opasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfgh … CINCO DE JUNIO... · 2009-04-24 · LECTURAS CINCO DE JUNIO...
Transcript of opasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfgh … CINCO DE JUNIO... · 2009-04-24 · LECTURAS CINCO DE JUNIO...
qwertyuiopasdfghjklzxcvbnmqwertyui
opasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfgh
jklzxcvbnmqwertyuiopasdfghjklzxcvb
nmqwertyuiopasdfghjklzxcvbnmqwer
tyuiopasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopas
dfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfghjklzx
cvbnmqwertyuiopasdfghjklzxcvbnmq
wertyuiopasdfghjklzxcvbnmqwertyuio
pasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfghj
klzxcvbnmqwertyuiopasdfghjklzxcvbn
mqwertyuiopasdfghjklzxcvbnmqwerty
uiopasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdf
ghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfghjklzxc
vbnmqwertyuiopasdfghjklzxcvbnmrty
uiopasdfghjklzxcvbnmqwertyuiopasdf
ghjklzxcvbnmqwertyuiopasdfghjklzxc
vbnmqwertyuiopasdfghjklzxcvbnmqw
LECTURAS CINCO DE JUNIO 2008
WWW.INSUMISOS.COM COORDINADOR
ROBINSON SALAZAR [email protected]
Principios y ética de todo Insumiso
Ser insumisos es una actitud provocadora. Pero no la insumisión del inmaduro que se espanta con la disciplina necesaria en cualquier
proceso de la vida.
Ser insumisos es tener la mente clara, la voluntad educada, una fuerte disciplina personal y sobre todo, el espíritu sensible.
Por eso, la insumisión no es precisamente la virtud de los inmaduros.
Es quizás la virtud más difícil de vivir. Porque el insumiso debe
saber distinguir entre no someterse al que quiere dominar... Pero, también, debe saber ser humilde y reconocer cuando puede aprender y
cuando además debe callar.
El insumiso no tiene problemas con la figura de autoridad. Más bien, sabe hablar con autoridad, esto es, entiende la autoridad en el
sentido profundo de la palabra.
El insumiso es profundamente espiritual. Busca trascender y en esa búsqueda es donde radica la experiencia mas profunda de la
libertad. Y como ama la libertad, y además es sensible, pues entonces
no puede permitir que sean otros los que le fabriquen sus ideas y le impongan sus sentimientos.
El insumiso sueña, con los pies en la tierra.
El insumiso, puede construir un mundo diferente, pero aquí mismo.
En esta tierra.
Puede enamorarse y puede ser revolucionario, puede entusiasmarse con un buen platillo dominguero y puede filosofar, puede ser crítico
pero a la vez humilde, puede escribir su doctrina, pero puede leer con esmero lo que otros han aportado a la posteridad.
El insumiso en realidad si tiene su Patria. Tiene identidad, pero
respeta las otras patrias y las otras identidades.
Puede ser una mujer argentina, o puede ser un mexicano, puede ser de Chile o español, de Irak o Mozambique...
El insumiso es el que rompe los paradigmas y las inercias, pero
la diferencia entre el frustrado-rencoroso y el insumiso es que el frustrado vive con rencor a cualquiera y el insumiso simplemente pretende hablarse de tu a tu, con el alma llena de amor y a la vez, de rebelión ante una realidad que el no pidió ni pretender seguir
manteniendo.
Insumisos, hay muchos.
Atte
Tenamaxtli Mercado
LECTURA CINCO DE JUNIO DE 2008
Cepal divulga documento sobre transformaciones en AL
Adital -
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) presentó ayer (12) el documento
"Transformaciones demográficas y su influencia en el desarrollo de América Latina y el Caribe" y
concluyó que la desigualdad en la distribución de la renta y el envejecimiento de la población
"caracterizan el panorama socioeconómico y demográfico de la región".
En la década del 50, América Latina y el Caribe tenían cerca de 161 millones de habitantes; en
2005, tenían más de 547 millones. En esos 55 años, el número de jóvenes en la región, creció 2,6
veces; mientras que el número de adultos creció 3,8 veces y el de ancianos, 5,4 veces.
De acuerdo con la Cepal, ese envejecimiento poblacional debería "motivar a los países para
diseñar estrategias específicas para enfrentar sus consecuencias, ante la creciente debilidad de las
redes de apoyo familiares y la falta de servicios sociales y de condiciones aceptables de vida para
las personas de edad avanzada, sin descuidar la satisfacción de las necesidades de otros grupos
etarios".
La expectativa es que el número de ancianos se cuadruplique entre 2005 y 2050 y que supere a la
población joven en un 30%. Ese envejecimiento es, entre otras razones, consecuencia de la
disminución de la tasa de fecundidad femenina latinoamericana. De 5,9 hijos en 1950-1955, la tasa
llegó actualmente a 2,4 hijos por mujer. Además, la esperanza de vida aumentó y, hoy está en los
73,4 años para ambos sexos.
El desarrollo económico y social de los países de la región y la caída de la mortalidad fueron
positivos para la salud y para las condiciones de vida de la población. Pero la Cepal criticó el hecho
de que ese desarrollo no sea capaz de combatir las desigualdades. Ahora, "se generó un nuevo
panorama poblacional en el cual las desigualdades demográficas están estrechamente
relacionadas con la situación socioeconómica de las personas".
En el documento, la Cepal señala en qué etapa de la transición demográfica están los países
latinoamericanos y caribeños. En una escala de muy avanzada, avanzada, plena y moderada, los
especialistas de la Comisión colocaron a Cuba y Barbados en el primer puesto: "muy avanzada". El
status de "moderada" quedó para Bolivia, Haití y Guatemala, porque todavía tienen altos
indicadores de fecundidad y de mortalidad.
Según el documento, los ancianos, las mujeres y los pueblos indígenas son los segmentos
latinoamericanos y caribeños más afectados por las desigualdades. La entrada de la mujer en el
mercado de trabajo provocó cambios en las estructuras familiares, afectando los procesos
demográficos, con la caída de la fecundidad.
Para la Cepal, si "no se avanza en la creación de nuevos focos de atención más específicos para la
acción social y las políticas económicas, especialmente para la población más vulnerable, la región
enfrentará un retroceso, ya que se irá abonando el camino de la reproducción y transmisión, entre
generaciones, de la pobreza".
El documento señala además medidas que los países deben tomar, enfocadas en la defensa de los
derechos humanos y en políticas públicas para el desarrollo, que aseguren mayor protección
social.
Traducción: Daniel Barrantes - [email protected] }
Chile Avanza la propuesta para crear un plantel de soldados profesionales
Fecha publicación: 13/06/2008 La Comisión de Defensa del Senado de Chile aprobó por unanimidad el proyecto que crea una plantilla de tropas profesionales en las fuerzas armadas en un lapso de cinco años. La iniciativa, que cumple su segundo trámite, debe ser analizada ahora por la Comisión de Hacienda para luego ser sometida a votación en la Sala del Senado. Su objetivo es la modernización y profesionalización paulatina del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, a fin de convertirlas en instituciones dedicadas profesionalmente al desarrollo y mantenimiento de sus capacidades de combate sin utilizar conscriptos y reservistas. Según datos oficiales, las Fuerzas Armadas chilenas cuentan con cerca de 80.000 efectivos, de los cuales casi 16 mil son conscriptos. De ahí que la iniciativa contemple un modelo para la incorporación de soldados y marineros profesionales, en sustitución del actual modelo basado exclusivamente en la conscripción. El presidente de la Comisión de Defensa, Sergio Romero, explicó que ya se aprobaron cuatro indicaciones presentadas por el gobierno que buscan perfeccionar el texto del proyecto de ley. Se trata de dar facultades al director de personal o su equivalente en cada institución armada, para establecer como causal de retiro absoluto las necesidades del servicio, evitando ilegalidades y arbitrariedades. En el proyecto se expresa que las tropas profesionales gozarán de todos los beneficios que el resto del personal de las fuerzas armadas y los demás derechos y sistemas de remuneraciones, como sueldo, incentivos adicionales, feriado anual, licencias, subsidios, pasajes, viáticos, asignación por cambios de residencia, vestuarios, equipos y alimentación fiscal. La última modificación que respaldó la Comisión se refiere al orden de precedencia que se establece para la entrega de la pensión en casa de muerte de un soldado profesional, puesto que la norma actual hace alusión a la 'madre de filiación matrimonial', situación que se corrige, ya que de acuerdo a la Ley de Filiación ello sería improcedente.
Por ello, se aprobó que en el caso del personal soltero y sin hijos que fallezcan en un acto determinado de servicio, si el padre no pudiera gozar de esa pensión, sólo le sucederá la madre.
EL NUEVO ESCENARIO: LOS PROBLEMAS DE LOGISTICA. No voy en barco ni en camión
Desde que comenzó el conflicto disminuyó el tráfico de camiones a puerto y los barcos no completan su carga.
Hernán Guzzetti. [email protected] Desde que comenzó el paro agropecuario, allá por el 13 de marzo, y hasta el 6 de junio pasado, el tránsito de camiones cargados con granos en Rosario y la zona de los puertos aledaños cayó un 30% respecto del año pasado. A primera vista parece sólo un conflicto de logística pero la cuestión no termina allí. También impacta en los mercados. Sucede que cuando se restablezca el tránsito normal, la oferta granaria se concentrará en poco tiempo y los precios tenderán a la baja. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, este año ingresaron 138.996 camiones menos. Así mientras el 15 de marzo y el 8 de junio del año pasado ingresaron 420.360 camiones, en el mismo período de este año ese tráfico fue 281.364 camiones. Además del paro agropecuario, esta semana se sumó el conflicto con los transportistas de carga que realizaron cortes de ruta en Buenos Aires, La Pampa, Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba. Además el colapso ocurre en el medio del período (de marzo a julio) en que se moviliza el 60% del transporte granario. Esa merma en el tráfico de camiones sucede en Rosario y los puertos aledaños (desde Timbúes a Arroyo Seco) desde donde se exporta el 80% de la producción granaria del país. En ese zona, el año pasado entraron 4.904 camiones diarios mientras que para el mismo período de este año, el promedio cayó a 3.283 unidades. ¿En algún momento el tránsito volverá a ser normal? "Seguramente algo se va a reestablecer pero no creo que sea como antes", estima el contador Rogelio Pontón de la bolsa rosarina. Pontón calcula que la disminución del tráfico de camiones implica que hasta el momento se dejaron de comercializar 100 millones de dólares en concepto de transporte. La cifra surge de los 138.996 camiones menos que llegaron a los puertos y terminales. Cada uno de ellos lleva 30 toneladas y realizan un recorrido promedio de 300 kilómetros. El costo de la tonelada por kilómetro se estima en 0,08 centavos de dólar. Pero los problemas de logística no sólo van sobre ruedas, también se sienten en los ríos. Ricardo Forbes, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires cuenta que en los puertos hay 90 barcos parados esperando para ser cargados. Cada uno paga una tasa diaria de US$ 80.000.
Inclusive en Necochea hay una barco parado hace 15 días porque le faltan 17.000 toneladas para completar la carga pero los granos no llegan y por eso no puede zarpar. Además se sabe que algunos embarques se están completando en Brasil, debido a la demora que se vive en los puertos argentinos. Qué sucederá entonces cuando el tránsito de camiones vuelva a ser intenso. "Se va a generar un efecto puerta 12", grafica Forbes ante Clarín Rural. Y agrega: "Cuando se concentra la oferta en un punto se colapsa el sistema de logística". Es que no es poco lo que llega a los 18 puertos y terminales que se reparten entre Timbúes y Arroyo Seco. Allí entre enero y abril de este año llegaron 19.165.217 toneladas de granos. Sólo la merma en el tráfico de camiones impidió que lleguen más de 4.000.000 toneladas de granos a los puertos, según estima la Bolsa de Rosario. Pero además se espera que los mercados sientan los cimbronazos de ese cuello de botella porque la oferta se concentrará en poco tiempo y, posiblemente eso impacte en los precios de los granos. "Todo dependerá de cómo se resuelva el paro. Si se logra un acuerdo consensuado y sostenido en el tiempo, los precios estarán tranquilos; de lo contrario, habrá presión sobre los precios", pronostica Forbes. Por su parte, Miguel Calvo, director del ente administrador del puerto de Rosario piensa que "puede ocurrir un atoramiento cuando se resuelva esta situación". Sin embargo confía en el "profesionalismo de los exportadores para organizar los cupos de exportación". Así y todo, Calvo lamenta que "Argentina no pueda aprovechar la coyuntura internacional. Este conflicto beneficia a nuestros vecinos", dice.
Las muchas caras del Che
Hubiese cumplido hoy 80 años. aquí, se analizan las caras políticas del Che: la revolucionaria, la
progresista, la comercial. Y se da cuenta de nuevos trabajos referidos a la faz humana del mito:
libros, el documental que prepara el Argentino Tristán Bauer y la película de Steven Soderbergh,
aún no estrenada aquí, que focaliza en la pequeñez del héroe en una gesta hecha por hombres.
Por: Nestor Kohan
No sólo no soy moderado sino que trataré de no serlo nunca, y cuando reconozca en mí que la
llama sagrada ha dejado lugar a una tímida lucecita votiva, lo menos que pudiera hacer es
ponerme a vomitar sobre mi propia mierda.
Carta de Ernesto Guevara a su madre. México, 15 de julio de 1956
En 1925 el peruano José Carlos Mariátegui, fundador de la revista Amauta y primer marxista de
América, escribió: "Todas las investigaciones de la inteligencia contemporánea desembocan en
esta unánime conclusión: la civilización burguesa sufre de la falta de un mito, de una fe, de una
esperanza [. . . ] El mito mueve al hombre en la historia. Sin un mito la existencia del hombre no
tiene ningún sentido histórico [. . . ] Los pueblos capaces de la victoria fueron los pueblos capaces
de un mito multitudinario ".
Según Mariátegui, los mitos no on ecesariamente ilusiones falsas, sino más bien creencias
movilizadoras que condensan esperanzas colectivas y anhelos populares.
Revolucionario genuino y radical, fotogénico y joven, Ernesto Guevara fue retratado en marzo de
1960 por Alberto Korda y su rostro recorrió el mundo. Se convirtió en el símbolo de toda rebelión
a escala mundial. Desde las Panteras Negras norteamericanas hasta los estudiantes japoneses,
desde los insurgentes palestinos hasta los negros insurrectos de Sudáfrica, desde las guerrillas
latinoamericanas hasta los intelectuales franceses, todas las rebeldías lo llevan como estandarte.
Guevara dejó de ser Ernesto y se transformó en el Che. Un mito y una leyenda atravesados por un
tironeo ininterrumpido y una permanente resignificación.
En esa pulseada por apropiarse del Che, tres perfiles posibles son los protagonistas: (a) el Che
devenido objeto mercantil y oferta de vidriera; (b) el Che políticamente correcto, light y
progresista simpático; (c) el Che inspirador político de corrientes revolucionarias y portador de un
pensamiento marxista radical, antiimperialista y anticapitalista. Podría quizásmencionarse un
cuarto relato que lo dibuja como "un asesino frío y sanguinario ". Pero a esta altura ese relato ya
no convence a nadie.
(a) La primera aproximación a Guevara existió desde su asesinato en octubre de 1967. Desde esa
fecha su imagen inunda librerías, quioscos, tapas de CD, películas, remeras, biquinis, ceniceros,
encendedores, cervezas y cualquier objeto que pueda ser comercializado en el mercado. La
"guevaromanía " resurge ante cada aniversario. ¡Qué tremenda paradoja la de un pensador que
conocía en detalle los tres tomos de El Capita l de Marx el terminar convertido en mercancía!No
muy diferente a Mao Tse Tung, quien representaba algo más que un cuello de camisa o un ícono
pop de Andy Warhol. O la estrella roja de cinco puntas, símbolo del Ejército rojo bolchevique
creado por León Trotsky, hoy más conocida por adornar la botella verde de una cerveza de moda.
(b) En el segundo perfil se inventa un Che light y descafeinado, ajeno a las emociones fuertes,
rodeado de suspiros melancólicos por los "bellos tiempos que se han ido y ya no volverán ". Aquí
Guevara se convierte en un tímido progresista, comodín útil para barnizar con tinturas
políticamente correctas las gestiones institucionales tradicionales. Desde este ángulo, el Che deja
de ser el inspirador de incendios juveniles para convertirse en una fría estatua de bronce que no
molesta a nadie (y a la que se le rinde tributo pues tranquiliza verlo muerto y petrificado). ¡Qué
curioso que Guevara, hermano mayor de Miguel Enríquez, Inti Peredo, Mario Roberto Santucho y
Raúl Sendic, se termine transformando en una pieza de metal más cerca de la canonización y el
museo que del fuego de la revolución latinoamericana!¡Justo él!, quien alguna vez, pensando en
José Martí escribió: "Porque a los héroes, compañeros, a los héroes del pueblo, no se les puede
separar del pueblo, no se les puede convertir en estatuas, en algo que está fuera de la vida de ese
pueblo para el cual la dieron. El héroe popular debe ser una cosa viva y presente en cada
momento de la historia de un pueblo. Así como ustedes recuerdan a nuestro Camilo, así deben
recordar a Martí, al Martí que habla y que piensa hoy, con el lenguaje de hoy, porque eso tienen
de grande los grandes pensadores y revolucionarios: su lenguaje no envejece. " (Conmemoración
del natalicio de José Martí, 28/1/1960).
La canonización de Guevara vaciado de contenido político tampoco es una excepción. Su guía
inspirador, Vladimir Ilich Lenin, quien le dedicó su vida a levantar barricadas, construir
organizaciones insurgentes y generar revoluciones terminó convertido –gracias a Stalin – en una
momia embalsamada.
(c) Desde el tercer ángulo, a notable distancia del mercado y los museos, del negocio y la nostalgia
complaciente, Guevara sigue siendo una astilla en el cuello de terratenientes, banqueros,
empresarios, policías y militares. Un heredero de Mariátegui, un estudioso obsesivo de Marx, un
admirador de Lenin y el político radical más notable de América Latina además de uno de sus
pensadores marxistas más heterodoxos. Desde la revolución cubana y el zapatismo de Chiapas
hasta la insurgencia colombiana y el bolivarianismo de Venezuela, desde el MST de Brasil hasta los
piqueteros de Argentina, desde el estudiantado de Chile hasta los indígenas de Bolivia, todos y
todas, continúan referenciándose en él. Lejos de las vidrieras y las manipulaciones oportunistas,
continúa existiendo el guevarismo como proyecto político y pensamiento radical.
Queridos viejos: Otra vez siento bajo mis talones el costillar de Rocinante. Vuelvo al camino con mi
adarga al brazo. Hace de esto casi diez años, les escribí otra carta de despedida. Según recuerdo,
me lamentaba de no ser mejor soldado y mejor médico; lo segundo ya no me interesa, soldado no
soy tan malo. Nada ha cambiado en esencia, salvo que soy mucho más consciente, mi marxismo
está enraizado y depurado.
Carta de Ernesto Guevara a sus padres. La Habana, marzo de 1965
Los tironeos y las disputas por su herencia multiplican los espejos que reflejan el rostro de varias
generaciones argentinas.
Cada generación dialoga con Guevara desde sus propios problemas, sus dudas, sus falencias, sus
sueños, sus desafíos pendientes, sus anhelos incumplidos.
La generación del 60 vio en el Che la encarnación de todo aquello que la vieja izquierda ya no
podía dar: ejemplo moral, nueva cultura, lucha contra la enajenación y la explotación (al mismo
tiempo), crítica de la burocracia, internacionalismo genuino y, sobre todo, un método de lucha
político-militar. Para aquella generación Guevara expresa la cabeza visible de un pro yecto
continental, impulsado por la revolución cubana y Fidel Castro. Una forma de lucha política donde
se confronta con las instituciones y el eje pasa al enfrentamiento directo con el poder armado de
las dictaduras militares y sus amos del Norte, Wall Street, la CIA, el Pentágono y la Casa Blanca.
Ya asesinado a sangre fría en Bolivia por el ejército y Félix Rodríguez, agente de la CIA que daba las
órdenes, la generación del 70 volvió a encontrar en el Che un ejemplo de vida. Pero lo descifró
desde otro lugar. Después del Cordobazo, la figura de Guevara se entremezcla con el fantasma de
Perón. Aunque existieron corrientes que, apoyándose en el marxismo del Che, dieron una batalla
por la conciencia clasista y socialista de los trabajadores y no aceptaron encolumnarse detrás del
general Perón y su "capitalismo nacional ", fueron minoritarias. En esos años, la mayoría de la
juventud argentina veía en el Che a un revolucionario que era parte de una constelación mayor,
donde también brillaban otras "estrellas ": los generales Velazco Alvarado [Perú], Torres [Bolivia] y
el propio Perón. El nacional-populismo fue hegemónico.
Después vino 1976, la dictadura, el terror, el genocidio, la masacre. Más de 100.000 desaparecidos
en toda América Latina. Durante esos años tenebrosos el Che Guevara se convirtió en un
desaparecido junto con sus libros, su imagen y su póster.
A partir de 1983 el pueblo volvió a la búsqueda. Muchos jóvenes que no habían vivido los 60 y los
70, se abocaron a reconstruir el pasado.
Un sector de intelectuales, ex izquierdistas, sumados al gobierno de Raúl Alfonsín, le proporcionó
a la juventud un relato tramposo, sesgado, unilateral. Guevara habría sido "un rebelde
bienintencionado, pero que no entendía nada de política ". De la mano de la teoría de los dos
demonios, algunos ex marxistas lo parangonaban a los militares genocidas. Triste y mediocre
teoría que homologaba al almirante Massera y al torturador Astiz con revolucionarios como
Rodolfo Walsh y Raymundo Gleyzer.
Entonces volvió el Che en las remeras y los libros, pero no en política. ¿Quién se animaba, en los
80, a defender la actualidad política de Guevara? No sus canciones o su iconografía.
Y apareció Menem, quien llegaba con la vieja retórica y la añeja puesta en escena nacional-
populista. Mientras se denostaba al Che, se privatizaba la Argentina de raíz y caía el Muro de
Berlín
Desde aquel derrumbe bochornoso de las burocracias del Este europeo (que Guevara había
impugnado duramente), el neoliberalismo económico y el posmodernismo cultural parecían
eternos.
Mientras las recetas económicas de Milton Friedman privatizaban en los '90 hasta el agua, el
mundo se desencantaba de la imaginación sesentista. El posmodernismo, bajo el pretexto de
defender a las minorías y sus diferencias, terminó legitimando un reino monocorde, triste y sin
alternativas. El "hombre mediocre " sin ideales ni aspiraciones, del que hablaba José Ingenieros
cien años atrás, se volvió moneda corriente. Lejos quedaba el "hombre nuevo " del Che.
Pero ese supuesto "fin de la historia " (Francis Fukuyama), ese "agotamiento de la política " (Daniel
Bell)y esa "crisis de los grandes relatos " (Jean François Lyotard), duró muy poco.
Reivindicando al Che, en 1994 entran en escena los zapatistas y le dan la primera estocada al
"Nuevo Orden Mundial ". Al poco tiempo se suceden las rebeliones en América Latina y el primer
mundo: La Paz, Seattle, Davos, Barcelona, Buenos Aires, Génova, etc. En todos lados la bandera
con el rostro del Che Guevara acompaña la insurgencia juvenil. Rápidamente entran en crisis los
falsos axiomas neoliberales: Mayor mercado = mejor democracia; más sumisión a Estados Unidos
=más derechos humanos; privatización = superación de la burocracia, etc.
En Porto Alegre los Foros Sociales Mundiales abren el siglo XXI gritando: "Otro mundo es posible ".
Renacen la sed de ideología, el apetito de totalidad, la necesidad de una cosmovisión de la historia
y el deseo de cambiar el mundo. Se profundiza la crisis del pensamiento en migajas y se agota el
culto dogmático del fragmento.
Retorna una vez más el mensaje del Che. Se palpa en el aire. Decenas de miles de jóvenes,
hastiados con la vieja política, hartos del sistema capitalista y del neoliberalismo, sin una dirección
definida por delante, pero a la búsqueda de una nueva alternativa de vida, enarbolan en marchas
y movilizaciones, en estadios de fútbol, en plazas, en parques, en recitales, casi fanáticamente, la
bandera del Che.
¿Qué les ofrece el Che? Un pensamiento político donde lo central de la estrategia es el problema
del poder. Una concepción de la transformación social, la subjetividad y la revolución, donde la
conciencia antiimperialista, clasista y socialista es fundamental, donde se disipan las ilusiones en
las tímidas reformas y las medias tintas, en la progresividad de la "burguesía nacional " y en el
populismo. . . En definitiva, un nueva cultura y un ejemplo de otra manera de vivir, donde queda
abolido para siempre el doble discurso y la doble moral. La estrella del Che Guevara, por sobre el
mito y la leyenda, vuelve para quedarse.
El autor es coordinador de la Cátedra Che Guevara-Colectivo Amauta: amautalahine.org y autor
del libro "Ernesto Che Guevara: el sujeto y el poder ". BS. AS. , Nuestra América, 2005. docente e
investigador de la UBA.
El Che y la recreación del marxismo Por Atilio A. Boron
Una de las mejores maneras de conmemorar el octogésimo aniversario del nacimiento del Che es recuperar una de sus facetas menos conocidas o, tal vez, la más olvidada: su papel como recreador del pensamiento marxista en clave latinoamericana. Desconocimiento u olvido explicable por la celebridad adquirida como “el guerrillero heroico”, valiente como el que más y a la vez noble y generoso como pocos con sus vencidos. Un hombre cuya absoluta coherencia entre ideas, valores y conductas lo convierte en un paradigma insuperable, especialmente en épocas como éstas, en
las que la traición a los viejos ideales –o la desconexión entre lo que se piensa o dice y lo que se hace– ha adquirido proporciones escandalosas. Como bien lo recordaba días pasados Miguel Barnet, este extraño guerrillero cargaba en su mochila la poesía de León Felipe y Pablo Neruda. En sus campamentos en la selva boliviana tenía más de un centenar de libros, muchos de los cuales eran verdaderas joyas del pensamiento social universal. No fue casual su capacidad para recibir críticamente algunas de las categorías del marxismo y para someter a implacable crítica la grotesca deformación que éste había sufrido a manos de la Academia de Ciencias de la URSS y sus insoportables manuales de “marxismo-leninismo”. Hay un paralelo entre Gramsci y el Che: ambos repudiaron las codificaciones “escolásticas” del marxismo. El primero, burlándose en su breve escrito a propósito de la Revolución Rusa, “La revolución contra El Capital”, de la interpretación canónica de El Capital del principal teórico de la Segunda Internacional: Karl Kautsky. El Che, haciendo lo propio con los “ladrillos soviéticos” que también decretaban la imposibilidad de la revolución en los países atrasados. Tanto uno como el otro libraron una exitosa batalla contra el “economicismo” décadas antes de que algunos intelectuales, arrepentidos de sus pecados juveniles, renacieran como infecundos posmarxistas y “descubrieran” el determinismo economicista que, según ellos, condenaba irremisiblemente la teoría marxista al cementerio de las ideas. Carentes del talento y la audacia intelectual que les sobraban a Gramsci y el Che, se rindieron ante las caricaturas y en lugar de repensar creativamente al marxismo optaron por adherir a la ideología dominante de su tiempo. Heredero de una noble tradición, de la cual José Carlos Mariátegui fue el gran precursor, el Che concebía al marxismo en sintonía con la Tesis Oncena de Marx: en vez de interpretar el mundo, de lo que se trata es de cambiarlo. Como Lenin, creía que “el marxismo no era un dogma sino una guía para la acción”. Por eso, si la teoría se daba de bruces con la realidad aquélla debía ser meticulosamente revisada. Si el eurocentrismo del marxismo originario no le hacía lugar a la revolución socialista en la periferia había que depurarlo de esos condicionamientos y, sin tirar al niño junto con el agua sucia de la bañera, recrear la teoría para dar cuenta del inédito desafío. Y si los “manuales” postulaban una visión etapista y mecanicista según la cual no podía haber revolución socialista sin que antes hubiera una revolución democrático-burguesa liderada por la burguesía nacional, lo que había que hacer era arrojar esos textos por la borda y repensar todo de nuevo. En esta operación el Che demostró, al igual que los grandes clásicos del pensamiento marxista, que la teoría no es un edificio acabado sino un emprendimiento en permanente revisión y reconstrucción, y que el abandono de ciertas proposiciones (y sus correlatos político-prácticos) y su reemplazo por otras puede hacerse sin necesariamente menoscabar el argumento central del marxismo, que revela el carácter insanablemente injusto, explotador y predatorio del capitalismo. Demostró también que el proyecto socialista trasciende el marco económico o el productivismo: que de lo que se trata es de crear un hombre y una mujer nuevos, una nueva cultura, una democracia participativa integral, un internacionalismo concreto y eficaz, basado en la solidaridad y el altruismo. Todo esto requiere de un sustento material, pero si esa apoyatura no sirve de fundamento para lo otro el proyecto socialista estará desahuciado antes de nacer. El legado teórico del Che es inmenso y la tarea de recuperarlo recién ha empezado. Sus pesimistas apreciaciones sobre la escena internacional de su tiempo, dominada por la “coexistencia pacífica” proclamada por la URSS, fueron proféticas; su visión de que no se puede construir el socialismo “con la ayuda de las armas melladas que nos legara el capitalismo” es irrebatible a la luz de la
experiencia reciente; sus análisis sobre la naturaleza incorregible y brutal del imperialismo se corroboran día a día, desde los “bombardeos humanitarios” de Bill Clinton hasta las torturas a niños y niñas iraquíes de 10 a 12 años definidos por Bush y su pandilla como “amenazas imperativas”, tal como lo expusiera Juan Gelman en este diario el pasado 12 de junio; igualmente preciso es su diagnóstico sobre la centralidad de la ideología cuando dice que “el capitalismo recurre a la fuerza pero además educa a la gente en el sistema” y lo viene haciendo desde hace quinientos años, con lo cual nos convoca a librar la “batalla de ideas” en todos los frentes. Y así podríamos seguir enumerando hitos de una reflexión teórica que no se detiene ante el saber establecido y prosigue incansable su marcha hacia horizontes de comprensión cada vez más profundos y abarcativos. Cuatro décadas después de su cobarde asesinato, el Che está más vivo que nunca.
Advierte Juventino Castro y Castro sobre renacimiento del delito de disolución social ■ Su derogación fue el único resultado del movimiento estudiantil de 1968, dice el ex
magistrado Alfredo Méndez “El único resultado del movimiento estudiantil de 1968 que trastocó el orden jurídico mexicano fue la derogación, en 1970, de los artículos 145 y 145 bis del Código Penal Federal que comprendían la tipificación del delito de disolución social”, sostuvo el ministro jubilado de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Juventino V. Castro y Castro. Pero ese gran logro, advirtió, está a punto de desvanecerse con la intención del gobierno de Felipe Calderón de volver a incluir en las leyes penales mexicanas algún apartado similar a la disolución social en el capítulo que tipifica al delito de terrorismo. “Está por renacer (el delito de disolución social). Estados Unidos se empeña, evitando que se comprenda cuáles son sus motivos reales, en que México ayude contra el terrorismo, y mientras tanto el vecino país del norte ayudará a acabar con el narcotráfico”, advirtió el ex presidente de la Corte al participar la noche del jueves pasado en un foro organizado por el Centro Cultural Universitario 68. Al hacer un análisis sobre los acontecimientos internacionales, políticos, sociales y jurídicos que dieron pauta al movimiento encabezado por estudiantes hace cuatro décadas, que derivó en una represión de Estado el 2 de octubre de 1968, en Tlatelolco, el ministro puso énfasis en la posibilidad de que el contexto mundial de aquella época se repita actualmente, con dimensiones más peligrosas, a partir de la guerra contra el terrorismo declarada por Estados Unidos en el año 2001. “Si la forma en que quieren combatir al terrorismo es la que el presidente de Estados Unidos, (George) Bush, ha hecho, pues es precisamente fuente de no respeto a las garantías constitucionales. Por ello, el único florón claro y definitivo del movimiento del 68, que fue la derogación de dos artículos del Código Penal Federal, está a punto de regresar; inclusive ya hay proposiciones concretas. De manera que ojalá no se produzcan, pero hay el peligro de que se vuelvan a producir”, destacó. Durante el foro que se realizó en la sala oval del edificio que en 1968 fue ocupado por la Secretaría de Relaciones Exteriores, en Tlatelolco, Juventino V. Castro destacó que aún está pendiente el
tema del castigo a los responsables de la matanza del 2 de octubre, en donde el único procesado es el ex presidente Luis Echeverría Alvarez. Sin embargo, insinuó que la resolución judicial que está por emitir el quinto tribunal colegiado penal, respecto al amparo que pidió Echeverría, no será muy favorable a las víctimas del presunto acto genocida de 1968. “Estamos ahorita pendientes de una resolución judicial. Todo mundo sabemos qué va a suceder: no va a suceder nada. Va a ser la muerte (en tribunales mexicanos) de todo el tema de las sanciones por esos hechos”, puntualizó el ministro. Finalizó su ponencia diciendo que el movimiento estudiantil de 1968 “puede llegar a tener toda su validez en cuanto a su oposición a él, cuando ya se diga al final, en los tribunales mexicanos, que el presidente Echeverría está siendo absuelto. ¿Por qué?, porque el Tribunal Penal Internacional solamente puede actuar cuando se haya agotado hasta el último de los recursos legales en nuestro país. De aquí tendrían que, para nuestra vergüenza, brincar todo el asunto a dicho tribunal internacional. Y como México ya suscribió el aceptar esa jurisdicción internacional, está obligado a acatar sus resoluciones”
Ciclos: futuro incierto Por J. M. Pasquini Durán Habrá un futuro en que será difícil explicar cómo pudo haber pobres en medio de la abundancia. La presunción tiene raíces en la evolución histórica del mundo. Los primeros países industrializados, como Inglaterra y Francia, vivieron desnutridos hasta fines del siglo XIX (R.W. Fogel, The escape from hunger and premature dead, 1700-2100). Otros datos confirman la posibilidad de cambios: “China concentraba el 32,9 por ciento del PBI mundial en 1820, frente al 1,8 de Estados Unidos, lo cual podía explicarse porque China tenía una población 38 veces mayor. A pesar de lo cual, para 1950 los Estados Unidos concentraban el 27,3 por ciento frente al 4,5 por ciento de China. Y es posible que las posiciones vuelvan a invertirse” (A. Maddison, The world economy: A millenium perspective). Argentina estaba en el “top ten” de las naciones cuando celebró el primer centenario de la independencia. ¿Será posible que en el bicentenario el país se haya quedado sin pobres ni excluidos, o por lo menos reducidos a números insignificantes en la totalidad de la población? Podría mencionarse aquí una biblioteca a favor y otra igual en contra de semejante posibilidad, pero en el corazón de una y de otra más que las cuestiones económicas priman las razones políticas para negar o aprobar las oportunidades del porvenir. La política tiene derechos naturales, por así decir, para prevalecer sobre la economía, aunque más no sea porque los ciudadanos pueden elegir a sus representantes pero no a los empresarios o banqueros. La experiencia reciente también lo confirma: el conflicto con “el campo” pudo tener orígenes económicos, pero antes de que la población se diera cuenta había derivado a una confrontación política de tal magnitud que hasta cuestionaba la naturaleza ideológica de los representantes del pueblo elegidos en las urnas. Un puñado de dirigentes de cuatro entidades agropecuarias, elegidos por sus asociados, cuyo número es varias veces menor al de pobres y excluidos, fueron el escudo de la confrontación, detrás del cual marcharon enemigos esenciales del Gobierno, políticos oportunistas, diversos gajos del abanico de la derecha económica e ideológica (también alguna izquierda envejecida, atrapada en reflejos antiguos que ni percibe) y un aparato mediático habituado a disputar espacios en la atención pública mediante la difusión de noticias rojas o amarillas, cuya contribución a la cultura cívica durante el conflicto fue elevar al rango de personaje a tipos como Minga De Angeli. A esa caravana se sumaron en los últimos días
algunos camioneros “granarios” que, en varias provincias centrales, cometieron secuestro extorsivo del derecho constitucional al libre tránsito. Una concepción deseable de los derechos humanos abarca la batalla contra la impunidad del terrorismo de Estado, la lucha contra la pobreza y la exclusión en nombre de los derechos económicos y sociales, y, por fin, la preservación de las garantías individuales, un legado del liberalismo político (nada que ver con el viejo o nuevo liberalismo de mercado), que protege la vida y los bienes de las personas particulares. Esto supone por parte del Estado el deber de reprimir el delito allí donde se presente, sin que importen el rango o las razones de los que lo cometen, tarea reservada a la consideración de la Justicia. Es inevitable aquí la cita de la reacción del gobierno socialista de España ante una protesta similar de camioneros: además de otras formas de castigo, aplicaron cuantiosas multas por las graves infracciones de interrupción deliberada del tránsito por el corte de rutas. No hay una sola forma de reprimir (con palos, hidrantes, gases lacrimógenos y balas de goma o de plomo), porque si fuera de esa única manera el Estado democrático quedaría inerme ante la vorágine caótica de grupos o tribus más o menos urbanas que buscarían realizar su voluntad sin importar el daño que causen al bienestar general. Tampoco la administración estatal, el gobierno, puede medir con varas diferentes, según la condición social del infractor, sin renegar de principios democráticos y sin violar derechos humanos fundamentales. En los últimos días las especulaciones acerca de un fiscal bonaerense que inició una causa contra un puñado de ruralistas lo convirtieron poco menos que en un mandadero del ministro de Justicia. Ojalá las mismas voces apresuradas por el procedimiento legal se hubieran escuchado con el mismo tono de indignación cuando la CTA, casi en soledad, reclamó sin cesar por las causas iniciadas en todo el país contra unos tres mil militantes sindicales y sociales, enjuiciados y hasta encarcelados durante los años de democracia por realizar manifestaciones pacíficas en nombre de sus derechos constitucionales. Una vez más, el presidente de una seccional de la Sociedad Rural tendría fueros invisibles que lo vuelven intocable, en tanto un obrero cualquiera debería resignarse y callar si no quiere que el peso del Estado caiga sobre sus hombros. Las reacciones disímiles, incluida la mayoría de los medios de información, muestran que aun la cultura democrática entre los argentinos tiene un sensible retraso. A la falta de cohesión social, el déficit de ciudadanía, las enormes desigualdades económicas y sociales, hay que sumarles los retrasos terribles del Estado de derecho. Estas deficiencias no son una causa menor ni una irregularidad temporal del paisaje. Las situaciones caóticas, en las que el ciudadano común pierde de vista a la autoridad legal y deja de advertir que está cumpliendo con sus deberes, han sido siempre mejor aprovechadas por la derecha que por la izquierda. Es más: la experiencia histórica muestra evidencias de un clásico de la derecha: promover el caos para luego reclamar orden “a cualquier precio”. Esto sirve tanto para disciplinar al populismo gubernamental como para tumbar gobiernos. A Salvador Allende en Chile lo querían voltear la Casa Blanca y la CIA operó en el mismo sentido, pero a la vista la hostilidad quedó a cargo de las clases medias y altas de Santiago, la capital, que hacían sonar las ollas y de un fenomenal paro de camioneros, hasta que llegó Pinochet y mandó a callar. Hay estudios clásicos sobre estos procesos que hace poco tiempo recordó el historiador mexicano Juan Pedro Viqueira a propósito del ascenso del nazismo en Alemania. De la crisis económica de finales de los años veinte del siglo pasado, los que resultaron más afectados fueron los trabajadores que perdieron sus empleos. “La clase media, en cambio, salió bastante bien librada de la recesión. Incluso, su capacidad de ahorro se incrementó, tal como lo reveló el estudio de las cuentas bancarias. Sin
embargo, fueron sobre todo los miembros de esta clase media los que empezaron a votar en masa por el Partido Nacional Socialista, mientras que la gran mayoría de los obreros mantuvo su apoyo al Partido Socialdemócrata o al Partido Comunista. ¿Cómo se explica esto? La crisis no afectó los bolsillos de los integrantes de la clase media, pero sí les infundió miedo” (Letras libres, México, mayo/08). El temor, el desasosiego son sentimientos que funcionan bien con las tendencias más conservadoras. Estados Unidos volvió a comprobarlo, después de los atentados contra las Torres Gemelas de Nueva York, y respaldó las aventuras guerreristas de Bush. Les costó casi un lustro regresar de a poco a la racionalidad y revalorizar las ideas transformadoras que, por ahora, encarna el candidato demócrata Barack Obama. ¿Cuál de estas fuerzas triunfará en octubre próximo? Antes de eso, ¿hasta dónde podrá llegar aquí la derecha antiperonista? No tiene como los alemanes todavía un líder y un partido –pese a que Elisa Carrió está en oferta con su Coalición Cívica–, y los sables tienen que seguir envainados, y por eso se juega a provocar suficiente desazón creando problemas de todo tipo (desabastecimiento de alimentos y combustibles, piquetes en las rutas que acorralan ciudades y provincias completas, campañas descalificadoras de la presidenta Cristina –“manda el marido”– y de la gestión global de gobierno, inseguridad urbana y un rosario interminable de pequeños y medianos desastres), desparramando la sensación de que la gobernabilidad está en retroceso. Al ser políticos profesionales, ni la Presidenta, ni el titular del PJ, ni sus colaboradores necesitan que se les recuerden estas obviedades, pero no siempre sus conductas se ajustan por la experiencia histórica, ya que cada gobernante suele tener ambiciones fundacionales y la convicción de que sabrá advertir a tiempo las maniobras que sus predecesores no pudieron evitar... hasta que es demasiado tarde. Aún está demasiado caliente el conflicto para que aguante un análisis sereno de sus causas y consecuencias, de las razones y astucias de sus protagonistas, de las suficiencias y de las incapacidades del Estado y del Gobierno para confrontar con poderes y riquezas de larga tradición en el poder. Será necesario hacerlo apenas se entibie, porque ahí empezó un ciclo que no terminará con las rutas despejadas, con o sin retenciones móviles, puesto que la intención política última –remover al gobierno populista– quedará pendiente. Puede anticiparse que se impone la consideración de un federalismo más activo, para comprometer a las provincias, no sólo a sus gobernadores, con el destino colectivo, y un rol más dinámico para el Poder Legislativo, ya que no sólo el Gobierno tiene mayoría propia sino que todos los congresistas, en especial los diputados, representan las opciones elegidas por los ciudadanos. Más de una vez se pidió a la oposición actitudes más propositivas que la simple crítica de la obra oficial y hace un par de días se conoció una propuesta para redistribuir mejor la riqueza hecha por un partido nuevo, Solidaridad e Igualdad (SI), formado por militantes del ARI que tomaron distancia de Carrió pero sin integrarse a la Convergencia de los Kirchner ni a la confusión de los ruralistas. Alguien del Gobierno debería iniciar conversaciones con este tipo de fuerzas que busca senderos nuevos. Los sistemas de pensamiento “cerrados” tienen la ventaja de ofrecer certezas y sentido de pertenencia a los adherentes, pero ese tipo de códigos clausurados son incapaces de ver las novedades que la vida y el mundo van presentando.
Argentina: La oportunidad ¿para quien? Por Alfredo Zaiat
En estos casi cien días de insólita privatización del tránsito en las principales rutas del país a manos de empresarios de la actividad agropecuaria y del transporte de cargas se repite el lugar común de que otra vez la Argentina está perdiendo una oportunidad histórica. En ese lamento generalizado se destaca el supuesto abandono de mercados externos por lo que se considera una deficiente política de fomento a la producción agropecuaria, con una obsesiva crítica al imprescindible sistema de retenciones móviles. Aunque pueda resultar incómodo para el consenso hipnotizado a partir de un discurso mediático dominante, Argentina no está desatendiendo mercados ni disminuyendo sus exportaciones agrarias en estos meses del más violento lockout de la historia del país. Ni el país ni el campo está perdiendo una oportunidad. Con escaso esfuerzo de rigurosidad, si existe vocación para comprender más que ser parte de mezquinos y ocultos intereses, existe la opción de sorprenderse con la evolución del negocio agropecuario en estos meses de conflicto. Sólo un indicador, entre varios otros, sirve para orientar a despistados: el valor de la hectárea no ha descendido ni un dólar; por el contrario, ha seguido subiendo hasta máximos históricos. La tierra es el bien raíz original de la actividad. No puede reproducirse. Vale en función a lo que de ella es posible producir. Por lo tanto, los precios de los campos agrícolas son sensibles a lo que sucede con la cotización de los cultivos. Los campos, más allá de consideraciones culturales o sentimentales, valen, como toda empresa, en función de la riqueza que es capaz de generar. Entonces, un simple análisis debería aliviar a la mayoría angustiada por la posibilidad de perder una oportunidad histórica, la última que se le presentará al país alertan profetas del fracaso: el principal activo para la tarea de la agricultura, o sea la tierra cultivable, no se deprecia pese al conflicto y a los fantasmas convocados porque la oportunidad no se está desaprovechando, sino que está presente y con cada vez mejores perspectivas. ¿Qué significa, entonces, la ansiedad por lo que se dice se está perdiendo? Muchos repiten esa idea porque es una muletilla mediática que convoca la atención del espectador. Otros se hacen eco porque ofrece una frase que denota importancia aunque ignorando de lo qué están hablando. Y unos pocos porque saben que de esa forma pueden mejorar aún más su posición relativa en el negocio. Esa expresión de desesperanza tiene que ver con el deseo de exportar aún más y si pudiera casi toda la producción agropecuaria. Los elevados precios internacionales, que se estiman se mantendrán en esos niveles por años por la confluencia de varios factores, son muy atractivos para despachar al exterior granos, leche y carne. Por lo tanto, cuando se pontifica sobre la oportunidad que se está perdiendo poniendo como ejemplo Brasil y Uruguay, sin conocer en profundidad las características de esos mercados ni las diferencias que existen con el argentino, se expone simplemente la preocupación por la rentabilidad extraordinaria de los eslabones concentrados de la trama multinacional sojera y de un grupo privilegiado de pequeños, medianos y grandes productores. En realidad, la Argentina está perdiendo otra oportunidad que no tiene que ver con ese objetivo de maximizar ganancias exportando con desprecio respecto del resto de la población. Lo que se está desaprovechando es la posibilidad de garantizar el acceso a los alimentos en cantidad y precios a todos los habitantes del país. La situación de excepción de Argentina por ser un productor mundial importante de cereales y carne frente al drama que se vive en gran parte del mundo, con disturbios y caos producidos por el alza de los alimentos, debería dar el marco para evitar una crisis local, no para provocarla por la ambición de acumular riquezas excepcionales por un sector minoritario. No deja de ser una peculiar forma de entender la convivencia democrática y la estabilidad social reclamar el derecho de exportar alimentos sin restricciones y encarecerlos en el mercado doméstico con un nivel de pobreza del 30 por ciento de la población y con un
porcentaje similar que está apenas en el escalón superior de ese umbral de ingresos. Hogares que ante una fuerte suba de los alimentos descendería a ese mundo lleno de carencias. El Gobierno debería ocuparse de diseñar un plan consistente de seguridad alimentaria sin apelaciones a la solidaridad, que no es un atributo que tenga que exigirse a los empresarios. Seguridad alimentaria que hoy está en una posición de vulnerabilidad por el alza de los precios domésticos y por el impacto externo del alza de las materias primas. Ese programa, además de fijar retenciones móviles, tiene que intervenir en la cadena de formación de precios y en los centros de comercialización oligopolizados. Felipe Torres Torres, economista y sociólogo mexicano, es el responsable de un interesante libro, Seguridad alimentaria: seguridad nacional. En esa obra menciona cuatro factores que amenazan la seguridad alimentaria de un país: 1 Las condiciones internas de la política económica que genera insuficiencia de oferta agropecuaria para satisfacer la demanda interna de alimentos. 2 Las crisis económicas recurrentes que deterioran los niveles de ingresos y concentran riquezas de tal manera que el acceso a los alimentos se ve seriamente restringido. 3 Los factores externos donde los agentes económicos más fuertes instrumentan estrategias de manipulación de los mercados agrícolas (subsidios de los países desarrollados). 4 Un escenario de abrupta desaceleración de la economía. De esa serie de cuestiones, la fortuna naturaleza ha permitido que el segundo sea el más relevante para el caso argentino, donde el proceso de aumento de precios está agudizando el problema de la seguridad alimentaria. Esta se entiende como “lograr que todas las personas tengan en todo momento acceso físico y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos adecuados para satisfacer sus necesidades alimentarias”, según la definición de la FAO. O en una forma más amplia la Cumbre Mundial sobre la Alimentación, en Roma, en 1996, precisó que “un hogar goza de seguridad alimentaria si tiene acceso a los alimentos necesarios para una vida sana de todos sus miembros (alimentos adecuados desde el punto de vista de calidad, cantidad e inocuidad, y culturalmente aceptables), y si no está expuesto a riesgos excesivos de pérdida de tal acceso”. Torres Torres menciona que la seguridad alimentaria es un problema de países atrasados “donde el ingreso de la población es restringido y asimétrico”. Pone como ejemplo a Japón y Suiza, que no tienen una producción de alimentos estable y creciente, pero cuentan con ingresos suficientes para obtener alimentos de calidad y, por lo tanto, no registran problemas de seguridad alimentaria. Argentina es el caso de que cuenta con una extraordinaria capacidad productiva, pero sufre un bajo nivel de accesibilidad a los alimentos. Torres Torres señala al respecto que “la seguridad alimentaria se convierte, por lo tanto, en un problema de desarrollo económico que se resuelve diseñando políticas económicas internas de corte distributivos”. Por ejemplo, las retenciones o cupos de exportación. A la vez, aunque menciona que son soluciones limitadas, el experto mexicano apunta que también se aborda con programas focalizados hacia los grupos más vulnerables. Entregando bolsones de comida o tickets para la compra de alimentos. Frente al complicado contexto internacional en el mercado de los alimentos se trata, entonces, de utilizar todos los recursos e instrumentos necesarios para constituir un eficiente y masivo
programa de Seguridad Alimentaria. De esa forma no se perderá la posibilidad de que un país privilegiado sea para todos y no sólo sea un territorio para satisfacer la oportunidad de unos pocos. [email protected]
Reflexiones sobre el paro del transporte x Comité Regional Centro de CNT - AIT
La situación del sector del transporte y, por ende, del paro que está llevando a cabo en la actualidad, está produciendo cierta desorientación a parte de la izquierda de este país. El problema es complejo y requiere visualizarlo desde varios puntos de vista para poder sacar unas mínimas conclusiones claras. En primer lugar, creemos que es de recibo concretar el lenguaje y evitar así su prostitución (principalmente en los medios de comunicación) y que pueden llevar a equívoco a la opinión pública. Así pues, tendremos que negar que se le llame Huelga a lo que está siendo un paro patronal en toda regla. En esta línea tendríamos que preguntarnos dónde se encuentran los servicios mínimos que siempre tenemos que soportar la clase trabajadora en casi todas nuestras movilizaciones, convirtiéndose en su mayoría en abusivos servicios mínimos. En segundo lugar, tendríamos que analizar ¿quién está parando? Podríamos decir que son los autónomos y las PYME´s del sector agrupados en una plataforma, pero siendo las asociaciones Fedatrans y Fenadismer las más combativas, pero que dentro del Comité Nacional del Transporte (CNTC) en su conjunto tan sólo tiene un 8% de los votos, mientras que la Confederación Española del Transporte de Mercancías (CETM), que no apoya este paro patronal, ostenta el 66% de la representatividad en el CNTC. De aquí se desprende dos cosas: la primera es la poca equitatividad del reparto de votos del CNTC, y en segundo lugar que las grandes empresas del sector no apoyan el paro; pero sí apuestan por iniciar una negociación con el gobierno para afrontar la "crisis" del sector. Más adelante veremos el por qué de esta actitud del CETM. En tercer lugar hay que señalar que, sin lugar a dudas, los más perjudicados por las crisis económicas del capitalismo son los trabajadores asalariados y los autónomos, los unos por ser siempre el sostén en donde se apoya el gran capital para sufragar sus crisis económicas, principalmente vía regularizaciones y flexibilidad laboral o bien vía subvenciones estatales. Los otros, es decir, los autónomos, porque no pueden competir con las grandes compañías del sector; ya se sabe el principio del capitalismo: en la competencia el pez grande se come al chico. Ha sido curioso observar cómo en los últimos 35 años el capital, bajo la bandera del neoliberalismo, ha desmantelado toda conciencia de clase y ha sido capaz de vertebrar un esquema de pensamiento único íntimamente unido a sus intereses particulares. Así en el horizonte del pensamiento ideológico y político de la gran mayoría de los ciudadanos, se aceptan los puntos de vista del gran capital para la ordenación de la vida en todos sus aspectos. De aquí deriva el ensalzamiento de los llamados emprendedores (ya no son patronos) equiparables en heroicidad y arrojo a los más grandes exploradores (Colón, Magallanes, Pizarro, etc). Se ha repetido hasta la saciedad, con sonrojante propaganda, que el patrón (me niego a utilizar la
palabra emprendedor) es el motor de la vida, es el benefactor que te da empleo y que si ellos no tienen las arcas bien llenas, nosotros, los mortales trabajadores, no podríamos vivir sin su magnificencia y bondad. Dentro de estos esquemas de pensamiento, el neocapitalismo apostó porque parte de la masa trabajadora pasase a esa clase de patronos. Se fomentó el autoempleo engañando con la idea de que la mayoría podría convertirse en grandes empresarios. Pero la realidad es otra y la autoexplotación es el pan de cada día, pero al contrario que los asalariados, los autónomos están obligados por su misma condición a defender los puntos de vista del gran empresario. Para el gran capital es una jugada perfecta, tiene unos autónomos que están supeditados a él mediante la competencia, incluso en muchas ocasiones los autónomos se convierten en unos trabajadores de hecho de la gran empresa, pero con la ventaja para el empresario que no tiene que poner los medios de producción, no tiene que pagar seguridad social, no les afectan las bajas laborales, etc. Esta situación de autoempleo se ha fomentado alegremente en un sector estratégico como es el transporte, o ¿es que el gran capital, y por ende los gobiernos, iban a permitir un sector lleno de asalariados que podrían agruparse en organizaciones sindicales fuertes y poner en jaque a cualquier gobierno? En cuarto lugar, retomando lo que antes comentábamos, la CETM no apoya los paros, porque en contra de lo que cacarean los medios de comunicación, el precio del petróleo no es la principal reivindicación. Tan sólo hay que leer su tabla reivindicativa en http://www.transportes.org, en donde se puede desprender que es la cuestión de los bajos precios a los que se ven obligados a trabajar su principal preocupación, debido a dos aspectos: - La práctica del dumping (práctica de comercio en la cual una empresa vende un producto en el mercado internacional a precio inferior al que se vendería en su propio mercado nacional para poder competir en el mercado internacional). - Los bajos precios que cargadores están ofreciendo aprovechándose de la competencia feroz derivada de la propia atomización del sector del transporte. Por lo tanto, la subida del precio del petróleo sería tan sólo un factor que agrava esta situación de bajas tarifas golpeando directamente en el margen de beneficio. De esta forma, la reivindicación choca con los intereses de las grandes compañías del transporte englobadas en CETM, que, dentro del contexto de crisis económica global, pueden competir en una situación de fuerza y reestructurar parte del sector eliminando parte de competencia representadas por las PYME´s, porque saben perfectamente que el autónomo no es peligroso, sino más bien beneficioso para su negocio como hemos visto antes. Así pues, la CETM sí que está dispuesta a entablar un diálogo con el gobierno en torno a ayudas fiscales y rebajas en el precio del gas-oil, pero no quiere oír hablar de la tarifa única porque ataca directamente a sus intereses. En quinto lugar esta movilización también tiene un factor internacional, ya que los transportistas lusos andan en movilizaciones y se espera que para el lunes día 16 empiecen los franceses, por lo que la Unión Europea también está pendiente de lo que el gobierno español y portugués decidan.
El gobierno quiere mantener una posición de fuerza de cara al exterior, que es la que le corresponde tener, sobre todo para que otros sectores como el taxi, pescadores y agropecuario (estos dos últimos fuertemente subvencionados) radicalicen más sus posturas, aunque a éstos los tiene más controlados vía subvenciones y amenazas de liberalización de mercados. Visto lo visto, es una situación complicada para el gobierno tanto en cuanto ya no hay ningún sector estratégico en manos públicas (transporte, energía, mas la creciente privatización de servicios públicos básicos). Pero el gobierno hará lo que tiene que hacer, o más bien lo que las grandes empresas del transporte le digan que haga. Amparándose en el libre mercado no aceptará la fijación de una tarifa básica e incentivará ventajas fiscales, pudiéndose dar que haya alguna medida relacionada con el combustible que beneficie al sector. Ante este panorama, nosotros, los trabajadores de este país no podemos dejar de comprender e incluso solidarizarnos con todos esos autónomos que lo están pasando mal. Pero también es preciso recordar varios aspectos: La crisis económica del capitalismo quien en mayor medida la está sufriendo es el trabajador: una inflación que no baja mientras la contención salarial sigue siendo el caballo de Troya de la patronal, el combustible sube para todos, aparte de una subida del Euribor que afecta a nuestra hipoteca, ya hemos apaciguado, en parte, la crisis financiera con la inyección de líquido del erario público al mercado financiero. Ahora, bajo el paraguas de la crisis, miles de empleos van a destruirse y varios Expedientes de Regulación de Empleo van a salir de los cajones para presentarse como inevitables, a no ser que aceptemos flexibilizar más aún nuestro precario mercado laboral. Decía antes que podemos entender a los autónomos en su situación, pero no podemos hacer nuestras unas reivindicaciones que no son propias de los asalariados. Decíamos que la propia idiosincrasia del autónomo hacía que defendiera posturas cercanas a la patronal, y el hecho de ir de la mano de las PYME´s del sector crea recelos en la clase trabajadora. Habría que preguntarse varias cosas ¿Dónde están las reivindicaciones en la mejora de la situación del transportista asalariado?, ¿dónde se refleja una subida salarial o rebaja de jornadas para los asalariados? Aparte de que son las mismas PYME´s con las que nos enfrentamos en múltiples ocasiones por incumplimiento de convenios, despidos gratuitos, jornadas abusivas, etc., las que están presentes en este paro patronal. Sea la que sea, la decisión gubernamental afectará negativamente a la clase trabajadora, ya sea mediante rebajas fiscales que tendrán que desviarse del gasto social, o bien imponiendo una tarifa mínima influyendo directamente sobre el precio de los productos, que una vez más tendrá que ser el consumidor quien acarree con esta escalada de precios. Mientras que, tanto autónomos como trabajadores asalariados de cualquier sector, no tengamos la capacidad de visionar el problema en su conjunto, no podremos dar una solución válida a esta crisis económica que no ha hecho más que empezar. Y esa visión general, pasa ineludiblemente por cuestionar las propias bases del sistema económico capitalista. Atajar el problema con medidas que no vayan a la base del problema y que sólo mantengan la visión del capital no nos llevará a avanzar en ninguna dirección. Secretaría de Acción Sindical (Ciudad Real)
Comité Regional de Centro de CNT - AIT www.cnt.es
LOS CURAS EN LA OPCION POR LOS POBRES RECHAZAN EL PLEBISCITO SOBRE LAS VILLAS QUE IMPULSA MACRI
“No se puede decidir por ellos”
Los sacerdotes que trabajan en las villas emitieron una carta abierta al jefe de Gobierno para repudiar el proyecto de hacer un consulta sobre la urbanización de los asentamientos. Le piden a Macri “una mirada más global” sobre estos barrios. Por Carlos Rodríguez Los curas católicos que cumplen su labor sacerdotal en las villas de la ciudad de Buenos Aires manifestaron su rechazo a la realización de un plebiscito para decidir sobre la urbanización de esos asentamientos urbanos, en una carta abierta dirigida al jefe del Gobierno porteño, Mauricio Macri. “Lo primero que queremos afirmar es que estas 350 mil personas –tomando el dato que tiene el señor jefe de Gobierno– son vecinos de la ciudad de Buenos Aires. Por eso, nos parece que no se puede decidir por ellos.” Los sacerdotes, luego de señalar que ellos “todos los días” comparten “la vida con los vecinos de las villas”, consideraron que “más que urbanizar” les gusta “hablar de integración urbana. Esto es, respetar la idiosincrasia de los pueblos, sus costumbres, su modo de construir, su ingenio para aprovechar tiempo y espacio, respetar su lugar, que tiene su propia historia”. Los religiosos se opusieron a que “las posibles soluciones” provengan “de oficinas donde trabajan técnicos que ignoran la realidad y que en lugar de mejorarla, la empeoran”. Uno de los sacerdotes que firman la carta abierta, José María Di Paola, “el padre Pepe”, que tiene su parroquia en la Villa 21-24 y en el Núcleo Habitacional Transitorio Zavaleta, en Pompeya-Barracas, le dijo a PáginaI12 que la iniciativa surgió luego de leer, el domingo pasado, una entrevista a Macri en la que el jefe de Gobierno revelaba que está analizando “llamar a un plebiscito sobre la urbanización de las villas”. A los vecinos que viven en otros barrios se los iba a consultar, según Macri, acerca de cómo reunir los fondos para la urbanización de las villas. Las alternativas que manejaba eran las de “aumentar impuestos o no hacer otras obras” en la ciudad. “Nosotros escribimos la carta abierta al ver los titulares del diario. En el barrio, los vecinos no hablaron mucho del tema, porque no tuvo tanta difusión, dado que todo está tapado por el conflicto con el campo. Nosotros leímos las declaraciones de Macri y resolvimos expresar nuestra opinión”, explicó Di Paola. El Equipo de Sacerdotes para las Villas de Emergencia subrayó que “los más pobres son sujetos de su propio destino, de su promoción humana integral”. Dijeron que eso lo expresaron unas diez mil personas que marcharon, en diciembre del año pasado, para agradecerle a la Virgen de Luján que hoy “las villas son barrios obreros”. Por esa razón, los religiosos aseguraron que “las decisiones que al Ejecutivo de la ciudad le corresponde tomar tienen que tener muy presentes lo que opinan los vecinos de estas barriadas más humildes que luchan día a día por una vida más digna”. Se declararon a favor de mejorar la calidad de vida en las villas, pero para hacerlo “es fundamental (...) poner el oído en el corazón del villero para que las posibles soluciones no provengan de oficinas donde trabajan técnicos que ignoran la realidad y que en lugar de mejorarla, la empeoran”. En ese sentido expresaron que hoy “se hacen planos y licitaciones y ni siquiera se consulta a las familias que van a ser desarraigadas acerca de cuáles son sus necesidades. Simplemente se les
informa lo que ya está decidido; y muchas veces son maltratados”. Los curas de los barrios pobres sostuvieron en su carta abierta que la “integración urbana” que ellos propician “es ofrecerles a los vecinos que viven en las villas las mismas posibilidades que a los vecinos del resto de la ciudad, así como también que el resto de la ciudad aprecie lo que estos vecinos de las villas pueden aportarle a la misma. Integración urbana tiene que ver con instalar servicios, electricidad, cloacas, gas, resolver el problema de falta de vacantes en las escuelas, posibilitar el acceso a la salud, etc.”. Le demandaron al Ejecutivo porteño “una mirada más global de la situación de estos barrios más postergados de la ciudad” y le recordaron que en 1968, durante la dictadura de Juan Carlos Onganía, se había planteado un “plan de erradicación de las villas de emergencia de la Capital Federal y Gran Buenos Aires”, pero cuando se estaba reacomodando a la gente “se decretó un ‘congelamiento’ (...) por el cual no podían realizarse nuevos asentamientos, construir o albergar nuevas familias”. Concluyeron que ese proyecto “fracasó porque no tuvo en cuenta que la causa real del crecimiento de las villas no es la falta de decretos, sino la falta de trabajo y de posibilidades de vida en los lugares de origen de los habitantes. Creemos que el marco de solución de este problema es más amplio y tiene que articular la participación de las provincias, el Estado y la ciudad”. Firmaron la carta Rodolfo Ricciardelli y Adolfo Benassi (de la villa 1.11.14), José María Di Paola, Carlos Olivero y Facundo Berreta (21-24 y N.H.T. Zavaleta), Nibaldo Valentín Leal (Villa 6), Juan Arias y Enrique Evangelista (Villa 26), Sebastián Sury y José Nicolás Zámolo (Villa 15), Guillermo Torre (villa 31), Gustavo Carrara y Martín de Chiara (Villa 3 y Barrio Ramón Carrillo), Sergio Serrese (Villa 19) y Jorge Tome y Franco Punturo (Villa 20).
Lula estatiza los fertilizantes La propuesta anunciada por el ministro de Agricultura busca frenar la suba de precios internacionales. Brasil importa el 70 por ciento de sus fertilizantes a través de tres grandes empresas multinacionales. El gobierno dice que la medida aumentará la producción agrícola. Brasil podría estatizar la producción de fertilizantes para frenar un brusco aumento de los precios de los alimentos. “Es un tema estratégico para Brasil porque somos altamente dependientes de la importación de fertilizantes. Si es necesario vamos a actuar reestatizando parte del sector”, aseguró ayer el ministro de Agricultura, Reinhols Stephanes. Según explicó el funcionario, los fertilizantes absorben el 40 por ciento del costo de producción de alimentos y el gobierno ha decidido intervenir en el sector debido al clima de preocupación por la inflación. Brasil importa cerca de 70 por ciento de los fertilizantes que utiliza y el 75 por ciento del mercado interno está dominado por tres empresas. “Este oligopolio perjudica a los productores”, aseguró el ministro, pero en realidad su preocupación son los consumidores finales. Durante su conferencia de prensa de ayer, Stephanes aseguró que, aunque Brasil es uno de los principales productores y exportadores mundiales de alimentos, también está sufriendo el aumento generalizado de los precios, como el resto del globo. Esta semana el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva anunció un aumento del diez por ciento al sueldo mínimo, como un paliativo a la inflación. A pesar de que según las cifras oficiales la inflación es sólo del 4,5 por ciento, los alimentos han aumentando hasta un 12 por ciento. Este incremento golpea principalmente a los sectores más pobres que gastan casi todo su sueldo en alimentos.
El ministro de Agricultura prometió que una nacionalización podría ayudar a mejorar la productividad del sector y, en consecuencia, toda la estructura productiva. “Cuando uno habla de estatizar, no significa aquella antigua idea de estatismo, sino que Petrobras podrá asociarse a algunas empresas privadas brasileñas y cooperativas para actuar en determinados sectores”, explicó. Según datos aportados por el Palacio del Planalto, sólo 40 países producen fosfatos y otros 12 potasio, que junto a los nitrogenados (extraídos a su vez del gas natural) son los principales componentes de los abonos químicos. “No podemos darnos el lujo de ser dependientes de la importación de fertilizantes”, advirtió el ministro, recordando los años de crisis alimentaria que ya pronosticaron organizaciones internacionales como la ONU, la FAO y el BM. Brasil tiene sus propias minas de fosfatos como para tornarse autosuficiente en el plazo de cinco a 10 años, pero debe optimizarse su explotación. “En el caso de potasio tenemos una gran mina que necesita de un análisis más técnico y ambiental porque queda en el Amazonas”, agregó Stephanes. Además, Petrobras controla la explotación de gas natural en el país, lo que le asegura al Estado tener materia prima de los fertilizantes. Hace tres años, Petrobras de-sistió de explotar una mina en Nova Olinda, cerca de la frontera con Bolivia, en las márgenes del río Madeira, a 1200 metros de profundidad, porque ninguna empresa se presentó a la licitación. Brasilia cree que en el contexto actual y con la escasez de alimentos y el aumento de precios, los incentivos podrían ser más tentadores para los inversores brasileños. El lunes pasado, la multinacional Bunge anunció que invertirá 2000 millones de dólares en nuevos proyectos para la producción de fósforo, en minas de Minas Gerais y Santa Catarina. El producto podría entrar en el mercado en 2010. Con este aumento en la producción de fosfato, Bunge espera lograr el tercer lugar en el sector fertilizantes, que es dominado a nivel mundial por la marroquí OCP, Cargill Fertilizantes e IMC Global, según la empresa. En la última reunión de gabinete, Lula les habría dicho a sus funcionarios que no quiere quedarse afuera de ese mercado y les pidió que piensen en proyectos mixtos para proponer en los próximos meses.
Puertos peruanos son más competitivos que los chilenos Pero ProInversión y el MTC insisten en concesionar los terminales de Pisco, Paita e Ilo.
La competitividad de los puertos peruanos es evidente. Un informe del Banco Mundial (BM), divulgado recientemente por el diario chileno El Mercurio, señala que exportar un contenedor por los puertos peruanos es 8.5% más barato que hacerlo por los terminales portuarios de Chile. "Otro elemento que se suma a la competitividad del país incaico (Perú) es que posee la ventaja de que sus oficinas operativas son más baratas que las nuestras (Chile), mientras que el costo de exportar un contenedor es de US$590, 8.5% menor que en Chile", asegura el Mercurio basándose en el reporte del BM.
Un elemento adicional es que el gobierno peruano, en ceremonia pública a la que asistieron la ministra de Transportes y Comunicaciones y otras autoridades, celebró recientemente el embarque de un millón de contenedores en el puerto del Callao, y sin grúas pórtico. NO A LA CONCESIÓN Tras las afirmaciones del BM, los trabajadores portuarios peruanos aseguraron que esta realidad deja al descubierto la razón por la cual "los monopolios privados chilenos están presionando para apoderarse de los terminales portuarios del país empezando por Paita y Pisco". Adolfo Granadino, secretario general de Fentenapu, demandó al presidente Alan García dejar sin efecto de inmediato "el ilegal proceso emprendido por ProInversión y el MTC", quienes conociendo de este escándalo siguen avalando al Consorcio Halcrow–Ikons–Chemonics que, teniendo demostrados vínculos con el monopolio naviero portuario Claro -Von Appen Agunsa del país del sur, está a cargo del diseño de la concesión de los puertos peruanos de Paita y Pisco. "Para apoyar este esquema de concesión, ProInversión anuló el carácter geopolítico nacional de los puertos públicos y otorgó una cláusula de "nacional de otro Estado contratante" al inversionista privado para evitarles conflictos contractuales, refirió. Los trabajadores denunciaron que David Lemor, director ejecutivo de ProInversión, desafía la autoridad del Congreso al negarse a asistir reiteradamente a la Comisión de Transportes para explicar su extraña posición adoptada para facilitar la entrega de los puertos a manos chilenas. "Lemor está ganando tiempo y quiere salvar su inasistencia con el cierre de la legislatura", advirtieron. CIFRAS 8.5% más barato que en Chile es mover un contenedor en un puerto peruano. 590 dólares vale exportar un contenedor en los puertos peruanos.
FMLN no cambiará sus candidaturas cuestionadas El diputado efemelenista y candidato a la vicepresidencia, Salvador Sánchez Cerén, fue el único funcionario de la cúpula que admitió que hay inconformidad en el tema. Julieta Chiquillo/Alexandra Bonilla [email protected] Fecha de actualización: 6/14/2008 Voces de “descontento” suenan al interior del FMLN por el nombramiento de algunos candidatos a alcalde en varios municipios del país, sobre todo en el departamento de La Paz, pero las candidaturas se mantendrán inamovibles. Salvador Sánchez Cerén, coordinador del grupo parlamentario y candidato a vicepresidente del FMLN, admitió que el partido ha recibido quejas por parte de algunas directivas de Ayutuxtepeque, La Paz y San Vicente, pero descartó que vayan a dar marcha atrás a la decisión. “Los que se han proclamado son candidatos que ya tienen el aval del partido”, aclaró el parlamentario, a quien precisamente fueron dirigidas algunas de las quejas de las bases.
Según el jefe de la bancada del FMLN, las nombres propuestos han sido ampliamente consultados en el partido y con la población de cada localidad. “Algunas directivas han hecho saber su descontento en cuanto a la definición. Pero el procedimiento es escuchar no solo a la directiva municipal, sino escuchar la departamental, y a veces la departamental tiene criterios diferentes”, argumentó. Explicó, además, que en los casos en los que la directiva municipal y la departamental no comparten el nombramiento de un aspirante a alcalde, es la dirección del partido la que tiene la última palabra, ya que hay un equipo de la cúpula que trabaja en la definición de las candidaturas. “La definición está sobre aquella persona que genera confianza tanto en el partido como en la población”, comentó el candidato a la vicepresidencia. La diputada Blanca Flor Bonilla, parte de la cúpula, es precisamente una de las candidatas que han sido objetadas por las bases de Ayutuxtepeque, comuna a la cual aspiraría en 2009. Niegan problemas Será por eso que la parlamentaria ha sido una de las primeras en asegurar que al interior del FMLN no hay ninguna inconformidad por las candidaturas. “No es cierto. No sé de dónde sacan eso”, dijo al ser consultada. A ella se suma el coordinador general del Frente, Medardo González, quien se da por enterado de las quejas que han hecho las bases al interior de su partido solo por los medios, y rechaza que se hayan recibido cartas. “No hay ningún tipo de molestias con las candidaturas. Lo único que he sabido de eso lo leí en LA PRENSA GRÁFICA”, contestó González, en clara contradicción con lo expresado por su candidato a vicepresidente. La semana pasada LA PRENSA GRÁFICA publicó que las bases de militantes del FMLN de Ayutuxtepeque, y en seis municipios de La Paz, reprochaban a la Comisión Política del partido las candidaturas edilicias en cartas dirigidas a Sánchez Cerén y Medardo González. Entre las quejas enunciadas en las cartas figuran que los postulados a alcalde no responden a los intereses del partido, que no atienden a las bases municipales, y se les acusa además de prácticas de corrupción e ignorancia sobre el municipio por el que correrán. Las candidaturas de San Vicente y Sonsonate también han generado incertidumbre
La mayoría de los aspirantes a alcalde por el FMLN ya han sido ratificados. En lugares donde harán alianzas aún hay varios pendientes.
Según Sánchez Cerén, el FMLN ha fijado alrededor de 90% de las nominaciones municipales, y al terminar el proceso de elección de esas candidaturas se dedicarán a definir la bancada.En el caso del municipio de Sonsonate, el partido aún no ha dejado en concreto si hará una alianza con Cambio Democrático para lanzar a Óscar Kattán como candidato a alcalde. El fin de semana pasado, el Frente nombró a Casimiro Sosa como su carta fuerte en Acajutla, a pesar de que él no está inscrito en el partido. Sosa actualmente se desempeña como alcalde. Los estatutos del FMLN permiten nombrar foráneos para ser candidatos a jefe municipales y a presidente, pero no así para diputados, para eso tiene que tener al menos tres años de militancia.
Bolivia, la derecha arremete AGRESIONES E INSULTOS EN MARCHA DE PROFESORES
Los insultos, agresiones a la propiedad privada y amenazas a efectivos de la Policía departamental fueron los principales componentes de la marcha que protagonizaron ayer profesores de escuelas y colegios fiscales de La Paz. Los insultos, agresiones a la propiedad privada y amenazas a efectivos de la Policía departamental fueron los principales componentes de la marcha que protagonizaron ayer profesores de escuelas y colegios fiscales de La Paz. La protesta, que fue convocada por los dirigentes del magisterio nacional, en rechazo al adelanto de las vacaciones escolares determinada por el Ministerio de Educación, recorrió las principales avenidas de nuestra ciudad interrumpiendo y congestionando el tráfico vehicular. Los maestros lanzaron tomates al frontis del edificio de una de las administradoras de pensiones, pintaron leyendas en contra el Presidente de la República y amenazaron a los efectivos policiales que cumplían con su labor de controlar el orden público. Un lamentable espectáculo dieron ayer los “educadores”, que ratificaron que no acatarán la disposición gubernamental con relación al descanso pedagógico de invierno.
Mara amnistía, ahora actúan como paracos vacunando a la población…quien los asesoró en eso…Colombia
Con menos homicidios pero más extorsiones Enrique Carranza
Viernes, 13 de Junio de 2008 » Este es uno de los cinco municipios más violentos del país, en los que El Diario de Hoy recorrió para presentar esta serie de reportajes Sonsonate, Lourdes, Apopa, Soyapango y San Salvador son municipios con un alto índice común: el de la violencia. De hecho, son para las autoridades algunos de los 10 municipios prioridad a la hora de patrullar, de trazar proyectos se seguridad, de prevención o de ejecutar operativos antidelictivos. En todos hay maras, ladrones, homicidas y violadores, pero, sobre todo, a diario hay decenas de víctimas inocentes de la detestable criminalidad. Son las cifras de homicidios las que suelen marcar con creces lo violento que puede ser un municipio. Para el caso, Sonsonate era hace un par de años el sitio donde al menos una persona era asesinada cada día. Con ello, el mote de ser el más violento no le quedaba grande, sino acorde a lo que abatía a sus pobladores. Las secuelas todavía las resienten algunos pobladores. El Diario de Hoy recorrió este municipio que a pesar de todo mantiene sus atractivos. Pero la gente común, los de a pie, pareciera que viven con temor, temor porque quedaron marcados por un hecho delictivo o por miedo a ser víctimas. Si bien las cifras de asesinatos se vinieron abajo en el último año -22 en promedio mensual-, ahora son los robos y las extorsiones los delitos que más afectan a los habitantes.
"Me han asaltado tres veces en una semana", se lamenta Karen, una joven universitaria, que a diario debe cruzar el abarrotado y peligroso centro de la ciudad. Si ahí ser asaltado puede ser algo "normal", en las periferias hay sitios donde vendedores, cobradores o transportistas, deben pagar cuotas a las maras por entrar o simple: deben atenerse a ser asaltados. Estos lugares son comunidades marginales ubicadas en la periferia del casco urbano, sobre todo a las orillas de la línea férrea. Al sondear a pobladores en el centro, rápido, mencionan las colonias Sensunapán y la Belén, como las más peligrosas. La situación no es nueva. Entre 2003 y 2006, Sonsonate entró en la categoría de los más violentos del país junto a Armenia, según Seguridad Pública. Una de las razones para estar en la letal categoría era obvia: la ola de homicidios parecía interminable. Uno de los casos que conmovió a Sonsonate sucedió en septiembre de 2006, cuando asesinaron al sacerdote Ricardo Antonio Romero. Fue interceptado cuando se desplazaba en su vehículo en la salida de la ciudad hacia Acajutla. Otro sitio inseguro, sobre todo, por los conductores temerarios. Romero era párroco del poblado de Santa Catarina Masahuat, lugar vecino a Sonsonate. Menos muertes El año anterior, la violencia dejó 269 muertes en Sonsonate y 380 en todo el departamento. La mayoría de crímenes estuvo relacionada a las pandillas, dice la Policía. Pero la baja en ese delito no permite dar un respiro total a la población ya que las pandillas se han expandido como pólvora. No obstante, para lo que va de 2008, las estadísticas son "alentadoras". En mayo, por ejemplo, hubo 20 muertes violentas en todo el departamento, y de esos, 13 ocurrieron en la cabecera. "La mayor parte de la delincuencia se da en el llamado 'cinturón de pobreza', en las comunidades que están entre la zona urbana y la rural del municipio", explicó el comisionado Julio César Marroquín Vides, jefe de la delegación de Sonsonate. De acuerdo con la Policía, las edades de los delincuentes oscilan entre 12 años y los 28. "La mayor parte de delitos está relacionado con pandillas o son casos en cantones donde un poblador enojado saca el corvo y mata a otro", dice Vides. Indica que en el caso de las extorsiones a veces son personas que se aprovechan del temor de los demás y se hacen pasar por pandilleros, intimidan y extorsionan. Aunque Sonsonate está rodeada de sitios para divertirse, los sitios de acceso gratis al público son pocos. Casi nulos, como en la mayoría de municipios.
Limitantes El jefe policial asegura que los índices delictivos están a la baja, en promedio, en 60 por ciento. Esa delegación policial registró en mayo de 2008 un total de 52 capturas efectuadas en todo el departamento. De ellas 25 eran detenciones por homicidios. La delegación de Sonsonate es la responsable de atender los 15 municipios del departamento. En medio de la trama de la delincuencia, hay iglesias –de diversas religiones-, la alcaldía, ONG y ministerios, como Educación, que trabajan de la mano para intentar transformar la dura realidad sonsonateca.
Carta de Stella Calloni a Fidel • Esta carta de la destacada periodista de investigación y escritora argentina Stella Calloni, Premio Latinoamericano de Periodismo José Martí, y autora del libro Operación Cóndor. Pacto criminal, una de las obras más reveladoras del genocidio de las dictaduras militares con el auspicio de Estados Unidos, será incluida en la segunda edición del libro Fidel, Bolivia y algo más… una visita histórica al corazón de América Latina Buenos Aires, 11 de Junio de 2008 Querido Comandante Fidel Castro: Hace días la directora del periódico La Jornada me envió una copia magnífica de esa fotografía suya donde está con las palomas en sus hombros y cabeza. Es una foto extraordinaria y genial. Y recordé también que estando en Cuba y asistiendo a un acto donde Usted habló, su discurso estuvo acompañado por un coro de pajaritos parados en uno de esos cables de la luz o alta tensión —no soy experta en tendidos de cables— y nunca pude preguntarle si los escuchó. Incluso en algunas grabaciones de ese discurso quedó muy bien registrado el formidable acompañamiento de trinos, realmente muy especiales. Y mágicos. Tenía muchos deseos de escribirle desde estos territorios del sur, todos algo conmocionados —algunos más que otros— y especialmente después de haber visto andar por la calle Corrientes, popular y mítica también, la estatua de bronce del Che, cuyo paso hizo emocionar a muchos, como que había algo más que una reivindicación. Me dije: ahora le escribo. No hay nada como escuchar el lenguaje de las calles y en una esquina había un hombre que se parecía a un duende y se secaba las lágrimas con un pañuelo muy viejo y gastado, hasta roto. Pequeñito era él. Le pregunté por qué lo emocionaba tanto. Me dijo "Tengo 93 años y no puedo andar mucho, pero supe que iba a pasar Ernesto por aquí y quise saludarlo aunque se que es un símbolo esto de la estatua, pero siempre algo anda allí". Le pregunté de donde venía y algo de su vida, que por su aspecto debió ser muy dura. "Vengo del norte, de por allá de Tucumán y Santiago del Estero. Muy dura pero peleada mi vida . Desde niño estoy peleando por lo que creo que es justo. Un hombre sólo necesita ser justo para estar en todas las peleas por la justicia".
Había trabajado en los oficios más duros, en el campo cuando niño, en las zafras, en naranjales, en frigoríficos luego, y participado en varias resistencias contra los diversos golpes que asolaron al país. Me lo dijo rápido, escueto como quien resume una vida en dos o tres frases. Se quedó mirando la figura de la estatua del Che hasta que se perdió a lo lejos, sin poder hablar. Antes de irse me tendió la mano temblorosa y gastada por esa vida y esos trabajos y me dijo "ahora me queda pedir a San Ernesto de la Higuera y al Che de América, que haga posible el milagro de unir a nuestras izquierdas y a nuestra mejor gente, que parece estar sólo preparada para desunir. Vienen tiempos duros y a los que andan agitando banderas con el Che, digo que eso no hace a un peleador, a un revolucionario y menos en estos tiempos. El Che necesita menos gritos, menos camisetas y más sabiduría para los nuevos tiempos de lucha. Estamos en tiempos en que debemos saber quién es el enemigo. Si nos confundimos estamos perdidos. Ahora el "mandinga" anda escondido entre muchas palabras floridas y algunos compañeritos se nos han vuelto ciegos y caen solitos en las trampas. Lean a fondo al Che, lean a fondo a Fidel, lean la historia, sean humanos y dignos como ellos, les dice un viejo como yo, que tengo que dar batalla cada día para comprar remedios baratos que debo tomar. Para comer nomás, doy una gran pelea". Lo miré emocionada y le dije que él hablaba muy bien. "Pobrecito como siempre fuí, también siempre leí. Todo lo que vino a mis manos. Eso me lo enseñó un compañero minero que andaba muy enfermo por aquellos pagos. Me dijo: eso será tu defensa y la de otros. Y él mismo me enseñó. Era un gran luchador. Y mire, sigo leyendo". De un bolsillo de su saco gastado sacó varias hojas arrugadas y me mostró las copias de varias de sus reflexiones, que un joven vecino le alcanza siempre que puede. Le pregunté el nombre y movió la cabeza "me llamo como se llaman todos los que viven como yo". Le cuento esta pequeña historia porque me pregunté si siempre aprendemos con humildad de los que debemos aprender. Esta historia es suya y lo abraza fuerte, con inmenso cariño y respeto Stella Calloni
A los compañeros de la izquierda radical en Argentina (En especial a los militantes trotskistas)
Celia Hart Camaradas (y los que no lo son): Como deben saber se realizará un acto oficial por el 80 aniversario de Ernesto Che Guevara en la ciudad de Rosario.
Será un acto del gobierno oficial al símbolo de la rebeldía y compromiso del Che Guevara, que es sin dudas homogéneo en todo el mundo. Pudiera parecer una victoria nuestra contra el capitalismo que tengan que rendir tributo al Che. Pero no es así, y me permito entonces decirles mi criterio al respecto: La imagen del Che se ha filtrado de manera peligrosa en el alma de la juventud en el mundo entero. En cualquier espacio que se busque siempre habrá un afiche, una camiseta con su imagen. La burguesía y el Imperialismo no tiene ya la menor de las posibilidades en convertirlo en asesino, terrorista. Y aunque parezca paradójico es éste el verdadero peligro. Al no poder demonizarlo…lo canonizan y se lo usurpan silenciosamente a la revolución. Es un viejo truco. Explotan su imagen, recuerdan al aventurero cándido que viajó en motocicleta y lo convierten en un mártir de sus propias ideas. La confiscación del Che, para convertirlo en souvenir es un atentado contra el guevarismo teórico y contra los aportes de Ernesto Guevara al pensamiento marxista más acabado. Es un atentado contra el pensamiento revolucionario. Esta estrategia de nuestros enemigos no es nueva. Ha sucedido muchas veces, pero les propongo dos ejemplos nada más. Jesús de Nazaret dejó de ser el rebelde conspirador de los pobres, el crítico inteligente y mordaz una vez que el Imperio Romano, que no pudo exterminar el cristianismo…lo hubo de canonizar. Constantino de Roma al bautizarse, robaba de manera descarada la bandera de los humildes para encaramarla en un altar. Cristo dejó de ser el hombre para convertirse en el intangible Dios a los que las señoras encopetadas y los ladrones del mundo le rezaban todos los días. Así hasta ahora. De hecho el Papa Benedicto XVI, con su inteligencia perversa exigió silencio a uno de los jesuitas por considerar que hablaba más de Jesús hombre que de Jesús Dios. Como Dios no existe…hicieron desaparecer al cristianismo también…Lo que no existe no molesta. Jesús hombre es el enemigo, el que está en el Cielo, es aliado. El otro ejemplo que les pongo es el de José Martí, el líder de la independencia y de la revolución en Cuba. A José Martí autor intelectual del pensamiento radical cubano, el enemigo lo cerró en la estrecha bandera patriotera y le arrebató su verbo cortante, su irreducible internacionalismo y su papel de organizador del partido revolucionario y de la guerra. Lo dejan como el Apóstol de la independencia arrebatándole toda ideología. El colmo es que usan su nombre para la prensa subversiva contra la revolución cubana. La misma estrategia usarán con el Che Guevara son especialistas en tergiversar y en limar asperezas. Pronto veremos la foto del Che en la Casa Rosada sin el menor rubor. Aún así no es esto lo más grave: Lo más grave somos nosotros, en la izquierda radical que nos sumamos muchas veces (sin saberlo) a la campaña del enemigo o al descuido (por llamarlo de algún modo) de nuestras instituciones.
Como consecuencia de esta manipulación efectiva, nos desarticulan el pensamiento, nos desaparecen los escritos, nos hacen creer una imagen prefabricada y caemos como peces en el redil. Cuando pasa el tiempo y aparecen libros inéditos de los revolucionarios o poco conocidos…ya estamos atrapados en las consignas babosas de la burguesía y no prestamos atención a ellos. Es exactamente el caso del Che. No voy ahora, por carecer de espacio y oportunidad, a editar una vez más mis múltiples discusiones y contrapunteos con todos mis camaradas trotskistas en todo el mundo. Confieso que son discusiones muy oportunas y que siempre sacamos alguna conclusión honesta. Cuando prima la buena intencionalidad es casi siempre posible hacerlo. Hoy sólo quiero llamarlos a la reflexión de este otro hecho. No permitan la usurpación del Che en nuestra querida Argentina. Por eso les conminaría a todas las organizaciones que tengan como objetivo la lucha por el socialismo que marchen al Seminario Internacional que propone el grupo Amauta y la Cátedra Che Guevara, cuyo anuncio les inserto. Allí puede discutirse de manera abierta los aciertos y desaciertos del Che, y más que del Che, del pensamiento guevarista como una rama imprescindible del marxismo tercermundista y universal. Es una contestación a los actos del oficialismo que nos quiere seguir arrebatando las banderas de la rebeldía. El Che nos pertenece, y hay una expresa intención de los reformistas actuales de querer transformarlo en un cándido joven suicida y romántico. Al Che lo necesitamos de carne y hueso con sus dudas, sus reflexiones, sus errores y sobre todo su entrega a la causa revolucionaria y sus aportes al ideario comunista. Muchas organizaciones (sobre todo trotskistas de Argentina) tienen muchas críticas sobre mi persona. Muchas de esas críticas pueden ser acertadas o parcialmente acertadas, pero les ruego ahora que atiendan este seminario y allí expongan incluso sus dudas, temores y análisis. Este seminario puede ser un punto de inflexión en la campaña mundial por usurparnos el pensamiento del Che. Por desgracia no puedo participar, aunque los compañeros del Seminario me invitaron, los pasajes son impagables…aunque de seguro fluirán los boletos para el acto oficial en Rosario. Me someto esta vez a que mis compatriotas me llamen sectaria y divisionista…pero lo que está en juego es parte de nuestro patrimonio revolucionario que debemos defender con uñas y dientes. Asistan en la medida de sus ocupaciones. Saldrán enriquecidos y satisfechos de la reunión. Estoy segura que Nahuel Moreno asistiría a una reunión como esta, donde de manera explícita hacemos resistencia, a los actos de canonización de Ernesto Guevara... Lo mismo que de alguna manera sucedió con nuestro León Trotsky. Mi consigna es que no les necesitamos ni el Infierno y menos aún en el Paraíso. A Ernesto Che Guevara lo necesitamos en la Tierra, donde pertenece y donde tiene mucho qué hacer todavía
HVS Un abrazo revolucionario a todos Celia Hart
EL GOBIERNO EROSIONA LA HUELGA DE LA COB
Redacción de Econoticiasbolivia
http://www.econoticiasbolivia.com/
http://www.econoticiasbolivia.com/La Paz, junio 12, 2008.- El gobierno indígena-
campesino de Bolivia comenzó a erosionar la movilización y huelga que la
Central Obrera (COB) quiere desatar en todo el país desde el lunes para obligar
al presidente Evo Morales a destruir el poder económico de la oligarquía y
otorgar mejores condiciones de vida a los trabajadores y población empobrecida.
La acción gubernamental contra la movilización popular se dio, hasta ahora, en
tres áreas para frenar la lucha de los sectores laborales más combativos como
son los maestros y los mineros.
Así, en las últimas horas de este jueves, el gobierno decretó el adelanto de las
vacaciones escolares para este lunes, anulando, en los hechos, la huelga y
movilización de los maestros urbanos y rurales, uno de los puntales de la lucha
de la COB en las ciudades y que libran en solitario una lucha por lograr mejores salarios.
Esta mañana, en La Paz, miles de maestros cumplían el segundo día de huelga
y marchaban por las calles protestando contra la política de Evo y las acciones
sediciosas y separatistas de la oligarquía. En el resto del país, otros miles de
maestros cumplían la huelga y ejecutaban similares acciones callejeras.
“El Gobierno está pretendiendo burlar las demandas del Magisterio y de todos
los trabajadores. No quiere aumentar salarios, no quiere expropiar las
empresas transnacionales que explotan nuestros recursos naturales y no quiere
nacionalizar las empresas que están en manos de los agroindustriales y
oligarcas que lucran con el hambre del pueblo”, dijo el dirigente de los maestros paceños, José Luis Álvarez, tras condenar el adelantamiento de las vacaciones.
Adán Quintana, de la Confederación nacional de Maestros, dijo que el adelanto
de las vacaciones no resolvía el problema de los trabajadores y que éstos volverían a la lucha más temprano que tarde.
Otras acciones
La segunda acción en contra de la huelga y movilización de la COB estaba
dirigida por una misión gubernamental, a cargo de los ministros de Trabajo y de
Minería, que avanzaban en negociaciones y acuerdos con la dirigencia de la
mina de Huanuni para evitar la participación de cerca de 5 mil mineros en la huelga.
Estas dos acciones se complementaban con otra tercera, desarrollada por los
dirigentes oficialistas de la propia COB, que boicoteaban desde adentro la
realización de la huelga y la movilización, definida en un ampliado nacional de
dirigentes para frenar la rebelión de la oligarquía y obligar al presidente Evo
Morales a cumplir con sus promesas de acabar con el neoliberalismo,
profundizar las reformas y mejorar la calidad de vida de la población.
La movilización va
Pese a estos tropiezos, el dirigente de la Central Obrera de Oruro, Jaime
Solares, aseguró que la movilización popular no se detendrá en esa región. “La
COD de Oruro irá a la huelga general indefinida con el bloqueo de caminos, a
partir del próximo lunes 16 de junio, haya o no la reunión nacional de dirigentes
que debe convocar la COB para organizar y consolidar la movilización”, dijo.
Solares dijo que Oruro debe ser el puntal de las movilizaciones, para que el
Gobierno responda al pliego de los trabajadores, como es el cumplimiento de la
Agenda de Octubre de 2003, que consiste en la recuperación de las empresas
capitalizadas y de los recursos naturales para los bolivianos; además de la
aprobación de la nueva Ley de Pensiones y un salario más digno para todos los trabajadores.
El dirigente minero informó que el principal ejecutivo de la COB, Pedro Montes,
se había comprometido en el ampliado a convocar a una reunión nacional de
dirigentes que debía realizarse en Oruro para respaldar y consolidar la movilización del 16 de junio, pero que hasta ahora no había tal convocatoria.
Charlas y dilaciones
El secretario general de la COD de Oruro, Mario López, advirtió, además, que el
Gobierno trataba de frenar la huelga general indefinida y el bloqueo de
caminos, con la promesa de responder las demandas laborales hasta el fin de
semana y reveló que para ello el Poder Ejecutivo les envió una carta, donde se
asegura que la misión le fue encomendada al Ministro de Hacienda, Luis Arce y al Viceministro de Pensiones, José Luis Pérez.
Para este viernes está prevista una reunión entre la dirigencia de la COB y el Gobierno de Morales para analizar el pliego petitorio de los trabajadores.
El ampliado de la COB, celebrado a principios de mes en La Paz con la
participación de los principales sindicatos y organizaciones populares urbanas y
rurales del país, convocó a la huelga y al bloqueo de caminos para presionar a
Evo para que cumpla con la denominada “agenda de octubre”, que postula la
expropiación a dominio estatal de las empresas transnacionales del gas,
petróleo y minerales, la expropiación de los latifundios y la entrega de tierras
para los campesinos, el aumento general de sueldos y salarios, el control de precios de los alimentos y la aprobación de una nueva ley de pensiones.
Todas estas demandas han sido relegadas por el Gobierno, que se ha
empeñado hasta ahora en intentar lograr un gran pacto nacional con la
oligarquía, los partidos de derecha y los prefectos (gobernadores) de los valles
y el oriente, que no dejan de avanzar en su proyecto de escindir en dos a
Bolivia, dejando el altiplano en manos del presidente Morales y reteniendo ellos
el poder y control del resto del país.
Previsiones
Todo indica hasta ahora que con el nuevo referéndum revocatorio del 10 de
agosto, fecha en la que es casi seguro que Evo y los principales prefectos
derechistas serán ratificados en sus cargos, se consolidará esta situación de
doble poder, con dos Gobiernos paralelos (con Evo en La Paz, Oruro y Potosí, y
los prefectos opositores derechistas y los 100 clanes que son dueños de la tierra y los negocios en Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija).
La apuesta de la COB y de los sindicatos más radicalizados es poner contra la
pared a Evo Morales para obligarlo a destruir el poder económico de la
oligarquía y mejorar la calidad de vida de los más pobres. Lejos de ello, el
Presidente indígena insiste en el diálogo y la concertación con la burguesía
agrofinanciera, con la que quiere compartir el poder y hacerla su socia. La
oligarquía, los 100 clanes y el imperialismo, por el contrario, no quieren perder
sus privilegios y avanzan hacia la destrucción del gobierno del “indio presidente”, de la COB y de los sindicatos rojos.
www.econoticiasbolivia.com
Clamor en El Alto: go home, señor embajador
(IAR Noticias) 13-Junio-08 Partidarios de Morales durante una marcha en El Alto. Miles de trabajadores y vecinos de la ciudad de El Alto, la más pobre y rebelde de Bolivia, cercaron por cinco horas la Embajada de Estados Unidos en La Paz. Econoticiasbolivia Demandaron a gritos la salida del embajador Philip Goldberg, acusado de patrocinar el acoso oligárquico sobre el presidente indígena Evo Morales y facilitar la total impunidad de los ex gobernantes Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Sánchez Berzaín, encausados por la justicia local. "Estamos indignados por el asilo y protección que los Estados Unidos le han dado al ex ministro de Defensa, Carlos Sánchez, dijo Sonia Brito, presidenta de la Asamblea de derechos Humanos, quien junto a miles de vecinos marcharon sobre el "bunker" de los gringos, una gigantesca mole de cemento ubicada en el centro de la ciudad. Durante cinco horas, cerca de 50 mil trabajadores y vecinos alteños rodearon las instalaciones de la Embajada de Estados Unidos, rompiendo los anillos de seguridad dispuestos por la Policía Nacional, exigiendo justicia para las víctimas de la masacre de octubre del 2003 y el cese de la injerencia norteamericana. Los manifestantes fueron reprimidos por la Policía. En octubre del 2003, 65 personas fueron muertas y más de 400 resultaron heridas por la dura represión ordenada por Sánchez de Lozada y Sánchez Berzaín. Otras nueve personas fallecieron en los meses venideros por las graves secuelas de sus severas lesiones que no pudieron superar. La rebelión popular, principalmente en la ciudad de El Alto, se desató en el 2003 para impedir la exportación de gas natural licuado a Estados Unidos, a través de un puerto chileno; negocio que sólo beneficiaba a las transnacionales y dejaba migajas para Bolivia. Sánchez de Lozada dimitió y fugó a Estados Unidos junto a Sánchez Berzaín y el ex ministro de Hidrocarburos, Jorge Berindoagüe. Marcha popular
En la marcha participaron la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve), la Central Obrera Regional (COR), la Federación de Gremiales, Federación de Trabajadores en Carne y Ramas Anexas (Futecra), Federación de Padres de Familia (Fedepaf), Sindicato de Choferes Primero de Mayo, Concejo Municipal, Federación Sindical Única de Campesinos del Radio Urbano y Suburbano (Fesucaruso) y la Federación de Mercados, entre otras. La anterior semana se conoció que el Departamento de Estado de Estados Unidos concedió asilo político a Sánchez Berzaín, que en octubre de 2003 fugó junto a Gonzalo Sánchez de Lozada hacia el país del norte. Fue el mismo ex ministro quien en contacto con algunos medios locales confirmó su asilo en los Estados Unidos, supuestamente porque es un perseguido político. Ante esta situación, el abogado de las víctimas de octubre de 2003, Rogelio Mayta, dijo que esta situación podría complicar aún más la extradición de Sánchez Berzaín y del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, ambos acusados de genocidio y de eludir justicia boliviana. Demanda gubernamental El presidente de Bolivia, Evo Morales, solicitó el domingo al Gobierno de los Estados Unidos cooperación para que el ex ministro de Defensa, Carlos Sánchez Berzaín, responda ante la justicia por la masacre de octubre de 2003. "Quisiéramos que el Gobierno de Estados Unidos, no sólo el embajador de los Estados Unidos (Philip Goldberg), (nos) ayuden a hacer justicia (contra) quienes hicieron mucho daño a Bolivia", expresó Morales. "No es posible que algunos personajes con mala trayectoria política puedan ser protegidos por el Gobierno de los Estados Unidos", acotó. La conspiración de Golberg Según ha denunciado el gobierno, la Embajada de Estados Unidos es la que promueve y financia los intentos separatistas de la oligarquía. Las estrechas relaciones del embajador estadounidense Philip Goldberg con los prefectos y líderes opositores y el financiamiento de la agencia norteamericana de cooperación Usaid a los políticos derechistas de oposición son prueba de ello y marcan la evolución de la política de Washington con relación al presidente Morales. Hasta el 2002, el dirigente cocalero Evo Morales era considerado como el enemigo número uno de Washington. En ese entonces, el embajador Manuel Rocha amenazaba abiertamente a los bolivianos con suspender la ayuda económica y cortar relaciones diplomáticas si éstos se animaban a votar por Evo, al que consideraban ligado al narcotráfico. Sin embargo, en el periodo 2003 – 2005, cuando el levantisco pueblo boliviano derribó a dos gobiernos neoliberales (Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Mesa) y amenazó con expulsar a las transnacionales petroleras y mineras que saqueaban Bolivia, nacionalizando el gas, las minas y las tierras, Washington revalorizó el papel de Morales y decidió, aunque de mala gana, convivir con él, más aún cuando éste ganó las elecciones de fines del 2005 con el 54 por ciento de los votos. Ya en el poder, Morales atemperó los ánimos populares sobre la expulsión de las transnacionales y logró nuevos acuerdos con las petroleras, legalizando sus contratos y garantizando sus
propiedades, sus inversiones y ganancias. Otorgó también amplias garantías para la propiedad y la inversión privada que cumplan con las normas y leyes.
La mujer de Obama en la mira de la "derecha blanca" estadounidense (IAR Noticias) 14-Junio-08 Barack Obama y su esposa Michelle, acusada de "antiblanca fundamentalista" por la ultraderecha republicana. Las usinas mediáticas de la campaña demócrata (con CNN y The New York Times a la cabeza) ya lanzaron a la mujer de Obama, Michelle, como la "víctima" de una operación de la derecha racista norteamericana que busca mostrarla como una "antiblanca fundamentalista" en las antípodas del discurso integrador y "conciliador" del candidato que deberá disputar la Casa Blanca con el republicano McCain. Para los medios y analistas estadounidenses que impulsan la candidatura de Obama, la derecha republicana ya inició una campaña para demonizar a Michel como la "cara negra" que dice lo que calla el candidato sobre los blancos. La cadena CNN afirma en su página web, que Michelle se perfila como "probable" objeto de ataque de la maquinaria republicana de cara a las elecciones generales del próximo 4 de noviembre. Similar opinión comparte la columnista del diario The New York Times, Maureen Dowd, quien señalaba el martes que los republicanos están listos para "demonizar" a Michelle. Según The New York Times, las usinas de la derecha republicana la presentan a Michelle como la "versión femenina" del pastor negro Jeremiah Wright, que fuera removido de la campaña de Obama por sus opiniones "extremas" contra los blancos. El pastor de Chicago que casó a los Obama y bautizó a sus dos hijas desató un auténtico revuelo hace unos meses después de que se retransmitiesen segmentos de sus sermones condenatorios al "racismo blanco". En algunos de esos sermones Wright instaba a los afroamericanos a entonar "Dios maldiga América", en lugar del tradicional himno "Dios bendiga América", producto según él del racismo aún predomina en el país. Obama se distanció rápidamente de esos comentarios y abandonó la iglesia a la que acudió durante dos décadas. Pero su larga vinculación con la congregación fue utilizado por los republicanos para mostrarlo como un negro "radicalizado" ante los votantes blancos. Obama, como se sabe, es mitad negro y mitad blanco, y su campaña es apoyada y financiada por los grupos más concentrados del sionismo financiero de Wall Street que lo eligió como alternativa
a Hillary Clinton que fue derrotada por el candidato "blanquinegro", a quien la prensa demócrata hace pasar por "negro". Un vídeo difundido el mes pasado por el Partido Republicano de Tennessee podría ser, según el periódico Los Angeles Times, una muestra de la campaña que preparan los cruzados racistas conservadores contra la mujer de Obama. El vídeo incorporaba imágenes de ciudadanos de a pie que aseguraban haberse sentido orgullosos de su país toda la vida, y que se intercalaban con las declaraciones de Michelle diciendo que era la primera vez que se sentía orgullosa de que un negro y no un blanco pudiera acceder a la presidencia de EEUU. Los republicanos interpretaron el comentario diciendo que la mujer de Obama estaba poniendo a EEUU como un país con un largo pasado racista, que su marido (un negro) viene a corregir. Los asesores de Obama intentaron zafar afirmado que "lo que quiso decir (Michelle) es que se siente muy orgullosa en este momento porque, por primera vez, miles de estadounidenses que no habían participado en la política se están sumando en cifras récord en la construcción de un movimiento de base a favor del cambio". Usinas conservadoras como la revista National Review, comenzaron a describir a Michelle como la otra "la mitad negra de Obama" y la versión femenina del reverendo Jeremiah Wright. La oficina de campaña del candidato demócrata salió el jueves en defensa de su esposa, Michelle, al que señala como víctima de los ataques de distintos grupos conservadores del país que la han convertido en su blanco predilecto. The New York Times afirma que sitios como TheObamaFile.com e influyentes comentaristas radiofónicos como Rush Limbaugh han propagado el rumor de que existe una cinta de Michelle utilizando la palabra "whitey", un término despectivo para referirse al hombre y la sociedad blanca. Obama prometiendo "lealtad" a Israel en la AIPAC, la máxima organización judía de EEUU. Un página web demócrta (www.fightthesmears.com) publicada el jueves, anuncia que se dedicará a desmontar los rumores falsos que circulan en la red sobre los Obama. Así como los demócratas tienen a Michael Moore y a la mayoría de Hollywood y de las cadenas mediáticas sionistas norteamericanas a favor de sus candidatos presidenciales, los candidatos republicanos (que solo cuentan con la minoría de Hollywood y de los consorcios mediáticos) cuentan con la inestimable colaboración del grupo ultraconservador Citizens United. Este grupo es liderado por David Bossie y apadrinado por el ultraconservador ex presidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, que en la década de los noventa se había convertido en el azote del gobierno liberal-sionista de Clinton. Durante la campaña para elegir a los candidatos demócrtas en las presidenciales de noviembre, el grupo ultraconservador y racista Citizens eligió como blancos de sus ataques a Hillary Clinton y a
Hussein Barack Obama, a quienes calificó como "antiamericanos" y defensores de negros e inmigrantes. Pero los laureles (en contra) se los llevó -según los demócratas- Obama por su doble condición de "negro" y "musulmán". El grupo ultracoservador Citizens United anunció haber recaudado un millón de dólares para iniciar la filmación de una pelicula mostrando "lo peor" de Obama. "La gente no sabe nada de Obama excepto que habla bien", asegura David Bossie, el jefe de los Citizens. "Nosotros les vamos a abrir los ojos. Después de esta película no lo podrán votar ni los de su familia", desafía. Ciizens United reúne todos los componentes de la derecha ultraconservadora cristiana (racista, guerrerista y anti-inmigrante) socia del lobby judío sionista de derecha, se define como una organización que trabaja "con el fin de devolver el control del gobierno al pueblo y reafirmar los tradicionales valores estadounidenses". El grupo representa cabalmente a los halcones asociados al lobby sionista ultraconservador que controla la Casa Blanca administrada por Bush, y sus integrantes sienten un particular odio y desprecio por los "liberales" del lobby sionista demócrata que ha manejado la Casa Blanca con Clinton, a los que considera como "entreguistas" de los valores tradicionales del Estado nacional norteamericano. El líder intelectual del grupo es el ex presidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich, el más ferviente y autorizado vocero del ala ultraconservadora republicana y de la derecha cristiana. Los republicanos "moderados" señalan a el "efecto propagandístico" de Citizen solo se multiplica entre los sectores de la derecha cristiana y del sionismo conservador, sin conseguir incidencia en la masa mayoritaria de votantes estadounidenses. Luego del triunfo de Obama en la interna demócrata Citizen oficialmente todavía no habló, pero se cree que sus líderes están detrás de la ofensiva contra la mujer de Obama. No se sabe que efecto pueda tener la campaña racista y "antislámica" contra Obama, no obstante que algunos analistas conservadores la consideran de importancia clave para volcar a la masa de votantes blancos a favor de McCain.
Fernando Lugo y los desafíos de Paraguay
Cécile Lamarque
Rebelión
Antiguo obispo de uno de los Departamentos más pobres del país, San Pedro, y hasta hace dos años
desconocido en la arena política paraguaya, Fernando Lugo, elegido presidente de la república el
pasado 20 de abril |1|, tomará posesión del cargo el 15 de agosto próximo.
Para los trabajadores pobres y para los campesinos, Lugo representa la esperanza de superar la
extrema pobreza provocada por la política del partido Colorado, basada en el clientelismo, la
corrupción y la explotación, un partido que además malvendió de manera vergonzosa la soberanía del
país.
En marzo de 2006, Lugo participó en el movimiento que se opuso a la maniobra de Nicanor Duarte Frutos de
modificar la Constitución para tener la oportunidad de un segundo mandato |2|. En diciembre de 2006
abandonó su sotana para vestir el ropaje de político estimulado por una petición con cien mil firmas para que
se comprometiese en política. Durante 14 meses recorrió el país para recoger los reclamos de la población, en
su ñemongeta guasu (en guaraní: gran diálogo con el pueblo).
Lugo, que no pertenecía por entonces a ningún partido político, consiguió reunir en torno a su candidatura un
amplio espectro de partidos y movimientos sociales, agrupados en la Alianza Patriótica para el Cambio
(APC), una coalición de la oposición que va del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) a grupos de
izquierda más radicalizados |3|.
Apodado ―el obispo de los pobres‖, Fernando Lugo cuenta con un fuerte apoyo, en particular en las
poblaciones rurales y en los barrios populares de las ciudades. Ciertos sectores sociales y políticos paraguayos
le critican que no tenga una posición ideológica clara, mientras que otros, sin dudar de su buena fe, lo
consideran un personaje moderado cuyas tentativas de reformas serán minadas por el Partido Liberal, que
participa en el poder, y por el Partido Colorado, que está en la oposición |4|.
Si bien Fernando Lugo no se presentó como un candidato ―revolucionario‖, su acceso a la presidencia de
Paraguay no deja de ser revolucionario dada la historia política de país: pone fin a la hegemonía del Partido
Colorado, que gobernó sin interrupción durante 61 años, 35 de los cuales bajo la dictadura del general Alfredo
Stroessner, desde 1954 hasta 1989.
―Hemos culminado una etapa y hoy comenzamos la otra, la del compromiso de transformar el Paraguay |5|‖,
se congratuló Lugo ante el anuncio de los resultados electorales. ¡Pero la etapa que comienza no será fácil!
Paraguay es un país pequeño (cuenta con 6 millones de habitantes, a los que hay que sumar cerca de 3
millones de exiliados económicos), empobrecido por la política del Partido Colorado (más del 50 % de la
población vive bajo el umbral de pobreza, 35 % en la miseria absoluta). Las finanzas del Estado están
erosionadas por el peso de una deuda en gran parte ilegítima y odiosa |6|. El país tiene poco peso en el
Mercosur |7| pero, sin embargo, es un país importante en el nivel estratégico.
El Paraguay, sometido al apetito de los imperialismos
La triple frontera, una zona donde coinciden los límites de Brasil, Paraguay y Argentina, es una región
caracterizada por una gran biodiversidad. Paraguay posee la reserva hidroeléctrica más importante del Cono
Sur y alberga el acuífero guaraní, una de las reservas de agua dulce más importantes del planeta. Sus riquezas
naturales hacen de Paraguay un punto estratégico en la geografía latinoamericana, lo que estimula el apetito
varios países, en particular de Estados Unidos, Brasil y Argentina. Estados Unidos trató durante mucho
tiempo de instalar una base militar en Paraguay. Washington presionó al gobierno para que aceptara su
presencia militar en el país, con el pretexto de la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo.
Por su lado, los dos gigantes latinoamericanos, Brasil y Argentina, han perpetuado con Paraguay unas
relaciones de poder profundamente injustas desde la guerra de la Triple Alianza |8|, en particular por medio de
su instalación masiva en este país con fines de explotación agrícola, y a través de los tratados bilaterales
relativos a la explotación de las centrales hidroeléctricas de Itaipú y Yacireta. Los empresarios brasileños
compraron grandes extensiones de tierras paraguayas para establecer, al principio, grandes explotaciones
basadas en la agricultura intensiva, y últimamente de soja transgénica |9|, con la bendición de los grandes
latifundistas nacionales y de los sucesivos gobiernos, causando desastres económicos, sociales y ambientales.
En tal panorama, incluso si contiene numerosas debilidades |10| , entre otras cosas no cuestionar radicalmente
los privilegios de los grupos de poder, el programa anunciado por Lugo durante la campaña es un programa
reformista que se articula en torno a desafíos y apuestas importantes, tanto en el plano del desarrollo nacional
como en términos de integración y de cambio de las relaciones de fuerza regionales.
Los grandes ejes del programa de la APC
Los grandes temas son: una ―revolución agraria integral‖; la lucha contra la corrupción, la impunidad y la
reforma del Estado para intentar expulsar de éste una burocracia oligárquica y mafiosa con más de 60 años de
antigüedad; una ―planificación estratégica del desarrollo nacional‖; un ―programa de reactivación económica
estrechamente vinculado a la equidad social‖; la recuperación de la soberanía, especialmente la energética
mediante la revisión de los tratados de Yacyreta e Itaipú; una integración regional solidaria, en particular
intentando superar la relación asimétrica de Paraguay con los otros miembros del Mercosur, entre otros temas.
Un programa como éste no es del agrado del Partido Colorado y de la gran burguesía, a la que pertenecen los
latifundistas. Ese grupo hará todo lo que puedan para impedir que Lugo lleve adelante las reformas, así como
los capitalistas brasileños y argentinos, que podrirían ver, ellos también amenazados sus privilegios, y el
gobierno estadounidense, que ha perdido un aliado dócil a la cabeza del Estado.
Las consecuencias geopolíticas de este cambio, si Lugo mantiene el ―rumbo‖ de su campaña electoral, pueden
ser considerables.
Soberanía territorial y reforma agraria integral
La ―reforma agraria integral‖ propuesta por la APC es una tarea prioritaria para poner fin a la escandalosa
concentración de la propiedad de la tierra. Lugo, en una entrevista, anunció que ―la reforma agraria integral
debe partir de un catastro nacional de las propiedades, que actualmente no existe. La propiedad de la tierra
es tan desigual hoy en Paraguay que un 80 % de la tierra está en manos del 2 % de la población. A
continuación, será necesario formar equipos interdisciplinarios y de distintas representaciones implicadas en
esta problemática: los sin-tierra, los grandes latifundistas y el Estado deberán discutir en conjunto una
reforma agraria integral |11|‖.
El debate corre el riesgo de ser complicado con los todopoderosos latifundistas, nacionales y extranjeros, que
harán seguramente lo posible para bloquearlo. Esta reforma agraria, que quiere ser ―integral‖, consiste en
redistribuir la tierra y colocar a los campesinos y a los indígenas en el corazón de un nuevo modelo de
producción agrícola.
Soberanía energética: Revisar los tratados de Itaipú y de Yacyretá…
Uno de los grandes temas de la campaña de Lugo y su coalición es la recuperación de la soberanía
hidroeléctrica, que pasa por una profunda renegociación de los contratos de Itaipú y Yacyretá, firmados por la
dictadura paraguaya de Stroessner en 1973 con Brasil (dictadura de Garrastazu Médici) y con la Argentina de
Perón, para mayor beneficio de estos dos países.
El tratado de Itaipú establece, en particular, que la energía producida se repartirá la mitad para cada país,
teniendo cada uno de éstos el derecho a adquirir la energía que no sea utilizada por el socio para su propio
consumo interno. Con este tratado, Paraguay, que consume alrededor un 5% de la energía producida en Itaipú,
se encuentra ya de entrada perjudicado; se ve obligado a vender el excedente, de alrededor de un 95 %, a
Brasil, al precio de coste, o poco más o menos. Las condiciones fijadas en el tratado son profundamente
injustas, o incluso totalmente ilegales: los precios fijados por el tratado de Itaipú se sitúan muy por debajo de
los precios de mercado, las normas de comercialización son leoninas, los tipos de interés relativos a la
amortización de la inversión son usurarios y profundizan la deuda externa. El acuerdo de explotación de
Yacyretá con Argentina contiene cláusulas muy similares, igualmente perjudiciales para los intereses de
Paraguay y para la soberanía sobre sus recursos naturales.
Paraguay recibe 300 millones de dólares al año por la explotación de Itaipú, mientras que Ricardo Canese,
ingeniero especialista en energía, considera que por los 53.000 gigawatios que Paraguay vende a Brasil,
debería recibir no menos de 4.000 millones de dólares, según los precios del mercado |12|.
Lugo reclama un tratamiento justo por parte de sus vecinos: instaurar precios equitativos, reducir los tipos de
interés usurarios; definir nuevas normas de colaboración bilateral, más justas y más soberanas; disponer
libremente del excedente; eliminar las deudas ilegítimas resultantes de estos tratados.
El Gobierno brasileño hizo saber que estaba dispuesto a discutir con el nuevo presidente electo el precio de la
energía de Itaipú, pero que excluía toda revisión del tratado binacional antes del vencimiento del contrato |13|,
lo que significa no tratar el tema antes del 2023. Por ahora, la posición argentina no parece más conciliadora
que la de Brasil.
La acción judicial
Lugo mantiene una postura firme sobre este tema y no excluye llevar el asunto ante los tribunales
internacionales: ―Si no se dan las condiciones se va a intentar agotar todos los caminos legales jurídicamente
aceptables entre los países que hemos firmado estos acuerdos y si no se consigue se podría ir a otros
estamentos judiciales a nivel internacional |14|‖.
―Para eso está la comunidad internacional. Que la comunidad internacional se entera, que sepa —para eso
están los medios de comunicación, ¿verdad?— qué hicieron y qué están haciendo el Brasil y la Argentina con
el Paraguay. Nunca hemos denunciado en ningún foro internacional eso, y lo tenemos que hacer con la frente
alta. Recuperar la dignidad es también recuperar la soberanía. La dignidad como nación. Cualquiera va a
saber que Brasil está cometiendo una vez más una injusticia con el Paraguay, y eso a nivel
internacional |15|‖.
Para Paraguay, los recursos que tiene legítimamente derecho de obtener de la revisión de los acuerdos con
Brasil y Argentina constituyen una palanca económica potente para garantizar una política de desarrollo e
inversión en programas sociales que permitan superar la extrema miseria del país. Esperemos que Paraguay
no claudicará ante estos vecinos.
... para financiar el desarrollo
Fernando Lugo prevé destinar los recursos resultantes de la venta de la energía a precio del mercado y los
obtenidos de la renegociación de los contratos bilaterales al programa de desarrollo social y reactivación de la
actividad económica.
El programa de Gobierno de la Alianza, expuesto durante la campaña electoral, prevé, en particular, la
creación de empleo para 100.000 familias sin empleo; jubilaciones para 200.000 ancianos; la construcción de
40.000 casas al año y la creación de 50.000 nuevos puestos de trabajo al año; la construcción de carreteras y
de infraestructura pública; la contratación de 30.000 profesores para mejorar la educación y la construcción de
20.000 nuevas aulas al año; el apoyo a la investigación y a la cultura, de las inversiones en salud y la
gratuidad de las prestaciones médicas; la tarifa social del agua para 800.000 familias, la de la electricidad para
400.000 familias y la gratuidad de este servicio para otras 400.000; la financiación de la reforma agraria, etc.
¡Por una auditoría de la deuda paraguaya!
Para hacer realidad este ambicioso programa de justicia social —según cifras proporcionadas por Emir
Sader |16|, será necesario dedicar 1.700 millones de dólares anuales—, el gobierno deberá aumentar los
ingresos del Estado. Si esto pasa, como es evidente, por la lucha contra la corrupción y las prácticas mafiosas
presentes en todos los niveles del aparato del Estado y de la sociedad, y por la recuperación de la soberanía
energética, será necesario estar atentos y vigilantes con la política de endeudamiento con las instituciones
financieras, especialmente con el FMI y el BM.
Bajo la presidencia de Nicanor Duarte y sus ministros de Hacienda Dionisio Borda y César Barreto (que
sucedió a Borda. NdT), el Partido Colorado, partidario de la ideología neoliberal, intentó aplicar con aún más
fuerza las recetas del «consenso de Washington», evidentemente contrarias a los intereses de los más
desprotegidos |17| .
En materia de endeudamiento, más allá de la renegociación de las deudas ilegítimas de Itaipú y Yacyretá,
Fernando Lugo debería encarar una auditoría de la deuda, que podría comprender toda la gestión del Partido
Colorado (1954-2007), y que permitiría repudiar las deudas odiosas y las ilegítimas |18|. A causa del largo
período de dictadura y de corrupción institucionalizada, los resultados serían sin duda alguna sorprendentes y
darían un buen balón de aire fresco a las finanzas públicas! El caso ―Gramont‖ |19| seguramente no es un caso
aislado!
Las posibilidades de cambio no se podrán lograr sin contar con la solidaridad y el apoyo de ciertos gobiernos
de la región.
¿Y si Lugo cambiara las relaciones de fuerza regionales?
La formación de un Gobierno de ―centro-izquierda‖ en Paraguay va a permitir el refuerzo de la orientación
integracionista latinoamericana, relativamente independiente de la influencia de Washington. Incluso si es
cierto que el ejecutivo colorado de Nicanor Duarte participó en el proceso de integración progresista en curso
sobre el continente (Banco del Sur, etc.), con la llegada de Lugo, se puede suponer que la presencia paraguaya
será más firme y más sólida.
El apoyo y la aproximación de los países que luchan también por la reconquista de su soberanía (en particular,
Bolivia, Ecuador, Venezuela) serán decisivos para hacer frente a Brasil y a Argentina. Brasil, que, según su
ministro Ceslo Amorim, ―no quiere ser visto como un país imperialista‖ |20|, deberá seguramente revisar su
libreto. Con respecto a Paraguay, a otros países y a un Banco del Sur, que quiere modelar a imagen de las
instituciones de Bretton Woods. Las relaciones de fuerza regionales se verían modificadas.
Todo depende del pueblo paraguayo
A causa del panorama político que se presenta, es difícil decir si Fernando Lugo podrá establecer las medidas
que los paraguayos necesitan imperiosamente. ¿Cuál será su margen de maniobra cuando esté a la cabeza del
país? ¿Sabrá combinar los intereses tan diferentes y las contradicciones profundas de las fuerzas en su
Alianza, que van de la derecha conservadora a la izquierda?
Y sobre todo, más allá de las actuales relaciones de fuerza en el gobierno, ¿sabrá responder a las expectativas
de los más explotados, que fueron los que lo llevaron a la presidencia?
En cualquier caso, ante los intereses de clase opuestos, el desarrollo y la tendencia del nuevo Gobierno
dependerán en gran parte de los movimientos populares y campesinos, de su vigilancia, de su capacidad de
propuestas, luchas y movilización. Está en Lugo la respuesta: ―¿Es posible entonces modificar el sistema
económico, conforme al socialismo del siglo XXI? El conflicto entre los que tienen que acumular y aquellos
que no tienen y son un producto empobrecido no se resolverá con teleconferencias de los ladrones globales,
sino sólo por la conquista del pueblo‖ |21|. Estamos entonces ante perspectivas interesantes para los próximos
meses.
Notas al pie de la páginas:
|1| Obtuvo el 40,82 % de los votos frente al 30,72 % de la candidata del Partido Colorado Blanca Oviedo y al
21,98 % del ex general Lino Oviedo. En el Paraguay, la elección presidencial se decide por mayoría simple en
una única vuelta.
|2| Los presidentes son elegidos para un único mandato.
|3| La APC agrupa a 10 partidos y a una veintena de movimientos, entre ellos el Partido Liberal Radical
Auténtico, la Democracia Cristiana, el Encuentro Nacional, el País Solidario, el Partido Movimiento al
Socialismo (P-MAS), el Movimiento Tekojojá, el Bloque Nacional y Popular, el Movimiento Resistencia
Ciudadana Nacional y el Movimiento Fuerza Republicana.
|4| De los 45 senadores y los 80 diputados, el Partido Colorado obtuvo 15 senadores y 30 diputados, el PLRD,
14 senadores y 29 diputados; el Partido UNACE, del ex general Oviedo, 9 senadores y 15 diputados; Patria
Querida, cuyo líder es Pedro Fadul, 4 senadores y 4 diputados; el Movimiento Tekojojá, aparentemente el más
próximo a Lugo, 1 senador y 1 diputado, lo mismo que el Partido Democrático Progresista; el Partido Popular
Socialista, 1 senador y el Partido Movimiento al Socialismo (P-MAS), no logró ningún representante.
|5| http://www.telesurtv.net/noticias/secciones/nota/index.php?ckl=26960-NN
|6| Según el Banco Central del Paraguay, la deuda pública externa se elevaba, el 1 de marzo de 2007, a
2.186,8 millones de dólares. Esta cifra subestima en mucho el endeudamiento real del país. El discurso del
gobierno anterior recordaba el lema propagandístico ―todo va bien en el mejor de los mundos‖. Fue así como
el 6 de abril de 2008, con ocasión de la asamblea anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el
ministro de Finanzas, Cesar Barreto, se congratulaba de la buena salud económica del Paraguay. Para él, la
deuda externa habría tenido un fuerte descenso, pasando del 44 % del PIB en 2002, al 18 % en 2007.
(http://www.ultimahora.com/notas/106596-Paraguay-est%C3%A1-blindado-frente-a-crisis-financiera-
internacional-). Ahora bien, estas cifras son totalmente erróneas dado que no contabilizan la deuda del
Paraguay contraída por las empresas binacionales Itaipú y Yaciretá que se sería por lo menos de 14.000
millones de dólares.
|7| Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, así como los países asociados Chile, Bolivia y Venezuela
|8| Desde el final de la colonización española, en 1811, el Estado paraguayo practicaba el proteccionismo para
defender su industria nacional y su mercado interior. Era entonces el Estado más progresista de la región. Por
esta razón fue atacado en 1865 por la coalición de sus vecinos Brasil, Argentina y Uruguay, apoyados y
estimulados por Gran Bretaña, la potencia capitalista dominante de la época, que temía la difusión del
ejemplo paraguayo. La sangrienta guerra, que duró cinco años, dejó con vida apenas a una sexta parte de su
población. Además, al Paraguay se le impusieron sanciones económicas: tuvo que ceder parte de su territorio
a los otros países y pagar deudas de guerra. Por ello se encontró endeudado por primera vez en su historia, ya
que desde 1811 a 1870 se había desarrollado sin recurrir al endeudamiento externo.
|9| Entre 1995 y 2006, la superficie dedicada al cultivo de la soja se ha más que triplicado, pasando de
735.000 hectáreas a 2,4 millones de hectáreas. Esto representa casi el 25 % de la superficie cultivable.
|10| Lugo, que optó por una alianza política amplia para llegar a la presidencia, tiene que manejarse con
intereses muy diversos. El programa de la APC refleja la diversidad de los grupos que la componen. Se tuvo
que llegar a compromisos para alcanzar un consenso que satisficiera las reivindicaciones de todos.
|11| http://vulcano.wordpress.com/2008/04/21/fernando-lugo-la-ilusion-paraguaya/
|12| Raúl Zibechi, Paraguay: el fin de la dictadura colorada, http://www.rebelion.org/noticia.php?id=66555
|13| http://www.argenpress.info/nota.asp?num=054804&parte=0
|14| http://vulcano.wordpress.com/2008/04/21/fernado-lugo-la-ilusion-paraguaya
|15| http://www.noticiasdelsur.com/nota.php?nota=3360
|16| Emir Sader, El nuevo Paraguay, http://www.rebelion.org/noticia.php?id=66086
|17| Las medidas propuestas por el FMI preveían un aumento del IVA del 10 % al 13 %, combinado con un
aumento de la base imponible; el congelamiento de los salarios de los empleados públicos y del salario
mínimo durante un período de al menos dos años; el aumento del aporte de los jubilados al erario público
conjuntamente con la reducción de los pagos a estos mismos jubilados de un 6 %; la reducción de la deuda
pública mediante la utilización de los recursos provenientes de la venta de las empresas públicas entre otras
medidas.
|18| Desgraciadamente, parece que ha elegido como futuro ministro a Borda, ex ministro de finanzas de
Nicanor Duarte de 2003 a 2005, y a Federico Franco del PLRA como vicepresidente.
|19| Por el decreto 6295, dictado el 26 de agosto de 2005, el Estado paraguayo considera que la deuda
contraída de manera fraudulenta por el cónsul Gustavo Gramont con bancos privados durante la dictadura de
Alfredo Stroessner es ilícita y que el Estado no tiene ninguna obligación de pagarla.
|20| Raúl Zibechi, El fin de la dictadura colorada,
http://www.elclarin.cl/index.php?option=com_content&task=view&id=11311&Itemid=2771
|21| Discurso pronunciado durante el seminario sobre el Socialismo del siglo XXI, el 25 de agosto de 2007, en
Ecuador. http://www.noticiasdelsur.com/nota.php?nota=2503
infos article
URL: http://www.cadtm.org
Traducción hecha por Guillermo Parodi, Griselda Pinero y Raul Quiroz.
La juventud y la crisis económica
Hedelberto López Blanch
Rebelión
La estertores de una anunciada recesión mundial que toca a las puertas de Estados Unidos y que por
refracción alcanzará a la mayoría del actual mundo globalizado, amenaza con convertirse en un grave
problema para los jóvenes que no encontrarán formas para obtener un empleo digno.
La actual crisis inmobiliaria en Estados Unidos con derrumbes no solo de su sistema financiero sino en otros
países capitalistas desarrollados, el constante incremento en los precios del petróleo y de los alimentos, y la
caída del valor del dólar (moneda de intercambio internacional), unido a las políticas neoliberales de
privatización indican un presente y futuro cercano difícil para las nuevas generaciones.
Solo algunos países cuyos gobiernos se han preocupado en llevar adelante acciones a favor de los programas
sociales y se han apartado de las medidas neoliberales de apertura indiscriminada al capital extranjero,
impuestas en los últimos años por las poderosas naciones desarrolladas mediante el Fondo Monetario
Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), podrán solventar esta crisis.
Pandillas juveniles han proliferado en el orbe en tiempos recientes debido a la desatención de los gobiernos
que no han hallado formas para contrarrestar los graves problemas sociales que padecen.
El principal gestor de las medidas neoliberales, el Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió
recientemente que las pérdidas potenciales de la crisis crediticia mundial alcanzarán 945.000 millones e,
incluso, podrían ser mucho más altas.
El organismo aseguró que hubo una "falla colectiva" a la hora de dimensionar el grado de reducción de deuda
de las diversas instituciones financieras, y añadió que podrían ser necesarias medidas y una intervención más
dura por parte de los gobiernos.
El informe global del FMI advirtió que "pese a las intervenciones sin precedentes de los principales bancos
centrales, los mercados financieros permanecen bajo una tensión considerable, agudizada ahora por el
empeoramiento del entorno macroeconómico, la capitalización deficiente de las instituciones y una reducción
de deuda generalizada".
Ni corto ni perezoso cuando muchos gobiernos lo señalan como causante directo de los problemas
económicos actuales, el FMI puntualizó que los efectos de la crisis crediticia serán probablemente "más
amplios, más profundos y más prolongados" que en crisis anteriores, debido al "nivel de inversiones en
valores y al endeudamiento en el sistema financiero".
Esta situación se presenta cuando un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) afirma que
en América Latina y El Caribe, 64 000 000 de jóvenes no trabajan ni estudian, o laboran en condiciones muy
precarias. La OIT, dependiente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) destaca en el estudio
denominado Juventud y Trabajo Decente en América Latina y el Caribe, que 46% de los desempleados en la
región son jóvenes. Diez millones se encuentran en el desempleo abierto, 22 000 000 más no estudian ni
trabajan y 32 000 000 laboran en condiciones precarias, es decir, con bajos salarios y carentes de protección
social.
Las mujeres participan menos en el mercado laboral; 16% se dedican al trabajo doméstico y 30% se ocupan
en el hogar. En América Latina, según la OIT, ―los jóvenes sufren exclusiones por raza, procedencia
geográfica, origen étnico, apariencia, edad y hasta por razones políticas‖, lo que coloca a los indígenas y a las
mujeres en las peores circunstancias. La maternidad adolescente es una de las restricciones más fuertes para
acceder a empleos productivos. Por lo general, son mujeres con poca escolaridad, pobres y solteras que no
trabajan y cuando lo hacen es en condiciones muy precarias. El ejemplo más contundente es que unos 16,7
millones de jóvenes que han logrado encontrar trabajo en la región, viven por debajo de la línea de pobreza, o
sea con menos de dos dólares diarios.
Debe tenerse en cuenta que en la mayoría de estos países no hay programas sociales que les permitan tener
acceso a la salud pública y educación gratuitas, mientras que los precios de las viviendas, la electricidad y
otros servicios, son incosteables.
Cuba a lo largo de 50 años ha sido un ejemplo a seguir por los innumerables programas sociales que ha puesto
al servicio de la juventud y que han permitido la formación y fuentes de empleo seguro y estable para las
nuevas generaciones. Otras naciones del área como Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Argentina y
Brasil, por mencionar algunos, se encaminan hacia esos fines.
Pese a la abocada crisis mundial, las políticas gubernamentales de beneficio social deberán prevalecer, pese a
la oposición del FMI y el BM que promueven mayores limitaciones económicas para la población.
México: los noticieros matutinos y la insolencia de los mediocres
Beligerancia de Mansedumbres
Fernando Buen Abad Domínguez
Rebelión/Fundación Federico Engels
Sangre, impudicia y publicidad.
A fuerza de ostentar impunemente su mediocridad escandalosa, algunos sedicentes ―periodistas‖ cobran (cara)
su mansedumbre cómplice para hacer rentable el secuestro de las oligarquías mass media contra los espacios
para la comunicación pública. Usan el espacio público, que no les pertenece, salvaguardados por concesiones,
o permisos, legalitos e ilegítimos a todas luces. Cantan ―a grito pelado‖ la desfachatez de su insolencia
disfrazada de ―noticia‖ para regodearse en el chiquero de un ―periodismo‖ mercenario que hace pasar por
señoritos de la ―objetividad‖ a unos cuantos vocingleros genuflexos especialistas en degenerar la realidad y
criminalizar las luchas sociales. Los hemos visto hasta el hartazgo.
Ese show de los noticieros matutinos quiere asustarnos y desesperanzados. Nos quieren infestados de
angustia, infelicidad, miedo… quieren que anide en nuestra inteligencia un dios degenerado que vende su
pontificado de calumnias como ―noticias‖ para estar ―actualizado‖. Dicen ser ―periodistas‖, ―comunicólogos‖,
esos lebreles entrenados para recoger la presa ―informativa‖, entrenados para traducirlo todo al lenguaje de
sus amos, entrenados incluso en universidades y claustros de alta alienación, para ahogar la verdad en saliva
mercenaria. Exhiben, con cinismo triunfal, la médula ideológica de un muerto que deambula en las campiñas
de la historia: el capitalismo mismo. Eso si, un muerto farandulero adornado con escándalos, corrupción y
oscuridad luminosa, como las pantallas de la tele. Los muchachos alquilados por la oligarquía mass media
para leer sus noticias son dueños de una mansedumbre dócil, servil, funcional, útil a la causa que consiste en
fabricar ―información exclusiva de última hora‖ para engañar con siempre más de lo mismo. Sangre, sangre y
más sangre.
El ―mercado‖ de las noticias efectistas compra y vende muchachos con doble moral: bravucones y mansos.
Talentos de la información ―espectacular‖ que venden payasadas y degeneración galopante leídas como
noticia. Se piensan ―simpáticos‖ y alguien les hace creer que son muy listos porque cobran mucho por sus
servicios que contribuyen a criminalizar la lucha obrera, campesina, de movimientos sociales… minuto a
minuto y ―desde el lugar de los hechos‖. No importa qué bajeza haya que usar: chistes vulgares, testigos
falsos, jueces corruptos, políticos prostituidos, clérigos en desgracia… Salen en la tele cada mañana esos
periodistas de la mansedumbre que siempre están bien dispuestos a bajarse los pantalones para cobrar fama y
dinero. Sus fines (mercenarios) justifican a sus noticieros.
¿El “fin” (mercenario) justifica sus “noticieros” (mediocres)?
¿Alguien en su sano juicio puede aceptar que ese circo sanguinolento y canalla es oficio de periodistas
verdaderos? Los medios burgueses venden como ―noticia‖ su evangelio de violencia y desgracia cotidiana...
venden huracanes, terremotos, sequías, balaceras, traiciones, corrupción y terrorismo mediático depurado
como producción informativa de espejismos ante las miradas atónitas de la población, los niños, los
adolescentes, los adultos, hombres y mujeres y lo convirtieron en negocio: lindos muchachos, científicos de la
―información‖, ―profesionales‖ de la noticia, ―salvaguardas‖ de los hechos… sepultureros de la verdad.
Son, en México, esos ―periodistas‖ buitres mañaneros que saborean y cobran (desde la posición más cómoda)
su complicidad con los fraudes electorales, por ejemplo... que babean tras las chequeras de las ―celebridades‖.
Medran esos mismos ―periodistas‖ vividores en Argentina, Chile, Perú, Bolivia, Venezuela… incluso,
algunos, se hacen ―catedráticos‖ o ―presidentes‖. Nos sirven como desayuno amargo sus jugos de sangre
―informativa‖ para mantener la ―atención‖ de ese público al que imaginan (con odio de clase) estúpido,
holgazán, postergado para siempre, idiota crónico o idólatra consuetudinario, derrotado para siempre
mientras, claro, compre y compre diarios, noticieros, informativos con ―candente actualidad‖. Esos lectores de
noticias mansos son la cara viva del mensaje neofascista e imperialista. Se llenan la boca, una y otra vez, con
todo tipo de cinismos típicos del discurso burgués para resaltar el valor supremo de la ―libertad de mercado
noticioso‖, inventan y acosan, mienten y agreden, tergiversan y traicionan cualquier cosa que les deje dinero
con la excusa retrograda de que la impunidad empresarial privada es intocable. Esos bravucones mansos
lectores de sus noticias son la servidumbre visible de una industria de la alienación basada en producir rating
con noticias farandulizadas y escandalosas. Guerra simbólica para desfalcar la verdad y hacer invisible la
miseria y la barbarie que el capitalismo engendra a fuerza de explotar a los trabajadores. No nos cansaremos
de aclarárselos.
Las ―noticias‖ burguesas ―cantadas‖ a gritos modulados por cierta estética de la estupidez mediática, en voz
de los lectores de noticias mansos, contribuyen a la acumulación del capital y al aseguramiento de capital
ideológico que anhela inocular en la clase trabajadora su odio, su pánico y sus estrategias geniales para
reprimir voluntades rebeldes con un circo decadente de mentiras ―informativas‖. Y cuentan con
―patrocinadores‖ que no son otra cosa más que barbarie cultural desatada en la ruta de la destrucción de toda
organización revolucionaria de las fuerzas productivas, de las fuerza creativas des-alienadas y de las fuerzas
comunicacionales apasionadas por la verdad y la emancipación de clase… las fuerzas nuestras.
No nos quedaremos mirando (a-críticamente) su “tele”
Sólo nos falta organizarnos y entrar en acción contraofensiva porque ya nos damos cuenta de toda esta
payasada obscena y la combatimos como podemos sin mansedumbre a pesar de la desigualdad de fuerzas y
armas en esta hora. Que ellos tengan tecnología y componendas para usufructuar lo que es nuestro y
enderezarlo contra los pueblos es una de las tantas calamidades del absurdo capitalista que tiene sus días
contados con el reloj de una revolución social que también es comunicacional en todo el continente. El
escenario de Guerra Mediática que se expande mundialmente nos llama a luchar organizados y firmes
ayudados también por una Corriente Internacional de la Comunicación con los ojos y los programas tácticos y
estratégicos de lucha bien puestos en el socialismo científico, nuestro, revolucionario y permanente. Está a la
vista.
Sobre el nombramiento de Eduardo Gordon al frente de Carabineros
El apoyo del Partido Socialista a la casta de oficiales de derecha
Gaspar Montes
Rebelión
Nuevamente los socialistas chilenos nos sorprenden y nombran a cargo de la dirección de carabineros (policía
uniformada chilena) a Eduardo Gordon Varcarcel, sobrino de Humberto Gordon Rubio, asesino, jefe de la
Central Nacional de Informaciones (CNI) en sus más criminales años (1980-1986) y miembro de la junta
militar de la dictadura. Bajo el mando de Humberto Gordon en la CNI, se torturó y asesinó a miles de
chilenos, los procesos más connotados de esos años son: el asesinato del líder sindical Tucapel Jiménez y de
cuatro opositores al régimen militar tras el atentado a Pinochet, en 1986, entre los cuales se encontraba el
periodista José Carrasco.
Eduardo Gordon Varcarcel es hijo de Eduardo Gordon Cañas quien trabajó para la DINA (dirección de
inteligencia nacional) entre los años 73 y 75, organismo represor que torturó, asesinó y desapareció militantes
de izquierda. Posteriormente ejerció importantes cargos en la dirección de carabineros llegando a ser
subdirector de la institución durante la dictadura de Pinochet.
Este comportamiento del gobierno chileno encabezado por el Partido Socialista, de nombrar comandantes en
jefe pinochetistas y vinculados a violaciones de DDHH, no ha sido aislado, hay que revisar el nombramiento
de otros comandantes en el pasado reciente:
Juan Emilio Cheyre, nombrado por Ricardo Lagos el 10 de Marzo de 2002. Cheyre es yerno de Carlos Forestier Haensgen, acusado de fusilamiento y desapariciones de decenas de personas, cuando era responsable de la VI división de ejercito. Juan Emilio Cheyre también fue acusado de participar en la caravana de la muerte en la Serena, casos de desaparición de restos de detenidos desaparecidos, la muerte de dos menores en Coquimbo, entre otras acusaciones.
El actual comandante en jefe del ejercito Oscar Izurieta Ferrer, nombrado por Michelle Bachelet el 10 de Marzo de 2006, ha defendido a militares involucrados en violaciones a los derechos humanos, entre ellos a 4 generales implicados en la muerte de 22 campesinos de Paine, además
Izurieta es Primo de Ricardo Izurieta Caffarena, comandante en Jefe del Ejercito que suplió a Augusto Pinochet a su salida del ejército, es decir continuador de la obra del tirano.
El Comandante en jefe de la armada Miguel Angel Vergara, nombrado por Ricardo Lagos el 18 de Junio de 2001, denunciado por el prisionero Oscar Carvajal en la comisión Valech, como responsable de ordenar torturas cuando fue jefe del departamento de electrónica del destructor “Cochrane”.
Comandante en jefe de la armada Rodolfo Codina Díaz, nombrado por Ricardo Lagos el 18 de Junio de 2005 (en ejercicio en la actualidad), acusado de conspirar abiertamente, para derrocar el gobierno de Salvador Allende.
General de carabineros José Bernales Ramírez, nombrado por Ricardo Lagos el 27 de Noviembre de 2005, durante la dictadura estuvo en Fuerzas Especiales, área militarizada de carabineros destinada a reprimir las protestas populares, posteriormente trabajó en inteligencia policial, que también realizaba torturas a los detenidos, en 1999 asume como jefe de la zona IX región de la Araucanía, donde se caracterizó en la represión a todas las movilizaciones mapuches y dentro de las cuales se encuentra el asesinato del estudiante de agronomía Matías Catrileo Quezada. Es irónico saber que a Bernales el gobierno lo denomino “el general del pueblo”, hecho que aconteció tras su muerte debido a la caída de un helicóptero en Panamá el 29 de Mayo de 2008.
Quizás la única institución, que en los últimos años, no ha tenido comandantes en jefe vinculados a
violaciones a los DDHH es la Fuerza Aérea, al parecer se debe este comportamiento a la gestión de su último
comandante en jefe durante la dictadura, Fernando Matthei, quien tuvo una labor disímil a sus pares de las
otras ramas castrenses, tratando de alejarse de las violaciones a los Derechos Humanos.
Es deplorable que los gobiernos del actual partido socialista premien con altos cargos a cachorros de la
dictadura, que tienen las manos manchadas con sangre y no realicen reconocimientos a miembros de las
distintas ramas armadas, constitucionalistas, que se opusieron al golpe y fueron exonerados de sus cargos,
puestos en prisión, además de eliminados sus derechos previsionales, por lo que hoy cuentan con pensiones
asistenciales de miseria.
El partido socialista, alejado de sus principios fundacionales, del pensamiento de su gran héroe histórico
Salvador Allende y de sus estatutos actualizados a Noviembre de 2003 [1] , mantiene una política de no
afectar los intereses de grandes empresarios, de la derecha chilena y de las fuerzas armadas y carabineros,
esperando que el tiempo depure las filas de dichas instituciones. Esta política no cambiara el perfil de los
futuros comandantes y mandos medios de las distintas ramas, debido a que no se realiza una política que
permita terminar con los embudos y discriminaciones en los accesos de quienes tengan vocación a las
escuelas de oficiales, no importando su clase social o filiación política propia o de sus familiares.
Demos una revisada somera a una rama, por ejemplo a la colegiatura exigida por la escuela Naval ―Arturo
Prat‖:
· Una colegiatura de 99 uf (unidades de fomento) anuales, equivalentes a $1.989.137 pesos chilenos o US$
4101.
· Un costo de equipo de ingreso reglamentario de 60 uf anuales, equivalentes a $1.205.537 pesos chilenos o
US$ 2486.
· Una prima de fianza, por si el cadete no termina de 1,5 uf anual, $30.138 pesos chilenos o US$ 62. Este
monto aumenta cada año.
· Un seguro de vida e invalidez, que en caso de desgracia obliga a la aseguradora a cancelar la colegiatura a la
escuela naval, el costo aproximado es de 1,5 uf anual.
· Los cadetes o sus avales deben pagar mensualmente gastos por: tintorería , fotocopias, reposición de prendas
de vestir, medicamentos, servicio fotográfico y demás artículos de uso personal, para tal efecto la escuela
proporciona un estado de deuda del cadete, que se debe pagar en la cuenta bancaria de la escuela [2] .
Todos estos costos se traducen en un total anual aproximado de $ 4.454.950 pesos chilenos, unos US$ 9185
[3] . Los costos a cadetes de las otras ramas son similares.
Dichos costos financieros son una barrera de entrada imposible para los sectores de escasos recursos de la
población y también para las capas medias. Pero esta barrera no es la única , es sabido que a los aspirantes a
oficiales de las distintas ramas se le revisan los antecedentes de todos sus familiares asegurándose que no
ingresen aspirantes con familiares de izquierda, revisando hasta 2 generaciones anteriores, además se les
exige un padrino que debe ser oficial de alto rango. Con estos dos últimos filtros se asegura una formación de
oficiales pertenecientes a familias acomodadas de Chile y vinculadas a la derecha y ultraderecha.
En Chile no existe un solo oficial miembro de una familia progresista o de escasos recursos, en ninguna rama
de las fuerzas armadas o carabineros, a lo máximo que pueden aspirar el resto de los chilenos con vocación
militar es a la calidad de suboficial con grado más alto de sargento, es decir son destinados a llegar a ser solo
―lustra botas‖. Ni siquiera un suboficial con destacada trayectoria puede aspirar a entrar a la escuela de
oficiales.
Para avanzar en la profundización de la democracia, en la disminución de las injusticias sociales y en la
desaparición del riesgo de futuros abusos de las FFAA sobre la población, es necesario un cambio profundo
en las políticas de reclutamiento y formación de sus oficiales, pero lamentablemente sabemos que para ello no
se cuenta con el Partido Socialista, ni con sus aliados, menos aún con Presidentes de la Republica en turno, a
pesar que muchos de sus militantes son honestos y fieles a los principios socialistas, que un día les permitió
tener la confianza del pueblo, cada vez más opacada y tal vez ya hoy, perdida.
[1] Algunos párrafos de las primeros principios enunciados en el estatuto del Partido Socialista de Chile:
― El Partido Socialista de Chile es la expresión política de los trabajadores manuales e intelectuales, de la
técnica, de la ciencia y de la cultura y de todos los hombres y mujeres que aspiran a una sociedad socialista, es
decir, igualitaria, libertaria y fraternal.‖
―El Partido Socialista de Chile es un partido popular y de izquierda, autónomo, democrático y revolucionario,
en tanto persigue un cambio social profundo. El socialismo es la respuesta al neoliberalismo y al capitalismo
globalizado. Luchamos por una radical profundización de la democracia, haciéndola participativa, por una
economía solidaria al servicio de la satisfacción de las necesidades de los seres humanos, una cultura de la
libertad y una proyección de Chile en el mundo a partir de su condición latinoamericanista e
internacionalista.‖
Estatuto del Partido socialista de Chile, texto refundido, Noviembre de 2003, www.pschile.cl
[2] El calculo de los valores se hicieron con precios del dólar y la unidad de fomento al día 10 de Junio de
2008.
[3] Total considerando un gasto mensual del cadete de $100.000 pesos mensuales (US$ 206), por concepto de
lavaseco, fotocopias, etc.
El Defensor del Pueblo denuncia que 800 mil niños son explotados laboralmente en
Bolivia
ABI
El Defensor del Pueblo, Waldo Albarracín, al recordar el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil, reveló que
800 mil niños, niñas y adolescentes, entre 7 y 18 años, son severamente explotados en Bolivia, en jornadas
laborales de hasta 12 horas diarias, en diferentes áreas o rubros.
"Ochocientos mil niños, niñas y adolescentes trabajadores, entre los 7 y 18 años de edad, se encuentran
trabajando en las áreas de severa explotación como la zafra de caña, castaña y minería, consideradas como las
peores formas de explotación", acotó el Defensor del Pueblo.
Albarracín apuntó que esos niños y adolescentes cumplen una jornada de trabajo de ocho a 12 horas diarias.
En la cosecha de caña y castaña, conocida como la zafra, están involucrados 25.000 niños, niñas y
adolescentes cuyas edades oscilan entre 9 y 13 años de edad.
El Defensor aseguró que esos menores de edad viven en condiciones precarias, con altos niveles de
hacinamiento, sin acceso al sistema educativo ni a los servicios básicos como agua potable y sistemas de
desechos sólidos.
Fue enfático en decir que Bolivia cuenta con 4,5 millones de personas menores de 18 años y de esta población
cerca de 2,5 millones de niños, niñas y adolescentes se encuentran con sus derechos humanos vulnerados,
presentando una situación de alto riesgo en su desarrollo y calidad de vida.
Lamentó que los niños, niñas y adolescentes trabajen 12 horas diarias bajo severas inclemencias de tiempo en
los cañaverales.
Esto, sumado a una dieta alimentaria deficiente en calorías, hace que los niños estén altamente vulnerables a
enfermedades infectocontagiosas, respiratorias y gastrointestinales y frecuentes accidentes laborales, como
son las cortaduras provocadas por el machete y las mordeduras de víbora.
Albarracín comentó que los niños, niñas y adolescentes en general no firman ningún tipo de contrato, por
tanto no se les provee de ningún tipo de equipo de seguridad, ni son tomados en cuenta para ningún beneficio,
invisivilizándose de esta manera el trabajo de los niños, niña y adolescente.
También reveló que en el rubro de la minería existen 3.800 niños, niñas y adolescentes que realizan trabajos
de explotación (perforación de la roca), procesamiento del mineral (relave y barranquilleo y embolsado del
mineral).
Ellos poseen contrato verbal y temporal. Los niños muchas veces trabajan por especie (porción de carga de
mineral).
Los efectos de esta actividad en este grupo son escaso acceso a centros educativos, corta permanencia en
aulas, déficit de educación secundaria, manipulación de explosivos, inhalación de gases tóxicos y
enfermedades de la piel, fiebre amarilla y reumatismo precoz.
"El trabajo en las minas y las zafras está prohibido para los niños, por el riesgo que significa el uso de
químicos y plaguicidas", enfatizó Albarracín.
TRABAJO INFANTIL
El Defensor explicó que se considera trabajo infantil "toda actividad laboral que realizan los niños, niñas y
adolescentes antes de los 18 años y que perjudica su desarrollo físico, social, intelectual, psicológico y moral".
Se define las peores formas del trabajo infantil como "el trabajo intolerable, nocivo y de alto riesgo, que
amenaza el ejercicio de los derechos humanos de la niñez y la adolescencia.
Esas formas de trabajo infantil les explota económicamente, atenta contra su desarrollo integral, les exige
jornadas laborales prolongadas, les produce tensiones físicas, sociales o psicológicas, les obstaculiza el acceso
a la educación, socava su dignidad y autoestima.
Por tanto, Albarracín dijo que "el erradicar el trabajo infantil en Bolivia es un reto de todos, porque se trata de
un problema estructural que tiene que ver con la falta de oportunidades que las familias tienen para un trabajo
digno y les permita tener ingresos estables".
En su criterio, la eliminación efectiva de las peores formas de trabajo infantil requiere una política prioritaria
del Gobierno que tenga en cuenta la importancia de la educación básica gratuita y la necesidad de librar de
todas esas formas de trabajo a los niños afectados y asegurar el trabajo de sus progenitores para que se atienda
a las necesidades de sus familias.
Se requiere, acotó, de acciones concertadas en el marco de una responsabilidad social compartida, donde el
Gobierno, como principal garante de los derechos humanos, establezca y ejecute políticas sociales básicas que
permitan el desarrollo pleno de la población.
El Defensor del Pueblo dijo que propició mesas de diálogo a nivel nacional entre los representantes de las
organizaciones de niños, niñas y adolescentes con autoridades del Ejecutivo, para que se realice un
tratamiento específico de la problemática.
El Gobierno, con apoyo de entidades internacionales como la Organización Internacional del Trabajo (OIT),
puso en marcha el Plan de Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil en la zafra, minería o recolección de
castaña, operativizando acciones interinstitucionales para enfrentar la problemática.
Entrevista con Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía El gobierno estadounidense
intenta minimizar la relación entre la guerra y la economía
Jacques Coubard, Hervé Fuyet y Dominique Sicot (L‘Humanité)
"Mientras Bush sea presidente, no se hará lo que hay que hacer. Estados Unidos sólo
evitará la recesión con políticas públicas que favorezcan los programas sociales y la
reactivación económica. Aumentando los impuestos, los del ricos, si es necesario".
Como demuestra en su libro, los gastos de guerra pesan excesivamente sobre una economía
ya maltrecha por las elecciones estratégicas de los conservadores. ¿Por qué esta guerra tan
costosa e impopular no está en el centro de la campaña electoral?
De momento, el problema central de la campaña es la debilidad de la economía, el empleo
–incluso los que tienen trabajo están preocupados por perderlo-, la reducción de los
ingresos y el miedo a perder la casa. Es comprensible, y además el gobierno intenta
minimizar la relación entre la guerra y la economía. El presidente dijo, en relación con la
crisis de las subprimes, que la razón era ¡que se habían construido demasiadas casas! El
problema es que se construyeron en una economía que debilita las rentas y obstruye el
crecimiento debido a los créditos destinados a la guerra y al aumento de los gastos para el
petróleo.
Entonces, ¿la guerra no ha hecho que aumenten los beneficios de las compañías?
Eso es lo que solíamos pensar. Así fue en la Segunda Guerra Mundial. Realmente, incluso
Greenspan (ex presidente del Banco federal) lo reconoció después de la intervención en
Kuwait. Las guerras no son buenas para la economía, no la estimulan. Ya la guerra del
golfo debilitó la economía. Y si se compara el actual nivel de vida de un trabajador con el
de antes de la guerra, comprobarán que bajó.
Usted declaró que no era una guerra por el petróleo…
Creo que no era el motivo, aunque lo dijeron algunos dirigentes. Si fue una guerra por el
petróleo, el resultado ha sido contrario a lo que se buscaba. El barril pasó de 25 dólares al
principio de la guerra a casi 130 actualmente. Las condiciones son diferentes de las guerras
del Siglo XIX, en las que se ocupaban los países y se acaparaban sus recursos. La
privatización del petróleo iraquí habría violado el Convenio de La Haya, firmado por
Estados Unidos, que prohibe esta operación sin el acuerdo del gobierno legítimo iraquí.
Sin embargo, a partir de 1997, los autores del Proyecto para un nuevo siglo estadounidense,
que formaban el núcleo fundamental del equipo de George Bush, tenían como objetivo a
Iraq en nombre de los intereses de Estados Unidos en esa región.
Está claro que había personas que pretendían «llevar la democracia» a Iraq y pacificar
Oriente Próximo solucionando el problema palestino, pero eso aparece como una burla y
poca gente seria pensaba que eso iba a ocurrir. Es difícil saber lo que pasa en la cabeza de
Bush.
Usted es miembro de una comisión creada por el presidente Sarkozy para reflexionar sobre
la evaluación del progreso social y los medios para desarrollarlo. ¿Piensa que al inspirarse
en el modelo Bush, con las bajadas de impuestos para los más ricos, la desregulación, la
reducción de los servicios públicos y la privatización, se puede desarrollar el progreso
social?
¡No! Por supuesto que no. Como señalo en mi libro, las consecuencias de esa guerra se
agravaron con la desregulación. Necesitamos más reglamentación, y no lo contrario, para
controlar la economía. Nuestra comisión se concentró en la medida del crecimiento y el
progreso social. Pienso que el producto nacional bruto es un pésimo instrumento para
medirlo, ya que el reparto del crecimiento no significa progreso social. Ahora bien, si
tienen un mal instrumento de medida tendrán malos resultados.
Dominique Strauss-Kahn, el Director General del FMI, considera que la crisis financiera se
termina, pero que sus consecuencias económicas se van a sentir todavía durante algún
tiempo. ¿Comparte este análisis?
La crisis reviste tres aspectos en Estados Unidos. En primer lugar el estrechamiento del
crédito. Los bancos utilizaron montajes tan complicados que no midieron los riesgos que
asumían y son incapaces de evaluar correctamente los balances de los demás bancos. En
este contexto nadie quiere prestar dinero. Por otra parte están los impagos, especialmente
los vinculados a las «subprimes». Un millón y medio de estadounidenses perdieron sus
casas y otros dos millones también van a perderlas. Esto no se termina, ya que los precios
de las casas, que ya han bajado a un tercio o a la mitad, van a seguir bajando. Cada vez más
hipotecas estarán vinculadas a viviendas cuyo precio será inferior a su importe. Y las
familias, simplemente, tendrán que abandonarlas. Resumiendo, la macroeconomía.
La economía estadounidense se mantiene gracias a los créditos. Los empréstitos pendientes
de las familias hipotecadas sobre sus casas alcanzan los 950.000 millones de dólares. Se
añade el recurso a las tarjetas de crédito. Y la tasa de ahorro es nula. Todos esos factores
interactúan. La bajada de los precios de las casas restringe el acceso a la hipoteca y en
consecuencia al crédito. De ahí una reducción del consumo que deprime la economía.
Strauss-Kahn tiene razón, los problemas económicos permanecen. Pero una economía
debilitada corre el riesgo de generar todavía más impagos. Y en consecuencia pérdidas para
los bancos. Creo, por lo tanto, que no se acaban los problemas financieros. Aunque el
choque más terrible ya haya ocurrido.
¿Qué puede hacer el gobierno para frenar la crisis?
Algunos apuestan por las reducciones de impuestos de 150.000 millones de dólares
decididas por la administración Bush. Pero las pérdidas vinculadas a las hipotecas se
calculan en 950.000 millones. Y la subida de los precios del petróleo, de 75 a 125 dólares el
barril, recarga el coste de las importaciones en 250.000 millones, una suma que no se
utilizará en la economía estadounidense y es mayor, por sí sola, al importe de las
reducciones de impuestos. Además, muchos estadounidenses ya tienen tantas deudas que
utilizarán estas reducciones para reembolsarlas más que para consumir. Y se perfila un
nuevo problema: la reducción de las rentas de los estados y municipios, que va a incitarles a
restringir sus gastos. Lo que pesará sobre la actividad económica. Esta política fiscal es
ineficaz, y mientras Bush sea presidente no se hará lo que hay que hacer: apoyar a los
estados y municipios, ayudar a los parados, modificar la estructura de la inversión…
¿Cuál es el programa económico de Obama? ¿Se adapta mejor?
Obama tiene como objetivo agrupar. Quiere conocer la opinión de la gente antes de decidir.
Una de las reformas principales será la del sistema sanitario. También deberá reactivar la
economía, reformar la reglamentación del sistema financiero de tal modo que evite otro
derrumbamiento. Y reaccionar a la globalización. Es necesario solucionar esta cuestión:
cómo establecer una protección social sin hacer proteccionismo. Los países escandinavos lo
han hecho. Obama intentará conseguir el apoyo de los sindicatos, que están preocupados
por la destrucción del empleo y el deterioro de los salarios.
¿Diría que es necesaria una vuelta del Estado a la economía?
Sí, ciertamente. En Estados Unidos son las empresas las que proporcionan a sus asalariados
el seguro sanitario, la jubilación… El peso de la protección social debe transferirse al sector
público para que las empresas sean más flexibles.
¿Eso significa que habría que subir los impuestos?
Habrá que ver qué gastos pueden reducirse para financiar nuevos programas de protección
social. Los gastos vinculados a la guerra son un derroche. Los únicos beneficiarios son los
traficantes de armas. ¿Eso será suficiente? En cualquier caso, el dogma según el cual el
hecho de aumentar los impuestos es necesariamente malo, es inexacto. Los países
escandinavos están entre los que viven mejor y tienen tipos impositivos muy altos. Y por
eso precisamente tienen éxito. Porque tienen muchos recursos públicos y los gastan en la
educación, la investigación y el bienestar de los ciudadanos. Y por eso su sociedad es más
productiva y son más competitivos.
Si Obama llega a presidente, Estados Unidos irá entonces hacia más regulación y más
impuestos. Sin embargo los países europeos, Francia entre ellos, se esfuerzan por hacer lo
contrario.
No creo que Obama vaya tan lejos como los países escandinavos. Pero establecerá un
nuevo equilibrio. Todo depende del tiempo que necesite para retirarse de Iraq. Si además,
por otra parte, Estados Unidos reduce sus emisiones de CO2, obtendrá recursos vendiendo
derechos de emisión. Con una reestructuración del presupuesto federal y una reanudación
del crecimiento, quizá no sea necesario subir más los impuestos. Pero hay un cierto
consenso en Estados Unidos para gravar las rentas de las compañías petroleras, que son
enormes, y no contribuyen eficazmente. Es un error de Bush haber disminuido los
impuestos de los que tienen rentas altas. ¿Por qué a los que ganan dinero especulando se les
grava menos que a los trabajadores? ¡Eso es lo que ha hecho Bush!
Original en francés:
http://www.humanite.fr/Entretien-avec-Joseph-Stiglitz-prix-Nobel-d-economie
Tomado de Rebelión. Traducción por Caty R., quien pertenece a los colectivos de
Rebelión, Cubadebate y Tlaxcala. Esta traducción se puede reproducir libremente a
condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a la traductora y la fuente.
Nicaragua: Carta de Carlos Mejía Godoy a Rosario Murillo
Señora Murillo:
Por medio de la presente, quiero expresar mi firme y formal protesta por el uso y abuso que
el partido de Gobierno está llevando a cabo, con mi canción titulada La Consigna.
Como ya expresé hace dos años, a raíz de la muerte de nuestro hermano Herty Lewites, la
única obra musical de mi autoría que yo cedí al Frente Sandinista, cuando yo pertenecí a
sus filas, es el llamado Himno de la Unidad Sandinista.
Todo el resto de mi modesta, pero digna obra musical y literaria, está registrada en la
SGAE (Sociedad General de Autores de España), con mi código de socio LW -355477.
Hace menos de 24 horas he enviado un correo a España, para manifestarles que se nieguen
rotundamente a autorizar al Partido FSLN y al Gobierno de Nicaragua, de cara a la
difusión, explotación y comercialización de las 208 canciones, que conforman mi
patrimonio artístico, que será —igual que mi dignidad patriótica y revolucionaria— la
única herencia que dejaré a mis hijos.
En el contexto dramático que vive nuestro pueblo, amenazado nuevamente con otra
dictadura familiar, réplica sórdida de la tiranía de los Somoza, no puedo permitir que las
canciones, inspiradas precisamente en el sacrificio e inmolación de miles de hermanos
nicaragüenses, sirvan de fondo musical, para continuar —desde las tarimas enfloradas— la
tragicomedia más vergonzosa de los últimos años.
Y como tengo todo el derecho a dudar de la aplicación de las leyes en mi país, ya que la
Justicia está secuestrada por el llamado pacto libero-sandinista, siempre voy a acudir a los
tribunales nacionales, pero así mismo buscaré respaldo en el ámbito internacional, como
miembro que soy de la SGAE, organismo de derechos de autor, con proyección mundial.
Y aprovecho esta oportunidad para denunciar el atropello contra La Moralimpia,
conviertiéndola en el fondo musical de los largos y aburridos discursos del caudillo. Si la
familia de Justo Santos —como suponemos— recibe los royalties de ley por el uso y el
abuso, no tengo ‗vela en ese entierro‘. Lo único que exijo es que la versión que nosotros
grabamos en España y que es la que la familia gobernante utiliza, sea retirada de los medios
oficiales (radio y TV). Les doy una semana para hacerlo.
Y como los demagogos del Canal 4 y Radio Ya, van a empezar a ladrar, diciendo que yo
ando en busca de dinero, les recuerdo lo mismo que le dije a Lupillo Rivera, cuando intentó
destrozar nuestra canción Son tus Perjúmenes Mujer. Esta no es una demanda económica,
sino moral. No obstante, aclaramos: si persisten en abusar de la obra musical que no les
pertenece, entonces sí habrá lugar a una demanda jurídica internacional. Y óigase bien, todo
lo que produzca dicha demanda, no tocará las yemas de mis dedos, sino que irá
directamente al fondo para continuar la lucha por la democracia.
Finalmente, quiero expresar al pueblo nicaragüense, sin distingos de ideologías y partidos
políticos y opciones religiosas, aparte de los medios de comunicación del Gobierno (radio,
TV y tarimas oficiales), el pueblo nicaragüense —mi querido pueblo, al que me debo como
artista y como luchador desde hace 40 años— tiene pleno derecho a utilizar estas
canciones, en sus barrios, en sus movilizaciones, en la calle, en el centro de trabajo y en el
hogar.
P.D.: Señora Murillo: no usurpe la música que no le pertenece. Me consta, que usted tiene
suficiente talento literario para hacer canciones. Y si no encuentra en Nicaragua a quienes
le pueden poner música a sus versos, no desfallezca. Quizás en el exterior encuentra a algún
rapsoda solidario. ¡Buena suerte!!!
Es el poder, por Carlos M. Vilas
Lanús, Buenos Aires (Agencia Paco Urondo) Está claro para todo el que quiera verlo. El asunto de fondo no es el aumento a las retenciones a la renta extraordinaria de la tierra. Tampoco la política fiscal, o la agraria. Lo que está en juego por detrás de todo esto, dicho llanamente, es el poder. En particular, la consolidación y el ejercicio del poder político democráticamente surgido de elecciones y desplegado de conformidad a los instrumentos, el marco institucional y el mandato que la Constitución Nacional define. El poder que fue mayoritariamente concedido por el pueblo argentino a Cristina Fernández de Kirchner y a las ideas que lleva a la práctica. No se espera, de quienes pierden una elección, que disfruten o aplaudan el modo en que el gobierno legítimamente electo ejerce el poder, o que estén de acuerdo con los objetivos y las metas hacia los que ordena sus acciones. Se espera, simplemente, que acaten las decisiones que se toman legalmente y que tengan paciencia hasta que el calendario político brinde una nueva oportunidad; entre tanto, pueden contribuir haciendo una oposición eficaz en los ámbitos que la democracia habilita. Una de las buenas cosas de la lucha democrática es que sustituye ventajosamente a la confrontación de hecho por la confrontación de argumentos y la competencia electoral. En vez de contar cadáveres, como en la guerra, contamos votos, y el que cuenta más, gana. Así de simple, y tanto que nos ha costado entenderlo –y unos cuantos siguen todavía, lo estamos viendo, sin entenderlo. Majority rule, le dicen los norteamericanos. Gobierno de las mayorías, decimos nosotros. Sin ese gobierno de las mayorías, la democracia es verso . Doscientas o trescientas mil personas reunidas al aire libre una mañana de sol son, ciertamente, muchas, pero ni por asomo pueden ser equiparadas, mucho menos puestas por delante, de los más de ocho millones que decidimos, pacífica y democráticamente, que el gobierno nacional, y todo lo que él involucra de acuerdo a la Constitución y las leyes, sea presidido, hasta el 2011, por Cristina Fernández de Kirchner.
Y que esas instituciones y normas enmarquen un proyecto de desarrollo integrador en el que el crecimiento, que es producto del esfuerzo de todos, sea distribuido a todos más equitativamente que en el pasado, y todos seamos, en libertad y hermandad, ciudadanos de primera. De esto trata el actual conflicto, no de otra cosa. Del empecinamiento de una parte del todo por imponer sus intereses por encima de los del conjunto nacional. De conseguir por la vía de la fuerza lo que les es negado por el camino democrático de las leyes y la confrontación ciudadana. Por eso ese irrespeto por las instituciones, que va mucho más allá que los exabruptos verborrágicos de algún novel cortacaminos. El diálogo entre un sector, cualquiera éste sea, y el gobierno a quien compete la representació n y la promoción nacional, no es, ni puede nunca ser, un diálogo entre iguales, porque no es lo mismo el interés de una parte que el interés del conjunto. E interesa al conjunto saldar las profundas inequidades que todavía surcan el tejido social. Cuando algún exaltado dirigente habla del desplante gubernamental porque no se les presta la deferencia a la que se consideran acreedores, pone de relieve esa incomprensión fundamental. Desde mayo 2003, y por primera vez en mucho tiempo, Argentina protagoniza un proceso sostenido de crecimiento equilibrado con inclusión social. No es frecuente en América Latina un modo de ejercicio del poder aplicado a las relaciones sociales y económicas, en el que todos ganan –trabajadores, pequeños y medianos empresarios de la ciudades y del campo, empresarios grandes, sectores medios-- por más que unos ganan más que otros. El crecimiento de los últimos cinco años se tradujo, por ejemplo, en creación de tres y medio millones de puestos de trabajo, mejora del salario real, crecimiento del consumo, decenas de miles de viviendas de interés social, dignificación de los haberes jubilatorios, y excelente rentabilidad empresaria. Es, típicamente, el modo peronista de gobernar: acumulación de capital, distribución de ingresos, mayor autonomía en la inserción internacional, ejercicio efectivo de los resortes del poder. Ciertamente es largo el camino que aún queda por andar. Por eso el embate actual contra la continuidad y profundizació n de esa política y de ese modo de ejercicio del gobierno. Como toda lucha por el poder, sus tiempos son específicos y no pueden ser valorados por las urgencias mediáticas para las que da lo mismo el desabastecimiento de la población, el nacimiento de un gatito con dos cabezas o las nuevas "lolas" de alguna efímera y opulenta diva. Cuando de la defensa de los intereses del conjunto se trata, y de esto se trata, no hay más ritmo que el que impone la magnitud del desafío. Hoy es el reparto de la renta extraordinaria del suelo; hace poquito, los derechos humanos, la depuración de las fuerzas armadas y de seguridad, la reducción del endeudamiento externo y el cierre de cuentas con el FMI, los medicamentos genéricos, la educación sexual en las escuelas…
Lo que detestan es la apropiación nacional, en clave popular, de la titularidad y ejercicio del poder. Algunos, por intereses propios, otros, por ceguera y estupidez, que en política suelen ser aliadas estratégicas de los que se pasan de vivos. Carlos M. Vilas es Politólogo, Universidad Nacional de Lanús (Agencia Paco Urondo)
¿Populismo reclicado o neoliberalismo a secas? El mito del "neopopulismo" latinoamericano[*]
Carlos M. Vilas Introducción El término neopopulismo fue empleado por algunos autores para caracterizar a los regímenes políticos con liderazgos fuertemente personalizados y apoyo electoral de los sectores de mayor pobreza y que en la década de los 90 ejecutaron reformas macroeconómicas y sociales de tipo neoliberal en varios países latinoamericanos. Generalizando a partir de una interpretación peculiar de la experiencia de Alberto Fujimori en Perú, y en oposición a un amplio y rico cuerpo de literatura, esos autores afirman la existencia de afinidades entre el populismo y el neoliberalismo. La partícula neo antepuesta a populismo destacaría esa dimensión inesperada de un concepto tradicionalmente asociado a diseños macroeconómicos y sociales de características más bien opuestas. La novedad del resultado –el populismo quedaba asociado tanto a un determinado diseño socioeconómico y político como a su opuesto– fue bien recibida por unas ciencias sociales que salían de la etapa de las “transiciones democráticas” bastante vapuleadas por el empecinamiento de la vida real de comportarse de manera distinta a lo que planteaban los análisis “transitológicos”. Más recientemente este modo de ver las cosas desarrolló su propia versión vulgar, en una serie de artículos que descubrían neopopulismo en cuanto dirigente o partido político más o menos nuevo, de retórica medianamente antipolítico y estilo mediático transgresor, apareció en la escena política. Otros académicos de la región en cambio, entre los que me incluyo, hemos cuestionado este estiramiento conceptual como producto de una mala caracterización del populismo, carente de rigor metodológico y revelador de cierta confusión analítica respecto del fenómeno a considerar y de los escenarios más amplios que lo enmarcan. Planteamos que el populismo, como cualquier otro régimen político, es mucho más que algún ingrediente aislado. Sobre todo, afirmamos que la identidad de un régimen político deriva, en definitiva, de los objetivos que se plantea y de los intereses en juego. Aquéllos y éstos condicionan las modalidades de desempeño, el tipo de conducción política y el entramado institucional, entre otras cuestiones. Desde una perspectiva teórico-metodológica, la cuestión del supuesto neopopulismo va mucho más allá del caso particular del populismo y de la mayor o menor proximidad de algunos regímenes políticos recientes a las experiencias históricas consideradas hasta ahora como populistas. Alude a la pertinencia, rigor y alcances de la llamada “elasticidad conceptual” ( conceptual stretching ) y a la relevancia de la transposición de un concepto históricamente situado, con características constitutivas bien definidas, a fenómenos enmarcados en escenarios que poco tienen que ver con aquéllos y cuyos rasgos constitutivos son presentados con una llamativa ambigüedad. La hipótesis de un neopopulismo latinoamericano también está directamente emparentada con la caracterización de los procesos llamados de transición a la democracia por gran parte de la literatura respectiva, y a sus dificultades para conceptuar adecuadamente la relación entre organización socioeconómica, procesos políticos y matrices institucionales.
De innegable relevancia, estas cuestiones quedan fuera de los alcances del presente trabajo, que se centrará en la discusión de la hipótesis neopopulista como pretensión de descripción y conceptuación de los fenómenos referidos. Lynch (2000) y Franco (1998) han llevado a cabo certeras críticas al “estiramiento conceptual” y a las limitaciones de los enfoques “transitológicos”, respectivamente; la calidad de estos trabajos me releva de mayores desarrollos sobre esos asuntos. En la primera sección de este trabajo se resumen los rasgos principales del populismo latinoamericano. A continuación analizamos la hipótesis neopopulista en sus principales dimensiones, incluyendo los primeros intentos de aplicar el concepto de populismo más allá del enmarcamiento histórico estructural en que el mismo se desarrolló. La discusión de la hipótesis se desarrolla en la sección tercera. El populismo latinoamericano[1] De acuerdo con su caracterización predominante en la sociología y la ciencia política latinoamericanas (Germani, Di Tella, Weffort, Quijano, Córdova), el populismo tuvo como rasgos constitutivos principales: una amplia movilización social; la integración de las clases populares principalmente pero no exclusivamente urbanas en un esquema de articulación política multiclasista; la promoción de una mayor diferenciación económica capitalista con énfasis industrializador, impulsada desde un Estado intervencionista dentro de una estrategia de economía mixta y no alineamiento internacional; de resonancias ideológicas nacionalistas; con una conducción fuertemente personalizada. El carácter policlasista constitutivo de los regímenes populistas no les impidió impulsar políticas de fuerte sesgo popular, tanto por su contenido y alcances como por contraste con los regímenes que les precedieron; políticas que contribuyeron a dotar de particular activismo el apoyo proveniente de estos sectores, con el Estado actuando como árbitro de las relaciones entre clases y grupos sociales. El populismo latinoamericano correspondió a un momento determinado del desarrollo capitalista –predominio de la producción orientada hacia el consumo final, industrialización sustitutiva de importaciones, mercados regulados, distribución progresiva de ingresos, gestión estatal de variables macroeconómicas consideradas estratégicas, etcétera– que poco tiene que ver con el capitalismo actual y en general con el de los últimos 30 o 40 años. Como todo fenómeno complejo –y no hay régimen social o político que no lo sea– el populismo tuvo dimensiones e ingredientes políticos, ideológicos, discursivos, estructurales, estilos de liderazgo, etc., que posiblemente no fueron originales en sí mismos o aisladamente considerados, pero cuya peculiar combinación dio origen a nuevos rasgos y definió la caracterización específica del conjunto. La lealtad popular al Estado estuvo alimentada por políticas que promovieron la redistribución de los ingresos y una disminución (y metamorfosis) de las disparidades sociales. La redistribución obedeció tanto a las demandas sociales (muchas de ellas preexistentes al populismo y sistemáticamente reprimidas o ignoradas hasta entonces) como a las necesidades de acumulación del capitalismo local. La distribución del ingreso y el estímulo al consumo popular y a la producción para alimentar ese consumo –en síntesis, la promoción del mercado interno– correspondieron a una etapa particular del capitalismo periférico y de sus clases empresarias, con determinados sesgos tecnológicos, estilo de crecimiento extensivo más que intensivo. La funcionalidad de la distribución de ingresos para alimentar el proceso de acumulación vía ampliación del consumo estuvo ligada a la capacidad del Estado de orientar el proceso de inversión y garantizar la rentabilidad del capital privado. A su vez la activación social estimulada por la distribución, el crecimiento del empleo, la política social, debía mantenerse dentro de los límites requeridos por la necesidad de preservar el interés de los grupos empresarios en sumarse a la estrategia. En una etapa del desarrollo industrial en que la
producción para el consumo final representaba una proporción importante de la oferta manufacturera, una mejor distribución de los ingresos ligada a un crecimiento en el empleo ampliaba el mercado para la producción; el proteccionismo comercial permitió que esa ampliación fuera protagonizada sobre todo por los industriales nacionales y en general residentes. En los aspectos hasta aquí resumidos se aprecia la dimensión estructural del populismo, en cuanto la articulación por él planteada entre distribución de ingresos, empleo, consumo y producción corresponde a un momento y a características particulares del desarrollo de la economía capitalista que hoy pertenecen al pasado. A diferencia de lo que plantearía un enfoque de tipo teleológico, la configuración de esa etapa de desarrollo no es inevitable ni mecánica; depende en medida importante de las decisiones adoptadas por los actores y de sus relaciones recíprocas de poder, de la dotación de recursos, de las modalidades de inserción en la economía mundial, etcétera (Vilas, 1988). Este desarrollo de tipo extensivo –en la medida en que el crecimiento del producto se basó en el crecimiento del empleo formal, ampliación de la frontera agrícola, aumento de la masa de consumidores, expansión de la cobertura de los servicios sociales, etcétera– demandó fuertes inversiones en educación, salud, infraestructura, que actuaron como satisfactores no salariales de las demandas sociales, como mecanismos de integración social y como generadores de economías externas para la inversión capitalista. En condiciones de lenta evolución de la productividad global y de restricciones fuertes al endeudamiento externo, la política macroeconómica fiscal se caracterizó por persistentes desequilibrios fiscales y una gran laxitud en materia monetaria que, a la postre, contribuirían al derrumbe de estas experiencias. Los movimientos en la estructura social y en la organización económica abonaron transformaciones importantes en las relaciones de poder político y en sus articulaciones institucionales. La promoción de los sectores industriales y la integración progresiva de las clases trabajadoras aceleraron la crisis del orden oligárquico y forzaron a los grupos agroexportadores y comerciales que le daban sustento a profundas transformaciones y adaptaciones. La dimensión simbólica de la sociedad, los criterios valorativos, los patrones de prestigio, el lenguaje cotidiano, la dinámica de la vida diaria del común de la gente, expresaron rápidamente la magnitud y los alcances de aquellos cambios. Sociedades hasta entonces fuertemente estratificadas experimentaron el impacto de una amplia y rápida plebeyización; espacios tradicionalmente reservados a las clases medias y a las elites debieron ser compartidos con rostros, sonidos y hábitos diversos. La “democratización fundamental” de la sociedad (para emplear la expresión de Mannheim) incluyó el maltrato político a la oposición y algún acotamiento de sus posibilidades institucionales de desenvolvimiento y de expresión pública. Los nuevos ámbitos de libertad y de protagonismo alcanzados por las clases populares fueron vividos, a veces, como permisivos de cierto revanchismo del que se hizo objeto a los usufructuarios tradicionales del poder. Varios de estos elementos preexistían al populismo, o figuraron en experiencias de otro tipo. La sustitución de importaciones tuvo lugar de manera espontánea en la década de los 20 y devino política gubernamental luego de la crisis de 1929 en un amplio número de países. En algunos de ellos formó parte de experiencias populistas (Brasil por ejemplo), pero no en otros (Centroamérica en la década de los 60; en Argentina el peronismo tomó cuerpo cuando ya la sustitución de importaciones estaba muy avanzada. Algo similar puede decirse de la distribución de ingresos como política pública, de la ampliación de los derechos de ciudadanía por la vía electoral, la organización de los trabajadores y campesinos, la extensión de la cobertura de los servicios sociales, el caudillismo político, etcétera. Cualquier lector de la historia política o social latinoamericana sabe que el populismo no los inventó, aunque ciertamente los resignificó. Populismo fue la específica conjugación de estos ingredientes en un momento estructural e históricamente determinado del capitalismo latinoamericano (por lo tanto del perfil de sus clases y
otros actores sociales, grado de desarrollo de sus fuerzas productivas, modalidades de articulación externa, intereses y objetivos en juego, etcétera) mucho más que cada uno de ellos tomados al margen del conjunto. Algunos de esos ingredientes sobrevivieron incluso a las experiencias populistas, y eventualmente reaparecieron como parte de regímenes de naturaleza y significados diferentes; otros no. La hipótesis “neopopulista” El auge del movimiento de descolonización y de procesos revolucionarios de liberación nacional en Asia y África en las décadas de los 50 y 60 dio paso a la formación –más o menos estable, más o menos efímera—de regímenes de organización económica y política que un amplio cuerpo de literatura de los llamados estudios del desarrollo (development studies) interpretó como de tipo populista, o fuertemente emparentados con él. Se señalaron en este sentido los esfuerzos por alcanzar y consolidar: la independencia nacional; la construcción de sistemas nacionalmente integrados de administración pública; la ocupación efectiva del territorio estatal y la vigencia incontestada de las decisiones adoptadas por el poder central; la promoción de estrategias de desarrollo extensivo que asignaban prioridad a la satisfacción de las necesidades básicas de los sectores más vulnerables de la población y a la ampliación de la cobertura de los sistemas de educación y salud pública; el impulso a rubros de producción vinculados a la expansión del consumo popular; el fortalecimiento de las capacidades de negociación en los mercados de exportables; la intensa movilización popular; la nacionalización de propiedades extranjeras, entre otras. Al mismo tiempo se reconocieron como aspectos de diferenciación la debilidad cuantitativa y organizativa de la clase obrera y de grupos empresarios locales; en consecuencia el mayor peso relativo del Estado en tanto actor político frente a la sociedad, junto con una precariedad de las capacidades estatales para desempeñar con eficacia un número creciente de funciones y responsabilidades; sistemas políticos de partido único; fragmentación étnicocultural de la población con repercusiones directas en las relaciones de poder político; etcétera. En conjunto, destacó en el análisis de estos regímenes su impulso a procesos heterodoxos de modernización social y económica junto con un ejercicio autoritario, y a veces dictatorial, del poder político. Es en torno de estos regímenes que se sugirió por primera vez la denominación neopopulismo (Byres, 1979). La literatura de los development studies practicó un enfoque holístico de los regímenes estudiados; dichos estudios difícilmente pueden ser considerados como un antecedente de la hipótesis neopopulista que comenzaría a circular a partir de algunos análisis de economistas vinculados al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional. En aquélla, como antes en los estudios seminales del populismo latinoamericano, la caracterización del régimen derivaba de una particular combinación de rasgos institucionales, modalidades de acumulación, estilos de movilización social, formas de conducción y de dominación política, cuyo conjunto, más que cada uno en sí mismo, y la ubicación de ese conjunto en momentos determinados del desarrollo histórico de las sociedades respectivas abonaban la aplicación del fenómeno. Aquí radica precisamente el inicio de la confusión básica de buena parte de la literatura referida al tema: la reducción de la complejidad del fenómeno a alguna de sus “partes” constitutivas. En realidad el reduccionismo del populismo a algunos de sus muchos ingredientes no es novedoso. El más frecuente es el que se refiere a la personalización del liderazgo político. El populismo fue tempranamente criticado por sus adversarios políticos como el producto de la demagogia de dirigentes carismáticos que subyugaban a las masas con promesas imposibles de cumplir, movilizándolas detrás de objetivos mezquinos e inconfesables. El atractivo del dirigente se explicaba por su supuesto carisma, en una aplicación más bien vulgar de un concepto bastante complejo y de raigambre weberiana.
La variante académica más elaborada de este reduccionismo pertenece a Ernesto Laclau, para quien el populismo es ante todo un estilo de discurso político: “la presentación de las interpelaciones popular-democráticas como conjunto sintético antagónico respecto de la ideología dominante” (Laclau, 1978, 201). Como este discurso carece, según Laclau, de referentes de clase o de vinculación con una configuración socioeconómica dada, cabe asignar el rótulo populista a una gama muy amplia de regímenes políticos: “es posible calificar de populistas a la vez a Hitler, a Mao o a Perón” ( ibíd. , 203). El de Laclau es, claramente, un reduccionismo discursivo del populismo[2]. Más recientemente algunos economistas –en general vinculados a los organismos financieros multilaterales que desde la década de los 80 tuvieron gravitación en las políticas de ajuste macroeconómico en varios países de la región– redujeron el populismo a un conjunto de políticas monetarias y de gasto público. De acuerdo con este reduccionismo fiscalista el populismo sería un régimen económico que, al enfatizar en el crecimiento y la distribución del ingreso, descuida los peligros de inflación y déficit fiscal, las restricciones externas y las reacciones de algunos actores del mercado a la regulación estatal (por ejemplo, Sachs, 1989; Dornbusch y Edwards, 1990 y 1991). El populismo, de acuerdo con esto, sería una mala política macroeconómica. El parcelamiento conceptual de un “populismo económico” diferente, y de hecho sin relación necesaria con un “populismo político”, refleja la separación entre política y economía típica de la teoría neoclásica que también fue adoptada por los estudios “transitológicos”. Este reduccionismo desconoce que la política de flexibilidad fiscal y “presupuesto blando” (en el sentido de Kornai) ni es exclusiva del populismo, ni fue implementada por todos los regímenes populistas. El manejo de la economía pública fue equilibrado durante el populismo varguista, mientras que sí incurrió en fuertes desequilibrios en el gobierno de la Unidad Popular chilena (1970-1973), erróneamente tildado de populista por el reduccionismo de Dornbusch y Edwards (Bresser Pereira, 1991, 7-9). Es posible agregar, en este último caso, que el descalabro fiscal no se debió tanto a un mal manejo de las variables respectivas sino al clima de intensa confrontación política que signó a esa experiencia. La crisis fiscal y económica fue simplemente un capítulo de una estrategia política que culminaría con un golpe de Estado y la instauración de una dictadura militar. Las concepciones sesgadas o reduccionistas del populismo abonaron el camino para la formulación de la hipótesis neopopulista. Los autores que se ubican en esta posición comparten la reducción del populismo a su ingrediente de liderazgo fuertemente personalizado, al que agregan la promoción de prácticas clientelistas para abonar el apoyo que el dirigente reclama, y obtiene, de las masas populares. El hecho de que los dirigentes a los que se refieren hayan impulsado estrategias macroeconómicas y ejecutado políticas de signo opuesto a las del populismo les resulta irrelevante. Al contrario, parte central de sus textos se refiere a las “insospechadas afinidades” (Weyland, 1996) entre populismo y neoliberalismo. A partir de esto resulta posible extender el nuevo concepto a cualquier tipo de escenarios (Weyland, 1999)[3]. Dresser (1991) fue posiblemente la primera en denominar como neopopulistas a algunos ingredientes políticos de las reformas neoliberales impulsadas en México durante la presidencia de Carlos Salinas de Gortari. Dresser puso la mira en el Programa Nacional de Solidaridad (Pronasol) –un conjunto de políticas y acciones de contención y promoción social de fuerte focalización en los grupos más vulnerables, ejecutadas directamente por el Presidente de la República– y a su relevancia para fortalecer la legitimidad de un gobierno cuestionado por denuncias generalizadas y verosímiles de fraude electoral. El alto perfil de Salinas en este programa, que dependía directamente de la Presidencia de la República, y el sistema de toma y daca entre las agencias gubernamentales y los destinatarios de las políticas, fueron interpretados por Dresser como una reedición de prácticas populistas que, además de aquel objetivo, buscaban mejorar la gobernabilidad del proceso de reformas neoliberales. Posteriormente a Dresser, otros autores recurrirían a similar caracterización (por ejemplo, Gibson, 1997; Knight, 1998).
La sorpresa que produjo en algunos autores vinculados a los estudios sobre “transiciones a la democracia” la victoria electoral de Alberto Fujimori en Perú en 1990 condujo a un nuevo estiramiento conceptual para dar cuenta de lo inesperado. Con su actitud de marginación respecto del sistema político partidario, las manipulaciones institucionales a partir del autogolpe de abril de 1992, el importante apoyo recibido de manera sostenida desde prácticamente todos los segmentos de la sociedad peruana, y la promoción de un drástico esquema neoliberal, Fujimori se convirtió en todo un desafío para gran parte de la sociología política. Los rasgos individuales más aparentes de la personalidad del dirigente fueron el punto de partida para un pastiche conceptual que, curiosamente, hizo carrera. La parecida combinación en tres países de la región (México/Salinas, Perú/Fujimori y Argentina/Menem) de reformas macroeconómicas neoliberales, la similar focalización de políticas sociales para dotar de apoyo político al régimen y la fuerte personalización de la conducción política del proceso, otorgaron plausibilidad a la hipótesis neopopulista. Es este último elemento –liderazgo de alto perfil personal con una relación no mediada o de débil mediación institucional con las masas– el que sirvió de argumento para mezclar populismo con neoliberalismo: el reduccionismo personalista . Roberts, por ejemplo, en uno de los esfuerzos mejor organizados para dotar de sustento al argumento, insiste en el tipo de liderazgo como elemento definidor del populismo, y aunque incluye algunos rasgos complementarios es indudable la primacía que asigna al estilo personalizado de conducción (Roberts, 1995)*4+. Roberts señala la “descomposición de las formas institucionalizadas de representación política” que crean el marco de posibilidad para el surgimiento de estos dirigentes y del tipo de relación líder-masas poco institucionalizado, y concluye que el populismo “es una tendencia perpetua donde las instituciones políticas son crónicamente débiles”. La inserción de este estilo de conducción politica en la estructura de poder, el contenido y los alcances de las políticas ejecutadas, el sesgo global de la gestión del Estado –es decir varias de las dimensiones que contribuyeron a identificar a determinadas experiencias como populistas– quedan fuera de la preocupación del autor. De manera coincidente, Weyland (1996) construye su versión del populismo de acuerdo con tres elementos: 1) un líder personal que apela a 2) una masa heterogénea de seguidores, muchos de ellos excluidos del desarrollo pero disponibles para la movilización; 3) aunque el líder construya nuevas organizaciones o reviva organizaciones populistas anteriores, ellas son instrumentos personales con bajos niveles de institucionalización. “Esta definición enfoca el núcleo político del populismo” ( ibíd. ), compatible por tanto con cualquier tipo de diseño socioeconómico y cualquier matriz estructural de poder. La reaparición de estos liderazgos sería una respuesta a la pérdida de representación de los actores y mediaciones institucionales preexistentes como producto de masivos cuestionamientos de la sociedad civil, como efecto de profundos desajustes en la organización de la economía, u otras causas. Este simplismo conceptual permite a los autores presentar al populismo como una opción permanente en la política latinoamericana con independencia de las configuraciones cambiantes de los escenarios históricos –vale decir, de la configuración de las clases y otros actores sociales, del desarrollo y orientaciones de la organización económica y de los procesos de acumulación, de la estructura internacional de poder, etcétera. Para poner en acto lo que sería una potencialidad avasalladora, sólo haría falta una crisis de representación del sistema político-institucional –partidos, elecciones, separación de funciones de gobierno, etc.–, que se demostraría así ineficaz para procesar las demandas planteadas por sectores clave de la sociedad. Del mismo modo que para Poulantzas el bonapartismo sería la forma normal de dominación política en el capitalismo (Poulantzas, 1970), el populismo reducido a clientelismo o caudillismo sería para estos autores el modo normal de hacer política. La confusión se agrava cuando este reduccionismo personalista se cruza con el reduccionismo fiscalista. Mientras que para los sostenedores de éste el
desmantelamiento del populismo es condición inexcusable para el éxito de las reformas macroeconómicas neoliberales (Burki y Edwards, 1996), para quienes participan de la simplificación personalista no hay tal, y el populismo es perfectamente compatible con esas reformas. Más aún: sería un instrumento extraordinariamente eficaz para llevarlas a cabo. Como ambas hipótesis no pueden ser verdaderas, dejo la resolución del galimatías a sus respectivos responsables. El todo y las partes La hipótesis neopopulista ha sido sometida a críticas por un número importante de autores latinoamericanos (por ejemplo, Vilas, 1988; Nun, 1995; Novaro, 1996; Quijano, 1998; Lynch, 2000). Aunque desde perspectivas variadas y poniendo énfasis en diferentes cuestiones, estos trabajos coinciden en señalar la deficiente comprensión del fenómeno de base –el populismo– en la formulación de la hipótesis neopopulista. En lo que sigue argumentamos que también está presente una mala caracterización de los regímenes a los que se considera neopopulistas . No sólo los populismos históricamente situados, sino también los pretendidos neopopulismos , son mucho más que un estilo de conducción política personalista, un estilo discursivo o una política fiscal sistemáticamente deficitaria. Planteamos asimismo que la hipótesis neopopulista practica una generalización excesiva de sus premisas en cuanto pretende abarcar un número de experiencias que tienen muy poco de sustantivo en común. El argumento de la crisis institucional En el origen de estos regímenes se encuentra, según los autores que sustentan la hipótesis, una crisis de representación, entendiendo por tal la pérdida de caudal electoral de los partidos políticos tradicionales y el desplazamiento de las adhesiones políticas hacia nuevos referentes. Se trata de una simplificación de un tema complejo sobre el cual existe un cuerpo amplio de literatura (por ejemplo, Pitkin, 1967; Cotta, 1982; Manin, 1992 y 1995; Leffort, 1992; Porras Nadales, 1996; etc.) y que en sus términos modernos se remonta posiblemente a Edmund Burke y sus debates con algunos contemporáneos. Referida al Estado en tanto estructura de poder, tiene que ver con una pluralidad de cuestiones que incluyen los criterios de legitimación del poder político, sus modalidades de organización, los objetivos que se persiguen y el modo en que éstos se definen, la forma de elegir y renovar a quienes desempeñan determinadas funciones de poder, etcétera. La volatilidad del comportamiento electoral, aun en sistemas de democracia representativa, no siempre es el mejor indicador de la existencia de una crisis institucional. Una crisis de representatividad partidaria tampoco se proyecta necesariamente como crisis de la representación política, aunque ciertamente pone en cuestión una forma particular de ella. No queda claro que tal cosa haya estado presente en la gestación de los regímenes definidos como neopopulistas. En el caso de Salinas de Gortari hubo, de ser ciertas las alegaciones, un fraude electoral que confiscó la victoria de la oposición de centro-izquierda que poco después devendría en Partido de la Revolución Democrática (PRD). Ni Salinas renegó de su condición de candidato del PRI, ni ésta fue cuestionada por nadie. Recurrir al Pronasol le permitió recuperar legitimidad frente a los sectores más empobrecidos que posiblemente votaron en 1988 por la oposición; este programa fue parte de un conjunto más amplio de decisiones heterodoxas desde la perspectiva de la tradición priista que incluyeron ampliación del espacio institucional de acción de la Iglesia católica, redefinición de las relaciones con Estados Unidos, acotamiento del margen de maniobra de las organizaciones sociales priistas, sanciones penales iniciales a algunos miembros del establishment financiero incursos en maniobras especulativas fraudulentas. Tampoco hubo crisis institucional, aunque sí un tensionamiento de la gobernabilidad, en el caso de Carlos Menem en 1989. La pérdida de control sobre el comportamiento de las variables
macroeconómicas y la derrota electoral cuestionaron la capacidad del gobierno de Raúl Alfonsín de conducir el país hasta el momento constitucionalmente fijado para la sucesión presidencial; por tal motivo, se convino entre las representaciones parlamentarias de los partidos políticos reformar el calendario respectivo y adelantar la iniciación del mandato del presidente Menem, quien había triunfado encabezando la fórmula del Partido Justicialista. La crisis financiera e hiperinflacionaria que enmarcó esta coyuntura fue procesada por los actores políticos y partidarios convencionales de acuerdo con el funcionamiento institucional previsto en la Constitución. También fue decisiva en el ascenso político inicial de Fujimori la operación de los mecanismos institucionales, y puede incluso afirmarse que la relación entre el triunfo de Fujimori y la crisis del sistema político peruano es inversa a la que plantea la hipótesis neopopulista, bien que con el telón de fondo de la enorme frustración democrática que arrojó como saldo la gestión presidencial de Alan García. La deslegitimación del sistema político partidario hizo eclosión después y como consecuencia de la victoria electoral de Fujimori, y no al revés. Varios estudios encontraron niveles crecientes de participación electoral de los pobres urbanos a lo largo de la década de los 80 que ponen en duda la hipótesis de una deslegitimación amplia de la política representativa desde la perspectiva de las clases populares (Tuesta Soldevilla, 1989 y 1994; Durand, 1996)[5]. El triunfo de Fujimori en el ballotage de 1990 contra la opción derechista de Mario Vargas Llosa fue posible por las contribuciones electorales del Partido Aprista Peruano, de Izquierda Unida y de otras denominaciones de izquierda. Es recién a partir de la instalación de Fujimori en la presidencia, con la consiguiente redefinición de alianzas, que el sistema partidario y el parlamento comienzan el desbarranque. Fujimori se quedó con los votos prestados por el PAP y las izquierdas, y la capacidad de esos partidos para bloquear desde el parlamento decisiones del nuevo Presidente sumó descrédito sobre ellos. El autogolpe de abril de 1992 con la disolución del Congreso y la destitución de la Corte Suprema de Justicia, la autonomía otorgada al ejército en su enfrentamiento contra Sendero Luminoso y el MRTA, la captura de Abimael Guzmán en septiembre de ese mismo año, agregaron créditos a una gestión de mano fura con el terrorismo y la corrupción política tradicional y abonaron el triunfo en las elecciones para un nuevo Congreso a fines de ese mismo año[6]. El desplazamiento del electorado desde los partidos tradicionales hacia Fujimori involucró similar mudanza de una cantidad grande de dirigentes de segunda línea, autoridades municipales, cuadros locales, que vieron en la mutación la posibilidad de preservar sus propios espacios de poder. Olfato, espíritu de supervivencia, craso oportunismo o lo que fuere, es algo que se registra siempre que se suscitan estos cambios rápidos en las preferencias de la gente y en las consiguientes modificaciones de los escenarios institucionales. La ejecución de programas de contención social y de emergencia orientados hacia los segmentos poblacionales de mayor vulnerabilidad, las altas tasas de crecimiento del producto y la reducción de la inflación reforzaron la instalación de la figura presidencial en el mundo de la pobreza. El liderazgo “neopopulista” El tipo de teoría política que se enseña en muchas universidades de Estados Unidos contribuye poco a una comprensión adecuada de la política tal como ella es en realidad, y en particular a entender la cuestión del liderazgo. Sea que se enfoque la política como un asunto de elecciones individuales descontextualizadas, o desde un enfoque más o menos marxista de conflictos entre actores colectivos, desde una perspectiva de gestión institucional, desde un paradigma pluralista de competencia entre grupos, o a partir del viejo enfoque conductista, el papel de la conducción no aparece por ningún lado. La fuerte gravitación de estos enfoques en la sociología política latinoamericana implicó un traslado de estas limitaciones a un número lamentablemente grande de autores. La reaparición de dirigentes políticos de gran arraigo social, su capacidad para alterar
las modalidades de desarrollo de los procesos políticos, su habilidad para modificar correlaciones de poder, fueron recibidas con una mezcla de sorpresa, preocupación y desconfianza que dificultó la comprensión de estos personajes y sobre todo de las condiciones que los hicieron posibles. Las situaciones de crisis severas provocadas por causas variadas –guerras, descalabro de la economía, revoluciones– son proclives a la concentración de la autoridad política –entendiendo por autoridad al poder dotado de legitimidad– en dirigentes que agregan a las facultades y competencias del marco institucional otras de tipo extraordinario avaladas por el consenso que de diversas maneras obtienen de sectores amplios de la población. Es ésta una situación que se registra en una variedad de escenarios, niveles de desarrollo e ideologías. La superación de la crisis y la reanudación de un camino normal están asociadas al surgimiento de un “piloto de tormentas” que se haga cargo de los asuntos públicos y saque la nave adelante. En diferentes momentos del siglo XX se desempeñaron así Churchill y Franklin D. Roosevelt, Charles de Gaulle y Konrad Adenauer, Stalin, Hitler y Mussolini, Kemal, Mao y Fidel Castro... y por supuesto dirigentes populistas como Perón, Velasco Ibarra o Vargas. Algunos de estos líderes cuentan con una larga trayectoria política en los marcos del sistema institucional; otros en cambio son de ingreso reciente a la escena política en la que se instalan, donde hay generalmente una pérdida de confianza del público en los actores políticos más tradicionales. Esto último tiene lógica: si se afirma la existencia de una crisis de representación de los partidos políticos y de la institución parlamentaria en el origen de la hipótesis neopopulista no debería extrañar el surgimiento de nuevos líderes provenientes de otros ámbitos: los medios de comunicación, el deporte, la música, las fuerzas militares o de seguridad. Si algo es incompatible con una sociedad organizada, es la ausencia de conducción. Antes o después las crisis de los mecanismos institucionales de representación son recompuestas por la aparición de estos nuevos liderazgos. Algunos autores se han referido a estos exitosos personajes como outsiders de la política: figuras públicas que llegan a competir por el poder a partir de prestigios construidos en otros ámbitos (Landi, 1995). El mote tiene valor casi exclusivamente metafórico, ya que la mayoría de ellos triunfó como culminación de una carrera política relativamente prolongada (Vilas, 1995). En este punto se revela una de las mayores fragilidades de la hipótesis neopopulista : pretender generar un concepto general a partir de un caso particular –el de Alberto Fujimori. Ni Carlos Salinas de Gortari, ni Carlos Saúl Menem encajan en el caso peruano. Ambos eran veteranos en las lides políticas de sus respectivos países cuando accedieron a la máxima conducción política de México y Argentina. La crisis fiscal y financiera argentina de 1989, de la que surgió Menem como salvador de la patria , se procesó y superó por mecanismos constitucionales diseñados para situaciones de emergencia -como volvería a ocurrir tras la crisis de fines de 2001. Carlos Menem había adquirido notoriedad en la política argentina desde inicios de la década de los 70; fue electo gobernador de su provincia natal (La Rioja) en 1973, y en 1976 fue encarcelado por la dictadura militar. Al concluir ésta volvió a ser electo gobernador de la provincia de La Rioja; posteriormente ganó su candidatura presidencial venciendo en las elecciones internas del Partido Justicialista a quien era presidente de ese partido y gobernador de la provincia de Buenos Aires. Salinas de Gortari debutó en la política electoral cuando devino candidato presidencial, pero en las dos gestiones gubernamentales previas había ocupado posiciones de alto nivel, así como cargos partidarios. ¿Clientelismo? Los estudios sobre el populismo pusieron de relieve lo que éste significó como transformación del “sujeto popular” desde una situación de masa a una condición de clase . El pueblo del populismo fue un conjunto organizado a partir de coordenadas provenientes del mercado de trabajo: sindicatos, organizaciones campesinas, partidos políticos de reverberaciones clasistas, u otras. El
verticalismo de la relación del dirigente con esas organizaciones contribuyó a que algunos observadores vieran en el populismo ingredientes de corporativismo. Sea como fuere, el fuerte encuadramiento organizativo de un pueblo que adquiría identidad política a partir del mundo del trabajo diferenció también al populismo de las variantes tradicionales del clientelismo. La típica relación individualizada patrono-cliente de la sociedad oligárquica (por ejemplo, Schmidt et al., 1977; Mouzelis, 1985; Robles, 2000) fue sustituida por una relación fuertemente mediada por esas organizaciones; la típica imagen populista del dirigente hablando desde un balcón a una plaza saturada de simpatizantes era el instante periódicamente reiterado de una relación construida ante todo con las organizaciones categoriales y políticas. El discurso del dirigente machacaba en el carácter de conquistas de nuevos derechos de los beneficios conseguidos: derecho a la organización, al trabajo, a la educación y la salud, a un salario justo, a la tierra... El populismo contribuyó así a la transformación de un pueblo de clientes o de súbditos en pueblo de ciudadanos, a lo largo de un proceso de fuerte conflictividad. Al contrario, la relación líder/masas carece en la hipótesis neopopulista de mediación institucional. Esto fue facilitado por la profunda desestructuración de las clases populares –como resultado de la crisis económica y de su impacto en el empleo y los ingresos– y reforzado por acciones gubernamentales concretas, tanto de represión directa de algunas organizaciones laborales o políticas y sociales en sentido amplio, como por las propias reformas neoliberales. Un manejo hábil de los medios masivos de comunicación, sobre todo de la televisión y la radio, permitió “llegar” a la gente sorteando mediaciones institucionales u organizativas. El pueblo organizado del populismo fue transformado en un público de individuos sin otro referente real o simbólico que el discurso del gobernante[7]. Al éxito de este tipo de interpelación contribuyeron tanto la habilidad o la personalidad del líder, o el desarrollo y difusión de la tecnología comunicacional, como la propia fragmentación del tejido social. Esto último –la fractura social en las clases populares y en el mercado de trabajo producida por la crisis de la década de los 80 y la restructuración neoliberal– pone de relieve la dimensión histórico-estructural del populismo latinoamericano a la que se hizo referencia en la primera sección: la estrecha articulación del régimen político y de la organización social característica del populismo con un tipo particular de organización de la producción y nivel de desarrollo capitalista. Las transformaciones en esta dimensión generaron modificaciones profundas en la matriz social y en el perfil de sus actores; en tales condiciones la relación política de liderazgo no podía sino ser diferente. También los dirigentes populistas recurrieron a momentos de relación directa con sus seguidores –caso típico el de la plaza llena– o a través de medios de comunicación. Pero éstos fueron recursos complementarios de un vínculo que presentó como ingrediente permanente la mediación de un conjunto de organizaciones populares con referente de clase: sindicatos, federaciones de trabajadores, organizaciones campesinas, cámaras patronales, u otras. Caso paradigmático de esta relación con públicos fragmentados son los programas de combate a la pobreza tipo Pronasol en el México de Salinas o el Foncodes en el Perú de Fujimori. Programas de contención social mucho más que de promoción fueron la variante más sofisticada y de más alcance de un amplio número de programas similares diseñados para compensar el impacto negativo de los programas de ajuste macroeconómico en las clases populares y en segmentos empobrecidos de las clases medias. La política social del populismo, de aspiraciones universalistas y de efecto promocional, fuertemente articulada al mercado de trabajo y a la gestión pública, devino un conjunto no siempre orgánico de acciones focalizadas en los grupos y áreas de mayor vulnerabilidad y de mayor interés político para el gobierno, con decisivo financiamiento externo y activa participación de organizaciones no gubernamentales y empresas privadas (Fleury, 1997; Vilas, 1997, 1998; Flier, 2000). Estos programas se convirtieron en el canal privilegiado de relacionamiento entre los más altos niveles de la decisión política y los segmentos más vulnerables
de la sociedad, al tiempo que un conjunto de políticas de desregulación del mercado de trabajo, privatización de empresas estatales, desregulación del comercio exterior, subsidio cambiario a importaciones de bienes industriales, reformas a la legislación laboral, y otras, acotaron severamente la gravitación de las organizaciones sindicales. Algo equivalente ocurrió con las organizaciones políticas en el caso peruano, no así en los de México y Argentina. Fujimori nunca se preocupó por construir un partido político que le sirviera de instrumento estable en su relación con el electorado. Las siglas partidarias que utilizó durante los 10 años de gobierno funcionaron únicamente en tiempo de elecciones, retornando a la pasividad o desapareciendo entre elección y elección (Arce, 1996; Cotler y Grompone, 2001). Un contraste marcado con las situaciones en los otros dos países, donde los aparatos partidarios del PRI y el Partido Justicialista fueron instrumentos estratégicos tanto de captación de votos como de disciplinamiento parlamentario. Ahora bien: lo llamativo del amplio apoyo electoral recibido por estos dirigentes no es tanto el que proviene de los sectores más empobrecidos –cuya propia vulnerabilidad usualmente los convierte en masa de maniobra del poder gubernamental o de “coroneles”, “punteros” o “caciques” locales o regionales– como el que fue brindado por los grupos sociales de mayores ingresos, y en particular por los vinculados al gran poder económico. El voto populista nunca fue exclusivamente obrero o popular (en sentido sociológico amplio), pero lo fue en un sentido claramente mayoritario que se agregó a otras manifestaciones de incuestionable y coincidente sentido[8]. Las clases medias y altas siempre oscilaron entre la desconfianza y la oposición, tomando los beneficios que les reportaba la expansión de la producción orientada al mercado interno, la política crediticia, el crecimiento del consumo y agraviándose de las incursiones autoritarias del régimen, del sistema de precios relativos, de la nueva presencia institucional y social de los de abajo, del mayor poder negociador de los sindicatos, de la irreverencia de los recién llegados. Lo novedoso del pluralismo electoral de los pretendidos neopopulismos fue, al contrario, la entusiasta adhesión de los sectores más acomodados de la sociedad, empezando por los que habían constituido los encuadramientos electorales de las opciones conservadoras y liberales. Las coaliciones electorales de estos regímenes agruparon a los más pobres junto con los más ricos, algo que tiene poco que ver con las constelaciones electorales del populismo. Con mayor fuerza en unos casos que en otros, la falta de mediación institucional o corporativa en la relación líder/masas –a la que también contribuyó el manejo de los medios masivos de comunicación– dotó a la experiencia de un cierto perfil leviatanesco . Los escenarios emergentes de la crisis y del ajuste neoliberal se parecen mucho al estado de naturaleza descrito por Thomas Hobbes. No tanto por esa especie de sálvese quien pueda y guerra de todos contra todos que se lleva a cabo en situaciones de hiperinflación, crac financiero, violencia terrorista y competencia despiadada por la captación de recursos básicos insuficientes y por el aprovechamiento de oportunidades escasas, sino por la vinculación directa, carente de mediación institucional que se establece entre los desposeídos y los poderosos. En estos escenarios el poder deviene absoluto; es el precio que los de abajo deben pagar a fin de alcanzar un mínimo de estabilidad y seguridad, y la fantasía de un futuro menos perverso. Y es también el precio que entregan gustosos los poderosos del mercado, como condición política para el restablecimiento de la normalidad de los negocios, la previsión en las transacciones o la ampliación de los espacios de acumulación. Como el Leviatán de Hobbes, el Estado es total y todopoderoso, y no existen defensas respecto de él, ni hay más derecho que los designios de quien ejerce el poder[9]. Apoyo electoral y reformas neoliberales
La hipótesis neopopulista esgrime como otro de sus argumentos el voto de los más pobres en apoyo de gobiernos o líderes que ejecutaban drásticas reformas neoliberales. Mientras que en el pasado este tipo de reformas había estado enmarcado por regímenes militares, fraude electoral u otras medidas de acotamiento de la democracia representativa, y unos cuantos regímenes populistas fueron violentamente derrocados para dar paso a la ejecución de políticas que hoy llamamos neoliberales, esas políticas son promovidas ahora por regímenes de democracia representativa. La calidad efectiva de estas democracias ha sido discutida en otros lugares (por ejemplo, Franco, 1998; Vilas, 1999). Simplemente debe señalarse aquí que no existen estudios que avalen con datos que ese apoyo electoral fuera suscitado por una intelección ciudadana acerca de las ventajas y beneficios de una reorganización neoliberal de la economía y de la sociedad, y no por otros motivos: desde la existencia de un importante núcleo de “voto duro” a favor del PRI y del Partido Justicialista en México y Argentina, hasta la derrota de Sendero Luminoso en Perú, pasando por el perfil transgresor de algunos de estos dirigentes y su promoción mediática. Se ha señalado ya que la estabilidad monetaria o al menos la superación de los episodios hiperinflacionarios, así como los programas de combate a la pobreza, tuvieron impacto electoral positivo. Pero es poco más que especulaciones lo que se puede agregar dada la ausencia de información sistemática o de estudios específicos. No puede afirmarse sin más que el voto popular estuviera motivado por las reformas –como aseguró con mucho entusiasmo y pocos datos la literatura vinculada al Banco Mundial, por ejemplo, Haggard y Webb (1994)– pero es evidente que las reformas y su impacto negativo en materia de distribución de ingresos y calidad de vida no fueron obstáculo para que los más pobres votaran en el mismo sentido que los más ricos. El diseño global del régimen De la mano del reduccionismo, la hipótesis neopopulista revela su incapacidad para entender los fenómenos complejos; practica un enfoque descriptivo pero también parcial –una simple agregación de aspectos aislados del contexto del que forman parte y al que el propio régimen contribuye a conformar. La jibarización del populismo a discurso, manipulación y control de masas a través de los medios, “deja fuera exactamente lo que debe ser estudiado y debatido: los intereses sociales en juego, las relaciones de fuerzas políticas entre tales intereses” (Quijano, 1998). De otro modo carece de sentido llamar neopopulistas a regímenes o liderazgos políticos neoliberales que tratan de destruir sistemáticamente todo aquello que fue conseguido por las luchas populares y bajo regímenes nacional-populares. En lo que el populismo significó de desarrollo de un capitalismo con distribución de ingresos y amplia organización popular, estos regímenes promueven la concentración del capital, el desmantelamiento de servicios públicos estatales, la desmovilización popular y el debilitamiento de las condiciones sociales para el ejercicio de la ciudadanía. En lo que el populismo fue participativo, estos regímenes son autoritarios; el efecto social y políticamente integrador y movilizador del populismo es en estos regímenes desmovilización, marginación y fragmentación; la promoción de grandes organizaciones de clase es ahora individuación forzosa de las relaciones sociales; el capitalismo productivo con distribución de ingresos y crecimiento del empleo fue reemplazado por la desindustralización, el deterioro de los mercados de trabajo y la especulación financiera; el Estado regulador fue transformado en Estado privatizador. Podría uno decir: mucho neo y poco populismo. Pero tampoco mucho de neo , porque los contenidos centrales de las políticas ejecutadas por estos regímenes forman parte desde hace más de medio siglo del repertorio de preferencias de buena parte de las elites económicas latinoamericanas y de las recomendaciones de los organismos financieros multilaterales. Lo interesante del caso es que esas propuestas hayan podido ser insertadas en los procesos
electorales e implementadas por gobiernos surgidos de ellos, para dar cuerpo a lo que ha venido a denominarse democracias de mercado . Más allá de lo que indica de sorpresa, el prefijo neo no refiere a algún rasgo novedoso y diferencial de los regímenes supuestamente neopopulistas respecto del populismo “tradicional”. Lo novedoso en todo caso correría por cuenta de la promoción de un diseño macroeconómico y social opuesto al diseño propio del populismo. Es decir: de todo lo que es contrario al populismo. El neopopulismo sería en realidad antipopulismo –como plantea, sin eufemismos, la literatura difundida por el Banco Mundial y otras agencias financieras multilaterales (por ejemplo, Burki & Edwards, 1996). En todo caso el supuesto neopopulismo de estos regímenes resulta una forma diferente de designar a lo que O'Donnell llamó en su momento “democracias delegativas”: modalidades de ejercicio de la dominación política que ocuparon, sin poder explicar muy bien por qué, el lugar que en el esquema de las transiciones a la democracia debía haber correspondido a un régimen democrático representativo consolidado[10]. El liderazgo fuertemente personalizado, las transgresiones simbólicas, la relevancia acordada a la dimensión mediática de la relación con el público –la política como espectáculo–, el acotamiento o supresión de la autonomía de las organizaciones sociales, todo ello en escenarios de crisis, fragmentación del tejido social y desmovilización popular, configuran esos regímenes políticos que por recurrir periódicamente a elecciones siguen siendo considerados democracias , pero por su manipulación de las instituciones y por su infrecuente concentración de poder son adjetivadas como delegativas –aunque muy a menudo se esté en presencia de usurpaciones consentidas más que de delegaciones. Tampoco hay un sesgo ideológico ineluctable en estas democracias delegativas . Los casos que sirvieron de referencia a la elaboración del concepto (Salinas, Menem, Fujimori) son claramente de derechas, pero la política latinoamericana brinda también ejemplos de otro perfil. Tenemos el caso de Hugo Chávez en Venezuela, y más recientemente, e hipotéticamente, de Lucio Gutiérrez en Ecuador. En ambos están presentes los elementos formales que definen a este tipo de régimen: respuesta a crisis institucionales prolongadas; vulnerabilidad y pérdida de representatividad de los partidos políticos tradicionales; conducción política fuertemente personalizada; relación líder/sectores populares no mediada o débilmente mediada por estructuras organizativas. Pero a diferencia de sus homólogos de derecha, estos otros muestran en las intenciones, ya que no siempre en los resultados, un mayor compromiso con la redistribución de ingresos, la movilización y el potenciamiento de las clases populares, y una política exterior de mayor autonomía respecto de las configuraciones predominantes de poder[11]. Consideraciones finales Ni los escenarios socioeconómicos, ni su articulación en la matriz institucional del Estado, ni el tipo de relación dirigentes/seguidores, ni el diseño global del régimen delegativo o supuestamente neopopulista y los intereses que él promueve, guardan una relación significativa con el populismo. Un régimen político es mucho más que un conjunto de elementos determinados susceptibles de combinaciones contingentes. Es una estructura de poder orientada hacia objetivos definidos en función de intereses. La política tiene que ver, ante todo, con la organización y la conducción de una sociedad en función de determinados objetivos e intereses, y por lo tanto con la configuración de las relaciones de poder. En el fondo, la debilidad de la hipótesis neopopulista deriva de ignorar este tipo de cuestiones. El surgimiento de regímenes políticos de fuerte concentración del poder en liderazgos de alto perfil personal está relacionado con un conjunto variado de factores, de desigual peso de acuerdo con las cambiantes circunstancias. Elemento común a todos los países a los que la hipótesis neopopulista se refiere, es la serie de tensiones, conflictos, acuerdos y enfrentamientos en torno de la implementación de la reestructuración económica y social en clave neoliberal, sea para
impulsarla o para revertirla o para instalar estilos diferentes de desarrollo. Hay, en este sentido, un encuadramiento histórico y estructural bastante preciso. La promoción de esas transformaciones o la lucha contra ellas han sido, en las dos décadas recientes, el eje central de la política latinoamericana y el marco en que esos regímenes han cobrado vuelo. En su origen, estos regímenes expresan la frustración de amplios sectores de población ante el resultado de algunas experiencias democráticas previas. Las expectativas generadas por los gobiernos de Alan García en Perú, Raúl Alfonsín en Argentina, o el segundo de Carlos Andrés Pérez se desvanecieron ante el deterioro de las condiciones de vida de buena parte de los sectores populares, su incapacidad para enfrentar a los grupos de poder económico, el incumplimiento de compromisos electorales, e incluso sus incursiones en hechos de corrupción. Es decir, las mismas razones que fundamentaron las masivas movilizaciones y protestas populares en Ecuador contra los gobiernos de Abdalá Bucaram y de Jorge Jamil Mahuad, que llevaron a la renuncia de Fernando de la Rúa en Argentina, que pusieron en jaque la segunda presidencia de Sánchez de Losada en Bolivia, y forzaron la huida del propio Alberto Fujimori y el fin de su aventura. Estos regímenes también dan testimonio de la tensión entre las demandas populares de bienestar e integración, por un lado, el impacto marginador del ajuste, por el otro, y la necesidad de mantener algunas formas democráticas por razones de política internacional. Desde la perspectiva de los grupos de poder económico y de los gobiernos de los países en los que las grandes corporaciones tienen sus matrices, el criterio que legitimó o deslegitimó a esos regímenes fue su eficacia para impulsar reformas económicas e institucionales amistosas al mercado –como es evidente cuando se compara la benevolente reacción ante el “autogolpe” de Alberto Fujimori con el apoyo al frustrado golpe de Estado contra Hugo Chávez. A la inversa, la legitimación popular de esos mismos regímenes está en relación directa con su capacidad para diseñar vías diferentes de desarrollo que aseguren un cierto bienestar, o al menos para amortiguar el impacto desintegrador de las reformas en curso. En ambos tipos de casos parece claro que el funcionamiento previo del sistema político presentó limitaciones para hacerse cargo de las demandas e intereses cruzados que le formuló la sociedad. En escenarios de fuerte tensionamiento y de abierta conflictividad social, de pérdida de gravitación institucional de algunos actores –por ejemplo el movimiento obrero, los sectores empresariales orientados hacia el mercado interno o beneficiarios de subsidios y estímulos gubernamentales, fracciones de las clases medias– y surgimiento de actores nuevos que compiten por posiciones de poder o por lo menos por un lugar bajo el sol –nuevos pobres, sector informal urbano, empresarios ligados al poder económico externo, a la expansión y la especulación financiera, nuevos segmentos del sector servicios o de tecnologías de punta– la preservación de un mínimo de unidad y de conducción del conjunto social incluye normalmente la concentración de los instrumentos y recursos del poder estatal. En conjunto, estos regímenes políticos son respuestas que las sociedades se dan cuando las instituciones convencionales de la democracia representativa se muestran ineficaces para procesar el conflicto generado en torno de los embates del capitalismo globalizado. Sobre todo, para responder, en esas coyunturas, a las demandas de las clases populares. Porque lo que está en el fondo de la cuestión es la insoslayable participación de las clases populares en cualquier régimen político que hoy por hoy aspire a un mínimo de estabilidad. Esa participación puede ser como actor protagónico o como masa de maniobra; puede expresarse como cuerpo electoral o como clientela de programas de contención social. Pero no puede ser ignorada, y las modalidades que en definitiva ella asume, sus alcances y contenidos, gravitan en el diseño institucional del Estado, en la configuración de los escenarios políticos y en los modos de desenvolvimiento de las relaciones de poder.
Bibliografía Arce, Moisés (1996): “La ‘crisis' de los partidos peruanos: nuevo vino en cueros viejos”, Estudios Sociológicos XIV (41), 311-330. Bresser Pereira, Luiz Carlos (coord.) (1991): Populismo económico. Ortodoxia, desenvolvimentismo e populismo en América Latina , Sao Paulo, Librería Nobel S. A. Burbano, Felipe y Carlos De La Torre (comps.) (1989): El populismo en Ecuador , Quito, Ildis. Burki, Shahid Javed y Sebastián Edwards (1996): Dismantling the Populist State . The Unfinished Revolution in Latin America and the Caribbean , Washington D.C, The World Bank. Byres, J. T. (1979): “Of Neo-Populist Pipe Dreams: Dædalus in the Third World and the Myth of Urban Bias”, Journal of Peasant Studies 9, 210-244. Cameron, Maxwell A. (1994): Democracy and Authoritarianism in Peru . Policial Coalitions and Social Change , New York , St. Martin 's Press. Córdova, Arnaldo (1979): La ideología de la revolución mexicana , México, Siglo XXI. Cotler, Julio y Romeo Grompone (2001): El fujimorismo. Ascenso y caída de un régimen autoritario , Lima, Instituto de Estudios Peruanos. Cotta, Mauricio (1982): “Representación política” en Norberto Bobbio y Incola Matteucci, Diccionario de política , México, Siglo XXI, vol. II, 1425-1433. Crabtree, John (2000): “Neopopulismo y el fenómeno Fujimori” en J. Crabtree y Jim Thomas (eds.), El Perú de Fujimori , Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 45-71. Diez Canseco, Javier (comp.) (2002): Decretos secretos y mal uso de fondos públicos: el Perú bajo el fujimorismo , Lima, Fondo Editorial del Congreso del Perú. Dornbusch, Rudiger y Sebastián Edwards (1990): “La macroeconomía del populismo en América Latina”, El Trimestre Económico , 225, 121-162. __________ (eds.) (1991): The Macroeconomics of Populism in Latin America , Chicago , The University of Chicago Press. Dos Santos, Mario (coord.) (1992): ¿ Qué queda de la representación política ?, Caracas, Nueva Sociedad. Dresser, Dense (1991): Neopopulist Solutions to Neoliberal Problems: Mexico's National Solidarity Program , San Diego, Universidad de California, Center for US-Mexican Studies. Durand, Francisco (1996): “El fenómeno Fujimori y la crisis de los partidos”, Revista Mexicana de Sociología , 96/1, 97-120. Fleur, Sonia (1997): Estado sin ciudadanos. Seguridad social en América Latina , Buenos Aires, Lugar Editorial. Flier, Patricia G. (2000): Las políticas de seguridad social de los populismos latinoamericanos en clave comparada. El desarrollo de la previsión social en los tiempo de Vargas y de Perón , Universidad Nacional de La Plata, Centro de Investigaciones Socio Históricas, inédito. Franco, Carlos (1998): Acerca del modo de pensar la democracia en América Latina , Lima, Fundación Friedrich Ebert. Germani, Gino (1962): Política y sociedad en una época de transición , Buenos Aires, Paidós. Gibson, Edward (1997): “The Populist Road to Market Reform Policy and Electoral Coalitions in Mexico and Argentina ”, World Politics , 49 (3), 339-370. Grompone, Romeo (1998): Fujimorismo, neopopulismo y comunicación política , Lima, Instituto de Estudios Peruanos, documento de trabajo n° 93. Haggard Stephan y Steven B. Webb (1994): Voting for Reform. Democracy, Political Liberalization, and Economic Adjustment , Washington , The World Bank/Oxford University Press. Jessop, Bo et al. (1984): “Authoritarian Populism: Two Nations and Thatcherism”, New Left Review , 147, 32-60.
Knight, Alan (1998): “Populism and Neo-Populism in Latin America , especially Mexico ”, Journal of Latin American Studies , 30, 223-248. Laclau, Ernesto (1978): Política e ideología en la teoría marxista , México, Siglo XXI. Landi, Oscar (1995): “ ‘Outsiders', nuevos caudillos y media politics” en Romeo Grompone (ed.), Instituciones políticas y sociedad , Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 289-299. Lefort, Claude (1992): “La representación no agota la democracia” en Mario Dos Santos (coord.), 139-145. Lynch, Nicolás (2000): Política y antipolítica en el Perú , Lima, Desco. Manin, Bernard (1992): “Metamorfosis de la representación” en Mario R. Dos Santos (coord.), 9-40. __________ (1995): Principes du Gouvernement Représentatif , París, Calmann-Lévy. McClintock, Cynthia (1996): “La voluntad política presidencial y la ruptura constitucional de 1992 en el Perú” en F. Tuesta Soldevilla (comp.), 53-74. Mora y Araujo, Manuel e Ignacio Llorente (comps.) (1980): El voto peronista. Ensayos de sociología electoral argentina , Buenos Aires, Editorial Sudamericana. Mouzelis, Nicos (1985): “Populismo y clientelismo como modos de incorporación de las masas en sistemas políticos semiperiféricos” en C. M. Vilas (comp.), 1994, 458-480. Novaro, Marcos (1996): “Los populismos latinoamericanos transfigurados”, Nueva Sociedad , 144, 90-103. Nun José (1995): “Populismo, representación y menemismo” en Peronismo y menemismo , Buenos Aires, Ediciones de El Cielo por Asalto, 67-99. O'Donnell, Guillermo (1992): Delegative Democracy? , Notre Dame University, Kellog Institute, Working Paper 172. __________ (1993): “Estado, democratización y ciudadanía”, Nueva Sociedad , 128, 62-87. __________ (1996): “Illusions about Consolidation”, Journal of Democracy , 7, (2), 34-51. Pease García, Henry (2003): La autocracia fujimorista. Del Estado intervencionista al Estado mafioso , Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú/Fondo de Cultura Económica. Pitkin, Hanna Fenichel (1967): The Concept of Representation , Berkeley , University of California Press. Porras Nadales, Antonio J. Ed. (1996): El debate sobre la crisis de la representación política , Madrid, Tecnos. Poulantzas, Nicos (1970): Poder político y clases sociales en el Estado capitalista , México, Siglo XXI. Quijano, Aníbal (1998): “Populismo y fujimorismo” en F. Burbano de Lara (comp.), El fantasma del populismo , Caracas, Nueva Sociedad, 171-205. Roberts, Kenneth M. (1995): “Neoliberalism and the Transformation of Populism in Latin America . The Peruvian Case”, World Politics , 48, 82-116. Robles, Horacio B. (2000): Pensando una tipología de las prácticas clientelares. Reflexiones sobre el clientelismo y el populismo , Universidad Nacional de La Plata, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, inédito. Sachs, Jeffrey D. (1989): “Conflito social e políticas populistas na América Latina” en Bresser Pereira (coord.), 1991, 123-149. Sanborn, Cynthia y Aldo Panfichi (1996): “Fujimori y las raíces del neopopulismo” en Fernando Tuesta Soldevilla (ed.), Los enigmas del poder Fujimori 1990-1996 , Lima, Fundación Friedrich Ebert, 29-52. Schmidt, Stephen, J. C. Scott, C. Landé y L. Guasti (eds.) (1977): Friends, Followers and Factions. A Reader in Political Clientelism , Berkeley , University of California Press.
Schoultz, Lars (1983): The Populist Challenge. Argentine Electoral Behavior , Chapel Hill , University of North Carolina Press. Tuesta Soldevilla, Fernando (1989): Pobreza urbana y cambios electorales en Lima , Lima, Cuadernos de Desco, n° 14. Tuesta Soldevilla, Fernando (1994): Perú político en cifras , Lima, Fundación Friedrich Ebert. Vilas, Carlos M. (1988): “El populismo latinoamericano: un enfoque estructural”, Desarrollo Económico , 111, octubre-diciembre, 323-352. ________ (1994): “Estudio preliminar: El populismo o la democratización fundamental de América Latina” en C. M. Vilas (comp.), La democratización fundamental. El populismo en América Latina , México, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, 11-118. __________ (1995): “Entre la democracia y el neoliberalismo: Los caudillos electorales de la postmodernidad”, Socialismo y Participación , 69, 31-43. __________ (1998): América Latina: Experiencias comparadas de combate a la pobreza , México, Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades, UNAM. __________ (1999): “Entre la desigualdad y la globalización: la calidad de nuestras democracias”, Boletín Electoral Latinoamericano , XXII, 09-198. ________ (2001): “La sociología política latinoamericana y el ‘caso' Chávez: entre la sorpresa y el déjà vu ”, Revista Venezolana de Economía y Ciencias Sociales , n° 7, vol. 2, 129-145. Weffort, Francisco (1973): “Clases populares y desarrollo social (contribución al estudio del populismo)” en F. Weffort y A. Quijano, Populismo, marginalidad y dependencia , San José, Educa, 17-169. ___________ (1992): Qual Democracia ?, Sao Paulo, Editora Schwarcz. Weyland, Kurt (1996): “Neo-Populism and Neo-Liberalism in Latin America : Unexpected Affinities”, Studies in Comparative International Development , 31, (Fall), 3-31. ________ (1999): “Neoliberal Populism in Latin America and Eastern Europe ”, Comparative Politics , n° 31, vol. 4, 379-401. Notas: **+ Carlos M. Vilas, “¿Populismo reciclado o neoliberalismo a secas? El mito del 'neopopulismo' latinoamericano”, en Revista Venezolana de Economía y Ciencias Sociales Nº 3, vol. 9, Caracas, mayo-agosto de 2003, pp. 13-36. [1] Lo que sigue es una síntesis apretada de Vilas (1988 y 1994). [2] Ver mi crítica a este reduccionismo en Vilas (1994, 112-116). [3] Quince años antes Jessop et al. (1984) habían extendido el concepto de populismo al gobierno neoliberal de Margaret Thatcher. *4+ Roberts menciona cinco características del populismo: 1) “un patrón personalista y paternalista, aunque no necesario carismático, de liderazgo político”; 2) “una coalición política policlasista heterogénea, concentrada en los sectores subalternos”; 3) movilización política de arriba hacia abajo que pasa por alto las formas institucionalizadas de mediación o las subordina a la relación directa líder-masas; 4) ideología anti-e stablishment que exalta a los sectores subalternos; 5) proyecto económico que utiliza métodos redistributivos o clientelistas para crear una base material de apoyo popular al líder. Varios autores peruanos optaron por la caracterización del régimen presidido por Alberto Fujimori como neopopulista : por ejemplo, Sanborn y Panfichi, 1996; Grompone, 1998; Crabtree, 2000. [5] Los estudios se refieren a la ciudad de Lima y destacan la reducción tanto del ausentismo electoral como del voto en blanco en los distritos de mayor pobreza y de trabajadores asalariados. Cameron (1994) ofrece una perspectiva un poco más matizada.
[6] No siempre se destaca que las tropelías institucionales de Fujimori no le fueron gratuitas en términos electorales. Mientras que en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 1990 la coalición fujimorista sumó más de 62% de los votos emitidos, en la elección para el Congreso Constituyente Democrático en noviembre de 1992 esa misma coalición recogió poco más de 49%, y 52,3% en el referéndum constitucional de diciembre de 1993. Recién en 1995 Fujimori recuperó el nivel de apoyo electoral de 1990; obtuvo la reelección con 64% de los votos y una distancia de más de cuarenta puntos respecto del segundo. [7] Pese a aceptar para el régimen de Fujimori la definición de neopopulismo , Grompone (1998) destaca el carácter no mediado de la relación líder/masas y, en este sentido, su diferenciación respecto de los regímenes propiamente populistas. [8] Ver Schultz (1977 y 1983) y Mora, Araujo y Llorente (1980) para las bases electorales del peronismo entre 1946 y 1973. Sobre Perú, ver Tuesta Soldevilla (1994); sobre el ibarrismo ecuatoriano Burbano y de la Torre (1989), en general, Vilas (1994, 80-93). [9] Fue también un Leviatán muy corrupto: ver, por ejemplo, Diez Canseco (2002), Pease García (2003) sobre los extraordinarios niveles de corrupción y arbitrariedad del régimen de Fujimori. [10] Ver O'Donnell (1992, 1993, 1996) y las críticas de Weffort (1992) y Franco (1998). La identificación entre ambas cosas es explícita en McClintock (1996). [11] Sobre el caso de Chávez en Venezuela ver Vilas (2001).
Carlos Vilas, un docente de la UNLa entre los 25 grandes pensadores del mundo
En una edición especial por el 40º aniversario de la prestigiosa revista francesa Le Nouvel Observateur, se realizó una lista de los 25 grandes pensadores del mundo. Entre ellos, se encuentra el politólogo y docente de la Universidad Nacional de Lanús (UNLa) Carlos María Vilas, un profundo analista de la problemática latinoamericana, que no sólo ha reflexionado sobre conceptos como dependencia, democracia y populismo, sino que ha sido un activo promotor de transformaciones políticas, demostrando una actitud comprometida con la realidad de América Latina. La lista de prestigiosos pensadores está integrada por personajes de la talla de Slavoj Zizek, Néstor García Canclini, Toni Negri y Richard Rorty, entre otros. Carlos Vilas es el único autor latinoamericano incluido en la antología sobre revoluciones y cambio político de la International Library of comparative politics and Goverment y en la Enciclopedia of Political Revolutions del Congressional Quaterly (Washington D.C.) “Después de sus primeras investigaciones acerca de las empresas multinacionales y su relación con la dominación y dependencia en los países perféricos, sobretodo en Argentina, Carlos Vilas se erigió como el más notable investigador de la realidad política de los países del Caribe y América Central”, consigna el texto de la revista parisina. Vilas es autor y coautor de 19 libros publicados en castellano, inglés, portugués, y de más de 200 artículos en revistas académicas y profesionales de Argentina y otros 16 países de Latinoamérica, Estados Unidos, Canada, Inglaterra, España, Italia, Alemania, Dinamarca, Holanda, Noruega, Suecia, Turquía y Filipinas. La mayor parte de estas obras está incorporada a los catálogs de las principales bibliotecas universitarias y públicas de América Latina, Europa, Estados Unidos, Asia y Canadá.
Breve reseña curricular: Carlos María Vila nació el 3 de enero de 1943, en Realicó, La Pampa. Casado y con cinco hijos, es abogado (UNLP 1966), magíster en Ciencia Política y Administración Pública (FLACSO 1970). Desde julio de 2003 se desempeña como director del Etoss (Ente Tripartito de Obras y Servicios Sanitarios) en representación del Poder Ejecutivo Nacional. Anteriormente fue Subsecretario de Seguridad y Protección Civil de la Secretaría de Seguridad Interior, Subsecretario de Formación y Capacitación del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Director Nacional de Capacitación del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP, 1998-2001). Durante el período 1999-2001 se desempeñó como presidente del Directorio del Instituto Argentino para el Desarrollo Económico. Por otra parte, ha sido consultor de agencias gubernamentales europeas en programas de formación de recursos humanos, desarrollo social e institucional, políticas públicas, seguridad y reforma del Estado. Consultor de UNICEF, PNUD, ACNUR y OEA en Centroamérica y el área andina. Funcionario de la CEPAL (1974-76). Asesor de gobiernos de Centroamérica. Actualmente es profesor de posgrado en la UNLa (Maestría en Políticas Públicas y Gobierno) y de la UBA. Anteriomente, fue docente en las universidades de La Plata, Complutense de Madrid, Autónoma de Barcelona, Columbia, Duke, Florida, Autónoma de Santo Domingo, entre otras casas de altos estudios.
Violencia y liberación x Gouns Consideraciones sobre una entrevista de Ramonet con Mustafá Barguti, líder de Iniciativa Nacional Palestina :: ¿Quién puede creer que la desobediencia civil podría por sí sola desalojar a los colonos de Cisjordania y Jerusalén? En una reciente entrevista, Mustafá Barguti manifestaba lo siguiente: “Siendo objetivo, hay que reconocer que tanto Hamas como Hezbollah son resultado de la intransigencia israelí" ¿Qué decir de esta obviedad? Por definición, la aparición de cualquier movimiento contestatario es consecuencia de la intransigencia del sistema dominante. Así, también podemos afirmar que el paso de Fatah a la lucha armada, en 1965, fue consecuencia de la intransigencia del Estado de Israel. En la época de la Argelia colonial, la creación del FLN, en 1954, fue asimismo consecuencia de la intransigencia francesa frente al MTLD de Messali Hadj. Del mismo modo, la creación histórica de los partidos socialistas y comunistas puede ser considerada como consecuencia de la intransigencia de los regímenes burgueses frente a los movimientos justicialistas anteriores. No parece que haya nada nuevo bajo el sol. Sin embargo, tras esta evidencia se esconde, en realidad, una insinuación extendida sobre Hamas, según la cual su creación habría estado supervisada por los propios servicios israelíes o, al menos, estos la habrían visto con buenos ojos. ¿Es necesario insistir en que todos los poderes establecidos intentan aprovechar la aparición de un nuevo movimiento de oposición para fragmentar la contestación global? Ya se sabe, “divide y vencerás”. Así, por ejemplo, en la Rusia zarista la policía política, la terrible Okrana, al principio, sin duda, vio con buenos ojos la aparición del Partido Socialdemócrata de Rusia como contrapunto a movimientos anteriores, nihilistas o socialistas revolucionarios, aparentemente más radicales y que practicaban, a diferencia del POSDR, un terrorismo desenfrenado en el sentido propio del término. Claro que no sospechaba que se trataba del germen del futuro partido bolchevique de Lenin, el que derrocaría a la dinastía de los
Romanov… Pero además, el hecho de que la Okrana hubiera conseguido infiltrar la organización de la Guardia Roja hasta los mismos órganos directivos, no cambió en nada el sentido de la historia, como se decía. Pero volvamos a las declaraciones de Mustafá Barguti. Su afirmación da a entender claramente que habría algo anormal en la aparición de estas dos formaciones: Hamas y Hezbollah. Como si hubieran nacido por generación espontánea y , en el fondo, no tuvieran nada que ver con las propias sociedades palestina y libanesa. Hijas de la violencia y las intrigas israelíes, quedarían así deslegitimadas desde su mismo origen. Es inútil decir que esta tesis, que se apoya alegremente sobre ciertos prejuicios post o pre 11 de septiembre, no se corresponde en absoluto con la realidad. Sin duda, habría mucho que comentar sobre la secularización de los movimientos religiosos en esta zona y su difícil inserción en el juego político. Pero, como se suele decir, más que un error, sería un crimen político presentar o dejar que se presenten estas formaciones como fuerzas casi exógenas, incluso artificiales. E incluso, aunque Israel, que lleva tiempo buscando una alternativa moderada a la OLP, seguramente se alegró al principio del nacimiento de Hamas, las dinámicas sociales que presidieron su aparición son muy reales. Al mismo tiempo, hemos de reconocer que es innegable que el Hamas de los años ochenta, mojigato y organizado en torno a sociedades deportivas (de nuevo, el deporte… la resistencia china antibritánica del siglo XIX encubrió sus actividades tras los clubs de boxeo, en el momento de la famosa “rebelión de los boxeadores”) no tiene gran cosa que ver con el Hamas de hoy. Pero vayamos a la propuesta esencial de Mustafá Barguti. Organizar un gran movimiento de contestación palestino mediante medios pacíficos como los de Mahatma Gandhi o Nelson Mandela. Para empezar, contrapongamos el hecho de que afirmar que el movimiento de Gandhi y aún más el de Nelson Mandela habrían vencido únicamente gracias a sus medios pacíficos no es, ni más ni menos, que una gran falacia. Por lo que concierne al movimiento de Gandhi, empezaremos señalando que este no tenía que enfrentarse, como tienen que hacerlo los palestinos, a un colonialismo de ocupación sino contra una administración colonial que intentaba explotar las Indias en un sentido capitalista. Sin duda, el poder británico administraba la perla del Imperio con mano de hierro, pero a excepción de las tropas, administradores civiles y empresarios, allí no había ni asentamiento colonial ni kibutz, intentado reemplazar a los indígenas. Y este es un matiz importante. Además, la lucha liberadora de Gandhi se desarrolló en un momento histórico, la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría, más bien favorable a la lucha anticolonial. De hecho, el temor de ver caer a la India, como China, en el comunismo, llevó a los británicos, alentados por Estados Unidos, a reconsiderar su presencia en este país. Y lo que es más, al margen de este movimiento aparentemente pacífico, se desarrollaron de forma continua muchas acciones violentas contra agentes coloniales o infraestructuras británicas. Además, recordemos que después de la guerra, Londres, que desde los años treinta ya es partidaria de la independencia de las Indias, intenta sobre todo formalizar sus relaciones con el futuro e ineluctable Estado independiente. Finalmente, en cuanto a los métodos de lucha, es cierto que la total dependencia económica de Palestina respecto a Occidente e incluso Israel, la otra cara de la famosa ayuda internacional, no impide pero hace mucho más difícil cualquier iniciativa de boicot comparable a las que inició Gandhi.
Otra diferencia es que el partido del Congreso indio podía sacar a la calle sin ningún problema masas humanas considerables con las que evidentemente no cuentan en absoluto los palestinos. Todo ello nos llevan a relativizar esta referencia a los métodos de Gandhi al igual que él mismo los relativizó en algunas de sus citas: “Creo que para liberarse sólo se puede elegir entre la violencia y la cobardía, yo aconsejo la violencia” y también “Yo insistía en cada reunión en que a no ser que sintieran que con la no violencia tenían una fuerza infinitamente mayor a la que poseían antes, no debían aplicar la no violencia y debían retomar las armas". Hagamos ahora la comparación, todavía más disparatada, con el ANC. El Congreso Nacional Africano, que abandona en 1960 la estrategia de la no violencia, se dota entonces de un brazo armado con el poético nombre de “la lanza de la nación” (Umkhonto we Sizwe). Este pone bombas en los supermercados y cines de los barrios blancos de Sudáfrica y ataca a los civiles blancos en sus granjas-colonias aisladas. En ellas, a veces, se masacra a mujeres y niños blancos. Algunos colaboradores indígenas sufren el famoso suplicio del neumático (un neumático en llamas alrededor de la cintura). Además, aunque la corrupción en el seno del ANC fue siempre patente, el ANC nunca fue desacreditado, ni calificado de movimiento corrupto. Porque a diferencia de lo que pasa con el movimiento de liberación palestino, lo que siempre se ha planteado es si la causa era justa y no sus epifenómenos, ni los medios empleados. Además, otro factor favorable a la lucha del ACN, con el que no cuenta el movimiento palestino, es que en los años ochenta, cuando el apartheid se había quedado totalmente obsoleto desde el punto de vista de sus intereses e incluso era contraproducente, lo importante era, sobre todo para Estados Unidos, que el sistema evolucionara sosegadamente. Sin embargo el imperialismo, indolente por naturaleza, solo acepta cambios de forma obligada y forzada, y no hay ninguna duda de que sin la resuelta oposición del ANC, habría perdurado. Es sabido que desde la presidencia de Carter, algunos responsables estadounidenses estaban convencidos de la necesidad de reformar el régimen del apartheid. Pero además, esta voluntad iba a tener un nuevo impulso en los años ochenta, bajo la presidencia de Ronald Reagan, en un momento en el que, (una vez más) debido al calentamiento de la guerra fría (la invasión del Líbano por parte de Israel, la de la Isla de Granada por los Marines, Afganistán, el Salvador, etc.) se trataba, apoyando la liberación de Sudáfrica, de conservar lo esencial y privar así a la propaganda soviética de un argumento antiimperialista de peso. Pero volvamos a Palestina e interroguémonos más bien sobre la negativa de los medios de comunicación dominantes y también de algunos supuestos amigos de Palestina, a relacionar la violencia liberadora con la ocupación israelí, como se hizo entonces con el régimen de Pretoria. Así, los métodos de lucha que utiliza el movimiento nacional palestino, sin distinción de tendencias, adquieren a los ojos de muchos en Francia, incluida la extrema izquierda, mayor importancia que los fines liberadores. Y sin embargo, los mismos que hoy critican duramente el terrorismo palestino precipitándose a darle lecciones de moral, como ha sido hace poco el caso del atentado contra la Jeshiva de Jerusalén, olvidan que tanto el PCF, como el Movimiento de la Paz y la CGT, sin mencionar otras corrientes de la izquierda francesa, no dijeron nunca nada de los atentados contra los blancos de la ANC. Se consideraba al poder racista de Sudáfrica responsable, en menor y en mayor medida, de todas las pérdidas humanas ocurridas en esa parte del mundo. En cuanto a Nelson Mandela, recordemos
que este supuesto adepto de la no violencia fue detenido en 1962 cuando volvía de Argelia, gobernada entonces por Ben Bella. No había ido allí precisamente para conocer la artesanía típica, sino que volvía de un entrenamiento militar (efectuado en la bonita ciudad de Maghnia). Está claro que cualquier tipo de violencia es detestable y todo indica que el debate sobre la militarización, que ha gangrenado ciertos movimientos de liberación, llegando incluso a hipotecar gravemente su futuro, no es superfluo. Pero lo contrario tampoco es cierto. ¿Cómo imaginar una salida favorable a estos movimientos sin una relación de fuerzas real? ¿Quién se puede creer que la desobediencia civil podría por sí sola desalojar a los colonos de Cisjordania y Jerusalén, permitir el retorno de los refugiados y liberar a los prisioneros y Jerusalén? En cuanto a la solidaridad internacional, seamos realistas, por muy fuerte que sea, su nivel actual, mediocre, es incapaz de producir en esta relación de fuerzas un cambio significativo. Es interesante señalar que los mayores éxitos diplomáticos de la OLP (por ejemplo, Arafat en la ONU en 1976) se obtuvieron en un momento, los años setenta, en el que los palestinos practicaban el “terrorismo” espectacular a gran escala. Contraponer la primera Intifada supuestamente pacifica (¡con al menos 800 jóvenes asesinados!) a la segunda, al parecer militarizada por Arafat, como lo hacen algunos es otro sinsentido. En primer lugar, porque supone ignorar que la primera Intifada estuvo lejos de ser tan espontánea como se dice, ya que estuvo alimentada por los propios Arafat y Abú Jihad desde Túnez. E incluso Abú Jihad pago con la vida su papel decisivo en este movimiento. Los hombres de Abú Jihad y Hamas, que acababa de crearse, llevaron a cabo entonces varias acciones armadas y ejecutaron a algunos colaboradores. Por lo demás, el fracaso de esta primera Intifada más bien pacifica fue precisamente lo que le dio una orientación distinta a la segunda. En cuanto a esta última, se quiera o no, ha conseguido por las armas la liberación de Gaza, incluso si se trataba para Sharon de una maniobra dilatoria: dividir el movimiento palestino replegándose en la Palestina útil, Cisjordania. Sin embargo, está claro que lo que destaca de la situación actual en Palestina es que las dificultades a las que se enfrentan los palestinos, aunque solo sea por el número de enemigos, son mucho más grandes que las que han tenido que afrontar la mayoría de los movimientos de liberación de los últimos tiempos. Incluso aunque, a primera vista, las pérdidas que sufren puedan parecer pequeñas en comparación con las que se produjeron en Vietnam o Argelia. Sin duda, acabar con el colonialismo israelí es una tarea mucho más compleja que la de combatir al imperialismo estadounidense o al colonialismo francés, y aún más, en un aislamiento internacional hacia el movimiento nacional palestino de los más terribles. Pero, si no se puede descartar ninguna hipótesis de lucha, ya sea civil o armada, es muy poco probable que Israel se deje convencer por métodos de desobediencia civil tipo Gandhi, para que acabe con los asesinatos "selectivos" en Gaza y libere a los prisioneros como está punto de conseguir Hamas con la mediación de Egipto. Un posible éxito en este campo tendrá mucho más que ver con el miedo que el Estado sionista siente frente a los cohetes sobre Sderot y Ashkelon, cuyos lanzamientos es incapaz de detener, que con la voluntad de este último de respetar el derecho internacional. Es un hecho que la lucha armada, y eso ha quedado demostrado en todos los movimientos de liberación, supone en sí misma la negación de la democracia, pero es evidente que dejar las armas significaría para los
palestinos la muerte anunciada de su lucha de liberación. Una muerte que, a pesar del supuesto aumento del apoyo de las opiniones occidentales que se produciría en compensación, no tendría vuelta atrás. Sin embargo, podemos apostar a que enseguida surgiría una lucha armada, comparable a la de Gaza y fruto de la intransigencia israelí, en Cisjordania. Dirigida por Fatah, Hamas, la Jihad o el FPLP. Por razones de eficacia estaría bien que estuviera unida a un gran movimiento de resistencia civil. Pero la elección de esos medios y esos fines, en todas sus posibilidades, les corresponde hacerla a los palestinos y solo a ellos. En cambio, la labor del movimiento de solidaridad internacional debe ser apoyar esta lucha anticolonial con manifestaciones, recogidas de fondos, misiones de solidaridad, presiones políticas sobre los gobiernos occidentales, exceptuando, porque los que aconsejan pocas veces son los que pagan, cualquier actitud paternalista o moralista. Lo que, al parecer, es una especialidad francesa.
Separatismo y construcción imperial en el siglo XXI
x James Petras - La Haine
El régimen indianista de Morales-García Linera, compuesto en gran parte de mestizos ex
empleados de ONG financiadas en el extranjero, nunca utilizó el monopolio constitucional
formal de la fuerza para declarar fuera de la ley a los secesionistas
Introducción: El contexto histórico
A lo largo de la moderna historia imperial, divide y vencerás ha sido la divisa esencial que
ha permitido que países europeos relativamente pequeños y pobres de recursos
conquistasen naciones mucho mayores en tamaño y población, y más ricas en recursos
naturales. Se dice que para cada funcionario británico destacado en la India, había
cincuenta sijs, gurkas, musulmanes e hindúes en el ejército colonial británico.
La conquista europea de África y Asia la dirigieron oficiales blancos y la lucharon soldados
negros, cobrizos y amarillos, para que el capital blanco pudiera explotar a sus trabajadores
y a los de color. Las diferencias regionales, étnicas, religiosas, sectarias, tribales,
comunitarias y otras, fueron politizadas y explotadas de modo que permitieron a los
ejércitos imperiales la conquista de pueblos guerreros. En décadas recientes, los
constructores del imperio de estadounidense se han convertido en los grandes promotores
de la estrategia de divide y vencerás en el mundo entero. En los años 70, la CIA dejó de
promover las dudosas virtudes del capitalismo y la democracia, y pasó a alinearse,
financiándolas y dirigiéndolas, con las elites religiosas, étnicas y regionales que se oponían
a los regímenes nacionales independientes u hostiles a la construcción imperial
estadounidense en todo el mundo.
La clave de la construcción imperial por vía militar de Estados Unidos descansa en dos
principios: la invasión militar directa y el fomento de movimientos separatistas que puedan
llevar a la confrontación militar.
La construcción imperial en el siglo XXI nos muestra la práctica ampliada de ambos
principios en Iraq, Afganistán, Irán, Líbano, China (Tíbet), Bolivia, Ecuador, Venezuela,
Somalia, Sudán, Birmania y Palestina. Es decir, en cualquier país en el que EE UU no
puedan instalar un gobierno satélite estable recurrirá a la financiación y el fomento de
organizaciones y líderes separatistas que utilizan pretextos étnicos, religiosos y regionales.
Fiel a los principios tradicionales de la construcción imperial, Washington solamente apoya
a los separatistas en los países que se niegan a someterse a su dominación imperial,
mientras que se opone a los separatistas que ofrecen resistencia al imperio y a sus aliados.
Es decir, los ideólogos imperiales no son ni hipócritas ni utilizan un doble rasero (como con
frecuencia afirman sus críticos de izquierda), sino que mantienen públicamente el principio
de preferencia imperial a la hora de evaluar los movimientos separatistas y concederles o
negarles su apoyo.
En cambio, muchos críticos del imperio aparentemente progresistas hacen declaraciones
universales a favor del derecho de autodeterminación e incluso lo aplican a los grupos
separatistas más rancios y reaccionarios patrocinados por el imperio, con resultados
catastróficos. A las naciones independientes y sus gentes, cuando se oponen a grupos
separatistas apoyados por EE UU, se las bombardea hasta la destrucción y se les coloca el
sambenito de criminales de guerra. A los que se oponen a los separatistas y viven en el
nuevo Estado se los asesina o se los fuerza al exilio. Los pueblos liberados sufren la tiranía
y el empobrecimiento inducido por los separatistas apoyados por Estados Unidos, y muchos
se ven obligados a emigrar a otros países para su supervivencia económica.
Ninguno, o casi, de los críticos progresistas de la URSS que apoyaban la separación de sus
repúblicas ha mostrado en ningún momento ningún remordimiento y menos aún ninguna
reflexión autocrítica, incluso frente a las catástrofes socioeconómicas y políticas en los
estados secesionistas que duran ya décadas. Sin embargo, estos mismos progresistas siguen
hoy predicando los grandes principios morales a aquellos que los cuestionan y rechazan
algunos movimientos separatistas porque provienen y sobrepasan los esfuerzos para
ampliar el imperio de EE UU.
En estas últimas décadas, el éxito de Washington en la cooptación de los llamados liberales
progresistas en apoyo a los movimientos separatistas listos para ser satélites imperiales ha
sido notable y las consecuencias para los derechos humanos, nefastas.
La mayor parte de los progresistas europeos y estadounidenses apoyaron a los grupos que
siguen:
1. fundamentalistas bosnios apoyados por EE UU, neofascistas croatas y terroristas albano-
kosovares, con el resultado de limpiezas étnicas y la conversión de sus Estados antes
soberanos en bases militares de EE UU, gobiernos satélites y desastres económicos,
destruyendo totalmente el estado de bienestar multinacional yugoslavo;
2. fundamentalistas islámicos afganos, apoyados por EE UU, que provocaron la destrucción
de un régimen político afgano laico y reformista, promotor de la igualdad de la mujer y de
importantes campañas anti feudales en las que participaron hombres y mujeres, de una
reforma agraria general y de amplios programas sanitarios y educativos. Como resultado de
los éxitos militares tribales EE UU-islámicos, millones de personas resultaron muertas,
desplazadas y desposeídas, y los jefes militares tribales medievales, anticomunistas
fanáticos, destruyeron la unidad del país.
3. La invasión de Iraq por EE UU, que destruyó el estado moderno, laico, nacionalista y de
avanzado sistema socioeconómico de ese país. Durante la ocupación, el apoyo de EE UU a
movimientos religiosos y tribales, clanes y movimientos separatistas étnicos ha conducido a
la expulsión de más del 90% de su clase científica y profesional moderna y de la matanza
de más de 1.000.000 de iraquíes… todo ello en nombre de la sustitución de un régimen
represivo y, sobre todo, de la destrucción de un Estado opuesto a la opresión israelí de
Palestina.
Es evidente que la intervención militar de EE UU promueve el separatismo como medio
para el establecimiento de una base regional de apoyo. El separatismo facilita la creación de
gobiernos títere minoritarios y tiene por función contrarrestar a países vecinos opuestos a
las depredaciones del imperio. En el caso de Iraq, el separatismo kurdo apoyado por EE UU
precedió a la campaña de aislamiento de un adversario, y de creación de coaliciones
internacionales para presionar y debilitar al Gobierno central. Washington resalta las
atrocidades de estos regímenes como casos de Derechos Humanos para alimentar campañas
globales de propaganda. Más recientemente, se ha hecho evidente en las protestas
teocráticas tibetanas financiadas por EE UU contra China.
Los separatistas reciben ayuda en tanto que potenciales tropas de choque terroristas para
atacar sectores económicos estratégicos y proporcionar la información, real o fabricada,
como en el caso de Irán entre los kurdos y otros grupos de minoría étnica.
¿Por qué el separatismo?
Los constructores del imperio no siempre recurren a los grupos separatistas, especialmente
cuando tienen satélites a escala nacional que controlan el Estado. Es sólo cuando su poder
se limita a algunos grupos concentrados territorial o étnicamente cuando sus servicios
secretos recurren a los movimientos separatistas y los promueven. Estados Unidos apoya el
movimiento separatista a lo largo de un proceso gradual, comenzando por la exigencia de
una mayor autonomía y descentralización, y mediante movimientos tácticos destinados a
adquirir una base de poder político local, acumular recursos económicos, reprimir grupos
anti separatistas y minorías étnicas o religiosas políticas locales vinculadas al Gobierno
central (como la represión de las comunidades cristianas en Iraq septentrional, reprimidas
por los separatistas kurdos por sus lazos con el partido Baaz, o los Roma de Kosovo,
expulsados y asesinados por los albano-kosovares a causa de su apoyo al sistema federal
yugoslavo).
La tentativa de usurpar por la fuerza los recursos nacionales y la sustitución de los aliados
locales del Gobierno central da lugar a confrontaciones y a conflictos con el poder legítimo
del Gobierno central. Es al llegar a este punto cuando el apoyo (imperial) exterior es crucial
para la movilización de los medios de comunicación de masas para denunciar la represión
de movimientos nacionales pacíficos simplemente ejerciendo su derecho a la
autodeterminación. Una vez que la máquina imperial de propaganda de los medios de
comunicación de masas toca la noble retórica de la autodeterminación y la autonomía, la
descentralización y el autogobierno, la gran mayoría de las ONG financiadas por EE UU y
Europa se suman al coro y atacan los esfuerzos del Gobierno por mantener un estado-
nación unificado estable. En nombre de la diversidad y de un Estado multiétnico, las ONG
de obediencia occidental proporcionan un soporte ideológico a los pro imperialistas.
Cuando los separatistas tienen éxito, y llegan a asesinar y realizar limpiezas de las minorías
étnicas y religiosas ligadas al gobierno central anterior, las ONG guardan un estruendoso
silencio o incluso justifican con complicidad las masacres como una reacción excesiva a la
represión previa. La máquina propagandística de Occidente llega a celebrar la expulsión
por parte del Estado separatista de centenares de miles de personas, como fue el caso con
los serbios y Roma de Kosovo y de la región croata de Krajina con titulares como "Los
serbios huyen a la carrera: les está merecido‖, acompañados de fotos en las que tropas de la
OTAN supervisan el traslado de familias indigentes desde sus pueblos y ciudades
ancestrales a campos escuálidos en una bombardeada Serbia.
Al mismo tiempo, los políticos occidentales musitan beaterías sobre las matanzas de civiles
serbios por el KLA, como por ejemplo cuando el anterior ministro de Asuntos Exteriores
alemán, Joschka Fischer (de Los Verdes) se lamentó del siguiente modo: "Comprendo el
dolor que sienten ustedes (los del KLA), pero no deberían lanzar granadas a niños (serbios)
en edad escolar."
El paso de la autonomía en un estado federal a un estado independiente se fundamenta en la
ayuda canalizada y administrada por el Estado imperial a la región autónoma, consolidando
con ello su existencia de facto como un estado independiente. Esto ha ocurrido claramente
la evolución desde 1991 hasta hoy del Kurdistán de Iraq Septentrional, en un principio no
fly zone (zona de prohibición de vuelos) y ahora región autónoma.
El mismo principio de autodeterminación exigido por EE UU y sus satélites separatistas se
le niega a otras minorías del mismo territorio. En cambio, los medios de comunicación de
propaganda de EE UU hacen referencia a ellos como agentes o caballos de Troya del
Gobierno central.
Consolidado por la ayuda exterior imperial, y las relaciones empresariales con las empresas
transnacionales de EE UU y la UE, apoyados por fuerzas paramilitares y cuasi militares
locales de policía (así como por cuadrillas criminales organizadas), el régimen autónomo
declara su independencia, y es reconocido poco después por sus patrones imperiales. Tras
de la independencia, el régimen separatista ofrece concesiones territoriales e instalaciones
para la construcción de bases militares de EE UU. El patrón imperial goza de privilegios de
inversión, lo que compromete seriamente la soberanía nacional.
El ejército de ONG locales e internacionales raramente formula alguna objeción a este
proceso de incorporación al Imperio de la entidad independiente, ni siquiera cuando el
propio pueblo liberado se opone. En la mayoría de los casos el grado de gobernanza local y
libertad de acción del régimen independiente es menor que cuando era una región
autónoma o federal en el estado nacionalista unificado previo.
No es raro que los regímenes separatistas formen parte de movimientos irredentistas
vinculados a contrapartes en otros estados. Cuando los movimientos irredentistas
transnacionales desafían a los estados vecinos que son también objetivos de los
constructores de imperio estadounidenses, pasan a ostentar la función de plataformas de
lanzamiento de ataques militares de baja intensidad y de actividades terroristas de las
fuerzas especiales.
Por ejemplo, casi todas las organizaciones separatistas kurdas tienen elaborado un mapa del
Gran Kurdistán que cubre un tercio de la zona sudeste de Turquía, el Iraq Septentrional,
una cuarta parte de Irán, partes de Siria y cualquier otro lugar donde puedan encontrar un
enclave kurdo. Los comandos estadounidenses operan al lado de los separatistas kurdos y
aterrorizan poblaciones iraníes en nombre de la autodeterminación, y grupos kurdos con
fuerte apoyo militar de EE UU han ocupado y gobiernan Iraq septentrional y proporcionan
tropas mercenarias peshmerga para masacrar a la población árabe-iraquí en ciudades y
pueblos que se oponen a la ocupación de EE UU, en las regiones centrales, occidentales y
meridionales. Estos grupos han iniciado el desplazamiento forzado de no kurdos (árabes,
cristianos caldeos, turcomanos, etc.) del llamado Kurdistán iraquí y han procedido a la
incautación de sus hogares, negocios y explotaciones agrícolas.
Los separatistas kurdos apoyados por EE UU han creado conflictos con el Gobierno turco
vecino, pues Washington intenta retener a sus satélites kurdos para su utilización en Iraq,
Irán y Siria sin por ello enemistarse con su cliente estratégico de la OTAN: Turquía. Sin
embargo los activistas separatistas turco-kurdos del PKK han alabado a EE UU por lo que
califican de colonialismo progresista en el desmantelamiento efectivo de Iraq y la
formación de los fundamentos de un Estado kurdo.
La decisión de EE UU de colaborar con el ejército turco, o de tolerar por lo menos sus
ataques militares contra ciertas zonas ocupadas por los separatistas kurdos del PKK con
sede en Iraq forma parte de su política global de dar prioridad a las alianzas imperiales
estratégicas y sus aliados por encima y contra cualquier movimiento separatista que los
amenace. Por lo tanto, mientras que EE UU apoya a los separatistas kosovares contra
Serbia, se opone a los separatistas de Abjasia que luchan contra su gobierno satélite de la
República de Georgia.
Mientras que EE UU apoyó a los separatistas chechenos contra el gobierno de Moscú, se
opone a los separatistas vascos y catalanes en su lucha contra el aliado de la OTAN de
Washington, España. A la vez que Washington ha financiado con largueza a los separatistas
bolivianos dirigidos por los oligarcas de Santa Cruz contra el gobierno central en La Paz,
apoya la represión del gobierno chileno ante las demandas de los indígenas mapuche de sus
derechos a la tierra y los recursos de la zona meridional y central de Chile.
Es evidente que autodeterminación e independencia no son principios universales que
definan la política exterior de EE UU, ni nunca lo han sido, como testimonian las guerras
de EE UU contra las naciones indias, los esclavistas secesionistas sureños y las invasiones
recurrentes de Estados latinoamericanos, asiáticos y africanos independientes. Lo que rige
en la política de EE UU es la cuestión de si un movimiento separatista, sus líderes y
programa fomentan o no la construcción del imperio. Sin embargo, pocas veces plantean
los llamados progresistas, izquierdistas o antiimperialistas la pregunta inversa: ¿debilita el
movimiento separatista o de independencia el imperio y consolida las fuerzas
antiimperialistas, o no? Si aceptamos que el problema determinante es la derrota de la
máquina de matar millones de personas llamada imperialismo estadounidense, entonces es
legítimo evaluar y apoyar determinados movimientos independentistas, así como rechazar
otros.
No hay nada hipócrita o incómodo en el aumento de más altos principios en tomar estas
decisiones políticas. Es sabido que Hitler justificó la invasión de Checoslovaquia en
defensa de los separatistas de los Sudetes, igual que una serie de presidentes
estadounidenses han justificado la división de Iraq en nombre de la defensa de los kurdos, o
los suníes o los chiíes, o cualesquiera que sean los líderes tribales que se presten a la
construcción imperial de EE UU. Lo que define la política antiimperialista no son los
principios abstractos sobre autodeterminación sino la concreción de a quién se refiere el
prefijo auto de la palabra autodeterminación, qué fuerzas políticas ligadas a qué
configuración de poder internacional están haciendo qué demandas política y con qué
propósitos políticos.
Como en Bolivia hoy, en que una oligarquía racista de derechas dueña del sector de la
agroexportación, se está haciendo con el control de la región rica más fértil y rica en
recursos energéticos, que contiene el 75% de los recursos naturales del país, en nombre de
la autodeterminación y de la autonomía, a la vez que expulsa y violenta a indígenas
empobrecidos. Cabe preguntarse sobre qué base puede el movimiento izquierdista o
antiimperialista oponerse a ello, si no es porque el contenido de clase, raza y nacional de
esta demanda es antitético a un principio más importante: la soberanía popular basada en
los principios democráticos de regla de mayoría e igualdad de acceso a la riqueza pública.
Separatismo en América Latina: Bolivia, Venezuela y Ecuador
Estos últimos años los candidatos apoyados por EE UU han ganado y perdido elecciones
nacionales en América Latina. Es evidente que EE UU ha retenido la hegemonía sobre las
elites gobernantes en México, Colombia, Centroamérica, Perú, Chile, Uruguay y algunos de
los Estados insulares del Caribe. En los estados en donde el electorado ha apoyado a
opositores a la dominación de EE UU, como Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua, la
influencia de Washington descansa en funcionarios regionales, provinciales y locales
elegidos.
Es prematuro afirmar, como declara el Council for Foreign Relations (Consejo de
Relaciones Internacionales) que la hegemonía estadounidense en América Latina sea cosa
del pasado. Uno solamente tiene que leer los documentos económicos y políticos que
fundamentan los crecientes lazos económicos y militares entre Washington y el régimen
Calderón en México, los regímenes de García en Perú, Bachelet en Chile y Uribe en
Colombia para darse cuenta de que la hegemonía de EE UU aún prevalece en regiones
importantes de América Latina. Si miramos más allá del nivel gubernamental nacional,
incluso en Estados en los que no haya hegemonía estadounidense, la influencia de EE UU
aún es un factor poderoso que forma el comportamiento político de actividades
empresariales de derecha potentes, elites políticas financieros y regionales en Venezuela,
Ecuador, Bolivia y Argentina.
A finales de mayo de 2008, los movimientos regionalistas apoyados por EE UU estaban en
la ofensiva, estableciendo un régimen secesionista de facto en Santa Cruz en Bolivia. En
Argentina, la élite del negocio de la agroexportación ha organizado un cierre patronal a
escala nacional que afecta a la producción y la distribución, apoyado por las grandes
confederaciones industriales, financieras y comerciales, contra un impuesto a la exportación
promovido por el gobierno de centro-izquierda de Cristina Kirchner. En Colombia, EE UU
están negociando con el presidente paramilitar Álvaro Uribe sobre el emplazamiento de una
base militar en la frontera con el estado venezolano de Zulia, de gran riqueza petrolera, que
da la casualidad que está regido por el único gobernador opuesto a Chávez en el poder, un
promotor decidido de la autonomía o la secesión. En Ecuador, el alcalde de Guayaquil,
apoyado por los medios de comunicación de derechas y los desacreditados partidos
políticos tradicionales, ha propuesto la autonomía respecto del Gobierno central del
presidente Rafael Correa.
El proceso de desmembración nacional impulsado por el imperio es muy desigual a causa
de los diversos grados de las relaciones políticas de poder entre el Gobierno central y los
secesionistas regionales. Los secesionistas bolivianos de derecha son los que más han
avanzado, habiendo llegado a organizar y ganar un referéndum y declarándose una unidad
de gobierno independiente con el poder de recaudar impuestos, formular la política
económica exterior y crear su propia fuerza de policía.
El éxito del Santa Cruz secesionista es debido a la incapacidad política y a la total
incompetencia del régimen de Evo Morales y su vicepresidente Álvaro García Linera, que
promovió la autonomía para las muchas naciones indias empobrecidas (o indianismo) y
terminó sentando las bases para que los oligarcas racistas blancos aprovechen la
oportunidad de establecer su propia base separatista de poder. A medida que los separatistas
conseguían el control de la población local, procedieron a intimidar a los indios y
sindicalistas partidarios del gobierno de Evo Morales, sabotearon violentamente la
Asamblea Constitucional y rechazaron la Constitución, mientras conseguían constantes
concesiones del débil y conciliatorio gobierno central de Morales. Mientras los separatistas
liquidaban la Constitución y utilizaban su control de los medios principales de producción y
exportación para incorporar otras provincias, formando un arco geográfico de seis
provincias, y la influencia en otras dos en su esfuerzo por degradar al Gobierno nacional.
El régimen indianista de Morales-García Linera, compuesto en gran parte de mestizos ex
empleados de ONG financiadas en el extranjero, nunca utilizó su poder y el monopolio
constitucional formal de la fuerza legítima para hacer cumplir el orden constitucional y para
declarar fuera de la ley y para llevar ante los jueces las violaciones por parte de los
secesionistas de la integridad nacional y su rechazo del orden democrático.
Morales nunca movilizó el país, ni a la mayoría de las organizaciones populares de la
sociedad civil, ni siquiera recurrió al ejército para derrotar a los secesionistas. En cambio
continuó con sus impotentes súplicas de diálogo y compromiso, con el que sus concesiones
al autogobierno de la oligarquía solamente reforzaron el impulso de ésta hacia el poder
regional. Como estudio de caso de gobernanza fallida, frente a una amenaza separatista
reaccionaria para la nación, el gobierno de Morales-García Linera representa un fracaso
lamentable a la hora de defender la soberanía popular y la integridad de la nación.
Las lecciones bolivianas de gobernanza fallida deben servir de sombrío recordatorio a
Chávez en Venezuela y Correa en Ecuador: a menos que actúen con toda la fuerza de la
Constitución para frenar los embrionarios movimientos separatistas antes de que consigan
una base de poder, se enfrentarán también a la desintegración de sus países. La amenaza
más grande está en Venezuela, en donde los militares estadounidenses y colombianos han
construido bases en la frontera limítrofe con el estado venezolano de Zulia, infiltrando
comandos y fuerzas paramilitares en la provincia. La toma de esta provincia rica en
petróleo la consideran una cabeza de puente para privar al Estado venezolano de sus
ingresos vitales provenientes del petróleo y desestabilizar al Gobierno central.
Después de varios años de existencia de un movimiento separatista apoyado y financiado
por Washington en Bolivia, algunos académicos y expertos progresistas han tomado nota y
han publicado comentarios críticos. Lamentablemente, estos artículos carecen de cualquier
contexto explicativo, y ofrecen poca comprensión de cómo el separatismo latinoamericano
encaja en la estrategia a largo plazo y de gran envergadura de construcción del imperio
estadounidense durante el pasado cuarto de siglo.
Hoy, los movimientos separatistas promovidos por EE UU en América Latina están activos
en por lo menos tres países. En Bolivia, las provincias de la media luna (Santa Cruz, Beni,
Pando y Tarija) han convocado con éxito referéndums provinciales de autonomía, que es
aquí el término utilizado para secesión. El 4 de mayo de 2008 los separatistas de Santa Cruz
tuvieron éxito: con una participación de casi el 50% del censo de votantes, consiguieron el
80% de votos favorables. El 15 de mayo, la élite político-empresarial anunció la formación
de ministerios de comercio exterior y seguridad interna, asumiendo así los poderes
efectivos de un estado secesionista.
El Gobierno de EE UU, dirigido por el embajador Goldberg, proporcionó apoyo financiero
y político a las organizaciones cívicas secesionistas de derecha, por mediación de sus
programas de ayuda de 125 millones de dólares que gestiona AID (US Agency for
International Development), sus decenas de millones del programa contra la droga, y a
través de las ONG favorables a la secesión financiadas por medio de su organismo NED
(National Endowment for Democracy.) En las reuniones de la Organización de Estados
Americanos y otras reuniones regionales, EE UU se negó a condenar los movimientos
separatistas.
A causa de la completa incompetencia y falta de liderazgo político nacional del presidente
Evo Morales y su vicepresidente Álvaro García Linera, el Estado boliviano se está
atomizando en una serie de cantones autónomos, pues ya otros Gobiernos provinciales
intentan usurpar el poder político y hacerse cargo de sus recursos económicos. Desde el
principio, el régimen Morales-García Linera firmó una serie de pactos políticos, adoptó
políticas y aprobó concesiones a las elites oligárquicas de Santa Cruz, que permitió que
reconstruyeran efectivamente su base política natural de poder, sabotearan una asamblea
constitucional elegida y socavaran efectivamente la autoridad del Gobierno central.
El éxito de la derecha se ha producido en menos de dos años y medio, lo que es
especialmente sorprendente si se tiene en cuenta que en 2005, el país vivió una sublevación
popular importante que sustituyó a un Presidente de derecha, cuando millones de
trabajadores, mineros, campesinos e indios se apoderaron de las calles. Es un tributo al
absoluto desgobierno de Morales y García Linera que el país haya pasado tan rápida y
decisivamente desde un estado de poder popular insurreccional a un país fragmentado y
dividido, en el que una élite agroexportadora separatista se ha hecho con el control del 80%
de los recursos productivos del país, mientras el Gobierno central elegido protesta
débilmente.
El éxito de la clase dirigente regional secesionista boliviana ha dado alas a movimientos
similares de autonomía en Ecuador y Venezuela, dirigidos por el alcalde de Guayaquil
(Ecuador) y el gobernador de Zulia (Venezuela). Es decir, el fracaso político del gobierno
de Morales y García Linera en Bolivia, apoyado por Estados Unidos, ha llevado al gobierno
de este país a asociarse con oligarcas en Ecuador y Venezuela para repetir la experiencia de
Santa Cruz en un proceso de separatismo antirrevolucionario permanente.
El separatismo y la ex URSS
La derrota del comunismo en la URSS tuvo poco que ver con lo que el ex asesor de
seguridad nacional estadounidense Zbigniew Brzezinski calificó como ―bancarrota del
sistema debido a la carrera armamentística‖. Hasta el final, las condiciones de vida eran
relativamente estables y los programas de bienestar siguieron funcionando casi a niveles
óptimos, y los programas científicos y culturales recibían una parte sustancial del gasto
público.
Las élites gobernantes posteriores al sistema comunista no respondían a la propaganda
estadounidense sobre las virtudes del libre mercado y la democracia, como pretendieron los
presidentes Ronald Reagan, George Bush padre y Bill Clinton. Lo prueba de manera
evidente el sistema político y económico que impusieron al tomar el poder, y que ni fue
democrático ni basado en mercados competitivos. Los nuevos gobiernos de base étnica se
asemejaron a monarquías despóticas, depredadoras y nepotistas que regalaron –
privatizaron– a un puñado de oligarcas y monopolios extranjeros la riqueza pública
acumulada durante los 70 años anteriores de trabajo colectivo e inversión.
La principal fuerza ideológica impulsora de las políticas separatistas es la política de
identidad étnica, fomentada y financiada por los organismos de inteligencia y propaganda
de EE UU. La política de identidad étnica, que reemplazó el comunismo, está basada en
vínculos verticales entre la élite y las masas. Las nuevas elites gobiernan por medio de un
nepotismo de tipo clánico-familia-religioso-mafioso, financiado e impulsado con el pillaje
y la privatización de la riqueza pública creados bajo el comunismo. Al llegar al poder, las
nuevas elites políticas privatizaron la riqueza pública transformándola en riqueza familiar y
se convirtieron, ellos y sus cómplices, en una clase gobernante oligárquica. En la mayoría
de los casos, los vínculos étnicos entre las elites y los sujetos se disolvieron ante el
deterioro de las condiciones de vida, las desigualdades profundas de clase, las elecciones
amañadas y la represión del Estado.
En todos los ex estados de la URSS, la única reivindicación de las nuevas clases dirigentes
en materia de legitimidad social se basa en la pertenencia a una identidad étnica común.
Han desempolvado símbolos medievales y monárquicos del pasado lejano, sacando del
armario monarcas absolutistas, parásitas jerarquías religiosas, señores de la guerra
precapitalistas, emperadores sangrientos y banderas nacionales de los días del feudalismo
terrateniente para forjar una historia y una identidad comunes con las masas recién
liberadas. El repetido recurso a pasados símbolos reaccionarios es enteramente apropiado:
las actuales políticas despotismo, pillaje y culto a la personalidad guardan resonancias de
pasados guerreros históricos, y señores y prácticas feudales.
A medida que los nuevos déspotas post URSS han perdido su lustre étnico como
consecuencia de la decepción pública con el pillaje depredador nacional y extranjero de la
riqueza nacional, han recurrido al uso sistemático de la fuerza.
El éxito mayor de la estrategia de estadounidense de promover el separatismo fue la
destrucción de la URSS, no la promoción de democracias capitalistas independientes
viables. Washington logró la exacerbación de conflictos étnicos entre los rusos y las
restantes nacionalidades, animando a algunos jefes comunistas locales a separarse de la
Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y a formar estados independientes en los que
los nuevos gobernantes pudieran compartir el botín del tesoro local con sus nuevos socios
occidentales. Los esfuerzos de desestabilización realizados por EE UU en los países
comunistas, especialmente después de la década de 1970 no compitieron en mejores
condiciones de vida, mayor crecimiento industrial o programas de bienestar más generosos.
En cambio, la propaganda occidental se centró en la solidaridad étnica, un tema que socava
la solidaridad de clase y la lealtad al estado y a la ideología comunistas, y consolidó a unas
élites pro occidentales, especialmente entre intelectuales públicos y jefes comunistas
convertidos en salvadores nacionalistas.
El punto clave de la estrategia occidental era sobre todo la desintegración de la URSS por
medio de movimientos separatistas, aunque éstos estuvieran formados por fanáticos
fundamentalistas religiosos, políticos gangsteriles, economistas liberales formados en
Occidente o jefes militares ambiciosos y con aspiraciones. Lo único que importaba era que
enarbolaran la bandera separatista de la autodeterminación. Más tarde, en el período post
soviético, las nuevas élites procapitalistas fueron elevadas a la categoría de miembros de la
OTAN y estados satélites.
Las políticas de Washington en el periodo post separatista siguieron un proceso en dos
etapas: en la primera fase, predominó el apoyo no diferenciado a cualquiera que abogara
por la desintegración de la URSS; en la segunda fase, EE UU intentó promocionar a la
facción más favorable a la OTAN y a los liberales de mercado, por ejemplo en las llamadas
revoluciones de colores en Georgia y Ucrania. El separatismo se consideró como paso
preliminar hacia una etapa avanzada de subordinación al imperio estadounidense. La
noción de estados independientes es virtualmente inexistente para constructores de este
imperio. En el mejor de los casos existe como etapa transitoria de una constelación de
poder a un nuevo imperio dirigido por EE UU.
En el período posterior a la desintegración de la URSS, las tentativas de Washington de
reclutar nuevas elites pro capitalistas y crear estados satélites tuvieron un relativo éxito.
Algunos países abrieron sus economías a una explotación no regulada, especialmente de
sus recursos energéticos. Otros, ofrecieron emplazamientos para bases militares. En
muchos casos, los gobernantes locales intentaron negociar con los poderes mundiales a la
vez que aumentaban su propia fortuna por medio del pillaje.
Ninguna de las repúblicas ex soviéticas llegó a desarrollar un Estado democrático
independiente que permitiese recuperar los niveles de vida que su pueblo poseía en los
tiempos soviéticos. Algunos gobernantes convirtieron sus países en dictaduras teocráticas,
en las que los notables religiosos y el dictador se apoyaban mutuamente. Ninguna de ellas
mantuvo la red de seguridad social o los sistemas educativos de alta calidad de la era
soviética. Todos los regímenes post soviéticos magnificaron las desigualdades sociales y
multiplicaron el número de empresas de características mafiosas. Los delitos violentos
crecieron geométricamente, fomentando la inseguridad cada vez mayor del ciudadano.
El éxito del separatismo inducido por EE UU creó, en la mayoría de los casos,
oportunidades enormes para el pillaje occidental y asiático de materias primas,
especialmente los recursos petrolíferos. La experiencia de los nuevos estados
independientes fue, en el mejor de los casos, una ilusión transitoria, a medida que la élite
gobernante pasó directamente a la esfera de influencia occidental o se convirtió en una
mera tapadera de la subordinación estructural profunda a los circuitos de exportación de
materias primas y financieros dominados por Occidente.
Tras la desintegración de la URSS, los estados occidentales se aliaron con las repúblicas
que más se ajustaban a sus intereses. En algunos casos firmaron acuerdos con sus
gobernantes para establecer bases militares, llenando para ello los bolsillos del dictador de
turno mediante préstamos. En otros casos, se aseguraron un acceso privilegiado a los
recursos económicos por medio de empresas mixtas. En otros, simplemente ignoraron a los
estados de menos recursos y los dejaron caer en la miseria y el despotismo.
Separatismo: Europa del Este, Balcanes y los países bálticos
El aspecto más destacado de la desintegración del bloque soviético fue la rapidez y
minuciosidad con que los países pasaron del Pacto de Varsovia a la OTAN, y del dominio
político soviético al control económico de EE UU y la UE en casi todos sus sectores
económicos importantes. El paso de una a otra forma de subordinación política, económica
y militar a otra resalta la naturaleza transitoria de la independencia política, la
superficialidad de su significado operativo y la hipocresía espectacular de la nueva élite
gobernante que denunciaba alegremente la dominación soviética mientras entregaba la
mayor parte de los sectores económicos al capital occidental y una parte de su territorio a la
OTAN para que construyera sus bases, mientras que al mismo tiempo facilitaba fuerzas
militares mercenarias para luchar contra en las guerras imperiales estadounidenses en un
grado mucho mayor a cualquier otro registrado durante el periodo soviético.
El separatismo en estos ámbitos era una ideología para debilitar a la coalición hegemónica
adversaria, tanto mejor cuanto más incorporase a sus miembros a una coalición más
virulenta y agresiva de construcción de imperio.
Yugoslavia y Kosovo: separatismo forzado
La exitosa desintegración de la URSS y de la alianza del Pacto de Varsovia animó a EE UU
y la UE a destruir Yugoslavia, el último país independiente fuera del control de éstos en
Europa Occidental. La demolición de Yugoslavia la inició Alemania tras su anexión y
demolición de la economía de Alemania Oriental. Poco después se extendió a las repúblicas
de Eslovenia y Croacia. EE UU, un recién llegado relativo a la división de los Balcanes, se
centró en Bosnia, Macedonia y Kosovo. Mientras que Alemania se extendía por la
conquista económica, EE UU, fiel a su misión militarista, recurría a la guerra en alianza con
los reconocidos gángsters terroristas albano-kosovares del paramilitar Kosovo Liberation
Army (KLA) o Ejército de Liberación de Kosovo. Bajo el liderazgo del sionista francés
Bernard Kouchner, las fuerzas de la OTAN facilitaron la purga étnica, el asesinato y la
desaparición de decenas de miles de serbios, Roma y disidentes albano-kosovares no
separatistas.
La destrucción de Yugoslavia es completa: la restante y fracturada República de Serbia
estaba ya a merced ahora de EE UU y sus aliados europeos. Para 2008 había resultado
elegida una coalición apoyada por la UE y EE UU, y favorable a la OTAN, y habían
desaparecido los últimos restos de Yugoslavia y su herencia histórica de socialismo
autogestionario.
Consecuencias del separatismo en la URSS, Europa Oriental y los Balcanes
En todas las regiones en donde triunfó el separatismo patrocinado y financiado por EE UU,
las condiciones de vida se derrumbaron, se produjo un pillaje masivo de los recursos
públicos en nombre de la privatización, y se alcanzaron niveles sin precedentes de
corrupción política. Una cifra en torno a un tercio de la población huyó a Europa
Occidental y América del Norte huyendo del hambre, la inseguridad personal –
delincuencia–, el desempleo y un futuro dudoso.
Políticamente, el gangsterismo y el número extraordinario de asesinatos condujeron a los
empresarios que desarrollaban actividades legítimas a pagar sumas exorbitantes de
extorsión, a medida que una nueva clase de delincuentes reconvertidos en empresarios se
hacía cargo de la economía y firmaba dudosos acuerdos de inversión y empresas mixtas con
empresas transnacionales de la UE, EE UU y Asia.
Los países ex soviéticos ricos en recursos energéticos de Asia central y meridional pasaron
a ser gobernados por dictadores opulentos que acumularon fortunas de miles de millones de
dólares en el curso de la demolición de las normas igualitarias, la sanidad generalizada y las
instituciones científicas y culturales preexistentes. Las instituciones religiosas adquirieron
el poder por encima de las asociaciones científicas y profesionales, y contra éstas,
invirtiendo los progresos educativos de los setenta años anteriores. La lógica del
separatismo se extendió desde las repúblicas a los niveles subnacionales, en un proceso en
el que los señores de la guerra y jefes étnicos rivalizaban en la creación de su propia
entidad autónoma, con el resultado de guerras sangrientas, nuevos episodios de limpiezas
étnicas y nuevas huídas de refugiados de las zonas en conflicto.
Las promesas hechas por EE UU sobre los beneficios que iba a aportar el separatismo no se
cumplieron mínimamente. En el mejor de los casos la pequeña élite gobernante y sus socios
cosecharon una riqueza enorme, el poder y el privilegio a expensas de la gran mayoría.
Cualesquiera que fueran las satisfacciones simbólicas iniciales, que la población de clases
bajas puede haber experimentado durante su efímera independencia, la nueva bandera y el
poder religioso restaurado fueron siendo erosionados por la paralizante pobreza y las luchas
internas violentas por el poder que perturbaron sus vidas. La verdad del asunto es que
millones de personas huyeron de sus estados recién independientes, y prefirieron
convertirse en refugiados y ciudadanos de segunda clase en países extranjeros.
Conclusión
La falacia mayor de los supuestos liberales y las ONG progresistas en su defensa de la
autonomía, la descentralización y la autodeterminación consiste en que estos abstractos
conceptos evitan la pregunta histórica fundamental y la pregunta política de fondo: ¿a qué
clases, raza o bloque político se está transfiriendo el poder? Durante más de un siglo, en EE
UU, la bandera que enarbolaban los terratenientes sureños de derecha racistas, que
gobernaban por la fuerza y el terror sobre la mayoría de negros pobres era la de los
derechos de los Estados, es decir la supremacía la ley y el orden locales sobre la autoridad
del Gobierno federal y de la Constitución nacional. La lucha entre los derechos federales y
los de los estados fue una lucha entre una oligarquía sudista reaccionaria y una coalición
urbana septentrional progresista formada por trabajadores y clase media.
Hay una necesidad fundamental de desmitificar la noción de autonomía, examinando las
clases que la exigen, las consecuencias de la descentralización del poder en términos de
distribución de éste, de la riqueza y del poder popular y los benefactores externos de un
cambio del Estado nacional a las élites de poder locales y regionales.
Del mismo modo, la irreflexiva manera con que algunos libertarios abrazan cada demanda
de autodeterminación ha conducido a algunos de los crímenes más atroces de los siglos XX
y XXI. En muchos casos los movimientos separatistas han fomentado o han sido produjo de
guerras imperialistas sangrientas, como fue el caso tras a las nazis, las invasiones
estadounidenses de Iraq y Afganistán y la salvaje invasión israelí del Líbano y a la
desintegración de Palestina.
Para aclarar el sentido de términos como autonomía, descentralización y
autodeterminación, y conseguir que estas descentralizaciones del poder se muevan en la
dirección histórica progresista, es esencial plantear algunas cuestiones previas: ¿Estos
cambios políticos propician el poder y el control de la mayoría de los trabajadores y
campesinos sobre los medios de la producción? ¿Llevan a un mayor poder popular en el
Estado y en los procesos electorales o consolidan a satélites demagogos defensores de los
intereses del imperio, en que la desintegración de un estado establecido lleva a la
incorporación de los fragmentos étnicos en un imperio vicioso y destructivo?
Artículo original: http://petras.lahaine.org/articulo.php?p=1738. Traducido para Rebelión
por S. Seguí
La tragedia social y ecológica de la producción de biocombustibles en las Américas
x Miguel A. Altieri, Elizabeth Bravo
En este trabajo exploramos las falsas afirmaciones y las implicaciones ecológicas, sociales
y económicas de la producción de biocombustibles agrícolas
Sostenemos que al contrario de las falsas afirmaciones que sostienen las corporaciones
que promueven los ―combustibles verdes‖, el cultivo masivo de maíz, caña de azúcar, soja,
palma y otros cultivos impulsados por la industria agroenergética no reducirán las
emisiones de gases de efecto invernadero, pero si desplazará a miles de agricultores,
disminuirá la seguridad alimentaria de muchos países, y acelerará la deforestación y la
destrucción del medioambiente en el Sur Global.
Las naciones pertenecientes al OECD –la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico, quienes consumen el 56% de la energía del planeta, tienen una necesidad
imperiosa de un combustible líquido que reemplace al petróleo. Se espera que las tasas
mundiales de extracción de petróleo aumenten este año, y el suministro global disminuirá
significativamente en los próximos cinco años[1] . Existe también una gran necesidad de
encontrar un sustituto para el combustible fósil, que es uno de los principales causantes del
cambio climático global a través de la emisión de CO2 y otros gases del efecto invernadero.
Los biocombustibles han sido promovidos como una prometedora alternativa al petróleo.
La industria, los gobiernos y científicos impulsores de los biocombustibles afirman que
servirán como una alternativa al petróleo que se acaba, mitigando el cambio climático por
medio de la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, aumentando los
ingresos de los agricultores, y promoviendo el desarrollo rural. Sin embargo, rigurosas
investigaciones y análisis realizados por respetados ecologistas y cientistas sociales
sugieren que el boom de la industria de biocombustibles a gran escala será desastrosa para
los agricultores, el medio ambiente, la preservación de la biodiversidad y para los
consumidores, particularmente, los pobres.
En este trabajo exploramos las implicaciones ecológicas, sociales y económicas de la
producción de biocombustibles. Sostenemos que al contrario de las falsas afirmaciones que
sostienen las corporaciones que promueven los ―combustibles verdes‖, el cultivo masivo de
maíz, caña de azúcar, soja, palma y otros cultivos impulsados por la industria
agroenergética –todos, se espera, genéticamente modificados - no reducirán las emisiones
de gases de efecto invernadero, pero si desplazará a miles de agricultores, disminuirá la
seguridad alimentaria de muchos países, y acelerará la deforestación y la destrucción del
medioambiente en el Sur Global.
Biocombustibles en Estados Unidos: alcance e impactos
Producción de Etanol
La Administración Bush se ha comprometido a expandir significativamente los
biocombustibles para reducir su dependencia al petróleo extranjero. (EEUU importa el 61%
del crudo que consume, a un costo de $75 billones por año.) A pesar de la existencia de una
amplia gama de biocombustibles, el etanol proveniente del maíz y de la soja constituye el
99% de todos los biocombustibles utilizados en EEUU, y se espera que su producción
exceda los objetivos para el 2012 de 7.5 billones de galones por año (Pimentel 2003). La
cantidad de maíz cultivado para producir etanol en las destilerías se triplicó en EEUU,
yendo de 18 millones de toneladas en el 2001 a 55 millones en el 2006 (Bravo 2006).
Destinando la actual producción estadounidense de maíz y soja a los biocombustibles, se
encontrará con que reemplaza simplemente el 12% de la demanda nacional de gasolina y el
6% de la demanda de diesel. En EEUU el área de tierra utilizada para la agricultura
constituye un total de 625.000 acres cuadrados. Bajo los cánones actuales, alcanzar la
demanda de aceite para biocombustibles requerirá 1.4 millones de millas cuadradas de maíz
para etanol u 8.8 millones de kilómetros cuadrados de soja para biodiésel (Korten 2006).
Dakota del Sur e Iowa ya han dedicado el 50% de su maíz a la producción de etanol, lo que
ha llevado a la disminución del suministro de maíz para alimento para animales y para el
consumo humano. A pesar de que una quinta parte de la cosecha de maíz norteamericana
fue destinada a la producción de etanol en el 2006, esta suplió solamente el 3% de la
demanda de combustible de este país (Bravo 2006).
La escala de producción necesaria para alcanzar la proyección en masa de granos,
promoverá la implementación de monocultivo industrial de maíz y soja, con drásticas
consecuencias ambientales. La producción de maíz conduce a una erosión del suelo mayor
que la producida por cualquier otro cultivo utilizado en EEUU. En todo el Oeste los
granjeros han abandonado la rotación de cultivos para plantar maíz y soja exclusivamente,
incrementando de esta forma el promedio de erosión del suelo, de 2.7 toneladas anuales por
acre a 19.7 toneladas (Pimentel et al 1995). La falta de rotación de cultivos también
aumentó la vulnerabilidad a las pestes, por ende necesitando una mayor incorporación de
pesticidas que otros cultivos (en EEUU, alrededor del 41% de los herbicidas y el 17% de
los insecticidas son aplicados al maíz- (Pimentel y Lehman 1993).
La especialización en la producción de maíz puede ser peligrosa: a principios de los 70s
cuando los maíces híbridos de alto rendimientos uniforme constituían el 70% de todos los
cultivos de maíz, una enfermedad de la hoja (leaf blight) que afectó a estos híbridos
condujo a un 15% de pérdida de rendimientos a través de esa década (Altieri 2004). Es
esperable que este tipo de vulnerabilidad de los cultivos se incremente en nuestro clima
crecientemente volátil, causando un efecto ondulatorio en toda la cadena alimentaria.
Deberíamos tener en cuenta las implicaciones de vincular nuestra economía energética a
ese mismo volátil y fluctuante sistema alimentario. Este cultivo es particularmente
dependiente de la utilización del herbicida atrazina, un conocido disruptor endocrino. Dosis
bajas de disruptores endocrinos pueden causar problemas de desarrollo al interferir con
catalizadores hormonales en puntos nodales del desarrollo de un organismo. Hay estudios
que demuestran que la atrazina puede causar anormalidades sexuales en las poblaciones de
ranas, incluyendo hermafrodismo (Hayes et al 2002).
El maíz requiere grandes cantidades de nitrógeno químico como fertilizante, uno de los
mayores responsables de la contaminación del agua y el suelo de la ―zona muerta‖ en el
Golfo de México. Las tasas medias de aplicación de nitratos en las tierras de cultivo
estadounidenses oscila entre los 120 y los 550 Kg. de N por hectárea. El uso ineficiente de
fertilizantes de nitrógeno por parte de los cultivos conduce al escurrimiento de residuos
altamente nitrogenados, sobre todo hacia aguas de superficie y subterráneas. La
contaminación de acuíferos con nitratos se ha extendido en niveles altamente peligrosos en
muchas poblaciones rurales. En EEUU se ha estimado que más del 25% de las fuentes de
agua potable contiene niveles de nitratos por sobre el standard de seguridad de 45 partículas
por millón (Conway y Pretty 1991). Los altos niveles de nitratos son peligrosos para la
salud humana, y hay estudios que han vinculado la incorporación de nitratos a la
metahemoglobinemia[2] en niños, y cáncer gástrico, de vejiga y de esófago en adultos.
La expansión del maíz en áreas secas, como Kansas, requiere de irrigación, aumentando la
presión sobre las ya agotadas fuentes subterráneas como el acuífero Ongalla en el Suroeste
norteamericano. En partes de Arizona, el agua subterránea ya está siendo extraída a un
ritmo diez veces mayor que el de recuperación natural de esos acuíferos naturales (Pimentel
et al 1997).
Soja para biodiésel
Actualmente en EEUU, la soja es el principal cultivo energético para la producción de
biodiésel. Entre 12004 y 2005 el consumo de biodiésel aumentó un 50%. Alrededor de 67
nuevas refinerías se encuentran en construcción con inversiones de los gigantes del
agronegocio como ADM y Cargill. Cerca de un 1,5% de la cosecha de soja produce 68
millones de galones de biodiésel, un equivalente a menos del 1% del consumo de gasolina.
Por lo tanto, si la totalidad de la cosecha de soja fuera destinada ala producción de
biodiésel, sólo alcanzaría a cubrir un 6% de la demanda nacional de diesel (Pimentel y
Patzek 2005).
La mayor parte de la soja estadounidense es transgénica, producida por Monsanto para
resistir su herbicida Roundup, hecho con el químico Glifosato (en 2006 se cultivaron 30.3
millones de hectáreas de soja Roundup-Ready, más del 70% de la producción doméstica).
La dependencia de la soja resistente al herbicida conduce a un aumento en los problemas de
malezas resistentes y pérdida de vegetación nativa. Dada la presión de la industria para
incrementar el uso de herbicidas, una creciente cantidad de tierras serán tratadas con
Roundup. La resistencia al glifosato ha sido documentada en poblaciones anuales de roya,
quackgrass, trébol de serradella y Cirsium arvense.
En Iowa, poblaciones de la maleza Amaranthus rudis mostraron señales de germinación
tardía que les permite adaptarse mejor a las fumigaciones tempranas, la maleza velvetleaf
demostró tolerancia al glifosato, y la presencia de un tipo de horseweed resistente al
Roundup se ha documentado en Delaware. Incluso en áreas donde no se ha observado
resistencia en las malezas, los científicos notaron un aumento en la presencia de especies de
malezas más fuertes, como Eastern Black Nightshade en Illinois y Water Hemp (Certeira y
Duke 2006, Altieri 2004).
Actualmente no hay datos sobre residuos de Roundup en soja y maíz, en tanto los granos no
están incluidos en las regulaciones de mercado convencionales para residuos de pesticidas.
Sin embargo se sabe que en tanto el Glifosato es un herbicida sistémicamente persistente
(aplicado en alrededor de 12 millones de acres de cultivos en EEUU) está presente en las
partes cosechadas de las plantas, y no es completamente metabolizable, por lo tanto se
cumula en zonas meristémicas como las raíces y nódulos (Duke et al 2003).
Lo que es más, información sobre los efectos de este herbicida sobre la calidad del suelo es
incompleta, sin embargo las investigaciones han demostrado que es probable que la
aplicación de glifosato esté vinculada a los siguientes efectos (Motavalli et al 2004):
· Una reducción de la habilidad de la soja y el trébol para fijar nitrógeno, afectando
indirectamente la simbiosis.
· La presentación de sojas y trigos más vulnerables a las enfermedades, como se
evidenció el año pasado con el crecimiento de Head Blight en el trigo Fusarium en
Canadá.
· La disminución de microorganismos presentes en el suelo, que cumplen funciones
regenerativas necesarias que incluyen la descomposición de materia orgánica, la
liberación y conclusión del ciclo de nutrientes y la supresión de organizamos
patógenos.
· Los cambios potenciales incluyen la alteración de la actividad microbial en el
suelo debido a diferencias en la composición de las exudaciones de las raíces,
alteraciones de las poblaciones microbianas, y toxicidad los pasajes metabólicos que
pueden evitar el crecimiento normal de bacterias y hongos.
· El glifosato también ha tenido efectos negativos en poblaciones de anfibios,
especialmente en aquellos como el altamente susceptible renacuajo norteamericano
(Relyea 2005).
Implicaciones e impactos para América Latina
Soja
Estados Unidos no será capaz de producir domésticamente biomasa suficiente para
satisfacer su apetito de energía. En cambio, cultivos energéticos serán sembrados en el Sur
Global. Grandes plantaciones de caña de azúcar, palma africana y soja ya están suplantando
bosques y pastizales en Brasil, Argentina, Colombia, Ecuador y Paraguay. El cultivo de
soja ha causado ya la deforestación de 21 millones de hectáreas de bosques en Brasil, 14
millones de hectáreas en Argentina, 2 millones en Paraguay y 600.000 en Bolivia. En
respuesta a la presión del mercado global, próximamente se espera, sólo en Brasil, la
deforestación adicional de 60 millones de hectáreas de territorio (Bravo 2006).
Desde 1995, el total de tierras destinadas a la producción de soja en Brasil de incrementó en
un 3.2% anual (320.000 hectáreas por año). Hoy la soja -junto a la caña de azúcar- ocupa
un territorio mayor que cualquier otro cultivo en Brasil con un 21% del total del área
cultivada. El territorio total utilizado en el cultivo de soja se ha multiplicado 57 veces desde
1961, y el volumen de producción se ha multiplicado 138 veces. 55% de la soja, o 11.4
millones de hectáreas, es genéticamente modificada. En Paraguay, la soja ocupa más del
25% de toda la tierra de agricultura. La deforestación extensiva ha acompañado esta
expansión: por ejemplo, buena parte del bosque atlántico de Paraguay ha sido deforestado,
en parte para el cultivo de soja que abarca el 29% del uso de tierras para agricultura del país
(Altieri y Pengue 2006).
En particular, grandes índices de erosión acompañan la producción de soja, especialmente
en áreas donde no se implementan ciclos largos de rotación de cultivos. La pérdida de
cobertura de suelo promedia las 16 toneladas por hectárea de soja en el oeste medio
norteamericano. Se ha estimado que en Brasil y en Argentina los promedios de pérdida de
suelo se encuentran entre las 19 – 30 toneladas por hectárea, dependiendo de las prácticas
de manejo, el clima y la pendiente. Las variedades de soja resistente al herbicida han
incrementado la viabilidad de la producción de soja para los agricultores, muchos de los
cuales han comenzado su cultivo en tierras frágiles propensas a la erosión (Jason 2004).
En Argentina el cultivo intensivo de soja ha llevado a un masivo agotamiento de los
nutrientes del suelo. Se ha estimado que la producción continuada de soja ha resultado en la
pérdida de un millón de toneladas métricas de nitrógeno y 227.000 toneladas métricas de
fósforo a nivel nacional. Se estima que el costo de recomposición de nutrientes con
fertilizantes es de 910 millones de dólares. La concentración de nitrógeno y fósforo en las
cuencas de los ríos de América Latina está ciertamente vinculada al aumento en la
producción de soja (Pengue2005).
El monocultivo de soja en la Cuenca del Amazonas ha tornado infértil parte de los suelos.
Los suelos pobres necesitan de una mayor aplicación de fertilizantes industriales para
obtener niveles competitivos de productividad. En Bolivia, la producción de soja se
expande hacia el Este, áreas que ya sufren de suelos compactos y degradados. 100.000
hectáreas de tierras agotadas, antiguamente productoras de soja, han sido abandonadas para
pastoreo, lo que lleva a una mayor degradación (Fearnside 2001). Los biocombustibles
están iniciando un nuevo ciclo de expansión y devastación de las regiones del Cerrado y la
Amazonía. En tanto los países de América Latina incrementen sus inversiones en cultivo de
soja para biocombustibles, podemos esperar que las implicaciones ecológicas se
intensifiquen.
Caña de azúcar y etanol en Brasil
Brasil ha producido caña de azúcar para combustible etanol desde 1975. En 2005 había 313
plantas procesadoras de etanol con una capacidad de producción de 16 millones de metros
cúbicos. Brasil es el mayor productor de caña de azúcar del mundo, y produce el 60% del
total mundial de etanol de azúcar con cultivos de caña de 3 millones hectáreas (Jason
2004). En 2005, la producción alcanzó un récord de 16.5 billones de litros, de los cuales 2
millones fueron destinados para exportación. El monocultivo de caña de azúcar por si solo
suma el 13% de la aplicación de herbicida a nivel nacional. Estudios realizados por
EMBRAPA (Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria) en 2002 confirmaron la
presencia de contaminación vinculada al uso de pesticidas en el Acuífero Guaraní,
atribuible principalmente al cultivo de caña en el Estado de San Pablo.
Estados Unidos es el mayor importador de etanol brasileño, importando el 58% del total de
su producción nacional en 2006. Esta relación comercial fue reforzada por el reciente
acuerdo sobre etanol de la administración Bush con Brasil. Lejos de ser buenas noticias
para Brasil, si la propuesta de la administración Bush sobre el estándar de combustible
renovable para el etanol fuera a ser alcanzado con la caña brasileña, Brasil debería
incrementar su producción con un adicional de 135 billones de litros por año. El área
cultivada se está expandiendo rápidamente en la región del Cerrado, cuya vegetación se
espera habrá desaparecido para el 2030. 60% de las tierras de cultivo de caña son
controladas por 340 destilerías (Bravo 2004).
Considerando el nuevo contexto energético global, los políticos brasileños y oficiales de la
industria están formulando una nueva visión para el futuro económico del país, centrada en
la producción de recursos energéticos para desplazar en un 10% el uso mundial de gasolina
en los próximos 20 años. Esto requeriría quintuplicar el territorio dedicado a la producción
de caña, de 6 a 30 millones hectáreas. Los cultivos nuevos conducirán a la apertura de
tierras en nuevas áreas, que probablemente serán objeto de la deforestación en niveles
comparables a los de la región de Pernambuco, donde sólo resta un 2.5% de los bosques
originales (Fearnside 2001).
Eficiencia energética e implicaciones económicas
La producción de etanol es sumamente intensiva energéticamente. Para producir 10.6
billones de litros de etanol, EEUU utiliza alrededor de 3.3 millones de hectáreas de tierras,
que a su vez tienen un requerimiento masivo de energía para fertilizar, desmalezar y
cosechar el maíz (Pimentel 2003). Estos 10.6 billones de litros de etanol sólo proveen el 2%
de la gasolina utilizada por los automóviles en EEUU anualmente.
A instancia de los estudios Shapouri et al (2004)‖ de la USDA que reportaron un retorno
neto positivo en la producción de etanol, Pimentel y Patzek (2005), utilizando datos de
todos los 50 estados y tomando en cuenta todos los ―inputs‖ de energía (incluyendo la
manufactura y reparación de maquinaria agrícola y equipamiento para fermentación y
destilación) concluyeron que la producción de etanol no provee un beneficio energético
neto. Por el contrario, revelaron que requiere más energía fósil producirla que la que
produce. En sus cálculos, la producción de etanol de maíz requiere 1.29 galones de
combustibles fósiles por galón de etanol producido, y la producción de biodiésel de soja
requiere 1.27 galones de energía fósil por galón de diesel producido. En suma, debido a la
relativa baja densidad energética del etanol. Aproximadamente 3 galones etanol son
necesarios para reemplazar 2 galones de gasolina.
La producción de etanol norteamericana se ha beneficiado anualmente de $3 billones de
dólares en subsidios federales y estatales ($0.54 por galón), que en general se acrecienta
para los gigantes del agronegocio. En 1978 EEUU introdujo un impuesto al etanol, pero
hizo una excepción de 54 centavos por galón para aquellos utilizados en alconafta (nafta
con un 10% de etanol). Esto resultó en un subsidio de $10 billones de dólares a Archer
Daniels Midland, desde 1980 a 1997 (Bravo 2006). En 2003 más del 50% de las refinerías
de etanol en EUA pertenecían a agricultores. En 2006, el 80% de las nuevas refinerías
pertenecían a sociedades anónimas, con $556 millones en ganancias proyectadas,
beneficiando a los productores más grandes. Para el 2007, se espera que la cifra alcance los
$1.3 billones de dólares.
Seguridad alimentaria y el destino de los agricultores
Los impulsores de la biotecnología postulan la expansión del cultivo de soja como una
medida de la adopción exitosa de tecnología transgénica por parte de los agricultores. Pero
este dato esconde el hecho de que la expansión de la soja conduce a una extrema
concentración de tierras e ingresos. En Brasil, el cultivo de soja desplaza once trabajadores
de la agricultura por cada nuevo trabajador que emplea. Este no es un fenómeno nuevo. En
los 70s, 2.5 millones de personas fueron desplazadas por la producción de soja en Paraná, y
300.000 fueron desplazadas en Río Grande do Sul. Muchos de estos ahora sintierras fueron
a la Amazonía, donde desmontaron bosques primitivos. En la región del Cerrado, donde la
producción de soja transgénica está en expansión, el desplazamiento de personas has sido
relativamente modesto debido a la baja densidad de población del área (Altieri y Pengue
2006).
En Argentina, 60.000 establecimientos agropecuarios fueron excluidos mientras el área
cultivada con soja Roundup Ready se triplicó. En 1998, había 422.000 granjas en Argentina
mientras en 2002 sólo quedaban 318.000, reduciéndose en una cuarta parte. En una década,
el área sojera se incrementó en un 126% a expensas de la producción de lácteos, maíz, trigo
y frutas. En la campaña 2003/2004, se sembraron 13.7 millones de hectáreas de soja, pero
hubo una reducción de 2.9 millones de hectáreas de maíz y 2.15 millones de hectáreas de
girasol. Para la industria biotecnológica, el aumento en el área cultivada de soja y la
duplicación de los rendimientos por unidad son un éxito económico y agronómico. Para el
país, esto implica mayor importación de alimentos básicos, por ende pérdida de soberanía
alimentaria, aumento en el precio de los alimentos y el hambre (Pengue 2005).
El avance de la ―frontera agrícola‖ para biocombustibles es un atentado contra la soberanía
alimentaria de las naciones en desarrollo, en tanto la tierra para producción de alimentos
está crecientemente siendo destinada a alimentar los automóviles de los pueblos del Norte.
La producción de biocombustibles también afecta directamente a los consumidores con un
incremento en el costo de los alimentos. Debido al hecho de que más del 70% de los granos
en EUA son utilizados como piensos, se puede esperar que al doblar o triplicar la
producción de etanol suban los precios del maíz, y como consecuencia, el precio de la
carne. La demanda de biocombustible en EEUU ha estado vinculada a un incremento
masivo en el precio del maíz que condujo a un reciente aumento del 400% en el precio de la
tortilla en México.
Cambio Climático
Uno de los principales argumentos de quienes abogan por los biocombustibles es que estas
nuevas formas de energía ayudarán a mitigar el cambio climático. Promoviendo el
monocultivo mecanizado que requiere de agroquímicos y maquinarias, lo más probable es
un aumento en las emisiones de CO2 como resultado final. Mientras los bosques captores
de carbono son eliminados para abrirle el camino a los cultivos destinados a los
biocombustibles, las emisiones de CO2 aumentaran en vez de disminuir. (Bravo 2006,
Donald 2004).
Mientras los países del Sur entran en la producción de biocombustible, el plan es exportar
gran parte de su producción. El transporte a otros países aumentará en gran medida el uso
de combustible y las emisiones de gases. Lo que es más, convertir biomasa vegetal en
combustible liquido en la refinerías produce inmensas cantidades de emisiones de gases de
efecto invernadero (Pimentel y Patzek 2005).
El cambio climático global no será remediado por el uso de biocombustibles industriales.
Será necesario hacer un giro fundamental en los patrones de consumo del Norte Global. El
único modo de detener el calentamiento global es una transición del modelo de agricultura
industrial a gran escala hacia uno de agricultura orgánica y a pequeña escala, y
disminuyendo el consumo mundial de combustible por medio de la conservación.
Conclusiones
La crisis energética –por el sobre-consumo y el cenit del petrolero- ha proporcionado la
oportunidad para tejer poderosas alianzas globales entre las industrias del petróleo, los
granos, la ingeniería genética y la automotriz. Estas nuevas alianzas entre alimentos y
combustibles están decidiendo el futuro del paisaje agrícola mundial. El boom de los
biocombustible consolidará su control sobre nuestros sistemas alimentarios y energéticos, y
les permitirá determinar qué, cómo y cuánto se producirá, resultando en más pobreza rural,
destrucción ambiental y hambre. Los grandes beneficiarios de la revolución de los
biocombustibles serán los grandes del mercado de los granos, incluyendo a Cargill, ADM y
Bunge; compañías de petróleo como BP, Shell, Chevron, Neste Oil, Repsol y Total;
compañías automotrices como General Motors, Volkswagen AG, FMC-Ford France, PSA
Peugeot-Citröen y Renault; y gigantes de la biotecnología como Monsanto, DuPont, y
Syngenta.
La industria de la biotecnología esta utilizando la actual fiebre del biocombustible para
lavar su imagen desarrollando y diseminando semillas transgénicas para la producción
energía, no de alimentos. Ante la creciente desconfianza y el rechazo publico que se viene
manifestando por los cultivos y alimentos transgénicos, la biotecnología será usada por las
corporaciones para maquillar su imagen, argumentando que desarrollarán nuevas semillas
genéticamente modificadas para la producción optimizada de biomasa o que contienen la
enzima alfa-amilasa que permitirá dar comienzo al proceso de etanol mientras el maíz
continua en el campo- una tecnología que, argumentan, no tendría impactos negativos en la
salud humana. La diseminación de este tipo de semillas en el ambiente agregará otra
amenaza ambiental a aquellas relacionadas al maíz GM que en el 2006 los 32.2 millones de
hectáreas: la introducción de nuevos eventos en la cadena alimentaria humana como ha
ocurrido con el maíz Starlink y el arroz LL601.
En tanto los gobiernos son seducidos por las promesas del mercado global de
biocombustibles, dieron surgimiento a planes nacionales de biocombustibles que limitarán
sus sistemas agrícolas a la producción de gran escala, monocultivos energéticos,
dependientes de la utilización intensiva de herbicidas y fertilizantes químicos, así desviando
millones de valiosas hectáreas de cultivo que de otra forma podrían ser destinadas a la
producción de alimentos. Es enormemente necesario un análisis social que anticipe las
implicancias del desarrollo de programas de biocombustibles sobre la seguridad alimentaria
y el medioambiente en países pequeños como el Ecuador. Este país planea expandir 50,000
hectáreas la producción de caña de azúcar, y habilitar 100,000 hectáreas de bosque natural
para plantaciones de aceite de palma. Las plantaciones de aceite de palma ya están
causando desastres ambientales en la región Colombiana del Choco (Bravo 2006).
Claramente, los ecosistemas de las áreas en donde se está produciendo agricultura para
biocombustibles se están degradando rápidamente. La producción de biocombustibles no es
ambiental ni socialmente sustentable ahora ni en el futuro.
Es también preocupante que las universidades públicas y los sistemas de investigación (por
ejemplo el acuerdo recientemente firmado por BP y la Universidad de California-Berkeley)
son presas fáciles de la seducción de los grandes capitales y la influencia del poder político
y corporativo. Además de las implicancias de la intromisión de los capitales privados en la
definición de las agendas de investigación y la composición de la academia –que desgasta
la misión pública de las universidades en beneficio de los intereses privados- es un atentado
a la libertad académica y el gobierno de las facultades. Estas sociedades impiden que las
universidades se involucren en una investigación imparcial, e imposibilitan que el capital
intelectual pueda explorar verdaderas alternativas sustentables a la crisis energética y el
cambio climático.
No hay duda en que la conglomeración del petróleo y el capital de la biotecnología decidirá
cada vez más sobre el destino de los paisajes rurales de las Américas. Sólo alianzas
estratégicas y la acción coordinada de los movimientos sociales (organizaciones
campesinas, movimientos ambientalistas y de trabajadores rurales, ONGs, asociaciones de
consumidores, miembros comprometidos del sector académico, etc.) pueden ejercer una
presión sobre los gobiernos y empresas multinacionales para asegurar que estas tendencias
sean detenidas. Y más importante aun, necesitamos trabajar en conjunto para asegurarnos
que todos los países adquieran el derecho a conseguir su soberanía alimentaria por vía de
sistemas de alimentación basados en la agroecología y desarrollados localmente, de la
reforma agraria, el acceso a agua, semillas y otros recursos, y políticas agrarias y
alimentarias domesticas que respondan a las necesidades de los campesinos y los
consumidores, en especial de los pobres.
Miguel A. Altieri es profesor de Agroecología. Universidad de California, Berkeley.
Elizabeth Bravo de la Red por una América Latina Libre de Transgénicos. Quito, Ecuador
Referencias
Altieri, M.A. and W. Pengue 2006 GM soybean: Latin America‘s new colonizer. Seedling
January issue.
Altieri, M.A. 2000 The ecological impacts of transgenic crops on agroecosystem health.
Ecosystem Health 6: 19-31
Altieri, M.A. (2004), Genetic engineering in agriculture: the myths, environmental risks
and alternatives, Food First Books, Oakland.
Bravo, E. 2006 Biocombustibles, cutlivos energeticos y soberania alimentaria: encendiendo
el debate sobre biocommustibles. Accion Ecologica, Quito, Ecuador.
Certeira, A.L. and S.O. Duke 2006 The current status and environmental impacts of
Glyphosate-resistant crops. J. Environ.Qual 35: 1633-1658
Conway, G.R. and J.N. Pretty 1991 Unwelcome harvest: agriculture and pollution.
Earthscan publications, London
Donald, P.F. 2004 Biodiversity impacts of some agricultural commodity production
systems. Conservation Biology 18:17-37.
DUKE, S.O., BAERSON, S.R., RIMANDO, A.M. 2003. HERBICIDES: GLYPHOSATE.
AVAILABLE FROM:
ver aquí. ENCYCLOPEDIA OF AGROCHEMICALS .
Fearnside, P.M. 2001. ―Soybean cultivation as a threat to the environment in Brazil‖,
Environmental Conservation 28: 23-28.
Hayes, TB, A Collins, M Lee, M Mendoza, N Noriega, AA Stuart, and A Vonk. 2002.
Hermaphroditic, demasculinized frogs after exposure to the herbicide, atrazine, at low
ecologically relevant doses, ver aquí. Proceedings of the National Academy of Sciences
(US) 99:5476-5480.
James, C, 2006. Global review of commercialised transgenic crops: 2006. International
Service for the Acquisition of Agri-Biotech Application Briefs, No 23-2002. Ithaca , New
York.
Jason, C. 2004, World agriculture and the Environment. Island Press. Washington.
Motavalli, P.P. et al 2004 Impacts og genetically modified crops and their management on
soil micribially mediated plant nutrient transformations. J. Environ. Qual 33: 816-824.
Pengue, W 2005.Transgenic crops in Argentina: the ecological and social debt. Bulletin of
Science, Technology and Society 25: 314-322.
Pimentel, D and H. Lehman 1993 The pesticide question. Chapman and Hall, New York
Pimentel, D. 2003 Ethanol fuels: energy balance, economics and environmental impacts are
negative. Natural Resources Research 12: 127-134
Pimentel, D. et al 1997 Water resources: agriculture, environment and society. BioScience
47: 97-106
Pimentel. D. et al 1995 Environmental and economic costs of soil erosion and conservation
benefits. Science 276: 1117-1123
Pimentel, D and T.W. Patzek 2005 Ethanol production using corn, switchgrass, and wood;
biodiesel production using soybean and sunflower. Natural Resources Research 14: 65-76
Relyea, R.A. 2005. The Impact of Insecticides and Herbicides on the Biodiversity and
Productivity of Aquatic Communities, Ecological Applications 15 : 618-627
Shapouri, H. et al 2004 The 2001 net energy balance of corn ethanol. USDA, Washington
DC.
Notas:
[1] Ver Colin Campbell
[2] Debido a una deficiencia de la enzima diaforasa, la sangre de las víctimas de met-Hb
reduce su capacidad de trasportar oxígeno. En lugar de ser color roja, la sangre arterial de
las víctimas de la met-Hb victims es marrón. Esto resulta en que la piel de los enfermos
caucásicos se torne azulada (por eso la referencia a los ―hombres azules‖). Los niños de
menos de 6 meses son particularmente susceptibles a la methemoglobinemia causada por
nitratos ingeridos en el agua, deshidratación causada usualmente por gastroenteritis con
diarreas, sepsis y anestésicos tópicos que contengan benzocaína. (Ver)
Boletín N° 235 de la Red por una América Latina Libre de Transgénicos
La Haine
El sindicalismo cae en la trampa mortal de los intereses compartidos con la patronal x David Macaray A mediados de los 80, los sindicatos norteamericanos cometieron un error fatal de juicio, de consecuencias epocales. Su error fue confiar en la dirección de las empresas. “Ser castrado es cosa de por sí ya suficientemente mala; ser persuadido para proceder a la ablación por propia mano, es toda una humillación añadida” Más específicamente: se creyeron la versión patronal de la Nueva Cultura: la narrativa, según la cual las relaciones laborales habían dejado de tener una naturaleza “hostil”, que sindicato y patronal habían finalmente recobrado el sentido común, que “viejos y malos días” de los cabezazos y la mutua acrimonia habían pasado para siempre.
Se puede sostener con buenos argumentos que la trayectoria de declive del trabajo organizado sindicalmente se remonta a ese momento, verdadero parteaguas. Una vez que los sindicatos fueron inducidos a dar por buena la fábula de que los trabajadores –quienes ganan un salario por hora trabajada y están permanentemente relegados en el fondo de la jerarquía empresarial— eran miembros de pleno derecho de lo que entonces se denominaba eufemísticamente un “equipo”, abandonaron toda vía de protección. Lo cierto es que los trabajadores asalariados son (y han sido siempre) vistos como meros “gastos generales”. Para la gestión patronal, son un gasto empresarial necesario pero lamentable, un drenaje de los activos de la compañía, un estorbo atravesado en el camino de los beneficios. Sugerir que el trabajo y la gestión patronal forman parte del “mismo equipo” es perverso. La locución misma tiene todas las trazas de haber sido acuñada en alguno de esos odiosos seminarios de recursos humanos. Las propias bases sindicales sonrieron maliciosamente la primera que la oyeron. Para apreciar lo que la gestión patronal piensa realmente de sus trabajadores, basta con observar la cantidad de dinero que se gasta en la investigación y el desarrollo de la robótica. Miles de millones de dólares. Tal énfasis en los robots revela más sobre el ideario de la patronal respecto a la dignidad y al mundo de los propósitos obreros que cualquier consigna excogitada en algún un seminario de empresa. ¿El escenario ideal de la Norteamérica empresarial? Externalizar todos los puestos de trabajo posibles, y en los que no se pueda, substituir seres humanos que viven y respiran por “hombres mecánicos”. Eso nos dice todo lo que precisamos saber. Además, no es por casualidad que la época en la que la gestión patronal indujo a los sindicatos a creer que “ambas partes deseaban lo mismo” coincidiera exactamente con la época en la que las ganancias de las corporaciones comenzaron a subir drásticamente, en la que las remuneraciones de los altos ejecutivos comenzaron a dispararse salvajemente y en la que los salarios y los beneficios asistenciales de los trabajadores comenzaron a despeñarse por unos derrotaderos que llegan hasta el día de hoy. La resistencia sindical era la última barda que había que saltar; lograr la capitulación de los sindicatos era la última joya de la corona. Esas observaciones no se hacen a mayor escarnio de las direcciones sindicales. Pues la verdad es que la de zascandilear con la patronal fue una decisión agónica, una decisión a la que, acosados por jaurías de varia cuenta, se vieron prácticamente forzados. Y aunque es verdad que las bases sindicales se mantuvieron escépticas respecto de esa “colaboración en equipo” , nadie puede saber hoy con certeza cómo habrían ido las cosas, si los sindicatos no se hubieran plegado a esa colaboración. Es claro que, cualquiera que hubiera sido la decisión, las perspectivas de los sindicatos tradicionales “de chimenea” habrían sido poco halagüeñas. Con la aparición de la economía global y la explotación del trabajo barato en el mercado mundial, el vaciamiento de la base industrial de los EEUU estaba poco menos que cantado. Puesto que ese sector (acero, automóviles, papel, caucho, equipamiento pesado, etc.) constituía el núcleo de los sindicatos más atractivos, cuando esas industrias centrales fueron diezmadas, el
trabajo organizado fue poco menos que barrido. Si los mismísimos Walter Reuther y George Meany hubieran podido salir de sus tumbas, tampoco habrían conseguido parar el proceso. Sin embargo, aun si el declive de la industria manufacturera era “inevitable”, no lo era en modo alguno la rendición de los trabajadores organizados en los sectores no manufactureros. De lo que no había la menor necesidad era de una década de cesiones, concesiones y un sinnúmero de comportamientos acomodaticios, de indignidades y de retrocesos sindicalmente inducidos, pocos de los cuales, al final, trajeron ventajas de ningún tipo a largo plazo. Después de todo, ¿qué se consiguió realmente? Aparte de las consabidas felicitaciones por parte de la patronal por haber entrado en la Nueva Era de las relaciones laborales, ¿qué sacaron, tangible, los sindicatos uniéndose al “equipo”? La afiliación sindical siguió desplomándose. Los trabajadores siguieron siendo despedidos. Salarios y beneficios asistenciales siguieron presionados a la baja. Las cosas fueron a peor. ¿Qué razón había para la capitulación sindical? ¿Qué habría ocurrido si los sindicatos no se hubieran tragado lo de la Nueva Cultura? ¿En qué habría venido todo a parar si, intuyendo un futuro espantoso y desmoralizador, difícilmente enmendable, los sindicatos se hubieran mantenido tozudamente en sus planteamientos de “hostilidad”, tratando simplemente de conseguir todo lo que pudieran a corto plazo? ¿Habrían salido del paso? Aunque estas cuestiones no tienen respuesta posible, una cosa está fuera de toda disputa: con esa “asociación en equipo”, los sindicatos fueron cooptados. Se jugó con ellos. A pesar de la sinceridad de los sindicatos y de su disposición a jugar el juego –asistir a seminarios de formación de equipos, ampliar o renegociar los contratos existentes, tragarse la “filosofía de Deming” de los “círculos de calidad”, etc.—, los contratos negociados, con pocas aun si preciosas excepciones, han ido de mal en peor, doquiera y comoquiera. Lo que consiguió el sindicalismo con su adhesión al “equipo” fue engrasar los patines de la gestión patronal, ponerles las cosas infinitamente más fáciles. Dejar panza arriba a los sindicatos debió de resultarles un sueño hecho realidad que ni el más empedernido de los optimistas se habría avilantado siquiera a fantaseaar en los setenta. Ser castrado es cosa de por sí ya suficientemente mala; ser persuadido para proceder a la ablación por propia mano, es toda una humillación añadida. Hay una voz en la jerga de los ejecutivos, harvesting (siega), que se aplica al proceso de abandonar un negocio, cerrar una planta o interrumpir una línea de producción de modo tal, que resulte maximizada hasta la última oportunidad de hacer dinero mientras se va de salida. Por ejemplo, cuando una compañía cierra una planta o interrumpe una de sus principales líneas de producción, la dirección raramente nunca anuncia su plan antes de lo exigido por la ley, conforme a la Ley 1989 WARN (Worker Adjustment and Retraining Notifiction), que exige una anticipación de 60 días para el cierre de una planta o el despido de 50 o más trabajadores. Por muchos rumores que circulen, la dirección de la empresa garantiza a todo el mundo que el cierre es improbable. Decirles a los trabajadores que se va a interrumpir con toda seguridad una operación es arriesgado. Es una información que puede tener consecuencias negativas sobre la moral, lo cual, a su vez, puede repercutir negativamente en la producción.
Por lo tanto, a fin de exprimir el máximo beneficio de una empresa agonizante, hacen lo contrario. Pregonan que, aun si las cosas pintan mal, si la gente trabaja más duro y la producción aumenta significativamente, hay muchas posibilidades de que la línea de producción se mantenga y todos conserven su puesto de trabajo. En una palabra, “siegan” la empresa. La Kimberly-Clark Corp. hizo exactamente eso en 1992 con su línea de pañales infantiles desechables en la fábrica de papel que tenía en Fullerton, California. A pesar del incremento en las ventas de sus popularísimos “Huggies”, Kimberley-Clarck siguió reduciendo el número de máquinas con que los producía en sus plantas de pañales de todo el país. Puesto que la velocidad y la eficiencia de las máquinas habían aumentado espectacularmente, 28 máquinas producían ahora lo mismo que 42 un año antes. El aumento de productividad era espectacular. Máquinas que antes producían 300 pañales por minuto, trabajaban ahora a una velocidad de más de 500, y la tasa seguía aumentando. Habiendo visto ya cerrar 4 de sus 6 máquinas, los trabajadores de la planta de Fullerton empezaron, como es natural, a ponerse nerviosos. Aun cuando las cifras de producción y eficiencia en Fullerton no dejaban de crecer, lo que estaba escrito parecía claro. Por mucho que la gente tratara de tranquilizarse, ver dos solitarias máquinas produciendo pañales en medio de una inmensa fábrica no dejaba de causar preocupación. Puesto que no se trataba del cierre de una planta y el número de los trabajadores subsistentes era inferior a 50, la empresa no estaba obligada a notificar nada con anticipación. Pero cuando los ejecutivos de la compañía visitaron la factoría y los trabajadores asalariados y los funcionarios sindicales les preguntaron por el futuro del departamento de pañales, respondieron a todos por la afirmativa. Contaron a la gente que si las tasas de producción seguían mejorando como hasta entonces, “tenían excelentes perspectivas ante sí”. Lo que hizo que todos se pusieran a trabajar con redoblado empeño. La producción fue interrumpida muy poco después de esa, la última, visita. Ironías de las cosas, eles del cierre el departamento de pañales había conseguido la mejor producción de toda su historia. Aunque el cierre era una decisión tomada con antelación, le dirección de la empresa estaba convencida de que no podía compartirla con los trabajadores. Una táctica parecida se empleó en la “siega” del trabajo organizado. La patronal no tenía la menor intención de unirse en equipo alguno con los sindicatos. ¡Dios nos coja confesados! En lo único que estaban interesados era en hacer retroceder a los sindicatos, en que sus negociaciones colectivas perdieran agresividad, en tenerlos sujetos, cual canes obedientes, mientras las empresas buscaban la mejor forma de maximizar sus beneficios en un mundo que cambiaba a toda velocidad. Lo consiguieron. La lección para el trabajo organizado es simple: manteneos unidos, manteneos en principios básicos, no os fiéis de nada que venga de la boca de la patronal. Sobre todo, no toleréis que nadie os venga con el cuento de que las relaciones laborales no tienen una naturaleza pugnaz, porque no es verdad. Las dos partes no quieren lo mismo. Nunca lo han querido y nunca lo querrán.
-- David Macaray es un escritor radicado en Los Ángeles. Fue presidente y negociador jefe del Sindicato de los Trabajadores del Papel, Local 262, entre 1989 y 2000. Counterpunch, 17 junio 2008. Traducción para sinpermiso.info: Ricardo Timón
Argentina: Polariza y reinarás: el antagonismo como estrategia
Cien días de conflicto, tensión política y malestar social pusieron a la sociedad argentina otra vez frente al espejo de sus peores demonios. Golpistas, oligarcas, intolerantes, patoteros, gorilas, pueblo, antipueblo, ricos y pobres, negros y blancos. ¿Hasta qué punto se puede tensar la cuerda de la polarización retórica sin caer en una profecía autocumplida? Por Hilda Sábato Domingo 22 de junio de 2008 | De un lado el pueblo, del otro la antipatria. Esta es la fórmula que usó el ex presidente de la República, actual presidente del PJ y número uno del entorno de la Presidenta en ejercicio, Néstor Kirchner, para sintetizar el conflicto político en que está inmersa la Argentina desde hace más de cien días. No fue una fórmula aislada, sino que se articula con otras parecidas acuñadas por diversas figuras del gobierno y del partido gobernante en una retórica fundada en dicotomías y desplazamientos. El país aparece así dividido en dos: se está a favor o en contra del gobierno, lo que equivale a ser popular o antipopular, democrático o golpista, peronista o gorila. Esta manera dicotómica de interpretar el conflicto político en términos de un polo que representaría al pueblo (la patria, la nación, la causa) enfrentado a otro que encarnaría al enemigo antipopular (la antipatria, la sinarquía, el régimen) y, por lo tanto, antinacional, fue característica de la vida política argentina de buena parte del siglo XX. Tanto el yrigoyenismo como el primer peronismo funcionaron sobre esas bases, pero también lo hicieron, con otras metáforas, las dictaduras militares. Esas imágenes fueron efectivas en la conformación de identidades políticas y tuvieron consecuencias en las formas en que se desenvolvieron los conflictos, con frecuencia reducidos a una confrontación amigo-enemigo que solo parecía poder resolverse a través de la violencia. Mucho se ha dicho y se ha escrito críticamente en los últimos treinta y cinco años sobre esta "tradición" política, en el marco de la valorización de la democracia y el pluralismo y de los esfuerzos que siguieron a la caída de la dictadura militar por construir una vida política sobre nuevas bases. Y no creo equivocarme si afirmo que en ese plano se lograron avances significativos. Fueron tres décadas y media muy duras para la mayoría de los argentinos, durante las cuales el desmantelamiento del estado, la destrucción del aparato productivo, la crisis económica y, sobre todo, la exclusión social, todos procesos iniciados durante la dictadura, no solo no lograron revertirse sino que se agudizaron. Sin embargo, y a pesar del desprestigio en que por momentos cayó la actividad política en general y sus cultores en particular, hubo un afianzamiento de valores y prácticas asociadas con la democracia, el pluralismo, el reconocimiento de la legitimidad de la diversidad y de las diferencias, y la aceptación del conflicto como inherente a la vida democrática. Si bien no sería difícil encontrar ejemplos que desmientan este diagnóstico quizá optimista, en general hay coincidencia en que estamos en ese camino. Intransigencia
Por eso el discurso del gobierno "atrasa", es decir, retoma una manera de entender el conflicto, y también de procesarlo, que una buena parte de la sociedad argentina buscaba dejar atrás. En esa parte se incluían hasta hace muy poco la propia Presidenta y el ex presidente, así como otras figuras del gobierno y del PJ, quienes ganaron las elecciones con un discurso bastante diferente al que ahora despliegan. Y si bien algunos motivos de aquella retórica habían asomado ya en ocasiones anteriores, nunca lo hicieron con la contundencia y la intransigencia actuales. Se podría argumentar que, en este caso, la representación dicotómica reflejaba la realidad de una manera más ajustada que la que hubieran permitido otras formas de caracterizar el problema. Es difícil, sin embargo, sostener ese argumento. En efecto, en una primera etapa, la disputa fue claramente sectorial: se dio entre un gobierno que, de acuerdo con sus facultades, tomó una medida que afectaba directamente a un sector -los que producen algunos bienes agropecuarios para la exportación, en especial soja- y las organizaciones corporativas de ese sector que salieron a protestar. Lo hicieron, además, según los mecanismos tradicionales de manifestación corporativa a los que agregaron los métodos más recientes de intervención, los piquetes y cortes de ruta, acciones que si bien han merecido críticas diversas han sido toleradas y hasta alentadas desde el gobierno en ocasiones anteriores. Por lo tanto, la protesta era acotada, refería a un problema específico y reunía a organizaciones que agrupan a sectores sociales muy diversos, con inclinaciones políticas también heterogéneas y, por lo tanto, no fácilmente ubicables en una representación polar del espectro político nacional. Es difícil reconocer en este conjunto a una oligarquía, y mucho más lo es asociarlo con el golpismo, por más que en su seno haya grupos que más de una vez alentaron y acompañaron a los gobiernos militares. Lo es más aún el identificarlo como opositor al "modelo económico" oficial en la medida en que, desde 2003 hasta hoy, el sector fue un pilar de ese modelo a la vez que un beneficiario directo de su implementación. Desde el primer momento, sin embargo, el gobierno optó por representarlo unitariamente como un antagonista esencial: los que protestaban eran la oligarquía, que siempre fue golpista, y que se levantaba ahora contra el gobierno popular en una acción antidemocrática. De allí en más, el deslizamiento era inevitable: cualquiera que no apoyara al gobierno en esta confrontación se colocaba en el polo opuesto. La dicotomía quedó, así, instalada desde el discurso oficial. No me interesa aquí especular acerca de las razones por las cuales quienes nos gobiernan eligieron esa forma de entender el conflicto y de actuar en consecuencia, sino reflexionar sobre los efectos que éste ya ha tenido y seguramente seguirá teniendo en nuestra vida política. Las palabras pesan y, si bien es cierto que la eficacia de la retórica para generar representaciones colectivas no está garantizada, su incidencia en la vida política puede ser decisiva. En este caso, no podemos saber todavía cuánto del discurso polarizador ha calado en la sociedad argentina, pero es cierto que éste y las prácticas consiguientes han contribuido al menos a transformar una protesta sectorial en un conflicto político que involucra a todos y que todavía no se resuelve. Así, el camino elegido no solo contribuyó a cohesionar a un conjunto de organizaciones que, como dijimos, es social, política y económicamente heterogéneo y reconoce rivalidades históricas, sino a despertar la militancia de sus bases, que esta vez han ido más allá que las dirigencias en la voluntad de defensa de sus intereses a través de la protesta. También ha favorecido la reacción de quienes, sin estar alineados con el campo y sus demandas, encontraron que el discurso oficial los dejaba afuera o, peor aún, los englobaba en el polo negativo de su definición política. Y que decidieron protestar para pedir cambios en la dirección que el gobierno imprimió a su accionar en relación al conflicto y sus derivados. Esta reacción de una parte de la sociedad argentina (no fácilmente encasillable en términos sociales, ideológicos ni políticos) fue asimilada rápidamente
por el discurso oficial al accionar de las fuerzas antidemocráticas y, desde el poder, se montó una demostración alternativa en la Plaza de Mayo en nombre de la defensa del gobierno y de la democracia. Pero ¿estaba la democracia en peligro? ¿estaba el gobierno nacional en jaque? La construcción de una imagen de la Argentina fragmentada en dos partes con aspiraciones nacionales antagónicas no parece responder a una realidad previa ni reflejar lo que buena parte de los argentinos queremos para nuestro país. Pero su puesta en circulación con la fuerza que da el poder político (resultado del apoyo electoral mayoritario) inevitablemente produce identificaciones y realineamientos. En este caso, además, la dicotomía viene cargada con contenidos históricos todavía presentes para una porción no menor de los argentinos, contenidos que, si bien no parecían tener mucho que ver con el país actual, pueden despertar reflejos, simpatías y rencores que realimenten la polarización. Y si sobre esa divisoria política se pretende imprimir un sesgo social, como en algún momento parecieron sugerirlo varios voceros del gobierno y del PJ, asimilando el pueblo peronista a las clases populares y la antipatria a los sectores medios y altos, la combinación puede tener resultados impredecibles en términos de la posibilidad de construcción de una nación relativamente integrada. Si hoy el mayor problema argentino sigue siendo la exclusión social, no es por medio del enfrentamiento retórico entre pueblo y antipatria que ese problema va a encontrar solución sino a través de políticas públicas activas que ni éste ni otros gobiernos en democracia han sabido o querido adoptar de manera sistemática. Mientras tanto, en el juego discursivo en que hoy estamos envueltos, seguramente habrá quienes busquen reactivar viejas antinomias para encender pasiones, crear incertidumbre y generar efectos desestabilizadores destinados a favorecer sus intereses por medios que no son los que ofrece la vida institucional. La polarización retórica podría convertirse entonces en una profecía autocumplida. ¿Estaremos todavía a tiempo de salir de esta trampa?
Las raíces históricas del conflicto La distribución de la riqueza producida por las exportaciones agropecuarias está en el centro de un debate económico que, una y otra vez, irrumpe en la realidad argentina. El historiador Tulio Halperin Donghi abordó ésa y otras claves del conflicto entre campo y gobierno, respondiendo vía e-mail a dos preguntas de LA NACION -¿Por qué cree usted que la Argentina se encuentra otra vez en situación de asamblea generalizada, con cacerolas en las calles y en medio de una crisis política imprevista? -Habría que remontarse muy lejos para inventariar todos los factores que llevaron a esta situación. Está en primer lugar, diría yo, el eclipse político de las fuerzas armadas, que no sólo incita a las fuerzas políticas a llevar el conflicto entre ellas a niveles que ya no corren peligro de inducir a aquéllas a reemplazarlas en el gobierno, sino que -cuando las crisis políticas o económicas alcanzan efectos que comienzan a parecer intolerables- sea eso que solía llamarse el pueblo o la ciudadanía, y ahora es conocido como "la gente" el que se entregue a intervenciones violentas a través de las cuales busca expresar lo que llama su bronca, animado a ello por el falso recuerdo de que fue su tenaz y heroica resistencia la que puso fin a la experiencia de terrorismo de estado vivida durante la última dictadura militar, cuando fue sobre todo la prodigiosa ineptitud de quienes la ejercieron la que los obligó finalmente a huir del poder. Cuando el presidente De la Rúa tuvo la insolencia de enfrentar mediante el estado de sitio la cólera popular que -suscitada por el súbito colapso de las finanzas nacionales- se había hecho dueña de la calle, la primera
consecuencia fue una masacre policial seguida inmediatamente del fin de su presidencia, y de la apertura de una etapa en que la Argentina vivió de veras en estado de asamblea. Cuando la movilización popular comenzaba a amainar, el asesinato policial de dos manifestantes vino a devolverle una intensidad que persuadió al doctor Duhalde de la necesidad de abreviar su gestión al frente de la presidencia que había quedado vacante, ya que sólo un rápido llamado a elecciones podía aventar la amenaza que esa situación estaba haciendo pesar sobre su cabeza, y esa segunda experiencia vino a confirmar que la Argentina vivía una situación inédita en que el Estado sólo retenía el monopolio de la violencia a condición de renunciar a usarla. Esa situación no había cambiado cuando el doctor Kirchner asumió la presidencia, y dura en lo esencial hasta hoy. Desde luego, las consecuencias fueron menguando paulatinamente; la más duradera fue la capacidad que retenían organizaciones surgidas durante la crisis y estaban adquiriendo otras más tradicionales, desde sindicatos de obreros y empleados hasta asociaciones estudiantiles, para imponer inesperadas trabas al tránsito, creando un mal humor bastante generalizado, pero no lo bastante intenso para suscitar reacciones violentas. El nuevo gobierno no buscó cambiar esa situación, en parte porque tenía buenos motivos para desconfiar de la lealtad de las instituciones a través de las cuales el Estado ejerce esa violencia sobre la cual reivindica un derecho monopólico, pero en parte también porque esperaba compensar con el apoyo de las organizaciones surgidas de la crisis el que no recibía en medida suficiente de las sindicales y de las máquinas políticas del justicialismo. Durante más tiempo de lo que hubiera parecido esperable, esa situación inédita no comenzó a alcanzar las consecuencias que hubieran sido esperables. En rigor, comenzó a entrar en terreno peligroso cuando pasó a dirimirse en ese terreno el conflicto planteado con Uruguay en torno a las usinas pasteras; pronto iba a descubrirse qué difícil iba a ser poner fin a una situación en que un grupo de vecinos de Gualeguaychú había conquistado y en los hechos ejercía un inapelable derecho de veto sobre algunos de los temas más delicados de la política exterior argentina mediante el sencillo procedimiento de instalarse periódicamente con sus reposeras en un puente internacional. Hoy en medio de un clima colectivo que todos contribuyen a hacer cada vez más tenso, quienes desafían al Gobierno han descubierto que nada les impide conducirse como quienes lo apoyan, y aunque cabe celebrar que las truculentas amenazas que intercambian unos y otros no se reflejen sino en mínima medida en los hechos, es ya suficientemente deplorable que ayuden a perpetuar un conflicto que si no se encuentra modo de cerrar prontamente logrará que la Argentina deje pasar de largo una oportunidad que, como sostiene con toda razón nuestra presidenta, sólo es comparable a la que conoció, y por cierto no dejó pasar de largo, hace un siglo. -¿Cómo describiría al campo como actor político en la historia argentina, antes visto como baluarte de la oligarquía ganadera y hoy presentado por el Gobierno como el sector que se opone a la distribución de la riqueza? -Desde antes que la Argentina fuese la Argentina, el interés rural invocó su condición de único productor de los bienes que permitían a las tierras del Río de la Plata insertarse en el comercio mundial para presentar a los productores rurales como los únicos cuya actividad agregaba algo valioso a la riqueza nacional; comenzaron tan pronto a hacerlo que pudieron apoyarse para ello en la doctrina económica de los fisiócratas del setecientos. Cuando la doctrina clásica pasó a caracterizarlos como beneficiarios de rentas de monopolio, respondieron a esa caracterización,
que juzgaban calumniosa, insistiendo aún más en los titánicos esfuerzos que les habían permitido vencer las resistencias de una naturaleza indómita para crear en las pampas uno de los mayores centros agrícola-ganaderos del planeta, y desde entonces siguen oponiendo esa imagen heroica a la que los representa como integrantes por excelencia de nuestra clase ociosa. Ese debate ya rutinario es alimentado por conflictos que no son nuevos, y que giran en torno a la distribución dentro de la sociedad argentina del excedente producido por las exportaciones agropecuarias. Esos conflictos, sin embargo, tardaron en perfilarse con bastante nitidez para que los distintos sectores rurales los percibieran como más serios que los que los dividían internamente. Así ocurría en el campo de la política monetaria, en que cada medida, así fuera implícitamente, venía a arbitrar entre el interés de las masas consumidoras y el de los rurales. Pero había muy pocos motivos para que éstos se movilizaran a favor de sus intereses comunes cuando, sin necesidad de que lo hicieran, las medidas más significativas tomadas en ese campo en la segunda mitad del siglo XIX -los dos retornos a la convertibilidad de la moneda de papel- habían buscado evitar el peligro de que una excesiva valorización del peso, que hacía más accesible a las masas populares los bienes de consumo entonces predominantemente importados, disminuyera los provechos que estaban estimulando la expansión del sector agropecuario. La crisis de 1929 vino a cambiarlo todo en este aspecto, al obligar al Estado a ejercer un arbitraje -ahora no sólo explícito sino permanente- entre los intereses del sector rural en su conjunto y los de otros (en primer lugar el industrial) que compensaban en parte con su mayor dinamismo la ya irremediable pérdida de velocidad del agropecuario. En ese marco nuevo, la revolución peronista iba a ganar el favor de las mayorías populares urbanas sin sufrir pérdidas significativas en el apoyo de las de las cuencas cerealeras, arbitrando a favor de las primeras al mantener muy alto el valor internacional del peso y compensando las pérdidas de las segundas a través de la congelación de los arrendamientos. Esa solución no impidió que ya se diera algún anticipo parcial del actual conflicto. Ocurrió en 1947, cuando la Federación Agraria, entonces expresión de los chacareros arrendatarios, llegó a amenazar con quemar la cosecha para la cual el Gobierno había fijado precios que encontraba insatisfactorios; y luego de un breve intercambio de amenazas cada vez más truculentas obtuvo un modesto reajuste de los precios que objetaba con tanta energía. Poco después desaparecía la ocasión para nuevos conflictos al cesar la breve bonanza exportadora de posguerra, y sólo después de que en 1963 se cerró la etapa de precios y volúmenes deprimidos abierta más de diez años antes, esa oportunidad vino a repetirse. Eso hizo posible que en 1967, siendo presidente el general Onganía y ministro de Economía el doctor Krieger Vasena, se introdujera por primera vez el régimen de retenciones que está en el origen del actual conflicto, en ese caso para financiar un ambicioso plan de obras públicas destinado a revitalizar otros sectores de la economía, sin provocar por cierto reacciones como la que ha desencadenado la reciente iniciativa del ministro Lousteau. Si esas reacciones no se produjeron entonces y sí ahora es, en parte, porque no se había completado aún la transformación social de la que fue teatro la pampa húmeda a partir de la revolución peronista. Debido a los efectos de la congelación de arrendamientos -sólo derogada por el gobierno del general Onganía-, los chacareros en tierra ajena no tenían ya una presencia numéricamente dominante en esa sociedad, pero estaban apenas comenzando la expansión de la agricultura en tierras antes ganaderas y los avances de la mecanización -con su consecuencia en el despoblamiento de los campos- que iban transformar profundamente el paisaje social de la pampa
húmeda, despojando a sus conflictos internos de la gravitación que habían tenido en el pasado, aunque ya por entonces se habían atenuado lo suficiente: cuando el general Lanusse ofreció la secretaría de agricultura al presidente de la Sociedad Rural, éste le sugirió que designara en su lugar al de la Federación Agraria, que se guiaría en su gestión por criterios muy parecidos sin que pudiera reprochársele su pertenencia a la oligarquía terrateniente. La consecuencia es que hoy la defensa de la prosperidad "del campo", una prosperidad que se percibe, mejor que en el mismo campo, en los centros urbanos menores, en los cuales -mientras luego del derrumbe de 2001 el Apocalipsis parecía haberse desencadenado en las grandes ciudades de la región- seguía reinando un aire de normalidad, prosperidad y tranquilidad que hacía difícil creer que formaban parte del mismo país, y que ha alcanzado también finalmente a la que fue sólo anteayer capital de los cereales (y del peronismo) y hoy es socialista capital de la soja, es capaz de movilizar en Rosario a muchedumbres que no tienen necesariamente parte directa en el conflicto, pero perciben muy bien hasta qué punto esa prosperidad ha repercutido positivamente en sus vidas. Es entonces quizá un poco injusto achacar a la indudable torpeza con que el Gobierno se ha manejado a lo largo del presente conflicto la solidez que conserva el movimiento de protesta, que se debe más bien a que -por desigual que sea la distribución de los frutos de la "prosperidad del campo"- ésta ha alcanzado a sectores mucho más amplios de la sociedad de la pampa húmeda de lo que sostiene (y sin duda cree) la señora Cristina Fernández de Kirchner.
Bolivia: la desintegracion andina
x Andrés Soliz Rada
Bolivia le presta dinero a EEUU, Alemania, Suiza, Gran Bretaña, Francia, Australia, Japón
e Irlanda al 2 % y recibe préstamos al 8 %
Las casualidades no existen en política. Alan García, al suscribir un TLC con EEUU,
aceptar la instalación de una base militar de EEUU e impulsar la venta de tierras comunales
ratifica que es un instrumento de Bush y de la oligarquía limeña. Tampoco es casual que su
canciller, José García, denigre al ex presidente Juan Velasco Alvarado, quien, junto a
Alfredo Ovando, de Bolivia, Lleras Restrepo, de Colombia y Velasco Ibarra, de Ecuador,
impulsaron, en 1969, la histórica ―Decisión 24‖ del Pacto Andino‖.
Esa ―Decisión‖ determinó que Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia establezcan reglas
comunes frente a los capitales extranjeros, prohíban a las transnacionales invertir en
servicios básicos e impidan exportar utilidades por encima del 14 % de su inversión.
Programaron el desarrollo de la metal mecánica y determinaron que el Estado sea partícipe
cada vez más decisivo en los emprendimientos estratégicos.
Washington y los militarismos brasileño y argentino, sometidos al Pentágono, derrocaron,
con el concurso de la oligarquía cruceña y la ultra izquierda, influenciada por James Petras,
al régimen Ovando-Torres, en 1971. En 1975, EEUU reemplazó a Velasco por el
conciliador Morales Bermudez. Con esos cambios, impidió que las esperanzas liberadoras
del cono sur se enriquecieran con la victoria de Allende, en Chile, en 1970, y de Héctor
Cámpora, en Argentina, en 1973.
Si de comparaciones se trata, Alan García desarrolla políticas económicas similares a las de
Menem, Sánchez de Lozada y Pinochet. Velasco Alvarado, en cambio, nacionalizó el
petróleo, controló a la Banca foránea, repartió los latifundios a los campesinos y puso
límites al abuso de los medios de comunicación, digitados por las metrópolis. Es, junto a
Ovando y Allende, el visionario de la integración latinoamericana, basada en una
democracia de autodeterminación nacional, ya que la otra, la neoliberal del Consenso de
Washington y Alan García, desemboca en baños de sangre, como el causado por ―Sendero
Luminoso‖.
El canciller de ―Torre Tagle‖ compara a Evo Morales con Velasco Alvarado. Infelizmente,
lo anterior no es totalmente cierto, debido a que las políticas del ―Palacio Quemado‖ contra
la exclusión social y por la recuperación de recursos naturales se estrellan contra el
neoliberalismo del Ministro de Hacienda, Luís Arce, y los directores del Banco Central,
para quienes Milton Friedman es el Sumo Pontífice.
En efecto, no tiene justificación alguna que 6.000 millones de dólares de las reservas
monetarias de Bolivia (del total de 7.000 millones) y de los fondos de los jubilados estén
prestados al 2% anual, según información oficial, a entidades financieras de EEUU,
Alemania, Suiza, Gran Bretaña, Francia, Australia, Japón e Irlanda. Bolivia le presta dinero
a la CAF al 2 % y recibe préstamos al 8 %. ¿Alguien puede entender semejante locura?
Cuando se pide a los desvergonzados neoliberales que expliquen lo anterior, responden que
―se trata de información confidencial‖. Añaden que no conviene tener dinero en Bolivia
para no aumentar la inflación, lo cual es falso si se lo destina a proyectos productivos, como
la siderurgia, refinerías, carreteras, fundiciones y gasoductos, financiados hasta ahora con
préstamos usureros.
La demencia del régimen boliviano es compartida por casi todos los gobiernos de la región.
El Presidente Correa del Ecuador ha revelado que los países latinoamericanos tienen
prestados 200 mil millones de dólares al Tesoro de EEUU, transnacionales y Bancos
norteamericanos, europeos y japoneses. ¿Hasta cuando no se creará el Banco del Sur?
¿Hasta cuando engordaremos a nuestros expoliadores?
La Haine
La dialéctica del neoconservatismo y la Sociedad Interamericana de Prensa
x Carlos Pandolfi
Pseudo-demócratas disfrazados de oveja, los neocons(ervadores) encuentran en la
confrontación directa, la psicología y los medios de comunicación convencionales sus
herramientas
―Estamos empeñados en trabajar con ambas partes para llevar el nivel de terror a
un nivel aceptable para ambas partes‖
George W. Bush (2-10-2001)
La Sociedad Interamericana de Prensa su filial en Iberoamérica para desarrollar su
estrategia comunicativa basada en la legitimación de la mentira por medio de prejuicios y
caracterizaciones marcadas entre buenos y malos. El siguiente ensayo intenta descifrar
este mapa ―maquiavelico‖ que actualmente intenta imponerse en el contexto
Latinoamericano y que tiene como fin ―hacer de la otredad y la razón una utopía‖.
El 11 de septiembre no solo significo la materialización, la concreción de un acto terrorista
de grandes proporciones- cuyo autor no deja de ser motivo de controversia- sino la excusa
perfecta para ejecutar el sueño truncado durante mucho tiempo del ala radical del partido
republicano tan ávida de confrontación, lucro y caos. En este marco, el proyecto del
movimiento neoconservador norteamericano emerge imponiendo el belicismo sobre la
lógica y llama a establecer una dinámica de movilización general a través del uso reiterado
y continuado de medidas de excepción.
Partiendo del postulado de la ―Guerra Preventiva‖ el llamado de los Neo cons hace eco en
la administración Bush – ¿Bush o Cheney?- y a partir de ahí se inicia una política ofensiva
que tiene como finalidad preservar el dominio Norteamericano en la escena internacional.
Con el fin de darle forma a su proyecto, los Neocons reconstruyeron, reinventaron de forma
mas no de fondo algunos de los elementos de su propia dialéctica política: la distinción
tajante entre amigos y enemigos (o estás conmigo o estás contra mí) paso de ser la ―Guerra
contra el comunismo‖ para convertirse en la ―Guerra contra el terrorismo‖; La guerra
ideológica y armamentista –contra el comunismo soviético- paso a ser en el fondo una
guerra racial con fines netamente económicos–Contra Evo Morales, los árabes y de manera
indirecta contra los inmigrantes no blancos que han llegado o intentan llegar a los Estados
Unidos y Europa entre otros-. La principal diferencia entre el discurso conservador (de
Reagan hacia atrás) y el neo conservador (De Bush en adelante) radica en el uso que ambos
le dan a la intervención militar –que pasa de la guerra fría a la materialización de una
ofensiva en la guerra-.
Seguidamente con el fin de establecer el dominio total de la mente del ciudadano –
inicialmente en Estados Unidos-, la ―religión neocon‖ tomó como punta de lanza la
estimulación de la paranoia en la población, la cual facilitó al máximo la sodomización de
forma continua desde un lugar común para todos: los medios de comunicación.
La identificación de sucesivos "peligros inminentes" le abrió caminos al sofisma erróneo de
que, al estar viviendo un momento de zozobra, era necesario dotar a ―Quienes saben‖ – La
aristocracia política privilegiada con una visión estratégica de la que carecería tanto su
población como los gobiernos de otros países- de poderes excepcionales para tomar
decisiones sobre cómo hacer frente a los peligros que afectan a la nación, invocando a cada
momento la necesidad de actuar en contra de todo aquel que profese alguna religión distinta
al cristianismo –entendiéndose por cristiano todo aquel que no acolita el socialismo, ni la
pluriculturalidad étnica ni religiosa y que apoya ciegamente la intervención norteamericana
sin mediar consecuencias ni victimas- con la convicción de ser los instrumento de dios en la
tierra con la autoridad suficiente para engañar y mantener a la ciudadanía indefensa,
confusa y alejada de todo cuestionamiento ante los acontecimientos, decisiones y guerra s
llevadas a cabo.
Por momentos, la retórica de los neocons revive el discurso de las cruzadas llevadas a cabo
por la iglesia entre los siglos XI y XIII contra los musulmanes de oriente medio e induce a
una respuesta común a dichos interrogantes por parte de un significativo porcentaje de
ciudadanos: ―preocupémonos por nuestros asuntos que ellos son los únicos que saben cómo
gobernarnos y se preocuparan por los nuestros‖.
De otro lado, sus vertientes ideológicas proceden de diversos autores: Irving kristol- de
origen judío y uno de los fundadores del movimiento que se influenció profundamente de
Trotski-, Norman Podhoretz, Charles Krauthammer –ex asesor de Jimmy Carter y creador
de la impronta del mundo unipolar-, David Horowitz y Paul Wolfowitz- Ex presidente del
banco mundial de una amplia trayectoria en cargos diplomáticos bajo administraciones
republicanas quien fue obligado a dimitir del BM acusado de nepotismo-.
Pero probablemente quien más influenció la actual directriz del movimiento fue Leo
Strauss, filosofo judío-alemán quien llega a los Estados Unidos a mediados de la década de
los años 30, padre de algunas de las políticas sectarias que actualmente George Bush ha
puesto en práctica tales como: la supresión de las políticas de discriminación de las
minorías, el corte total de subvenciones a la cultura, la defensa institucional de los valores
religiosos, la implantación de una interpretación restrictiva de la libertad de expresión
reconocida por la Primera Enmienda de la constitución americana y el recorte del Estado de
bienestar y de los derechos de la mujer.
En síntesis hay varios elementos en los que coinciden los abanderados del movimiento neo
con estadounidense:
Una gran mayoría de los estandartes "neocon" norteamericanos son de origen judío y pro-
israelí por lo que el discurso religioso y anti-islámico que circula en el gobierno de EEUU
es una de sus prioridades -importancia que radica en los intereses estratégicos e
imperialistas de EEUU en esta región-.
Se hacen llamar la elite – uno de los pilares de la llamada ―noble mentira‖ Straussiana, que
se cimenta, en la necesidad que tiene el filósofo-rey de contar al pueblo ignorante las
mentiras necesarias para conseguir el bien de todos-. En su totalidad , sus referentes han
sido catedráticos de ciencia política, filosofía y relaciones internacionales en prestigiosas
universidades norteamericanas siendo testigos de como su proyecto se ha fortalecido
gracias al apoyo financiero de las grandes corporaciones que, a través de fundaciones como
la Olin, la Sarah Scaife, la Bradley o el American Enterprise Institute (AEI), han
colaborado con cientos de millones de dólares no solo publicando y difundiendo los libros
y revistas que han promovido sus ideas, sino también los numerosísimos departamentos
universitarios (1)
EL NEO CONSERVATISMO EN LATINOAMERICA
El movimiento neo conservador latinoamericano en primera instancia nace como
consecuencia de las dictaduras militares instauradas alrededor del continente, orquestadas y
controladas por los Estados Unidos, las cuales se convirtieron en el ―laboratorio
internacional‖ de las políticas teorizadas por los neo con norteamericanos- cuyo mayor
auge se dio en las administraciones de Richard Nixon y Henry Kissinger-. El accionar de
este movimiento en nuestro continente en las décadas del 70 y 80 tuvo un papel netamente
ejecutivo -cumplir con los lineamientos de la banca internacional, del capital transnacional
y con las obligaciones ―generosas y justas‖ del FMI-. Por lo tanto la ―elite designada‖ por
los Estados Unidos para llevar a cabo esta ―noble mentira‖, capaz de gobernar en
Latinoamérica la componen las fuerzas militares, los políticos de los partidos oligarcas
tradicionales, y su bastión espiritual –La iglesia-.
Este proceso, que fue denominado de manera errónea neo liberalismo -uno más de los
cientos de juegos dialecticos que han utilizado históricamente los neoconservadores para
mimetizar sus verdaderos fines- fue llevado a cabo durante veinte años - de los años 70 a
los 90- y trajo como consecuencias entre otras cosas: Privatizaciones, Aumentos
exagerados en la deuda externa que tuvieron como desenlace fugas masivas de capital de
los países, colapso de los sistemas económicos, desigualdad, aumento de la brecha de
ingresos entre pobres y ricos, cesión a ultranza al capital privado de los bienes de las
naciones y proteccionismo al capital privado en detrimento de las mayorías acompañado
todo lo anterior por gastos ridículos en inversión social.
En medio de este panorama desolador de saqueo, empiezan a tomar fuerza los movimientos
sociales y movimientos políticos en Latinoamérica que aprovechando el descontento
generalizado de los ciudadanos con estas políticas, abanderan una causa común: La defensa
de la soberanía, la integración y la transformación parcial o total de los sistemas políticos,
económicos y financieros del continente así como su integración. A decir verdad lo que
hicieron los movimientos de izquierda en Latinoamérica fue capitalizar el descontento de
las mayorías con los sistemas reinantes en las urnas.
En este punto-finales de la década de los 90 y el transcurso de este siglo-, se ha
vislumbrado un proceso en Suramérica que trajo como resultado el vuelco casi total del
panorama político hacia la izquierda- a excepción de Colombia-.
Los resultados electorales toman por sorpresa a los políticos tradicionales quienes se ven
obligados a buscar formas de frenar a como dé lugar los procesos de cambio que se dan en
el continente por lo que los antiguos ―monarcas‖ se convierten en opositores. Al asumir su
nuevo rol de desterrados- al cual nunca estuvieron acostumbrados-, esta oligarquía
neoconservadora empieza a buscar apoyo en su mentor -el departamento de estado de
Estados Unidos y la CIA-.
Es así como aparecen en este contexto, las operaciones secretas del SOCOM (Mando
Secreto de Operaciones Especiales), famoso por haber dirigido la desestabilización e
invasión de Irak en distintos países y un plan conjunto entre los medios más influyentes de
Latinoamérica tendiente a justificar futuras acciones diplomáticas, políticas e incluso
militares contra Cuba y Venezuela -incluidos los países del mal llamado ―eje del mal‖, así
como relacionar a este último con grupos terroristas del medio oriente(2).
Dicho plan de la aristocracia latinoamericana representada en sus medios de comunicación
–Los del GDA- en la práctica es orquestado desde la Sociedad Interamericana de Prensa
(SIP) quien ―amablemente‖ se presenta a la opinión pública de la siguiente manera
(http://www.sipiapa.com/espanol/general.cfm):
La Sociedad Interamericana de Prensa es una organización sin fines de lucro dedicada a
defender la libertad de expresión y de prensa en todas las Américas.
Sus principales objetivos son:
Defender la libertad de prensa donde quiera que se impugne en las Américas, Proteger los
intereses de la prensa en las Américas, Defender la dignidad, los derechos y las
responsabilidades del periodismo, Alentar normas elevadas de profesionalismo y conducta
empresarial, Promover el intercambio de ideas e información que contribuya al desarrollo
técnico y profesional de la prensa, Alentar un conocimiento amplio y un mayor intercambio
de información entre los pueblos de las Américas en apoyo a los principios básicos de una
sociedad libre y de la libertad individual.
La ―cara amable‖ de la SIP dista mucho de su verdadera realidad:
La SIP es una organización de Estados Unidos que reúne a los grandes dueños de
periódicos, diarios y canales de televisión de ese país y de América Latina-Canales entre
los que encontramos a Telemundo y Univisión, Canal 13 de Perú, Canal 9 de Argentina,
Chilevision, Globovision de Venezuela, Tv Azteca, Galavisión y Televisa de México,
Caracol y City Tv de Colombia entre otros-.
En la práctica, la SIP opera como brazo periodístico del gobierno estadounidense en la
región interamericana, como un complemento imperial facilitador de las políticas
regionales del departamento de Estado y del Pentágono que tiene como objetivo lograr
difundir e imponer en la ciudadanía hispana las premisas del movimiento neoconservador
norteamericano -recordemos que sus fundadores fueron los agentes de la CIA Jules Dubois
y Joshua Powers, y el funcionario del Departamento de Estado, Tom Wallace-. Los grandes
dueños estadounidenses de periódicos manejan a la SIP con una visión del mundo que
coincide con la óptica del poder imperial de Washington, arrastrando consigo a la comparsa
de las oligarquías propietarias de periódicos de América Latina.
La acción puntual de la SIP es lograr materializar la Guerra de Cuarta Generación (Fourth
Generation Warfare - 4GW), término usado por los analistas y estrategas militares para
describir la última fase de la guerra en la era de la tecnología informática y de las
comunicaciones globalizadas- premisa de los Neoconservadores representados en los
medios de su propiedad a nivel mundial-.
Este postulado comenzó con la formulación de dicha teoría en 1989 cuando William Lind y
cuatro oficiales del Ejército y del Cuerpo de Infantería de Marina de los Estados Unidos,
titularon un documento: "El rostro cambiante de la guerra: hacia la cuarta generación". En
su definición técnica, "Guerra Psicológica", o "Guerra sin Fusiles", es el empleo planificado
de la propaganda y de la acción psicológica orientadas a direccionar conductas, en la
búsqueda de objetivos de control social, político o militar, sin recurrir al uso de la armas.
Esta estrategia de engaño es develada de manera magistral, directa por Ernesto Carmona en
su ensayo La SIP: los amos de la prensa (en América Latina):
―La teoría y la práctica del engaño pretenden hacer creer a los lectores que los propietarios
de periódicos son también los dueños de la verdad. Se atribuyen facultades de superioridad
sobre la sociedad que nadie nunca les otorgó y actúan como si hubieran sido elegidos para
formar parte del Estado según el concepto de la separación de los poderes. Los ciudadanos
de la región mal que bien eligen a sus presidentes, legisladores y muchas veces éstos
diputados o senadores designan a los jueces. Desde la Revolución Francesa se conforman
así los poderes clásicos del estado burgués: ejecutivo, legislativo y judicial. Pero nadie
puede elegir a los diarios que desearía leer y menos, los contenidos que le gustaría conocer.
La noticia, a menudo tergiversada y maliciosamente comentada, se impone con la fuerza
que sólo la riqueza de sus dueños otorga a la tinta y al papel‖.
Por lo anterior, no es de sorprendernos que en la plana mayor de este notable circulo
―demócrata‖ aparezca un periodista ―integro‖ como lo es Enrique Santos Calderón- primer
vicepresidente de la organización-, director del ―siempre imparcial y equilibrado‖ periódico
El Tiempo de Bogotá recientemente adquirido por el grupo editorial planeta, diario que se
convierte en la fuente de primera mano a consultar con respecto a quienes son los ―buenos‖
y los ―malos‖ en la situación política colombiana por parte de la ciudadanía
Latinoamericana-así calumnien, apoyen la desestabilización de gobiernos legítimos con
fotos equivocadas y computadores de dudosa procedencia o encubran el accionar mafioso y
asesino del paramilitarismo y sus socios en las esferas de poder colombiano-.
A nivel de contenidos la idea principal de la SIP es crear una división clara en la misma
izquierda Latinoamericana, distanciarla hasta llegar a dividirla parcial o totalmente,
diferenciándola de cara al mundo en la ―buena izquierda‖ - la de aquellos países que han
dado continuidad a la circulación del gran capital, protegiendo los bolsillos de los grandes
conglomerados y no han impuesto barreras significativas a la especulación financiera de la
banca transnacional- y la mala izquierda –La del famoso ―eje del mal‖, que se opone
férreamente a ceder los intereses y bienes nacionales para favorecer a los grandes magnates
particulares locales e internacionales-.
Otros objetivos puntuales en la agenda del neoconservatismo latinoamericano son:
―venderle‖ al lector y televidente los supuestos beneficios de la apertura a ultranza de los
mercados al capital norteamericano- representado en los tratados de libre comercio-
mostrando esto como la ―salvación‖, apoyar a candidatos de la derecha y extrema derecha
―maquillándolos‖ como ―demócratas‖, ―defensores de la libertad‖ generadores de ―progreso
y modernidad‖ y mostrar a las comunidades étnicas y los movimientos sociales como
grupos terroristas, reaccionarios, obsoletos, desestabilizadores del orden –Orden que para
estas oligarquías obedece al concepto de ―quien pone la plata manda e impone el orden‖-.
A nivel de estrategia de comunicación –en el ámbito televisivo sobre todo- este movimiento
neoconservador ―bien representado‖ en la SIP y el GDA en Latinoamérica, obedece y se
nutre de los mismos principios que sus mentores –CNN, CBS, ABC, NBC y FOX- por lo
que no es de extrañarse que un noticiero de Antena 3 sea muy parecido a uno de la cadena
o‘globo o que a su vez al ver Abc news y luego algún noticiero de Globovision o Ecuavisa
nos encontremos con muchas coincidencias en el manejo de información. El manejo
informativo que impone el neoconservatismo es global y obliga entre otros puntos a lo
siguiente:
Primero: La percepción de la realidad se puee moldear. Mucha gente no tiene información
directa de los acontecimientos y sólo los puede conocer y valorar por lo que escucha o
dicen otros. Ocupar espacios en ese ruido informativo es por lo tanto fundamental para dar
argumentos a quienes se desea ―manipular‖ y a su vez hacer dudar a los otros, así se pierda
parcial o totalmente la noción de lo que en realidad está pasando.
Ejemplos de lo anterior son los siguientes:
Un periodista de la cadena Globovision –Situación extraña por cierto ya que no involucra a
la eternamente ―imparcial‖ Ana Karina Villalba- entrevista a un empleado de un medio
oficialista y le reprocha que no se haya sumado a una marcha de ―periodistas‖ para
reclamar que se respeten los derechos a la libertad de expresión. El empleado le dice que su
pensamiento no es ese con respecto al tema y que va a participar en otra marcha –Contra
los traidores de la profesión-, lo que desata la respuesta iracunda del periodista de
Globovision quien le suelta y le quita el micrófono al entrevistado sin dejarle responder.
Acto seguido el colérico entrevistador se lanza en ristre contra Chavez, el gobierno, el
comunismo, los dictadores, etcétera. Todo este ―show‖ toma nueve minutos y finaliza con
un abrupto corte comercial.
En su afán de darle un tinte ―amarillo‖ a la situación entre Colombia y Ecuador, el
periódico El Tiempo publico una foto –según el diario suministrada por la Policía
Colombiana- en la que según la primera versión, Gustavo Larrea –canciller de Ecuador para
ese entonces- aparecía en fotos ―comprometedoras con Raúl Reyes- segundo hombre de las
FARC-. De lo anterior se hizo eco a nivel mundial, se polemizo a más no poder, se saco el
mayor provecho hasta el momento en que finalmente se supo que el de la foto no era él,
sino el dirigente del Partido Comunista Argentino Patricio Etchegaray, lo que detonó un
escándalo en el preciso momento en el que la OEA discutía una resolución para dirimir la
incursión colombiana en Ecuador.
Con respecto a los casos anteriormente nombrados, es importante reflexionar sobre cómo
esta sobrestimulación sensorial y cognitiva obliga a que los mensajes tengan que ser cada
vez más impactantes para que primero se procesen y luego se retengan, por ello, no es de
extrañar que estos medios manipuladores incluyan música que le de suspenso al mensaje,
imágenes y textos de tipo amarillista así como comentarios que sugieren una postura
política al televidente por parte de los presentadores. Esta dinámica nos está conduciendo a
una información cada vez más burda y sin contenidos profundos, que nos hace a la vez
menos sensibles, resistentes a los estímulos.
Segundo: Descalificar al político en lugar de criticar sus políticas. No es que se esté en
desacuerdo con tal o cuál propuesta, sino que quien lo propone es incapaz, flojo, sin ideas
etc. La técnica neo con exige destruir la confianza en las personas y en los dirigentes
políticos ya que, según ellos, no hay tanta diferencia entre las políticas a aplicar. El
problema no es qué hacer, sino quién lo hace. Por eso llegan al absurdo de criticar cosas
que hacen otros aunque sean idénticas a las que hicieron ellos cuando gobernaban- caso
Rafael Caldera, Andrés Pastrana entre otros-.
En la reciente pugna por la alcaldía de Bogotá los contendores, Enrique Penalosa –
respaldado por Álvaro Uribe- y Samuel Moreno –Del movimiento de izquierda Polo
Democrático Alternativo- se vieron enfrentados y en el caso de Moreno, este tuvo que verse
expuesto a una campaña dentro de la misma campaña –soportar la parcialización de la
prensa en sus entrevistas, ir a debates electorales en donde el moderador restringía el campo
de acción de sus respuestas, responder preguntas malintencionadas hechas con el fin de
hacerle cometer errores en debates televisados entre otros-.
La cresta de esta ―ola‖ se vio cuando el mismo presidente Uribe en uno más de sus cientos
de ataques verbales contra la oposición no tuvo ningún reparo en decir ―Que no se
equivoquen allá (…) eligiendo alcaldes respaldados por la guerrilla y que además compran
votos‖, en clara alusión al candidato del polo (3). Esto sucedió en la víspera de las
elecciones sin ningún tipo de reproche o rechazo por parte de unos medios que mantuvieron
una posición permisiva, cómplice, casi descarada en esta situación.
Los ataques de la prensa y el mismo presidente fueron sorpresivamente interpretados por
los electores de manera contraria. La gente supo leer muy bien la mala intención de la
―maquinaria‖ contra Moreno y se identifico mas con el candidato que a pesar de todo siguió
yendo a los debates –posición contraria a lo que hizo Peñalosa al inicio de la campaña
quien se negó a ir a varios de estos a pesar de tener el campo a su favor-. Moreno declararía
al respecto: Pero el que armó esta campaña contra mí me hizo un gran favor, porque la
gente está indignada y en los recorridos nos ha dado su afecto y apoyo". (4)
La manera arrogante de Peñalosa fue opacada por la calidez y humor de Moreno quien
sabiendo la desventaja mediática que tenia, supo recorrer de manera inteligente la ciudad
para mostrar sus propuestas contrario a su retador quien se dedico a hacer ―lobby‖ en foros
de empresarios y en Universidades privadas; En uno de esos debates televisados de manera
cómica Moreno dejo en claro el lugar que le correspondía: "Aquí estoy jugando de
visitante: la cancha, el árbitro y hasta las porristas están a favor de Peñalosa", dijo, en
alusión a que EL TIEMPO, propietario de Citytv, se declaró en sus editoriales a favor de
Enrique Peñalosa‖. (5).
Finalmente todo culmino con una victoria avasallante de Samuel Moreno en las urnas a
pesar de los cientos de ataques y rumores lo que provoco la ira una vez más del presidente
Uribe quien posterior a la elección se negó a entrevistarse con el nuevo alcalde en repetidas
ocasiones (6).
Tercero: No hay adversarios sino enemigos. La pugna política no es entre partidos u
organizaciones que defienden intereses, visiones o posiciones distintas en un espectro
político en donde hay unos requisitos mínimos de convivencia y respeto, sino entre grupos
que no tienen nada en común –Evo Morales es un indio comunista ¿Cómo un indio
comunista nos va a gobernar a nosotros los blanquitos cruceños?: independicémonos de
esos coyas-.
En últimas se obliga al ciudadano promedio a pertenecer, a parcializarse totalmente y a
limitar su espacio de decisión a una sola respuesta: O conmigo o contra mí es la esencia de
este planteamiento que se extiende otros entornos diferentes al político. Sólo la victoria
total para llegar al poder, es una opción. No importa que ―mala jugada‖ haya que hacer para
lograr estar ahí o acceder a él –computadores adulterados señalando a gobiernos o partidos
de oposición ―herejes‖, marchas burguesas reclamando ―mejores garantías‖ para los
humildes exportadores de soya-, porque se hará lo que se pueda o lo que sea necesario para
mantenerse en él.
Esta estrategia de confrontación directa alimentada y utilizada de manera sutil, a veces
manera descarada, por los medios de comunicación corporativos para cubrir las noticias en
el mundo entero –estos son los buenos y estos otros son los malos, por lo tanto no hay nada
que negociar o consensuar-, ha sido una de las premisas históricas de los neocons que ante
la imposibilidad de hacerla posible en lo político y sobre todo en el campo militar antes del
11 de septiembre –sobre todo en la época Reagan- llevaron el enfrentamiento al campo
publicitario en donde el objetivo era enfrentar un producto de manera directa con otro –
entre cocacola y pepsi por ejemplo- . Esta confrontación directa probada con éxito en el
marketing se traslado posteriormente a lo que hoy se denomina marketing político en la
base de las campañas políticas–sobre todo presidenciales-.
Un ejemplo de esta estrategia tuvo lugar en Paraguay donde la guerra mediática frontal
contra Fernando Lugo se instauró desde los medios más influyentes en la opinión
paraguaya- cadena Multimedia (Diario Popular, Radio UNO y Radio Laser) y el grupo
Nicolás Bó -propietaria del diario Noticias, Radio Cardinal y Canal 13 (7)-.
La estrategia se empezó a intensificar a medida que se iban acercando los comicios del 20
de abril, a menos tiempo de la elección, mayor deslegitimación contra Lugo especialmente
a nivel internacional-. La agitada ofensiva televisiva contra el ―demonio‖ Lugo fue
subiendo de tono hasta el punto de que el mismo presidente Duarte Frutos empezó a hacer
campaña a favor de su ministra –Blanca Ovelar candidata del partido colorado y ministra de
educación- utilizando la especulación como herramienta, primero afirmando que habían
ingresado a Paraguay "agitadores sociales" traídos de Venezuela, Ecuador y Bolivia y luego
expresando abiertamente que eran seguidores del ex obispo que llegaban al país para hacer
un caos.
Posteriormente la afirmación del presidente no se quedo en simples palabras, y la "cacería"
de ―posibles agitadores‖ extranjeros se intensificó.
Los primeros ―conejillos de indias‖ fueron un grupo de seguidores colombianos que
vinieron a presenciar el partido por la copa Libertadores de América entre el Nacional de
Medellín y Sportivo Luqueño, y que se quedaron en Asunción mientras llegaba el momento
de partir hacia Sao Paulo donde ese mismo equipo jugaría con el equipo local. Los hinchas
fueron apresados y encarcelados en la comisaría 15ª, Metropolitana y posteriormente
liberados.
Seguidamente, el rumor- uno de los fuertes de los medios de comunicación para generar
percepciones erróneas de sus enemigos- de posibles atentados terroristas llegó a su
momento más crítico con lo sucedido en el hotel donde estaban hospedados los
observadores internacionales, lugar donde se recibió una llamada anónima de amenaza de
bomba unos días antes de las elecciones –llamada de dudosa procedencia-..
Posteriormente dicho evento fue desmentido por los propios observadores de la OEA
quienes de acuerdo al análisis que realizaron, contradijeron al jefe de Estado y dijeron que
en Paraguay no había tales agitadores –todo resulto ser una burda cortina de humo,
estrategia bien conocida por los políticos hegemónicos latinoamericanos-.
Todo lo anterior sucedió mientras los medios controlados por el grupo Wasmosy y la
familia Bo en asocio con la SIP y el mismo partido colorado le daban el ―adecuado
cubrimiento‖ a la situación: Desestabilizar psicológicamente a la población por medio de
atentados ―fantasma‖ y amenazas de dudosa procedencia, aterrorizarla mientras mostraba a
su beneficiario –En este caso el continuismo de la casta ―colorada‖- como el único partido
que puede proteger a la ciudadanía de la amenaza terrorista- encarnada en el ―demonio‖
Lugo al cual se le relacionaba con Opresión, Dictadura y Fundamentalismo mientras sus
contendores se les exponía como los defensores de la democracia –palabra relacionada con
Libertad, Estado de Derecho y Mundo Libre según su léxico que nunca acude a la
memoria-. En ultimas el mensaje final apuntaba a lo mismo ―si votas por Lugo vamos a
quedar en manos de los terroristas‖.
Como hemos visto, la técnica del neo conservatismo mediático acude a cualquier tipo de
artimañas con tal de lograr lo que se quiere pero tiene un problema básico: carcome desde
sus entrañas la democracia tal y como la entendemos ya que excluye la razón y el debate
que es la esencia conceptual y práctica de las democracias actuales.
Así, de forma paradójica, quienes se dicen llamar ―los abanderados de la democracia y el
orden existente‖, son quienes están actuando para omitir dar información completa,
oportuna, con análisis y propuesta, con diversos puntos de vista y contextos, sobre los
procesos sociales, sus etapas, sus actores y funciones, precisando metas y logros, todo lo
anterior con el fin de darle al receptor herramientas útiles para opinar, para educarse sobre
sus deberes y derechos, orientándolo a generar opinión mediante el debate público
articulado.
Aquí el dilema planteado es que dichos medios han perdido toda ética social con respecto al
manejo de la información y las reglas de juego de la democracia tradicional,
sustituyéndolas por un espectáculo agresivo, de confrontación total y permanente contra
todos y contra todo.
Visto desde afuera, la técnica mediática del neoconservatismo tal vez asegure el raiting –tan
indispensable en un ámbito mercantilizado y poco ético que se alimenta de la pauta
publicitaria-, tal vez asegure televidentes y lectores –seres maleables que obedecen a
estímulos periódicos de choque, receptores no de noticias sino de―comidilla‖ y ―rumores‖-
dándole un contexto de ―conventillo‖ a la emisión de información, proceso no ajeno al
encubrimiento y la manipulación premeditada entre lo ―políticamente rentable‖ y lo
―políticamente susceptible de ser omitido‖.
Esta intención tacita anteriormente descrita de los medios neo conservadores reunidos en la
SIP es resumido de la siguiente manera en palabras de George Orwell: "existe un acuerdo
general y tácito sobre ciertos hechos que 'no deben' mencionarse. Esto es fácil de entender
mientras la prensa siga tal como está: muy centralizada y propiedad, en su mayor parte, de
unos pocos hombres adinerados que tienen muchos motivos para no ser demasiado
honestos al tratar ciertos temas importantes".
Mientras lo anterior siga ocurriendo la ciudadanía no tendrá que dedicarse a leer y ver
noticias que provienen de medios de comunicación ―responsables‖, sino por el contrario
tendrá que aprender a ―leer entre líneas‖ ―analizar‖ y ―codificar‖ los contenidos
confrontados con el fin de quitarse la venda que le supone la información recibida. Cuando
esto realmente ocurra, quienes intervienen en este proceso tendrán que entrar a cuestionar
lo que anteriormente asumían como algo irrefutable: los medios masivos de comunicación
nunca mienten.
Notas
(1) Diario la nación: El mundo baila con Strauss por Josep María Ruiz Simón.
(2) Agencia de Prensa Mercosur : La CIA impulsa campaña de prensa en América Latina
(Víctor Ego Ducrot)
(3) Radio Santafé: El presidente Uribe descalifica a Samuel moreno; el polo democrático
responde
(4) (5) Observatorio de Medios: Intenso pulso Moreno-Peñalosa.
http://www.mineducacion.gov.co/obsetarget="_blank"rvatorio/1722/article-137061.html
(6) El izquierdista Samuel Moreno logra la alcaldía de Bogotá.
http://www.elconfidencial.com/cache/2007/10/28/23_colombia.html
(7) Los medios masivos de Comunicación y la Construcción de la Hegemonía. Por Omar
Valenzuela.
http://pandolfidigital.blogspot.com
Brasil, la triple infamia y la cancilleria paraguaya
x Luís Agüero Wagner
El pedido de Martín Almada coincide con la presentación en público del gabinete del
obispo presidente (quien niega la presencia de EE.UU. en Paraguay), en su mayoría
integrado por políticos sufragados por los organismos del imperio
El premio Nóbel alternativo de la Paz Martín Almada dirigió el viernes 13 de junio del año
2008 al clérigo-presidente electo paraguayo Fernando Lugo una nota titulada Ni verdad
secuestrada ni memoria prohibida urgiendo la adopción de una firme posición sobre la
revisión del leonino Tratado de Itaipú [gran central hidroeléctrica sobre el río Paraná en la
frontera con Brasil], tal como lo prometió en su campaña electoral, con miras a lograr el
pago de precio justo por la energía eléctrica paraguaya que consume el Brasil.
A poco de ganar las elecciones, algunos partidarios del obispo variaron su postura en el
tema de Itaipú y defendieron ofrecimientos de compensaciones que Brasil acostumbra
hacer desde hace décadas cuando un gobierno paraguayo desempolva reivindicaciones
parecidas.
Almada recuerda al obispo su criterio expresado que si el gobierno brasileño se niega a
pagar el precio justo solicitado se disponga su venta a otros países que ofrezcan mejor
precio porque somos un país soberano, y recuerda que un tratado contemporáneo y paralelo
al de Itaipú, el Pacto criminal firmado por la Operación Condor ya ha sido considerado nulo
por la buena conciencia de la humanidad.
Correlativamente, dice Almada, el Tratado que defiende Brasil con respecto a Itaipú
también debería correr esa suerte.
El responsable del hallazgo de los Archivos del Terror de la Operación Cóndor también
recuerda que Brasil anexó a su imperio 62.325 Km2 de la zona mas rica del Paraguay en
1870, y también arrebató al Paraguay la memoria al apropiarse de nuestro Archivo historico
nacional. Indica que ha llegado la hora que el gobierno del "compañero Lula devuelva al
Paraguay ese importante Archivo por lo que vengo a rogarle incorporar en su Agenda de
trabajo este clamor nacional."
También solicita que se pida a la UNESCO que declare ese Archivo historico nacional
como Memoria del mundo, testimonios de un genocidio perpetrado por las fuerzas del
imperialismo contra los gobiernos patriotas de [Gaspar Rodríguez de] Francia y los López,
que lograron un desarrollo autónomo sin deuda externa o eterna y sin capital extranjero que
lo sojuzgue y lo instrumente como una mera factoría dependiente.
El pedido de Almada coincide con la presentación al público del gabinete del obispo, en su
mayoría integrado por políticos sufragados por los organismos de penetración imperialista
y promovidos por la prensa paraguaya que responde al embajador norteamericano James
Cason y a los intereses de la Secta Moon.
El mismo obispo es sobrino de un agente de la CIA que jugó un papel preponderante en la
consolidación de la dictadura neo nazi y pro-Washington del general Alfredo Stroessner, en
la década de 1950, y la mayoría de sus seguidores financiaron sus movimientos con
donaciones de USAID, donde el obispo tiene trabajando a varios familiares.
La prensa paraguaya financiada por James Cason, conocido en Latinoamérica por su actitud
intervencionista, ignora cotidianamente el papel del imperio norteamericano en los
disturbios que se producen o produjeron en la región, y es imposible que alguno de sus
articulistas o periodistas emita el más leve comentario que contradiga la versión sobre los
hechos que corresponde a los intereses estadounidenses.
Paraguay enfrentó en el siglo XIX al Brasil en una guerra que culminó en marzo de 1870
con la aniquilación del país, el exterminio de su población masculina y la devastación
material de sus fuerzas por las tropas del emperador Pedro II, que en aquella oportunidad se
unió al dictador argentino Bartolomé Mitre para complacer al comercio de Inglaterra.
Hasta entonces el Paraguay se mostraba reacio al libre comercio, por entonces la ideología
de exportación que difundía el imperio británico en su propio beneficio, como hoy el
imperio norteamericano intenta impulsar el ALCA.
El escepticismo de las verdaderas intenciones del nuevo gobierno en materia de defender la
soberanía energética ante el Brasil quedó en entredicho cuando una de sus primeras
medidas fue ubicar al sobrino del clérigo-presidente, un vendedor de autos ilegales sin
formación académica, en un alto cargo de la entidad binacional Yacyretá [Otra gran central
hidroeléctrica sobre el río Paraná, esta vez en la frontera con Argentina].
Las dudas aumentan con el posicionamiento en la Cancillería paraguaya de la ingeniera
agrónoma Milda Rivarola, una conocida detractora del nacionalismo paraguayo, del
Mariscal Francisco Solano López y de la causa paraguaya de 1870, promocionada como
historiadora desde la embajada norteamericana y su prensa adicta, además de vinculada con
la prensa mitrista de Buenos Aires.
Lugo niega presencia de EE.UU. en Paraguay
Siguiendo la tradición de la derecha neo nazi y corrupta que predomina en Paraguay desde
hace casi siete décadas, el obispo Fernando Lugo negó este domingo 15 de Junio en La Paz
la conocida presencia norteamericana en Paraguay, país ocupado por el imperio, sus
misiones militares y sus organismos de penetración imperialista que incluso manejan varias
instituciones del estado con la coartada de la lucha contra el narcotráfico, la corrupción y el
terrorismo.
Aseguró también que cuando asuma el gobierno el 15 de agosto, va abrir todo el país a
cualquier tipo de investigación a periodistas e investigadores, para que realmente se pueda
desmitificar la afirmación de que en Paraguay hay bases militares norteamericanas, aunque
sea de público conocimiento la numerosa presencia estadounidense en el pais.
Señaló que "lo que sí existe es parte del Ejército norteamericano que hacen acciones
humanitarias y ejercicios militares también", lo que es prácticamente un reconocimiento de
lo que niega en su negativa inicial.
"Pero que haya una base militar que pueda operar desde el Paraguay y que pueda tener
acción en los países vecinos del continente, nosotros como paraguayos lo negamos",
remarcó Lugo, quien realizó una visita de dos días a Bolivia y participó del 73 aniversario
del cese de hostilidades entre Asunción y La Paz, olvidando que desde Asunción se
coordinó en los años 70 el Operativo Cóndor y que en la misma sede de la embajada
estadounidense en la capital paraguaya existe una dotación de marines.
Todo lo que sucede en la sede diplomática de Estados Unidos en Asunción, una verdadera
fortaleza de varias hectáreas, se oculta tras una monumental muralla que impide indagar sus
actividades, y los políticos que concurren con frecuencia a realizar proselitismo ante el
embajador norteamericano en lugar de hacerlo ante su pueblo no demuestran mucho interés
en hacerlo.
La presencia de militares de EEUU en el noroeste paraguayo provoca resquemores en los
gobiernos progresistas de la región, que los ven como un peligro para la paz social por la
tradición de irrefrenables conspiradores y otros funestos antecedentes.
La concesión de bases militares a Estados Unidos por parte del gobierno paraguayo se
remonta a los años de la guerra fría, según se consigna en un documento confidencial
enviado al departamento de estado por la embajada de Asunción el 10 de octubre de 1958,
donde la legación diplomática argumentaba a favor de seguir apoyando al dictador neo nazi
Alfredo Stroessner que ―era del mejor interés de EEUU mantener una nación fuertemente
anticomunista en medio de países que experimentan graves problemas económicos e
internos e inestabilidad política seria, factores que crean un clima favorable para la
penetración del comunismo en América del Sur‖.
La ayuda estaba condicionada a ―que el gobierno de Paraguay otorgue todos los derechos y
privilegios al gobierno de Estados Unidos para el establecimiento, organización, activación
y mantenimiento y operación de cualquiera y todas las bases aéreas dentro de los límites de
Paraguay que el gobierno de Estados Unidos considere necesarios para conducir la defensa
del Hemisferio‖(1).
***
Durante su campaña el obispo compartió el escenario con el doctor Oscar Ynsfrán,
hermano del temible ministro político de Stroessner Edgar L. Ynsfrán, antecedentes
sangrientos que no le impidieron ser uno de los puntales del proyecto.
La relación de Ynsfrán con la siniestra presencia norteamericana en Paraguay puede
constatarse en un memorando fechado en Washington el 8 de Octubre de 1956 (2), en el
que se asigna al coronel Robert K. Thierry como asesor de la temible Policía política. En el
documento aparece como participantes en los papeles Mr. Da Silva, primer secretario de la
embajada paraguaya, Dr. Insfrán (el seguidor del obispo), segundo, Mister Rubottom
(ARA) Y Mister Havemeyes (OSA). Se consigna en el documento que se envió una copia a
la embajada de Asunción, cifrado ARA (Mr. King), ICA (Mr. Atwood), ARA (Mr.
Rubottom) y OSA.
Estos compromisos con un pasado sangriento de represión, muerte y terror es lo que
justifica el encubrimiento por parte del clérigo-presidente de la presencia norteamericana en
Paraguay.
(1) Aníbal Miranda, en ―Estados Unidos y el régimen militar paraguayo‖. Asunción, 1985.
(2) Archivos del Terror, Poder Judicial. Asunción.
f17digital.blogspot.com
Uruguay: El "modelo progresista"... Tomografía de una crisis social
x Juan Luis Berterretche
En un escenario económico incomparable para derivar riqueza hacia los trabajadores, la
continuidad (neoliberal) de la política del gobierno del Frente Amplio nos promete una gran
acumulación de capital.
Poscomunistas, exguerrilleros y socialdemócratas, arropados todos bajo el manto
―progresista‖, volverán a demostrar que el capital es acumulativo y no distributivo.
Infantilización de la pobreza
El fenómeno de la infantilización de la pobreza es más grave en Uruguay que en el resto de
los países de la región. La mitad de la población uruguaya que vive en condiciones de
pobreza se compone de niños y adolescentes, quienes son sin embargo menos de un tercio
(29%) de la población total del país. Las cifras de la pobreza infantil indican que es este
sector el más vulnerable frente a las variaciones de la economía. En el 2001 la mitad
(50,53%) de los niños menores de 6 años estaban en la franja de pobreza. En el 2003, luego
de la crisis financiera, este porcentaje llegó al 67%. A fines del 2006 los niños viviendo en
condiciones de pobreza vuelven a ser la mitad (49,58%) del total de niños menores de 6
años. A pesar de la mejora relativa de los últimos años, el problema sigue siendo grave y
persistente. (1)
El 20% de los niños que ingresan al sistema educativo primario llega con algún problema
de retraso en la talla o el peso o alguna dificultad de carácter cognitivo. Aunque esto no es
resultado únicamente de la pobreza, ésta es el factor principal. Hay que buscar las causas de
esta situación en la pobreza extrema, la exclusión social y en las deficiencias del sistema
sanitario (2).
En marzo del 2008 una información preliminar del Ministerio de Salud Pública sobre un
índice fundamental para medir la situación de la infancia, presentó cifras alarmantes. La
Tasa de Mortalidad Infantil (TMI) hasta el primer año de vida creció durante el 2007 en
relación al año anterior. La tasa de TMI se situó en 11,9 cada mil niños y el crecimiento en
relación al 2006 es de un 13,5%. La tasa de mortalidad infantil en Uruguay es el doble que
en Beijing. (3)
El escenario de los adolescentes y jóvenes no es mucho mejor. El 33% de ellos viven en
situación de pobreza y el 22% de los que son mayores de edad están desempleados (4). Es
decir hay tres veces más desempleados entre los jóvenes mayores que en el conjunto de
todas las franjas etarias. La tasa de desempleo nacional alcanza el 7,6%.
Como consecuencia de la insuficiencia de ingreso de las familias, la escasez de recursos del
sistema educativo, la deficiente calidad de la enseñanza y los bajos salarios de los
profesores de la enseñanza media, la deserción en el Ciclo Básico (hasta tercer año en la
enseñanza media) y en el Bachillerato (los seis años de enseñanza media) tiene cifras
pavorosas. El 40% de los estudiantes que ingresan al liceo abandona antes de concluir el
Ciclo Básico y dos tercios de los estudiantes de enseñanza media no concluyen el
bachillerato.
"La escolaridad o niveles de actividad que exhiben los adolescentes uruguayos de niveles
bajos, y de la clase media están entre los peores de América Latina, aún respecto a países
más pobres y con mayores problemas sociales" "En el caso de Uruguay, los adolescentes
(entre 15 y 17 años) que no asisten a la educación formal y son inactivos en hogares con un
clima educativo bajo superan el 25%, el peor porcentaje en América del Sur y sólo
superado en América Latina por Honduras (27%)."(5)
"Tomando en cuenta la totalidad de los adolescentes entre 15 y 17 años al margen de la
educación y el trabajo en América Latina el índice varía entre el 3,26% en Bolivia y el
20,46% en Honduras. En promedio Uruguay tiene 12,68% de adolescentes en todo el país
que no estudian ni trabajan, por encima de la media latinoamericana que se ubica en 12%."
(6)
Sindicatos y conquistas laborales
Con la aprobación por parte del gobierno de algunas medidas y leyes que eran prioritarias
en el programa de la central sindical se obtuvo una fuerte sintonía entre el ejecutivo y la
corriente mayoritaria (grupo Articulación) dentro del PIT-CNT.
Las principales medidas adoptadas a favor de los sindicatos fueron la instalación de los
Consejos de Salarios, la Ley de negociación colectiva y la Ley de Fueros Sindicales. Esta
última garantizó protección jurídica a la actividad gremial. Este cambio en la legislación
nacional condujo a que el 97% de los trabajadores privados, el 99% de los trabajadores
públicos y el 33% en el sector rural (7) están amparados por los convenios colectivos (8).
En 2006 hubo 206 convenios y acuerdos. Por consecuencia de la instalación de los
Consejos de Salarios, entre marzo de 2005 y enero de 2008 el salario real se incrementó un
17,7 en el sector público y un 14,8 en el ámbito privado (9).
La recuperación salarial de los funcionarios públicos de la administración central
(nucleados en COFE) durante el actual período de gobierno alcanzó el 19,5%. Los docentes
de la Administración nacional de Educación Pública (ANEP) lograron una recuperación
salarial del 24% y los funcionarios no docentes de la Universidad de la República un 36%.
En Salud Pública los médicos tuvieron un 100% de aumento respecto a su salario mínimo.
Los avances no se restringieron a los incrementos salariales. Casi la mitad de los convenios
aprobados estableció nuevos beneficios de salario indirecto. Licencia por nacimiento de
hijo, y por estudio, feriados especiales, primas por antigüedad y presentismo, primas por
trabajo nocturno, derecho a ropa de trabajo y viáticos, etc. Incluso reducción de la jornada
laboral como en la rama de la bebida que bajó de 8 a 6 horas diarias con igual jornal.
Otra disposición legal que favoreció a los trabajadores fue la Ley de tercerizaciones que
hacía responsables a las empresas que tercerizaban su relación laboral del cumplimiento de
los derechos de los trabajadores tercerizados. También fue derogado el decreto que permitía
desalojar las ocupaciones de los lugares de trabajo. Esperando una sanción definitiva del
parlamento, existe un proyecto para equiparar el régimen de asuetos entre públicos y
privados.
Las conquistas salariales, los beneficios indirectos y la mayor protección legal a la
actividad sindical redundaron en un aumento de los sindicalizados y de los gremios
adheridos al PIT-CNT. La central de Trabajadores pasó de 120.000 a 280.000 afiliados
entre 2003 y 2008.
Se mantiene un núcleo duro de pobreza
Si analizamos las cifras de pobreza (hogares con ingreso entre $2.292 y $4.732) e
indigencia (hogares con ingreso menor a $2.292) desde marzo del 2005 a la fecha
comprobamos que los planes del actual gobierno (10) hicieron descender la pobreza en un
13,8% (algo más de 100.000 pobres menos) y redujeron la indigencia a la mitad (34.000
indigentes menos que en el 2004. (11).
Pero si consideramos el desarrollo de las cifras de pobreza e indigencia de la última década
vemos que aún se está lejos de alcanzar los porcentajes que el país tenía a fin de la década
pasada. En 1999 los montevideanos que vivían bajo la línea de pobreza eran el 16,2% de la
población de la capital. En el 2001 el porcentaje subió al 18,4%; en el 2002 la crisis
financiera sumergió en la pobreza al 23,5% de los montevideanos y en el 2004 casi un
tercio (31,8%) de la población de la capital eran pobres. En el 2007 más de la cuarta parte
(26,5%) de la población capitalina está bajo la línea de pobreza. En términos de pobreza
hoy se está un 10% peor que en 1999. (12)
La reducción de la pobreza alcanzada durante el actual gobierno se limitó a los sectores
sociales de pobreza reciente que habiendo descendido a la pobreza como consecuencia de
la crisis del 2002, se fueron recuperando en el marco de la reactivación económica. Al
mismo tiempo se mantiene un núcleo duro de pobreza que ni losplanes del Mides ni la
relativa recuperación salarial consiguieron abatir.
Es importante saber que más del 15% de los asalariados urbanos del país y el 35% de los
trabajadores informales están bajo la línea de pobreza. Existiendo bolsones de pobreza
mayor entre los trabajadores de la agricultura y ganadería, de la pesca, de la construcción y
de la explotación de minas. Si se combina la ocupación con la edad tenemos resultados aún
peores: entre los menores de 25 años que están en el servicio doméstico la pobreza alcanza
el 40%.
Descontento social
En el primer trimestre de 2008, la cantidad de horas de paro aumentó un 41%. El 64% de la
conflictividad del trimestre se debió a paros en el sector privado. En particular en la
construcción por el crecimiento de los accidentes de trabajo. El punto más alto de la
conflictividad en el sector público estuvo dado por los trabajadores de la Intendencia
Municipal de Montevideo y por las movilizaciones de los maestros. También los profesores
de secundaria y los funcionarios de la Universidad de la República realizaron paros. Los
trabajadores de la enseñanza reclaman mejoras a incorporar en la Rendición de Cuentas.
Los funcionarios de los entes públicos realizaron un paro de 24 horas y otra serie de
medidas. "Los reclamos van a seguir mientras los avances sean insuficientes. Nos tiene sin
cuidado si esta lucha hace peligrar un nuevo triunfo del Frente Amplio." Esta es la opinión
de Joselo López de la Confederación de Funcionarios del Estado (13).
En la reunión de los 400 delegados a los Consejos de Salarios con el ejecutivo del PIT-
CNT se definieron algunas pautas para la negociación con las patronales que indican un
descontento con lo obtenido por el movimiento sindical hasta ahora en términos de
aumento salarial.En primer lugar empieza a quedar claro que la recuperación salarial partió
del nivel bajísimo de ingresos que impuso la crisis económica del 2002. El salario real
medio disminuyó un 23,3% entre el 2000 y el 2005. Muchos sindicalistas son conscientes
que en los convenios colectivos apenas se recuperó el 50% del salario perdido (14).
En 2006 y 2007 la producción nacional creció 6,6 y 7 % y en el primer trimestre de 2008 el
PBI fue 10,9% superior a igual trimestre de 2007. Lo cierto es que los aumentos salariales
obtenidos no acompañan el crecimiento de la economía y del PBI.
Por eso, mientras el gobierno propone aumentar el salario mínimo a $4.150. y la propuesta
del PIT-CNT era de $6.800, los delegados a los consejos de salarios elevaron su demanda
de un salario mínimo de $8.500. Exigieron también relacionar el aumento salarial a una
mayor distribución de la riqueza, tomando como referencia el crecimiento de la economía y
de la productividad del trabajo.
La pauta del gobierno para los anteriores consejos de salarios era aprobar convenios con
plazos de vigencia superior al año y ampliar lo más posible el plazo de los ajustes
relacionados con la inflación. En su reunión con el ejecutivo del PIT-CNT los delegados
decidieron reducir la periodicidad de las correcciones por aumento del IPC.
Es necesario tomar en cuenta que la actual inflación está concentrada en el precio de los
alimentos. En el primer cuatrimestre de 2008 el rubro alimentos aumentó un 5% y el
acumulado de los últimos 12 meses supera el 20%. Pero si nos concentramos en los
alimentos prioritarios en la dieta de los uruguayos veremos que el crecimiento de los
precios es muy superior al del rubro alimentos y bebidas en general, donde los bombones,
el whisky y los vinos se promedian con el arroz, el aceite, la carne, el pan y la leche. La
variación anual en porcentajes a mayo de 2008 de alimentos y bebidas (15) revela algunas
cifras escandalosas. Desde la cebolla cuyo precio aumentó un 118,7%, pasando por la uvas
con un 75%, los duraznos con un 64,5%, los quesos que aumentaron entre un 35% y un
54,6%, el arroz el 52,5%, el aceite de girasol el 53,7%, el pan flauta 28,9%, el asado el
22,3%, el pescado el 18,8% y la leche el 17,15%. El aumento en los alimentos afecta en
forma inversa a la pirámide social: cuanto mayor es el nivel de pobreza mayor es el
porcentaje del salario destinado a la alimentación y por tanto, se trata de una inflación
perversa que golpea en mayor medida a la pobreza y la indigencia.
Otra importante reivindicación del mandato a los delegados a los consejos de salarios es la
reducción de la jornada laboral en todos los sectores de la actividad privada. Pero no se
trata de una campaña en la que el PIT-CNT ponga todos sus esfuerzos de manera
centralizada: se deja a cada sector la forma de implementar esta medida tanto en horas
como en días.
Continúa la concentración de la riqueza
Mientras los poscomunistas y socialdemócratas liberales disputan sobre quién administra
mejor el capitalismo, la embajada de EEUU elogia al ministro de economía y finanzas
Danilo Astori por la aplicación de una política "macroeconómica ortodoxa", léase
neoliberal y de acuerdo con las recetas del FMI y el Banco Mundial. En el mismo informe
la embajada del imperio celebra el tratamiento preferencial al capital extranjero que otorga
el gobierno de "centroizquierda" de Tabaré Vázquez (16).
Lo cierto es que, mientras el gobierno realiza reuniones ministeriales para dar informes
triunfalistas sobre las relativas y exiguas mejoras sociales algunos economistas comienzan
a difundir las cifras de la continuidad de una distribución regresiva de la riqueza en el
período 2005 - 2007.
Los resultados de la recaudación de la DGI en el 2007 demuestran que la Reforma
Tributaria aprobada por el actual gobierno favorece la acumulación de capital esquilmando
a los trabajadores. El 90% de la recaudación corresponde a aportes de los trabajadores y
sólo el 10% afecta al capital. La "redistribución del ingreso" que realizaría el IRPF estaba
centrada en sacar a los trabajadores que ganan más para aumentar el ingreso de los que
ganan menos, sin afectar las ganancias del capital. El discurso del gobierno enfrentaba a
jubilados de la miseria con jubilados que no alcanzaban a recibir una canasta familiar, a la
población mas pobre con los asalariados con mayores ingresos y la clase media. Un
discurso perverso para dividir a los sectores populares, manteniendo un modelo que da
prioridad a la ganancia de las empresas y transnacionales.
Veamos como fue la distribución de la riqueza en el 2007. El PBI es el índice que utiliza el
capital para medir la generación anual de riqueza. "En el 2007 el PBI superó los 22.000
millones de dólares, en un proceso que confirma la tendencia de crecimiento de los últimos
tres años. Del total, casi un 30% (6.600 millones de dólares)corresponde a lo que fue a
manos de los trabajadores (salarios y jubilaciones); un 20% (4.400 millones de dólares)
deriva al Estado (deducidas las transferencias por jubilaciones); el restante (11.000 millones
de dólares) corresponde a rentas del capital.
En el período 2005 - 2007 se verificó una caída del 33% de la participación de la masa
salarial respecto al producto bruto por habitante. Hay una pérdida de participación de los
salarios y los ingresos en el PBI de amplísimos sectores de la población; el pronunciado
aumento de la riqueza generada en el país ignoró a la inmensa mayoría."(17).
Desde el análisis de otro índice de distribución de la riqueza el economista liberal Jorge
Notaro confirma las conclusiones anteriores. Mientras el PBI mide los que se genera en el
país anualmente, el Ingreso Nacional Bruto Disponible (YNBD) son los ingresos que
quedan en el país cada año. El YNBD es menor que el PBI porque las transferencias de
ingresos al exterior superan las que se reciben.
"La participación de la masa salarial en el YNBD pasó del 31% en el trienio 1998 - 2000 a
17,5% en el 2004. En el 2005 la masa salarial aumentó un 3,5%." (18) En el trienio 2005 -
2007, si se mantiene la política salarial sin cambios, la masa salarial en el YNBD se
ubicaría un 10% por debajo del nivel del trienio 1998 -2000. Esto significa que, cada año,
aproximadamente 1.700 millones de dólares que antes recibían los asalariados y sus
familias ahora son apropiados por el capital. "El nuevo gobierno sobrecumplió las metas
acordadas con el FMI de crecimiento, resultados fiscales, cuenta corriente y reducción de
deuda." Su política económica "es la instrumentación propia de la ortodoxia
fondomonetarista" (19)
El aumento del precio internacional de los commodity (alimentos transformados en
mercancías de la economía globalizada) esta impulsando una inflación centrada en los
productos alimenticios. Pero para la economía capitalista uruguaya existe una gran
oportunidad de ganancias. Uruguay es el séptimo exportador de arroz del mundo y el
primero en América Latina; es también el primer exportador de lácteos en el continente; y
un tradicional exportador de carnes de calidad. La prensa llegó a decir que se puede
alcanzar los 10.000 millones de dólares en exportaciones en el 2008 (20).
Bajo estas condiciones económicas de ―bonanza‖, realmente propicias para desarrollar un
programa de justicia social a favor de la clase trabajadora, el gobierno del Frente Amplio
recorre un camino inverso: asegura la acumulación y reproducción del capital. Haciendo a
un lado la prometida ―distribución de la riqueza‖.
Montevideo, 12 de junio 2008.
* Militante marxista revolucionario. Escritor y periodista. Autor del libro ―El comisario va
en coche al muere‖ (primera edición, Trilce, Montevideo 1992, segunda edición, Banda
Oriental, Montevideo 2000). Integra el consejo de redacción de la revista alternativa
Desacato (editada en portugués y castellano) que se actualiza semanalmente:
www.desacato.info
Notas
(1) Evolución de la pobreza y desigualdad de ingresos en Uruguay entre
2001 y 2006 Instituto Nacional de Estadística - INE.
(2) Gustavo de Armas, sociólogo, responsable de Políticas Sociales y
Educación de UNICEF en Uruguay, El País Suplemento de ECONOMÍA Y MERCADO
04
12 2006.
(3) Agustina Navarro, El País, 20 03 2008.
(4) Encuesta de Hogares Ampliada del Instituto Nacional de
Estadísticas -INE.
(5) Según el informe publicado en mayo del 2008 por el Sistema de
Información de Tendencias Educativas en América Latina (SITEAL) apoyado por
UNESCO y la Organización de estados Iberoamericanos para la Educación, la
Ciencia y la Cultura (OEI) semanario Búsqueda 29 05 2008.
(6) Ibid.
(7) El sector rural participa por primera vez en este tipo de instancias.
(8) Relaciones Laborales y Modelo de Desarrollo - Programa de
Modernización de las Relaciones Laborales de la Universidad Católica
(UCUDAL)
(9) Instituto Nacional de Estadística - INE.
(10) Plan de Emergencia y Plan de Equidad del Ministerio de Desarrollo
Social - Mides.
(11) Fabiana Espíndola y Gustavo Leal, Observatorio de Montevideo de
Inclusión Social, El País, 12 09 2007.
(12) Instituto Nacional de Estadística - INE.
(13) El Observador 03 05 2008.
(14) Instituto Cuesta Duarte.
(15) Instituto Nacional de Estadística - INE. Componentes del IPC del rubro
alimentos y bebidas. Tasa de variación de precios de junio 2007 a mayo 2008.
(16) Los datos que apuntalan la concentración de la riqueza, Semanario
Brecha, 07 03 2008.
(17) Joaquín Etchevers, La distribución del ingreso en el período 2005 -
2007 con referencia a tendencias de más largo plazo. Semanario Brecha, 07 03
2008.
(18) Jorge Notaro, Investigador del Instituto de Economía del Uruguay
(IECON) de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración (FCCEE).
Revista Caras y Caretas 11 05 2007.
(19) Ibid.
(20) La República 08 06 2008.
La Haine
Entrevista a la web de contrainformación Oaxaca Libre x Sergio de Castro Sánchez & Raúl Calvo Trenado
Somos un colectivo donde confluyen las muy diversas ideologías que comprenden todo el alfabeto de la izquierda contemporánea, desde el anarquismo hasta el zapatismo ¿Cuándo y cómo nace el colectivo Oaxacalibre? Oaxaca Libre es un espacio de colaboración colectiva que nace junto con el movimiento popular oaxaqueño en el 2006. Nos entendemos como parte del movimiento pero no somos vocero oficial de nadie, ni siquiera de nosotros mismos. Oaxaca Libre nace la tarde del 14 de junio del 2006; al principio, era un proyecto impulsado por tres personas que dedicaron tiempo y trabajo para que esta iniciativa fuera una voz confiable para la gente que busca una información responsable. Cuando lo gestamos eran tiempos de vasta velocidad en la información y para resolver eso se buscaron mecanismos de colaboración y alianzas estratégicas con otros medios alternativos y comerciales que nos compartieron sus notas, hasta lograr un reconocimiento en los grupos sociales que conformaban la coalición del descontento generalizado en Oaxaca. ¿Quiénes formáis parte de él? Somos un colectivo donde confluyen las muy diversas ideologías que comprenden todo el alfabeto de la izquierda contemporánea, desde el anarquismo hasta el zapatismo, pasando por la No Violencia Activa. Como muchos, algunos de nosotros tuvimos históricamente una simpatía irracional con cierto partido amarillo que alguna vez pretendió ser de la izquierda. Sin embargo, esta simpatía se ve traicionada por lo menos una vez a la semana por la práctica de esa institución política. Al principio lo formamos tres personas, un diseñador y gestor, un programador y un investigador, pero con el tiempo se fue consolidando un equipo interdisciplinario. Llegaron más personas interesadas en colaborar en la iniciativa, hasta que se logró consolidar un equipo de trabajo con un grupo de reporteros en la calle, personas dedicadas en la redacción, personas que asesoraban el trabajo, los diseñadores y programadores de la pagina y los demás invisibles que hacen posible este proyecto. Ahora seguimos funcionando de la misma forma pero con pocas personas involucradas en el proyecto. A principios del 2007 el colectivo dio un giro interesante hacia la promoción y la creación de una comunidad que impulsa el Software Libre. ¿Qué papel tenemos los medios de información alternativa en el movimiento social oaxaqueño? Creemos que nuestro papel como medios de información alternativa es documentar lo que pasa en Oaxaca y en otras partes donde incidimos y funcionamos, respetando los contextos locales para discutir ideas, estrategias, sueños, esperanzas, etcétera. Que nos impulse la concepción, construcción y puesta en marcha de un nuevo orden social y político. En Oaxaca Libre nos hemos propuesto burlarnos de todo lo que amerite ser satirizado porque sabemos que no hay grupo que nos respalde. En lo particular, tenemos amistades y simpatía con ciertos grupos y participamos en eventos de varios (con o sin invitación expresa); pero como colectivo no tenemos compromisos ni obligaciones con grupo alguno, más que las que son creadas por la fuerza de la colaboración y la cooperación mutua. Desde su aparición, la web de Oaxacalibre ha sufrido sabotajes. Radio Plantón también ha estado interferida. ¿Qué podéis decirnos al respecto y cuál es la situación actual?
Nos han saboteado varias veces. La que más dolió fue el 25 de noviembre, justo cuando empezaron con la destrucción violenta del movimiento. Nosotros estábamos haciendo los reportajes de lo que estaba pasando, y de repente ya no pudimos entrar al servidor y se empezó a borrar la información. Qué chinga, nos pararon. Estos y otros eventos significan para nosotros que nos toman en serio, que nos ven como una amenaza, y eso nos hace orgulloso de nuestro trabajo. Parece que estamos haciendo algo bien, y que tocamos algunos nervios. Además, significa que aquí en México la frase “libertad de expresión” es una burla, lo vimos con la interferencia en Radio Plantón, mientras radio mapache tenía todos los recursos a su disposición. Y lo vemos con las amenazas personales a gente cercana a nosotros. Sobran ejemplos. ¿Cómo veis la represión que están sufriendo los medios comunitarios como la radio “La Voz que Rompe el Silencio” Es parte del proyecto de imponer una sola opinión a todos y a los que no se agachan: “Cuello”. Si la represión provino de cacicazgos locales o por parte del gobierno estatal o federal, es meramente una cuestión académica, al final son parte de lo mismo. Estos cacicazgos siguen sosteniendo al sistema, que ha cambiado de color al nivel federal pero de ninguna manera ha cambiado sustancialmente: Allí está Elba Esther Gordillo como la mejor aliada de Calderón; allí siguen Marín y, por supuesto, URO. Y ellos se apoyan al final en los caciques locales, a los cuales brindan impunidad a cambio de sus servicios. El proyecto de ellos es consolidar el poder en lo económico, en lo político y también en el ámbito mediático. Los medios independientes, especialmente los comunitarios, les estorban porque son muchos y difíciles de controlar. ¿Cuáles son, en vuestra opinión, los logros o puntos más destacados del movimiento social oaxaqueño? Comprobamos que el pueblo existe y que puede actuar como pueblo fuera de los ámbitos asignados por la estructura. Comprobamos que no necesitamos gobierno ni policía para convivir en forma civilizada: En los tiempos de barricadas, tan vilificados por los medios oficiales, la violencia provino principalmente del gobierno. En respuesta nos organizamos en las colonias y se recreó una vida comunitaria que brindó apoyo y seguridad a los habitantes; sabemos que la ciudad estuvo bajo autogobierno y sin presencia policíaca y hecho bajaron los índices de criminalidad en lo referente a los crímenes comunes. Ahora, después de la invasión federal y en tiempos de Paz, hay un nivel de violencia cotidiana increíble, hay secuestros, un ambiente individualizado, de desconfianza, feo. Conforme creció la presencia policíaca, creció la violencia. Comprobamos que la diversidad no nos debilita: la APPO era muy diversa, mucho más que lo órganos que la representaron. Y sin embargo era efectiva, creativa. Dejó muchas memorias buenas, memorias de convivencia, de esfuerzos colectivos. Comprobamos que un movimiento no necesita un líder. La consigna de que “este movimiento no es de líderes, es de bases” es una de las verdades de este movimiento, y la gran diferencia con las movilizaciones de AMLO, por ejemplo, que llevan consigo un proyecto de poder personal. También evidenciamos que esta lucha rebasa por mucho a los partidos políticos, que son, todos, parte del problema. Quedó clarísimo que ningún partido representa la lucha del pueblo y que
todos se dedican a lucrar con él. Nos dejaron solos, y qué bueno, porque así se pudieron hacer otras cosas y pudimos soñar más allá de las elecciones para elegir al próximo cacique redentor. ¿Y cuáles han sido sus principales carencias o fallos? El fallo más grande fue el enfoque a la lucha, a la acción. Revisando nuestros archivos, nos damos cuenta que nos dejamos llevar por la imagen de la lucha, de los chavos tirando piedras a federales y cosas así, que no están mal, pero lo que nos falló era sacar a relucir la parte creativa y propositiva: las discusiones, las fiestas, cómo compartía la gente entre sí lo poco que tenía, las nuevas alianzas, amistades y formas de convivir y autogobernarse que se daban en estos tiempos. Era la parte creativa que estaba tejiendo una nueva sociedad. Creo que allí fallamos todos, enfocados en eso de tumbar a URO, constantemente en modo de emergencia, organizando otra marcha, otra toma, otra barricada. Se nos olvidó el hecho de que tuvimos toda una ciudad a nuestra disposición, que ya podíamos pasar a la construcción de algo nuevo; sí se hizo, pero no se tomó mucho en cuenta, especialmente en los medios. Anduvimos como los medios comerciales detrás de la sangre, de la acción. Al final, el problema de URO se podría arreglar con 6 gramos de plomo, pero con eso no se arregla el problema de Oaxaca, nada más llegaría otro igual. Este problema va más allá y solamente se arregla construyendo algo nuevo. La gente sí construyó, pero nosotros no lo reconocimos a tiempo, no lo tratamos de sacar a relucir y menos de fomentar. ¿A qué se debe la liberación de David Venegas Reyes y Flavio Sosa? ¿A la presión popular o a un cambio en la estrategia de URO? Se debe primero al hecho de que son inocentes y eso se comprobó por la presión popular. Hasta en una dictadura como la actual se deben conservar las formas legales y el estado agotó su posibilidad de transas. Obviamente ayudó muchísimo la presión popular, que mantuvo vivo el asunto y bajo la lupa nacional e internacional. Es difícil creer que URO tenga estrategia en este sentido, sentimos que ésta viene más del gobierno federal que quiere de alguna manera desaparecer el asunto Oaxaca sin meterse demasiado. Pero repetimos, al final fue la presión popular, especialmente en los espacios mediáticos. Por último, ¿cómo veis el futuro inmediato la lucha social en Oaxaca? Pues está dura la situación. Hay mucha represión y un bajón de energía, aunado a mucha desconfianza. Por otra parte, ya nos conocemos mejor y hay el antecedente de que sí se puede; sin embargo, también sabemos que no va a ser igual que hace dos años, la próxima vez será diferente y no sabemos cuándo ni cómo va a ser. Por eso, lo que estamos haciendo en este momento es reforzar y ampliar las estructuras que provienen del movimiento, las estructuras de base, canalizar la energía más hacía la construcción de algo nuevo. Como Oaxaca Libre tratamos de hacer nuestra parte para construir la utopía desde aquí y desde ahora, aunque sea bajo condiciones
El Pentágono reconoce por primera vez un plan para destruir los sitios de internet que le
molesten
El Departamento de Defensa anuncia su estrategia “Alfombras de bombas para el
ciberespacio”
http://www.rebelion.org/mostrar.php?tipo=5&id=&inicio=0
Cubadebate
El Pentágono ha decidido dotarse de una unidad especializada capaz de destruir sin previo
aviso los sitios de Internet de sus adversarios, de acuerdo con el número de mayo de 2008,
de la revista especializada Armed Forces Journal, del Ejército de los Estados Unidos.
―Alfombras de bombas para el ciberespacio‖, la estrategia que acaba de anunciar el
Departamento de Defensa norteamericano, significa destruir deliberadamente los sitios en
la Internet que al gobierno norteamericano le molestan, en caso de conflicto real o posible,
lo que hace blanco de una agresión cibernética a cualquier punto de la red.
Aunque había evidencias públicas de esta estrategia en los discursos oficiales de los
militares norteamericanos, por primera vez un alto oficial, el Coronel Charles W.
Williamson, juez de la Agencia de Inteligencia, vigilancia y reconocimiento de la Fuerza
Aérea, acaba de admitirlo e intenta justificar legalmente flagrantes violaciones a la libertad
de expresión en la web y mecanismos de guerra cibernética, para la cual se los
norteamericanos se están preparando a toda marcha.
La ―guerra de las redes‖ (network warfare), en manos de la 67ª brigada de guerra de las
redes, ya dispone de más 8 000 hombres comandados por el coronel Joseph Pridotkas. Esta
fuerza complementará Comando Ciberespacial de la Fuerza Aérea, que opera desde Los
Angeles, California, y que estará plenamente activo en octubre próximo.
Cuando se alisten oficialmente ambas fuerzas, Estados Unidos contará con una fuerza
impresionante para operar en la Internet, que se unirá a los ejércitos tradicionales –mar, aire
y tierra- y recibirá potentes medios capaces de eliminar miles de sitios en Internet de forma
simultánea.
―Norteamérica necesita una red que lo suficientemente potente para redirigir esas enormes
cantidades de tráfico en internet ... que son útiles a nuestros adversarios. Norteamérica
necesita la capacidad de una gran alfombra de bombas en el ciberespacio para crear la
disuasión que nos falta‖, afirma el Coronel Williamson en la revista Armed Forces.
Admite que las ―ramificaciones políticas pueden ser difíciles de manejar‖, aludiendo a la
decisión de que los Estados Unidos no dudarán en tumbar de la red un sitio, aunque
pertenezca a un país que no esté contemplado en la lista de enemigos políticos:
―Obviamente, los EE.UU. buscaran aliados, pero podríamos estar en condiciones de lanzar
un ataque contra una nación que hemos jurado proteger a un pacto de defensa mutua.
Juntos, los EE.UU. y sus aliados pueden reducir este riesgo mediante la cooperación para
maximizar la seguridad informática‖, afirma Williamson.
La industria militar ha hecho posible que Estados Unidos se convierta en una potencia de la
cibervigilancia y las operaciones encubiertas a través de la red. El secretario de la Fuerza
Aérea Michael W. Wynne anunció el 2 de noviembre de 2006 que el Pentágono había
decidido constituir una 8va Fuerza Aérea, ―el nuevo mando ciberespacial del servicio y
centrará la atención en llevar la lucha contra el terrorismo al plano tecnológico‖.
El Comando del Ciberespacio está bajo la dirección del Teniente General Robert Elder, un
general de tres estrellas especializado en tecnología militar soviética –uno de sus libros se
titula Enfoque estratégico al Comercio de Tecnología Avanzada con la Unión
Soviética.
En la presentación ante la prensa del Comando del Ciberespacio, Elder expresó:
―definitivamente existe mucho más interés en usar el ciberespacio como un ámbito de
combate, al menos con nuestros adversarios, y eso es lo que estamos tratando de
contrarrestar. … Si quieren pelear con nosotros en el ciberespacio, estamos dispuestos a
llevarles allí el combate también."
La misión del nuevo Comando, según Elder, es ―alcance mundial, vigilancia mundial,
poderío mundial.‖ ―Hasta hoy —dijo— hemos estado a la defensiva. El cambio cultural es
que pasamos a la ofensiva y vamos a tratar al ciberespacio como un ámbito de
combate…Vamos a desarrollar, junto con las universidades, guerreros ciberespaciales que
sean capaces de reaccionar ante cualquier amenaza las 24 horas del día, durante los siete
días de la semana...‖.
Para que no quedara ninguna duda de la gravedad de la orden del Pentágono, añadió: ―en
este ámbito, al igual que en cualquier escenario de guerra, no hay lugar para aficionados‖.
El Comando ciberespacial tiene una contraparte en el Departamento de Estado: el Grupo
Especial de Tareas para la Libertad de la Internet Global (Global Internet Freedom Task
Force, GIFTF, por sus siglas en inglés), una organización multiagencias subordinada
directamente a Condoleezza Rice y dirigida por la subsecretaria de Economía, Comercio y
Agricultura, de ese Departamento, Josette Sheeran. Este Grupo de Tareas, en el que
participan agencias del gobierno, universidades e investigadores privados que ―se
mantienen operativos las 24 horas del día‖, fue dado a conocer el 14 de febrero de 2006.
En su segunda reunión de trabajo celebrada el 3 de abril de 2006, el GIFTF "discutió la
práctica y construcción de estrategias para apoyar la libertad de Internet‖. Josette Sheeran
advirtió que en el encuentro donde participaron ―altos‖ funcionarios del gobierno,
―específicamente nos concentramos en los desafíos de la libertad de Internet en Irán, Cuba
y China‖.
Cómo entrenar a escuadrones de la muerte y aplastar revoluciones de El Salvador a
Iraq
Manual militar filtrado de EE.UU.
Julian Assange
Wikileaks
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens
Como entrenar clandestinamente a paramilitar, censurar la prensa, prohibir los
sindicatos, emplear terroristas, realizar allanamientos sin mandato judicial, suspender
los recursos de amparo, ocultar las violaciones de la Convención de Ginebra y hacer
que la población lo adore
Wikileaks ha publicado un manual confidencial militar de contrainsurgencia de EE.UU. de
219 páginas. El manual: ―Técnicas y Procedimientos de Tácticas de Defensa Interiores en
el Extranjero para Fuerzas Especiales (1994, 2004) podría ser descrito críticamente como
―lo que aprendimos sobre el manejo de escuadrones de la muerte y el apuntalamiento de
gobiernos corruptos en Latinoamérica y cómo aplicarlo en otros sitios.‖ Su contenido es
definidor de la historia para Latinoamérica y, considerando el continuo rol de las Fuerzas
Especiales de EE.UU. en la represión de insurgencias, incluyendo en Iraq y Afganistán, es
histórico.
El manual filtrado, que ha sido verificado con fuentes militares, es la doctrina oficial de las
Fuerzas Especiales de EE.UU. para la Defensa Interna en el Extranjero o FID.
Las operaciones de FID tienen el propósito de sostener a un gobierno ―amigo‖ que enfrente
una revolución popular o insurgencia guerrillera. Las intervenciones de FID son a menudo
encubiertas o casi encubiertas debido a la naturaleza impopular del gobierno que está
siendo apuntalado (―Al formular una política realista para el uso de asesores, el comandante
debe avaluar cuidadosamente el clima psicológico de la HN [siglas en inglés para Host
Nation, (Nación Anfitriona) y de EE.UU.‖)
El manual propugna directamente el entrenamiento de paramilitares, la vigilancia
generalizada, la censura, el control de la prensa y restricciones a los sindicatos y partidos
políticos. Propugna directamente allanamientos sin mandato judicial, la detención sin
acusación y (bajo diversas circunstancias) la suspensión del habeas corpus (recurso de
amparo). Aboga directamente por el empleo de terroristas o el procesamiento de individuos
por terrorismo que no son terroristas, realizar operaciones bajo bandera falsa y ocultar los
abusos de derechos humanos ante los periodistas. Y defiende repetidamente el uso de
subterfugios y ―operaciones psicológicas‖ (propaganda) para que estas medidas y otras de
―control de la población y de recursos‖ sean más aceptables.
El contenido ha sido particularmente informado por la prolongada participación de EE.UU.
en El Salvador.
En 2005 una serie de informes verosímiles en los medios sugirieron que el Pentágono
estaba discutiendo intensamente ―la opción salvadoreña‖ para Iraq. [1] Según la revista del
New York Times:
―El diseño básico para Iraq actual no es Vietnam, con el que ha sido comparado a
menudo, sino El Salvador, donde un gobierno derechista respaldado por EE.UU. combatió
contra un insurgencia izquierdista en una guerra de12 años que comenzó en 1980. El coste
fue elevado – más de 70.000 personas fueron muertas, la mayoría civiles, en un país con
una población de sólo seis millones. La mayoría de los asesinatos y de las torturas fueron
realizadas por el ejército y los escuadrones de la muerte que le estaban afiliados. Según un
informe de Amnistía Internacional en 2001, las transgresiones cometidas por el ejército y
grupos asociados incluyeron ‗ejecuciones extrajudiciales, otros asesinatos ilegales,
‗desapariciones‘ y tortura... Aldeas enteras fueron atacadas por las fuerzas armadas y sus
habitantes masacrados.‘ Como parte de la política del presidente Reagan de apoyar a las
fuerzas anticomunistas, cientos de millones de dólares en ayuda de EE.UU. fueron
canalizados al ejército salvadoreño, y un equipo de 55 asesores de las Fuerzas Especiales,
dirigido durante varios años por Jim Steele, entrenó a batallones de primera línea que
fueron acusados de importantes abusos de los derechos humanos.‖
El mismo artículo señala que James Steele y muchos otros ex ―asesores militares‖ de las
Fuerzas Especiales centroamericanas han sido ahora nombrados a un alto nivel a Iraq.
En 1993, una comisión de la verdad de la ONU sobre El Salvador, que examinó 22.000
atrocidades que ocurrieron durante los doce años de la guerra civil, atribuyó un 85% de los
abusos a los militares salvadoreños respaldados por EE.UU. y a sus escuadrones de la
muerte paramilitares.
Vale la pena señalar que el embajador de EE.UU. a El Salvador, Robert E. White (quien es
actualmente presidente del Centro para Política Internacional) ya dijo en 1980, en
documentos del Departamento de Estado, obtenidos bajo la Ley de Libertad de la
Información:
―La mayor amenaza inmediata para la existencia de este gobierno es la violencia
derechista. En la ciudad de San Salvador, los matones a sueldo de la extrema derecha,
algunos de ellos terroristas cubanos y nicaragüenses bien entrenados, matan a dirigentes
moderados de la izquierda y hacen volar edificios del gobierno. En el campo, elementos de
las fuerzas de seguridad torturan y matan a los campesinos, acribillan sus casas y queman
sus cosechas. Por lo menos doscientos refugiados del campo llegan cada día a la capital.
Esta campaña de terror está radicalizando las áreas rurales con tanta seguridad como lo
hizo la Guardia Nacional de Somoza en Nicaragua. Por desgracia, la estructura de
comando del ejército y de las fuerzas de seguridad, tolera o alienta esta actividad. Esos
altos oficiales creen o pretenden creer que están eliminando a los guerrilleros. [2]‖
A continuación presentamos pasajes seleccionados. Nótese que el manual tiene 219 páginas
y contiene integralmente material sustancial. Estos pasajes sólo deben ser considerados
representativos. Se ha agregado énfasis para mayor selección. El manual integral puede ser
encontrado en el manual de contrainsurgencia de las Fuerzas Especiales FM 31-20-3.
RESTRICCIÓN A LA DISTRIBUCIÓN: Distribución autorizada a agencias del gobierno
de EE.UU. y sus contratistas sólo para proteger información técnica u operativa de
diseminación automática bajo el Programa de Intercambio Internacional o por otros medios.
Esta decisión fue tomada el 5 de diciembre de 2003. Otros pedidos para este documento
deben ser referidas al Comandante, Ejército de EE.UU., Centro y Escuela de Guerra
Especial John F. Kennedy, ATTN: AOJK-DTD-SFD, Fort Bragg, North Carolina 28310-
5000.
Nota de destrucción: Destrúyase por cualquier método que pueda impedir la
revelación del contenido o la reconstrucción del documento.
[...]
Contrainteligencia
[...]
La mayor parte de las medidas de contrainteligencia utilizadas serán abiertas en su
naturaleza y orientadas a proteger instalaciones, unidades, e información y detectar
espionaje, sabotaje, y subversión. Ejemplos de medidas de contrainteligencia a utilizar
son:
Investigación de antecedentes y de historiales de personas en posiciones confidenciales
y de personas cuya lealtad pueda ser cuestionable.
Mantenimiento de archivos sobre organizaciones, lugares, e individuos de interés para
la contrainteligencia.
Inspecciones de seguridad interna de instalaciones y unidades.
Control de movimiento de civiles dentro de áreas controladas por el gobierno.
Sistemas de identificación para minimizar la posibilidad de que insurgentes ganen
acceso a instalaciones o se muevan libremente.
Allanamientos e incursiones no anunciadas contra presuntos sitios de reunión.
Censura
[...]
PSYOP [Operaciones psicológicas] son esenciales para el éxito de PRC [Control de
Población y Recursos]. Para máxima efectividad un fuerte esfuerzo de operaciones
psicológicas es dirigido hacia las familias de los insurgentes y su base de apoyo popular. El
aspecto de PSYOP del programa PRC trata de hacer que la imposición de control sea
más aceptable para la gente al relacionar la necesidad de controles con su seguridad y
bienestar. Los esfuerzos de PSYOP también tratan de crear una imagen favorable del
gobierno nacional o local y de contrarrestar los efectos del esfuerzo de propaganda
insurgente.
Medidas de control
Las SF (Fuerzas Especiales de EE.UU.] pueden aconsejar y ayudar a las fuerzas de la
HN [Nación Anfitriona] en el desarrollo e implementación de medidas de control.
Entre estas medidas están las siguientes:
Fuerzas de seguridad: La policía y otras fuerzas de seguridad utilizan medidas PRC (de
Control de la Población y Recursos] para privar de apoyo al insurgente y para
identificar y ubicar a miembros de su infraestructura. PSYOP [Operaciones
Psicológicas] adecuadas ayudan a que esas medidas sean más aceptables para la
población explicando su necesidad. El gobierno informa a la población que las
medidas de PRC pueden causar molestias pero que son necesarias debido a las
acciones de los insurgentes.
Restricciones: Derechos sobre la legalidad de la detención o encarcelamiento de
personas (por ejemplo, habeas corpus) pueden ser temporalmente suspendidos.
Esta medida debe ser adoptada como último recurso, ya que puede suministrar a los
insurgentes un tema efectivo de propaganda. Las medidas de PRC también pueden
incluir toques de queda o cortes de luz, restricciones a los viajes, y áreas
residenciales restringidas tales como aldeas protegidas o áreas de reasentamiento.
Registros y sistemas de pases y control de ítems delicados (control de recursos) y de
suministros críticos como armas, alimentos, y combustible son otras medidas de
PRC. Puntos de control, cacheos, bloques de ruta; vigilancia, censura, y control de
la prensa; y restricción de actividad que se aplique a grupos seleccionados
(sindicatos, grupos políticos, etc.) son otras medidas de PRC.
[...]
Consideraciones legales Todas las restricciones y medidas de DA deben ser regidas por la
legalidad de esos métodos y su impacto sobre la población. En países donde las autoridades
gubernamentales no tienen una amplia flexibilidad en el control de la población debe ser
promulgada legislación especial o de emergencia. Esa legislación de emergencia puede
incluir una forma de ley marcial permitiendo al gobierno los allanamientos sin
mandato judicial, detener sin presentar acusaciones formales, y ejecutar otras acciones
similares.
[...]
Operaciones psicológicas:
Las PSYOP pueden apoyar la misión desacreditando a las fuerzas insurgentes ante grupos
neutrales, creando disenso entre los propios insurgentes, y apoyando programas de
tránsfugas. Programas divisivos crean disensión, desorganización, baja moral,
subversión, y defección entre las fuerzas insurgentes. También son importantes
programas nacionales para ganar a insurgentes para el lado del gobierno con ofertas de
amnistía y recompensas. Motivos para la entrega pueden varias de rivalidades personales y
amargura a la desilusión y el desaliento. La presión de las fuerzas de seguridad tiene
poder persuasivo.
[...]
El personal de inteligencia debe considerar los parámetros dentro de los cuales opera un
movimiento revolucionario. Frecuentemente, establecen un centro centralizado de
procesamiento de inteligencia para recolectar y coordinar la cantidad de información
requerida para hacer cálculos de inteligencia a largo plazo.
La inteligencia a largo plazo de concentra en los factores estables existentes en una
insurgencia. Por ejemplo, varios factores demográficos (étnicos, raciales, sociales,
económicos, religiosos, y características políticas del área en el que el movimiento
clandestino tiene lugar) son útiles para identificar a los miembros de la resistencia.
Información sobre la organización clandestina a nivel nacional, de distrito, y local es básica
para la FID (Defensa Interna en el Exterior) y / o operaciones de IDAD. La recolección de
inteligencia específica a corto plazo sobre las variables en rápido cambio de una situación
local es crítica. El personal de inteligencia debe reunir información sobre miembros de
la resistencia, sus movimientos, y sus métodos. Biografías y fotos de presuntos
miembros de la resistencia, información detallada sobre sus casas, familias, educación,
historia laboral, y asociados, son características importantes de la inteligencia a corto
plazo.
La destrucción de sus unidades tácticas no es suficiente para derrotar al enemigo. Las
células o la infraestructura clandestinas de los insurgentes deben ser neutralizadas primero
porque la infraestructura es su principal fuente de inteligencia táctica y control político. La
eliminación de la infraestructura dentro de un área logra dos objetivos: asegura el
control gubernamental del área, y corta las principales fuentes de inteligencia del enemigo.
Un centro de comando de inteligencia y operaciones (IOCC) es necesario a nivel de distrito
o provincia. Esta organización se convierte en el centro nervioso para operaciones contra la
infraestructura insurgente. La información sobre objetivos de la infraestructura insurgente
debe provenir de fuentes como la policía nacional y otras redes y agentes e individuos
(informante) de inteligencia establecidos.
La naturaleza altamente especializada y delicada de la recolección de inteligencia
clandestina exige agentes especialmente seleccionados y altamente entrenados. La
información de fuentes clandestinas es a menudo altamente confidencial y requiere un
estrecho control para proteger a la fuente. Sin embargo, la información táctica según la cual
puede emprenderse una reacción en combate puede ser pasada al nivel táctico adecuado.
La localización, evaluación, y reclutamiento de un agente no es un proceso fortuito sin
tener en cuenta el tipo de agente que se busque. Durante la fase de evaluación, el agente a
cargo determina el grado de inteligencia del individuo, su acceso al objetivo, cobertura
disponible o necesaria, y motivación. Inicia el reclutamiento y la acción y la acción de
codificación sólo después de que determina que el individuo tiene los atributos necesarios
para satisfacer las necesidades.
Todos los agentes son observados de cerca y los que no son fiables son relevados. Es
mejor tener unos pocos agentes bien centrados, fiables y más económicos que una gran
cantidad de agentes deficientes.
Se necesita un sistema para evaluar a los agentes y la información que presentan. El
mantenimiento de un archivo maestro de un agente (posiblemente al nivel SFOD B) puede
ser útil al evaluar al agente respecto al valor y la calidad de la información que ha
presentado. El archivo debe contener una copia del informe de los datos de la fuente del
agente y cada informe de inteligencia que haya presentado.
Las fuerzas de seguridad pueden inducir a individuos de entre la población en general para
que se conviertan en informantes. Las fuerzas de seguridad utilizan diversos motivos
(conciencia cívica, patriotismo, miedo, elusión de castigos, gratitud, venganza o celos,
recompensas económicas) como argumentos para persuadir. Utilizan la promesa de
protección contra represalias como un aliciente importante. Las fuerzas de seguridad deben
mantener el anonimato del informante y deben ocultar el paso de información de la fuente
al agente de seguridad. El agente de seguridad y el informante deben acordar previamente
señales que coincidan con la conducta diaria.
La vigilancia, la observación clandestina de personas y sitios, es un método principal
para obtener y confirmar información de inteligencia. Las técnicas de vigilancia varían
naturalmente según los requerimientos de diferentes situaciones. Los procedimientos
básicos incluyen la observación mecánica (escuchas o micrófonos ocultos), observación
desde sitios fijos, y la vigilancia físicas de sujetos.
Cada vez que un sospechoso es detenido durante una operación, tiene lugar un
interrogatorio apresurado para obtener información inmediata que podría ser de
valor táctico. Los métodos utilizados más frecuentemente para recolectar información
(estudios de mapas y observación aérea), sin embargo, normalmente no tienen éxito. La
mayoría de los prisioneros de guerra no saben leer un mapa. Cuando son llevados en un
vuelo de reconocimiento visual, es usualmente su primer vuelo y no pueden asociar una
vista aérea con lo que vieron en el terreno.
El método más exitoso de interrogatorio consiste de un estudio de mapa basado en
información desde el terreno recibida del detenido. El interrogador pregunta primero al
detenido cuál era la dirección del sol cuando abandonó el campo base. Partiendo de esa
información puede determinar una dirección general. El interrogador luego pregunta al
detenido cuanto se demoró para caminar hasta el punto en el que fue capturado. A juzgar
por el terreno y la salud del detenido, el interrogador puede determinar un radio general en
el que se puede encontrar el campo base (puede utilizar una transparencia de sobreposición
con este fin). Entonces solicita al detenido que identifique importantes características del
terreno que vio en cada día de su viaje (ríos, áreas descubiertas, montes, arrozales,
pantanos). A medida que el detenido habla, y se refresca su memoria, el interrogador ubica
esas características del terreno en un mapa actualizado y gradualmente representa la ruta
del detenido para terminar por ubicar el campo de base.
Si el interrogador es incapaz de hablar el lenguaje del detenido, interroga mediante un
intérprete que ha recibido de antemano una instrucción. Una grabadora también puede
ayudarle. Si el interrogador no está familiarizado con el área, personal familiarizado con el
área lo informa antes del interrogatorio y luego se une al equipo de interrogación. La
grabadora permite al interrogador un interrogatorio con más libre flujo, La grabadora
también permite que un intérprete entendido elabore sobre los puntos que el detenido ha
mencionado sin que el interrogador interrumpa la continuidad establecida durante una
secuencia determinada. El intérprete también puede cuestionar ciertas inexactitudes,
manteniendo la presión sobre el sujeto. El intérprete y el interrogador tienen que estar bien
entrenados para trabajar como equipo. El intérprete tiene que estar familiarizado con los
procedimientos de interrogatorio. Sus instrucciones previas al interrogatorio deben incluir
información sobre la salud del detenido, las circunstancias que llevaron a su detención, y la
información específica requerida. Un interrogatorio exitoso depende de la continuidad y de
un intérprete bien entrenado. Una grabadora, (o un secretario que tome notas) refuerzan la
continuidad al liberar al interrogador de tareas administrativas que cuestan tiempo.
[...]
Estructuras políticas. Una organización partidaria fuertemente disciplinada, formalmente
estructurada para que se asemeje a la estructura gubernamental existente, puede ser hallada
al centro de algunos movimientos insurgentes. En la mayoría de los casos, esta estructura
organizativa consistirá de organizaciones comprometidas en los niveles de la aldea, la
provincia o el país. Dentro de grandes divisiones y secciones de los cuarteles militares
insurgentes, existen canales de comando totalmente definidos pero paralelos. Existen
cadenas de comando militares y canales políticos de control. El partido asegura una
dominación total sobre la estructura militar utilizando su propia organización paralela.
Domina a través de una división política en un cuartel militar insurgente, una célula o grupo
de partido en una unidad militar insurgente, o un oficial político militar.
[...]
Operaciones especiales de recolección de inteligencia
Técnicas y fuentes alternativas de recolección de inteligencia, como ser operaciones
dobles o falsas, pueden ser probadas y utilizadas cuando es difícil obtener información
de la población civil. Estas seudo-unidades están usualmente compuestas de ex
guerrilleros y/o de personal de las fuerzas de seguridad que se las dan de insurgentes.
Circulan en la población civil y, en algunos casos, infiltran a unidades de la guerrilla para
reunir información sobre movimientos de la guerra y su infraestructura de apoyo.
Hay que utilizar mucho tiempo y esfuerzo para persuadir a insurgentes para que cambien de
lado y sirvan con las fuerzas de seguridad. Posibles candidatos deben ser adecuadamente
seleccionados, dándoles a continuación una opción de servir con las fuerzas de
seguridad de la HN [nación anfitriona] o encarar el enjuiciamiento bajo la ley de la
HN por crímenes terroristas.
Unidades de la fuerza de seguridad gubernamentales y unidades de diverso tamaño han sido
utilizadas para operación de infiltración contra fuerzas clandestinas y de la guerrilla. Han
sido especialmente efectivas en la obtención de información sobre la seguridad y los
sistemas de comunicación clandestinos, la naturaleza y el alcance del apoyo civil y de la
vinculación con la resistencia, los métodos clandestinos de suministro, y la posible colusión
entre funcionarios locales del gobierno y la resistencia. Antes de que una unidad semejante
pueda ser adecuadamente entrenada y disimulada, sin embargo, hay que reunir mucha
información sobre la apariencia, las formas de ser, y los procedimientos de seguridad de
unidades del enemigo. La mayor parte de esta información proviene de tránsfugas o
prisioneros reformados. Los tránsfugas también se convierten en excelentes instructores y
guías para una unidad de infiltración. Al utilizar un equipo camuflado, los hombres
seleccionados deben ser entrenados, orientados, y disimulados para que parezcan y
actúen como auténticas unidades clandestinas o de la guerrilla. Aparte de adquirir
información valiosa, las unidades de infiltración pueden desmoralizar a los insurgentes en
la medida en que se hagan excesivamente sospechosos y recelosos hacia sus propias
unidades.
[...]
Después de establecer el cordón y de determinar un área de contención, se establecer el
punto o centro de selección. Todos los civiles en el área acordonada pasarán entonces a
través del centro de acordonamiento para ser clasificados.
Personal de la policía nacional completarán, si no existen datos del censo en los
archivos policiales, una tarjeta básica de registro y fotografiarán a todo el personal
sobre 15 años. Imprimirán dos copias de cada foto – una es pegada en la tarjeta de registro
y la otra en el libro de la aldea (para posible uso en operaciones posteriores y para
identificar a renegados e informantes).
El jefe del elemento de selección asegura que los seleccionadores interroguen a parientes,
amigos, vecinos, y otros individuos informados sobre dirigentes o funcionarios de la guerra
que operen en el área sobre su paradero, movimientos, y su regreso esperado.
El área de selección debe incluir áreas en las que personal policial y de inteligencia militar
pueda entrevistas en privado a individuos seleccionados. Los interrogadores tratan de
convencer a los entrevistados de que su cooperación no será detectada por otros habitantes.
También discuten, durante la entrevista, la existencia de recompensas monetarias por
ciertos tipos de información y equipos.
[...]
Las Fuerzas de Auto-Defensa Civil [CSDF por sus siglas en inglés - Paramilitares o,
especialmente en El Salvador o en el contexto de la guerra civil colombiana, ―escuadrones
de la muerte‖ derechistas]
Cuando una aldea acepta el programa de las CSDF, los insurgentes no pueden optar por
ignorarlo. Si no se castiga a la aldea, alentará a otras aldeas a aceptar el programa CSDF del
gobierno. Los insurgentes no tienen otra alternativa; tienen que atacar a la aldea de las
CSDF para dar una lección a otras aldeas que consideren las CSDF. En cierto sentido, la
efectividad psicológica del concepto de las CSDF comienza al trastrocar la estrategia
insurgente de presentar al gobierno como represor. Obliga a los insurgentes a cruzar
un umbral crítico – el de atacar y matar a la misma clase de gente que supuestamente
están liberando.
Para tener éxito, el programa de las CSDF debe tener apoyo popular de los directamente
involucrados o afectados. El campesino promedio no está normalmente dispuesto a
luchar hasta la muerte por su gobierno nacional. Su gobierno nacional puede haber
sido una sucesión de dictadores corruptos y burócratas ineficientes. Esos gobiernos no
son el tipo de instituciones que inspiran emociones de lucha hasta la muerte en el
campesino. La aldea o ciudad, sin embargo, es algo diferente. El campesino promedio
luchará mucho más duro por su casa y por su aldea de lo que jamás haría por su gobierno
nacional. El concepto de las CSDF involucra directamente al campesino en la guerra y la
convierte en una lucha por la familia y la aldea en lugar de una lucha por algún gobierno
lejano irrelevante.
[...]
Miembros de las CSDF no reciben paga por sus deberes civiles. En la mayor parte de los
casos, sin embargo, derivan ciertos beneficios del servicio voluntario. Esos beneficios
pueden variar de prioridad de contratación para los proyectos CMO a un sitio adelante en
las colas para raciones. En El Salvador, personal de las CSDF (que son llamadas
defensa civil en ese país) recibieron una póliza de seguro de vida financiada por
EE.UU., en la que la mujer o su pariente más cercano era el beneficiario. Si un
miembro de las CSDF moría en la línea del deber, la viuda o su pariente más cercano
recibía ceremoniosamente el pago de un funcionario de la HN. La HN administraba el
programa y un asesor de EE.UU., que mantenía la contabilidad de los fondos, verificaba el
pago. La HN [Nación Anfitriona] ejerce el control administrativo y visible.
El grado de reacción y el pago rápido son esenciales en el proceso, ya que la viuda
normalmente carece de medios de apoyo y el efecto psicológico de que el gobierno le
ayude en su aflicción impresionan a toda la comunidad. Estos, y otros beneficios, ofrecidos
por o mediante el gobierno de la HN son valiosos incentivos para reclutar y mantener las
CSDF.
[...]
Los miembros locales de las CSDF seleccionan a sus dirigentes y sus lugartenientes
(grupos y equipos de las CSDF) en elecciones organizadas por las autoridades locales. En
algunos casos, la HN nombra a un jefe que es un miembro especialmente seleccionado de
las fuerzas de seguridad de la HN entrenado para realizar esta tarea. Semejantes
nombramientos ocurrieron en El Salvador, donde las fuerzas armadas han establecido
una escuela formal para entrenar a comandantes de las CSDF. Se requiere extremo
cuidado y una supervisión de cerca para evitar abusos por parte de los jefes de las
CSDF.
[...]
La organización de unas CSDF puede ser similar a la de un grupo de combate. Esta
organización es efectiva tanto en contextos rurales como urbanos. Por ejemplo, un grupo
básico, con una fuerza de 107 miembros, está dividido en tres elementos de 35
hombres, más un elemento en el cuartel de 2. Cada elemento de 35 hombres está
dividido en tres equipos de 11 hombres y un elemento en el cuartel de 2. Cada equipo
consiste de un jefe de equipo, y un ayudante del jefe, y tres células de 3 hombres cada
una. Esta organización puede ser modificada para acomodar la cantidad de
ciudadanos disponibles.
[...]
El entrenamiento con armas para el personal de las CSDF es crítico. La pericia con las
armas decide el resultado de una batalla y debe ser subrayada. De igual importancia es el
mantenimiento y el cuidado de las armas. A los miembros de las CSDF se les enseña
puntería básica con los rifles con un énfasis especial en los disparos desde posiciones fijas y
durante condiciones de visibilidad limitada. También se incluye en el programa de
entrenamiento de puntería es la detección de objetivos y la disciplina de fuego.
Generalmente se asigna munición de entrenamiento a las CSDF sobre la base de una
cantidad especificada de tiros para cada arma autorizada. Una fuerza gubernamental de
apoyo de la HN o una fuente logísticas de las CSDF suministra la munición para respaldar
los cursos de reciclaje.
[...]
Actos de mal comportamientos de personal de la HN [Nación Anfitriona]
Todos los miembros de los equipos de ayuda del entrenamiento deben comprender sus
responsabilidades respecto a actos de mal comportamiento de personal de la HN. Los
miembros de los equipos reciben instrucciones antes de su despliegue sobre qué hacer si
encuentran u observan semejantes actos. Actos prohibidos por el Artículo Común 3 de las
cuatro Convenciones de Ginebra enumera actos prohibidos por partes de la convención.
Tales actos son:
Violencia contra la vida y la persona, en particular, asesinato, mutilación, tratamiento
cruel, y tortura.
Toma de rehenes.
Ofensas contra la dignidad personal, en particular, tratamiento humillante y degradante.
Pronunciamiento de sentencias y realización de ejecuciones sin juicio previo por un
tribunal regularmente constituido que permita todas las garantías oficiales que son
reconocidas como indispensables por gente civilizada.
Las provisiones del párrafo anterior representan un nivel de conducta que EE.UU.
espera que sea observado por cada país extranjero.
Si los miembros de un equipo encuentran actos prohibidos que no pueden impedir, se
desconectarán de la actividad, abandonará el área si es posible, e informarán
inmediatamente sobre los incidentes a las autoridades apropiadas de EE.UU. en el país. El
equipo en el país identificará a autoridades apropiadas de EE.UU. durante la instrucción
inicial del equipo. Los miembros del equipo no discutirán semejantes temas con
autoridades que no sean del gobierno de EE.UU., como ser periodistas y contratistas
civiles.
[...]
La mayor parte de los documentos doctrinarios y de entrenamiento de los insurgentes
subrayan el uso de minas a presión en las áreas más aisladas o menos pobladas. Prefieren
utilizar minas a control remoto en las áreas más densamente pobladas. Esos documentos
subrayan que cuando utilizan minas detonadas sin control remoto, los insurgentes utilizan
todos los medios para informar a la población local sobre su ubicación, con las
correspondientes regulaciones de seguridad. En realidad, la mayoría de los grupos
insurgentes sufren de diferentes grados de deficiencia en sus sistemas de C2 (comando y
control). Sus C2 no les permiten verificar que los elementos a su nivel operativo sigan
estrictamente directivas y órdenes. En el caso del Frente Farabundo Martí de la Liberation
Nacional [sic] (FMLN) en El Salvador, el individuo que coloca la mina es responsable por
su recuperación después del enfrentamiento. Existen problemas con este concepto. El
individuo puede ser muerto o las fuerzas de seguridad pueden ganar el control del área. Por
ello, la recuperación de la mina es casi imposible.
[...]
Minas antipersonal hechas en casa son utilizadas extensivamente en El Salvador,
Guatemala y Malasia. (Un 80% de todas las bajas de las fuerzas armadas salvadoreñas en
1986 se debieron a minas; en 1987, los soldados heridos por minas y trampas-bomba
promediaron entre 50 y 60 por mes.) El punto importante a recordar es que cualquier
bomba hecha en casa es el producto de los recursos disponibles del grupo insurgente. Por
ello, nunca dos minas antipersonal pueden ser iguales en su configuración y materiales. Los
grupos insurgentes dependen en gran medida de materiales descartados o perdidos por
personal de las fuerzas de seguridad. Los insurgentes no sólo usan armas, munición, minas,
granadas, y cargas de demolición para su propósito original sino también para preparar
minas viables y trampas-bomba.
[...]
Una serie de exitosas colocaciones de minas realizadas por los insurgentes Viet Cong en el
río Cua Viet, provincia Quang Tri, demostraron su inventiva en contrarrestar tácticas de
detección de minas. Inicialmente se realizaban acciones de detección utilizando cadenas
arrastradas por la mañana y la noche. Después de varios ataques exitosos con minas, fue
obvio que colocaban las minas después del paso de los equipos detectores. Entonces, los
botes que utilizaban el río se formaron en convoyes y transitaban el río con barreminas que
iban a 914 metros delante del convoy. Sin embargo, botes del convoy fueron exitosamente
minados al medio del canal, indicando que las minas fueron colocadas de nuevo después
del paso del barreminas, posiblemente utilizando sampanes. Varios sampanes fueron
observados cuando cruzaban o utilizaban de otra manera el canal entre los barreminas y el
convoy. Los convoyes fueron entonces organizados de modo que los barreminas trabajaban
directamente frente al convoy. Un convoy pasó exitosamente. Al convoy siguiente le
atacaron con minas su barreminas y fue emboscado cerca de las riberas del río.
[...]
Consejeros militares
[...]
La presión psicológica sobre los homólogos de la HN [Nación Anfitriona] puede ser a
veces exitosa. Formas de presión psicológica pueden variar desde lo obvio a lo sutil. El
consejero nunca aplica amenazas, presión o intimidación directas sobre su homólogo. La
presión psicológica indirecta puede ser aplicada llevando el problema más arriba a la
cadena de comando, a un comandante estadounidense más elevado. El comandante de
EE.UU. puede entonces conducir a su homólogo a obligar al homólogo subordinado a
ajustarse. La presión psicológica puede obtener resultados rápidos, pero puede tener efectos
colaterales muy negativos. El homólogo se sentirá enajenado y posiblemente hostil si el
consejero usa técnicas semejantes. Ofertas de pago en la forma de objetos de valor puede
llevarlo a resentirse por el control obvio que se ejerce sobre su personal. En breve, la
presión psicológica sobre un homólogo no es recomendada. Semejante presión es utilizada
sólo como último recurso ya que puede dañar irreparablemente la relación entre el
consejero y su homólogo.
Apoyo de PSYOP [Operaciones Psicológicas] para los asesores militares
La introducción de asesores militares requiere la preparación de la población con la
cual los consejeros van a trabajar. Antes de que los consejeros entren a un país, el
gobierno de la HN [Nación Anfitriona] explica cuidadosamente su introducción y subraya
claramente los beneficios de su presencia para los ciudadanos. Debe suministrar una
justificación verosímil para minimizar los obvios beneficios propagandísticos que los
insurgentes pueden obtener como resultado de esta acción. Los elementos disidentes del
país califican nuestras acciones, no importa cuán buena sea su intención, como
―intervención imperialista.‖
Una vez que los asesores están involucrados, sus actividades deben ser aprovechadas. Su integración exitosa en la sociedad de la HN y su respeto por las costumbres y buenas
maneras locales, así como su participación en proyectos de CA [Asuntos Cívicos], son
constantemente destacados. Al formular una política realista para el uso de asesores, el
comandante debe evaluar cuidadosamente el clima psicológico de la HN y de EE.UU.
[...]
Operaciones de PRC [Control de Población y Recursos]
Los asesores ayudan a sus homólogos en el desarrollo de planes adecuados de control
y en programas de entrenamiento para medidas de PRC. También ayudan a coordinar
planes y solicitudes para materiales y someten recomendaciones para mejorar la efectividad
general de las operaciones. Pueden ayudar a preparar el inicio del control:
Seleccionar, organizar y entrenar a fuerzas paramilitares e irregulares.
Desarrollar actividades de PSYOP [Operaciones Psicológicas] para apoyar operaciones
de PRC.
Coordinar actividades a través de un centro de coordinación del área (si está
establecido).
Establecer y refinar operaciones de PRC.
Intensificar actividades de inteligencia.
Establecer y refinar la coordinación y las comunicaciones con otras agencias.
Referencias
1. ↑ Newsweek.Special Forces May Train Assassins, Kidnappers in Iraq by Michael Hirsh
& John Barry, Jan. 14, 2005,
http://www.msnbc.msn.com/id/6802629/site/newsweek/print/1/displaymode/1098 /
2. ↑ US State Department, FOIA record, http://foia.state.gov/documents/elsalvad/738d.PDF
http://wikileaks.org/wiki/How_to_train_death_squads_and_quash_revolutions_from_San_
Salvador_to_you
-------
http://www.informationclearinghouse.info/article20125.htm
Entrevista con Álvaro García Linera, vicepresidente de Bolivia
Evo es una criatura de la Historia que a todos nos modela
Luis Báez y Pedro de la Hoz
Red Informativa Virtin
A la vera de Evo Morales, en su condición de Vicepresidente de la República de Bolivia, se
halla Álvaro García Linera. Para algunos analistas acostumbrados a juzgar la realidad
boliviana a partir de tópicos, todavía resulta incomprensible la articulación de la fórmula
que conquistó en las elecciones de 2005 el voto de las mayorías y mucho menos se explican
su consolidación a lo largo de dos años y medio de gestión gubernamental: el indio y el
blanco, el dirigente popular de base y el intelectual académico.
Hay quienes ponderan su inteligencia, valoran su capacidad discursiva, califican sus
cualidades políticas y resaltan su militancia y servicio a favor de los cambios que ha
emprendido el país. Ha sido objeto, sin embargo, de duros ataques y oscuras sospechas que
apuntan tanto hacia el pasado del Vicepresidente como a su actuación en el Gobierno.
Es interesante su perfil. Nació en Cochabamba el 19 de octubre de 1962. Cursó estudios
básicos y de nivel medio en la escuela Don Bosco y el colegio Agustín de Cochabamba, Se
licenció en Matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde
realizó estudios de posgrado en Ciencias Puras. Pero desde siempre mostró vocación por la
Sociología y las Ciencias Políticas, áreas en las que ha ejercido la docencia.
Hoy día es indudable su protagonismo en la vida de la nación. Sus criterios adquieren un
valor inestimable, aunque también en la conversación afloraron necesariamente aspectos de
su biografía política, imprescindibles para arrojar luz acerca de su compromiso con el
proceso.
¿Cómo explica que siendo blanco, de clase media, e intelectual se haya involucrado en
un proyecto de raíz popular e indígena?
Crecí en una sociedad pigmentocrática, donde el color de la piel visibiliza la estructura de
clases de la sociedad, la distribución del poder económico y político. Es un modelo que se
consolidó durante décadas, siglos, una percepción de la distribución de roles, de funciones
de las personas: los indios para el trabajo en el campo, obreros, artesanos, sirvientes, de la
piel un poco más entremezclada en funciones intermedias, ámbito intelectual; las personas
mas blanqueadas, poseedoras del poder, del control y del dominio social.
Así como en los años 60, cuando surgieron las luchas armadas en Latinoamérica, hubo una
fuerte radicalización de las clases medias, que se incorporaron en las luchas campesinos y
obreras, en nuestro país sucedió en las últimas décadas algo por el estilo.
Es evidente que esto ha sido fruto de un proceso histórico; uno no estaría hablando de estas
cosas, si no hubieran habido sublevaciones desde los años 70, ni el despertar del
movimiento indígena que increpa a las elites.
¿Cómo influyó en usted el reclamo indigenista?
No es solo mi caso, sino el de un núcleo de personas de clase media convocada, arrastrada
por ese despertar indígena y popular, que ha aprendido al sumarse a este. A medida que ese
influjo popular e indígena irrumpe en la escena política y se expande, se presenta no
solamente como un demandador de igualdad, sino como un proponente de una sociedad
más equilibrada y beneficiosa para la inmensa mayoría de los bolivianos.
¿Qué opinión tienen de ustedes las elites clasistas?
No nos perdonan. Piensan que somos traidores de clase por pelear a favor de los pobres.
Las clases altas y tradicionalmente dominantes, no nos han perdonado y nos han
sancionado muy drásticamente. No pueden concebir que se hable de la igualdad de las
personas, que se combata el neocolonialismo, las diferenciaciones y el modo pigmentizado
de ejercer el poder.
¿Ha logrado el proceso de cambio liderado por el actual gobierno romper esa
percepción racista de la sociedad?
Es más fácil introducir cambios en la estructura económica y favorecer a amplios sectores,
como lo hemos hecho, mediante políticas sociales de amplio consenso popular, que
transformar las estructuras mentales heredadas del pasado. Constituye un fardo pesado la
estructura de clases del país, que se ha mantenido a lo largo de nuestra historia,
independientemente de la fundación de la República, de la Revolución del 52 que
democratizó la vida política y distribuyó tierras. Esa estructura persiste y se refleja hasta el
día de hoy en muchos de los hábitos de todos. El testimonio de que eso no ha desaparecido
aún es lo que ustedes han visto en Sucre el 24 de mayo de 2008, cuando las supuestas
clases cultas hacen arrodillar a indios, quieren imponernos a todos la imagen que ellos
tienen del indio sumiso ante el poderoso. Esa es la historia de nuestro país. Evidentemente,
la lucha de los pueblos indígenas y de los sectores populares se encamina a transformar ese
estado de cosas y conseguir nuevas formas de comportamiento cotidiano.
¿De qué manera se fueron articulando a la lucha los sectores de la clase media?
Yo creo que en el 2000 la llamada Guerra del Agua, en Cochabamba, fue un momento
definitorio. Allí participó el movimiento campesino, cocalero, indígena y fabril, para evitar
la privatización de un bien de primera necesidad. Luego vinieron las sublevaciones aquí en
el altiplano, y en lo adelante se hizo visible la construcción de un liderazgo político,
intelectual, moral e indígena. Cada vez fueron más los sectores identificados con la
demanda indígena. Eso lleva a la victoria en las urnas, del compañero Evo Morales en el
año 2005. Donde triunfan los movimientos populares e indígenas, con el apoyo de
importantes sectores de las clases medias, e incluso de algunos sectores de clase alta,
democráticos, que se sienten atraídos, convocados por este proyecto de igualdad.
¿Fue lineal ese proceso?
Evidentemente ha sido un proceso largo, complicado y con muchas idas y venidas, no es un
proceso definitivo. Hay avances y retrocesos. En lo personal nos toco jugar un papel,
articular en los años 90 la cercanía al movimiento indígena. Hacía tiempo que la izquierda
no veía a los indios, porque también la izquierda era muy señorial en Bolivia, de buen
apellido. Nosotros éramos una generación pequeña, que no había bebido de la totalidad de
estos prejuicios. Fuimos un pequeño grupo, influido por el movimiento indígena de los
años 70, el indianismo y el katarismo, tendencia esta última que reivindicaba la figura de
Tupac Katari, un aymará que desafió al poder colonial español en 1781. Comenzamos a
acercarnos al movimiento indígena. Éramos ovejas negras en medio de un rebaño blanco.
Ahora yo diría que es una cosa mucho más organizada, porque ya el rebaño es más grande,
hablo de un sector cada vez más numeroso y sensibilizado. Ahí radica su virtud y su fuerza.
¿Usted fue guerrillero?
Influidos como ya dije por katarismo de los 70, una década después creamos unos núcleos
de propaganda y difusión en las fábricas y en las comunidades. Situémonos hacia la
medianía de los 80, en el momento en que se da una involución social con la llegada del
neoliberalismo al país y se cooptan las dirigencias sindicales; se aniquila moral y
políticamente a la izquierda. Aquí se quebró en 1984 la izquierda tradicional.
En ese momento, nos vinculamos mucho al sector indígena, intentamos hacer una cercanía
entre la lectura marxista, pero a la vez recogiendo las lecturas sobre lo que Marx llamaba
las identidades difusas, nacional y campesina. Aprendimos con insumos del indianismo y el
katarismo, de ahí salió un cóctel tal vez interesante, que nos permitió comprender que con
el neoliberalismo se cerraba una época, que no era cuestión de un mero gobierno. Me
acuerdo de que redactamos un texto donde decíamos que el neoliberalismo despertaría a
Tupac Katari; estaba escrito en un cuaderno que se llevó la represión cuando nos agarraron
presos.
¿Hasta dónde pudieron proyectarse?
Sacamos la conclusión de que había que prepararse para una sublevación. Todo nuestro
trabajo consistió en elaborar la doctrina, en articular marxismo e indigenismo, separados
durante décadas en Bolivia, y crear mecanismos semiclandestinos en las comunidades con
capacidad movilizativa para cuando llegara el momento. La idea de una sublevación
recorrió nuestro ideario, le pusimos el nombre de guerra de ayllus, y la acción iba a estar
territorializada en los núcleos comunitarios.
Nuestra estructura política tenía varios niveles: por una parte la construcción teórica
intelectual y la elaboración de panfletos y libros; por otra, la formación de cuadros
políticos; y en un tercer nivel, la preparación para la lucha armada. Yo participé en la
concepción teórica y la formación de cuadros. Pero nos apresaron.
¿De qué se les acusó?
Nos levantaron cargos por violar 17 artículos del Código Penal, comenzando por
terrorismo, atentado, y falsedad ideológica. Nos llevan a una cárcel de máxima seguridad,
la de Choncocoro, donde permanecimos cinco años a la espera de que demostraran
cualquiera de las acusaciones. Nunca pudieron hacerlo a lo largo de 15 audiencias. Nunca
lograron presentar más que burdos informes policiales, que me colocaban simultáneamente
en cinco lugares como si poseyera el don divino de la ubicuidad.
Fue una pantomima montada por el gobierno de Jaime Paz Zamora, con el intento de
encerrarme en la cárcel. Después de cinco años, salimos de la cárcel, todavía con juicio
pendiente. Pasaron otros cinco años esperando por el enjuiciamiento y exigimos a los
tribunales y los fiscales de que la investigación avanzara. Exigíamos un resarcimiento y un
castigo a las personas que nos encerraron y torturaron.
¿Cómo conoció a Evo Morales?
Conocí a Evo en el 2000, en los días de la llamada Guerra del Agua. Saliendo de la cárcel
me vinculé con los fabriles de la ciudad de Cochabamba y a través de los fabriles con los
regantes (campesinos que dependías del regadío para sus producciones), que habían
peleado desde hacia tiempo atrás por el control de los recursos hídricos, debido a las
amenazas contra su propiedad. Ahí nosotros hacíamos trabajo académico, hicimos un libro
de investigación sobre el mundo fabril alertando contra la desproletarización llevada a cabo
por el sistema neoliberal.
Coincidí con Evo, en las movilizaciones, en las barricadas, aunque yo por supuesto le había
seguido la pista desde 1988, cuando creamos estructuras de organización clandestina en el
Chapare, ya lo habíamos detectado como un dirigente muy carismático.
¿Él lo escogió a usted para postularse como Vicepresidente?
Me acuerdo que con el compañero Evo hacíamos reuniones permanentes de evaluación
política, que se intensificaron más en 2002 cuando lo expulsan del Parlamento. En 2005,
cuando se estaba armando, acordamos que a su candidatura del Evo tenía que acompañarle
un segundo que contribuyera a articular a otros sectores sociales, fundamentalmente clase
media y al Oriente del país. Evaluamos nombres. Faltando un mes para el inicio de la
campaña, el compañero Evo se me acerca y me dice: ―Álvaro tenemos un problema, no
estamos pudiendo encontrar al candidato, alguien de clase media, empresario progresista o
del Oriente. Lo que pasa es que algunos cumplen solo una parte de los requisitos‖ Entonces
me llevó a su cuartito, de su histórica casa, estábamos preocupados pensando en quien
podía ser y me dijo: ―Algunos compañeros están pensando que tú puedes ser un candidato‘.
Le dije: ―Ni loco, compañero, hay que trabajar. Sigamos buscando, si todo falla y no queda
nadie mas, evidentemente yo voy a hacer lo que me manden y lo que se decida
colectivamente‖.
De no haberse dado esa eventualidad, ¿usted seguiría trabajando junto a Evo?
Trabajaría igual, en tareas que ya tenía en el análisis político, en la evaluación de
situaciones. Miren, Hay un lugar en donde Álvaro García se ubicaba muy cómodamente, en
la cátedra, teniendo tiempo para leer mucho, en la investigación, en el aporte de
informaciones. Yo tenía mi vida planificada para los próximos cuatro años. Resulta que el
presidente Evo me da otra tarea y la asumimos, con una humildad infinita y con el mismo
compromiso de toda la vida. Las necesidades del proceso hacen que uno asuma lo que cada
momento colectivamente se considera necesario.
Se rumora que usted, lo mismo que el Ministro de la Presidencia, representan al magnate
norteamericano George Soros en el gabinete. Que usted apuesta por convertir a Bolivia en
un narcoestado.
En mi vida he visto ni he entrado en contacto con Soros. Como académico asistí a una
conferencia internacional en la ciudad mexicana de Mérida en 2002 donde es posible que
haya habido gente de Soros, pero también de muchas otras organizaciones del más variado
pelaje político e ideológico. Lo del narcoestado es ridículo, una invectiva mortificante y
gratuita.
Otro rumor habla de nepotismo en el gobierno.
Desde que asumimos el poder con el compañero Evo Morales, nos pusimos una serie de
objetivos. Una lucha implacable contra la corrupción, no importaba quién, si fuera el
amigo, el conocido, el familiar, quien sea. Había que cortar de raíz cualquier tipo de
corrupción, a cualquier persona y en cualquier lugar. Nuestro Presidente, a las tres semanas
de gobierno, expulsó a su Viceministro de Transporte, por ejercer cierto tipo de extorsión.
Eso hasta el día de hoy continúa de manera tajante, inflexible, inclaudicable. Me acuerdo
que en lo personal, alguna vez comenté con la familia, que a ellos había tocado un triste
destino: primero, sufrir por la presencia del hijo en la cárcel, la viejita que tenía que llevar
la comida cada 15 días y sufrir; segundo, que aún en gobierno, cualquier familiar de Álvaro
García Linera estaba excluido de tener la más mínima presencia en una función pública. Es
mas, hemos instruido que cualquier familiar que se acerque al gabinete sea expulsado de
inmediato.
¿Hacia dónde va el proceso boliviano?
La meta perspectiva e irrenunciable es la justicia social. Pero no es solamente un problema
de justicia histórica de los pueblos indígenas. En esta coexistencia tensa entre estado,
monopolio y esfera pública no estatal, se juega la posibilidad de que este post
neoliberalismo sea con el tiempo un poscapitalismo, porque el socialismo no es un tema de
decretos, es un tema de voluntad, es un tema de construcción de la sociedad, de
reapropiación de sus capacidades por encima del estado. Ahora se está jugando la suerte del
poscapitalismo en Bolivia, porque en Bolivia habrá socialismo solamente cuando haya
obreros organizados e indios organizados en el contexto de los recursos públicos.
¿Siente en este proyecto el legado del Che Guevara?
El Che es un referente irremplazable. Y cuando se aspira a reparar todo tipo de injusticia, su
ética es necesaria. En el orden personal, me interesan y he estudiado los escritos
económicos del Che, sus agudas polémicas.
¿Cómo valora la personalidad de Evo?
Escribí un textito que se llama "El evismo" donde analizo dos dimensiones de la figura de
Evo, la histórica procesual y la histórica individual personal. En la primera, no se puede
entender a Evo sin 30 años de formación y elaboración del movimiento indígena y sus
vertientes, desde la vertiente culturalista que rechaza la política y se dedica a recuperar la
memoria cultural de nuestro país distanciado del Estado, al que considera como algo
impuro, hasta la corriente más radicalizada que afirma que Bolivia solo es un país de
indios. En medio de estos dos extremos, ha habido un despertar, múltiples corrientes, y la
virtud de Evo es que ha representado la capacidad de articulación y de síntesis que encarna
la voluntad general de nación.
Evo viene del sindicalismo reivindicativo pero tiene la habilidad de articularse con los
regantes, con los fabriles, con los alteños, con los indígenas del altiplano en un proyecto
común. Mientras otros líderes se repliegan a lo suyo, el compañero Evo lo que hace es ver
las distintas fuerzas emergentes y buscar su ensamblaje y esa es una virtud muy personal
pero también una virtud histórica. Evo es una criatura de la Historia, al tiempo que la
historia ha sido modelada en parte, como dice Sartre, por el propio individuo. Y diría más.
Evo nos modela a todos con su liderazgo.
Entrevista al periodista Carlos Lozano:
"El origen de la guerrilla es político y tiene que ver con la deformación de la
democracia y la injusticia social existente en Colombia"
Gorka Castillo
Público
Carlos Lozano. Periodista. Su papel en el conflicto armado de Colombia es clave, ya
que actúa de mediador entre las FARC y el equipo internacional que negocia el
intercambio de rehenes por prisioneros.
La vida no es fácil en Colombia y menos para un periodista de pluma afilada como Carlos
Lozano (1948), amenazado de muerte por los grupos paramilitares por trabajar a favor del
canje humanitario entre el Gobierno y las FARC.
Usted acaba de revelar que ya se ha establecido contacto con las FARC para negociar el
canje humanitario. ¿Hay motivos para la esperanza?
Lo que se ha abierto es un canal de comunicación directo con el nuevo comandante de las
FARC, Alfonso Cano, con el cual se pretende que el contacto sea fluido en la medida de las
posibilidades. Es todo lo que hay. En este momento las posiciones de las partes son las
mismas, priman los inamovibles de un lado y de otro.
Mientras el Gobierno colombiano acepta su papel de mediador en el canje, le acusan de
mantener relaciones con las FARC. ¿Cómo maneja esta situación?
Bueno, el Gobierno está acosado por los escándalos de los nexos con el paramilitarismo y
de la compra de los votos de dos congresistas para lograr aprobar la reelección y por ello
necesita de otros escándalos para desviar la atención. En ese sentido pretende armar el
proceso de los supuestos nexos con las FARC, sindicando a quienes hemos venido
trabajando por el intercambio humanitario y la paz. Es como una especie de judicialización
de la labor humanitaria. Es algo absurdo.
¿Sigue siendo el despeje de las zonas de Florida y Pradera la única forma de que las FARC
acepten el canje?
Por el momento sí. Es un punto intocable para la guerrilla.
¿Se barajan otras posibilidades?
Nuestra labor es ver otras alternativas, que sean aceptadas por las FARC y el Gobierno.
¿Qué países trabajan para lograr este acuerdo?
Los actores principales son el Gobierno y las FARC, que son los llamados a negociar el
canje humanitario. Podrán contar con la ayuda de los países amigos, como Francia, Suiza y
España y quizás de Venezuela y Ecuador. EEUU debería participar porque tiene en su país
a dos guerrilleros, Simón Trinidad y Sonia, y las FARC tienen en su poder a tres personas
canjeables que son estadounidenses.
¿Cree que el Gobierno de Uribe está decidido a llegar a un acuerdo?
No creo. Uribe continúa privilegiando la vía militar. Su deseo es el rescate militar de los
retenidos por la guerrilla y la derrota militar de las FARC.
¿Y están las FARC en el inicio de su derrota militar, tal y como asegura el ministro de
Defensa, Juan Manuel Santos?
Creo que la posición del ministro es triunfalista, aunque es cierto que la guerrilla ha
recibido golpes muy fuertes. Pero su derrota está muy lejos de ser cierta, al contrario de los
cálculos pedantes que difunde el ministro Santos.
¿Puede haber cambios en las FARC tras el nombramiento de Alfonso Cano como sustituto
de Manuel Marulanda?
No creo que se abra una nueva etapa en la vida de las FARC. Su orientación política y
militar, de elaboración colectiva sigue siendo la misma, aunque Cano le dará un mayor
acento a la política. Esa es su trayectoria y formación.
Pero el desprestigio de la guerrilla es casi total. Sobre todo tras revelarse que el 50% de su
financiación procede del narcotráfico.
No se si será así, pero el origen de la guerrilla es político y tiene que ver con la deformación
de la democracia y la injusticia social existente en Colombia.
¿Qué opina de la petición realizada por los presidentes de Venezuela y Ecuador a las FARC
de que el tiempo de la lucha armada ha terminado?
Son apreciaciones que convocan a la reflexión y al debate, con mayor razón en Colombia,
en donde el conflicto de más de medio siglo tiene niveles altos de tragedia y de barbarie.
Todos coincidimos en que debe resolverse por la vía política del diálogo y la negociación.
¿Qué posibilidades de éxito tendría un proceso de paz basado en la inserción social de
guerrilleros sin delitos de sangre y en proyectos de desarrollo en las áreas más castigadas
por el conflicto?
La solución del conflicto está estrechamente ligada a los cambios políticos y sociales
democráticos y a que la izquierda tenga garantías de luchar democráticamente por el poder.
Una hipotética Comisión de la Verdad tendría que determinar la situación legal de los
guerrilleros, de paramilitares y de civiles involucrados en delitos de lesa humanidad.
¿Cree que la existencia de las FARC es utilizada por la derecha para neutralizar a
una alternativa de izquierda como puede ser el Polo?
La guerra sucia y el terrorismo de Estado en Colombia tienen que ver con la precariedad de
la democracia. La clase dominante se sostiene mediante el ejercicio de la violencia y el
desconocimiento de las libertades democráticas. Así ha sido siempre. Es la práctica de la
clase dominante colombiana.
¿Cuál es su impresión actual de la situación del conflicto colombiano?
El conflicto está maduro para resolverlo por la vía política de la negociación y el diálogo.
La vía militar está agotada. Insistir en ello es prolongar de manera indefinida una guerra
que degrada a la sociedad. Lo peor de todo esto es el paramilitarismo, principal soporte del
terrorismo de Estado. Así deben entenderlo el Estado y la guerrilla.
¿Qué papel puede desempeñar España?
España debe favorecer las salidas políticas, guardando distancias de ofrecer el respaldo
incondicional a un Gobierno ilegítimo, apoyado en el paramilitarismo
y el narcotráfico.
¿Cuál es la situación de derechos humanos en Colombia?
La violación de los derechos humanos es de alta intensidad. El actual Gobierno colombiano
menosprecia las libertades y los derechos de los ciudadanos, en medio de una polarización
tan alta que los opositores o los críticos son tratados como terroristas.
El presidente Uribe asegura que la económica colombiana se consolida.
El crecimiento económico favorece a los capitalistas, en particular al sector financiero que
especula con las tasas de interés. Mientras tanto aumenta la pobreza, el desempleo y los
graves problemas sociales del país. Uribe Vélez desprecia las necesidades de los más
pobres.
En España se contrapone a Chávez con Uribe. ¿Qué está sucediendo en América Latina?
En América Latina se fortalece la lucha por la democracia y la tendencia es favorable a los
cambios de izquierda y a distanciarse del poder de EEUU. Un caso como el de Uribe,
principal aliado de Bush en la región, es excepcional y no cuenta con el apoyo mayoritario
del continente.
Otro paso en la militarización
Raúl Zibechi
La Jornada
Por primera vez, las fuerzas armadas de Perú reconocieron que está prevista la construcción de una base
militar en Ayacucho, en el valle del río Apurímac, donde en mayo ingresaron 150 soldados del Comando Sur
de Estados Unidos como parte del operativo Nuevos Horizontes 2008. El presidente Alan García venía
negando esa posibilidad, pero el jefe del ejército, general Edwin Donayre, afirmó que existen conversaciones
con Washington para construir un "aeródromo militar" en la zona.
Desde hace algunos meses se especula acerca del lugar que elegirá el Comando Sur para sustituir el papel que
viene jugando la base de Manta (Ecuador), en funcionamiento desde 1999, cuyo contrato vence el año
próximo y, según anunció el presidente Rafael Correa, no será renovado. Días atrás Hugo Chávez mencionó
la Guajira, frontera entre Colombia y Venezuela, como lugar estratégico para construir la nueva base. Otras
fuentes estiman que el lugar elegido podría ser Iquitos, sobre el río Amazonas, donde las fuerzas armadas
estadunidenses ya tienen elementos operando. Pero existen indicios firmes de que puede ser Ayacucho.
El analista militar peruano Ricardo Soberón estima que "la selección de Ayacucho tiene que ver con el interés
de Estados Unidos de estar en el corazón de la zona más problemática en términos de seguridad que hay en el
país y porque está equidistante del conflicto armado en Colombia y de los conflictos políticos en Bolivia"
(Página 12, 17/6/08).
En suma, se trataría de una base situada a 600 kilómetros al sur de Lima, capaz de cubrir una amplia franja de
la región andina, a la que el Comando Sur concede la máxima importancia. Basta observar el mapa para
concluir que la base representa una clara amenza al control que Brasil pretende ejercer sobre la Amazonia, y
que con ella se estrecha el anillo de bases que conforma un cerco al único país de la región que puede
contrarrestar el dominio estadunidense.
La zona elegida presenta algunas particularidades: fue importante base de operaciones de Sendero Luminoso
y aún existen pequeños grupos de esa organización, es una región con cultivos de coca, y es uno de los
territorios campesinos más pobres del país. La forma de operar del Comando Sur recuerda lo sucedido en
Paraguay en los últimos años. Hace pocos meses el parlamento peruano aprobó el ingreso, de forma rotativa,
de un destacamento de militares estadunidenses durante cinco meses al departamento de Ayacucho, para
participar en el Ejercicio Combinado Conjunto de Acción Cívica Humanitaria Nuevos Horizontes 2008.
La labor de los uniformados, como confirmó en Paraguay en 2006 una misión de la Cada (Campaña por la
Desmilitarización de las Américas), consiste no sólo en ayuda "humanitaria", sino sobre todo en estudiar el
terreno física y socialmente, habituar a la población a la presencia de militares extranjeros y recoger datos
para establecer un sólido control social de los campesinos. La denominada "acción integral" que aplica el Plan
Colombia II, destinado a la "recuperación social del territorio", se inscribe en la misma estrategia.
En Perú, como quedó demostrado en las pasadas semanas, la acción del Comando Sur choca con la presencia
de una sociedad organizada. El Frente de Defensa del Pueblo de Ayacucho convocó una movilización y paro
regional para el 8 de julio, para exigir el retiro de las tropas estadunidenses. La congresista departamental
Elizabeth León apoyó el paro y señaló que la población es la última en enterarse de estas decisiones. Perú aún
está intentando cicatrizar las heridas de la terrible experiencia de la guerra sucia entre el ejército y Sendero,
que en la década de 1990 se cobró por lo menos 70 mil víctimas, dos terceras partes campesinos quechuas.
Pero la construcción de una nueva base militar debe situarse en los objetivos de largo plazo del Comando Sur,
que se ha convertido en la pieza maestra de la estrategia de Estados Unidos en América del Sur. En efecto, el
informe 2007 del Southern Command establece para los próximos 10 años "el plan estratégico más ambicioso
que haya concebido en años una agencia oficial estadunidense respecto a la región", según afirma Juan
Gabriel Tokatlian (Le Monde Diplomatique, Edición Cono Sur, junio 2008). Dicha estrategia supone tres
cambios de larga duración: de la contención se pasa a la primacía, que no tolera competidores; de la disuasión
a la guerra preventiva, y se sustituye la red de alianzas estables por coaliciones puntuales para cumplir
objetivos trazados unilateralmente por el Pentágono.
En los primeros seis meses de este año sucedieron varios hechos que permiten confirmar que la región se está
convirtiendo en escenario de un conflicto por la hegemonía y el control de los bienes comunes. El ataque al
campamento de las FARC en territorio ecuatoriano y la reactivación de la cuarta flota de Estados Unidos,
dirigida al Caribe, América Central y del Sur, son los datos más evidentes. El descubrimiento de importantes
yacimientos de petróleo en el litoral marítmo de Brasil termina de convertir a este país en una potencia del
siglo XXI. Por último, la creación de la Unasur (Unidad de Naciones Sudamericanas) y, sobre todo, la
propuesta de Lula de crear un Consejo de Defensa Sudamericano, ponen en negro sobre blanco lo que se está
jugando en la región.
Si recordamos que el Plan Colombia consiguió modificar el equilibrio militar de la región, emparejando al
ejército de tierra de ese país con el de Brasil, las cosas empiezan a cerrar. En algunos existe clara conciencia
de la necesidad de defenderse, de ahí los acuerdos firmados en febrero de 2008, entre Brasil y Argentina, para
la cooperación nuclear y de defensa. Pero la embestida imperial es muy fuerte, cuenta con aliados importantes
en la región andina, como Perú y Colombia, y, por encima de todo, hay varios gobiernos, como el de
Uruguay, que tienen más dudas que opciones por la región.
Fuente: lafogata.org
La nueva derecha. Algunas reflexiones sobre la carta abierta Nº 3 producida por un grupo de
intelectuales del campo de la cultura
Raúl Cerdeiras *
La idea general es que el grupo de intelectuales que firman esta serie de cartas parece que
recién han caído en la circunstancia de que la política ha sido secuestrada por la gestión.
Parece que no han leído o tomado en serio lo que desde hace varios años se viene
trabajando en pos de un pensar-hacer la política desde posiciones radicalmente diferentes
tanto de la experiencia de las luchas emancipadores del siglo pasado, como de la coartada
que la nueva derecha (que yo llamo nuevo sujeto reactivo) tendió cuando atenazó toda
política posible a la elección entre democracia o totalitarismo. Y en la década del 80 los
intelectuales argentinos en masa (pero no todos) se encarrilaron en la primera opción,
hicieron el mea culpa de su pasado subversivo y fueron premiados con el control casi total
del aparto cultural de UBA. Y, por lo que veo al leer esta carta (y también las otras 2), aún
siguen amarrados al horizonte de la "democracia" como la única forma de pensar-hacer la
política, perfectible, pero la menos mala.
Entre estos intentos del pasado quiero mencionar por ejemplo a la revista acontecimiento
(que lleva como subtítulo "revista para pensar la política") cuyo primer número apareció en
julio de 1991 y creo que a dos números por año hoy andan por el 35. También hay que
destacar la fuerte pero fugaz irrupción del colectivo 5Ø1 cuya declaración en 1999 acerca
de porqué invitaban el día del acto supremo de la democracia: el voto, a realizar una
asamblea pública de discusión política, es una pieza indispensable para todos los que
quieren realmente subvertir la política tal cual hoy circula. Y no sólo declaraciones sino
todo el sacudón que culmina en el 19/20 de diciembre del 2001, piquetes, asambleas,
tomas, marchas, etc.
Lo que el documento "descuida" es que esa nueva derecha ya está en marcha en América
Latina desde hace varios años, pero lo que aquí importa es que en nuestro país asume la
secuencia que recorren estos tres nombres: Dhualde-Lavagna-Kirchner. No quiero abundar
en argumentos puesto que el lector que lea la carta verá que la gestión de Kirchner y su
continuación en Cristina ofrece ejemplos más que elocuentes de ese vaciamiento de las
palabras en función de un objetivo: que el pueblo no se desmadre y que no crezca ninguna
experiencia política de un pensar-hacer emancipador por fuera del trípode del santuario
"democrático": los partidos, la representación y el Estado.
Pero quiero dar un ejemplo. En su momento Néstor Kirchner como presidente dijo en la
asamblea de la Naciones Unidas que él se consideraba "un hijo de las Madres de Plaza de
Mayo". Hace unos pocos días en el interior de esta feroz lucha entre dos billeteras que en
definitiva es el mal llamado "conflicto del campo contra el gobierno", la Presidenta decía
que su gobierno e históricamente el peronismo, jamás preconizó la lucha de clases, y que
estaba muy bien que los empresarios ganen y que quieran ganar más, pero ahora, ante esta
coyuntura excepcional debían solidarizarse con los que menos tienen. Si un hijo
desaparecido de las Madres escuchara estas palabras (nunca tan vaciadas de aquello por lo
que los luchadores del 60/70 dieron su vida) se levantaría y estoy seguro que haría dos
cosas: 1) darle una patada en el traste al matrimonio Kirchner; 2) escribir una carta abierta
sobre la nueva derecha diciendo del kirchnerismo muchas de las cosas que expresa la que
ahora estoy comentando respecto al discurso de los "ruralistas". Es un acierto lo que dice la
carta en muchos de sus pasajes, sobre todo en la descripción de los montajes mediáticos, la
invocación de citas de luchadores para cubrir intereses espurios.
Pero me pregunto ¿qué pasa con el gobierno? No puedo comprender como no se dice algo
que es tan evidente: el "campo"en tanto fuerza económica está casi solo. Quiero decir que
las fuerzas económicas más poderosas y reconcentradas de la economía están -con su obvia
neutralidad- bancando al gobierno que en esta coyuntura representan la otra billetera en la
que se apoya la Presidenta. Veamos: la banca y el capital financiero, se encuentra alineado
con el gobierno, habida cuenta que este paga puntualmente la deuda externa (y las
retenciones ayudan…); la Unión Industrial Argentina (de los Rocca para arriba…)cuando el
cuarteto ruralista fue en busca de su apoyo no se comprometieron y casi expresamente los
dejaron solos, puesto que la política económica activando el mercado interno, manteniendo
alto el dólar y bajo los salarios más los subsidios que reciben, los pone en carrera
competitiva con el exterior. Las Cámaras de Comercio: mutis; y ni que decir de los que
venden los productos que produce el "campo" la vieja y poderosísima casta exportadora
(Cargill, Dreyfus, Bunge, etc.) que denuncia Mario Cafiero desde años. También la
agroindustria y todos los laboratorios de agroquímicos (Monsanto, Bayer, etc.). Ni que
hablar de las concesiones mineras hechas a consorcios mundiales que destruyen la
naturaleza y envenenan a los pueblos del interior no dejando -en proporción a lo que se
llevan- nada redituable en términos de canon. E incluso los pools sojeros que
vertiginosamente se instalan para disputarles a los dueños de la tierra de la vieja oligarquía
la renta capitalista aplicada sobre la diferencial configurando una especie de patria sojera,
modelo patrocinado por Kirchner, pese al desastre que eso significa, no sólo para la
economía, sino por el aniquilamiento del suelo que acarrea, (suelo que la carta reclama que
su producción extraordinaria es un bien social) y que un histórico luchador dentro del
peronismo revolucionario, me refiero a Jorge E. Rulli, viene hace años denunciando, pero
su voz no es escuchada y su persona es perseguida por demandas judiciales.
Pues bien, ¿qué decir de este otro escenario? Este escenario, en que todas estas
personalidades a las espaldas de la Presidenta aplaudían cuando anunciaba el "destino"
social y comunitario del aumento de las retenciones, es también el de una derecha
exactamente igual a la "nueva" que se trata de denunciar. En ese momento, unas palabras
de Buzzi, el de la FAA, cayeron como un rayo y, según mi modo de ver, puso en la
superficie la esencia del problema. Dijo: "aplauden porque no se la sacan a ellos". Tiene
razón, y él aplaudiría también si la cosa fuera al revés…
Me inclinaría a pensar que estamos frente a una variante (la del "campo") en el interior de
una nueva derecha que nace con el Kirchnerismo. Hay que hacerse una pregunta que la
carta nunca se hace y me parece vital: ¿por qué la derecha tienen necesidad de renovarse?
La respuesta es sencilla: cuando empieza a tomar cuerpo una experiencia política
emancipativa, cuando la sociedad empieza a ser visitada por declaraciones, formas de
lucha, modos organizativos, etc., que se resisten a ser absorbidos en el interior del modelo
político vigente, cuando todas estas circunstancias amenazan inaugurar un nuevo presente
político emancipativo, lo establecido, es decir, el lazo social dominante, el Estado y la
política en la que se sostiene, reaccionan y nuevos sujetos, nuevas ideas empiezan a tomar
cuerpo teniendo como único objetivo apagar ese presente, reconocer el foco del incendio,
pero para apagarlo, no para soplar.
Nuestra América después de casi 15 años de padecer la ola neoliberal, ha producido un
sinfín de eclosiones de luchas, pensamientos, experiencias que buscan articularse en una
nueva política emancipativa, lo que llamo Otra política, así, con la "O" mayúscula por que
se trata de una ruptura con lo que se venía haciendo y pensando hasta ahora. Desde el
formidable Caracazo de 1989, los Sin Tierra, las rebeliones de las comunidades indígenas,
nuestra propia experiencia post-menemista: piqueteros, asambleas, etc. la conmoción que
produce la irrupción del zapatismo, etc. todo esto y una bastísima lista de muchas otras
cosas están abriendo los lugares privilegiados en donde es posible inventar Otra política de
emancipación. Ahora bien, la reacción no se hizo esperar y en las naciones de América
Latina sus sillones presidenciales se vieron ocupados por una oleada de gobiernos que
podríamos llamar "populares" y de "izquierda". Esa es la nueva derecha, ese es el nuevo
sujeto reactivo. Ahora no puedo explayarme, pero en el número 33/34 de la revista
acontecimiento intenté hacer un ejercicio de intervención política en Venezuela para poner
a prueba esta idea.
En todo caso aquí me conformo en exponer una simple constatación, y es que si se compara
la potencia activada por todas esas experiencias y las posibilidades que se abrían antes de
que asumiera la nueva derecha y la comparamos con la actualidad, resulta más que evidente
la manera en que se las ha aplanado, domesticado y encauzado dentro del orden. Por esa
razón en todos los lugares en donde queda aún alguna llama del incendio el obstáculo
principal a vencer no es la vieja derecha oligárquica de esos países sino el dispositivo
ideológico-político que llevo adelante la extinción de ese precario nuevo presente: el
chavismo y el PSUV en Venezuela; el PT en Brasil; y entre nosotros, D`Elía desde el poder
(y la vieja izquierda desde el llano) es una muestra emblemática de lo que era la experiencia
piquetera antes y después de Kirchner. Y siguen los ejemplos por Ecuador, Nicaragua, etc.
Afortunadamente ¡ya hay rebelión en la granja contra la nueva derecha! Pero también es
cierto, y hay que reconocerlo, que esta detención y retroceso marca lo incipiente y difícil
que es esta empresa de abrir nuevos caminos, y no cabe duda que debe ser materia de un
balance y reflexión lo más profunda posible, pero jamás las inmensas dificultades que hay
que vencer para abrir Otro camino emancipativo va a justificar que nos pongamos a
marchar por las autopistas del sistema. Porque por más que se renueve, la política de la
derecha no deja de ser un cadáver del que no se puede esperar nada, en cambio, por
incipiente que sean estos múltiples síntomas de que Otra política es posible, tiene la
grandeza de ser una posibilidad, una esperanza, y sabemos que las autopistas están hechas
para que no se abran nuevos caminos.
Quiero hacer una última consideración antes de intentar alguna reflexión sobre la naturaleza
de la nueva derecha que denuncia la tercera carta de los intelectuales de la cultura y otras
actividades afines. ¿Hacia adónde apunta esta nueva derecha ya en el poder que llega
incluso a manipular asquerosamente los viejos -y ya agotados- oropeles del socialismo
como hace Chávez? Sabemos que intentan apagar un nuevo presente político-emancipativo,
pero, y al mismo tiempo, realizan la tarea de desarrollar e integrar la economía de sus
países en el mercado mundial capitalista, tratan de hacerlos lo más competitivos posibles
para dar batalla en el interior de la maquinaria infernal de la red de producción del capital
por fin globalizado. Esta expansión global se realiza simultáneamente con el
derrumbamiento de los Estados llamados obreros o socialistas. A grandes rasgos podemos
decir que los países del bloque socialista eligieron dos vías diferentes para desarrollarse e
incluirse plenamente: la vía "democrática" o la de una fuerte dictadura estatal. La primera
es el camino que eligió la antigua Unión Soviética y los países del Este europeo, la segunda
la que recorre China y Vietnam. Todo indica que Cuba se va a adscribir, viendo el éxito que
tiene en cuanto a su objetivo, a la vía de los chinos. Ya vimos que elegir entre la
democracia y el totalitarismo era la imposición del mundo Occidental para toda la
humanidad y hoy constatamos que ambos son compatibles con el secuestro que la
economía capitalista ha realizado de la política para ponerla a su servicio. Están los
caminos mixtos como creo que es el de Venezuela en donde Chávez balancea un
autoritarismo personalista, vertical y casi absoluto, rodeado de una burocracia dura como
una roca, con una articulación con las formas democráticas, como elecciones,
representantes, plebiscitos, etc. Todo indica que una fuerte intervención del Estado es
necesaria en países de bajo desarrollo económico y que las democracias son más operativas
cuando el trago amargo y doloroso que es el período de la reconversión ya está realizado.
Lo que finalmente quiero subrayar es que la política ha sido tragada por las exigencias de la
maquinaria y la lógica económica del mercado, y cualquiera sea la fachada que se use no
hay país (¿y Africa?) que no tenga como meta (subjetiva u objetiva) integrarse en el
capitalismo mundial, sea por las formas políticas que sean, armando las alianzas o bloque
económicos que se quiera, etc. Todo eso implica asumir las consecuencias fatales que toda
la barbarie capitalista del lucro y el consumo librada a su propia dinámica es capaz de
producir. Que en este contexto alguien hable de "inclusión social" parece un chiste de mal
gusto.
Para terminar, ¿qué pensar de esta "nueva derecha" que nos presenta la Carta Abierta/ 3?
Creo que todos los gobiernos que estrenan la ideología populista y/o socialista para realizar
la tarea de una nueva derecha que busca extinguir ese nuevo presente que siempre resucita
toda nueva idea liberadora, terminan tarde o temprano abriéndole un amplio canal a la
derecha que ellos juran combatir. Es una derecha que se licua como el mercado, es volátil
como ninguna, le habla al ciudadano como si fuera un consumidor, reivindica la libertad de
expresión, es decir, la libre circulación de la opinión y el sentido común que los medios
luego amplifican, devota de la democracia y la participación porque ya ve que la
intervención del Estado es inútil toda vez que ya no hay rastros activos de ese presente
nuevo que tan bien apagó la ahora "desactualizada" nueva derecha que en su momento
aceptó. Destruye toda idea de que haya otra cosa en la política que no sea la gestión de
negocios, repudian la palabra pensamiento político. Para ella jamás la política podría ser un
pensamiento. Enarbolan la consigna fascista: la única verdad es la realidad. Por cierto es
un rejuntado variopinto típico de la posmodernidad en cuanto a su capacidad de disolver en
el plano del pensamiento toda diferencia con capacidad de inscribir algún principio, de la
misma manera que el rasero del mercado iguala a todas las particularidades culturales.
Llevan hasta el final la ideología de los derechos humanos porque (lo sepan o no) esa es
una ideología acorde con el capitalismo contemporáneo que pone en el centro al Hombre
interpretado desde dos variantes reaccionarias: la de víctima y la de un ser puramente
biológico. Personalmente lo dije hace 13 años en un trabajo publicado en la revista
acontecimiento número 10 titulado Contra la Memoria, allí, refiriéndome al tema de los
derechos humanos decía: "Si bajo su manto hoy se intentan cobijar posiciones
«progresistas», llenas de «buenas intenciones», no es sino una mueca siniestra del destino
que producirá -por encima de la buena conciencia de sus sostenedores- el reforzamiento de
todo aquello que supuestamente se quiere impedir". No hay que asustarse que esa ideología
les calce de alguna manera y ver como ese siniestro personaje que es De Angelis la invoca
impunemente.
Si se analiza más de cerca la cuestión se podrá comprobar que tanto el kirchnerismo como
esta variación interna tienen muchos puntos en común. No puede ser de otra manera sobre
todo si se piensa que la verdadera nueva derecha es la que hoy nos gobierna y este
exabrupto del la vieja y desgastada oligarquía remozada con un lenguaje acorde a sus
necesidades coyunturales, es la señal de que el fuego se ha controlado, aquél nuevo
presente tibiamente anunciado está como apagado, ¡es la hora de repartir riquezas! Es el
momento en que el capitalismo muestra su peor (¿tiene otro?) rostro: la lucha descarnada
por el interés, el lucro, el goce de los cuerpos, "¡no me metan la mano el bolsillo!".
Nuevamente, Buzzi tiene razón: aplauden porque no se la sacan a ellos.
¿Qué hacer, entonces? Mi propuesta es intervenir en la coyuntura pero para trabajar en la
invención de Otra política. Corrernos lo más que se pueda, es decir, todo lo que lo permitan
las experiencias y pensamientos acumulados hasta ahora, para abrir otra mirada que la que
nos quieren presentar. Tratar de demostrar que esta es una operación en la que el pueblo no
interviene ni se expresa, ni se reúne, ni declara, y que es necesario hacer todo lo que se
pueda para que esto suceda. Todos aquellos que están convencidos de que algo nuevo
tenemos que hacer nacer, empeñarnos en sostener y difundir nuestras experiencias y los
nuevos puntos de partida sobre los que abrir caminos quizás insospechados para los mismos
que los promueven. Abandonar definitivamente la política del mal menor, de estar
constantemente eligiendo la mejor basura que nos tiran. Desmantelar la idea de que
nosotros somos débiles, que no somos nadie, y afirmar que la potencia trabaja de nuestro
lado, que los políticamente débiles son ellos y basta para evidenciarlo con el espectáculo
televisivo de ese circo de impotencia que nos brindan a diario.
Un párrafo final para los luchadores peronistas que han puesto su vida en un pensamiento y
una acción en la que afirmaban su convencimiento del potencial liberador que encerraba el
peronismo. Hay que ser un necio para no reconocer que la historia política de las luchas
emancipativas de nuestro país tuvo en ese movimiento un lugar privilegiado en el que
también se debatieron los grandes temas de la emancipación de los años sesenta, y en su
nombre se llevaron adelante gloriosas jornadas de lucha y resistencia. Pero ese ciclo ha
concluido junto al acabamiento de la experiencia y el pensamiento de lo que fue el ideario
socialista. Deben hacer un sincero balance de sus luchas y decirles a estos payasos que
copan la Plaza de Mayo, junto con custodios de dudosa reputación, que todo ese aparato de
funcionarios como Moreno, De Vidio, Kirchner, etc. nada tienen que ver con sus luchas
históricas. El pueblo está ausente y su lugar lo ocupa la resaca que dirige un partido
llamado justicialista…
Los que venimos de la experiencia política fundada por Marx, Lenin, Mao…y yo vengo de
esa historia, hemos debido romper con la izquierda vernácula (en todas sus variantes)
siempre ubicada en el lugar incorrecto en los momentos decisivos de nuestra vida política,
y hace años que empezamos a hacer el trabajo (especialmente en la revista acontecimiento)
de desmontar los dispositivos teóricos y políticos que puedan explicarnos su agotamiento y
esterilidad actual. Pero tampoco vamos a aceptar que ese balance se lo haga desde la
derecha, puesto que estamos convencidos de que todo proyecto emancipativo debe
reconocer que las luchas de la humanidad sostenidas en la idea del comunismo serán un
punto de renacimiento eterno en cada singularidad política liberadora a la que se convoque
a los pueblos.
De la misma manera quiero decirle a los compañeros peronistas que se dicen
revolucionarios, que también emprendan el camino que consideren adecuado para romper
con ese lastre que hoy produce (concientemente o no) un sólo efecto: reproducir un sistema
y abortar a una nueva generación en la búsqueda de un nuevo horizonte emancipativo.
Deben plantearse que hay ideas políticas propias de los populismos del siglo pasado que
hoy son un lastre que no producen nada. Que hoy es un culto a los cadáveres políticos
revivir las oposiciones del estilo "oligarquía contra el pueblo" para justificar un apoyo al
gobierno. Esa maniobra se la acepto como táctica al gobierno pero no a un peronista de la
emancipación. Y quizás, en esa dirección de revisar el pasado, como cierre de una historia y
como un homenaje de sinceridad política a esa figura extraordinaria atravesada tanto por la
grandeza como por las miserias de su época, podrían salir a la calle para gritarle a la
Presidenta: no hinchen más las bolas ¡Evita hay una sola¡
* director de la revista: acontecimiento)
Récord de gasto militar en América del Sur Jun-17-08 - por Rosendo Fraga
El SIPRI con sede en Estocolmo -que junto con el IISS de Londres son las dos entidades más reconocidas a nivel mundial por sus estimaciones acerca de gasto, equipamiento y balance militar-
, ha informado hace días que lo que gasta el mundo en armamentos aumentó significativamente durante 2007. En el caso de los 12 países de América del Sur, que desde la reciente Cumbre de Presidentes de UNASUR realizada en Brasilia, buscan constituir un Consejo de Defensa regional, el Balance Militar para la región que realiza el Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría, anticipa que durante el año 2008, el incremento año contra año es del 25%. Se trata de un aumento record en las últimas décadas. El gasto en defensa de los países de América del Sur alcanzará así este año 50.000 millones de dólares, frente a los 39.961 de 2007. Se trata de una tendencia general de los países sudamericanos, dado que el gasto militar aumenta 34% en Paraguay, 32% en Brasil, 29% en Venezuela, 24% en Bolivia, 22% en el caso de Chile y 19% en Perú y Ecuador. Los incrementos anuales más bajos se dan en los casos de Argentina con 18%, Colombia 13% y Uruguay 4%. Lógicamente, estos porcentajes dan sólo una idea general, ya que el reequipamiento es un rubro relevante del incremento en países como Brasil y Venezuela, mientras que en otros como Argentina, el aumento se concentra más en el rubro personal (salarios y retiros). Cabe señalar que de los 50.000 millones de dólares que se destinan a defensa en América del Sur, 70,18% es para personal, 14,23% va a bienes y servicios, 9,81% a inversiones -donde están las compras de nuevos armamentos- y 5,78% a otros gastos. En cuanto al monto total del gasto sudamericano -algo más de la mitad-, el 55% con 27.540 millones de dólares corresponde al Brasil, que por población, territorio y PBI es aproximadamente la mitad de los 12 países de la región. Sigue Colombia con 6.746, cifra que es originada en el despliegue dedicado al combate con las FARC; el tercero es Chile con 5.395 -el país todavía cuenta con fondos destinados a reequipamiento militar provenientes de las exportaciones de cobre-; y el cuarto es Venezuela con 3.321, país que da al rubro militar prioridad política. Como porcentaje sobre el total del presupuesto nacional, la lectura puede ser diferente. En Brasil en 2007 el gasto en defensa representaba el 2,68% y crece al 3,44% y en Venezuela pasa del 4,79% al 5,18%. Como porcentaje del presupuesto total, los países de América del Sur que destinan más a defensa son Chile, Colombia y Ecuador. Otra lectura que puede realizarse es lo que significa el gasto militar sobre el PBI. Colombia es el más alto, dedicando el 3,34%, Chile destina 2,91% (que se eleva al 3,73% al incluirse los fondos provenientes de la Ley del Cobre). Ecuador dedica 2,01%, Brasil 1,70%, Uruguay 1,56%, Paraguay y Bolivia 1,55%, Venezuela 1% y Argentina sólo 0,87%. Es así como el gasto militar puede tener distintas lecturas si se analiza el incremento año contra año, el volumen de fondos destinados o el porcentaje que representa sobre el total del presupuesto o el PBI. Pero la otra referencia es la comparación con otras regiones del mundo.
América del Sur destina al gasto en defensa el 1,74% de su PBI y dicho porcentaje es el menor de mundo en términos regionales, por debajo de los países de la OTAN (EEUU, Canadá y Europa), Rusia y Asia Central Lejano y Cercano Oriente y África. En cuanto al monto, los 50.000 millones de dólares que gasta en Defensa la región, equivalen al 9% de lo destinado por EEUU, lo que resulta lógico dados los compromisos estratégicos de la primera potencia militar del mundo. Pero es el 81% de lo que gasta Francia y el 81% del Reino Unido y el 82% del gasto militar de China. El gasto en defensa sudamericano es aproximadamente un quinto más grande que los de Japón, Alemania y Rusia respectivamente, es el doble de India -cuyo gasto de defensa es casi igual al de Brasil- y los de Canadá y España son aproximadamente un tercio del de América del Sur. En conclusión, si bien el incremento del gasto militar de América del Sur es record en 2008 respecto a 2007 con relación al último cuarto de siglo, el aumento se inscribe en una tendencia mundial en la misma dirección -que puede ser acentuada por tensiones dentro de la región-, pero sigue siendo el más bajo en términos de porcentaje del PBI con relación al resto de las regiones del mundo.
Desde el año 1986 han ocurrido 77 accidentes con aeronaves militares
Abr-07-08 - por el CENM
Un trabajo de investigación realizado por Rodrigo Mallea, investigador del Centro
de Estudios Nueva Mayoría, destaca que con la reciente caída de un avión de la
Armada en Punta Indio, se eleva a 77 la cantidad de accidentes ocurridos con aeronaves militares desde 1986.
De acuerdo al estudio, la evolución anual muestra que en 1986 y 1987 tuvieron lugar tres
en cada año, en 1988 fueron siete, en 1989 y 1990 cinco en cada caso, en 1992 fueron
sólo dos, en 1993 tuvo lugar el "récord" con nueve accidentes en el año, en 1994 nada más
que uno, en 1995 se registraron cinco, en 1996 siete y en 1997 y 1999 sólo uno en cada
caso. En 2000 hubieron cinco y en 2001 seis, en 2002 ninguno, mientras que en 2003 uno,
en 2004 se registraron tres, y en 2005 y 2006 hubo cuatro. En el año 2007 se registraron
cuatro, y en lo que va del año 2008 se ha registrado uno. Cabe señalar que en los años
1991, 1998 y 2002, no tuvieron lugar accidentes en aeronaves de las Fuerzas Armadas y de Seguridad que hayan trascendido públicamente.
(*) Comprende hasta el 7 de abril de 2008.
Hasta 1996, la Gendarmería y la Prefectura dependían del Ministerio de Defensa.
Fuente: información pública difundida en los diarios de circulación nacional. Centro de Estudios Nueva Mayoría
El primer accidente tuvo lugar en mayo de 1986 cuando se estrelló un avión de la Armada
-cerca de la Isla Grande de Tierra del Fuego- durante un ejercicio nocturno, en junio
explotó en vuelo un avión Sabre F86 de la Fuerza Aérea y en agosto del mismo año cayó un
helicóptero Lama también de la Fuerza Aérea en la cordillera, durante un vuelo de instrucción.
En 1987, en el mes de junio, un avión Mentor de la Escuela de Aviación Militar se estrelló
durante un vuelo de entrenamiento en Córdoba y en ese mismo mes, un cazabombardero
tipo Dagger se precipitó a tierra próximo a Tandil, en la provincia de Buenos Aires. Dos
meses después, en agosto, un avión del tipo Mirage III de la VIII Brigada Aérea con asiento en Moreno, se estrelló en Gualeguaychú.
Al año siguiente, en 1988, los accidentes se incrementaron, ya que cayó en junio en Río
Gallegos un helicóptero Bell UH1-H del Ejército destacado en la Brigada de Infantería XI, en
julio cayó un avión Mirage de la Fuerza Aérea muriendo el piloto en Río Cuarto, provincia de
Córdoba, en agosto cayó también en Córdoba un avión Tucano EMB 312, en setiembre cayó
en San Martín de los Andes otro helicóptero Lama del Ejército, en octubre cayó en Río
Negro un avión Douglas A4K de la Fuerza Aérea y en diciembre cayó en Córdoba otro avión
del tipo Tucano EMB 312 de la Fuerza Aérea y un avión Aeromachi de la Armada en
Gualeguaychú.
En 1989, en febrero, se accidentó un avión Mentor de la Fuerza Aérea muriendo un alférez,
en marzo cayó un helicóptero en la frontera norte en la provincia de Jujuy, en ese mismo
mes cayó en Río Gallegos un avión cazabombardero del tipo Dagger de la Fuerza Aérea, en
junio cae en Mendoza un caza del tipo Mirage III y en diciembre un avión del tipo Super Etendard de la Armada.
Durante 1990, cayó en enero un avión Pucará en Bella Vista (Chubut), en mayo cae otro
avión de entrenamiento Tucano EMB 312 de la Fuerza Aérea en Córdoba, muriendo un
oficial, en agosto cae otro avión Pucará de la Fuerza Aérea en Reconquista (Santa Fe), y en
noviembre efectuó un aterrizaje de emergencia un helicóptero Alouette de la Armada y el
mismo mes se estrelló un avión Moranne Saulnier de la Fuerza Aérea en Mendoza.
En 1991, no se difundieron por lo menos públicamente accidentes de aeronaves de las
Fuerzas Armadas, y durante 1992, en septiembre, cayó en Gran Bretaña un avión Pampa
IA-63 que participaba en una exhibición de material aeronáutico, muriendo sus pilotos y el
mismo año cayó un avión de reconocimiento de la Gendarmería Nacional que patrullaba la provincia de Formosa.
Durante 1993, se registran tres accidentes en febrero: cae en la Antártida un helicóptero
de la Fuerza Aérea que abastecía las bases militares, en el norte del país se estrella un
helicóptero del Ejército del tipo Bell UH1-H, muriendo el personal que lo piloteaba y dos
médicos, y un tercer helicóptero, de la Gendarmería Nacional, se accidenta falleciendo sus
cuatro tripulantes. Entre los meses de agosto y septiembre, nuevamente se suceden 3
accidentes más: el de un helicóptero Chinook de la Fuerza Aérea en Santa Fe; el de un
avión Mentor de la Escuela de Aviación Militar que no pudo ser controlado en un aterrizaje
forzoso, y el del helicóptero Chinook que trasladaba al Presidente durante su visita a
Formosa. En octubre, un avión Guaraní de la Fuerza Aérea, se estrella en Entre Ríos,
muriendo todos sus tripulantes. Ya en noviembre, dos aeronaves del Ejército se accidentan
ocasionando numerosas víctimas. El 12, durante un ejercicio militar en proximidades de la
ciudad de Azul, en la provincia de Buenos Aires, un helicóptero Puma se precipita a tierra
incendiándose. Hubo un muerto y 3 heridos. Posteriormente, el 21, un monomotor Cessna
se estrella en cercanías de la localidad salteña de Vaquería, falleciendo sus cuatro tripulantes.
Durante 1994, se registra un solo accidente el 14 de diciembre cuando un avión Pampa
2000 se estrella en las afueras de la ciudad de Mendoza cuando realizaba un vuelo de
entrenamiento. En el accidente pierden la vida sus dos ocupantes un capital y un suboficial.
En 1995, el 10 de marzo se produce el primer accidente cuando un cazabombardero
Skyhawk A4C se incendia en pleno vuelo y posteriormente se estrella en las cercanías de la
ciudad de San Luis. Si bien el piloto logra eyectarse fallece al fallar la apertura del
paracaídas. El 15 de septiembre, durante la realización de ejercicios militares, cae un
Mirage de la Fuerza Aérea. Tres semanas después, el 7 de octubre, una nave bimotor de la
Gendarmería en la provincia de Buenos Aires y mueren cuatro personas. El 5 de noviembre
del mismo año, también en la provincia de Buenos Aires, cae un avión de entrenamiento
del Instituto Nacional de Aviación Civil, y tres días después, cae un avión Fokker F-27, con 55 personas en la zona de Altas Cumbres, perteneciente a la Fuerza Aérea.
En 1996, el 27 de marzo sufrió un aterrizaje de emergencia un avión FIAT G-222 del
Ejército, en Santa Cruz, cuando llevaba a bordo 56 pasajeros. Luego, el 11 de abril se
estrelló contra el cerro La Horqueta próximo a Río Gallegos, un helicóptero de la
Gendarmería, falleciendo 4 gendarmes. El 14 de mayo, se estrelló en Malagueño, provincia
de Córdoba, un B-45 Mentor de la Fuerza Aérea, falleciendo sus tripulantes. Más tarde, el 4
de junio, se estrelló un helicóptero de la Fuerza Aérea en la provincia de Mendoza,
falleciendo sus dos tripulantes. El 8 de octubre, cayó en el Campo Argentino de Polo en
Buenos Aires, un helicóptero del Ejército Puma SA 300, falleciendo 10 personas y quedando
heridas otras 5. El 23 de octubre, tuvo lugar el accidente del avión Boeing 707 de carga de la Fuerza Aérea en Ezeiza, en el que se registraron dos muertos y siete heridos graves.
En 1997, se registró un único accidente, el 10 de diciembre, al estrellarse un Douglas A4C
de la Fuerza Aérea en la localidad de Villa Mercedes, en San Luis, donde el piloto logró
salvar su vida al eyectarse de la aeronave.
En el año 1998 no se registran accidentes de aeronaves y 1999 encontramos uno en San
Juan cuando cae un avión Pampa debido al choque de un pájaro en una turbina. Sus dos
ocupantes un oficial argentino y un instructor norteamericano logran eyectarse y salvar su
vida.
En 2000, tuvieron lugar 5 accidentes. El 23 de febrero, se precipitó a tierra un Cesna 402
de la Gendarmería, a 30 kilómetros de la Capital de Salta, oportunidad en la que fallecen
dos efectivos de la fuerza y dos civiles. En marzo, se accidenta un helicóptero de la
Prefectura, en Puerto Deseado, en momentos que realizaba maniobras de rescate de un
buque pesquero, cuyo saldo fue de 2 muertos. El 8 de agosto, se estrella un Mirage III de
la Fuerza Aérea en Tandil, donde el piloto salva su vida al eyectarse. El 20 de setiembre, se
despista un Rockwell de la Fuerza Aérea, cuando aterrizaba en el aeroparque
metropolitano. Por último, en noviembre, cayó a tierra un Mirage IV de la Fuerza Aérea en Tandil, cuyo piloto se salva al eyectarse de la aeronave.
Durante 2001, se registraron 6 accidentes. El 23 de enero cae un helicóptero Bell UH1H,
en Bariloche, en momentos que realizaba maniobras de entrenamiento, resultando dos
efectivos heridos. El 7 de febrero, un Aero-Commander T 144 perteneciente a la Fuerza
Aérea, se precipita a tierra en la localidad de Moreno, dejando un saldo de dos pilotos
muertos de la fuerza. El 17 de mayo, en Mendoza se precipita a tierra al poco tiempo de
despegar un Fokker F-27, falleciendo sus 5 tripulantes. El 18 de setiembre, se accidenta un
helicóptero en Mendoza, y al día siguiente, se estrella un Mentor B-45, en Córdoba, cuando
realizaba un vuelo de exhibición, muriendo sus dos tripulantes.
En el año 2002, no se conocieron -al menos públicamente- accidentes de aeronaves militares de las Fuerzas Armadas y de Seguridad.
En el primer bimestre de 2003, tuvo lugar uno, cuando el 3 de febrero se estrella un avión
Sukoi-29, perteneciente a la Fuerza Aérea, en Mendoza. Cabe señalar, que la aeronave se
encontraba realizando un vuelo de habilitación, para renovar las licencias de los dos pilotos que lo tripulaban, quienes fallecieron en el accidente.
El 21 de junio de 2004 un Mirage de la Fuerza Aérea cae cuando realizaba un vuelo
integrando un grupo de cuatro naves que se dirigían desde Tandil hacia el aeropuerto de las
Higueras para participar en ejercicios militares. El piloto logra eyectarse y salvar su vida. El
18 de noviembre un helicóptero de la Fuerza Aérea (Bell, UH1H) se estrelló, muriendo sus
cuarto tripulantes, a 40 km. de Bariloche. El 10 de diciembre un piloto de la Fuerza Aérea
muere al caer un Pampa IA-63 cuando realizaba un vuelo de exhibición ante un grupo de empresarios chinos.
En 2005 se produjeron cuatro accidentes. El 6 de julio cae en San Luis un avión de
combate Douglas-A4-AR y muere el piloto. El 24 de agosto un piloto de la Fuerza Aérea
logra eyectarse cuando cae el avión A4-AR que piloteaba al sur de Río Cuarto y veinticuatro
horas después un helicóptero Hughs 500-H36 perteneciente a la Escuela de Aviación Militar
de Córdoba se estrella y mueren sus cuatro ocupantes. El 23 de noviembre cerca de Santa
Rosa, La Pampa, un desperfecto obliga a aterrizar a un helicóptero H-09 perteneciente a la
Fuerza Aérea.
Un año más tarde también se produjeron 4 siniestros. El 7 de marzo de 2006 un Tucano
Emb 312 de la Fuerza Aérea tuvo un aterrizaje de emergencia sin consecuencias para sus
dos tripulantes. Dos días más tarde, el 9 de marzo, seis militares argentinos murieron al
estrellarse un avión -un Learjet Tango 21 de la Fuerza Aérea- en el que viajaban a unos 20
kilómetros de la ciudad boliviana de La Paz, luego de que la aeronave despegara para
emprender el regreso hacia la Argentina en un viaje oficial de ayuda humanitaria. En el
mismo mes, en el día 16, hubo dos heridos tras accidentarse un Pucará de la Fuerza Aérea
en Santa Fe. El 13 de septiembre mueren dos tripulantes del Grumman OV-1D Mohawk del Ejército al precipitarse a tierra mientras realizaba tareas de reconocimiento.
En 2007, han tenido lugar cuatro accidentes con aeronaves militares. El 16 de marzo cayó
un helicóptero Bell UH1H de la Armada en Viedma, donde no se registraron heridos. Se
registró otro accidente con un avión Mirage de la Fuerza Aérea, el 1° de mayo en Tandil,
donde el piloto perdió su vida en el marco de la conmemoración del 25° aniversario del
bautismo de fuego de la Fuerza Aérea. En agosto, una aeronave de la Fuerza Aérea quedó
varada por más de 20 días en el Glaciar La Pampa del Colchón (cercano a la base antártica
esperanza), imposibilitada de despegar porque se había dañado la rueda nariz del tren de
aterrizaje. El 21 de agosto la Fuerza Aérea chilena socorrió a la aeronave. Finalmente, el 24
de octubre, como se mencionó precedentemente, tuvo lugar un accidente con un avión
MC32 Aemacchi de la Armada, en Punta Indio -provincia de Buenos Aires-, cuando murió un piloto y otro resultó ileso.
En lo que va de 2008, se ha registrado un accidente en Comodoro Rivadavia (Chubut)
correspondiente a la Fuerza Aérea, tratándose de un Avión Twin Otter que sufrió varios
daños al efectuar un aterrizaje de emergencia en un vuelo ordenado por la IX Brigada
Aérea. No obstante, ninguno de los 4 tripulantes resultó herido.
Si se tienen en cuenta los accidentes por fuerza, se observa que, con el reciente, ya son
6 los producidos con aeronaves de la Armada desde 1986. Sin embargo, la Fuerza Aérea es
la que registra la mayor cantidad de los mismos desde el periodo mencionado, con un total
de 56, se ubica luego el Ejército (9), seguido por la Armada (6) y la Gendarmería (5). La Prefectura sólo ha tenido 1 accidente con un helicóptero.
Cantidad de accidentes de aeronaves militares por fuerza (1986-2008*)
Fuerza Accidentes %
Fuerza Aérea 56 73
Ejército 9 12
Gendarmería 5 7
Armada 6 8
Prefectura 1 1
Total 77 100
(*) Comprende hasta el 7 de abril de 2008.
Hasta 1996, la Gendarmería y la Prefectura dependían del Ministerio de Defensa.
Fuente: información pública difundida en los diarios de circulación nacional. Centro de Estudios Nueva Mayoría
Las conclusiones del estudio consignan:
a. El accidente del avión de la Fuerza Aérea ocurrido en Comodoro Rivadavia, es el
número 77 que sufre una aeronave militar desde 1986 en la Argentina.
b. Representa también el 56º accidente de una aeronave de la Fuerza Aérea desde 1986.
c. La falta de mantenimiento de las aeronaves, el agotamiento del material y la
disminución del adiestramiento de los pilotos por la reducción de las horas de vuelo,
surgen como las explicaciones probables de estos accidentes.
La expansión de la Doctrina Bush en Sudamérica Perú adopta el concepto de acción militar preventiva
Por Sebastián Pellegrino | Desde la Redacción de APM Recientes medidas tomadas por el gobierno de Alan García en materia de Seguridad y Defensa señalan la creciente gravitación de la Casa Blanca en los procesos políticos y conflictos de la región. El complejo escenario político militar andino, con epicentro en Colombia y sus diversos focos de tensión con los Gobiernos vecinos y las Fuerzas Armadas revolucionarias de Colombia (FARC), se ha convertido en el punto de partida del nuevo trazado estratégico de la política exterior de Estados Unidos hacia la región. Como ya adelantara APM, en los últimos meses aumentó notablemente la presencia de militares estadounidenses en distintas áreas del continente. También se realizaron denuncias contra el Embajador de Washington en Bolivia por su supuesta participación en el proceso secesionista del departamento de Santa Cruz. El ataque al campamento del número 2 de las FARC Raúl Reyes en territorio ecuatoriano, llevado a cabo en marzo pasado por tropas del Ejército colombiano, se constituyó en la puesta en marcha de la llamada Doctrina Uribe: una versión importada de la justificación ideológica de la administración Bush para las denominadas “Guerra Preventiva” y “lucha global contra el terrorismo”. En el proceso de regionalización del conflicto andino, favorable a los intereses de la Casa Blanca que busca frenar los intentos de transformación y de integración impulsados por varios Gobiernos latinoamericanos, se ha incorporado un nuevo actor colectivo: el Gobierno de Perú. En los últimos días, fuentes del Ejército peruano adelantaron la posibilidad de que la base militar estadounidense en Manta sea relocalizada en la provincia de Ayacucho, a 575 kilómetros de Lima. En dicha provincia se desarrolló el epicentro del conflicto interno que durante los años 80 y parte de los 90 se desató entre la agrupación maoísta Sendero Luminoso y las fuerzas de seguridad nacional de Perú, que aún continúa sin resolverse. A pesar de haber sido negado el presunto traslado de la base por el presidente Alan García, el Jefe del Ejército peruano, General Edwin Donayre, afirmó: “Efectivamente estamos en conversaciones (con Estados Unidos) para construir un aeropuerto militar”. Según fuentes consultadas, la negociación del Ejército peruano con el Pentágono estaría vinculada con la eventual firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) que ya fue suscripto por Estados Unidos y la actual administración limeña en 2007. Por otra parte, durante una reunión celebrada en Bogotá el pasado 3 de junio entre el Ministro de Defensa colombiano Juan Manuel Santos y su par peruano Ántero Flores Aráoz acordaron reforzar
la seguridad fronteriza e "impulsar la cooperación binacional en las áreas de Defensa y en las acciones de lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y el crimen transnacional organizado". El encuentro se produjo a partir de presuntos nuevos documentos informáticos hallados en las computadoras del campamento de Raúl Reyes, que vincularían a las FARC con los grupos guerrilleros peruanos Tupac Amarú y Sendero Luminoso. Sobre las polémicas computadoras, novedosa fuente de inagotables argumentos para los objetivos políticos del presidente Uribe, es preciso realizar algunas observaciones. En principio, no sólo es injustificable el modo en que las presuntas pruebas fueron “halladas”, sino que el Gobierno colombiano es juez y parte en el manejo y divulgación de los contenidos de los archivos. Tanto es así, que la revisión de los materiales informáticos por parte de la organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), demostró que tales elementos fueron “revisados” 48.055 veces por los investigadores colombianos antes de ser ofrecidos a la entidad. El otro dato curioso surge a partir del análisis sobre el momento en que las distintas evidencias se fueron presentando al conocimiento público: los presuntos correos-e que vincularían a las FARC con una facción del Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA), denominada ‘Venceremos’, fueron divulgados por medios de comunicación peruanos días antes de la cumbre entre los ministros de Defensa de Colombia y Perú. De ese encuentro, una de las conclusiones centrales fue el refuerzo de la seguridad fronteriza bilateral ante lo que los funcionarios consideraron una posible expansión de la violencia “terrorista” dentro el Estado peruano. Lo cierto es que la Doctrina Uribe, guiada y respaldada por el gobierno de George W. Bush, consiguió en los últimos meses una concreta y decidida alineación de la administración peruana con los planes estadounidenses de militarización latinoamericana e intervención extraterritorial sobre la soberanía de otros países que protejan “agrupaciones terroristas”. Tales son los objetivos primordiales de la actual política exterior de la Casa Blanca. En este sentido, resulta interesante considerar la siguiente información - divulgada días atrás- relacionada con la criminalización de agrupaciones enmarcadas en la categoría “terroristas” según el criterio de la Casa Blanca: militares estadounidenses y diversas agencias policiales a lo largo del continente sudamericano -en un informe realizado por Telemundo y NBC- advirtieron que “el grupo terrorista Hezbollah echó raíces en América del Sur, fomentando una bien financiada fuerza de radicales listos para probar su odio hacia los Estados Unidos con su muerte”. La noticia trascendió luego de que fuentes de inteligencia de Estados Unidos y Canadá informaran que “últimamente miembros de Hezbollah estuvieron haciendo seguimiento y observaciones de la Embajada de Israel ubicada en Ottawa y de algunas sinagogas en Toronto”. Asimismo advirtieron que América Latina es considerada también un objetivo posible para un nuevo atentado de la agrupación islámica. Retomando la cuestión de las políticas de seguridad de la administración limeña, a fines de mayo pasado el Gobierno de Alan García autorizó, por medio del Ministro peruano de Defensa, el ingreso de tropas estadounidenses al país como parte del programa humanitario de Washington
“Nuevos Horizontes”, con el objeto de “sostener reuniones de coordinación sobre temas de desminado humanitario”, según una resolución ministerial publicada en el diario oficial El Peruano. El programa de ayuda humanitaria fue presentado como respuesta a la crisis social que atraviesa la provincia de Ayacucho. La medida del Ministro de Defensa fue tomada en medio de otra polémica por el envío de más de un millar de militares estadounidenses a Perú, que se realizará entre el 1 de junio y el 31 de agosto. Miembros del Partido Nacionalista Peruano (PNP), que lidera el ex comandante y ex candidato presidencial Ollanta Humala, criticaron al gobierno de Alan García por considerar que el ingreso de tropas sería una intromisión en asuntos internos del país. Además, los nacionalistas vienen denunciando reiteradamente que los agentes enviados por la Casa Blanca llevan armas de guerra. Los rumores sobre la posibilidad de que la agrupación Sendero Luminoso retome en los próximos meses la lucha armada en Perú, sumados a la postura de militarización y refuerzo de los mecanismos de defensa tomada por los funcionarios de Lima frente a lo que califican como “eventuales acciones terroristas”, acrecientan el riesgo de una renovada versión de la Doctrina de Seguridad Nacional. En este sentido, lo que a partir de los 60 se presentó como el enemigo interno en Latinoamérica (el fantasma del comunismo soviético), ahora se consolida en la versión del llamado “narcoterrorismo andino”. Las distintas experiencias históricas de aplicación de tal doctrina en la región señalan las consecuencias posibles para los próximos años: la renovación y expansión de la hegemonía estadounidense y la mantención de un sistema de relaciones económicas que refuerza y reproduce las relaciones de dependencia. Tal hipótesis se refuerza con la expresa postura ideológica de la actual administración limeña ante el creciente distanciamiento entre el Gobierno colombiano con los de Venezuela y Ecuador. Luego de la decisión tomada por el Presidente colombiano a fines del año pasado, quien desvinculó a Chávez del exitoso proceso de canje humanitario que el mandatario llevaba adelante con las FARC, el Ministro de Defensa peruano criticó al líder bolivariano por considerar al grupo guerrillero como “fuerzas beligerantes”, en contraposición con los países alineados a Washington que las considera “un grupo terrorista”. Por otra parte, Ántero Flores Aráoz sostuvo recientemente que la reorganización de las Fuerzas Armadas en el Valle de los ríos Apurímac y Ene (región de la provincia de Ayacucho con presencia de militantes de Sendero Luminoso) canalizada en un comando especial con un mando único, permitirá una “acción más contundente contra el terrorismo en esa zona”. Asimismo, reviste la mayor importancia la propuesta electoral presentada por Alan García en 2006, respecto de las alianzas estratégicas en el continente. El llamado Plan de Gobierno 2006-2010 propugnaba la ratificación del TLC con Estados Unidos, firmado por el presidente Toledo, lo que alejó al candidato aprista de su competidor más cercano, Ollanta Humala, quien basaba gran
parte de su campaña en la necesidad de la integración de Perú al proceso bolivariano liderado por Hugo Chávez, Evo Morales y Fidel Castro. “Rechazamos la intromisión del señor Chávez en la política de los países de la Comunidad Andina”, declaró Alan García durante una entrevista realizada en 2006. En ese sentido, invocó al Presidente venezolano a “dejarse de confrontaciones y presionar a los otros países para no firmar convenios comerciales con Estados Unidos, cuando Venezuela le exporta una gran cantidad de petróleo”. En vista de las últimas decisiones tomadas por el Gobierno peruano y su nueva política de seguridad preventiva, comienza a adquirir fuerza la noción del eje Bogotá-Lima como Estados alineados con la propuesta geopolítica estratégica de Washington para las próximas décadas. La urgente necesidad de Estados Unidos de controlar los recursos naturales no renovables que se hallan en Latinoamérica (en la actual etapa de escasez mundial de tales recursos), sumado a los Gobiernos de la región que impulsan mecanismos cada vez más eficaces de integración y desarrollo autónomo respecto de los países centrales, acelera y acrecienta el proceso de intervención político militar del país del norte sobre los conflictos de esta parte del continente. La violación de la soberanía ecuatoriana por parte de tropas colombianas constituye un punto de quiebre en la pacífica convivencia político diplomática entre los gobiernos del sur. El surgimiento y el delineamiento de dos bloques de países enfrentados por cosmovisiones políticas, representan un serio riesgo para la favorable etapa de las economías latinoamericanas ante la creciente demanda mundial de productos básicos. En el actual contexto, y como respuesta al resurgimiento del interés por Las Américas en el trazado político de la Casa Blanca, se fortalece la idea de crear un Consejo Sudamericano de Defensa para la protección de los recursos naturales estratégicos y la integridad de las naciones. La propuesta formal de la entidad fue realizada por el Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, durante la cumbre inaugural de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) el pasado mes de mayo. En dicha ocasión, el Gobierno de Colombia fue el único que no suscribió la iniciativa. Por ahora si algo queda claro es que la militarización y la injerencia de Estados Unidos, principalmente en los procesos políticos de los países andinos, se apoyan no tanto en la llamada lucha contra el “narcoterrorismo”, sino en la búsqueda de gobiernos democráticos de baja intensidad para la recreación de los viejos anhelos de la superpotencia del norte: una “América para los americanos”. La historia del continente señala que no hay necesidad de aclarar quienes quedan enmarcados en el gentilicio mencionado.
La lucha contra los cultivos ilícitos de coca ¿Mano dura o erradicación voluntaria?
Por Matías Mongan | Desde la Redacción de APM A pesar del Plan Colombia y las fumigaciones con glisofato en territorio ecuatoriano, los cultivos de coca, según la ONU, crecieron un 27 por ciento en territorio colombiano el año pasado.
En innumerables cantidades de veces la Casa Blanca se ha encargado de calificar a Álvaro Uribe como un verdadero “paladín” en la lucha contra el narcotráfico. Jactándose del supuesto éxito del Plan Colombia, por intermedio del cual Estados Unidos entrega 600 millones anuales a la Casa de Nariño, el Presidente estadounidense George W. Bush constantemente “invita” a los demás países latinoamericanos a imitar el ejemplo de la administración uribista e intensificar la lucha contra el narcotráfico. En relación con este tema, los cañones de Washington tradicionalmente han estado dirigidos hacia el gobierno de Bolivia, sobre todo al Presidente Evo Morales Aima. Desde que Morales era líder de los sindicatos cocaleros del Chapare en la década del noventa; y por el sólo hecho de llevar adelante una campaña para que se reconozcan los usos ancestrales de la planta verde emanada de la Pachamama; el gobierno estadounidense infundamente lo ha venido vinculado con el cultivo ilegal de la hoja de coca. De acuerdo a un informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC), los cultivos de coca crecieron un 27 por ciento en territorio colombiano durante el 2007. Según cifras del informe, los sembradíos ascendieron de 78.000 hectáreas en el 2006, a 99.000 hectáreas el año pasado. Por su parte, en el resto de la región andina el crecimiento de la coca fue mucho menor: en Bolivia sólo creció un 5 por ciento y en Perú un 4 por ciento. En un comunicado divulgado a la prensa, el director de la UNODC, Antonio María Costa, intentó encontrar una explicación sobre el fracaso del plan antinarcóticos patrocinado por Estados Unidos. Afirmó que "el incremento en los cultivos de coca en Colombia es una sorpresa y un shock: una sorpresa porque llega en un momento en que el gobierno de Colombia intenta fuertemente erradicar la coca y un shock debido a la magnitud de los sembradíos" Para intentar justificar el fenómeno, las autoridades de la UNODC argumentaron que en estos últimos meses se ha evidenciado un fuerte desplazamiento de los cultivos ilícitos y una resiembra de los cocales. “De la misma forma en que en Afganistán, donde la mayor parte del opio se cultiva en provincias con fuerte presencia del Talibán, en Colombia la mayor parte de la coca se cultiva en áreas controladas por insurgentes”, señala el documento. ¿Seria bueno preguntarse como es posible que el crecimiento en el índice de coca sólo se deba a lo que se planta en el territorio dominado por una guerrilla supuestamente diezmada (ese argumento es enarbolado por los integrantes de la línea mas dura en la Casa de Nariño), que se “guarece” en los países limítrofes para así escapar del accionar del ejército? Definitivamente hay algo que no cierra en toda esta cuestión. Para intentar de alguna forma restarle validez al informe de la UNODC, el director de la Policía Nacional, Oscar Naranjo, argumentó que el crecimiento en el porcentaje de cultivos de coca se debe a que el sistema satelital de medición que actualmente utiliza la ONU tiene mayor capacidad de detección que el que se usaba antes.
En una entrevista con la W Radio, el General Naranjo señaló que "la base de medición se ha ido modificando año a año, es relativa, entre otras cosas porque si bien en el año 1999 el sistema de monitoreo se fundamentaba en la medición de un satélite, hoy, para hacer esa misma medición de áreas cultivadas, el sistema recurre a cinco satélites" Otro funcionario que se quejó por el documento de la UNODC fue el Ministro de Justicia, Juan Manuel Santos. Tomando la excusa de que según el gobierno el año pasado fueron entre erradicadas y asperjadas unas 218.000 hectáreas, se quejó de que “cada vez que sale una medición quedamos en entredicho ante el mundo, por eso consideramos que no pueden decir que no estamos luchando en contra del narcotráfico". Además de resaltar que en Colombia ya no existen capos del narcotráfico como hace veinte años atrás, Santos sugirió: "ojala este mismo cotejo no se haga no cada año, sino cada mes (...) esto es más conveniente porque en muchas áreas hay hasta siete cosechas, por lo cual una medición anual no refleja lo que está sucediendo frente al esfuerzo de Colombia". Para finalizar el Ministro de Justicia anunció que el gobierno colombiano convocó a una licitación para así implementar un sistema de medición propio, que se lleve a cabo mensual o bimensualmente. Más allá del enojo de la administración de Álvaro Uribe con los resultados obtenidos por el informe de la UNODC, lo cierto es que la política antinarcóticos de mano dura -patrocinado por Estados Unidos- no ha servido para contener el avance de los cocales. Hay que recordar que con esta excusa, durante varios meses la Casa de Nariño fumigó con glisofato la frontera con Ecuador. Finalmente Uribe tuvo que terminar con esta práctica que dañaba el ecosistema de la región, debido a las quejas de su par Rafael Correa Mientras los millones entregados por el Pentágono no pueden controlar los excedentes de coca en Colombia, el gobierno de Evo Morales viene consiguiendo muy buenos resultados con su campaña “Coca sí, cocaína no”. El Ministro de Gobierno, Alfredo Rada, remarcó que el principal incremento en el país tuvo lugar en la región de los Yungas, donde la inversión estatal todavía es escasa. “En el caso concreto de los Yungas estamos encarando un diálogo, porque nosotros no vamos a acudir a la represión pura y dura, como acudían los gobiernos neoliberales buscando el objetivo inalcanzable de coca cero", afirmó tajantemente Rada. La administración boliviana es una fuerte defensora de la hoja de coca, la cual es utilizada asiduamente por los pueblos originarios desde hace más de dos mil años. Es más, actualmente el Ministerio de Relaciones Exteriores realiza una serie de gestiones para lograr la reclasificación de la hoja de coca y sacarla de la Lista 1 de la Convención Única sobre Estupefacientes de las Naciones Unidas. De acuerdo al Ministro de Gobierno, esta reivindicación tampoco implica que se permita el libre cultivo del arbusto. Siguiendo el esquema de racionalización orgánica, este año se deben erradicar alrededor de 5.000 hectáreas de coca excedente.
Al mismo tiempo que esto se lleva a cabo de una manera pacifica y dialogada, el gobierno va a continuar adelante con su plan que busca industrializar la producción de la hoja de coca. Para así demostrarle al mundo, y sobre todo a Estados Unidos, en que es una injusticia asociar a la coca solamente con la cocaína. Que paradojas presenta el escenario. El delfín de Estados Unidos en la lucha antinarcóticos, Álvaro Uribe, no consigue controlar los cultivos ilícitos en su país. Por su parte Evo Morales, acusado constantemente por Washington de no colaborar en la contienda contra el narcotráfico, lleva adelante hoy en día una racionalización orgánica pacifica que permite que en un país como Bolivia -en el que hoja coca forma parte central de las costumbres de los pueblos originarios- se controle en cierta forma la irrupción de los sembradíos ilegales. ¿Cuál es la mejor receta para hacer frente al flagelo del narcotráfico: mano dura o erradicación voluntaria? El lector sabrá sacar sus propias conclusiones… [email protected]