Ontogenia de la red fibrócítica, base de la comunicación ... · Por analogía, el sistema...

Teorías de Base en Medicina Tradicional

Mario Mario Rojas Alba. Tratado de Medicina Tradicional Mexicana © Tlahui. Prohibida su reproducción total o parcial. http://www.tlahui.com/libros

Ontogenia de la red fibrócítica, base de la comunicación meridiana en el marco de la Teoría Biocibernética del Ser*. Dr. Mario Rojas Alba** Resumen. El estudio de la medicina tradicional mexicana y china, bajo un enfoque multidisciplinario, permite concebir un sistema de comunicación primitiva no nerviosa, integrado por una red de fibrocitos, y en general de fibras de colágeno, conformando una unidad de comunicación en sincitial en donde las células socializan sus relaciones generales, como las específicas en vías preferenciales de origen ontogénico denominadas cuerdas o meridianos, y las vecindades en asociaciones o microsistemas conocidos como áreas, zonas y puntos de sensibilidad y aplicación terapéutica. El estudio de la forma en que se integra la comunicación nerviosa, humoral, y fibrocítica primitiva, permitirá una mejor comprensión fisiológica y terapéutica del sistema de puntos y meridianos de la medicina tradicional china, como de sus paralelismos en la medicina tradicional mexicana. * El material de la ponencia fue sustraído del Tomo II, del Tratado de Medicina Tradicional Mexicana, del mismo autor, quien lo resumió y adaptó para su presentación en la conferencia. ** Médico Cirujano General, UAEM, Acupuntor, Director de la Revista Electrónica Tlahui, y Presidente fundador del Instituto Mexicano de Medicinas Tradicionales Tlahuilli A.C. Introducción

El reconocimiento constitucional demanda la elaboración de métodos y procedimientos para la investigación teórica, y el desarrollo del conocimiento sustentado de la Medicina Tradicional (MT en adelante). Ante el enorme grado de complejidad de los sistemas médico-tradicionales, se entiende que la pretensión de introducir el método científico es una tarea difícil y de ninguna manera exenta de riesgos y dificultades, no obstante deben darse los primeros pasos. La investigación sistematizada de la MT requiere de métodos y herramientas adecuadas, ninguno de los procedimientos actuales, teorías y objetivos de las ciencias que se le relacionan, están a la medida de su complejidad, por lo que deben de crearse los específicos, y en muchos casos, de la elaboración de nuevos métodos, teorías, y tesis, e incluso de la emisión de los neologismos científicos que se requieran.

Para el abordaje moderno de la MT se propone esencialmente la aplicación de la Lógica difusa (borrosa o confusa) y Cibernética, la filosofía Ometeoísta y las Sinonimias difusas, destacando el procedimiento para encontrar los

conceptos comunes entre las ciencias, la filosofía y el lenguaje vulgar. Para arribar a la concepción del sistema de comunicación primitivo, mediante la red fribrocítica, se pasó primero, en forma deductiva, del estudio del Ser Supremo a la luz del ometeoísmo (filosofía náhuatl prehispánica) identificando los componentes del Ser universal y su naturaleza; los seres del cielo, tierra e inframundo, y su relación con la medicina y la salud; pasando por el planteamiento de la Teoría Biocibernética del Ser, donde se estudia la conformación tripartita del Ser humano (cuerpo, alma, y espíritu), el animismo orgánico, y su naturaleza dual (femenino-masculino); se llegó así a la discusión de la biocomunicación y orientación en el ser unicelular y pluricelular, desarrollando algunas hipótesis sobre la comunicación celular primitiva anterior a la existencia del sistema nervioso central, las que podrían explicar la fisiología de las cuerdas o meridianos, los microsistemas conocidos en la terapia de zonas.

Composición tripartita del Ser

En general, cuerpo, alma y espíritu conforman una unidad indivisible, en donde las tres se


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empalman como laminillas transparentes

que se sobreponen, o mejor como tres líquidos de colores diferentes que se han mezclado en un recipiente único. No obstante que los tres componentes del Ser tienen entre si límites en extremo difusos, para su estudio, es necesario disecarlos con un fino bisturí virtual y pedagógico. No existe gran problema para identificar la parte material de la máquina humana, o De Humani Corporis Fabrica de Andreas Vesalius, como se ha indicado, el problema resulta al intentar separar los conceptos de alma y espíritu. La influencia del concepto judeocristiana que reconoce únicamente la dicotomía cuerpo-alma, se ha transferido a la traducción de los diversos términos de alma y espíritu en las lenguas indígenas, eso ha acrecentado las propias confusiones de origen. Si se quiere acercar a la verdad, el método de disección del alma y espíritu, reclama la exclusión del etnocentrismo judeocristiano. Ese método está bien para comenzar con el estudio de lo que pudo haber sido el alma y el espíritu en las culturas prehispánicas, en segunda instancia, los conceptos cristianos y católicos tienen que ser también estudiados, sobre todo si se considera que la medicina tradicional actual es una mezcla de ideas prehispánicas, hispánicas, y africanas. Se ha preferido en enfoque ometeoísta por sobre el taoísta, no obstante, no se identifican contradicciones de importancia entre ambos sistemas filosóficos tradicionales. Concepción general. En la ideología mesoamericana, la trinidad se manifiesta con menos insistencia que la dualidad, de cualquier manera, apenas hurga uno un poco entre los datos prehispánicos y etnológicos, brota de inmediato y con fuerza, la misma composición tripartida del Ser Humano. En la numerología sagrada de los antiguos pueblos mesoamericanos Todo cuanto existe en el universo se compone de tres elementos, cada uno de ellos duales. Formando parte fundamental de numerosas expresiones de las medicinas tradicionales, encontramos el viejo concepto del “Ser”, para la mayoría de ellas —y en mi propia definición— no es otra cosa que la unidad indisoluble entre el cuerpo, alma y espíritu de un individuo viviente en un tiempo y espacio específico e irrepetible. Para existir, el alma requiere de un cuerpo, una masa, o mejor dicho, de un organismo capaz de darle albergue y sentido; el cuerpo sin alma es materia

sin pensamiento, conciencia y directivas; finalmente la ejecución de las directivas del alma por el cuerpo es imposible, si no existe la fuerza o energía del espíritu. En resumen. El Ser tiene tres componentes indivisibles: una parte material denominada cuerpo o soma (griego), y dos partes sutiles, el alma o psique (griego), y el espíritu (fuerza o energía). La biocibernética nos permite cierta claridad en los tres componentes, el cuerpo anatómico corresponde a la biomáquina o biohardware (inglés), el alma al bioprograma o biosoftware (inglés), y el espíritu a la bioenergía necesaria para el funcionamiento del sistema. Cuerpo o nacayotl. El cuerpo se conforma con el conjunto de partes materiales de una persona, incluyendo órganos, tejidos y sistemas. Sinonimias difusas: en biomedicina, anatomía, cuerpo o soma (griego); en física, materia, masa, materia, y máquina; en bioquímica, moléculas y compuestos químicos que conforman el cuerpo humano; en Medicina Tradicional Mexicana (MTMX), carne o nacayotl (náhuatl), hueso o tomio (náhuatl), sustancia, y materia; en informática y cibernética, máquina, y hardware (inglés). Alma o elhuayotl. El alma es el conjunto integral e inmaterial de memorias, ideas, instrucciones y funciones lógicas concientes o inconscientes a ejecutarse en el cuerpo humano, que caracterizan a una persona, y que le permiten mantener la vida física e intelectual, su existencia y relación con el medio. Sinonimias difusas: En biomedicina y psiquiatría, mente, pensamiento, personalidad, carácter, yo, y psiqué (del griego ψνχή); en la cultura grecolatina y judeocristiana, alma o haimatos, del genitivo griego “de la sangre”, ente, palabra (logos, del griego, y tlahtolli, del náhuatl), verbo (verbum, del latín), idea, ser pensante, ser ideal, ser conceptual, orden e ingenio divino; en cibernética, sistema lógico, orden lógico, orden matemático, programa o software (inglés), ser virtual; en bioquímica, código genético, ingenio molecular; en la medicina afro-mexicana, sombra; entre los nahuas, alma o tetonalli, elhuayotl, personalidad humana o tlacayotl (de tlacatl, persona, y -yotl, sentimiento), carácter o ixtiyotl (de ixtli, faz, rostro, cara, y –yotl, sentimiento), mente o teixnematli, pensamiento o ayequimatiliztli, ilnamiquiliztli, tlanemiliztli, y sangre de la persona o ezotl; entre los mayas, mente o tuukul (también, pensamiento), persona o may,



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wíinik, tú en lo personal o teech, rostro, cara

o ich, máscara o tep’ ich, pix ich, alma o píixan, óol, sangre o k’i’ik’; entre los purhépechas, persona o achá, pensamiento o eratsikua, cara, rostro, máscara o kánarhikua, carácter consistente, y sangre o iurhiri.

Espíritu, tonalli o ch’i es la fuerza o energía necesaria para el funcionamiento del cuerpo y la ejecución del alma de un individuo vivo, así como la irradiación, o la emisión de emanaciones sutiles que resultan de su actividad interna. Sinonimias difusas: En biomedicina, bioenergía, metabolismo, temperatura; en biofísica, fuerza, energía, irradiación, electricidad, magnetismo, temperatura, termodinámica, luz, frío, y calor; en bioquímica, metabolismo, biotermodinámica, y esencias; en medicina tradicional, vida, vitalidad, energía vital, fuerza vital, movilidad, esencia, efluvio, olor, aliento, vaho, olor, aire, luz, sombra, aura, calor, y frío; en la lengua náhuatl, tonalli, tona, yolo, yolotl, y ecahuil; en chinanteco, bi, gi, y mmi; en huasteco, ehetal, ts’itsiin; en huichol, cupuri, iyari, y tukari; en maya, ch’i (energía), píixan, óol (espíritu), muuk’ (fuerza, vigor, o poder), muuk’il, y óol (vigor); en mochó, čah¢i; en ñañhu, ts’ëdi (fuerza), ro’müi (espíritu), kaki, ntãhi, mbu i; en purhepecha, coasica (espíritu), tsunhapikua (vigor, fuerza, energía), uinapikua (fuerza), en rarámuri o tarahumara, iwigála; en totonaco, li-stanka, y li-kstsin; en tzotzil, ch’ulel; y en zoque, kojama.

Biocibernética y comunicación

El alma es la rectora intelectual del cuerpo, para funcionar requiere de un cuerpo de residencia, y de un espíritu o fuerza que la anime (energía), al ejecutarse libera otra fuerza que se pierde, y que hace que el sistema se degrade (entropía), en la dimensión del tiempo, el sistema se desgasta, el caos domina, y sobreviene la muerte, la materia y energía que se dispersó, se integra a nuevos sistemas que nacen, así todo se mueve, cambia, muere y nace eternamente. La Cibernética ocupa un lugar prominente en mi Teoría Biocibernética del Ser (TBS), el término proviene griego de κυβερνητική, y se refiere a la técnica y arte de conducir o gobernar una nave; se introdujo al inglés como cybernetics, al francés como cybernétique, y de esta última al castellano. Por analogía, el sistema nervioso central, es el “gobernador del cuerpo humano”, y para hacerlo, necesita de energía, este enfoque tripartito del Ser

humano (máquina, programa y energía) permite comprender la fenomenología de la MT, como de la misma biomedicina. De esta forma, la Cibernética permite el estudio de aquellas analogías entre los ordenadores y los sistemas de control y comunicación de los seres vivos, y en particular, el de las aplicaciones de los mecanismos de regulación biológica a la tecnología1, en relación a los conceptos tradicionales del alma, esta ciencia incluye el estudio comparativo de las operaciones de las computadoras y con el sistema nervioso humano2.

Biocibernética. Abundando, la Cibernética es la ciencia que estudia las analogías entre los sistemas de control y comunicación de los seres vivos y los de las máquinas; y en particular, el de las aplicaciones de los mecanismos de regulación biológica a la tecnología3. De manera específica, la Cibernética es el estudio de la forma en que son controlados los sistemas complejos. Incluye el estudio comparativo de las operaciones de los ordenadores y del sistema nervioso humano4, en este caso y en todos aquellos relativos al control y procesamiento de la información en los sistemas biológicos complejos, recibe el nombre de Biocibernética. El hombre es un Ser biocibernético que dispone de un sistema de manejo automático y racional de la información mediante una complejísima red interna (intranet) de ordenadores similares y especializados que se comunican mediante diversos medios y lenguajes. Los mensajes del exterior e interior del organismo son tratados por diversos codificadores y decodificadores para ser enviados por líneas aferentes y eferentes hacia los principales centros de procesamiento de datos. De la integración y eficiencia de los sistemas de programación, anatómicos, y energéticos, depende el estado de salud de los individuos. Con una jerga del todo diferente, pero queriendo decir lo mismo, lo pretenden explicar los diferentes sistemas de MT; sus conceptos son a veces sorprendentemente certeros, en otras esbozos ininteligibles para el científico como para los mismos curanderos, y en

1 Cibernética. Real Academia de la Legua. http://www.rae.es/. 2 Downing, Douglas A.; Covington, Michael A.; y Mauldin Covington, Melody. Diccionario de términos informáticos e Internet. Anaya Multimedia, Madrid, España, 1998, p. 63. 3 Diccionario de la Lengua Española. Real Academia Española. 22a edición, España, 2001, p. 370. 4 Downing, Douglas A.; et al. Ibid. p. 63.



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muchas más aparecen como destellos de

imaginación, de fantasías oníricas o mitológicas, que no obstante de ser incomprendidas por la ciencia actual, son dignas de ser tomadas en cuenta para su futuro replanteamiento a la luz de nuevos descubrimientos o avances tecnológicos.

Comunicación biológica

Entendida como la transmisión de señales mediante un código común, la comunicación presenta una enorme variabilidad en los organismos biológicos. A veces el emisor y el receptor son tan especializados, que asemeja en mucho al modelo antidemocrático de la televisión, en donde el emisor de mensajes, no acepta réplicas o interacción con el receptor, en la Biología este modelo es menos frecuente que en las sociedades humanas. Comunicar, es unir a dos o más mediante un código, es establecer una relación común entre entidades más o menos autónomas, y coordinadas en acuerdos que vinculan sus intereses en un gran objetivo común, la vida misma. Las células han establecido relaciones horizontales de igual a igual, una vinculación muy dinámica en donde cada célula es emisora y receptora al mismo tiempo, este es el modelo democrático dominante, del que mucho podrían aprender los pueblos del mundo. Compartir responsabilidades en beneficio de todos, ha sido la única determinante para que existan células con funciones especializadas dominantemente definidas por la emisión o la recepción. Pero, cómo se comunica una célula, o un conjunto de ellas, de una parte del cuerpo, con otras distantes; lo hace a través de células especializadas en la comunicación, las neuronas, eso se sabe muy bien en biomedicina, pero muchos otros fenómenos de la MT china y mexicana no se pueden explicar únicamente mediante la neurofisiología. Además de la nerviosa, es importante determinar qué relación existe entre los puntos acupunturales y los órganos internos, cómo es posible que un cataplasma caliente aplicado en la planta de los pies pueda desinflamar las “anginas” o curar el “frío en los bronquios”, cómo se relaciona el paladar con la hipófisis, qué tiene que ver el pulso abdominal con el estado de equilibrio del cuerpo en general, qué son las “cuerdas adoloridas” o “torcidas”, las “bolas” o “masas” (no ganglionares)

dolorosas que aparecen en algunos padecimientos no traumáticos; cómo explicar la fisiología de la “terapia de zonas”, o descubrir la naturaleza de los “canales” o “meridianos” chinos, encontrar una respuesta a todo esto resulta una pretensión abusiva, no obstante, haciendo acopio de la imaginación sustentada de manera importante en la informática y la cibernética se puede ver algo de luz. La comunicación vista desde la TBC se puede resumir en tres conceptos asociados: a) el alma del mensaje es un programa con cuatro secciones: uno capaz de percibir y capturar la información; otro dedicado al procesamiento, almacenamiento lógico de datos, y la emisión de respuestas; y uno más con el método para emitir el mensaje mediante un contenido codificado; b) el soma o máquina comunicadora dispone de las partes correspondiente a la ejecución de las diferentes almas del mensaje; y c) el espíritu representado por la energía necesaria para que la máquina y sus periféricos puedan ejecutar los programas. Para tratar un tema tan complejo como los mecanismos de información, comunicación, y orientación espacio-tiempo de los organismos unicelulares y pluricelulares he elaborado algunas coordenadas temáticas, como siempre partiendo del concepto de visión integral del Ser, en donde esas dimensiones de la exposición, de ninguna manera están separadas de manera absoluta. De esta manera trataré resumidamente sobre la rica temática del sistema de orientación espacio-tiempo, y el sistema integral de comunicación, en ambos casos en su manifestación del Ser formado de una célula, de aquel conformado por una convención comunitaria de células, y la de los seres pluricelulares que viven en sociedad.

Comunicación evolutiva

La evolución de la vida no es posible sin la existencia de otra previamente ocurrida en la materia inerte. Todo iniciaría en el vacío infinito y la energía, es decir, a partir de las partículas elementales, siguiendo la formación de los elementos, continuando con la síntesis de moléculas y compuestos químicos, las proteínas y polímeros, coacervados protobiontes, y los primeros seres vivos, las algas, mitocondrias, bacterias, células procariotas, eucariotas, protozoarios, plantas y animales multicelulares,



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para culminar en la organización social de

algunas especies, en cada etapa de la evolución, desde las partículas elementales hasta los animales superiores, han existido diferentes formas de comunicación. No trataré aquí la comunicación en la materia inerte, una especie de protocibernética que recae en las leyes de la física nuclear, cuántica, y en las leyes químicas que permiten la recombinación de partículas para formar elementos, y de estos para conformar moléculas, he de retomar, de manera muy resumida, la temática comunicativa a partir de los seres biológicos. Origen de la vida. La teoría de Oparin-Haldane sobre el origen de la vida se puede resumir básicamente en cuatro puntos consecutivos: 1) en la Tierra debió de existir una atmósfera reductora (con hidrógeno, metano y amoníaco), lo que ocurriría cuando el Sistema Solar se condensó a partir del material interestelar; 2) en este tipo de atmósfera intervinieron muy diversas fuentes de energía, como la radiación solar, choques de meteoritos, erupciones volcánicas, y relámpagos, entre otras; 3) ese medio se originaron los compuestos de carbono necesarios para la vida, se encontraban disueltos en el océano en una sopa prebiótica; 4) posteriormente la sopa sufrió nuevas transformaciones químicas que culminaron con el nacimiento de la vida. El primer organismo vivo sería una célula procariota (unicelula sin núcleo). Se dice que los primero procariotas obtendrían su energía de la fermentación química, en una serie de reacciones moleculares de sustancias orgánicas sin la presencia de oxígeno en el medio. El disenso comienza al pretender explicar cómo es que se formaron los primero eucariotas (unicelulares con núcleo), al menos dos hipótesis se disputan la respuesta: a) por la invasión de un procariota a otro, en donde el primero introdujo partes de su citoplasma limitado por su propia membrana, de esta manera se formaría una especie de protonúcleo alienígena dentro del citoplasma del protocariota invadido; y b) Por la invaginación de la pared celular e un mismo protocariota, permitiendo la formación de un protonúcleo dentro de su citoplasma. La comunicación en los seres unicelulares sin núcleo (procariontes) se realizaría mediante el procesamiento de datos en el ADN disperso en el

citoplasma, y las respuestas simples de membrana. En los seres unicelulares con núcleo (eucariontes), los datos externos aferentes se transmiten desde la membrana, en lo interno desde los organelos, y las diferentes partes del citoplasma, mediante señales eléctricas a través de las fibras y microtúbulos hasta la membrana nuclear, pasan para ser procesados por el ADN, él que emite los datos de respuesta que siguen las mismas rutas, pero en sentido eferente. El ADN funciona como el cerebro celular (o el CPU5 del ordenador), las fibras y microtúbulos como los cables de la intranet celular, los organelos como microingenios periféricos, y la membrana celular de manera muy similar a la piel de los animales pluricelulares, establece los límites del organismo celular. El animal pluricelular es el resultado de un acuerdo evolutivo entre millones de células que determinaron vivir en común y atar sus destinos, para eso establecieron una constitución biopolítica y un gran contrato sociocelular, que a diferencia de las personas, las células en salud cumplen de manera casi perfecta. La ley del amor continúo su proceso de comunicación, ahora en grandes consorcios de seres pluricelulares, la auténtica vida social y política, donde los individuos pluricelulares se dividieron el trabajo, las profesiones, y el intercambio de bienes y servicios hasta hacerlos depender los unos de los otro, pienso como algunos futuristas, que eso no termina ahí, que la evolución continuará ahora con la máquina inteligente que acompañará por algún tiempo al hombre, su creador, ¿o tal vez vendrá a sustituirle?, eso el tiempo lo dirá.

Comunicación celular

La célula es una unidad cibernética que dispone de los sistemas de control y comunicación con sus organismos internos, capaz de recibir información y de responde a los mensajes del medio, igualmente puede mantener una comunicación ordinariamente armónica con otras células familiares que integran con ella el gran consorcio (organismo pluricelular), además puede actuar por si misma o en coordinación con sus similares para defenderse de la agresión de otras células extrañas. La directiva más importante de su programa es el mantenimiento de la vida de la

5 CPU: Central Processing Unit, que se traduce al español como, Unidad central de procesamiento del ordenador. Nota del autor.



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especie, incluso sacrificando la propia e

individual si es necesario, de ahí que toda célula al nacer, tiene como prioridad el mantenimiento del sistema y la reproducción bajo las reglas del contrato de la sociedad celular. Comunicación intracelular. Antes de que el hombre existiera y cualquier animal multicelular, y la vida se limitaba a la existencia de los primeros seres unicelulares, la sensibilidad celular era muy simple, pero no por eso menos eficiente. En los organismos unicelulares de hace millones de años, como en los de la actualidad, la membrana celular hace las veces de la piel, conforma el límite del ser orgánico, una especie de frontera protectora y de interrelación con el medio. La membrana percibe del exterior todos aquellos datos necesarios par la supervivencia de la especie, y los transmite al núcleo donde los procesa a fin de emitir las directivas correctas para la vida. Hasta ahora se conoce más sobre la fisiología de la membrana y su sensibilidad a diversos estímulos físico-químicos, que la forma en que los mismos son transmitidos al interior de la célula, tampoco se sabe la forma en que estos se codifican y procesan a fin de dar respuestas “inteligentes”. Comparando la organización del sistema de comunicación de un unicelular eucarionte, con el de un pluricelular como el hombre, se puede decir que: la membrana celular representa un órgano sensitivo equivalente a la piel, oído, olfato, gusto, y tacto; los microtúbulos y fibras de colágeno del interior de la célula, representan el sistema nervioso periférico (vías aferentes y eferentes); y el ADN nuclear, no sería otra cosa que una especie de cerebro (sistema nervioso central), lugar de residencia del alma celular. Al menos tres tipos de comunicación intracelular se pueden identificar: a) la comunicación bioquímica (inteligente), del cerebro nuclear (ADN) con el resto de la célula a través del ácido ribonucleico (ARN), especialmente por el ARN-mensajero (ARNm) que transcribe los mensajes de tres bases (codones) del ADN y los lleva hasta el ribosoma para introducir el aminoácido correspondiente, el ARNm porta un mensaje completo con los codones o tripletes de bases necesarios para sintetizar una proteína específica; b) la transmisión de corrientes eléctricas más o menos específicas a través del citoesqueleto

celular conformado por las fibras y microtúbulos, una especie de microsistema nervioso; c) la transmisión de corriente eléctrica en “todo o nada”, es decir que, la célula se polariza o no de manera completa, el medio conductor corresponde al citoplasma (nucleoplasma, y citoplasma o citosol) en donde las moléculas de agua están ordenadas de acuerdo a su polaridad eléctrica y magnética como un “cristal líquido”, gracias al hierro intracelular (ferritina), conteniendo en disolución y bien orientadas las moléculas de proteínas, electrolitos (entre ellos el Ca++), y glucosa, y dispersos por todo el citoplasma numerosos gránulos de glucógeno, y glóbulos de grasas neutras. Cédula de identidad celular. Propongo que cada célula del organismo dispondría de una cédula de identidad registrada a nivel molecular a partir de la activación o inhibición de codones, intrones, y exones, en alguna parte del genoma. Los gametos, óvulos y espermatozoides, son células haploides, es decir que disponen únicamente de 23 cromosomas, 22 somáticos y 1 sexual, X para los ovocitos, y opcionalmente X o Y para los espermatocitos. Cuando ocurre la fecundación, el óvulo aporta 23 cromosomas, y el espermatozoide otro tanto, conformando una nueva célula diploide de 46 pares de cromosomas conteniendo entre 20,000 y 30,000 genes humanos6. Por su parte, el total del genoma humano tiene un tamaño aproximado de 3,200 millones de pares de bases. La cédula de identidad celular (CIC) en los individuos multicelulares, como el hombre, está determinada por la serie de mitosis que ocurren a partir del cigoto, y el proceso de diferenciación celular hasta la culminación del desarrollo embrionario, y aún después del mismo. En una “evolución” de pocos meses de vida embrionaria, el individuo recorre casi todos los estadios de la evolución de la vida animal. A partir de la formación del cigoto, el ser humano inicia como una de las primeras formas de vida en el planeta7, 6 Los últimos estudios han reducido en mucho la estimación anterior de 100,000 genes, el cálculo más alto en fechas recientes ha estimado que el genoma humano podría codificar unos 35,000 genes, de esta manera, si se considera que las secuencias codificantes del genoma humano representan escasamente el 1.5%, se puede decir que la gran mayoría del ADN humano no es codificante, y que la información contenida en el genoma se encuentra mayoritariamente inactiva. Nota del autor. 7 Coincido con otros en que los primeros seres vivos fueron los procariotas (unicelulares sin núcleo, como las bacterias), y un poco después los eucariotas (unicelulares con núcleo), sin



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es decir, como un individuo unicelular

eucariota. El huevo fecundado es un individuo unicelular con las potencialidades generadoras de un Ser humano completo; la primera célula se divide en el segundo día después de la fecundación para formal el Ser bicelular, se dividen a su vez para formar las cuatro subsiguientes pertenecientes a la segunda generación de mitosis, viene enseguida la tercera división mitótica, hasta aquí todas ellas son células totipotenciales, significando que cualquiera de ellas tienen la capacidad de formar un individuo humano completo, aunque de ordinario, de un cigoto se formará únicamente un embrión8. Las células totipotenciales correspondientes a las primeras tres generaciones de mitosis, tienen una cédula de identidad celular idéntica, aunque con una pequeña marca codotemporal9 correspondiente al número de generación mitótica. Las células totipotenciales que se mantenían juntas, a partir de la cuarta división generacional conforman las células de la mórula (tercer día de la fecundación) destinadas a conformar nuevos grupos de células diferentes entre si, iniciando desde ahí con la verdadera diferenciación celular; mientras tanto, el codotemporal continúa registrando la cuenta generacional de mitosis, a la manera de un cronómetro biológico que marca los tiempos de cada división celular. El codotemporal tiene una cuenta regresiva, específica y algo errática para cada una de las diferentes células del cuerpo humano, lo que correspondería a la longevidad determinada por los genes de cada individuo. Sospecho que cada organismo unicelular, sin importar la especie, dispone de una cédula de identidad (CIC) única e irrepetible que registra el número de clonación (o mitosis), en una cuenta que inicia a partir de la primera célula madre ancestral. Al ocurrir una mutación, la primera célula portadora de la misma agrega una marca de linaje para iniciar una nueva cuenta en la

embargo, ambas formas pueden bien ser consideradas como las primeras formas de vida en el planeta. Nota del autor. 8 Aunque normalmente un huevo forma únicamente un embrión, la existencia de gemelos, trillizos, cuadrillizos, y quintillizos homocigotes, demuestra el carácter totipotencial hasta la tercera generación mitótica. Nota del autor. 9 He considerado conveniente crear el neologismo codotemporal, (de codón y tiempo) para referirme al posible registro del número de mitosis que corresponda a partir la célula madre, mediante codones ordenados en los cromosomas durante cada proceso de división celular. Nota del autor.

cédula de identidad clonal. La CIC debe ser algo similar a un orden digital que se desprende de la clasificación taxonómica del individuo unicelular, y en el caso de los pluricelulares se agregarían los datos “personales” de cada célula, como el número de mitosis, tipo de célula (muscular, nerviosa, linfática, etc.) y el domicilio en donde se le ubica (en algún músculo esquelético, en el corazón, en el cerebelo, en algún hueso, etc.); el CIC es algo mucho más amplio, aunque similar en función de control social, al contenido informático de una credencia personal muy precisa y completa: nombre, domicilio, teléfono, correo electrónico, edad, media filiación, grupo sanguíneo, raza, trabajo o profesión, gremio de pertenencia, matrícula del auto, foto, huella digital, firma, y muchos datos más. La CIC funcionaría como una matriz informática conteniendo una colección de elementos de datos a los que se les daría un nombre único identificable por las coordenadas en tres dimensiones y sus valores en números (índices). La cédula estaría registrada en alguna parte de la serie de codones del ADN (o en su caso en el ARN) del individuo; en todos los casos el orden va de lo general a lo específico en las categorías de las taxas que corresponden a las directivas de ingeniería y arquitectura biológica. Cédula de identidad individual común (CIIC). La cédula de identidad celular (CIC) correspondería a un número relativamente reducido de bases del genoma (ciertos intrones y exones), algo diferente correspondería a la cédula de identidad individual común (CIIC) que abarcaría propiamente la totalidad del genoma de un individuo, es muy importante no confundirlas: La CIC permite identificar cada célula al interior de un individuo pluricelular; mientras que la CIIC corresponde a la identidad celular común de todas sus células y que lo hacen diferente de otras especies como de otros individuos de su propia especie.

Orientación espacio-tiempo. Si el genoma es un código con millones de directivas a ejecutar, este requiere de un programa bien sustentado en tiempo y espacio. A partir de la fecundación, el huevo arranca su cronómetro para la ejecución del plan de construcción del nuevo Ser, el proceso incluye una secuencia rígidamente ordenada de etapas de bioingeniería. Considerando al cigoto como la primera célula madre del nuevo Ser, esta debe disponer de una porción de su genoma destinada al sistema programático general de



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orientación en tiempo y espacio, al que he

denominado Sistema Genómico General de Orientación Espacio-Tiempo, en adelante únicamente G4Det. Lo considero un sistema debido a que contiene diferentes componentes, es general (G) para diferenciarlo del de Linaje (L), del género (Ge) y especie (Esp), o porciones genómicas que deben de existir para regir los planes y tiempos parciales para el desarrollo de ciertas porciones del Ser. Explicaré con mayor amplitud las partes y características del sistema genómico de orientación espacio-tiempo.

La orientación espacio-tiempo tiene determinaciones internas y externas: Cada célula es un individuo bien orientado en tiempo y espacio, conoce cual es su izquierda y derecha, su frente y espalda, su parte superior e inferior; dispone de biorritmos de actividad y reposo, de nutrición-excreción, reproducción, crecimiento y muerte. En lo externo, cada celdilla reconoce sus linderos y células vecinas, las ubica en su posición espacial, mantiene una memoria de familiaridad ontogénica con todas las células del organismo, sabe lo que tiene que hacer, conoce sus roles sociales y las jerarquías de linaje, subordina o se subordina según corresponda a su propia estirpe.

El sistema G4Det contiene las instrucciones iniciales para desencadenar el desarrollo general de las diversas etapas del programa genómico, es un detonador cronometrado del plan general y de sus diferentes parcialidades, es una brújula y cronómetro a la vez. Al momento de la fecundación, el óvulo y espermatozoide desencadenan algún algoritmo iónico, a manera de un lenguaje electrónico de polarización y despolarización de las membranas, a manera de un orgasmo celular que permite la penetración del espermatozoide, y de inmediato, las mismas modificaciones de las concentraciones iónicas que se desencadenan, impiden la adición de más espermatozoos e inician el desarrollo embrio-nario10.

El genoma del cigoto humano contiene millones de datos, algunos de ellos constituyen los genes o secuencias de ADN que conforman las unidades funcionales para la transmisión de los caracteres hereditarios de la especie, muchos de esos datos se encuentran activos y otros inactivos 10 Epel, David. El proceso de la fecundación. Investigación y Ciencia. Edición en español de Scientific American, Barcelona, España, Número 15, Enero 1978, p. 63.

(bloqueados en sus funciones), el G4Det debe disponer de algún plan-calendario de eventos a fin de activar o desbloquear diferentes porciones del genoma y producir así el proceso de diferenciación y especialización celular.

Orientación espacial. El espacio es la distancia existente entre dos cuerpos, dos puntos materiales, en términos dinámicos, el espacio corresponde a la distancia que un móvil recorre en una unidad de tiempo. La unidad del espacio en el Sistema Internacional se mide en metros por segundo (m/s). El vacío es aquel espacio carente de cualquier materia, por sus dimensiones infinitas contiene al universo entero, sin embargo ante la realidad física el vacío absoluto no existe, siempre contiene alguna brizna de materia o energía. Para existir, la materia-energía requiere del espacio-vacío, la materia y vacío relativo existen siempre entremezclados, el lugar virtual en donde no existe materia ni vacío, es la nada, el no ser, o la carencia absoluta de todo ser. El vacío absoluto y la nada pueden considerarse como sinónimos difusos.

El sistema genómico de orientación espacial 4De es una especie de bio-brújula. En el vacío la ubicación de las dimensiones es relativa a los referentes materiales, en el caso de los seres vivos del planeta, la orientación depende de las referencias relativas a la propia Tierra. Como se ha insinuado de manera general, la orientación espacial en cuatro dimensiones (4De) se compone de tres direcciones espaciales (3De) en las coordenadas x, y, y z, y sus respectivas medidas o tamaños dimensionales, es decir, el valor de e, en las coordenadas x, y, y z.

Las coordenadas polares sirven para determinar la posición de un punto, un área, o una masa, en relación al centro del núcleo celular. No puedo imaginar a la célula realizando cálculos de



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geometría espacial mediante el empleo de

coordenadas cartesianas, considero mucho más natural que el ADN nuclear pueda manejarse mediante coordenadas polares, para determinar la ubicación de cualquier área o superficie de masa, mediante las diferentes longitud de radios vectores que se emiten desde el centro virtual del núcleo celular hasta el objeto a determinar, y los diferentes ángulos que se forman entre si los radios vectores, como entre estos y las líneas rectas de los ejes o coordenadas polares.

Física del espacio y tiempo. El problema no es tan simple como reducir el espacio a un conjunto de coordenadas, yendo al fondo en el estudio de la física del espacio-tiempo, no podemos más que maravillarnos de tal complejidad, y mantenernos boquiabiertos ante la inmensidad de lo desconocido, y caer en la frustración ante la rica confusión que mantienen las líneas de discusión de los expertos, que nos dejan sin una explicación concluyente. De manera resumida y simple, la teoría de la relatividad general tiene su principal aplicación al estudio del macrocosmos, es decir, en la ciencia del espacio y tiempo astronómicos; mientras que la mecánica cuántica permite concebir los fenómenos físicos del microcosmos, de la “anatomía y fisiología” atómica, sin embargo, ambas teorías presentan diversas contradicciones irreconciliables, de tal forma que la física del espacio según la relatividad general no son aplicables al estudio de lo infinitamente pequeño. Ambas teorías rectoras del universo físico podrían reconciliarse si el espacio tuviera una dirección imperceptiblemente privilegiada, en la que, por ejemplo, la velocidad de la luz sería ligeramente diferente, o si las leyes de la física variaran imperceptiblemente con el tiempo11. En resumen, las teorías de la relatividad general y la mecánica cuántica podrían fusionarse si se demuestra de manera contundente que la distorsión del espacio-tiempo ocurre a pequeña escala12.

Geometría del espacio celular. A mi entender el código genético debe ser sensible principalmente a dos tipos de indicadores magnéticos: el polo norte, y la gravedad terrestre. De alguna manera el cigoto humano identifica la polaridad norte-sur, como izquierda-derecha, y su perpendicular como delante-detrás; la gravedad terrestre le permite determinar el arriba-abajo; una

11 Bonneau, Cécile. Espace temps… Ibid., p. 59. 12 Bonneau, Cécile. Espace temps… Ibid., p. 60.

cuarta dimensión espacial establece la distancia desde el centro o núcleo virtual hasta la periferia o superficie más externa del ser, representada la dimensión cerca-lejos, interno-externo, o entraña-superficie.

La orientación genética en 4De dependiente de los polos y gravedad terrestre, es básicamente la misma para todos los organismos biológicos, particularmente entre los seres unicelulares con núcleo y todos los pluricelulares; el programa genético de los cigotos trabaja bajo los principios de la geometría del espacio para el desarrollo embrionario, para eso considera la construcción de las estructuras como en una figura en donde todos los puntos de la figura virtual no están de ninguna manera en un mismo plano.

Hierro y campos magnéticos. La fisiología médica ha destacado la función del hierro orgánico en el transporte del oxigeno (en la hemoglobina), pero muy poco se ha dicho sobre su papel en la orientación celular y orgánica, considero que el hierro funciona como una aguja magnética dirigida hacia los polos magnéticos, orienta las proteínas a las que se liga como la hemoglobina, transferrina y ferritina, algunas enzimas, el hierro libre igualmente se nortea ordenando las moléculas de agua de los fluidos orgánicos, plasma, líquido intersticial, citoplasma, y nucleoplasma. Muchos datos científicos nos permiten descubrir la influencia de los polos magnéticos en la orientación espacial. El campo magnético terrestre influye de alguna manera en la orientación de los animales, es evidente la sensibilidad de algunas especies como la ballena, los delfines, y las aves migratoria entre otros. El campo magnético terrestre se ha revertido varias veces en el tiempo, actualmente se ha reducido en un 10% lo que hace pensar en un proceso inicial para una nueva reversión.

Orientación celular de si misma. El siguiente modelo gráfico permite explicar el contenido de la información en 4De: al momento de la copia genética y el nacimiento de una nueva célula, la gravedad terrestre le permite identificar un polo cefálico o superior, y otro podálico o inferior; el polo Norte, y en alguna forma la radiación y gravitación solar, le proporciona los datos necesarios para ubicar su orientación en los cuatro puntos cardinales, los que se traducen en izquierda-derecha, y anterior-posterior.



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Ubicación espacial del entorno. En un Ser multicelular, la misma orientación 4De permite que la célula pueda reconocer la ubicación espacial de las cosas del entorno, como de sus células vecinas, en el siguiente modelo simplificado a las tres dimensiones espaciales (a 90 grados), la célula central (CC) dispone de la información sobre la ubicación espacial de las células del mismo género y especie C1, C2, C3, C4, C5, y C6.

Dejando de lado los términos geográficos, y si en su lugar convenimos emplear arbitrariamente los de anatomía humana, como: izquierda-derecha (norte-sur), y anterior-posterior (este-oeste), y cefálica-podálica (cielo-tierra o arriba-abajo); entonces la célula central (CC) ubicaría a su izquierda a la célula 1 (C1), a su derecha a C2, enfrente o en la parte anterior a C3, en la posterior a C4, en la superior o cefálica a C5, y en la inferior o podálica a C6. En este ejemplo me refiero al caso de células fijas, con una posición permanente en la estructura anatómica de un Ser pluricelular, es de suponerse, y no podría ser de otra manera, que la orientación espacial sobre el entorno de las células en movimiento (eritrocitos, linfocitos, etc.) deben de disponer de un sistema de orientación diferente, la orientación individual de si misma podría ser similar a la de una célula fija, pero no así su orientación con el medio, en donde se limite a seguir ciertas directivas de flujo y navegación, cargas y polaridades temporales

hacia sus blancos funcionales, y sobre todo el tropismo químico y humoral.

Orientación simétrica-asimétrica. La determinación de las simetrías y asimetrías corporales ocurre por la integración funcional de los sistemas de orientación del espacio y el tiempo (4Det). En el ser humano, como en otros organismos biológicos, debe de existir una interacción entre los genes de la simetría y de la asimetría, los primeros determinan la construcción de los órganos pares dentro de la biomáquina humana, los segundos siguen un patrón asimétrico para la generación de los órganos impares. Los embriones inician simétricos, conforme madura se consolida como un individuo asimétrico. El 4Det genómico de ciertas células debe disponer de algún detonador cronometrado, para que algunas secciones de la cadena de nucleótidos del ADN inicien la síntesis de las proteínas “barogénicas”, se sabe, por ejemplo, que la orientación de los órganos internos se controla en parte por proteínas sintetizadas en un solo lado del embrión13.

Orientación temporal. En la física el tiempo sidéreo se mide por el movimiento aparente de las estrellas, específicamente del primer punto de Aries; en nuestro sistema, el tiempo solar corresponde al movimiento aparente del Sol. Magnitud física que permite medir la duración de las cosas sometidas al cambio, permitiendo ordenar las secuencias de los sucesos en el pasado, presente y futuro. En el Sistema Internacional, la unidad del tiempo es el segundo (s). La velocidad es el espacio recorrido por un objeto en movimiento en una unidad de tiempo, en el Sistema Internacional la velocidad se mide en metros por segundo (v = m/s). Se ha sugerido que el tiempo es un parámetro sin dirección, de tal forma que todas las ecuaciones son reversibles y no existe privilegio alguno entre la noción de pasado y de futuro; por su parte, en su segundo principio, la termodinámica plantea la irreversibilidad del tiempo y con ella una dirección bien definida para las evoluciones14.

13 Rodríguez Esteban, Concepción, et. al. Cómo distingue el cuerpo la izquierda de la derecha. Investigación y Ciencia. Septiembre, 2001, número 300, p. 62. 14 Payán de la Roche, Julio César. Información, Entropía y Terapia Neural. Instituto de Terapia Neural, Colombia, 07.07.2006, URL: http://www.terapianeural.com.



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En la actualidad, como en la antigüedad, el

tiempo se confunde con el movimiento y la velocidad, sin el movimiento no existiría el tiempo. De manera simple, el tiempo de un objeto depende de la velocidad con que se mueve de otro aparentemente quieto, pero, como en el universo existen infinidad de puntos de referencia y todos en movimiento, la determinación del tiempo absoluto en un momento dado resulta propiamente imposible, hasta ahora únicamente se puede medir el tiempo de un evento concreto, por ejemplo, lo que tarda la Tierra en dar un ciclo alrededor del Sol, o la duración de un giro de la Tierra sobre su propio eje. A resumidas cuentas, el tiempo no existe, es apenas un concepto ligado al movimiento; lo que la física entiende por el “tiempo” (t), es una medida convencional y muy relativa, se puede justificar muy bien que un año terrestre tenga una duración un poco superior a 365 días, pero no así que un día se componga de 24 horas, cada una de 60 minutos, y tampoco que un minuto tenga 60 segundos, para los simpatizantes del sistema decimal, o vigesimal, bien se podría dividir al día en 10 o 20 horas respectivamente.

Cronometría embrionaria. Supongo que la activación del sistema G4Det va a su vez a desatar otros procesos específicos de la ingeniería del desarrollo embrionario. La arquitectura del embrión sigue un plan rígidamente cronometrado en todos sus detalles, debo destacar dos etapas indisolublemente ligadas pero invariablemente una primero que la otra, me refiero al plan de la ingeniería simétrica (IS), que precede y sustenta al de la asimetría lateral (IAS). Mientras que el G4Det fue determinado sustancialmente por los polos magnéticos, y la gravedad terrestre, la IS y IAS traducen las coordenadas del G4Det en proteínas orientadas a tareas de construcción muy específicas. La importancia de las proteínas en la ingeniería genética ha quedado de manifiesto en múltiples padecimientos que implican alguna alteración en el ADN. Se han podido identificar más de 2000 padecimientos genéticos en el hombre, en donde la herencia de un gen defectuoso determina la síntesis de una proteína anormal15.

15 Anderson, W. French; y Diacumakos, Elaine G. Ingeniería genética en células de mamíferos. Investigación y Ciencia. Edición en español de Scientific American, Barcelona, España, Número 60, Septiembre 1981, pp: 46-157.

Intentaré explicar cómo entiendo la orientación espacial en coordinación con la cronología y mesura del proceso de diferenciación y especialización celular. Desecho, por maniquea, la concepción de existencia exclusiva de células madre, o células específicas, en esta óptica o es célula madre o es célula especializada, sin nada de matiz; de acuerdo con la ideología ometeoísta y la lógica difusa, deben de existir diversos tipos y matices celulares intermedios entre una célula madre primigenia y una célula altamente especializada. Por eso mismo considero que el sistema genómico de orientación espacio-tiempo (G4Det), es un cronómetro que arranca de manera exclusiva a partir de la fecundación y la formación del huevo, funcionando como la primera y única célula madre del embrión (CME). Al duplicarse la CME genera las células madre secundarias o terciarias, a las que he denominado células madre de linaje (CML), al formarse cada una de ellas disponen del G4Det que heredaron de la CME, pero su ADN registra, activa y adiciona un nuevo contador (con su cronómetro y brújula propia) correspondiente al linaje de células que pretende desarrollar de manera diferenciada, he denominado al nuevo orientador como sistema genómico de orientación de linaje espacio-tiempo (L4Det).

Las células madre de linaje (CML) se duplican para producir las células madre de un género de células (CMGe), estas adicionan su propio sistema genómico de orientación genérica del espacio-tiempo (Ge4Det). Finalmente, las células altamente especializadas (CEs) han perdido la potencialidad amplia de las células madre, heredaron todos los orientadores espacio-tiempo de sus predecesoras, incluyendo el suyo propio, el sistema genómico de orientación de especie espacio-tiempo (Es4Det), además del individual (In4Det) este último es una especie de cronómetro que establece el período de vida según cada especie e individuo celular.

En mi propuesta, las células gonadales (CGo), los óvulos y espermatozoides, tendrían un sistema genómico de orientación espacio-tiempo (Go4Det) único, con características bien particulares, y por demás interesantes, pues contarían con un cronómetro limitativo a su periodo de vida, y una especie de brújula orientada hacia el lugar de encuentro para la fecundación, durante la cual, al fusionar sus cromosomas, el huevo resultante borraría de su ADN los orientadores de espacio-



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tiempo (Go4Det) del óvulo y espermatozoide

que le dieron origen, al mismo tiempo crearía un nuevo orientador, el G4Det personalizado al cigoto en cuestión.

Reloj biocibernético. Los ordenadores disponen de un reloj cibernético que sigue de manera permanente e interrumpida la evolución de la hora y fecha, se le conoce igualmente como reloj en tiempo real o reloj-calendario. Alimentado por una batería, el reloj en tiempo real funciona de manera permanente, incluso cuando la computadora se encuentra apagada16. Dentro de la Teoría Biocibernética se puede decir que las células y el Ser humano deben disponer de un dispositivo similar, un reloj biológico que inicia su cuenta regresiva a partir de la fecundación, o mejor desde la formación misma del cigoto.

He propuesto en líneas anteriores, que en la célula el reloj biocibernético general debe ser parte del sistema genómico de orientación espacio-tiempo o G4Det, sin embargo, falta localizar y determinar las características del biocronómetro de la mancomunidad celular que conforman al humano y otros seres pluricelulares. El G4Det del cigoto, la primera de las células madre del organismo, va a marcar los biorritmos de todas las células, para sincronizar las funciones del desarrollo, mantenimiento, reparación, nutrición, excreción, reproducción, y período de vida, la mancomunidad ha establecido un sistema de comunicación conformado por células altamente especializadas, las neuronas.

La temprana eclosión de las primeras neuronas humanas refleja la urgencia embrionaria por construir el sistema de comunicación de la mancomunidad celular en formación. Desde el día 31 de la gestación, se ha podido observar la aparición de las primeras neuronas de la corteza cerebral de los embriones humanos17. Antes que cualquier tipo de célula del córtex en desarrollo, esas neuronas “predecesoras” aparecen en la superficie del prosencéfalo o primitivo cerebro

16 Downing, Douglas A.; Covington, Michael A.; y Mauldin Covington, Melody. Diccionario de Términos Informáticos e Internet. Ediciones Anaya Multimedia. Madrid España, 1998, página 324. 17 Irina Bystron y su equipo de investigadores de la Universidad de Oxford, en la revista Nature Neurosciences, julio del 2006, nota extractada de: M.-C.M. L’éclosion des tout premiers neurones humains. Science & Vie, septembre 2006, No 1068, pp: 14-15.

anterior y emigran para formar las diferentes capas corticales.

El tejido nervioso es el sistema multicelular de comunicación del ser humano y otros animales, en su interior existe una especie de sistema general de orientación nerviosa del espacio-tiempo (NG4Det), la brújula (NG4De) y el marcapaso general (NGt) de la vida de una persona. Mientras que la gravitación y el magnetismo terrestre es el principal orientador espacial de los organismos biológicos, el tonal, la energía luminosa (tlahuilli) procedente del Sol, es el más potente orientador del reloj biológico o biocronómetro.

El tiempo cero inicia con la dotación de energía vital predeterminada por los genes de los padres, la batería que ha de sostener el funcionamiento del reloj es la misma que determina la expectativa genética de vida de un individuo. El tonalli individual —conformado por el tonalli humano, étnico y familiar— condiciona un cierto determinismo de probabilidad de vida, para mayor claridad, la genética de especie, etnia y familia fabrica una biomáquina humana para una duración de vida predeterminada, de manera anecdótica se puede decir que los individuos nacen con una batería que les permite mantener el funcionamiento de su reloj por un tiempo de vida predeterminado, una cuerda de relojería que le permite vivir 70, 80, o más años, según sea el caso.

Comunicación electrocelular. En los seres unicelulares cada individuo de una misma especie representa una unidad de comunicación con cierto grado de autonomía de interacción con el medio, y de coordinación con otros individuos de la misma especie a los que reconoce por la cédula de identidad clonal. Los ácidos nucleicos son el cerebro en donde se reciben, procesas los datos, y de donde se emiten las respuestas y directivas fisiológicas. El individuo unicelular es una unidad sensible y transmisora, parcialmente autónoma, se comunican con otras como una red global. En el individuo pluricelular, las células funcionan como una enorme cito-intrared (intranet) comunicada básicamente mediante vías nerviosas, relaciones fibrosas, contacto membranoso por contigüidad de vecindario, o humoral, los mensajes son de naturaleza eléctrica, térmica o química.



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Antes de que la evolución produjera las

células especializadas para la comunicación en un animal pluricelular (neuronas), las células se comunicaban unas con otras mediante impulsos eléctricos, según las fases de polarización y despolarización de la membrana celular. No ignoró otros mecanismos de comunicación como los de carácter humoral, pero se trata únicamente de plantear algunas hipótesis de la comunicación celular mediante impulsos eléctricos, como sustento para explicar posteriormente la existencia de cuerdas, zonas, y puntos de comunicación sugeridas por la MTMX, y otras expresiones de la MT.

Primera hipótesis: la neurona es el producto de la especialización evolutiva de una célula común. Dicho de otra manera, cualquier célula ordinaria tiene básicamente las mismas funciones de comunicación, aunque menos desarrolladas, que las de una neurona.

Segunda hipótesis: los mecanismos de la polarización y despolarización de la membrana de una célula ordinaria, son similares, aunque menos perfectos, que los de una neurona. La similitud es todavía mayor entre una célula común y una neurona no mielinizada, sugiriendo que las neuronas mielinizadas gracias al aislamiento eléctrico de sus axones mediante la mielina de las células de neuroglia (oligodentrocitos y células de Schawnn), así como los nódulos de Ranvier son algunas de las manifestaciones de la especialización de las funciones de transmisión eléctrica de la neurona. La membrana lipoproteínica de la célula común se compone básicamente de una bicapa lipídica (con moléculas de fosfolípidos), intercalando grandes moléculas de proteínas globulares, en breve, el extremo de cada una de las moléculas de fosfolípidos es hidrofílico, y el otro extremo hidrofóbico. En reposo, el exterior de la membrana celular es positivo y el interior, el cambio de polaridad ocurre por el intercambio iónico entre los líquidos intra y extracelular.

Tercera hipótesis: existen dos procesos relativamente diferentes de intercambio iónico entre la membrana que se encuentra entre citoplasma y líquido intersticial, que entre las membranas que se contactan entre los citoplasmas de dos células continuas. Los estímulos eléctricos que se propagan a través del líquido intersticial son demasiado difusos, si llega

con suficiente intensidad a la membrana de una célula provocará la entrada de iones sodio (Na+), desde el líquido extracelular hasta el citoplasma, y la salida de potasio (K+) del citoplasma al extracelular, provocando la despolarización y repolarización celular. La comunicación eléctrica de una célula a otra es relativamente diferente, es más selectiva, y en ella intervienen los iones calcio (Ca++) e hidrógeno (H+), que pasan por transporte activo empleando energía del adenosin monofosfato cíclico (AMPc), la célula despolarizada pasa el estímulo a la siguiente célula a través de las uniones de abertura o nexos establecidas según la afinidad y orden de origen ontogénico.

Cuarta hipótesis: en la célula ordinaria las uniones de abertura o nexos, funcionan como sinapsis simplificadas, permitiendo la conducción de estímulos con cierto sentido preferencial entre cadenas de células con un origen secuencial en la etapa embrionaria. Considero que los nexos funcionan como compuertas en un sentido, válvulas orientadas, o mejor como el orificio de un tornillo con rosquilla a la izquierda o a la derecha, la orientación dependería del origen ontogénico en prioridades longitudinales, más que las colaterales, sobre todo en las células de los tejidos de las extremidades superiores e inferiores. Por permitir el paso de estímulos eléctricos de una célula a otra he preferido denominar sinexón18, al nexo o unión de abertura. Para explicar como se transmite el potencial de membrana de una célula a otra mediante el sinexón he elaborado la siguiente ilustración gráfica:

El dibujo presenta tres células con un Sistema Genómico General de Orientación Espacio- 18 El nexo es una puerta física entre dos membranas celulares, permitiendo la comunicación entre sus respectivos citoplasmas; he acuñado el término sinexón para referirme a la unidad funcional para la comunicación celular, en donde se integra el nexo, las membranas, y los citoplasmas de dos células contiguas, permitiendo el transporte pasivo, y activo, de electrolitos, en su caso mediante la energía del adenosin monofosfato cíclico (AMPc). Nota del autor.



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Tiempo (G4Det) desarrollado de izquierda a

derecha, con las células: G4DetC1, G4DetC2, y G4DetC3; suponiendo que las células se encuentren en el miembro superior y su orientación sea en sentido inverso a su desarrollo embrionario, el estímulo eléctrico proviene de una región distal a otra proximal (vía aferente o sensitiva), es decir que viene de la célula 3 (G4DetC3) y se dirige a la célula 1 (G4DetC1). Como puede notarse la célula 3 que recibió la excitación de otra hipotética célula 4, tiene la membrana completamente despolarizada, y con el auxilio del adenosin monofosfato cíclico (AMPc) ha logrado pasar a través del sinexón, suficientes iones de calcio (Ca++) e hidrógeno (H+) al citoplásma de la célula 2, cambiando su polaridad de membrana, haciendo el exterior negativo y el interior positivo; la célula 2 está en el proceso de hacer pasar los iones calcio e hidrógeno a la célula 1, que todavía tiene su membrana en polarización de reposo, exterior positivo e interior negativo. Es obvio que las primeras células que recibieron el estímulo eléctrico, después de despolarizarse, vuelven a polarizarse regresando al estado hipotético de reposo, lo digo así por que el reposo absoluto no existe, la membrana celular se encuentra en permanente intercambio iónico y actividad eléctrica. Regresaré más adelante a la aplicación clínica de la comunicación eléctrica de las células no nerviosas, precisamente para explicar el carácter de las cuerdas, puntos y zonas del cuerpo humano.

Comunicación multicelular

El Ser multicelular. La comunicación interna en los seres pluricelulares se sustenta en la convención mancomunada de millones de células. Diversos conceptos y prácticas de la MT pueden encontrar explicación si se considera teóricamente la existencia de un Sistema Integral de Comunicación (SIC) entre las células de los organismos pluricelulares. El SIC estaría confor-mado por tres sistemas de intercomunicación celular: a) el Sistema Nervioso (SN); b) Sistema de Comunicación Humoral (SCH), y b) Sistema de Comunicación Multicelular Primitivo (SCMP). La función y estructura de la mayor parte de los tres subsistemas se conocen ampliamente en biomedicina, pero no así su integración funcional, y muy poco del tercero (SCMP), en consecuencia, sobre el SN y SCH he de remitir al amable lector para que consulte los libros de fisiología humana, dejando para tratar aquí especialmente el SCMP,

algunos aspectos interesantes del SN, y los específicos de la integración de los tres sistemas.

El desarrollo de una identidad y diferenciación celular culminó primero con la CIIC, y finalmente con la CIC individual. Resta ahora discutir como es que los diferentes CICs establecen toda una vida social rigurosamente reglamentada, con millones de células que juegan un papel bien determinado en la organización pluricelular. El alma de la célula se encuentra en su ADN, y ahí mismo el código individual de funciones y roles a cumplir, nadie se sale del libreto, so pena de ser eliminado por los implacables guardianes de la ley y el orden. Los sociólogos podrían aprender mucho de las células que decidieron vivir juntas, desde hace millones de años.

Sociología celular. Trataré de resumir lo que considero una teoría de identidad celular ancestral. Millones de años de evolución trajo la posibilidad de la socialización cada vez más amplia y compleja de los organismos unicelulares, hasta conformar los primeros organismos multicelulares. Para lograrlo, las células tuvieron que adquirir un altísimo grado de especialización y de socialización de la vida en común. La comunicación entre las células de los diferentes tejidos, sistemas y órganos de los seres multicelulares implicó el desarrollo de células especializadas en la transmisión, recepción, y procesamiento de datos y mensajes, fue así como surgieron las neuronas. La organización de las neuronas conformó el sistema nervioso de los animales, sin embargo, aunque suplantó y redujo la importancia del antiguo sistema de comunicación entre los seres unicelulares, este sistema primitivo no desapareció sino que permaneció subyacente para complementar las funciones del sistema neuronal.

Hipótesis generales. Para explicar cómo ocurre la comunicación en un ser pluricelular, planteo cinco hipótesis rectoras, las mismas que han de orientar el aspecto teórico del presente extracto. A) Hipótesis básica: las células que conforman un ser pluricelular se comunican como una unidad informática sincitial19, gracias a la integración de 19 Sincitio, unión celular, del griego sin- (συν), unir, y citos (κύτος), célula. El concepto se emplea en el sentido de una unidad informática común a todas las células de un individuo pluricelular. En esta obra, el término sincitio se emplea como



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los sistemas nervioso, humoral, y de

comunicación primitivo. Los datos que recibe una célula, en alguna medida se comunican a todas las integrantes del sincitio. B) Hipótesis segunda: el sincitio dispone de vías de comunicación preferenciales, sean nervio-sas, humorales, o primitivas. Las vías nerviosas así como las humorales (disparo y blanco celular) son bastante conocidas, no así las de comunicación primitiva o de contacto celular no nervioso. C) Hipótesis tercera: las vías preferenciales de comunicación sincitial están determinadas por la genética y se establecen durante el desarrollo embrionario, lo que se denomina relación celular ontogénica, el lugar en donde su ubica una célula y su relación con otras en su desarrollo embrionario se denomina locus ontogénico. Cada célula de la comunidad dispone de relaciones preferenciales según la familiaridad tisular, y las cercanías espaciales, las que se establecen en el proceso de desarrollo embrionario. D) Hipótesis cuarta: El sincitio dispone de nódulos de integración biocibernéticos para el manejo de los diversos bancos de datos con la información recabada en los sistemas nervioso, humoral, y primitivo, con la consecuente emisión lógica de respuestas y ordenes a ejecutarse a fin de mantener la homeostasis orgánica. El SNC funciona como un enorme nódulo, pero comprende un conjunto de nódulos menores, como los del corazón, respiración, las áreas sensitivas o motoras somestésicas, las visuales, del lenguaje, las olfativas y del equilibrio, por decir algunas; el sistema humoral tiene sus áreas de integración biocibernética como la hipófisis que rige a las glándulas de secreción interna, el timo que dirige parte del sistema inmunitario, cada glándula es en si misma un nódulo de integración; finalmente los centros anímicos concentran funciones locales o regionales de células que se vinculan mediante el sistema de comunicación primitiva o mediante la integración de todos los sistemas de información. E) Hipótesis quinta: Los principios de la comunica-ción celular, son equivalentes a los mismos que

sinónimo difuso de red, comunidad o mancomunidad celular, individuo pluricelular, e intranet celular. Nota del autor.

requiere la comunidad sincitial. Para iniciar, la célula necesita estar orientada en tiempo y espacio, igualmente el sincitio que conforma al Ser Humano, de ahí la idea de una universalidad básica en las leyes de comunicación unicelular y pluricelular, como es arriba es abajo.

Orientación temporal y espacial. La forma en que el ser unicelular se orienta en tiempo y espació, se repite, aunque en un nivel diferente de organización, en el ser pluricelular. Si comparamos el sincitio humano como una Intranet de miles de millones de ordenadores conectados, tenemos que pensar en el arranque20, o la forma en que inició su funcionamiento. Considero que la fecundación fue el arranque del primer ordenador, la matriz de todo lo que vendrá después. Con la información génica de los padres, se puede decir que el primer ordenador celular (cigoto) arrancó en frío, no existir es como estar apagado, al fusionar los cromosomas el proceso informático comenzó. Una vez cargados los programas básicos en el ordenador madre, este se dispone a deszipear21 toda la información contenida en el genoma y que concierna a la especie e individuo específico. Los siguientes ordenadores celulares, conforme se van creando arrancan también en frío, los que ya están encendido tienen sus periodos de reposo y de actividad, cada vez que entran en función intensa es como un arranque en caliente. He realizado esta comparación para poder explicar la necesidad de que cada ordenador celular del sincitio maduro requiere de haber instalado y activado de manera adecuada el programa de orientación en tiempo y espacio para poder arrancar adecuadamente.

20 Arranque, concepto traducido idiomáticamente del inglés bootstrap, que tiene la idea de para arrancar un ordenador “tiene que levantarse a sí mismo tirando de los cordones de los zapatos”. Downing, Douglas A.; Covington, Michael A.; y Mauldin Covington, Melody. Diccionario de términos informáticos e Internet. Anaya Multimedia, Madrid, España, 1998, p. 22. En esta obra “arrancar” se emplea como sinónimo de “encender”, “prender” el ordenador. Para el contexto biológico, prefiero el término “iniciar” (del inglés cet up) para el encendido de la actividad celular mediante el arranque del programa de comienzo; y “reiniciar”, (del inglés recet) cuando se pone a funcionar nuevamente después de que la célula o el sincitio habían estado en el ciclo de reposo. Notas del autor. 21 Deszipear, término común en la jerga informática con el anglicismo zip, en referencia un archivo comprimido con el programa PKZIP del famoso programador Phil Katz. El término se emplea aquí estableciendo un símil entre la información contenida en el ADN, con un archivo comprimido, deszipear significa descomprimirlo, hacer mucho más grande de tal forma que pueda leerse. Nota del autor.



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El sistema de arranque tiene dos niveles

de organización: el individual de cada célula, y el colectivo o sincitial, este último es que interesa tratar ahora. Los términos encendido o apagado son demasiado burdos para la biología, la sinonimia más cercana para el apagado es el deceso, y para el encendido, el nacimiento, el dormir y despertar son estados parciales de apagado y encendido; una vez que una célula se encuentra encendida únicamente dejará de comunicarse al momento de morir y causar baja de la red, en otro orden de ideas, de manera obvia, mientras una célula este viva trasmitirá mensajes. Por eso mismo prefiero los términos de actividad o reposo, para indicar si una célula se encuentra transmitiendo mensajes en mayor intensidad, o si se encuentra “descansando” y su actividad informática se encuentra en su estado basal, respectivamente. La misma idea de actividad y reposo se puede aplicar al sincitio informático; en ningún momento el 100% de las células estarán en actividad o en reposo; la actividad o reposo sincitial es un concepto relativo, en cifras proporcionales se diría que un individuo humano se encuentra activo (o despierto), si y solo si, más del 50% de sus ordenadores celulares se encuentran activos, si es menos del 50% se diría que la persona se encuentra en reposo. Igualmente se aplica a la actividad o reposo, de órganos, sistemas, tejidos, nódulos biocibernéticos, glándulas, o centro anímicos, en ciertas circunstancias el individuo puede estar en reposo, mientras que algunas áreas del sincitio se encuentran activas, por ejemplo durante el sueño, mientras la mayor parte de las células se encuentran en el ciclo de reposo, los ojos tienen movimientos rápidos y el cerebro aumenta su actividad nerviosa y su metabolismo hasta en un 20%, lo que se denomina sueño paradójico, debido al contraste entre el reposo del dormir, y la actividad cerebral del sueño durante los movimientos oculares rápidos (MOR22). Hipótesis sobre el arranque: El programa autómata de arranque de un nuevo ser pluricelular demanda que primero sea instalado y activado el programa de identidad y de orientación en tiempo y espacio. Al momento de la fecundación, el cigoto instaló y activó las partes del programa genómico correspondiente a la identidad del Yo Autómata

22 Se conoce mejor en inglés: “rapid eye movement” (REM). Nota del autor.

(YoA) y los de la orientación en tiempo y espacio (que van juntos), de tal forma que las células que se van integrando al sincitio embrionario puedan seguir patrones precisos de ingeniería y arquitectura del nuevo ser en construcción. Se trata de la identidad común que resulta de la integración biocibernética del CIIC y de todos los CICs del individuo, así como de todos los G4Det celulares, en la formación embrionaria, y durante toda la vida.

El programa autómata de arranque está fuera del control o intervención de la conciencia del nuevo ser, y no podría ser de otra forma puesto que esta no existe al momento de la fecundación. Redundando, el YoA es un programa eficaz para construir un nuevo ser, para organizarlo, e instalar los programas operativos de base, incluyendo los indispensables para respirar, mantener el latido cardiaco y la circulación sanguínea, para alimentarse, excretar, y otros más, igualmente se instalan y configuran los programas de base que permitirán posteriormente los utilitarios para el desarrollo del lenguaje, y muchos otros propios de las capacidades intelectuales del ser humano. Haciendo a un lado los casos de excepción, el alma humana se encuentra incompleta desde el huevo hasta los 4 o 5 años de edad, de ordinario, hasta los 3 o 4 años de edad, el alma humana no es muy diferente del de cualquier otro animal, incluso en diversos aspectos, el alma animal nos supera en mucho respecto a habilidades físicas, identidad autómata, y sobre todo en la capacidad de supervivencia por si mismo.

Orientación espacial. Una célula se orienta gracias a su G4Det, un ser pluricelular necesita además disponer de un sistema de socialización de la orientación, y generar una información comunitaria a la que he denominado orientación pluricelular en cuatro dimensiones de espacio y tiempo (OP4Det). Para poder actuar al unísono, el ser pluricelular necesita de un sistema específico establecido en diferentes partes coordinadas del sistema nervioso. Las bases de la orientación espacial del animal pluricelular son las mismas que las estudiadas a nivel celular. Los datos recabados mediante la vista; el oído interno, específicamente en el órgano de Corti; y transmitidas el cerebelo; le permiten ubicarse en las tres dimensiones espaciales; mediante complejas ecuaciones inconscientes, el individuo puede ubicar cualquier objetivo en el espacio con una precisión extraordinaria. Las bases de la



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orientación son, igual que en la célula, el

gravedad y magnetismo terrestre, y el posicionamiento solar, y lunar, en el ser pluricelular se adicionan los datos propios de la localidad, montañas, ríos, mar, lagos, rocas, barrancas, etc.

Orientación gravitacional. He sugerido que debe haber un mecanismo fisiológico en el ADN capaz de percibir el magnetismo y la gravedad terrestre, y muy posiblemente las fuerzas gravitacionales del Sol y la Luna, además de las fuerzas magnéticas del medio circundante. No obstante que ese mecanismo hipotético resta desconocido, me he atrevido a proponer que de existir, éste debe responder con la síntesis de ciertas proteínas a las que he denominado “barogénicas”23. Por otra parte, se pudo conocer la enorme importancia de la gravedad terrestre en la fisiología humana hasta que los horizontes de exploración de la tierra quedaron pequeños ante la curiosidad exploradora del hombre, y este extendió sus pasos hasta el espacio exterior, ahí donde desaparecen los efectos de las fuerzas gravitatorias.

Orientación temporal. El cronómetro nervioso general (NGt) se encuentra en el sistema nervio central (SNC). En los organismos pluricelulares la expresión genómica circadiana de cada célula en lo individual requiere ser sincronizada por una estructura jerárquica superior, a fin de dar origen a los diferentes ritmos circadianos, al parecer, en los mamíferos, esa estructura superior, o marcapaso central para los ritmos circadianos, se encuentra localizada en la región del hipotálamo anterior, precisamente en los núcleos supraquiasmáticos, existen ahí unos pocos miles de neuronas que en el hombre tienen la propiedad de generar ritmos de 14 horas, aún aislados del resto del cerebro24.

Corazón como cronómetro. El latir del ser, según la MTMX, depende de teyolia, el espíritu del corazón, e ihiotl, el espíritu de la respiración. El 23 Proteínas barogénicas, neologismo propuesto por el autor para referirse a las proteínas que los genes producen por efecto o respuesta a la gravedad y/o magnetismo terrestre, el término se forma del griego, baro-, peso o pesadez, y -génico, lo relativo a los genes. Aunque todavía no han sido suficientemente identificadas, algunas de las proteína barogénicas serían: la sintetizada por el gen Sonic Hedgehog, la Nodal (de Hensen), Lefty, Activin βB, Snail, y la del factor de crecimiento de fibroblastos-8. Nota del autor. 24 Cardinali, Daniel P. Cronobióticos: cómo mover los engranajes del reloj biológico humano. Investigación y Ciencia. Septiembre, 2001, número 300, p. 44.

corazón es la representación de Tonatiuh (el Sol) al interior del organismo humano, y el pulmón, la de Ehécatl (la deidad del Viento), en este contexto el corazón es una braza que se enciende con el viento, y late al ritmo de la luz solar. Para los indígenas mesoamericanos el Sol era como un cronometro del cielo, era evidente que marcaba los ciclos del día y la noche, necesariamente marcaría también el ritmo del corazón. No encuentro otro cronómetro mejor para determinar le vitalidad y la esperanza de vida de un individuo, que el latir de su corazón.

Tres leyes cardiodinámicas. De la fisiología comparada con otras especies, se pueden sacar algunas conclusiones, a mi entender, los datos del peso, longevidad y signos vitales, sugieren tres leyes hipotéticas relacionadas con la física cardiaca.

Primera ley. Con algunas variables entre las especies, se percibe la existencia de una relación entre la masa corporal y la frecuencia cardiaca (e igualmente respiratoria), se podría decir en términos muy relativos que la frecuencia cardiaca es inversamente proporcional al peso corporal de una especie, la frecuencia cardiaca aumenta en la misma medida que se reduce el peso corporal; Segunda ley. Existe otra relación entre la frecuencia cardiaca y la longevidad, nuevamente en términos relativos, la longevidad de una especie es inversamente proporcional a la frecuencia cardiaca, mientras esta es la frecuencia cardiaca es mayor, la esperanza de vida de una especie se reduce. Tercera ley. Con sus matices y límites, la temperatura de una especie esta en relación directa con su frecuencia cardiaca, mientras más rápido late el corazón, la temperatura corporal es también mayor y con ella la entropía, en el hombre la frecuencia cardiaca aumenta 18 latidos por minuto por cada grado Celsius en que se eleva la temperatura corporal (10 latidos por cada grado Farenheit), hasta los 40.5 °C, por arriba de esta cifra, la frecuencia cardiaca puede disminuir por efecto de la fiebre que debilita el músculo cardiaco. Las tres leyes descubren el objetivo fundamental de la organización multicelular: los seres unicelulares se asociaron con el objetivo de extender temporalmente su existencia en un ser pluricelular. La vida de los seres unicelulares es demasiado corta, para enfrentar la fugacidad de la existencia, algunos de esos ellos optaron para



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asociarse y prolongar la vida en una entidad

mancomunada, sacrificaron eficiencia de masa vital a favor de un periodo de vida mayor por individuo.

Comunicación y orientación espacial

El ser pluricelular requiere de una adecuada orientación espacial, no la suma de la orientación celular individual, sino una integración única que permita la autoubicación de la comunidad celular, como la confluencia de datos espaciales para ubicar cualquier otra cosa externa en las tres coordenadas cartesianas (x, y, y z), y todavía más complejo es la ubicación del movimiento, y del peso de las cosas. La orientación se realiza básicamente mediante dos sistemas, el nervioso (SN) y el de comunicación celular primitivo y no nerviosos (SCCP), dedico algunas líneas al primero, el más conocido, y un poco más al segundo propiamente desconocido por la fisiología moderna.

Orientación nerviosa del espacio. La información para la orientación en el espacio proviene de cuatro fuentes: en gran parte de los receptores vestibulares, siendo igualmente importantes los datos provenientes del sentido de la vista, y de los propiorreceptores de las cápsulas articulares que aportan datos sobre la posición relativa de las distintas partes del cuerpo así como de los externorreceptores cutáneos, sobre todo los del tacto y presión. La información procedente de las cuatro fuentes, se integra a nivel cortical, permitiendo una imagen continua de la orientación del individuo en el espacio25. El vestíbulo es además sensible a la temperatura, el frío o el calor pueden trastornar las funciones del equilibrio. De manera hipotética, se puede suponer que el vestíbulo, la piel, y el propio sistema nervioso central, tengan otras formas de sensibilidad no estudiadas o poco conocidas, como por ejemplo la posibilidad de percibir los campos magnéticos del entorno e incluso el de la tierra.

Control del movimiento y la aceleración. En todos los mamíferos, incluyendo a la especie humana, las máculas del utrículo y el sáculo son sensibles a la aceleración lineal, de manera más explícita, el utrículo responde a la aceleración horizontal y el sáculo a la vertical. Debido a que

25 Ganong, William F. Fisiología Médica. Manual Moderno, 18ª Edición, México, 2002, página 203.

los otolitos tienen una densidad mayor que la endolinfa, la aceleración en cualquier dirección tiende a desplazarlos en dirección opuesta, más que desplazarlos en sentido inverso a la dirección de la aceleración, lo que ocurre es que la inercia de los otolitos hace que estos se desplacen con menor velocidad que la endolinfa en el sentido de la aceleración, este rezago de los otolitos dobla la prolongación de las células ciliadas en sentido opuesto a la aceleración, lo que a su vez genera actividad en las fibras nerviosas26. En ausencia de los movimientos de la cabeza, la mácula mantiene una descarga tónica, debido a la atracción que produce la gravedad terrestre sobre los otolitos27. Los potenciales que se generan en los receptores son parcialmente responsables del enderezamiento de la cabeza, además de intervenir en el mantenimiento de otros ajustes importantes de la postura corporal. Las respuestas de la mácula a los estímulos son ordinariamente de naturaleza refleja, sin embargo, los potenciales de membrana llegan hasta la corteza cerebral, en donde supuestamente el movimiento adquiere una percepción consciente, además, la corteza proporciona parte de la información necesaria para la orientación en el espacio28. La unidad para la orientación se conforma con las propias dimensiones del individuo. Los animales superiores e incluso los insectos disponen de mecanismos muy sofisticados de orientación espacial.

Redes neuronales cibernéticas. Los especialistas en informática y ciencias de la computación han venido desarrollando complejos de circuitos electrónicos que pretenden imitar la forma en que trabajan las redes de neuronas del sistema nervioso; para esto, han tenido que excluir la intención de generar resultados con datos cerrados, o de exactitud absoluta, tal y como ocurre con la lógica difusa, las redes neuronales electrónicas, únicamente producen resultados aproximados29 y con cierto gr

Ontogenia de la red fibrócítica, base de la comunicación ... · Por analogía, el sistema...

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