LA MEJOR MEDICINA PARA LOS NIÑOS El jabóngalia.fc.uaslp.mx/~uragani/cam/quid/quid 40.pdfcomo...

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Foto: Pulso [6 C] Miércoles, 7 de marzo de 2007 Actualidad/PULSO Qüid PUBLICACIÓN PERIÓDICA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA UASLP (FC-UASLP) LA MEJOR MEDICINA PARA LOS NIÑOS CUERPO ACADÉMICO DE MATERIALES/FC-UASLP El cuidado de la salud es una de las funciones priori- tarias de la sociedad. En la actualidad el avance de la medicina y de la ciencia en general, conduce a elevar el nivel de vida así como su ca- lidad. Sin embargo, la pre- vención de enfermedades va ligada a cuestiones de cultu- ra y educación, situación que se debe de atender. IMPORTANTE MEDICAMENTO Muy posiblemente la mayo- ría de la gente piense que el más importante medica- mento desarrollado en toda la historia de la medicina sea la penicilina. Si bien es cierto que este antibiótico ha salvado mi- llones de vidas humanas, el más grandioso, el que más ha ayudado a la salud y que mayor número de personas ha salvado de la enferme- dad es una sencilla combi- nación de un ácido graso y sosa cáustica que viene en forma de pastilla. Esta medicina, aunque se comenzó a desarrollar desde siglos Antes de Cristo, se conoce en esta forma desde el siglo XVII y desde entonces tiene la forma de una tablilla del tamaño de un puño. Su nombre común es Jabón. Este sencillo pero pode- roso medicamento fue el que hizo desaparecer casi por completo del mundo en- tero la amenaza de la peste. HISTORIA El nacimiento del primer jabón se pierde en los tiem- pos. Los egipcios ya utiliza- ban un producto jabonoso que consistía en una mezcla de agua, aceite y ceras vegeta- les o animales, fórmula que fue utilizada también por los griegos y los romanos. En el siglo VII existía una potente industria en Es- paña e Italia y fue precisa- mente en la ciudad italiana de Savona donde se empezó a elaborar un jabón de acei- te de oliva que también ha- cían los musulmanes. En el siglo XV aparece el jabón de Marsella, el pre- cursor de los jabones actua- les, preparado con una mez- cla de huesos (ricos en pota- sio) y grasas vegetales. La industria jabo- nera floreció en las ciudades cos- teras del Medi- terráneo, favo- recidas por la abundante pre- sencia del aceite de oliva y la sosa na- tural. Durante la Segunda Guerra Mundial, los ameri- canos desarrollaron un tipo de jabón que podía utilizar- se con agua del mar, pens- ando en los marines desti- nados en el Pacífico: así nació el jabón dermatológi- co, el menos agresivo de todos los jabones. El jabón generalmente es el resultado de la reacción química entre un álcali (ge- neralmente hidróxido de sodio o de potasio) y algún ácido graso; esta reacción se denomina saponificación. El ácido graso puede ser por ejemplo: la manteca de cerdo o el aceite de coco. El jabón es soluble en agua y, por sus propiedades deter- sivas, sirve comúnmente para lavar. DETERGENTES En medicina se entiende por deterger, limpiar una úlcera o herida, y se denominan de- tersorios las sustancias que se emplean para ello. Esto implica que puedan calificarse como de- tergentes sustan- cias tan dispares como la saliva, el jabón o la ga- solina depen- diendo de sobre qué superfi- cies sean empleadas, ya que cuando limpian tienen un efecto detergente. En la vida diaria se en- tiende por detergentes úni- camente a las sustancias que disuelven las gra- sas o la materia orgá- nica gracias a su tensoactividad. Este término pasó del lenguaje indus- trial al lenguaje do- méstico para referirse a ellos en contraposición con el jabón. Pero en realidad, el jabón es un detergente más. Aunque los jabones comparten estas propieda- des, los jabones no son considerados en la práctica como detergentes. Los jabones deben su tensoactividad a la propie- dad de sus moléculas de tener una parte hidrófila (a su vez lipófoba) y otra lipófila (a su vez hidrófoba) y poder emulsionar la suciedad insolu- ble en agua. En el jabón, esta pro- piedad se obtiene al oxidar un ácido graso de cadena larga con una sal alcalina, frecuentemente de sodio o de calcio. Este proceso se de- nomina saponificación. El extremo de la molécu- la que contiene al ácido graso es lipófilo, y el que contiene al átomo alcalino es hidrófilo. Este fue básica- mente la única sustancia tensoactiva utilizada a nivel doméstico hasta mediados del siglo XX. EL CASO DE NEWTON En la época de Newton, 1665, aún no se generalizaba el uso del jabón, así que la peste apareció en Inglaterra y obli- gó a escuelas y universidades a cerrar sus puertas, durante tres años Newton tuvo que posponer sus estudios. Años que se vio forzado a pasar en la granja de su madre adoptiva, lejos de las clases y los profesores. Algunas veces era el có- lera, otras la difteria o la influenza, en aquel 1665 fue la peste bubónica, en- fermedad casi siempre mortal, que se trasmite por medio de las pulgas múri- das (pulgas de las ratas) y que provoca la aparición de ámpulas o bubones de color muy oscuro, por lo que también se le conoce como la peste negra. La peste en Europa y Asia era endémica y tuvo ca- rácter de epidemia en tres ocasiones cuando menos. La primera ocurrió en el siglo VI de nuestra era, y se calcula que cobró 100 millo- nes de víctimas. La segunda se presentó en el siglo XIV y fue conoci- da como la “muerte negra”, probablemente a causa de la cianosis-coloración negruz- ca o lívida de la piel-que ocasiona en las víctimas, aproximadamente 50 millo- nes en esa ocasión. La últi- ma gran epidemia, origina- da en China en 1894, se pro- pagó a todos los continentes y fue diagnosticada por pri- mera vez en los Estados Unidos en 1900. CAMINO DE LA PLATA Las enfermedades infeccio- sas se diseminaron más rápi- damente en los centros mine- ros, debido a las condiciones en que laboraban los hom- bres, algunas mujeres y me- nores de edad, en los tiros y socavones de las minas y en la superficie en las haciendas y patios de beneficio. El hacinamiento en di- chos lugares hacía posible que se contagiaran los tra- bajadores, sobre todo por las malas condiciones de ali- mentación y el exceso de trabajo, aunado a la varie- dad pulmonar de la peste. Estos factores precipitaron la diseminación de una ma- nera rápida y letal. La pulga fue uno de los viajeros incómodos que acompañaron al hombre en su peregrinar a lo largo del Camino de la Plata y con ella viajó la peste como su con- secuencia grave en la rela- ción rata-pulga-hombre. Sierra de Pinos, una de las escalas en el itinerario del camino de México a Za- catecas, fue un poblado mi- nero con movimiento mi- gratorio intenso por la mano de obra itinerante que sufrió los embates de la peste durante el año de 1737. El mal no respetó estatus económico, edad ni sexo. La epidemia que se inició en el pueblo de Tacuba a fi- nales de agosto de 1736, para noviembre ya había invadido la Ciudad de México, y se ex- tendió muy rápidamente a Querétaro, Celaya, Guana- juato, León, San Luis Potosí, Pinos, Zacatecas, Fresnillo, Avino y Sombrerete. ¿La razón? Los caminos no eran muy fluidos pero si bas- tante transitados por los más diversos personajes. La mayor parte de la población de la Nueva España se vio afectada y el Camino de la Plata fue un vehículo eficaz de disemina- ción hacia el norte. CUESTIÓN DE SALUD En el año 2004 un estu- dio reveló que uno de cada doce niños muere antes de lle- gar a los cinco años La causa principal de estas muertes no es el sida, la malaria ni la tuberculosis. La patología que cada año se lleva la vida de cerca de dos millones de niños menores de cinco años es la diarrea, y combatirla es tan simple como eficaz: la- varse las manos con jabón. Un nuevo estudio publi- cado en The Journal of the American Medical Associa- tion (JAMA), confirma que la aplicación de esta medida, recomendada para evitar las descomposiciones causadas por el consumo de alimentos o agua contaminados por bacterias, virus o parásitos, logró reducir en un 53% la incidencia de la diarrea. Los responsables del estu- dio publicado en el JAMA se- ñalan que la limpieza de las manos es importante antes de preparar los alimentos, des- pués de usar el baño, cuando se han tocado animales o des- hechos de los mismos, si al- guien del entorno está enfer- mo o simplemente si están su- cias. La forma de lavárselas también es importante: no basta con mojarse las manos y aplicar jabón en ellas, es nece- sario frotarlas para limpiar la superficie que hay bajo las uñas, entre los dedos y alrede- dor del dorso y las palmas. Por último, han de secarse con una toalla limpia. SALVAR LA VIDA Hay miles de niños en el mundo que desconocen este sencillo proceso, que podría salvar las vidas de gran parte de ellos. Más allá de la importan- cia de lavarse las manos con jabón, este estudio demues- tra que una buena educación sanitaria es la mejor medici- na para los niños. Una cam- paña para promover el lava- do de manos en los países en desarrollo podría salvar un millón de vidas al año. El jabón Cada año mueren dos millones de niños menores de cinco años a causa de la diarrea. Lo mejor para mantenerse alejado de los virus patógenos es lavarse las manos con agua y jabón tradicional. La higiene permanente es fundamental para mantenerse sano. El agua con jabón No hay nada que funcione mejor para mantenerse aleja- do de los virus patógenos que lavarse las manos simplemen- te con agua y jabón tradicional, según ha demostrado un ex- tenso estudio. Parece que ese gran sub- estimado de la desinfección, el jabón de toda la vida, cobra protagonismo. El estudio más extenso hasta el momento de compa- ración de la efectividad de los productos para la higiene de las manos ha demostrado que el agua jabonosa despren- de a la perfección los virus y microorganismos patógenos, como el resfriado común, el virus de la hepatitis A, el de la gastroenteritis aguda y los responsables de un gran nú- mero de enfermedades más. Un hallazgo clave que se obtuvo independientemente fue que las toallitas para las manos que no contienen agua sólo eliminaron alrede- dor de un 50% de las bacte- rias de los voluntarios del es- tudio. Los resultados se pu- blican en el número de marzo del American Journal of In- fection Control. “Se estudió la eficacia de 14 agentes distintos para la hi- giene de manos en la elimi- nación de virus y bacterias de las manos,” afirmó Emily E. Sickbert-Bennett, una epide- mióloga del University of North Carolina Health Care System. “Ningún otro estudio había medido la eficacia del jabón en la eliminación tanto de bacterias como de virus al mismo tiempo,” concluyó.

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[6•C] Miércoles, 7 de marzo de 2007 Actualidad/PULSO

Qüid PUBLICACIÓN PERIÓDICA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA UASLP (FC-UASLP)

LA MEJOR MEDICINA PARA LOS NIÑOS

CUERPO ACADÉMICO DE MATERIALES/FC-UASLP

El cuidado de la salud esuna de las funciones priori-tarias de la sociedad. En laactualidad el avance de lamedicina y de la ciencia engeneral, conduce a elevar elnivel de vida así como su ca-lidad. Sin embargo, la pre-vención de enfermedades valigada a cuestiones de cultu-ra y educación, situaciónque se debe de atender.

IMPORTANTE MEDICAMENTOMuy posiblemente la mayo-ría de la gente piense que elmás importante medica-mento desarrollado en todala historia de la medicinasea la penicilina.

Si bien es cierto que esteantibiótico ha salvado mi-llones de vidas humanas, elmás grandioso, el que másha ayudado a la salud y quemayor número de personasha salvado de la enferme-dad es una sencilla combi-nación de un ácido graso ysosa cáustica que viene enforma de pastilla.

Esta medicina, aunquese comenzó a desarrollardesde siglos Antes de Cristo,se conoce en esta formadesde el siglo XVII y desdeentonces tiene la forma deuna tablilla del tamaño deun puño. Su nombre comúnes Jabón.

Este sencillo pero pode-roso medicamento fue elque hizo desaparecer casipor completo del mundo en-tero la amenaza de la peste.

HISTORIAEl nacimiento del primerjabón se pierde en los tiem-pos. Los egipcios ya utiliza-ban un producto jabonosoque consistía en una mezclade agua, aceite y ceras vegeta-les o animales, fórmula quefue utilizada también por losgriegos y los romanos.

En el siglo VII existíauna potente industria en Es-paña e Italia y fue precisa-mente en la ciudad italianade Savona donde se empezóa elaborar un jabón de acei-te de oliva que también ha-cían los musulmanes.

En el siglo XV aparece eljabón de Marsella, el pre-cursor de los jabones actua-les, preparado con una mez-cla de huesos (ricos en pota-sio) y grasas vegetales.

La industria jabo-nera floreció enlas ciudades cos-teras del Medi-terráneo, favo-recidas por laabundante pre-sencia del aceitede oliva y la sosa na-tural. Durante la SegundaGuerra Mundial, los ameri-canos desarrollaron un tipode jabón que podía utilizar-se con agua del mar, pens-ando en los marines desti-nados en el Pacífico: asínació el jabón dermatológi-co, el menos agresivo detodos los jabones.

El jabón generalmente esel resultado de la reacción

química entre un álcali (ge-neralmente hidróxido desodio o de potasio) y algúnácido graso; esta reacción sedenomina saponificación.

El ácido graso puede serpor ejemplo: la manteca decerdo o el aceite de coco. Eljabón es soluble en agua y,por sus propiedades deter-sivas, sirve comúnmentepara lavar.

DETERGENTESEn medicina se entiende pordeterger, limpiar una úlcerao herida, y se denominan de-tersorios las sustancias quese emplean para ello.

Esto implicaque puedancalificarsecomo de-tergentess u s t a n -cias tandisparescomo lasaliva, eljabón o la ga-solina depen-diendo de sobre qué superfi-cies sean empleadas, ya quecuando limpian tienen unefecto detergente.

En la vida diaria se en-tiende por detergentes úni-camente a las sustancias

que disuelven las gra-sas o la materia orgá-nica gracias a sutensoactividad.

Este término pasódel lenguaje indus-

trial al lenguaje do-méstico para referirse a

ellos en contraposición conel jabón. Pero en realidad, eljabón es un detergente más.

Aunque los jabonescomparten estas propieda-des, los jabones no sonconsiderados en la prácticacomo detergentes.

Los jabones deben sutensoactividad a la propie-dad de sus moléculas detener una parte hidrófila (a

su vez lipófoba) yotra lipófila (a suvez hidrófoba) ypoder emulsionar

la suciedad insolu-ble en agua. En el jabón, esta pro-

piedad se obtiene al oxidarun ácido graso de cadenalarga con una sal alcalina,frecuentemente de sodio ode calcio. Este proceso se de-nomina saponificación.

El extremo de la molécu-la que contiene al ácidograso es lipófilo, y el quecontiene al átomo alcalinoes hidrófilo. Este fue básica-mente la única sustanciatensoactiva utilizada a niveldoméstico hasta mediadosdel siglo XX.

EL CASO DE NEWTONEn la época de Newton, 1665,aún no se generalizaba el usodel jabón, así que la pesteapareció en Inglaterra y obli-gó a escuelas y universidadesa cerrar sus puertas, durantetres años Newton tuvo queposponer sus estudios.

Años que se vio forzado apasar en la granja de sumadre adoptiva, lejos de las

clases y los profesores. Algunas veces era el có-

lera, otras la difteria o lainfluenza, en aquel 1665fue la peste bubónica, en-fermedad casi siempremortal, que se trasmite pormedio de las pulgas múri-das (pulgas de las ratas) yque provoca la apariciónde ámpulas o bubones decolor muy oscuro, por loque también se le conocecomo la peste negra.

La peste en Europa yAsia era endémica y tuvo ca-rácter de epidemia en tresocasiones cuando menos.La primera ocurrió en elsiglo VI de nuestra era, y secalcula que cobró 100 millo-nes de víctimas.

La segunda se presentóen el siglo XIV y fue conoci-da como la “muerte negra”,probablemente a causa de lacianosis-coloración negruz-ca o lívida de la piel-queocasiona en las víctimas,aproximadamente 50 millo-nes en esa ocasión. La últi-ma gran epidemia, origina-da en China en 1894, se pro-pagó a todos los continentesy fue diagnosticada por pri-

mera vez en los EstadosUnidos en 1900.

CAMINO DE LA PLATALas enfermedades infeccio-sas se diseminaron más rápi-damente en los centros mine-ros, debido a las condicionesen que laboraban los hom-bres, algunas mujeres y me-nores de edad, en los tiros ysocavones de las minas y enla superficie en las haciendasy patios de beneficio.

El hacinamiento en di-chos lugares hacía posibleque se contagiaran los tra-bajadores, sobre todo porlas malas condiciones de ali-mentación y el exceso detrabajo, aunado a la varie-dad pulmonar de la peste.Estos factores precipitaronla diseminación de una ma-nera rápida y letal.

La pulga fue uno de losviajeros incómodos queacompañaron al hombre ensu peregrinar a lo largo delCamino de la Plata y con ellaviajó la peste como su con-secuencia grave en la rela-ción rata-pulga-hombre.

Sierra de Pinos, una delas escalas en el itinerario

del camino de México a Za-catecas, fue un poblado mi-nero con movimiento mi-gratorio intenso por lamano de obra itinerante quesufrió los embates de lapeste durante el año de 1737.El mal no respetó estatuseconómico, edad ni sexo.

La epidemia que se inicióen el pueblo de Tacuba a fi-nales de agosto de 1736, paranoviembre ya había invadidola Ciudad de México, y se ex-tendió muy rápidamente aQuerétaro, Celaya, Guana-juato, León, San Luis Potosí,Pinos, Zacatecas, Fresnillo,Avino y Sombrerete.

¿La razón? Los caminos noeran muy fluidos pero si bas-tante transitados por los másdiversos personajes. La mayorparte de la población de laNueva España se vio afectaday el Camino de la Plata fue unvehículo eficaz de disemina-ción hacia el norte.

CUESTIÓN DE SALUDEn el año 2004 un estu-

dio reveló que uno decada doce niñosmuere antes de lle-gar a los cinco añosLa causa principalde estas muertes no

es el sida, la malariani la tuberculosis.La patología que

cada año se lleva la vida decerca de dos millones deniños menores de cinco añoses la diarrea, y combatirla estan simple como eficaz: la-varse las manos con jabón.

Un nuevo estudio publi-cado en The Journal of theAmerican Medical Associa-tion (JAMA), confirma quela aplicación de esta medida,recomendada para evitar lasdescomposiciones causadaspor el consumo de alimentoso agua contaminados porbacterias, virus o parásitos,logró reducir en un 53% laincidencia de la diarrea.

Los responsables del estu-dio publicado en el JAMA se-ñalan que la limpieza de lasmanos es importante antes depreparar los alimentos, des-pués de usar el baño, cuandose han tocado animales o des-hechos de los mismos, si al-guien del entorno está enfer-mo o simplemente si están su-cias. La forma de lavárselastambién es importante: nobasta con mojarse las manos yaplicar jabón en ellas, es nece-sario frotarlas para limpiar lasuperficie que hay bajo lasuñas, entre los dedos y alrede-dor del dorso y las palmas. Porúltimo, han de secarse conuna toalla limpia.

SALVAR LA VIDAHay miles de niños en elmundo que desconocen estesencillo proceso, que podríasalvar las vidas de granparte de ellos.

Más allá de la importan-cia de lavarse las manos conjabón, este estudio demues-tra que una buena educaciónsanitaria es la mejor medici-na para los niños. Una cam-paña para promover el lava-do de manos en los países endesarrollo podría salvar unmillón de vidas al año.

El jabónCada año mueren dos millones de niños menores de cinco años a causa de la diarrea. Lo mejor para mantenerse alejado de los virus patógenos es lavarse las manos con agua y jabón tradicional.

La higiene permanente es fundamental para mantenerse sano.

El agua con jabónNo hay nada que funcionemejor para mantenerse aleja-do de los virus patógenos quelavarse las manos simplemen-te con agua y jabón tradicional,según ha demostrado un ex-tenso estudio.

Parece que ese gran sub-estimado de la desinfección,el jabón de toda la vida,cobra protagonismo.

El estudio más extensohasta el momento de compa-ración de la efectividad de losproductos para la higiene delas manos ha demostrado

que el agua jabonosa despren-de a la perfección los virus ymicroorganismos patógenos,como el resfriado común, elvirus de la hepatitis A, el de lagastroenteritis aguda y losresponsables de un gran nú-mero de enfermedades más.

Un hallazgo clave que seobtuvo independientementefue que las toallitas para lasmanos que no contienenagua sólo eliminaron alrede-dor de un 50% de las bacte-rias de los voluntarios del es-tudio. Los resultados se pu-

blican en el número de marzodel American Journal of In-fection Control.

“Se estudió la eficacia de14 agentes distintos para la hi-giene de manos en la elimi-nación de virus y bacterias delas manos,” afirmó Emily E.Sickbert-Bennett, una epide-mióloga del University ofNorth Carolina Health CareSystem. “Ningún otro estudiohabía medido la eficacia deljabón en la eliminación tantode bacterias como de virus almismo tiempo,” concluyó.