Del archivo fotográfico de Andrés Molina

LA HISTORIA

1.- En el año 1717 se construye la primera ermita a Ntrª Srª de Las Nieves en el paraje jos Tajos del Veleta, a expensas del Beneficiado de Válor, D. Martín de Mérida, en acción de gracias por haberse

librado de una fuerte tormenta cuando atravesaba la sierra en dirección a Granada, después de invocar la protección del Señor y de la Virgen María. Ese día era el 5 de agosto, en el que la Iglesia celebra la fiesta de Santa María la Mayor, llamada popularmente Ntrª Srª de la Nieves. Desde entonces aquel sitio se le llama los Tajos de la Virgen.

LA HISTORIA

2.-Los fieles de la Parroquia de Dílar acuden a dicha ermita e invocan a la Virgen como su Patrona. En 1724 la Hermandad decide construir una nueva en el collado del Borreguil, también término de este pueblo.

LA HISTORIA 3.- En 1745, se construye la 3 ª ermita en el Picón del Sabial entre los términos de Padul y Dúrcal lo que en la actualidad se llama “ERMITA VIEJA”

LA HISTORIA

4.- En 1796 se erigió la definitiva y actual, cercana a Dílar de bella y majestuosa planta, la que la Hermandad y todo el pueblo cuidan con esmero y fervorosa devoción.

Interior de la Ermita

Multitud de peregrinos de Dílar y de los pueblos cercanos, en su mayoría de Padul, se congregan junto a la ermita para rezar ante la imagen de la Virgen durante la noche del día 15 de agosto.

Muchos permanecen durante esa noche en espera de participar en la Eucaristía que se celebra al salir la imagen de la Virgen para su posterior traslado a la Iglesia de Dílar

Estrella hermosa

que anuncia el día,

eres, oh Madre,

Virgen María.

Más que el lucero, ya en su alborada, brillas, oh Madre, oh, Madre Inmaculada; inunde el seno del alma mía tu luz purísima, Virgen María.

Virgen y reina de las flores, Virgen pura de Las Nieves, limpia nuestros corazones para que seamos fieles.

Reunidos en el nombre del Señor

que nos ha congregado ante su altar,

Celebremos el misterio de la fe,

bajo el signo del amor y la unidad.

Se abre un nuevo día bajo la luz de la Palabra y presencia del Señor

Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. ¡Ven, Señor Jesús!

Comamos todos de este Pan,

el Pan de la unidad, en un cuerpo nos unió el Señor por medio del amor.

Luz del pobre peregrino,

estrella de Salvación,

brilla siempre en mi camino

y brilla en mi corazón.

Alumbra mi pobre vida,

y cuando llegue a su fin,

Madre mía de Las Nieves,

vuelve tus ojos a mí.

Se inicia la procesión, símbolo del caminar en nuestro vida tras la cruz de Cristo, con la ayuda de María, Madre de la Iglesia.

Con la colaboración de los fervorosos miembros de la Hermandad Parroquial

AVE, MARIS STELLA

¡ Salve del mar Estrella!. ¡ Salve Madre sagrada!.

¡ Salve por siempre Virgen, puerta del cielo santa !

¡ Muéstranos que eres Madre ! Presenta las plegarias a Quien por darnos vida nació de tus entrañas

Haz pura nuestra vida – camino firme allana porque el que a Jesús llega - eterno gozo alcanza

Virgen la más humilde, infunde en nuestras almas

libres de toda culpa, virtud humilde y casta.

Cantar quiero a mi Madre cantos de alegre son óyelos, Virgen pura óyelos con amor.

Cuando oigo de las aves su alegre gorjear con ellas yo quisiera a tu lado cantar.

Mirando Dios tu belleza

para Madre te escogió. ¡

Oh, que bien le pareció

tu humildad y tu pureza,

pues tu santa castidad,

merecer pudo tal grandeza

¡María flor, divina unión de cielo y tierra en tu ser!

¡ María paz, luz celestial que ahuyentas con tu luz el mal !

Madre, trono del Señor en quien Jesús se complació, reina escogida del Amor,

¡Madre, Hija, Esposa de Dios !

Danos tu amparo y protección,

te suplicamos con fervor.

Clamorosamente recibida en la plaza del pueblo.

Salve, Señora, Virgen de las Nieves, Madre de nuestra patria y de nuestra fe.

Hoy vuelve a ti

las flores de tu pueblo a

postrarse a tus plantas,

otra vez, otra vez.

No desoigas la voz del que te llama

y rendido se postra a tus pies.

Es el afán del pueblo que te aclama,

es el amor de este tu pueblo fiel.

Virgen de las Nieves, Madre dulce y buena que estás en las cumbres guardando a Dílar contra todo mal. Baja hasta nosotros ygual que una vena de amor celestial

Velón de mil corazones, Dílar se está quemando de tu amor en oraciones: que por ver la alegría de nuestra tierra, ha bajado María sobre la Sierra (bis)

Postrados a tus plantas los dilareños, desde la Vega a la Sierra con sus canciones, trenzan cordones fuertes de corazones.

¡Viva la Virgen de las Nieves,

que todo el año nos guarde !

Y en agosto nos visita, ¡Viva la Virgen bendita!

Nota: Las letras al margen de las fotografías están tomadas de los himnos latinos “Ave maris Stella”,”Flor Vírginum” y de canciones populares tradicionales