El Discurso Melgarejo

7
El discurso del espíritu de Melgarejo Por: Gabriela Behoteguy Ch. Ilustración 1 Melgarejo en Tarata. Muralista Diego Vilar Franco. “Y como te iba diciendo, el hermano Mariano siempre se posesionaba del hermano Rubén y en una de esas, el año de 1996, le ha dicho: ‘No estoy bien en el cementerio de Lima. Quiero volver a Bolivia y descansar en mi ciudad natal Tarata’. El hermano Rubén Inofuentes tenía toda una estrategia que había armado, seguramente junto a los consejos del hermano Mariano Melgarejo. Había decidido que tenía que ir a fin de año, en las épocas de fiestas porque ese ambiente de fin año hace que la gente quiera festejar, quiera gastar dinero (...). Entonces ha ido al cementerio de Lima, hasta la tumba del hermano Mariano y su estrategia ha sido pagarles a los sepultureros con unas cajas de cerveza para que desentierren al hermano Mariano. El hermano Rubén, nos ha contado, cuando ya ha retornado al Centro que todo el tiempo Melgarejo lo estaba acompañando y se comunicaba con él diciendo: ‘Está bien lo que estás haciendo, está bien’. Claro, los sepultureros, los obreros del cementerio no sabían a quién estaban desenterrando, no sabían que era un expresidente de Bolivia, no sabían nada de quién era. Cuando ya el hermano Rubén ha sacado su calavera, que conserva las balas (orificios) en el cráneo que lo han matado. Lo ha guardado en su maletín negro, uno cuadradito que tenía, en el que lo ha traído. Su cráneo es, cómo te puedo explicar, es algo sorprendente como se ha conservado hasta sus

description

Análisis sobre el discurso de Mariano Melgarejo

Transcript of El Discurso Melgarejo

  • El discurso del espritu de Melgarejo

    Por: Gabriela Behoteguy Ch.

    Ilustracin 1 Melgarejo en Tarata. Muralista Diego Vilar Franco.

    Y como te iba diciendo, el hermano Mariano siempre se posesionaba del

    hermano Rubn y en una de esas, el ao de 1996, le ha dicho: No estoy bien

    en el cementerio de Lima. Quiero volver a Bolivia y descansar en mi ciudad

    natal Tarata. El hermano Rubn Inofuentes tena toda una estrategia que

    haba armado, seguramente junto a los consejos del hermano Mariano

    Melgarejo. Haba decidido que tena que ir a fin de ao, en las pocas de

    fiestas porque ese ambiente de fin ao hace que la gente quiera festejar,

    quiera gastar dinero (...). Entonces ha ido al cementerio de Lima, hasta la

    tumba del hermano Mariano y su estrategia ha sido pagarles a los

    sepultureros con unas cajas de cerveza para que desentierren al hermano

    Mariano. El hermano Rubn, nos ha contado, cuando ya ha retornado al

    Centro que todo el tiempo Melgarejo lo estaba acompaando y se

    comunicaba con l diciendo: Est bien lo que ests haciendo, est bien.

    Claro, los sepultureros, los obreros del cementerio no saban a quin

    estaban desenterrando, no saban que era un expresidente de Bolivia, no

    saban nada de quin era.

    Cuando ya el hermano Rubn ha sacado su calavera, que conserva las balas

    (orificios) en el crneo que lo han matado. Lo ha guardado en su maletn

    negro, uno cuadradito que tena, en el que lo ha trado. Su crneo es, cmo

    te puedo explicar, es algo sorprendente como se ha conservado hasta sus

  • barbas. Ese rato, inmediatamente, ha ido al aeropuerto. El hermano

    Mariano lo ha acompaado todo el tiempo y ni la aduana, ni nadie lo ha

    revisado desapercibido ha pasado! Entonces, ya cuando ha pasado el

    aeropuerto, ac lo hemos recibido en el templo con una misa y le hemos

    cantado el Himno Nacional para recibirlo. Porque el hermano Mariano es un

    espritu que siempre est alegre, viene contento y nos hace rer a todos.

    Jazmn Ergueta, devota espiritual del hermano Mariano.

    La calavera del General Mariano Melgarejo lleg al Centro Luz, Amor y Esperanza de la ciudad

    de La Paz, en diciembre de 1997. Los hermanos que asisten a las sesiones espiritistas la

    recibieron con una solemne misa de almas y la entonacin del Himno Nacional boliviano. All,

    permaneci en un pequeo altar hasta enero de 1998 cuando fue trasladada al pueblo de

    Tarata. Actualmente, el altar del Centro tiene un retrato pintado de Melgarejo y las personas

    que asisten a las sesiones aseguran que este lugar junto al Palacio de Gobierno y el pueblo de

    Tarata, en Cochabamba, son los lugares preferidos del espritu de Melgarejo.

    El hermano Rubn Inofuentes () se encarg de informar sobre la llegada de Melgarejo a los

    habitantes del pueblo de Tarata. Todos se movilizaron para los preparativos: la Escuela de

    Sargentos Maximiliano Paredes se encarg de homenajearla con saludos militares; la iglesia

    celebr una misa de almas y la poblacin entera se reuni para recibir a los hermanos del

    Centro que acompaaron el traslado. La calavera de Melgarejo fue recibida con los honores

    que corresponden a un general y expresidente de Bolivia.

    Desde entonces, la calavera de Melgarejo es uno de los mayores atractivos del pueblo de

    Tarara. La camba calavera conserva la larga barba del general y tiene los dos agujeros que

    dejaron las balas que Aurelio Snchez le dispar. El escritor tarateo Alberto Iriarte me explic

    que muchos espiritistas, bolivianos y peruanos llegan a visitarlo cada 13 de abril para festejar

    su nacimiento y cada 23 de noviembre para recordar su muerte. Para que no la observen, el

    sacerdote de la iglesia determin taparla con una bandera boliviana (Tarata, 4 de enero 2015).

    A las barricadas

    Viene la pantera;

    le daremos un balazo

    en su camba calavera

    Copla Belzista, dedicada a

    Melgarejo (s. XIX)

    Ilustracin 2 La Calavera de Melgarejo (2012). Fotografa cortesa de Ramn Rocha Monrroy.

    Manuel Mariano Melgarejo (1820- 1872) naci en la doctrina de Toco, perteneciente al pueblo

    de Tarata del departamento de Cochabamba. Durante su infancia fue educado por el cura

    Antezana, prroco de Tarata, quien le inculc su reconocida fe catlica. Luego, vino su

    fascinacin por la vida militar, cuando el oficial Mariano Montalvo lo reclut al cuartel de

  • Lampa, donde despus de tres aos de estudio alcanz el grado de sargento. Este hombre

    pblico es recordado como un tirano que tuvo debilidad por el amor y la borrachera.

    La historia oficial cre muchos mitos sobre Melgarejo, se dice que lleg al Palacio de Gobierno

    el 28 de diciembre de 1864 bajo el grito de o me segus coraceros o les destapo los sesos. All,

    no slo derroc al general Jos Mara Ach, presidente entre 1861-1864, sino que puso fin a la

    vida del Tata Belzu, caudillo que luch contra la propiedad privada y que gobern el pas de

    1848 a 1855. El gobierno de Melgarejo se caracteriz por sus polticas feudales en el altiplano y

    la Amazona, entre estas resalta la Ley de Exvinculacin de 1866 que convirti a las

    comunidades en haciendas y el Tratado de Ayacucho de 1877 que negoci la venta ms de

    100 mil km2 del Acre boliviano al gobierno brasilero que se comprometi a construir el

    ferrocarril Madeira-Mamor.

    Ilustracin 3 Retrato presidencial del General Mariano Melgarejo. www.lostiempos.com

    Las barricadas paceas derrocaron a Melgarejo el 15 de enero de 1871. Esa misma noche l

    escap hasta el Desaguadero y sigui en marcha hasta la ciudad de Arequipa. Mientras tanto

    su pareja, Juana Snchez, qued como prisionera del gobernante Agustn Morales. El escritor

    Vicente Tern (1980) relata que la libertad de la Juanacha cost a Melgarejo treinta mil

    pesos, y que desde el encuentro que tuvieron en Tacna hasta que fue asesinado en Lima, slo

    recibi el rechazo de ella. Este gran amor lo llev a la muerte el 23 de noviembre de 1872,

    cuando el hermano de Juana Snchez, Jos Aurelio, le destap los sesos con dos tiros de

    revlver cuando ste intentaba volver a verla.

    El 25 de noviembre tuvo lugar, con gran solemnidad, en Lima, el

    entierro del infortunado general don Mariano Melgarejo, cuyo

    cuerpo se halla sepultado en un mausoleo del cuartel numero 16

    letra A del cementerio de San Eloy. (Toms Oconnor)

  • Ilustracin 2 Melgarejo en altar familiar. Cortesa Antonia Aramayo.

    En 1914, Isaac Tamayo, exsecretario de Melgarejo, bajo el seudnimo de Thajmara, asumi la

    defensa de Melgarejo hacindolo comparecer en una sesin espiritista. Melgarejo, tras lanzar

    una carcajada, entabl una conversacin a travs del espiritista Enrique, y explic a Tamayo

    que la coyuntura poltica de la poca lo llev a la tirana de su sexenio.

    El libro titulado Habla Melgarejo describe que el espiritismo se practica en Bolivia antes de

    1870 y que quien hizo la escuela en esta materia fue Mr. Rand, un gringo alto, flaco y jorobado

    que era contador del Banco Boliviano y que invocaba a los espritus cada vez que le vena en

    gana para absorber grandes cantidades de aquellos en forma de ron o ginebra.

    Cuando el espiritista Enrique X, amigo de Tamayo (Isaac), pregunt a

    la sombra de Melgarejo qu haca en la eternidad. Este respondi Yo

    soy, respondi ella, uno de esos espritus vagabundos condenados a

    no tener sitio seguro, paz ni descanso: soy la sombra; una de esas

    nubes preadas de tempestad que vagan arrastradas por el viento y

    los huracanes (Thajmara).

    El espiritismo es una prctica religiosa que sostiene que es posible entablar comunicacin con

    el alma de un muerto a travs de un mdium. Como doctrina religiosa se autoidentifica como

    cristiana ya que se basa en el poder que otorga el amor para servir al prjimo. En la ciudad de

    La Paz, las sesiones espiritistas del Centro Luz, Amor y Esperanza se realizan en la zona de

    Santa Brbara. Lastimosamente, quienes manejan el centro no guardan el registro de la fecha

    de su creacin, pero recuerdan que hace cincuenta aos se ubicaba en la calle Juan de Rivas.

    Las sesiones se celebran los sbados, asisten alrededor de sesenta personas. stas se inician

    con la celebracin de una misa catlica, posteriormente el secretario del centro, hermano

    Walter, se encarga de agendar citas con los espritus mdicos, guas espirituales o algn

    familiar en particular. Se ofrecen rezos y cantos para que la llegada de los espritus sea alegre.

  • Para el catolicismo, Dios es el nico que puede decidir sobre el paso de la vida a la muerte y

    sobre el paso de la muerte a la vida. Por eso, no es casualidad que el primero en presentarse

    durante las sesiones espiritistas sea San Lzaro, a quien Jess resucit de la muerte. Dentro del

    Centro, no slo son los hermanos quienes aseguran que el espiritismo es cosa de Dios; sino

    que hasta el mismo Melgarejo da gracias a Dios por haberle permitido encontrar el camino del

    espiritismo para ayudarnos.

    Gracias doy a Dios que me ha dado este camino para ayudarlos, si

    por m fuera arreglara no slo Bolivia, sino el mundo entero. Ah!

    Cuanto no quisiera entrarme en uno de ellos (polticos) para hablar

    con el presidente. Gral. Mariano Melgarejo, sesin espiritista con la

    hermana Flora Villagmez Reyes, 15 de enero 2015.

    Llama la atencin que entre los personajes locales se hacen presentes polticos que fueron

    asesinados (Mariano Melgarejo y Marcelo Quiroga Santa Cruz y entre Ernesto Che Guevara).

    Cundo pregunt a la hermana Flora Villagmez, directora del Centro, me explic que las

    almas de los asesinados fueron abruptamente cortadas de una existencia de expiacin y

    misin cristiana. stas no pueden reencarnar normalmente y el sufrimiento que les ocasion

    su muerte los lleva a ayudar a quienes sufrimos en vida (4 de febrero 2015).

    Ilustracin 4 Medalla Melgarejo. bo.globedia.com

    El espiritismo es una manera de plasmar nuestros deseos espirituales sobre la muerte. La

    experiencia de Melgarejo, al haber sido sometido a la tortura fsica y social, cre un contra-

    discurso que desmitifica al antihroe, lo reivindica y le permite habitar un discurso mgico que

    traspasa lo verdadero y lo falso; en palabras del investigador Michael Taussig (1987): El

    espacio de muerte es importante en la creacin de significado y de conciencia, y en ninguna

    parte tanto como en las sociedades donde la tortura es endmica y donde florece la cultura

    del terror. Podemos pensar el espacio de muerte como un umbral que permite tanto la

    iluminacin, como la extincin. A veces una persona lo traspasa y vuelve a nosotros para

    contarnos el cuento (1987: 26).

  • Ilustracin 3 Altar del Hermano Melgarejo en el Centro Luz, Amor y Esperanza. Fotografa: Rolando Albornoz. Enero 2015.

    Las sesiones espiritistas para invocar a Melgarejo se realizan en los departamentos de La Paz,

    Cochabamba y Santa Cruz. En el centro espiritista de La Paz, cuando el hermano Mariano

    posesiona a la mdium se presenta con un discurso patritico, religioso y optimista. Le gusta

    que quienes comparten las reuniones lo escuchen atentamente, le conversen y lo despidan

    cantando: Viva mi Patria Bolivia, Sandunga y en ocasiones especiales, como la pascua, el

    Himno Nacional. Los autores, Ismael Sotomayor y Toms Oconnor describen que Melgarejo

    festejaba su cumpleaos durante la Pascua de Resurreccin, fecha movible que cae el primer

    domingo despus de la primera luna llena del equinoccio de primavera.

    En la cosmovisin andina, se dice que los militares que hicieron dao en vida tienen el poder

    de ayudar a los vivos, por eso: Mariano Melgarejo con tantas cosas que ha hecho cuando era

    presidente, ahora quiere ayudar a los pobres. Es una persona que si antes ha sido malo ahora

    quiere que lo vean con todo respeto (Flora Villagmez Reyes).

    En el imaginario social boliviano, Melgarejo no slo es parte de la memoria de los centros

    espiritistas, muchas personas conocemos ancdotas suyas que nos fueron transmitidas. El

    personaje como creacin cultural delata que nuestro inconsciente poltico no adquiri una

    conciencia civil ante el morbo dictatorial. Al parecer, las polticas populares de los militares que

    como Mariano Melgarejo y Ren Barrientos financiaron grandes festines y jolgorios (al primero

    le encantaba festejar el da de la pascua en toda Bolivia y al segundo le gustaba donar

    vestimenta militar a las vrgenes y santos) crearon jerarquas sociales en nuestra cultura. Por

    eso, a pesar de la paz neoliberal que se resguarda en los derechos humanos, dentro de nuestra

  • sociedad, el servicio militar contina consolidando una identidad nacional que es motivo de

    orgullo y patriotismo.

    Ilustracin 4 Plaza Gral. Mariano Melgarejo en Tarata.