los habitantes de la Ciudad Luz. Para obligar al embajador norteamericano a que exigiera su peridico a los sitiadores, los parisinos, frente a la embajada gritaban en tono enrgico: Nosotros les dimos a Lafayette, a cambio slo les pedimos un ejemplar de un peridico... y en ingls. En su desesperacin le recordaban al embajador, el favor hecho por Francia al Gobierno de Estados Unidos, cuando Bona-parte les vendi el territorio de Luisiana que inclua la ciudad de Lafayette.

    Este ejemplo se nos puede aplicar a nosotros mismos, pues cuando por alguna circunstancia quedamos sin conexin con nuestro mundo habitual, la urgencia por saber lo que ha pasado en el nterin de incomunicacin es insoportable.

    No se puede vivir bien si no se sabe qu sucede. Las noticias proveen el conocimiento indispensable para encontrar el equilibrio entre lo que el humano es y lo que representa para el universo. La necesaria actualizacin del concepto de identidad se produce de manera automtica al saber lo su-cedido en el mbito local, nacional y, cada vez ms, en el internacional. La globalizacin, que reduce el tamao virtual del planeta, tiene que ver tanto con los sistemas econmicos y polticos, como con el avance de los medios de comunicacin.

    Es necesario saber qu significa y en qu nos puede impactar lo sucedi-do en las bolsas de valores del mundo, no slo en la mexicana; o qu pasa en el Partido de la Revolucin Democrtica, o quin gan el Campeonato Mundial de Ftbol en Sudfrica, o las posturas del partido demcrata nor-teamericano. Porque si hoy mismo una plaga devasta los cultivos de arroz en oriente nos afecta a todos, no slo a los consumidores directos. La erupcin

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    de un volcn lejano, una fuga de petrleo en el mar, o una nueva enfermedad en cualquier pas, son temas de nuestra incumbencia.

    Miles de ejemplos confirman la importancia y las necesidad de la infor-macin, incluso de dar un paso ms, de conocer los intestinos del periodis-mo. A todos interesa si El Norte se va a vender y quines estaran pujando por comprarlo; si Slim adquiri un paquete accionario del New York Times, o si los comandantes de la Iniciativa Mxico ganaron una licitacin pblica del Gobierno federal para explotar en el mercado de las comunicaciones el cableado de fibra ptica de la CFE.

    Nos afecta tambin si a la periodista mexicana Carmen Aristegui la pre-sionaron para que dejara de conducir noticieros en medios electrnicos na-cionales, pues adems de hacer falta su opinin para normar criterios, su caso modifica el concepto de libertad de prensa porque en el periodismo, como en casi todas las actividades contemporneas, nadie es indispensable, pero todos somos necesarios.

    Se necesita escuchar y leer todas las versiones, y que todos estemos ente-rados de ellas, porque la opinin pblica es muy importante, es ms impor-tante que la legislacin, quizs tan importante como los diez mandamientos.

    Se debe reflexionar acerca de lo que puede significar para un pueblo tener o no informacin rpida y expedita a la mano, as que todo lo que intervenga para la correcta formacin de la opinin pblica es indispensable. Y los me-dios de comunicacin forman opinin pblica.

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    la escritura

  • El elemento primordial para el desarrollo de los medios de comunicacin impresa fue la escritura; sin ella no se habra podido avanzar en el campo del saber materia prima de la informacin y la comunicacin. Cada vez que el hombre necesit consignar o guardar algo para que el tiempo no lo sepultara, hubo de escribirlo. Por eso se deca en otros tiempos que el hombre que es-cribe se convierte en rey. Actualmente ya no parece tan cierta aquella conseja popular, pues de serlo hoy seran miles de millones los monarcas. Ahora bien, debo aadir que es casi imposible la existencia de un rey que no sepa escribir.

    La transmisin de mensajes por medio del dibujo y de los signos es tan antigua como la humanidad. En cambio, la escritura tiene apenas unos seis mil aos, segn el estudioso Georges Jean.1 Sin embargo hay una tendencia en Internet, que comentar ms adelante, a volver a los signos.

    Es fcil imaginar que los instrumentos ms antiguos para la escritura fueron los dedos; las evidencias permanecen en cuevas, grutas y acantilados que dieron soporte al arte rupestre. Despus lleg el pincel de China, que se remonta tambin a unos seis mil aos y la tinta a base de cola, elaborada por los orientales a base de sustancias aromticas y humo. Podra decirse que los chinos fueron los pioneros en la industrializacin de la escritura, hasta des-pus los egipcios escribieron sobre papiro con plumilla de caa de bamb, utilizando tintas negra y roja. Pero la historia conocida por nosotros es la de Occidente y el Oriente Medio.

    Jean asegura que la necesidad de escribir naci tres mil aos antes de nuestra era y se requirieron dos mil aos para que se inventara el alfabeto; es justamente la extensin milenaria de este proceso lo que no permite fechar su nacimiento. Sin embargo, en lo que todos los autores coinciden es que este hecho sucedi en Mesopotamia, razn por la cual se reconoce como 1 Georges Jean, La escritura, archivo de la memoria, Aguilar Ediciones, Madrid, 1989.

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    cuna de la civilizacin. All nacieron los primeros calculi (origen del trmino clculo), que no eran otra cosa que pastillas de arcilla en donde se anotaban los primeros inventarios de los rebaos. Ms adelante, como se requera de algn signo que representara a los animales de diez en diez tal fue el pri-mer mltiplo nacieron los vestigios de la abstraccin, aspecto indispensable para la escritura y base del lgebra.

    Han sido encontradas tablillas de arcilla del ao 3,200 A.C. con pictogra-mas estilizados, como una cabeza de toro, un tringulo pbico, una corona y una copa. Es decir que en esa poca ya comenzaba a escribirse con represen-taciones de cosas, no slo con signos numricos. Aquellos pictogramas eran desde luego imprecisos, pues la representacin de un ro lo mismo podra significar agua que transporte, vida, creciente o inundacin.

    Adems, el nmero de signos era tan grande que, para reducirlo, le dieron a cada uno de ellos varios sentidos. As, por ejemplo, mediante cinco signos digamos, un hombre, el sol, la luna, un nio y un ro podra leerse una gran cantidad de cosas, tales como Un caluroso da, un seor y su hijo es-peraban en el ro a que anocheciera; pero los mismos tambin podran decir que Cuando sali la luna se reflejaba en el agua del ro y un nio pens que se trataba del sol, hasta que un hombre lo sac de su error, o Anoche llegu a descansar al ro, pero un joven baista no me dej dormir hasta que sali el sol, entre otros.

    La lectura no poda reflejar las ideas con exactitud. Pero los escribas fue-ron depurando los ms de setecientos signos diferentes. Se requeran aos de estudio para aprender su manejo y quien lo lograba se converta en un profesional, capacitado para ocupar los ms altos cargos.

    Y as, la escritura fue creciendo hasta desarrollarse plenamente, permi-tiendo que la humanidad pudiera interrelacionarse pese a las diferencias en los lenguajes.

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    En pocas ms recientes, en el ao de 1714, el ingls Henry Mill invent la mquina de escribir, pero desafortunadamente slo la reina Ana de In-glaterra lo entendi y le dedic palabras de elogio en un manuscrito donde aseguraba que con esa mquina se puede trasladar al papel un escrito de forma tan pulcra que no se distingue de la imprenta.2

    De la mquina de escribir de Hill no quedaron ms que sus escritos. Des-apareci y a nadie interes copiarla, dado que la pericia de los amanuenses les permita escribir con hermosa caligrafa a una rapidez casi mecanogrfi-ca. Napolen, por ejemplo, alababa a sus escribanos particulares Bourrienne y Meneval, de quienes deca que eran unas mquinas de escribir.

    Despus, en 1873, la Remington Fire Arms Company, que tambin se ocupaba de las mquinas de coser, fabric mquinas de escribir, pero no las venda, slo las alquilaba. Una vez creada la necesidad entre el pblico, co-menz a fabricarlas en trescientos modelos diferentes, obteniendo enormes utilidades.

    El libro naci a consecuencia de un conflicto, pues antiguamente se escriba en rollos de papiro que eran llamados volumen en latn, hasta que apareci el pergamino, nombre que viene de Prgamo3, ciudad de Asia Menor. Este nuevo soporte tuvo su origen dos siglos antes de Jesucristo, cuando durante un conflicto Egipto se neg a enviar papiro a su rival Prgamo, por lo que sus habitantes comenzaron a experimentar con el cuero tratado, hasta que encon-traron la forma ideal. Adems ensamblaron las hojas de pergamino a la ma-nera de los codex romanos, con lo que nace el libro tal como se le conoce hoy.

    Sin embargo, a pesar de los enormes avances de la ciencia y la tecnologa, veintitrs siglos despus de inventado el libro es increble que, a pesar de la

    2 Patente concedida por la Reina Ana a Henry Mill en 1714.3 La evidencia histrica confirma que los volmenes de Prgamo eran copiados en un material inventado en esta ciudad, de ah el nombre de pergamino.

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    existencia de unas tres mil diferentes lenguas en el mundo, de todas ellas slo unas cien se escriban. Esto quiere decir que 2 mil novecientas lenguas actualmente no cuentan con escritura.

    Corrijo, In puris naturalibus todas las lenguas se podran escribir, aunque fuesen aljamias, o sea escritas en un alfabeto no correspondiente. Por ejem-plo, alguien podra escribir la lengua seri de la Isla del Tiburn en el mar de California cuyo alfabeto ha desaparecido con letras latinas o griegas, pero no la podran leer los hablantes de este idioma.4 Y esta deficiencia se ha presentado a lo largo de la historia en todas las culturas incluyendo desde luego la occidental.

    Baste un ejemplo para describir el proceso por el que la escritura ha pasa-do: Carlos I, El Grande, conocido como Carlomagno, fundador del Imperio Carolingio, rey de los francos y de los Lombardos y Sacro Emperador de Occidente, muerto en el ao 814 de esta era, no saba escribir. Firmaba con una cruz. Hablamos de un importante personaje que vivi cuatro siglos des-pus de San Agustn, siete siglos despus de Adriano, y doce siglos poste-riores al fabulista Esopo, tres grandes de la literatura universal en diferentes gneros.5

    Hoy mismo, iniciando la segunda dcada del siglo XXI, el mundo vive exageradas incongruencias, pues mientras la red de Internet tiene ms de mil 800 millones de usuarios6, uno de cada dos seres humanos tiene proble-mas con el uso de la escritura o la desconoce por completo. Por eso hablamos de que slo se escribe en Internet y se publican libros y peridicos en cien 4 Lengua del pueblo seri, de la costa de Sonora. La comunidad lingstica seri no sobrepasaba los 800 individuos en el ao 2000 (segn el censo oficial), por lo que se trata de una lengua en riesgo.5 San Agustn: filsofo y telogo, ardiente buscador de la verdad, estudi varias corrientes filosficas. En su gran obra apologtica La Ciudad de Dios, formula una filosofa teolgica de la historia, y compara en ella la ciudad de Dios con la ciudad del hombre. Adriano, emperador romano de 117 a 138 d.n.e. Autor de la primera compilacin de la jurisprudencia romana en el cdigo Edictum Perpetuum. Esopo, escritor de la antigedad, clebre por sus fbulas que encierran una enseanza moral, no una doctrina. No hay, sin embargo, confirmacin de su existencia fsica.6 www.internetworldstats.com

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    lenguas o idiomas oficiales. Aunque existen publicaciones en otras lenguas como el nhuatl son raras y espordicas.7

    Los que pertenecemos al exclusivo primer grupo, el de los usuarios de Internet, tan slo con encender nuestras computadoras en casa u oficina, nos conectamos automticamente a la red, abrimos Messenger, Twitter o Facebook, bajamos los correos recibidos en nuestras direcciones electrni-cas y guardamos en la memoria los que dispongamos.

    Hoy nadie piensa en comunicarse por telgrafo, ni siquiera por fax, puesto que son medios totalmente rebasados. Ahora con un click podemos chatear con un cliente o amigo, leer los peridicos de cualquier parte del mundo, escritos en distintas lenguas, informarnos sobre el clima de hoy y conocer el pronstico del tiempo para los prximos das, el tipo de cambio actual del peso respecto al dlar y al euro, y consultar el significado de cualquier palabra en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Espaola. Todo instantneamente.

    Esto constituye un gran avance de la humanidad, pero revela al mismo tiempo una de las ms grandes inequidades del siglo XXI, pues viven en el planeta cientos de millones de seres humanos sin acceso y por lo tanto priva-dos de cualquier posibilidad de alcanzar el xito en el mundo de los negocios o del arte, y mucho menos de ser lderes en sus pases.

    Quienes aspiren a gobernar una empresa de buen calado o una entidad gubernamental tienen que saber muchas cosas y para ello necesitan en prime-ra instancia estar informados y contar un nivel cultural mnimo, que empieza por saber leer y escribir. Los avances en el sistema de aprendizaje visual no llegarn jams al grado de prescindir de la lectura, pues los documentos bsi-

    7 Vase el estudio de Ascensin Hernndez de Len-Portilla Algunas publicaciones recientes sobre lengua y literatura nahuas en http://www.ejournal.unam.mx/ecn/ecnahuatl30/ECN03016.pdf

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    cos, frmulas, leyes y proyectos en general, deben ser impresos o digitalizados para su formalizacin y universalizacin.

    Internet cuenta con nuevas generaciones de signos que tienden a sustituir las palabras, por lo que si esto contina, la escritura va de regreso a la poca de los calculi. Por tanto, en este momento histrico de globalizacin, los medios de comunicacin se erigen como el transporte casi nico de la cultura universal.

    escritura y periodismo

    La participacin del pblico en los medios

    Los medios electrnicos de difusin masiva mass media informan a ma-yor cantidad de gente porque su cobertura es muy amplia, pero como su presencia al aire es efmera, los que forman opinin entre los ciudadanos que constituyen la cspide de la pirmide demogrfica informada, son los medios escritos. Debido a estas caractersticas, el pblico se manifiesta en los primeros mediante cartas, telefonemas o correos electrnicos, que pue-den ser publicados sin limitaciones de espacio, mientras que el acceso a los medios impresos se circunscribe a las restricciones que determinan los costos de edicin, produccin y distribucin.

    Actualmente la interactividad entre medios y pblico es indispensable, pues la interpretacin de las noticias y editoriales no slo se enriquece con la opi-nin pblica, sino que se favorece con las posibilidades de retroalimentacin.

    El crecimiento de la cobertura de la radio ha sufrido altibajos, depen-diendo de la regin de que se trate. En las grandes ciudades se ha fortalecido porque los tiempos de desplazamiento suelen ser largos y en muchos casos se mitigan escuchando msica, programas de entretenimiento o noticiarios radiofnicos.

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    En la dcada de 1930, el dramaturgo alemn Bertolt Brecht postul que la radio debera ser de uso exclusivo para distribucin de noticias e ideas, y que los oyentes deberan participar directamente en sus emisiones.8 Pero fue hasta los aos setenta cuando Hans Magnus Enzensberger propuso una utilizacin emancipadora de los medios de comunicacin escritos, denun-ciando la utilizacin de los electrnicos, que se haban transformado en re-presoras industrias elaboradoras de la conciencia, o sea que las esperanzas que se haban depositado en la radio y la televisin, haban sido incumplidas, segn el ensayista alemn.9

    El planteamiento de Enzensberger coincidi en 1980 con el Informe MacBride, Un solo mundo, voces mltiples, de la UNESCO, que reconoce el derecho humano a la informacin, con escalonamiento progresivo en la in-teractividad del pblico, buscando la democratizacin de la comunicacin.10 Empero, dicho informe fue desestimado en la asamblea y hasta ahora los estudios culturales britnicos retoman la idea de MacBride.

    La televisin, al combinar sonido, imagen y movimiento, es muy atracti-va para los pblicos de todas las edades, pero su liderazgo en audiencias est seriamente amenazado por otros modos de comunicacin. En nuestro pas se suscit una fuerte polmica cuando en 2006 el Senado de la Repblica se propuso restringir los spots de propaganda poltica en medios electrnicos, para disminuir el efecto poltico de la televisin en los comicios.

    As las cosas, lo que debe seguir impulsndose es la participacin de la gente comn en los medios, pues como los mensajes mediticos son polis-micos, el pblico de hoy debe participar en su redaccin o cuando menos 8 Dramaturgo y poeta alemn, reconocido como uno de los ms influyentes del siglo XX. 9 Hans Magnus Enzensberger poeta y ensayista alemn, autor de Elementos para una teora de los medios de comunicacin.10 El Informe fue dirigido por el abogado irlands Sean McBride, premio Nobel de la Paz en 1974. Uno de los integrantes del equipo de redaccin fue el escritor Gabriel Garca Mrquez.

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    en la discusin previa a su alumbramiento, pues la relacin entre medios y sociedad debe ser creciente.

    el periodismo y la literatura

    Ya en el siglo XIV se polemizaba respecto a la diferencia entre periodismo y literatura. En 1845 lleg a la Real Academia Espaola el discurso de Joaqun Rodrguez Pacheco defendiendo los derechos literarios del nuevo gnero: el periodismo. No ha sido el nico, pues su coetneo Juan Valera afirmaba que ser periodista es, sin duda, profesin u oficio, como ser ingeniero, abogado o mdico. El periodista debe ser literato de cierta y determinada clase.

    Isidoro Fernndez Flores Fernanflor al ingresar a la Academia dijo que periodista es el literato que escribe con frecuencia en un pliego o grande hoja volante, que se estampa peridicamente y se difunde entre el pblico, a veces por centenares de miles de ejemplares. Hay diferencia entre libro y peridico, pero es comn que de una serie de artculos se forme un libro y de fragmentos o pedazos de un libro se hagan artculos periodsticos.

    Los trminos periodista y escritor muchas veces se confunden, como su-cede entre periodista y reportero, editorialista y articulista, al grado de ser utilizados como sinnimos. Dice Jos Ortega Costales que ser periodista no es escribir en los peridicos, pues como en el manicomio, no son todos los que estn ni estn todos los que son.11 Y es cierto, puesto que no todos los trabajadores de una empresa periodstica son periodistas.

    Hay quienes para simplificar, incluyen el periodismo dentro de las ciencias de la comunicacin, entendindolo nicamente como el acto de comunicar informacin, pero disminuyen su trascendencia. Tal vez as haya empezado

    11 Jos Ortega Costales, Noticias, actualidad, informacin, Universidad de Navarra, Navarra, 1976.

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    pero un periodista no slo informa, sino que da su opinin razonada de la noticia para que el pblico la coteje entre las diversas opciones informativas, y es ah en donde la literatura tiene mayor peso especfico.

    Ya no puede concebirse la historiografa sin la fuente que es el periodis-mo, no solo en la evolucin de los hechos y actos, sino en la evolucin de las ideas. El periodismo es la historia del presente y la literatura es el periodismo del pasado. Es lgico que, dentro del campo de la comunicacin histrica, antes de investigar lo que hicieron los antepasados, interese al hombre saber lo que hacen sus contemporneos. Como dijo el periodista y escritor mexi-cano Vicente Leero, Sin el periodismo el hombre conocera su realidad nicamente a travs de versiones orales, resmenes e interpretaciones hist-ricas y anecdotarios.12

    El periodista puede estar en cualquiera de las expresiones tecnolgicas, en una imprenta, en una cabina de radio, en un set de televisin, o en un site de Internet. Puede especializarse en espectculos o nota roja, en economa o en poltica y en cualquiera de ellas est haciendo literatura. Nadie en su sano juicio excluira de la literatura, por ejemplo, las narraciones del viajero Humbolt cuando nos presenta un mundo real, en forma de fascinante litera-tura. Dice Gonzalo Martn Vivaldi que la literatura, la creacin literaria, es un lujo, y el periodismo es una necesidad.13

    Efectivamente, no puede decirse que el periodismo sea el hermano me-nor de la literatura, pero tambin es cierto que el periodistaescritor, y el es-critorperiodista, confieren dignidad literaria a cuanto toca su pluma. Ejem-plos hay, como el de Gabriel Garca Mrquez que se inici como periodista en El Espectador y luego en El Heraldo.

    12 Vicente Leero y Carlos Marn, Manual de periodismo, Editorial Grijalbo, Mxico, 1986.13 Gonzalo Martn Vivaldi, Gneros periodsticos, Paraninfo, Madrid, 1986.

  • elnegociodel periodismo

  • No se puede estar dentro de las profesiones de comunicaciny fuera de la sociedad al mismo tiempo.

    Hasta ahora, quiz hemos estado ms fueraque dentro de la sociedad, hablando sobre ellos.

    Parece llegada la ocasin de hablar, al menos, con ellos.James Carey

    Para que un medio de comunicacin privado subsista es necesario que sea negocio, si como tal entendemos una entidad econmica en donde los ingre-sos sean, cuando menos, iguales a los egresos. Tenemos, pues, que la indus-tria periodstica se inscribe en el mundo de las finanzas y en estos tiempos de altibajos en las bolsas de valores y caresta dilatada, cada vez son menos los medios que arrojan nmeros negros en sus balances reales.

    Desde luego que cada caso es especial, pues hay medios que pertenecen a grupos editoriales o empresariales cuyos resultados econmicos no impor-tan, porque unas empresas subsidian a otras. Sin embargo tarde o temprano pasarn por una restriccin presupuestaria, que ir a dar en la lnea de flota-cin de la economa del medio subsidiado. Por tanto, es necesario tomar en cuenta la rentabilidad econmica propia de cualquier medio de comunica-cin privado para garantizar su permanencia.

    Por otra parte, existen medios diseados para formar opinin a favor o en contra de determinados intereses ajenos a la informacin e incluso a la economa. En esos casos su costo no es el factor determinante para su sub-sistencia. Sin embargo, lo ms sano es que haya autonoma financiera, como garanta de una autntica soberana editorial.

    Existen otros medios cuya rentabilidad proviene del escndalo. Pero generalmente sufren el problema de que su pblico se acostumbra y cada vez exige ms, llegando en muchos casos a abandonar los principios perio-

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    dsticos y hasta los morales, aspecto indeseable desde cualquier ngulo de observacin.

    En cualquier caso ubicarse en los extremos fomenta las malas expecta-tivas, porque si el proyecto deja de ser rentable, terminar cerrando, pero si hay un excesivo comercialismo, el producto de los medios se encamina al absurdo de negar el periodismo para convertirse en una publicacin cuya existencia puede tener su justificacin econmica, pero periodsticamente resultar un fiasco.

    El modelo de comercializacin de los medios electrnicos es el origen de la distorsin comercial en los escritos, pues el acceso a los primeros (ra-dio, televisin e Internet) suele ser gratuito, sobreviviendo por las ventas de anuncios comerciales. As que los segundos (peridicos y revistas) para po-der competir, viven actualmente con la exigencia de convertirse en medios gratuitos, que debern subsistir mediante la venta de anuncios comerciales o polticos, principio del modelo antes mencionado.

    El caso de la World Wide Web es interesante e ilustrativo, pues en sus inicios pareca ser el medio ideal para la participacin ciudadana, pero en los ltimos tres aos padece una escalada de comercializacin que limita su potencial en este rubro.

    apuntes sobre la historia del periodismo

    Seis siglos despus de la invencin de la brjula y 170 aos posteriores a la creacin del reloj mecnico, el alemn Johannnes Gutenberg invent la im-prenta en el ao 1438, momento de trascendencia equiparable a la creacin del alfabeto por los fenicios. Ya exista en Europa y China desde finales del siglo XIV la idea de impregnar con tinta planchas de madera e imprimirlas en papel, pero Gutenberg tall letra por letra, no en placas completas, y las

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    orden en marcos de madera para imprimir un mismo texto cuantas veces quisiera. Ms sencillo, barato y rpido que copiar libros uno por uno, como hacan los amanuense, los esclavos romanos y griegos, o los monjes, lo cual poda tardar aos.

    La imprenta propici la lectura masivamente, difundiendo ideas y trans-formando a la humanidad. Se imprimieron durante sus primeras dcadas slo libros religiosos como La Biblia y las grandes obras de los padres de la Iglesia. Pero el inevitable siguiente paso fue imprimir el pensamiento de reformadores y librepensadores, catapultando la demanda de imprentas en el mundo. Y as lleg la primera imprenta a Amrica, a la Ciudad de Mxico, en 1539, un siglo despus de su invencin. Su operador fue un im-presor italiano de nombre Juan Pablos, dirigido por el arzobispo fray Juan de Zumrraga.

    En aquel Mxico colonial, como en el resto de la Amrica espaola, las noticias se transmitan por medio de pregoneros que voceaban las novedades en plazas, mercados y reuniones, con autorizacin de las autoridades colo-niales otorgadas a travs de los cabildos, pues las notas eran objeto de cen-sura. En esa poca lo ms parecido a la prensa moderna era la promulgacin de bandos, leyes o proclamas (noticias oficiales), que se haca exhibiendo una copia en los parajes ms concurridos.

    La imprenta de Juan Pablos propici la multiplicacin de talleres de im-presin en la capital novohispana. En uno de ellos se imprimi el papel noticioso ms antiguo de que se tiene noticia: la Relacin del Terremoto de Guatemala, ocurrido en noviembre de 1541, que circul en 1542. Pero no sera hasta un siglo y medio despus, en 1693, que apareci la primera pu-blicacin formal de carcter informativo en Mxico, con temas histricos y cientficos: el Mercurio Volante, editado por Carlos de Sigenza y Gngora.

    Esto se dio 71 aos despus de que en la Inglaterra una imprenta que slo

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    reproduca obras clsicas, imprimiera el semanario Weekley News of London con eventos sociales londinenses y un resumen de noticias mundiales.

    En Mxico hubo de pasar un siglo ms desde el comienzo del semanario ingls mencionado, para que en 1722 el sacerdote y mdico Juan Ignacio de Castorena y Ursa fundara la Gaceta de Mxico y noticias de Nueva Espaa, primer peridico nacional, con temas religiosos, oficiales, comerciales, so-ciales, mineros y martimos. Desafortunadamente se public slo de enero a junio de ese ao. Desapareci porque la monarqua absoluta que rega Espa-a y sus colonias restringa la libertad de imprenta. Adems, el Tribunal de la Chancillera reprima los excesos en materia civil y el Tribunal de la Santa Inquisicin haca lo propio en materia religiosa. Por eso son escasas las pu-blicaciones de esa poca. Pero ni ello impidi que libros de corte republica-no y liberal circularan entre los intelectuales, favoreciendo los movimientos independentistas.

    el periodismo en mxico

    Fuera de la capital, el primer peridico fue el Jornal Econmico Mercantil de Veracruz, de 1806, con temtica comercial y martima. Puede considerarse el primero en incluir el reporte del clima y marcar la transicin a la prensa de inters general con la informacin sobre venta de casas, formas de curar las fiebres y hasta recetas de cocina. Como instrumento de difusin ideolgica, en abierta rebelda a las leyes coloniales de imprenta, apareci el Despertador Americano en Guadalajara el 20 de diciembre de 1810, fundado por Miguel Hidalgo y Costilla bajo la direccin de Francisco Severo Maldonado.

    Ya bajo los beneficios de la libertad de imprenta consagrada por la Constitu-cin de Cdiz de 1812, aparecieron muchos peridicos como El Pensador Ame-ricano de Jos Joaqun Fernndez de Lizardi, El Sud de Jos Mara Morelos, El

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    Correo Americano del Sur a cargo de Jos Manuel Herrera, El Aristarco Universal de Lorenzo de Zavala y El Ilustrador Nacional del doctor Jos Mara Cos.

    el periodismo en nuevo len

    En aquel momento Nuevo Len, parte de las Provincias Internas de Orien-te, segua con el sistema de pregoneros y las publicaciones venan de fuera. Fue hasta 1813 cuando, por azares de la Guerra de Independencia, lleg a Monterrey un pequeo equipo que las fuerzas realistas haban decomisado al insurgente Jos lvarez de Toledo, en una batalla al sur de San Antonio, en la an provincia espaola de Texas. De esta prensa, por falta de impresor calificado, solo vieron la luz un par de proclamas reales.

    Cuatro aos despus, en abril de 1817, otra casualidad permiti llegar a Monterrey y posteriormente a Saltillo una segunda imprenta, tambin deco-misada con todo y su impresor, un tcnico originario de Baltimore, llamado Samuel Bangs. Esta vez el decomiso fue nada menos que a Fray Servando Teresa de Mier, quien al momento de la independencia pudo recuperarla y traerla de Saltillo.

    Posteriormente, en 1823 el Ayuntamiento de Monterrey encabezado por el alcalde Francisco Tamez de Iglesias, compr otra imprenta. Sin embargo, no sera sino hasta el 3 de agosto de 1826, cuando inicia el periodismo local con la publicacin de la Gazeta Constitucional de Nuevo Len (hoy peridico Oficial del Estado Libre y Soberano de Nuevo Len), operando como r-gano oficial de difusin del Gobierno estatal, con la publicacin de noticias nacionales y extranjeras, campaas de gobierno y suplementos como procla-mas, poesa, manifiestos y discursos.

    A partir de ese momento se potencia la actividad periodstica. El An-tagonista, primer peridico independiente, aparece en 1831, reportando las

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    actividades del Gobierno y opinando sobre ellas y publicando notas nacio-nales e internacionales. El Restaurador de la Libertad, de Santiago Vidaurri, le sirve de instrumento para apoderarse de Monterrey en 1855 y autopro-clamarse gobernador del estado de Nuevo Len. Tambin destaca El Cura de Tamajn, semanario escrito totalmente en verso por Guillermo Prieto, mientras resida en Monterrey del 13 de mayo al 14 de agosto de 1864, durante la estancia del presidente Benito Jurez. Don Desiderio Lagrange dirigi La Revista y Revista de Monterrey, publicada desde el primero de febrero de 1881 semanalmente y, a partir de 1883, como diario. Cerr el 30 de abril de 1886 por rdenes del gobernador Bernardo Reyes, debido a la presunta publicacin de informacin infundada, motivo por el cual, el edi-tor fue adems encarcelado.

    El general Bernardo Reyes quera quietud en el estado para poder indus-trializarlo y opt por imponer mordazas a la prensa. As que los 52 peridi-cos existentes eran meticulosamente censurados. De entre ellos destacan el primer peridico en ingls, del coronel Joseph A. Robertson, The Monterrey News, cuyo nmero inicial apareci el 23 de abril de 1892. Se edit en espa-ol a partir de 1902. Fue el primero en utilizar el linotipo y en contratar los servicios de una agencia internacional de noticias (Associated Press), adems sirvi de escuela a periodistas como Rodrigo de Llano. Finalmente cerr por la censura en 1903. En el mismo ao, tambin la censura acab con La Defensa, que circulaba desde 1883. El Espectador, fundado en 1892 y donde colaboraban, entre otros literatos, Manuel Jos Othn, Carlos Pereyra y Ce-ledonio Junco de la Vega, sorte la censura hasta 1905.

    En ese tiempo, el diario semioficial La Voz de Nuevo Len, cuyo primer nmero apareci el 15 de diciembre de 1888, era del agrado de Bernardo Reyes y de sus seguidores, pero desapareci en 1909 al ser derrocado Reyes por el gobernador Jos Mara Mier, quien apoyaba La Opinin, a favor de

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    Madero y de la no reeleccin. En el ao de 1919 apareci El Porvenir, el peridico ms antiguo de los que hoy circulan, de lnea conservadora y muy moderada, hasta que en el ao 1986, por el secuestro del nio Hernn Mar-celo Villarreal (hijo del doctor Gustavo Villarreal) public por primera vez una nota roja en su portada.

    desarrollo de los peridicos en nuevo len

    Desde la aparicin de La Gazeta Constitucional de Nuevo Len en 1826, hasta los actuales noticieros de Canal 28 TV Nuevo Len y Radio Nuevo Len, el Gobierno del estado siempre ha contado con un rgano de difusin oficial, no slo para difundir cultura y transmitir noticias, sino para hacer pblicos los programas estatales. Aparentemente La Gazeta se public en ingls en 1848 por la invasin norteamericana y dej de publicarse de 1848 a 1851.

    Con El Antagonista nace la prensa crtica en 1831. Este peridico mani-festaba su decepcin por la forma de manejar la guerra de Texas y la inefica-cia del Gobierno local. Desde ese ao y hasta la aparicin del peridico El Porvenir, los medios de comunicacin fueron sostenidos por grupos polti-cos, de los que eran voceros. Algunos sirvieron a los liberales, como El Cura de Tamajn; otros a los conservadores, como El Espectador; algunos ms a proyectos personales, como El restaurador de la democracia al servicio de San-tiago Vidaurri; a intereses comerciales, como el Monterrey News o polticos como La Voz de Nuevo Len de Bernardo Reyes.

    En la poca posrevolucionaria el periodismo nuevoleons comenz a pro-fesionalizarse, aunque hubo medios con tendencia, pero siempre informa-tivos y conservadores, tal como es la sociedad neoleonesa. Desafortunada-mente, hoy algunos sucumbieron a la tentacin del amarillismo como forma de atraer lectores.

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    En la actualidad los peridicos con difusin mundial va Internet son El Norte, El Porvenir, El Regio.com, Milenio y ABC, adems de publicaciones solamente electrnicas como el semanario ndigo, Los Tubos, La Quincena, y Monitor poltico. Existen otros peridicos diarios, como El Crucero; regiona-les, como El Informador, de Guadalupe; el San Pedro; El Santacatarinense y La Espiga, de Cadereyta. Y otros meramente comerciales como Slo ofertas y Slo empleos.

    tica periodstica en materia electoral

    En una sociedad cada vez ms compleja no se puede concebir democracia y poltica sin participacin de los medios de comunicacin. Son el ni-co camino efectivo para hacer llegar simultneamente mensajes a millo-nes de ciudadanos en zonas como Nuevo Len con ciudades densamente pobladas y comunidades rurales con poblacin dispersa. Los medios de comunicacin, para cumplir con su responsabilidad electoral, deben ser informadores abiertos a la pluralidad, evitando ser proveedores de ventajas partidistas. Si bien los medios no generan noticias, la poltica editorial debe proyectar neutralidad en sus informaciones. La libertad de expresin no es un derecho abstracto ni absoluto, pues la ley electoral estipula los principios de equidad democrtica.

    Los medios son una especie de radiografa que permite examinar en tiempo real las situaciones polticas. La funcin editorialista es para dar a conocer una opinin razonada del acontecer poltico. Si los medios destacan el debate de bajo contenido o las rias polticas, transfieren a la sociedad la sensacin de que la poltica es desordenada, baja y ruin. Cuando los medios privilegian el debate de alto nivel lo inducen a la sociedad.

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    peridicos locales desaparecidos

    Esta historia no slo est marcada por los triunfos. No todos los peridicos sobrevivieron a los avatares que debieron enfrentar en diferentes pocas y magnitudes. La vida de una empresa periodstica, una vez puestos en circu-lacin sus primeros nmeros, se desarrolla bajo colosales presiones econmi-cas, financieras o polticas que no todos pudieron aguantar. Es as que para la segunda mitad del siglo XX es apreciable la lista de publicaciones diarias que salieron de circulacin. He aqu algunas de ellas.

    Tribuna de Monterrey

    Fue fundado en 1968 por el coronel Jos Garca Valseca. Sus directores fueron Salvador Borrego, Antonio H. Flores, Fernando Cant Jaukens, scar Espi-no y Caro, Salvador Hernndez Landeros, Sergio Gutirrez y Francisco Cerda Muoz. Comenz tirando 80 mil ejemplares y termin en 6 mil. Una de sus principales aportaciones fue la impresin en colores. Cerr en marzo de 1994.

    El Tiempo

    Federico Gmez, al salir de El Porvenir, funda a mediados de la dcada de los treinta el peridico El Tiempo, con oficinas en Matamoros 313 oriente. Se conviti de inmediato en el segundo peridico de mayor circulacin en la entidad. En los aos cuarenta se asocia con Manuel L. Barragn y Joel Rocha para conformar Editora Regiomontana.

    Federico Gmez era un buen escritor. Su influencia qued patente cuan-do un editorial suyo form opinin entre personajes sensibles, al grado de iniciarse los trmites para buscar el terreno donde construir la actual Ciudad Universitaria. Una huelga laboral oblig a desaparecer a esta casa editora,

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    as que el peridico dej de circular por cerca de un ao, para resurgir como Editora Cronos con un nuevo peridico, el Ms Noticias. En ste trabajaron periodistas de la talla de Alberto Garca Guzmn, Ramn Pedroza Langa-rica, Francisco Cerda Muoz, Eduardo Martnez Clis, Herberto Nez Espinosa. Editora Cronos tuvo su primer director en la persona de Manuel L. Barragn y, a propuesta de Garca Guzmn, se cre Ms Noticias. Ambos peridicos desaparecieron en 1984, cuando sus activos pasaron a manos de El Diario de Monterrey, hoy Milenio.

    datos generales de los medios decomunicacin locales ms conocidos

    Circulacin de la prensa escrita local / Cantidad de ejemplares por da

    Fuente: www.segob.gob.mx

    El Norte 142,569 El Porvenir 21,815 Milenio 34,443 Regio.com 22,593

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  • medios y organizac iones medit icas . 47

    medios yorganizaciones mediticas

  • la radio

    La dcada de los veinte

    La primera radiodifusora en Latinoamrica naci en Monterrey con las si-glas TND (Trnava Notre Dame). Su creador fue Constantino de Trnava, cientfico de 23 aos, ingeniero elctrico por la Universidad de Notre Dame, Indiana. Logr tal hazaa con un sencillo equipo de apenas 50 watts. Don Constantino hizo la primera transmisin desde la sala de su casa ubicada en la esquina oriente de las calles de Guerrero y Padre Mier, con un contenido netamente musical. De 1921 hasta 1929 la radio de Trnava fue experimental. Empez a identificarse con las siglas TND y despus como CYD. Termin por conocerse en 1929 como la XEH, y a partir de ese ao inici sus transmi-siones formales ya comercializada e identificada como La Voz de Monterrey.

    En abril de 1922 aparece el peridico El Sol, segundo ms antiguo en circulacin. Actualmente es vespertino y amarillista.

    La dcada de los treinta

    El 19 de marzo de 1930 nace la segunda estacin de radio en Monterrey, identificada por las siglas XET. Por aquel entonces se ubic en las calles de Hidalgo y Galeana, era propiedad de Emilio Azcrraga Vidaurreta, tamau-lipeco avecindado en Linares, quien meses despus, en septiembre de 1930, fund en la Ciudad de Mxico, la XEW.

    La tercera estacin, la XEFB, nace el 4 de abril de 1931, con el mote de Quintanilla y Stevenson. La fundan Gilberto Quintanilla y Alejandro Ste-venson, asesorados por Jess Quintanilla. Las transmisiones iniciales estu-vieron a cargo de Juan Montemayor Escamilla, Isaac Flores y el profesor Manuel Flores. Se trataba de una estacin de apenas 7 watts en los 1,410

  • medios y organizac iones medit icas . 49

    Kilociclos hoy Kilohertz, cuya nmina inicial de locutores se integr con Humberto Caldern Navarrete y Ramn Hinojosa, quienes cubran unas incipientes transmisiones de apenas cuatro a seis horas que, sin embargo, combinaban por primera vez el entretenimiento con la informacin noticiosa.

    A finales de esa dcada, en 1938, aparece el peridico El Norte, uno de los de mayor circulacin en el estado.

    La dcada de los cincuenta

    En esta dcada el estado de Nuevo Len comenz a despuntar en el panorama nacional, llegando a ser considerado piedra angular del desarrollo industrial de los medios de comunicacin. Y esto no es casual: los orgenes de las ms gran-des cadenas informativas de prensa escrita (Reforma, Milenio), radio (MM Radio, Radio Alegra, Radio Red y Radio Centro), televisin (Televisa, MM TV; TV Azteca, TV Nuevo Len), e Internet, tienen races en Nuevo Len.

    Entre las tres radiodifusoras iniciales de Monterrey (XEH, XET y XEFB) y la XEW de Mxico, se desencaden una dura competencia que perdur hasta la entrada de la televisin en 1957. Este hecho paradjicamente abri un pro-ceso de multiplicacin de estaciones radiofnicas, diversificndose segn tipos de msica, y naciendo los primeros programas de informacin noticiosa.

    En la actualidad hay en Nuevo Len 47 estaciones de radio, todas con espacio para noticias y al menos diez con una fuerte inclinacin noticiosa.

    la televisin

    A mediados de la dcada, el primero de septiembre de 1955, naci la te-levisin en Monterrey, con el primer canal XHX Canal 10, retransmisora de programas nacionales, instalado en el cerro del Topo Chico. Tiempo

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    despus, desde este canal, Horacio Alvarado Ortiz transmite el primer pro-grama filmado en Monterrey, un noticiero de sociales llamado Telesocial.

    Un ao despus del inicio de la televisin local, en 1958, nace Canal 3 XEFB TV, fundado por Mario Quintanilla Garca con el propsito de pro-ducir programas en vivo. El primer informativo fue El Noticiero de las 10, con Horacio Alvarado y Jess Garza Hernndez, Don Chucho, saliendo a cuadro y como titulares la esta serie. Sigui Concretando la Noticia, patrocinado por Cementos Mexicanos, que se mantuvo al aire por 17 aos.

    En 1961, Canal 6 de Monterrey (XET-TV, Televisin del Norte, S.A.) ini-cia la transmisin de espectculos deportivos los domingos. En octubre de ese ao transmiti, en cadena con el Canal 5 (KRGV) de Weslaco, Texas, la Serie Mundial de Bisbol por primera vez fuera de los Estados Unidos que fue narrada por el comentarista Fernando Von Rossum.

    En 1968 comienza el Canal 12, XHAW, de Jess D. Gonzlez, que pronto crea sus propios programas de entretenimiento y musicales. Su principal noticiero ha sido Noticiero del 12 cambiando de nombre a Noti-Oro 12 y Telediario. En la dcada de los setenta destacan Ms all de la Noticia, El Pulso de la Ciudad, Reportaje 70 y Reportaje 71.

    En 1973 con la fusin de Telesistema Mexicano (canales 2, 4 y 5) y te-levisin independiente (canal 8) se form Televisa. Actualmente Televisa Monterrey cuenta con una importante barra de noticias con informacin internacional, nacional y local. Importante es el programa Reportajes de Alvarado, que trata temas regionales como son gastronoma, msica y cul-tura en general. Se inici el 28 de julio de 1980 y hasta la fecha sigue en el aire con Horacio Alvarado Ortiz y su hijo Eduardo Alvarado Ginesi.

    En mayo de 1982 aparece el Canal 28 como parte de la cadena nacional Televisin Rural de Mxico, con el objetivo de traer a Nuevo Len la telese-cundaria, y contar con espacios informativos. En 1998 cambia su nombre por

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    TV Nuevo Len y regionaliza su contenido, en el que incluye el noticiario oficial del Gobierno del estado. Hoy es un canal oficial atractivo, con cultu-ra, noticias y comentarios, que compite con la televisin privada. Adems, est encadenado a Radio Nuevo Len, de cobertura nica en todo el estado.

    El 9 de junio de 1990 se inaugura el Canal 53 a iniciativa del ingeniero Gua-dalupe Cedillo apoyado por el director de la Facultad de Ingeniera Mecnica y Elctrica, Jos Antonio Gonzlez Trevio y por el rector Gregorio Faras Longoria, as como por el gobernador Jorge Trevio Martnez. Es un canal televisivo de carcter educativo y cultural, parte de la Red Nacional de Ra-diodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de la Repblica Mexicana.

    En 1983 comienza a operar en Monterrey el canal 8 de Imevisin (Ins-tituto Mexicano de Televisin), con una barra de noticias oficialista, como expresin local de las transmisiones nacionales. ste se mantiene en el aire hasta que finalmente en 1994 y como producto de la privatizacin de las em-presas televisivas nacionales, nace en su lugar TV Azteca con una programa-cin de inters general y noticioso, sostenida por los informativos Info 7.

    Despus de ms de veinte aos bajo la administracin del estado, Canal 13 de Imevisin pasa al sector privado en julio de 1993. Junto con el 13 y su red nacional, son desincorporados Canal 7 y sus repetidoras en el pas, as como el canal 2 de Chihuahua. En cambio, el canal 22 de la Ciudad de Mxico, no entr en el paquete de privatizacin y fue entregado a Conaculta. Para efec-tuar la desincorporacin el Gobierno adecu su estatus legal, pues tenan el estatuto de permisionados, es decir, la autorizacin de trabajar las seales, lo cual impeda formalmente su venta dado que solamente los canales concesio-nados pueden cederse en operaciones de compraventa. Se crearon empresas paraestatales Televisin Azteca fue la ms grande como concesionarias de los canales que conforman las redes 13 y 7. Al final se pusieron a la venta dos cadenas nacionales, la del 13 con 90 canales y la del 7 con 78.

  • 52 . l e o p o l d o e s p i n o s a b e n av i d e s

    La licitacin pblica la gana el grupo Radio Televisora del Centro, en-cabezado por el Ricardo Salinas Pliego, dueo de la cadena de artculos electrodomsticos Elektra. El empresario paga 650 millones de dlares por un paquete de medios que incluye, adems de las cadenas de televisin, las salas cinematogrficas Compaa Operadora de Teatros S.A. y los Estudios Amrica, ambos de propiedad estatal. TV Azteca ha crecido con la compra de empresas televisoras en Amrica Latina, y alianzas con empresas interna-cionales del medio como Disney y TV Globo, entre otras.

    las organizaciones mediticas

    El Grupo Reforma

    Tiene 85 aos de antigedad. Inici con el peridico El Sol en abril de 1922, seguido por El Norte en 1938, el diario Metro de Monterrey en 1988 y Reforma en 1993. Cuatro aos ms tarde naci Palabra, peridico de Saltillo, y el Metro de la Ciudad de Mxico. Mural comenz a circular en Guadalajara un ao ms tarde. En 2004 apareci el Metro Saltillo y en 2005 Metro Guadalajara. En los aos 2007 y 2008 aparece el Metro en los estados de Mxico y Puebla.

    El peridico Reforma se fund como rama de El Norte. Cuando se em-pez a distribuir, un 20 de noviembre, presion a los sindicatos de puestos de peridico para que se vendiera ese mismo da, pero se opusieron por ser da festivo y Reforma se vendi en la calles por los mismos periodistas, di-rectivos y celebridades como una respuesta a lo que consideraron un boicot. Grupo Reforma cre un canal de distribucin independiente para vender en las calles de la Ciudad de Mxico. El apoyo de los lectores fue increble: intelectuales, artistas y gente ordinaria se uni al proceso de creacin de este canal. En la actualidad Reforma se distribuye de forma independiente a ms

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    de cien mil suscriptores, en los supermercados y en otros puntos de venta, as como para los lectores en las calles de la Ciudad de Mxico. Su presidente es Alejandro Junco de la Vega.

    El Porvenir

    Hace noventa aos Jess Cant Leal y el poeta colombiano Ricardo Arena-les, ms conocido como Porfirio Barba-Jacob, crearon un peridico que refle-jara lo que suceda en la ciudad. El 31 de enero de 1919 iniciaron la aventura y al poco tiempo el colombiano emigr, pero la semilla ya estaba sembrada. Don Jess, originario de Cadereyta Jimnez, falleci el 26 de marzo de 1947, su obra fue continuada por su hijo Rogelio y, ahora, por la tercera generacin de su misma estirpe. Rogelio Cant Gmez naci en Monterrey el 26 de febrero de 1917. El Gerente, como se le conoca, aprendi el manejo de la publicidad, prensas, linotipos y tlex, en resumen, todo lo relacionado al pe-ridico. Tuvo una longeva actividad periodstica de 51 aos, logrando llevar El Porvenir a los primeros planos. Entre sus mltiples actividades cre, junto con otros seis visionarios la Asociacin de Editores de los Estados (AEE) en 1934. Falleci el 29 de agosto de 1984. Este peridico es considerado como la escuela de cuando menos tres generaciones de periodistas locales.

    Multimedios

    Multimedios es un grupo de estaciones de radio, televisin y varios peridi-cos, como Milenio, Extra y Express. En 1933 Jess Dionisio Gonzlez compr la XEX, que luego sera XEAW. Localmente tiene dos canales: XHAW-TV (canal 12 en Monterrey y rea metropolitana), que transmite noticias de la regin, y de inters para la comunidad; y XHSAW-TV (Canal 64), Teleritmo, con transmisiones del gnero grupero y regional mexicano, as como repeti-

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    ciones de algunos programas que se producen para Grupo Multimedios. A partir del 1 de noviembre del 2009, el canal 64 en su seal abierta se convierte en repetidora, slo para Monterrey, de Milenio Televisin, y el canal gru-pero Teleritmo se pasa al canal 27 del sistema de cable de Multimedios Redes. Cuenta con repetidoras y estaciones locales en Tamaulipas, Coahuila, Du-rango, Guanajuato, as como California, Texas, Nevada y Florida en los Es-tados Unidos. Su programacin tambin puede ser vista a travs de Internet.

    Multimedios es el conglomerado de medios de comunicacin ms grande en el norte de Mxico. Posee decenas de emisoras de radio en Mxico y una estacin de radio en Espaa (Top Radio), un sistema de televisin por cable (Cablevisin), un sistema de telefona local e Internet (Telum, Intercable), y un peridico de circulacin nacional, Milenio Diario. Es considerada la tercera cadena de Mxico, superando a Televisa Monterrey y TV Azteca No-reste en coberturas, con corresponsales propios nacionales e internacionales.

    Adicionalmente, el 20 de octubre de 2008 Multimedios lanz Milenio Televisin, canal totalmente noticioso que transmite por televisin de paga a travs de Cablevisin, en sistema bsico, en el canal 24 y bsico digital por el canal 407, y por Sky el canal 120. Asimismo su seal puede ser vista a travs de Internet desde su sitio www.milenio.tv.

    Estaciones locales de Multimedios Televisin

    12 XHAW-TV Monterrey 40 K40FW-TV Jurez50 XHAW-TDT HD Monterrey 45 XHNAT-TV Nuevo Laredo11 XHAW-TV Saltillo 49 XHTAO-TV Tampico6 XHTAO-TV Tampico 54 XHCTV-TV Matamoros6 XHLGG-TV Len 54 XHVTV2-TV Reynosa7 XHVTU-TV Ciudad Victoria 51 XHVTV-TDT HD Reynosa9 XHOAH-TV Torren 64 XHSAW-TV Sabinas Hidalgo

  • medios y organizac iones medit icas . 55

    Estaciones de MM en Estados Unidos

    Grupo Radio Alegra

    Gonzalo Estrada inici el 25 de diciembre de 1959 con la estacin de radio WENV 1340AM. En la actualidad se ha expandido a once estaciones, que combinan el entretenimiento con cultura y se enlazan para el noticiero insti-tucional del grupo varias veces al da, independientemente de los programas de editoriales y comentarios acerca del devenir poltico local. Cuenta tam-bin con el peridico ABC.

    Ncleo Radio Monterrey

    Naci el primero de febrero de 1990 con tres emisoras de radio, y actualmente tiene cuatro, despus de haber estado afiliado comercialmente a Organizacin Estrellas de Oro, ahora Grupo Multimedios. Su fundador fue Tefilo Bichara.

    Radio red

    En 1973, la cadena noticiosa Radio Red, de Clemente Serna Martnez, ori-ginario de Linares y su hijo Clemente Serna Alvear, adquiri la compaa Radio Cadena Nacional, concesionaria de la estacin XERCN en la frecuen-cia de los 1110 kHz en la Ciudad de Mxico. En 1974 cambi su distintivo de llamada a XERED, para dar paso a Radio Red, emisora de formato variado y noticioso, pionera de los noticiarios de larga duracin, en donde naci el programa de noticias Monitor de Jos Gutirrez Viv.

    18 K18HD Bakesfield, California 52 K52EA San Antonio, Texas24 K24GP Lubbock, Texas 54 K54JS Corpus Christi, Texas28 KVPX-LP Las Vegas, Nevada 61 K61GH San Diego, California40 K40FW El Paso, Texas 64 K64GK Amarillo, Texas43 KHLM-LP Houston, Texas 50 KATA-CA Mesquite, Texas

    (Dallas/Fort Worth)

  • 56 . l e o p o l d o e s p i n o s a b e n av i d e s

    En 1994 las emisoras que forman Radio Programas de Mxico de la cual era parte XERED-AM 1110 kHz (Radio Red AM), junto con XHRED-FM 88.1 MHz (Radio Red FM) y XHRCA-FM ahora XHFAJ-FM 91.3 MHz (Alfa FM) en la Ciudad de Mxico, XEDKR-AM 700 kHz (Radio Red AM) de Guadalajara, Jalisco, y XESTN-AM 1540 kHz (Radio Red AM) de Monte-rrey, se vende a Grupo Radio Centro, propiedad de otro nuevoleons, Fran-cisco Aguirre. Sus orgenes en la radiodifusin se remontan a ms de 45 aos, cuando su fundador inici actividades en 1946, en lo que se conoca como Cadena Radio Continental y que slo operaba la frecuencia del 1030 AM.

    En 1952 Francisco Aguirre funda Organizacin Radio Centro con dos estaciones: Radio Centro y Radio xitos, con oficinas en el centro de la Ciu-dad de Mxico. En 1973, establece tres estaciones de FM, consolidando su posicin de lder de la industria radiofnica en Mxico y es el segundo medio en instalar su torre de transmisiones FM en el cerro del Chiquihuite al norte de la ciudad. El director general de Grupo Radio Centro, lder en radio en el valle de Mxico, es Carlos Aguirre Gmez, quien en 2009 inaugur una nueva emisora en Los ngeles, California. Ya en 2003, Grupo Radio Centro inici los trmites para dotar a XERED-AM de mayor cobertura, y en abril de 2004 la Secretara de Comunicaciones y Transportes autoriz el aumento de su potencia de 50 mil watts a 100 mil watts diurnos.

    MVS Comunicaciones

    El 15 de abril de 1967 Joaqun Vargas Gmez introdujo StereoRey, la primera estacin de FM en el pas. El nombre tuvo su origen en las palabras stereo por estereofona, y rey, como un homenaje al nombre de la ciudad pionera del FM en Mxico: Monterrey. StereoRey ms tarde se convirti en una cadena con cobertura en las ciudades ms importantes de la repblica y a inicios de la siguiente dcada abri con el mismo nombre ms emisoras en diferentes ciu-

  • medios y organizac iones medit icas . 57

    dades, como el 102.5 en la Ciudad de Mxico y Acapulco. En la primera mitad de los aos noventa Vargas Gmez introdujo el sistema MVS Multivisin.

    MVS Radio cuenta con cuatro cadenas de radio: Noticias MVS, EXA FM, La Mejor FM y FM Globo. Actualmente MVS Radio tiene cobertura en la repblica mexicana, adems del sur de Estados Unidos (San Diego, Califor-nia, y El Paso, Texas), Centroamrica (Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica, Panam) y Ecuador, en Sudamrica.

    Joaqun Vargas Gmez no slo fund las cadenas en radio y televisin, tambin cre la Corporacin Mexicana de Restaurantes (CMR), que integra las marcas Wings, Los Almendros, Restaurante del Lago, algunos Chilis, Pan y Vino, La Destilera, Fonda Mexicana, entre otros, as como el servi-cio de Internet Ego. En 1996 el empresario se retir de la direccin de MVS Comunicaciones y de la CMR, que dej en manos de uno de sus hijos.

    Resumen

    Podemos afirmar sin temor a la exageracin que en nuestra entidad, a pesar de haber iniciado tarde su desarrollo en el periodismo, han nacido y se for-maron las ms grandes cadenas noticiosas de prensa escrita, radio, televisin e Internet. Imposible hablar en Mxico de los medios de comunicacin, sin mencionar el nombre de Nuevo Len. No es posible obviar algunos nom-bres de empresarios y periodistas destacados de nuestro tiempo, pilares del desarrollo de los medios de comunicacin locales y nacionales. Desde luego que no es exhaustiva, pero da idea de quienes han sido los que permitieron a Nuevo Len llegar al sitio que ocupa. Hay otras redes sociales que cumplen con la funcin de comunicar. Tal es el caso de Facebook y Twitter, en donde el periodista es el lector, y forma parte de la sociedad. En Nuevo Len hay una gran cantidad de personas, sobre todo jvenes, que tienen acceso a estas redes, sin embargo, no es posible medir su avance en estos momentos.

  • pornografainformativa

  • El periodismo no puede decir toda la verdad porquenadie puede decir toda la verdad.

    Todo lo que el periodismo puede hacer es liderarla conversacin pblica, estimularla, organizarla,

    mantenerla en movimiento constante y alimentarsede lo que otras conversaciones tienen para ofrecer:

    la historia, el arte, la ciencia, la religin.Walter Lippmann

    Hace un ao la televisin public imgenes de cmaras de seguridad oficiales que dan testimonio del asalto a Creel, Chihuahua, por un coman-do armado; los resultados fueron funestos. Pasaba como una nota ms de violencia, slo que con demasiado tiempo aire, y se repiti la parte en que el jefe de los sicarios aspira droga y reparte dosis entre sus compinches. Es la mayor propaganda del consumo de droga y el mensaje enviado a los jvenes, es claro: quien necesite realizar acciones peligrosas debe drogarse.

    Ese tipo de notas arrebataron el rating a los talk show televisivos. Nadie necesita ver violencia verbal si la puede ver real. Un noticiario televisivo con-tiene ms sangre que cualquier parte de guerra en el mundo. Vemos a detalle la violencia, y an as los medios de comunicacin la potencian. Con tal difusin, los jvenes la ven como alternativa vlida para resolver conflictos entre particulares y va para hacer fortuna.

    Recientemente el periodista colombiano Javier Daro Restrepo acu el trmino pornografa informativa para referirse al exceso en los detalles al difundir actos de violencia. Coincido con l, pues en el caso mencionado no haba necesidad de subrayar el consumo de droga con esa nitidez. Ya era excesivo ver en accin a esos individuos elevados a seudo hroes por mos-trar entrenamiento policaco militar, para todava publicar reiteradamente escenas del consumo de droga.

  • p o r n o g r a f a i n f o r m at i va . 61

    A la pornografa informativa que define Restrepo se le debe agregar el exceso en la difusin de los detalles del consumo de drogas, porque el re-portaje mencionado est pasado de ambas cosas: de violencia y consumo de drogas. Aunque es imposible medir el dao hecho a la sociedad, al menos increment la curiosidad por la drogadiccin.

    Afortunadamente comienza a darse un rechazo a la difusin excesiva de la violencia. El periodista y acadmico de la Universidad Iberoamericana, Mario Campos, dice que en la pornografa informativa los detalles se mag-nifican y, para destacar algunos aspectos de la situacin se hace de la noticia una puesta en escena. Yo agregara el aspecto poltico, pues la difusin de hechos de sangre se aumenta o disminuye dependiendo del efecto poltico. En el caso de la nia Paulette, por ejemplo, a todas luces se busca daar la imagen del gobernador del Estado de Mxico.

    Cabe preguntar: existir la necesidad de que las notas rojas aparezcan en portada de los noticiarios, sustituyendo los grandes temas sociales, eco-nmicos o polticos? Estoy de acuerdo en que los medios de comunicacin reaccionen ante un hecho de violencia, o a una catstrofe natural con la inmediatez que requieren algunos casos, pues el televidente o radioescucha debe satisfacer su necesidad natural de informacin, pero no con la porno-grafa informativa que satura hoy en da los medios.

    el rating manda

    Tono, pauta y grado de detalles son los que llevan a la exageracin, que es una verdad destemplada. Hay exposiciones de imgenes realmente ofensivas para el pblico, mucho ms para la vctima de la violencia. La entrevista con un moribundo luego de un accidente, o altercado, no es fcil de borrar en una mente juvenil porque la sangre provoca sensaciones diversas en la con-

  • 62 . l e o p o l d o e s p i n o s a b e n av i d e s

    ciencia de quien se est formando. Y algo similar o peor se genera cuando se publica a un grupo de sicarios drogndose.

    S que un medio de comunicacin vive de su rating. Por tanto necesita notas que llamen la atencin, y el morbo atrae los dedos de la mano que mueven el control de la televisin. Pero as como nos preguntamos qu fue primero, si el huevo o la gallina, salta la duda si los medios de comunicacin publican la pornografa informativa porque el pblico lo demanda, o el p-blico la ve porque el medio la publica.

    antecedentes

    Siempre se han publicado notas de violencia, lo cambiante es, adems de la tecnologa moderna que permite rapidez en la informacin, la evidencia grfica. Pero siempre la nota roja ha sido cruel. En la Gazeta de Lima del 11 de abril de 1794 sobre la ejecucin en Pars de Mara Antonieta de Lorena, Archiduquesa de Austria, se lea:

    Se arrodill, present la cabeza Luego que el fatal hierro la dividi del cuerpo, la mostr el ejecutor en los cuatro ngulos del tablado. Gente del populacho, vendi-da a los tiranos para vitorear su triunfo, aplaudi entonces, como ya lo haba hecho delante de la misma Soberana cuando se dio la sentencia, y cuando la conducan al suplicio, para que as no faltase ningn gnero de insulto. Apenas expir, subieron al cadalso tres mozos y empaparon pauelos en su sangre

    el amarillismo moderno viene de estados unidos

    As vino creciendo el amarillismo periodstico, y a fines del siglo XIX tom el formato actual, derivado de la competencia por el mercado entre el New

  • p o r n o g r a f a i n f o r m at i va . 63

    York World de Joseph Pulitzer y el New York Journal de Willam Randolph Hearst. Ambos luchaban por publicar las ms escandalosas y sensacionalis-tas portadas exagerando las noticias. El gnero periodstico llamado amari-llismo apareci como consecuencia de la competencia del mercado, tan slo para vender ms y ms caro. Cierto que todos disfrutamos de la historia y biografas ajenas. Es natural curiosidad conocer las vidas de otros, sobre todo de quienes han sobresalido en los diversos campos de la vida.

    la violencia vende

    Siempre hay personas que gustan de conocer el lado oscuro de los hombres, prefiriendo las historias de sangre, violencia o catstrofe. Afortunadamente son minora, pero hay ciertos medios de comunicacin que ah encontraron un nicho de venta, provocando el morbo por la sangre y el sexo. Respecto a la promocin del consumo de drogas se hace en el cine y la televisin desde hace dos dcadas. Era innecesario difundir cmo disolva los cuerpos El Pozolero ni a qu ola el bodrio, o saber los detalles de los abusos del padre Maciel a sus hijos, hasta qu desayun el nio el da despus de la felona. O los detalles de la vida de la familia de la nia Paulette. Menos necesario era ver el cadver del capo cubierto de billetes y sangre. Haba necesidad de publicar al futbolista Cabaas con un plomo en la cabeza en el sanitario de un bar? A quin beneficia ver a sicarios consumiendo droga?

    Cierto es que como dice Walter Lippman, el periodismo slo lidera lo que dice la gente, pero este tipo de periodismo nos devala, pues siempre hay la forma de presentar la nota roja sin apologizarla. Ahora, en los grandes peri-dicos del mundo, Mxico no es la excepcin, slo se reproducen los crmenes. Y si en nuestro pas no se lee cultura, es por la sencilla razn de que no se publica cultura.

  • 64 .

    Gazeta Constitucional de Nuevo Len. 3 de julio de 1826

  • . 65

    Peridico Oficial del Gobierno del Estado de Nuevo Len. 12 de agosto de 1952

    Peridico Oficial del Gobierno del Estado de Nuevo Len. 12 de junio de 1943

  • 66 .

    El Sol. 6 de abril de 1952

  • . 67

    El Universitario. Septiembre de 1952

  • 68 .

    El Porvenir. 20 de marzo de 1938

    El Porvenir. 1o. de enero de 1940

  • . 69

    El Porvenir. 1o. de enero de 1970

  • 70 .

    El Porvenir. 1o. de enero de 1980

    El Porvenir. 1o. de enero de 1990

  • . 71

    El Porvenir. 2 de enero de 2010

  • 72 .

    El Norte. 1938-1945

  • . 73

    El Norte. 6 de juniode 1975

    El Norte. 1o. de enero de 1988

  • 74 .

    El Norte. 15 de febrero de 2000

    El Norte. 9 de juliode 2009

  • . 75

    El Norte, Nacional. 17 de mayo de 2010

  • 76 .

    Milenio. 3 de febrero de 2007

  • . 77

    Milenio. 19 de mayo de 2008

  • 78 .

    Regio. 23 de diciembre de 1999

  • . 79

    Regiodeporte. 12 de septiembre de 2001

  • 80 .

    Vida Universitaria. 15 de noviembre de 2004

  • segunda parte

  • catlogobiogrfico-profesional

  • Dice Giovanni Sartori que el homo sapiens ha sido sustituido por el homo videns, concluyendo que la cultura actual, ms que de conocimiento, es de imgenes.14 Esta tesis podra ser cierta para determinados grupos de indi-viduos y para algunas actividades, como las campaas electorales o comer-ciales, en que los mensajes enviados a travs de imgenes repetidas o pautas altas, pueden inducir ciertas tendencias de opinin o impulsar el consumis-mo. Sin embargo, el individuo en condiciones normales exige informacin que consigue a travs de la palabra escrita o verbal a travs de los medios. A falta del don de la ubicuidad, puede acceder prcticamente a donde quiera por conducto de los medios de comunicacin.

    Es por ello que el periodismo y los periodistas son tan importantes. Las personas que mencionaremos empresarios, reporteros, locutores, edito-res, comentaristas en prensa escrita o electrnica han rebasado el papel de narradores de noticias para asumir en algunos casos el protagonismo involuntario de ser la noticia. Porque el pblico lee, escucha y ve, pero tambin piensa, y la actual abundancia de medios le permite comparar y calificar a los que comunican. Hay espacios en los mismos medios para ha-blar o escribir acerca de los periodistas como protagonistas de la historia. Bendita competencia.

    El siguiente catlogo biogrfico-profesional no intenta ser un documento total, ni siquiera pretende ser exhaustivo, pues pretender tal empresa sera construir una dilatada labor enciclopdica, que no es este caso. Slo me pro-pongo poner al alcance del lector particularmente de los jvenes estudian-tes y profesionales de la comunicacin y dems interesados en el tema una seleccin discreta de nombres vinculados con el ejercicio del periodismo en Monterrey desde sus primeros tiempos hasta la fecha. 14 Giovanni Sartori, Homo videns. La sociedad teledirigida, Taurus, Madrid, 1998.

  • n om b r e s p a r a l a h i s t o r i a . 87

    Para la seleccin segu algunos criterios, aplicados a partir de las fuentes disponibles. Primero: la muestra deba ser horizontal, es decir, que se encuen-tren all representantes en toda la extensin del tiempo, desde los orgenes de la actividad periodstica en Monterrey, hasta estos das; el segundo criterio es la amplitud, que nos permite acceder en cualquier direccin a profesionales de los distintos medios y formas de expresin periodstica, prensa escrita, radio y televisin. Un tercer criterio, al que concedo especial inters, es el de la interdisciplinariedad, que nos lleva a considerar el ejercicio periodstico de escritores, acadmicos, polticos, cientficos y lderes de opinin, lo cual ampla y enriquece el campo profesional. En este punto no puedo omitir algo que me parece valioso, tanto para el lector como para los investigadores inte-resados en profundizar el estudio del tema: llama la atencin cmo la produc-cin periodstica del siglo XIX y primera mitad del siglo XX ha contado con el ejercicio de relevantes personalidades de su tiempo: rectores, presbteros, intelectuales, embajadores, cientficos, gobernadores, alcaldes, legisladores, acadmicos, entre otros. Habr que estudiar las razones por las cuales los polticos de hoy, especialmente los que pueden considerarse vrtices en el cuadrante del poder, se alejan cada vez ms de la produccin intelectual y de la circulacin de sus ideas mediante artculos, ensayos y reflexiones espe-cialmente concebidos para los medios de comunicacin, como en su tiempo hicieron muchas figuras que ocuparon curules, escaos, alcaldas, secretaras y gobiernos, algunas de las cuales se vern aqu.

    He seguido un cuarto criterio de seleccin, que no del todo satisfecho, por el volumen de investigacin que demanda y que dejo para otros investi-gadores: ampliar, hasta donde fuera posible, los datos aportados por autores precedentes, gracias a los cuales pudo escribirse el presente manual. Indis-pensable, a la vez que difcil, es la obtencin de informes documentados sobre la creciente cantidad de jvenes profesionales que en los ltimos aos

  • 88 . l e o p o l d o e s p i n o s a b e n av i d e s

    se han incorporado a la produccin periodstica de Nuevo Len, tanto desde el ejercicio reporteril en los medios, como desde la reflexin cotidiana fuera de las salas de redaccin, desde las numerosas profesiones que configuran un arco de pensamiento cada vez ms prolijo, cada vez ms complejo y cada vez ms indispensable. A ello habr que incorporar a los que emergen a travs de las redes sociales como lderes de opinin.

    Un quinto criterio fue el de incluir en el catlogo a periodistas regiomon-tanos que hicieron o hacen sus vidas y carreras vinculados a los medios fuera del territorio, pero que en determinada medida obtuvieron aqu su formacin o parte de ella. De igual manera he incluido a aquellos que, procedentes de otras partes de Mxico o del mundo, dejaron en Monterrey parte de su obra.

    No omito mencionar una limitacin que usualmente maltrata intentos como ste: las fuentes no siempre estn a la mano o no se encuentran, y son necesarios mucho tiempo y recursos para acceder a ellas. De ah la omi-sin de algunos datos en determinadas fichas, que impiden conocer aspectos como fechas, lugares y, en ciertos casos, actividades ms o menos relevan-tes. Tambin he encontrado algunas contradicciones en los datos obteni-dos, felizmente advertidas, lo cual permiti solucionar muchas de ellas en la revisin editorial. Aunque he hecho todo lo posible por emplear fuentes bibliogrficas y hemerogrficas, que son las ms fiables, en no pocos casos se ha tenido que recuperar informacin en Internet, lo cual exige, como sabe el lector, una bsqueda escrupulosa y una constante crtica, comparacin y dis-criminacin de ciertas fuentes que hospedan un hervidero de inexactitudes.

    Hay un propsito en estas cpsulas biogrfico-profesionales que se hace visible en su lectura. Una ficha es un extracto de datos de una vida, ciertos hechos, ciertos momentos. Pero el conjunto de ellas es la revelacin de de-terminada porcin histrica en que los accidentes individuales configuran nuevas texturas y significados. As se ponen de manifiesto, por ejemplo, los

  • n om b r e s p a r a l a h i s t o r i a . 89

    vnculos extraordinarios entre formacin magisterial y conciencia periods-tica en la primera mitad del siglo XX; o el papel de la prensa como espacio para las ideas ms avanzadas en sus respectivos tiempos. Esta relacin nti-ma entre historias individuales y contexto histrico-social en que se dieron, permitir al lector atento sacar mayor provecho de los datos aqu ofrecidos.

  • ?a

    Agredano Brambila, Mario. Naci en Monterrey. Ha trabajado por ms de medio siglo como locutor, comentarista y reportero de radio y televisin. El 14 de julio de 1948 se inici en la locucin en la estacin radial XEMR de Monte-rrey. Tras diez aos de experiencia gan en una audicin para el noticiero del Canal 3 de televisin, a la que acudieron ms de treinta locutores. As se convir-ti en el primer locutor de noticieros de Canal 3 el lunes 21 de julio de 1958. La emisin fue inaugurada por el entonces gobernador Ral Rangel Fras.Agredano Ramrez, Mnica. Naci en Monterrey el 4 de mayo de 1971. Co-municloga de la UANL en 1994. Re-dactora y conductora de noticias en Ra-dio Nuevo Len; ha colaborado como reportera en Televisa Monterrey, TV Azteca y El Porvenir; jefa de prensa en el Ayuntamiento de Monterrey, coordi-nadora de comunicacin del Congreso del Estado y directora de comunicacin del Ayuntamiento de San Pedro.

    Aguilar, Alberto. Naci en la Ciudad de Mxico el 7 de noviembre de 1957. Economista por la UNAM, fundador de Uno Ms Uno y director del suplemento Don Dinero. Colabor en El Economis-ta, Notimex, El Norte, Reforma y en una docena de los ms prestigiados medios regionales. Locutor en Stereo Mil, Ste-reo Rey y conductor de Don Dinero en el 88.1 FM y 1110 AM.Aguirre, Jess Mara. Naci en Vi-llagrn, Tamaulipas, el 14 de marzo de 1882. Educador y periodista. Residi en Doctor Arroyo donde public dos peridicos: El Pequeo y La Voz del Sur. En Tampico public El Golfo. Se tras-lad a Monterrey en 1910, dedicndo-se al periodismo. En 1911 sustituy a Porfirio Barba-Jacob en la direccin de El Espectador. Fue adems director de El Noticiero en 1912 y edit el diario El Horizonte. Regidor del Ayuntamiento de Monterrey en 1914. Falleci en la Ciudad de Mxico en 1967.Alans tamez, Juan. Naci en El Cercado, Santiago, Nuevo Len, el 8 de enero de 1950. Arquitecto por la UANL. Fundador, director y columnis-ta del peridico mensual El Dilogo de El Cercado. Cronista de Santiago des-de 1986. Colaborador de El Guajuco de

  • catlogo biogrf ico-profe s ional . 91

    Santiago, Visin 2000, La Regin, y El Norte; de las revistas Cronos, La Quin-cena, y Horizonte y de Regio.com.Alardn Rosas, Herlinda. Naci en Aramberri, Nuevo Len. A fines del siglo XIX lleg a Monterrey. Estudi li-teratura en el Colegio Civil y escribi en la Revista Estudiantil del propio centro.Alonso estrada, Ren. Naci en Tampico en 1952. Jefe de informacin

    y columnista de diversos medios locales. Profe-sor de Ciencias de la Comu-nicacin de la UANL. Medalla al Mrito post

    mortem en la especialidad de periodis-mo en 2010. Reportero y conductor en Radio Alegra y conductor del progra-ma Punto de Partida en Radio y TV Nuevo Len. Falleci en Monterrey en julio de 2009.Alvarado daz, Hctor. Naci en Monterrey en 1957. Licenciado en Le-tras por la UANL. Catedrtico en la Universidad Michoacana de San Nico-ls de Hidalgo, la UANL y el ITESM. Director Editorial de la Universidad Michoacana, editor de la Coordina-

    cin de Publicaciones del Gobierno de Nuevo Len. Desde 1992 mantiene una seccin de libros en TV Nuevo Len.Alvarado Ginesi, eduardo. Na-ci en Monterrey en 1950. Abogado por la UANL y egresado del Colegio de Periodismo. Inici en Televisa en 1979 dirigiendo el programa Repor-tajes de Alvarado. Actualmente pro-duce y dirige el mismo programa para TV Nuevo Len.Alvarado ortiz, Horacio. Naci en Monterrey el 25 de agosto de 1925. Pionero de la televisin, como conduc-tor de noticieros en XEFB TV Canal 3. Transmiti el primer programa filma-do en Monterrey en pelcula de 16 milmetros, en blanco y negro. Reportero e in-vestigador tele-visivo y funda-dor del popular programa Reportajes de Alvarado, que desde 1980 difunde la cultura y tra-diciones regionales. En radio colabor en XEH, XEAW, XET y XHEJM. Es-critor, productor y narrador de novelas. Alvarado santos, edmundo. Naci en Monterrey en 1923 y falleci en

  • 92 . l e o p o l d o e s p i n o s a b e n av i d e s

    1949. Abogado por la Universidad Au-tnoma de Nuevo Len. Fue juez civil. Colabor en Armas y Letras.Alvarado santos, Jos. Naci en Lampazos el 21 de septiembre de 1911. Periodista y escritor. Estudi en el Co-legio Civil de Monterrey. Escribi en Archivaldo, peridico estudiantil de 1927 a 1929 y fue fundador de Rumbo. Durante cerca de medio siglo escribi para los ms importantes peridicos y revistas mexicanos. Rector de la Uni-versidad de Nuevo Len (1961-1963) Autor de Tiempo guardado (1976) y otros libros. Falleci en la Ciudad de Mxico el 23 de septiembre de 1974.Alvarado segovia, francisco Javier. Naci en Doctor Arroyo en 1959. Li-cenciado en Bibliotecologa por la UANL. Cronista de Doctor Arroyo. Secretario de la Asociacin de Cronis-tas de Nuevo Len en 1992. Ha colabo-rado en El Metro, Diario de Monterrey, y actualmente en Regio.com.Allen navarro, Ral. Naci en Lam-pazos el 14 de febrero de 1900. Te-nedor de libros y taquimecangrafo. Dedicado al periodismo desde 1923 cuando fund la revista Actualidades. Colabor en Solidaridad. Fund la revista Vidriera cuando trabajaba en

    esa empresa. Fue jefe de redaccin en la revista Avance. Sus trabajos se reprodujeron en El Norte, Tribuna de Monterrey y El Porvenir. Falleci en la Ciudad de Mxico en 1988.Anda y de Anda, Lorenzo de. Naci en Nuevo Laredo el 7 de noviembre de 1937. Abogado por la UANL, doc-tor en derecho por las universidades de Madrid y Estrasburgo. Rector de la Universidad Autnoma de Nuevo Len. Editorialista en 17 peridicos de Mxico. Comentarista de radio y televisin.ngel, Gloria del. Naci en Monte-rrey el 24 de marzo de 1925. Titulada en Letras por la Universidad Autno-ma de Nuevo Len. Trabaj en el pe-ridico El Norte.Anteo, Mario. Naci en Monterrey en 1955. Escritor, licenciado en Letras por la Universidad Autnoma de Nuevo Len. Colabor en diversas revistas y peridicos. Escribi guiones para radio. Fue becario de la Fundacin Rockefe-ller a travs del Guadalupe Cultural Arts Center de San Antonio, Texas, y en 2004 gan el Premio UANL a las Artes. Au-tor de varios libros de narrativa.Arenales, Ricardo Ver Porfirio Bar-ba-Jacob.

  • catlogo biogrf ico-profe s ional . 93

    Arrambide paz, edgardo. Naci en Montemorelos el 1 de diciembre de 1953. Hizo estudios de Arquitectura en la UANL. Locutor en la XEDD de Montemorelos y posteriormente en Grupo Radio Alegra, TV Azteca y Ncleo Radio Monterrey. Actualmen-te es director de prensa del equipo de bisbol de los Sultanes de Monterrey.Arreola castillo, federico. Naci en Monterrey en 1956. Licenciado en Eco-noma por el ITESM. En 1983 apare-

    cen sus primeras colaboraciones en El Porvenir. En poco tiempo pasa a ser co-lumnista polti-co de El Norte, hasta 1994. Des-

    pus fue nombrado director general editorial de El Diario de Monterrey, La Opinin de Torren y El Diario de Tam-pico. Ascendi a director general de la Divisin de Prensa de Multimedios Estrellas de Oro. En 2005 renuncia a la direccin del peridico Milenio para sumarse a las redes ciudadanas de L-pez Obrador.Arroyo Llano, Rodolfo. Naci en Monterrey el 23 de enero de 1908. Gra-

    duado en la escuela de Medicina en 1932. Presidente de la Sociedad Nue-voleonesa de Historia, Geografa y Estadstica. Colabor en El Nor