Capítulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

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    1

    Establecida la relacin entre derechos y liberta

    Estado debe actuar para lograr las libertades positiva

    de evitar , como es propio en

    el

    caso de las libertad

    en el caso de estas ltimas el Estado impone lmites y

    es

    protegerlas, en el caso de las libertades positivas

    es

    adopte polticas para hacer efectiva su realizacin

    78

    E

    lticas pblicas deben garantizar el acceso a los biene

    las condiciones que propician la vulnerabilidad, pue

    nar

    los

    medios para equiparar

    las

    oportunidades y po

    de las personas para que puedan ejercer en forma efe

    a complejidad y magnitud del problema a en

    superar las barreras de la pobreza y la exclusin, sign

    alcance y requieren polticas integrales que orienten l

    doles las guas de accin en escenarios de corto, medi

    forma que haya continuidad en el alcance de sus pro

    para responder a las dinmicas sociales.

    El acierto y sostenibilidad de las polticas pbli

    la participacin y apropiacin de las mismas

    por l

    y la ciudadana en general, concertando polticas e

    apuesten a objetivos comunes y a poblaciones espec

    en forma conjunta se logren eliminar las barreras q

    situaciones desfavorables en las que

    se

    encuentran la

    e

    esta forma

    se

    contribuye a superar la visin de la

    como problemas de orden individual y se trasciende

    sal e integral del problema enraizado en el orden so

    dijo, expresa un importante grado de ineficiencia so

    La identificacin de la pobreza, su diferenciaci

    cin o situacin al igual que la identificacin de los

    concentra, permiten un mejor diseo de polticas y

    claramente sus alcances en

    el

    corto, median o y largo

    78 P.

    Dieterlen lo ejemplifica con

    la libertad econmic

    forma

    importante

    a aumentar

    la

    desigualdad,

    pues

    la

    no parten de condiciones iguales razn

    por

    la cual e

    ciones es desigual. Ver Dieterlen, P.

    2003).

    p. cit.

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    ,1 :

    ) .

    La

    poJlica social en clave de derechos

    1. De las necesidades a

    los

    programas

    una mirada crtica

    La reflexin conceptual sobre el problema de la pobreza es de la mayor

    importancia

    por

    sus implicaciones

    en

    materia de polticas para enfrentarlo.

    La visin de las personas como sujetos de derechos valoriza las polticas p

    blicas como referente de la intervencin social, condu cente a restablecerlos y

    garantizarlos,

    por

    lo cual las p o l t i c ~ deben ser comprehensivas e integrales

    dada

    la

    indivisibilidad e interdependencia de los derechos.

    No ocurre lo m smo cuando se considera a personas como sujetos

    de

    necesidades, pues en esta visin prevalecen los programas de asistencia social

    ausentes de polticas integrales como referente, por c uanto asum en la pobre

    . za como un problema de carencias individuales.

    Una de las consecuencias importantes de esta visin tradicional

    es

    que

    la poltica econmica

    se

    divorcia de

    la

    poltica social y esta ltima pone

    el

    nfasis en

    las

    compensaciones mediante propuestas redistributivas tradicio

    nales, como impuestos y subsidios, que se reducen, en

    el

    mejor de los casos,

    a transferir ingresos, bienes y servicios entre los grupos s.;ciales, pero sin

    , ('tocar los factores estructurales e intergeneracionales de la reproduccin de

    : ~ \ ' ; ~ E ~ ~ r e . z a ; a travs de polticas integrales que logren construir autonoma

    . ::\en

    el

    ejercicio de los derechos. Esta visin conduce a poner el acento en

    . programas sociales que faciliten el acceso de los ms pobres a los servicios

    ;>

    considerados vitales, principa lmente a travs de subsidios a la deman da,

    re-

    I .

    .

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    apoltica social en clave de derechos

    ejecucin y control

    se

    dificultan ms que si los esfuerzos se canalizan a travs

    de la oferta pblica

    82

    Ello se puede

    ilumar

    con

    e

    caso de

    la

    educacin: la calidad

    de las

    infra

    estructuras sociales, la calidad de recurso humano responsable, los conte ni

    dos y pedagogas curriculares,

    e

    aprovechamiento de

    los

    espacios escolares

    como escenarios de convivencia,

    e

    componente de alimentacin con

    los

    requerimientos nutricionales apropiados y

    e

    uso adecuado de tiempo libre,

    son todos factores indispensables para hacer de la escuela

    un

    escenario no

    solo de enseanza sino tambin de aprendizaje y construccin de ciudada

    na. El alcance de estos objetivos se facilita ms si

    e

    Estado asume

    el

    lideraz

    go en la prestacin de servicio que si

    lo

    deja a la iniciativa privada, que por

    su naturaleza siempre busca u na rentabilidad econmica, lo que conduce en

    algunos casos a subordinar la rentabilidad sociaL

    A ello hay que agregar que este tipo de programas, basados en subsidios

    a la demanda, no con tribuyen al fortalecimiento de la instin.ci9nalidad, a su

    " intervencin articulada y coo rdinada en busca de objetivos comunes, sino

    , que fomenta la sectorialidad y la dispersin de acciones, muchas veces con

    tradictorias po r la disparidad de criterios y metodologas de intervencin.

    Por otra parte, e enfoque de carencias materiales conduce a una aso

    ciacin inmediata con e ingreso, y de ah la preferencia por los programas

    de

    transferencia de ingresos, que si bien alivian la situacin de pobreza no se

    arraigan en

    la

    institucionalidad,

    no

    garantizan la recurrencia de

    los

    recursos

    y persisten en la mirada de las personas como sujetos individuales de nece-

    / sidades. Esto conduce a pone r

    e

    nfasis no en polticas sino en programas

    para aliviar la pobreza, mediante e acceso a bienes y servicios considerados

    como fundamentales. Estas consecuencias son puestas de presente por Ru

    , ggeri, as:

    El enfoque del ingreso incluye por lo general

    los

    recursos privados y

    omite el ingreso social bienes

    que se

    proveen pblicamente escuelas,

    clnicas, medio ambiente, etc.).

    Esto

    puede conducir a un desvo im-

    plfeito en

    la

    escogencia de las polticas pblicas a avor de

    la

    generacin

    62 Estas crticas aplican bien al programa "Familias en

    Acci6n ;

    si bien los com-

    ponentes de alimentaci6n, salud y educacin

    son

    pertinentes y representan un

    aporte importante a

    las

    personas

    en

    situaci6n de pobreza o desplazamiento,

    el

    programa

    est

    expuesto a los riesgos e insufici encias sealadas, pues no

    responde a una poltica pblica integral que ~ o r d e

    105

    diferentes factores que

    propician

    la

    pobreza y

    la

    vulnerabilidad.

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    Capllu/o

    11 as

    polt1icas pblicas

    del ingreso

    privado

    as como en contra de la

    provi

    cos

    y

    una desviacin

    en la

    identificacin

    de

    los

    p

    de

    focalizacin

    hacia aquellos

    que

    carecen de ingr

    2 De los derechos a

    l s

    polticas:

    un camino ms prspero

    Una de las lecciones importantes de

    las

    crti

    ochenta y noventa fue e reexamen de las relacione

    nmico y reduccin de la pobreza y la desigualdad

    cimiento casi generalizado de la relacin

    mutua

    ent

    mico y

    e

    desarrollo social, e incluso

    la

    evidencia e

    inversin social apalanca

    e

    crecimiento econmico

    ye

    a su sostenibilidad y se aporta

    al

    desarrollo con e

    la

    dicotoma entre

    lo

    econmico y

    lo

    social

    le

    abre

    pblicas, en particular a

    las

    polticas de inclusin

    imperativas en

    e

    deber de restablecer y garantizar l

    les y

    en e

    propsito de superar la situacin de pobr

    Esta visin hoyes compartida incluso p or org

    de larga tradicin ortodoxa, como

    e

    Banco Mun

    explcitamente este cambio de concepcin. En efec

    Banco Mundial Reduccin

    de

    la

    pobreza

    y crecimien

    culos viciosos, establece relaciones de doble va en

    za y destaca la importancia no solo de las poltica

    tambin de las polticas sociales. Reconoce que n

    que considera importante tambin e tipo de crec

    al examen de

    la

    composicin sectorial, la tasa de u

    obra, la educacin y la formacin de recursos hum

    una infraestructura adecuada, en tanto todos estos

    sobre e crecimiento y sobre la reduccin de la po

    63

    Ruggeri, c ; Saith,

    R

    y Stewart,

    F

    (2003), Does it m

    the definition of poverty? A comparison of four app

    umber

    107.

    Oxford: Queen Elizabeth House, Uni

    84

    Perry, G, et l. (2006).

    Reduccin

    de

    la pobreza y

    sos y crculos virtuosos

    Resumen

    ejecutivo.

    Washi

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    ;

    ,

    "

    o:

    La pol 1ica social

    en cl ve de

    derechos

    i ~ C Ms an, establece que la pobreza persistente en Amrica Latina limita las

    posibilidades de crecimiento y genera crculos viciosos de difCil solucin

    8

    .

    ,

    Como

    bien lo seala G. Perry, el crecimiento es necesario para

    el

    desa

    rrollo, pero este tiene

    un

    alcance mayor: Uno de los objetivos bsicos del

    . d e s ~ r r o l l o es lograr que ningn ciudadano viva en condiciones de indigen

    cia. La pobreza es

    un

    concepto multifactico: se refiere tanto a la carencia

    de un ingreso monetario suficiente para adquirir

    una

    canasta de consumos

    esenciales, corrio

    al

    acceso insuficiente a servicios bsicos (agua potable, sa

    lud, educacin, energa), la falta de seguridad fsica y econmica y la margi

    nacin social y poltica. El crecimiento econmico facilita la superacin de

    algunos de estos aspectos.

    En

    particular, los estudios disponibles demuestran

    que el crecimiento econmico contribuye por lo general a la reduccin de la

    pobreza de ingresos y que son muy pocos los casos en que se logra reducir la

    pobreza sin crecimien to econmico"86. '

    El avance no, es solo conceptual sino poltico. Ya no se trata de seguir

    discutiendo si es primero

    el

    crecimiento o la distribucin, pues no hay un

    divorcio ent re lo econ mico y ,lo social. Por

    el

    contrario, existe una fuer

    te interrelacin: la distribucin inicial condiciona

    el

    crecimiento y este re

    quiere de polticas distributivas para tener efectos sobre la desigualdad. La

    eleccin colectiva del marco econmico no puede pasar

    por

    alto sus efectos

    redistributivos y de bienestar, y la eleccin de lo social

    no pUf:de

    descuidar

    el componente de eficiencia, estabilidad econmica y sos(enibilidad

    37

    Se

    trata entonces de tener en cuenta los objetivos y efectos de

    las

    polticas eco

    nmicas y sociales, tanto sobre el

    crecimiento como sobre

    la

    reduccin de

    la pobreza.

    Si no hay coherencia y consistencia entre ellas se corre el riesgo de que

    los esfuerzos en

    un

    frente sean anulados por el otro y no logren los efectos

    esperados. Pinsese en los nocivos efectos de

    una

    drstica poltica monetaria

    ..

    ' ..

    "

    85 Esta

    tesis ha sido

    formulada desde

    tiempo atrs.

    Ver en especial: Corredor, C

    (2004).

    p. cit.

    86

    Perry, G. (2005).p. cit., p. 56.

    87

    Corredor, C

    (2000b). El

    componente

    social

    delas

    crisis

    econmicas. En

    Re-

    vista Latinoamericana de Polrlica Social, No. 3, p.

    63. Buenos

    Aires: Hamo

    Sapiens Ediciones.

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    Cap/lulo 11 Las polfticas pblicas

    sobre las variables reales de la economa;

    por

    ejem

    de inters sobre la generacin de emple0

    88

    .

    Pero a pesar de estas importantes lecciones y d

    enfoque de derechos, la mayora de las polticas pa

    la exclusin

    an

    siguen permeadas

    por

    la visin de

    de necesidades y,

    por

    la misma razn, los program

    fundamentalmente de atencin a carencias puntua

    vs

    de subsidios a la demanda a las personas o a la

    modificar el entorno de las comunidades en situa

    nan estando divorciados de polticas de inclusin

    yan autonoma en el ejercicio de los derechos.

    Ello se expresa en la prioridad que se le sigu

    cimien to y al balance macro econmi co y fiscal, co

    atencin de los problemas sociales

    89

    . Es as como

    cin

    de la riqueza, persisten

    las

    restricciones a las fu

    ciendo la ocupacin precaria, informal y temporal,

    financieros sigue siendo una barrera para los ms p

    Lo anterior

    pone

    en entredicho la legitimidad

    tringe la gobernabilidad pues

    mina

    la confianza y

    dadanos, aumenta el resentimiento, la segmentaci

    an ms la democracia y conduce al incumplimie

    de las obligaciones constitucionales, en especial en

    su "obligacin de prestaciones" en materia de der

    que, como ya

    se

    argument, co mportan la exigibil

    La poltica social debe entonces estar al servic

    ello,

    no

    puede ser subsidiaria de la poltica econrri

    Y

    otra deben tener en consideracin los objetivos

    88 Centro de

    Investigaciones

    para

    el Desarrollo -CID

    croeconomfa. Informe de coyuntura.

    Bogot: Faculta

    Universidad Naciomil de

    Colombia. Este estudio

    par

    la

    Repblica

    demuestra que las

    polrticas

    fiscal y mo

    responsables del aumento

    de

    la pobreza ydel desem

    desde 1997.

    8 Esta situacin ha

    sido

    reiterada recientemente

    por

    la

    Repblica

    al encontrar que

    las

    principales inversion

    do las

    entidades pblicas que tienen

    una gran

    resp

    inversin

    social, como el

    Banco Agrario,

    el

    Instituto

    el

    Instituto

    Colombiano

    de Bienestar Familiar,

    entre

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    7/23

    , I

    i

    a polftica social en clave de derechos

    social y lo econmico, pues

    las

    polticas macroeconmicas no son neutrales

    y tienen efectos sectoriales y regionales diversos que dependen en buena

    medida de la distribucin inicial de los activos, del ingreso y

    de acceso a los

    recursos pblicos, factores que son determinantes de

    las

    oportunidades y de

    la capacidad

    de

    eleccin.

    Un

    ejemplo muy pertinente en la actualidad son los requerimientos

    sociales en los tratados comerciales. Como bien lo advierte Uprimny: "[

    la sostenibilidad de los procesos de integracin econmica depende en gran

    medida de que estos sean compatibles con la garanta de

    los

    derechos

    socia.-

    les,

    al

    menos por una razn nor mativa y otra poltica. En efecto, no solo ju

    rdicamente

    los

    pactos

    de

    derechos humanos imponen esa obligacin, sino

    que, polticamente, una integracin econmica que debilite la integracin

    ciudadana y la cohesin social carece, en

    el

    mediano y largo plazo, de los

    respaldos sociales y polticos que la hagan sostenible"90. Para ilustrar

    lo

    an

    terior alude a la experiencia de la Unin Europea, que con

    el

    fin de fortale

    cer la cohesin econmica y social

    ha

    desarrollado instrumentos jurdicos,

    como

    e

    Tratado de Maastricht

    (1992), el

    cual seal "[ que

    la

    cohesin

    social y econmica era un elemento indispensable de la unin monetaria y

    econmica, por lo que

    el

    Consejo Europeo defini en

    1997

    a

    la

    cohesin

    social, entendida como la disminucin de

    las

    disparidades y brechas sociales,

    como una de

    las

    necesidades prioritarias de Euro pa'; experiencia en la que

    se

    apoya para concluir que "[ un proceso exitoso de integracin econmica

    requiere una poltica social concomitante, que evite los efectos socialmente

    disgregadores que pueden tener dichos procesos de integracin, cuando se

    reducen a la mera integracin de mercados"91.

    El principio e equid d debe

    ser,

    entonces, un principio orientador de

    las

    polticas pblicas tanto econmicas como sociales, no solo por razones

    ticas y

    de

    justicia social sino tambi n por la sostenibilidad del crecimiento

    y la estabilidad socio econmica y poltica.

    La

    equidad no necesariamente

    engendra prdidas en la eficiencia. Por

    el

    contrario, la concentracin del

    ingreso y de

    la

    riqueza tienen efectos negativos sobre

    el

    crecimiento: no

    permiten e desarrollo del mercado interno, limi tan

    las

    posibilidades y opor-

    ,o

    Uprimny, R (2007). p. cit. Las dificultades de aprobacin del TLC

    en

    el Con

    greso

    de Estados

    Unidos son una muestra clara

    de las

    implicaciones polticas

    cuando no

    se

    atienden

    los

    preceptos establecidos

    en los

    acuerdos internaciona

    les en materia

    de

    derechos sociales.

    91

    Ibd.,

    p

    19.

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    Cap/lulo 11 aspolfticas pblicas

    tunidades para la poblacin en situacin de pobrez

    en la productividad, limitan la competencia y des

    nuevas empresas.

    La

    Cepal ha demostrado cmo los program

    ingreso disponible

    de

    las personas en situacin de

    bienestar, al punto que calcula que e gasto pblico

    representa un 19.4% del ingrem promedio de

    los

    h

    so disponible del quintil ms pobre de

    la

    poblacin

    De

    ah que

    el

    Banco Mundial, en la actualida

    que atiendan

    los

    mbitos econmico y social: "D

    polticas que protejan efectivamente

    los

    derechos

    los

    ciudadanos, que faciliten la creacin de nueva

    trabajo, que conduzcan a una mayor cobertura y ca

    un mayor acceso

    al

    crdito

    y los

    servicios financier

    dad macroeconmica y a un sistema de proteccin

    universal y equitativo que

    el

    actual, contribuirn n

    miento, sino a una menor desigualdad de ingreso"9

    En sntesis, y tal como se argument en e p

    miento

    es

    una condicin necesaria pero no suficien

    za, pues la distribucin es determinante, lo cual po

    mismas de crecimiento. As

    lo

    seala

    el

    informe de

    crecimiento econmico sostenido ayuda a romper

    [oo ]

    pero

    esos

    logros no son automticos. Pueden de

    desigualdad de ingresos y

    los

    pobres no participan a

    miento, un fenmeno detectado en muchos pases

    Por ello las polticas sociales deben abordar lo

    pues son procesos simultneos en e desarrollo h

    apostarle

    al

    desarrollo con equidad y democracia.

    Como bien lo precisa

    C.

    Vallejo: "La pobrez

    mente como un problema

    ele

    justicia

    y

    equidad; e

    _ . .. . . - .

    pierden

    los

    pobres;

    es

    tambin un problema de ef

    cipalmente pierde toda

    la

    sociedad, que

    ve

    reduci

    92

    Ver Cepal (2007). p. cit., pp. 3031.

    93

    Perry,

    G

    (2005). p. cit.,

    p

    59.

    9

    PNUD, DNP, ACCI, PNDH (2003). 10 aos

    de

    des

    bia Bogot:

    Ed

    Alfaomega Colombiana S.A., p 21

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    8/23

    ~ O '

    1.

    1

    a poltica social

    en

    e/ave de derechos

    alcanZar el ptimo social y salir del atraso; Los dos tipos de problemas tienen

    grandes

    costos

    sobre el bienestar y la eficiencia en lo econmico,

    en

    lo social

    y

    enlo

    poltico. El primero (equidad) afecta ms directamente el bienestar

    individual y la calidad de los 'factores';

    el

    segundo (eficiencia) ms directa- .

    mente el bienestar social y la asignacion de dichos factores 95.

    Es importante insistir en la equidad y la eficiencia, pues quienes solo

    miran la segunda establecen

    un

    vnculo automtico entre crecimiento eco

    nmico y desarrollo huma no, lo. que hoy

    se

    pone en tela de juicio por los

    problemas de inequidad y escasa participacin en los beneficios generados

    socialmente. Cepal

    ha

    mostrado con evidencia terica y emprica que la

    inequidad puede crecer con depresin o expansin econmica

    96

    El balance

    fiscal y la estabilida d macroecon mica son medios y no fines. "Las condicio

    nes de desigualdad frenan el crecimiento en las etapas expansivas, hacen ms

    larga la depresi n y ms difcil la recuperacin"97.

    Ya no es sostenible la oposicin tradicional entre crecimiento econ

    .mico y desarrollo social, o la creencia de que

    el

    crecimiento econmico

    resuelve por s solo el problema de la pobreza y de la desigualdad. Las

    polticas pblicas, fundamentlmente las dirigidas a la poblacin en si

    . uacin de mayor vulnerabilidad; generan beneficios a toda la sociedad

    ...... ......

    puesto que contribuyen al desarrollo en la medida en que produ cen efectos

    --

    socialment e deseables. .

    . L. Es

    el caso de la redistribucin del ingreso a favor de los ms pobres, que

    \

    .

    ,'.

    ,apunta a tres

    o ~ j e t i v o s

    nada despreciables:

    u m l ' ~ i n a y o r

    equidad,

    u n : ~ ' a y o r

    ":::

    : (1 .:bienestar y

    u n a ~ ' t 1 a y o r

    eficiencia, en tanto

    se

    potencian las capacidades

    y,

    . '> con ellas,

    el

    aporte a la sociedad.

    .

    . .

    (.\

    .'

    j Por este motivo las polticas de inclusin productiva son cruciales, en

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    9/23

    :

    La

    poltica social

    en

    clave de derechos

    instituciones as como de la capacidad de la gestin pblica exigen

    un

    es

    fuerzo importante para establecer prioridades en el deber constitucional de

    restablecer y garantizar los derechos fundamentales.

    Se trata de la definicin del mnimo vital , del derecho a la subsisten-

    cia , de los bienes de mrito , de las prestaciones esenciales , todas expre-

    siones que apuntan a la necesidad de darle contenido y alcance a

    un

    mnimo

    de derechos que deben ser tutelados de inmediato y contar con polticas que

    garanticen su progresividad, orientada a la universalidad de los mismos. Este

    ha

    sido

    un

    tema permanente en las agendas internacionales y nacionales,

    tanto de las autoridades pblicas como de los acadmicos y la tecnocracia,

    y que se expresa en las polticas y programas, en las diversas formas de me-

    dicin de la pobreza y en el alcance de la fecalizacin como instrumento de

    llegada a las personas que estn en peores situaciones.

    Cualquiera sea

    el

    trmino que

    se

    utilice, lo que s es fundamental es que

    los desarrollos jurdicos de los derechos sociales y los anlisis econmicos

    alimenten los debates que permitan concretar las prestaciones esenciales ,

    y

    el

    contenido de las mismas. De esta forma tambin

    se

    avanza en la defi-

    nicin del alcance de

    las

    obligaciones estatales incorporadas a

    los

    tratados

    ratificados

    por

    los Estados en este campo lOl

    y, por

    consiguiente, se cuenta

    con

    un

    referente para su exigibilidad.

    Los derechos constitutivos del mnimo vital, y que sern desarrollados

    en este trabajo, son: el derecho a la alimentacin y la nutricin el derecho a

    la

    educacin

    el

    derecho

    a

    la

    saludy el

    derecho

    al trabajo

    02

    La salud, la educacin, la alimentacin y nutricin constituyen una

    triada indisoluble si se trata de garantizar un mnimo de dignidad a las

    personas. Por ello claramente se reconocen como bienes de mrito. De

    ah que en toda estrategia de lucha contra la pobreza y la exclusin sean

    101 Uprimny,

    R.

    2007). p. cit.,

    pp.

    44-45.

    10 En el caso del Plan de desarrollo Bogot sin indiferencia. Un compromiso

    social contra

    la

    pobreza y la exclusin (2004-2008) , los diez programas priori

    tarios del

    Eje

    social reflejan la apuesta integral por mo dificar

    las

    condiciones de

    pobreza y exclusin de las diferentes poblaciones y territorios, pero la prioridad

    se le otorg a estos cuatro derechos constitucionales, que por su trascendencia

    bien pueden constituir

    el

    mnimo vital o

    las

    prestaciones esenciales , ya que

    su

    restablecimiento y garanta significan remover los factores que estn

    en

    la

    hase de la situacin de pobreza.

    Estos

    derechos

    se

    analizarn

    en

    detalle

    en

    los

    captulos y IV.

    1

    L

    I

    I

    t

    1

    I

    ,

    Captulo

    11 Las pol/1icas

    pblicas al

    imperativas las polticas tendientes a garantizar su

    calidad

    y

    oportunidad.

    Por su parte, el derecho al trabajo, adems de esta

    cionalmente,

    es

    una fuente de identidad, de sentido d

    nocimiento y por supuesto de generac in de ingresos

    ciudadana

    y,

    por tanto, autonoma en el ejercicio d

    la prioridad del derecho al trabajo para lograrla, adem

    de ingresos dignos contribuye a la sostenibili dad de l

    l derecho a la al;rnentacin y nutricin

    Claramente

    el

    derecho a no padecer hambre

    recho, en los trminos de Sen expuestos anteriorm

    precisa,

    A

    Sen concluye que [ ]

    los

    derechos rela

    hambre peden, por

    lo

    tanto, asumir muchas formas

    de concrecin, reflexin institucional, etc., pero ad

    considerar en este contexto la clase de metaderech

    Esto es particularmente relevante en pases en donde

    del hambre es imposible, pero en donde existen po

    alcanzarn tal objetivo. El dejar de cumplir metadere

    proveer razones legtimas para la revuelta I03.

    Un enfoque de derechos exige ver no solo las l

    tambin

    las

    negativas. Por ello

    el

    derecho a no padec

    prioridad, dada la dramtica situacin de desnutri

    la mayor parte de la poblacin en situacin de pob

    consecuencias en materia de crecimiento y desarroll

    rendimiento escolar y productvidad

    104

    De hecho, la educacin es un instrumento eficaz

    y la pobreza. Est demostrado que la mejor educac

    1 ] Sen A. 2002b).

    p.

    cit., p. 32.

    10< La

    situacin es

    ms

    dramtica para

    la

    poblacin que

    forzado,

    pues al ser

    desalojados

    de sus

    tierras pierden

    tacin y entran en gran riesgo de desnutricin, en es

    y

    las

    personas mayores. Ver Corredor, C (2008b).

    una situacin de extrema vulnerabilidad. Trabajo rea

    t

    ll

    analizo en detalle las intervenciones pblicas

    privado que se deben emprender para dar cumplimi

    de la Corte Constitucional.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    10/23

    i

    a

    poli1ica

    social en clave

    de

    derechos

    efectos sobre la nutricin de sus hijos e hijas y sobre la salud de toda la fami

    lia. As mismo existe evidencia emprica acerca de los efectos negativos del

    \ hambre con relacin al ingreso tardo, al abandono te mprano de la escuela,

    tial menor rendimiento escolar y a los efectos a lo largo de la vida

    105

    . De la misma manera, en,salud son importantes

    las

    implicaciones que

    . tienen

    el

    hambre y la malnutricin sobre la mortalidad infantil y materna en

    el

    deterioro del sistema .inmunolgico y en

    el

    crculo vicioso de transmi

    sin

    intergeneracional,de la pobreza, que es uno de los factores ms difciles

    de combatir y que implica

    un

    enorme esfuerzo de la gente para sobrevivir.

    No se

    puede tener

    una

    comprensin completa del problema del ham

    bre y la malnutricin sin considerar sus vnculos con el desarrollo econ

    mico, social y ambiental: el hambre y la pobreza reducen las capacidades y

    las oportunidades de las personas, reducen la productividad a lo largo de la

    vida, en especial por bajo peso al nacer, por insuficiencia calrica y por la

    carencia de vitaminas y minerales esenciales.

    Hay una relacin clara entre las fuentes del crecimiento y la composi

    cin del PIB c an el estado nutricional de la poblacin, que los megaproyec

    tos para reemplazo de combustibles, la guerra y

    el

    conflicto armado alteran,

    afectando la produccin agrcola y l acceso de las familias a los alimentos.

    Igualmente, los tratados internacionales, que como

    el

    TLC con

    EEUU

    amenazan la ya de por s precaria seguridad alimentaria en Colombia.

    L

    falta de una poltica agropecuaria orientada a la seguridad alimentaria, la

    concentracin de la tierra y su destino improductivo as como la falta de

    infraestructura rural, afectan el derecho que tienen las personas a no padecer

    hambre. Por ello es crucial que se tracen polticas no solo de acceso a los

    alimentos sino tambin para el adecuado abastecimiento de los mismos, lo

    cual

    se

    refiere a precios, calidad y cantidad adecuados.

    En l problema del hambre

    se

    hace particularmente importante dife

    renciar los requerimientos nutricionales en los diferentes grupos poblacio-

    lOS Diversos estudios realizados

    por

    diferentes a u t o r ~ s , e 1 l t i d a d e ~ . : Y . organismos na

    cionales e internacionales,

    dan

    cuenta

    de

    los e f ~ c o s n O c i v s de a

    mal

    nutricin

    durante todo el ciclo de vida. Vase Caray, l. j. y Rodrguez, A. (2005). Co-

    lombia: dilogo pendiente. Documentos

    de

    poltica pblica

    para la

    paz. Bogo

    t: Ediciones ntropos, Planeta Paz; Instituto

    Colombiano

    de B ienestar Familiar

    :-ICBF-

    (2005). Encuesta nacional de

    la

    situacin nutricional en Colombia. Bo

    got:

    Ed.

    ICBF, Profamilia,

    INS,

    Universidad

    de Antioquia, OPS; PNUD, DNP,

    Accin Social

    (2006).

    Hacia una

    Colombia equitativa

    e

    incluyente.

    Informe de

    Colombia.

    Objetivos. de desarrollo

    del milenio 2005.

    Bogot.

    Cap/lulo

    11. Las

    pol/licas pblicas

    nales,

    por

    las graves implicaciones que tiene la falt

    atencin merecen los nios y las nias,

    por

    lo cual

    e

    travs de diferentes modalidades, en especial los res

    suplementos vitamnicos para menores de tres aos

    menores de doce aos, deben ser

    una

    prioridad. Ig

    las mujeres gestantes y lactantes as como las perso

    cin de discapacidad. La atencin especial a estos

    sido puesta de relieve por

    el

    Informe de Colombia s

    La

    carencia de

    alimentos

    durante

    un periodo

    efectos perversos

    tanto para el individuo

    como

    pa

    cala individual el

    bajo consumo

    de

    alimentos tra

    el

    bajo desarrollo cerebral

    los

    niQs rezagos en

    lencia

    de

    enfermedades y

    larga

    duracin

    de l s m

    morbilidad y mortalidad infantil y

    de

    adultos

    m

    de la

    actividad

    sica

    y baja productividad

    (

    ..

    ] L

    da es

    fondamental

    en las primeras etapaS de la

    crecimiento es acelerado

    y toda

    deficiencia

    alim

    irreversibles.

    De ah

    la necesidad de

    poner

    el nfa

    fancia y

    en l s m ~ j e r e s gestantes. Las madres

    con

    alta probabilidad

    de

    tener

    bebs

    de bajo

    peso

    y

    en el desarrollo mental y ftsico

    de

    los

    mismos las

    traducirn en deficiencias

    en la

    capacidad de

    ap

    medades crnicas. Una

    desnutricin generalizad

    nes con

    altas

    tasas de morbilidad lo que genera

    b

    ausentismo laboral una mayor proporcin de ga

    .;v

    en trminos generales una

    foerza productiva

    po

    te

    a

    los mercados mundiales. Por tanto no presta

    a

    una adecuada

    alimentacin

    empeora la

    calida

    dividuos intensifica la pobreza y revierte el de

    social alcanzado

    106

    Es por

    ello que convertir el

    hambre en

    una situ

    tica

    y polticamente es.

    un

    imperativo. El drama de

    consecuencias as lo confirman.

    106 PNUD,

    DNP,

    Accin Social

    (2006). p. cit., p. 37.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    11/23

    : ,,

    a pol lica social

    en

    clave

    de

    derechos

    La

    situacin

    de

    hambre en el

    mundo

    y

    sus

    implicaciones en e mal

    estar de amplios sectores de la poblacin mantiene un lugar importante en

    la agenda

    de los

    organismos internacionales y confirma la pertinencia

    de los

    ODM, que estabiecen e derecho a la alimentacin como uno de ellos por

    su carcter estratgico en la lucha contra

    la

    pobreza. Prcticamente todos

    los objetivos tienen relacin con

    e

    problema de

    la

    seguridad nutricional

    y alimentaria. Pinsese en aquel que plantea la reduccin de la pobreza y

    de

    hambre, en e objetivo de la educacin bsica para todos y todas, en la

    reduccin de

    la

    mortalidad materna e infantil, en la equidad

    de

    gneros, en

    la sostenibilidad ambiental; todos ellos, de una u otra manera, tocan con

    problemas de alimentacin y de nutricin.

    Tanto

    en

    la Cumbre de Alimentacin de 1996 y por supuesto en los

    ODM, claramente se plantea una relacin entre la situacin de hambre,

    de desnutricin, de inseguridad alimentaria y los problemas de pobreza,

    de desarrollo humano y de distribucin del ingreso. De ah que una de las

    metas sea reducir el nmero de personas que la padecen, que se estim en

    800 millones en 1990, a 400 millones en 201S; es decir, una reduccin del

    SO%. Pero desafortunadamente hay un desarrollo muy desigual en el cum

    plimiento de

    esa

    meta. En Amrica Latina y e Caribe hay algunos avances

    con relacin a otras regiones, pero ellos son muy desiguales entre pases}'

    al

    interior

    de los

    mismos.

    Segn

    los

    datos

    de

    la FAO, entre 1990 y 2002, solo siete de

    los

    pases

    en desarrollo han alcanzado

    los

    objetivos de reducir la prevalencia de la

    desnutricin a la mitad. Ellos son: Chile, Cuba, Ecuador, Per, Guyana,

    Ghana y Kuwait. En

    13

    pases

    ha

    aumentado

    la

    prevalencia

    de

    la desnutri

    cin en el mismo periodo, entre ellos Guatemala, Panam y Venezuela.

    En

    los pases de Amrica Latina y el Caribe encontramos que Hait tiene una

    prevalencia superior

    al

    3S%; Bolivia, Nicaragua, Repblica Dominicana,

    Honduras, Panam y Guatemala entre el 20% Y

    el

    3S%; Per, Jamaica,

    Surinam, Colombia, Paraguay,

    El Salvador, Trinidad y Tobago y Venezuela

    una prevalencia entre

    e

    10% Y

    e

    20%; Guyana, Brasil y Mxico entre

    e

    S% y

    e

    10%; Cuba, Chile, Uruguay, Ecuador y Costa Rica entre e 2.S% y

    el S%.

    Se

    aprecian entonces desarrollos muy desiguales en

    e

    avance para

    e

    logro de este objetivo.

    En cuanto a la desnutricin en Colombia, segn datos de la Encuesta

    naciona l de demografa y salud de Pro familia, cuyos result ados se publica

    ron en 200S,

    se

    destaca la grave situacin de

    los

    nios y

    las

    nias menores

    de S aos, rango de edad en e cual las implicaciones de la desnutricin,

    T

    I

    I

    I

    I

    t

    I

    I

    t

    l

    r

    t

    aptulo 11 Las poljiicas pblicas

    al servicio de

    1 5 derechos

    como

    ya

    se dijo, son muy

    graves

    pues pueden ser irreversibles.

    El

    12%

    de los

    nios y las nias menores

    de

    S aos presentaron desnutricin crnica (10%

    moderada y 2% severa). Su prevalencia

    es

    mayor entre 1 y 2 aos

    de

    edad,

    en familias grandes con 6 o ms hijos, entre nios y nias con intervalo

    de

    n c i n ~ j e n t o

    menor a 24 meses, entre aquellos cuyas madres son jvenes

    -entre lS

    y 24

    aos-

    y son muy marcadas las diferencias en

    la

    prevalen

    cia de desnutricin crnica segn la educacin formal de

    los

    padres y las

    madres y

    e

    nivel econmico de

    las

    familias. Estos datos y las correlaciones

    mencionadas indican la complejidad y

    la

    multicausalidad de un problema

    como la desnutricin.

    A su vez, la ltima Encuesta Nacional de la Situacin Nutricional en

    Colombia de ICBpo7 confirma y arroja datos adicionales de inters, entre

    los que cabe destacar:

    En e rango de edad

    de

    O a 4 aos

    la

    prevalencia de desnutr icin crnica

    es

    de 12% y la es nutr icin global de 7%, siendo ms alta en

    el

    sector

    rural, en

    los

    estratos socioeconmicos bajos -niveles 1 y 2

    de

    Sisben- y

    en los nios y nias cuyas madres tienen bajos niveles de educacin.

    Para este rango de edad aument la prevalencia

    de

    anemia de 23.3% en

    1995 a 33.2% en 2005 yen e rango de 5 a

    12

    aos alcanza

    e

    37.6%.

    Esta situacin es particularmente grave en los nios y nias de 12 a 23

    meses, en quienes la prevaleca es de S3.2%. Desafortunadamente la

    prctica de la lactancia materna est an distante de las recomendacio

    nes internacionales: e 2S% de los menores de dos aos y e SO% de los

    menores de tres aos usan bibern. La alimentacin complementaria,

    requerida desde los 6 meses, es muy deficiente. En e nive l de Sisben

    ms del 20% de

    los

    nios y nias entre

    los

    6 y

    23

    meses reciben solo

    entre 1 y 3 comidas diarias y uno de cada cuatro nios y nias no con

    sume carne ni huevo.

    En los

    adultos la delgadez

    es

    ms prevalente entre

    los 18

    y

    los

    22 aos y

    en la poblacin con menor nivel de Sisben. Ms de la tercera parte de

    la

    poblacin tiene deficiencia en

    e

    consumo de protenas, siendo mayor

    e

    dficit en

    e

    rango

    de

    9 a

    18

    aos, periodo

    clave

    del crecimiento. En

    general,

    los

    hbitos alimentarios

    de

    toda la poblacin son bajos en valor

    107 ICBF 2005). p. cit., captulos

    2 3

    4 Y

    5.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    12/23

    La poltica social

    en e/ave

    de derechos

    nutricional.

    De

    ah que el,sobrepeso y la obesidad sean important es en

    la poblacin adulta, y mayor en

    las

    mujeres.

    En el caso de las mujeres gestantes, la quinta parte presenta bajo peso

    para a edad gestacional y el

    30

    exceso de peso, es decir, que una de

    cada dos mujeres tiene malnutricin ya sea

    por

    dficit o exceso. En

    cuanto a la prevalencia de la anemia

    en

    este grupo es del 44.7%, lo cual

    pone en riesgo la vida de la madre y del feto.

    , La preocupante informacin que arroja la encuesta confirma

    la

    per

    tinencia de otorgarle a

    la

    alimentacin y nutricin el carcter de derecho

    fundamental y de considerarlo como el ncleo del mni mo vital y, por ello,

    e informe destaca que sin ese derecho "[

    ..

    no se pueden garantizar los

    dems derechos humanos. La salud, la educacin y la nutr icin se aprecian

    actualmente no solo por su valor intrnseco, sino tambin

    por

    sus efectos

    positivos, directos e in'directos, en e capital humano, la productividad y el

    potencial para la participacin y la interaccin social"lo8.

    l

    derecho

    a

    la educacin

    La apuesta por

    e

    desarrollo con equidad y democracia le otorga un

    pape fundamental a la educacin, en tanto es la puerta de entrada para

    e

    acceso a

    las

    oportunidades y para e desarrollo de las capacidades. El derecho

    a la"educacin significa que to da la poblacin en edad escolar, sin discrimi

    nacin de ninguna naturaleza, pueda tener

    las

    mismas oportunidades para

    acceder

    al

    conocimiento, la cultura,

    la.

    ciencia y

    la

    tecnologa

    Sin duda, uno de los factores de la reproduccin de la pobreza inter

    generacional

    es el

    bajo nivel educativo de los padres

    y

    la poca importancia

    que

    le

    dan a la misma para sus hijos. Las madres que han alcanzado

    un

    mayor nivel educativo tienen

    un

    menor nmero de hijos y las prcticas de

    alimentacin y nutricin son much o mejores que en las madres con niveles

    educativos inferiores.

    El papel del Estado en materia de p o l ~ i ~ pblicas yde prestasin

    . directa de los servicios es crucial para p o s t a r ~ ; J ~ ~ e ~ ( t l 'permanencia,

    el rendimiento escolar y la calidad de la educacin, si se quiere construir

    ~ q u i d a d . De ah la importancia de fortalecer la educacin pblica, la cual

    "[ .. debe entenderse como un camino a la excelencia en los procesos de

    108 Ibfd.,

    p.

    23.

    1-

    r

    Captulo

    11 Las

    polticas pblicas

    l

    servicio de los derechos

    formacin, de tal manera que ellos satisfagan las expectativas de cualquier

    nifio, nifia o joven sin importa r su origen social o econmico. En este sen

    tido, la educacin pblica no puede ser entendida como una educacin de

    mnimos circunscrita a cumplir las exigencias bsicas de disponibilidad,

    ac.

    ceso y permanencia. Ms all de estas condiciones a

    las

    cuales est obligadq ,

    e

    Estado, se plantea la calidad como

    un

    horizonte tico que marca la

    d i f e ~

    renda

    entre una concepcin de la educacin como 'la prestacin eficiente

    un servicio pblico' y una concepcin del proceso educativo como

    la

    plena

    satisfaccin de un derecho fundamental ', plasmado en la Constit ucin Po

    ltica colombiana"\09.

    El Comit de los Derechos Econmicos, Sociales y Culturales

    -DESC

    ha hecho explcita esta orientacin al sefialar que la educacin debe tener

    cuatro caractersticas, las cuales estn interrelacionadas entre s: 1. la dispo-

    nibilidad referida a la existencia de instituciones y programas suficientes; 2.

    la accesibilidad referida a la no discriminacin, la accesibilidad material y la

    accesibilidad econmica;

    3. la aceptabilidad

    referida a la pertinencia, inclui

    dos los mtodos pedaggicos; y 4. la

    adaptabilidad

    referida a la flexibilidad

    para responder a la diversidad cultural y social

    llo

    . ._,

    Las polticas educativas deben tener como preocupacin central resol-l

    ver

    las

    mltiples restricciones que inciden en el acceso y desempefio escolar

    derivadas de una situacin de pobreza, como es la alimentacin y nutricin,

    la disponibilidad de textos y tiles escolares, las facilidades de transporte

    y,

    por supuesto,

    el

    respeto y reconocimiento de los derechos de

    las

    nifias y los

    nios

    por

    parte de la familia y su entorno social. --

    Si bien en e pas se ha avanzado en la cobertura de la educacin prima

    ria an persisten regiones muy atrasadas y la heterogeneidad en la calidad y

    pertinencia de la ensefianza es enorme. En Bogot, la cobertura en

    e

    nivel

    primario prcticamente est cerca de

    1

    y por ello

    es

    urgente poner el

    nfasis en la educacin secundaria y relacin con la tcnica, tecnolgica

    y superior.

    No menos importante es la relacin con la ciencia, la innovacin y la

    tecnologa. De hecho, hoy se ha generalizado la idea de la "economa del

    conocimiento" para sealar e carcter endgeno de ste en los procesos de

    109

    Ver Alcalda

    Mayor de Bogot - Secretara de Educacin Distrital

    (2007). Infor

    me

    del Plan de desarrollo (2004-2007) y (2005). Plan sectorial de educaci6n.

    Bogot una gran escuela.

    Bogot, D.C..

    110

    Ver

    en detalle Uprimny, R.

    (2007).

    p. cil., pp.

    50-53.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    13/23

    l

    .

    '.:

    ro"

    a

    poltica

    social

    en

    clave de derechos

    crecimiento econmico, al punto de considerarse como uno de los factores

    ',,-

    de produccin ms relevantes. Entre

    los

    indicadores del grado de desarrollo

    de un pas siempre

    se

    incluye

    el

    nivel promedio alcanzado en educacin y

    se relaciona con la "intensidad en habilidades" que hoy comporta

    el

    cambio

    tcnico. Este ha venido siendo cada vez ms "[ intensivo en habilidades:

    en otras palabras, la adopcin generalizada de tecnologas nuevas requiere

    niveles educativos cada

    vez

    ms altos de la fuerza de trabajo. Infortuna

    damente, si bien

    los

    pases de Amrica Latina han venido aumentado los

    niveles de escolaridad de

    sus

    trabajadores, lo han hecho en general ms

    lentamente que la mayora

    de

    sus competidores y hoy da, con pocas excep

    ciones, presentan niveles educativos y de cobertura de la educacin secun

    daria y terciaria inferiores a

    lo

    que cabra esperar dado su nivel de ingreso

    por habitante" 111.

    La

    evidencia emprica ha demostrado la progresividad de los gastos en

    educacin, en particular en

    los

    niveles de preescolar y primaria. Dicho gasto

    tiene

    un

    mayor impacto en

    el

    ingreso primario de

    las

    personas en mayor

    pobreza, "pues representa un 40% de las transferencias que recibe el primer

    quintil,

    es

    decir un 7.4% del gasto social total. La relacin es similar en e

    segundo quintil"112.

    En la propuesta de la Cepal de adoptar un "contrato social" para en

    frenta r los desafos de la asignacin de gasto pblico social, se destaca la

    inversin en educacin: "[ disminuir la segregacin y segmentacin es

    colar

    es

    parte, no solo del imperativo de mejorar la calidad de la educacin

    para todos, sino tambin de la estrategia que debe establecerse para abordar

    la fragilidad econmiea, social y poltica de la regin [ ]

    El

    nuevo contrato

    social debe incluir en forma explcita polticas educacionales que enfren ten

    activamente

    e

    problema de

    la

    desigualdad social, mediante acciones afirma

    tivas que compensen

    las

    desventajas de

    los

    estudiantes ms pobres y mejoren

    la calidad de

    los

    procesos de aprendizaje, aminorando la fuerte estratifica

    cin que existe en los sistemas educativos"ll3.

    Las

    polticas deben orientarse

    al

    acceso, pertinencia y permanencia de

    los escolares en e sistema. Para ello resultan convenientes

    las

    polticas de

    gratuidad que eliminen

    los

    costos complementarios, pues por bajos que sean

    111 Perry G. 2005). p. cit., p. 40.

    n

    Cepal 200 7). p. cit.,

    p.

    31.

    113 Ibid., p. 51.

    Cap lulo 11 as polticas pblicas al servicio de los derech

    resultan devados para la poblacin en situacin de pobreza. Los subsid

    de permanencia sujetos

    al

    rendimiento escolar son muy importantes, pue

    que muchas familias vinculan tempranamente al trabajo a los nios y

    nias en razn de la necesidad de fuentes de ingresos. La promoci n de

    bliotecas escolares es de la mayor utilidad para facilitar el acceso a los text

    pues esta es una barrera frecuente para el rendimiento escolar

    1l4

    Un esfuerzo importante, tratndose de poblaciones en extrema pobre

    son

    los

    ?rogramas de educacin extra-edad, dados los niveles de analfabe

    mo absoluto o funcional,

    as

    como

    el

    abandono temprano de la escuela.

    l

    derecho a l s lud

    Este derecho alude directamente a las libertades positivaS, pues no

    trata de la mirada tradicional que pone el n f ~ s i s en la "curacin" de

    enfermedad silla en el derecho a librarse de la enfermedad,'e cual est

    timamente ligado

    al

    ejercicio de d ~ r e ~ h o a la l i ~ e n t c i n y nutricin

    derecho a la educacin.

    La progresividad del gasto en salud ha sido demostrada por Cepa

    la atribuye a la importancia que han adquirido

    los

    servicios con carc

    preventivo orientados a la poblacin en mayor situacin de pobreza, a

    ferencia de

    los

    gastos en servicios hospitalarios que, por los elevados req

    rimientos de inversin en infraestructura, hacen que estos se concentr

    por lo general, en centros de mayor poblacin y que a ellos puedan acce

    quienes tienen cmo financiarlos1l

    5

    Los

    problemas de acceso, equidad y eficiencia estn en la base del ej

    cicio del derecho a la

    s;Uud,

    pues

    la

    forma en

    q ~ e

    se han estructurado

    sistemas de seguridad social adoptados desde la dcada de

    los

    noventa

    puesto

    el

    acento en

    el

    carcter contributivo y

    se

    estructuraron en func

    del vnculo laboral, con lo cual se acenta la regresividad del gasto. Si b

    las restricciones derivadas han llevado a desarrollar iniciativas solidarias y

    114 Varios analistas coincide n en la pertinencia de

    estas

    polticas. Ver, por ejem

    el

    trabajo de la Misin de Ciencia

    y

    Tecnologa del Ministerio de Educac

    Nacional, DNP

    y

    Fonade (1990).

    I

    Tomos; Guill,

    1.

    et l. (2005). Cerra

    brecha

    en

    educaci n

    y

    tecnologa. Serie Desarrollo para todos. Washing

    Banco Mundial; Ocampo,

    J.

    A.

    2001 a),

    p. cil. Como

    se

    ver

    en el

    cap

    111 estas polticas

    y

    programas se han adelantado en Bogot con resulta

    significativos.

    115

    Cepal 2007 ). p. cit.,

    p.

    28.

    T

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    14/23

    .,,1.

    a

    polt1ica social

    en

    clave

    de

    derechos_

    subsidios para poder ampliar la cobertura, no puede decirse que se den avan

    ces significativos

    'en

    ~ a t e r i a de equidad.y eficienci, pues los resultados no

    se corresponden con la creciente destinacin de recursos.y la sostenibilidad

    financiera amenaza en f ~ r m a permanente al sistema.

    La importancia de lit atencin primaria en salud

    APS

    se dehe a que

    contribuye con costos muy inferiores a ampliar el acceso

    a

    los servicios de

    salud y a mejorar la equidad, por cu anto lleva a identificar las barreras a la

    salud de familias y comunidades, requiriendo de la institucionalidad progra-

    . mas que respondan a los riesgos que enfrentan.

    En orden a lo anterior, el Comit de los DESC reconoce como obli

    gaciones bsicas de los Estados parte, las siguientes: 1. garantizar el acceso

    a los centros, bienes y servicios de salud, sin ninguna discriminacin, y en

    especial a los grupos ms vulnerables y velar

    por

    su distribucin equitativa;

    2.

    asegurar el acceso a

    una

    alimentacin esencial mnima y que garantice

    que

    nadie padezca

    hambre; 3. garantizar condiciones sanitarias bsicas;

    4.

    facilitar medicamentos esenCiales; y 5. con base en

    los

    perfiles epidemiolgi

    cos, adoptar estrategias y acciones en salud pblica

    .

    En las actividades de prevencin es incuestionable el papel del Estado

    mediante polticas pblicas, pues estn asociadas a campaas masivas, ya

    sea de vacunaci n o prevencin de acciden tes, de consumo de' sustancias

    psicoactivas o de alcohol, a la int roduccin de hbitos de vida saludable en

    la escuela y las familias, a los requerimientos nutricionales de la poblacin

    segn edad y sexo, y

    en

    fas

    mujeres

    asu

    estado en materia de salud sexual y

    reproductiva, entre otros.

    \

    Las

    polticas' deben orientarse hacia

    la

    universalidad progresiva

    de

    los

    ~ e r v i i o s

    de salud atendiendo la diversidad tnica y de gnero y las necesida

    o-es

    de

    las

    personas segn el ciclo vital. Las polticas no deben tener solo un

    ;'rcteE.. curativo s ino ~ ~ . l E ~ , porlo cual la formacin y capacitacin en

    h b i t o s d ~ vida saludilile debe materializarse en programas especficos. Es

    conveniente promover un sistema de gratuidad para el acceso a los medica

    mentos dirigido a las poblaciones que, por ausencia de recursos, no pueden

    adquirirlos. Por supuesto que se requieren ldli;cntroles:'pertinentes para

    garantizar el aprovechamiento adecuado de los mismos.

    Una mencin especial merece el debate en torno a la seguridad social,

    ms exactamente de la Ley 100 de 1993:

    La

    desigualdad en la distribucin

    l_

    _ __ _ ~ - - - ~ _ _ ~ __

    116 Uprimny, R. (2007). p. cit., pp. 54-56.

    Cap tulo

    11

    Las pol/1icas pblicas al servicio de los derechos

    de los ingresos se reproduce en el sistema de seguridad social, lo que se a-[

    duce en una segmentacin en el acceso a los servicios y en los atributos de:

    los mismos segn la capacidad de financiamiento, de tal suerte

    q{e

    se per-;

    peta la desigualdad. La proteccin social debe equilibrar mecanismos con

    tributivos y solidarios atendiendo la estructura laboral y familiar as como

    la situacin de pobreza o pobreza extrema,

    por

    lo cual

    el

    vnculo laboral

    no puede ser el.mecanismo principal o exclusivo de acceso a la proteccin

    social. Por supuesto que hay que conciliar el bienestar social con la compe

    titividad y sostenibilidad del sistema

    ll7

    El caso de las personas

    m a y o ~ e s

    es particularmente dramtico. En este

    grupo pob lacional la pobreza y la informalidad son situaciones generaliza

    das, los programas de subsidios son muy reducidos tanto en cobertura como

    en monto y las posibilidades de lograr una pensin son extremadamente re

    ducidas. J A. Ocampo estima que en Colombia solo el

    17%

    de la poblacin

    mayor de 60 aos recibe una pensin y la mitad pertenece

    al

    20% ms rico

    de la poblacin 18. Dado el cambio en la pirmide poblacional y la mayor

    esperanza de vida alcanzada en el pas, es el momento de promover inicia

    tivastendientes a disear

    un

    sistema de pensin para esta poblacin, que le

    garantice un mnimo vital y aminore las cargas de las familias, en especial

    de las mujei:es

    I19

    117

    Un anlisis detallado se puede consultar

    en

    Le Bonniec, Y. y Rodrguez, O.

    (2006). Crecimiento equidad

    y

    ciudildan a. Hacia

    un

    nuevo sistema de protec-

    ci6n social.

    Tomo 2. Bogot:

    Ed.

    Alcalda Mayor de Bogot, CID, Universidad

    Nacional de Colombia.

    118 Ocampo,

    J

    A. (2001 a). p. cit., p: 40.

    En

    Colombia, segn el Censo de 2005,

    el 6.3 de la poblacin

    es

    mayor de 65 aos, lo que equivale a 2.612.508

    personas.

    119 Ver

    El

    Tiempo (2008). Pensin un lujo entre los pobres. Marzo 24 de 2008.

    Bogot.

    El

    artculo cita fuentes como la Corporacin Andina de Fomento y un

    estudio recientede Planeta Paz. Destaca el caso ele Chile donde

    se

    adopt, en

    marzo de 2001\ una ley que le asignar mesada pensional a

    las

    personas mayo

    res en

    pobreza, que nunca pudieron hacer aportes o fueron insUficientes.

    Esta

    es una iniciativa importante a considerar.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    15/23

    .1

    a poltrica social

    en

    clave

    de

    derechos

    l

    dere ho l

    tr b jo

    _/ El trabajo no es solamente la principal fueme de ob tencin de ingresos

    sino tambin un medio de reconocimiento, de identidad, sentido de perte

    : nencia y valoracin personal y social. Igualmente, los logros en materia de

    Lnclusi n social solo sern sostenibles si la poltica social integra la inclusin

    productiva como un objetivo explcito, con las estrategias pertinentes para

    su alcance120.

    La Constitucin colombiana, en su artculo 25, e s t a b l e c < ~ que El tra

    bajo es un derecho y una obligacin social y goza, en todas sus modalida

    des, de la especial proteccin del Estado. Toda person a tiene derecho a un

    trabajo en condiciones dignas y justas . Este reconocimiento constitucional

    del derecho

    al

    trabajo responde

    al

    ejercicio efectivo de la ciudadana,

    el

    cual

    pasa por la autonoma en

    el

    dominio de

    las

    titularidades ejercidas a travs

    del intercambio.

    De

    hecho,

    la

    situacin de pobreza y de vulnerabilidad est asociada

    en gran medida a

    la

    ausencia de oportunidades de empleo y de generacin

    de ingresos. Este

    es

    uno de

    los

    grandes retos de

    las

    polticas pblicas orien-

    , tadas a crear las condiciones adecuadas para promover la inversin, para

    crear fuentes de empleo e ingresos, para abrir y diversificar mercados, para

    garantizar reglas claras y estables en los negocios y para promover formas

    de produccin que eviten los monopolios y oligopolios en desmedro de las

    pequeas unidades econmicas.

    Es as como en los pases latinoamericanos que ms avances han tenido

    en reducir la pobreza desde comienzos de la dcada de los aos noventa

    (Chile, Brasil, Ecuador, Mxico y Panam), han sido

    muy

    importantes

    las

    mejoras en

    el

    ingreso laboral por ocupado y las mayores ocupaciones gene

    radas. El llamado " b _ ) . E . ) i ~ I l 1 . o g r f f i f o ~ , referido a la mayor participacin

    de la poblacin en

    ;dadde

    trabajar en

    el

    total de poblacin, es provechoso

    siempre y cuando e."'{istan fuentes de empleo y oportunidades de generacin

    de ingreso.

    120

    La

    importancia de

    la

    inclusin productiva como condicin

    de

    sostenibilidad

    de los

    logros sociales, se desarrolla en forma amplia en el captulo IV

    de

    este

    trabajo.

    En

    dos

    documentos recientes

    he

    argumentado

    esta

    n e c e s i d ~

    y

    pro

    puesto

    polticas

    concretas para

    su

    alcance.

    Ver

    Corredor,

    C. (2008a). Op.

    cit.,

    y (2008b). p.

    cit.

    I

    I

    l

    I

    I

    Cap/rulo 11 as polfticas pblicas al servicio de los derechos

    Desafortunadamente en Amrica Latina, y Colombia no es la excep

    cin,

    las_

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    16/23

    '

    :,- J:

    .

    . ,

    ...

    )

    a

    poli1ica social

    en

    clave de derechos

    mas de proteccin social, en especial en la atencin a la infancia y adultos

    mayores.

    Igualmente difciles son las posibilidades para los jvenes, en especial

    para quienes tienen baja escolaridad derivada de la falta de oportunidades

    y recursos para permanecer en la escuela. En las familias de bajos ingre

    sos los jvenes salen muy tempranamente al mercado laboral, y dados sus

    bajos niveles de educacin y capacitacin se vinculan a trabajos a destajo,

    temporales e informales, reproducindose el crculo perverso de la pobreza

    intergeneracional. . .

    Por ello las polticas de empleo y generacin de ingresos para jvenes

    no pueden estar desligadas de las polticas educativas, de la pertinencia en

    la capacitacin y de

    las

    oportunidades de primer empleo, lo cual tendr

    impactos integrales y sostenibles si se brindan oportunidades a

    los

    padres,

    de tal suerte que puedan prescindir de los escasos ingresos que aportan los

    jvenes en trabajos precarios.

    Como lo seala la Cepal, si bieit en varios pases de.la regin

    e

    aprove

    chamient o de bono demogrfico ha contribuido a avanzar en la reduccin

    de la pobreza, "existeun dficit en los increm entos de los ingresos laborales y

    de las oportunidades de empleo de los ms pobres. Un aspecto que los pases

    :: de la regin deben tener en cuenta

    es

    que las ventajas del bono demogr

    fico acabarn por compensarse y que, para seguir avanzando,

    se

    requerirn

    polticas pblicas destinadas a conciliar e cuidado del hogar con e trabajo

    remunerado, mejorar la productividad de las ocupaciones donde

    se

    desem

    pean los ms pobres y, en la eventualidad de que esto no ocurra, focalizar

    e

    gasto social hacia las demandas de los grupos ms vulnerables"122.

    .....

    i

    iesgos

    de una

    nuev

    forma de

    exclusin soci l

    La informacin y

    el

    conocimient,? pueden ser fuente tanto de exclu

    sin como de inclusin social, dadas las limitaciones de acceso a las nuevas

    tecnologas y a

    las

    diferentes capacidades para su uso (problemas genera

    cionales, culturales y de formacin inicial,

    l i m i q f ? n e ~

    ~ o g n i ? v a s fsicas o

    sensoriales).

    " .

    _,c...

    . '

    La desigualdad social y econmica tambin se traduce en desigualdad

    en

    e

    campo de

    las

    nuevas tecnologas:

    es el

    caso del acceso a Internet, am

    pliamente posible para

    las personas con'mayores recursos, pero no para toda

    122 Cepal 2007). p. cit.,

    p

    18.

    Cap/lulo 11

    as

    poltlicas pblicas

    l

    servicio de los derechos

    la poblacin.

    Las

    bajas tasas de acceso en los pases en desarrollo as lo con

    firman. En Colombia el nmero de usuarios de banda ancha

    es

    tan solo de

    700 mil, de los cuales el 50 estn en Bogot

    123

    Para que

    ell,lSO

    de

    las

    nuevas tecnologas contribuya a expandir

    las

    ca

    pacidades individuales y sociales y que el cambio tecnolgico est

    al

    servicio

    del conocimiento, la innovacin y el desarrollo, es necesario que

    las

    socieda-

    :

    des tengan un ambiente y unos resultados educativos favorables, pactos so-

    ciales que privilegien la igualdad y un alto nivel de apropiacin de objetivos

    sociales legtimos.

    Es necesario tener en cuenta que las nuevas tecnologas tienen impac

    tos, a veces contradictorios, en el mundo de la educacin, la salud y el tra

    bajo. En educacin, se crean nuevas formas y herramientas de aprendizaje;

    los medios de comunicacin juegan un papel fundamental en la formacin

    y en la transmisin de paradigmas y las posibilidades de inclusin o exclu

    sin digital se hacen evidentes. Las exigencias educativas, cada vez mayores,

    pueden hacer obsoleta la formacin de

    un

    gran contingente de personas

    si no se cambian los senderos de formacin y actualizacin. En

    el

    mundo

    laboral,

    las

    nllevas herramientas para incrementar la productividad, la ma

    yor flexibilidad y la mayor autonoma del trabajador pueden tener efectos

    favorables sobre el desarrollo humano si se desarrollan en un entorno laboral

    y democrtico adecuado, de otra forma se aumentan los peligros asociados

    a la mayor incertidumbre y a la polarizacin de las ocupaciones entre una

    fuerza laboral de muy altos niveles de formacin y otra sin ninguna prepa

    racin. De ah las dificultades en la relacin educacin-empleo: aunque los

    jvenes tienen hoy mayor escolaridad que la generacin precedente, pocos

    logran convertir esa mayor escolaridad en mejores opciones de empleo. Esta

    situacin es paradjica desde

    el

    punto de vista del desarrollo humano: una

    mayor inclusin en la adquisicin de conocimiento, pero mayor exclusin

    del mundo laboral y de la generacin de ingresos.

    Igualmente importante

    es

    la atencin a los usos nocivos y no regulados

    que crean dependencia, aislamiento y violacin de la privacidad. De ah

    la

    necesidad de polticas preventivas y regulaciones para que su apropiacin

    vaya en direccin

    al

    desarrollo humano.

    123 Alcalda Mayor de Bogot 2007b),

    Bogot sin indiferencia 2004 200 8. Informe

    final Plan de desarrollo. Bogot.

    Los

    usuarios de banda ancha de la Empresa

    de Telecomunicaciones de Bogot -ETB- pasaron de 40,000 a 220.000 entre

    2003 y julio de 2007.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    17/23

    i

    a

    pol/lica social en clave de derechos

    De

    lo

    dicho hasta

    el

    momento,

    es

    claro que

    el

    examen del derecho

    al

    trabajo no puede ser ajeno a la poltica pblica de proteccin social, pues

    sta

    es

    la llamada a contrarre star los efectos nocivos de los ciclos econmicos

    que afectan

    el

    bienestar de la poblacin.

    Como se

    anot anteriormente, los

    sistemas de proteccin social deben tener una naturaleza anticclica, pues

    se

    trata

    de

    proteger a las personas y a las familias ante los cambios en

    el

    entorno

    _ que

    les

    impide n acceder a los bienes y servicios vitales.

    . Sin embargo, en Amrica Latina la mayor parte de los sistemas de pro-

    _teccin social siguen atados al vnculo laboral, con lo cual los ms despro

    tegidos quedan excluidos de los mismos. Son sistemas con muy baja co

    bertura, con problemas de diseo, con duplicidades, con ineficiencias,

    con

    incierta sostenibilidad financiera.:

    Los seguros sociales existentes (salud,

    incapacidad,

    vejez)

    benefician

    por lo general a menos de la mitad de

    quienes

    estn sujetos al riego

    res-

    pectivo (estn limitados a parte de

    los

    trabajadores del sector formal y

    quienes quedan por uera incluyen con

    frecuencia

    a la

    mayora

    de las

    familias

    pobres, que

    son las que ms

    los

    necesitan. Muy pocos pases

    tienen

    seguro de desempleo, o

    programas

    efectivos de obra pblicapara

    apoyo

    a los desempleadoP4.

    Es conveniente reiterar que las polticas de inclusin deben abordar

    en

    forma simultnea

    la

    inclusin social y la inclusin econmica, lo cual impo

    ne una perspectiva integral para construir progresivamente autonoma en

    el

    ejercicio de los derechos.

    4 la

    integralidad de las polticas

    El restablecimiento y garanta de los derechos requiere entonces de

    po-

    lticas pblicas, entendidas com o acciones organizadas en torno a objetivos

    'de inters

    colectivo"125.

    Si aceptamos la obligacin de prestacin en m;.te-

    ra de dew;:hos sociales,

    se

    deriva

    la

    necesidad de formular polticas pblicas

    que

    se

    desarrollen a travs de estrategias y programas coherentes con ellas,

    124 Pery, G. 2005). p

    cit. p.

    52.

    125 Ocampo, J

    A.

    2001

    a .

    p. cit., p. 36.

    Captulo

    /l Las

    polticas pblicas al

    servicio

    de

    los

    derechos

    y que sean integrales para que respondan

    al

    carcter multidimensional y

    mulricausal de la situacin de pobreza.

    La Cepal comparte esta necesidad cuando seala: Para avanzar en

    la

    superacin de

    la

    pobreza yen la cohesin social, se requieren polticas mul

    tidimensionales que incluyan intervenciones tendientes a crear las oportu

    nidades necesarias para que los ms vulnerables tengan mayores expectati

    vas de

    movilidad social, incrementen su confianza en las instituciones, se

    sientan ms incluidos y participen ms activamente en las decisiones que

    inciden en su calidad de vidi'126.

    La

    obligacin de prestacin , que comportan

    las

    libertades positivas

    y,

    por tanto,

    los

    derechos sociales, es de la mayor importancia en materia de

    polticas pblicas, pues si bien se reconoce

    el

    carcter progresivo

    de las

    mis

    mas, d:J.das las

    limitaciones

    ya

    sealadas, ello no significa que

    esas

    obligacio

    nes queden a la disr;recin de

    los

    gobiernos dndoles

    un

    sentido meramente

    programtico. En esto ha sido contundente

    el

    Comit de los DESC de la

    ONU El

    estudio de Uprimny

    lo

    concreta

    as:

    [ .. ]

    es posible

    identificar ciertas obligaciones inmeditttas que dicho

    tratado

    impone a las autoridades

    de

    los Estados que han

    ratificado

    ese instrumento internacional. Conviene recordar que

    la mayora de

    los

    Estados

    latinoamericanos

    no

    solo han

    ratificado dicha cOnllencin

    sino

    que,

    adems,

    han

    incorporado a sus constituciones normas sobre

    derechos sociales semejantes a las

    previstas

    en el Pidesc [ . . ]

    As,

    el

    Comit DESC distingue

    entre

    una

    obligacin

    de

    respeta,:

    otra de

    proteger''y una ltima

    de

    realizar': que a veces llama

    de

    cumplir':

    La

    primera

    consiste

    en una obligacin negativa, ya que ordena a

    las

    autoridades no tomar

    medidas que

    impidan el goce

    de

    los

    derechos

    sociales por

    las

    personas; la segunda implica

    que

    las autoridades deben

    tomar medidas para evitar que un particular prive a otro particular

    del goce de un

    derecho

    social; la tercera obligacin implica que los

    Estados

    adopten medidas

    positivas o

    prestaciones

    que

    permitan a

    las

    personas

    gozar

    de este derecho

    7

    Estas polticas deben conllevar a estrategias que mo difiquen las dotacio

    nes

    iniciales individuales, familiares y colectivas, y sus titularidades, lo

    cua

    126 Cepal 2007). p cit., p 6

    127

    Uprimny,

    R

    2007).

    p

    cit., pp. 48-49. Pidesc

    es

    el Pacto Internacional de

    lo

    DEse de Naciones Unidas.

    r,

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    18/23

    ,

    I

    '1

    .

    , i

    I

    i .

    .

    La

    pofttica social

    en

    clave

    de

    derechos

    pasa por modificar los entornos de los grupos o comunidades identificados

    como pobres. Las acciones individuales y aisladas tienen resultados de muy

    corto alcance, logrando en' la mayor parte de los casos una mejora muy

    puntual y transitoria.

    La

    fortaleza institucional

    es

    una condicin fundamental para

    el

    adecua

    do

    diseo y gestin de

    las

    polticas pblicas que facilite la integralidad, la

    intersectorialidad, la interinstitucionalidad y la transversalidad, as como la

    fortaleza tcnica y administrativa para ia formulacin y ejecucin de los pro

    gramas correspondientes. Estos no pueden agotarse en la bsqueda de una

    mayor eficiencia de acceso a los servicios, pues sera persistir en la m irada de

    las personas como sujetos de necesidades y no de derechos, as como en una

    intervencin pblica de carcter sectorial y puntual desprovista de polticas

    que apunten a

    remOver

    los factores que estn en la base de la pobreza y la

    exclusin. Este carcter integral

    de

    las polticas

    es

    resaltado por

    J

    Sachs en

    los

    siguientes trminos:

    Uno

    de

    los puntos dbiles

    sobre

    el desarrollo es

    la

    incesante tendencia

    a creer en una solucin mgica, en que

    hay

    una nica inversin de-

    cisiva que invierte latmdenda.

    Por desgracia,

    esto no

    es

    as.

    Todos

    y cada uno

    de

    los seis tipos

    de

    capitaldefinidos [se refiere al capital

    human o, infraestructuras, c apital' natural, capital pblico insti

    tucional y capital intelectual],

    son

    necesariospara que

    la economa

    sea

    eficaz y funcione adecuadamente.

    Todos

    y

    cada

    uno son

    necesarios

    para

    escapar

    a

    la

    trampa

    de

    la

    pobreza.

    y

    lo

    que

    es

    ms

    importante

    el

    xito

    en

    cualquiera

    de las reas, ya sea

    en

    materia de salud,

    edu-

    cacin oproducti1ddad agrcola, depende del conjunto de las inver-

    siones

    realizadas

    28

    'Si

    se

    trata de polticas integrales, estas deben tener claramente una do

    ble perspectiva: la perspectiva poblacional, en tanto

    las

    personas son suje

    tos

    de

    derecho, yla perspectiva territorial, entendido el territorio [ ] no

    como

    un

    concepto exclusivamente geopoltico o geogrfico, sino como un

    concepto cultural

    y

    social

    Ul29

    .

    . . : : . ~ ~

    , ~ . ; , ~ : y - ,

    Esta doble mirada exige cambios institucionales

    en

    las unidades terri

    toriales y

    en

    las distintas entidades estatales, de tal suerte que

    se

    responda

    26 Sachs, J 2006).

    p

    cit., p 359.

    29

    Nez,

    J

    y Carvajal,

    A.

    (2007).

    p

    cit., p. 12. Sobre

    la

    doble mirada pobla

    cional y territorial ver Corredor, C. (2008a). p cit.

    Captulo I/ Las poli1icas pblicas al servicio de 105 derechos

    a sus demandas

    y

    se

    evite que prevalezca la oferta disponible

    por

    parte de

    las autoridades pblicas. Ello propicia una gestin integral, eficaz, eficiente

    y transparente.

    La perspectiva poblacional es una obligacin derivada del Estado social

    de derecho que le asigna

    al

    Estado en sus funciones y su quehacer, obrar en

    beneficio de los ciudadanos y ciudadanas.

    La mirada poblacional permite tener en consideracin las caractersti

    cas de las personas segn su ciclo vital, su condicin de gnero o etnia, as

    como su situacin de pobreza, pobreza extrema o desplazamiento. Igual

    mente, permite abandonar la idea de poblacin objetivo para asumirla

    como sujetos, pues [ ms all de sealar la diferencia semntica entre

    objeto (cosa, asunto) y sujeto (persona, humano, ser), se trata aqu de pro

    fundizar la comprensin sobre el ser humano, de exaltar sus particularidades

    y de reconocer los derechos como atributos intrnsecos de todas las personas

    por igual. El reconocimiento de las personas como sujetos significa ante

    todo dar cuenta de sus capacidades y potencialidades para vivir a plenitud

    individual y colectivamente. El ser hombre o mujer; el estar en la infancia, la

    juventud, la edad adulta o la vejez;

    el

    ser afrocolombiano, mestizo, indgena

    o blanco; el venir de fuera o el haber permanecido todo el tiempo aqu, son,

    entre otras, caractersticas constitutivas de los sujetos, situaciones derivadas

    de su historia, de su cultura,

    de

    los roles que han ejecutado y de

    las

    singula

    ridades y colectividades que han construido 130.

    -La perspectiva poblacional conduce a poner el nfasis en el reconoci

    miento de la igualdad de los derechos y en la diversidad de identidades y

    requiere que las personas participen activamente en su propio desarrollo.

    Suponer que las personas no son agentes de su propio desarrollo, centrarse

    en unos pocos y no en todas

    las

    personas, atender principalmente los pro

    blemas en vez de las capacidades y potencialidades, proporcionar cosas en

    vez de oportunidades, construyen un a especie de universo cuyo destino final

    es

    una institucin cerrada, con pretensiones de autosuficiencia, aislada de

    los contextos y desde luego estigmatizante

    y

    excluyente Esta perspectiva

    de sujeto, con los mismos derechos que los dems, singular y activo en su

    130

    Ver Alcalda Mayor

    de

    Bogot - Departamento Administrativo

    de

    Bienestar

    Social del Distrito (2005b). p. cit., p. 45.

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    19/23

    La pol/lica social en clave

    de

    derechos

    desarrollo, es

    la

    que

    se

    presenta como opcin frente a aquella en la que las

    personas son homogneas, pasivas y

    ahistricas 131.

    Por su parte, adoptar la mirada territorial [

    ..

    ) aumenta

    las

    posibilida-

    des de xito de la gestin de la poltica social en el largo plazo, cuando sta

    incorpora en su desarrollo las especificidades del contexto local y regional

    en el impulso de estrategias de desarrollo endgeno basadas en la identifica

    cin, reconocimiento y apalancamiento de las potencialidades de los terri

    torios y poblaciones locales. Al mismo tiempo, procura las mejores formas

    de insercin en la dinmica

    de

    la ciudad, del pas y del mundo. Considera

    . la relacin entre desarrollo local y gestin social en doble va: a la vez que

    la gestin de la poltica social contribuye a impulsar el desarrollo local, la

    dinmica progresiva de ste puede servir para desencadenar efectos multipli

    cadores y cualificado

    res

    de la gestin de esa

    poltica 132.

    El tener en consideracin los territorios conduce por lo menos a cuatro

    valoraciones de la mayor importancia:

    1. La promocin

    del desarrollo

    humano,

    en tanto propicia

    el

    rescate

    y valoracin de su identidad cultural, su sentido de pertenencia y

    el

    fomento de las oportunidades y capacidades colectivas. La mirada te

    rritorial en

    el

    diseo y gestin de las polticas pblicas promueve el

    desarrollo humano al reconocer a sus habitantes como sujetos sociales

    y, por tanto, actores protagnicos de su territorio, capaces de construir

    lecturas compartidas y objetivos comunes, siempre que

    se

    identifiquen

    las

    restricciones y potencialidades locales y se acte sobre ellas en alian

    za con los actores pblicos, privados y comunitarios,

    de

    tal suerte que se

    promueva la inclusin socio econmica Y e prevea la exclusin. De esta

    forma se podr enfrentar la tendencia persistente

    de un

    continuo de

    territorios urbanos fragmentados, nuevas segregaciones sociales, nuevas

    privatizaciones de lugares y renovadas formas de exclusin social

    133

    .

    2.

    El

    reconocimiento

    de

    mltiples

    capacidades

    y

    potencialidades, a

    partir de la identificacin de sus recursos humanos, organizacionales,

    naturales y de equipamientos, as como sus relaciones con otras uni

    dades territoriales de nivel local, regional, nacional o internacional. La

    131 Ibd., p. 45.

    l

    Ibd., p. 74.

    1Jl

    Ver

    Borja,

    ). 2003). La

    ciudad

    conquistada Madrid: Alianza

    Editorial.

    \

    \

    \

    \

    Captulo

    /l

    Las pol licas

    pblicas al servicio de

    los

    derechos

    pertinencia, la integralidad Y a equidad deben orientar las acciones de

    tal suerte que se evite profundizar la segmentacin, la desigualdad y la

    pauperizacin de unos sectores en beneficio de otros.

    3. La

    promocin de la participacin social

    y

    comunitaria. La perspec

    tiva territorial en

    elmarco de

    los derechos conduce favorablemente

    a

    empoderamiellto

    de

    los grupos sociales, por lo cual la participacin

    s

    convierte en

    un

    imperativo dada su dimensin espacio-temporal. E

    ejercicio ciudadano de participar requiere identificar tres elemento

    quines conforman

    el

    grupo que participa, dnde se participa y cul

    son los intereses en torno de los cuales

    se

    da la participacin

    34

    Para l

    grar una mayor efectividad los procesos participativos deben integrar

    con la institucionalidad a travs de instancias formales, y a la dinmi

    de

    las

    administraciones locales y nacionales de tal manera que se co

    viertan en interlocutores permanentes.

    4. El impulso p rogresivo a los procesos de des concen traci n

    y

    d e ~ c e n t r a l i z a c i n

    de

    la

    gestin pblica. La bsqueda de relacion

    ms

    autnomas, horizontales Y complementarias con

    las

    instancias

    gobierno central o regional contribuye a

    una

    mayor gobernabilida

    legitimidad, a mejorar la pertinencia, eficacia y eficiencia de

    las

    lticas e intervenciones pblicas, a un mayor empoderamiento de

    comunidades y, en suma, a u na consolidacin de la democracia lo

    Ello requiere abordar la estructu ra Y competenci as de los nivele

    gobierno, la distribucin de responsabilidades en la provisin

    de

    vicios,

    las

    fuentes y destino

    de

    los recursos pblicos, as como

    el

    g

    de autonoma de las unidades territoriales con relacin a los pod

    regional y nacional.

    La mirada pobiacional y territorial lleva a tener en consideraci

    bsqueda de u na doble capitalizacin humana y fsica mediante

    las

    pol

    y estrategias de desarrollo. En la primera

    se

    alude a la capitalizacin in

    dual y co cctiva, siendo prioritarias en la individual la salud, la educac

    la nutricin; y la colectiva, que alude al capital social manifiesto en la

    cipacin, en las asociaciones

    yen

    el desarrollo institucional

    l3s

    Por su

    la capitalizacin fsica hace referencia a los bienes colectivos que coad

    Ver Ospina,

    J

    M.

    (2007).

    p.

    cit.

    135

    Ver

    Corredor, c ;

    Ramrez,

    C y Sarmiento, A. 200n. p. cit., captulo

  • 7/23/2019 Captulo 2. LA POLITICA SOCIAL EN CLAVE DE DERECHOS

    20/23

    a

    poltica social en clave

    de

    derechos

    a hacer efectivos los derechos, a la infraestructura y el desarrollo urbano y a

    la propiedad de activos.

    Esta doble perspectiva, si bien

    es

    compleja, constituye

    un

    verdadero

    reto pues se trata de polticas e intervenciones que resulten pertinentes para

    escenarios caracterizados por una gran fragmenta cin social y econmica, .

    cultur almente diversos y con prof undas desigualdades socioespaciales. .

    5 Corresponsabilidad

    y

    responsabilidad

    sod l

    Actualmente se reconoce que, en el deber de restablecer y garantizar

    el ejercicio de los derechos, la responsabilidad no es nicamente del sector

    pblico sino tambin. del sector privado, de las organizaciones sociales y

    comunitarias, de los orgaismos i n t e r ~ c i o n l e s y por supuesto, de quienes

    son sujetos del restablecimient o de sus derechos. .

    Aunque internacionalmente la responsabilidad social cobra mayor im-

    portancia cada da, en el mbito nacional todava se est lejos de llegar a

    un

    consenso sobre el concepto mismo

    l36

    . Sin duda, la responsabilidad social

    ha

    adquirido una creciente importancia. Desde 1999, el Pacto Global

    ha

    he

    choaportes primordiales para promover la a.dhesin empresarial a principios

    . universales, tanto en derechos humanos como laborales y de medio ambien

    te. Se ha suscitado una visin ms amplia de la responsabilidad social

    presarial, que transciende lo estrictamente econmico y productivo y avanza

    hacia. una visin sistmica de los problemas y de la sociedad.

    Se

    reconoce

    que

    las

    alianzas pblico-privadas para el desarrollo de las polticas pblicas

    y

    la

    responsabilidad social con tienen

    un

    valor tico y estratgico de cara a la

    construccin de ciudadana y

    la

    consolidacin de

    la

    democracia.

    104

    No

    es

    pertinente considerar la responsabilidad social en trminos del

    cumplimiento de la ley laboral o de

    las

    obligaciones fiscales; la responsabili

    dad sodal no

    es

    filantropa, ni significa de ninguna manera sustituir las obli-

    Este aparte se

    nutre

    con algunas de

    las

    reflexiones

    que present

    en

    el

    evento

    Colombia Responsable , realizado en agosto