Caracterología y comportamiento rural

El presente estudio sobre el carácter del campesino, al aumentar el conocimiento de la acción

del factor humano en el cambio social, puede contribuir a analizar mejor las alternativas

referentes a la población rural.

Brinda una serie de datos científicos sobre los valores e impulsos arraigados

profundamente en el campesino, que son los que determinan en buena parte su respuesta

a las nuevas condiciones, exigencias y oportunidades.

Un conocimiento minucioso de la estructura de carácter de los distintos sectores de la

población rural permite predecir los efectos probables que tendrán en los campesinos los

programas educativos y los proyectos económicos que se trazan para ellos.

Las interrelaciones e interacciones entre las actitudes emocionales arraigadas en el

carácter y los factores socioeconómicos, en particular los concernientes al modo de

producción, son esenciales para definir y comprender el carácter social.

El carácter social se describe la forma en que es estructurada la energía humana a fin de

motivar al individuo en su trabajo y su relación social. La estructura del carácter puede

limitar también las posibilidades de adaptación a nuevas condiciones culturales y

socioeconómicas.

El campesino

Llamaremos campesinos en este estudio a aquellos vecinos de un pueblo cuya ocupación

principal es la agricultura, aunque también puedan trabajar como alfareros o pescadores.

El sistema de producción del campesino es altamente individualista.

No cuenta ni con el capital ni con la tecnología del agricultor moderno.

Trabaja solo o con su familia y utiliza aperos tan rudimentarios como el azadón y el arado.

Depende económica, cultural y políticamente de la sociedad urbana.

Está sujeto al gobierno de la ciudad o de su estado, que recauda los impuestos.

El campesino legalmente es propietario de su tierra y únicamente depende de la

naturaleza y del mercado.

El campesino puede aprender nuevas técnicas debe cooperar con los servicios auxiliares,

experimentar con semillas hibridas y nuevos métodos y trabajar en coordinación con los

demás.

El agricultor en la sociedad industrial debe estar abierto a las nuevas ideas, ser

cooperativo en cierta medida y capaz de planear y de invertir para el futuro.

Con las nuevas técnicas nacen nuevos valores que empujan hacia el consumo máximo, la

subordinación del hombre a los requerimientos de la máquina y el lucro, la enajenación, la

destrucción de la cultura campesina tradicional.

Con frecuencia abandona el campo con la ilusión de que estando en la ciudad podrán

participar de la vida esplendorosa, únicamente para encontrarse con que sus condiciones

de vida no mejoran y que en cambio se ve obligado a llevar una existencia de paria.

Lo que podría mejorar sus oportunidades en la ciudad es contar con instrucción mejor en

el pueblo y recibir cursos de adiestramiento industrial.

El concepto dinámico del carácter

Desde el punto de vista psicoanalista un rasgo de carácter es una parte cargada de

energía del sistema de carácter que puede ser comprendido completamente solo si se

comprende todo el sistema. Los rasgos de carácter son la raíz de los rasgos de la

conducta y un rasgo de carácter puede manifestarse en uno o más rasgos de conducta

diferentes.

La conducta es una adaptación a las circunstancias reales cambia con relativa facilidad

cuando las circunstancias hacen más aconsejable otro tipo de conducta.

Ciertos rasgos de conducta a saber la terquedad, el afán por el orden y la parsimonia, con

muchos rasgos de frecuencia se encontraban en un síndrome de rasgos.

Si una persona es pobre su conducta puede ser acumulativa o mezquina es decir muestra

una gran renuencia a hacer más gastos que los necesarios.

Si situación económica mejorara modificara su conducta y ya no insistiría en gastar solo en

lo necesario. A tal persona la llamamos parsimosa con una conducta frugal.

La avaricia no se aprende se encuentra en personas para las cuales nunca fue adaptativa

y nunca la aprendieron, el avaro se comporta de acuerdo con el principio acumulativo,

cuando el avaro se comparta fiel a su patrón experimenta una intensa satisfacción que a

veces puede ser observada en su complacida expresión facial, cualquier intento de

cambiar su patrón de conducta se topa con grandes dificultades.

En efecto tosas las pasiones irracionales del hombre de las cuales la historia es un triste

registro no son adaptativas sino incluso dañinas.

El rasgo de conducta es una respuesta adaptativa a una situación social dada y en esencia

es resultado del aprendizaje.

Los rasgos de carácter son parte de un sistema dinámico el sistema de carácter.

El sistema de carácter es la forma relativamente permanente en que la energía humana se

estructura en el proceso del relacionarse con los demás y de asimilar la naturaleza.

El carácter en sentido dinámico se convierte en el sustituto del instinto. (carácter anal)

El carácter social

El concepto de carácter social se basa en la premisa de que la energía del individuo no solo

está estructurada en términos del concepto dinámico del carácter, de Freud si no que hay una

estructura de carácter común a la mayoría de los miembros de los grupos o clases dentro de

una sociedad dada.

Es una matriz de carácter un síndrome de rasgos de carácter que se ha desarrollado como

una adaptación a las condiciones económicas sociales y culturales comunes a ese grupo.

Explica como la energía psíquica en general se transforma en la forma especifica de energía

psíquica en general se transforma en la forma especifica de energía psíquica que toda

sociedad necesita emplear para funciona.

Este proceso de trasformación de la energía psíquica general en energía psicosocial

específica es mediada por el carácter social.

La formación del carácter social esta medida por la influencia de la cultura total.

El bienestar máximo se logra si la persona se concierte en lo que potencialmente es.

El carácter se forma en los primeros años la estructura normalmente es lo bastante flexible

para que los cambios ocurran en un periodo posterior. Así la estructura de carácter adquirida

en la infancia constantemente es reforzada en la vida posterior.

El método

La investigación social se ha limitado a métodos que producen datos de conducta como

las opiniones y las actitudes conscientes

Una opinión en sí misma no es más que la aceptación de un patrón de pensamiento

compartido por la sociedad en general o por un grupo en particular como en caso de los

trabajadores.

La interpretación psicoanalítica es una arte. El factor más importante para asegurar la

exactitud de la interpretación y luego de los resultados de toda la investigación que

descansa en datos interpretativos.

La más obvia dificultas del método interpretativo es que muchas respuestas corresponden

a los patrones culturales.

Carácter y variables culturales y socioeconómicas

Necesitamos estudiar dos asuntos principales. El primero es ver si pruebas de que un carácter

adaptable tiene más éxito y son más prosperas que aquellos que no las tienen. El segundo

asunto es si el modo de producción es un factor decisivo para la formación del carácter

adaptable.

El carácter y el modo de producción

Los ejidatarios productivo acumulativos están alertas a las formas de aumentar al máximo

las ganancias materiales de su trabajo.

El campesino productivo acumulativo puede también complementar los ingresos abriendo

una tienda cuando ha reunido suficiente capital.

La diferencia más decisiva entre el ejidatario receptivo y el acumulativo está en sus modos

de agricultura, el tipo de cosechas que siembran y las relaciones sociales.

El ejidatario acumulativo diente vergüenza cuando no está trabajando y prefiere un trabajo

que le exija más especialmente si también le va a dar más ganancias.

Aquellos que plantan solamente caña son generalmente hombres improductivos

receptivos, sumisos y orientados a la madre.

El no ejidatario

Es más probable que el no ejidatario se vuelva dependiente de uno de los terratenientes

más ricos o de una mujer que lo mantenga.

La orientación acumulativa es más critica para la prosperidad de los no ejidatarios.

Clase y carácter.

El factor económico es la determinante más importante del estatus socioeconómico y el

ser miembro de la clase ejidataria generalmente es señal de una relativa riqueza en el

pueblo.

La relativa riqueza dentro de la clase no ejidataria y ejidataria depende del carácter y que

el carácter a veces lleva a un cambio en la posición socioeconómica.

Los pocos ejidatarios en la clase más baja son hombres acumulativo productivos o

productivos explotativos que han aprovechado las nuevas oportunidades de acumular

capital.

El carácter de las esposas esta también relacionado con la clase socioeconómica, aunque

la mayoría de las esposas son acumulativas el porcentaje de esposas acumulativas en las

dos clases altas es mayor que el de la clase más baja.

La mayoría de esposas receptivas se encuentran en la clase baja.

Los hombres receptivos en la clase alta deben su posición a las esposas que se encargan

de una tienda o que prestan dinero con intereses.

Carácter y educación.

Leer y escribir no son importantes para el trabajo

A la escuela asisten hijos de los campesinos más ricos que ven la educación como una

calzada para que sus hijos dejen la aldea y se capaciten para el trabajo no agrícola.

Los aldeanos prefieren educar a los niños en casa.

Carácter y actividades religiosas y culturales.

Los aldeanos más productivos buscan el poco estimulo cultural. La productividad mide la

respuesta a esos estímulos.

Hay una correlación entre ir a misa y la productividad.

La religión cumple una función distinta para las mujeres y los hombres.

Es muy probable que el campesino más productivo también busque un significado en la

vida el cual encuentra en las enseñanzas de la Iglesia.

El sexo y el carácter

Los resultados muestran que el general los hombres más que las mujeres son dominantes

receptivos con tendencias receptivas; tipo narcisista de 40% a 27%; tradicional de 64% a

49%; democrático de 45% a 30%. También tienden a ser más indulgentes y a manifestar las

tendencias sádicas algo más que las mujeres.

La mayoría de los aldeanos dicen que las mujeres no deberían tener los mismos derechos

de los hombres.

El narcisismo característico del aldeano implica un cierto aislamiento y autoprotección.

Los hombres acumulativos tienden a ser más producticos que las mujeres acumulativas.

En los hombres la orientación acumulativa es afín a la productividad.

Las mujeres con tendencias improductivas acumulativas combinadas con la sumisión,

masoquismo y/o rebeldía son más frecuentes que en los hombres.

Los rasgos femeninos más admirados son la abnegación, el sufrir sin quejarse, un feroz

amor maternal, la modestia y la sumisión.

Los hombres productivos son responsables y tradicionales tanto como independientes, los

hombres improductivos son sumisos dependientes y tiene tendencias sadomasoquistas.

Las mujeres productivas son más afectuosas y generosas además de tradicionales.

La relación entre hombres y mujeres

El nivel de productividad es un factor de peso para la elección del compañero y no que sea

el resultado de dos personas vivan juntas.

Los individuos más productivos comparten una actitud responsable más independiente

mientras que es más probable que los improductivos se enamoren.

Las familias dirigidas por hombres producticos tienen dignidad y preocupación por cumplir

con las obligaciones por ser formal y cumplido. Las esposas son sumisas y modestas pero

protectoras y cariñosas.

Hay pocas familias donde las esposas y las esposas sean cariñosos.

El papel patriarcal es diferente al del machismo sádico, el cual generalmente es una

compensación compulsiva de los sentimientos debilidad y dependencia de las mujeres.

Tales hombres dominan a sus esposas por la fuerza.

Las mujeres consideran el acto sexual como algo en que son usadas por el hombre. Existe

una frigidez femenina.

El reto del patriarcado

Entre más alto se encuentre el hombre en cuanto a posición económica más

probabilidades hay de que mantengan las autoridad tradicional del macho.

En cada clase los hombres son carácter receptivo, los dependientes y los fijados a la

madre son lo que tiene más posibilidades de que la esposa los domine.

Muchas familias en México no tienen padre y los hijos son criados solo por mujeres.

Los hombres tratan de reafirmar su masculinidad por la fuerza bruta contra sus esposas

que son apartemente sumisas pero que en realidad se cierran guardado su amor para sus

madres e hijos y son pasivamente rebeldes ante el dominio y de la indiferencia masculina.

Las mujeres masoquistas podrían querer someterse a hombres fuertes y autoritarios.