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Latrompo es un magazine con un espíritu joven, fresco, efervescente, cosmopolita y alternativo que informa sobre eventos, manifestaciones o expresiones de distinta naturaleza, desde una perspectiva diferente a la habitual. De igual modo, sirve como plataforma de difusión para jóvenes artistas cualquiera que sea la disciplina que trabajen. Latrompo es puro asfalto y cuenta desde dentro o a través de sus protagonistas qué sucede en el “Montevideo urbano” que se escapa de los canales convencionales de información, para saciar a la audiencia hambrienta de contenidos de calidad con los que se sienta identificada. Nuestro lema es “¡Hacelo girar!”, por lo que la propuesta editorial nace de la idea de generar un movimiento compuesto por información alternativa a cerca de nuevas manifestaciones y formas de expresión, que se desarrollan en el ámbito urbano de Montevideo. De este modo, los propios protagonistas de los contenidos hacen girar Latrompo y Latrompo hace girar sus creaciones.
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l¿A quién se le ocurre meterse en un pro-yecto editorial con el verano llamando a la puerta? Solo a cuatro locos que no podían despedir el 2013 quietos y pla-neando qué hacer en fin de año. No queríamos esperar más porque tenemos mucho para contar y bastantes hojas en blanco que rellenar.
Latrompo se presenta como un magazi-ne y la necesidad de vestir de contenido sus 82 páginas nos llevaron a montarnos en una chiva tres personas por falta de infraestructura, beber chela para ahogar el estrés, crear una oficina improvisada en la Rambla con vistas al río, ayudar a fluir las ideas con alguna que otra cena y conocer a mucha gente con una energía increíble.
Sí, la verdad es que la hemos gozado tra-bajando y no podría ser de otra manera, porque ese es el espíritu que queremos compartir con tod@s.
Después de tres meses de gestación, por fin, nació Latrompo y esperamos que la disfruten como nosotros disfrutamos haciéndola girar.¡Salud!
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Muta Montevideo reunió a 40 artistas urbanos
nacionales e internacionales que vistieron de colores los muros del barrio de Goes.
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Entre el 22 y 24 de noviembre, 40 artistas callejeros procedentes de Uruguay, Brasil, Argentina, Pa-
raguay, Chile y España trabajaron codo a codo sobre los muros del ba-rrio montevideano. Diez fueron las pa-redes donde plasmaron las obras junto a compañeros con los que nunca an-tes habían colaborado. Zësar, uno de los cuatro integrantes del colectivo En Montevideo Nunca Pasa Nada, or-ganizador del evento, confiesa que la repartición de muros fue una “curadu-ría warrior de la que han salido expe-rimentos increíbles”. Se pretendía que los artistas compartieran ideas, técnicas y el modo de uso de materiales, pero la energía fluía de tal modo, que termina-ron compartiendo más que piques.
Sentarse a mirar el modo de trabajar de cada uno de ellos era un espectá-culo. Junto a uno que pintaba con ae-rosol y sumo cuidado su zona, convivía otro artista que trazaba líneas gigantes con un rodillo como si el muro fuera un gran lienzo. ¿El resultado? Impre-sionantes murales donde cada pieza forma parte del todo.
Zësar afirma que “si no hubiera sido por los amigos y los vecinos no hubiera salido nada”. Cabe destacar el papel de los voluntarios de Muta Montevi-deo que estaban al pie del cañón lle-vando agua a cada rincón y pintando un muro junto a los más pequeños. Tambíen fue crucial la colaboración de los vecinos del barrio que presta-
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ron herramientas, lugares para dejar los materiales y contagiaron el entusiasmo a todo aquel que se acercaba a observar.
El encuentro se cerró con las actuacio-nes de Wildban, Kif y Jaime Roots, para finalizar con una proyección del colectivo Entrelazando, que fue roda-da y editada simultáneamente mientras se producía el evento.
¿Para cuándo el siguiente Muta Mon-tevideo? Zësar se ríe cansado pero con ganas de un bis. Mientras esperamos, lo mejor es pasear por las calles del barrio Goes y admirar los muros que lucen ver-daderas obras de arte.
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ARTISTAS
ARGENTINA · Acra, Coure,
Cof, Luxor, Irene Lasivita,
Grito, Francisco Bosoletti,
Sato, Ice, Lacast, Pelos
de Pluma, Santhee Be.
BRASIL · Ela, Japem, Paula
Plim. CHILE · Luna Lee,
Henruz. ESPAÑA · Feoflip,
Zësar, David de la Mano.
PARAGUAY · Oz Montaina.
URUGUAY · Raf, Aese,
Pasto Verde, Poshy, Noel,
Min8, Made, Mok, Kabe,
Conde, Alfalfa, Mal Andro,
Alabama, Verde Humo,
Fitz, Seg, Ochopante, Theic.
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lo de roberto
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En uno de los barrios más emblemá-ticos de Montevideo se encuentra un supermercado donde se pue-
de encontrar de todo. Los estantes del establecimiento están vestidos con pe-lelas rosadas, cucharas de las que sos-pechamos tuvieron antiguos dueños, vasos de requesón reciclados, figuritas de vírgenes y pirámides o un extraño saco negro colgado de una percha. Tras un minucioso trabajo de investigación, recorriendo cada centímetro y góndo-la del súper de Roberto, llegamos a la conclusión de que no era un supermer-cado cualquiera, sino una galería que exponía los bodegones más pintorescos que jamás habíamos visto.
¡bienvenidos al museo de lo bizarro!
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“Urinal”
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“Despojo de la mamadera e introducción al tenedor”
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“Vasos de requesón Conaprole Light”
“$20”
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“Rompiendo filas”
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“Orgía”
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Acordes jazzísticos arropados por el compás de los tambores, ritmos que activan las caderas y la composición al dente entre lo tradicional y lo moderno, es la propuesta de esta banda montevideana con identidad propia.
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Suena Candombe, compuesto por Noé Núñez en el tambor repique y en la batería, Diego Paredes en
el tambor piano, Ferna Núñez en el tambor chico, Aníbal Pintos en el te-clado, Juan Correa como bajista y, en el saxo tenor, Leo Méndez, reformula el repertorio candombero a través de fraseo del jazz. Esta fusión no solo aúna dos géneros musicales, sino que une las formas de expresión nacidas en el seno de dos pueblos esclavizados en un mis-mo continente: Candombe y Jazz. Cuando preguntamos a los integran-tes de la banda su relación con el Can-dombe, su respuesta tardó en salir unos segundos de su boca pues nun-ca se habían plateado esta cuestión. El Candombe está en sus vidas desde antes de que vinieran al mundo, el rit-mo corre por sus venas y los tambo-res estuvieron presentes durante todo su crecimiento, incluso, Aníbal Pin-tos manifiesta que aprendió a caminar agarrándose en citados instrumentos. No es de extrañar, ya que pertenecen a familias de las cuerdas más importantes de Montevideo: Noé y Ferna Núñez son hijos de Lobo Núñez, un referente de Candombe, Diego Paredes, por su parte, es heredero del toque Ansina y Aníbal Pintos, hijo de Aquiles Pintos creador del estilo de El Cordón.
El libro “Somos Candombe” de Leo Méndez, con 150 partituras de can-ciones populares de Candombe, fue el detonante que llevó a la creación de la
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banda. El primer boliche donde toca-ron fue La Conjura (Montevideo) y des-de entonces no han parado de conta-giar su buena onda allá donde van. En
Buenos Aires agotaron las entradas y desean salir fuera con “una propuesta propia y mostrar como el Candombe se puede mezclar con distintos instrumen-tos”, según afirma Diego Paredes.
No dejarse llevar por la música de Sue-na Candombe es imposible. El ritmo de los tambores unidos al teclado, el saxo y el bajo viaja de los oídos al ce-rebro, que manda un mensaje a los músculos y, sin poder remediarlo, tu cuerpo se contonea y saborea cada compás transportándote a un universo donde historia y modernidad conviven en perfecta armonía.
Suena Candombe
El Candombe está en sus vidas desde an-tes de que vinieran al mundo, el ritmo corre por sus venas.
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en junio de 2013 se pu-blicó “Somos Candombe, melodía, armonía y letra”, de leo méndez, que reú-ne 150 partituras de can-dombes uruguayos que van de los más típicos a temas nuevos de can-tautores del momento.
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ILUSTRADOS
Con mucha elegancia y con los ojos mirando al pasado arropados por unas pobladas y grisáceas cejas,
Gallo comienza su ritual. Con esmero quita el polvo de las botas para, poste-riormente, aplicar la crema con la ayuda de un cepillo de púas blandas y termi-na abrillantando el calzado con un paño que sus manos, cortas pero fuertes, su-jetan firmemente para sacar los restos de ungüento. Mientras realiza su tarea con pasmosa facilidad, viajamos 70 años atrás en el tiempo con su relato y nos explica cómo funciona el negocio.
Las dificultades económicas a las que se enfrentaba su familia, llevaron al menor de cuatro hermanos a lustrar botas por las casas y hoteles de Minas para ayu-dar en casa. Con el tiempo se mudó a Montevideo, donde tras trabajar como peón y, después, jubilarse como patrón en el Mercado Agrícola, tuvo que volver a dedicarse a la profesión que ejercía de niño. Esta vez, con la ayuda de un ami-
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Raúl Gallo, “El Lustrador de la Plaza de la Independencia”, aprendió la profesión con tan solo 10 años. En la actualidad y con ocho décadas a su espalda, continúa lustrando zapatos cada día en el corazón de Montevideo.
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go chileno, Gallo fabricó una silla para que sus clientes se sentaran. El asiento, decorado con un cartel con la ilustración de Artigas y su insignia, la bandera de 33 y la celeste uruguaya y un letrero que reza “El prócer. Lustrados”, forma parte del mobiliario de la Plaza de la Indepen-dencia desde hace más de 10 años.
“Los clientes son muy distintos” afirma Raúl Gallo. Desde turistas, hasta aboga-dos y futbolistas han pasado por su silla. Declara que sus clientes son en su mayo-ría hombres porque “la mujer nuestra es muy tímida, no quiere abrir las piernas para lustrar”, y es que para poder abri-llantar el calzado, “El Lustrador” cuen-ta con una estructura donde apoyar los pies que elevan las piernas y dejan la apertura idónea entre ambas para poder realizar el trabajo, una postura un tanto peculiar.Aunque nos confiesa que “los años te van llevando para atrás” El Lustrador rebosa energía y buen humor por cada poro de su piel.
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vueltaa los
orígenesAbel Álves, creador del videojuego de Game of Thrones en 8 bits, no sale de su asombro.
En menos de dos semanas consiguió 100.000 descargas y lo que comenzó como un
pasatiempo se convirtió en un viral que no ha parado de girar por la red.
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La afición por los videojuegos sumado a la pasión por el dibujo artístico, empujaron a este gallego instalado en Montevideo
a llevar a cabo un proyecto ignorando que alcanzaría tanto éxito. La sabia decisión de crear un videojuego divertido, sobre una his-toria con muchos fans y diseñarlo volviendo a los orígenes de los 8 bits fue la conjunción que dio en el blanco. Después de un duro trabajo de más de tres meses, donde tuvo que armar fotograma por fotograma todos los movimientos de cada uno de los per-sonajes, Abel recibió una recompensa mayor a la que esperaba.
Revistas de videojuegos como Ing, incluso, la Rolling Sto-nes o la MTV y radios in-ternacionales escribieron sobre el fenómeno que el formato de
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8 bits del juego de Game of Thrones ha-bía causado en la audiencia. El gallego nunca pensó que su trabajo fuera tratado en tantos medios, ni mucho menos, que cruzara fron-teras. “Ver que en YouTube turcos, franceses o portugueses se graban jugando a tu jue-go y recibir mails dándote la enhorabuena es increíble” afirma Abel Álves quien pensó que estaba en la cima cuando la cifra de des-cargas alcanzó el número 1000 y desconocía que esa cifra se multiplicaría por 100 en me-nos de dos semanas.
El diseñador tiene en mente otra saga, pero esta vez no sabe si el hilo argu-
mental se basará en una película o en una serie. De momento,
meterse en la pixelada piel de Jon Snow, Daenerys
de la Tormenta o Robb Stark, está gozado.
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abel no salía de su asombro, cuando en menos de dos semanas el juego
superó las 100.000 descargas
WEB - Abel Álves
poética mudaMediante ilustraciones silenciosas vestidas de blanco y negro, Gervasio Troche nos invita a conocer su forma de ver el mundo. Un viaje donde los árboles, las estrellas, la lluvia o la música guían la travesía.
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Gervasio Troche, hijo de padres exiliados políticos de Uruguay, nació en Buenos Aires y creció
en Francia y México, hasta su regreso a la tierra natal de sus progenitores. Las dificultades idiomáticas con las que el artista se topó en su niñez, le llevaron a buscar un nuevo código para co-municarse que él denomina “lenguaje mudo” y que asienta la línea de todo su trabajo. De niño encontró en el di-bujo una válvula de escape. “Cuando dibujaba estaba en paz conmigo”, afir-ma el uruguayo, “me gustaba jugar a atrofiar la realidad (…) pretendía cam-biar el mundo con el arte”.
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Comenzó publicando en fanzines in-dependientes y revistas zonales, rea-lizó colaboraciones en revistas de hu-mor como ¡Berp! y Tío Pepe, tenía un cartoon editorial diario en el matutino La República y hace trabajos para el magazine Hecho en Buenos Aires. Realmente su apertura al mundo fue gracias a Internet. En un primer mo-mento estaba receloso por colgar sus trabajos en la red sin seguridad algu-na, pero dejó a su personaje Mangru-llo en el pasado, se lanzó a dibujar su visión del mundo y creó un blog don-de sube ilustraciones periódicamente. Gracias a ello, consiguió lo que más ansiaba, editar un libro.
Dibujos invisibles engloba el trabajo de tres años donde la lluvia, los árbo-les, la música y el cielo son elementos presentes en cada una de las páginas. Con trazos sinceros, Troche muestra su forma de ver el mundo y nos invita a colarnos en su “trozo de planeta”, un planeta desnudo y puro en el que el visitante es libre de perderse entre sus líneas y darle su propio significado. La simpleza y el silencio a gritos son las armas del artista, que se inspira en la naturaleza que muta según se la mire.
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El proceso creativo es más que curioso. Primero escribe la idea y luego la plasma en el dibujo. Cree que “caminar es una euforia” a la hora de inspirarse y su trabajo está in-fluenciado por su estado anímico. Explica que dibuja para alguien que no sabe quién es y no pretende romper los límites dentro del arte, pero sí dentro de su personalidad. La verdad, es que al mirar sus ilustraciones se puede cono-cer la identidad del artista uruguayo, sus sentimientos y su modo de ver el mundo.
Entre sus influencias artísticas, se destacan músicos como Bob Dylan o Radiohead y dibujantes como Quino o Steinberg, pero su padre y su madre, poeta y actriz res-pectivamente, jugaron un papel muy importante en su vida al enseñarle a “no tener miedo a ser artista”.
En la actualidad, además de publicar en su blog y colaborar en distintos semanarios, imparte clases de dibujo en Talleres SACUDE y la Escuela del INAU de Soriano con menores infractores. Su intención es hacer renacer los sueños de los jóvenes mediante la ilustración.
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“me gustaba jugar a atrofiar la realidad”
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“cuando dibujaba estaba en paz conmigo”
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textos Rocío garcíaFotos Nacho turelldiseño carolina amaroproducción ruth beltramelli
agradecimientos:
a david, por el aguante eterno
y sus dotes culinarios. a ali,
por su seriedad cuadrúpeda. al
tincho, nuestro tirador oficial de
trompos. a rosa, primera infectada
de tromposis.
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