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[1] No. 142 – marzo de 2015— Año XIV Preparado por: José Arcelio Gómez Prada Contenido Editorial Pág. 2 N oticias Dos subastas numismáticas en la ciudad de Medellín Pág. 2 Encuentran tesoro numismático en Israel Pág. 4 Tema Central El Búho en la notafilia y numismática – Segunda parte Pág. 6 M emoria Numismática 120 años de la emisión de billetes del Banco Nacional de la República Pág. 10 Agradecimiento del señor Danilo Parra Pág. 14 José A. Gómez. E-mail: [email protected] Teléfono móvil: (571) 312 3915951

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No. 142 – marzo de 2015— Año XIV

Preparado por: José Arcelio Gómez Prada

Contenido

Editorial Pág. 2

N oticias

Dos subastas numismáticas en la ciudad de Medellín Pág. 2

Encuentran tesoro numismático en Israel Pág. 4

Tema Central

El Búho en la notafilia y numismática – Segunda parte Pág. 6

M emoria N umismática

120 años de la emisión de billetes del Banco Nacional de la República Pág. 10

Agradecimiento del señor Danilo Parra Pág. 14

José A. Gómez. E-mail: [email protected]

Teléfono móvil: (571) 312 3915951

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Editorial

n el mes de marzo venimos

con un boletín recargado de

noticias, aniversarios y

agradecimientos. Decimos, recargado,

por cuanto se nos aumentó el número

de páginas pero creemos que la

circunstancia lo amerita.

No es muy usual que las subastas

numismáticas tengan lugar en un

breve lapso, sin embargo, en los

próximos días tendrán lugar en la

ciudad de Medellín, dos subastas

organizadas por importantes

personalidades de esta ciudad. Así

que les traemos la información

relacionada para que se animen a

asistir.

Venimos con la segunda parte del

artículo central dedicado a la

presencia del búho en la

numismática, en esta ocasión, los que

están presentes en billetes griegos del

siglo XX.

En Memoria Numismática,

recordamos los 120 años de la bella

emisión realizada por el Banco

Nacional de la República de Colombia.

Y finalmente, incluimos unas palabras

de agradecimiento del señor Danilo

Parra, luego de la exitosa

presentación de su libro Compendio

Histórico del Papel Moneda en

Colombia.

Esperamos que la información que

aquí les compartimos, sea del interés

de todos nuestros lectores.

¡Hasta el próximo número!

Noticias

• Dos subastas numismáticas en la ciudad de Medellín: como ya decíamos en el editorial, no es muy usual que las subastas numismáticas se realicen en tan corto tiempo, sin embargo, en menos de dos meses,

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tendremos dos convocatorias que nos resultan muy atractivas: la primera tendrá lugar el 21 de marzo en el salón de reuniones de la Torre Almagrán (calle 7d No. 43A-99, Sótano 1) de la ciudad de Medellín a las 3 p.m. La organización está a cargo del doctor Ricardo Botero, a quien pueden contactar en el siguiente correo: [email protected] .

Catálogo subasta 12 Torre Almagrán

La segunda subasta, organizada por la Asociación de Coleccionistas C & C de Medellín, tendrá lugar el próximo 11 de abril de 2015 en la sede del Hotel Diez Categoría Colombia, calle 10A No. 34-11 de Medellín a las 4 p.m. Se ofrecerán diversas piezas, entre ellas: billetes mundiales, monedas de Colombia, monedas de Colombia pruebas e invertidas, monedas del mundo, variedades billetes Banco de la República, medallas, cupones y fichas, billetes del Banco de la República, billetes de Colombia anteriores al Banco de la República, títulos y documentos. Para mayor información pueden contactar al señor Julián Cuartas en el correo: [email protected] .

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Catálogo Tercera subasta numismática de C & C

• Encuentran tesoro numismático en Israel: (Fuente: Emol.com)

Buceadores descubrieron el pasado mes de febrero, en el fondo del puerto antiguo de Cesarea, en la costa mediterránea, dos mil monedas de oro de mil años de antigüedad que constituyen el tesoro numismático más importante descubierto en Israel, según anuncio la autoridad nacional de antigüedades. Los miembros de un club de buzos hicieron el descubrimiento por casualidad, después de que unas tempestades removieran los fondos marinos del puerto antiguo de Cesarea, al noroeste de Israel. "Al principio creyeron que se trataba de una ficha de juego" y salieron de su error cuando recogieron varias monedas, indicó la autoridad. Avisaron al director del club de buceo, que a su vez informó a las autoridades de antigüedades. Los buceadores de la autoridad han detectado unas 2.000 monedas de dinares, medios dinares y cuartos de dinar, la más antigua acuñada en Palermo (Sicilia) en la segunda mitad del siglo IX. La mayor parte de las monedas remontan a dos califas fatimíes que reinaron de las postrimerías del siglo X al primer tercio del siglo XI en un territorio que cubre gran parte

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de África del Norte, Sicilia y parte del Cercano Oriente. En excelente estado de conservación a pesar de los mil años en el fondo del mar, las monedas no necesitaron una limpieza, indica Robert Cole, experto en numismática. Algunas tienen huellas de mordeduras, que muestran que sus dueños comprobaron su calidad con los dientes. Otras parecen haber recibido golpes. Las piezas provienen quizás del naufragio de un barco que transportaba la recaudación por impuestos destinada al Gobierno central en Egipto, aventura Kobi Sharvit, director de la unidad de arqueología marina de la autoridad de las antigüedades. O bien, el dinero estaba destinado a pagar los sueldos de la guarnición que defendía Cesarea. O bien, el dinero pertenecía a un rico mercader cuyo barco negociaba con los puertos mediterráneos antes de zozobrar. La autoridad espera que el estudio del contexto permita saber más detalles. La dinastía fatimí fue fabulosamente rica, según la autoridad de las antigüedades. Su advenimiento coincidió con una renovación del comercio marítimo en el este de la cuenca mediterránea. Cesarea, construida por el rey Herodes I de Judea el siglo I AC, y otras ciudades portuarias se desarrollaron con la dinastía. El comercio entre musulmanes y cruzados prosperó en tiempos de paz, sin cesar en tiempos de guerra, indica la autoridad. Los vestigios importantes de las épocas romana y medieval hacen de Cesarea una de las grandes atracciones turísticas de Israel.

Imagen del tesoro hallado recientemente en Cesarea

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Tema Central

El búho en la notafilia y la numismática– Segunda parte

ntes de continuar con la segunda parte de este estudio es importante aclarar que la primera presencia iconográfica de este tipo de aves rapaces en la antigüedad griega, hacía más referencia precisamente a la lechuza o al

mochuelo y no así al búho, el cual no era muy común en esas regiones. Fue muy importante la asociación que tuvo la lechuza con Atenea (“la diosa de los brillantes y resplandecientes ojos… de mirada viva y penetrante, como la de las pequeñas lechuzas”), ella misma prefirió adoptar a la callada y observadora lechuza como proyección suya. Ese primer vínculo simbólico de la diosa con el ave la aproximaba a las orillas de la sabiduría pero también empezaba a tomar una connotación de cercanía con lo oculto. Más adelante, con la apropiación que hicieron algunas sociedades secretas de la figura del búho, ha empezado a asumirse como símbolo del control que ejerce el nuevo orden mundial.

En la reapropiación de Atenea que hicieron los romanos, a quien llamaron Minerva, se conservó la imagen de la lechuza como animal totémico. Esta imagen se extendió a todo el mundo cristiano, y por ende, al territorio americano, donde la lechuza y demás rapaces nocturnas, tenían otras presencias simbólicas.

El búho como representación de la sabiduría a que aspiran los filósofos, vino a entronizarse luego de la publicación de la Filosofía del Derecho (1820) del filósofo alemán, Federico Hegel, quien incluyó al final del prefacio una referencia genérica a esta ave. Debido a la falta de precisión en la palabra, los traductores la popularizaron como “búho”, dice la cita: “Cuando la filosofía pinta su gris sobre gris, entonces ha envejecido una figura de la vida y, con gris sobre gris, no se deja rejuvenecer, sino sólo conocer; el búho de Minerva sólo levanta su vuelo al romper el crepúsculo”. De esta manera, la castiza “Lechuza de Atenea” se popularizó hasta hoy, como “El búho de Minerva”. Incluso, los coleccionistas hoy centramos más nuestras búsquedas en las representaciones del búho que de las lechuzas.

Y ya pasando a la numismática, en el anterior número les habíamos mostrado las primeras monedas griegas que tenían al mochuelo y a la lechuza como imágenes permanentes junto con la de la diosa Palas Atenea. Estas piezas fueron acuñadas entre el siglo VI a. C. y el siglo II a. C., llegando a convertirse en las monedas más importantes de la época en un vasto territorio, tal como lo presenta el siguiente fragmento: “Durante todo el periodo helenístico siguieron corriendo estas monedas atenienses por todo el Mediterráneo, e incluso hubo imitaciones directas (las más conocidas son las tetradracmas del reino árabe-nabateo). La tetradracma ática fue una moneda de prestigio internacional hasta bien entrada la época romana (algo así como el "dólar" actualmente) y eran comúnmente bien aceptadas incluso en las

A

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épocas en que ya hacía mucho tiempo que la propia Atenas había dejado de acuñarlas. No obstante, la mayoría de las que actualmente se conservan tienen casi siempre una antiestética raja o hendidura que a veces desfigura los grabados: es lo que los numismáticos denominan "marca de banquero", una incisión causada por un golpe de buril y martillo con que los cambistas y "argentarii" calaban la moneda para comprobar que era de plata maciza y no de bronce "forrado" (prueba de que circulaban casi tantas de las "buenas" como de las "malas"). Por lo demás, casi todas las conservadas aparecen ligeramente recortadas en los bordes (sobre todo en la parte superior de la cimera o cresta del casco de Atenea), para esquilmarles unos poquitos gramos de plata cuando ello era posible; y otras se han conservado partidas por la mitad (es decir, en forma de artificiales "didracmas").” (Tomado de: http://www.estudiogeneraldehumanidades.es/antiqua/numismatica.html)

En este número vamos a compartirles piezas más recientes del país griego, en las cuales vemos que aquella antigua iconografía que hacía referencia al búho como ave mítica, ha permanecido a lo largo de siglos.

El ejemplar del Banco de Grecia de 1944 por valor de cien mil dracmas, tiene en el reverso una reproducción de las antiguas monedas con la imagen de Atenea al lado izquierdo de la cifra y de la lechuza al lado derecho.

Banco de Grecia, 100.000 dracmas (reverso)

La misma imagen de la lechuza aparece en billetes posteriores como el de 10000 dracmas de 1946, en el que se ubica en el anverso, hacia el centro de la parte superior, ocupando una pequeña parte de la pieza. Pick 175.

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Banco de Grecia, 10000 dracmas, 1946

También en el billete de 10000 dracmas de 1947, la imagen de la antigua moneda que porta la lechuza aparece ubicada en el mismo lugar y es de la misma dimensión. Pick 182.

Banco de Grecia, 10000 dracmas, 1947

Luego de la revaluación acaecida en el país mediterráneo, en 1954 aparece un billete por valor facial de 20 dracmas, el cual tiene por el anverso en la viñeta principal del costado izquierdo, la imagen de Atenea y en el centro de la franja inferior, la imagen de la mítica lechuza. Pick 187.

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Banco de Grecia, 20 dracmas, 1954

También en las monedas contemporáneas, realizadas en metales como plata, cobre, níquel, zinc y latón, ha aparecido la imagen de la antigua lechuza. Un pequeño ejemplo de ellas es la de 2 dracmas de 1973 y la de un euro de 2002. Como podemos ver, la numismática griega es un ejemplo de conservación de las más importantes imágenes que le han dado vida a un imaginario tan importante como el que nos legó la cultura griega.

2 dracmas, 1973

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1 euro, 2002

Memoria Numismática

120 años de la emisión de billetes del Banco Nacional de la República de Colombia 1895 - 2015

El 4 de marzo del año 1895, el Banco Nacional de la República de Colombia sacó a circulación una serie de valores que van desde uno hasta 1000 pesos. Esta serie es quizás la más hermosa de las que el banco emitió a través de su existencia. Fue elaborada por la American Bank Note de Nueva York, a excepción del de 1000 pesos, que estuvo a cargo de Franklin-Lee Bank Note de N.Y.

Esta emisión tiene varias curiosidades que vale la pena destacar: el valor de un peso ha sido llamado popularmente como “Toche” en razón de sus colores. Tiene a Simón Bolívar en el lado derecho y el escudo de armas de la República al costado izquierdo. Los colores son negro y amarillo. Por su parte, tiene un valor que no ha sido usual en la numismática colombiana, el de 25 pesos, el cual, además, está ilustrado con la imagen de un canino, a diferencia de los otros que tienen la figura de un prócer. Y otra importante particularidad es que en esta emisión, por primera vez se presentó el valor de 1000 pesos, el cual era desbordante para la época.

A continuación les compartimos imágenes en muy buen estado, de la serie completa, todos ellos circulados.

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República de Colombia, un peso, 1895

El valor de cinco pesos está ilustrado con el escudo nacional, la imagen de Bolívar y en el centro, una viñeta alegórica al comercio. Serie A, seis y siete dígitos.

República de Colombia, cinco pesos, 1895

El de diez pesos tiene a Simón Bolívar en el centro, el escudo nacional a la derecha y una imponente viñeta con la imagen de una mujer que hace alusión a la libertad conquistada y la institucionalización de la República. Serie A, seis dígitos. Colores amarillo y negro.

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República de Colombia, diez pesos, 1895

El de veinticinco pesos tiene una viñeta alegórica de la libertad al lado derecho, y a la izquierda, la imagen de un hermoso perro. Serie 1A. Cinco y seis dígitos.

República de Colombia, veinticinco pesos, 1895

El de cincuenta pesos tiene una viñeta alegórica de la manufactura a la derecha, el escudo nacional en el centro y a la izquierda una imagen de Simón Bolívar. Serie A, seis dígitos. Colores negro, verde y amarillo.

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República de Colombia, cincuenta pesos, 1895

El diseño del valor de cien pesos es extraordinario, además de las tradicionales imágenes de Bolívar y el escudo nacional, sobresale una viñeta central con la imagen del dios Baco niño. Serie A, seis dígitos. Colores múltiples.

República de Colombia, cien pesos, 1895

Y finalmente, tenemos el billete de 1000 pesos, en el que se suprime la imagen de un prócer y se cambia por la de una mujer con el torso semidesnudo observando el horizonte. Cuatro dígitos. Este billete fue anulado, como puede verse.

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República de Colombia, mil pesos, 1895

Agradecimiento

El señor Danilo Parra nos ha hecho llegar las siguientes palabras de agradecimiento con motivo de la publicación en diciembre pasado, de su

libro “Compendio Histórico del Papel Moneda en Colombia”. A continuación las compartimos:

El 5 de diciembre de 2014 y tras 7 años de arduo trabajo y serio compromiso, se llevó a cabo el lanzamiento de la obra COMPENDIO HSTORICO DEL PAPEL MONEDA EN

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COLOMBIA, la cual hasta dicho momento no había sido puesta en conocimiento de persona alguna.

Agradezco al Museo Nacional de Colombia quien me abrió sus puertas como uno de sus miembros, Museo Casa de Moneda del Banco de la República, Museo de Artes Gráficas, Archivo Histórico Nacional, Biblioteca Nacional, Presidencia de la República, Archivo Histórico de Bogotá, Archivo Histórico de Medellín y cada uno de mis amigos coleccionistas residentes dentro y fuera de nuestro país, por la confianza y colaboración depositada en mí desde el inicio del trabajo hasta su culminación cuando adquirieron uno o varios de mis libros contribuyendo al fortalecimiento de la notafilia de nuestro país. También agradezco de corazón todos los mensajes de apoyo y elogios recibidos por muchos de ustedes que me hicieron llegar de forma escrita o verbal, de los cuales a continuación relaciono algunos de ellos:

1. Al ing. Jorge Ojalvo, por su tarjeta y colaboración económica aportada el 6 de diciembre como un gesto de agradecimiento por el lanzamiento de la obra.

2. A don Bernardo Gonzales White por tan elogiosas palabras.

Estimado Danilo:

No encuentro un adjetivo preciso para dar a tu obra. Requiero de varios: ¡Espectacular!, ¡Soberbia!, ¡Maravillosa!. Inicie su detallada lectura a las once de la mañana y a las 7 de la noche llegué a la página en que expresas tu agradecimiento a Dios. ¡Que deleite, Danilo! Contenido excepcional, fotografías excelentes, diagramación sobria y agradable, textos precisos, valoraciones justas. Lujosa edición. Nos presentas un documento único, resultado de largos años de seria investigación, de amplias consultas y la difícil adquisición del invaluable material fotográfico.

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Brindas a la historia numismática colombiana y a los coleccionistas e investigadores una obra, repito: ¡excepcional!, ¡Soberbia!, ¡maravillosa! ¡DEJAS ORGULLOSA HUELLA! Gracias Danilo, ¡salud! Estrecho abrazo, Bernardo.

3. A mi gran amigo José Arcelio Gómez, por su aporte de sabiduría, conocimientos y experiencia. Por su acompañamiento en la consecución de información e imágenes, por sus consejos, por su aporte desinteresado en la publicación de información al público por medio de su boletín digital, leído masivamente. Por su mensaje de agradecimiento y porque usted es un verdadero amigo. Muchas gracias.

“ME ADIERO A TODAS LAS MANIFESTCIONES, DE APLAUSOS Y AGRADECIMIENTOS AL Sr. PARRA POR TAN SOBERBIA, GRANDIOSA Y ESPECTACULAR OBRA SOBRE EL ACONTECER NOTAFILICO DE ESTA GRAN COLOMBIA. Recuerdos y agradecimientos perennes por toda la vida. Saludos JOSE ARCELIO”.

4. Mil agradecimientos a la revista credencial y a la Dra. Marta Ayerbe por su acertado aporte a la cultura de nuestro país con la publicación en sus páginas del mes de febrero de una nota sobre el contenido del libro para que todos sus masivos lectores tuvieran conocimiento de la existencia de esta publicación dedicada a la notafilia de Colombia.

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5. Al Dr. Jorge Emilio Restrepo, quien desde hace varios años fue quien me impulso con sus palabras para lograr el objetivo final, fue la persona que periódicamente publicaba los meses restantes para el lanzamiento del libro como medio de presión para que el objetivo no quedara en el camino. Muchas gracias Dr. Restrepo.

6. Muchas gracias al Dr. Ignacio Alberto Henao que con tanta experiencia y sabiduría en el tema notafílico fue mi guía y ejemplo para lograr el objetivo

7. Al Dr. Raúl Jiménez, de quien en cada visita que hago a su casa me baño en ideas, del mar de conocimientos que por años ha resguardado su prodigioso cerebro. Que Dios lo cuide por muchos años más.

8. A nuestro incansable y dinámico investigador Manuel Arango quien con sus agotadoras jornadas dentro de los archivos logro poner en el libro gran cantidad de imágenes hasta ese momento desconocidas.

9. A Jorge Becerra por sus acertados comentarios en su revista numismática sobre la publicación del libro.

10. A mi editor del prólogo, Gabriel Cortázar, y a quien presto su ejemplar trabajo en la toma de muchas de las fotografías, Oscar Monsalve.

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11. A Alejandro Brill por la colaboración prestada para el evento del lanzamiento, como propietario de MONETARIO y su desprendimiento económico para la adquisición de un libro con costo superior.

12. A don Antonio Pedraza por sus elocuentes palabras de presentación y aportes de conocimientos en el desarrollo de la obra.

13 . A Julián Cuartas porque sin dudar adquirió uno de los libros con costo superior y me recibió en su casa depositando en mi toda su colección para la toma de imágenes.

14 . A Jorge Enrique Arbeláez porque desde el inicio aporto fotocopias de toda su colección para el estudio de cada uno de los billetes y bancos.

15 . A Gregorio Toulemonde porque a pesar que es totalmente numismático compro varios libros para sus regalos de navidad con el fin de apoyar el comercio de la obra.

16 . A Harold Vanegas por que puso a mi disposición su tiempo y vehículo para los desplazamientos a diferentes sitios de coleccionistas en Medellín.

17 . A Juan David Fernández y esposa, Ricardo Botero, Franz Banner y esposa, Carlos Vargas, Andrés Cortázar, Waldo Casas, Fernando Barriga, Alberto del Castillo, Javier del Castillo, Alexander Montaña, Alfonso Ujueta, Alfredo Benavides, Mauricio Acosta, Amanda Laiseca, Sergio y su padre don William Jaramillo, Jairo Sánchez, Antonio Herrera, Armando Donado, Efrén Serrano, Fernando Charry, Gabriel Borrajo, Javier Arroyave, Oscar Monsalve, Edder Jiménez, Yezid Casallas, Tomás Uribe, Rodolfo Villegas, Reverendo padre Gabriel Mesa y a todas aquellas personas que relacioné dentro de las primeras páginas del libro.

18 . A don David, propietario de la editorial DIXONEX S. A., porque cuando vio la calidad del proyecto, bajó sus costos al máximo para hacer posible y viable la ejecución de la obra e impartió instrucciones para que saliera un producto totalmente de lujo, tal como se logró.

Sus pedidos dentro y fuera del país los podrán hacer por medio de [email protected] o Cel. 57 (313) 2959627.

José A. Gómez. E-mail: [email protected]

Teléfono móvil: (571) 312 3915951