Bt Resultados en Jovenes

ADMINISTRACIÓN NACIONAL DE EDUCACIÓN PÚBLICA

COMISIÓN Y SECRETARÍA TÉCNICA PARA LA TRANSFORMACIÓN DE LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR

- D O C U M E N T O N O O F I C I A L -

SEGUIMIENTO DE LOS EGRESADOS DE LOS BACHILLERATOS

TECNOLÓGICOS DEL CETP

Serie “Aportes para la reflexión y la transformación de la Educación Media Superior”

Cuaderno de trabajo nro. 24

Coordinador General de la Serie

y Coordinador Académico de la Comisión TEMS: Soc. Renato Opertti

Coordinador Técnico de la Comisión TEMS:

Prof. Daniel Martínez

Unidad de Programación, Seguimiento y Monitoreo Fondo de Cooperación Técnica ATN/JF-7557

Soc. Alberto Villagrán

Redacción de este documento: Consultora Interconsult

Edición y composición de carátula: Prof. Marcos Medina Vaio

FEBRERO DE 2004

Montevideo - Uruguay

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24

Comisión de transformación de la Educación Media Superior en Uruguay / ANEP - Codicen

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I N T E G R A N T E S D E L A C O M I S I Ó N T E M S

TITULARES

¾ Soc. Renato Opertti (Coordinador Académico) ¾ Prof. Daniel Martínez (Coordinador Ejecutivo) ¾ Prof. Aníbal Camacho (delegado por ATD CES) ¾ Prof. Gregorio Dassatti (Dir. Escuela T. Buceo) ¾ Prof. Hugo Fernández Britos (Dir. Liceo Nueva Palmira) ¾ P.A.E. José María Fynn (delegado ATD CETP) ¾ Prof. Ana Lopater (delegada Sala Directores de Montevideo) ¾ Prof. Martín Pasturino (Dir. Programa P. industriales CETP) ¾ Prof. Adela Pereyra (Insp. Institutos y Liceos) ¾ Insp. Hilda Surraco (Inspectora General Docente CES) ¾ Prof. Ricardo Vilaró (Gerencia Innovación Codicen) ALTERNOS

¾ Prof. Dinorah Motta de Souza (delegada ATD CES) ¾ Prof. Blanca Arrillaga (Directora Esc.Téc. Florida) ¾ Prof. Ma. Carmen Liesegang (Subdir. Liceo Piriápolis) ¾ Prof. Abel Vanni (delegado ATD CETP) ¾ Dra. Graciela Bianchi (delegada Sala Directores de Montevideo) ¾ Ing. Agr. Gabriel Dambrauskas (CETP) ¾ Insp. Alex Mazzei (Insp. Regional - Codicen) ¾ Dr. Juan José Villanueva (Director de Programa CETP) ¾ Prof. Roberto Oliver (Codicen)

I N T E G R A N T E S D E L A S E C R E T A R Í A T É C N I C A

¾ Mag. Renato Opertti (Coordinación Académica); ¾ Prof. Daniel Martínez (Coordinación Ejecutiva); ¾ Prof. Ricardo Vilaró; ¾ Insp. Adela Pereyra; ¾ Prof. Ana Lopater; ¾ Mag. Rosalía Barcos; ¾ Prof. Roberto Oliver; ¾ Prof. Martín Pasturino; ¾ Mag. Rosario Oldán (Asistente Técnico); ¾ Prof. Sharon Musselli (Secretaría Ejecutiva).

Todas las publicaciones de la Serie se pueden consultar en las Bibliotecas, Salas de Profesores y Direcciones de los centros de Educación Media Superior. También están disponibles en la página web de la Comisión TEMS: www.comisiontems.edu.uy



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UNA NECESARIA ACLARACIÓN En el marco del proceso de transformación de la Educación Media Superior que la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) de Uruguay está llevando a cabo, la Secretaría Técnica de la Comisión de Transformación de la Educación Media Superior (TEMS) presenta el siguiente documento, perteneciente a una serie de publicaciones pensadas como aportes para la discusión sobre este ciclo educativo.

Este texto tiene como objetivo conocer el perfil de los egresados de los Bachilleratos Tecnológicos (BT) del Plan 1997 del Consejo de Educación Técnico Profesional desde una perspectiva laboral, sociodemográfica y educativa, así como de la adecuación al empleo de acuerdo a la formación recibida y su grado de conformidad con la misma. Para llevar a cabo el estudio, se realizó un llamado a firmas consultoras adjudicándose a la empresa Interconsult. El trabajo de campo fue realizado entre los días 25 de julio y 20 de setiembre de 2003 y estuvo basado en una encuesta dirigida a todo el universo integrado por 513 egresados de los BT. Está siempre presente la intención de que este documento posibilite intercambiar diferentes opiniones sobre el tema y generar espacios de diálogo que permitan alcanzar acuerdos sólidos para desarrollar una nueva educación media superior entre todos.

El Programa de Modernización de la Educación Media y la Formación Docente (MEMFOD “Con los jóvenes”) apoya este proceso de transformación y quiere por este intermedio dejar constancia que éste es un documento no oficial de la Administración Nacional de Educación Pública , publicado específicamente para los fines anteriormente mencionados. Asimismo, cabe aclarar que los contenidos expresados por los técnicos son de su responsabilidad y pueden no necesariamente corresponderse con la opinión de las autoridades educativas nacionales.

La investigación y la impresión de este estudio se realizan en el marco del Fondo de Cooperación Técnico ATN/JF-7557 (Fondo Japonés), préstamo no reembolsable del gobierno de Japón a la Administración Nacional de Educación Pública de Uruguay.



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ÍNDICE

I. Introducción ......................................................................................... p. 7 II. Metodología ........................................................................................ p. 9 II. 1. Trabajo de campo .................................................................. p. 9 II. 2. Formulario .............................................................................. p. 12 II. 3. Actividades realizadas ........................................................... p. 13 III. Plan de análisis .................................................................................. p. 15 IV. Análisis de resultados ...................................................................... p. 19 IV. 1. Análisis Encuesta egresados Plan 97 .................................. p. 19 1. Características del egresado .......................................... p. 19 2. Educación ....................................................................... p. 23 3. Actividad .......................................................................... p. 25 3.1. Ocupados .......................................................... p. 26 3.2. No ocupados ..................................................... p. 29 3.3. Trabajan actualmente o lo hicieron antes .......... p. 32 3.4. Quienes no trabajan en ocupaciones afines con su formación ..................................................

p. 33

4. Situación económica familiar e ingresos personales ...... p. 36 5. Opiniones ........................................................................ p. 39 IV. 2. Análisis comparativo para las diferentes generaciones de egresados .................................................................

p. 45

1. Caracterización de los egresados ................................... p. 45 2. Nivel de estudios ............................................................. p. 46 3. Inserción laboral .............................................................. p. 47 4. Ingresos .......................................................................... p. 48 5. Opiniones ........................................................................ p. 49 IV. 3. Análisis comparativo con la población de jóvenes entre 23 y 29 años ..................................................................

p. 55

1. Situación ocupacional ..................................................... p. 55 2. Ingresos .......................................................................... p. 57 3. Educación ....................................................................... p. 58 V. Conclusiones finales ......................................................................... p. 61 V. 1. Egresados del BT, Plan 97 .................................................... p. 61 V. 2. Comparación entre generaciones ......................................... p. 62 V. 3. Comparación con los egresados antes del Plan 97 .............. p. 64 V. 4. Comparación con los egresados de la EMS ......................... p. 64 V. 5. Verificación de hipótesis ........................................................ p. 65 Principales publicaciones del Programa de Modernización de la Educación Media y la Formación Docente (período 1997-2004) ........

p. 67



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I. INTRODUCCIÓN A continuación presentamos el Informe Final del Estudio de “Seguimiento de los Egresados del Bachillerato Tecnológico del CETP”. En el punto II se detalla la metodología utilizada, así como el Informe de campo que da cuenta de los pasos adoptados durante el desarrollo del mismo.

En el punto III se presenta el Plan de Análisis sugerido para este Estudio. Finalmente, en el punto IV se presentan los principales resultados del

Estudio, así como el análisis de los mismos y un capítulo de Conclusiones.



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II. METODOLOGÍA El estudio estuvo basado en una encuesta dirigida a todo el universo integrado por los egresados de los bachilleratos técnico profesionales del plan 97. II.1. Trabajo de campo El estudio fue realizado en base a entrevistas personales sobre el listado de egresados facilitado por MEMFOD, de 513 egresados en todo el país.

Se seleccionó un equipo de 21 encuestadores profesionales, especialmente capacitados para este estudio en particular, quienes trabajaron bajo la supervisión de un Jefe de campo y 4 supervisores de terreno. Relevamiento de campo

El encuestador contó con los siguientes elementos para la realización del trabajo de campo: Manual del Encuestador, Hoja de Ruta donde estén ubicadas las zonas de relevamiento y las personas a entrevistar, una planilla para anotar las situaciones de rechazo y de revisitas y un Instructivo para la administración del formulario.

En todos los casos, el encuestador anota con claridad su recorrido,

viviendas encuestadas, rechazos, revisitas, etc, para facilitar la tarea del Supervisor.

En las zonas urbanas, una vez ubicado en la zona que le correspondía relevar, recorre la misma ubicando los puntos de encuesta (personas a entrevistar). En la medida que existían teléfonos, las entrevistas fueron previamente pautadas desde nuestras oficinas, en la gran mayoría de los casos. Una vez ubicado el hogar que correspondía entrevistar, se solicita a quien atienda que informe sobre la persona a entrevistar y en caso de no encontrarse se convenía día y horario para la próxima visita.

En caso de ausencia de los ocupantes de la vivienda que correspondía entrevistar, se realizaron hasta tres revisitas, tratando de hacerlas en horarios en que acostumbran a encontrarse sus ocupantes.

En caso de rechazo a ser encuestados, se anotaron nombre y otras características en la planilla de rechazos. Posteriormente, desde nuestras oficinas se intentó convencer a dicha persona para ser entrevistado, lo cual se logró en un 36% de los casos (7 personas). El nivel de rechazo final fue relativamente bajo, de 12 personas (2% sobre el total y 2,5% sobre el total de contactados).



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En el caso de errores en las direcciones de los domicilios de los

entrevistados o de direcciones que caducaron (casi todas son del año 98 o 99), el encuestador debió indagar con los vecinos o comercios de la zona para obtener información sobre la nueva dirección del entrevistado. En muchos casos se recurrió a ex compañeros que facilitaron teléfonos para ubicar a varios de ellos. Estos procedimientos permitieron ubicar a 48 egresados que se habían mudado. También se recurrió a la búsqueda de estas personas por la guía telefónica lo cual permitía encontrar a algunos de ellos o un familiar más o menos directo que brindará información. De Montevideo existían 6 personas que emigraron hacia el interior, mientras que d l interior a la capital la emigración llega a 40 casos.

La solicitud a las Escuelas de donde habían egresado, para ampliar o actualizar información, nunca tuvo respuesta en ningún caso. Por el contrario encontramos serias resistencias de directores y docentes para realizar esta encuesta en la medida que no existía una “indicación por escrito proveniente del Codicen”. Para ilustrar sobre esta situación alcanza con señalar que aquellos egresados que estaban realizando cursos terciarios en UTU fueron advertidos por sus docentes para no responder la encuesta, de acuerdo a lo señalado por algunos de los jóvenes. Otro de los problemas con que nos enfrentamos en el trabajo de campo refiere a los egresados que emigraron del país. De acuerdo a información de familiares o vecinos 36 personas (7%) se encuentran fuera del país, aunque 2 de ellos fueron posibles de entrevistar en la medida que se encontraban en el país al momento de realizar el trabajo de campo. En 21 casos no existía dirección o teléfonos, contándose solamente con la localidad o el paraje. Ello hacía casi imposible ubicar a la persona a entrevistar. A pesar de ello, se logra ubicar a 3 de ellos por diferentes procedimientos. Finalmente, quedaron 45 personas (8,8%) sin poder ubicar luego de haber recurrido a los procedimientos anteriormente reseñados. Si a estos le sumamos los 18 que no fueron ubicados por no contar con la información mínima, llegamos a 63 casos no ubicados (12%). A continuación se presenta un cuadro resumen de los resultados obtenidos en el relevamiento de campo: Cuadro resumen de resultados del relevamiento de campo

Región Resultados Montevideo Interior Total

Entrevistados 242 (78,6%) 162 (79,1%) 404 (78,8%) Rechazo 6 (1,9%) 6 (2,9%) 12 (2,3%) Emigraron 21 (6,8%) 13 (6,3%) 34 (6,6%) Sin información 5 (1,6%) 13 (6,3%) 18 (3,5%) No ubicados 34 11,0%) 11 (5,4%) 45 (8,8%)

Total 308 (100,0%) 205 (100,0%) 513 (100,0%)



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Otro de los problemas detectados refiere a la existencia de 26 egresados entrevistados por Interconsult que ingresaron antes del 97. Luego del procesamiento de la información se detectó este problema y se chequeó el dato con el propio encuestado.

En 20 casos efectivamente se trataba de alumnos anteriores a la reforma. Comparado este grupo con el resto de los entrevistados se entendió que 14 casos podían ser incluidos en el análisis por presentar características similares al resto (básicamente ingresados en el 96). En 6 casos esto no era así, por lo cual se decidió dejarlos fuera del análisis, en la medida que podían distorsionar algunos resultados. Por lo cual el número de casos finalmente analizados es de 398. El trabajo de campo fue realizado entre los días 25 de julio y 20 de setiembre del 2003. Supervisión y controles

Se realizaron dos instancias de supervisión de campo: 1ª) Un 20% de las entrevistas fueron sometidas a control de terreno a cargo del

supervisor. Se controló la efectiva realización de la entrevista y se realizaron además diez preguntas al azar del cuestionario original.

2ª) Todas las entrevistas fueron sometidas a supervisión de oficina por el Jefe de

Campo, quién revisó una a una las mismas en conjunto con cada encuestador.

Codificación y procesamiento

Los cuestionarios fueron codificados para su procesamiento por parte de un equipo de codificadores profesionales. En los casos de preguntas abiertas, los códigos residuales como "otros", no podrán cubrir mas de un 9% de las respuestas. El procesamiento fue realizado en equipos PC de acuerdo a las especificaciones del sistema SPSS.

Para el control de consistencia se utilizaron algunas preguntas de la sección

de “Actividad” y de ingresos personales. Pregunta 10 con pregunta 12; Pregunta 12 con pregunta 13; Pregunta 17 con preguntas 18 y 28; Pregunta 28 con pregunta 29 y año de egreso; Pregunta 26 y 33 con pregunta 35; Pregunta 38 con pregunta 40, 41, 42 y 43.



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II.2. Formulario

La elaboración del cuestionario tuvo una fase preliminar donde se analizó

con la Unidad Coordinadora un borrador presentado por Interconsult para su aprobación antes de comenzar el trabajo de campo.

El mismo se encuentra precodificado en su mayor parte, conteniendo 55

preguntas, 7 de ellas “abiertas”.

La base del formulario fue la utilizada para la primera generación de egresados (año 2001) en la medida que la comparabilidad es parte importante del plan de análisis y de los objetivos del Estudio.

El mismo contempla las siguientes secciones:

A. Identificación del egresado (orientación, escuela, datos personales) B. Información socio demográfica del egresado ( constitución del núcleo

familiar, cobertura salud, situación ocupacional del núcleo familiar, nivel educativo alcanzado por su padres o tutores, etc).

C. Situación educacional y expectativas educacionales. Evolución en el tiempo de la situación educacional.

D. Situación ocupacional y expectativas (completa y comparable con

indicadores utilizados por el Instituto Nacional de Estadística (similar al formulario del 2001). Evolución en el tiempo de la situación ocupacional.

E. Situación socio económica (familiar, ingresos personales, similar a los

indicadores utilizados por el INE).

F. Opiniones y percepciones sobre la educación recibida (opinión sobre la formación que le suministró UTU para diferentes dimensiones, razones por las que optó por una u otra orientación, conformidad con la opción elegida, factores que influyeron en dicha elección, autopercepción sobre la imagen social de su título, expectativas de futuro, que cambiaría de la formación que recibe en UTU, etc.)

G. Opiniones y percepciones sobre la inserción laboral y la pertinencia de la

educación recibida (autopercepción sobre su situación laboral, utilidad de la educación recibida para la inserción laboral, facilitadores e inhibidores de la formación recibida para su inserción laboral, expectativas de futuro, que cambiaría de la formación que recibe en UTU, etc.)



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II.3. Actividades realizadas Finalmente, de acuerdo a lo propuesta original, Interconsult realizó las siguientes tareas: 9 Coordinar con el equipo técnico de MEMFOD el ajuste no sustantivo de la

propuesta, previo al inicio del Estudio. 9 Diseño de cuestionario 9 Elaboración de manuales de campo y armado de hojas de ruta y otros

materiales requeridos para las entrevistas 9 Selección e instrucción de encuestadores 9 Trabajos complementarios de ubicación de los egresados que han cambiado

de dirección. 9 Realización de las encuestas 9 Supervisión del trabajo de campo 9 Crítica y codificación 9 Ingreso de datos, análisis de inconsistencias y depuración de archivos,

elaboración de tabulados. 9 Análisis de la información relevada e Informe preliminar 9 Procesamiento de información secundaria, Encuesta de Hogares INE,

encuesta egresados 2001 (Memfod), Encuesta egresados 1998 (UTU – Interconsult).

9 Análisis comparativo entre diferentes poblaciones. 9 Análisis final, Informe Final



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III. PLAN DE ANÁLISIS El objeto principal de este Estudio radica en conocer el perfil de los egresados desde una perspectiva laboral, socio demográfica, educativa, así como de la adecuación al empleo de acuerdo a la formación recibida y su grado de conformidad con dicha formación.

Específicamente se persiguen los siguientes objetivos: 9 Conocer el perfil del egresado de los bachilleres a través de un seguimiento

para determinar su inserción en el mercado laboral, en el sistema educativo, así como su situación socio económica en lo referente a la familia.

9 Conocer las percepciones de los bachilleres del Plan 97 acerca de la formación

recibida en las distintas especialidades y modalidades de estudio, así como las expectativas que los impulsaron a optar por una u otra.

9 Analizar comparativamente las distintas generaciones de egresados en

términos de inserción laboral, de la incidencia de la formación recibida en su situación laboral, así como de las opciones educativas posteriores.

9 Analizar comparativamente los egresados plan 97 con anteriores egresados en

términos de inserción laboral, de la incidencia de la formación recibida en su situación laboral, así como de las opciones educativas posteriores.

9 Analizar comparativamente los egresados plan 97 con la población en general

integrada por jóvenes con edades entre 15 y 19 años, en términos de inserción laboral, situación socio económica, de la incidencia de la formación recibida en su situación laboral, así como situación educativa.

Dada la estrecha relación buscada entre la oferta educativa de los

bachilleratos Técnico Profesional con el mercado laboral, el plan de análisis apuntará a brindar información sobre el impacto de la reforma en la inserción laboral de sus egresados. Así mismo deberá contemplar la eficacia del sub sistema para la continuación de la educación en el nivel terciario. Con el fin de obtener indicadores más o menos confiables del impacto de la reforma de los bachilleratos del CETP se deberá recurrir a un análisis comparativo con otras poblaciones. Estas poblaciones son las siguientes.

Un primer referente comparativo es dado por la población en general integrada por jóvenes con edades entre 19 y 29 años. En este caso se realizó un análisis comparativo de los perfiles socio demográficos y económicos, así como de situación laboral y educativa. La información comparativa con los resultados de la



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encuesta se obtuvo de las encuestas de hogares del INE (año 2002). Paralelamente, se compara con los egresados del EMS en el 2001, utilizando la misma base del INE.

Un segundo referente fueron los egresados del bachillerato técnico

profesional anteriores a la reforma. Aquí podemos establecer varios parámetros comparativos desde los perfiles socio demográficos, económicos, inserción laboral y educacional, así como algunas opiniones sobre el grado de satisfacción con la formación recibida. La información comparativa se realizó a partir de los resultados de la encuesta realizada en diciembre del 98, por Interconsult, para el CETP.

En tercer término se establece un análisis comparativo de las diferentes

generaciones de egresados del BT, 1999 a 2002, con los resultados obtenidos en esta última encuesta y la encuesta realizada por MEMFOD en el 2001 para la primera generación de egresados.

El Plan de Análisis que proponemos buscará identificar y conceptuar

diferencias y similitudes entre las diferentes poblaciones anteriormente mencionadas de forma tal que podamos caracterizar nuestra población objetivo en un marco comparativo y estimar indicadores de impacto.

El Plan de Análisis se basará en algunas hipótesis que en forma preliminar serían las siguientes:

I. “Los egresados del BT de CETP del Plan 97, obtienen una mejor inserción laboral que los egresados de generaciones anteriores a la reforma”

II. “Los egresados del BT de CETP del Plan 97, obtienen una mejor situación

educacional que los egresados de generaciones anteriores a la reforma”

III. “No existen diferencias significativas de inserción laboral entre las distintas generaciones bajo la reforma”.

IV. “La inserción educacional en niveles superiores lograda por los egresados

del BT es similar a los bachilleres de la EMS”.

V. “La inserción laboral lograda por los egresados del BT es superior a la que obtienen los bachilleres de la EMS”.

Lógicamente, las hipótesis están planteadas en términos positivos hacia el Plan 97 en función de los objetivos que se planteaba la Reforma. De todas formas es de tener en cuenta que estas hipótesis requieren de la construcción de algunos indicadores para su validación cuantitativa.



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Estos indicadores son posibles de construir y calcular a partir de aquellas variables estadísticamente comparativas que se puedan obtener de la información secundaria. INDICADORES

De acuerdo a estas hipótesis se requieren algunos indicadores cuantitativos que permitan objetivar mejor su verificación, por lo cual es necesario el diseño de indicadores de inserción laboral y educación. Indicadores educativos Para el área educativa se tomaron los siguientes indicadores: porcentaje de egresados que continúan estudiando luego de su egreso (BT, UTU, EMS); porcentaje de egresados cuya ocupación está relacionada con la formación recibida (distintas generaciones de egresados); nivel de estudios alcanzado (todas las poblaciones). También se utiliza como indicador el porcentaje de egresados que acceden a los estudios universitarios (BT, UTU, EMS).

Asimismo, para los egresados UTU y diferentes generaciones de BT se

toman algunos indicadores de opinión: porcentajes de egresados satisfechos con la formación recibida; percepción de la incidencia en su situación laboral; porcentaje de egresados que volvería a elegir el BT y porcentaje que lo recomendaría (seguramente y probablemente).

Como Indicadores de situación laboral se recurrió a los siguientes: inserción laboral; tasa de desempleo; tasa de actividad; porcentaje de ocupados y estudiantes activos sobre el total; cobertura de salud; tipo de ocupación ingresos promedio totales y por trabajo.

Principales definiciones utilizadas En este estudio se utilizan las siguientes definiciones, donde en general se siguen los criterios del Instituto Nacional de Estadística (INE): Población económicamente activa: Personas que tienen al menos una ocupación (remunerada o no) o que sin tenerla la buscan activamente en las 4 semanas previas a la encuesta. Ocupados: Son las personas que trabajan en la semana anterior a la encuesta o que no lo hicieron por estar enfermos, de licencia, interrupción temporal del trabajo y que volverán a su trabajo.



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Desocupados: Aquellas personas que no estaban trabajando la semana anterior a la encuesta, que no piensan volver, pero que buscan activamente una ocupación y están disponibles para trabajar. Inactivos: son las personas que no trabajan, que no buscan hacerlo, ni están disponibles. Índice de desocupación: es la relación entre desocupados y población económicamente activa, expresada en porcentaje. Tasa de actividad: es el porcentaje de la población económicamente activa sobre el total de la población. Tasa de inserción: son aquellas personas que están ocupadas en trabajos productivos o como estudiantes. Se conforma por los ocupados más los inactivos que estudian. Índice de confort: es el promedio del número de electrodomésticos y otros elementos de confort que se tiene en el hogar (electrodomésticos, pc, moto, automóvil, etc.).



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IV. ANÁLISIS DE RESULTADOS A continuación se presentan los análisis realizados para la encuesta egresados de Bachilleratos Tecnológicos (Plan 97), así como los análisis comparativos propuestos en el Plan de Análisis. IV.1. Análisis Encuesta egresados del Plan 97 1. Características del Egresado Las orientaciones más numerosas son las correspondientes al área Agraria (32%) y al área Administrativa (26%), según cuadro Nº 1.

En la primera encontramos que la gran mayoría egresa con el título de “Bachiller en Tecnología Agraria” (73%), otro 15% en Auxiliar en tecnología Agraria y el 12% como “técnico Agrario” en sus dos orientaciones (Agrícola–Ganadero y Granjero).

En el área Administrativa (104 casos), el 64% de ellos son bachilleres en

Administración, un 30% Auxiliares y el 6% Técnico en Administración Comercial. La tercer área en importancia numérica es Informática, con el 17% (69 casos). Allí el título otorgado es "Auxiliar Técnico en procesamiento y mantenimiento informático". En cuarto término tenemos los egresados del área de Química, 13% (51 casos), con el título de “Auxiliar Técnico en Química Básica e Industrial”.

El 7% de los egresados proviene del área de Termodinámica “Auxiliar Técnico en Termodinámica” (28 casos).

Finalmente, las áreas menos pobladas son las del área de la Construcción

(15 casos, 4%) y Electromecánica (4 casos, 1%).



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CUADRO Nº 1: Orientación según zona de residencia

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Del total de egresados entrevistados por Interconsult que reúnen las características del universo objetivo (398 casos), el 62% se encuentra en la capital del país (247 casos), mientras que los 149 restantes residen en el interior (Cuadro Nº 1). Tenemos dos casos del total de entrevistados que residen fuera del país. Lógicamente, la mayoría de quienes actualmente residen en el interior del país son egresados del área Agraria (54%), mientras que otro 28% son titulados en Administración. Sin embargo, para quienes residen en Montevideo predominan los egresados en Informática (24%) y Administración (25%), mientras que en las otras orientaciones tenemos que el 80% de los egresados de Termodinámica viven en Montevideo, al igual que el 69% de los egresados de orientaciones relacionadas con la Construcción y el 90% de quienes estudiaron Química. Los cuatro egresados de Electromecánica se reparten en partes iguales entre el interior y la capital del país. Más de las tres cuartas partes de los egresados (78%) lo hicieron entre los años 2000 (47%) y 2001 (31%), un 1,2% egresó en el 2002 o principios del 2003 y una quinta parte (21%, 83 casos) en los años 98 y 99. Siete de cada diez egresados lo hicieron en el tiempo curricular (3 años), una cuarta parte lo hizo en cuatro años, mientras que el resto (6,5%) en cinco o seis años.

Más de la mitad (56%) es menor a 23 años (de 19 a 22), otro 40% presenta edades entre los 23 y 29 años, restando un 4% (17 casos) de 30 o más años (Cuadro Nº 2). Asimismo, las dos terceras partes de los egresados que fueron entrevistados son del genero masculino y un 35% mujeres, cifra que supera el 36% en Montevideo (Cuadro Nº 3).

Ello está en parte relacionado con la alta proporción de egresados de

orientaciones agrarias, donde el 84% está constituido por son hombres. Por el contrario, en las orientaciones del área Química el 71% son mujeres, al igual que un 64% en el área de Administración. En el resto predominan ampliamente los



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egresados del género masculino. También es posible constatar que tanto en Administración como en el área Agraria la gran mayoría (64%) son menores de 23 años, mientras que en el resto de las orientaciones predominan los mayores de 23 años, en especial en Química (65% de 23 años o más) y 75% en Electromecánica.

CUADRO Nº 2 : Edad según zona de residencia

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CUADRO Nº3 : Sexo según zona de residencia

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La mitad de quienes egresaron en los años 98 y 99, lo hizo con 18 o 19 años, mientras que un 47% egresó con edades entre 20 y 25 años y en dos casos con más de 25 años. De la generación 2000, egresaron a los 18 o 19 años en un 56%, otro 40% con edades entre 20 y 25 años, así como un 4% mayores de 25 años. Por su parte, el 59% de la generación 2001–2002 obtuvo el título de bachiller con 18 o 19 años, el 35% en el tramo de 20 a 25 años y el resto (6%) con más de 25 años. Más de la quinta parte (22%) ejerce el rol de jefe (16%) o pareja del jefe (6,5%) en el hogar, aunque el 57% de los “jefes de hogar” son personas que viven solas. La gran mayoría son hijo/a del jefe del hogar: 68%, 269 casos, mientras que el 10% restante vive con otro familiar o no pariente. La mayor proporción de egresados–jefes de hogar se encuentra en Montevideo (77%), así como quienes viven con otras personas que no son sus padres (78% en Montevideo). Un 13%



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vive en pareja (unión libre o casados), mientras que la gran mayoría está constituida por solteros o jóvenes que no viven en pareja (87%). Mientras que el 21% de las mujeres vive con su pareja, sólo el 10% de los hombres se encuentra en dicha situación. El tamaño del hogar es de 3,8 en promedio, 3,6 para quienes residen en Montevideo y 4,2 para el interior. El hogar unipersonal es del 3,3%; un 18% de los hogares está integrado por dos personas (en su mayoría, parejas establecidas), mientras que las dos terceras partes son hogares cercanos al promedio (entre 3 y 5). El resto, 12,4% lo componen son hogares con 6 o más personas (máximo 10, un caso).

En la gran mayoría de los hogares (69%), entre dos y tres personas son receptoras de ingresos, con un 17% donde existe un solo ingreso en el hogar y en el 15% restante existen más de tres personas que perciben algún ingreso. El promedio por hogar de personas que perciben ingresos es de 2,3. El ingreso único es más frecuente en el interior que en Montevideo a pesar de que los hogares son más extendidos. Finalmente, encontramos que en el 28% de los hogares visitados existe al menos un menor de 14 años y en el 18% viven mayores de 65 años. Considerando la población económicamente activa (PEA), encontramos que en el 6% de los hogares existe una sola PEA, en más de la mitad de los casos (51%) hay dos o tres PEA, en el 27% cuatro y con más de cuatro tenemos un 16% de los hogares. Al comparar con número de personas receptoras de ingresos, vemos que en el 5% de los hogares existen receptores de ingresos que no pertenecen a la PEA, así como el 29% de las PEA de estos hogares no perciben ningún ingreso. Como último aspecto para caracterizar al egresado, sólo un 3,5% (14 casos) no cuenta con cobertura de salud, predominando quienes se encuentran cubiertos a través de una mutualista (65%) u otra institución privada (1%), mientras que el 28% declara estar cubierto por Salud Pública y el 3% por un seguro parcial de salud. Aquellos que residen en el interior del país son quienes más dependen de Salud Pública (38%). Resumen Las orientaciones más numerosas son las correspondientes al área Agraria y al área Administrativa, mientras que la tercer área en importancia numérica es Informática. La mayoría de los egresados se encuentran radicados en la capital del país (62%). Más de las tres cuartas partes de los egresados lo hicieron entre los años 2000 y 2001, así mismo siete de cada diez egresados lo hicieron en el tiempo curricular de 3 años. Más de la mitad son menores de 23 años y otro 40% presenta edades entre los 23 y 29años. Asimismo, las dos terceras partes de los egresados pertenecen al genero masculino.



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En más de la quinta parte, ejerce el rol de jefe o pareja del jefe en el hogar, siendo la gran mayoría hijo/a del jefe del hogar. El tamaño del hogar es de 3,8 en promedio, 3,6 personas, siendo de 2,3 el promedio por hogar de personas que perciben ingresos. Como último aspecto para caracterizar al egresado, sólo un 3,5% no cuenta con cobertura de salud, predominando quienes se encuentran cubiertos a través de una mutualista u otra institución privada (66%). 2. Educación Seis de cada diez egresados de los bachilleratos tecnológicos se encuentran, al momento de la encuesta, cursando algún año de estudios formales (Cuadro Nº 4). Esta cifra aumenta al 68% para el caso de quienes residen en Montevideo, siendo menos de la mitad (49%) en el caso de quienes residen en el interior del país. Los dos egresados radicados fuera del país no están estudiando actualmente.

CUADRO Nº 4 : Continúa cursando algún curso de educación formal según zona de residencia

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Según muestra el Cuadro Nº 5, la mayoría (53%), al egresar del BT, realizó estudios universitarios, mientras que la segunda opción en importancia fue el postgrado BT (19%). En tercer lugar se encuentran quienes siguieron el curso Técnico en la propia UTU (10%) y aquellos que optaron por estudiar Magisterio o Profesorado (6% de los casos), luego un 1% (5 casos) que estudió Ingeniería Tecnológica, dos casos que ingresaron a la carrera militar y otros dos casos que optaron por realizar el bachillerato de Secundaria.

Más de la quinta parte (22%, 89 casos) no realizó ningún estudio luego de terminar el BT. Esta última situación se encuentra más generalizada en el interior del país (37%) que en Montevideo (14%). Por otra parte, existe un 12% que realizó más de un curso, siendo las “combinaciones” más comunes Universidad y Curso Técnico de UTU (4,3%), así como Universidad y post grado BT (4,5%).



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Cuadro Nº 5: Situación curricular según nivel educativo luego del egreso de BT

Nivel Continúa Abandonó Finalizó Totales Secundaria 2 (100,0%) 2 (100%) Técnico UTU 18 (46,2%) 8 (20,5%) 13 (33,3%) 39 (100%) Ingeniero Técnico

1 (25,0%) 4 (75,5%) 5 (100%)

Magisterio-Profesorado

20 (83,3%) 4 (16,7%) 24 (100%)

Militar 1 (50,0%) 1 (50,0%) 2 (100%) Universidad 166 (79,0%) 43 (20,5%) 1 (0,5%) 210 (100%) Post grado 41 (53,9%) 13 (17,1%) 22 (33,0%) 76 (100%) Considerando las orientaciones básicas del BT, quienes egresaron del área Química y de la Construcción son los que en mayor proporción se encuentran estudiando actualmente, a diferencia de lo que ocurre con quienes egresaron de las áreas de Informática, Termodinámica y Electromecánica. Asimismo, los egresados de Termodinámica (36% no estudió) y Administración (32%), al igual que Electromecánica (50%) son quienes en menor medida optaron por estudios posteriores al BT. En el 11% de las situaciones de estudios post BT se finalizó el ciclo (40 casos), básicamente del Postgrado y del Curso Técnico de UTU. La gran mayoría continúa estudiando (70%), principalmente a nivel universitario, y el 19% restante abandonó sus estudios post BT. De quienes optaron por estudios universitarios casi un 80% continua estudiando (43% aprobó al menos un año), mientras que una quinta parte abandonó y sólo en un caso se obtuvo el título. Para aquellos que siguieron cursos docentes, en el 83% de los casos continúan estudiando (el 63% aprobó al menos un año) y el otro 17% abandonó sus estudios. Para los cursos técnicos de UTU, el 46% continúa estudiando, la tercera parte culminó sus estudios y el 21% abandonó. Finalmente, en los postgrados, más de la mitad (54%) continúa estudiando, un 29% se recibió y el resto abandona. En cuanto a los cursos universitarios preferidos por los egresados del BT, una quinta parte optó por Ciencias Económicas y otro tanto por las Ingenierías (preferentemente Ing. de Sistemas). Un 19% prefirió la carrera de Veterinario y el 10% Agrónomo, mientras que otro 12% sigue el área Química, un 7% Administración de Empresas, el 4% Informática y otro tanto Arquitectura. Ciencias un 2% y Psicología el 1%, al igual que Medicina. Resulta interesante observar que es marginal la proporción de egresados del BT que optaron por carreras no técnicas (3%). Esto supone que las orientaciones del BT lo marcan en forma significativa. El 89% de los egresados de cursos agrarios optaron por carreras universitarias de la misma orientación, lo cual se reitera en el 89% de quienes siguieron Administración, el 93% de los egresados del área Informática, el 89% del área Química y el 100% de los egresados de Termodinámica, Construcción y Electromecánica.



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Finalmente, cuando se pregunta por cursos de capacitación realizados en el último año, el 78% responde negativamente y en 86 casos (54 en Montevideo) se mencionan cursos de Computación (50%), Idiomas (17%), Marketing (9%), Administración–Contabilidad–Comercialización (9%), agropecuarios (10%), entre otros. Resumen Seis de cada diez egresados de los bachilleratos tecnológicos se encuentra, al momento de la encuesta, cursando algún año de estudios formales. La mayoría, al egresar del BT, realizó estudios universitarios, mientras que la segunda opción en importancia fue el postgrado BT. Quienes egresaron del área Química y de la Construcción son los que en mayor proporción se encuentran estudiando actualmente, a diferencia de lo que ocurre con quienes egresaron de las áreas de Informática y Termodinámica. En el 11% de las situaciones de estudios post BT se finalizó el ciclo, mientras que la gran mayoría continúa estudiando (70%), principalmente a nivel universitario. Resulta interesante observar que es marginal la proporción de egresados del BT que optó por carreras no técnicas, lo cual supone que las orientaciones del BT lo marcan en forma significativa. 3. Actividad Del total de 398 egresados de los BT que conforman nuestro universo, 272 de ellos (68%) se encuentran ocupados al momento de realizar la encuesta, donde 256 lo hicieron la semana anterior (64%) y otros 16 (4%) no lo hicieron pero piensan regresar a su trabajo habitual. De los primeros 256, en seis casos (1,5%) son trabajadores familiares no remunerados. Por lo cual, un 31,6% (126 casos) se encuentra no ocupados al momento de la encuesta (Cuadro Nº 6). Cuadro Nº 6: Situación laboral según zona de residencia Montevideo Interior Totales Trabajo remunerado

169 (68%) 81 (54%) 250 (63%)

Trabajo familiar no remunerado

4 (2%9 2 (1%) 6 (2%)

Vuelve al trabajo 12 (5%) 2 (1%) 16 (4%) No ocupado 62 (25%) 64 (43%) 126 (32%)

Totales 247 8100%) 149 (100%) 398 (100%)



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La situación laboral presenta diferencias en cuanto a la zona de residencia. Quienes residen en la capital del país presentan índices de ocupación mayores, donde las tres cuartas partes de ellos se encuentran ocupados, contra el 57% del interior del país. Asimismo, los mayores índices de ocupación se encuentran entre los egresados de las áreas de Informática (86%) y Termodinámica (86%). Por el contrario, los egresados del área Agraria están ocupados en un 57%, y los del área Electromecánica en un 25% (un caso), mientras que aquellos que egresaron de Química (69%) y Construcción (73%) presentan índices de ocupación levemente superiores al promedio. Por su parte, los hombres y los mayores de 30 años son quienes exhiben índices de ocupación más altos (71 y 694% respectivamente), mientras que las mujeres (36%) y los menores de 23 años (37%) presentan indicadores de no ocupación mayores. Los egresados entre 23 y 29 años se encuentran ocupados en un 74% de los casos. 3.1. Ocupados En promedio, las horas trabajadas la semana anterior a la encuesta es de 36 horas, sin diferencias significativas entre Montevideo e Interior, llegando a 38 horas promedio por semana si consideramos las dos ocupaciones. Un 34% trabaja (entre las dos ocupaciones) hasta 30 horas por semana (Cuadro Nº 7), una cuarta parte lo hizo entre 30 y 40 horas, mientras que el 41% restante trabajó más de 40 horas en la semana. Habitualmente, los entrevistados ocupados dicen trabajar un promedio de 41 horas (42 en Montevideo, 38 en el interior), con una distribución por tramos horarios similar a la semana anterior (Cuadro Nº 8). El promedio de horas trabajadas habitualmente en la semana por las mujeres es inferior a los hombres (35% versus 44%). Este indicador crece con la edad del entrevistado, donde los mayores de 29 años trabajan promedialmente 42 horas a la semana y los menores de 23, 37 horas.

CUADRO Nº 7: Cantidad de horas trabajadas la semana anterior a la encuesta segúnzona de residencia

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La gran mayoría de los ocupados posee una sola ocupación (87%), un 12% dice tener dos ocupaciones y en un caso tres. En Montevideo se observa un mayor número de ocupaciones por persona (22%, dos o tres ocupaciones), mientras que en el interior el 97% tiene una sola ocupación. No existen diferencias apreciables entre el número de ocupaciones por género, sí por edad, donde los mayores de 30 años concentran más su trabajo en una sola ocupación (94%). También quienes cursaron la orientación Informática se destacan por poseer más de un empleo (29%). En cuanto a horas trabajadas habitualmente por semana, los “más ocupados” son quienes egresaron de las orientaciones Química y Termodinámica, por el contrario con menos horas semanales encontramos a los egresados de Administración y Construcción.

CUADRO Nº 8: Cantidad de horas que trabaja habitualmente según zona de residencia

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Una amplia mayoría (67%) de quienes están ocupados declara su voluntad de trabajar más horas, principalmente en el interior del país (77%). A pesar de trabajar menos horas a la semana, las mujeres declaran menor voluntad de trabajar más horas que los hombres (57% versus 71%). Por su parte, la voluntad de trabajar más horas se incrementa con la edad. Quienes egresaron de las orientaciones informáticas son los más dispuestos a trabajar más horas, al contrario de quienes lo hicieron de Química (quienes trabajan más horas por semana). El canal más común de obtener el empleo (Cuadro Nº 9) es a través de un familiar, amigo o compañero de estudio (41%), así como por “búsqueda personal” (34%). Un 7% obtuvo su empleo por recomendación de un docente de su centro de estudio, otro 6% concursando en UTU y el 8% es becario de la UTU. Sólo el 2% obtuvo trabajo a través de una Agencia de Colocación. La recomendación de familiares y amigos es más frecuente en el interior que en Montevideo, mientras que en la capital se destacan quienes obtuvieron trabajo por búsqueda personal.



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CUADRO Nº 9: Medio por el cual obtuvo el empleo según zona de residencia

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En poco más de la mitad de los casos su trabajo le brinda cobertura de salud, en el 66% tienen derecho a aguinaldo y en un 51% a salario vacacional. En estos indicadores no existen diferencias significativas entre Montevideo e interior del país. En la cobertura de salud los hombres se encuentran más cubiertos que las mujeres (59% y 44% respectivamente). Según muestra el cuadro Nº 10, poco más de la mitad de los entrevistados entienden que su ocupación se encuentra relacionada con la especialidad que cursó en el BT (55% en el interior y 51% entre quienes residen en Montevideo). Claramente los egresados en Informática son quienes en mayor proporción tienen ocupaciones relacionadas con su especialidad (63%), mientras que los egresados de Termodinámica y Construcción en su mayoría no trabajan en áreas relacionadas con su especialidad. También en el caso de los hombres (59%) y de los egresados entre 23 y 29 años 860%) su ocupación se encuentra relacionada con su especialidad en mayor medida.



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CUADRO Nª 10: Relación entre la ocupación y la especialidad recibida en la UTU según zona deresidencia

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Como señaláramos anteriormente, una amplia mayoría (67%) de quienes están ocupados declara su voluntad de trabajar más horas, principalmente en el interior del país, los del género masculino y los mayores de 30 años. Considerando este segmento en particular, el 65% de ellos estaría dispuesto a trabajar hasta 20 horas más, una quinta parte entre 20 y 30 horas, así como un 13% que dice estar dispuesto a trabajar más de 30 horas adicionales. Poco más de la mitad (55%) dice no trabajar más horas porque no ha conseguido más trabajo o no le dan más horas, otro 27% aduce razones de estudio y un 7% por motivos de familiares o personales. Es mayor la proporción de quienes aducen razones de no conseguir más trabajo en el interior (60%) que en Montevideo (52%). En promedio, los hombres y los egresados entre 23 y 29 años están dispuestos a trabajar más horas adicionales que las mujeres y los menores de 23 años. En el caso de los hombres, los principales motivos para no trabajar más horas es el estudio (30%) o por no haber conseguido más trabajo (52%), mientras que en las mujeres pesa más el segundo motivo (63%) que el estudio (17%). Para los más jóvenes, los motivos de estudio pesan más (34%), mientras que un 61% de quienes tienen edades entre 23 y 29 años es el no poder conseguir más trabajo. 3.2. No ocupados Del total de 398 egresados de BT que componen este universo objeto de estudio, en 126 casos (31,6%) no están ocupados ni en forma remunerada, ni como familiar no remunerado. Si analizamos este segmento encontramos que la tercera parte de ellos (41 casos) estuvieron buscando trabajo la semana anterior a la encuesta y otros 16 casos (13%) lo hicieron en las últimas cuatro semanas. Por lo cual el índice de desocupación queda determinado por 57 casos que representan un 14,3% del total y un 17,3% de la población activa (329 egresados).



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En Montevideo el índice de desocupación es del 12,6% y en el interior del país asciende al 17,5%. Para los hombres, el nivel de desocupación es de un 12,7%, mientras que entre las mujeres llega al 17,1%. Los más jóvenes (menores de 23 años) son quienes presentan los mayores índices de desocupación (16,2%), bajando al 13,2% para el tramo de 23 a 29 años y sin desocupados en el tramo de mayores de 29 años (Cuadro Nº 11).

Asimismo, los mayores niveles de desocupación se encuentran entre los egresados de las orientaciones agrarias (18%), Construcción (20%) y Administración (16,3%). Por el contrario este indicador baja al 7% para los egresados del área Informática y Termodinámica. En Electromecánica de los cuatro egresados, tres no trabajan, ni buscan hacerlo. El principal expediente al cual recurrieron quienes buscaban trabajo (Cuadro Nº 13) fueron los avisos en la prensa escrita (44%), en segundo término ofrecer su trabajo directamente en algunas empresas o con familiares y amigos (11% cada uno). Un 12% recurrió a agencias de colocaciones y en un solo caso se realizaron trámites para poner su propio negocio. El 44% hace menos de 6 meses que busca trabajo, un 30% entre 6 y 12 meses, un 12% entre 1 y 2 años y el 14% restante más de 2 años. Esta situación no impide que el 100% de los desocupados afirmen mantener su voluntad de encontrar trabajo, mientras que dentro del subgrupo que no trabaja, ni ha buscado hacerlo (69 casos), el 72% dice tener voluntad de trabajar. Cuadro Nº 11. Situación laboral

Situación laboral Número %/total %/situación Trabajan 272 68,3 100,0 En forma remunerada (266) (66,8) 97,8 Trabajo familiar no remunerado (6) (1,5) 2,2 No ocupados 126 31,7 100,0 Desocupado (57) (14,3) 45,2 No ocupado, no busca, disponible (50) (12,6) 39,7 No ocupado, no busca, no disponible

(19) (4,8) 15,1

Totales 398 100,0 Del total de mujeres que no trabajan, tres de cada 10 han buscado trabajo en las últimas cuatro semanas, mientras que entre los hombres que no trabajan ese porcentaje es de un 26%. Entre los más jóvenes (que no trabajan) más de la cuarta parte (25%) busca hacerlo, subiendo al 31% en el tramo de 23 a 29 años. Las mujeres son quienes recurren en mayor medida a los avisos de prensa para buscar trabajo, al igual que los egresados entre 23 y 29 años, mientras que los hombres lo hacen con familiares o amigos. El 83% de los hombres, así como el 88% de las mujeres que no trabajan, tienen voluntad de hacerlo, pero sólo el 63%



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de los hombres y el 57% de las mujeres están disponibles para empezar a trabajar.

CUADRO Nº 12: Cantidad de horas adicionales que estaría dispuesto a trabajar según zona deresidencia

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CUADRO Nº 13: Acciones realizadas para buscar trabajo la semana anterior segúnzona de residencia

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También se observan diferencias con relación a los antecedentes laborales,

donde la mitad de las mujeres que hoy no trabajan lo hicieron anteriormente, mientras que en los hombres esta proporción es del 64%. Respecto de los tramos de edades, el 71% de los más jóvenes y el 92% de los egresados de 23 a 29 años



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declaran su voluntad de trabajar, estando disponibles para hacerlo el 76 y 80% respectivamente. Del total de personas que no trabajan actualmente (126 casos), un 58% lo hizo antes, donde tres de ellos se encontraban en seguro de paro al momento de la encuesta. 3.3. Trabajan actualmente o lo hicieron antes Si consideramos el segmento de quienes actualmente trabajan, más aquellos que hoy no trabajan pero lo hicieron antes, tenemos un sub total de 345 casos. Sólo en 53 casos (13%) nunca han trabajado. Quienes han trabajado o lo hacen actualmente, un 36% comenzó a trabajar en los últimos tres años, el 43% lo hizo entre el año 1995 y 2000, otro 18% entre 1990 y 1995, mientras que el 3% restante comenzó a trabajar antes del año 1990. Poco más de la mitad ha tenido un solo trabajo (54%) desde que egresó del BT, un 38% tuvo dos o tres trabajos en ese período y un 3% dice haber tenido más de tres. El 5,5% restante no ha tenido ninguna ocupación desde que egresó del BT. En promedio, al egresar del BT han tenido 1,5 ocupaciones, verificándose en Montevideo una mayor rotación de trabajos que en el interior.

Según muestra el cuadro Nº 14, las ocupaciones más comunes son de empleados de oficina (26%), técnicos (29%) y como trabajadores no calificados (18%). Un 11% trabaja o trabajó como vendedores en comercios, un 5% como agricultores o trabajadores calificados agrícolas y el 4% como operadores y montadores de instalaciones y máquinas. Un 10% trabaja como cuentapropista (7% son local), otro 1% como patrón con personal a su cargo y en dos casos como miembros de una cooperativa de producción. La mayoría lo hace en situación de dependencia, 69% como empleado u obrero privado no familiar (49%) o familiar (20%), otro 12% como empleado u obrero público y el 7% como pasante. Los cuentapropistas predominan en Montevideo, así como los empleados públicos, mientras que los empleados u obreros en empresas familiares lo hacen en el interior del país. Los egresados de las orientaciones Informática y Termodinámica son quienes en mayor medida trabajan en relaciones de no dependencia, ocurriendo lo contrario con los egresados de Administración.

De acuerdo a las tareas que declaran realizar o haber realizado,

aproximadamente un 53% de los egresados de BT trabaja en tareas afines con su formación específica. En casi todas las orientaciones esta proporción se ubica cercana al 50%, con la excepción del área Informática donde el 69% trabaja en ocupaciones afines con su profesión. En el caso de los egresados de Administración el porcentaje es de 52%, pero se generan ciertas dudas por la categoría “oficinista” que es contabilizada como afín aunque en muchos casos seguramente no lo sea.



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CUADRO Nº 14: Ocupados por categoría de ocupación según zona de residencia

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Si recordamos que quienes perciben su trabajo actual (no el anterior) como

relacionado con su formación específica también es de un 53% y en general no existen grandes discrepancias con lo estimado por Interconsult. Justamente, la única excepción puede estar en Administración, donde se percibe un trabajo relacionado en el 44% de los casos. 3.4. Quienes no trabajan en ocupaciones afines con su formación Finalmente, en la sección de Actividad del egresado, se formulan algunas preguntas referidas al relacionamiento de su ocupación con la formación específica recibida en BT. Éstas están dirigidas sólo para quienes no trabajan pero lo han hecho antes y para quienes trabajan actualmente pero consideran que su actividad no está relacionada con su formación curricular.

Para este segmento, casi una cuarta parte considera que no ha encontrado un trabajo acorde con su formación específica por no estar “preparado suficientemente” (23% de las dos menciones), mientras que un 44%



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responsabiliza de esta situación a la “difícil situación económica del país”. Un 11% cree que no existen suficientes puestos de trabajo en su especialidad o que la misma está desactualizada (4%), otro 10% por considerar que gana más dinero en otra ocupación, y el 18% simplemente por no haber buscado trabajo. Si bien en todas las orientaciones el motivo principal se ubica en la situación económica del país (Cuadro Nº 15), esto adquiere mayor relevancia en los egresados del área de la Construcción (71%, en las dos menciones) y del área Administración (55%). En el área Agraria adquiere mayor relevancia la percepción de que no existe demanda (15%), en Informática que la preparación no es suficiente (30%), en Termodinámica que se gana más en otra actividad (27%), mientras que en Química existe mayor dispersión de motivos.

CUADRO Nº 15: Razón por la que no ha conseguido trbajo en su especialidad según la orientación que cursó _ 1º MENCION

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Cuando se pregunta por sus expectativas en cuanto al tipo de trabajo o tareas que desearían realizar, entre los egresados del área Agraria sobresalen quienes querrían trabajar en el “campo” (19%), como encargado de un establecimiento rural (9%), como técnico agrario (12%), como Ingeniero Agrónomo (5%) o en otras actividades afines con su formación (18%), aunque también se mencionan actividades no afines (12%) y quienes no saben (6%). En el área Informática, sus egresados prefieren trabajos relacionados con su formación en un 77% de los casos, en Termodinámica sube a un 83% y en Química es de 96%. Para los egresados de Administración, una quinta parte optaría por otras actividades, un 4% aspira a ser Contador y el 76% restante por diversas actividades afines con su formación específica.



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En términos generales, es posible decir que cerca de un 80% de los egresados que no trabajan en una ocupación relacionada con su formación específica quiere hacerlo, mientras que 16% busca otra ocupación diferente y el 3% aún no tiene claras sus preferencias. Los hombres perciben en mayor medida que las mujeres el hecho de que su preparación no fue suficiente como principal impedimento para conseguir un trabajo relacionado con su formación (26% versus 18%), mientras que los mayores de 22 años resaltan en mayor proporción la situación económica por la que atraviesa el país. Resumen Del total de egresados de los BT, uno de cada siete se encuentra desocupado al momento de realizar la encuesta. Quienes residen en la capital del país presentan índices de ocupación mayores y, asimismo, se encuentran los mayores índices de ocupación entre los egresados de las áreas Informática y Termodinámica en los hombres y los mayores de 30 años, mientras que las mujeres, los residentes en el interior y los menores de 23 años presentan indicadores de no ocupación mayores. En promedio, las horas trabajadas la semana anterior a la encuesta son 36, llegando a 38 horas por semana si se consideran las dos ocupaciones. El promedio de horas trabajadas habitualmente en la semana por las mujeres es inferior a los hombres y este indicador crece con la edad del entrevistado. La gran mayoría de los ocupados posee una sola ocupación (87%), Una amplia mayoría (67%) de quienes están ocupados declara su voluntad de trabajar más horas. El canal más común de obtener el empleo es a través de un familiar, amigo o compañero de estudio, así como por “búsqueda personal”. Poco más de la mitad de los entrevistados entiende que su ocupación se encuentra relacionada con la especialidad que cursó en el BT, donde claramente los egresados en Informática son quienes en mayor proporción tienen ocupaciones relacionadas con su especialidad Del total de egresados de BT, en el 31,6% de los casos no están ocupados ni en forma remunerada, ni como familiar no remunerado. Si analizamos este segmento, un 45% de ellos estuvieron buscando trabajo en las últimas cuatro semanas, por lo que el índice de desocupación queda determinado por un 17,3% de la población activa. Los menores índices de desocupación se observan en Montevideo entre los hombres y los mayores de 29 años, así como entre los egresados de las orientaciones de Informática y Termodinámica. Del total de personas que no trabajan actualmente, uno de cada seis lo hizo antes.



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Finalmente, en este capítulo podemos resaltar que, para quienes no trabajan pero lo han hecho antes y para quienes trabajan actualmente pero consideran que su actividad no está relacionada con su formación curricular, casi una cuarta parte considera que no ha encontrado un trabajo acorde con su formación específica por no estar “preparado suficientemente”, mientras que un 44% responsabiliza de esta situación a la “difícil situación económica del país”. Cerca de un 80% de los egresados que no trabajan en una ocupación relacionada con su formación específica quiere hacerlo, mientras que una quinta parte busca otra ocupación diferente o aún no tiene claras sus preferencias. 4. Situación socioeconómica familiar e Ingresos personales De los 15 aspectos utilizados en la encuesta para describir el equipamiento de los hogares (Cuadro Nº 16), en la quinta parte de los casos existen menos de cinco, en el 43% de cinco a siete, un 29% de los hogares poseen entre ocho y diez y en un 8% de los casos 11 o más. El nivel de equipamiento, como indicador de confort, es mayor en Montevideo que en el interior del país. De acuerdo a la orientación cursada por el egresados, se destacan con un mayor nivel de confort los hogares de los egresados de las áreas de Informática y Termodinámica, mientras que los menores niveles se observan en los hogares de quienes egresaron de las orientaciones agrarias. El 83% cuenta con telefonía fija en su hogar y el 44% con telefonía celular. La mitad tiene heladera con freezer, un 74% lavarropa programable, el 96% TV color, 53% videocasetera, 56% microonda, 58% un PC, 41% auto propio y el 29% tiene moto o motoneta. Finalmente, hogares con filmadora un 10%, aire acondicionado 6%, lavavajilla 8% y secarropa 12%.

CUADRO Nº 16 : Nivel de equipamiento de los hogares según zona de residencia

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Con relación a los ingresos personales (cuadro Nº 17), como se viera en el ítem 3.1., existen 272 egresados ocupados, 250 que estaban trabajando en forma remunerada al momento de la encuesta, seis que lo hacían como trabajador familiar no remunerado y 16 que no trabajaron la semana anterior pero volverían a su ocupación.

En suma, hay un total de 266 egresados con ocupaciones remuneradas, donde –según lo declarado por ellos- en el mes anterior a la encuesta, 218 recibieron ingresos por su trabajo (y, en algunos casos, también por contribuciones), 29 sólo por contribuciones de diferente tipo y en 13 casos no percibieron ningún ingreso. Sobre el total de ocupados (272), el 68% fue en carácter de empleado u obrero, otro 10% como trabajador por cuenta propia, el 2% como patrón o socio. Por su parte, entre quienes no están ocupados (126 casos), existen 56 casos (44% de los no ocupados, 14% del total) que percibieron algún ingreso en el mes anterior a la encuesta. El origen de estos ingresos responde a contribuciones por ayuda familiar, pensiones, becas, etc. o ingresos generados por trabajos anteriores. Ello hace que del total de 398 egresados incluidos en este análisis, 313 de ellos (78,6%) perciben algún tipo de ingreso. Cuadro Nº 17: Resumen de ingresos Ocupados No ocupados Totales

Categoría Número egresados

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Ingresos promedios

en $

Número egresados

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Ingresos promedios

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Número egresados

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en $ Empleados 178 (65,4) 5.224 178 (44,7) 5.224 TPC 25 (9,2) 4.036 25 (6,3) 4.036 Patrón/socio 3 (1,1) 7.683 3 (0,8) 7.683 Empleado/TCP 9 (3,3) 6.489 9 (2,2) 6.489 Sin dato 12 (4,4) 1 13 (3,3) Contribuciones 29 (10,7) 662 56 (42,8) 931 85 (21,3) 747 Sin ingresos 16 (5,9%) 69 (55,7) 85 (21,3)

Totales 272 (100) 5.081 126 (100) 931 398 (100) 3.682 El ingreso promedio mensual, calculado sobre el total de la población (excluyendo los 13 casos que no declaran sus ingresos), es de $ 3.682, cifra que sube a $ 5.081 entre los ocupados y de $ 931 entre los no ocupados (desocupados e inactivos). Un 21% no recibe ningún ingreso, la cuarta parte percibe ingresos inferiores a los dos SMN, otro 23% se ubica entre dos y cuatro SMN, el 14% entre cuatro y seis, y el 15% restante más de seis SMN.



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Para los residentes en Montevideo, el promedio sube a $ 4.536, el doble de lo percibido por los residentes en el interior del país (Cuadro Nº 18). Los egresados de las orientaciones Informática y Termodinámica son quienes perciben mayores ingresos promedios ($ 5.287 y 5.721 respectivamente), mientras que las orientaciones Agrarias son los de menores ingresos ($ 2.663). Las diferencias de ingresos por género no son tan apreciables, donde los hombres presentan un promedio de $ 3.870 y las mujeres de $ 3.345. Finalmente se percibe un crecimiento de los ingresos promedios mensuales en función de la edad. Los más jóvenes cuentan con ingresos promedio de $ 2.860, mientras que los mayores de 30 años casi tres veces más ($ 7.788) y los egresados entre 23 y 29 años 1,5 veces más ($ 4.424). Cuadro Nº 18: Ingresos totales (por todo concepto) según segmentos

Segmentos

Ingresos promedio en $

Totales 3.682 Montevideo 4.536 Interior 2251 Hombres 3.870 Mujeres 3345 Menos 23 años 2.860 23 a 29 años 4.424 30 o más 7.788 Agraria 2.663 Informática 5.287 Química 3.811 Termodinámica 5.721 Administración 3.783 Otras orientaciones 3.270 Si consideramos aquellos que perciben ingresos como empleado u obrero (público y privado), el promedio es de $ 5.224, de los cuales un 77% es generado por sueldos, otro 16% por prestaciones sociales, el 4% por comisiones y un 3% por retribuciones en especies. Los trabajadores por cuenta propia perciben un ingreso promedio de $ 4.036 (98% en dinero) y los patrones o socios de $ 7.683 (incluyendo utilidades). Finalmente es posible constatar que en un 25% de los casos se recibieron ingresos por contribuciones de diverso tipo. En promedio estos ingresos significan $ 747 al mes, siendo mayor en Montevideo ($ 1.040) que interior del país ($ 334), tanto en porcentaje de destinatarios como en dinero.



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Resumen

El nivel de equipamiento, como indicador de confort, es mayor en

Montevideo que en el interior del país. También exhiben un mayor nivel de confort los hogares de los egresados de las áreas de Informática y Termodinámica, mientras que los menores niveles se observan en los hogares de quienes egresaron de las orientaciones agrarias. Con relación a los ingresos personales, sobre el total de ocupados, el 68% fue en carácter de empleado u obrero, otro 10% como trabajador por cuenta propia, el 2% como patrón o socio. Por su parte, entre quienes no están ocupados el 44% percibió algún ingreso en el mes anterior a la encuesta (contribuciones por ayuda familiar, pensiones, becas, etc. o ingresos generados por trabajos anteriores). Ello hace que del total de egresados casi un 80% percibe algún tipo de ingreso. El ingreso promedio mensual, calculado sobre el total de la población, es de $ 3.682, cifra que sube a $ 5.081 entre los ocupados y de $ 931 entre los no ocupados (desocupados e inactivos). Un 21% no recibe ningún ingreso. Los mayores promedios se observan para los residentes en Montevideo, los egresados de las orientaciones Informáticas y de Termodinámica, para los mayores de 29 años y en los hombres. 5. Opiniones Prácticamente seis de cada diez entrevistados (58%) expresa su satisfacción con la formación recibida en UTU (Cuadro Nº 19), mientras que un 7% se muestra insatisfecho y el 35% se ubica en una postura intermedia (puntaje 3). En promedio el nivel de satisfacción (en la escala de 1 a 5) es de 3,7, por debajo de “bueno”. En el interior es levemente superior que en Montevideo. Las mujeres aparecen como más satisfechas que los hombres, al igual que los egresados de Química y los egresados de 23 a 29 años. El principal motivo para haber elegido el BT como opción curricular, según lo declarado por el 52% de los egresados (2 menciones), es en función de poder ingresar a la Universidad pero, a diferencia de Secundaria, en posesión de un título intermedio. En segundo lugar se menciona la formación “específica e integral” que se obtiene (35%) y en tercer término un 26% cree que el BT le asegura una mejor inserción en el mercado laboral.

El resto de las respuestas está más disperso y son menos específicas, destacándose solamente el 15% que dice haber optado por el BT por ser lo que “más le interesó”. Para los residentes en Montevideo, así como los egresados de



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Informática tiene más “peso” el BT como el mejor camino hacia la Universidad, mientras que en el interior y los egresados de Química lo tiene la posibilidad de inserción laboral.

CUADRO Nº 19 : Opinión acercad e la opinión que recibió en UTU según zona de residencia

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El principal canal de información sobre la oferta educativa del BT (34%) es la propia información otorgada en UTU para quienes se interesaron previamente. En segundo lugar (23%) a través de los medios de comunicación, mientras que un 11% por conocidos que estudiaban en UTU y el 5% por familiares o conocidos que trabajaban en esa misma especialidad. Con relación a las expectativas al momento de ingresar, se muestran dos grandes vertientes: quienes veían al BT como un escalón para ingresar a la Universidad (39%) u otros estudios (7%) y quienes lo consideraban como una buena opción para ingresar al mercado de trabajo (39%). Lógicamente existen quienes consideraban ambas opciones (13%). Esto se refuerza por una mayoría del 60% que considera al BT como una mejor opción que Secundaria para luego ingresar a la Universidad. Otra cuarta parte cree que Secundaria es mejor alternativa y un 11% no encuentra diferencias en este sentido. Los residentes en Montevideo son más enfáticos en cuanto a las virtudes del BT para acceder a los estudios universitarios (Cuadro Nº 20). Una clara mayoría del 71% entiende que la formación del Ciclo Básico es adecuada para cursar el BT, por el contrario un 12% la considera insuficiente y el 16% responde “más o menos”. En este sentido, los residentes en el interior del país tienen una opinión más favorable sobre la formación que brinda el CB.



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CUADRO Nº 20 : Expectativas al momento de elegir cursar la modalidad de BachilleratosTecnológicos según zona de residencia

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Cuando se les solicita a los entrevistados que califiquen la formación que recibieron para diferentes atributos (Cuadro Nº 21) utilizando una escala del 1 al 5, las respuestas tienden a ubicarse en el centro de la escala, variando de 2,9 a 3,9. Específicamente, las valoraciones que realizan los egresados sobre los diferentes atributos muestran juicios más bien cautos que describen su formación como relativamente útil, buena y actualizada (promedios 3,9); ni fácil, ni difícil (3,4); no muy alentadora (3,4); ni superficial, ni profunda (3,2); poco reconocida (3,1); más práctica que teórica (2,9) y poco planificada (2,9). Los atributos mejor evaluados son su utilidad y su actualización. Los aspectos evaluados mayoritariamente en forma negativa son su falta de planificación y el reconocimiento del título. Las opiniones se dividen cuando se piensa en la suficiencia de la formación recibida para acceder al mercado laboral. Un 46% entiende que lo ayudará, ya sea “bastante” (35%) o mucho (11%), mientras que un 52% cree que no lo ayudará, sea en absoluto (11%) o señalando que sólo lo ayudará “algo” (41%). Los residentes en el interior del país se muestran más escépticos que los montevideanos en cuanto a las posibilidades laborales en función de la formación recibida en el BT. Los egresados del área Agraria son los menos convencidos con las posibilidades que les brinda su formación para insertarse mejor en el mercado laboral, al contrario de lo que ocurre con quienes egresaron de Informática y Química.



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CUADRO Nº 21 : Calificación de la formación recibida en UTU según zona de residencia

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Quienes expresan una visión más “optimista” aducen que la formación recibida les brindó una buena capacitación y conocimientos, por ser una formación más “práctica” que les "abre el mercado" y es aplicable a las exigencias del mismo. Otros lo dicen por su propia experiencia laboral, donde la formación recibida les posibilitó progresar en su trabajo. Quienes no confían en la formación recibida para mejorar su situación laboral afirman que ésta sólo les brinda conocimiento básicos, falta más formación “práctica, no les abre las puertas del mercado o por ser un tilo poco reconocido.



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CUADRO Nº 21 :Calificación de la formación recibida en UTU según zona de residencia (Continuación)

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Si bien el grado de satisfacción con la formación recibida en el BT puede catalogarse de “media”, el 80% de los egresados no duda en afirmar que volvería a elegir el BT como opción. Por el contrario, un 11% elegiría Secundaria y el 9% dispersa sus respuestas con poca especificación o claridad en las alternativas.

También resulta interesante observar que el 85% de los egresados del BT

seguramente lo recomendarían (55%) o probablemente (31%) lo harían (Cuadro Nº 22). Un 13% no lo recomendaría, 15% en Montevideo y 11% en el interior del país. Los egresados de Termodinámica aparecen como los menos convencidos con la decisión tomada y el 40% de ellos no lo recomendaría. También los hombres y los mayores de 30 años expresan su disconformidad en mayor proporción.



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CUADRO Nº 22: ¿Recomendaría a sus amigos y parientes que cursaran esta modalidad?

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Resumen

Prácticamente seis de cada diez entrevistados expresan su satisfacción con la formación recibida en UTU, mientras que un 7% se muestra insatisfecho y el resto se ubica en una postura intermedia. En promedio, el nivel de satisfacción (en la escala de 1 a 5) es de 3,7, por debajo de “bueno”. En el interior es levemente superior que en Montevideo, las mujeres aparecen como más satisfechas que los hombres, al igual que los egresados de Química y los egresados entre 23 a 29 años. Los principales motivos para haber elegido el BT son poder ingresar a la Universidad, por la formación “específica e integral” que se obtiene y porque le asegura una mejor inserción en el mercado laboral. Por otra parte, con relación a las expectativas al momento de ingresar, se muestran dos grandes vertientes: quienes veían al BT como un escalón para ingresar a la Universidad u otros estudios (46%) y quienes lo consideraban como una buena opción para ingresar al mercado de trabajo (39%). Una clara mayoría del 71% entienden que la formación del Ciclo Básico es adecuada para cursar el BT.

Las valoraciones que realizan los egresados sobre los diferentes atributos muestran juicios más bien cautos, que describen su formación como relativamente útil, buena y actualizada (promedio 3,9); ni fácil, ni difícil (3,4); no muy alentadora (3,4); ni superficial, ni profunda (3,2); poco reconocida (3,1); más práctica que teórica (2,9) y poco planificada (2,9). Los atributos mejor evaluados son su utilidad y su actualización. Los evaluados mayoritariamente en forma negativa son su falta de planificación y el reconocimiento del título.

Las opiniones se dividen cuando se piensa en la suficiencia de la formación recibida para acceder al mercado laboral. Un 46% entiende que lo ayudará “bastante” o mucho, mientras que un 52% cree que no lo ayudará en absoluto o sólo lo ayudará “algo”. Si bien el grado de satisfacción con la formación recibida en el BT puede catalogarse de “media”, el 80% de los egresados no duda en afirmar que volvería a elegir el BT como opción y el 85% lo recomendaría.



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IV.2. Análisis comparativo para las diferentes generaciones de egresados Para este análisis se consideran cuatro segmentos:

- egresados 1996 (encuesta 1998), - egresados 1999 (encuesta 2001); - egresados 2000; y - egresados 2001-2002 (encuesta 2003).

En el primer segmento (483 casos) la gran mayoría son egresados del 96,

en el segundo (86 casos) son la primera generación de egresados de la reforma 97, mientras que los otros dos segmentos (186 y 129 casos respectivamente) fueron encuestados por Interconsult en agosto-setiembre del 2003. 1. Caracterización de los egresados En primer lugar, es posible constatar que la proporción de egresados del BT que residen en el interior se ha incrementado levemente en las últimas generaciones, desde un 33% en el 99 a un 40% actual. En cambio, entre los egresados anteriores a la reforma del 97, el interior suponía más de la mitad (52,4%) (Cuadro Nº 23). La participación de la mujer en las distintas generaciones de egresados ha sido más errática. En el 96 era la mayoría (54%), bajando a un 30% en la primera generación de egresados de BT, luego subió a 43% en la generación 2000, para volver a caer en las últimas generaciones (28%). Por su parte, el tramo de edad más joven presenta su menor participación en la primer generación de egresados BT (23%), ubicándose cerca del 40% en las generaciones posteriores. Si consideramos los egresos por orientación curricular, se nota un incremento del área agraria, hoy cercana al 30%, un cierto decrecimiento de la orientación Informática y una duplicación de los egresados de Termodinámica en las últimas generaciones. En el caso de Administración, el comportamiento ha sido variable, con su pico más salto en la generación 2000 donde llegan a representar un 31% del total de egresados. Para la generación anterior a la reforma, no es posible establecer parámetros comparativos, con la excepción del área agraria, que en dicha generación llegan a ser un 35% del total.



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Cuadro Nº 23:Caracterización de las poblaciones

Egresados 96 Egresados 99 Egresados 2000

Egresados 2001-2002

Montevideo 47.6 67.4 62.4 60.5 Interior 52.4 32.6 37.6 39.5 Hombres 46.4 70.1 57 72.1 Mujeres 53.6 29.9 43 27.9 Menores 23 años 54.9 76.7 58.1 62.8 23 a 29 años 45.1 23.3 41.9 37.2 Agraria 35.2 25.6 31.2 29.5 Informática 8.3 27.9 16.7 18.6 Química 12.8 15.0 13.2 Termodinámica 5.8 5.4 10.1 Administración 12.8 31.2 15.5 Otras 56.5 0.0 0.0 13.2 Con relación al nivel de equipamiento en el hogar, la generación de egresados en el 2000 es la mejor equipada, mientras que las anteriores al 2000 son quienes presentan menores niveles de equipamiento. 2. Nivel de estudios La generación 2000 es la que alcanza un mayor nivel de inserción universitaria llegando al 56%, proporción que baja al 42% en las últimas generaciones y que parte de un 40% en la primer generación de egresados del BT (Cuadro Nº 24). Antes de la reforma, el porcentaje de egresados de UTU que realiza estudios universitarios es de sólo el 5%. Es necesario tener en cuenta que los egresados 2001-2002 son muy recientes y posiblemente algunos de ellos ingresen a la Universidad en 2004, aunque se observa una tendencia a incrementarse las opciones por postgrado de UTU (se duplica) en detrimento de los estudios universitarios.

También es la generación 2000 la que presenta un mayor índice de egresados que continúan estudiando (63,4%), levemente superior a la generación 99, pero que baja a 58% en las últimas generaciones. Comparando egresados BT con anteriores a la reforma observamos que el porcentaje de quienes continúan estudiando un 50% superior.



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Con excepción de la generación 2000, en el resto las mujeres continúan estudiando en mayor proporción que los hombres (Cuadro Nº 25), mientras que con la excepción de quienes egresaron antes del 97, los más jóvenes continúan estudiando en mayor medida que quienes tienen 23 años o más. En este último tramo de edad se nota una sensible mejora con las sucesivas generaciones de egresados. Asimismo, con la excepción de la generación 99, los residentes en la capital del país continúan estudiando en mayor proporción que quienes residen en el interior, aunque en las últimas generaciones prácticamente no existen diferencias por lugar de residencia. En todos los casos, los egresados de las áreas Agraria y Química son quienes en mayor medida continúan con algún estudio formal. 3. Inserción laboral El nivel de ocupación decrece de 79% en las generaciones anteriores a 1997 (Cuadro Nº 24) hasta 63,6% en la generación 2001-2002, aunque en este último caso, ello se relaciona -en parte- con la edad del egresado. Esta situación lleva a que la tasa de actividad también disminuya en las sucesivas generaciones. Por su parte, el índice de desocupación (desocupados/activos) es cercano al 20% para la primera generación de egresados del BT y para las últimas, bajando al 16,6% en la generación 2000 y a 16,3% entre los egresados anteriores a 1997. En la generación 2000 es donde observamos el mayor porcentaje de quienes no buscan trabajar por estar estudiando: 17%, similar al de las últimas generaciones de egresados (16%). Quienes egresaron en 1996, plan anterior a la reforma, se caracterizan por un mayor nivel de actividad, menor desempleo y menor índice de estudiantes. Considerando sólo a quienes están ocupados en el período de referencia, la generación 2000 es la que trabaja más horas por semana y las últimas generaciones quienes trabajan menos horas, a pesar de ser quienes en mayor medida tienen más de un empleo (15%). También se constata que las generaciones anteriores al 2000 y 2001-2002, con menos horas de trabajos, expresan mayor voluntad de trabajar más horas. La ocupación dependiente se observa en seis de cada diez egresados de la generación 2000 (cuadro Nº 24), un 57% en la generación 99 y sube al 67% en los egresados antes del 97. Sin embargo, ese porcentaje baja al 51% en las últimas generaciones, donde se incrementan los cuentapropistas (11%).

Esta situación lleva a que las generaciones 2000 y anteriores presenten mayores índices de cobertura de salud en su trabajo (55 y 57%) y, en general, con relación a los egresados 2001-2002 (50% cubiertos por su trabajo). Ocurre lo mismo en cuanto a derechos de aguinaldo y salario vacacional.



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En el grupo de desocupados propiamente dichos o que buscan trabajo por primera vez (57 casos), en la generación 2000 es donde se observa un tiempo mayor de búsqueda de trabajo y menor voluntad de trabajar. Continuando con el segmento de ocupados, cabe recordar que el 53% de ellos declara trabajar en ocupaciones relacionadas con la formación recibida en BT. Dicho porcentaje es mayor para la generaciones 96 y 99 (59%), valor levemente superior a la generación 2000, pero que desciende a 47,6% en las últimas generaciones. Mientras que para las generaciones anteriores al 2000 y 2001-2002 el principal problema para no obtener un trabajo relacionado con su formación es el no contar con una formación suficiente (36 y 33% de las menciones respectivas), para la generación 2000 el principal escollo radica en la situación económica del país (45%). Si consideramos los diferentes segmentos, la inserción laboral de los hombres es claramente mejor que en las mujeres (cuadro Nº 25), con la excepción de la generación 99, donde las mujeres presentan un menor índice de desocupación. Por otra parte, los residentes en Montevideo presentan para todas las generaciones un mejor índice de inserción laboral, situación que se encuentra acentuada en la generación 99 y en las últimas generaciones. Los menores de 23 años presentan mayores índices de desocupación, situación que se agrava en la generación 99 y en las últimas. Mientras que en la generación 2000 los más castigados por la desocupación son los egresados del área Agraria, en las otras dos generaciones se suma quienes egresaron de Administración. 4. Ingresos En la medida en que existe una fuerte asociación entre ingresos y edad del egresado, la generación 99 y las últimas generaciones son las que presentan un ingreso promedio menor (por todo concepto): $ 2.677 y $ 3.287 respectivamente (Cuadro Nº 24). Los egresados 2000 y anteriores al 97 tienen un ingreso similar (en pesos corrientes) de $ 3.680, 1,1 veces superior a las ultimas generaciones y 1,4 veces al ingreso de la generación 99. Si consideramos el ingreso percibido por trabajo productivo, las diferencias se acortan, destacándose el menor ingreso de la generación 99. Los egresados del 2000 son quienes en mayor proporción perciben ingresos por su ocupación como empleado u obrero (87%), con el promedio más bajo de esta categoría laboral ($ 5.100). Por el contrario, los últimos egresados tienen un promedio de ingresos mayor ($ 5.416) pero con un 74% en la categoría de trabajador dependiente. El ingreso promedio mayor, como empleado u obrero lo obtienen quienes egresaron antes del 2000: $ 5.609. Como trabajador independiente o cuentapropista, la mayor proporción se observa en las últimas generaciones de egresados que muestran una clara



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diferencia con las otras (16% versus 9,5%). En cuanto a los ingresos de esta categoría laboral, el mayor es para la generación 2000 ($ 4.900) y el menor para egresados anteriores al 2000 ($ 2.400). Por su parte, el mayor promedio de ingresos como patrón o socio se observa en las últimas generaciones de egresados ($17.550), disminuyendo a $5.000 en las anteriores al 2000 y siendo de sólo $500 en la generación 2000 (2 casos). Finalmente, por otros conceptos, los menores ingresos se dan en las generaciones 2001–2002. La relación de ingresos por trabajo entre hombres y mujeres (cuadro Nº 25) muestra un índice menor a uno sólo en los egresados del 99, llegando a su mayor valor en las últimas generaciones (1,5). Montevideo en relación al interior siempre es mayor a uno, pero en la generación 99 llega prácticamente a ser cuatro veces mayor. La relación de ingresos por trabajo, entre los mayores de 22 años y los menores de 23 es de 1,6, con la excepción de la generación 99 que baja a 1,2. Finalmente, los no ocupados (desocupados e inactivos) de las últimas generaciones son quienes perciben menos ingresos: $ 634 (62% ningún ingreso), mientras que los egresados en el año 2000, con un 47% que recibe algún tipo de ingreso, son los de mayor promedio: $ 1.171. 5. Opiniones En el capítulo de opiniones observamos que los más satisfechos con la formación recibida en BT son los egresados 2000, donde un 65% se expresa satisfecho o muy satisfecho (cuadro Nº 24), con un puntaje promedio de 3,8 (en la escala del 1 al 5). El resto se ubica en un promedio de 3,5. Si bien la comparación con los egresados antes de la reforma no es totalmente confiable (distinta formulación de la pregunta), es posible observar que éstos se expresan más conformes que el resto: 89% de satisfacción con la formación recibida en UTU.

Por otra parte, los egresados 2000 son quienes en mayor medida eligieron la modalidad BT como forma de acceder a la Universidad y contar con un título intermedio, mientras que los egresados antes del 2000 ponen un mayor énfasis en las posibilidades de inserción laboral. Esta situación también se refleja en el hecho que la generación 2000 tenía mayores expectativas que el resto de continuar estudios universitarios al momento de ingresar al BT, mientras que los anteriores al 2000 las tenían en el ingreso al mercado de trabajo. Las últimas generaciones manifiestan opiniones en este aspecto más cercanas a los anteriores al 2000. Más de la mitad de los egresados en el 2000 consideran que la formación recibida en el BT los ayudó bastante (40%) o mucho (11%) para mejorar en su trabajo, mientras que estos porcentajes bajan al 40% en las últimas generaciones. La primera generación de egresados del BT es la que presenta un mayor índice en este aspectos, siendo un 71% quienes afirman que su formación los ayudó en su inserción laboral. Claramente, en este aspecto se observa un decrecimiento en la



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satisfacción de las sucesivas generaciones de egresados. También es posible verificar la mayor satisfacción o conformidad de la generaciones 1999 y 2000 cuando califican los distintos atributos del BT. Más de ocho de cada diez (84%) de los egresados en 1999 y 2000 volverían a elegir el BT, así como un 86% y 89% de ellos seguramente o probablemente lo recomendaría. En el caso de las últimas generaciones el nivel de “entusiasmo” por el BT es menor, con un 76 o 77% que volvería a tomar esa opción y un 82% que lo recomendaría. Cuadro Nº 24: Indicadores comparativos entre generaciones egresadas del BT EGRESADOS del BT INDICADORES 1996 1999 2000 2001 / 2002 _________________________________________________________________________ Situación ocupacional Ocupados 78,7 67,4 67,2 63,6 Desocupados 15,3 16,3 13,4 15,5 Inactivo, estudia 1,4 10,5 17,2 16,3 Inactivo, no estudia 4,6 5,8 2,2 4,7 Índice desocupación 16,2 19,4 16,6 19,6 Tasa Actividad 94,0 83,7 80,6 79,1 Ocupados y/o estudian 80,1 73,2 84,4 79,9 Cobertura de salud Privada 62,7 70,9 71,1 69,0 Pública 30,6 19,8 22,9 28,7 Ninguna 6,7 8,1 6,0 2,3 Tipo de Ocupación No trabaja 21,2 32,5 32,8 36,4 Empleado / obrero 66,7 55,8 58,1 49,6 TCP, con local 5,0 2,3 4,8 7,0 TCP, sin local 4,6 3,5 1,6 3,1 Socio o patrón 1,9 0,0 0,5 2,3 TF no remunerado 0,6 1,2 2,2 1,6 Ingresos Ingresos promedio, total ($) 3.678,8 2.677,2 3.680,0 3.287,0 Ingresos promedio, trabajo ($) 4.528,8 3.751,3 4.170,0 4.431,0 Sin ingresos 24,2 46,5 17,4 17,1 N 483 86 186 129



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Cuadro Nº 24: Indicadores comparativos entre generaciones egresadas del BT (continuación) EGRESADOS del BT INDICADORES 1996 1999 2000 2001 / 2002 _________________________________________________________________________ Continúa estudiando Sí 40,3 62,8 63,4 58,1 No 59,7 37,2 36,6 41,9 Relación 0,7 1,7 1,7 1,4 Nivel estudios Bachillerato 45,6 3,5 19,4 30,2 Curso Técnico 48,8 55,8 20,5 24,0 Mag./Profesorado 0,6 1,2 4,3 3,9 Universidad 5,0 39,5 55,8 41,9 Ocupación relacionada Para quienes trabajan 58,7 58,6 56,8 47,6 Para el total 46,2 39,5 38,2 30,2 Satisfacción con formación recibida Satisfecho 88,8 58,1 65,1 49,6 Más o menos 9,1 30,2 30,6 42,6 Insatisfecho 2,2 11,7 4,3 7,8 Lo ayudó en su trabajo Sí 70,9 51,1 39,6 Algo 26,7 39,2 43,4 Nada 0,0 8,6 14,7 98,9 97,7 Volvería a elegir BT 84,0 84,4 76,0 Recomendaría Seguro 63,9 63,4 45,0 Probable 22,1 25,3 37,2 N 483 86 186 129



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Cuadro Nº 25: Indicadores comparativos para las generaciones egresadas del BT, según distintos segmentos EGRESADOS INDICADORES 1996 1999 2000 2001/2002 ___________________________________________________________________ Tasa desempleo Hombres 10,9 22,4 13,9 17,3 Mujeres 21,5 13,0 20,3 25,9 Montevideo 14,4 13,7 13,3 14,5 Interior 18,1 33,3 19,4 31,2 < 23 años 18,2 22,2 19,2 24,6 23 a 29 años 13,4 11,1 15,2 16,2 Tasa de actividad Hombres 99,6 80,3 81,1 80,7 Mujeres 90,0 92,0 80,1 75,0 Montevideo 96,5 88,0 84,5 78,4 Interior 91,7 75,0 74,2 64,0 < 23 años 93,2 81,8 75,0 75,0 23 a 29 años 95,0 90,0 82,7 82,2 Trabaja y/o estudia Hombres 87,9 68,9 87,7 82,8 Mujeres 73,4 84,0 80,1 72,3 Montevideo 83,0 82,8 88,8 83,3 Interior 77,4 53,6 77,1 74,0 < 23 años 78,5 69,7 82,7 77,7 23 a 29 años 82,1 85,0 86,7 80,0 Cobertura salud privada Hombres 69,3 70,5 78,3 71,0 Mujeres 60,6 72,0 53,3 53,9 Montevideo 70,8 75,9 73,2 75,6 Interior 55,3 60,8 75,6 58,0 < 23 años 56,7 71,2 65,4 67,1 23 a 29 años 70,2 70,0 70,6 68,9 N 483 86 186 129



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Cuadro Nº 25: Indicadores comparativos para las generaciones egresadas del BT, según distintos segmentos (continuación)

EGRESADOS INDICADORES 1996 1999 2000 2001/2002 ___________________________________________________________________ Relación de ingresos (por trabajo) Hombres/mujeres 1,4 0,8 1,1 1,5 Montevideo / Interior 1,3 3,8 1,8 1,2 23 a 29 / < 23 años 1,6 1,2 1,6 1,6 Ocupación relacionada Hombres 53,3 55,3 63,5 46,8 Mujeres 49,5 65,0 47,1 50,0 Montevideo 47,9 61,4 52,9 47,5 Interior 54,8 50,0 65,0 45,5 < 23 años 46,0 57,1 52,4 44,2 23 a 29 años 57,4 62,5 60,7 54,8 Continúa estudiando Hombres 37,4 60,7 67,0 54,8 Mujeres 42,8 68,0 58,8 66,7 Montevideo 39,6 56,9 73,3 59,0 Interior 21,9 75,0 47,1 58,0 < 23 años 28,9 69,7 71,2 65,8 23 a 29 años 41,0 40,0 57,3 51,1 Satisfacción con formación Hombres 87,8 52,4 60,4 49,5 Mujeres 91,5 72,0 71,3 50,0 Montevideo 87,8 65,5 70,3 41,1 Interior 89,8 42,8 62,5 45,4 < 23 años 87,5 56,0 63,5 46,0 23 a 29 años 90,4 65,0 68,0 55,5 N 483 86 186 129



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Resumen

La proporción de egresados del BT que reside en el interior del país se ha incrementado levemente en las últimas generaciones, mientras que la participación de la mujer en las distintas generaciones ha sido más errática. Por otra parte, se anota un incremento del área agraria, un cierto decrecimiento de la orientación informática y una duplicación de los egresados de Termodinámica en las últimas generaciones. La generación 2000 es la que alcanza un mayor nivel de inserción universitaria, aunque se observa una tendencia a incrementarse las opciones por postgrado de UTU en detrimento de los estudios universitarios. También es la generación 2000 la que presenta un mayor índice de egresados que continúan estudiando. El nivel de ocupación decrece en las últimas generaciones y ello lleva a que la tasa de actividad también disminuya en las sucesivas generaciones. Por su parte, el índice de desocupación es menor en la generación 2000 y donde observamos el mayor porcentaje de quienes no buscan trabajar por estar estudiando. Considerando sólo a quienes están ocupados en el período de referencia, la generación 2000 es la que trabaja más horas por semana y las últimas generaciones quienes trabajan menos horas.

En las generaciones 96 y 99 es donde se encuentra el mayor porcentaje que declara trabajar en ocupaciones relacionadas con la formación recibida en BT, mientras que para las generaciones anteriores al 2000 y 2001-2002 el principal problema para no obtener un trabajo relacionado con su formación es el no contar con una formación suficiente. En la medida en que existe una fuerte asociación entre ingresos y edad del egresado, la generación 99 y las últimas generaciones son las que presentan un ingreso promedio menor (por todo concepto). Los egresados 2000 y anteriores al 97 tienen un ingreso similar, 1,1 veces superior a las ultimas generaciones y 1,4 veces al ingreso de la generación 99.

Los más satisfechos con la formación recibida en BT son los egresados 2000. También es posible observar que estos son quienes en mayor medida eligieron la modalidad BT como forma de acceder a la Universidad y contar con un título intermedio, mientras que los egresados antes del 2000 ponen un mayor énfasis en las posibilidades de inserción laboral.



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IV.3. Análisis comparativo con la población de jóvenes entre 23 y 29 años. Este análisis comparativo se realiza tomando como referencia a la población de jóvenes entre 23 y 29 años, residentes en el país, utilizando la Base de Datos de la Encuesta Continua de Hogares del INE. En total tenemos 9.171 individuos (57% en Montevideo y 43% en el interior del país) que responde al tramo de edad definido como referente. Dentro de esta población se diferencia la sub población de jóvenes entre 19 y 29 años que egresaron del bachillerato de secundaria (3356 casos). La comparación se establece sobre las variables de situación ocupacional, estudios curriculares e ingresos. 1. Situación ocupacional

En primer lugar encontramos que la tasa de desempleo general es de 23,6%, la cual se mantiene entre los bachilleres de secundaria, pero baja a 17,3% en los egresados BT. También los egresados del BT presentan una mayor tasa de actividad y un mayor porcentaje de ocupados y/o estudiantes que las otras poblaciones (Cuadro Nº 26).

Si consideramos las tres poblaciones, vemos que las asimetrías entre los diferentes segmentos se mantienen (cuadro Nº 27), aunque no en todos los casos en igual medida. En los tres casos, quienes residen en Montevideo, los mayores de 23 años y los hombres presentan las menores tasas de desocupación, mientras que quienes residen en el interior, los menores de 23 años y las mujeres muestran los mayores índices. La asimetría entre Montevideo y el interior del país es más marcada entre los egresados de BT, mientras entre tramos de edades es menor que en las otras poblaciones. Por otra parte, el porcentaje de personas que no están activas económicamente es menor entre los egresados de BT, aunque con una cobertura de salud similar a los egresados de la EMS (cuadro Nº 27). El inactivo que no estudia también es menor en la población de egresados del BT, aunque sin mucha diferencia con los egresados de la EMS, quienes presentan una mayor proporción de inactivos que estudian. En términos generales, sobre la situación ocupacional de estas tres poblaciones (cuadro Nº 27), podemos decir que los egresados de ambos bachilleratos se encuentran en una mejor situación que la población general de jóvenes entre 19 y 29 años. Entre ambas poblaciones de bachilleres, los egresados de BT logran una mejor inserción laboral, siendo superados por los egresados de EMS en cuanto a porcentaje de inactivos que continúan estudiando, sin muchas diferencias en cobertura de salud, ni tipo de ocupación. La mejor situación laboral de los egresados de BT queda más marcada en Montevideo y entre los jóvenes menores de 23 años y entre los hombres.



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Cuadro Nº 26: Tasa de desempleo BT EMS Población total Totales 17,3 23,6 23,6 A. Montevideo 14,4 20,2 21,2 B. Interior 23,3 24,1 24,0 Relación B/A 1,6 1,2 1,1 A. Hombres 15,3 19,5 18,6 B. Mujeres 21,2 23,8 25,6 Relación B/A 1,4 1,2 1,4 A. Menor 23 20,5 29,0 28,2 B. 23 a 29 15,2 17,0 17,6 Relación A/B 1,3 1,7 1,6 Cuadro Nº 27: Comparativo de situación laboral

Ocupados Desocupados Inactivos, no estudia

Inactivos, estudia

Totales

BT EMS Pob total

BT EMS Pob total

BT EMS Pob. total

BT EMS Pob. total

BT EMS Pob. total

Totales 68,3 59,9 61,8 14,3 18,8 19,2 3,0 3,8 8,6 14,5 17,6 10,4 100 100 100 Mdeo. 74,9 61,2 63,0 12,6 19,0 20,1 1,6 2,8 9,6 10,9 17,0 7,3 100 100 100 Interior 57,0 56,4 60,2 17,4 18,1 18,0 5,4 6,5 7,3 20,1 19,0 14,4 100 100 100 Hombres 70,9 65,6 73,7 12,8 17,2 16,2 1,6 1,0 6,7 14,7 16,2 3,4 100 100 100 Mujeres 63,6 56,0 50,7 17,1 19,9 21,9 5,7 5,7 10,5 13,6 18,5 17,0 100 100 100 Menor 23 62,6 33,8 48,7 16,2 25,6 24,6 2,7 4,5 16,9 18,5 36,1 9,8 100 100 100 23 a 29 73,6 73,9 70,2 13,2 15.1 15,7 3,1 3,4 3,3 10,1 7,6 10,8 100 100 100

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 2. Ingresos Esta situación también se refleja en los ingresos, pero con diferencias muy leves entre los egresados de ambos bachilleratos, según muestra el cuadro Nº 28. Tomando como base el ingreso total de la población general de jóvenes entre 19 y 29 años, los egresados del BT los superan en 1,3, mientras que quienes egresaron del EMS en 1,25. Cuando esta relación se calcula sobre quienes perciben ingresos por trabajo, los egresados de la EMS son quienes están en mejor situación (1,26, contra 1,1 de los BT). Cuadro Nº 28: Distribución de ingresos

Egresados BT (%) Egresados EMS (%0)

Población General (%)

Ninguno 21,4 32,8 30,1 Menos 2 SMN 24,1 10,8 19,1 2 a 4 SMN 22,8 23,4 26,4 4 a 6 SMN 13,8 15,1 13,6 Más de 6 SMN 14,6 18,0 10,7 Sin dato 3,3 0,0 0,0 Total 100,0 100,0 100,0 Promedios sobre el total (en pesos)

$ 3.623

$ 3.446

$ 2.741

Relación de ingresos sobre población total

1,32

1,25

1,0

Promedios sobre quienes perciben ingresos (en pesos)

$ 4.278

$ 5.100

$ 4.045

Relación de ingresos sobre población total

1,05

1,26

1,0

Analizando los diferentes segmentos con los de quienes perciben algún tipo de ingreso (cuadro Nº 29), se corrobora que, también en materia de ingresos, los montevideanos, los hombres y los mayores de 23 años se encuentran en mejor situación en las tres poblaciones. Las diferencias entre géneros están menos marcadas entre los egresados del BT, al igual que entre tramos de edad. Pero ocurre lo inverso con el lugar de residencia, mostrando una mala situación en materia de ingresos para los BT que residen en el interior del país. Cuadro Nº 29: Promedios de ingresos (sobre quienes perciben ingresos)

Relaciones de ingresos

Egresados BT ($) Egresados EMS ($)

Población General ($)

Montevideo/Interior 1.6 1.4 1.5 Hombres/mujeres 1.2 1.5 1.6 23 a 29/Menor 23 1.6 1.9 2.2

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 3. Educación Lógicamente, la comparación de nivel educativo formal tiene sentido entre egresados de los dos bachilleratos que cuentan con el mismo “piso”. Al comparar ambos grupos (cuadro Nº 30), observamos que las diferencias no son muy grandes.

Por un lado, los egresados del BT optan en mayor medida por los cursos técnicos (donde se incluyen los pos grados) y una menor inserción universitaria.

Por otra parte, existe una mayor proporción de los egresados del BT que

culminan sus estudios con el bachillerato, 22, 4 contra 20% de los bachilleres “comunes”. Sin embargo, un 61% de quienes egresaron recientemente del BT continúa estudiando, mientras que dicha proporción baja a 55% para los egresados de la EMS y a 28% para la población total de jóvenes entre 19 y 29 años.

En este aspecto se debe tener en cuenta que si bien los tramos de edad son los mismos, cuando hablamos de los BT hacemos referencia a egresados relativamente recientes (cuatro años o menos), mientras que en la población de egresados de la EMS el tiempo de egreso es mayor. Cuadro Nº 30: Estudios realizados

Nivel de estudios Egresados BT Población en general

Egresados de Bachilleratos

Primaria 19,3 Ciclo Básico 31,9 Bachillerato incompleto

18,8

Curso Técnico 19,8 5,0 13,7 Mag./Profesorado 4,5 2,7 7,4 Bachillerato compl.. 22,4 7,2 19,7 Universidad 53,0 21,6 59,1 Sin información 0,3 0,3

Totales 100,0 100,0 100,0

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 Cuadro Nº 31: INDICADORES COMPARATIVOS

POBLACIONES EGRESADOS BACHILLER JÓVENES INDICADORES BT UTU, 1996 SECUNDARIA 19-29 Años __________________________________________________________________________ Situación ocupacional Ocupados 68,3 78,7 59,9 61,8 Desocupados 14,3 15,3 18,8 19,2 Inactivo, estudia 14,3 1,4 17,6 8,6 Inactivo, no estudia 3,0 4,6 3,8 10,4 Tasa de desempleo 17,3 16,2 23,6 23,6 Tasa Actividad 82,6 94,0 78,7 81,0 Ocupado y/o estudia 82,6 80,1 77,5 70,4 Cobertura de salud Privada 68,6 62,7 70,0 57,4 Pública 27,7 30,6 26,0 38,2 Ninguna 3,8 6,7 4,0 4,4 Tipo de Ocupación No trabaja 31,7 21,2 40,1 38,2 Empleado/obrero 56,8 66,7 50,2 50,7 TCP, con local 2,5 5,0 5,0 5,1 TCP, sin local 5,8 4,6 2,5 4,5 Socio o patrón 1,5 1,9 1,2 0,6 TF no remunerado 1,5 0,6 1,0 0,9 Ingresos promedio, total ($) 3.623,0 3.678,8 3.445,9 2.741,3 Ingresos promedio, trabajo ($) 4.278,0 4.528,8 5.100,0 4.045,2 Sin ingresos 24,6 24,2 32,8 30,1 Continúa estudiando Sí 60,8 40,3 54,6 28,3 No 39,2 59,7 45,4 71,7 Relación (sí/no) 1,6 0,7 1,2 0,4 Nivel estudios Primaria 19,3 Ciclo Básico 43,8 Bachillerato 22,4 45,6 19,7 7,2 Curso Técnico 20,1 48,8 13,7 5,0 Mag./Profesorado 4,5 0,6 7,4 2,7 Universidad 53,0 5,0 59,1 21,6 Nº de casos 398 483 3.356 9.171

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 Resumen La tasa de desempleo general es de 23,6%, la cual se mantiene entre los bachilleres de secundaria, pero baja a 17,3% en los egresados BT. También los egresados del BT presentan una mayor tasa de actividad y un mayor porcentaje de ocupados y/o estudiantes que las otras poblaciones. Por otra parte, el porcentaje de personas que no están activas económicamente es menor entre los egresados de BT. El inactivo que no estudia también es menor en la población de egresados del BT, aunque sin mucha diferencia con los egresados de la EMS, quienes presentan una mayor proporción de inactivos que estudian.

Tomando como base el ingreso total de la población general de jóvenes entre 19 y 29 años, los egresados del BT los superan en 1,3, mientras que quienes egresaron del EMS en 1,25. También en materia de ingresos, los montevideanos, los hombres y los mayores de 23 años se encuentran en mejor situación, en las tres poblaciones, aunque las diferencias entre géneros están menos marcadas entre los egresados del BT, al igual que entre tramos de edad. Pero ocurre lo inverso con el lugar de residencia, mostrando una mala situación en materia de ingresos para los BT que residen en el interior del país.

Entre ambas poblaciones de bachilleres, los egresados del BT optan en mayor medida por los cursos técnicos y una menor inserción universitaria. Por otra parte, existe una mayor proporción de los egresados del BT que culminan sus estudios con el bachillerato. Asimismo, los egresados de BT logran una mejor inserción laboral, siendo superados por los egresados de EMS en cuanto a porcentaje de inactivos que continúan estudiando, sin muchas diferencias en cobertura de salud, ni tipo de ocupación.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 V. CONCLUSIONES FINALES A continuación presentamos las principales conclusiones emanadas de este Estudio. Para ello, iremos analizando los resultados de las encuestas por aproximaciones al problema, comenzando por las conclusiones que emanan de una análisis en términos absolutos de los egresados del BT Plan 97, para seguir con las conclusiones que surgen de las comparaciones con las poblaciones de referencia. V.1. Egresados del BT, Plan 97. En primer lugar consideremos a los egresados del BT a partir del año 99, es decir quienes cursaron bajo el Plan 97. Las orientaciones más numerosas son las correspondientes al área Agraria y Administrativa, siendo la tercer área en importancia numérica Informática. Las áreas menos pobladas son las de Construcción y Electro Mecánica. El 62% se encuentra en la capital del país, donde la mayoría de quienes actualmente residen en el interior del país son egresados del área Agraria, mientras que para quienes residen en Montevideo predominan los egresados en Informática y Administración. Más de la mitad son menores de 23 años; de igual manera, las dos terceras partes de los egresados del BT son del genero masculino, lo cual en parte está relacionado con la alta proporción de egresados de orientaciones agrarias, donde el 84% son hombres. Por el contrario, en las orientaciones del área Química y de Administración predominan las mujeres. Si consideramos que entre 17 y 19 años es la edad “esperable” de egreso, un 44% de los egresados del 96 lo hace a esa edad, exactamente la mitad de quienes egresaron en los años 98 y 99 lo hicieron con 18 o 19 años, mientras que en la generación 2000 egresa con esa edad un 56%. Por su parte, el 59% de la generación 2001–2002 obtienen el título de bachiller con 18 o 19 años, lo cual muestra que ha ido mejorando la edad promedio de egreso. Más de la quinta parte de los egresados del BT ejerce el rol de jefe (16%) o pareja del jefe en el hogar, donde la gran mayoría es hijo/a del jefe del hogar. La gran mayoría son solteros o no viven en pareja (87%), mientras que el 21% de las mujeres vive con su pareja, sólo el 10% de los hombres se encuentran en dicha situación. El tamaño del hogar es de 3,8 en promedio y, en la gran mayoría de los hogares (69%), entre dos y tres personas son receptoras de ingresos. Desde el punto de vista educativo, la situación de los BT aparece como razonablemente buena. Sus expectativas para ingresar al BT residía en las mayores posibilidades de insertarse laboralmente y poder ingresar al nivel universitario. En ambos sentidos encontramos que las expectativas parecen cumplirse. Su tasa de desempleo es menor que las poblaciones de referencia y su inserción universitaria es alta, aunque similar a los egresados de la EMS. La

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 gran mayoría de ellos continúa estudiando (61%) y si bien el 32% no trabaja, sólo el 3% no trabaja ni estudia. Por otra parte, sólo el 4% no cuenta con cobertura de salud y la mayoría (69%) está cubierta por instituciones privadas. Los ingresos declarados se encuentran en un nivel aceptable en la medida que la mayoría se encuentra en situación de dependencia salarial y dada la depreciación del salario en los últimos dos años en nuestro país. Finalmente, en esta primera aproximación al tema, encontramos que los egresados del BT Plan 97 se encuentran relativamente satisfechos con la formación recibida, una amplia mayoría, cercana al 80%, volvería a elegir la opción del BT y más de un 80% lo recomendaría como una buena alternativa a seguir. V.2. Comparación entre generaciones Una segunda aproximación a los objetivos de este Estudio radica en comparar los resultados en los diversos tópicos para las diferentes generaciones de egresados del Plan 97. Según nuestra hipótesis de trabajo, no existirían diferencias significativas entre las distintas generaciones, por lo menos en términos generales. En ese sentido podríamos decir que esta hipótesis de trabajo no es totalmente correcta. La generación 2000 aparece en una situación relativamente mejor que las otras dos (1999 y 2001-2002) en la mayoría de los aspectos analizados en este Estudio. Para empezar, la generación 2000 es quien presenta un menor índice de desempleo, una menor proporción de inactivos totales (quienes no trabajan y no estudian), mayores ingresos promedio por todo concepto, menor proporción de desocupación, mayor proporción de egresados que continúan estudiando, una clara superioridad en inserción universitaria, así como una mayor satisfacción declarada con la formación que recibió en el BT. En cambio, los egresados en los dos últimos años (2001-2002) aparecen con los peores índices en desocupación, inserción laboral, tasa de actividad, porcentajes de quienes trabajan y/o estudian, inserción universitaria, continuidad de estudios y ocupación relacionada con la formación recibida. Así mismo, esta generación de egresados es la menos satisfecha con la formación recibida y quien menos cree que su formación le sirva para insertarse laboralmente. Por su parte, la primera generación de egresados del plan 97, puede ubicarse en una posición intermedia, compartiendo una buena posición con la generación 2000 en cuanto tasa de actividad, cobertura de salud, continuidad en los estudios pos egreso y ocupación relacionada. Pero, a su vez, presenta indicadores “bajos” en ingresos, en inserción universitaria, en desocupación y en el porcentaje de quienes trabajan y/o estudian. Así mismo, a pesar de ser la generación con mayor índice de insatisfacción en relación con la formación

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 recibida en el BT, son quienes más creen en las posibilidades que mesa formación les brindó para mejorar en su trabajo. En síntesis, sobre las distintas generaciones de BT se pude concluir que la generación 2000 sobresale del resto tanto en aspectos ocupacionales, como de estudios, así como en satisfacción en relación con la formación recibida en el BT. Por el contrario, los egresados 1999 y 2001-2002, presentan problemas de inserción laboral, así como de inserción universitaria. En este último aspecto se debe destacar que la generación 1999 opta en buena medida por los postgrados tecnológicos de UTU, lo cual relativiza el tema del nivel de estudios alcanzado. Ello es así porque dichos pos grados pueden equipararse con el nivel universitario y suponen una mayor adhesión a la formación que brinda UTU. Otro aspecto que merece ser destacado en estas conclusiones refiere a las asimetrías entre los distintos estratos utilizados para las segmentaciones. En términos generales, salvo alguna excepción, tanto la situación ocupacional como de estudios es peor en las mujeres que en los hombres, para los más jóvenes en relación a quienes tienen 23 o más años y para quienes residen en el interior del país, respecto a quienes residen en la capital. Estas asimetrías responden a un patrón social verificable con los datos de la población en general entre 19 y 29 años. Sin embargo, estas asimetrías son menores entre los jóvenes “más educados” por lo cual se mejora en términos relativos las situaciones de las mujeres, menores de 23 años y residentes en el interior para las poblaciones de egresados de bachilleratos.

En este aspecto, no se encuentran grandes diferencias entre las diferentes generaciones de egresados, aunque en materia de situación laboral las asimetrías son más marcadas en la generación 1999 entre Montevideo e interior y tramos de edad, no así entre hombres y mujeres, donde la situación incluso se invierte. De todas formas no es posible encontrar un patrón. Sin embargo en materia educacional las diferencias entre segmentos no son tan marcadas, donde las mujeres, incluso, logran una mejor situación educacional que los hombres en varias generaciones, al igual que los menores de 23 años. Por otra parte, aparece claro que ciertas orientaciones curriculares encuentran una mejor inserción laboral que otras. Informática, Química y Termodinámica se encuentran en esa situación, frente a Administración y Agraria que presentan indicadores más comprometidos. La mejor situación laboral de los egresados de Informática y Termodinámica posiblemente incida en una menor proporción de quienes continúan estudiando, no así en el caso de los egresados de Química.

Finalmente, podemos concluir que la satisfacción con la formación recibida ha ido decreciendo en relación con los egresados anteriores a la reforma, pero ello puede explicarse por un nivel de expectativas previas mayor. Entre los egresados del BT la generación 2000 es la más satisfecha, pero hay un decrecimiento en las sucesivas generaciones en cuanto a la percepción de que su formación incide positivamente en su inserción laboral. Aunque ello parece no incidir en los altos porcentajes de quienes dicen que recomendarían la opción del BT.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 V.3. Comparación con los egresados antes del Plan 97 En este punto es necesario aclarar que los datos resultantes del estudio del año 1998 no resultan totalmente comparables con los obtenidos en las encuestas del 2001 y 2003. De todas formas, es posible extraer algunas conclusiones interesantes. Cuando comparamos las cuatro poblaciones de egresados (1996, 1999, 2000 y 2001-2002), encontramos que los egresados anteriores a la reforma presentan una mejor situación ocupacional en cuanto a su inserción laboral, tasa de actividad, tasa de desocupación y niveles de ingresos por trabajo. En estos aspectos sólo pueden equiparse con la generación 2000, pero con el global de egresados del Plan 97 están en mejor situación. En otros aspectos no hay grandes diferencias, como es el caso de la cobertura de salud, el porcentaje de inactivos que no estudian, en remuneración por trabajo o el relacionamiento de la ocupación con la formación recibida. Sin embargo, en cuanto a niveles de ocupación dependiente, los egresados 1996 son quienes presentan un mayor porcentaje, pero su “peor” situación se expresa en el nivel de estudios alcanzados. Efectivamente, el déficit principal de este grupo radica en una baja inserción universitaria (sólo el 5%) y en el bajo porcentaje de egresados que continúan estudiando (40%). Si bien no contamos con preguntas en la encuesta del 1998 para comparar con la actual referidas a las expectativas de ingreso a UTU, todos los indicadores parecen mostrar que esta población de egresados tiene un claro posicionamiento hacia la inserción en el mercado laboral, antes que a continuar estudios superiores. Ello, sumado a las mucho mejores condiciones del mercado de trabajo en el 98, hacen que estos egresados se hayan volcado a trabajar, antes que continuar estudiando. Este razonamiento puede llevarnos a pensar que la mejor situación laboral de los egresados de 1996 no se explica por una mejor formación curricular sino por mejores condiciones de mercado y mayor predisposición de los jóvenes para trabajar. V.4. Comparación con los egresados de la Educación Media Superior (EMS) Quizás la comparación más interesante para realizar refiere a la situación laboral y educativa de los egresados del BT (plan 97) con los jóvenes que optaron por cursar el bachillerato común en Secundaria. Esto es así, dado que ambos bachilleratos figuran como alternativas planteadas a los egresados del CB donde el BT puede significar un caminos para estudios superiores y, a su vez, como una mejor preparación para ingresar al mercado laboral. De alguna forma estas son las hipótesis que manejamos en este análisis. Comenzando por el área educativa, las diferencias entre ambas poblaciones –como era de esperar- no son muy importantes. En ambos grupos el nivel de inserción universitaria es superior al 50%, constatándose que los egresados del BT logran una inserción universitaria casi igual a los egresados de la EMS. Esto puede considerarse como un “logro” de los BT si

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 consideramos que ocurría antes con los egresados de UTU, donde muy pocos accedían el nivel universitario. Pero si además consideramos el alto porcentaje de egresados del BT que realizan postgrados en la propia UTU podemos decir que el nivel terciario es similar, si no superior en los BT. Por otra parte, el porcentaje de quienes continúan estudios formales postegreso es similar (78% versus 80%) y el porcentaje de quienes continúan estudiando al momento de la encuesta es mayor en los BT. En síntesis, sobre la situación educacional podemos decir que al menos, tenemos dos situaciones similares, cuando no mejores de los BT. En cuanto a la situación ocupacional, las cosas son diferentes. Allí casi todos los indicadores marcan un mejor nivel de los egresados del BT que los egresados de la EMS. Los BT presentan una menor tasa de desempleo (4,5 puntos menos), una mayor tasa de actividad y mayor porcentaje de egresados que trabajan y/o estudian. Los ingresos promedio por todo concepto son levemente superiores en los BT, aunque invirtiéndose la situación cuando hablamos de ingresos por trabajo. Sin embargo, sólo el 32% de los egresados del BT no trabajan y un 25% no percibe ingresos, cuando en los egresados de la EMS estos valores son de 40% y 33% respectivamente. En cobertura de salud no existen diferencias significativas entre ambos grupos. Es decir que, con una situación de ingresos y cobertura de salud relativamente similar, en todos los otros indicadores de ocupación los BT muestran una clara superioridad sobre los egresados de la EMS. En síntesis, podemos afirmar que los egresados del BT logran una situación educativa –al menos- igual que los egresados de la EMS, pero con una mejor inserción laboral. V.5. Verificación de hipótesis De acuerdo a las hipótesis planteadas en el plan de análisis podemos concluir que: Para la hipótesis I: “Los egresados del BT, del plan 97, obtienen una mejor inserción laboral que los egresados de generaciones anteriores a la reforma”: En este caso no es posible verificar la hipótesis en la medida que la generación egresada en el 1996 presenta indicadores de situación laboral mejores que los egresados del BT, con la excepción de la generación 2000. Sin embargo debe tenerse en cuenta la situación del mercado laboral en 1998 (momento en que se realiza la encuesta) era sensible mejor que la de 2003. por otra parte, parece quedar claro que los egresados de UTU anteriores a la reforma optaban por esta opción en función de un marcado interés por ingresar al mercado de trabajo con cierta calificación. Para la hipótesis II: “Los egresados del BT de CETP del Plan 97 obtienen una mejor situación educacional que los egresados de generaciones anteriores a la reforma”:

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 La hipótesis se verifica con total seguridad, en la medida que la prosecución de estudios post egreso y la inserción universitaria es claramente mayor en los egresados BT que en la generación anterior a la reforma. La misma apreciación realizada en la hipótesis I sobre la mayor predisposición de los egresados 1996 por ingresar al mercado laboral, antes que continuar estudios formales terciarios, también se aplica en este caso. Para la hipótesis III: “No existen diferencias significativas de inserción laboral entre las distintas generaciones bajo la reforma”. Esta hipótesis tampoco se verifica, encontrándose que la generación 2000 presenta indicadores laborales y educativos superiores al resto de las generaciones. Asimismo, la última generación de egresados (2001-2002) es la que presenta peores índices en ambos aspectos. En esta hipótesis se debe tener presente que tanto la generación 1999 como las generaciones 2001-2002 son las que presentan una edad promedio menor, con altos porcentajes de menores de 23 años, segmento que en todas las poblaciones presenta una pero situación laboral. Para la hipótesis IV: “La inserción educacional en niveles superiores lograda por los egresados del BT es similar a los bachilleres de la EMS”. Esta hipótesis se puede decir que es verificable a partir de los datos analizados anteriormente. Incluso, afinando más el análisis, se observa una mejor situación de los egresados del BT. Para la hipótesis V: “La inserción laboral lograda por los egresados del BT es superior a la que obtienen los bachilleres de la EMS”. Finalmente, la hipótesis V se verifica totalmente, en la medida en que todos los indicadores de situación laboral y ocupacional de los egresados del BT son superiores a los mostrados por los egresados de la EMS.


P r i n c i p a l e s P U B L I C A C I O N E S

(Período 1997 - 2004)

Programa de Modernización de la Educación Media y la Formación Docente

Los siguientes documentos se encuentran disponibles en el sitio web: www.memfod.edu.uy

LIBROS Una visión integral del proceso de Reforma Educativa en Uruguay 1995-1999. Dirección Técnica General: Prof. Soc. Germán Rama. Supervisor Técnico y Redactor principal: Mag. Soc. Renato Opertti. ANEP-Codicen. Febrero de 2000. CUADERNOS DE SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN DEL PLAN 1996 DEL CICLO BÁSICO DE EDUCACIÓN MEDIA Estudio de Seguimiento de la Experiencia Piloto. Resultados de la implementación en 1996. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Diciembre de 1997. Estudio de Seguimiento de la Experiencia Piloto. Resultados de la implementación en 1997. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Setiembre de 1998. Evaluación de aprendizajes por asignaturas: Matemática. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Diciembre de 1998. Evaluación de aprendizajes por asignaturas: Ciencias Sociales. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Diciembre de 1998. Evaluación de aprendizajes por asignaturas: Idioma Español. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Diciembre de 1998. Evaluación de aprendizajes por asignaturas: Ciencias Experimentales. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Marzo 1999. Estudio de Seguimiento de la Experiencia Piloto Plan 1996. Resultados de la implementación en 1998. Serie La Reforma de la Educación. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Marzo de 2000.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 SERIE DE CUADERNOS "CENSO NACIONAL DE APRENDIZAJES 1999 EN TERCEROS AÑOS DEL CICLO BÁSICO" Primera comunicación de resultados. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Marzo de 2000. Primer análisis de la prueba censal en Matemática. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Marzo de 2000. Primer análisis de la prueba censal en Lengua. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Mayo de 2000. Primer análisis de la prueba censal en Ciencias Sociales. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Mayo de 2000. Análisis del perfil de las familias de los estudiantes. Segunda comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP / Codicen. Mayo de 2000. Estudio sobre predisposición al abandono escolar. Tercera Comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Mayo de 2000. Primer análisis de la prueba censal en Ciencias Experimentales. Programa MESyFOD. ANEP-Codicen. Mayo de 2000. Modelo sobre predisposición al abandono de los estudios. Cuarta Comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Julio de 2000. Informe Regional de Resultados. Inspecciones Regionales del Ciclo Básico de Educación Media. Quinta Comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Setiembre, 2000. Los aprendizajes y su relación con los factores institucionales y de gestión pedagógica. Sexta Comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Setiembre de 2000. Formación de actitudes y opiniones: los estudios desde la perspectiva de los estudiantes. Séptima Comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Octubre de 2000. Segundo análisis de la prueba censal en Matemática. Variables académicas y sociales. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Octubre de 2000. Tercer análisis de la prueba censal en Matemática. Resultados del ítem abierto. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Noviembre de 2000. Rendimiento escolar: una aproximación mediante un modelo de regresión logística. Octava Comunicación. Programas MESyFOD y UTU/BID.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 ANEP-Codicen. Marzo de 2001. Cuarto análisis de la prueba censal en Matemática. Estudio de detección de errores persistentes en Matemática. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Julio de 2001. Segundo análisis de la prueba censal en Lengua. La producción textual. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Julio de 2001. Censo Nacional de Aprendizajes de los Terceros Años del Ciclo Básico de Educación Media 1999. Resultados y desafíos. Programa MEMFOD. ANEP-Codicen. Agosto de 2003. CUADERNOS DE TRABAJO. SERIE DE ESTUDIOS SOCIALES SOBRE LA EDUCACIÓN El Plan 1996 en el Ciclo Básico. Un análisis desde los indicadores de resultados educativos. Nro. I. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Setiembre 1999. Análisis de la Generación 96 del Instituto de Profesores Artigas: Seguimiento de una Cohorte de Estudiantes (1996-1999). Nro. II. Programas MESyFOD y UTU/BID. Dirección de Formación y Perfeccionamiento Docente. ANEP-Codicen. Mayo de 2000. Inserción laboral de los egresados recientes del Consejo de Educación Técnico-Profesional. Encuesta de egresados de 1998. Nro. III. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Julio de 2000. Primer informe de resultados del Censo de Estudiantes y Docentes de los Institutos de Formación Docente (IFD) del año 1999. Nro. IV. Programas MESyFOD y UTU/BID. Dirección de Formación y Perfeccionamiento Docente. ANEP-Codicen. Julio de 2000. El Plan 1996 en el Ciclo Básico: Un análisis comparativo costo-eficiencia. Nro. V. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Noviembre de 2000. Estudio de factibilidad y sustentabilidad para la creación del Centro Regional de Profesores (CERP) del Sur de la República. Nro. VI. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Noviembre de 2000. Inserción laboral de los egresados recientes del Consejo de Educación Técnico-Profesional. Encuesta de egresados de 2000. Nro. VII. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Diciembre de 2000. Un análisis acerca de los jóvenes que no trabajan ni estudian. Nro. VIII. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Enero de 2001. Aportes al análisis de los Bachilleratos en la Educación Secundaria. Niveles de cobertura y características de la población asistente, año 1999.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 Nro. IX. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Enero de 2001. Eficiencia interna de la Educación Secundaria Pública. Nro. X. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Febrero de 2004. Un análisis de la cobertura y duración de los distintos ciclos de la enseñanza en Uruguay. Nro. XI. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Febrero de 2004. CUADERNOS DE TRABAJO. SERIE "ESTUDIOS DE EVALUACIÓN DE PROYECTOS E INNOVACIONES" Primera evaluación de los Proyectos educativos liceales (PREL) en la región litoral del país. Nro. I. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Julio de 2001. Aportes para el desarrollo curricular del Plan 1996. Nro. II. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Setiembre de 2001. La educación media superior en el Uruguay: Evidencias sobre el Bachillerato Secundario. Nro. III. Programas MESyFOD y UTU/BID. ANEP-Codicen. Octubre de 2001. Eficacia del Programa Post-escolar de estudios para alumnos de escuelas rurales con dificultades de acceso (7º, 8º y 9º años rural). Nro. IV. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Agosto de 2002. Aportes al seguimiento del Plan 1996 del Ciclo Básico de Educación Media: un estudio de cohortes de estudiantes. Nro. V. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Octubre de 2002. Equidad en el Ciclo Básico. La experiencia de 7º, 8º y 9º años en las escuelas rurales con dificultades de acceso. Volumen Uno: Las necesidades educativas en el medio rural y la extensión del Ciclo Básico Plan 1996 bajo la modalidad de 7º, 8º y 9º grados en las escuelas rurales. Nro. VI. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Abril de 2003. Equidad en el Ciclo Básico. La experiencia de 7º, 8º y 9º años en las escuelas rurales con dificultades de acceso. Volumen Dos: La evaluación de aprendizajes como instrumento de diagnóstico de los logros educativos en 7º, 8º y 9º grados en las escuelas rurales. Nro. VII. ANEP–Codicen. Programa MEMFOD. Abril de 2003. Equidad en el Ciclo Básico. La experiencia de 7º, 8º y 9º años en las escuelas rurales con dificultades de acceso. Volumen Tres: Los aspectos extraeducativos que influyen en los aprendizajes de 7º, 8º y 9º grados en las escuelas rurales. Nro. VIII. ANEP–Codicen. Programa MEMFOD. Abril de 2003. Análisis de la evaluación censal de aprendizajes a los novenos grados de

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 las escuelas rurales en el año 2002. Informe sobre Lengua. Nro. IX. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Julio de 2003. Análisis de la evaluación censal de aprendizajes a los novenos grados de las escuelas rurales en el año 2002. Informe sobre Matemática. Nro. X. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Julio de 2003. Análisis de la evaluación censal de aprendizajes a los novenos grados de las escuelas rurales en el año 2002. Informe sobre Ciencias de la Naturaleza. Nro. XI. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Julio de 2003. Estudio de seguimiento a estudiantes que cursaron el noveno grado rural en 2001. Nro. XII. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Noviembre de 2003. Evaluación del impacto de los Proyectos Educativos Liceales (PREL). Nro. XIII. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Febrero de 2004. Estudio del impacto de la formación de los egresados de los Centros Regionales de Profesores (CERP) en la primera etapa de su ciclo profesional. Nro. XIV. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Febrero de 2004. CUADERNOS DE TRABAJO. SERIE "APORTES PARA LA NUEVA MODALIDAD DEL CICLO BÁSICO DE LA EDUCACIÓN MEDIA PARA JÓVENES ENTRE 15 Y 18 AÑOS" Censo de alumnos de Formación Profesional Básica (FPB) del Consejo de Educación Técnico Profesional. Cuaderno nro. I : Características de los cursos y niveles de deserción. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Diciembre de 2002. Censo de alumnos de Formación Profesional Básica (FPB) del Consejo de Educación Técnico Profesional. Cuaderno nro. II : Perfil socioeconómico de los estudiantes. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Diciembre de 2002. Censo de alumnos de Formación Profesional Básica (FPB) del Consejo de Educación Técnico Profesional. Cuaderno nro. III : Determinantes de la demanda educativa. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Diciembre de 2002. Censo de alumnos de Formación Profesional Básica (FPB) del Consejo de Educación Técnico Profesional. Cuaderno nro. IV : Los cursos de FPB desde la perspectiva de los estudiantes. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Diciembre de 2002.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 SERIE “APORTES PARA LA UNIVERSALIZACIÓN DEL CICLO BÁSICO DE LA EDUCACIÓN MEDIA” Apuntes para el mejoramiento curricular del Plan 1996 del Ciclo Básico de Educación Media. Nro. I. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Mayo de 2003. Evaluación de aprendizajes de Inglés en los terceros años del Ciclo Básico del Plan 1996. Nro. II. Programa de MEMFOD. ANEP–Codicen. Junio de 2003. Prácticas pedagógicas de gestión y de aula. Un estudio de casos en el Ciclo Básico de Educación Media del Plan 1996. Nro. III. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Junio de 2003. Estudio sobre los procesos de inserción de los egresados del Plan 1996 en la Educación Media Superior. Nro. IV. Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. Julio de 2003. Enseñanza por áreas en el Plan 1996. Primera parte: Ciencias Sociales, Primer año. Nro. V. Programa de Modernización de la Educación Media y la Formación Docente (MEMFOD). ANEP–Codicen. Noviembre de 2003. Los proyectos estudiantiles: una apuesta a la participación juvenil. Nro. VI. Programa de Modernización de la Educación Media y la Formación Docente (MEMFOD). ANEP–Codicen. Noviembre de 2003. Enseñanza por áreas en el Plan 1996. Segunda parte: Ciencias de la Naturaleza, Primer año. Nro. VII. Programa de Modernización de la Educación Media y la Formación Docente (MEMFOD). ANEP–Codicen. Febrero de 2004. SERIE “APORTES PARA LA REFLEXIÓN Y LA TRANSFORMACIÓN DE LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR” DE LA COMISIÓN y SECRETARÍA TEMS Cuaderno de trabajo nro. 1: LA EDUCACIÓN MEDIA EN EL MUNDO. Análisis de algunos casos. Comisión TEMS / ANEP. Abril de 2002.

• Problemas globales y respuestas nacionales en reformas de la educación media en América Latina en los años noventa: análisis comparado de Argentina, Brasil y Chile .- por Cristián Cox Donoso • La educación secundaria en Europa y Estados Unidos.- por Jean-Pierre Jallade

Cuaderno de trabajo nro. 2: LOS GRANDES TEMAS DE LA FORMACIÓN PROFESIONAL: ¿cómo se ubica Uruguay? por Claudio De Moura Castro. Comisión TEMS / ANEP. Mayo de 2002.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 Cuaderno de trabajo nro. 3: EL BACHILLERATO DESDE LA PERSPECTIVA DE SUS ACTORES. Un estudio etnográfico. Capítulo Uno: “Roles, actores y expectativas: sus interacciones”. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 4: EL BACHILLERATO DESDE LA PERSPECTIVA DE SUS ACTORES. Un estudio etnográfico. Capítulo Dos: “Evaluación”. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 5: EL BACHILLERATO DESDE LA PERSPECTIVA DE SUS ACTORES. Un estudio etnográfico. Capítulo Tres: “Clima institucional”. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 6: EL BACHILLERATO DESDE LA PERSPECTIVA DE SUS ACTORES. Un estudio etnográfico. Capítulo Cuatro: "Enseñanza y aprendizaje". Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 7: LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR URUGUAYA EN EL SIGLO XX. Capítulo Uno: Historia curricular de la educación media superior en Uruguay. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 8: LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR URUGUAYA EN EL SIGLO XX. Capítulo Dos: Aportes de la Asamblea Técnico Docente (ATD) de Educación Secundaria a la Educación Media Superior en Uruguay. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 9: LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR URUGUAYA EN EL SIGLO XX. Capítulo Tres: Estudios realizados sobre la educación media superior en el ámbito nacional en la década de los años noventa. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 10: UNA MIRADA A LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR EN AMÉRICA LATINA Y EUROPA. Capítulo Uno: I) La Educación Media Superior en Europa; II) Diseños curriculares de educación media superior de países europeos seleccionados. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 11: UNA MIRADA A LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR EN AMÉRICA LATINA Y EUROPA. Capítulo Dos: I) La Educación Media Superior en América Latina y el Caribe; II) Diseños curriculares de educación media superior de países de América Latina y el Caribe seleccionados; III) Algunas consideraciones finales del estudio sobre la educación media superior en Uruguay y los países analizados. Comisión TEMS / ANEP. Junio de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 12: JÓVENES, EDUCACIÓN Y TRABAJO. Un análisis del proceso de inserción laboral en los jóvenes que han abandonado sus estudios. Comisión TEMS / ANEP. Julio de 2002.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 Cuaderno de trabajo nro. 13: Informe preliminar de los resultados de la Consulta Nacional a Estudiantes de Educación Media Superior. Comisión TEMS / ANEP. Setiembre de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 14: Aproximación al estudio sobre los resultados de los exámenes en segundos y terceros años del bachillerato diversificado en liceos públicos. Comisión TEMS / ANEP. Noviembre de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 15: Fundamentos y contextos pertinentes para el proceso de transformación de la educación media superior. Comisión TEMS / ANEP. Noviembre de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 16: Contenidos curriculares de la educación media superior: organización, especificación y selección. Estudio comparado en países seleccionados para las asignaturas Matemática, Biología e Historia. Comisión TEMS / ANEP. Diciembre de 2002. Cuaderno de trabajo nro. 17: El cambio curricular: Principales innovaciones para procesar la transformación de la Educación Media Superior. Comisión TEMS / ANEP. Julio de 2003. Cuaderno de trabajo nro. 18: Demandas sociales hacia la Educación Media Superior. Comisión TEMS / ANEP. Setiembre de 2003. Cuaderno de trabajo nro. 19: La evaluación en Bachillerato. Comisión TEMS / ANEP. Setiembre de 2003. Cuaderno de trabajo nro. 20: Jornada escolar, estudio y exámenes en el Bachillerato Secundario. Comisión TEMS / ANEP. Setiembre de 2003. Cuaderno de trabajo nro. 21: La evaluación en Matemática en Bachillerato desde la perspectiva de las expectativas de los estudiantes. Comisión TEMS / ANEP. Octubre de 2003. Cuaderno de trabajo nro. 22: Trayectoria educativa de los jóvenes: el problema de la deserción. Comisión TEMS / ANEP. Enero de 2004. Cuaderno de trabajo nro. 23: Las tutorías en la Educación Media Superior. Comisión TEMS / ANEP. Febrero de 2004. Cuaderno de trabajo nro. 24: Seguimiento de los egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Comisión TEMS / ANEP. Febrero de 2004. SERIE DE CUADERNOS DE ORIENTACIÓN VOCACIONAL Y OCUPACIONAL ¿Qué puedo elegir...? Guía 2003 del Programa de Apoyo Psicopedagógico y Orientación Vocacional y Ocupacional de la Gerencia de Programas Especiales dependiente de la Gerencia de Planeamiento y Gestión Educativa.

Seguimiento de egresados de los Bachilleratos Tecnológicos del CETP. Serie TEMS. Cuaderno nro. 24 Apoyo técnico y financiero: Programa MEMFOD. ANEP–Codicen. 8ª.ed. Junio de 2003. SERIE "CUADERNOS PARA LA REFLEXIÓN Y PRÁCTICA EDUCATIVAS" Cuaderno nro. I. Programa MEMFOD. ANEP-Codicen. Diciembre de 2003.

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