Morales, Franklin - Futbol, Mito y Realidad

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nuestratierra 22EDITORES.DANIELAUANAnMARIOBENEDETTOHORACIODEMARSIUOASESOR GENERAL.Dr. RODOLfOV. TUCEASESOR EN CIENCIAS ANTROPOLGICAS.Prof. DANIELV'DARTASESOR EN CIENCIAS BIOLGICAS.Dr. RODOLFOV. TUCEASESOR EN CIENCIAS ECONMICAS.Dr. CLAUDIOWILLIMANh.ASESORENCIENCIAS GEOGRFICAS.Prof. GERMANWETTSTEINASESOR EN CIENCIAS SOCIALES YPOL/TICAS.Prof. MARIOSAMBARINOSECRETARIO DE REDACCiN.JUUOROSSIELLOSECRETARIO GRFICO.HORACIOA.... NDEPARTAMENTO DE FOTOGRAF/A.M\rLCARM. PERSICI!ETTIDistribuidor general: ALBE Soe. Com., Cerrito 566, ese. :l, tel.a 56 92, Montevideo. Distribuidor para 01 interior, quioscos yvenia callejera. Distribuidora Uruguaya de Diarios y Revistas,Ciudadela 1424, tel. a5155, Montevideo.LAS OPINIONESDELOSAUTORESNOSONNECESA-. RIAMENTE COMPARnDAS POR LOS EDITORES' yLOSASESORES.Copyright 1969 . Editorial "Nue5tro Tierra". Soriano 875.ese. 6, Montevideo. Impreso en-Printed inUruguay-o Hecho el depsito de ley. - Irr.preso en"Impresora REX S. A.. . calle Goboto 1525. Montevideo.setiembre de 1969. - Comisin del Papel: Edici6n ampoen ,,1 orl. 79 de la ley 13.349.,.'UTBOL:MITOEALIDADFranklinMoralesINTRODUCCION 3El ftbol: nacimiento, desarrollo, muerte? 3la cultura de la pobreza 6'.'EI opio de los pueblos" 8El FTBOL EN El PAs 10Poblacin yftbol 10la concurrencia de menores y mujeres 12Oficinistas de 40 aos 14Menos de 100.000 personas 15Campeonato Uruguayo: lo curiosa estabilidad 17No influyen triunfos ni derrotas: ir al ftbol es una cdstumbre 19loque sucede afuera 20No hay reglas en la distribucin de entradas 22los estadios propios 25De la "alegra semanal" a la muerte civil 27El ftbol usa al poltico 27la Copa "libertadores" y su secuela 30El fin de lo actividad local? 33la reforma no servir 34Huracn Suceo 37Poblacin y jugadores 38Slo el 8 % no jug nunca 39Una ciudad del Interior 40la verdad de las cifras 42No se juega menos: llegan menos al ftbol mayor 42El liceal como espectador y como partidario 43la Asociacin y los impuestos 46El ftbol en el Interior 47EL MUNDO DEL FUTBOLISTA 49No Se aceptan recomendaciones 49Ni timidez ni "'hibiciones 51El jugador y el club: relacin feudal 52Los .. Rebeldes" con causa 53El sindicato del futbolista 53los amigos del jugador 54Una manzana y el cojn 56Qu pasa cuando uno se enhena? 60El partido qumico 61FRANKLIN MORALES naci en Durazno en 1933. Hacia 1964 comenz ocolaborar en el diarioEPCAen el tratamiento de los grandes temas del f:bol, 10 que abandon momentneamente para reclizarel Curso deEntrenadores de Ftbol organizadopor la Comisin Nacional de Educacin F:sica. Trabaien el diario HECHOSdesde su aparicin, y' lo hace actualmen:e en LAMANANA. En 1967public unlibro con reportajes publicados en HECHOS donde explora con sentido antropolgico -una de suspreocupaciones fundamentales- al futbolista y al ex-futbolista. El mismo ao pub'ic en GACETA DELA UNIVERSIDAD un extenso estudio sobre la situo cin del ftbol profesional, el primero en su gnero,adquirido por la propia Asociacin Uruguaya de Football. Ha escrito el fascculo deCAPITULOORIEN-TAL"Ftbol y literatura" y el de ENCICLOPEDIA URUGUAYA "La garra celeste". Tiene a su cargo ladireccin de la coleccin "Cien aos deftbol", primera h,istoria del ftbol del pas. Numerosos repor-tajes y notas suyas han sido reproducidas en el ex terior.El. FUTBOL: NACIMIENTO,DESARROLLO, MUERTE?Aun a riesgo de una obligada brevedad queimplicalacertezade nopoderfundamentar comoquisiramos algunas ideas que sobre eldel ftbol venimos madurando, parece necesanotrazarlaslneasdentrodelasquepensamosnaci,sedesarrollymuere?Comencemospor ubicar sunacimientoydesa-rrollo en la sociedadindustrial urbana de la queformamos parte.El siglo XVI constituy la edad de oro delcomercio, aunque el trminocomerciodeba inter-pretarse tambincomo piratera, saqueo, conquis-ta, explotacin ytrfico de carne humana negraenmanosdel blancoeuropeo. Elsaltodelanave-gacin, desutradicional confinamientoenel Bl-ticoy Mediterrneoavastosmundosdesconocidos,generaraunagigantescaacumulacinde riqueza:INTRODUCCIONEl ftbol y todos los deportes modernos se consolidaronante la necesidad de proveer mano de obra fuerte enun momento histrico en que la mquina arrojaba productos ycadveres de hombres depauperados porsiglos deabsoluto abandono fsico. Hoy sus cultores', responden aun tipo social surgido de los sectores marginales urbanosde la civilizacin industrial: tambin hay una "geografadel ftbol".la revolucincomercial acunlaindustriaLAquella ascendente burguesa,'que tena pro-piedadesyquera privilegios, denunciaba ladeca-dentesociedadqueobrabasobresuexpansinco-mounchalecodefuerzadecuyaspresillastirabanafanosamente clrigos y nobles. En el continentelos dos mil artculos del Cdigo Napolen con-sagraran legalmente la mutacin del privilegiodenacimientoporelprivilegiodepropiedad. Talescambiossepultabanunaestructurae iniciabanotraera histricafundada en el librecambiode mer-caderas: haba nacido el capitalismo.Dentro de l, como parte de su estructurae inicialmenteenrazndesus necesidades defun-cionamiento, seinsertara laeducacin fsica ysuramams popular: el deporte.Pero en Inglaterra .el perodo revolucionario1640-88ali nobleza yburguesaunavez que sereconoci a sta el derecho a formar parte delgobierno. Fruto de situaciones particulares 3enlasislas; se adelantaradecididamente ala san-grienta imposicin burguesa ocurrida en Franciarecin en 1789. No fue entonces casual que pre-cisamente Inglaterra fuera el pas que asumierala condicinde primer pas capitalista. Tampocolosera que, simultneamente, fuese el centro decreacin odesarrolloorganizadodelamayorpartedelasformas deportivas modernas.Se necesitabaalgoms que el capital acumu-lado por los galeones para echar a andar lasgigantescas posibilidades entrevistas al descubrirselaaplicacindel vapor: senecesitabaunaenormefuerza de trabajo vigorosa, sana,com-petente.La condenade la iglesiaal ejercicio pes porsiglos y el hombre europeo vivi constreido alabandono fsico ms absoluto. "Durante sigloslos puebloscontinentalestrataronenloposible desuponerqueel hombre careca decuerpo. Ycomouna de las cualidades de ste consiste enque cuando est sano parece ausente, no se lenota, se dira que no existe, el hombre moderno llega no tenerlo en cuenta ms que cuando sentadolor. Para facilitar el escamoteode nuestra cor-poreidad, se le tap. En el siglo XVIIIse cubrehastael cabelloconunapeluca. Elhombre-cuerpoqued reducido a una carita que emerga delaschorreras yunasmanecitas brotandode puos deencaje: angelical", dira tiempo despusHerbert Spencer. "El hombre sloespritu" idea-lizado por Descartes sala convertido en cadverjuntoala mercadera que produca.Fortalecerlo, redimensionarlo a las necesidadesde la hora era la exigencia del nuevo sistema enple-nodesarrollo. El hombre tena que ser capaz decumplir supapel en las leyesdel juego econmico:capaz de producir y capaz de consumir. Inicialmen-te, capaz de permanecer catorce, dieciocho horas pa-rado. Es"lanacinde animalesrobustos, primera4El hombre del siglo XVIII. Una cara plida quesurge de las chorreras.condicindelaprosperidadnacional" comoluegosintetizarael mismoSpencer.Enesadisyuntivahistricalaburguesainglesaarremeticontrael nuevoobstculo, endos direc-ciones. Inaugur por unadoel comerciode na-tivos africanos de piel negra. Por otro, extrajojuegospopulares grotescosydivertidos, quepervi-van como recreacin para das de fiesta en laentraa popular, reglamentando ysistematizandosuprcticacomomediodefortalecer aquellafuer-zadetrabajo: enlaguerradela competencia seasegurabael msculo aptodelosjornaleros. Mien-trasEspaa, nuestrocolonizador, producabaronesy marqueses, obisposy mendigos, en lasislas, Can-ningproclamaba"unaedaddeeconomistasycal-culadores". All lapelotade ftbol dara sus pri-merospiques y semeteranlosprimerosgoles.La maldicin de Espaa, como la de otrascivilizaciones, fue recoger la riqueza de este con-tinente por interpsita persona: el indio mitayoesclavizado en las minas. La cultura fsica nopodavenirdeall nidePortugal quetropezaronprime-roconestas tierrasporquesuconcepcinculturalera la del mundo del Lazarillo de Tormes. LamismaquePuiggrosilustra alaperfeccincuandocita unademanda por infamia planteada por unespaol residenteenBuenosAires, antelaAudien-cia de Charcas: "Han dichoquetrabajo".Ascomoel primer traficantedeesclavos, JohnHawkins, fue ingls, fueron ingleses tambin losprimeros magnficos protagonistas de ftbol, derugby, de beisbol, de "curling", de bochas, de"hand-ball", de "sqash racquet", de waterpolo,degolf, depolo, de remo, de navegacina vela,denatacin, de atletismo, de boxeo, de"badmin-ton", de tenis, dehockeysobrehieloyhierba, decanotaje, quesontansloalgunasdelasactivida-des deportivas formalizadas en Inglaterra.Tambin de las islas vendra otra cosa: elprofesionalismoenel deporte.Hasta ahora se ha visto el nacimiento de laeducacin fsica moderna en las "ideas" de al-gunoshombres. Entresusmilagrosos creadoreses-taranSadolet, UlricoZwinglio, Montaigne, JuanComenios, Locke yalgunos otrosmenos notorios.Ose prefiere dar nombre yapellido a tan complejofenmenodelasociedadindustrial yas aparecencomo "-creadores" Guts Muths,Pehr Ling, Frie-drichJhan, FrancisLiebery,sobretodo, ThomasArnold, que slodesempearonel papel q1,1e pu-dieron: dar forma a hechos nacidos con racesdistintas, largamente excedidos de la mera tareade convencimientoydifusinindividual.Una gran batalla doctrinariaopuso la gimnasiaaldeportey sacudial mundoeuropeooccidental.EnunauotratrincheralosdefensoresdeLadaladoarrojabanyrecibanargumentos, planteabany oan exposiciones sobre 31954195519561957 1958195919601961196219631964 19651966III 1\,\I ~r--,,1/'\ I1/ / N~/'1\ \ 11 1\VV'\1\-1/ 1/"\ /\II \V\VIII\!jII1I I I-600.000700.000soo.ooo1: 000.0001: 100.0001: 200.0001: 300.0001: 400.000\100.000aparece, agregamos el aparente "boom" de la Li-bertadores. El resultado es que el promedio deconcurrencia se mantiene tercamente esttica: lavida de la Copa Libertadores ha sidola muertedel Torneo Competencia. Nada ms que eso.Conviene aclarar el sentido del "pico" de1960: esas 100.000 entradas ms respe:-:to alaoanterior son "anormales" pues incluye aque-llas 124.000 vendidas en la final diferida delCampeonato Uruguayo del 59 y el partido dedesempate Pearol-Cerro.En los aos considerados de la dcada del40, el promediode "consumo" deeneroadiciem-bre en Montevideo, fue de 1: 400.000 entradas.Enlos aos50, 1: 560.000 yen10que va de ladcada del 60 de 1: 525.000.Ray un retrocesoaun en cifras absolutas res-pectoaladcadaanterior. Siseconsiderarael au-mento de poblacin las diferencias seran impor-tantes.Las consecuencias de la implantacin de laCopa Libertadores en nuestro medio hanllegadoatodoslosrincones del ftbol: nohayunodondenosenotesupresencia.Destroz aquella Copa Competencia, primercertamen anual, en el que no rega el sistema de"locatarios"yporlotantotodospagabanentrada.32Laconsecuenciaeraque enesa rueda de p a r t i d o ~solanvenderse ms entradas que encada unadelas ruedas del mismsimo Campeonato Uruguayo(grfica 8 donde se seala con trazo grueso losndices del Competencia junto a cad vuelta delUruguayo). Peroal entrar a esta dcada, el pri-mer ao vendi305.000entradaseinicisudes-aparicin: en1965, 28.000 y en '1966 no se disput.Losclubesgrandeshaninstaladoalgoas comouna esclusa: loque antesse llevabantodos ahoralo desvana sus arcas. El resto retira un porcen-taje de cada partido en Montevideo (4 %) quemuchas veces significa, para sus posibilidades tanmenguadas, cantidades nadadespreciables. Sellega decir, concierta base de seriedad, que a losclubes chicoslesconvena, ms qU'e jugarentres,alentar laparticipacin de Pearol yNacional engrandes partidos: sin ningn riesgo, el porcentajees atractivo. Obsrvese cmo esta filosofa de laprosternacin concuerda sin violencia con cuantohemos venido exponiendo.Una sociedad que abarcasocios tan pobres ysocios tan ricos crea un desequilibrio enfavor destos. Deah laimportanciaquetieneel problema-ventiladoeste ao, en que vencila concesindel municipio- del usoo propiedad del EstadioCentenario. El hechodeperteneceralaAsociacines el arma con la cual los socios pobres puedenforzar alossociosricos a permanecerenla rbitacomn, que cada da ms obra comoun chalecodefuerzasobresus aspiraciones.EL FIN DE LAACTIVIDAD LOCAL?Cercenada de un hachazo la actividad local'por laCopa Libertadores de Amrica, sus ndicesestabanala altura de 1948, cuandoslo se jugunaruedadel CampeonatoUruguayoporlahuel-gade jugadores (grfica 9).La Copacre adems dos deformaciones. Porunlado, enlamedida desus xitos, Pearol elevsusretribucionesaunnivelcompetitivoaescalain-La copa libertadores subvirti la actividad local en beneficiode los "grandes"33-ternacional, desenfrenoal que tambin arrastr aNaciona! porque cada unode los clubes grandeses extremadamentesensible aloque haga odejede hacer el otro.Naturalmente que sus presupuestos nopuedenser cubiertos por la actividad local ni por lascuotas sociales: hay que competir fuera del pasenprocura de dlares. Peroenla otra punta delgrupo declubes menoresnecesitacomodel oxgenosupresenciaenMontevideo, porquedeotromodolaactividadmuereporinanicin.El gran proceso de la Copa Libertadores deAmricadebecentrarse enque, al incrementar des-proporcionadamente los presupuestos de los clubesmayores (Pearol, por ejemplo, en la temporada1969deberarecibirlquidosmsde$ 500.000.-diarios), produjo un desplazamiento de toda laatencinfutbolstica del pas. Por esodesde 1960la presin sobre la regularidad y jerarqua delCampeonatoUruguayovieneaumentando. Es im-previsible saber hasta dnde se llegar. Pero enltima instancia a las grandes instituciones lesconvienecadada menos permanecerenMontevi-deO, inmovilizando equipos extraordinariamente cos-tosos, en una plaza que no guarda ninguna rela-cin con ese costo. Lo que sucede en 1969 alconfeccionarse el calendariodepartidos del torneouruguayoes aleccionador: paraque termineantesdel 31 de diciembre se jugarn treinta partidosentre semana. Los contratistas ya anuncian paraenero una nueva Copa Montevideo. La Liberta-doresesperadespus su turno.LA REFORMANOSERVIRAAs planteadaslas cosas, paralatemporada de1969sellegaunacuerdoenbasealaprolonga-cindelaactividadlocal. La temporada seinau-guraconunTorneo llamadodeCopa, dondepar-ticipanlosdiezclubesdePrimeraAy seis delaB.Apartir de agostosejuegaun Campeonato Uru-guayo ms larg(). Las dos primeras ruedas sernlas acostumbradas, peroluego vendr una terceradonde ttulo y descenso sern definidos por dosgrupos de clubes: los seis primeros por un ladoy los cincosiguientes por otro, desde queeste aosononce los clubes yno diez, por el ascenso deDanubio a travs del mecanismo del Torneo deCopa.575S 5960616263646566 195051. \400.000H'H-+-+-f---J-I-HI-Hc-l-l-+--+--1--f -\' .. J' \ \ \ 1/\\V, I \ I \) \,_.--200. 0001-+--+--+--+--+--+--+--+--+--+--+--+--+-t\+--+-;100. 000 f--+--+--f-+-+-+---f-I---+-+-+-+-t-+t\--t--i34Enel aspectoquepodramosllamar "formal",unequipomsyestergimenconmayor nmerodepartidos, chocadefrenteconlasnecesidadesdeprogramacininternacional delosclubesmayores:bsicamente, con su participarazones ynoha vueltoaconstituirse.Perolos barrotes no ceden asu prisionero niauncuando dejadeactuar. Slo habilitadoslaboral\' culturalmente, para pequeos menesteres, paratareas sin calificacin, el pblico, sinembargo, lo,;concibe movindose en medio de la opulencia:esocondicionatodoal dramticoperodoque sigueal trmino de la vida til como jugador.Esos escrutadores ojos annimos ejercen algoas comouna persecucindespiadadaquefrecuen-tementeles inhibederealizarlosmodestostrabajosquepuedendesempear: limpieza, vigilancia, con-serjeras. Es cuandoel ex-jugador maldicesupro-fesin y comola tierra nolo traga, se sustrae atodo contacto. Paradjicamente quienes estn enmejorescondicionesdeenfrentarel tramoqueque-dadelavida, uninterminablepramo, sonlosqueno han llegado a la condicin de crack: los ju-gadores de los clubes "chicos", Por imposicin deuna paga menor han debido mantener paralela-mente otra ocupacinyel ftbol rentadoha sidoslo una entrada extra cuyotrmino no enciendelas hogueras del infierno. . . ,para noventa minutos detrabajo.63,BIBLIOGRAFIABARBAGELATA, Hctor Hugo: Revista de DerechoLaboral, tomon, N ~ 8, AmalioM. Fernndez, Mon-tevideo, 1949.BUYETENDIKJ, F. J.: Le football. Une tude psy-chologique, Ediciones Descle de Brouwer, Paris,1952.CAGIGAL, Jos Mara: Hombres y deportes, Taurus,Madrid, 1955.CAi\1PIGLIA, N.: Migracin interna en el Uruguay,Depto. 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CampalLAS CORRIENTES RELIGIOSASAlbertoMethol Juliode Santa AnaELSABERY LASCREENCIASPOPULARESEquipo de antroplogosARBOLES YARBUSTOSAtilioLombardoLAENERGIA, ELTRANSPORTEYLAVIVIENDAJuanPabloYerraR(OSYLAGUNASRal Praderi y Jorge VivoARTES, JUEGOSY FIESTASTRADICIONALESEquipo de antroplogosPLANTAS MEDICINALESBlanca A. de MaffeiHISTORIA DE NUESTROSUBSUELORodolfo Mndez AlzolaLAECONOM(AENEL URUGUAYENEL SIGLOXXW. ReyesAbadie yJosWilliman (h).FRONTERAYLIMITESSalvador E. PortaLAVIDACOTIDIANAYSUAMBIENTE'Equipo de AntroplogosPOLlTICAECONMICAYPLANES Dq'DESARROLLOEnrique Iglesias "1HACIAUNAGEOGRAF(ADE LAVIDARodolfo V. TaliceLACULTURANACIONALCOMOPROBLEMAMario SambarinoHACIAUNAGEOGRAF(AREGIONALAsociacin de Profesores de Geografa"El PUEBLOURUGUAYO:PROCESORACIALYCULTURALEquipode antroplogosPERSPECTIVAS PARAUNPA(S EN CRISISLuis FaroppaLOS EDITORES PODRAN, SIN PREVIOAVISO, SUSTITUIR CUALQUIERA DE lOS TITULOS ANUNCIADOSOALTERAR ELORDENDE SUAPARICiN