Edición No. 44 Agosto 2013

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Director GeneralSalvador Tapia

Directora EditorialAlelhí Montelongo

Sub-directora EditorialMarcela Tapia

Director ComercialSalvador Tapia

Dirección de ArteAna María Leyva Alvarado

Participación Especial Dra. Claudia Vega, Arq. Greta Montelongo, Lic. César Mon-telongo, Dra. Gloria López Gavito, Dr. Jorge Olalde López

Gavito, Ana María Leyva Alvarado.

DomicilioGenaro Estrada #604 entre Benito Juárez y Guillermo

Nelson, Col. Centro, Mazatlán, Sinaloa C.P. 82000Teléfono

(669) 982 31 39Redacción

[email protected]’s es una revista de publicación mensual que se distribuye de forma gratuita en la ciudad de Mazatlán, Sinaloa. Los artículos publicados en esta revista no son responsabilidad del editorial sino de quien lo escribe. Muchas gracias

a nuestros anunciantes y a todas las personas que participaron en la edición anterior.

06 NUTRICIÓN Comer con conciencia

28 CUENTOS El sastrecillo valiente (Primera parte)

22 TIPS Consejos para el regreso a clases

20 CINE ¡Cine!

18 MASCOTAS ¡Mi perro tiene miedo a las tormentas!

|INDICE

16 SALUD Tratamiento temprano

15 COCINA Tomates rellenos10 NUTRICIÓN

Las bondades del tomate

12 DECORACIÓN Pensando en la cocina

Nutrición06

Nutrición07

En todos lados se cuecen habas… otro re-frán culinario para hacer referencia a que en todas partes pasan cosas similares. No sólo en México comemos con singu-lar alegría, lo mismo sucede en cualquier sitio en donde haya seres humanos. Así que revisemos un poquito sobre los di-ferentes significados que tiene el acto de comer. En particular el porqué lo hacemos sin hambre, a cualquier hora y a veces incluso comemos lo que sea. ¿Por qué co-memos como comemos?

Prácticamente todos nosotros hemos ex-perimentando alguna vez esa sensación de hastío, de llenado a la máxima capaci-dad, a sentir que vamos a reventar des-pués de haber comido mucho y tal vez, también muy rápido. Si tomamos el tiempo para pensar y analizar un episodio como este, seguramente hemos sentido algún tipo de remordimiento, malestar o culpa cuando hemos comido de esta manera. Tal vez lo que ocurrió es que te-níamos tanta hambre por haber esperado varias horas sin comer, o bien estábamos pasando un momento estresante, o sim-plemente el aburrimiento hizo presa de nosotros y lo que hicimos fue comer tan-to como pudiera pasar por esa garganta para apaciguar el hambre, calmar el es-trés o disminuir el tedio.

¡Ahora, para! Si eso te ha ocurrido y estás recordando uno o varios episodios como este, no emitas, al menos trata, ningún

juicio. No eres el único, no hay nada que hacer de lo que ya pasó. La comida es utilizada frecuentemente con otros fines además de nutrirnos. Es más, casi siem-pre se usa como medio de deleite, de pla-cer y, de paso, para alimentar nuestros cuerpos. Son menos las personas que al momento de alimentarse ponderan real-mente la importancia que esa comida tie-ne para su cuerpo y se dan más a la tarea de simplemente “disfrutarla”. Sin embar-go, en ese disfrute estamos a veces tan distraídos que eso que se suponía nos iba a satisfacer (el platillo favorito, la salida a los tacos, los chocolates, el helado de vainilla con brownie, etc.) termina sien-do devorado y ni tiempo tuvimos de real-mente saborearlo.

Si hiciéramos un experimento y tomára-mos papel y lápiz para describir nuestro último alimento, sería curioso ver la capa-cidad descriptiva de nuestro apunte. Tal vez seamos capaces de nombrar el ali-mento principal, cómo estuvo preparado y con qué lo acompañamos. En un segundo intento, si se nos pidiera que describiése-mos olores, colores y sabores, en dónde lo comimos, cómo era el entorno, cuánto tiempo nos tardamos, qué precisamente hicimos y cómo fue que lo degustamos, quizá recurriríamos más a los recuerdos, a los conocimientos aprendidos y a nues-tra imaginación que a lo que verdadera-mente se registró en nuestra memoria de corto plazo.

Comer conConciencia

Dra.Claudia VegaMamá Pediatra

Nutrición08

Nuevamente, si somos de los que ten-dríamos que inventar respuestas, no nos sintamos mal. Eso es justo lo que hemos aprendido y lo que más sucede en nues-tros días. Comemos sin darnos cuenta, deglutimos y a duras penas lo percibimos, saboreamos los primeros dos o tres boca-dos y entonces nos distraemos en otros asuntos. Comemos con nuestros cuerpos sentados a la mesa, manejando en el ca-rro, en la oficina, parados en la cocina, pero con las mentes en un sitio algo dis-tante. Comemos SIN conciencia.

¿Qué es comer con conciencia?

Es poner atención al acto de comer, a lo que comemos, cómo lo comemos y por qué lo comemos. Significa estar comple-tamente presentes mientras comemos. Cuando una persona come con conciencia, enfoca su atención a los sabores, textu-ras, colores, formas de sus alimentos. Es decir, come utilizando sus sentidos para vivir lo que pasa fuera de él, percibiéndolo con su boca, su vista, su olfato, su tacto, incluso hasta con el oído. Además, está en constante contacto con lo que suce-de dentro de él, es decir, observando sus pensamientos, emociones, sensaciones y reacciones ante el alimento, en cada bo-cado. Es algo así como meditar mientras te estás alimentando. Es experimentar con la comida, tal como lo hace el científi-co del laboratorio.

¿Cómo se hace?

Justo así, practicando mientras comes, permitiéndote estar ahí, dándote el tiem-po y la oportunidad de experimentar ese acto, tal como si fueras un crítico gastro-nómico y tuvieras que hacer un reporte sobre el alimento.

¿Es factible?

09Salud

Cualquiera que lea esto creerá que es exageración, se pudiera reír, pensar que es absurdo e inmediatamente renegar que con tan poco tiempo que tiene, esto es imposible. De hecho es un reto, requie-re primero disposición, voluntad y tiem-po. Sin embargo, es cuestión de inten-tarlo una vez. Observar que pasa contigo después de haber comido así, con todos tus sentidos. Regalándote al menos 25 minutos para consumir tu comida princi-pal del día. ¿Será posible que una persona no se merezca este diminuto tiempo para sí misma? Cuando recordemos que la ali-mentación es un acto indispensable para nuestro bienestar y supervivencia, que de ese bienestar físico dependerán muchas cosas, quizá entonces le demos la impor-tancia que amerita.

Haz la prueba. En tu siguiente comida, regálate 25 minutos. Piensa que en esta

ocasión, comer será un presente que te estás dando. Observa tu mente y tu cuer-po desde que estás sentándote a comer. Observa detenidamente el alimento fren-te a ti, busca sus colores y formas, huele sus aromas, tócalo si es posible, escu-cha los sonidos del lugar en donde estás y en cada uno de estos pasos, observa qué sientes y qué piensas. Sé agradeci-do, hoy tú puedes comer. Entonces da el primer bocado y sigue observando. Sabo-rea, siente las texturas, identifica todas las sensaciones en tu boca. Come y bebe despacio. Olvídate de los pendientes del futuro y de los rencores y sinsabores del pasado. Estate presente, aquí y ahora, con esos sagrados alimentos que estás poniendo en tu maravilloso cuerpo.

Buen provecho y felicidades, ya estás co-miendo CON CONCIENCIA.

Nutrición10

El tomate es un vegetal que encontramos comúnmente en nuestras casas, el cual usamos para la mayoría de las comidas diarias. Pero, ¿conocemos realmente la importancia de consumir este maravilloso vegetal?

Permítanos compartirles los beneficios que el tomate tiene para el cuerpo:

Fuente de antioxidantes.- Muy útil y be-néfico contra los problemas del cáncer.

Colesterol.- El consumo regular de toma-te disminuye los niveles de colesterol LDL y los triglicéridos en la sangre.

La visión.- La vitamina A, ayuda a mejo-rar la visión, previene la ceguera noctur-na y la degeneración macular.

El intestino.- Mantiene el sistema diges-tivo saludable y previene contra el estre-ñimiento y la diarrea, elimina las toxinas del cuerpo.

La hipertensión.- Produce un efecto re-ductor de la tensión. El consumo diario reduce el riesgo de desarrollar hiperten-sión.

La diabetes.- De acuerdo con el “Diario de la Asociación Médica de Estados Unidos”, el consumo diario de tomate reduce el es-trés oxidativo en la diabetes tipo 2.

La piel.- Excelente en el mantenimiento de dientes sanos, huesos, pelo y piel. La aplicación tópica de jugo de tomate se utiliza para curar quemaduras. El consu-mo diario protege la piel contra los rayos UV.

Tracto urinario.- Reduce la incidencia de infecciones del tracto urinario, así como el cáncer de vejiga.

Cálculos biliares.- El consumo regular también ayuda a disolver los cálculos bi-liares.

Como podemos observar, los beneficios del tomate son múltiples para el ser hu-mano y no es nada difícil de conseguir ya que lo podemos encontrar en todas las tiendas, recordemos comerlo maduro.

Los invitamos a seguir investigando sobre las bondades de este maravilloso vegetal y a incluirlo en nuestra comida diaria.

Las bondades del tomate

Salud11

Decoración12

Arq. Greta Berenice M.

Pensando en la

cocinaLa cocina es el área de la casa en donde, si les gusta cocinar, pasan gran parte del tiempo creando y disfrutando de cocinar para ustedes y sus seres queridos. Por lo tanto, queremos tener el mejor espacio para movernos libremente y con toda seguridad. Así que, para quienes estamos pensando en remodelar o construir nuestra cocina, debemos tomar en cuenta que, para toda actividad, la iluminación es muy importante, tanto que muchas veces la damos por un hecho y la olvidamos a la hora de diseñar, y más en la cocina en donde utilizamos objetos filosos, y se termina por utilizar los famosos “parches” que se colocan “donde se puede”.

Bueno, es por ello que los invito a que la iluminación sea un factor a considerar. Tener la mejor iluminación natural evita esfuerzos de la vista y crea una sensación de libertad, armonía y alegría que no se logra con la luz artificial. Por supuesto que la luz natural no dura todo el día, así que deben pensar en la iluminación correcta para la cocina, enfocarse más a que es la zona de preparación de alimentos.

Deben tomar en cuenta que las luminarias que se colocarán deben ser sencillas y fáciles de limpiar, ya que lo que predomina en la cocina son los restos de grasa que a la hora de cocinar prevalecen en el ambiente.

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La correcta ventilación nos brinda esa sensación de bienestar y libertad a la hora de cocinar, ya que la cocina es la concentración de muchos olores y grasa; por lo tanto, una buena ventilación natural sería de mucha ayuda. También, nos podemos auxiliar de los famosos extractores que nos ayudan a deshacernos de ese aire viciado que se crea en la cocina.

Otro aspecto que también nos hace sentirnos presionados, atosigados o que nos llega a hartar en nuestra cocina es el famoso “espacio”. Cuántas veces no nos ha pasado por nuestra mente: “no tengo en donde poner esto”, “ya no me cabe aquello”, “desearía no haber comprado esto otro”. Bueno, eso es algo por lo que todos pasamos en la cocina, y nos sucede debido a que muchas veces guiándonos por lo nuevo y de moda, tendemos a cometer el error de comprarlo sin pensar en todo lo que tenemos que guardar ahí. ¡Por favor! Piensen en eso antes de comprar o mandar construir sus alacenas, tenemos muchas cosas que guardar, tanto trastes y utensilios de cocina como comida, en su rutina a la hora de cocinar, el tránsito existente en ella, en lo que necesitan tener más a la mano, su estatura, sus costumbres, etc.

Por consiguiente, piénsenlo bien antes de decidirse por algo que tendrán en su cocina por mucho tiempo.

Planifiquen bien el área en la cual van a llevar a cabo el trabajo de preparación de la comida, ya que un lugar angosto y amontonado no es un área en la cual se vayan a sentir a gusto al cocinar.

Para quienes nos gusta la idea de una isla en la cocina, meditenlo bien; una isla es muy bonita y accesible, si es que

Decoración

Decoración14

hay espacio. La cocina funciona mejor si se cuenta con espacio para transitar en ella, pero si la isla entorpece su recorrido, mejor dejen esa idea de lado. ¡No queremos accidentes en la cocina!

Cuidado con lo que deciden colgar. Colgar sartenes en soportes suspendidos desde el techo o alacenas muy bajas tienden, en muchos casos, a ser puntos de accidentes en donde nos suceden esos molestos accidentes en la cabeza, que si bien no son peligrosos, son muy molestos.

Sobre el piso a utilizar, existe una gran variedad de pisos que nos pueden servir para la cocina, mientras sean anti-derrapantes, tanto para un baño como para la cocina la utilización de pisos anti-derrapantes es muy importante, recordemos que son áreas propensas a los derrames de líquidos y con un piso liso los accidentes están a la orden del día.

Así que piensen muy bien a la hora de remodelar o construir su cocina, ya que la tendrán por mucho tiempo y que mejor que sea un área en donde se sientan a gusto y felices de seguir cocinando.

No olviden pedir el consejo de un profesional a la hora de modificar o construir la cocina.

Cocina15

Procedimiento:

Mezclar bien el atún desmenuzado con los pimientos morrón, cebolla, una cucha-rada de aceite del atún, 3 cucharadas de mayonesa, una pizca de pimienta y sal al gusto.

Quitar con cuidado toda la pulpa a los tomates.

Rellenar los tomates con la preparación de atún.

Colocar los tomates en un refractario y decorar con el huevo duro y aceitunas de la manera que más le guste.

Ingredientes:

• 8 tomates rojos, redondos, medianos y firmes• 5 cucharadas de mayonesa• 2 latas de atún • 1 cebolla finamente picada

• pimientos morrones en lata picados• 10 aceitunas • 1 huevo duro• sal al gusto• pimienta al gusto

Tomates rellenos

(4 personas)

Salud16

Según los lineamientos de la Asociación Americana de Ortodoncistas, la edad ideal para la primera visita de un paciente con el ortodoncista es a los 7 años de edad.

Es muy probable que a esta edad no se inicie algún tipo de tratamiento activo, una temprana valoración nos permite mo-nitorear el desarrollo de tus hijos y deter-minar oportunamente cuando es el mo-mento correcto para iniciar tratamiento. Una detección temprana de un problema existente puede reducir la necesidad de extraer dientes permanentes o si ello es indispensable, el tiempo de tratamiento de una segunda fase también se reduce.

Resultados positivos se obtienen cuando se requiere de desarrollo a favor si se ini-cia a temprana edad, de otra forma se-ría difícil obtener ese resultado cuando el crecimiento ha terminado.

En el pasado, era común que el trata-miento de Ortodoncia se pospusiera hasta los años de adolescencia, cuando todos los dientes permanentes hubieran erupcionado. Actualmente, sabemos que muchos de los problemas de ortodoncia pueden y deben ser tratados a edad tem-prana ya que es mucho más fácil trabajar sobre el mal desarrollo de los maxilares cuando existe crecimiento de los mismos,

Tratamiento TempranoDra. Gloria López Gavito y Dr. Jorge Olalde López Gavito

Especialistas en Ortodoncia, Maestría en Ciencias Odontológicas

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lo cual sucede alrededor de los 7 años y un segundo “estirón” a los 12, aproxima-damente. A esto se le llama primera fase de tratamiento, en esta fase usualmente se emplean aparatos con función Ortopé-dica sobre los maxilares y otros huesos de la cara.

Tratamiento de Dos Fases Un tratamiento ortodóntico de dos fases es un procedimiento especializado que sólo ciertos niños necesitan. El tratamien-to suele comenzar antes de que todos los dientes permanentes hayan erupciona-do. En Ortodoncia Mazatlán considera-mos que este tratamiento debe limitarse a aquellos pacientes con mordidas cru-zadas esqueléticas, un desplazamiento exagerado de la mordida causado por un tamaño desbalanceado de los huesos o un apiñamiento (dientes chuecos) dental

moderado y severo.

La meta del tratamiento de dos fases es crear un ambiente que le permita al pa-ciente desarrollar, lo más normalmente posible, la dentición mixta (la presencia tanto de dientes permanentes como pri-marios), y para que la segunda fase (tra-tamiento en dientes permanentes) sea más fácil de llevar a cabo, y que su resul-tado final esté tan cercano a la perfección como sea posible. Cabe destacar que la posición de los dientes, una vez comple-tada la primera fase del tratamiento, no será la posición final del diente. La po-sición del diente no será final hasta que se lleve a cabo la segunda fase del tra-tamiento.

Mascotas18

Bueno, ahora que está en pleno la tempo-rada de lluvias, seguro a muchos nos ha pasado que durante una tormenta vemos a nuestras mascotas correr y meterse de-bajo de los muebles o en el peor de los casos saltar a la cama y meterse debajo de las sábanas (lo cual no es muy agra-dable si estás plácidamente dormido), aunque puede resultar algo cómico, dé-jame contarte que este es un problema bastante serio.

El temor a las tormentas en un perro es según los etólogos un rasgo de su evo-lución. “Alarmarse y huir de los truenos ha permitido al perro salvarse de muchos peligros, como derrumbamientos de árbo-

les o ser atrapados por los rayos”, afirma Teresa Marías, etóloga profesional. Esto, junto al hecho de la excelente capacidad auditiva de los canes es, en buena parte, responsable de esos episodios de pánico.

Puede interpretarse que el hecho de es-conderse al escuchar un sonido fuerte y repentino es considerado normal en un perro, este mismo comportamiento lle-vado al extremo se considera una fobia y puede acarrarte graves problemas con tu mascota, ya que durante un ataque de pánico puede romper objetos dentro de la casa, cavar hoyos para tratar de escon-derse o incluso poner en peligro su inte-gridad al tratar de escapar ya sea saltan-

¡Mi perro tiene miedo a las tormetas!

Ana María Leyva Alvarado

do por una ventana, a través de un vidrio o escapar hacia la calle y ser atropellado.

Por desgracia, la fobia a los ruidos fuertes es muy difícil de curar ya que, como lo mencionamos anteriormente, los perros tienen un rango de audición muy amplio y perciben los sonidos con mayor inten-sidad que los humanos. Por lo tanto, te tengo algunos consejos para ayudar a nuestros pequeños amigos a reducir sus ataques de pánico:

1.- Crea un lugar seguro. Prepara un refugio para tu mascota en donde se sienta seguro, ya sea que pongas la casa del perro en un rincón de la cocina, en la sala o en algún lugar en donde no lle-gue a percibir los rayos o déjalo estar en tu cuarto. También funciona cubrirlo con una manta o toalla, quedarte un rato con él y darle algo de comer ayudará a que se tranquilice y a asociar las tormentas con un hecho agradable.

2.- Insensibilizar al perro. Esto es un poco más complicado pero bien puede funcionarte para ayudar a tu mascota, se trata de exponerlo a sonidos fuertes ya sean de tormenta o cualquier sonido que sepas que lo altere, para lo cual ne-cesitarías un CD o cinta con estos sonidos grabados y hacerlo de una forma gradual. Por ejemplo, ponerlos durante un minu-to y apagarlos cuando el perro se alte-re, esperar a que se calme y hacer sonar nuevamente la música, repetir la opera-

ción unas cinco veces, con intervalos de diez minutos durante cuatro o cinco días, dejar pasar unas dos semanas y realizar una sesión similar. Con esto lograrás que tu perro se acostumbre a los sonidos de las tormentas y de esta manera insensi-bilizarlo.

3.- Distrae a tu perro. Castigarlo por tener miedo solo provocará que el miedo se acreciente. Mejor cuando veas que tu perro está asustado, trata de distraerlo con algún juego, ya sea con una pelota o enciende el televisor o la radio para ami-norar los sonidos de la tormenta.

4.- Medicinas para la ansiedad. Pue-des dejarlo como último recurso y siem-pre debes preguntarle antes a tu veteri-nario para que sea él quien te recomiende el medicamento exacto para tranquilizar a tu mascota. Recurre a esta opción úni-camente si se trata de un caso extremo de ansiedad y pánico.

Debes entender que el miedo que tu mas-cota experimenta durante una tormenta es algo irracional y que se debe tanto a su muy desarrollado oído como a su capa-cidad de supervivencia, así que trata de entenderlo y ayudarlo, ya que él confía plenamente en ti.

¡Nos vemos la próxima!

Mascotas19

Nutrición20

¡Cine!Lic. César Montelongo C.

Director Teatral

El verano no se ha terminado y siguen las propuestas atractivas en el cine, películas para todos los gustos y para todo públi-co, aunque realmente todos sabemos que en verano la oferta está pensada en los pobres padres de familia que necesitan llevar a sus hijos a entretenerlos mínimo 90 minutos.

Actualmente podemos ver dos opciones que, si bien, para el ojo medianamente crítico podrían pasar por filmes sin senti-do o aburridos. La primera opción, estoy seguro que a sus pequeños les encantará, pero ¡OJO!, será mejor que se lleven un cafecito, porque después de todo tienen que cuidarlos.

Turbo.- (O cuando Ratatouille conoció a Cars).

Si ustedes no vieron Cars ni Ratatouille y quieren hacer una sinopsis de ambas de manera que puedan ahorrar tiempo, entonces esta película les conviene al 100 por ciento. La animación no está mal, de hecho es muy atractiva, no así la película, que trata sobre un personaje que quiere ser algo en la vida que va contra todo lo que le han enseñado. ¿Suena conocido? ¡Pues claro! La mitad de las películas de animación hablan de eso, pero hay más, ese personaje idolatra a otro y desea demostrarle a todos los que no creen en él que puede ser el mejor.

En resumidas cuentas eso es “Turbo”, la historia de un caracol que vive en una hortaliza y que sueña con ser un genial corredor de autos y el más veloz de todos.

Yo sé que es difícil complacer a todos y pensar en tramas que no dañen ni los ojos ni los oídos de los más pequeños, aunque sería bueno que la oferta animada tuviera mejores argumentos, en fin...

21Cocina

Como ya me desahogué con la oferta animada y no es el foro para sugerir películas muy fuertes, solo les diré que otra película muy recomendada para los adultos de amplio criterio es “Los amantes pasajeros”. Película muy al estilo Almodóvar, divertida y ruda, que trata sobre la tripulación de un avión que sale de España rumbo a México y que en el camino tiene un problema que les obliga a dar vueltas y vueltas por España para poder aterrizar de emergencia. Vayan a divertirse y con la mente muy abierta.

Los veo el siguiente mes, disfruten lo que queda de sus vacaciones, que ya pronto tendremos mejor cine y los niños estarán en la escuelita y haciendo tarea. Ya es el turno de las películas de adultos.

¡Que tengan un excelente mes!

Tips22

CÓMO HACER MÁS FÁCIL SU PRIMER DÍA:

• Recuérdele a su hijo que no es el único que está un poco preocupado por el primer día de clases. Los maestros saben que los estudiantes están ansiosos y harán un esfuerzo adicional por asegurarse de que todos se sientan tan cómodos como sea posible.

• Señale los aspectos positivos de empezar un nuevo año escolar: Será divertido. Verá a sus antiguos amigos y conocerá nuevos. Refresque sus recuerdos positivos sobre años anteriores, como cuando pudo haber vuelto a casa después del primer día de clases muy animado(a) porque se la pasó bien.

• Encuentre a otro niño del vecindario con el que su pequeño pueda ir a pie a la escuela o ir en el transporte escolar.

• Si lo cree apropiado, lleve a pie o en

automóvil a su hijo y recójalo en su primer día de clases.

SEGURIDAD DE LA MOCHILA

• Elija una mochila con tirantes anchos y acojinados, así como respaldo acojinado.

• Empaque ligero. Organice la mochila utilizando todos sus compartimentos. Coloque lo más pesado en el centro. Nunca deberá pesar más del 10 al 20% del peso de su niño.

• Siempre use ambos tirantes. Colgársela en un solo hombro podría producir un esguince.

• Considere una mochila con ruedas. Este tipo de mochila puede ser una buena opción para los estudiantes que deben llevar mucho peso. Recuerde que las mochilas con ruedas también se tienen que cargar al subir escaleras.

Consejos para el regreso a clases

A continuación, algunos consejos de la American Academy of Pediatrics (AAP).

Mascotas23

Cine24

Cuentos28

No hace mucho tiempo que existía un humilde sastrecillo que se ga-naba la vida trabajando con sus hi-los y su costura, sentado sobre su mesa, junto a la ventana; risueño y de buen humor, se había puesto a coser a todo trapo. En eso pasó por la calle una campesina que gritaba:

¡Rica mermeladaaaa... Barataaaa! ¡Rica mermeladaaa, barataaaa! Este pregón sonó a gloria en sus oí-dos. Asomando el sastrecito su fina cabeza por la ventana, llamó: ¡Eh, mi amiga! ¡Sube, que aquí te alivia-remos de tu mercancía!

Subió la campesina los tres tramos de escalera con su pesada cesta a cuestas, y el sastrecito le hizo abrir todos y cada uno de sus pomos. Los inspeccionó uno por uno acercán-doles la nariz y, por fin, dijo: Esta mermelada no me parece mala; así que pásame cuatro onzas, mucha-cha, y si te pasas del cuarto de li-bra, no vamos a pelearnos por eso.

La mujer, que esperaba una mejor venta, se marchó malhumorada y refunfuñando.

¡Vaya! —Exclamó el sastrecito, fro-tándose las manos— ¡Que Dios me bendiga esta mermelada y me de salud y fuerza! Y, sacando el pan del armario, cortó una gran reba-nada y la untó a su gusto. «Parece

que no sabrá mal», se dijo. «Pero antes de probarla, terminaré esta chaqueta.» Dejó el pan sobre la mesa y reanudó la costura; y tan contento estaba, que las puntadas le salían cada vez más largas.

Mientras tanto, el dulce aroma que se desprendía del pan subía hasta donde estaban las moscas sentadas en gran número y éstas, sintiéndo-se atraídas por el olor, bajaron en verdaderas legiones.

— ¡Eh, quién las invitó a ustedes! —dijo el sastrecito, tratando de es-pantar a tan indeseables huéspe-des. Pero las moscas, que no en-tendían su idioma, lejos de hacerle caso, volvían a la carga en banda-das cada vez más numerosas. Por fin, el sastrecito perdió la paciencia, sacó un pedazo de paño del hueco que había bajo su mesa, y excla-mando: « ¡Esperen, que yo mismo voy a servirles! », descargó sin mi-sericordia un gran golpe sobre ellas, y otro y otro. Al retirar el paño y contarlas, vio que por lo menos ha-bía aniquilado a veinte.« ¡De lo que soy capaz! », se dijo, admirado de su propia audacia. « La ciudad entera tendrá que ente-rarse de esto » y, de prisa y corrien-do, el sastrecito se cortó un cintu-rón a su medida, lo cosió y luego le bordó en grandes letras el siguien-te letrero: SIETE DE UN GOLPE.

El Sastrecillo ValienteUn cuento de los hermanos Grimm

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« ¡Qué digo la ciudad! », añadió. « ¡El mundo entero se enterará de esto! » Y de puro contento, el corazón le tembla-ba como el rabo al corderito. Luego se ciñó el cinturón y se dispuso a salir por el mundo, convencido de que su taller era demasiado pequeño para su valentía. An-tes de marcharse, estuvo rebuscando por toda la casa a ver si encontraba algo que le sirviera para el viaje; pero sólo encon-tró un queso viejo que se guardó en el bolsillo. Frente a la puerta vio un pájaro que se había enredado en un matorral, y también se lo guardó en el bolsillo para que acompañara al queso. Luego se puso animosamente en camino, y como era ágil y ligero de pies, no se cansaba nunca.

El camino lo llevó por una montaña arri-ba. Cuando llegó a lo más alto, se encon-tró con un gigante que estaba allí senta-do, mirando pacíficamente el paisaje. El sastrecito se le acercó animoso y le dijo:— ¡Buenos días, camarada! ¿Qué, con-templando el ancho mundo? Por él me voy yo, precisamente, a correr fortuna. ¿Te decides a venir conmigo?El gigante lo miró con desprecio y dijo:— ¡Quítate de mi vista, monigote, mise-rable criatura!— ¿Ah, sí? —contestó el sastrecito, y, desabrochándose la chaqueta, le enseñó el cinturón—-¡Aquí puedes leer qué clase de hombre soy!El gigante leyó: SIETE DE UN GOLPE, y pensando que se tratara de hombres de-rribados por el sastre, empezó a tenerle

un poco de respeto. De todos modos de-cidió ponerlo a prueba. Agarró una piedra y la exprimió hasta sacarle unas gotas de agua.— ¡A ver si lo haces —dijo—, ya que eres tan fuerte!— ¿Nada más que eso? —contestó el sas-trecito—. ¡Es un juego de niños!Y metiendo la mano en el bolsillo sacó el queso y lo apretó hasta sacarle todo el jugo.— ¿Qué me dices? Un poquito mejor, ¿no te parece?El gigante no supo qué contestar, y ape-nas podía creer que hiciera tal cosa aquel hombrecito. Tomando entonces otra pie-dra, la arrojó tan alto que la vista apenas

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podía seguirla.—Anda, pedazo de hombre, a ver si haces algo parecido.—Un buen tiro —dijo el sastre—, aunque la piedra volvió a caer a tierra. Ahora ve-rás, y sacando al pájaro del bolsillo, lo arrojó al aire. El pájaro, encantado con su libertad, alzó rápido el vuelo y se perdió de vista.— ¿Qué te pareció este tiro, camarada? —preguntó el sastrecito.—Tirar, sabes —admitió el gigante—. Ahora veremos si puedes soportar alguna carga digna de este nombre—y llevando al sastrecito hasta un inmenso roble que estaba derribado en el suelo, le dijo: Ya que te las das de forzudo, ayúdame a sa-car este árbol del bosque.—Con gusto —respondió el sastrecito—. Tú cárgate el tronco al hombro y yo me encargaré del ramaje, que es lo más pe-sado.En cuanto estuvo el tronco en su puesto, el sastrecito se acomodó sobre una rama, de modo que el gigante, que no podía volverse, tuvo que cargar también con él, además de todo el peso del árbol. El sas-trecito iba de lo más contento allí detrás, silbando aquella tonadilla que dice: «A caballo salieron los tres sastres», como si la tarea de cargar árboles fuese un juego de niños.El gigante, después de arrastrar un buen trecho la pesada carga, no pudo más y gritó:— ¡Eh, tú! ¡Cuidado, que tengo que soltar el árbol!El sastre saltó ágilmente al suelo, sujetó el roble con los dos brazos, como si lo hu-biese sostenido así todo el tiempo, y dijo:— ¡Un grandullón como tú y ni siquiera eres capaz de cargar un árbol!Siguieron andando y, al pasar junto a un cerezo, el gigante, echando mano a la copa, donde colgaban las frutas maduras, inclinó el árbol hacia abajo y lo puso en manos del sastre, invitándolo a comer las cerezas. Pero el hombrecito era demasia-

do débil para sujetar el árbol, y en cuan-to lo soltó el gigante, volvió la copa a su primera posición, arrastrando consigo al sastrecito por los aires. Cayó al suelo sin hacerse daño, y el gigante le dijo:— ¿Qué es eso? ¿No tienes fuerza para sujetar este tallito enclenque?—No es que me falte fuerza —respondió el sastrecito—. ¿Crees que semejante mi-nucia es para un hombre que mató a sie-te de un golpe? Es que salté por encima del árbol, porque hay unos cazadores allá abajo disparando contra los matorrales. ¡Haz tú lo mismo, si puedes!El gigante lo intentó, pero se quedó col-gando entre las ramas; de modo que también esta vez el sastrecito se llevó la victoria. Dijo entonces el gigante:—Ya que eres tan valiente, ven conmigo a nuestra casa y pasa la noche con no-sotros.

El sastrecito aceptó la invitación y lo si-guió. Cuando llegaron a la caverna, en-contraron a varios gigantes sentados jun-to al fuego: cada uno tenía en la mano un cordero asado y se lo estaba comiendo. El sastrecito miró a su alrededor y pen-só: «Esto es mucho más espacioso que mi taller.»El gigante le enseñó una cama y lo in-vitó a acostarse y dormir. La cama, sin embargo, era demasiado grande para el hombrecito; así que, en vez de acomo-darse en ella, se acurrucó en un rincón. A medianoche, creyendo el gigante que su invitado estaría profundamente dormi-do, se levantó y, empuñando una enorme barra de hierro, descargó un formidable golpe sobre la cama. Luego volvió a acos-tarse, en la certeza de que había despa-chado para siempre a tan impertinente grillo. A la madrugada, los gigantes, sin acordarse ya del sastrecito, se disponían a marcharse al bosque cuando, de pron-to... CONTINUARÁ