Paraísos al norte de Lima

16
Semanario del Diario Oficial El Peruano | Año 102 | 3 a etapa | N° 157 Semana del 25 al 31 de enero de 2010 • DISTRIBUCIÓN GRATUITA Paraísos al norte de Lima Recuerdos en blanco y negro Courret y la ciudad que se fue Terremoto metalero Metallica sacudió San Marcos PLAYAS ESCONDIDAS Y MARAVILLOSAS PARA PASEAR Y ACAMPAR CON LA FAMILIA

Transcript of Paraísos al norte de Lima

Page 1: Paraísos al norte de Lima

Semanario del Diario Oficial El Peruano | Año 102 | 3a etapa | N° 157

Sem

ana

del 2

5 al

31

de e

nero

de

2010

• D

ISTR

IBU

CIÓ

N G

RAT

UIT

A

Paraísos al norte de Lima

Recuerdos en blanco y negroCourret y la ciudad que se fue

Terremoto metaleroMetallica sacudió San Marcos

PLAYAS ESCONDIDAS Y MARAVILLOSAS PARA PASEAR Y ACAMPAR CON LA FAMILIA

Page 2: Paraísos al norte de Lima

2 • VARIEDADES

EXPOSICIÓN

SUEÑOS. Apacibles olas salen al encuentro del visitante en las paradisiacas playas norteñas FOTO: Rocío Farfán

2008 © TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS.

Variedades es una publicación del Diario Oficial

DIRECTOR FUNDADOR : CLEMENTE PALMA

DIRECTORA (E) : DELFINA BECERRA GONZÁLEZ

SUBDIRECTOR : JORGE SANDOVAL CÓRDOVA EDITOR : WALTER CARRILLO SÁNCHEZ

EDITOR DE FOTOGRAFÍA : JEAN P. VARGAS GIANELLA EDITOR DE DISEÑO : JULIO RIVADENEYRA USURÍN

TELÉFONO : 315-0400, ANEXO 2030 CORREOS : [email protected] [email protected]

RESUMEN5 | ESCENARIOSAnálisis del Acuerdo Nacional y su importancia para el país por María del Pilar Tello.

PORTADA

8 | PORTAFOLIONo solo al sur sino también al norte los limeños disfrutan del sol y de playas

16 | EL OTRO YOFaceta divertida de una narradora de noticias que tiene alma de hippie

12 | CORREO DE SALEMConmovedor relato de un viajero y sus preparativos para la última travesía

14 | TRADICIÓNHistoria del night club más famoso de Cuba que a sus 70 años sigue vigente

ESCRIBE: JOSÉ VADILLO VILAFOTOS: COLECCIÓN BIBLIOTECA NACIONAL DEL PERÚ-ARCHIVO COURRET

I. En medio del conjunto brilla una individualidad. Entre las imágenes de una ciudad que ya se fue –cuyos reta-zos aún podemos hallar en la ciudad, si persistimos–,

hay sólo un autorretrato, el que se hizo a sí mismo Eugene Courret, allá por 1880.

La mayoría de los recuerdos visuales que tenemos de la segunda mitad del XIX de Lima se la debemos a este fran-cés, quien trabajó durante mucho tiempo con su compatrio-ta, Eugenio Manoury, siendo ambos testigos de la vida en nuestra capital desde el estudio en la cuadra tres del jirón de La Unión, edificio que hasta hoy mantiene sus formas externas.

Courret desembarcó en el Callao alrededor de 1860 y se quedó durante tres décadas retratando a todos los persona-jes, calles, costumbres, luces y sombras de Lima.

Pero el francés no se limitó a ser un fotógrafo de estudio. Como acota Alfredo Vanini, curador de la breve muestra Lima a través del Estudio Courret, que se exhibe en el hall princi-pal de la Biblioteca Nacional del Perú (BNP), en San Borja, Courret "fue testigo de hechos trascendentales y dolorosos, como la ocupación de Lima por el ejército chileno. Gracias a él podemos comparar lo que fue antes de la Guerra Chorrillos a lo que quedó después del saqueo", comenta.

No sabemos lo que pensaba Courret al retratar todo Lima, pero siempre debió saber lo que es una obsesión de los fotógra-fos de raza: dejar lo mejor para que perviva en el tiempo.

COURRET DEVELA A LA OTRORA CIUDAD JARDÍN

Lima coqueta y señorial

Un cerro San Cristóbal desnudo, sin cruz o un puente de piedra adornado con arcos celestiales, que une el Rímac con Lima, son retazos de una memoria urbanística que el francés Eugene Courret retrató hace más de 140 años. Hoy podemos admirarla a través de una muestra fotográfica, cómo fue la tres veces coronada Villa

II. Las 18 imágenes que integran esta muestra son sólo un grano de arena entre las 52 mil placas del archivo Courret que la BNP adquirió en 1985, gra-

cias al apoyo del gobierno francés. No todas las imágenes del estudio Courret fueron tomados por éste, sino hay otras firmadas por Eugenio Manoury y Adolphe Dubreuil, quien

Page 3: Paraísos al norte de Lima

LIMALunes 25 de enero de 2010 • 3

LA EXPOSICIÓN VA HASTA EL SÁBADO 30, EN LA SEDE DE SAN BORJA DE LA BNP (AV. DE LA POESÍA 160). INGRESO LIBRE.

tomará luego la dirección del afamado estudio, a la partida a Europa de Courret. (La lista de los clientes de Courret y algunos carnés, entre otros, figuran en una exposición hoy en el ICPNA).

Nos mordemos la cola y repetimos que estamos ante una ciudad que ya no está, urbanística y culturalmente hablando. Nos inquieta la ausencia del arco sobre el puente de piedra que hasta hoy une el Rímac con Lima y el jirón de la Unión.

La imagen es de 1874 y el puente tuvo una historia que iba con el trajinar de los tiempos: Se construyó en 1700, fue derribado 46 años después, se reedificó en 1752 y fue re-parado en 1868 por el presidente Balta. Su letrero original de "Dios y el Rey", fue cambiado por "Dios y la Patria". No se pudo salvar de un incendio del 5 de abril de 1879. Como recuerda Vanini parece un "lúgubre vaticinio": pocos días después Chile declararía la guerra al Perú.

Otra ausencia notable es la iglesia jesuita de Desam-parados. Courret la fotografió en los años de 1870. Pese a todas las protestas se demolió en 1938 para ampliar los jardi-nes posteriores de Palacio de Gobierno, y en compensación el Estado dio el dinero para que se construya la iglesia del mismo nombre en la cuadra 12 de la avenida Venezuela.

Otra imagen, de 1868, una panorámica tomada por Courret desde la torre de la iglesia de Santo Domingo, permi-te apreciar el cerro San Cristobal sin ninguna cruz sobre su cima y desnudo en sus cuatro costados.

La ciudad creció, se dinamizó y se adecuó a los tiempos modernos. Manoury toma en daguerrotipo, en 1860, una ima-gen del antiguo Palacio Arzobispal cuando en la plaza mayor se alumbraba por las noches con faroles a gas.

Page 4: Paraísos al norte de Lima

4 • VARIEDADES

EXPOSICIÓN

HAY DOS VISTAS DE COURRET, DE 1866 Y 1874, DEL ANTIGUO PALACIO MUNICIPAL. LA PRIMERA ES IMPORTANTE, PORQUE ES EL AÑO EN QUE EN LIMA SE DERRIBAN LAS MURALLAS. EN LA SEGUNDA, SE RETRATA LA TRANQUILIDAD DE UNA LIMA HABITADA SÓLO POR 80 MIL HABITANTES.

Manoury retrata en 1860 el movimiento de la calle de Ma-riquitas, actual cuadra 3 del jirón Moquegua, que ya por enton-ces contaba con más de un siglo de vida y también a la capilla "de la Buena Muerte", en una postal con carruajes apacibles; y Courret hace lo propio en 1886 con la calle Mercaderes (hoy cuadra 4 del Jirón de la Unión), era el mall de la época, por la cantidad de negocios que albergó.

Dubreuil retrató en 1900 al financista alemán Carlos Einfiel-dt, a su esposa Luisa y a sus amigos melómanos (fundadores en 1907 de la Sociedad Filarmónica), en una sesión de ensayo en su casa de la Quinta Heeren. Y también a tapadas limeñas en el Palacio de Torre Tagle en 1917, como un eco tardío de esa Lima que ya es parte de la historia. O "La Perrera", un mi-crobús de a principios del siglo pasado, en la cual hoy circulan por las mismas calles ya distintas sus herederas, las combis.

III. Los paneles de la exposición que cohabitan el hall se acompañan con un archipiélago de vitrinas. Las imágenes se complementan con los libros. Se tra-

ta de "una bibliografía elegida arbitrariamente, porque los libros sobre la ciudad llenarían todo el hall", comenta Vanini.

"Si bien cuando cayeron las murallas de la ciudad empezó a peruanizarse Lima, algunos autores (de fines del XIX y prin-cipios del XX) empiezan a ver con mucha nostalgia a esa Lima que ya no está. Esa actitud comienza a ser una moda en la clase dominante", dice el curador.

En las vitrinas figuran ejemplares de Lima Antigua, una mirada a la ciudad del ayer, que el francés Carlos Prince pu-blicó en forma facsimilar en su momento; están las Estam-pas Limeñas y Calles de Lima y Meses del Año del "cronista de Lima", don José Gálvez; o el imperdible Lima Ciudad de los Reyes (1968), del multifacético Aurelio Miro Quesada o la joya Del Pasado Limeño (1932), del autodidacta Ismael Portal, para regocijo de los bibliofilos. Guillermo Thorndike novela sobre el episodio de la Guerra del Pacífico con La Batalla de Lima (1979).

O aquellas ficciones necesarias para entender la ciudad que surgía tras la explosión demográfica, como Lima en Rock

(Los inocentes), donde Oswaldo Reynoso da una mirada a la juventud de los años 1950. Y el retrato que hace de Sebastián Salazar Bondy sobre Lima La Horrible.

Y esos estudios para entender la urbe que tenemos hoy, como Los Nuevos Limeños. Sueños, fervores y caminos en el mundo popular (1993) de Gonzalo Portocarrero, Arquitectura para una Ciudad Fragmentada (2000), de Elio Martuccelli y La Muralla y los Callejones (1999), de Gabriel Ramón Joffré.

Una última vitrina tiene un manojo de portadas de elepés. Un formato del ayer, también, aunque de extinción más recien-te. Se dice que la BNP tiene más de cuatro mil elepés, casetes, y los CD de música peruana que ingresan a sus archivos como parte del Depósito Legal.

Está en Voz y vena de Chabuca Granda, La jarana es en los altos, con Mario y sus carretas; el clásico de Lucha Reyes con "Regresa" y "Mi última canción" o el Seguimos valseando festejos con Lucila Campos, Arturo "Zambo" Cavero y Oscar Avilés. Y esto es sólo la punta del iceberg de la limeñidad, de ayer, hoy y mañana.

Page 5: Paraísos al norte de Lima

ESCENARIOSESCRIBE: MARÍA DEL PILAR TELLO Lunes 25 de enero de 2010 • 5

LA NUEVA DÉCADA II

El relanzamiento del Acuerdo Nacional

A Javier Pérez de Cuéllar,

en sus noventa años

de entrega a las mejores causas nacionales

y de la humanidad.

El pacto social es un signo de los tiempos. Los diálo-gos nacionales permiten a las sociedades y a sus gobiernos analizar el interés nacional para producir

consensos o decisiones. Desde los años noventa, los de-mócratas peruanos nos reunimos para llegar a acuerdos y acciones conjuntas y logramos el Acuerdo de Gobernabili-dad, que firmamos el 26 de noviembre de 1999 en el Hotel Bolívar bajo el liderazgo de Gustavo Mohme Llona, quien trazó una línea patriótica de compromiso con la democra-cia y la construcción nacional.

Ahí nos dimos cuenta de que el país no se construye solo y que alrededor de una mesa la verdad se consolida y todos podemos sentirnos involucrados en alcanzar objetivos predeterminados. Así se pueden levantar economías con el esfuerzo de todos y hacer que la sociedad se sienta parte de los mejores resultados, que los apoye y los defienda.

El Acuerdo Nacional complementa los poderes del Estado desde la buena voluntad y el interés nacional. Ahí están las 31 políticas de Estado, fruto del debate plural de largos meses. Ellas pactan la continuidad en el corto, me-diano y largo plazos, son mucho más eficientes que cual-quier eslogan oficial.

Y el Acuerdo Nacional que tenemos llega casi a la dé-cada, con sus logros y frustraciones, limitaciones y poten-cialidades, siendo un privilegio y una muestra de madurez cívica y política. Ha dado al Perú la visión de lo posible a ser logrado en conjunto. Y aunque lamentablemente sus acuer-dos no son vinculantes, más allá de lo escrito en el docu-mento que los contiene, cuán importante y necesario es que lo sean para hacer de su seguimiento una obligación, de su letra y espíritu una inspiración, un referente de lo deseable para diferenciarlo razonablemente de lo posible. Para legis-lar está el Congreso, para consensuar el Acuerdo, y en ello ha sido pródigo y eficiente. ¿Cómo hacer para que las po-líticas de Estado y los compromisos y pactos se traduzcan en leyes y alcancen su plena aplicación, estableciendo una articulación entre el corto, el mediano y el largo plazo? Esa es la pregunta aún sin respuesta.

Y es que su inmensa posibilidad y utilidad no siempre ha sido bien entendida por los líderes máximos de los partidos po-líticos, cuya presencia en el Foro se ha dado sólo en los gran-des momentos y muchas veces sólo para la foto. El AN no es un anexo del Gobierno. Como tal no valdría mucho, pero sí es un espacio diferenciado y plural, independiente cuya autoridad ética es irreemplazable. Ha faltado voluntad política esencial para que las políticas de Estado se conviertan en el insumo esencial de la visión compartida como la contenida en el plan nacional de desarrollo presentado por Ceplan.

A nadie escapa el valor del diálogo, sobre todo en un país tan desencontrado como el nuestro. Lo demostraron los luctuosos sucesos de Bagua. Qué importante sería que cada año se cumpliera una sesión solemne del Acuerdo Nacional presidida por el Jefe del Estado para evaluar las políticas de Estado y los consensos. Para analizar la arti-culación de aquellos con la Agenda Legislativa y para pre-sentar iniciativas y proyectos de ley con el respaldo ético del Acuerdo Nacional.

Esta eficacia repercutiría, a no dudarlo, en los Acuerdos Regionales, que ya plasman consensos amplios e incluyen-tes entre los tres niveles de gobierno, los partidos y movi-mientos políticos y las organizaciones de la sociedad civil representativas de cada región, pero padecen de la misma falta de interés de los líderes mayores.

La participación ejemplar del Presidente de la Repú-

blica y de los principales líderes de los partidos políticos en el AN ratificaría el compromiso del partido de gobierno y motivaría el de los otros partidos e instituciones para res-catar el valor de las políticas de Estado para la inversión extranjera, la gobernabilidad democrática y la promoción de la cohesión social.

Al ingresar nuevamente en una etapa preelectoral, el país requiere de la confianza en el futuro, que solo se lo-grará con una visión compartida con base en los objetivos y políticas del Acuerdo Nacional. Un magma demasiado va-lioso para dejar de ser usado positivamente para la nación. Un compromiso de apoyar la gobernabilidad del país entre los candidatos de los partidos políticos que participen en el 2011 podría ayudar, pues lo que se viene, y se repite, es un Parlamento cada vez más fragmentado, sin mayoría que apoye al Presidente y sin posibilidades de una labor congre-sal eficiente. Nuestros Ejecutivos no tienen mayoría en los parlamentos cuyos miembros se definen en primera vuelta. Ese problema de gobernabilidad debería ser resuelto a par-tir del Foro del AN. El que tenga ojos de ver que vea.

El Partido Popular Cristiano, con la presencia de Lour-des Flores Nano, entregó hace muy poco al Acuerdo Na-cional el documento Progreso para todos, en el que figu-ran sus principales planteamientos. Que los otros partidos sigan su ejemplo. Esto es responsabilidad con el Acuerdo y con el Perú. ¡¡Felicitaciones!!

Page 6: Paraísos al norte de Lima

6 • VARIEDADES

CONCIERTO

LOS FIEROS DE METALLICA EN SAN MARCOS

La Decana de América abrió sus puertas a la trepidante música de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis y un ex sanmarquino revive el éxtasis de los 50 mil fanáticos que sucumbieron ante el frenesí de la banda estadounidense.

P L

Page 7: Paraísos al norte de Lima

Lunes 25 de enero de 2010 • 7

ROCK

INICIAMOS EL "POGO", BAILE QUE CONSISTE EN SALTAR Y EMPUJAR CON EL CUERPO AL OTRO AL SON DE LA MÚSICA; PERO AL "POGO" CRIOLLO DE ESE DÍA, SE LE AGREGÓ COMO CONDIMENTOS PUÑETES Y PATADAS.

ESCRIBE: FÉLIX PAZFOTOS JUAN CARLOS GUZMÁN

Fui una de las 50 mil personas que el pasado martes lograron hacer un sueño realidad: ver y escuchar a los míticos de Metallica en directo. Quedé afónico de tanto

gritar, pero al final concurrí al mejor concierto de metal que se haya presentado en Lima, y creo que a un espectáculo difícil de superar.

Llegué con mi hermano Miguel poco más de las 17:00 horas. Todo me traía recuerdos. Las largas colas ya no eran para viajar en los célebres "burros" (ómnibus universitarios) o esperar en la entrada de los comedores.

Esta vez las colas eran para ingresar al viejo e imponen-te "Monumental" de San Marcos, mi querida alma máter. En este mismo estadio en los años 80, ante la falta de electri-cidad, debimos improvisar algunas clases, aprovechando la luz de la tarde.

Era dífícil de creer que en este estadio se iba a producir la más grande concentración de fanáticos de un grupo meta-lero. Atrás quedaban los recuerdos de un frustrado Santana, que en los años 70 trató de actuar en este mismo escenario. Ahora sí, todo estaba organizado como un reloj para ver a estos cuatro metaleros.

La tribuna de oriente fue la primera en llenarse de faná-ticos, como en aquella tarde de 2006, cuando el Deportivo Municipal, mi equipo, retornaba a primera división.

A cada momento me encontraba con viejos amigos de la "cuatricentenaria" y de la Banda del Basurero, la barra del Muni, colegas, punkies y hasta skinhead; todas las tribus ur-banas; niños y ancianos. Era una torre de Babel. Y eso, sólo lo podía lograr la música, y un grande como Metallica.

No importó esperar más cuatro horas dentro del coloso sanmarquino. Todas las molestias quedaron atrás cuando los Cuatro jinetes del Apocalipsis tomaron posesión del inmenso escenario con "The Ecstasy of Gold", iniciando su presenta-ción con el clásico "Creeping Death".

Fue increíble, miles de manos y brazos se alzaron y miles de gargantas furiosas comenzaron a gritar al son de las guitarras y la batería, Metallica iniciaba su tour sudamericano, y la Ciudad de los Reyes se fundía en la vorágine de un metal de acero.

James Hetfield, Lars Ulrich, Kirk Hammett y Robert Trujillo dieron una descarga trepidante que jamás se podrá olvidar. La noche se inició con el clásico "Creeping Death" y "From Whom The Bell Tolls" del segundo disco Ride the Lightning; siguió "Fuel" del Reload; "Harvester of Sorrow" del And Justice for All y "Fade to Black" del Ride...

Luego vinieron dos temas del último disco Death Magne-tic: "That Was Your Life" y "The End of the Line". Para seguir con "Sad But True" del comercial Metallica, disco conocido como el Álbum Negro.

Tres temas después interpretaron "One" y posteriormen-te el tema, a mi gusto, más elaborado e importante del grupo: "Master of Puppets", extraído del disco del mismo nombre.

La historia continuó con "Battery", otra joya del mismo disco. Y los millares de cabezas se movieron de arriba para abajo, expresión conocida como "mosh".

El éxtasis fue total. Vendrían "Nothing Else Matters" y "En-ter Sandman", éste último considerado el gran "hit" de la banda por muchos, aunque no por los metaleros "ortodoxos".

La presentación se acercaba al final, y continuaron los fuegos artificiales. La milicia de Metallica esperaba más. Y todo acabó con tres clásicos: "Am I Evil?", "Blackened" y el legendario "Seek And Destroy", el único del primer disco Kill Em All.

Con este show, Lima celebró sus 475 años de fundación y su ingreso a las grandes ligas de los espectáculos de rock. Y nosotros junto a ecuatorianos, colombianos y chilenos, que acudimos al concierto, cumplimos un sueño que hasta hoy sa-boreamos. "Olé, olé, olé..Meta..llica"...

Page 8: Paraísos al norte de Lima

8 • VARIEDADES

PORTAFOLIO

HACIA EL NORTE DE LIMA SE ABREN FANTASIOSAS PLAYAS

Olas de ensueño

Si busca la serenidad y tranquilidad de un oasis idílico poco concurrido, anímese a remontar las dunas de un camino formado por arena, mar y Sol, a solo cuatro horas y media de distancia desde Lima, y visite las hermosas playas de Áncash. Ahí también podrá conocer algunos sitios arqueológicos y disfrutar de una magnífica gastronomía.

ESCRIBE: GISELLA SALMÓN SALAZARFOTOS: ROCÍO FARFÁN

En el kilómetro 293 de la Panamericana Norte, a 4 horas y media de Lima, se encuentra la ciudad de Huarmey, una de las veinte provincias que integra la

Región Ancash y el balneario más concurrido por sus exóti-cas playas.

Entre las playas que recomendamos visitar destacan:Bermejo (km 228): una playa tranquila y familiar. Debido

a su extensión, es ideal para realizar campamentos y prac-ticar el surf.

Tamborero (km 261): de aguas cristalinas y bordeadas por extensas dunas, esta playa se caracteriza por la quietud de sus aguas, para nadar y bucear.

Tuquillo y La Pocita (km 303): son playas adyacentes de aguas remanso. Por su particular geografía han sido deno-minadas "La piscina del océano Pacífico". Formada por arre-cifes naturales, La Pocita alberga un jacuzzi natural y tiene sombrillas artesanales. Son playas muy concurridas los fines de semana y por S/. 2.5 se puede encontrar transporte desde el centro de Huarmey.

Se puede practicar natación, remo, pesca y buceo, y pa-sear en bote. Además está permitido acampar.

El Erizo (km 306): su singular nombre deriva de la abun-dancia de puntiagudos equinodermos en la zona. Se ubica en el distrito de Culebras, en Huarmey. Esta playa exótica tiene arena blanca y agua azulina. Nada tiene que envidiar a los parajes caribeños. SOLITARIAS. En Huarmey se encuentran playas aisladas del mundanal ruido capitalino.

MILENARIO. Durante el recorrido de la ruta norte se pueden visitar numerosos restos arqueológicos, como Sechín y Caral.

Page 9: Paraísos al norte de Lima

Lunes 25 de enero de 2010 • 9

PLAYAS

CASMAA poco más de cinco horas en auto desde Lima, se encuentra la ciudad de Casma, capital de la provincia del mismo nombre, ubicada en el kilómetro 375 de la Panamericana Norte. Entre sus playas destacan:

Las Aldas (km 345): playa de aguas tranquilas alejada del bullicio de la ciudad. Es ideal para realizar campamentos o animarse a pasar unos días en el hos-pedaje turístico que presenta cabañas rústicas instala-das en el lugar desde 1976. Además de disfrutar de la naturaleza es posible practicar diferentes deportes, visitar las ruinas aledañas o aventurarse a conocer Sechín.

La Gramita (km 347): Florentino Mejía tiene 32 años viviendo en esta caleta, afirma que estas playas no solo son atractivas sino que se pueden pescar lenguados, ca-brillas y chitas.

Las Zorras (km 364.5): con más de 2 km de exten-sión, esta playa no cuenta con acceso vehicular cercano, por ello es ideal para realizar caminatas y disfrutar de la naturaleza adyacente.

PAZ. Puede realizar diversas actividades como pasear en bote, hacer deportes o solo descansar plácidamente para ver el sunset. Nada tiene que envidiar a las playas del Caribe.

Page 10: Paraísos al norte de Lima

10 • VARIEDADES

PORTAFOLIO

BUEN GUSTOSi visita el norte chico, no puede dejar de probar en Barranca el famoso tacu tacu. Elaborado a base de frijoles y arroz, mezclado en paella y frito en sartén, se sirve acompañado de un delicioso pescado o marisco.

"Nosotros freímos la masa antes de hacer el tacu tacu. Pero siempre lo elaboramos con cariño y alegría, como se deben preparar todas las comidas", comenta Don Tato. Su esposa revela que el plato más solicitado es el tacu tacu relleno con picante de maris-cos. Su restaurante se ubica en el cruce de Pativilca, en pleno malecón de Barranca.

LA POCITA ALBERGA UN JACUZZI NATURAL Y TIENE SOMBRILLAS ARTESANALES. ES UNA PLAYA MUY CONCURRIDA LOS FINES DE SEMANA Y POR S/. 2.5 SE PUEDE ENCONTRAR TRANSPORTE DESDE EL CENTRO DE HUARMEY.

SABROSO. Los platillos a base de pescado, mariscos y frejoles, como el contundente tacu tacu, resultan espectaculares. Los adultos pueden practicar la caza submarina y los niños gozar de las amplias playas.

Page 11: Paraísos al norte de Lima

ESCENARIOSNUESTRAMÚSICAESCRIBE: MANUEL ACOSTA OJEDA

Lunes 25 de enero de 2010 • 11

BATALLA DE LA CANCIÓN COSTEÑA (1)

A pocos días de la conmemoración de las batallas de Chorrillos, San Juan y Miraflores –enero de 1881–, donde pudo más el poder del rifle chileno, que el valor y coraje del pecho peruano, podemos comparar el desigual enfrentamiento entre los que amamos nuestra canción nacional tradicional contra los ritmos ajenos a nuestros intereses culturales, disfrazados de música -no sólo extranjera-, sino también hecha por peruanos.

DESIGUAL Y VALEROSA

Esta antigua lucha entre las dos fuerzas ya menciona-das es un problema sociológico muy largo de explicar. Recordemos que en la época del Virreinato fuimos ata-

cados y casi vencidos por la cultura europea, principalmente española; siglos después, luego de la llamada Independencia, los vencedores criollos, en su primer momento de euforia, opta-ron por cultivar la música costeña, para luego –ya establecidos en el poder– dejarse llevar por la soberbia de ser blanco y, por tanto, tener iguales derechos que los europeos, consumiendo lo mismo. Adoptan y adaptan el minué francés, la pavana, el waltz, la cuadrilla, el rigodón, etcétera.

A partir de esa época, ya podríamos separar dos claras co-rrientes en nuestras costumbres musicales; por un lado, la de los blancos o mestizos de blanco, y por el otro, la del negro afro-descendiente –no afroperuano–, la de los postergados andinos y la de los casi "invisibles" selváticos. Después de la Guerra con Chile, como una respuesta de la calidad humana del vencido, llegan a lo más alto de su literatura González Prada, Abelardo Gamarra, Ricardo Palma y muchos otros, mientras que en la mú-sica popular, en el barrio de Malambo (Rímac) el sentimiento del negro peruano empieza a manifestarse en el valse, que sería el equivalente al spiritual del negro del sur de Estados Unidos.

Este género, junto con la polca y el canto de jarana, van tomando cuerpo al ser difundidos por las grabaciones de Mon-tes y Manrique –1911 y 1912–. La ausencia de los medios de comunicación masivos en aquella época jugó a favor de la música de la casa; este momento histórico llega a su fin con la entrada de la Victrola –gramófono de pequeño tamaño, sin la bocina– a Lima a inicios de la década de 1920, que vino a reemplazar al gramófono de corneta.

Acompañando la novedad, llegan discos de carbón, graba-dos con los últimos adelantos de la tecnología; estos contenían charleston, fox-trot, jazz, shimy, one-step, cameltrot, tangos y otros, que comparándolas con los ritmos y canciones que ahora nos invaden, la calidad de sus expresiones musicales resulta siendo arte.

Bien dice César Santa Cruz que no hay un solo valse o pol-ca que recuerde en su letra la celebración del primer centenario de nuestra Independencia. ¡1921 encontró a las musas criollas inactivas y a los bardos criollos en un momento de voluntario mu-tismo! ¡Para qué componer, si nadie escucha! (1). Estas palabras demuestran que no exageramos cuando calificamos de "terrible" la postergación y el exterminio de nuestra canción popular.

A PARTIR DE ESA ÉPOCA YA PODRÍAMOS SEPARAR DOS CLARAS CORRIENTES EN NUESTRAS COSTUMBRES MUSICALES, POR UN LADO, LA DE LOS BLANCOS O MESTIZOS DE BLANCO, Y POR EL OTRO, LA DEL NEGRO AFRODESCENDIENTE, LA DE LOS ANDINOS Y LA DE LOS CASI "INVISIBLES" SELVÁTICOS.

(1) César Santa Cruz, El waltz y el valse criollo 1989, pág. 69.

Page 12: Paraísos al norte de Lima

12 • VARIEDADES

CORREO DE SALEM

ESCRIBE: EDUARDO GONZÁLEZ VIAÑA

–¿De dónde viene usted?– me preguntó por hacer conversación la anciana dama que estaba sentada frente a mí en la misma mesa, y al enterarse que había viajado tan temprano desde Cor-vallis, una ciudad situada a 60 kilómetros de allí, me preguntó extrañada si no había allí una iglesia católica.

–Claro que la hay. Es Saint Mary –repuse–. Pero, los "do-nuts" de allá no pueden compararse con lo que ofrecen aquí des-

SOBREPONERSE AL DOLOR

Historia de viajeros

Conocí a Jane Nolan durante el desayuno comunitario que se sirve después de misa para que los parroquianos puedan entablar amistad. Ocurrió en la Queen of Peace Church de Salem, a las 8 de alguna luminosa mañana, hará cinco años.

cir que era de ancestro irlandés como la mayoría de los pelirrojos, pecosos y afables fieles. Además, es madre de Maureen, una guapa profesora de mi universidad que no la acompaña a misa, ya no recuerdo si por ser testigo de Jehová o porque prefiere le-vantarse tarde.

Sean Sutherland, el caballero que a veces va con Jane a la iglesia es su vecino, tiene 95 años, peleó en la Segunda Guerra Mundial, se jubiló con varios millones en el bolsillo hace algunas décadas y enviudó casi al mismo tiempo que Jane. Todos los días, Sean lleva a su amiga los periódicos y el correo, la invita a cenar con alguna frecuencia y a veces la conduce a la iglesia a despecho de que él pertenece a la religión episcopal.

Mi pasión tal vez literaria de enredar los destinos de la gente, hizo que en una ocasión yo le obsequiara a Jane una edición en inglés de El amor en los tiempos del cólera, la novela de García Márquez en que una pareja otoñal se une en las postrimerías de la vida. Pero ni ella ni Sean cayeron en la trampa.

–Usted me parece siempre un viajero– le dije una vez a Sean–. Me parece que va usted todo el tiempo del oriente al occi-dente, y de allí otra vez hacia el oriente.

–Tal vez usted no se equivoca. En verdad, soy un viajero– me respondió.

Y no me equivoqué. Ahora sé que efectivamente lo es por-que se encuentra en el hospital de Salem próximo a un viaje definitivo. El médico que lo trata ha dicho que ya no hay forma de derrotar a la muerte, y hará un mes, le ha pronosticado ho-ras, días o tal vez sólo algunas semanas de vida. Gracias a los adelantos en la supresión del dolor, Sean pasa el tiempo que le resta sin mayores fastidios. ¿Y saben ustedes lo que hace? Se prepara para el viaje.

Como Jane, debido a su invalidez y a su edad avanzada, no puede visitarlo en el hospital, la llama y la tiene al tanto de lo que el doctor le ha dicho al pasar a visitarlo por la mañana. Al igual que las personas en camino al aeropuerto para conocer París, Roma o San Francisco, está fascinado por lo que le espera.

–¿Sabes?– le dijo la semana pasada a Jane–. Voy a verme con Bob, tu esposo, para contarle acerca de ti y de tus hijos y de todo lo que está ocurriendo aquí abajo. También voy a encontrar-me con los muchachos Nolan que cayeron en la Segunda Guerra cuando ya estábamos llegando a Berlín, y no tendremos cuando terminar de reírnos como lo hacíamos en las trincheras.

Lo único que le fastidia a Sean es la inexactitud del doctor. –Me dio solamente dos o tres semanas y ya voy a pasar del mes.

Jane me ha llamado para relatarme la llamada que el agoni-zante le hizo esta mañana: –No veo la hora de partir, pero estas últimas noches las he pasado muy bien, porque una señora muy bonita, probablemente voluntaria, está todo el tiempo cuidándome.

Le he contado esta historia a mi amigo Luis Miguel González Rossell, de La Industria de Trujillo, Perú, cuando él me escribió re-latando que hace un mes su padre se quedó dormido para siem-pre mientras recitaba con él los misterios luminosos del Rosario. En realidad, no quedó dormido... sólo partió de viaje.

Luis Miguel, ustedes y yo sabemos cómo son los ojos de la señora bonita que cuida a Sean. No los hay más bellos en el universo. Y debemos vivir felices, como el fascinado viajero, porque alguna tarde misteriosa nos quedaremos mirándolos para siempre.

pués de misa ¡Estos "donuts" de café son incomparables!Aunque arqueara la ceja derecha por esta respuesta no muy

ortodoxa, la señora Nolan inició conmigo una gratísima amistad. Sus ochentitantos años y su invalidez no le impedían desplazarse rauda en un carro gigantesco y bajar de él la silla de ruedas con la que se dirige a Queen of Peace para evocar el sacrificio del Hijo del Hombre, comulgar, tomar un café, hacer amistades... y saborear algunos "donuts" realmente celestiales.

Me enteré, o más bien, comprobé lo que sospechaba, es de-

Page 13: Paraísos al norte de Lima

Lunes 25 de enero de 2010 • 13

LITERATURA

CONCURSO NARRATIVO

Ten en cuento a La VictoriaAcaba de publicarse el libro: Ten en cuento a La Victoria (Lima MLV: 2009), Cuentos ganadores de segundo Concurso Narrativo. Es una contribución destacable para el desarrollo de la tradición literaria peruana.

ESCRIBE: DIMAS ARRIETA ESPINOZA

Con la edición de este segundo libro: Ten en cuento a la Victoria, producto del concurso literario (versión 2009) que la Municipalidad de La Victoria ha realiza-

do es la concreción de un sueño que se ha hecho realidad dentro de las Buenas Prácticas en Gestión Pública en este periodo edilicio. Por supuesto, entendemos que no es fácil, demanda mucho esfuerzo y dedicación, sobre todo, de un equipo de gente que trabaje fuera de los horarios estableci-dos por la administración pública. Este es un gran mérito.

Desde estas orillas, celebramos la iniciativa de las perso-nas que integran el Comité de Damas de la Municipalidad de La Victoria, presidido por la señora Elizabeth De Sánchez Aizcorbe, como sabemos, concretizar este proyecto, desde la preparación del mismo concurso, hasta las horas finales de la publicación de los cuentos de los participantes, es una entrega total.

Este concurso literario está dirigido con un objetivo claro y pertinente a rescatar las historias y personajes victorianos. Pues, en la literatura y, en especial, un género literario como el cuento, el escritor logra captar las emociones, los sueños, las tristezas, a través de una voz colectiva que configura en sus personajes, la personalidad de su comunidad don-de vive. Por eso, la Municipalidad de La Victoria, en Lima, ha creado un innovador concurso narrativo inspirado en los hechos, costumbres, tradiciones y personajes victorianos con el objetivo de cambiar la imagen de un distrito violento y desordenado por la de uno emprendedor, sensible a las manifestaciones culturales y rico en tradición.

He allí el móvil de este entusiasmo y la dinámica, en la convocatoria, sustentada sobre la base de la experiencia anterior que ha hecho posible el nacimiento de una cultura literaria única del distrito que ayudará a fortalecer su propia identidad. Somos conscientes que la lectura y el cultivo de la producción literaria son un alimento espiritual de sensibiliza-

ción y un método eficaz para un cambio y desarrollo en área de la pedagogía y la educación. Por eso resaltamos este tipo de esfuerzos culturales y literarios.

Asimismo, creemos que este tipo de decisión no tiene un rol protagónico de beneficios electorales, sino que muestra un compromiso con la cultura y la educación en este distri-to. Por eso, sabemos que el municipio está incentivando la lectura a través de la donación de las antologías que reúnen los textos de los ganadores a las bibliotecas e instituciones educativas estatales del distrito. El 45% de los concursantes radica en el distrito, al igual que el 50% de los ganadores. Esta experiencia ganó el Premio a las Buenas Prácticas en Gestión Pública 2009 en la categoría Promoción de la Cultu-ra e Identidad.

Esta vez el primer premio lo obtuvo Carlos Yushimito Del Valle con "Ciudad de Cristal", quien nos hace notar su experiencia en la escritura, plantea bien la historia, sabe llevar magistralmente un tema desde el comienzo hasta el final. Mientras que, el segundo puesto lo obtuvo Miguel Ruiz Effio, con "Raimondi 945", quien nos interioriza por una his-toria humana: el amor y la lealtad de un hijo hacia su padre. Como diría Juan Bosch: "Nada interesa al hombre más que el hombre mismo. El mejor tema para un cuento sería siem-

pre un hecho humano, o por lo menos relatado en términos esencialmente humanos."

El tercer puesto lo ha obtenido Rosalín Cansino Verde, con el "El tejido de una reina", un cuento que supura vida hecha palabra y palabras que convocan una historia enter-necedora y apasionante. Lograr la ternura en un cuento es la conquista tan ansiada para un escritor. Lo extraordinario, cómo un personaje femenino logra resucitar con un beso a una paloma. Luego se destacan los cuentos "La siguen espe-rando" de Antonio Muñoz Monge, con mucho oficio, por eso nos presenta un hecho en su historia que se va a fundamen-tar en un tema principal.

Luego viene Armando Flores Herrera con "Una reencar-nación", y Krishian Ayala Calderón con "De vuelta al barrio", lo mismo Jaime Valentín Trujillo "El bigote y la barba" y con-cluye Abel Gonzales Gonzales con "Un clásico para el re-cuerdo". Ocho cuentos, como dice Augusto Higa, en las sola-pas: "Son de una alta factura literaria, y a su modo, cada uno de los ganadores expresa algún pasaje, alguna anécdota, de ese turbulento mundo victoriano tan difícil y contradictorio. Tal vez, se podría decir, que la modernidad del cuento perua-no encuentra en el telón de fondo del parque Manco Cápac, o Matute, o Balconcillo, una espléndida dimensión literaria."

Page 14: Paraísos al norte de Lima

14 • VARIEDADES

MAGACIN

ESCRIBE: RUBÉN YARANGA M.

El cine no se sustrajo a su mágica imagen y la capturó en una de las secuencias de gran tensión de El padrino II, que tiene como referente histórico la caída del régi-

men de Fulgencio Batista y como escenario de ese episodio. A ritmo de son cubano se desarrolla y concluye la conspiración de Michael Corleone para liquidar a sus enemigos que habían intentado eliminarlo.

Damas y caballeros, esta es la historia que se cuenta y que forja el aura de Tropicana. La Segunda Guerra Mundial desangra a Europa. Las ideas moran en la cabeza del ser humano. Las ocasiones aparecen para hacerlas realidad. Víctor de Correa te-nía en mente crear un cabaré que no fuera igual a los otros, eso lo haría original. Había encontrado el lugar perfecto, una zona bos-cosa de Marianao, y pertenecía a una viuda que lo había here-dado de su primer matrimonio. No fue difícil convencerla, porque deseaba deshacerse de esa propiedad que le traía recuerdos nada gratos. El sueño transita por la carretera de la realidad.

Aparece para convertirse en el principal atractivo de Cuba el 31 de diciembre de 1939, con un espectáculo para celebrar el advenimiento del Año Nuevo. Los vientos del cambio han so-plado en esta institución bautizada por el músico Alfredo Brito como Tropicana. Su nombre tiene de tropical (tropi) y de palmera (cana). Ingenio que trasunta amor por lo caribeño.

Su historia no es ajena a los regímenes que se turnaron en el gobierno de la isla. Durante la dictadura de Fulgencio Batista, no solo es música y baile, el juego tiene cabida y se institucionali-za; la presencia de personajes de la mafia se hace notoria como clientes. La actividad va creciendo porque los ciudadanos, perso-nalidades y políticos estadounidenses y de otros países visitan con asiduidad la isla para ser observadores de los soberbios es-pectáculos, beber y apostar en los juegos. Bonanza económica. Se dice que en un tiempo llegaron doscientos mil visitantes al año y en época de crisis sólo 150 mil, para divertirse sólo en Tropica-na . Si Cuba es el paraíso, Tropicana es el cielo de ese paraíso. Juego y bebida. Este ciclo acaba el 1° de enero de 1959.

LA RUMBA DEL TROPICANA

Estrella caribeña

Esa fecha comienza una nueva etapa para Cuba, al derro-car Fidel Castro a Fulgencio Batista. Tropicana tiene que bailar al ritmo de la Revolución cubana: se eliminan los juegos, y las relaciones con Estados Unidos se tornan tensas. Los visitantes se hacen humo en la antigua Villa Mina, así se llamaba el cabaré antes que fuera Tropicana, y ya no fue el mismo.

Con el empuje de Martín Fox, Tropicana trasciende los linderos de la isla y adquiere fama internacional. Y más: em-bellece el salón "Bajo las Estrellas", instala pasarelas aéreas para que las bailarinas evolucionen entre las copas de los árboles. Suyo fue el proyecto de edificar el salón que recibi-ría un premio de arquitectura por su originalidad: "Arcos de Cristal". Fox invierte todo y lo convierte en el primer cabaré cubano, y para ello elimina con agallas e inteligencia a los competidores.

En estos salones pasea su talento una pléyade de artistas de talla mundial: Nat "King" Cole, Josephine Baker, Carmen Mi-randa, Libertad Lamarque, Xavier Cugat, Rita Montaner, Celia

El night club más famoso del mundo, cumplió 70 años en el último día de 2009 y su aura no se apaga.

Cruz, Ignacio Villa "Bola de Nieve", Pedro Vargas. Marlon Bran-do, James Cagney, Ava Gardner y Joan Crawford, entre otras estrellas de Hollywood, se aparecen por allí para deleitarse con el folclor cubano, que recrean músicos de categoría y danzan con gracia guapas mulatas. La calidad de los espectáculos habla de que la Revolución cubana comienza en Tropicana. En este asunto tiene que ver la figura del coréografo Roderico Neyra, "Rodney", quien da lo mejor de sí y hace crecer la nombradía del local presentando shows de calidad inigualable.

Tropicana significa esplendor incomparable, bellezas que incendian los ojos, música que llama al baile. Buena diversión. La primera palabra que sale de los labios al nombrarse a Cuba, el primer sitio al que los turistas desean ir al pisar suelo cubano y el primero entre los cabarés del mundo. 70 años tiene y aún ilusiona a muchos ser protagonistas de sus noches caribeñas. El "Paraíso bajo las estrellas" aporta la calidad artística de su espectáculo al mundo y algo contante y sonante que engorda las arcas del gobierno cubano.

APUNTES• Su espectáculo reúne un elenco de 300 músicos, bailarines, cantantes y acróbatas.

• El show incluye ritmos tradicionales cubanos –el danzón, la rumba, el chachachá, el mambo y el son– con otros como el latin jazz y la samba.

Page 15: Paraísos al norte de Lima

Lunes 25 de enero de 2010 • 15

MÚSICA

IMÁGENES. La muestra Testimonia Rock puede ser apreciada hasta el 21 de febrero. Para los próximos días se prevé un recital en la galería, con grupos de rock limeños.

POSTALES ROQUERAS DESDE ECUADOR

Juntos y revueltos

La muestra de un fotógrafo ecuatoriano evidencia la enorme lucha del rock alternativo por expresarse en el país vecino. Son los mismos problemas que quizá aquejan a sus semejantes limeños. Testimonia Rock nos ayuda a descubrir el vasto mundo cultural alternativo que existe en Ecuador y las conquistas que ha logrado para ser reconocido.

ESCRIBE: FIDEL GUTIÉRREZ MENDOZA

Los rodearon, los sacaron del concierto al que habían asis-tido y los llevaron a un galpón donde los golpearon, les cortaron sus largos cabellos y se los hicieron comer. Corría

1996 y el festival metalero que en la ciudad ecuatoriana de Am-bato se había organizado con la presencia del grupo mexicano Cenotab como cabeza de cartel llegaba a su fin violentamente.

Como pocas veces antes, la Policía y el Ejército unieron fuer-zas para "imponer el orden" con desmedido ímpetu. El episodio fue la tácita declaratoria de guerra de parte del régimen de Abdalá Bucaram a los jóvenes seguidores del metal pesado y el punk; vertientes del rock caracterizadas por su perfil contestatario y que actualmente –pese al abuso y la discriminación– predominan en el vecino país.

Las cosas han cambiado para bien, felizmente, reflexiona Danilo Vallejo García, tras recordar este infausto episodio. Él y su cámara han sido testigos de prácticamente toda la historia de la contracultura roquera ecuatoriana, desde sus orígenes a fines de la década de 1980. "El actual gobierno nos mira con mucho más respeto y consideración", explica. Prueba de ello –precisa– es el

apoyo financiero brindado para organizar La Semana del Rock; ciclo de conciertos realizado en cinco ciudades el año pasado. A él mismo, un banco le auspició el proyecto de mostrar amplia-ciones gigantes de sus fotografías de la movida del rock local en diversas estaciones de trolebús en Quito.

"Entre 1988 y 1990 éramos 20 que íbamos de garaje en ga-raje, en zonas periféricas de la ciudad, para reunirnos", recuerda. "Ahora se reúnen hasta quince mil personas en un concierto de grupos locales."

Organizarse fue la solución. "Hay muchos colectivos urba-nos, con gente que se dedica al arte y la cultura", dice Vallejo. Al Sur del Cielo, Quitu Raymi y Diablo Uma son algunos, y or-ganizan encuentros artísticos y sociales con cierta constancia y buena acogida.

"Nuestro movimiento es más grande ahora, pero también más diverso y tolerante; a diferencia de antes", explica. "La gente aprendió que unidos somos más y que hacemos fuerza. Es por eso que el gobierno cambió su mirada hacia nosotros."

Vallejo se encuentra en Lima para exponer su trabajo foto-gráfico en el Instituto Cultural Peruano Norteamericano de San Miguel. Testimonia Rock muestra impresionantes imágenes de

la escena juvenil ecuatoriana, de sus músicos y, muy espe-cialmente, de sus seguidores. También presenta accesorios inherentes a la imagen de los "punkies" y metaleros, y música de Basca, Resistencia, Almetal, Selva y Descomunal, entre muchos otros grupos que los asistentes pueden oír mientras recorren la galería.

"Mi gusto por la fotografía y las artes plásticas se inició cuan-do era niño y mi papá me regaló una cámara Kodak Pocket 110; y mi pasión por el rock también viene de esa misma época", señala Danilo, quien también ha expuesto sus fotos y pinturas en Alema-nia, Malasia y Estados Unidos.

Sus imágenes no dejan duda: el rock ecuatoriano y la gente que lo escucha mantienen muy en alto un espíritu con-testatario. El trabajo pionero de grupos como Chankro Duro o Notoken –representantes, respectivamente, del metal extremo y del hardcore punk, vertientes imperantes en tierras norteñas– ha tenido continuidad no solo en Quito sino también en otras ciudades, lo que da cuenta de una coyuntura descentralizada que contrasta con el predominio que en nuestro país tienen los grupos capitalinos, y con las aún incipientes interrelaciones entre nuestros colectivos culturales.

Page 16: Paraísos al norte de Lima

ELOTROYO16 • VARIEDADES

Entrevista completa en www.andina.com.pe

blue jeans...¿Y por qué ocultó su alma hippie?–Por las circunstancias. Estuve en 24 horas, y el formato es

serio; y no me permitía algunas licencias.

¿Y cómo es la Valia que quiere liberar?–Más graciosa de lo que ven, soy formal y respetuosa de las

jerarquías, pero tengo un lado divertido que sólo la gente muy cercana a mí conoce.

¿Es introvertida?–No, en general soy extrovertida. Y en el tema de los afectos

con las personas, si por allí reboto, qué pena. No soy una ostra.¿De dónde procede su apellido?–Mi abuelo fue un judío-ruso y se estableció en Perú luego

de la Segunda Guerra Mundial. Se enamoró de mi abuela que era pisqueña, y se quedó para siempre.

Acaba de ser mamá, ¿cuánto la ha cambiado?–Me estoy comiendo cada una de mis palabras, porque yo

me burlaba de lo exageradas que eran algunas mujeres en la relación con sus hijos. Y ahora, cada una de las decisiones que uno toma es pensando en el hijo.

¿Fue periodista por vocación?–No, en los tests sicológicos que nos hacían en el colegio

siempre salía que tenía habilidades para las letras, la literatura. La mejor amiga de mi mamá me sugirió probar con el periodismo porque escribía bien.

¿Qué habilidad tiene usted para ser periodista?–Tengo un olfato que me guía, y hasta ahora no me ha fa-

llado. Es una intuición que me orienta hacia dónde está la noticia.

¿Es inquieta o ambiciosa?–Inquieta.

¿Le ha dado buenos resultados?–Sí, y el mejor resultado ha sido desarrollar varias

actividades al mismo tiempo. Lo malo es que uno puede caer en ansiedad; y soy una persona ansio-sa. Mi marido me baja las revoluciones. Somos un complemento.

¿En qué es lo más consecuente?–En mis afectos.¿Es leal?–Sí, creo mucho en la lealtad. Si alguien

me es desleal, para mí murió.¿Dice todo lo que piensa?–Ahora lo digo todo. A quien le gusta, bien;

a quien no, también.¿Hace todo lo que siente?

–Uhmmm... no siempre se puede. No expreso mi rabia, porque prefiero calmarme un poco para no

actuar de manera desproporcionada.¿Es reprimida?

–Uhmmm...no, la verdad que exploto...¿Su inteligencia emocional es superior

a la intelectual?–Por ahí van... jajaja.

¿Qué es lo que extraña de la soltería?–Marmotear...

VALIA ISABEL BARAK PASTOR

"Tengo alma hippie"

ENTREVISTA: SUSANA MENDOZA SHEEN CARICATURA: TITO PIQUÉ R.

Está en la TV desde hace 17 años, ¿por qué ha sido posible?

–Porque empecé desde practicante, cargando cables; y porque creo que siempre he actuado correctamente. Lo que he logrado hasta ahora me ha costado y me siento orgullosa por eso.

¿Siempre ha conseguido las cosas con esfuerzo?–Sí. Es más, creo que muchas veces elegí el camino más

difícil, me complicaba la existencia.¿Es una persona sacrificada?–No, para nada. Ahora, como parte de la madurez,

tengo 40 años, soy pragmática, si las cosas se me presen-tan sencillas, las acepto.

¿Cuál es su mayor aprendizaje de mujer madu-ra?

–Que no necesito demostrarle nada a nadie. En este momento de mi vida me provoca hacer las cosas que quie-ro, y me he propuesto quemar los bobos de mi calzón...

¿Quiere usar hilo dental?–No, jajaja. Lo que pasa es que en el pe-

riodismo siempre he proyectado una imagen correcta, y me he ido al extremo. Esto me lo hizo notar una señora que me vio riendo, se me acercó y me dijo: Ahhh, tú sonreías... Me preocupé.

¿Y qué piensa hacer ahora?–Nada especial, porque mi alma es hi-

ppie. Me gusta mostrarme como soy, cuando no estoy proyectando mi ima-gen en la TV no uso maquillaje, uso

De nuevo al redil. Valia Barak regresa al lugar que la vio nacer como periodista y está dispuesta a mostrar que no sólo es seria y formal, sino inteligente y divertida. Desde el 11 de enero, conduce de nuevo Buenos Días Perú.