LA CORONA DE NUESTRA FE -1 Cor 15

8/9/2019 LA CORONA DE NUESTRA FE -1 Cor 15

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LA CORONA DE NUESTRA FE(1 CORINTIOS 15.1-28, 32b-34, 58)

Pastor Juan Carlos de la Cruz V.

Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque maana moriremos. v.34.b

1Adems os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual tambin recibisteis, enel cual tambin perseveris; 2por el cual asimismo, si retenis la palabra que os he predicado, soissalvos, si no cresteis en vano.

3Porque primeramente os he enseado lo que asimismo recib: Que Cristo muri por nuestrospecados, conforme a las Escrituras; 4y que fue sepultado, y que resucit al tercer da, conforme alas Escrituras; 5y que apareci a Cefas, y despus a los doce. 6Despus apareci a ms de 500hermanos a la vez, de los cuales muchos viven an, y otros ya duermen. 7Despus apareci a Jacobo;despus a todos los apstoles; 8y al ltimo de todos, como a un abortivo, me apareci a m. 9Porque yosoy el ms pequeo de los apstoles, que no soy digno de ser llamado apstol, porque persegu a la

iglesia de Dios.

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Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano paraconmigo, antes he trabajado ms que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo. 11Porqueo sea yo o sean ellos, as predicamos, y as habis credo.

12Pero si se predica de Cristo que resucit de los muertos, cmo dicen algunos entre vosotrosque no hay resurreccin de muertos? 13Porque si no hay resurreccin de muertos, tampoco Cristoresucit. 14Y si Cristo no resucit, vana es entonces nuestra predicacin, vana es tambin vuestra fe. 15Y somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que l resucit a Cristo,al cual no resucit, si en verdad los muertos no resucitan. 16Porque si los muertos no resucitan,tampoco Cristo resucit; 17y si Cristo no resucit, vuestra fe es vana; an estis en vuestros pecados. 18Entonces tambin los que durmieron en Cristo perecieron. 19Si en esta vida solamente esperamos enCristo, somos los ms dignos de conmiseracin de todos los hombres.

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Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.

21Porque por cuanto la muerte entr por un hombre, tambin por un hombre la resurreccin de losmuertos. 22Porque as como en Adn todos mueren, tambin en Cristo todos sern vivificados. 23Perocada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.24Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, todaautoridad y potencia. 25Porque preciso es que l reine hasta que haya puesto a todos sus enemigosdebajo de sus pies. 26Y el postrer enemigo que ser destruido es la muerte. 27Porque todas las cosas lassujet debajo de sus pies. Y cuando dice que todas las cosas han sido sujetadas a l, claramente seexcepta aquel que sujet a l todas las cosas. 28Pero luego que todas las cosas le estn sujetas,entonces tambin el Hijo mismo se sujetar al que le sujet a l todas las cosas, para que Dios sea todoen todos.

De otro modo, qu harn los que se bautizan por los muertos, si en ninguna manera los muertosresucitan? Por qu, pues, se bautizan por los muertos?30 Y por qu nosotros peligramos a toda hora?31 Os aseguro por la gloria que de vosotros tengo en Cristo Jess Seor nuestro, que cada da muero.32 Si como hombre batall en Efeso contra las bestias, qu me aprovecha?

32bSi los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque maana moriremos. 33Noerris; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.34Velad debidamente, y nopequis;porque algunos no conocen a Dios; para vergenza vuestra lo digo.

Pero dir alguno: Cmo resucitarn los muertos? Con qu cuerpo vendrn?36 Necio, lo que t siembras no revive, si no muriere antes.37 Y lo que siembras, no siembras el cuerpo que ha de ser, sino el grano desnudo, ya sea de trigo,

o de otro grano;38 mas Dios le da el cuerpo como l quiere, y a cada simiente su propio cuerpo.


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39 No toda carne es la misma carne; pues una carne es la de los hombres, y otra carne la de losanimales, y otra la de los peces, y otra la de las aves.

40 Tambin hay cuerpos celestiales, y cuerpos terrenales; mas ciertamente una es la gloria de loscelestiales, y otra la de los terrenales.

41 Una es la gloria del sol, y otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas; porque una

estrella es diferente de otra en gloria.42 As tambin es la resurreccin de los muertos. Se siembra en corrupcin, se levantar enincorrupcin;

43 se siembra en deshonra, se levantar en gloria; se siembra en flaqueza, se levantar en poder;44 se siembra cuerpo natural, resucitar cuerpo espiritual. Hay cuerpo natural, y hay cuerpo

espiritual.45 Y as est escrito: El primer hombre Adn fue hecho un alma viviente; el postrer Adn un

espritu vivificante.46 Mas lo espiritual no es primero, sino lo natural; luego lo espiritual.47 El primer hombre, es de la tierra, terrenal; el segundo hombre que es el Seor, es del cielo.48 Cual el terrenal, tales tambin los terrenales; y cual el celestial, tales tambin los celestiales.

49 Y as como hemos llevado la imagen del terrenal, llevaremos tambin la imagen del celestial.50 Mas esto digo, hermanos; que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios; ni la

corrupcin hereda la incorrupcin.51 He aqu, os digo un misterio: No todos dormiremos, pero todos seremos transformados.52 En un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocar la trompeta, y

los muertos sern resucitados sin corrupcin, y nosotros seremos transformados.53 Porque es necesario que esto corruptible sea vestido de incorrupcin, y esto mortal sea vestido

de inmortalidad.54 Y cuando esto corruptible haya sido vestido de incorrupcin, y esto mortal haya sido vestido de

inmortalidad, entonces se cumplir la palabra que est escrita: Sorbida es la muerte en victoria.55 Dnde est, oh muerte, tu aguijn? Dnde, oh sepulcro, tu victoria?56 El aguijn de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley.57 Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Seor Jesucristo.58As que, hermanos mos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Seor

siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Seor no es en vano.

PROPOSICINSi los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque maana moriremos.

INTRODUCCINEl escenario de fondo a la resurreccin, la doctrina que representa la corona de nuestra fe, fue uno

de tensin, discusiones, discursos, aclaraciones, milagros, etc. El colmo de todo fue la vergenza queJess hizo pasar a los maestros del pueblo con la respuesta a la pregunta sobre a quien pagar lostributos. Los seguidores del Maestro no haban entendido ninguna de las enseanzas de Jess sobre lamuerte y resurreccin de Cristo hasta que todo aconteci. Una vez muerto el Cristo todos pensaron quesus esperanzas de restauracin del reino haban sucumbido y fenecido. No bastaron las enseanzastextuales del Maestro sobre el particular, nadie haba entendido lo que el quera decir con aquello deque resucitara al tercer da. Aquel sbado de recogimiento, aquel da de reposo fue el ms anormal detodos para los seguidores del que se deca ser el Mesas. El que haba enseado tantas maravillas,aquel que haba hecho historias sin precedentes haba fenecido al igual que todos los que habanvenido. Las esperanzas de restauracin del reino se pusieron oscuras. Haba unos seguidores tristes ydolidos aquel da de reposos. Haba mucho dolor en Mara, las dems seguidoras de Jess y de los

discpulos. Aquella pascua no sera olvidada jams por aquellos seguidores del Mesas. Todoaparentaba sombro. Cunto dolor!


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Cunado hablamos del hecho histrico de la resurreccin, la corona de la fe cristiana , estamoshablando de un hecho trascendental que o bien sea es el fraude mas grande y sofisticado de la historiao es el hecho mas fantstico y sobrenatural de la historia humana.

Hay tres credenciales bsicas en la historia de Jess, de los cuales, si alguno de ellos sucumbe,sucumbe todo el cristianismo, a saber: 1) El impacto de la vida de Jess sobre la historia, 2) el

cumplimiento de las profecas en su persona, 3) la resurreccin de entre los muertos.Si se pudiera negar la resurreccin, el cristianismo no tendra razn de ser. El cristianismopermanece en pie o cae con la resurreccin. Esta doctrina no es un asunto de mera discusin teolgica,sino un asunto de vida o muerte para la fe cristiana. Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos,que maana moriremos.

En la historia de Jess todo armoniza perfectamente, lo extrao hubiera sido si Cristo se hubieraquedado en la tumba. Todo su mensaje, las profecas y su obra habran fenecido si el no hubieraresucitado, conforme a las escrituras.

La primera multitud que se convirti al cristianismo se convirti en un mensaje sobre laresurreccin.

El meollo del mensaje apostlico era exactamente la resurreccin de Cristo y la esperanza de la

resurreccin de los cristianos. El cristianismo no tuviera nada que ofrecer si no fuera la esperanzade resurreccin y vida.

La resurreccin enfatiza cinco grandes realidades:1) Explica la muerte de Jess,2) Confirma y completa las profecas sobre la primera venida, al igual que da paso al flujo normal

del plan de Dios en la historia, segn las profecas.3) Anticipa la venida del E. S. y la expansin de la fe cristiana.4) Preanuncia la segunda venida de Cristo como rey.5) Nos anima en la esperanza de vida.

Nuestra fe no avergenza, por el contrario, nos trae esperanza de vida eterna.

Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque maana moriremos.

UNA EXPLICACIN GENERAL DEL PASAJELa carta de Pablo a los corintios, principalmente, no es una carta doctrinal, sino una carta de

correccin de conductas personales y de la iglesia; no obstante y por ello, debe contener doctrinas en simisma. Esta carta de Pablo, aunque es dirigida a la iglesia, no es como la que escribi a los Glatas, oa los efesios o a Timoteo. En aquellas, el contenido es puramente doctrinal, en esta es correctivo. Perola conserjera y la correccin no ocurren separadas de la doctrina, por tal razn, la carta a los corintios

tiene un alto contenido doctrinal prctico.Este capitulo 15 de primera a los Corintios es la defensa mas abundante en las escriturassobre la doctrina de la resurreccin. Es una apologa a favor de tal doctrina, y en oposicin a lasfalsas enseanzas de algunos que estaban introduciendo doctrinas malditas, quizs pblicamente yencubiertamente en la iglesia sobre el particular que nos atae. El apstol esta haciendo una referenciaabundante y marcada sobre la predicacin apostlico-cristiana y su mensaje. Si se quiere un resumendel contenido del evangelio de Cristo, helo aqu. En este pasaje (versos 1 al 11), a grueso modo,encontramos las evidencias que podan ser comprobadas sobre la doctrina de la resurreccin,entre las cuales tenemos: 1) la enseanza universal de la iglesia (vv.1, 2), 2) el testimonio de las

Escrituras (vv.3, 4), 3) la prueba del testimonio de la basta nube de testigos oculares que aun vivan

en el entonces (vv.5-7), 4) el testimonio del mismo Apstol Pablo (vv.8-10), y 5) el mensaje apostlico

comn (v.11). Cabe mencionar aqu que las variaciones del verbo resucitar ocurren unas 20 veces entodo el capitulo.


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El verso 12 da testimonio de la falta de fe de algunos que se llamaban creyentes, en los cuales,quizs, pesaban ms las influencias filosficas anteriores del dualismo griego o el saducesmo judo.El dualismo griego, que domin la mayora de las escuelas filosficas, que consideraba el universocomo dos realidades mezcladas, lo material y lo espiritual, en donde lo material era contrario a loespiritual, el epicurianismo y el estoicismo son corrientes que enfatizan una de las realidades en contra

de la otra. El platonismo, etc. estn dominados por esta concepcin dual del universo. Los saduceoseran una corriente juda influenciada por esta filosofa que mezclaban los conceptos fundamentales deljudasmo con el dualismo griego, y haban llegado a negar la realidad espiritual futura para los sereshumanos.

En Corinto haba algunos que superponan sus concepciones filosficas por encima de losfundamentos de la fe cristiana. En este capitulo el apstol Pablo est atacando tal hereja, ya que elloshaban llegado a la conclusin de que no haba resurreccin, al igual que crean que los judossaduceos.

En los versos del 13 al 19 Pablo resume seis consecuencias desastrosas en caso de que laresurreccin no sea una realidad. Encontramos entonces: 1) La predicacin de Cristo seria un absurdo(vv.13), 2) la fe en Cristo seria intil y vana (v.14), 3) todos los testigos y predicadores de la

resurreccin serian mentirosos (v.15), 4) nadie seria redimido del pecado y la fe seria una farsa(v.17), 5) no habra esperanza para los cristianos ya fallecidos (v.18), y 6) los cristianos seriamos las

personas mas dignas de lastima del universo (v.19).Los versos siguientes continan dando evidencias y razones teolgicas y practicas sobre la realidad

de la resurreccin. En el v.20 hay una afirmacin de la doctrina como base para nuestra fe. Se trae a lamemoria la analoga de Adn y Cristo, el primero como el representante en la carne, el pecado y lamuerte de la raza humana, y el segundo como el dador de la vida y la resurreccin.

El v.23 habla del orden de la resurreccin, dando por sentado la inerrancia de la doctrina de laresurreccin. El orden es el siguiente: 1) Cristo, 2) las primicias, 3) todos los que son de Cristo losverdaderos cristianos, estos ltimos en su venida. Las primicias representan a aquellos que ya hanresucitado, o que resucitaran antes de la resurreccin final.

Los vv.24 al 28. Nos relatan el estado final de las cosas bajo el dominio y control de Dios el Padre,en el cual, incluso Cristo, estar sujeto al Dominio eterno del Padre. Todo esto luego de que la muertesea derrotada y sometida por completo (v.25).

Los versos 29 al 32 son una ilustracin de lo impregnado de tal esperanza en las culturas paganas.Los versos 35 al 56 nos ilustran la forma de la resurreccin. Ilustran la manera como suceder la

resurreccin propiamente dicho. Podramos decir que nos hablan de la mecnica de la resurreccin.Los versos 34, 57 y 58 nos refieren las recomendaciones y mandamientos del apstol Pablo a los

creyentes para asegurarnos de que no hemos credo en vano.


No se puede hablar de resurreccin sin hablar de nacimiento, vida, obra y muerte. Aqu no hablaremosni del nacimiento, ni de la vida ni la obra de nuestro Seor. Tampoco pretendemos hablarabundantemente de la doctrina de la resurreccin misma; nuestro marcado inters en esta maana esindagar sobre las implicaciones de creer la doctrina que representa la corona de la fe cristiana, laresurreccin de Jess y la postrera resurreccin de los muertos.

ILUSTRACIN DE LA BIOGRAFAToda biografa inicia con los datos de nacimiento, despus habla de la vida y obra del biografiado, yfinalmente concluye con la fecha de defuncin. Todas son iguales en esto, excepto la de nuestro SeorJesucristo que concluye con la resurreccinpstume a su muerte en la cruz.


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LAS DISCUCIONES CIENTFICAS SOBRE LA RESURRECIN- El postulado materialista- El postulado dualista- El postulado de la falsamente llamada ciencia (gnosis)- El postulado pantesta y unitarianista.

LAS APLICACIONES EN EL PASAJEEn los vv. 32 al 34 y 58 encontramos las aplicaciones: Si los muertos no resucitan, comamos y

bebamos, porque maana moriremos.No erris; las malas conversaciones corrompen las buenas

costumbres.Veladdebidamente, yno pequis; porque algunos no conocen a Dios; para vergenza

vuestra lo digo. Masgracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro SeorJesucristo.

As que,hermanos mos amados, estadfirmes y constantes, creciendo en la obra del

Seor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Seor no es en vano.

Encontramos:1) El consejo a los impos, los que niegan las doctrinas cristianas: La idea es: est bien, si usted

cree que los muertos no resucitan, que podemos hacer por usted, siga as, viva la vida loca, coma y

beba, goce de los placeres y deseos carnales, y nos vemos maana, cuando muramos. Pero yo estoyseguro de que los muertos resucitan, por lo que ya les expuse, basado en mi conocimiento, miexperiencia y el testimonio de otros cientos de hermanos y hermanas, incluyendo los dems apstolesdel evangelio que anunciamos.

2) Los mandatos a los creyentes: (a) tenga cuidado, las malas conversaciones corrompen lasbuenas costumbres. Tenga cuidado con quien se junta, los herejes no merecen ser nuestros amigos.Cuidado lo que vemos en la TV, lo que omos en la radio, lo que conversamos con nuestros amigos,etc. (b) Velemos debidamente y no pequemos; pues los que viven pecando son una vergenza, noconocen a Cristo. (c) En el verso 57 se nos recuerda que debemos agradecer constantemente a aquelpor quien tenemos la victoria. La idea es: cuidado con jactarte porque lo que tienes te ha sido dado, lavictoria es segura porque el esta de nuestra parte para darnos el poder para velar debidamente, para nopecar, para estar firmes, constantes y en continuo crecimiento en la fe. (d) El v.58 nos trae el consejocristiano final: As que, hermanos mos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra delSeor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Seor no es en vano. (e) Recordando siempre quehabra grande recompensa y que el trabajo en el Seor no es en vano. Amn.


ALGUNAS APLICACIONES A NOSOTROS HOY

A cual de los personajes involucrados en la resurreccin representas tu hoy?

A los perversos que estaban enseando herejas destructoras en la iglesia, los cuales mostrabanapariencia de piedad pero con sus acciones la negaban?Representas a alguno de los apstoles que vio a Jess?O representas a los fieles creyentes que hicieron caso al testimonio de los apstoles?

Quizs usted diga: Pastor pero yo creo fielmente la doctrina de la resurreccin.Respondo: y por que vives como si no la creyeras?

- Qu estas haciendo en tu vida privada?- Cmo es tu testimonio pblico?- Cmo es tu testimonio privado?- Con quien te juntas?- Qu hay en tu vocabulario?- Qu domina tus conversaciones?


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- Qu tipo de programas estas viendo en la TV?- Qu tipo de literatura estas leyendo?- Con que te sueas?- Qu calificacin piensas que dara Jess a tu corazn?- Por qu hay que luchar tanto contigo si en verdad crees las doctrinas cristianas?- Cunto creciste en los ltimos dos aos de creyente?- Qu se puede decir de tu trabajo en el Seor?, Hay que regarte para involucrarte en el trabajo

del Seor?- A cuanto ascendieron tus ofrendas y diezmos el ltimo ao fiscal?- Que dicen los que te rodean, tus amigos, tus familiares, etc. de ti?

La fe no es un asunto del intelecto. Cuando afirmamos creer lo que Dios ha dicho acerca de laresurreccin, nunca debemos pasar por alto las advertencias y mandatos sobre como mostramos queverdaderamente creemos la doctrina de que se habla. Es con nuestros hechos.


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