Esta Es La Razón Por La Cual Te Cuesta Tanto
description
Transcript of Esta Es La Razón Por La Cual Te Cuesta Tanto
Esta es la razón por la cual te cuesta tanto
Terminar esa relación
Que no va a ninguna parte
El sicólogo Henry Cloud escribe para Psychology Today las razones por las cuales a las personas
nos cuesta tanto terminar con una situación a la que estamos acostumbrados pero que es
destructiva para nosotros. Aplica para la vida emocional, así como para la vida profesional.
Tanto en nuestra vida personal como profesional, hay momentos en los que la realidad dicta
que tomemos las riendas del asunto y pongamos fin a algo. Ya sea porque su tiempo ya pasó, la
temporada terminó, o peor aún, su continuidad terminaría siendo destructiva en algún sentido.
Sin embargo, muchas veces, y aunque tengamos todas las señales ante nuestros ojos, no
podemos dar el paso decisivo para decir adiós ¿Por qué ocurre eso?
A veces las personas pueden estar apegadas irracionalmente una cierta circunstancia. En
sicología eso es lo que se define como apego seguro o constancia del objeto emocional, la
separación y la pérdida e implica que poner fin a una relación activa resulta demasiado, por lo
que lo evitan.
Las personas no cuentan con las habilidades para hacer frente a situaciones como esas. Puede
ser que hayan tenido pérdidas traumáticas en la vida, el término de otra relación representa
una repetición de aquel momento, por lo que intentan reparar lo que sea que esté mal, más
allá de lo razonable. O tienen la idea de que terminar algo es “malvado” y por tanto le causaría
daño a alguien. En cualquier caso, los temores dominan su funcionamiento, provocando que se
sienten incapaces de poner fin a algo, aunque sea necesario.
Ve si puedes relacionarte con cualquiera de estos miedos o incapacidades que provocan que las
personas quieran mantener algo o quedarse en algún lugar por mucho tiempo:
No puedes distinguir entre la necesidad de poner fin a algo, y la posibilidad de
arreglarlo.
Le temes a la pérdida y la tristeza que puede causar.
Le temes a la confrontación.
Le temes a lo desconocido.
No posees las habilidades necesarias para terminar con algo.
Careces de las palabras apropiadas para ese momento.
Le temes a la posibilidad de herir a la otra persona.
Has tenido demasiadas pérdidas dolorosas en tu vida personal y no quieres tener otra
más.
Has cometido errores al poner término a otras cosas en el pasado, y no quieres que se
repita.
El problema es el siguiente: los finales son necesarios. Son una parte esencial de la vida. Todo
tiene períodos, y tenemos que ser capaces de reconocer cuando ha pasado el tiempo de algo y
ser capaz de pasar a la próxima etapa. Todo lo que está vivo requiere ser podado, y eso es una
gran metáfora de lo que significa ponerle fin a algo. Los jardineros podan los rosales por tres
razones:
1. El arbusto produce más brotes de lo que puede soportar, por lo que hay que retirar
algunos de los buenos para que los mejores puedan obtener los recursos necesarios.
2. Algunas ramas y brotes están enfermas y simplemente no van a mejorar.
3. Algunos brotes ya están muertos y están ocupando espacio.
Apliquemos esto a la vida diaria:
1. Con el tiempo, acumulas más actividades, relaciones, trabajos, intereses, etc., de las que
realmente pueden contar con tu atención y energía. Tienes que caer en cuenta de que te
puedes dedicar y comprometer con todo, y averiguar en qué vas a invertir tu tiempo.
2. Hay que ser realista: hay personas con las que ya has intentado de todo para lograr que
entiendan, o temas de trabajo sobre los cuales también ya hiciste todo lo posible, y como dice
el dicho: no hay por qué seguir alimentando una vaca muerta
3. Hay personas, lugares y cosas que hace mucho tiempo que están muertas para nosotros, y ya
es hora de dejarlas ir.
Entonces, tenemos un dilema: la vida y el éxito requieren de “finales necesarios” pero tenemos
miedo de llevarlos a cabo. ¿Qué se puede hacer?
Vamos a empezar con algunas reflexiones:
1. Reflexiona sobre lo que piensas de los finales en general: ¿Los ves como algo natural?
¿Tienes una visión de mundo en la que todo tiene su ciclo, o crees que si algo se termina es
porque algo no está bien?
2. Cuando ves que tienes que deshacerte de algo o de alguien, ¿qué ocurre en tu interior?
¿Cuáles son los miedos que surgen? ¿Esos miedos te paralizan? ¿Cómo puedes enfrentarlos?
3. ¿Has pensado en la posibilidad de que si no “podas” el área necesaria, no conseguirás lo que
realmente estás buscando? Por ejemplo, si no despides a ese empleado, su departamento no
va a alcanzar los resultados esperados ¿cierto?, o si sigues en esa relación, jamás vas a
encontrar a la persona que realmente va a completar tu vida ¿verdad? Trata de visualizar tu
vida uno o dos años hacia el futuro y ve si te gusta el resultado de no haber tomado esa
decisión.
4. Si vives con la esperanza de que algo simplemente cambie ¿en qué te estás basando? ¿es
algo racional y objetivo o sólo un mecanismo de defensa para no enfrentar el problema?
Los finales son parte de la vida, y en realidad estamos destinados a llevarlos a cabo. Pero
debido a algún trauma, fallos en el desarrollo, y otras razones, nos alejamos de las medidas que
podrían abrir nuevos mundos de desarrollo y crecimiento. Haz un inventario de las áreas de tu
vida que pueden necesitar un poco de limpieza, y comienza a tomar las medidas necesarias
para hacer frente a los temores que te encuentras en el camino.
Si lo haces, puede que te veas ante la posibilidad de avanzar y así entrar en una nueva etapa en
tu vida.