Eckhart de Hochheim o El Maestro Eckhart

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MAESTRO ECKHART OP Eckhart de Hochheim, mejor conocido como El Maestro Eckhart o Meister Eckhart (1266-1328), fue un Fraile Dominico condenado en su época por herejía por Juan XXII en Avignon, y rehabilitado por la Congregación de la Fe hasta el año de 1992. Este gran místico dominico es un gran promotor de una de las más interesantes formas de relación con Dios a través de la Oración Contemplativa. El misticismo de Eckhart, es conocido también como “esencia”. Y en su concepto, él niega que se tenga que entender a Dios como solo un concepto teológico casi inalcanzable, y da con eso paso a una expresión que define de otra manera la relación: “que contempla la relación entre el alma que ama, y su destino del amor que es Dios. Es decir se atreve a una relación más íntima con Dios. Este místico alemán del siglo XIV, monje de la orden de los dominicos-, abrió, a través de su obra escrita, una puerta que posibilita el acceso a la comprensión de la experiencia contemplativa.

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  • MAESTRO ECKHART OP Eckhart de Hochheim, mejor conocido como El Maestro Eckhart o Meister Eckhart (1266-1328), fue un Fraile Dominico condenado en su poca por hereja por Juan XXII en Avignon, y rehabilitado por la Congregacin de la Fe hasta el ao de 1992. Este gran mstico dominico es un gran promotor de una de las ms interesantes formas de relacin con Dios a travs de la Oracin Contemplativa.

    El misticismo de Eckhart, es conocido tambin como esencia. Y en su concepto, l niega que se tenga que entender a Dios como solo un concepto teolgico casi inalcanzable, y da con eso paso a una expresin que define de otra manera la relacin: que contempla la relacin entre el alma que ama, y su destino del amor que es Dios. Es decir se atreve a una relacin ms ntima con Dios. Este mstico alemn del siglo XIV, monje de la orden de los dominicos-, abri, a travs de su obra escrita, una puerta que posibilita el acceso a la comprensin de la experiencia contemplativa.

  • El naci en Turingia Alemania, en el ao de 1260. No se sabe casi nada de su niez, es ms podemos decir que en lo general, se carece de datos concretos sobre su vida. Lo poco que se conoce, es a travs de las Actas de la poca, que son los escritos que van reflejando algunos de los datos ms significativos de ese momento. Podemos comenzar diciendo que es un Fraile Dominico alemn. Que fue ms conocido por su obra Filosfica, Teolgica y otros sus escritos, mismos que fueron conformando poco a poco, una forma de misticismo interesante, que llego a ser una escuela, conocida posteriormente como Mstica Renana (algunos le han llamado incluso, Mstica Dominicana). Renana viene porque estn a las orillas del recorrido del rio Rhin.

    Y esta expresin se convierte en todo un movimiento en el corazn de Europa del siglo XIV, y que reivindica para todos, especialmente para el pueblo, la posibilidad de una experiencia mstica, que por lo comn en esa poca, era monopolio de Conventos y Monasterios, y en su nuevo concepto, era algo que se abra a los laicos. Los laicos tienen con este movimiento, un acceso a vivir esta experiencia mstica. En la historia, ya se habla sobre la Triada Mstica Renana, que tiene tres importantes personajes: El Maestro Eckhart, Juan Tauler y Henry Suso. (Todos, dominicos, todos profesores Universitarios) Algunos elementos que acompaan a este movimiento son:

    1) Dan un mayor nfasis a la presencia del laico en esta experiencia. 2) El uso de lenguaje cotidiano, en vez del oficial Latn (que no todos hablan), 3) El uso ms frecuente de textos del Nuevo Testamento, y un mayor acento,

    en hacer de esta experiencia un aprendizaje o un elemento de predicacin.

    Por lo que se hace ms accesible a nosotros. Para entender el alcance del trabajo del Maestro Eckhart, debemos decir que este movimiento mantiene los elementos fundamentales de la experiencia Mstica, y para ello haremos un breve parntesis, que nos ayude a descubrir un poco cuales son dichos elementos, podamos conocer ms el sentido de su propuesta. He buscado algunos elementos importantes que se refieren al significado del misticismo, y solo transcribo algo de lo que encontr.

    Mstico viene de Mystikos, del verbo Myo, que significa cerrar, y especialmente cerrar los ojos, con esta expresin se seala, expresa y directamente una determinada y clara experiencia interior.

    Lo que significara, el encuentro interior unitivo de un hombre con la infinitud divina, que fundamenta tanto a l como a todo ser (Karl Rahner).

    La experiencia mstica lleva consigo para su realizacin, no slo la profundizacin sobre algo o alguien, sino que lleva implcita una cierta ruptura momentnea con la conciencia ordinaria, para poder abrirse a nuevas conciencias. Y as la experiencia

  • mstica sucede en medio de una situacin en el que la mente transciende su estado habitual, transciende la condicin normal de la racionalidad finita, y se une a su fondo infinito. Es decir Al todo. Algo que algunos han denominado xtasis de la razn.

    Esto lleva a la generacin de una nueva conciencia, que no slo experimenta el ncleo o el alma de la realidad, sino que experimenta un Todo lleno de sentido.

    Aparece entonces, esa presencia que le rodea de algo absolutamente nuevo. Es Algo o Alguien, que sobrepasa y desborda, pero que no es algo imaginario, sino que es ms real que todo lo que se considera normalmente como realidad. No es algo que se imagina, es algo que se experimenta realmente.

    El mundo en que vivimos y que nos parece tan real y slido, se convierte para el mstico en solo un bastidor transparente, porque desde l se percibe esa otra nueva realidad absoluta y definitiva, que no es ajena o exterior a quien vive la experiencia, sino que es la dimensin profunda de su ser y su realidad, de la que no se separa, pero que le da trascendencia, entendiendo trascender, como ese pasar a, ir mas all. Y esto le da a nuestra oracin una nueva dimensin. Subrayando: No es ese todo que nos retira de la realidad, es ese Dios que nos trasciende con nuestra realidad.

    Aqu la presencia de esa dimensin profunda de la realidad es inmediata. La pared que normalmente es inevitable entre el hombre y la realidad (Ideas, afectos, razonamientos, etc.) se derrumba, y el mstico percibe esa presencia con una certeza que slo tiene paralelo en la percepcin total. Entendamos que no es algo razonado, aprendido, pensado o definido; es experiencia, es vida. El mstico llega a un contacto directo con lo invisible que se convierte para l en una realidad incuestionable, que vive y percibe.

    En las relaciones msticas, no existe la relacin de causa-efecto. En todas se afirma el carcter de regalo, de donacin que sta tiene. Normalmente es el final de un largo y paciente camino. La mejor preparacin para la experiencia mstica, es alcanzar, la nada fcil actitud de receptividad, de percepcin en el silencio humilde y abierto de la razn y la voluntad.

    A medida que en ese paciente (implica saber esperar) y perseverante ejercicio, la receptividad va ganando terreno, y va despertndose la actividad propia del centro del ser, ante la cual el hombre, slo puede estar abierto y receptivo. Cuando ste se ha convertido en pura receptividad, todo puede suceder como un puro don. El hombre se siente invadido por el Ser o el Todo. Vive el Todo y se vive en el Todo, y es arrebatado por la fuerza del Ser, que ahora se le revela como poder ilimitado. Es una experiencia de Dios y en Dios.

  • Entonces el hombre siente una Realidad que habla sin palabras a su ntima esencia, de sustancia a sustancia (san Juan de la Cruz). Algo que le toca en la profundidad, y le hace cautivo, y le transforma. Nada hay en esa experiencia que se parezca a una contemplacin neutra de algo que no afecta a la propia existencia, o no lo hace cambiar. Nada tampoco es algo que se parezca a una evasin de la responsabilidad en el mundo, porque aunque se experimenta una liberacin de todo lastre personal y de una entrega espontnea al amor en todas sus manifestaciones, nunca se deja de estar consciente de la realidad. Es dejar de hablar demasiado de Dios, para dejarnos ser tocados por El, es entonces que enmudeceremos, porque nuestro lenguaje es insuficiente. Es experiencia intima con lo sagrado, que le da un sentido a la unin con Dios.

    En la experiencia mstica, que obra de forma inmediata en el ser del mstico, aparece un mundo inexpresable en el lenguaje, no hay nada que traduzca la experiencia, con las experiencias ordinarias o en el conocimiento racional-lgico de la realidad. La inefabilidad de la experiencia, la imposibilidad de traducirla lingsticamente, y a la vez la necesidad y deber de comunicarla, obliga al mstico, a crear un lenguaje nuevo, mediante la paradoja, en la que a la ruptura de la mente lgica, corresponde tambin la ruptura del lenguaje lgico. Y se entiende todo, sin palabras, ni conceptos.

    El misterio de la Realidad a la que el mstico se abre, y la realidad que se abre al mstico, est en la dinmica de la revelacin privada, en el pleno misterio del Dios vivo de Abrahn, Isaac y Jacob. En el que se recalca el yo soy el que soy del Sina y el santo, santo, santo de la visin de Isaas. En una palabra es Dios en Es el Dios que transciende lo creado, lo particular y lo histrico, en el que se unifican la ultimidad y lo concreto, lo universal y lo individual. El Ser-Mismo y su manifestacin en la persona histrica, individual, de Jess como el Cristo.

    En la Sagrada Escritura no hallamos el adjetivo mystiks, ni por supuesto, el sustantivo mstica. Pero s hallamos, en cambio en el AT la palabra mysterion (de la misma raz que mystiks) que sirve algunas veces para indicar simplemente un secreto humano que no puede entenderse.

    En el Nuevo Testamento va a ser San Pablo el que usa el trmino mysterion para significar el plan de salvacin de Dios Padre, escondido desde los siglos, realizado y revelado en el acontecimiento de la cruz-resurreccin del Hijo, conocido y vivido slo por la fuerza del Espritu vivificante. Es pues, el mysterion esencialmente trinitario y al mismo tiempo cristocntrico, que Pablo presenta como la sabidura misteriosa de Dios. Mstico designa un conocimiento experimental, vivencial, inmediato, e interno de las realidades divinas. Despus de este parntesis, podremos volver a nuestro personaje, y entender mejor el significado de la presencia en la historia del Maestro Eckhart. Eso de

  • Maestro (Meister en alemn), es por el reconocimiento que le tenan y a los muchos ttulos acadmicos que obtuvo en la Universidad de Paris. As que podemos seguir su camino en sus textos. Sabemos que ingresa como novicio en la Orden de los Predicadores (Dominicos) en el monasterio de Erfurt, ahi se interna aun ms, estudiando y desarrollando ms la vida Dominicana.Se ha comprobado que en 1277 residi en Pars como estudiante de artes. Y antes de 1280 volvi a su patria y curs estudios teolgicos en el Studium Generale de su Orden en Colonia, ciudad que posteriormente habra de ser el lugar principal de sus actividades como predicador, especialmente en los conventos femeninos. Se entendera que ah, en el Studium Generale de Colonia, por donde haban pasado Alberto Magno y su discpulo Toms de Aquino, es donde en 1293 Eckhart ya se encuentra como licenciado. En esta etapa predic por primera vez ante un pblico acadmico durante la fiesta de Pascua. Sus sermones son la expresin pura de una pedagoga de la mstica. En ellos, mediante una explicacin, ofreci una visin profunda, autntica y espiritual del mensaje de Jess de Nazaret. Pero incluso se puede observar en su discurso que transciende al propio mensaje Cristiano, unificndose al mensaje mstico universal. Es reconocible la conexin entre su descripcin de la Nada con la descripcin del Vaco que ofrece el Budismo Zen. Se supone que en sus primeros aos de Colonia, podra haber tenido contacto con Alberto Magno, pero no hay constancia de ello. Entre 1294 y 1298 se origin su primera obra escrita en alemn Las plticas instructivas (Die rede der Underscheidunge). Curiosamente, a pesar de su profundidad y su capacidad de abstraccin, se le reconoce haber sido brillante en los cargos que la Orden le encomend y tambin se comenta acerca de esa entrega y apoyo de su parte a algunas religiosas. En la historia se indica que era, prior en Erfurt y vicario de Turingia. Esta sobria referencia prueba tambin que Eckhart, ya en aos tempranos se haba convertido en un personaje importante dentro de la Orden de los Predicadores. En este perodo es cuando escribe su primera obra de importancia: Las Plticas Formativas, charlas entre l y los novicios como su director espiritual. En 1302 fue

  • profesor ordinario de Teologa de la Universidad de Pars, en ctedra reservada para los no franceses. Entre 1300 y, a ms tardar 1302, Eckhart debe haber renunciado, primero al priorato y luego al vicariato. Ya que en este ao (1302), se le design Magster de Teologa en Pars. Ense all durante un ao, para volver posteriormente a Erfurt. Pero ya en 1303 se dividieron algunas provincias demasiado grandes de la Orden, y Eckhart fue designado Provincial de la nueva Provincia Sajonia, a la cual pertenecan vastas regiones de Alemania Septentrional, incluyendo entre otras, a Holanda. Desde ese ao, hasta el ao de 1311, asume el cuidado de 47 conventos de once naciones y varios monasterios de religiosas. Si recordamos que las distancias generalmente eran recorridas a pie, podemos imaginarnos el peso de la tarea, a la cual se agreg en 1307 su designacin como Vicario general de Bohemia. No olvidemos que en 1310 los electores de la Teutonia haban votado por Eckhart, cuando se haca necesario designar un nuevo provincial. Pero no lleg a ejercer las obligaciones vinculadas con tan honrosa eleccin, porque en 1311 el Captulo General de la Orden lo envi otra vez como magister ad legendum a la Universidad de Pars, distincin que segn Soudek slo se puede comparar con los dos nombramientos que para esa tarea tuvo Santo Toms de Aquino. An cuando los estudiosos no coinciden con respecto a las obligaciones que haba tenido durante los dos aos siguientes en Pars, la mayora opina que es en ese lapso, fueron madurando las ideas principales de su fundamental obra latina inconclusa, el Opus tripartitum. Mientras tanto, contina ininterrumpidamente su actividad como predicador. En esa fecha, el Captulo de los Dominicos le dispensa de todas sus obligaciones y lo enva a Pars para ocupar de nuevo la ctedra, siendo ste un honor equiparable al que vivi Toms de Aquino. Hasta que en 1313 tiene lugar el segundo y de mayor importancia, que es: El magisterio de Eckhart en la Sorbona. Desde el 1313 hasta 1322, vuelve a ejercer como maestro de vida y se ocupa de la reforma de conventos y del cuidado de comunidades de monjas en el sur de Alemania. En 1320 fue nombrado maestro de teologa del Studium Generale de Colonia. De esta poca es su obra El Libro del Consuelo Divino escrito para Agnes, viuda del rey Andreas III, rey de Hungra, que en ese momento era superiora de un convento de Clarisas. En esta obra presenta un modelo de consolacin a travs de la imitacin de los sufrimientos de Cristo. Esta obra fue decisiva y marca el comienzo de las sospechas de hereja contra Eckhart.

    Una vez terminada su estancia a orillas del Sena en abril de 1314, Eckhart, se encuentra en Estrasburgo, donde actu como director o lector del colegio local de la Orden, y tambin como asesor de los monasterios femeninos de Alemania Meridional. Luego de haberse desempeado como visitador del convento femenino de Unterlinden (importante para la historia del misticismo alemn), el maestro fue enviado a Colonia, en 1323.

  • Este es el momento de su vida, en que incluye en su cuidado religioso a la gente del pueblo, y para ello toma el idioma popular, dejando a un lado el latn. Escribe, pero para todo el mundo, ya no slo para los acadmicos. Comienza a incorporar a su discurso, contenidos propios del movimiento del libre espritu asumidos por las beguinas.

    Las beguinas eran una asociacin de mujeres cristianas, contemplativas y activas, que dedicaron su vida, tanto a la defensa de los desamparados, enfermos, mujeres, nios y ancianos, como a una brillante labor intelectual. Organizaban la ayuda a los pobres y a los enfermos en los hospitales, o a los leprosos. Trabajaban para mantenerse y eran libres de dejar la asociacin en cualquier momento para casarse.

    Este cambio en su visin, comienza a preocupar a los sectores ms conservadores de la Iglesia Catlica, y se comienzan a hacer duras crticas dentro de los crculos de la jerarqua religiosa. Este compromiso de compaa y enseanza espiritual del Maestro al pueblo, a travs de sus sermones y otros escritos, le provoco grandes problemas con la Iglesia, institucin que termin rechazando sus modos y su contenido.

    La fama de Eckhart haba llegado a su cspide, pero los temores tambin, y fue as, cuando el 1 de agosto de 1325 el papa Juan XXII nombr al dominico Nicolaus Von Strassburg (visitador de la Orden), y le fue obligado a abrir una investigacin sobre los escritos alemanes del Maestro.

    Se le consider sospechoso de pertenecer a la Orden de los Begardos, quienes eran un movimiento religioso cristiano, que apareci en Alemania (condenado por Bonifacio VIII y por Juan XII), que crean en la impecabilidad del alma humana, cuando llegaba a la visin directa de Dios. Llevaban una vida austera, inspirados en la pobreza, la piedad y la pureza. Consideran que la condicin humana y la relacin tiempo eternidad, permiten al hombre por la contemplacin adquirida gozar en la tierra de la beatitud final. As como su relacin con muchas de las Beguinas. Las primeras investigaciones se centraron en un libro, el Liber Benedictus, calificando peligrosas varias de las tesis expuestas en l. Frente a la acusacin, Eckhart respondi con una rplica.

    En 1326, el arzobispo de Colonia, Heinrich von Virneberg, inici contra l un proceso de inquisicin, acusndole de la difusin de doctrinas herticas en alemn. Hay opiniones divergentes acerca de cules habrn sido los trasfondos de tal acusacin que fue la primera dirigida contra un miembro de la Orden de los Predicadores. Sin embargo, no se puede negar del todo, que el procedimiento contra el Maestro Eckhart mostrara rasgos de una venganza personal del arzobispo Heinrich, quien hizo or sus acusaciones an despus de la muerte del famoso predicador.

    En 1326 el arzobispo de Colonia recibe dos listas, en distintas ocasiones, con frases tomadas de las obras de Eckhart, que servirn la base para la acusacin de

  • hereja. En septiembre de ese ao, el maestro aparece ante los inquisidores comisionados por el arzobispo. Poco ms tarde es confeccionada una tercera lista.

    En el proceso inquisitorio al que fue sometido, -proceso lleno de irregularidades-, todas sus enseanzas fueron analizadas fuera del propio contexto en donde fueron expresadas. De ese modo, pudo derramarse sobre ellas, la interpretacin propia que sirvi de justificacin para el propio proceso de hereja. El propio Strassburg, alertado por las falsas acusaciones y testimonio quiso detener el proceso, pero fue apartado del escenario de los hechos. Y Eckhart muri esperando el veredicto del tribunal inquisitorio.

    La respuesta del maestro mismo, est contenida en la bula de Juan XXII llamada in agro dominico Sin embargo, una comisin convocada por el obispo tild de sospechosos 49 pasajes de sus escritos latinos, del Libro de la consolacin divina (Daz buoch der goetlichen troestunge) y de los sermones alemanes.

    Eckhart contest en su llamado Escrito de justificacin donde seal que l, segn los privilegios de su Orden, slo era responsable ante la autoridad del Papa y de la Universidad de Pars. Negaba el fundamento jurdico del proceso, pero se declar dispuesto a contestar de buena voluntad.

    Slo se debe aadir que Eckhart, el 13 de febrero de 1327 hizo una declaracin pblica en latn, con comentario en alemn, donde el maestro llamaba a Dios por testigo de que durante toda su vida se haba esforzado por evitar cualquier error contra la fe o falta contra la moral. No negaba la posibilidad de haber enseado doctrinas, que para algunos fuesen errneas, pero s rechazaba cualquier posibilidad de hereja, ya que sta sera objeto de la voluntad y l no tena voluntad alguna de faltar a la fe. Cabe sealar que segn una apelacin del 24 de enero del mismo ao dirigida al Papa Nicols de Estrasburgo, visitador designado por el propio Santo Padre, ya habra examinado las doctrinas de Eckhart y negado la sospecha de hereja.

    En Colonia, el maestro nunca fue declarado culpable. La decisin dependa ahora de la Curia en Avin, donde Eckhart habra residido en el mismo ao de 1327, segn el testimonio de Guillermo de Ockham. Entre julio de este ao y el 30 de abril de 1328 el maestro habr muerto sin conocer el juicio definitivo sobre la obra de toda su vida. No se sabe dnde muri ni tampoco se conoce el lugar donde se encuentran sus restos.

    Tan slo el 27 de marzo de 1329 se dio a conocer la Bula del Papa Juan XXII Inagro dominico, en la cual se objetaba la formulacin de 28 artculos de su obra, 17 de los cuales eran considerados herticos

  • y otros 11, sospechosos de hereja. En la Bula se menciona tambin que Eckhart antes de su muerte se habra retractado de las frases incriminadas. Sobre esto ltimo, no consta nada que indique que as haya sido, pudiendo parecer ms una posterior utilizacin del maestro por parte del tribunal inquisitorio en propio detrimento de sus enseanzas espirituales.

    En los siglos siguientes a la desaparicin del gran predicador, su doctrina fue defendida y atacada desde los ms diversos ngulos, especialmente por parte de catlicos y protestantes, hasta llegar a una burda interpretacin nacionalista para la cual el hombre conscientemente catlico se convirti en rebelde contra la autoridad eclesistica.

    Muchos de los resultados dudosos de la interpretacin, se lograron mediante la despreocupada separacin de frases y giros de su contexto, aun cuando justamente las difciles y a veces apenas expresables exposiciones, junto con el insuficiente conocimiento de los textos autnticos, y la falta de los estudios pertinentes, slo pueden ser valuados en su conjunto natural, quiere decir como un eslabn dentro de un tratado o una homila. Cabe agregar que, gracias a los investigadores catlicos Otto Karrer, Herma Piesch y AloisDempf el maestro Eckhart fue reconocido posteriormente cuasi oficialmente por la Iglesia catlica.

    Karrer cree que la condenacin de Eckhart se dirigi en el fondo contra los begardos y sus excesos, y defiende la opinin de que el Maestro Eckhart muy lejos de los prejuicios de la izquierda y de la derecha se hallaba dentro de una gran tradicin espiritual de la cual se apropiaba con profundidad mstica, siendo en sus enseanzas y su personalidad uno de los hombres ms destacados de su pueblo, un hroe trgico, y ciertamente por eso no menos un discpulo de su Divino Maestro y un vocero de aquel reino divino que se halla en lo interior.

    El Maestro Eckhart ha sido reconocido tanto por representantes de la mstica occidental Tauler, Suso, Juan de la Cruz, Silesius-, como por filsofos de oriente Nishitani y Tanabe de la Escuela de Kioto. stos ltimos, lo han descrito como el interlocutor excepcional entre ambas culturas por la conexin entre su filosofa y las tradiciones asiticas, en concreto, con el Budismo Zen.

    En 1992, el entonces Prefecto de la Congregacin de la Doctrina de la Fe, -el cardenal Ratzinger, hoy Papa emrito Benedicto XVI-, acept la peticin del Captulo General de los Dominicos para rehabilitar al Maestro Eckhart. El proceso de rehabilitacin finaliz con el veredicto que expresaba que Eckhart nunca necesit de una rehabilitacin. Este es el resumen de la respuesta que el entonces Maestro de los Dominicos, Timothy Radcliffe, recibi del Vaticano:

    " y se nos dijo que no haba realmente ninguna necesidad, ya que nunca haba sido condenado por su nombre, slo por algunas proposiciones que se supona haber tenido, por lo que somos perfectamente libres de decir que es un buen telogo y ortodoxo

  • El veredicto consisti en tres proposiciones fundamentales: El Maestro Eckhart no necesita ninguna rehabilitacin; su doctrina est en perfecta consonancia con la doctrina catlica y es un telogo digno de recomendacin.

    El movimiento mstico de Eckhart busca la unin del alma con Dios, a travs de una serie de estadios: el alma reconoce primero que el ser pertenece slo a Dios, mientras que ella misma no es nada por s sola; en un segundo momento se descubre como imagen de Dios, cuando se ha olvidado de s; y en el tercer estadio, el alma se reconoce como idntica a Dios, tesis que dio pie a la acusacin de pantesmo, y sobre cuyo sentido se ha discutido abundantemente; el ltimo estadio supone la superacin de Dios como creador, en su anterioridad exenta de determinaciones y que se identifica, por tanto, con la nada. Las obras principales de Eckhart son Opus tertium (que dej inconclusa) y Quaestiones parisienses.

    Es poco lo que se sabe de su vida, y se ha observado tambin que l, en sus sermones y tratados, evit referirse a hechos y sucesos personales. A diferencia de otros msticos religiosos medievales, como Seuse, de quien conservamos un trabajo autobiogrfico, ocult su individualidad bajo el anhelo, tpico de l, de hacer confluir toda actividad humana en el inagotable fondo de lo Uno.

    Ni siquiera se conocen cartas suyas capaces de arrojar luz sobre uno que otro episodio de su vida. Esta falta de referencias a su vida y a su mundo individual, condice perfectamente con la insistencia en la necesidad de despojarse y desasirse del propio yo que ante la contemplacin de Dios se reduca a casi nada, slo importante por cuanto se vinculaba con lo ms excelso mediante la chispa increada en su propio fuero ntimo. Pero esta nica cosa importante era casi inefable y requera todas sus fuerzas intelectuales y espirituales para anunciarla como buena nueva, y esto s lo haca en forma decididamente personal. No es fcil ni sencillo leer al Maestro Eckhart. A nosotros, habitantes habituales en el mundo de la imagen, se nos hace inextricable entrar en el mundo de la no-forma que nos propone Eckhart. l mismo tena consciencia de la dificultad para acceder a ese tipo de conocimiento. Por ello es posible ver cmo, desde una compasin profunda y consciente, brotaron sus palabras claves en el sermn Los pobres de espritu dirigidas a aquellos que inician su camino espiritual. stas nos dicen: Quien no entienda este discurso no debe afligirse en su corazn. Pues mientras el hombre (el ser humano) no se haga semejante a esta verdad, no lo entender; es una verdad desvelada que ha surgido directamente del corazn de Dios. Hacerse semejante. En el Gnesis, se expresa que Dios hizo el hombre a su imagen y semejanza. En el diccionario de la lengua se encuentran dos significados que parecen concordar con el discurso de Eckhart: igual e idntico. En consecuencia, habla de un proceso interior por el que el ser humano es capaz de sentirse idntico, igual y comparable a Dios pero si yo no hubiera sido, tampoco habra sido Dios: que Dios sea Dios, de eso soy yo una causa; si yo no fuera, Dios no sera Dios. (Soy una manifestacin de Dios. En consecuencia, al yo existir, Dios existe, y al existir Dios, existo yo).

  • Pero no nos habla de un Dios externo y separado de, sino de una experiencia ntima en donde la persona experimenta como en la Moradas de Teresa de Jess- las diversas estancias y potencias en las que el alma sabe el Ser de Dios. Pero atento a la forma creada de Dios existente en el discurso de la iglesia, nos alerta acerca de la creencia e interiorizacin de un Dios dolo cuya forma y manifestacin estar siempre en acorde a los deseos del hombre y no en su propia esencia. Una de sus frases maestras es aquella que dice: Por eso ruego a Dios que me vace de Dios. Pide poder estar libre de toda imagen de Dios para poder vivenciar la experiencia de Dios en Dios. Por ello comprende que el acceso al mundo de la no-forma pasa por la experiencia y conocimiento de la nada, del vaco. Si bien el tema de cada sermn pareciera en un principio diferente, todos contienen el mismo objeto y sentido: sentir y comprender la experiencia de Dios sin forma en cada uno de nosotros. En el sermn Los pobre de espritu, referido a la primera frase del Sermn de la Montaa, explica el autntico significado del trmino pobre. Explica bellamente que el hombre pobre es aqul que no sabe nada no apego a la forma-, no tiene nada no apego a las cosas, y no quiere nada asiente a la realidad tal y cmo es sin pretender modificarla a voluntad. Vive libre de intencionalidad. Todo movimiento nace de la nada del desapego- de lo que le rodea y de lo que es, porque surge directamente de la Nada plena de Dios. En el sermn El Templo vaco, hace referencia al captulo del Nuevo Testamento en el que Jess de Nazaret expulsa a los mercaderes del templo. Va estableciendo comparativas entre los diferentes tipos de personas que ubica fuera de un templo, como en un smil de todas aquellas ideas, formas, comprensiones y hbitos que no nos permiten que nuestro interior el templo- contenga en s el silencio que debe darse para que pueda Dios revelarse, hablar y ser odo. Nos ofrece en este sermn, una descripcin detallada acerca de todos los hbitos religiosos aceptados socialmente como vlidos y legtimos y cuya expresin nos aleja de la verdadera experiencia de Dios, siendo fcilmente reconocibles muchos de ellos en el texto. Y como ltimo ejemplo, en el sermn llamado Marta y Mara, nos muestra una visin amplia y profunda sobre la experiencia mstica y la vida cotidiana. Mara como representante de las personas en plena experiencia espiritual, que no les es posible accin alguna, sino contemplacin de lo que se le desvela. Mientras Marta, que ya ha experimentado lo que vive Mara en ese momento, lamenta su inactividad. Y expresa Jess a Marta que entienda el momento de Mara, porque an le queda el aprendizaje que ella ya ha obtenido, que no es nada ms ni nada menos que la contemplacin misma llevada a la vida cotidiana.

  • Algunas citas

    Extradas del libro "El fruto de la nada",

    Sermn sobre el templo vaco El templo en el que Dios quiere dominar segn su voluntad, es el alma del hombre esa es la razn por la que Dios quiere tener el templo vaco, para que ah dentro no haya nada que no sea l. (35) Quien no entienda este discurso, no debe afligirse en su corazn. Pues, mientras el hombre no se haga semejante a esta verdad, No lo entender; Es una verdad desvelada que ha surgido directamente del corazn de Dios