N° 74 - Octubre 2012

www.pescatotaldigital.com.uy Revista PESCA TOTAL digital -2

PESCA TOTALPESCA TOTAL

digitaldigital

PESCA TOTAL — REVISTA DIGITAL Es una publicación gratuita que se distribuye vía mail, realizada por amantes de las actividades al aire libre y pescadores deportivos para pescado-res deportivos Para recibir la revista enviar un mail solicitándola a la siguiente dirección: [email protected] o registrarse en nuestra página WEB www.pescatotaldigital.com.uy Para enviar artículos, sugerencias o comentarios a la revista, enviar el artículo adjunto a: [email protected] Preferentemente en formato Word con las fotos aparte. Visite: www.pescatotaldigital.com.uy COLABORADORES DE PESCA TOTAL Roberto Tagle Fernando Troccoli Prefectura de Canelones Carlos Damiano Fernando Ricca Daniel Siri Dr. Fabián García Jorge Curbelo José L. Reboulaz Diego Gutierrez Uruguay Sánchez Fernando Martinez Ricardo Faccini Mario Acosta Rius Dirección y Edición: Raúl Bove Relevamientos: Miguel Trípani Dep. de Turismo: Lic. Alberto Guardia Dep. Marketing Pablo Bove Pesca Total digital es una revista digital mensual que se distribuye en forma gratuita. Las notas firmadas no reflejan necesariamente la opinión de la editorial, por lo tanto, corren por cuenta exclusiva de sus autores.

Registro derecho de autor LEY Nro. 9739 Inscripto en el libro 31 del registro con el número 369

Otorgado el 25 de abril de 2008

INDICEINDICE 7474

EDITORIAL

VARIADA DE COSTA FERNANDO MARTINEZ

MOSQUEANDO EN EL RIO DE LA PLATA MIGUEL TRIPANI

ESQUINA DARIO PEREZ

BROTOLAS HECTOR ABALDE

GRUTAS DE SALAMANCA LIC. ALBERTO GUARDIA

TARARIRAS LAGUNERAS MIGUEL TRIPANI

FIN DE TEMPORADA JORGE CURBELO

BREVE HISTORIA DE LA ARQUERIA ANDRES ALMANSA

CONOCIENDO NUESTRAS ESPECIES MARIO ACOSTA RIUS

CORREO DEL LECTOR

LAS RECETAS DE DOÑA RAMONA

CUENTOS DE FOGON LUIS DELPRATO

PESCA TOTAL PESCA TOTAL PESCA TOTAL digitaldigitaldigital


EDITORIALEDITORIALEDITORIAL

En este segundo mes de nuestro séptimo año, siempre pensando en ustedes, quienes nos si-guen mes a mes y para quienes trabajamos, instrumentamos, aprovechado el soporte en In-ternet de PESCA TOTAL digital, la plataforma ideal para que “TU PROGRAMA DE PESCA;

EL DEPORTE CHARRUA” se encuentre disponible las veinticuatro horas para así disfru-tarlo en plenitud. Es entonces que en este mes de octubre la asociación de estos dos emprendimientos realiza-dos por pescadores para pescadores van a estar a un sólo “clic” de todos los aficionados a la pesca deportiva, y las actividades al aire libre. Para esto nos apoyamos en las múltiples aplicaciones que este mundo cibernético actual nos brindan, tal como youtube, dónde en principio se van a encontrar alojados los programas que a partir de este momento podamos generar, sin olvidar el extenso archivo con el cual conta-mos y al que seguramente apelaremos para mostrar otras vivencias inéditas. Al frente del programa seguirá Miguel Tripani, el que en cada uno de ellos nos dejará, tal cual lo ha realizado hasta el momento, inolvidables imágenes de inolvidables pesquerías. No-sotros estaremos como siempre junto a él brindando todo el apoyo necesario para lograr un producto de calidad que obtenga la aprobación unánime de quienes nos siguen prácticamente desde todo el planeta, ya que estamos presentes en ciento trece países. Estamos además en tratativas con un número importante de canales de cable, para que de este modo llegue también a quienes no tienen acceso a Internet. Esperamos lograr la comprensión de los futuros anunciantes en el poder de esta herramien-ta, nueva e innovadora al igual que PESCA TOTAL digital; la primer revista en su tipo, la de mayor difusión en nuestro país y la única con presencia internacional.

GRACIAS A TODOSGRACIAS A TODOSGRACIAS A TODOS POR HACER CADA VEZ MAS POR HACER CADA VEZ MAS POR HACER CADA VEZ MAS

GRANDE AGRANDE AGRANDE A

PESCA TOTAL digitalPESCA TOTAL digitalPESCA TOTAL digital www.pescatotaldigital.com.uywww.pescatotaldigital.com.uywww.pescatotaldigital.com.uy

Por: Raúl BovePor: Raúl BovePor: Raúl Bove


Texto y Fotografía: Fernando MartínezTexto y Fotografía: Fernando MartínezTexto y Fotografía: Fernando Martínez

El menguante del mes de septiembre resultó sumamente redituable para la pesca variada de costa. Todos aquellos que se animaron a realizar alguna hora en los tradicionales pesqueros de la Costa de Oro, obtuvieron respuestas varias de distintas especies que pulularon en todo el departamento Canario. La ciudad de Atlántida, como así mismo Las Toscas y Parque del Plata recibieron la visita de muchos pescadores de distintos puntos del país que poblaron sus playas con los distintos

“artes”, quienes junto a los locales pudieron realizar muy buenas pes-cas tanto diurnas como nocturnas. Trataremos en esta nota realizar una breve reseña de los apostade-ros tradicionales de esta zona y que se conocen por los nombres vernáculos con los que los propios pescadores los han señalado a través de muchos años y los cuales hoy día son adoptados como ele-mento de identidad que nadie des-conoce.


Comenzamos esta reseña en el oeste de Atlántida en el muy tradicional apostadero conocido como “El Aguila”. La zona de playa comprendida desde esta emblemática construcción hasta el último espigón de contención de arena se ha caracterizado desde siempre como uno de los mejores, sino el mejor lugar en el cual practicar la pesca de “borriquetas”. Antaño el mar se encontraba mucho más retirado. Hoy día están faltando más de ochenta metros de costa, pero pese a esta variación costera, aún mantiene el fondo de tosca a unos cincuenta metros del rompimiento de las olas, el que con las condiciones óptimas, logramos siempre encontrar muy buenos ejemplares de la especie sin olvidar brótolas, corvinas y peje-rreyes. No bien nos desplazamos hacia el este nos encontramos con “la bajada vieja”; “calle 14”, para luego interrumpir estos apostadero hasta llegar a “la bajada del Cholo” o bajada de lanchas. Esta primer nomenclatura es la que más nos gusta recordar, ya que la misma homenajea a un viejo pescador artesanal el cual hace ya unos años que no se encuentra entre nosotros.


Aquí encontramos dos zonas muy bien definidas, la que está al oes-te de la bajada que conserva las características antes menciona-das y la que continúa al este con fondo rocoso y que se extiende hasta unos cuantos metros supe-rada la visión perpendicular a la “Isla de la sirena”, más conocida como “La isla de Atlántida”. Toda esta zona es muy frecuenta-da como pesquero nocturno por la comodidad de acceso y lo ilumina-do que está el estacionamiento, permitiendo que si nos apostamos cerca de la propia bajada de lan-chas, podemos aprovechar esta luz para hacer mucho más cómoda la pesca. En este punto nos debemos dete-ner y señalar para todos los esta-cionamientos que encontramos so-bre la rambla de la ciudad el cui-

dado que se debe tener en los últimos tiempos ya que la delincuencia no descansa, sino que va en aumento y sabemos de coches robados o cristales rotos que muchas veces cuesta más su reparación que lo que estos inadaptados puedan sustraer.


Seguimos nuestro recorrido y antes de llegar a “la piedra lisa” encontramos zona conocida como “playa brava” con características similares a “El Aguíla”. El acceso es a través de una rampa utilizada en temporada para los bañistas y que fuera de ella sirve de mucho para llegar a la costa con todos los petates. La piedra lisa, denominación que se ganó dada la forma y superficie que el trabajo del mar le

dio luego de muchos años de golpear sobre ella, es un em-blemático pesquero para la pesca del pejerrey en los meses de invierno. A sus costados se forman “pozos” en los cuales solíamos pes-car muy buenas tamberas. El sector de playa entre es-ta y el muelle es además un muy buen pesquero de blan-cas.


Llegamos en nuestra recorrida al muelle de Atlántida, denominado en estos nuevos tiem-pos como “Piedra Lisa”, pero que los más vie-jos recordamos como “de los banquitos”, alu-diendo a los tres bancos que se elevaban so-bre su estructura mucho antes de que se construyera el muelle. Muchos de nosotros hemos cumplido innume-rables horas sobre la roca primero y más tar-de sobre el muelle en unos de los mejores pesqueros de todo el país, pero que poco a po-co va perdiendo el esplendor que la abundan-cia de peces le hizo ganar con total justicia por la predación que ejerce la pesca comer-cial. Tamberas, blancas, pejerreyes, brótolas, y las buscadas negras nunca faltaron a la cita

con los pescadores deportivos cuando llegaba la fecha de su presencia y se daban las condi-ciones necesarias. Pero pese a su merma quienes aún se aventuran a hacer “unas cuantas horas” desafiando in-clemencias del tiempo logran su recompensa por la generosidad del pesquero. Abandonamos esta zona de fondo total-mente rocoso con mucha agarradera que obliga a gastar en consecuencia también mucho material para ingresar a una zona de playa muy diferenciada de la del oeste de la ciudad. Aquella totalmente playa que se profundiza luego del banco de arena que normalmente encontramos a unos treinta metros de la costa, y esta que presenta una “primer ca-nal” relativamente profunda y un banco a unos cincuenta metros con una caída, ahora si totalmente profunda, llegando a cerca de cuatro metros en ciertos lugares. El panorama no cambia aún dejando Atlán-tida, para pasar por Las Tosca y finalizan-do en Parque del Plata.


Es así que transitando la rambla hacia el este nos encontramos con “estacionamiento alto”, “la bajada de las viviendas”; “la dos B”: “Riomar”, “el club las Toscas”; la principal, etc, luga-res que cuando la pesca está presente denotan gran cantidad de móviles en sus respectivos estacionamientos. Los registros gráficos de esta nota corresponden a una pesca realizada en los primeros días del mes de setiembre en la “parada siete” de Parque del Plata en un fin de semana que se nos dieron todas las condiciones para lograr lo excelentes resultados que todos pueden apreciar. Increíblemente con las mismas condiciones se nos dio una pesca variada también increíble, logrando capturas de especies que no suelen coincidir, como corvinas, brótolas y borriquetas. Señalaremos solo a modo de comentario la utilización de equipos totalmente equilibrados pa-ra lograr lances mayores a los ochenta metros a los efectos de lograr superar el banco de arena que mencionamos. Carnadas tradicionales tales como camarón y lisa; sin olvidar la vaini-lla para tentar aún mas a las brótolas. Los pesqueros de toda esta zona siempre pagan y quedan a un paso de la Capital. Una escapada puede deportar los mismos resultados: una variada inolvidable.


Desde que me considero un pescador deportivo, Desde que me considero un pescador deportivo, Desde que me considero un pescador deportivo, uno de mis grandes objetivos ha sido ir sumando uno de mis grandes objetivos ha sido ir sumando uno de mis grandes objetivos ha sido ir sumando nuevas especies a mi lista de peces capturados. nuevas especies a mi lista de peces capturados. nuevas especies a mi lista de peces capturados. Lo mismo me sucedió cuando empecé a pescar Lo mismo me sucedió cuando empecé a pescar Lo mismo me sucedió cuando empecé a pescar con mosca. El primer objetivo era capturar ta-con mosca. El primer objetivo era capturar ta-con mosca. El primer objetivo era capturar ta-rariras laguneras, luego de éstas la idea era ir rariras laguneras, luego de éstas la idea era ir rariras laguneras, luego de éstas la idea era ir sumando especies con esta modalidad para po-sumando especies con esta modalidad para po-sumando especies con esta modalidad para po-der disfrutar de manera superlativa la pelea de der disfrutar de manera superlativa la pelea de der disfrutar de manera superlativa la pelea de cada especie con ésta técnica tan delicada. Más cada especie con ésta técnica tan delicada. Más cada especie con ésta técnica tan delicada. Más tarde habrá tiempo para buscar mayores portes tarde habrá tiempo para buscar mayores portes tarde habrá tiempo para buscar mayores portes y cantidades ahora el éxito lo encuentro logran-y cantidades ahora el éxito lo encuentro logran-y cantidades ahora el éxito lo encuentro logran-do nuevas especies con mis engaños y mi astucia.do nuevas especies con mis engaños y mi astucia.do nuevas especies con mis engaños y mi astucia.

Texto y Fotografía: Miguel TripaniTexto y Fotografía: Miguel TripaniTexto y Fotografía: Miguel Tripani


Es así que un lindo sábado a la mañana nos juntamos en Atlántida, el director de la revista, Raúl Bove, el gerente del departamento de marketing, Pablo Bove y el jefe de relevamientos quien suscribe. Cada títulos!, que hasta parecemos una mega publicación internacional. Raúl el día antes había pescado anchoas y pescadillas y cambiamos una salida para el centro del país para disfrutar de esta espectacular pesca antes de que se vinieran los temporales anunciados.


Con el sonar encendido a una marcha suave, buscábamos el cardumen, pero además tiramos un señuelo de arras-tre que con multifilamento y a cuaren-ta metros de la embarcación no des-cendiera más de cincuenta centíme-tros. Llegando a las dos millas náuticas, don-de se encontraban el día anterior, la pantalla que se llena de peces y casi al mismo tiempo mi caña que acusa pique. Ahí fondeamos el ancla y comenzamos a disfrutar de lo que a la postre se transformaría en la mejor pesca activa de nuestras vidas. Cobré la pieza que prendimos en tro-lling y comienzo a practicar bait cas-ting con resultado inmediato, por lo que a la tercera pieza cobrada le digo a los compañeros; esta es la oportuni-

dad de pescar con mosca esta especie y ni lerdo, ni perezoso, comencé a armar mi equipo número ocho (#8) de nueve pies, (9’) con línea de hundimiento, líder de nylon progresivo de monofilamento 0,60mm a 0,50mm, terminando por un 0,40mm donde sujetamos un líder de acero para 15libras con delicado pero fuerte conector de alambre que nos permitiera cam-biar rápidamente de mosca, pero que nos brindara seguridad a la hora de recuperar las pie-zas.


Tomé posición en la proa de la lancha para no molestar a los compañeros con los cas-teos, pero además para te-ner una perspectiva de pes-ca mucho mejor. Comencé pescando con una mosca sencilla (streamers) que imitara a un pececito, en fibras fuerte para que soportara la mayor cantidad de ataques posible. La até con fibras de cintas de bol-so o mochila, bien peinadas, con hilo de keblar también

material muy resistente y en colores azul bolita en el lomo y rosado claro en la panza. El anzuelo era un modelo maruseigo de MarinSort número 26. Todo bien pegado con adhesi-vo instantáneo. Comencé hacer los lances y en las primeras recogidas ya tuve respuestas, algún tarascón y vi varias persiguiendo la mosca gracias a la claridad del agua y los lentes de sol polarizados, pe-ro no lograba pieza aún. No demoré encontrar la técnica para que mordieran bien y poder prenderlas. Había que recoger rápido y cuando las anchoas o buereles se acercaban, con la punta de la caña le hacía un movimiento lateral como si el pequeño pez quería cambiar el rum-bo de su corrida y ahí era cuando estos cazadores apuraban y tiraban los zarpaos. La pelea todo un cúmulo de muchas sensaciones. Recuerdo la primera pieza concretada segu-ramente la más grande que cobré con mosca ese día, llevó toda la línea que tenía fuera del reel y pelearla con todas esas corridas, algún que otro salto y muchas veces con grandes arremetidas a las profundidades era todo un espectáculo. Si a todo eso le agregamos que el reel recoge uno a uno, imaginen que lucha tremenda. De todos modos la gran mayoría las prendí a pocos metros de la embarcación y las peleaba a pura acción de caña tomando línea con la mano a medida que se iban rindiendo. Estaba más que contento, no solo estaba sumando una nueva especie capturada con mosca a mi haber, si no que además estaba capturando piezas a buen ritmo, el cual podía medir com-parando con las que cobraban mis compañeros con currica o con señuelo.

Si tiene un cuento que merezca ser relatado junto a un fogón no dude en enviarlo

para que pueda ser publicado en esta sección.

Todos tenemos algo en nuestra memoria, cierto o fantasía que merece ser contado.


Pero aún quedaba alguna sorpresa más; prendo otra bicha que peleaba muy lindo y me dije para mi; esta es la más grande por como pelea y hace fuerza. Mi sorpresa fue tal, al ver en la punta de mi sedal una bella palome-ta. Eso significaba otra especie con mosca y a pesar de su porte mediano como dice Raúl, vendió cara su derro-ta y me dio otro motón de sensacio-nes difíciles de describir. Como la cosa venía muy bien, era hora de hacer pruebas. La mosca no daba más, le quedaban la mitad de los pe-los, por lo que aproveché para probar una mosca que bauticé “Mitrí” ya que combiné algunos materiales buscando buen hundimiento, algo de vibración y resistencia a peces muy dentados. Con esta lograba ver muchos más in-dividuos tras ella pero me costó

hacer que la tomaran y lo logré cuando me puse la caña bajo el brazo y recogía lo más rápido posible; como si quisiera que no la agarraran y ahí logre capturas. También pienso que el color de la primera les resultaba mucho más atractivo, pero en defini-tiva me seguían dando satisfacciones. Finalmente se me ocurre tirarles con un poper de pelo de siervo al cual logré también que lo tomaran. Seguramente todo esto fue posible por la gran cantidad de peces que habían y la competencia por alimento era muy grande. Pero como muchas veces hemos escuchado; las oportunidades en la vida hay que saber aprovecharlas y eso fue lo que hice; la verdad estoy cada vez más seguro de que la pesca deportiva es la actividad que más satisfacciones le da a los individuos y si nos enfocamos en diversificarla, buscando diferentes especies y con dife-rentes técnicas, cada día de pesca que pase, vamos a ser más felices. Solo el hecho de estar junto a la naturaleza es más que satisfactorio, si a eso le sumamos que lo hacemos junto amigos y que esos lasos se estrechan cada vez que nos juntemos y le seguimos sumando cosas, como el hecho de cobrar peces con la modalidad o técnica que ele-gimos y la especie que queríamos, eso es el éxito en la vida y no el dinero o los bienes mate-riales, si bien ayudan. El éxito en la vida es compartir con nuestros pares lo que nos gusta y hacerlo de la manera que elegimos. Por eso somos seres sociales y tenemos la capacidad de elegir lo que sea; aprovechemos esa diferencia que tenemos con el resto de los seres vivos, respetemos a ellos también y disfrutemos de la vida que es corta. Les deseo las mejores de las pescas para ésta primavera que comienza.


l segundo fin de semana de sep-tiembre estuvimos en una salida familiar por primera vez en Ar-

gentina en la ciudad de Esquina, provincia de Corrientes. Junto a mis padres arribamos a la ciudad después de un viaje de diez horas, sobre la tardecita del día trece. Nos hospedamos en las cabañas que ya teníamos reservadas con antelación y después de descansar, fuimos al comedor un rato antes de que estuviera la cena.

Ahí empezaron las expectativas con la pesca cuando en un comedor muy acogedor veíamos las paredes adornadas con muchísimos cuadros de pescadores con sus presas. Es ese el momento que a uno le parece verse en uno de esos cuadros, mientras en el magnífi-co parrillero íbamos palpando como un cordero se cocinaba lentamente a las brasas. Se podrán imaginar que con el hambre que traíamos del viaje de el viaje; como le dimos !!! Y como si fuera poco unos postres riquísimos. Al otro día con las pilas cargadas nos levantamos a las seis y media a desayunar, teniendo que resaltar que estaba muy bueno y abundante. A eso de las siete ya estábamos en la bajada de lanchas en dónde nos designaron un guía y una embarcación muy cómoda de seis metros treinta de eslora, del tipo trucker con un mo-tor 115 hp cuatro tiempos.

Texto y fotografía: ´Darío Perez


Transcurrido un tiempo cambiamos a pescar al garete, que por si alguno no la conoce les paso a comentar que se sube al inicio de la corredera, le bajan un motor de proa eléctrico que sir-ve para ir orientando la embarcación en la corriente y ahí se bajan las carnadas con un plomo corredizo de veinte gramos dependiendo de la corriente . En esta modalidad también tuvimos muchos piques, a los que había que separarlos de lo que parecían piques cuando la carnada iba arrastrando en el fondo y se enganchaba en el mismo. Después de la jornada de la mañana el guía eligió el dorado mas grande para ser el almuerzo. A eso de la tres y media bajamos en una isla donde se encontraban ya dos embarcaciones de la misma empresa. El momento resultó propicio para intercambiar experiencias, anécdotas y al mismo tiempo degustar una picada de chorizo y queso con los otros turistas mientras los guías preparaban los dorados a al estaca. Luego de almorzar y descansar un rato le salimos a la pesca de nuevo teniendo muchos pi-

ques. Para que tengan una idea en el día gastamos 120 morenas, eso habla a las cla-ras de que hubo buena acti-vidad y donde pescamos do-rados no muy grandes, palo-metas, bagres blanco y un par de surubi’s chicos . A eso de las de las siete de la tar-de llegamos a las cabañas después de una jornada de pesca de doce horas en un día espectacular con mucho sol y muy sereno.


Salimos agua arriba por un eco sistema muy bonito de lagunas y canales que las iban comuni-cando entre sí. Navegamos unos cuarenta y cinco minutos a toda marcha casi sin poder con-trolar la ansiedad de echar los anzuelos al agua. Paramos en una corredera en la cual se fondeó la embarcación. Fue acto seguido dónde co-nocí las tan mencionadas morenas, a las que encarnándolas vivas las largábamos corriente abajo sin plomo, sólo con la línea. Como era de esperar por ser la primera vez en ese tipo de pesca, y teniendo poca experiencia, tuvimos que pagar el tan conocido "derecho de piso" ya que no llevamos los equipos precisos y nos encontramos con una pesca un tanto diferente a la habitual. Con la ayuda del guía que cumple un rol fundamental transmitiéndote toda su ex-periencia y sus ''maňas'' pudimos superar estos inconvenientes y ponernos casi “a tiro con la práctica” agarrándole la mano poco a poco.

Las empresas que anuncian en nuestra revista contribuyen a que puntualmente PESCA TOTAL digital esté mes a mes a disposición de nuestros suscriptores en la red.

La preferencia de ustedes es fundamental para la continuidad del apoyo incondicional que nos brindan.


Es en ese momento dónde uno sien-te el desgaste que tuvo al dejar de fluir la adrenalina que un poco an-tes corría por la actividad de pes-ca. Un poco antes de las nueve nos lla-maron a cenar. Nos esperaban con matambre a la pizza. pollo y chori-zo todo a las brazas. Buenísimo to-do junto con los postres!. Al otro día muy temprano desayunamos pa-ra volver a la'' cancha''. Estaba nublado y con mucho viento que dificultaba un poco la pesca ya que al no tener los equipos adecua-dos molestaba bastante. El monofilamento 0.50mm con el que cargamos nuestros reel’s era tabajabado mucho por el viento im-pidiendo que la carnada se alejara de la embarcación lo que dificulta-ba el pique.


Pero con el pasar de la mañana fue amainando lo que mejoró la situación y permitió volver a tener muchos piques de nuevo . Al mediodía paramos de nuevo en la isla y mientras le dába-mos a las empanadas los guías preparaban una olla con aceite para hacer una fritanga de pes-cado que les quedó buenísimo. Terminamos de almorzar y le salimos enseguida a la pesca aprovechando la ultima jorna-da que nos quedaba.

Seguimos obteniendo pesca variada como en la mañana y el día anterior. En una de las pasadas al garete un guía de otra embarcación le aviso por la radio [vhf] que ellos en un lugar habían tenido buenos piques al garete también. Nos acercamos al lugar y en vez de garetear fondeamos y tiramos donde ellos indicaron. Dejamos ir las carnadas con la corriente y empezaron los piques de a poco . Al rato el guía pincha un dorado aparentemente muy bueno pero como a doscientos metros. Me dice: -sacalo vos nomas. Después de pelear con el dorado y la corriente por unos diez mi-nutos lo subimos a la embarcación. Le calculamos que promediaba los siete kilos, lo cual para esa zona es bastante bueno. Mientras lo recuperábamos mi padre pincha otro de porte mas o menos parecido que también dio una buena pelea.


A ese punto estábamos todos re contentos con lo sucedido y como si fuera poco cuando mi padre estaba acercando el dorado a la embarcación encuentro entre las morenas entrevera-da, lo que ellos llama tararira, que no se parece en nada a las de acá, incluso dicen que no pi-ca en los anzuelos, le pregunto al guía si servía como cebo y me respondió que era muy buena para los dorados. Encarné con la tararira y antes de que el viejo subiera el dorado muy peleador yo ya había prendido otro muy bueno también con la tararira de carnada . Se ve que en ese lugar se encontraba un cardumen de dorados grandes y estaban muy acti-vos. Cuando terminé de sacar mi pieza que parecía hermana de las otras dos anteriores por el tamaño, comenzamos con el viaje de regreso de una hora, llegando de noche a las cabañas. Terminamos la jornada de pesca a toda orquesta y como si fuera poco para la cena nos espe-raban con asado, chorizos y vacio, todo a las brazas . Que más se puede pedir para un pesca-dor para pasar un día espectacular? Les paso a contar lo de los equipos de pesca: Lo ideal para mi y para ese lugar es llevar equipos livianos, ya que hay que estar todo el día con la caña en la mano. El largo puede oscilar entre 2.10m a 2.40m; de acción media de 20 a 40 libras y los reel’s que andan muy bien son los tipo huevito o galletita medianos. Los fron-tales para mi gusto no son indicados para ese tipo de pesca.


Todos utilizan multifilamento que es más resistente y no tiene memoria lo que hace tener mejor clavada y no precisas usar la línea tan gruesa dándole mayor sensibilidad y resistencia. En cuanto al hospedaje, nos alojamos en las cabañas ''Rancho Pelo Largo'', que son muy reco-mendables ya que tienen un sistema tipo “all inclusive”, con desayuno, vianda para la mañana, almuerzo al mediodía, cena y postres; todo a repetir cuantas veces quiera. No incluye las bebidas, pero tampoco matan en el precio de ellas. En la pesca la lancha está muy bien equipada, con guías muy bien e inclusive el dueño también saca gente a pescar y anda siempre en la vuelta. Es un tipo muy servicial y macanudo , enseguida hace amistad con todos. Incluyen por jornada de pesca cincuenta litros de nafta y cinco docenas de morenas, lo que se gaste después de eso lo cobran adicional pero a un precio normal. Nosotros cada día gastamos 10 docenas de morenas lo que nos deja tranquilo de que tuvimos bastante respuesta. Por último les puedo comentar que pasamos unos días preciosos de pesca en familia y si pu-diera iría mañana mismo de nuevo. Muy recomendable para salir de la rutina y el stress.


Fuimos este domingo después del mediodía a Las Toscas con la familia , yo por supuesto con mis cañas y pocas esperanzas de pesca alguna, pues después del temporal y con la cantidad de agua que había caído, pensé que las condiciones no eran las ideales ya que el agua estaría dulce. Sin embargo, nos encontramos con agua bien tapada, entreverada, viento norte, mar en condiciones ideales para la brótola. Llegamos a la una de la tarde a la costa en Las Toscas en la bajada C. La tarde preciosa y bueno; la pesca pudo más y plomo al agua. Al primer lance con camarón y lisa tirando lejos, en los primeros cinco minutos, acusa la primer pica-da, sutil como siempre, y cobro por suerte la primer Brótola.

Texto y Fotografía; Hector Abalde

Antes de organizar una salida de pesca infórmese de que está saliendo, dónde y con que. En los comercios del ramo le pueden brindar esta información. No se deje engañar por artículos y publicaciones en las cuales el relevamiento informado tiene varios meses de antigüedad. Lo publicado en PESCA TOTAL nunca es viejo. Tratamos de brindarles la realidad. Además en nuestro FORO tiene el pique, no solo al día, sino al instante. Vea interesantes rincones dirigidos a todas las actividades afines a nuestra afición. VISITE: www.pescatotaldigital.com.uy


De ahí en más armé la segunda caña, y sucesivos piques, todos de brótolas, no se hicieron esperar. Al final, pude cobrar unas 12 brótolas todas de muy buen tamaño, algún brotolín devuelto, y varias roncaderas también devueltas como corresponde, todas sanas. Algunas marcaron presencia con fuertes piques que incluso dispararon la chicharra del daiwa 20, cosa

que me sorprendió ya que no es normal este comportamiento en la especie. Se ve estaban con hambre y corriendo. La única que aflojó fue la primera. En fin, pasamos una hermosa tarde en familia , con pesca y todo!!!! A las cinco y media de la tarde emprendimos la retirada, ya que empezaba a quedar frío con la ida del astro Rey. Muy buena jornada, que valió la pena ya que volvimos con las pilas recargadas como para co-menzar la semana Laboral.


Texto y fotografía : Lic. Alberto GuardiaTexto y fotografía : Lic. Alberto GuardiaTexto y fotografía : Lic. Alberto Guardia

GRUTAS DE GRUTAS DE GRUTAS DE

SALAMANCASALAMANCASALAMANCA

MaldonadoMaldonadoMaldonado En esta oportunidad nos remontamos hacia las sierras para vivir las diferentes tonalidades de verde que nos regala nuestro campo. Innumerables matices de colores y solo nos acompañan los trinos de las aves pues el silencio domina todo el encanto natural del lugar, un lugar que sorprende por su belle-za paisajística, serrana, … al norte del departamento de Maldonado poco conocido para muchos.”Las Grutas de Salamanca”.* Formada seguramente por la constitución calcárea de algunos bloques de granito de las sierras, por tal motivo han perdurado a lo largo del tiempo y de la acción humana. Son las grutas más grandes del país, una de las cuales es una caverna que en su entrada tiene una abertura de 33 metros de ancho por unos 4 de altura.

Pasando la ciudad de Aigúa y por Ruta 13 a poco más de 20 kilóme-tros hacia el norte en el km 188 entramos al par-que natural antesala de las Grutas de Salamanca, un lugar de origen ge-ológico y producto de la erosión que nos brinda sus espectaculares for-maciones naturales en-clavada en las Sierra de los Sosas y a unos 200 metros de altura.


Como mencionábamos en la antesala a las Gru-tas se encuentra el Parque Municipal con mesa-das, parrilleros y parador a su pie que funciona en temporada. Se destaca una zona de camping y subiendo por la ladera rodeada de monte se-rrano nos encontramos con una vertiente de agua cristalina y posteriormente las grutas. La mayor de todas tiene unos mil metros cua-drados y en total son más de una docena de cavidades de piedra. El sendero de acceso principal surge desde el pa-rador, ascendiendo al cerro, el tupido monte serrano destaca sus especies la aruera, el tala, el canelón blanco como el negro, el chal chal, la palma pindó, el cipó, curupíes, styrax, etc. Luego de recorrer alre-dedor de 300 metros se llega a su cueva principal. En el sendero se abren múltiples ramificaciones para ir descubriendo una a una pero todas vuelven al mismo camino, donde a ambos lados de este se sitúan excelentes miradores desde donde verdes va-lles se abren entre las sierras re-galándonos una imagen espectacular de esta agreste región. Lo mismo nos pasará en su cima, las imágenes se suceden 360 grados. Las grutas cuentan con cuatro espa-cios famosos, “El Salón”, “La Secreta o la Escondida" de bordes rocosos, la Iglesia y el Cuarto de Lemos.


En primer lugar, el Salón, que es la cavidad de ingreso, la mayor de todas con una abertura de diez me-tros de alto la cual se puede recorrer casi en su totalidad. A sus lados otras cuevas se abren por do-quier. La bóveda de la cueva posee una grieta que la atraviesa longitudinalmente permitiendo su ilumi-nación y cuyas paredes cóncavas permite el continuo fluir de finos hilos de agua. El segundo espacio es el "Cuarto de Lemos" donde se afirma constituía la guarida que tenía un famoso matrero en ese lugar de apellido Lemos al que se accede por un pasillo estrecho de dos metros por 5 me-tros de largo, casi 3 de ancho y un poco más de un metro de alto y según cuenta la leyenda sigue escondi-do allí, en sus alrededores un tesoro. El tercer espacio es el llamado La Secreta, que se accede por un tubo de trece metros de largo por uno de diámetro. Es un espacio sumamente oscuro y de aire denso, de 5 metros de largo, 3 de ancho y 3 de alto.


Utilizadas como asentamientos indígenas o lugares de descanso en esta zona se han encontrado res-tos de tumbas indígenas. Hoy sus moradores permanentes son los murciélagos que cuando apenas en-tramos ya algunos revolotean por sobre nuestras cabezas, una de las cuatro especies que habitan es hematófaga, es decir se alimenta de sangre.** La vista es espectacular, con el Cerro de las Cuentas y el Cerro del Minuano y un valle encerrado en-tre el arroyo Aiguá y el Alférez.

El primero marca el límite en-tre Maldonado y Lavalleja. En el país existen varias gru-tas, las más conocidas son las Grutas del Palacio en Flores, las de Salamanca en Maldona-do, las de Arequita en Lavalle-ja, otras en el Cerro Largo (que dan nombre al departa-mento) con cavernas más chi-cas.

Las empresas que anuncian en nuestra revista contribuyen a que puntualmente PESCA TOTAL digital esté mes a mes a disposición de nuestros suscriptores en la red.

La preferencia de ustedes es fundamental para la continuidad del

apoyo incondicional que nos brindan.


En Carlos Reyles, Durazno encontramos otras que realmente son poco explotadas del punto de vista turístico, ni que hablar si llegamos a la gruta de los Helechos o a la de los Cuervos en el departamen-to de Tacuarembó o las Cuevas de San Antonio en Salto. * Las grutas o cuevas son oquedades (espacios vacíos en un cuerpo sólido) que se hacen en el proceso de formación de la roca o resultan del desgaste que se produce por la erosión causada por el viento o el agua, que en el caso de Uruguay es principalmente hídrica. ** Desmodus Rotundus o Vampiro común. Es el principal habitante de las Grutas de Salamanca que desde la entrada de la gruta, "El Salón", se escuchan sus chillidos constituyéndose en la colonia de vampiros más notoria del país.


Texto y fotografía: Miguel Tripani.Texto y fotografía: Miguel Tripani.Texto y fotografía: Miguel Tripani.

PRIMERO CON MOSCAPRIMERO CON MOSCAPRIMERO CON MOSCA Adoptamos esta modalidad para pescar tarariras tras la experiencia de varios años de pescarlas en spinning y comprobar que la gran mayoría de las veces en zonas con densa vegetación estas tomaban cada vez más firme los señuelos cuando estos eran más pequeños. Y lo que pasó fue lo que esperábamos; cundo aprendimos a colocar las moscas donde había que hacer-lo y hacerlas trabajar correctamente, fue más fácil concretar capturas que con señuelos. Esto no es siempre así, hay momentos y condiciones que favorecen a la pesca con mosca y otros mo-mentos y condiciones diferentes que favorecen a los señuelos. La mosca es muy efectiva a comienzo de temporada, dado a la delicadeza del engaño y cuando están buscando comer en donde hay vegetación es más efectivo conseguir concretar los piques.


Pero en espejos desprovistos de vegetación, con agua cálida y clara, los señuelos son capaces de cubrir más lugares no solo por las distancias de lance si no también por las vibraciones o ruidos que estos generan atrayéndolas de más distancia que una sutil mosca. Las fotos que ilustran la nota corresponden a una salida con clientes que recién comienzan a pescar con mosca y que además era la primera vez que intenta-ban capturar tarariras con arti-ficiales. Por tal motivo en primer lugar los llevé a pescar a un tajamar con agua clara donde no se hace necesario hacer grandes lances y donde además podrían practi-car la pesca a pez visto. Muchas veces los mosqueros pescamos a pez visto, o sea que vamos a un lugar nos movemos con cuidado y al divisar un pez la mayoría de las veces con ayu-da de lentes polarizados, trata-

mos de colocar la mosca de la manera más delicada posible, para luego pasarla cerca de el pez y hacer que estos la ata-quen o la persigan. El éxito no se logra cuando te-nemos el pez visto; luego de es-to viene lo más lindo de esta pesca. Primero tenemos que pensar como ellos y preguntarnos,

¿están ahí porque están cazan-do o porque están descansando y tomando la energía del sol? Si la respuesta es la primera (cazando) buscaremos un artifi-cial que imite algún animal que esté dentro de su dieta normal: ratón, rana, insectos. Si la respuesta es la segunda buscaremos un engaño ruidoso y de colores estridentes que las altere y repetir con estos las pasadas cerca del lugar para que enojadas les den una mordi-da y de esta manera poder pes-carlas. En esta jornada de pesquería los compañeros comenzaron probando con unos popers de pelo de ciervo de colores natu-rales (similar ratón o rana) con los cuales lograron hacer mover algunas de las tarariras, los que nos permitió saber donde esta-ban. Luego de insistir y ver que no tomaban estos engaños, de-dujimos que no estaban cazando y que había que irritarlas.


Cambiamos por una especie de popers un poco más chicos lla-madas “Rifle Express” pero ata-das en colores amarillo fluores-cente con rojo o con lila o azul. Con estas últimas logramos que le pegaran unas buenas atrope-lladas pero no ataques efecti-vos propiamente dichos. Acto seguido, las comenzamos a ver casi a flor de agua en esos ojos limpios entre los camalo-tes. Ahí concentraron los es-fuerzos y lograban ver como las tarariras salían tras la mosca pero no lograban que las mor-dieran. Luego comenzaron a pa-sarlas un poco más rápido por donde estaban las taruchas y popeando un poco más fuerte efectivamente se le tiraban muy enojadas. Pero aún por algún motivo no se lograban las piezas. Sucede que, el instante exacto para poder clavar el anzuelo es muy breve y además el éxito depende mucho de cómo la tararira toma el ar-tificial para que al momento de aferrar logremos clavar el an-zuelo. Muchas veces y al comienzo con esta técnica, la ansiedad nos gana y generalmente se la saca-mos de la boca antes de que la muerdan. Ojo, esto nos pasa a nosotros hasta el día de hoy, hasta que no entramos en calor como cualquier deportista, nos olvidamos de esos detalles que vamos ajustando a medida que se suceden los piques. Finalmente se lograron varios buenos ataques y una sola pieza

porque el resto siempre gana-ron la pelea, ya sea ganando las mugres o en esos eléctricos sal-tos. Por último logramos ver otra tararira un poco más gran-de que la cobrada y tras inten-tar con todas las moscas irri-tantes que teníamos y ver que la tararira ni se movía, pusimos un ratón de pelo muy bien atado y en el primer intento lo vio, lo siguió y lo tomó por la panza sin lograr pincharla por lo que se fue victoriosa.

Esta última estaba al acecho, tenía apetito y el ratón la tentó, por eso siempre hay que estar atentos. Finalmente fuimos a unas lagu-nas artificiales para regadío de chacras hortícola. En estas había mucho movimiento de mo-jarritas y dentudos y casi nada de vegetación y otra gran dife-rencia con el tajamar, el agua estaba algo turbia, o sea que a pez visto sería difícil pescar.


Por lo tanto había que pescar a ciegas como lo hacemos casi siempre con los señuelos. La técnica aplicada aquí era la siguiente: hacer pasadas con los popers en paralelo a la orilla y donde se movía alguna o donde se le tiraban a nuestra mosca y no las pinchamos le insistíamos hasta pescar-la o hasta que no atacaran más. Las tarariras son porfiadas pero hasta cierto punto, luego se moles-tan y no atacan más. Si les interesa esta pesca desde el mes pasado hasta marzo la hacemos en distintos ámbitos en un radio de la capital no mayor a los cien kilómetros. La pesca de las tarariras laguneras es la más activa y adrenalínica que tenemos en Uruguay y a pesar de que los portes rara vez son superlativos es una pesca más que divertida para todos. Para contactar: [email protected]


AHORA CON LOS SEÑUELOSAHORA CON LOS SEÑUELOSAHORA CON LOS SEÑUELOS La pesca de laguneras en spinning tiene la ventaja que la puede practicar desde un niño de cuatro años, hasta el más veterano pescador. Muchos dirán que estoy loco, como voy a poner a pescar a un niño de cuatro años con esta técnica, pero créanme, lo hemos hecho y no es ninguna locura. Primero le enseñamos a tirar un frontal chico con un pequeño plomo. Luego de que el niño asimiló bien todos los pasos lo llevamos a la laguna, buscamos la parte con vegetación y le colocamos un anti-enganche. El niño tira y recoge sin peligro y en varios momentos logra tener ataques en la superficie; los que los deja como locos. Y donde el factor suerte los ayude a pinchar una, ni les cuento la emo-ción de todos los presentes!!! Por otro lado mencioné el hecho de que la pueden practicar hasta los más veteranos. Sucede que generalmente los señuelos anti-enganches se logran tirar a muy buenas distancias lo que nos permite que; estando en un mismo punto de lance tenemos 180 grados para probar donde buscar. Sin mucho esfuerzo logramos tirar al menos cuarenta metros, estaríamos cubriendo una superficie de unos 400 a 500 metros cuadrados, quietos en un mismo lugar y en una laguna promedio de nuestro país, en esa superficie pueden haber de veinte a cuarenta tarariras. Son sin duda un montón de oportunidades. Luego de la pesca con mosca, con dos días más de calor acumulado, era hora de probar con los señue-los. Las dos alternativas de salida que teníamos eran para probar represas privadas.


Una de ellas en el departamento de Florida con datos de muy buenos portes y que no de-jan entrar a nadie era otro dato nada menor, pero con quienes conseguimos permiso no podíamos ir porque ese día no estaban en el barrio. La otra represa en el noreste de Canelones, prácticamente a la misma distancia de nues-tros hogares que la de Florida, pero con otros datos muy distintos. Me dijo quien me la recomendó: Hace como cuatro años que no pesca nadie porque un día aparecieron unos tipos con unas redes la colaron y ahora no hay nada. Los ojitos me brillaban y la cuenta salió en el aire. Una pareja que haya quedado, más toda la comida que se reprodujo sin depredadores naturales ya tenía que estar a punto de cara-melo. En términos matemáticos: un macho + una hembra o dos + mucha comida + cuatro años + cero extracción = muchas tarariras y algunas grandes.

Dicho y hecho, llegamos a la represa con el amigo Maximiliano Garrido, la vimos y nos encantó y las respuestas no se hicieron esperar. Maxi utilizó una caña de última generación, ultra liviana, Sumax Bulgari, entera de grafito, largo 1,78cm con un reel daiwa galleta, cargado con nylon Súper Raiglon 0,28 mm. Líder de acero bien finito conector de alambre y una rana anti-enganche Angler blanca con panza amarilla y boca plop roja.


Por mi lado comencé pescando con la vieja ca-ña de fibra hueca en dos tramos para andar más cómodamente con ella en la moto, reel también viejito marca Banax argentino con multi 0,25 pero que tuve que cambiar por el equipo frontal porque el reel estaba sin deva-nador lo que me generaba muy mal enrollado tras los golpecitos para hacer popear la rana y cada poco tenía que estar desenredando algu-na galleta. Comencé pescando con una rana Shang Prof americana marrón, la cual tuvo muchos ata-ques, pincho varias tarariras, pero no pude cobrar ninguna. Cuando digo muchos ataques, hablo de unos cincuenta en tres horas de pesca, pero las po-cas que logré que mordieran bien el señuelo o bien me ganaron la pelea o nunca tomaron la rana de manera tal que las pudiera pinchar. Cabe recordar que algunas de las que atacaron y de las que lo hicieron más lejos de la orilla, eran de un porte no menor a los dos kilos. Por otra parte Maxi, con su rana de colores más irritables, logró que la atacaran más firme que la mía, lo que le dio varias peleas que perdió en las mugres y una sola captura que a pesar de su pequeño porte, nos dio una satisfacción enorme porque cuando te ganan tantas peleas, poder ganar una es muy satisfactorio; además de la diversión de muchos ataques en una tarde muy agradable a pesar de la tormenta que rondó siempre, la captura era la frutillita de la torta.

Pescar tarariras laguneras con anti-enganches es de las pescas más difíciles que tenemos por-que hay muchos factores que juegan en nuestra contra: las mugres, los anzuelos con anti-enganches, la explosión de los ataques a flor de agua, la livian-dad del equipo etc. Pero como he dicho muchas ve-ces; “el éxito en la moderna pesca deportiva no se logra pescando más o la pieza mayor, si no que la satisfacción en es-tos tiempos de escasez de pe-ces se logra pescando un pez determinado, con una técnica determinada”


Amigos ésta pequeña reseña, es para informarles sobre el fin de la temporada de pejerreyes en Laguna del Sauce. Concurrimos a principios del mes de Setiembre, con amigos a la laguna, para comprobar lo que siempre escuchamos de boca de los aficionados que frecuentan este gran espejo de agua: -al fin de la temporada salen los grandes; y por suerte lo pudimos confirmar.

Bajamos la lancha a las nueve de la mañana, en una playita semi oculta, pegado al Yacht Club Laguna del Sauce. Zarpamos buscando la parte mas rizada de la laguna, a la que encontramos bien frente a la toma de OSE que surte de agua potable a gran parte del departamento de Maldonado.

FIN DE TEMPORADA FIN DE TEMPORADA FIN DE TEMPORADA

EN EN EN

LAGUNA DEL SAUCELAGUNA DEL SAUCELAGUNA DEL SAUCE

Texto y Fotografía: Jorge CurbeloTexto y Fotografía: Jorge CurbeloTexto y Fotografía: Jorge Curbelo


Comenzamos al medio de la laguna la deriva y des-plegamos nuestros aparejos de peje-rreycera de tres boyas en forma de gota, de buen ta-maño y color fuer-te. Las característi-cas de estos apa-rejos mitigan bas-tante el reflejo del sol de frente que hace difícil ver los piques, ya que la pesca de los grandes necesita mucha distancia de la embarcación, siendo además su-mamente sutiles al momento de to-mar el cebo.


Se emite por canal 5 Se emite por canal 5 TELEVISIÓN NACIONAL TELEVISIÓN NACIONAL

domingos 12 horas.domingos 12 horas. Repetición domingos 24horasRepetición domingos 24horas

No se hicieron esperar los piques, de pejerreyes de porte mediano, con llevadas laterales bien firmes, dejando disfrutar por la clavada segura y una recuperación de las piezas muy disfrutable al estar lejos los aparejos. Al encontrar el pique enseguida, con dos latas de atún barato y la misma agua de la laguna más un poco de kril, confeccionamos una buena ceba, y la usamos, pero sin abusar, dado que si se ceba muy seguido, lo más seguro es que atraigamos a los más juveniles, así, pudimos mantener el pique con poca interrupción. No quiero hablar de peso de piezas, pero cobramos en total unos sesenta pejerreyes, seis de los cuales, superaban claramente el kilo, debiendo usar el copo para su captura, ya que las líneas estaban armadas con nylon 0.35.


Nos llamo la atención la poca cantidad de piques de dientudos, dado que a mi gusto al encarnar con dientudo blanco o coloreado, se tiene el mismo resultado que con moja-rras.

Espero les sirva el relato para tener en cuenta para el próximo año, que es verdad que los grandes están firmes al final de la temporada. De todas maneras, seguramente, para Octubre, algunos más van a salir. Buenas pescas para todos


a ballesta es un arma com-

puesta por un arco monta-do sobre una base en ángulo

recto que dispara flechas llamadas saetas y que retiene la energía del arco liberándola por medio de un sistema de gatillo. Su uso fue para la caza y la guerra y si bien actual-mente su uso bélico quedo relegado a ciertas fuerzas especiales actual-mente se usa ampliamente para la caza y el tiro al blanco.

En muchos países el período de caza en mucho más amplio para los cazadores con arco o ballesta y aparte las regulaciones son más benignas no precisándose permisos para su compra o uso. Eso no quita que quien los use debe saber que tiene un arma y será responsable de su mal uso. Las primeras evidencias escritas sobre la ballesta datan del siglo IV antes de Cristo en China en la batalla de Ma-Ling en Linghyi China en el año 341 AC y fue usada como arma primaria en la batalla. Incluso el Emperador en la tumba de los soldados de terracota se encontraba rodeado de soldados armados con Ballestas. En Europa en época similar y paralelamente se había desarrollado las gastrap-hetes cuya traducción sería de disparador de ba-rriga pues era una ballesta cuyo apoyo se hacía en di-cha zona, esta esta des-cripta por Heron de Ale-jandría como una evolución de un arma de artillería.

BREVE HISTORIA DE LA ARQUERÍABREVE HISTORIA DE LA ARQUERÍABREVE HISTORIA DE LA ARQUERÍA

La BallestaLa BallestaLa Ballesta

Texto y Fotografía: Andrés AlmansaTexto y Fotografía: Andrés AlmansaTexto y Fotografía: Andrés Almansa


El desarrollo temprano en China de este instrumento llevo a va-rias innovaciones llegando inclu-sive a desarrollar una ballesta de repetición y se uso en bata-lla inclusive en 1895 en la gue-rra chino-japonesa. Los roma-nos también usaron la ballesta pero recién en el siglo X DC se expandió su uso como arma de batalla. La efectividad de la Ballesta también le creó una mala fama pues un noble caballero armado con su costosísima armadura podía ser derribado por un ple-beyo sin nada. Esta misma situación dio lugar a que fuesen masacrados sin pie-dad los ballesteros al ser de-rrotados sus ejércitos. La difu-sión de la misma se dio por la facilidad de crear cuerpos de ballesteros que no requerían entrenamiento y por el gran al-cance de la misma.

Hasta principios de los 1400s las ballestas eran básicamente de madera lo que las hacía más fácil de transportar y cargar, luego como los arcos se fue haciendo los arcos compuestos con tendón y cuerno lo que si bien las hacía más potente re-querían más tiempo de cons-trucción y eran más difíciles de cargar lo que creo diferentes artilugios como pata de cabra que era como una palanca, unos ganchos que estaban sujetos de la cintura y criquets que por medio de una manivela se carga-ban. Actualmente se usan varia-ciones de estas.

La ballesta primitiva fue evolu-cionando con cambios como el estribo para poner el pie al car-gar, el desarrollo del gatillo por media nuez que era una pieza que trancaba la cuerda y al apretar el gatillo giraba y solta-ba la cuerda. Sobre las ballestas actuales, La ballesta si bien mantiene las características básicas de las antiguas ha incorporado todos los avances tecnológicos en ma-teriales. Hoy tenemos básicamente dos modelos de ballestas las clási-cas recurvas como los arcos y las compuestas las cuales apa-recieron como la evolución del arco de poleas patentado por Allen a mediados de los 60s. Si bien en la ballesta la ventaja del arco de poleas de aminorar la tensión no es tan importante el desarrollo de poleas con ex-centricidades que hacen que aumente el impulso sin una rela-ción directa con la fuerza nece-saria para cargarla. Es por esta causa que suele darse como da-to en lugar del libraje la veloci-dad de la flecha.


Sobre la potencia que es uno de los factores que más se desconocen es que si bien la potencia de una ballesta de 150 libras se equivale a un arco de 60 libras a 30 metros. Cuando hablamos de la potencia es la fuerza necesaria que se requiere para cargar la misma, usualmente se mide en li-bras cuya equivalencia en kilos es 1lb = 0,45 kg La gran ventaja de la ballesta con respecto al arco y causante del desprecio de muchos es su facilidad para usarse. Si bien el arco requiere para su uso efectivo cierto entrenamiento la ballesta es sencilla en su uso y si bien las prime-ras armas de fuego siguieron la evolución de las ballestas estas son usables en forma similar a un rifle tanto en la forma de sostener como de disparar. Hoy en Uruguay podemos cazar con una ballesta desde la caza menor como liebres a Jabalíes por lo que se esta desarrollando un auge de su uso aquí. Una cosa a tener en cuenta es nunca disparar sin flecha, el disparo e “seco” como se lo conoce puede dañar seriamente las palas y la cuerda. Como se carga una ballesta:Como se carga una ballesta:Como se carga una ballesta: 1) Colocar la ballesta apuntando al piso y poner el pie dentro del estribo asegurándonos de que quede bien firme sin posibilidades de escaparse. 2) Tomar con ambas manos la cuerda a los lados de la culata manteniendo la misma distancia a ambos lados, en el caso de usar un accesorio de carga se colocan los ganchos con poleas en la misma forma. 3) Procedemos a tirar en forma pareja tanto con las manos como si lo hiciéramos con el accesorio de carga hasta que sintamos que trabo y no soltamos hasta estar seguros. 4) Se coloca la flecha en el riel con la flecha de distinto color hacia abajo entrando la misma dentro

del riel y quedando el nock contra la cuerda y usualmente queda sostenida por un agarre. 5) Ya esta pronta para apuntar y disparar si-guiendo las reglas de cualquier arma, no apun-tar a ninguna persona, antes de disparar con-firmar que no existen personas detrás del blanco o que la saeta pueda describir una tra-yectoria que no veamos Espero que les sea útil y cualquier duda pue-den consultar en [email protected]


Corvina Blanca La corvina blanca, denominada científicamente Micropogonias furnieri, es un pez que es sumamente buscado por nosotros, los pescadores, generalmente en estas épocas. Este pez pertenece a la familia Sciaenidae dentro del orden Perciformes. La corvina blanca, también es llamada “corvina rubia” tanto en uruguay como en argentina, en brazil se llama “cascuda o mariqueira”, en Venezuela como “curvinata”, en chile como “ huaquil o covinilla”. Se encuentra fuertemente extendido en aguas del océano Atlántico, en especial en nuestra región (Argentina, Brasil y Uruguay) donde habitan en aguas de poca profundidad. En Chile, su hábitat se limita al lago Budi, un lago salado del sur de Chile. El peso promedio va de 2 kilos y medio a 3 kilos. Su talla máxima encontrada en los registros en base de datos es de 80 cm. La edad máxima reportada en la base de datos (www.fishbase.org) fue de 7 años. Se reproduce normalmente en las estaciones de primavera y verano.

Descripción General Anatómica De cuerpo elongado con un perfil grueso y elevado y con un preopérculo espinoso. La coloración es variable, va desde el banco, pasando por el amarillo, hasta el marrón, con vivos en flancos amarillentos. Su vientre es blanco con matices amarillos. Posee escamas cicloides grandes y de alta dureza. En cuanto a las aletas, la corvina blan-ca posee dos aletas dorsales contiguas, la primera con radios duros, la aleta caudal es de forma trapezoidal-

Curiosidades… *Micropoginias etimológicamente viene del griego mikros= chico y pogon = barba hace alusión a su fuerte “ carácter” teniendo poca edad, por eso lo de chico y la barba.

*En la actualidad existen proyectos de acuicultura centrados en estas especies en los que se ha logrado la pro-ducción de huevos fértiles por inducción hormonal, y un moderado éxito en la supervivencia de las larvas.

Bibliografía *www.fishbase.org (consultado el 22 setiembre 2012) *www.dinara.gub.uy (consultado entre los días 20 al 23 de setiembre 2012) *VIGNOLO, Luis A. - 1976 La pesca deportiva en el Uruguay y Río de la Plata * NUÑEZ GUTIERREZ, Pablo A.- Peces marinos de las costas uruguayas

Mario Acosta Rius CORVINA BLANCACORVINA BLANCACORVINA BLANCA


De: Bernardo Porras Enviado el: viernes, 14 de septiembre de 2012 11:04 a.m. Para: Pesca total digital Asunto: pesca en Salto El pasado primero de setiembre en las costas de Salto se vivió una jornada de pesca trabajosa pero con bue-nos resultados. Martín Crosa Machado, pescador fre-cuente de la pesca de río, nos contó su experiencia aguas debajo de la represa. Según relató a Pesca Total el avezado pescador, el agua no presentaba ese día en particular la mejor oxigenación para la pesca del dora-do. No obstante, un poco de paciencia dio sus frutos en un lugar que es un clásico para la pesca de estos ejemplares.

De: Pedro Mascaro Fecha: 03/09/2012 08:03:43 p.m. Para: pescatotaldigital Asunto: URUGUAYOS PESCADORES HOLA RAUL, GRACIAS POR LAS REVISTAS, TE MANDO UNA FOTO DE MI HERMANO DANIEL MASCARO, QUE GANO EN GUAYAQUIL , ECUA-DOR UN CAMPEONATO DE PESCA DE CORVI-NAS EN EL RIO GUAYAS. Y LUCE ORGULLOSO LA BANDERA DE SU PAIS, Y EN LA OTRA FOTO EL TROFEO QUE GANO POSANDO JUNTO A DOS DE SUS NIETOS ECUATORIANOS.

De: sebastian poggio zinno Fecha: 09/27/12 09:24:48 Para: raul bove Asunto:tuna! Cuando yo salí ( Guillermo Poggio) no pescamos nada, vimos y ali-mentamos muchas pero el capitán no quiso poner el anzuelo en el agua, o porque muy chicas o porque parecían lastimadas y eso pue-de llevar a que el valor sea bajo y como solo pueden sacar uno, tie-ne que estar seguro!!! En fin estuvimos hasta las 17 y no engancha-mos nada. Hoy salieron a las 8am y a las 8:10 am estaban con el pez luchándolo!!!! Peso 505Lbs. El próximo es mío!!!! Saludos para todos especial a mi hermano Sebastián "Pepe" Pog-gio un gran pescador sanducero


CORVINA AL HORNO CONCORVINA AL HORNO CONCORVINA AL HORNO CON COSTRA DE TOMATE Y ZUCCHINICOSTRA DE TOMATE Y ZUCCHINICOSTRA DE TOMATE Y ZUCCHINI

PREPARACIÓN PREPARACIÓN PREPARACIÓN Cortar el zapallo italiano y los tomates en láminas bien delgadas y reservar. Pelar las berenjenas a lo largo con un pelador de papas, cortarlas en cuadraditos y reservar las cáscaras. En una olla sofreír en abundante aceite la cebolla y el ajo sin dorar; agregar las berenjenas corta-das y condimentar con sal y pimienta. Revolver constan-temente y dejar en fuego bajo durante 20 o 30 minutos o hasta que las berenjenas estén cocidas y blandas. Con la ayuda de una licuadora o minipimer hacer un puré con las berenjenas y reservar. Pasar las cáscaras por un bol con harina y freír en una olla con bastante aceite. Una vez dorado, retirar, ponerlo sobre papel absorbente y condimentar con sal. Reservar. Cortar los pimentones a lo largo en cuatro tro-zos, eliminar las semillas y la parte blanca del interior, freírlos en el mismo aceite de las berenjenas, y cuando estén blandos guardarlos en un bol tapado con film plástico. Dejar reposar durante 10 o 15 minutos. Pelar los pimentones, llevarlos al vaso de la li-cuadora, agregar un poco de aceite de oliva y licuar hasta obtener una salsa homogénea. Si fuera necesario pasar la salsa por un colador fino. Cortar el pescado en trozos y con-dimentar por ambos lados. Colocar las láminas de zapallo italiano y tomate en forma intercalada sobre los trozos de pescado, y condimentar encima nuevamente con sal y pimienta. Poner el pescado en una budinera o fuente del horno y rociar con un poco aceite de oliva. Hornear el pescado a 180 ºC durante 8 a 10 minutos o hasta que esté cocido. Para el montaje del plato poner una cama del puré de berenjenas como base, el pescado sobre el puré y, encima de él, las cáscaras de berenjenas fritas. Salsear alrededor con el coulis (salsa) de pimentón.

INGREDIENTES´PARA SEISINGREDIENTES´PARA SEISINGREDIENTES´PARA SEIS 1 kg de filete de corvina 2 tomates 1 zucchini 2 morrones rojos 2 berenjenas 1 cebolla picada fina 1 diente de ajo picado fino 100 g de harina Sal y pimienta


Recuerdo siempre, una anécdota, que me marcó, para siempre mi vida de pescador. Sería el verano, del año 56. Yo tenía por ese en-tonces, once años. En esa época, todo gurí, hacía una verdadera "carrera" para ser pescador. Comenzábamos, en la siempre querida pesca de mojarras, (en mi pueblo, Rocha, se le conoce por "piabas"). Me crié en un Barrio, donde uno de los principales entretenimientos, era la pesca. Además, del trompo, las cometas, las bolitas, etc.- Estas actividades ten-ían su temporada según la estación del año. Pero la pesca y la honda al cuello, era todo el año. Este Barrio donde vivía-mos, tenía una parti-cularidad. Ahí tenía-mos todos, en infraes-tructura. Había escuela, policlínica, iglesia, tienda, ferretería, panaderías almacenes, (hasta de ramos ge-nerales). Por lo que dependíamos poco, del cen-tro de la ciudad. Entonces, la vida transcurría, alegremente, y el arroyo lo teníamos, a pocas cuadras. Era nuestro patio trasero de juegos. Además del arroyo, propiamente, tenía ese mon-te ribereño. Un éxtasis, para la honda. Y se esti-laba también, poner trampas para pájaros. Especial para el sabiá, y el zorzal, para nosotros, el primero, es el de pecho colorado, mientras que el segundo, el de pecho blanco, los dos de tamaño casi igual. El canto de éstos, nos invade, hasta el día de hoy. Además estaba, la "pega-pega". Un pegamento, que lo hacíamos, nosotros mis-

mos, para cazar jilgueritos, mistos, cabecitas negras. Para la gente joven que lee esto, les digo que esa pegatina, se hacía a partir de aceite lina-za, hirviéndolo, hasta que al consumirse, se busca la viscosidad deseada. Se pone con un palito, en un alambrado, o alguna ramita, donde se posan éstas aves. Al querer volar, no pueden. Se les agarra, y se le limpian las patitas con alcohol. Así transcurría nues-

tra vida, pero siempre con la mirada atenta de nuestros

padres. Aunque, por alguna "macana", tam-

bién "ligábamos", para enderezar lo torcido!. En esa época era usanza común. Pero,

el tema siempre giraba, en torno de la pes-ca. La conversación

de mayores, siempre sacaban a relucir el tema.

Cualquier cosa que se programara, ya sea una

simple mateada, algún asado, para reunirse, siempre

era al lado del agua. Pero con la consiguiente noticia, de "donde salía algo". El medio de transportarnos era la bicicleta. To-dos teníamos, y ya sea algún "mandado", a dos cuadras, era; en bicicleta!. Pero un tema muy im-portante, era; que los mayores para llevar algún menor, éste tenía que pasar por ciertos filtros. Por eso éramos observados, en nuestros avances en el conocimientos de la pesca.

Texto: Luis DelpratoTexto: Luis DelpratoTexto: Luis Delprato


Nosotros teníamos que hacer nuestras propias líneas. No teníamos medios, como los hay hoy en día. Los primeros anzuelos para esas piabas, las hacíamos, con un alfiler de cabeza. El hilo, era el de coser. Cuando se conseguía el "cadena" No.16, iba solo. Cuando era de "tubino", (mas delgadito), lo poníamos doble. Arrollando, ambas hebras, quedaba como trenzado. El flotador, un palito seco, fijado con un doble "bozal". La caña, una varita de sarandí. Carnada, el mismo pan, la miga humedecida, una bolita en la punta. Y a pescar!! Con el tiempo, ya nos íbamos, armando mejor. Cortábamos caña bambú, entre uno cincuenta a dos metros. Ya algunos nos adelantábamos más. La cortábamos, en menguante de enero o agosto. Lo aprendíamos de los mayores. Secada a la som-bra. Después el fogueo. Con los pertinentes agu-jeritos, en cada tabique, por debajo del nudo. Grasa y fuego. Lo que más me gustaba cuando lo hacía, el olor que desprendía. Era el de maní ca-liente. Ya con la caña, le poníamos anzuelo. Un anzuelito "mosca", costaba un "vintén", (eso quería decir, dos centésimos). Pero, uno sólo no se podía comprar; por lo menos tres. Salían, un medio, (cinco centésimos) y había que tenerlo! Con los pedidos, y los lloros, a mi abuela y tíos, se conseguía! Ya con éstos implementos no metíamos a lugares donde además de mojarras, salían dientudos, ba-grecitos, "papaterras"(cabeza amarga). Armábamos concursos con los sarguitos, o sean las chachitas. Las habían de todos los colores. Entonces era: el primero que sacara una de Na-cional, o de Peñarol, Rampla, Racing, etc. Armábamos nuestros propios juegos. O también, marcarlas, y quien la sacaba de vuel-ta! Así íbamos escalando posiciones, en el apren-

dizaje. Hasta que llegaba el día..!! Era como ponerse los pantalones largos! En una pesca de mayores, nos llevaban con ellos! Cuando venía la invitación, era designar que ya empezábamos a jugar en primera. En éste caso, me tocó. Preparativos, para el próximo fin de semana. Para colmo, la pesca iba a ser de lisas. Ya teníamos referencia, de lo que esto represen-taba. No moverse, no pararse, no hacer sombra en el agua, no hacer ruido. Por eso empezaban a llevarnos de a uno. Porque dos o más era motivo de bochinche y gritos. Pero aún no con la caña para lisas. Son muy lar-gas, (seis metros afuera), y no había físico aún para maniobrarlas. Pero estar ahí... Escuchar lo que hablaban entre mayores. Ya era muy impor-tante para mis once años. En esas temas estaban ellos, cuando inocente-mente, pero a título de reproche, le digo a mi pa-dre; que le voy a decir a mi madre, cuando llegue a casa, y me pregunte por lo que saqué, ya que no había pescado. A lo que un amigo de mi padre, me dice: "decíle que pescaste un maraño..." Yo, en mi inocencia, le pregunté: "que es eso?". A lo que me dice: "Un sorete grande, de éste tamaño..." Bueno, era el "cartón" ligador, para esa pesca. Me gustó la joda. La guardé en la memoria. Cuan-do llegamos a casa, mi madre me recibe con alegría. Y entre todas las preguntas, como me había ido, que había comido, si no estaba muy quemado por el sol. Y todas esas cosas que las madres preguntan. Llega lo concebido... "y qué pescaste...", mi contestación no se hizo espe-rar..."un maraño...", y la pregunta correspondien-te, "...y eso que es?". Cuando le contesté... Zzuumm, ¡ Zaass !! Divina cachetada.!! CON LA VIEJA, NO!!!

LA CONTINUIDAD DE LA PUBLICACION Y DE NUESTRA PÁGINA EN INTERNET ESTA LA CONTINUIDAD DE LA PUBLICACION Y DE NUESTRA PÁGINA EN INTERNET ESTA LA CONTINUIDAD DE LA PUBLICACION Y DE NUESTRA PÁGINA EN INTERNET ESTA DEPENDIENDO DE LOGRAR CUBRIR EL PRESUPUESTO CON AYUDA DE SPONSOR’S DEPENDIENDO DE LOGRAR CUBRIR EL PRESUPUESTO CON AYUDA DE SPONSOR’S DEPENDIENDO DE LOGRAR CUBRIR EL PRESUPUESTO CON AYUDA DE SPONSOR’S

NECESITAMOS PUBLICIDAD PARA PODER FINANCIAR LA REVISTANECESITAMOS PUBLICIDAD PARA PODER FINANCIAR LA REVISTANECESITAMOS PUBLICIDAD PARA PODER FINANCIAR LA REVISTA APELAMOS A LOS EMPRESARIOS QUE NOS LEEN MES A MES.APELAMOS A LOS EMPRESARIOS QUE NOS LEEN MES A MES.APELAMOS A LOS EMPRESARIOS QUE NOS LEEN MES A MES.

SU COLABORACIÓN SERA INVALORABLESU COLABORACIÓN SERA INVALORABLESU COLABORACIÓN SERA INVALORABLE

Comuníquese con nosotros vía mail Comuníquese con nosotros vía mail Comuníquese con nosotros vía mail [email protected]@[email protected]

N° 74 - Octubre 2012

Documents

Transcript of N° 74 - Octubre 2012