La Sagrada FamiliaLa Sagrada Familia

Los que empadronaron a la Sagrada Familia

En muchos países de

África el no estar

empadronado hace que

muchos niños ni siquiera reciban

ayudas o puedan ir a

la escuela porque no

existen.

El empadronamiento es hacer la lista de las personas que viven en un lugar.

Una cuarta parte de los seres humanos vivían en el imperio.

El emperador romano César Augusto dominaba todas las costas del mar Mediterráneo desde España hasta Palestina, además de zonas de Europa, África y Asia.

Para saber cuántos eran los habitantes de este gran imperio, Augusto mandó a sus gobernadores que hicieran un empadronamiento de todos ellos.

Uno de los fines principales era saber cuántos impuestos podían pagar.

Los romanos llevaban establecidos en Judea unos 60 años, cuando Cirino, el gobernador de Siria, provincia romana de la que dependían los judíos, hizo que sus funcionarios comenzaran a empadronarlos.

San José y la Virgen

tuvieron que dejar Nazaret,

porque el empadronamie

nto se hacía según familias

y la familia de

san José, la del antiguo

rey David, era del Belén.

Para evitar problemas se trasladaron hasta aquella pequeña aldea.

Y así nació Jesús en Belén. Con la orden de Augusto se cumplía así una profecía del profeta Miqueas que había predicho que aquella aldea era importante porque en ella nacería “el que apacentaría a mi pueblo Israel”.

La Sagrada Familia sería incluida en la “lista” por un “publicano”, uno de los odiados judíos que recogían impuetos para Roma, y a quienes tanto querría salvar Jesús en su vida pública, con la supervisión de algún soldado romano.

El empadronamiento de Jesús le hacía ser uno más entre nosotros y fue un signo de que Dios entraba en la historia, compartía nuestra vida y formaba parte de nuestras “listas”.

FIN

Texto e imágenes

Revista Gesto, Nº 159

Power Point

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