Inward Outward Frmi

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 1 6 8 www.sonepsyn.cl Estudio mediante imagen funcional de resonancia magnética (fMRI) de las activaciones emotivas correlacionadas a la presentación de rostros extraños o del propio rostro en sujetos con personalidad inward y outward* Functional magnetic resonance imaging (fMRI) study of emotional expressions correlated to strange face expressions or of the itself in subjects with inward or outward personality d* Bernardo Nardi 1 , Ilaria Capecci 1 , Mara Fabri 2 , Gabriele Polo nara 3 , Ugo Salvolini 3 , Cesario Bellantuono 4  y Andrés Moltedo 5 Introduction: Due to patterns of reciprocity based on steady and coherent behaviours or, on the contrary, on articulate and changing behaviours, attachment relationships produce personal meaning organizations respectivel y centred on inward or outward focus. In inward organizations, emotions are more distinct and reciprocity is more based on physical distance (protection, loneliness); in outward organizations, emotions are more blurred and reciprocity is more based on a semantic sight of relations (approval, rules). Thanks to the modern technologies of neuroimaging (especially functional magnetic resonance, fIMR), a scientific, live study of what happens when an emotion starts is now possible.  Method : W e studied in 10 healthy subjects the amygdala and other nervous system structures activations when the subject perceives emotional expressions by seeing an unknown face and his/her own face. Results were also matched with inward/outward organization (studied with clinical approach and MMPI2, QSP, MQOP). Results and Discussion: Our results proved that an unknown face produces higher activation on the subjects than their own face (“surprise effect”); the anger mostly activates the right Recibido: 16 de mayo de 2008 Aceptado: 15 de agosto de 2008 *En la elaboración de los datos han colaborado Emidio Arimatea, Marco Brandoni, Gianni Castellucci, Gianluca Cavola, Marisa Del Papa, Marzia Di Nicolò, Sabrina Laurenzi, Giulia Mascioli. La investigación se valió de la colaboración de los técnicos neuroradiólogos Gianrico Conti, Jeffrey Dubbini y Felicita Ramella. 1 Centro Adolescentes, DSM de Ancona, Universidad Politécnica de la Marca (Italia). 2 Sec. Fisiología, Dep. de Neurociencias, Universidad Politécnica de la Marca (Italia). 3 Instituto de Radiología, Universidad Politécnica de la Marca (Italia). 4 Clínica Psiquiátrica, Universidad Politécnica de la Marca (Italia). 5 Escuela de Psicología, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (Chile).  ARTÍCU LO DE INVES TIGACIÓN REV CHIL NEURO-PSIQUIAT 2008; 46 (3): 168-181

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    Estudio mediante imagen funcional de resonanciamagntica (fMRI) de las activaciones emotivascorrelacionadas a la presentacin de rostrosextraos o del propio rostro en sujetos conpersonalidad inward y outward*Functional magnetic resonance imaging (fMRI) study ofemotional expressions correlated to strange face expressions orof the itself in subjects with inward or outward personalityd*Bernardo Nardi1, Ilaria Capecci1, Mara Fabri2, Gabriele Polonara3,

    Ugo Salvolini3, Cesario Bellantuono4 y Andrs Moltedo5

    Introduction: Due to patterns of reciprocity based on steady and coherent behaviours or, on thecontrary, on articulate and changing behaviours, attachment relationships produce personalmeaning organizations respectively centred on inward or outward focus. In inward organizations,emotions are more distinct and reciprocity is more based on physical distance (protection,loneliness); in outward organizations, emotions are more blurred and reciprocity is more basedon a semantic sight of relations (approval, rules). Thanks to the modern technologies ofneuroimaging (especially functional magnetic resonance, fIMR), a scientific, live study of whathappens when an emotion starts is now possible. Method: We studied in 10 healthy subjects theamygdala and other nervous system structures activations when the subject perceives emotionalexpressions by seeing an unknown face and his/her own face. Results were also matched withinward/outward organization (studied with clinical approach and MMPI2, QSP, MQOP).Results and Discussion: Our results proved that an unknown face produces higher activationon the subjects than their own face (surprise effect); the anger mostly activates the right

    Recibido: 16 de mayo de 2008Aceptado: 15 de agosto de 2008

    *En la elaboracin de los datos han colaborado Emidio Arimatea, Marco Brandoni, Gianni Castellucci, Gianluca Cavola,Marisa Del Papa, Marzia Di Nicol, Sabrina Laurenzi, Giulia Mascioli. La investigacin se vali de la colaboracin de lostcnicos neuroradilogos Gianrico Conti, Jeffrey Dubbini y Felicita Ramella.

    1 Centro Adolescentes, DSM de Ancona, Universidad Politcnica de la Marca (Italia).2 Sec. Fisiologa, Dep. de Neurociencias, Universidad Politcnica de la Marca (Italia).3 Instituto de Radiologa, Universidad Politcnica de la Marca (Italia).4 Clnica Psiquitrica, Universidad Politcnica de la Marca (Italia).5 Escuela de Psicologa, Pontificia Universidad Catlica de Valparaso (Chile).

    ARTCULO DE INVESTIGACIN

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    Introduccin

    as emociones desempean un rol fundamen-tal en la modificacin de las funciones psico-

    fisiolgicas y en la expresin de los comporta-mientos; como ya haba sido notado por la es-cuela Hipocrtica, ellas tambin condicionan elfuncionamiento de las distintas estructuras som-ticas. En tiempos recientes, el estudio psicofisio-lgico de las emociones ha permitido dar lucessobre los canales de relacin entre mente y soma,y de aquellos procesos que estn a la base tantode la salud mental como de la psicopatologa, enel continuum que existe entre ambas.

    Con este propsito, Papez ha sido de los pri-meros en notar que el hipotlamo, los ncleosanteriores del tlamo, el giro del cngulo, elhipocampo y sus conexiones constituyen un me-canismo armnico que suscita internamente lasemociones, y al mismo tiempo contribuyen a or-ganizar las respuestas emotivas1. Esta observa-cin est inserta en un panorama cognoscitivoque ha permitido puntualizar que las estructuraslmbicas estn implicadas en la induccin de lasexpresiones emotivas en correlacin a los estmu-los sensoriales, mientras que el componentecortical es el responsable de la elaboracin expl-cita y semntica de las distintas experienciasemotivas.

    Contemporneamente, Kluver y Bucy han ob-servado que, tras una lobectoma temporal queimplicaba destruccin de la corteza temporal odel hipocampo y de la amgdala subyacente, elanimal mostraba comportamientos emotivos deltodo inapropiados respecto al tipo de estimula-

    Lcin; tenda, por ejemplo, a aparearse con ani-males de especies distintas y, si estaban hambrien-tos, a llevarse a la boca cualquier tipo de objeto,prescindiendo de cuanto fuese comestible2.

    Desarrollando posteriormente estas observa-ciones experimentales y clnicas, Downer ha pues-to en evidencia el rol predominante de la amg-dala en la valoracin emotiva de los estmulos3.Los resultados que l obtuvo han sido confirma-dos sucesivamente por toda una serie de estudiosposteriores que han permitido evidenciar que elreconocimiento de la valencia positiva y negati-va de una informacin sensorial (por ejemplo,visual) tiene lugar slo despus que las informa-ciones sean unidas y elaboradas por la amgdala.En fin, ha sido demostrado que la estimulacinde la amgdala provoca respuestas emotivas deltodo sobrepuestas a aquellas evocadas por un es-tmulo natural, as como una lesin suya inter-fiere con la actividad autonmica ligada a lasemociones, con los comportamientos emotivosya aprendidos o innatos y con el aprendizaje denuevas respuestas emotivas hacia el ambiente cir-cundante4-6.

    En los ltimos aos, estudios cada vez ms nu-merosos en el mbito neuropsicolgico y psicopa-tolgico han desplazado la atencin de los pro-cesos cognitivos a aquellos centrados en la emo-cin, investigando las relaciones entre las activa-ciones subjetivas de naturaleza emocional y lossistemas operativo-funcionales4 del sistema ner-vioso central correlacionados a ellas.

    Bajo el perfil metodolgico, la introduccinde las modernas tecnologas de imgenes funcio-nales (fMRI, PET, etc) han, en efecto, permitido

    amygdala, while the joy activates both the amygdalas or the left one (it produces a semanticdecoding). Outward subjects, with respect to the inward ones, respond to the anger with a lessintense and univocal pattern, activate more cortical areas, not always respond to their ownfacial expressions and respond to the joy with an higher involvement of the left verbal hemisphere.

    Key words: Amygdala, emotions, fMRI, inward or outward personal meaning organizations.Rev Chil Neuro-Psiquiat 2008; 46 (3): 168-181

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    sentar las bases para un estudio cientfico en vivosobre lo que sucede cuando se experimenta unaemocin y sobre las modalidades a travs de lascuales las diversas emociones son manejadas enel curso del ciclo vital, sea en condiciones fisiol-gicas como psicopatolgicas (trastornos de an-siedad, del nimo, etc)5,6.

    En un reciente estudio de meta-anlisis sobre385 estudios, realizados mediante PET y fMRI,Costafreda et al7, han detectado que, en general,todos los estmulos emocionales resultan asocia-dos a una ms alta probabilidad de activacin dela amgdala respecto de aquellos neutros; aun-que resultados comparables hayan sido observa-dos a raz de emociones negativas y positivas,porcentajes ms elevados de activacin han sidoreportados por algunas emociones negativas(como el miedo y el disgusto) respecto de aque-llas positivas, como la alegra.

    En particular, la activacin de la amgdala trasla presentacin de expresiones faciales de temory de tristeza ha sido documentada en varios estu-dios llevados a cabo mediante fMRI8-14; Prez-Edgar et al14, han sealado, adems, que, en laadolescencia, los procesos de la atencin interfie-ren con la activacin de la amgdala, encontran-do una respuesta claramente superior sobre todoen los sujetos con inhibicin comportamental, loscuales aparecen as ms expuestos al riesgo depresentar trastornos de ansiedad. Por otra par-te, la amgdala y la corteza anterior subgenualestn coinvolucradas sea en las respuestas ansi-genas, sea en las variaciones del tono del nimo,como ha sido recientemente confirmado en tra-bajos realizados utilizando sea rating scales comoel fMRI15. En otros estudios16, siempre mediantefMRI, ha sido demostrado que existe una corre-lacin entre hiperactivacin de la amgdala a lapresentacin de expresiones faciales experimen-tando emociones negativas enmascaradas y de-presin mayor.

    Comparando las respuestas a la presentacinde expresiones faciales de miedo o de alegra,Morris et al9, han puesto en evidencia mediantePET, que la amgdala y la regin periamigdalinase activa mayormente frente a caras que experi-

    mentan miedo respecto a aquellas que experi-mentan alegra; tales activaciones se incrementantanto ms intensa es la expresin de miedo y queella es independiente de los procesos explcitos dereconocimiento cortical de la emocin; en fin, enel caso del miedo est mayormente activada laamgdala izquierda. Un posterior trabajo me-diante fMRI de Vuilleumier et al17, ha permitidodiscriminar las activaciones amigdaloides deriva-das de la presentacin de expresiones faciales desusto segn los componentes espaciales a baja o aalta frecuencia de la imagen: la amgdala recibe,en efecto, los aferentes visuales talmicos mediantedos vas: una, filogenticamente ms antigua,retino-colculo-pulvinar, ms directa y rpida,que no pasa por la corteza visual y que transpor-ta informaciones globales, no permitiendo unadiscriminacin fina; la otra, arribando de la cor-teza visual ventral es ms finamente discrimina-dora pero ms larga y lenta. Como han podidoobservar los autores, la amgdala responde bilate-ralmente a la presentacin de caras asustadas abaja frecuencia, mientras el giro fusiforme (bila-teralmente) y la corteza temporo-occipital iz-quierda responden a alta frecuencia.

    En estos sectores recientes de la investigacinneurocientfica, dos elementos estn asumiendouna notable relevancia, sea bajo el perfil heurs-tico, sea por las posibles recadas clnicas en elestudio de los trastornos mentales: la identifica-cin de sistemas neuronales espejo y la posibi-lidad de distinguir bajo el perfil neurobiolgicolas diferencias entre el pensamiento en primerapersona y aquel en tercera persona.

    El primero, en relacin a los sistemas neuro-nales espejo (mirror neurons, mirror systems),identificados en el cerebro de los primates y, enparticular, en el humano, ha sido observado queellos se activan tanto cuando un individuo haceo prueba cualquier cosa directamente, o cuandoobserva a alguien similar que lo hace o pruebaesa misma cosa. Los sistemas espejo han sido des-critos por el grupo de Rizzolatti18, a nivel motoren los primates (en el rea F5, homloga a laverbal de Broca en los humanos) y sucesivamen-te han sido identificados tambin en las reas

    IMAGEN FUNCIONAL DE RM DE LAS ACTIVACIONES EMOTIVAS CORRELACIONADAS A LA PRESENTACIN DE ROSTROS EXTRAOS

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    somatosensoriales e insulares anteriores implica-das, respectivamente, en las senso-percepciones yen el disgusto19, en la corteza frontal en lo querespecta a las expresiones faciales y a la motiva-cin20, en la amgdala, en la nsula, en el giro fu-siforme y en la corteza orbitofrontal y temporalpara la empata21,22. La presencia de los sistemasespejo demuestran que, para comprender elcomportamiento de los otros, el cerebro traducelas acciones, las senso-percepciones y las emocio-nes observadas en un lenguaje neural propio.

    En relacin al segundo elemento, para percibircomo pertenecientes al s mismo a las emociones,los pensamientos, las acciones y las intencionespropias, el cerebro realiza una sntesis, elaboran-do una serie de imgenes y configuraciones di-versas22-24. Como ha sido puesto en evidencia me-diante fMRI21,24,26, cuando un sujeto piensa en pri-mera persona activa sistemas localizados en lacorteza prefrontal, la parietal medial y en latemporo-parietal derecha. Cuando el sujeto pien-sa en tercera persona, ponindose as en la pers-pectiva del otro, activa no slo la corteza pre-frontal medial, sino tambin aquella temporo-medial izquierda. Estos datos indican que en am-bos casos son activados sistemas neuronales ope-rativo-funcionales que son compartidos por am-bos exmenes y que aparecen localizados a nivelde la corteza prefrontal medial; esta ltima pare-ce as suministrar un nodo funcional al pasajede un enfoque interno a uno externo, que requie-re tambin la activacin de las reas espacialesdel hemisferio derecho.

    El descubrimiento de la existencia de sistemasneuronales espejo ha permitido profundizar lasbases neurobiolgicas de la empata, al permitiractivar inferencias emocionales sobre los estadosmentales y sobre los sentimientos de otra perso-na en contextos sociales. En particular, mediantefMRI, ha sido posible discriminar las diferenciasobservadas al apreciar las expresiones facialesemotivas atribuidas a los estados emocionalespropios o de otros, mediante el estudio de lasdiferencias de activacin cuando se observaba larespuesta emocional ante la presentacin de unaexpresin facial propia (auto-observacin) y

    cuando se observaba la expresin dicho estadoemocional en otra cara (htero-observacin); enambos casos, las estructuras comunes activadashan resultado la corteza orbito-frontal lateral iz-quierda, cortezas frontales inferiores derecha eizquierda, surco temporal superior y poli tem-porales, cerebelo derecho; mientras que en el casode las expresiones propias ha sido observada unaactivacin de la corteza frontal, de la corteza pos-terior del cngulo, del precuneo, del crucetemporo-parietal derecho e izquierdo25,26.

    Las tecnologas de neuroimgenes funcionaleshan permitido estudiar, bajo el perfil de la acti-vacin de estructuras enceflicas especficas, lasrelaciones entre emociones y personalidad. Enesta direccin van estudios, como el de Mobbs etal27, que indagan las relaciones entre expresionesfaciales emocionales y dimensiones de personali-dad (en este caso, aquellas previstas en el NEO-Five-factor Inventory, NEO-FFI: neuroticismo,extraversin, apertura, amabilidad, responsabi-lidad). Tales estudios han permitido confirmarel hecho que el estilo de personalidad juega unrol fundamental en los sistemas neurobiolgicosque permiten apreciar los cambios de humor,aunque el paradigma de referencia considere a lapersonalidad como una configuracin de conjun-to y no como un proceso que emerge de las din-micas del desarrollo individual.

    Para superar este lmite epistemolgico, pa-rece fundamental considerar que, a la base de losprocesos que permiten la expresin de la perso-nalidad individual, como tambin en la modali-dad de su estabilizacin, es posible identificar cla-ramente un valor adaptativo; ello permite man-tener una tendencia a la estabilidad de la cohe-rencia interna y definir la identidad, bajo la for-ma de un sentido de unicidad subjetiva y de cons-tancia en el tiempo. A este valor adaptativo sedebe, gracias a la plasticidad del cerebro huma-no, la capacidad de seleccionar y de estructuraraquella modalidad de funcionamiento psico-comportamental que permite buscar y obtener,del ambiente en el cual se desarrolla y madura, larespuesta a las principales necesidades que se ad-vierten. Bajo este perfil existe, por lo tanto, una

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    reciprocidad, en el salto evolutivo del desarrolloenceflico, entre la aparicin del homo sapiens yla aparicin de la personalidad, dado que estaltima se configura, ms que por una serie es-tructural de habilidades ligadas a las distintasfunciones psquicas, por la capacidad procesal deorganizarse de manera autorreferencial, constru-yendo gradualmente la complejidad interna pro-pia, activndose emotivamente, reordenando laexperiencia percibida de manera subjetiva y defi-niendo, de tal manera, un sentido de s mismo ydel mundo. En cada caso, casi cualquier cambioen la percepcin de s y del mundo, que determi-na una posterior articulacin de los modos dereferir a s la experiencia, es posible slo al inte-rior de las modalidades procesales, en gran parteimplcitas (tcitas) e inconscientes, consisten-tes en los procesos bsicos de cierre organizacionalpropios de cada sujeto28-31.

    Desarrollando modelos explicativos, relativosal funcionamiento mental normal o patolgico,se pueden tomar los aspectos invariantes, quepermiten la estabilidad sustancial y constante enel tiempo de la modalidad bsica de mantencinde la coherencia interna. Esta modalidad le per-mite a cualquier individuo, no obstante lastrasformaciones y los cambios que encuentra ensu ciclo de vida, mantener el sentido de unicidadpersonal y de continuidad histrica que definensu identidad. Por ejemplo, aquello a que VittorioGuidano32 ha dado el nombre de organizacionesde significado personal, OSP (Personal MeaningOrganizations, PMO).

    Cada organizacin, en tanto representa unamodalidad de desarrollo en relacin a las presio-nes percibidas del ambiente, presenta valoresadaptativos, que le permiten enfrentar y resolvermltiples problemas y que brinda indudables po-tencialidades. Pero, por otro lado, por las mis-mas razones, puede presentar fragilidad y pres-tarse a descompensaciones cuando los estmulosambientales resultan perturbantes, cuando nopueden ser integrados con continuidad en el sen-tido de s mismo en curso.

    Por tanto, una percepcin ms o menos posi-tiva o negativa de s y del mundo, con la consi-

    guiente lectura del propio pasado y futuro, nodepende del tipo de cierre organizacional y, porlo tanto, del tipo de organizacin sino sobretodo de la fragilidad constitucional y de los reco-rridos que, al interior de un marco organizacio-nal dado, el sujeto emprende, asimilando la ex-periencia y los mensajes externos y trasformn-dolos activamente en sentido de s.

    En algunos sujetos, las emociones aparecenms precozmente, siendo expresadas prevalen-temente aquellas denominadas primarias, quepara ser activadas no necesitan grandes esque-mas cognitivos y se asocian a una construccinde la reciprocidad centrada en un enfoque inter-no o inward (las activaciones percibidas son uti-lizadas para decodificar la situacin ambientalen la cual se encuentra) principalmente atenta ala distancia fsica de las figuras de referencia30, 31.

    En otros sujetos, a lo largo de un continuumcon posibles situaciones ms matizadas e inter-medias, las tonalidades emotivas reconocibles sonms complejas y aparecen ms tardamente, yaque su activacin requiere una valoracin cogni-tiva preventiva del propio comportamiento, aso-cindose a una construccin de la reciprocidadcentrada sobre un enfoque externo o outward(las seales del ambiente son utilizadas paradecodificar las activaciones internas percibidas)y atento a las seales semnticas intercambiadascon las figuras significativas30,31. Un estudio re-ciente de Alessandro Bertolino et al33, efectuadomediante fMRI y con la evaluacin de los estilosde personalidad conducido por el IPRA de Roma,ha permitido observar que los sujetos inward pre-sentan una mayor activacin de la amgdala, delhipocampo y de la corteza prefrontal medial aestmulos alarmantes constituidos por expresio-nes faciales estndar de miedo respecto a losoutward, que presentan, en cambio, una mayoractivacin a nivel del giro fusiforme, de la corte-za occipital asociativa y de la corteza prefrontaldorsolateral. En otro estudio de este grupo34 hasido demostrado, comparando 14 sujetos inwardy 14 outward, que en los primeros, durante lapresentacin de caras experimentando rabia o te-mor, se observa tambin una mayor activacin

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    IMAGEN FUNCIONAL DE RM DE LAS ACTIVACIONES EMOTIVAS CORRELACIONADAS A LA PRESENTACIN DE ROSTROS EXTRAOS

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    de la corteza media prefrontal, correlacionadacon un mayor reclutamiento neuronal en el cur-so del procesamiento de estmulos emocionales.

    Objetivo de la investigacin

    A la luz de las consideraciones antes reporta-das se ha querido indagar, en voluntarios sin pa-tologa, las activaciones de estructuras del SNCproducto de estmulos emocionales externosestandarizados, estudiados mediante la resonan-cia magntica funcional (fMRI), sea cuando el su-jeto percibe expresiones emotivas relativas a unrostro extrao (tercera persona), o cuando per-cibe las mismas activaciones en la imagen de supropio rostro (primera persona).

    Por lo tanto, hemos querido observar si losresultados obtenidos fuesen similares o existiesendiferencias segn la modalidad de enfoque inter-no (inward) o externo (outward), aspectosque conducen a modos diversos de funcionamien-to bsico de la personalidad individual.

    Mtodo

    SujetosEste estudio ha sido realizado en un grupo de

    10 sujetos voluntarios normales sin patologa (5mujeres y 5 hombres, 28-53 aos), a los cuales seles ha solicitado el consenso informado para par-ticipar del estudio, segn un protocolo experi-mental aprobado por el Comit tico de la Fa-cultad de Medicina y Ciruga de la UniversidadPolitcnica de la Marca. Los sujetos han sido se-leccionados, al interior de un grupo ms amplio(N = 25), de acuerdo al sexo (igual cantidad dela muestra femenina y masculina), a la dominan-cia manual (los sujetos eran todos diestros al testde Oldfield, 35), al nivel de cultura general (ins-truccin universitaria), a la ausencia de patolo-gas neuropsquicas actuales y pasadas (excluidasmediante la Brief Psychiatric Rating Scale [BPRS]y entrevistas clnicas preliminares al reclutamien-to), y a la edad (exclusin de sujetos de edad in-ferior a 18 y superior a 60).

    Protocolo clnicoLa modalidad de enfoque interno (inward)

    o externo (outward), aspectos que conducen amodos diversos de funcionamiento bsico de lapersonalidad individual, han sido comprobadas,en ciego respecto a las pruebas efectuadas confMRI, mediante: a) Cuestionario para la evalua-cin de la Organizacin de Significado Personal(QSP)36; b) escala de evaluacin L del MinnesotaMultiphasic Personality Inventory 2 (MMPI2);c) Mini Cuestionario sobre las Organizaciones dePersonalidad (MQOP), preparado ad hoc pornosotros; d) evaluacin clnica realizada en cie-go respecto a los tests por un psicoterapeuta ex-perto, profesor de Psicoterapia Cognitiva.

    El protocolo prevea la exclusin del estudiode aquellos sujetos para los cuales fuese encon-trada una eventual no concordancia entre los re-sultados de los tests y las evaluaciones clnicas dela modalidad de enfoque inward u outward (co-nectada con la organizacin de la personalidad)situacin que no sucedi en caso alguno.

    Entre los sujetos examinados utilizando la ba-tera de tests precedentemente descrita y la entre-vista clnica, 6 han manifestado una modalidadde enfoque outward y los otros 4 inward. De lossujetos outward, 4 eran de sexo femenino y 2 desexo masculino; entre los inward 3 eran de sexomasculino y 1 de sexo femenino.

    Adquisicin de las imgenes funcionalesEl estudio ha sido efectuado utilizando el apa-

    rato de resonancia magntica General ElectricSigna LX NV/i y CV/i de 1.5 Tesla, provisto degradientes 50 mT/m. A los sujetos se les ha pedi-do hallar una posicin cmoda, de evitar todomnimo movimiento y de mantener la mirada fijaal centro del campo visual, indicado por una cruzpequea. La adquisicin de las imgenes ha teni-do 5 momentos. En el primero ha sido utilizadoun localizador sagital para escoger los niveles delas imgenes. De all ha sido seleccionado un pa-quete de 10 imgenes axiales oblicuas contiguas,de 5 mm de espesor, paralelas al plano pasandopor la lnea bicomisural y perpendicular al pla-no sagital mediano, posicionadas de modo tal de

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    incluir la amgdala. La segunda pasada ha pre-visto la adquisicin de una secuencia 3D. La ter-cera ha consistido en la adquisicin de imgenesanatmicas axiales a alta resolucin, sobre lascuales superponer las imgenes funcionales. Enla cuarta pasada han sido adquiridas las imge-nes funcionales en los mismos planos axiales, uti-lizando una secuencia eco-gradiente EPI T2*-pe-sada. Durante el ciclo de estimulacin han sidoas obtenidas 1000 imgenes funcionales axiales(100/seccin, 1 imagen/3s), adquiridas de los 10niveles axiales seleccionados en la segunda pasa-da. Las imgenes funcionales han sido obtenidascon el mtodo del contraste dependiente del ni-vel de oxigenacin de la sangre (Blood Oxyge-nation Level-Dependent [BOLD]).

    EstimulacinLos estmulos visuales han sido presentados

    por medio de gafas adecuadas, compatibles conel ambiente de la MRI, vinculadas a un computa-dor. Los estmulos utilizados eran caras huma-nas que experimentaban alternativamente unaemocin claramente positiva (alegra), una cla-ramente negativa (rabia) y una neutra. El est-mulo ha sido presentado al centro del campo vi-sual segn un paradigma en bloque, y los movi-mientos oculares han sido monitoreados por unatelecmara incorporada en las gafas. A cada su-jeto le ha sido presentada una secuencia en la cualse alternaban, en orden, una cara con expresinde rabia, una con expresin neutra y una conexpresin de alegra, intervaladas por perodosde no estimulacin (pantalla gris); cada emocinha sido presentada 4 veces, expresada, en ordencasual, dos veces de un rostro de mujer y dos ve-ces de un rostro de hombre, ambos desconocidospor el sujeto (rostro estndar; experiencia en ter-cera persona). La segunda secuencia ha consisti-do en fotografas del mismo sujeto, con las ex-presiones de rabia, neutra y de alegra, presenta-das en el mismo orden (rostro propio; experien-cia en primera persona). Cada secuencia ha teni-do la duracin de 5 minutos, y ha sido compues-ta de la siguiente manera: 12 segundos de reposo,12 segundos de expresin de rabia, 12 segundos

    de reposo, 12 segundos de expresin neutra, 12segundos de reposo, 12 segundos de expresin dealegra, etc, por 4 veces. Durante los 12 segundosde presentacin del rostro, la imagen era ilumi-nada sobre la pantalla una vez al segundo y per-maneca visible por 500 msec.

    Elaboracin de los datosLas imgenes adquiridas han sido analizadas

    con los softwares Functool, BrainVoyager QX ySPM2, en condicin de elaborarlas mediante unaserie de realineaciones, corregistros, normaliza-cin y anlisis estadstico. Tales programas pue-den suministrar un mapa de las reas de activa-cin cerebral, correlacionadas a la presentacindel estmulo, haciendo referencia al sistema deCoordenadas de Talairach. Ha sido as posiblelocalizar las reas de activacin en base a tres va-lores numricos (x, y, z) y valorar las dimensio-nes del volumen cerebral activado, expresado porel nmero de voxel (volumen cerebral unitario 1mm3).

    Resultados

    Mediante los tests psicodiagnsticos y la en-trevista clnica, 4 sujetos han presentado una or-ganizacin de personalidad con enfoque inward,6 con enfoque outward, existiendo concordanciaen todos los casos entre la evaluacin clnica ylos perfiles obtenidos por los Cuestionarios su-ministrados.

    Para asegurarse que el estmulo visual hayasido percibido, ha sido controlada la activacindel rea visual primaria en el lbulo occipital.En presencia de activacin en esta regin, hansido estudiadas las estructuras cerebrales ms di-rectamente correlacionadas con la elaboracin delos estmulos emotivos. En esta primera fase laatencin ha sido dirigida al estudio de la amg-dala, que tiene un rol importante en la elabora-cin de estmulos con un contenido emotivo designificado social28. La expresin de rabia en unrostro desconocido ha activado la amgdala de-recha en 6 sujetos (Figura 1A, B), la izquierda en

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    IMAGEN FUNCIONAL DE RM DE LAS ACTIVACIONES EMOTIVAS CORRELACIONADAS A LA PRESENTACIN DE ROSTROS EXTRAOS

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    Figura 1. Activacin en la amgdala derecha, evidenciada por la interseccin de los ejes, evocada por la presentacin decaras con expresin de rabia. A: activacin observada en un sujeto con estilo de personalidad inward a la presentacin derostro estndar (experiencia en tercera persona); B: activacin evocada por el mismo estmulo en un sujeto outward.C: activacin evocada en el sujeto inward, el mismo mostrado en A, a la presentacin de su rostro (experiencia en primerapersona); D: activacin evocada por el mismo estmulo en el sujeto outward mostrado en B. Siguiendo la convencinradiolgica, el hemisferio izquierdo es representado a la derecha.

    3; en 3 sujetos la expresin de rabia en un rostrodesconocido no ha provocado activaciones. Laexpresin neutra no ha tenido particular signifi-cado emotivo en tercera persona, y ha produci-do una leve activacin de la amgdala izquierdaen 3 sujetos, mientras la derecha la activacin haestado presente en 6 casos. La expresin de ale-gra en tercera persona ha activado bilateral-

    mente la amgdala en 7 de los sujetos, en los res-tantes 3 se ha producido activacin slo de laamgdala de izquierda.

    En la experiencia en primera persona la acti-vacin de la amgdala ha estado presente en laderecha en 2 casos (Figura 1C, D) y bilateralmenteen 5 para la expresin de rabia; a la derecha en 3sujetos, a la izquierda en 2 y bilateralmente en 1

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    para la expresin neutra; la expresin de alegra,en fin, ha activado la amgdala bilateralmente en5 sujetos y la izquierda en 2.

    Los volmenes de activacin no presentan re-sultados distintos de aquellos determinados porla presentacin de caras estndar, aunque, a cau-sa del bajo nmero de casos, no ha sido efectua-do por el momento algn anlisis estadstico.

    En lo que respecta al estilo de personalidad, ladiferencia ms evidente ha consistido en el ma-yor nmero de voxels activados en la amgdaladerecha de los sujetos inward (Figura 1A) respec-to a los outward (Figura 1B); tal diferencia haresultado evidente slo en la experiencia en ter-cera persona.

    Los resultados antes descritos pueden ser re-copilados en las Figuras 2 y 3.

    Discusin

    Los resultados obtenidos en el presente estu-dio confirman el hecho de que la amgdala estimplicada en la elaboracin de estmulos con unsignificado emocional, especialmente si estncorrelacionados a valores sociales, como ya hasido sealado en distintos trabajos relativos a in-vestigaciones de neuroimagen funcional, realiza-das mediante PET o fMRI7-14. Haciendo referen-cia a aquellos trabajos ms estrechamente corre-lacionables con cuanto nos hemos propuesto ve-

    Figura 2. Frecuencia de acti-vacin (expresada en porcentajede sujetos) evocada en la amg-dala por la presentacin derostros estndar con expresinde rabia (columna negra), neu-tra (columna gris) y de alegra(columna blanca).

    Figura 3. Frecuencia de ac-tivacin (expresada en porcen-taje de sujetos) evocada en laamgdala por la presentacin derostros propios con expresinde rabia (columna negra),neutra (columna gris) y dealegra (columna blanca).

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    rificar, la presencia de activaciones bilaterales olateralizadas (prevalencia izquierda segn Morriset al9; activacin bilateral para Vuilleumier et al17;activacin prevalentemente derecha en nuestrocaso) puede ser puesta en relacin con una diver-sa coimplicacin de los circuitos que arriban a laamgdala o directamente del tronco enceflico, oa travs de la corteza visual. Tal comportamien-to funcional distinto puede ser puesto en rela-cin, como se ver, con el enfoque prevalen-temente inward o outward que caracteriza la or-ganizacin de significado personal de algn suje-to, de acuerdo con lo observado por Bertolino etal, en colaboracin con el IPRA33-34.

    Adems, tanto en otros estudios21,25 que handemostrado cmo el experimentar experienciasen primera o en tercera persona, junto a la acti-vacin de reas comunes, conlleva tambin dife-rencias especficas, como en nuestros datos,focalizando la atencin principalmente sobre laamgdala, han emergido diferencias significativas:en la casustica observada por nosotros, en efec-to, la amgdala se ha activado mayormente traslas expresiones faciales percibidas en los rostrosextraos, probablemente por la importancia deun efecto sorpresa y por una mayor focalizacinde los procesos de la atencin sobre los detallesestticos desconocidos y no apreciados, ms quesobre la emocin misma, como sucede al perci-birla observando la propia imagen.

    Otro dato surgido de nuestro estudio concier-ne a la activacin prevalentemente bilateral de laamgdala tras la percepcin de las imgenes pro-pias. La amgdala derecha, adems, se ha activa-do mayormente durante la presentacin de carasexperimentando rabia, que muestran, por consi-guiente, una emocin que prescinde, al menos enla fase de activacin, de la codificacin semnticacortical. La visin de rostros experimentando ale-gra, en cambio, ha activado la amgdala bilate-ralmente o mayormente izquierda; y estando estaltima directamente conectada con las reascorticales del lenguaje, se puede deducir que laalegra sea una emocin ms compleja e indirec-ta que la rabia, necesitando de una codificacinsemntica.

    Bajo el perfil del estudio de los procesos quellevan a la organizacin del significado personalespecfica de algn individuo, nuestra investiga-cin ha confirmado lo observado por Bertolinoet al33 y Rubino et al34, es decir, que las organiza-ciones inward y outward presentan diferenciassignificativas de activacin emocional, documen-tables no slo a nivel clnico, sino tambin me-diante los correlatos neurofuncionales observa-bles mediante fMRI.

    Nuestra investigacin ha permitido profundi-zar algunos aspectos clnicos, utilizados en laaproximacin psicoteraputica constructivistapost-racionalista, y concernientes al procesamien-to subjetivo de la experiencia inmediata28,31,32.

    En efecto, de la comparacin entre las activa-ciones verificables tras la presentacin de rostrosextraos o propios, experimentando una emo-cin negativa, una positiva o una expresin neu-tra, es posible hacer las siguientes consideracio-nes:

    En los sujetos inward, en primer lugar, ha sidoconfirmada la evidencia experimental, obtenidapor Bertolino et al28, que documenta una mayoractivacin de la amgdala derecha como respues-ta a rostros con expresin de rabia, activacinque resulta muy slida en la zona estudiada. Estedato justifica el hecho que estos individuos, ope-ran un enfoque de la experiencia interna, y utili-zan de manera marcada las emociones bsicas(como la rabia), a travs de las cuales recavan siel ambiente externo les resulta o no favorable.

    Adems, en los inward la expresin neutra haevocado la activacin de la amgdala en un n-mero casi mayor cuando era presentada sobre elrostro propio respecto a un rostro desconocido;esta activacin ha sido observada significati-vamente slo en los sujetos con enfoque inward,en cuanto ellos estn ms centrados sobre los es-tados internos propios, a partir de los cuales acontinuacin efectan una evaluacin de la posi-tividad o negatividad de la situacin externa. Talresultado puede, por consiguiente, ser explicadocon el hecho que la visin del rostro propio pro-duce de todos modos una respuesta emotiva cuan-do lo externo es ledo a travs de lo interno.

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    En los sujetos outward, al contrario, de acuer-do con los datos clnicos recavados del enfoqueconstructivista post-racionalista, ha sido eviden-ciada una activacin menos unvoca de la amg-dala, aunque intensa, mientras emerge una ma-yor activacin, respecto a los inward, de otraszonas cerebrales; este dato, evidente tras la pre-sentacin de expresiones faciales de rabia, ha sidoobservado tambin en relacin a aquellas de ale-gra; adems, tras las expresiones de alegra, haemergido un mayor involucramiento del hemis-ferio verbal respecto de los sujetos inward. Estosdatos confirman la mayor codificacin semnti-ca de las emociones en los sujetos outward, queprefieren la comunicacin semntica, necesitan-do de una constante referencia a confirmacionesy normas externas para mantener constante elsentido de s. En los inward, por el contrario, lacomunicacin est prevalentemente centrada enlos aspectos fsicos, como el manejo de la distan-cia respecto a los otros31.

    Conclusiones

    Como emerge de este estudio, gracias a losnuevos mtodos y a los progresos de las neuro-ciencias, se pueden identificar innovadoras lneasde investigacin, tales como verificar el modeloconstructivista post-racionalista de las organiza-ciones de significado personal. Tales lneas con-firman la concepcin clnica de que los aspectossubjetivos de la experiencia humana no son algoirracional, no definible y no estudiable cientfi-camente, sino, al contrario, pueden abrir el acce-so a un conocimiento ms profundo de la unici-dad de la experiencia individual. En efecto, si elenfoque en los procesos psquicos es un deber per-manentemente privilegiado e irrenunciable de lapsicoterapia, en el curso de la cual el terapeutalos reconstruye y los reformula al interior de unarelacin dual nica e irrepetible, ellos empiezana aparecer documentables en sus correlatos bio-lgicos gracias a protocolos cientficos estanda-rizados y verificables, los cuales, a su vez, puedenser considerados como instrumentos de valida-

    cin de los presupuestos psicoteraputicos episte-molgicos.

    As, mediante los estudios de neuroimagenfuncional, el focus que el cognoscitivismo cons-tructivista post-racionalista hace sobre los con-tenidos subjetivos de la consciencia puede hallarimportantes confirmaciones experimentales, con-firmando tambin el perfil de la aproximacincognoscitiva al funcionamiento de la mente.

    En sntesis, los estudios de neuroimagen fun-cional, como aquellos realizados por nosotrosmediante fMRI, confirman el rol de la amgdalasobre todo aquella del hemisferio no verbalen la respuesta a los estmulos emocionales. Ade-ms, la activacin emotiva resulta mayor tras lapresentacin de rostros extraos, por la proba-ble distraccin ante sus particulares irrelevan-cias respecto de la imagen propia.

    La marcada activacin de la amgdala dere-cha en el caso de expresiones de rabia, respectode aquella ms modesta, bilateral o lateralizadaa la izquierda, consecuentes a las expresiones dealegra, parece sostener la hiptesis que la rabiasea una emocin ms directa, que involucra pri-mariamente la amgdala y que, sobre todo en lossujetos inward, no necesita para ser activada depasajes corticales, mientras que la alegra resultaser ms compleja y necesita del auxilio de las reassuperiores como aquellas del lenguaje. As, el es-tudio del estilo inward o outward del enfoque dela experiencia permite superar algunos aspectoscontrastantes presentes en la literatura preceden-te; adems, respecto a los inward, en los outwardlas activaciones amigdaloides parecen menoslateralizadas e intensas, son ms difusas a estruc-turas extra-amigdaloides e involucran de mane-ra evidente estructuras superiores, incluso delrea lingstica.

    En sntesis, nuestros resultados coinciden conel hecho de que la construccin de la personali-dad y los comportamientos recprocos de apegoentre cuidador y nio tienen una base biolgica,como parecen indicar recientes estudios sobrepolimorfismos genticos37. Para indagar poste-riormente estos aspectos, en colaboracin con losInstitutos de Biologa y Gentica y de Medicina

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    Legal de la Universidad Politcnica de la Marca,nuestro grupo ha puesto en marcha un protoco-lo sobre las relaciones entre variantes genticas ymodalidad de apego, que estn a la base de la

    Resumen

    Introduccin: Patrones de reciprocidad estables y coherentes o, al contrario, no unvocos ycambiantes, permiten desarrollar organizaciones de significado personal con enfoque de laexperiencia a lo interno (inward) o externo (outward). En los inward las emociones son msdefinidas y la reciprocidad es primordialmente fsica (proteccin, soledad); en los outward lasemociones son ms difuminadas y la reciprocidad es prevalentemente semntica (confirmacin,reglas). Las modernas tecnologas de imgenes funcionales han permitido estudiar en vivo qusucede cuando se experimenta una emocin. Mtodo: Hemos estudiado, mediante imagenfuncional de resonancia magntica (fMRI), las activaciones de la amgdala y de otras estructurasdel SNC producidas, en 10 voluntarios sanos, por estmulos emocionales externos estandarizados,tanto cuando el sujeto percibe expresiones emotivas relativas a un rostro extrao (tercerapersona), como relativas al rostro propio (primera persona). Resultados y Discusin: Losresultados obtenidos han sido confrontados con las modalidades de enfoque inward o outward,atribuibles al funcionamiento de base de la personalidad individual. Tales modalidades hansido comprobadas mediante MMPI2, QSP y MQOP asociados a una evaluacin clnica realizadapor un psicoterapeuta experto. Los resultados indican que un rostro extrao produce activacionesmayores respecto al propio (efecto sorpresa), que la rabia activa mayormente la amgdaladerecha, mientras que la alegra activa ambas amgdalas o la izquierda. Los outward, respectoa los inward, responden a la rabia de manera menos intensa y unvoca, activan ms reascorticales, pueden no responder a las emociones propias y tienen una mayor implicacin delhemisferio verbal en la alegra.

    Palabras clave: Amgdala, emociones, fRMI, organizaciones de significado personal inward youtward.

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    Correspondencia:

    Dr. Bernardo NardiE-mail: [email protected]

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