Apuntes de una fundación Apuntes de una fundación

Apuntes de una fundación

Jorge Calzoni - Patricia Domench - Adriana Presa

La Colección Historia Cultural de Avellaneda, que este libro inaugura, recoge un mandato insos-layable que es, además, un síntoma de este tiempo: la relación que éstas, las Universidades del Bicentenario, están fraguando con la sociedad que las hospeda. La comunidad está en la univer-sidad. La puebla y la modifica, la interpela en lenguas nuevas, mientras redefine las propias, en un movimiento apasionante, y de un enorme potencial transformador.Esta Colección surge en co-edición con la Biblioteca Nacional. Es un motivo de prestigio que nos responsabiliza aún más. Que la Biblioteca que fundara Mariano Moreno nos acompañe honra el surgimiento de esta Colección y nos augura un trabajo que nos llena de entusiasmo.Universidad Nacional de Avellaneda. Apuntes de una fundación, es el resultado de una cuidadosa investigación que se nutre de la voz de los que fueron (y son) sus protagonistas. La impronta que la distingue es la inclusión, lo que implica equidad y calidad en la enseñanza; integración con el entorno social y educativo; y producción de conocimiento pertinente.Quienes construimos esta Universidad nos debemos al pueblo del cual venimos, no somos ni que-remos ser una elite. Ser universitarios es un orgullo y una responsabilidad. Esta Colección es una manifestación del modo en que la entendemos.

Dra. Patricia Domench

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Calzoni, Jorge F. Universidad Nacional de Avellaneda : apuntes de una fundación / Jorge F. Calzoni ; Patricia Domench ; Adriana María Presa. - 1a ed. - Avellaneda : Undav Ediciones; Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Biblioteca Nacional, 2014. 154 p. ; 17x20 cm. - (Historia cultural de Avellaneda / Patricia Domench)

ISBN 978-987-29292-6-8

1. Historia. 2. Universidad. 3. Fundación Educacional. I. Domench, Patri-cia II. Presa, Adriana María III. Título CDD 378.009 821 2

Fecha de catalogación: 14/11/2014

© 2014, UNDAV Ediciones.

España 350, Avellaneda CP 1870Provincia de Buenos Aires, ArgentinaTel.: (54 11) 4229-2466/[email protected]

Arte de tapa, diseño y diagramación: Julia Aibar (UNDAV Ediciones).

ISBN 978-987-29292-6-8

Hecho el depósito que marca la Ley 11.723Prohibida su reproducción total o parcialTodos los derechos reservados.

Agradecemos los valiosos aportes del equipo del Programa de Apoyo a la Investigación y Formación de Docentes-Investigadores dirigido por la Dra. Patricia Domench e integrado por Adriana Presa, María Luz Nin y María Victoria Barros, así como la colaboración del personal de la Secretaría General de la Universidad Nacional de Avellaneda.

Todas las fotografías históricas del interior del libro (en escalas de grises) y sus referencias pertenecen al Archivo General de la Nación Dpto. Doc. Fotográficos. Buenos Aires. Argentina.Las fotografías de la UNDAV pertenecen a Prensa UNDAV.

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Índice

Introducción

Análisis del origen y proceso de constitución de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV)

IntroducciónReseña histórica de las universidadesLas nuevas universidades del siglo XXI

La Universidad Nacional de Avellaneda: de la aspiración a la concreción

El trabajo y la producción La educación y las artesEl deporte y la recreaciónLas ciencias ambientalesLas políticas públicas medioambientales

La construcción de una historia colectivaInicios de la propuesta: una universidad en Avellaneda

El camino hacia la creaciónPresentación del proyecto (2007)El recorridoLos equipos académicos que aportaron al proyecto

Puesta en marcha de la Universidad Nacional de Avellaneda

Rector OrganizadorJalones de un recorrido vertiginosoConsejo Interuniversitario Nacional (CIN)

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Se integra el Consejo Social de la Universidad Nacional de AvellanedaPropuesta educativa de la UNDAVAsamblea Universitaria

Conclusiones y perspectivas

Imágenes fundacionales

Bibliografía

AnexoDocumentos

Ley de CreaciónAsamblea Universitaria

Investigación


Introducción

En el joven emprendimiento edito-rial que lleva adelante UNDAV Edi-ciones, la publicación de este libro representa un momento particular. Nos proponemos ofrecer una humil-de contribución a la Historia Cultural de Avellaneda, y quien asume esa ar-dua tarea, con orgullo, es su Univer-sidad. Lo hace como creemos que le corresponde: dando testimonio del recorrido de su propia existencia.Este trabajo es el resultado de la convergencia, por un lado, de estu-dios históricos acerca de los cami-nos que fue recorriendo este sueño y, por el otro, del modo en que se pensó, elaboró y construyó —con una impronta colectiva que continúa siendo su huella más profunda y dis-tintiva— lo que hoy ya conocemos como la Universidad Nacional de Avellaneda.

Se trata de dar testimonio de una labor fundacional apasionante, del tiempo en el que se inscribe —y que la hizo posible— y de los desafíos en curso, sin pretensión de exhaustividad, pero con la seriedad y auto-exigencia que consideramos indispensables.Desde la construcción del Proyecto que habrían de tratar las Cámaras Legislativas de nuestro país (luego de que fuera necesario rediseñar globalmente la intención primera de


Jorge Calzoni - Patricia Domench - Adriana Presa8 9Universidad Nacional de Avellaneda. Apuntes de una fundación

dar vida a una Universidad de Artes) hasta que se sancio-nara la Ley de Creación, se fue forjando una clave de la que hacemos tesoro: la Universidad sería (y es) una construcción de todos, para todos y entre todos.

La designación del rector Organizador, en un acto que aho-ra nos parece distante y del que, sin embargo, apenas han QBTBEP�QPDP�NÈT�EF�DVBUSP�B×PT �TJHOJmDØ�VO�QVOUP�EF� JO-nFYJØO �QVFT�BCSJØ�VO�OVFWP�NPNFOUP�RVF �FO�NÈT�EF�VOB�PDBTJØO �IFNPT�OPNCSBEP��UBM�WF[�TJO�SFnFYJPOBS�BDFSDB�EF�FMMP� MP� TVmDJFOUF�� DPNP� EF� iWÏSUJHP� GVOEBDJPOBMw�� "RVFMMB�jornada del Teatro Roma habría de marcar, además, otra se-×BM�EFDJTJWB�EF�OVFTUSB�FYJTUFODJB��MB�mSNF[B�EF�MB�EFDJTJØO�política de la presidenta de todos los argentinos, Dra. Cristina Fernández de Kirchner, de contribuir, incansablemente, con la transformación de la educación, y el fundamental acom-pañamiento de las autoridades municipales. De Baldomero Álvarez de Olivera en su momento, y del actual intendente de Avellaneda, Ing. Jorge Ferraresi.

En pocos meses, un equipo nutrido de pioneras y pioneros, DPNFO[BCB�B�DPOTUSVJS�FM�&TUBUVUP�0SHBOJ[BEPS �TF�BmOBCBO�MPT�QFSmMFT�EF�MBT�DBSSFSBT�Z�TF�FMBCPSBCB�FM�1SPZFDUP�*OTUJUV-DJPOBM��&O�NBS[P�EF�� RVJ[ÈT�DPOmSNBOEP�BRVFM�DPNFO-UBSJP�EF�iFOUSFDBTBw�RVF�OPT�TF×BMBCB�VO�UJFNQP�WFSUJHJOPTP �la presidenta de la Nación inauguraba el primer ciclo lectivo: la Universidad Nacional de Avellaneda se echaba a andar y NJMFT�EF�FTUVEJBOUFT�IBCSÓBO�EF�DPOmSNBS� Z�DPOUJOÞBO�IB-ciéndolo) la justicia histórica de su creación.

Dijimos antes que este libro inaugura la Colección Historia Cultural de Avellaneda. Aportar a esta historia, tan rica, lo consideramos un mandato y, a la vez, la expresión de un sín-toma de este tiempo: la relación que éstas, las Universidades del Bicentenario, están fraguando con la sociedad que las



hospeda. Se trata de un vínculo que se está transformando radicalmente, del mismo modo que tiene planteado hacerlo la educación superior toda, en un escenario inédito de amplia-ción de derechos y de democratización creciente de la vida TPDJBM��-B�VOJWFSTJEBE�ZB�OP�iFTUJSB�TV�CSB[Pw�QBSB�MMFHBS�DPO�el producto de su labor a la comunidad. Ahora, la comunidad FTUÈ�FO� MB�VOJWFSTJEBE��-B�QVFCMB�Z� MB�NPEJmDB � MB� JOUFSQFMB�FO�MFOHVBT�OVFWBT �NJFOUSBT�SFEFmOF�MBT�QSPQJBT �FO�VO�NP-vimiento palpitante y de un enorme potencial transformador.Afrontar, entonces, la inquietante aventura de recoger una Historia Cultural de Avellaneda implica, entre otras cosas, asumir de manera creativa un eje crucial de la propuesta ins-titucional de la universidad: labrar una relación con la reali-dad local y regional para construir, en estrecho vínculo, res-puestas comunes a las demandas de una sociedad mejor.6OJWFSTJEBE� /BDJPOBM� EF� "WFMMBOFEB�� "QVOUFT� EF� VOB� GVO-dación, es el testimonio de una construcción que no pocas veces olvidamos que todavía estamos comenzando. Desde aquí recogeremos una historia cultural de la que esta institu-ción es expresión indudable y que esperamos testimoniar en toda su extraordinaria riqueza.

Esta Colección nace en co-edición con la Biblioteca Nacio-nal. Es un motivo de prestigio que nos honra y nos respon-sabiliza aún más. La Biblioteca que fundara Mariano Moreno como parte de un conjunto de medidas (la edición, la traduc-ción, el periodismo) destinadas a forjar una opinión pública atenta a la vida política y cívica, nos acompaña y da lustre a este surgimiento.

Sugerimos considerar este libro como un punto de partida. Como el resultado de una cuidadosa investigación que reco-ge la voz de los que fueron (y son) sus protagonistas. El testi-monio de una fundación que también se puebla de imágenes y de la que damos cuenta mientras seguimos comprometidos


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FO�FMMB��-B�JNQSPOUB�RVF�MB�EJTUJOHVF��Z�RVF�DPOmBNPT�RVF�nos siga distinguiendo— es la inclusión. Pero, la inclusión implica equidad y calidad en la enseñanza; integración con el entorno social y educativo; y producción de conocimiento pertinente.

Quienes construimos esta Universidad nos debemos al pueblo del cual venimos, no somos ni queremos ser una elite. Ser uni-versitarios es un orgullo y una responsabilidad. Esta Colección es una manifestación del modo en que la entendemos.



Análisisdel origen y proceso de

constitución de la

Universidad Nacional de

Avellaneda

Introducción

Toda cronología es contingente, pro-ducto de una interpretación de la realidad de sujetos anclados en un determinado contexto socio-históri-co. La identidad de una institución es una manifestación producto de su historia. El conocimiento de la historia institucional nos permite, pues, anali-zar las transformaciones que a lo lar-go del tiempo ocurrieron y proyectar lo que será.Krotsch (2007) analiza el proceso de creación de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (UNICEN) a través de un conjun-to de entrevistas que le permiten dar cuenta de una serie de tensiones que moldean la política institucional. Estas tensiones tienen su origen en el proce-TP�EF�DPOTUJUVDJØO�Z�DPOmHVSBDJØO�EF�la institución durante las décadas pos-teriores a su creación, y son producto de las interacciones y negociaciones entre los diferentes actores y el con-texto socio-histórico. A partir de este trabajo, nos es posible entender cómo los proyectos impulsados desde políti-cas nacionales son apropiados por las instancias locales de formas diversas, según los procesos propios y origina-les de creación, el desarrollo de las es-USVDUVSBT� JOTUJUVDJPOBMFT�Z� MB� JOnVFODJB�del contexto socio-histórico. Teniendo



en cuenta la complejidad de las instituciones universitarias es ne-cesario remarcar la importancia que adquiere su proyecto de fun-dación y el contexto en el que se institucionaliza (Beltrán, 2009). En este sentido, Clark (1990) sostiene que toda institución tie-ne un sentido que es posible rastrear, en gran medida, en sus momentos fundacionales, y que luego se desarrolla en forma de una saga en la representación colectiva de sus integrantes. Es a partir de esta consideración que sostenemos que la in-terpretación integral de la realidad institucional debe realizarse JEFOUJmDBOEP�QSPDFTPT�Z�FTUBCMFDJFOEP�TV�TJHOJmDBEP�QBSB�MPT�distintos actores participantes. Esta es la razón por la que hemos indagado respecto del origen de la Universidad Nacional de Avellaneda recuperando relatos de diferentes actores que participaron en su proceso de cons-titución. El abordaje metodológico estuvo hecho de entrevistas semi-estructuradas efectuadas a un grupo de personas entre las cuales se encuentran el actual rector de la UNDAV, actores que integran las áreas de funcionamiento de la Universidad, re-ferentes de las distintas disciplinas correspondientes a las ca-rreras, otros integrantes de la comunidad universitaria y actores FYUFSOPT��4F�EFmOJØ�MB�NVFTUSB�B�BOBMJ[BS�de manera intencional por considerar a dichos actores clave en el surgimiento y con-solidación de la institución.Por otra parte, también se analizaron normativas educativas nacionales e institucionales y demás documentación que dan cuenta del contexto socio-histórico y político en relación con el origen en el que surgió la UNDAV.A partir de este análisis emergió una periodización que va des-de el surgimiento del primer proyecto de creación de una uni-versidad en Avellaneda en 1992 (proyecto de creación de la Universidad Nacional de las Artes) hasta el momento en el que DPNJFO[B�FM�USBCBKP�FTQFDÓmDP�Z�DPODSFUP�EF�PSHBOJ[BDJØO�EF�MB�institución Universidad Nacional de Avellaneda (2010), dando lugar a una historia del origen y constitución que responde a la visión colectiva de los actores involucrados.



Lo que sigue es un breve recorrido por la historia de la universi-dad, entendida en sentido más general, y algunos pasajes fun-damentales de su desarrollo en América latina, para dar marco a la universidad argentina y llegar, de ese modo, a la creación de la Universidad Nacional de Avellaneda.

Reseña histórica de las universidades

Las primeras instituciones universitarias como organizaciones formales nacieron en Europa Occidental, y tienen su origen en la Edad Media. Bolonia y París representan los prototipos de uni-versidades medievales. De acuerdo con lo que señala Cuevas (1997) la idea de universidad en aquellas épocas se describía con la expresión latina TUVEJVN�HFOFSBMF. La palabra TUVEJVN�indicaba una escuela en la que había instalaciones adecuadas para estudiar, y la palabra generale TJHOJmDBCB�RVF�MB�FTDVFMB�atraía estudiantes de diversas partes. Existían también TUVEJVN�particulare�RVF�TØMP� UFOÓBO�FTUVEJBOUFT�EF�VO�ÈSFB�HFPHSÈmDB�limitada. Los TUVEJVN�HFOFSBMF enseñaban artes liberales y ade-más tenían una o más de las llamadas facultades superiores: leyes, teología y medicina. Algunas escuelas alcanzaron gran prestigio en algún campo, como la Escuela de Medicina de Sa-MFSOP �QFSP�OP�TF�MFT�DPOmSJØ�FM�FTUBUVT EF�TUVEJVN�HFOFSBMF. La determinación de este estatus estaba a cargo generalmente del Papa y, en ocasiones, del emperador. Se produce luego, entre los siglos XII y XIII, la creación de la Universidad de Oxford, la más antigua del mundo de habla in-glesa (se desconoce la fecha precisa de su fundación, y tal vez no existió como un suceso en concreto, pero hay evidencia de actividades de enseñanza desde el año 1096) y la Universidad de Cambridge (la segunda universidad de habla inglesa más antigua. Según la historia, fue fundada en 1209 por académicos que huyeron de Oxford, tras una reyerta con agentes de dicha ciudad. El rey Enrique III de Inglaterra les concedió el mono-



polio de la enseñanza en aquel lugar en 1231). En los años siguientes fue incrementándose el número de universidades caracterizadas por su alto nivel de calidad.Los modelos de organización fueron los utilizados por las Uni-versidades de Bolonia y París. Esta última recibió el nombre de magisterial con gran prestigio como escuela de lógica y teo-logía. Se caracterizaba por estar gobernada por el gremio de profesores. En cuanto a la Universidad de Bolonia, se inició como escuela de leyes, constituyéndose en la primera univer-sidad cuyo gobierno estaba en manos de los estudiantes. En el siglo XIV tomaron el control del gobierno los profesores. La Universidad de Salamanca, por otro lado, creada en el siglo XIII,1 es necesario considerarla, ya que sirvió de modelo a las universidades latinoamericanas.De acuerdo con lo señalado por Tünnermann Bernheim (1996), la organización y las estructuras académicas de Salamanca, SFQSPEVDJEBT�MVFHP�DPO�NVZ�QPDBT�NPEJmDBDJPOFT�QPS�TVT�m-liales americanas, podemos describirlas, en pocas palabras, de la manera siguiente: el claustro pleno de profesores era la máxi-ma autoridad académica, al que le incumbía la dirección supe-rior de la enseñanza y la potestad para formar los estatutos. Al maestrescuela, llamado también canciller o cancelario, le co-rrespondían las importantes funciones de juez de los estudios, la colación de grados y la autorización de las incorporaciones.Este cargo, generalmente reservado a una alta autoridad ecle-siástica, tenía facultades que realmente superaban a las del QSPQJP�SFDUPS �B�RVJFO�TF�DPOmBCB�MB�SFQSFTFOUBDJØO�EF�MB�DPS-poración universitaria y la supervisión de la docencia. El rector estaba asesorado por dos consejos: el claustro de conciliarios, con funciones electorales y de orientación, y el de diputados, encargado de administrar la hacienda de la institución. Todo el FEJmDJP�EF�MB�USBOTNJTJØO�EFM�DPOPDJNJFOUP�EFTDBOTBCB�TPCSF�

1 En 1218 el rey Alfonso IX funda la Universidad de Salamanca.



la cátedra, cuya importancia era tal que con frecuencia se con-fundía con la misma Facultad, desde luego que en ciertos mo-mentos toda una rama del saber dependió de una sola cátedra.En lo que respecta a América latina, Tünnermann Bernheim (1996) señala que los factores que llevaron a crear las univer-sidades en América latina fueron la necesidad de proveer lo-calmente de instrucción a los religiosos que acompañaban al conquistador español para las tareas de evangelización y la ne-cesidad de proporcionar oportunidades de educación, más o menos similares a las que se ofrecían en la metrópoli, a los hijos EF�MPT�QFOJOTVMBSFT�Z�DSJPMMPT �B�mO�EF�WJODVMBSMPT�DVMUVSBMNFOUF�con el imperio y, a la vez, preparar el personal necesario para llenar los puestos secundarios de la burocracia colonial, civil y eclesiástica. Si bien es importante considerar los antecedentes señalados, RVF�UVWJFSPO�JOnVFODJB�FO�MB�VOJWFSTJEBE�MBUJOPBNFSJDBOB �SFTVM-ta interesante incorporar los aportes de Mendoza (2002) que, para interpretar la historia de esta universidad, señala cuatro líneas de convergencia, a saber:

X� Un modelo originario común en su estructura legal y en su estructura académica.X� Participación de actores con cierta homogeneidad (el clero regular, los criollos ilustrados, por ejemplo).X� Procesos socio-políticos análogos.X� Como punto de convergencia actual, los países lati-noamericanos enfrentan problemas comunes que plan-tean nuevos desafíos a la universidad.

La primera universidad erigida por los españoles en lo que hoy conocemos como América latina, fue la de Santo Domingo, en la Isla Española (28 de octubre de 1538). La última fue la de León de Nicaragua, creada por decreto de la Corte de Cádiz del 10 de enero de 1812. En ese periodo de casi tres siglos, fueron 32 las universidades creadas. Algunas, como la de la



Plata o Charcas (Bolivia), la de Mérida (Yucatán, México) y la de Buenos Aires (Argentina), solo existieron de Jure, pues su funcionamiento pleno recién pudo concretarse superado el periodo colonial. La mayoría de las universidades coloniales GVFSPO�B�MB�WF[�QPOUJmDJBT�Z�SFBMFT��-BT�DSFBEBT�QPS�MBT�ØSEF-nes religiosas, autorizadas por el Papa para otorgar grados, gozaron de este carácter en virtud del privilegio general con-GFSJEP�B�MB�PSEFO��&O�NVDIPT�DBTPT �MB�CVMB�QPOUJmDJB�QSFDFEJØ�a la real cédula, especialmente en el caso de universidades fundadas por iniciativa de las órdenes religiosas. En otros, la corona tomó la precedencia, naciendo así las universidades de carácter real, siendo después que adquirieron los privile-HJPT�QPOUJmDJPT�5àOOFSNBOO ��A partir del proceso de independencia, se tomó como modelo la universidad francesa. Ésta se sometía a la tutela del Estado DVZB�NJTJØO� FT� iQSPWFFS� BEJFTUSBNJFOUP� DVMUVSBM� Z� QSPGFTJPOBM�a la élite burguesa, imprimiéndole a la vez, un particular sello JOUFMFDUVBM��QSPNPWFS�MB�VOJEBE�Z�FTUBCJMJEBE�QPMÓUJDB�EFM�&TUBEPw�(Tünnermann, 1999:133). Esta universidad republicana no logró ampliar la base social de la matrícula estudiantil, ya que fue representativa de las clases dominantes. Así el movimiento de Córdoba denunciaría esta situación generando la Reforma de 1918. La clase media emergente a comienzos del siglo XX en Argentina fue la gestora de este movimiento, puesto que la uni-versidad se estaba constituyendo en un instrumento facilitador de ascenso político y social.De acuerdo con Giustiniani y Carbajal (2008) la Reforma re-planteó las relaciones entre la universidad, la sociedad y el Es-tado, conformando la autonomía un nuevo marco jurídico para que la universidad asumiera una nueva posición. Los postu-lados más importantes de esta Reforma fueron: autonomía universitaria, elección de las autoridades de la universidad, participación de docentes, estudiantes y graduados y cáte-ESB�MJCSF��&M�.BOJmFTUP�EF�MB�3FGPSNB�FO�$ØSEPCB�JNQBDUØ�FO�una serie de reclamos y acciones estudiantiles que se hicieron



sentir en toda América latina. La democratización del gobierno de las universidades constituyó el elemento primordial sobre el que se estructuró el movimiento de la Reforma. Generó una activa vida política mediante actos eleccionarios que incluían a profesores y estudiantes, y adquirieron importancia las ta-reas relacionadas con investigación, como así también las ac-tividades de extensión.Pocos meses después del golpe militar de 1930 las universida-des fueron intervenidas y, por lo tanto, sus autonomías fueron erosionadas. El ímpetu reformista se fue apagando, y era muy poco lo que quedaría en las seis universidades argentinas que llegaban al año 1946, lo que, además, era expresión de la des-conexión entre la universidad y el país real y profundo. Un rasgo NBSDBEP�EF�BRVFMMB�VOJWFSTJEBE�MP�DPOTUJUVÓB�FM�QFSmM�EF�MBT�JO-vestigaciones y la formación de la educación superior, tradicio-nalmente liberales e europeístas en su ideología, y renuentes a desarrollar las carreras industriales acordes con el país que TF�FTUBCB�DPOmHVSBOEP��$PO�+VBO�%PNJOHP�1FSØO�FO�FM�HPCJFS-OP � TF�TBODJPOBSÓBO� USFT� MFZFT�VOJWFSTJUBSJBT �PmDJBOEP�B�QBSUJS�de aquí, como el primer gobierno en sancionar una ley desde 1885, pero además, como el gobierno democrático que mayor cantidad de leyes de educación superior sancionaría en la his-toria del país: 13031/47, 14297/54 y 20654/74. Esta legislación sería expresión de un esquema jurídico normativo de todos y DBEB�VOP�EF�MPT�mOFT�EF�MPT�WFSEBEFSPT�SFGPSNBEPSFT�EF�� superándolos ampliamente. Durante los primeros diez años de gobierno podemos citar, entre otras: a) Ampliación de las ma-trículas y democratización del ingreso; b) Eliminación de todo tipo de aranceles; c) Desarrollo de un sistema de becas (lo que tuvo luego sanción constitucional en 1949); d) Establecimiento de horarios nocturnos para trabajadores; e) Creación de la Uni-versidad Obrera; f) Por primera vez se menciona a la extensión universitaria en la legislación (1954) y se iniciarían las prácticas rentadas en el Estado; g) La Universidad Obrera articulaba di-rectamente el conocimiento y la acción práctica en fábrica; h)



Promoción de carreras prioritarias: por primera vez el Estado es-tablecería regiones universitarias y se daría una política de pla-OJmDBDJØO�EFM�HBTUP�Z�MB�VOJGPSNJEBE�OBDJPOBM�EF�MPT�QSPHSBNBT��i) Se crearía el Consejo de Universidades como ámbito de arti-culación de políticas públicas; j) Se desarrollarían las técnicas agrarias, la ingeniería del petróleo, la investigación oceanográ-mDB �FUD��"QBSFDFSÓBO�MPT�HSVQPT�EF�JOWFTUJHBDJØO�BOUFDFEFOUFT�del CONICET; k) Ingreso de estudiantes latinoamericanos; l) Vin-culación obrero-estudiantil; m) Defensa de la cultura nacional.El peronismo —en sus diez años de gobierno— legaría al siste-ma universitario: la gratuidad; los primeros pasos en la articula-ción concreta obrero-estudiantil; la creación de la Universidad Obrera; la existencia de carreras prioritarias para la industriali-zación; un aumento sin precedentes del presupuesto; la crea-ción del Ministerio de Educación; el fomento del latinoamerica-nismo y el antiimperialismo de la juventud; y varios proyectos de universidades y carreras. Con el peronismo en sus primeros EJF[�B×PT�BQBSFDFSÓB�MB�OPDJØO�EFM�iEFSFDIP�TPDJBM�B�MB�FEVDB-DJØO�TVQFSJPSw�Z�MB�iDVMUVSB�EF�MB�JOEVTUSJBMJ[BDJØO�Z�FM�QMFOP�FN-QMFPw�DPNP�mOFT�DVMUVSBMFT�Z�QPMÓUJDPT�FTUSBUÏHJDPT�OBDJPOBMFT�Respecto de la Universidad Obrera, la diferencia principal con las universidades tradicionales era que en ella se impartían es-tudios superiores técnicos a estudiantes trabajadores; por este motivo, las clases se dictaban en el turno vespertino y su moda-lidad era la teórico-práctica.

Desde el punto de vista social, su fundación daba respuesta a las demandas por la educación superior de los sectores traba-jadores que recientemente se integraban a la vida política, eco-nómica y cultural del país y que habían sido marginados de las universidades tradicionales. Desde el punto de vista económico, TF�DPOWJSUJØ�FO�MB�ÞOJDB�JOTUJUVDJØO�VOJWFSTJUBSJB�BQUB�QBSB�DBMJmDBS�la fuerza de trabajo requerida por la burguesía industrial vincu-lada al aparato gubernamental (Mollis 1991 en Mollis 2001: 76).



A partir de 1955,2 se inició en las universidades un proceso de modernización de las estructuras organizativas y curriculares. Durante el gobierno desarrollista3 la relación estrecha entre ciencia e investigación se plasmó con la conformación del Con-TFKP�/BDJPOBM�EF�*OWFTUJHBDJPOFT�$JFOUÓmDBT�Z�5ÏDOJDBT�$0/*-CET). En el período que va de 1968 a 1975 se produjo una gran expansión de instituciones y crecimiento de la educación supe-rior universitaria en el país. "�mOFT�EF� MB�EÏDBEB�EF�MPT�B×PT�� TF� JNQVMTØ �EF�BDVFSEP�con lo señalado por Rovelli (2008), una agenda orientada a tres FKFT�� mOBODJBNJFOUP � FWBMVBDJØO� Z� EJGFSFODJBDJØO� JOTUJUVDJPOBM �marcada por una gran cantidad de instituciones universitarias privadas. Así, en 1995 se dictó la Ley 24521 Nacional de Edu-cación Superior con consecuencias para el sistema de evalua-ción y acreditación y el tradicional concepto de autonomía ins-titucional (Mollis, 2009).Puede ser útil dejar indicadas acá las diferentes oleadas de creación de universidades nacionales que fueron construyendo el actual escenario del sistema universitario argentino. Concre-tamente, se trata de tres movimientos o tiempos, marcadamente diferentes entre sí que, todos juntos, produjeron una gran trans-formación. Entre 1989 y 1995 fueron creadas las universidades nacionales de: General Sarmiento, Quilmes, La Matanza, San Martín, Tres de Febrero, Lanús, Formosa, Patagonia Austral y Villa María, y nacionalizada la de La Rioja. Ello importó un mo-vimiento de franca expansión del sistema universitario nacional durante el periodo neoliberal. Otro proceso precedió al aquí descrito. En palabras de Eduardo Rinesi:

1FSP�BVO�BOUFT�EF�FTUF�NPWJNJFOUP �PUSP�JNQVMTP�NVZ�TJHOJmDBUJWP�al crecimiento de conjunto del sistema universitario nacional había

2 Ante un nuevo golpe de Estado que derroca al gobierno peronista.3 Bajo la conducción de Frondizi.



UFOJEP�MVHBS�FOUSF�mOFT�EF�MB�EÏDBEB�EF�MPT�B×PT��Z�MB�QSJNFSB�mitad de la siguiente, cuando en un contexto social, político e ideológico muy distinto (signado por los ecos del Mayo francés, el ascenso de las luchas sociales y políticas, el Cordobazo, la crisis de la Revolución Argentina y la inminencia de la vuelta del pero-nismo y de Perón al Gobierno nacional) se crearon, en algunos casos ex novo y en otros absorbiendo distintos tipos de institu-ciones preexistentes, las Universidades Nacionales de Rosario, Comahue, Río Cuarto, Catamarca, Lomas de Zamora, Luján, Sal-ta, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Misiones, San Juan, San Luis, Santiago del Estero, Centro de la Provincia de Buenos Aires, Mar del Plata y la Patagonia (Rinesi, 2013).

El tercero de esos activos movimientos es el de la década ini-ciada por el gobierno de Néstor Kirchner, que sumó las univer-sidades nacionales de Chilecito, Arturo Jauretche de Florencio Varela, Oeste, Moreno, José C. Paz, Chaco Austral, Tierra del Fuego, Noroeste de la Provincia de Buenos Aires, Río Negro, Villa Mercedes y, claro, la Universidad Nacional de Avellaneda. &M�FOUFSP�TJTUFNB�VOJWFSTJUBSJP�TF�NPEJmDØ �BTÓ �TVTUBODJBMNFOUF�

Si la primera de estas tres olas expansivas había tendido sobre UPEP�B�MB�BNQMJBDJØO�EF�MB�DPCFSUVSB�HFPHSÈmDB�EFM�TJTUFNB�EF�universidades públicas hacia el interior del país, y si la segun-da impactó especialmente en el crecimiento de la red de uni-versidades nacionales del Conurbano bonaerense, la tercera combina en partes semejantes ambos impulsos, no dejando ya casi ningún rincón de la mayor región metropolitana del país y ninguna de sus veintitrés provincias sin una universidad pública en su territorio (Rinesi, 2013).



Las nuevas universidades del siglo XXI

El actual ministro de Educación, Alberto Sileoni (2012), sostiene que el particular momento por el que estamos transitando los ar-gentinos necesita de nuevas ideas y paradigmas para la cons-USVDDJØO�EF�QPMÓUJDBT�OBDJPOBMFT�iEFTEF�FM�QFOTBNJFOUP�Z�QBTJØO�QPS�MBT�JEFBT�Z�MB�BDDJØO�USBOTGPSNBEPSB�EF�MB�TPDJFEBEw�4La universidad no es ajena a esta necesidad y debe contribuir desde su lugar de entidad generadora de nuevos conocimien-tos a la construcción de políticas nacionales. En tal sentido, para alcanzar sociedades justas, libres, soberanas y democrá-UJDBT �FO�OVFTUSP�$POUJOFOUF�TF�SFRVJFSF�DBNCJBS�FM�QFSmM�IJTUØ-rico de las Casas de Estudios, constituyéndolas en espacios de construcción de saberes sociales que incluyan la visión del conjunto del colectivo que denominamos pueblo. Coincidiendo con Sileoni, la inclusión del pueblo en el ámbito de la educación superior requiere de nuevos espacios, que se caractericen por la existencia de nuevas miradas pedagógicas que permitan la creación de estrategias y formas de trabajo innovadoras. En respuesta a esta tarea es que durante los últimos años se han creado nuevas universidades nacionales cuya misión fun-damental es la inclusión de los sectores sociales históricamen-te excluidos de los sistemas de educación superior. De este modo, actualmente en Argentina, contamos con 104 institucio-nes estatales de educación superior universitaria (contando las universidades nacionales y los institutos universitarios), de las cuales, recientemente, cinco de ellas están localizadas en el Conurbano Bonaerense.Uno de los nuevos desafíos que se les presenta a estas nue-

4�4JMFPOJ �"�� i/VFTUSB�ÏQPDB�OFDFTJUB�OVFWBT�JEFBT�Z�QBSBEJH-NBTw��/PUB�QVCMJDBEB�FO�MB�3FWJTUB�Bicentenario, de la Subsecretaría de Gestión y Coordinación de Políticas Universitarias, del Ministerio de Educación de la Nación. Buenos Aires.



vas universidades, y al sistema de educación superior en su conjunto, es el de generar estructuras para facilitar la participa-ción activa de toda la sociedad en sus claustros, con miras a la producción y distribución de conocimiento de acuerdo con las OFDFTJEBEFT�EF�MB�QPCMBDJØO �Z�MB�GPSNBDJØO�EF�VO�OVFWP�QFSmM�de profesionales con espíritu crítico y emancipador. La creación de la Universidad Nacional de Avellaneda no esca-pa a este escenario, caracterizado por un contexto socio-histó-rico de fuertes transformaciones y de gran participación social, y desde sus inicios ha generado diversas experiencias e imple-NFOUBEP�OVNFSPTBT�FTUSBUFHJBT � DPO�FM� mO�EF�BMDBO[BS� FTUPT�ideales transformadores. Para ello, la UNDAV debió plantearse el difícil objetivo de ser una universidad nacional y popular, con todo lo que ello implica. Pero, ¿es posible una universidad que sea a su vez nacional y popular?Las universidades constituyen instrumentos o instancias de me-diación entre la población y el Estado (a nivel local y nacional). Si la universidad se vincula con distintos organismos de Estado, MP� RVF� OP� OFDFTBSJBNFOUF� JNQMJDB� iQFSEFSw� TV� BVUPOPNÓB � FT�capaz de asumir un papel protagónico en el proceso de trans-formación de la sociedad, acompañando políticas públicas de inclusión que promuevan una realidad más justa y equitativa, en defensa de la institucionalidad democrática. Es central que para ello la universidad y el Estado coincidan en la forma de lograr la transformación social, y la plasmen en forma de una política pública concreta. Desde 2003, esta política pública es la denominada política de inclusión.Para aportar a ella, la universidad debe generar mecanismos que permitan garantizar el acceso y la permanencia de todos los sectores sociales en sus claustros (desterrando una arrai-HBEB�DPODFQDJØO�FMJUJTUB �NJUJHBOEP� MB� JOnVFODJB�EF�EJTUJOUBT�WBSJBCMFT�Z�GBDUPSFT�RVF�EJmDVMUBO�B�MPT�TVKFUPT�TPTUFOFS�TV�USB-yecto universitario. Los factores no son solo internos, y preci-samente por ello debe valorarse el marco poderoso de estos años para comprender el modo en que las políticas públicas



favorecen un nuevo concepto de educación superior inclusiva. Entre los factores internos, propios del ámbito universitario y resultado de las políticas que se llevan a cabo en las Casas de Estudios, es posible mencionar: sistemas de ingreso muy TFMFDUJWPT � DVSSÓDVMPT� QPDP� nFYJCMFT� Z� BMFKBEPT�EF� MB� SFBMJEBE�cotidiana de los estudiantes, falta de preparación pedagógica de los profesores (sobre todo en cursos iniciales), falta de ac-ciones de acompañamiento a los estudiantes y falta de políticas de asistencia estudiantil o compensatorias.Una universidad nacional, en el actual momento de nuestro país, debe generar mecanismos innovadores al respecto de estas situaciones, abriendo sus puertas al conjunto de la socie-dad y acompañando la política de inclusión que lleva a cabo el gobierno nacional.Esta construcción que es, precisamente, aquella que pretende abordar centralmente este libro, además de la acción de diversos actores sociales y políticos, es la expresión de una historia cultural que es la que ha concentrado, en su larga forjadura, la ciudad de Avellaneda. De esos jalones da cuenta el siguiente Capítulo.


Este es un recorrido en el tiempo de la iniciativa en pro de una univer-sidad local cuando todavía no estaba conformada pero ya era una idea y un impulso cargado de entusiasmos y fu-turo hasta llegar a los momentos pre-vios a su efectiva puesta en marcha (Irene Mercedes Aguirre).

Avellaneda cuenta con numerosos establecimientos educativos dentro de su jurisdicción, tanto jardines de infantes como establecimientos pri-marios, de nivel medio y terciarios, públicos y privados, todos los cuales han realizado importantes contribu-ciones al desarrollo de la educación y la cultura local, cada uno en su ni-vel de actuación. Asimismo, coexisten dentro del Par-tido de Avellaneda, instituciones uni-versitarias de reconocida trayectoria y prestigio como la Facultad Regional Avellaneda, perteneciente a la Univer-sidad Tecnológica Nacional y algunas actividades del Ciclo Básico Común y de carreras de grado de la Univer-sidad de Buenos Aires. Sin embargo no hubo —hasta 2009— una univer-TJEBE� FTQFDÓmDB� EF�"WFMMBOFEB � RVF�cubriera las nuevas expectativas de estos tiempos en cuanto al desarrollo, recogiendo además su impronta his-tórico-cultural característica. Desde comienzos de la década de los años

La Universidad

Nacional de Avellaneda:

de la aspiración

a la concreción



90, se acentúa el interés por concretar el proyecto universitario que buscaba la representación y optimización de realidades lo-cales dentro del concierto educativo nacional e internacional, especialmente ante los procesos de profundos cambios y glo-balización creciente en el mundo entero.Dentro del ámbito universitario aparecen y se imponen nuevas tendencias, a las que es necesario responder según las exi-HFODJBT�Z�OFDFTJEBEFT�MPDBMFT��4F�NBOJmFTUBO�OVFWPT�QVOUPT�EF�WJTUB�Z�TF�BOBMJ[B�FM�GFOØNFOP�EF�MPT�iNFTUJ[BKFTw�EFOUSP�EFM�campo educativo y cultural, favorecidos por la incorporación de las tecnologías digitales y las nuevas interpretaciones que iban apareciendo sobre el valor y las oportunidades que brindaba la diversidad cultural resultante de las circunstancias apuntadas. El azaroso trayecto de paradigmas tradicionales ligados —o DVBOEP�NFOPT�JOnVFODJBEPT��QPS�NPEFMPT�GPSÈOFPT�FO�OVFT-tras Casas de Estudios, van cediendo el lugar a la necesidad de fortalecer lo propio, mejorar los procesos inclusivos y valorar el rol de la educación para atender a los problemas locales, conservar la memoria de nuestras tradiciones, reconocer los es-fuerzos de la población a través del tiempo y mejorar la gestión relacionada con necesidades sociales presentes y el diseño de escenarios futuros. El despliegue de las diversas instancias del proyecto universita-rio en Avellaneda partió de una concepción educativa y cultural dentro de la cual la presencia de una Casa de Estudios en la zona se consideraba como un factor de transformación y edu-cación de enorme importancia para la población del lugar y de las zonas circundantes. Asimismo, esa creación promovería la comprensión, el análisis y el mejoramiento de las vinculaciones de la universidad con la política, la economía, las artes, la cien-cia, el deporte, la salud, las comunicaciones y en suma, con las actividades de su sociedad circundante. Por otra parte, posibilitaría la presencia de profesionales, inves-tigadores y docentes que contribuirían a formar personas que profundizaran en los diversos espacios del pensar, el decir, el



hacer y que podrían detectar necesidades y aspectos críticos a través de las contribuciones de la universidad. Aunque cada institución universitaria posee sus matices pro-QJPT �B�MB�WF[�QBSUJDJQB�EF�iMBT�SBÓDFT�DPNVOFT�RVF�MJHBO�B�MBT�VOJWFSTJEBEFT�BSHFOUJOBT�Z�B�MBT�EF�"NÏSJDB�MBUJOBw�"HVJSSF �2000:46) y que constituyen un basamento ineludible a la hora de conformar otras nuevas. Por ello, consideramos indispensa-ble atender a los procesos histórico-culturales de un territorio determinado, lo que implica no considerarlo como UBCVMB�SBTB, sin atender los hechos pasados, sino lograr la armoniosa con-junción de lo acontecido con las necesidades del presente y el adecuado bosquejo de escenarios futuros.Si repasamos el desarrollo histórico de las universidades ar-HFOUJOBT � TF� QPOFO� EF� NBOJmFTUP� MBT� DBSBDUFSÓTUJDBT� QSPQJBT�de cada zona del país en materia de estudios superiores, algo acerca de lo cual nos hemos referido en el Capítulo precedente. Ello se ha debido a múltiples y complejas situaciones sociales de toda índole, tanto históricas como culturales, económicas, EFNPHSÈmDBT � HFPQPMÓUJDBT � FUD� � QPS� MP� DVBM� WBSJBT� [POBT� EF�nuestro territorio nacional ingresaron tardíamente a la vida uni-versitaria, mientras que otras lo hicieron en épocas más tem-pranas. Por eso, resulta necesario atender a la pertinencia y coherencia del proyecto de una universidad local atendiendo a las condiciones que surgen del propio medio circundante. Para ello daremos una breve reseña histórica y cultural sobre cuatro aspectos centrales del quehacer local a lo largo del tiempo:

X� El trabajo y la producción;X� La educación y las artes;X� El deporte y la recreación;X� Las ciencias ambientales y la salud.



El trabajo y la producción

El Partido de Avellaneda se caracteriza por su intensa vida cultural y educativa, de lo que dan cuenta los múltiples esta-blecimientos que funcionan en su casco céntrico y diferentes localidades que lo integran. Pero cuenta con una larga y esfor-zada historia de trabajo que se remonta a siglos anteriores, a los comienzos de la época colonial, cuando los pueblos originarios que habitaban el Riachuelo tomaron contacto con los conquis-tadores y colonizadores del Viejo Mundo. La cercanía con la actual Ciudad Autónoma de Buenos Aires posibilitó la vinculación de algunos miembros de la expedición de Juan de Garay a los pocos meses de la Segunda Funda-ción, ocurrida el 11 de junio de 1580. El Cabildo de la refunda-da Ciudad permitió el arrendamiento de algunos de los mean-dros del Riachuelo, denominados ensenadas. Allí se estableció como vecino Antón Higueras que se dedicó a la agricultura y era tahonero, dedicado al abasto de la incipiente población de entonces. Una publicación de la Municipalidad de Avellaneda BNQMÓB� MB� JOGPSNBDJØO�FO�FTUPT� UÏSNJOPT�i.ÈT� UBSEF�BSSJFOEBO�estas ensenadas los vecinos Juan Ramírez de Abreu y Martín "MPOTPw� .VOJDJQBMJEBE�EF�"WFMMBOFEB � �� &TUBT� UJFSSBT�junto a la costa ofrecían la ventaja de contar con abundante agua y terrenos aptos para la siembra y la provisión de alimen-tos a los pobladores de Buenos Aires, lo que les brindó una consideración especial en aquellos tiempos. Otro interés para las autoridades lo constituyó el Camino a la Campaña del Sud, ruta ya considerada por Garay en el repar-timiento de tierras al sur de la ciudad. Era un larguísimo tra-yecto que arrancaba en la Plaza Mayor, cruzaba el Riachuelo y continuaba hacia la costa del río Samborombón. Ese recorrido dio lugar a la aparición de varias calles de antigua raigambre: Ameghino, Laprida, Avenidas Bartolomé Mitre y Ramón Franco. Las vías de comunicación se agilizaron con la construcción del puente de Gálvez, el 1º de diciembre de 1791. Hasta enton-



ces había que cruzar en canoas, y podemos recordar aquí el Paso Pedro Salazar, que recibió su nombre del dueño de una chacra que allí estaba ubicada. En síntesis, desde la fundación de Garay hasta la construcción del puente pasaron 211 años aproximadamente, para un cambio de comunicación y trans-QPSUF�DPO�PUSP�SJUNP�Z�SFMBDJPOFT�NÈT�nVJEBT�EF�VO�MBEP�Z�PUSP�del Riachuelo. El otro camino que vinculó la ciudad y la campaña sud fue el Camino a las Cañuelas y a las Lomas de Zamora. Al cruzar el puente de Barracas doblaba hacia el oeste y realizaba un reco-rrido bastante parecido al de la avenida Pavón hacia los lugares mencionados. Una circunstancia afortunada favoreció la formación del pue-blo de Barracas al Sud. Como aumentó la dedicación al faena-miento de carnes saladas a través de la industria saladeril, la Primera Junta de Gobierno Patrio permitió que se establecieran varios saladeros al sur del Riachuelo, dada su condición de vía nVWJBM�QBSB�TV�GÈDJM�USBOTQPSUF�BM�FYUFSJPS��&TB�BDUJWJEBE�QSPQJDJØ�la radicación de trabajadores y sus familias en las cercanías del DVSTP�EF�BHVB��%FmOJEP�QPS�FM�UFYUP�NVOJDJQBM�ZB�DJUBEP�DPNP�iBSSBCBM�QSFDBSJPw��TF�GPSNØ�FM�JODJQJFOUF�QVFCMP�RVF�TF�fue consolidando, en especial luego del decreto del goberna-EPS�.BSUÓO�3PESÓHVF[�RVF �FO�� EJTQVTP�iMB�JOTUBMBDJØO�EF�los saladeros, graserías, fábricas de jabón y barracas de frutos EFM�QBÓT�BM�TVE�EFM�3JBDIVFMP�EF�#BSSBDBTw��¿Cómo era nuestro pueblo hacia 1830? Era pequeño, inorgá-nico y desparejo en su distribución habitacional. En líneas ge-nerales comprendía unas doce cuadras de largo por ocho de ancho, con construcciones a lo largo de los caminos y calles NFODJPOBEPT��4F� USBUBCB�EF�FEJmDBDJPOFT�QSFDBSJBT � SBODIPT�habitados por personas humildes y sus familias, reseros, mata-rifes y peones de los saladeros. Como podemos apreciar, fue el trabajo saladeril y las activida-des conexas, promovidos por las autoridades gubernamenta-les, lo que posibilitó la conformación del primer núcleo humano



que puede considerarse un pueblo propiamente dicho. Pero ya mucho antes, durante las primeras décadas del siglo XVIII, el 3JBDIVFMP�TJHOJmDBCB�VO�DBVDF�WJUBM�QBSB�FM� USÈOTJUP�EF�CBSDPT�de poco calado, y en sus cercanías se depositaban en grandes cantidades las corambres (conjunto de cueros) productos de las vaquerías (caza de ganado vacuno) autorizadas por el Cabildo. El nombre antiguo de la actual Avellaneda es el resultado de TV�QSPQJB�IJTUPSJB�Z�BMVEF�BM�iBMNBDFOBNJFOUP�EF�MPT�DVFSPT�FO�grandes galpones […] que comenzaron a llamarse barracas, posiblemente por corrupción del nombre inglés CBSSBDPOTw. Los galpones también sirvieron para la cuarentena de negros escla-vos que luego se vendían para cumplir distintas labores en el área rioplatense. Estas construcciones dieron lugar, entonces, al nombre #BSSBDBT�BM�4VE. El Riachuelo también pasó por distintas denominaciones: 3ÓP�EF�MBT�$BOPBT �3JBDIVFMP�EF�MPT�/BWÓPT�Z�3JBDIVFMP�EF�#BSSBDBT� Ambos lados de la costa se denominaron Barracas, las Barracas al Norte (actual Barracas) y Barracas al Sud (hoy Avellaneda). ��NBSDB�VO�QVOUP�EF�JOnFYJØO�FO�FM�QVFCMP��&O�FM�QMBOP�OBDJP-nal, se produce la caída de Don Juan Manuel de Rosas en Case-ros y la provincia de Buenos Aires, gobernada por Vicente López y Planes, acepta crear una nueva jurisdicción con la cabecera en el pueblo de Barracas al Sud. Por decreto del 7 de abril de dicho año, se designa como titular del Juzgado de Paz a Martín José de la Serna quien pone en marcha la organización del territorio que comprendía los Cuarteles 1º, 2º y 3º del antiguo Partido de Quilmes. Esos límites se mantuvieron hasta 1864, cuando Lomas de Zamora se separa, por ley del 24 de octubre de ese año. El 4 de junio de 1944 se produce otra merma territorial: se separa el actual partido de Lanús y queda entonces Avellaneda con la TVQFSmDJF�DPO�MB�RVF�DVFOUB�IBTUB�IPZ�El juez De la Serna fue quien se ocupó de que se autorizara la creación de un curato en el pueblo, lo que dio lugar a la crea-ción de la Parroquia de Barracas al Sud bajo la denominación de $VSBUP�EFM�5SÈOTJUP o "TVODJØO�EF�.BSÓB�4BOUÓTJNB�y su primera



capilla se llamó i$BQJMMB�EFM�*UBMJBOPw. Aún no se contaba con igle-sia y éste era un oratorio privado, propiedad del coronel Fabián Rozas, que se lo había adquirido a la viuda del italiano Nicolás Paduán. Unos años después, en 1860, ya poseía Barracas al Sud su primera Iglesia Catedral, para cuya construcción hubo colec-ta pública, iniciada en 1858, cuando la población había crecido hasta los 6000 habitantes. La epidemia de cólera de 1869 provocó que se cerraran tempora-riamente los saladeros, que habían sido hasta entonces el sostén principal del progreso local. A esta grave circunstancia se agregó, EPT�B×PT�EFTQVÏT �MB�FQJEFNJB�EF�mFCSF�BNBSJMMB�RVF�EVSBOUF�FM�verano de 1871 causó verdaderos estragos (Eyherabide, 1971) y MMFWØ�B�TV�DJFSSF�EFmOJUJWP�FO�MB�[POB��-B�EFTBQBSJDJØO�EF�MB�FTDMB-vitud, lenta e inevitable, hizo que el mercado de carnes saladas, el principal alimento de los esclavos africanos, decreciera y consigo trajo la disminución de la industria del saladero.Un cambio de gran trascendencia se produce cuando aparece el sistema de carnes enfriadas primero y congeladas después, lo que permitirá otra forma de trabajo con la carne y el desarrollo EF�FTUBCMFDJNJFOUPT�GSJHPSÓmDPT�RVF�QPUFODJBSÈO�MB�OVFWB�JOEVT-trialización de Barracas al Sud. El primer envío de carne bajo estas condiciones fue todo un éxito; quedó patentizado con la presencia del barco -F�'SJHPSJmRVF, desde el puerto de El Havre, en Francia y llegó a Buenos Aires en diciembre de 1876 luego de 105 días de navegación. Todo ello dio cuenta de las bondades del experimento del ingeniero Charles Tellier, su inventor.4F�EFCF�B�(BTUØO�4BOTJOFOB�MB�JOTUBMBDJØO�EFM�QSJNFS�GSJHPSÓmDP�local; a partir de allí esta industria propulsó una gran actividad y QSPTQFSJEBE�FO�MB�[POB �B�mOFT�EFM�TJHMP�9*9�Z�CVFOB�QBSUF�EFM�siglo XX. Abundaban, además, las barracas, las curtiembres, las graserías, las fábricas de aceite, las tejedurías, los lavaderos de lanas, las fábricas de fósforos. El Mercado de Abasto se crea en 1887 para atender las necesidades de la población para el aprovisionamiento cotidiano, y se constituyó, junto con el Mer-cado Central de Frutos, que se abre al público en 1890, en dos



importantes polos de comercialización, depósito y transporte de alimentos y mercancías de toda índole, en particular al último FEJmDJP�NFODJPOBEP��BMMÓ�TF�EJSJHÓBO�MBT�WÓBT�GÏSSFBT�EF�MPT�USFOFT�de toda la provincia (Torassa, 1940). Por ley del 22 de octubre de 1895, el pueblo de Barracas al Sud se convierte en ciudad. Pocos años después, el 11 de enero de 1904, la ciudad y el Par-tido dejan su antigua denominación y toman el nombre actual de Avellaneda, en homenaje a quien fuera presidente argentino entre 1874 y 1880. El aumento de la población y la intensa actividad industrial y co-mercial incrementó la necesidad de más y mejores transportes. Se tendieron varias líneas de tranvías, se pavimentaron calles y comenzaron a funcionar líneas telefónicas, la luz eléctrica, y el servicio de agua corriente. El Canal Dock Sud fue otra de las HSBOEFT�PCSBT�RVF�TF�IJDJFSPO�BM�DPNFO[BS�FTUF�NPNFOUP�nPSF-ciente de la industria local lo que favoreció la vía de circulación nVWJBM�SFRVFSJEB��%F�FTUB�NBOFSB �"WFMMBOFEB�TF�DPOWJSUJØ�FO�iMB�NBZPS�DJVEBE�JOEVTUSJBM� Z� PCSFSB� EF� MB� "SHFOUJOBw� 5PEPBWFMMBOFEB�DPN�BS �)JTUPSJB��&TUP�PDVSSJØ�QPS�TV�GVFSUF�DSFDJNJFOUP � MB�EJWFSTJmDB-ción de sus actividades y la modernización consiguiente. En el último texto mencionado se expresa que, en 1931, contábamos con 6501 establecimientos industriales, cuatro años más tarde sumaban 7321 y en 1943 eran ya 9938. Hacia 1847 cuatro gran-EFT�GSJHPSÓmDPT�TF�NBOUFOÓBO�FO�MB�[POB �BEFNÈT�EF�EPT�NPMJ-nos harineros, e industrias sucedáneas menores. La metalúrgi-ca también tenía gran importancia, con numerosas fundiciones, tornerías, talleres de laminación y otros talleres y fábricas de artículos de hierro. Esta extraordinaria actividad industrial se debilitó hacia 1960, por transformaciones que sufrió la estruc-tura económica predominante, y fueron desapareciendo, poco a poco, las grandes industrias. Permanecieron los talleres más pequeños que lograron sostener, aunque en niveles más mo-destos, la economía del partido (-B�$JVEBE, 1979).



La educación y las artes

La educación de la sensibilidad a través del arte no es algo nuevo, por supuesto. Avellaneda cuenta, desde hace muchos años, con Institutos de reconocido prestigio en la materia, tales como la Es-cuela Municipal de Música de Avellaneda (IMMA), creada en 1949; la Escuela de Conjunto Orquestal; el Instituto Municipal de Folklore y Artesanías Argentinas (IMFAA), de 1960; el Instituto Municipal de Artes Plásticas (IMAP), creado en 1963 como Escuela de Artes 1MÈTUJDBT�i"MGSFEP�4UVSMBw��FM�*OTUJUVUP�.VOJDJQBM�EF�&EVDBDJØO�QPS�el Arte (IMEPA), fundado en 1965; y el Instituto Municipal de Tea-tro (IMT) que inició sus actividades al año siguiente (1966), mien-USBT�RVF�FM�*OTUJUVUP�EF�"SUF�'PUPHSÈmDP�Z�5ÏDOJDBT�"VEJPWJTVBMFT�(IMAFTA) se inició en 1969. Por su parte, el Instituto Municipal de Cerámica (IMCA) nace como Taller del Instituto de Artes Plásticas IBDJB��&M�*OTUJUVUP�EF�"SUF�DJOFNBUPHSÈmDP�*%"$�DPNJFO[B�sus actividades en 1974. Se suma luego la Escuela de Música Po-pular de Avellaneda (EMPA) que se crea en 1987 como Primera Escuela Argentina de Música Popular, de carácter provincial.A los institutos mencionados se agregan otros dos descentrali-zados: el de Investigaciones Históricas Municipal, centrado en estudios del pasado de la zona, su evolución cultural e identidad local, que comenzó sus actividades en 1994 y brinda seminarios, investigaciones y forma a los interesados en la historia local, y el Municipal de Letras, que brinda talleres literarios, realiza concur-sos y publicaciones diversos. Estos valiosos antecedentes de educación por el arte se suman a los numerosos establecimientos educativos de todos los niveles DPO�RVF�DVFOUB�"WFMMBOFEB�Z�QPOFO�EF�NBOJmFTUP�FM�SJDP�QBOPSB-ma educativo y cultural que requería ser optimizado y tenido en cuenta dentro del proyecto universitario, con la conformación de unidades académicas vinculadas con estos estudios. -PT�FEJmDJPT�USBEJDJPOBMFT�RVF�BMCFSHBO�BDUJWJEBEFT�WJODVMBEBT�con las artes son: la Casa de la Cultura; el Teatro Municipal Roma (inaugurado el 1º de octubre de 1904 y conocido anteriormente



como Teatro del Sur); el Auditorio José Rodríguez Fauré, por ci-tar algunos y cuenta asimismo con el Teatro Colonial restaurado hace poco tiempo. Esos espacios y muchos otros que se crean para los vecinos, posibilitan el acceso a la música, la danza, el canto, el teatro, la pintura y en general, al desarrollo de la crea-tividad en sus múltiples formas. La pesada herencia del ensayo neoliberal dejó serias huellas en esta rica herencia cultural, lo que nos exige repensar las formas de entender la producción de bienes artísticos y simbólicos, al igual que las políticas y las estrategias de gestión. La imposición de mercancías culturales y la aparente conveniencia de adoptar una línea de gestión en MÓOFB�DPO�MBT�JEFBT�EF�DÈMDVMP �FmDBDJB �CFOFmDJP�Z�SBDJPOBMJ[B-ción, eran clara expresión de un sometimiento a las imposicio-OFT� EFM�NFSDBEP � RVF� DPODFCÓB� TPMP� iDPOTVNJEPSFT� QBTJWPTw��5BNCJÏO� MB�iHFTUJØO�DVMUVSBMw �FOUPODFT � SFRVFSÓB�EF�VOB�OVFWB�SFnFYJØO�Z�VOB�SFEFmOJDJØO �RVF�UPNBSB�EJTUBODJB�EF�VOB�DPOTJ-deración puramente administrativa, cuya base no era otra que las necesidades comerciales de un puñado de oligopolios, y la desprotección de los sectores populares. La multiplicación de proyectos culturales, artísticos, editoriales y comunicacionales iJOEFQFOEJFOUFTw � MBT� DPPQFSBUJWBT � MBT� VOJWFSTJEBEFT� QÞCMJDBT�y no pocas ONGs desempeñaron un papel determinante. En el aspecto local, la incesante labor desplegada por la Secretaría de Cultura, Educación y Promoción de las Artes comandada por Hugo Caruso contribuyó de manera sustancial. Es tiempo, sin embargo, de forjar una nueva concepción de la gestión cultural desde las nuevas universidades nacionales.3FTDBUBS�FTUF�DPODFQUP�EF�iHFTUJØO�DVMUVSBMw �SFDSFBSMP�FO�FM�NBS-co de una nueva Universidad Nacional que se integra recogien-do una tradición de arte y de cultura que es marca distintiva de la ciudad de Avellaneda, es además de un reto, un mandato car-gado de futuro. Toda práctica cultural es una fusión inseparable entre un legado y la inagotable producción de lo nuevo. Dicho de otro modo, este escenario solicita la facilitación de un diálogo FOUSF� MB�HFTUJØO�QÞCMJDB�Z� MBT�NBOJGFTUBDJPOFT�DVMUVSBMFT� iJOEF-



QFOEJFOUFTw �MB�FYQSFTJØO�EJWFSTB �DPNQMFKB �SJDB�FO�NBUJDFT�Z�FO�diversidad, de la sociedad toda, una mirada colectiva acerca de los modos de concebir, producir y difundir los bienes culturales.

El deporte y la recreación

El deporte es otro tema de gran repercusión popular y en Ave-llaneda su historia deportiva así lo demuestra. Racing Club apa-rece el 2 de octubre de 1904, justo cuando queda atrás el viejo nombre de Barracas al Sud para empezar a llamarse Partido de Avellaneda. Casi inmediatamente, el 1º de enero de 1905, nace el Club Atlético Independiente, su tradicional rival. Tiempo después, el 1º de setiembre de 1916, surge el Club Sportivo Dock Sud. Casi medio siglo habrá de transcurrir antes de que se sume Arsenal de Sarandí, el 11 de enero de 1957. Existen, además, otros lugares dedicados al deporte y la recreación que sería muy largo enumerar. Mencionamos, a título de ejemplo, el Club General Mitre, Club Hípico y de Pato Barracas al Sur, Club Náutico de Avellaneda, Club Regatas de Avellaneda, Club Social y Deportivo Amado Nervo, Club Social y Deportivo Amor y Progreso, Club Social y Deportivo Belgrano, Club Social y De-portivo Cramer, por citar algunos. Estos son apenas algunos nombres de una historia riquísima que, en no pocas ocasiones, estuvo relacionada con la vida político-social del país y sus dife-rentes administraciones gubernamentales, en estrecha relación con los modos diversos en que se entendía la relación entre Estado y sociedad.La etapa del primer peronismo fue particularmente rica en el es-tímulo y creación de clubes de barrio. Una época esplendorosa del fútbol argentino, con destacados dirigentes que se conside-raban fomentistas, vecinos y amantes del deporte social. A los DMVCFT�DFOUFOBSJPT�TF�BHSFHB�VO�OÞNFSP�TJHOJmDBUJWP�EF�PUSPT�que superan largamente las seis décadas de existencia. Más de 150 clubes que cumplen una amplia actividad social en la



que niños y jóvenes practican deportes y actividades cultura-les, sirviendo como espacios de cohesión y sociabilidad. Los DBNQFPOBUPT� JOGBOUJMFT� i&WJUBw �QPS�FKFNQMP �B�QBSUJS�EF�� JODPSQPSBSPO�VO�BTQFDUP�EF�QBSUJDVMBS�TJHOJmDBDJØO��FYÈNFOFT�médicos en la población infantil. Los programas del neurólogo santiagueño Ramón Carrillo, primer ministro de Salud del pe-SPOJTNP�FO�� EFUFSNJOBSPO��NJM�QMBDBT�SBEJPHSÈmDBT�B�chicos de 10 a 12 años entre 1949 y 1951.La Municipalidad de Avellaneda, en la estela de ese rol del Esta-do, desarrolla programas para el fortalecimiento y el desarrollo de los clubes de barrio. El Programa Municipal de Incentivo Deporti-WP�i"MJFOUPw �FOUSF�FMMPT �FTUÈ�EFTUJOBEP�B�DPMBCPSBS�DPO�MB�DBSSFSB�de deportistas de alto rendimiento, quienes compiten en distintas disciplinas nacionales e internacionales: natación, taekwondo, patín artístico, paddle, judo, natación, boxeo, lanzamiento de martillo, triatlón, tenis, ajedrez, físico-culturismo, tenis de mesa, atletismo, para mencionar algunas. En este sentido, la implemen-tación del programa incluye la articulación con empresas loca-les para que actúen como sponsors de los atletas. Esta política municipal se complementa con el Programa Alentar, destinado a generar mejores condiciones de desarrollo e infraestructura para todas las instituciones deportivas del Partido, devolviéndoles, de esa manera, su rol fundamental dentro de cada comunidad. Am-bos programas se complementan y le dan impulso al deporte en Avellaneda. Es decir, una poderosa tradición deportiva (y cultu-ral) que reencuentra en el Estado el desarrollo de políticas públi-cas que fomentan y propician la práctica deportiva, además de contribuir materialmente con su sostenimiento, y honrar la carac-terística histórica que distingue a la ciudad: la gran cantidad de clubes de barrio. Con ejes precisos que podrían sintetizarse en FM�JODFOUJWP�EFQPSUJWP �MB�TPMJEBSJEBE �FM�mOBODJBNJFOUP �MB�QSPNP-ción local, el asesoramiento y las obras, se ha restituido el valor fundamental de estos espacios clave en la trama social.La necesidad de responder a las exigencias de profesionali-zación para contribuir a mejorar las instituciones y su gestión



respectiva, puso de relieve la importancia de atender a esta rama de la actividad social de Avellaneda dentro del proyecto de la universidad local que, además, lo contempla en sus pro-pios cimientos fundacionales:

Formar profesionales que posean una visión integral de la perso-na, observando la importancia de la actividad física y el deporte para la promoción y prevención de su estado de salud (Proyecto Universitario Institucional, UNDAV).

Las ciencias ambientales

Las actividades industriales aumentaron considerablemente la contaminación de las aguas, el suelo y el aire en nuestra zona, provocando la preocupación de los vecinos y las autoridades para controlar sus efectos nocivos. Era inevitable que se atendiera a la creación de una unidad académica que se aplicara a estos temas dentro del proyecto universitario local. Los problemas ambientales son múltiples y requieren abordaje rápido y con buenos índices de gestión para resolverlos. La formación de profesionales capaces de enfrentar dichos desafíos es de crucial importancia en la región. Se realizaron múltiples investigaciones sobre el estado actual EF�"WFMMBOFEB�FO�NBUFSJB�EF�DPOUBNJOBDJØO � SFTVMUBEP�EF� iMB�JOUFSBDDJØO�GÓTJDB�Z�TPDJBMw�BOBMJ[BEB�1SJBOP ��-B�VUJMJ[B-DJØO�EFTPSEFOBEB�Z�QPDP�mTDBMJ[BEB�EF�MPT�DVSTPT�EF�BHVB�DP-lindantes del Partido y su intensa industrialización dan como resultado problemas con el agua para su utilización cotidiana. Esta situación afecta tanto la potabilización como el deterioro del paisaje y la disminución de ámbitos saludables para el es-parcimiento de la población. También incapacita el potencial productivo de los recursos relacionados, como bien lo destaca la autora citada. Se presentan síntomas contaminantes en los SFDVSTPT�IÓESJDPT�TVQFSmDJBMFT�Z�TF�EFUFDUBO�QSPCMFNBT�FO�MBT�aguas subterráneas del partido.



Las políticas públicas medioambientales

La Municipalidad de Avellaneda, en estrecha labor con el Go-bierno Nacional, viene desarrollando un trabajo sostenido de atención a la problemática ambiental. En setiembre de 2012, el EJTUSJUP�mSNØ�VO�DPOWFOJP�DPO�MB�"VUPSJEBE�EF�MB�$VFODB�.BUBO-za-Riachuelo (ACUMAR) para construir una sede del Departa-mento de Ciencias Ambientales de la Universidad Nacional de Avellaneda, el Museo del Riachuelo y el Centro Integral de Moni-toreo y Control Ambiental en el lugar donde funcionó el Hotel de Inmigrantes de esa ciudad. Este proyecto fue anunciado en su momento por la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de ,JSDIOFS��"�mO�EF�DPOTUSVJS�FTUBT�USFT�HSBOEFT�PCSBT �FM�NVOJDJQJP�suscribió un convenio por un valor de 18 millones de pesos, lo RVF�QFSNJUJSÈ �BEFNÈT �MB�QVFTUB�FO�WBMPS�EF�VO�FEJmDJP�IJTUØSJDP�Una de las obras programadas es la puesta en funcionamiento del Centro Integral de Monitoreo y Control Ambiental de ACU-MAR (CIMCA), donde se reunirá toda la información de otros centros similares ubicados en otros sectores para tener un pano-rama completo del comportamiento del Riachuelo.Con base en estos objetivos y en relación estrecha con estas políticas públicas, es que maduraba el diseño de una carrera de Ciencias Ambientales. En palabras del señor rector, Ing. Jorge $BM[POJ �FMMP�QFSNJUJSÓB�iDPMBCPSBS�DPO�FM�NVOJDJQJP�Z�DPO�"$6-."3w��&O�FM�NJTNP�TFOUJEP�TF�DPOTJEFSBCB�MB�DPOTUSVDDJØO�EFM�.VTFP�EFM�3JBDIVFMP �DPO�FM�QSPQØTJUP�EF�RVF�iTF�USBOTGPSNBSB�en un amplio generador de identidad y contribuirá a mejorar la QSPQVFTUB�IJTUØSJDP�DVMUVSBM�EF�"WFMMBOFEBw�Por otro lado, también el Municipio dispuso políticas para la cla-TJmDBDJØO�EF�SFTJEVPT�EPNJDJMJBSJPT��-B�QVFTUB�FO�NBSDIB�EF�VO�EcoPunto es expresión de ello. Los objetivos son formalizar y controlar los residuos no alcanzados por la recolección formal, y reducir las fracciones de escombros, poda, orgánicos y reci-DMBCMFT�FO�DBEB�NVOJDJQJP�EF�MB�DVFODB�3JBDIVFMP �DPO�FM�mO�EF�optimizar el Sistema Municipal de Gestión de Residuos Sólidos



Urbanos y reducir la cantidad de residuos dispuestos en basura-les clandestinos. En la Cuenca Matanza Riachuelo se dispondrá EF��&DP1VOUPT�mOBODJBEPT�QPS�MB�"$6."3��4F�QSFUFOEF �BEF-más, fortalecer y ampliar los circuitos de reciclado de materiales de desecho, evitando de ese modo la extracción y utilización de recursos naturales cada vez más escasos, favoreciendo la re-utilización y reinsertando materiales en el mercado productivo. )BTUB�FM�NPNFOUP �TF�mSNBSPO�DPOWFOJPT�QBSB�MB�DPOTUSVDDJØO�EF�un total de doce plantas. La ubicada en Avellaneda es la primera en trabajar en forma experimental.Medio Ambiente y Educación se enlazan, para estrechar un vín-culo que deviene indispensable. El proyecto de recuperación del ex Hotel de Inmigrantes debe considerarse un reconocimiento para un municipio que estuvo a la cabeza de la reconversión de los problemas de contaminación y el cumplimiento de las resolu-ciones de ACUMAR.-BT� JOnVFODJBT� FTUÈO�QMBOUFBEBT��3FDPHFSMBT � FO� MPT�NPEPT� Z�con las exigencias institucionales y proyectivas de una institución de la educación superior, ha sido el propósito axial de quienes forjaron el sueño de una universidad propia para una ciudad que labraba, sostenida e incansablemente, la trama cultural que to-EBWÓB�IPZ�KVTUJmDB �MBSHBNFOUF �TV�FYJTUFODJB�


LBT� DBUFHPSÓBT� FNQÓSJDBT� JEFOUJm-cadas a partir del análisis cualitativo efectuado sobre los relatos de los ac-tores, conforman una cronología fuer-temente atravesada por los cambios políticos a nivel nacional y local.Es así que a partir de los relatos de los participantes podemos diferenciar la existencia de tres etapas, producto de las variaciones en el contexto so-cio-político que enmarca el proyecto, así como de las alianzas políticas y estrategias desarrolladas por quienes lo formularon y llevaron adelante.

Las etapas emergentes son, entonces:

B�� *OJDJPT� EF� MB� QSPQVFTUB� EF�VOB�VOJWFSTJEBE�FO�"WFMMBOFEB

la que, a su vez, consta de dos momentos diferenciados. El pri-mero es el que denominamos &M� QSPZFDUP� EVSBOUF� MPT� B×PT�1992-2003 y el segundo es el que hemos llamado &M�QSPZFDUP�EVSBOUF�MPT�B×PT��C��-B�QSFTFOUBDJØO�EFM�QSPZFDUP�FO��, constituye la segunda de las etapas resaltadas desde distintos ángulos por los entre-vistados, a la que caracteriza-mos como un periodo bisagra FOUSF� iMP� WJFKP� Z� MP� OVFWPw� VO�recorrido que va desde el anti-guo proyecto de una Universi-

La construcción

de una historia

colectiva



dad de las Artes, que se demostrara inviable, hasta el que se elaborara en la nueva fase, y que concluiría en la creación de la actual Universidad).c. La tercera etapa, que denominamos 1VFTUB�FO�NBSDIB�EF�MB�VOJWFSTJEBE, comienza con la aprobación de la Ley /BDJPOBM��RVF�DSFB�PmDJBMNFOUF�MB�6OJWFSTJEBE�/B-cional de Avellaneda, y termina con su puesta en marcha en enero de 2011.

A las dos primeras es posible considerarlas como el recorrido que llevó a la ley de creación, y a la tercera etapa aquí caracte-rizada como la de la fundación de la Universidad.En el presente Capítulo, desarrollaremos la primera de las tres etapas que conforman el origen y el proceso de constitución de la UNDAV, es decir, la historia del surgimiento de la Universidad Nacional de Avellaneda.

Inicios de la propuesta: una universidad en Avellaneda

La primera de las etapas emergentes tiene dos momentos di-ferenciados. El primero transcurre entre los años 1994 y 2003. La idea de construir una universidad en Avellaneda tiene sus orígenes en un proyecto muy anterior del de la actual UNDAV. En efecto, la iniciativa de crear universidades nacionales en el Conurbano Bonaerense data de la década de los años 90, momento en el cual se responde a una demanda producto de MB�NBTJmDBDJØO�EF� MB�NBUSÓDVMB�VOJWFSTJUBSJB� USBT� MB� WVFMUB�B� MB�democracia. Durante los primeros años del retorno a la demo-DSBDJB��B�� FTQFDÓmDBNFOUF�IBZ�VO�BVNFOUP�EFM��por ciento en el número de estudiantes que asisten a las univer-sidades argentinas, consecuencia de la eliminación de las res-tricciones en el ingreso a las universidades que había impuesto la dictadura cívico-militar. Ante este cuadro de ampliación de la población estudiantil en el nivel superior surge la necesidad



de crear nuevas universidades que contengan dicha demanda DSFDJFOUF��.PMMJT� ��EFmOF�B�FTUB�FUBQB�RVF�DPNJFO[B�FO�la década de los años 90 como una tercera oleada de expan-TJØO�EF�MB�VOJWFSTJEBE�BSHFOUJOB �B�MB�RVF�DBMJmDB�DPNP�VOB�FY-QBOTJØO�QSJWBUJTUB��1BSB�FOUFOEFS�FM�QPSRVÏ�EF�FTUB�BmSNBDJØO�de Mollis acerca del carácter privatista de las nuevas Casas de Estudio hay que entender la lógica socio-política en que su creación estuvo inmersa. %VSBOUF�MB�ÞMUJNB�EÏDBEB�EFM�TJHMP�QBTBEP�TF�JOUFOTJmDBSPO�FO�MB�Argentina las denominadas políticas neoliberales que, con el im-pulso de organismos internacionales tales como el FMI, el Banco .VOEJBM�Z�FM�#*%�FO�"NÏSJDB�MBUJOB �IBCÓBO�DPNFO[BEP�B�QFSmMBS-se como la opción de superación del endeudamiento del aparato estatal a partir de la crisis del petróleo en la década de los años ��%F�FTUF�NPEP �TF�FGFDUVØ�VOB�SFGPSNB�QPMÓUJDB�JNQVFTUB�iEFT-EF�BSSJCBw�'FMEGFCFS�� EFTEF�FRVJQPT�UÏDOJDPT�DFOUSBMFT �que se visualizó como la única alternativa posible a la crisis. El gobierno del entonces presidente Carlos Saúl Menem, acorde DPO�FTUBT�SFDFUBT�Z�SFDPNFOEBDJPOFT�EF�MBT�FOUJEBEFT�mOBODJF-ras mundiales, comenzó un periodo de reforma del aparato esta-tal argentino, que consistió en la descentralización y privatización de amplios sectores de la esfera pública, alegando la necesidad de un nuevo paradigma organizativo para el Estado y el sector público, inspirado en el modelo gerencial de la empresa privada. De acuerdo con García Delgado (1997), durante la década de los años 90 surgió una suerte de nuevo localismo. La Constitución sancionada en 1994 reconoce la autonomía de los municipios, delegando en las Constituciones provinciales la determinación de su alcance y contenido. A partir de su sanción se planteó la necesidad de un nuevo modelo de gestión municipal que resultó más o menos exitoso, a condición de la buena gestión de los gobiernos locales y de los recursos transferidos. El proceso de descentralización y la consecuente retirada del Estado Nacional tuvieron como consecuencia que los gobiernos locales debieron incorporar a su agenda nuevos temas. Entre ellos, sobresalen la



QMBOJmDBDJØO� FTUSBUÏHJDB�EFM� UFSSJUPSJP � FM� EFTBSSPMMP� MPDBM� Z� VOB�nueva política social. Estas nuevas funciones fueron desarrolla-das de manera más o menos exitosa. En el marco de estas políti-cas, algunos municipios del Conurbano Bonaerense comenzaron a gestionar la creación de sus propias universidades nacionales, por razones diversas, que van desde la absorción del excedente EF�MB�NBUSÓDVMB�EF�MB�6#"�QSPEVDUP�EF�MB�NBTJmDBDJØO �MB�GPSNB-ción de nuevos cuadros profesionales en carreras innovadoras DPO�VO�QFSmM�EJGFSFOUF�EFM�USBEJDJPOBM �MB�DSFBDJØO�EF�VOB�VOJWFSTJ-dad local como logro de una gestión política particular, enfocada en la mejora de las condiciones de vida de los ciudadanos, el aumento del prestigio del municipio; hasta la posibilidad de ge-nerar recursos económicos y humanos propios, producto de la vinculación de la universidad con el medio socio-productivo local en que se implanta. Con respecto a esto último, es importante señalar el estrecho vínculo que existe entre algunas universida-des nacionales y los municipios de las localidades en las cuales están insertas, vínculo que varía de manera particular en cada caso. En este contexto, se crean nuevas Casas de Estudio: las Universidades Nacionales de Lanús, La Matanza, General Sar-miento, Quilmes y Tres de Febrero.Una de las características de estas nuevas universidades era la de no reproducir los modelos organizacionales de sus anteceso-ras, conformando nuevas e innovadoras estructuras, tales como la organización matricial por departamentos. Buchbinder (2005) señala que mientras las universidades creadas durante la década de los años 70 terminaron reproduciendo, en líneas generales, las estructuras institucionales (organización por facultades, carreras profesionales de larga duración) propias de las grandes Casas de Estudios existentes en aquel entonces, las surgidas en la déca-da de los años 90 adoptaron nuevos modelos organizacionales y permitieron, además, el armado de proyectos institucionales que seguían las señales emitidas desde el Ministerio de Educación. Se descartó, en muchos casos, la antigua estructura basada en la división por facultades y se adoptó un modelo que privilegia la



conformación de escuelas, institutos y departamentos, en los que se articulan en forma estrecha investigación y docencia. La Uni-versidad de La Matanza, por ejemplo, adoptó una organización departamental al igual que la de Quilmes. La de General Sarmien-to optó por una organización a través de Institutos.Ahora bien, cabe retomar en este punto, la pregunta acerca de por qué Mollis (2009) denomina a este periodo histórico como de expansión privatista. La respuesta está en la concepción que el neoliberalismo tenía de la educación. Desde la visión neoliberal fue equiparada a un bien de consumo. En el marco de este nuevo paradigma se educa para adaptarse a los cambios y a la sociedad del conocimiento y para formar en competencias, es decir, suje-UPT�nFYJCMFT� 5PSSFT �� BDPSEF�DPO� MBT�OFDFTJEBEFT�EF�VOB�FDPOPNÓB�DBNCJBOUF �FO�EPOEF�FM�TFDUPS�JOEVTUSJBM�TF�QFSmMBCB�FO�extinción ante la supremacía del sector de bienes y servicios. &O� FM� ÈNCJUP� EF� MB� FEVDBDJØO� TVQFSJPS� FTQFDÓmDBNFOUF � FTUB�tendencia llega de la mano de la Ley 24521 de Educación Su-perior, sancionada en 1995. Esta norma, contiene la posibili-dad de implementar políticas tales como crear nuevos tipos de instituciones, arancelar los estudios de grado, descentralizar el salario docente, etc.; e insta a cada universidad a generar re-cursos propios de acuerdo con la lógica del mercado. Ejemplo de este mecanismo para la generación de recursos propios es la posibilidad que se habilita para que el Ministerio de Educa-ción distribuya una partida especial de dinero a las distintas VOJWFSTJEBEFT�TFHÞO�DSJUFSJPT�EF�FRVJEBE�Z�FmDJFODJB�B�QBSUJS�de la evaluación de la calidad universitaria, y la creación de in-centivos a la investigación. El Estado Nacional adoptó un nuevo rol, pasando de un Estado que brindaba recursos y los gestio-naba, a un Estado evaluador (Feldfeber, 2003) ante el cual las instituciones de nivel superior debían rendir cuentas a cambio EF� mOBODJBNJFOUP�� 1SPEVDUP�EF� FTUB� SFEFmOJDJØO�EFM� SPM� FTUB-tal ocurre, a su vez, un desplazamiento del rol de las propias universidades, que terminan orientándose a la demanda exter-na del mercado. Sin embargo, discrepamos en generalizar un



carácter privatista o neoliberal a todas las Casas de Estudios inauguradas en el marco de este periodo. Siguiendo a Krotsch (2007) sostenemos la apropiación diferencial de las políticas y proyectos impulsados desde las instancias nacionales. Las QPMÓUJDBT�TPO�BQSPQJBEBT�Z� SF�TJHOJmDBEBT�EF�NBOFSB�EJWFSTB �según los procesos locales y los actores involucrados.En aquella época, funcionarios de la Municipalidad de Avella-neda comienzan a plantear la posibilidad de crear una univer-sidad en su localidad. Es así que surge el primer proyecto que insta a la creación de una Universidad Nacional en Avellaneda (UNA), proyecto de características muy diferentes de las que posee la actual Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV). Este antecedente se menciona en el actual Proyecto Institucio-nal Universitario de la UNDAV, en donde se da cuenta del surgi-miento de la idea inicial durante la última década del siglo XX:

Entre las consideraciones históricas que hacen a la viabilidad del proyecto, esta iniciativa se remonta al año 1994 y a gestiones pos-teriores para contar con una Universidad Nacional de característi-cas propias en el Partido de Avellaneda (Proyecto Institucional de la UNDAV, junio de 2010).

Entre dicha propuesta inicial (que se origina en 1992 y se hace pública en 1994) y la actual UNDAV hay una serie de continui-dades y rupturas. La que más se destaca es que, inicialmente, la Universidad de Avellaneda fue pensada como una universi-dad dedicada exclusivamente al campo artístico. En efecto, el proyecto inicial elaborado durante la gestión del ex intendente de Avellaneda Baldomero Álvarez de Olivera (y con participación destacada de quien es actualmente secretario de Cultura del Mu-OJDJQJP �"OUPOJP�)VHP�$BSVTP�DPOTJTUÓB�FO�MB�VOJmDBDJØO�EF�UPEPT�los institutos artísticos de la localidad en un centro único de estu-dios con acreditación de nivel superior universitario. En palabras de una de las entrevistadas:



La idea que tenía Hugo Caruso en ese momento en que revista-ba como secretario de Educación y Cultura de la Municipalidad [era diferente]; nos había convocado en ese momento, iba a tener otro nombre: era la Universidad de las Artes, y estaba pensado que tuviera el eje fuerte en la educación artística, aprovechando la cuestión de la Municipalidad de Avellaneda. En ese momen-to teníamos algunas reuniones en función de qué carrera, cómo estructurar el proyecto y después ya no, en la segunda parte no seguí participando, fue solamente al principio, hace muchos años (Julia Denazis, actual directora de la Escuela Secundaria Técnica de la Universidad Nacional de Avellaneda).

Otro de los referentes entrevistados también hace mención a FTUP�Z�EFOPNJOB�BM�QSPZFDUP�JOJDJBM�DPNP�i6OJWFSTJEBE�/BDJPOBM�EF�MBT�"SUFTw �SFGPS[BOEP�B�ÏTUB�DPNP�PSJHFO�IJTUØSJDP�EFM�QSP-yecto de la UNDAV:

Bueno, yo formé parte del Ejecutivo Municipal. Nosotros nos hici-mos cargo de la Municipalidad en 1991. Y prácticamente desde los comienzos de la gestión municipal, con Cacho Álvarez como intendente, se empezó a trabajar este tema de cómo se podía ha-cer para transformar en una universidad sobre todo a los institutos de cultura. La Municipalidad de Avellaneda tiene carreras terciarias sobre artes, algo que prácticamente es inédito en la provincia de Buenos Aires […] en principio se pensó en crear una Universidad Nacional de las Artes. Y así empezó, más o menos desde 1994 creo, que fue cuando arrancó el primer expediente y la ordenanza de propuesta de creación de la universidad. Este proyecto se si-HVJØ�MMFWBOEP�BEFMBOUF�DPO�CBTUBOUFT�EJmDVMUBEFT�QPSRVF�OP�IBCÓB�criterio a nivel nacional de [crear] nuevas universidades nacionales al principio (Oscar Fariña, actual director del Departamentos Trans-versal de Ciencias de la Salud).

Sin embargo, cuando en 1995 se sanciona la Ley 24521 de Educación Superior, se presenta un primer inconveniente para



MB�FKFDVDJØO�EF�BRVFM�QSPZFDUP��%JDIB�MFZ�JODMVZF�MB�mHVSB�EF�MPT�institutos universitarios:

La Educación Superior está constituida por instituciones de edu-cación superior no universitaria, sean de formación docente, hu-manística, social, técnico-profesional o artística, y por institucio-nes de educación universitaria, que comprende universidades e institutos universitarios.1

&T�QBSUJDVMBSNFOUF�TJHOJmDBUJWP�FM�UFTUJNPOJP�EF�8BMUFS�3PNFSP �para comprender el recorrido de la creación:

Los proyectos que proponían una universidad en Avellaneda fueron varios. Algunos tuvieron estado parlamentario, pero no avanzaban. Y es que en el mundillo de la educación superior, o de la política, de lo que fuere, decían que las características de varios de esos proyectos hacían presumir una intención de que TF�USBOTmSJFSBO�TJO�DPTUP�UPEPT�MPT�JOTUJUVUPT��<y>�&T�QPS�FTP�RVF�en octubre de 2006 se hace un replanteo general de la propues-ta, puesto que aquella idea inicial se había tornado claramen-te inviable. Esto es: pensar la universidad en otros términos. Se hizo un estudio muy interesante, de la demanda y la oferta de la educación superior en la región del consorcio de municipios del Conurbano Sur, que habíamos propiciado, desde la Secretaría de 1MBOJmDBDJØO�B�NJ�DBSHP�Z� MB�EF�PUSP�NVOJDJQJP�EFM�TVS��&TF�FT�el proyecto que entregamos al senador Pampuro [la documenta-ción obra en el Anexo: Proyecto de Creación de la Universidad Nacional de Avellaneda, 2007] junto con un trabajo muy serio que lo sustentaba estratégicamente. Confío en no olvidar a ninguno de quienes trabajamos en este proyecto, es importante nom-brarlos: Lic. Gabriela Dorrego, Mg. Analía Araujo, Dra. Patricia Domench, Lic. Liliana Elsegood, Dra. Mercedes Di Virgilio, Ing.

1 Ley de Educación Superior Nº 24.521, Artículo 5.



Jorge Calzoni, quien aquí habla, y el licenciado Jorge González, de la Universidad de Río Cuarto. Se trata de un trabajo interesan-tísimo. Allí es posible apreciar la demanda vacante, la propuesta, las necesidades. En ese momento hablábamos de tres ejes: el ambiental, el cultural y el deportivo. No hablábamos de la pro-ducción y el trabajo todavía. Y acá ya aparece el compromiso del Municipio de aportar una sede. Todas estas cosas acompañaron el proyecto de ley. Esto en el Senado tuvo un rápido tratamiento, pero en la Cámara de Diputados estuvo un rato largo. Ahora, lo interesante fue que después se pudo integrar a un conjunto de iniciativas que incluía a otras universidades nacionales que ha-brían de crearse. […] Si volvemos un poco para atrás, en nuestra HFTUJØO�NVOJDJQBM� FO� MB�4FDSFUBSÓB�EF�1MBOJmDBDJØO�&TUSBUÏHJDB �se generó el Plan Avellaneda 2020 que nos permitió trabajar va-rias áreas. Entre ellas los nuevos sistemas de información para el trabajo municipal; una de desarrollo local; otra de desarrollo urbano territorial; y otra de gestión asociada con la comunidad y los municipios vecinos. […] Lo que veo interesante remarcar es MP�TJHOJmDBUJWP�RVF�FT�WFS�VOB�DPTB�RVF�MB�QFOTBTUF �MB�TP×BTUF �MB�USBCBKBTUF �TF�UF�DBZØ�WBSJBT�WFDFT�Zy�mOBMNFOUF�TF�DPODSFUB��[…] Y ahora, acá estamos. Veo a la Universidad creciendo, y se-guirá creciendo en los próximos años, mejorando. Y después la otra cosa que veo es que es imprescindible no dejar de trabajar FO�MB�SFUFODJØO�8BMUFS�3PNFSP �BDUVBM�EJSFDUPS�EFM�%FQBSUBNFOUP�de Producción y Trabajo de la UNDAV).

Una de las diferencias clave que marca la Ley 24521 de Edu-cación Superior entre universidades e institutos universitarios es que estos últimos son aquellos que se remiten a la formación de profesionales en una disciplina única.2 De este modo, el proyec-to inicial de creación de una Universidad en Avellaneda (UNA) OP�TF�DPSSFTQPOEÓB�MFHBMNFOUF�DPO�MB�mHVSB�EF�VOB�VOJWFSTJEBE�

2 Ley 24521 de Educación Superior, Artículo 27.



nacional, limitándose a un instituto universitario. Por este motivo EFCJØ�QFOTBSTF�FO�NPEJmDBS�BRVFM�QSPZFDUP�JOJDJBM��&M�QSPZFDUP�de la UNA queda en estado latente hasta 2003. En palabras de Hugo Caruso, consejero superior de la Universidad, en repre-sentación del Consejo Social, a quien entrevistamos:

¿Cómo nació este día de la Universidad? Como nacen las ideas. Cuando llegué a Avellaneda en 1992, vi que era importante todo lo RVF�IBCÓB�BIÓ �RVF�TF�QPEÓB�QSPGFTJPOBMJ[BS�NVDIP��.F�SFmFSP�B�MPT�institutos de arte, los jardines de infantes, todas esas cosas que te-nía el municipio, y todo el tema educativo. Primero en la Subsecre-taría, que después se convirtió en Secretaría de Cultura, Educación y Medios de Comunicación Social, y después más adelante, fue Cultura, Educación y Promoción de las Artes. Promovimos perma-nentemente el arte. Es decir, la acción en Cultura y Educación, y la promoción, relacionada con todos los individuos o instituciones colectivas que tenga la sociedad. Volviendo a la historia de la Uni-versidad, ya en 1994, hablé con el intendente de entonces, que era Baldomero Álvarez de Olivera y planteamos, cómo es posible que Avellaneda tenga todo un sistema con todos estos jardines de infantes, que es el más grande de la provincia, con todas las escuelas de apoyo primario, con los centros de formación profesio-nal, con todos los cursos de desarrollo y todos los institutos de arte: de plástica, de teatro, de fotografía, de cine, más las escuelas, de circo, de magia y la Escuela de Danza que ya estaba, y no tenga una Universidad. Avellaneda tiene que tener una universidad, y tie-ne que tender a las Artes, justamente. Bueno, así nació esta idea. Entonces, primero se dicta una Ordenanza del Concejo Deliberante que aprueba la gestión para la creación de la Universidad Nacional de Avellaneda y empieza la ronda de gestiones en la Cámara de Diputados, en el Senado, con todos sus vaivenes. Cuando volvi-mos a la gestión municipal en 2003, se retoma esta idea, pero ya con otro criterio: una universidad vinculada con las Artes, el Medio Ambiente, el Trabajo y la Producción. Se elaboró un sólido proyec-to. Desde que Avellaneda nace, como Barracas al Sur, cómo se



va desarrollando el proceso de crecimiento, cómo se convierte en Avellaneda, las instituciones vinculadas al arte, a la industria, el trabajo, y la importancia que le da Avellaneda a la Educación, ¿no? Eso debe estar en los archivos de las Cámaras. Luego de muchas gestiones, le presentamos el proyecto al senador Pampuro, como VOP�EF�MPT�SFTQPOTBCMFT�EF�MB�$PNJTJØO�EF�&EVDBDJØO �Z�mOBMNFOUF�se concretó un valioso primer paso, que fue la aprobación en el Se-nado, con un solo voto en contra, y todo el resto a favor. Quedaba la Cámara de Diputados. Hubo toda una nueva ronda de reuniones, y se fueron conformando equipos de trabajo para perfeccionar la Universidad. Recuerdo, especialmente, una de las visitas de la pre-sidenta a Avellaneda, en el Teatro Roma, un lugar histórico testigo de tantas cosas que pasaron, se le dice a la presidenta acerca de la necesidad que había de crear la Universidad Nacional de "WFMMBOFEB �Z�FMMB�EJKP �i{RVÏ�GBMUB�QBSB�DPODSFUBSMP w��:�MF�EJKJNPT�iRVF�MP�BQSVFCF�MB�$ÈNBSB�EF�%JQVUBEPT �QPSRVF�FM�4FOBEP�ZB�MP�BQSPCØw��:� MB�QSFTJEFOUB�DVBOEP� UPNØ� MB�QBMBCSB�FO�BRVFM�FWFO-UP �EJKP�iTÏ�MB�OFDFTJEBE�RVF�UJFOF�"WFMMBOFEB�EF�DPOUBS�DPO�VOB�6OJWFSTJEBE��"WFMMBOFEB�WB�B�UFOFS�TV�VOJWFSTJEBEw��:�FO�MB�ÞMUJNB�sesión de la Cámara de Diputados de 2009 se sancionó la creación de la Universidad Nacional de Avellaneda. Luego de 15 años, se lograba concretar un largo anhelo. A partir de ahí vino el nombra-miento del rector Organizador, Ing. Jorge Calzoni, quien le dio un impulso extraordinario, se trabajó sobre lo que había que trabajar, la Universidad se echó a andar con ochocientos estudiantes y tiene hoy más de ocho mil; empezó con cinco carreras, y hoy ofrece más de veinte, con Observatorios importantes; es decir, tiene un sinfín de actividades y va a ser imparable, porque la educación es el progreso. ¿Qué hay atrás de Educación? No es solo un pibe, es un conjunto. El que se desarrolla, que va desde el jardín de infantes y que termina en la Universidad, pero el conjunto es el que se be-OFmDJB �MB�TPDJFEBE�FT�MB�RVF�TF�CFOFmDJB �QPS�MPT�GSVUPT�RVF�MF�EB�precisamente esta persona, es un profesional y lo puede trasladar a la sociedad donde vive. O sea, nosotros no vivimos solos acá, voy a poner un ejemplo más simple: si usted tiene una enfermedad, va al



médico, si el otro quiere jugar, va a un club, si el otro quiere estudiar va a una escuela, el otro quiere trabajar… puede haber un trabajo individual, puede ser un artesano, bárbaro, pero se lo tiene que vender a alguien. Entonces todos tenemos una relación con el otro. No podemos estar fuera de la condición social. Y bueno, la Univer-sidad trae justicia, porque va incluyendo cada vez a más gente. Y corona una historia riquísima de Avellaneda. Desde aquel primer Jardín de Infantes, que está en la Plaza Ugarte, en Ugarte y Piñeiro, y la primer experiencia con los centros educativos municipales que se crea en Avellaneda y es única. Se crea con el centro que está en Dock Sud, en el Barrio Sargento Ponce, que era un barrio que hizo el primer peronismo. Se hizo con la Universidad de Buenos Ai-res (1957-58). El primer Instituto de Arte para chicos, IMEPA es en Avellaneda. La primera orquesta de música es de Avellaneda, junto con la Sinfónica Nacional (1949). Y ahora es el Instituto de Música y la Orquesta Sinfónica de Avellaneda. El Teatro Experimental de Avellaneda (1948-49), hoy es el Instituto de Teatro de Avellaneda. Los primeros del Instituto de Folklore de la década del 50. En Ave-llaneda, el primer encuentro de Arte Plástico, surge de una Comi-sión de Bellas Artes que se forma en los años 43-44, para hacer un concurso, y después aparece el Instituto de Artes Plásticas. Fíjese el origen cómo va. Entonces, Jardín de Infantes, Escuela Primaria, Centros de Formación Profesional, Institutos de Arte, ¿cómo no iba a tener una universidad? Se merecía tener una universidad. Porque eso contribuye con la comunidad en la que uno vive. Yo soy un gra-nito de arena en todo esto. Después está un montón de gente que ayuda a generar todo esto, porque es una construcción colectiva, la vida es una construcción colectiva, porque cuando uno piensa, por lo menos la vida mía. Nosotros somos parte de una cultura de organización. Un tipo se casaba, le hacían la colecta, lo ayudaban, le hacíamos regalos y con eso empezaba… ¿y quién lo ayudaba? Los compañeros (Entrevista a Hugo Caruso, actual secretario de Cultura, Educación y Promoción de las Artes de la Municipalidad de Avellaneda).


De este modo, se constituye un quiebre en la primera etapa, que lo-calizamos cronológicamente en 2003, dando lugar a un segundo momento RVF� EFOPNJOBNPT� i&M� QSPZFDUP� EV-SBOUF� MPT� B×PT� ��w. En este nuevo momento, la historia de la UN-DAV se caracteriza por un cambio en las políticas del Estado a nivel nacio-OBM��"�QBSUJS�EF��BQBSFDF�MB�DPOm-guración de un Estado que habrá de caracterizarse por la reconstrucción de la legitimidad política nacional, de su capacidad productora como regu-lador y controlador de la economía, y por la reconstrucción de la ciudada-nía y de la soberanía nacional. Lenta-mente, el Estado argentino comienza a recuperar las funciones que había abandonado durante la reforma neo-liberal de la década de los años 90. Este cambio impacta directamente en la educación superior, siendo una de sus consecuencias la creación de nuevas universidades nacionales en el marco de un proyecto de país FTQFDJmDP��&TUB�OVFWB�QPMÓUJDB�B�OJWFM�nacional está registrada en la memo-ria y los relatos de los testigos partici-QBOUFT �DPNP�TF�SFnFKB�FO�FM�TJHVJFOUF�fragmento de una de las entrevistas:

Esto se revitalizó en 2003 […] el Go-bierno Nacional avaló la creación de las universidades del Conurbano, que

El camino

hacia la creación



realmente siempre fueron muy discutidas; es decir, los organis-mos nacionales empiezan ahora a reconocer a las universidades del Conurbano porque ven lo que es la Universidad de La Matan-za, lo que es la Universidad de Quilmes, la Universidad de Tres de Febrero, que han dado grandes respuestas. A ese nivel, ya cuando surgió ahora, digamos después de 2003, la discusión fue la Universidad Nacional de Avellaneda tiene que tener, no puede tener un tópico cultural, tiene que tener varios, que ahí fue donde se abrió todo lo que tenemos ahora, y que crecerá también ex-pandiéndose hacia mayores temas. Ahí es donde surgió el tema nuestro (Ricardo Serra, actual director del Departamento de Cien-cias Ambientales).

Uno de los desafíos que se plantean en el marco de esta nueva modalidad estatal, es la creación de un nuevo modelo de uni-versidad capaz de dar respuesta a los problemas cotidianos de la producción, la educación básica y media, la salud y la inclu-sión social. Es así que comienza a impulsarse la creación de nuevas Casas de Estudios, con características muy diferentes de las de la década de los años 90. De este modo, además de MBT�NPEJmDBDJPOFT�RVF�MB�-FZ��EF�&EVDBDJØO�4VQFSJPS�SF-clamaba al proyecto inicial, este cambio en el contexto político local y nacional comenzó a dar una nueva impronta al proyecto de creación de una universidad en Avellaneda. Dar respuesta a las demandas del contexto socio-productivo regional y formar QSPGFTJPOBMFT�DPO�VO�QFSmM�TPDJBM�TF�WVFMWFO�FMFNFOUPT�GVOEB-mentales a la hora de pensar un nuevo modelo de universidad de cara al siglo XXI. A través de las entrevistas realizadas podemos dar cuenta de DØNP�FTUF�GBDUPS�JOnVZØ�Z�QSPWPDØ�FM�SFQMBOUFP�EFM�QSPZFDUP�JOJ-cial. La demanda de los vecinos de Avellaneda, de que se ge-nerase una institución que diera respuestas a las necesidades de la población respetando la impronta histórica de la localidad, es un argumento muy frecuente en el grupo de personas que a partir de 2003 comienzan a adaptar el proyecto inicial:



Bueno yo […] estaba en la Municipalidad de Avellaneda dentro EF�MB�4FDSFUBSÓB�EF�1MBOJmDBDJØO�EF�MB�.VOJDJQBMJEBE��<y>�DVBO-do llegamos en 2003, 2004 a la Secretaría, que era nueva, se FNQF[Ø�B�USBCBKBS�FO�MB�QSPQVFTUB�EF�QFEJS�VO�mOBODJBNJFOUP�BM�Ministerio de Economía para hacer el Plan Estratégico de Avella-neda. Empezamos a tener reuniones con gente del Ministerio de Economía, a juntar el equipo que iba a trabajar en este proyecto, se sustanció el equipo y cuando se empezaron a tirar las prime-SBT� MÓOFBT� EF� FTB� JOWFTUJHBDJØO� RVF� TF� MMBNØ� i"WFMMBOFEB� ��1MBO� &TUSBUÏHJDPw� TBMJØ� FM� mOBODJBNJFOUP� QPS� MB� 6OJEBE� 5SFT� EF�Financiamiento del Ministerio de Economía con fondos del Banco Mundial y se contrató a los consultores; yo era contraparte de uno de los grupos (Liliana Elsegood, actual secretaria de Extensión Universitaria).

Esto constituye un segundo hito que da origen a una nueva eta-pa en la historia de la Universidad Nacional de Avellaneda, que se caracteriza por plasmar un cambio en el diseño del proyecto inicial que había sido gestado la década anterior:

Y bueno, este proyecto que al principio era fundamentalmente Universidad de las Artes luego se transformó en este de buscar los ejes de desarrollo de la ciudad, por eso la universidad tiene un eje muy importante sobre el tema artístico, un eje muy fuerte sobre el medio ambiente, un eje muy fuerte en la producción y un eje muy fuerte sobre el deporte (Oscar Fariña, actual director del Departamentos Transversal de Ciencias de la Salud).

%F�FTUF�NPEP �MB�QSJNFSB�NPEJmDBDJØO�BM�QSPZFDUP�JOJDJBM�DPOTJT-tió en agregar al eje de la cultura y el arte (eje inicial del proyecto de la UNA), los ejes medio ambiente y deporte (conformándose los tres ejes principales del proyecto inicial de la UNDAV):

Sí, al principio estaba como muy enfocada en todo el tema artístico. Porque se había pensado en armar la Universidad de las Artes.



&TF�GVF�FM�iQSJNFS�UÓUVMPw �EJHBNPT �RVF�ZP�FTDVDIÏ��2VF�UFOÓB�RVF�ver también con a quién le habían encargado el proyecto que era Hugo Caruso, responsable del Área de Cultura del Municipio. Y con la idea de reciclar o reformular todo lo que era la propuesta cultural con los institutos municipales de arte, con la escuela de arte, con una serie de instituciones artísticas de vieja data que traía el municipio. La idea era jerarquizarla, potenciarla y darle formato universitario. Eso era lo que no cerraba. Entonces eso se empieza a ampliar. Al proyecto se empieza a replantearlo y ampliarlo a otras disciplinas. Se incorpora el tema deportivo, a través de la tradición de Avellaneda, de los clubes de fútbol. Tenemos Racing, Indepen-diente, Arsenal, Dock Sud, más todos los clubes de barrio socia-les y deportivos. Y después la cuestión ambiental siempre fue una asignatura pendiente en Avellaneda, en cuanto a la problemática de la cuenca Matanza-Riachuelo, el problema del Riachuelo en sí mismo. Todo lo que es la convivencia entre éstas, en el tejido urba-no con las familias, entonces tenés curtiembres, imprentas, el polo petroquímico, es como que en Avellaneda siempre el tema ambien-tal fue un tema central. Parecía como muy interesante abordar esas problemáticas desde un proyecto de universidad. Tres temas muy cercanos, muy constitutivos de la identidad de Avellaneda (Gabrie-la Dorrego, directora del Departamento Transversal de Ciencias Sociales, al momento de la entrevista).

Por otra parte, con el objetivo de replantear el proyecto inicial y adaptarlo a las necesidades y demandas de la comunidad de Avellaneda, el equipo que estaba elaborando el proyecto a ser presentado nuevamente, realizó un estudio de la demanda educativa de la región. Fue así que se realizó un estudio a tra-vés de una encuesta a los jóvenes de entre 18 y 23 años de la zona, que posteriormente también se extendió a las escuelas secundarias locales:

Se tomaron las entrevistas a la salida de las escuelas sobre los in-tereses de los jóvenes de los últimos años del secundario, qué les



gustaría estudiar, y si hubiera una propuesta en las áreas de deporte, cultura y ambiente (como era el diseño original) si se engancharían o no, si les interesaría (Gabriela Dorrego, directora del Departamento Transversal de Ciencias Sociales, al momento de la entrevista).

Este cambio en el proyecto que dio origen a la UNDAV, es pro-EVDUP�EFM�USBCBKP�EF�VO�HSVQP�EF�QFSTPOBT�RVF�SF�QMBOJmDBSPO�la propuesta académica en función de la demanda local y el nuevo contexto nacional:

Conocí el proyecto de la UNDAV a través de Jorge Calzoni, con quien trabajábamos en algunos espacios en la Universidad Tec-nológica Nacional, siempre más que nada digamos… desde la intención de vincular la formación profesional con el aspecto so-cial, ¿no?, y la función social más que nada. Desarrollar una mirada tendiente a la función social que debían desempeñar, bueno en este caso ingenieros u otras personas que se acercaban a la UTN. Desde ahí generamos un espacio que se llama Foro Tecnológico de Pensamiento Crítico. Y empezamos un trabajo en ese sentido, en poder organizar, digamos, más que nada charlas, seminarios podríamos decir, en relación con distintas temáticas que estuvieran abiertas a los profesionales pero también abierta al público para poder ir discutiendo cuestiones vinculadas a la realidad argentina en distintos momentos históricos […] Entonces, en medio de todas esas situaciones, surge el proyecto de la Universidad Nacional de Avellaneda, cosa que festejamos desde el inicio ¿no? Porque, diga-mos, una universidad nueva, con posibilidades de ir incorporando las experiencias, las miradas, en relación con lo que es la necesi-dad de abrir espacios, con una mirada distinta de la de las univer-sidades tradicionales, que pudiera ser inclusiva, que tuviera una impronta nacional y popular (Diana Hamra, actual coordinadora del Trayecto Curricular Trabajo Social Comunitario).

Los tres ejes constitutivos de la UNDAV, a saber, la cultura, el deporte y el medio ambiente, se tradujeron en la estructura or-



ganizacional, dando lugar a los Departamentos de Cultura y Arte, Actividad Física y Deporte y Ciencias Ambientales. Posteriormente, se agregó al proyecto institucional en cons-trucción un Departamento de Producción y Trabajo, que en sus orígenes daba cuenta de la importancia de la temática del tra-bajo y el desarrollo industrial en Avellaneda. La Tecnicatura en %JTF×P�EF�.BSDBT�Z�&OWBTFT �GVF�FM�SFnFKP�RVF�TF�EJP�FO�FM�EJ-seño curricular de este eje. Dicha Tecnicatura se planteó como la posibilidad de ofrecer a la comunidad una carrera corta e innovadora enfocada directamente al sector productivo local y QSPWJODJBM �Z�DPO�NJSBT�GVUVSBT�BM�NFSDBEP�JOUFSOBDJPOBM��i"WF-llaneda es una ciudad netamente industrial, que tiene más de 4000 industrias. Es su eje, aporta al producto bruto industrial de MB�QSPWJODJB�EF�#VFOPT�"JSFTw�0TDBS�'BSJ×B �BDUVBM�EJSFDUPS�EFM�Departamento Transversal de Ciencias de la Salud).Otro agregado al proyecto fueron los Departamentos Transver-sales de Ciencias de la Salud y Ciencias Sociales, los cuales por poseer la facultad de la transversalidad fueron pensados como instancias articulatorias de la institución, de acuerdo con un modelo matricial de la estructura organizacional.La Licenciatura en Enfermería y la Tecnicatura y Licenciatura en Periodismo son los últimos agregados a nivel curricular que se hacen en el proyecto institucional de la UNDAV. La Licen-ciatura en Enfermería se agrega en la currícula de la Univer-sidad en respuesta a una tendencia en el sistema de salud a nivel nacional:

Yo te puedo hablar de lo que me compete a mí que es la carre-ra de Enfermería, esto es como un dato, pero hoy prácticamente todas las universidades nuevas —y las no nuevas— tienen una carrera de Enfermería lo cual implica una responsabilidad distinta que ha tomado el Estado en este tema. En la Argentina se nece-sitan 45 mil enfermeros y la Ley de Enfermería vigente hace unos años implica que el enfermero tiene que ser profesional, tiene que ser enfermero profesional terciario o universitario o licenciado y



el licenciado en la provincia de Buenos Aires forma parte de la carrera médico-hospitalaria, es decir que puede llegar a cualquier cargo dentro de la estructura de conducción hospitalaria […] este FT�VO�EÏmDJU�OP�TPMP�EF�MB�QSPWJODJB�EF�#VFOPT�"JSFT�TJOP�EFM�QBÓT�(Oscar Fariña, actual director del Departamento Transversal de Ciencias de la Salud).

Del mismo modo, la Licenciatura y Tecnicatura en Periodismo SFTQPOEFO�B�VO�EÏmDJU�B�OJWFM�OBDJPOBM �FO�FTUF�DBTP �B�MB�OFDF-TJEBE�EF�OVFWPT�DPNVOJDBEPSFT�GPSNBEPT�DPO�VO�QFSmM�JOOPWB-dor y una visión social, capaces de dar cuenta a través de sus relatos de las realidades locales. Como se manifestó con anterioridad, en nuestra periodización, FM�mOBM�EF�FTUF�NPNFOUP�IJTUØSJDP�MP�MPDBMJ[BNPT�FO�� DVBO-EP�VOB�WF[�mOBMJ[BEP�FM�USBCBKP�EF�MPT�FRVJQPT�FTQFDJBMJ[BEPT �es presentado en el Congreso de la Nación el Proyecto de crea-ción de lo que actualmente conocemos como Universidad Na-cional de Avellaneda (UNDAV).

Presentación del proyecto (2007)

El resultado del trabajo antes descripto es el Proyecto de Crea-ción de la UNDAV, presentado en 2007:

La decisión de la creación de la Universidad Nacional de Avella-neda por parte del Honorable Congreso de la Nación, cristalizada en la Ley 26543 de noviembre de 2009, se apoyó en la presenta-ción efectuada del Proyecto de Creación, en junio de 2007 (Frag-mento de la Presentación del Proyecto Institucional de la Universi-dad Nacional de Avellaneda, 10 de agosto de 2010).

El Proyecto, que fue presentado ante la Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Nación, constaba de cinco secciones: a) La demanda regional de educación superior universitaria en



la región sur del Conurbano Bonaerense; b) Los lineamientos de política universitaria y organización institucional; c) La Propuesta Académica; d) Infraestructura y Equipamiento; y e) Presupuesto.Durante el periodo de evaluación parlamentaria del proyecto, DPOUØ�DPO�FM�BQPZP�QBSB�TV� JNQVMTP�EF�FNJOFOUFT�mHVSBT�EFM�gobierno nacional y provincial, así como de las dos Cámaras del Congreso, tal lo recuerdan los entrevistados:

Hubo apoyo de autoridades políticas a nivel nacional; por ejem-plo, el senador Pampuro que fue quien lo presentó en el Senado; y reuniones con la directora General de Escuelas de la provincia de Buenos Aires que era en ese momento Adriana Puiggrós […] Pero fundamentalmente yo creo que se creó a través de la deci-sión de la presidenta, que decidió crear las universidades locales y descentralizar (Oscar Fariña, actual director del Departamentos Transversal de Ciencias de la Salud).

.JFOUSBT�UBOUP�FO�"WFMMBOFEB �TJ�CJFO�ZB�IBCÓB�mOBMJ[BEP�MB�FUB-pa de diagnóstico de la demanda y el proyecto institucional es-UBCB�mOBMJ[BEP �TF�DPOUJOVØ�DPO�FM�USBCBKP�EF�SFUSPBMJNFOUBDJØO�entre los equipos de profesionales y la comunidad:

Quedaba todo en manos de la Cámara, de los diputados y me acuerdo que abrimos una página web en la Municipalidad en la que promocionábamos con los vecinos y que nos preguntaban, porque los vecinos iban a la Municipalidad a preguntar qué pasa-ba con la universidad, entonces se abrió una, no un página web, un correo electrónico […] y bueno lo administramos en la Secreta-SÓB�EF�1MBOJmDBDJØO�Z�MFT�SFTQPOEÓBNPT�B�MPT�WFDJOPT�RVF�NBOEB-ban preguntas, les respondíamos que ahora estábamos esperan-do para que se transformara en ley, que los diputados la votaran (Liliana Elsegood, actual secretaria de Extensión Universitaria).

Esta etapa, que comienza en 2007, culmina con la sanción por parte del Honorable Congreso de la Nación, de la Ley 26543 en



OPWJFNCSF�EF�� NPNFOUP�FO�FM�DVBM�TF�DSFB�PmDJBMNFOUF�MB�Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV):

Fue el cierre esperado de un largo recorrido. De hecho partici-pamos de varias reuniones del Congreso de la Nación con la ex-pectativa de que considerara el Proyecto de Ley y lo sancionara. Y esas expectativas se vieron frustradas dos, tres veces. Nuestra preocupación crecía, porque podía perder estado parlamentario; eso ocurre cuando un proyecto no es sancionado en la Cámara durante el período que la ley ha reglamentado para ello; y eso era inminente para el caso del Proyecto de creación de la UNDAV. 1FSP�FO�BRVFMMB�TFTJØO�EF�OPWJFNCSF�EF�� MB�MFZ�mOBMNFOUF�TF�TBODJPOØ��:�TJHOJmDØ �DMBSP �VOB�JONFOTB�TBUJTGBDDJØO��1FOTÈOEPMP�desde hoy, con esta perspectiva que nos da el tiempo transcurri-do, volver a aquella jornada me hace pensar en otras que quizás he vivido con mayor intensidad aún. Recuerdo, por ejemplo, aquel domingo de febrero de 2011, justo antes del inicio del primer in-HSFTP � DVBOEP� MB�6OJWFSTJEBE� `QPS� mOþ� BCSJSÓB� TVT�QVFSUBT�B� MPT�estudiantes. Docentes, compañeros trabajadores, funcionarios, todos arremangados y barriendo, limpiando, acomodando, pre-parando todo… era una expresión clarísima de una construcción colectiva. Tengo el recuerdo de haber vivido allí una enorme emo-ción, más ligada a la concreción efectiva de ese sueño común. Creo que, en todo caso, era una alegría más plena, más llena de todo el esfuerzo, las ansiedades, de todo el recorrido realizado (Liliana Elsegood, actual secretaria de Extensión Universitaria).

Dicha ley estipula claramente dos pautas o condiciones funda-mentales para la creación de la que en adelante se llamaría la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV):

1) Que las carreras que constituyan su propuesta académica no se superpongan con las de otras Casas de Estudios instaladas en la región sur del Conurbano Bonaerense, adecuando los pro-HSBNBT�Z�MBT�DVSSÓDVMBT�EF�FTUVEJP�B�VO�QFSmM�FTQFDÓmDP�WJODVMBEP�



con las características socioeconómicas y culturales del distrito en particular y de la región en general; y 2) Las artes, el medio ambiente, el deporte, la producción y el trabajo serán lo sustan-tivo de las disciplinas en las que fundamentará su razón de ser (Fragmento de la Presentación del Proyecto Institucional de la Universidad Nacional de Avellaneda, 10 de agosto de 2010).

En palabras del rector de la Universidad:

El proyecto arranca en 1994. En ese momento se planteaba hacer una universidad de las artes, algo que fue rechazado. En 2006 se retoma la idea y se convoca a mucha gente, entre los que estaba yo, y allí se planteó que para hacer una universidad había que tener muchas disciplinas y tendría que tener los ejes troncales de la región y eso terminó en un proyecto que se aprobó en el Se-nado y es parte de un conjunto de nuevas universidades que se crean casi al mismo tiempo, entre las que están José C. Paz, del Oeste, Arturo Jauretche, Moreno, más la nuestra. Son las cinco del Conurbano que se aprueban simultáneamente. Los ejes de la nuestra tienen que ver con el territorio donde está ubicada: uno es el deporte (Avellaneda es muy fuerte en el deporte, de hecho hay tres equipos en la primera división del fútbol profesional y gran-des atletas a lo largo de la historia) y ninguna universidad pública trabajaba este tema, somos la primera en hacerlo. Otro eje es la cultura y el arte. Avellaneda tiene ocho institutos de arte y tenía-mos que lograr que no sea una competencia con las demás pro-puestas académicas de la región. El tercero es el medio ambiente (tenemos el Riachuelo pegado y el polo petroquímico genera una QSPCMFNÈUJDB�BNCJFOUBM�NVZ�GVFSUF�Z�mOBMNFOUF�MB�QSPEVDDJØO�Z�el trabajo (a lo largo de su historia Avellaneda se caracterizó por ser una ciudad industrial pionera). Con esas bases armamos el proyecto institucional de la Universidad (Jorge Calzoni, rector de la Universidad Nacional de Avellaneda).



El recorrido

La construcción del proyecto institucional que sería la base fun-damental sobre la que se crearía la UNDAV, fue jalonada por VOB�TFSJF�EF�FTGVFS[PT�DPOnVZFOUFT�El Proyecto de ley (S 719/07), en sus ocho artículos, reitera algunas precisiones ya conocidas y agrega otras, dada la in-minencia de apertura de la UNAV, como se la designaba a la universidad en aquella etapa. El artículo primero crea la Univer-TJEBE��FM�TFHVOEP�mKB�MB�OPSNBUJWB�QPS�MB�DVBM�TF�SFHJSÈ�iIBTUB�TV�EFmOJUJWB�OPSNBMJ[BDJØOw�BSUÓDVMPT��Z��EF�MB�MFZ��El artículo tercero deja en claro que las carreras que ofrezca iOP�TF�TVQFSQPOHBO�DPO�MBT�EF�PUSBT�$BTBT�EF�"MUPT�&TUVEJPT�JOTUBMBEBT�FO�MB�SFHJØO�TVS�EFM�$POVSCBOP�#POBFSFOTFw��{2VÏ�DBSSFSBT�QVFEFO�EJDUBSTF �"RVFMMBT�iWJODVMBEBT�B�MBT�DBSBD-terísticas socioeconómicas y culturales del distrito en particular y EF�MB�SFHJØO�FO�HFOFSBMw��&TUVEJPT�SFGFSJEPT�B�iMBT�BSUFT �FM�NFEJP�ambiente, el deporte, la producción y el trabajo serán lo sustantivo EF�MBT�EJTDJQMJOBT�RVF�GVOEBNFOUBSÈO�TV�SB[ØO�EF�TFSw��-PT�BSUÓDVMPT�DVBSUP�Z�RVJOUP�mKBO�ÈNCJUPT�QÞCMJDPT�Z�QSJWBEPT�facultados para intervenir en la celebración de convenios para transferencia de bienes, servicios y otras prestaciones para im-plementar la organización de la UNAV. El Poder Ejecutivo Na-DJPOBM�FTUÈ�GBDVMUBEP�iQBSB�HFTUJPOBS�Z�BDFQUBS�EFM�1PEFS�&KFDV-tivo de la provincia de Buenos Aires, del poder municipal y de instituciones tanto públicas como privadas la cesión de bienes NVFCMFT�F�JONVFCMFT�RVF�JOUFHSBSÈO�FM�QBUSJNPOJP�EF�MB�6/"7w�&M�BSUÓDVMP�TFYUP�TF�PDVQB�EF�MB�mHVSB�Z�GVODJPOFT�EF�VO�SFDUPS�Normalizador nombrado por cuatro años por el Poder Ejecutivo, iQBSB�QSPNPWFS�Z�DPOEVDJS�FM�QSPDFTP�EF�GPSNVMBDJØO�EFM�QSP-ZFDUP�JOTUJUVDJPOBM�Z�FM�&TUBUVUP�1SPWJTPSJPw��Los fondos presupuestarios para crear la UNAV provendrían de SFBTJHOBDJPOFT�EFM�1SFTVQVFTUP�RVF�mKF�FM�1PEFS�&KFDVUJWP�/B-DJPOBM�P�EF�iMBT�QBSUJEBT�RVF�TF�BTJHOFO�FO�FM�FKFSDJDJP�mTDBM�TJHVJFOUF�B�MB�TBODJØO�EF�MB�QSFTFOUF�MFZw�



El blog de la Municipalidad de Avellaneda informa el 18/11/09 que Avellaneda tendrá su propia Universidad Nacional. Se de-OPNJOBO� iNVZ� QBSUJDVMBSFTw� TVT� USFT� EFQBSUBNFOUPT�� $JFODJBT�Ambientales, Actividad Física y Deporte y Cultura y Artes. Puede observarse que ya no se mencionan más facultades sino depar-UBNFOUPT��&M�BWBODF�EFM�QSPZFDUP�WB�EFmOJFOEP�DBEB�WF[�NÈT�DMBSBNFOUF�FM�QFSmM�EF�MB�VOJWFSTJEBE �TV�FTUSVDUVSB�Z�PSHBOJ[B-ción. Al referirse a las disciplinas que en ella se dictarán, brinda algunas precisiones de interés. Las Ciencias Ambientales cons-UJUVJSÈO�iVO�FTQBDJP�BDBEÏNJDP �EF�GPSNBDJØO�Z�EF�JOWFTUJHBDJØO�TPCSF�FM�|OÞDMFP�EVSP}�EF�MB�QSPCMFNÈUJDB�BNCJFOUBMw��Se trata de un momento de gran expectativa frente a la inmi-nencia de la actividad en la universidad local. El avance del proyecto y su culminación exitosa es objeto de la nota de otro medio periodístico de la provincia que comenta al respecto que MBT�DBSSFSBT�Z�MPT�QSPHSBNBT�UFOESÈO�VO�QFSmM�WJODVMBEP�B�iMBT�características socio-económicas y culturales del distrito y de FTB�SFHJØO�EFM�DPOVSCBOP�TVSw��&M�#PMFUÓO�0mDJBM�QVCMJDB�MB�PmDJBMJ[BDJØO�EF�MB�6OJWFSTJEBE�/B-DJPOBM�EF�"WFMMBOFEB�iDSFBEB�QPS�-FZ�EFM�$POHSFTP�EF�MB�/B-DJØO�EFM��EF�OPWJFNCSF�QBTBEPw��"SHFOUJOB� UJFOF��VOJWFS-TJEBEFT�FTUBUBMFT � JODMVZFOEP� MB�6/"7��4FHÞO�EBUPT�PmDJBMFT �en el país hay 1.265.000 estudiantes en éstas y 255 mil, en las VOJWFSTJEBEFT�QSJWBEBTw��

Los equipos académicos que aportaron al proyecto

Un proyecto de creación universitaria requiere del concurso de muchas personas y voluntades para concretarse. Señalamos ya el esfuerzo de las autoridades municipales que desde fechas muy tempranas (que remontan a 1991), hicieron el pesado y DPOUJOVP�USBCBKP�EF� MMFWBS�BEFMBOUF�FM�QSPZFDUP��TJHOJmDØ�un momento de fuerte impulso para dar un paso decisivo en el compromiso de las autoridades del Honorable Concejo Delibe-



rante, que impulsaron la presentación ante las instancias na-cionales correspondientes. Pero también hubo colaboraciones, desde los primeros momentos, de académicos de distintas dis-DJQMJOBT�RVF�BQPSUBSPO�QBSB�MBT�QSFTFOUBDJPOFT�PmDJBMFT�DPSSFT-pondientes. Nos consta ese esfuerzo por haber participado en EJDIBT�SFVOJPOFT�Z�DPOGFDDJØO�EF�BOUFDFEFOUFT�QBSB�KVTUJmDBS�MB�necesidad de la universidad local. Esto ocurría por la convoca-toria regular que realizaba la Secretaría de Cultura, Educación y Promoción de las Artes durante esos largos años previos a la DPODSFDJØO��&SB�OFDFTBSJP�KVTUJmDBS�BEFDVBEB�Z�GVOEBEBNFOUF�el porqué del proyecto y en ese sentido concurrimos todos los convocados a colaborar con entusiasmo y dedicación. En el Proyecto de Creación de la Universidad Nacional de Ave-llaneda (2007), previo a la sanción de la ley de creación, par-ticipó un equipo que se constituyó ad-hoc, cuyos integrantes GVFSPO�NFODJPOBEPT�QPS�FM�-JD��8BMUFS��3PNFSP�FO�PUSP�QBTBKF�de este libro. Dicho proyecto luego fue base para el diseño del Proyecto Institucional Universitario

Y llegamos así a la creación de la Universidad Nacional de "WFMMBOFEB �FO�MB�QSPWJODJB�EF�#VFOPT�"JSFT �DPNP�mHVSB�FO�FM�#PMFUÓO�0mDJBM�EFM��1SFTFOUBDJØO�� KVMJP�EF��BOUF� MB�CONEAU y el Ministerio de Educación, de acuerdo con la ley 26543. A partir de aquí la UNDAV comienza su camino dentro de las Casas de Estudios de la República Argentina.


Esta es la tercera y última de las etapas que, en su conjunto, constitu-yen la cronología del surgimiento de la UNDAV. Con la aprobación de la Ley 26543 de Creación de la Universi-dad de Avellaneda en 2009, comien-[B�FM�USBCBKP�FTQFDÓmDP�Z�DPODSFUP�EF�PSHBOJ[BDJØO�EF� MB� OVFWB� Z� nBNBOUF�institución:

Aquí comienza el trabajo de la orga-nización en la Universidad, entonces ahí se hace una convocatoria de acto-res con otras características. Que tu-vieran que ver directamente o estuvie-ran vinculados con las disciplinas que iban a trabajarse en la Universidad. La idea fue convocar a todos aquellos que, por distintas razones, desde la Universidad, teníamos conocimiento que nos podían aportar al diseño de las carreras, convocar a personas, expertos, profesionales que tuvieran que ver con la cultura y el arte, con el deporte, con las tendencias ambien-tales y con la producción y el trabajo. A partir de ahí se armaron grupos de trabajo en las distintas temáticas y se empezaron a pensar carreras, tenien-do siempre como referencia este estu-dio de demanda que se había hecho en el proyecto inicial. De esa manera se fue trabajando en el diseño de las carreras (Patricia Domench, actual secretaria General).

Puesta en marcha de la

UniversidadNacional de Avellaneda



En este momento se convoca a actores vinculados con las distintas disciplinas que iban a trabajarse en la Universidad y se crean grupos de trabajo en las distintas temáticas teniendo como referencia el Proyecto Institucional Universitario (PIU):

Ahora, en este momento, el contacto vino pura y exclusivamente cuando aprobaron la ley de la Universidad. En enero, febrero de 2010 el Ing. Calzoni me llamó para que integre los grupos para el armado de Ciencias Ambientales (Ricardo Serra, actual director del Departamento de Ciencias Ambientales).

&TUBNPT�IBCMBOEP�EF�mOFT�EF�� RVF�TF�DPNJFO[B�B�QFOTBS�en el diseño de un curso de ingreso y bueno me puse a trabajar en eso, a buscar material, a pensar en un ingreso acorde a la imagen de Universidad que el Ing. Calzoni me había planteado (Laura Cativa, coordinadora del Programa de Ingreso).

&TUF� USBCBKP�EF�PSHBOJ[BDJØO� Z�QMBOJmDBDJØO�DPOUJOÞB�EVSBOUF�2010, cuando se realiza la selección del primer personal do-cente y las adaptaciones del lugar físico en el cual funcionaría la Universidad —el Mercado de Abasto de Avellaneda— que al ser trasladado es refuncionalizado por parte del gobierno local. &M�FEJmDJP�FT�SFTUBVSBEP��VOB�QBSUF�TF�EFTUJOB�BM�$FOUSP�$VMUVSBM�Hugo Caruso y otra se le concede a la Universidad.

Mientras se espera la aprobación del PIU por parte de la CO-NEAU y el Ministerio de Educación el equipo trabaja en la or-ganización del primer curso de nivelación que tendrían que realizar los aspirantes para lograr el ingreso y ser estudiantes de la UNDAV. A la vez, y cuando las autoridades tienen ya cono-cimiento de la aceptación del proyecto institucional por parte de los responsables nacionales, se realiza la actividad de difusión y puesta en conocimiento de la Universidad a la comunidad en general y, sobre todo, a los docentes y estudiantes de las es-cuelas medias de Avellaneda. Para ello se las visita y se entrega



NBUFSJBM�HSÈmDP �B�MB�WF[�RVF�TF�SFBMJ[BO�QSFTFOUBDJPOFT�BVEJP-visuales y explicativas de la propuesta educativa de la UNDAV y de sus características principales.

Rector Organizador

El martes 31 de agosto de 2010, la presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner, junto al intendente de "WFMMBOFEB �*OH��+PSHF�'FSSBSFTJ �FODBCF[BSPO�FM�BDUP�RVF�Pm-cializó el nombramiento del rector Organizador de la Universi-dad Nacional de Avellaneda (UNDAV), Ing. Jorge Calzoni. Ese acontecimiento clave ocurrió en el Teatro Roma de la ciudad de Avellaneda, y estuvieron también presentes el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, el director Ejecutivo de Anses, Diego Bossio, el ministro de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires, Baldomero Álvarez de Olivera y el subsecretario de Obras Públicas de la Nación, Abel Fatala. i&T�NVZ�JNQPSUBOUF�MPHSBS�MB�EFNPDSBUJ[BDJØO�FO�FM�BDDFTP�B�MB�FEVDBDJØO�VOJWFSTJUBSJBw �NBOJGFTUØ�FO�BRVFM�NPNFOUP�MB�QSF-sidenta, respaldando el proyecto de la Universidad que abriría sus puertas en 2011. La presidenta agregó:

El modelo iniciado en mayo de 2003 permitió ir derribando proli-jamente dogmas y falsas verdades sacralizadas que nos decían que los argentinos no podíamos ser felices. Decidimos empezar a cambiar una historia que estaba cristalizada, que nos decían que era imposible cambiar. Esta es la esencia del modelo: el va-lor agregado, el trabajo, las exportaciones, el mercado interno, la tecnología, la ciencia, la innovación, y el conocimiento. Tenemos que seguir adelante impulsándolo. Ese es el compromiso que les pido, no con una persona, un gobierno o un partido, sino con el modelo de país y de patria.



También el jefe comunal de Avellaneda, Ing. Jorge Ferraresi, se SFmSJØ�BM�IJTUØSJDP�BDPOUFDJNJFOUP��

Este había sido un sueño que se inició hace cerca de doce años, QBSB�UFOFS�VOB�VOJWFSTJEBE�RVF�OPT�JEFOUJmRVF�DPO�OVFTUSBT�DP-sas, con la cultura, la producción y el deporte, y que hoy se hace realidad. Es parte de una transformación que se viene realizando, porque en las escuelas, donde antes nuestros chicos iban a co-mer, ahora van a estudiar con netbooks. La Universidad Nacional de Avellaneda es un anhelo que hoy se hace realidad.

De este modo, llegamos a febrero de 2011, fecha en la cual se realiza el primer ingreso a la UNDAV y la institución comienza a funcionar. El periodo que se abre allí, con el inicio de la vida académica de la Universidad Nacional de Avellaneda, será NPUJWP�EF�OVFWBT�SFnFYJPOFT �RVF�QSPEVDJSÈO�OVFWPT�UFYUPT �todo ello destinado a dar testimonio de una gesta fundacional apasionante.

Decimos que somos las universidades del siglo XXI, lo que es estrictamente cierto, porque comenzamos a funcionar en 2010. Y en ese sentido somos pioneras, aunque con los resabios de la educación clásica, inevitablemente. Pero nos pensamos en un contexto histórico distinto: la inclusión es parte de nuestra géne-TJT �OBDJNPT�QBSB� JODMVJS �FO�FM�NBSDP�EF�VOB�NBTJmDBDJØO�EF� MB�educación. Tiene que ver también con la nueva Ley de Educación RVF�NPEJmDØ�FM�QBSBEJHNB�EF� MB�EÏDBEB�EF� MPT�B×PT��5JFOF�que ver con la educación media obligatoria que antes no existía, tiene que ver con la posibilidad del empleo (Jorge Calzoni, rector de la UNDAV).

La verdad es que mi elección de estar en este momento en la Uni-versidad de Avellaneda, es muy fuerte porque fue la de volver al ámbito académico, después de muchos años de haberme dedi-cado a la gestión cultural, al ámbito más de políticas culturales en



los distintos niveles. Me parecía que tenía que hacer en este mo-mento de mi vida personal este corrimiento, esta vuelta a lo aca-démico, y en ese sentido la verdad es que estoy muy satisfecho y creo que llena una expectativa que personalmente tengo. Desde el punto de vista institucional me parece que las expectativas de esta universidad son muy promisorias, muy buenas. Estoy abso-lutamente convencido de que la creación de todas las nuevas universidades en el Conurbano son fundamentales, son necesa-rias, y que solamente había algunas cuestiones de razón política, digamos, que hacía que el elefante sea la UBA y no aparecie-ran la universidades del Conurbano. En particular porque estas OVFWBT�VOJWFSTJEBEFT �TPO�QPSUBEPSBT�EF�QFSmMFT�NÈT�TPDJBMFT �de integración, en una línea política, incluso, con la que coincido plenamente, y que da lugar a que mucha gente que en otros mo-mentos no tenía posibilidad de ingresar a la universidad porque no había propuestas de este tipo, lo van a poder hacer, y creo que va seguir generando nuevas líneas de trabajo que la van a hacer crecer, y en unos años será una universidad importante del sur (Daniel Ríos, actual director del Departamento de Cultura y Arte).

Creo que lo que nos espera cotidianamente es mucho trabajo. Estas cosas que se discutieron en el primer momento fundacional de la universidad lo exigen, estas buenas intenciones que están plasmadas a través del Proyecto Universitario Institucional, que obviamente es un proyecto que ha de ir revisándose y replanteán-dose, pero que no tiene que perder lo que conversábamos al co-mienzo, esta mirada nodal de una universidad inclusiva, nacional, popular (Diana Hamra, actual titular del Ciclo de Complementa-ción Curricular de la Licenciatura en Historia).

Creo que hoy en el ámbito sanitario la universidad no tiene fronte-ras en cuanto a lo que puede desarrollar, sobre todo si hablamos de extensión universitaria, posgrado, investigación. Por ejemplo, nosotros trabajamos hoy en la provincia de Buenos Aires un tema nuevo que es neuro-desarrollo infantil, que es el desarrollo cog-



nitivo del niño en los primeros cinco años de vida. Es algo que se está iniciando, Avellaneda ya tiene un centro, el primer centro público en el desarrollo infantil de Argentina y es una nueva espe-cialidad que tiene que ver con esto, el desarrollo del chico en los primeros años, cuando adquiere habilidades que si no las adqui-rió ya después es muy difícil que lo haga. Esto tiene que ver con la igualdad de posibilidades y hoy la inclusión social está vinculada con el cuidado del cerebro del niño. Bueno, este es un campo donde también estamos preparando un posgrado junto con el Dr. Saforcada, profesor consulto en la Universidad de Buenos Aires que trabajaría con nosotros y todo un equipo. Por eso, no hay lí-mite para el desarrollo futuro de la universidad. Hay posibilidades espectaculares (Dr. Oscar Fariña, actual director del Departamen-to Transversal de Salud y Desarrollo Comunitario).

Mi gran expectativa es que podamos cumplir con ese objetivo de la inclusión con calidad, que no quede en el discurso, sino que realmente podamos sostenerlo, porque esto requiere mucho es-fuerzo intelectual y material y bueno mi gran preocupación es esa ¿no? Es un desafío de coherencia y trabajo (Laura Cativa, actual coordinadora del Programa de Ingreso).

Estoy segura que va a ser un proyecto exitoso y que va a sacar profesionales de calidad, no solo calidad disciplinar, sino calidad humana que va a respetar los derechos humanos, que va a brin-darle a su pueblo saberes para transformarlos para mejor (Liliana Elsegood, actual secretaria de Extensión de la Universidad).

Jalones de un recorrido vertiginoso

Todos y cada uno de los momentos que componen un recorrido fundacional tienen una importancia decisiva. Así, pretender ser exhaustivos llevaría a este trabajo a un callejón sin salida. Es inevitable, sin embargo, referir algunos momentos clave, que



contribuyeron a la consolidación institucional de la UNDAV tanto en el orden interno, como en su inscripción en el sistema univer-sitario argentino.

Consejo Interuniversitario Nacional (CIN)

La participación del rector, y de la vicerrectora, Mg. Nancy Ganz, del 25º aniversario del CIN (3/8/11), conviene ser des-tacada, en el marco de un activo protagonismo de la UNDAV en ese ámbito. Este acto se llevó a cabo en el Salón Mujeres Argentinas del Bicentenario de la Casa de Gobierno, y contó con la presencia de la presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner, junto a ministros, secretarios, intenden-UFT �EPDFOUFT�Z�FTUVEJBOUFT��/P�NFOPT�TJHOJmDBUJWB�GVF�MB�QBS-ticipación de la Universidad en el 67º Plenario de Rectores del CIN (3/9/2011), realizado en la Universidad Nacional del Litoral (UNL), puesto que fue el momento en que el Ing. Calzoni reci-bió la bienvenida como rector pleno, superado el proceso de normalización. Desde entonces, la UNDAV nunca dejó de ser protagonista destacada de la vida institucional de la universi-dad argentina. La designación del Ing. Calzoni como uno de los representantes del CIN en el Consejo de Universidades (órgano intersectorial presidido por el ministro de Cultura y Educación de la Nación encargado de coordinar el sistema universitario) y del Comité Ejecutivo del CIN, encabezando la Comisión de Extensión, son señales inequívocas de ese protagonismo.

Se integra el Consejo Social de la

Universidad Nacional de Avellaneda

De acuerdo con el Proyecto Institucional Universitario, la UN-DAV propició la creación de un Consejo Social, con el propósito de responder a la voluntad de estrechar y profundizar las re-



laciones con la comunidad. Constituido por representantes de distintas áreas de la comunidad de Avellaneda y su área de JOnVFODJB �MP�JOUFHSBO�DJODP�SFQSFTFOUBOUFT��EF�PSHBOJ[BDJPOFT�sindicales, del gobierno local y dos de organizaciones no gu-CFSOBNFOUBMFT��4PO�EFTJHOBEPT�QPS�FM�SFDUPS �iBE�SFGFSÏOEVNw�del Consejo Superior; duran dos años en sus funciones y su DBSHP�FT�iBE�IPOPSFNw��-BT�GVODJPOFT�EFM�$POTFKP�4PDJBM�TPO��i) Canalizar las demandas de la comunidad local; ii) Propiciar la generación de acuerdos de colaboración y/o articulación con organizaciones no gubernamentales y empresas de la comu-nidad, en áreas del conocimiento que se desarrollan en la uni-versidad; iii) Generar y evaluar proyectos de extensión universi-taria; iv) Promover, generar, evaluar y coordinar convenios con otras organizaciones de la comunidad; v) Monitorear y evaluar que las carreras existentes como así también las que se creen sirvan a las necesidades reales, técnicas, económicas, profe-sionales y académicas de la Región; vi) Promover convenios y acciones para que los alumnos de la Universidad participen en proyectos productivos; vii) Representar en el Consejo Superior a la comunidad local. Cumple un importante rol al interactuar con las diferentes instituciones de la comunidad y realizar su-gerencias acerca de políticas educativas relacionadas con la 6OJWFSTJEBE��4V�JOUFHSBDJØO�FT�SPUBUJWB �B�mO�EF�RVF�UPEB�MB�DP-munidad pueda sentirse representada.

Propuesta educativa de la UNDAV

El Ciclo Lectivo 2011, primero en la vida institucional de la UN-DAV, se abriría con la siguiente propuesta educativa: Licencia-tura en Ciencias Ambientales, Licenciatura en Actividad Física y Deporte, Licenciatura en Gestión Cultural, Tecnicatura en Di-seño de Marcas y Envases, Tecnicatura en Enfermería Universi-taria, Tecnicatura en Periodismo, y el Ciclo Complementario de la Licenciatura en Actividad Física y Deporte. A partir de 2012,



se agregarían: Licenciatura en Artes Audiovisuales, Ingeniería en Informática y Licenciatura en Periodismo. Además, para este periodo lectivo, y coordinada por su Vicerrectoría, se puso en marcha el área de Educación a Distancia, con las Tecnicaturas en Intervención Socio-Comunitaria; Gestión de Empresas Fúne-bres; y el Ciclo de Complementación Curricular en Museología y Repositorios Culturales y Naturales.

Asamblea Universitaria

Una marca distintiva de la Universidad ha sido la (auto) exi-gencia de desarrollar, junto con los primeros pasos, el proceso de normalización institucional. Aun cuando el tiempo asignado para ello era de cuatro (4) años, de acuerdo con las disposicio-nes vigentes en la materia, ya durante el primer periodo lectivo (2011) se activó el dispositivo que habría de ser coronado, por un lado, por las Elecciones de Claustros convocadas por la Re-solución Nº 403/11, del rector Organizador, y por el otro, con la Asamblea Universitaria.Las primeras se desarrollaron, con total normalidad, los días jueves 24 y viernes 25 de noviembre de 2011. El propósito era elegir los representantes de cada claustro para integrar los ór-ganos de gobierno y conformar la Asamblea Universitaria para nombrar a las autoridades de la Universidad. Ese proceso, que fue precedido por la realización de los concursos para profeso-res ordinarios y por todo el andamiaje que habría de ir consoli-dando la normalización institucional y académica de la Univer-sidad, preparaba el terreno para que la Universidad Nacional de Avellaneda fuese la primera de las nuevas universidades creadas desde el 2009 por el Gobierno Nacional en completar su proceso de normalización.Finalmente, la tarde del viernes 16 de diciembre de 2011, su máximo órgano de gobierno, la Asamblea Universitaria, eligió por unanimidad al Ing. Jorge Calzoni y a la Mg. Nancy Ganz



como rector y vicerrectora respectivamente. La Asamblea Universitaria contó con la participación de los representantes de los claustros docente, no docente y estudiantil y del Con-sejo Social, quienes debatieron sobre las tareas realizadas durante el proceso de organización de la UNDAV y los objeti-vos del gobierno normalizador. Aquella jornada contó con la presencia de la secretaria General, Mg. Patricia Domench; la subsecretaria de Gestión Académica, Mg. Julia M. Denazis; la secretaria de Extensión Universitaria, Lic. Liliana Elsegood; la secretaria de Investigación e Innovación Socio-productiva, Dra. María Mercedes Di Virgilio; el secretario Administrativo, Dr. Carlos Hermida; docentes, no docentes y estudiantes de la UNDAV. Pocos días después (19/12/11), en una ceremonia histórica, asumieron las autoridades electas, con la partici-pación del ministro de Educación de la Nación, Prof. Alberto Sileoni; el jefe Municipal, Ing. Jorge Ferraresi; y el secretario de Educación de la Nación, el Lic. Jaime Perczyk, entre otros destacados funcionarios. El jefe Municipal, primero en hacer uso de la palabra, manifestó sentirse orgulloso por la asunción de las autoridades y señaló que la UNDAV:

Ha sido una de las nueve universidades que se han inaugurado, con una característica que la distingue, ya que más del 83 por ciento de los estudiantes son primeros estudiantes universitarios de sus familias. Se trata de la inclusión y de igualdad de oportuni-dades (Ing. Jorge Ferraresi, intendente de Avellaneda).

Por su parte, el Prof. Sileoni, destacó el lugar preponderante que ocupa la educación dentro del proyecto de gobierno y las nuevas universidades creadas desde el 2009:

Formamos parte de un Gobierno que ha creado nueve nuevas universidades y hoy estamos celebrando estas decisiones. Tene-mos un proyecto político que desde el 2003 ha decidido poner a



la educación en el centro de los afanes políticos y esto también es lo que está presente hoy en esta Universidad. Estamos hacien-do la Universidad Nacional de Avellaneda para los nietos de los nietos de nuestros nietos. Construimos una Universidad para que la puedan ver generaciones que ni soñamos que las puedan ver (ministro de Educación de la Nación, Prof. Alberto Sileoni).

Finalmente, el Ing. Calzoni, en sus primeras palabras desde su puesta en funciones, agradeció a quienes trabajaron para que la UNDAV pudiera alcanzar su primera asamblea. Además, el rector hizo hincapié en el momento histórico que vive el país:

Hace un tiempo atrás la educación no era para todos porque no todos podían llegar. Tuvieron que pasar muchas cosas para que se cayeran esos paradigmas y para que a partir del 2003 la políti-DB�EFmOJFSB�RVÏ�JCB�B�IBDFS�MB�FDPOPNÓB�Z�FO�DPOTFDVFODJB�RVÏ�se iba a hacer respecto a lo social y a lo educativo. Trabajamos por un futuro mejor que tiene que ver con que nuestros estudian-tes no sean solo profesionales sino profesionales comprometidos con su pueblo, dispuestos a trabajar por más justicia, solidaridad y democracia. Ese es nuestro desafío y a eso nos compromete-mos (Ing. Jorge Calzoni, rector de la UNDAV).

Aquella jornada, además, tuvo como protagonistas a los titu-lares de las carreras que la Universidad dictaría en 2011 (Li-cenciatura en Ciencias Ambientales, Licenciatura en Actividad Física y Deporte, Licenciatura en Gestión Cultural, Tecnicatura en Diseño de Marcas y Envases, Tecnicatura en Enfermería Universitaria, Tecnicatura en Periodismo, y el Ciclo Comple-mentario de la Licenciatura en Actividad Física y Deporte), más las que pasarían a formar parte de la propuesta educativa a partir de 2012 (Licenciatura en Artes Audiovisuales, Ingeniería en Informática y Licenciatura en Periodismo). Durante la cere-monia de asunción el Lic. Daniel Escribano, en representación de la Asociación de Docentes de la Universidad, hizo entrega



de dos placas conmemorativas al rector y a la vicerrectora. Lo propio hizo el Prof. Hugo Caruso, secretario de Cultura, Edu-cación y Promoción de las Artes de Avellaneda, en represen-tación del Consejo Social de la UNDAV; Jorgelina Guesdon, en representación de los No Docentes; y Sabrina Molnar, en representación del Centro de Estudiantes de la UNDAV.


El desarrollo de este proyecto ins-titucional fue posible por el marco político existente desde 2003. Desde entonces se inició un cambio sustan-DJBM�FO�FM�QFSmM�EFM�&TUBEP�Z�TVT�QPMÓ-ticas, con mayor nivel de penetración en la sociedad y más inclusivas, con MB�mOBMJEBE�EF� MMFHBS�B� UPEPT� MPT�DJV-dadanos, y sobre todo a los más vul-nerables. Las políticas de educación superior se orientaron a facilitar el acceso de la población a los estudios universitarios, para lo cual el gobierno incrementó el presupuesto, creó nue-vas universidades, implementó pro-gramas de becas, entregó materiales e insumos. Es en este contexto que la idea fuerza de algunos actores de la comunidad de Avellaneda referida a impulsar el proyecto de creación de una nueva universidad en esta ciu-dad, encuentra espacio político y lo-gra hacerse realidad.Lo que se desprende del camino re-corrido en la constitución y puesta en marcha de esta institución es que TF�SFBMJ[Ø��iFOUSF�UPEPTw �FT�EFDJS �GVF�una construcción colectiva en la cual QBSUJDJQBSPO�EJGFSFOUFT�QFSmMFT�QSPGF-sionales que enriquecieron y aporta-ron sustantivamente al proyecto. Y ello sin dejar de tener en cuenta la historia de esta ciudad que permite lograr —como ya hemos dicho anteriormen-te— esa armoniosa conjunción de lo

Conclusiones

y perspectivas



acontecido con las necesidades del presente y el adecuado bosquejo de escenarios futuros.El proyecto desarrollado tuvo como fortalezas la libertad y las QPTJCJMJEBEFT� EF� DSFBUJWJEBE � RVF� QFSNJUFO� iIBDFSw� VOB� JOTUJ-tución nueva. Si bien la propuesta es realizar una universidad con inclusión, lo cual plantea un gran desafío, existen amplios márgenes de acción a desarrollar. Y tal vez cierta debilidad sea iIBDFS�DBNJOP�BM�BOEBSw �FT�EFDJS �OP�FYJTUFO�SFDFUBT��"VO�DVBO-do se puedan tomar referencias, esta nueva universidad tendrá que encontrar un camino propio. La impronta, se la otorgarán TVT� GVOEBEPSFT� Z� GVOEBEPSBT��&M� QFSmM � TVT�HSBEVBEPT�� 5BOUP�aquélla como éste se gestarán, a la vez, en estrecho vínculo con la comunidad y el territorio. Es importante insistir acá en el carácter plural y colectivo de esta construcción. En efecto, QBSUJDJQBSPO�EJGFSFOUFT�QFSmMFT�QSPGFTJPOBMFT�F�JEFPMØHJDPT�RVF�enriquecieron y aportaron sustantivamente al proyecto.Afrontar, por ejemplo, el desafío de pensar la inclusión en el contexto de la educación superior universitaria, en la serena convicción de que ese reto implica contribuir a sentar las bases de una transformación del sistema universitario, es un compro-NJTP�EF�FOPSNF�TJHOJmDBDJØO��3FQSFTFOUB �FOUSF�PUSBT�NVDIBT�cosas, el esfuerzo de actores diversos, armar equipo para un objetivo común y contar con políticas públicas nacionales que lo hagan posible. La creación de nuevas universidades con un QFSmM�BEFDVBEP�B�MBT�OFDFTJEBEFT�TPDJBMFT�EF�FTUPT�UJFNQPT��la libertad, la creatividad, la responsabilidad individual, la to-MFSBODJB�Z�MB�QBSUJDJQBDJØO �DPO�FM�mSNF�QSPQØTJUP�EF�iTFS�DBEB�WF[�NÈT�DJFOUÓmDB�Z�B�MB�WF[�NÈT�DPNQSPNFUJEB�TPDJBMNFOUFw �estar más relacionada internacionalmente y más involucrada lo-calmente, es una expresión acabada de la existencia de tales políticas, y una marca profunda de este tiempo cultural. La otra, que nos corresponde realizar, es forjar los más altos estándares de calidad y de excelencia. Nuestro modelo es el de una univer-sidad abierta a todas las ideas y a todas las discusiones, cuyo cometido esencial sea la enseñanza, validada por la investiga-



ción y la extensión y al servicio de una mejor calidad de vida para toda la sociedad.La universidad que promovemos, en consecuencia, es una es-trechamente vinculada con las circunstancias locales, y plena-mente comprometida con la búsqueda universal de la verdad y el avance del conocimiento. Un ámbito para pensar, tener ideas Z�EJTDVUJSMBT �Z�VO�FTQBDJP�iEF�JORVJFUVEFT �SFDIB[PT �BVEBDJBT �FTDSÞQVMPT�Z�FTQFSBO[BT w�RVF�FT�OFDFTBSJP�DPNQSFOEFS�FO�TV�verdadera dimensión y reconocer por estas condiciones, como un factor determinante para el progreso común.Nuestra Universidad no sólo debe desarrollar un proyecto aca-démico, debe fortalecerse como un proyecto socio-político que se caracterice por tener capacidad de impulsar el cambio; por asumir una actitud de liderazgo en ese cambio y por lograr con-TPMJEBSTF�DPNP�VO�GBDUPS�TPDJBM �EFTEF�MB�SFnFYJØO�Z�MB�DSÓUJDB �FM�aporte de ideas y de soluciones a los problemas que afrontan nuestra región, nuestro país y nuestro continente. Cedemos, aquí, a un ordenamiento esquemático, pero no por ello NFOPT�EFTBmBOUF �EF� MPT�QSPQØTJUPT�RVF�DPOTJEFSBNPT� GVOEB-mentales respecto de los presupuestos con que se ha afrontado la fase fundacional de la Universidad Nacional de Avellaneda:

1. Que la educación sea un bien social y no un bien de mercado.2. Que el Estado garantice la inversión necesaria para una educación superior e investigación acordes con las demandas del desarrollo nacional y social.3. Sostener la autonomía y autarquía universitarias avan-zando hacia mayores niveles de responsabilidad social. 4. Que el sistema de educación superior se articule ac-UJWBNFOUF�DPO�MB�JOWFTUJHBDJØO�DJFOUÓmDP�UFDOPMØHJDB�Z�MB�innovación productiva. 5. Constituir un sistema de educación superior que ar-ticule a los institutos de educación superior y a las uni-versidades.



6. Profundizar la articulación entre el nivel secundario y el de educación superior para mejorar el cursado de los estudios universitarios.7. Que se establezca un sistema de créditos académicos que reconozca las sucesivas etapas de las carreras cursa-das, posibilitando a los estudiantes concluir los estudios.8. Aumentar la ayuda en becas destinadas a los estudiantes. 9. Mejorar las condiciones de acceso a los concursos do-centes, fomentando la capacitación en la docencia uni-versitaria y superior.

Estos aspectos, que recogen un conjunto de tareas y respon-TBCJMJEBEFT�OP�DPOUJOHFOUFT �EFWJFOFO�DMBWFT�NBHOÓmDBT�QBSB�MB� GPSKBEVSB�EF� MB� USBNB� JOTUJUVDJPOBM �Z�QBSB�QFSmMBS�FM� UJQP�EF�universidad que tenemos el propósito de contribuir a fundar.

No se puede proponer vivir juntos cuando el 20 por ciento más rico de la población se está apropiando del 50 o 60 por ciento de la riqueza, y otro 20 por ciento está en situación de indigencia, lo que indica un muy bajo nivel de solidaridad social. Aprender a vi-vir juntos es el aspecto educativo de un proyecto social que tiene que ver fundamentalmente con la equidad y con la distribución del ingreso (Tedesco, 2001: 114-115).

Y, tal como señalaran Gvirtz y Camou (2009: 305):

La universidad puede y debe ayudar a construir caminos, a en-frentar los problemas de alimentación y salud, a comprometer-TF �FO�mO �DPO�MBT�NÈT�EJWFSTBT�UBSFBT��1FSP�MB�GVODJØO�QSJODJQBM�de la educación sigue siendo la de formar actores capacitados y comprometidos con este cambio, es decir, provistos a la vez de competencia humana y técnica.

3FmSJÏOEPTF�B� MPT�DPOEJDJPOBOUFT�Z�B� MBT�DBSBDUFSÓTUJDBT�DPO-UFNQPSÈOFBT�EF�MB�FEVDBDJØO�TVQFSJPS �5BVCFS�BmSNB�



El desarrollo de las Universidades y el fortalecimiento de la edu-cación superior, constituyen un elemento insustituible para el avance social, donde la dinámica del conocimiento obliga a las sociedades a poseer la inteligencia colectiva que les permita apropiárselo, utilizarlo y extenderlo, dentro de los márgenes de incertidumbre, riesgo, inestabilidad y cambio que caracterizan los emergentes del presente. En este sentido, la ciencia y la tecnolo-gía juegan un papel de primer orden en cuanto a la exploración, interpretación y aplicación del conocimiento disponible en los nuevos frentes.

La Universidad Nacional de Avellaneda, surgida en la estela de este tiempo profundamente transformador de la realidad social, económica, política y cultural de nuestro país, y en extraordi-naria sintonía con un puñado fundamental de países hermanos de la Patria Grande, no renuncia a la estatura de la oportunidad IJTUØSJDB�RVF�UJFOF�BOUF�TÓ��&OUSF�TVT�QFSTQFDUJWBT�NÈT�EFTBmBO-UFT �TJO�EVEB �FTUÈ�MB�EF�DPOmSNBS �BmBO[ÈOEPMPT �MPT�QBTPT�ZB�dados en pos de contribuir a garantizar un derecho ciudadano universal: el ejercicio pleno de la educación universitaria a los jóvenes argentinos. Esta década tan rica en tantos aspectos, lo ha sido especialmente en una extraordinaria expansión y uni-versalización de derechos como signos inequívocos de demo-cratización de la vida social. Las implicancias de esta transfor-mación son tan profundas que están fundando una nueva forma de representarnos la idea misma de democracia. Y he aquí una gran esperanza: que los avances se arraiguen tan profunda y tan sólidamente en la sociedad, que ya no haya marcha atrás. Es nuestra manera de entender el compromiso de este momen-to histórico. En palabras del señor rector de la Universidad:

Vivimos un tiempo en el que, desde algunos sectores, se habla de relato con desdén. Curiosa paradoja: desde las usinas del desáni-NP�TF�FSJHFO�MBT�USJCVOBT�EF�EPDUSJOB�Z�TF�MBO[B�FM�EBSEP�iBDVTB-EPSw� EFM� SFMBUP� QBSB�EFTBDSFEJUBS� B� RVJFOFT�HFTUJPOBO� MP� QÞCMJDP�



(sobre todo desde la última y más cruel dictadura cívico-militar que padeció nuestro país). Porque, no nos confundamos. No hablan de un gobierno, sino de los políticos y de la política, pues pretenden gerentes que administren la economía librando al mercado el poder de decisión. En todo caso, que en manos de los gerentes quede la contención de los planes sociales y la política represiva, para FWJUBS�EFTCPSEFT�Z�HBSBOUJ[BS�MB�TFHVSJEBE�Z�MB�iDPOmBO[Bw�EF�MPT�inversores. En ese marco la educación no es un derecho, sino un bien transable y elitista.Cada programa de ajuste que sufrimos los argentinos se inició con devaluación (para acomodar los precios relativos), congelamiento de salarios (para ser más competitivos), transferencia de servicios QÞCMJDPT�B�MPT�QSJWBEPT�QBSB�HFOFSBS�DPOmBO[B�FO�MPT�NFSDBEPT�Z�eliminación de subsidios. Así, lo primero en afectarse es la educa-ción y, en particular, la educación superior: basta recordar el último intento de la Alianza que gobernaba al país hacia 2001.Frustrados ex funcionarios devenidos académicos plantean el malgasto en universidades haciendo cuentas de tasas de ingre-so-egreso de estudiantes, con un análisis que cuenta mal los datos y los compara aún peor. En el fondo son lobbistas de los intereses RVF�QSFGFSJSÓBO�VOB�iNFKPSw�VUJMJ[BDJØO�EF�FTPT�SFDVSTPT��QPS�FKFN-plo girarlos al exterior, como hicieron sistemáticamente con el dine-ro generado con el esfuerzo de los trabajadores argentinos.Vivimos un tiempo en el que se han conquistado nuevos derechos: así es posible visualizar hoy a la educación superior. Es en este tiempo que nace la Universidad Nacional de Avellaneda. Por ello sentimos la responsabilidad de formar a los profesionales del Siglo XXI comprometidos con la defensa y profundización de los dere-chos conquistados. De ese modo, cuando se hable de relato que sea de aquel que sintetice nuestra historia, los valores y el espíritu de querer ser mejores, en las antípodas de quienes pretenden ha-cernos creer que no podemos, que somos los peores, que solo nos queda la tristeza. Aprendimos, con Jauretche, que un pueblo triste no se atreve a las transformaciones: nada es casual.El surgimiento de nuestra Universidad es indisociable de este tiem-



QP�QPMÓUJDP �TPDJBM �FDPOØNJDP �DJFOUÓmDP �UFDOPMØHJDP�Z�DVMUVSBM�RVF�nuestro país viene transitando en los últimos diez años. Ello impli-ca asumir la responsabilidad y los desafíos que de ello se deri-van, puesto que las universidades no pueden estar ausentes en MB�EFmOJDJØO�Z�DPOTUSVDDJØO�EF�NPEFMPT�EF�TPDJFEBE�JOUFHSBEPT�Z�productivos, con el eje puesto en la ampliación de derechos y la inclusión social.Este libro ha intentado relatar los primeros pasos, sueños y realida-des de un nuevo tiempo, de una nueva Universidad. No es el sue-ño de una persona sino el de los miles de pibes que pueblan sus aulas. A ellos va dirigido todo nuestro esfuerzo y dedicación (Ing. Jorge Calzoni, rector de la Universidad Nacional de Avellaneda).


El camino recorrido para la realización de estos apuntes fundacionales estuvo, desde el comienzo mismo, poblado de imágenes. De MPT�EJTUJOUPT�NPNFOUPT�RVF�FTUF�MJCSP�SFmFSF �Z�de la herencia cultural, social, política y econó-mica de la ciudad de Avellaneda. Unas veces llegaban con la exigencia del orden cronológi-co; otras por esa selección que suele hacer la memoria, que a veces traiciona. Siempre como relámpagos de una emoción inocultable. Por eso hemos escogido esta serie de fotogra-fías que queremos ofrecer a modo de epílogo, contrariando un poco su sentido: no hay aquí pretensión de clausura ninguna. Sí acaso ofre-cer, por un lado, una serie histórica del empuje que dieron a la Universidad Nacional de Ave-llaneda su historia de trabajo, de producción, de deporte, de salud, de arte y de cultura. Por el otro, momentos relevantes de los intensos años de la fundación. Como suele ocurrir en estos casos, hay momentos y protagonistas que no están, porque la cámara estuvo lejos en esos que, de todas maneras, atesoramos y valoramos como instantes y personas fun-damentales. En otros, en cambio, nos recono-cemos y reconocemos a mujeres y hombres que, con su aporte invalorable, contribuyeron —y continúan haciéndolo— a la construcción de esta Casa. Como todo testimonio es incom-pleto y, sin embargo, lo valoramos en toda su TJHOJmDBDJØO��$POmBNPT�FO�RVF�MB�IJTUPSJB�SF-coja este legado para completarlo, cuando la perspectiva del tiempo lo permita.

Los autores

Imágenesfundacionales



Mercado Central de Frutos1956



Plaza Alsina - Fiestas patronalesAgosto de 1936



MunicipalidadJunio de 1912



Trabajadora de cristaleríaDiciembre de 1933



Policlínico Presidente PerónSarandí



Enfermeras Policlínico



Dock Sud1937



Regatas1930



Sección cerilleríaCompañía General de Fósforos Sudamericana



Sección estampilleroCompañía General de Fósforos Sudamericana



Escuela Normal MixtaSeptiembre de 1947



Dock Sud



Bailes populares - Fiestas patronalesSan Martín y Alsina



Agencia StudebakerSeptiembre de 1927



Centro Mayor de Higiene Materno InfantilNoviembre de 1950



Acto de la CGT Junio de 1951



Catedral, Plaza Alsina



Talleres de mecánicaCompañía General de Fósforos Sudamericana



El viejo Mercadoaños 1930 y 2000



Hoy la UNDAV



La UNDAV abre sus puertas Feb/2011



Rector de la UNDAV, Ing. Jorge Calzoni



Dr. Alberto Dibbern, ex secretario de Políticas Universitarias, Ing. Jorge Calzoni, rector, Mg. Nancy Ganz, vicerrectora, Ing. Jorge Del Gener,

decano de la Facultad Regional Avellaneda UTN

7.- Cap.6.indd 110 29/01/15 10:22


Primeros estudiantes



Cristina Fernández de Kirchner inaugura el ciclo lectivo 2011Mar/2011



Ministro de Educación de la Nación, Prof. Alberto Sileoni. Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli. Presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner. Intendente de Avellaneda, Ing. Jorge Ferraresi. Rector de la UNDAV, Ing. Jorge Calzoni. Ex ministro de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires, Baldomero Álvarez de Olivera



1VI]O]ZIKQ~V�LMT�TI[�WÅKQVI[�LMT�:MK\WZILWSet/2011

Ing. Gustavo Agosti, Lic. Jaime Perczyk, Ing. Jorge Ferraresi, Ing. Jorge Calzoni



Lic. Jaime Perczyk, Ing. Jorge Calzoni, Lic. Daniel López, Mg. Nancy Ganz, Ing. Gustavo Agosti, Ing. Jorge Ferraresi,



Intendente de Avellaneda, Ing. Jorge Ferraresi. Rector de la UNDAV, Ing. Jorge Calzoni.



Elecciones de claustrosNov/2011



Primera Asamblea UniversitariaDic/2011



Vicerrectora de la UNDAV, Mg. Nancy Ganz. Rector de la UNDAV, Ing. Jorge Calzoni.

Secretario de Bienestar Estudiantil, Dr. Raúl Giandana.



Asunción de las autoridades ejecutivas de la UNDAVDic/2011

Mg. Nancy Ganz, Ing. Jorge Ferraresi, Prof. Alberto Sileoni,Ing. Jorge Calzoni, Lic. Jaime Perczyk



Rector de la UNDAV, Ing. Jorge Calzoni. Ministro de Educación de la Nación, Prof. Alberto Sileoni.

Secretario de Cultura, Educación y Promoción de las Artes, Hugo Caruso



Prof. Alberto Sileoni, Ing. Jorge Ferraresi, Ing. Jorge Calzoni



Integrantes de la Secretaría General (2011) con su titular, Dra. Patricia Domench, el rector, Ing. Jorge Calzoni y el Sr. intendente, Ing. Jorge Ferraresi



El rector y la vicerrectora con trabajadoras de la UNDAV



Primera reunión del Consejo SuperiorFeb/2012



Equipo de gestión

Dr. Carlos Hermida, Lic. Luis Fogliazza, Ing. Jorge Calzoni, Dra. Patricia Domench, Mg. Julia Denazis,

Dra. Mercedes Di Virgilio, Lic. Liliana Elsegood


Autoridades de Departamentos

Prof. Daniel Ríos, Ing. Gregorio Glas, Lic. Walter Romero, Lic. Daniel Escribano, Ing. Jorge Calzoni, Lic. Daniel Pallarola, Bioq. Ricardo Serra


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Anexo

Documentos

Ley Nacional 26543



Investigación

Reseña de un itinerario

6OJWFSTJEBE�F�*OTUJUVUPT�.VOJDJQBMFTUn tema a tener en cuenta por el Gobierno es el análisis de iSFDPOWFSTJØO�EF� MBT�DBSSFSBT�RVF�TF�EJDUBO�FO� MPT�PDIP� JOTUJ-tutos municipales de Enseñanza Artística del Distrito para que QVFEBO�QBTBS�B�MB�ØSCJUB�Z�FTUSVDUVSB�EF�MB�GVUVSB�VOJWFSTJEBEw��

6OJWFSTJEBE�MPDBM�Z�MBT�VOJWFSTJEBEFT�EFM�$POVSCBOP�4VS�&M�.VOJDJQJP�FYQMJDB�RVF�FM�QSPZFDUP�USBUBSÈ�EF�iOP�TVQFSQPOFS-TFw� DPO� FMMBT � iBEFDVBOEP� MPT� QSPHSBNBT� Z� MBT� DVSSÓDVMBT� EF�FTUVEJP�BM�QFSmM�EF�MB�SFHJØOw�

&M�mOBODJBNJFOUP�EF�MB�GVUVSB�6OJWFSTJEBE4F�DPOUFNQMBO�EPT�GVFOUFT�EF�mOBODJBNJFOUP��6OB�FT�iSFBTJH-naciones presupuestarias por parte del Ejecutivo dentro del 1SFTVQVFTUP�/BDJPOBM��w �NJFOUSBT�RVF�PUSB�QSPWFOESÈ�EF�iQBSUJEBT�RVF�TF�BTJHOFO�FO�FM�FKFSDJDJP�mTDBM�TJHVJFOUF�B�MB�TBO-DJØO�EF�MB�QSFTFOUF�MFZw�

6OJWFSTJEBEFT�ZB�FYJTUFOUFT�FO�"WFMMBOFEBEl diario La Nación, en su edición digital, al referirse al proyec-to de creación, destaca la presencia de las subsedes de las Universidades de Buenos Aires y de la Tecnológica Nacional dentro del territorio avellanedense, así como la cercanía de las Universidades de Quilmes, Lomas de Zamora y Lanús. El secre-tario de Políticas Universitarias, Alberto Dibbern, dijo que des-conocía la existencia del proyecto de creación de la UNA (sic):

.ÈT�BMMÈ�EFM�MVHBS�HFPHSÈmDP�EPOEF�TF�JOTUBMF�VOB�OVFWB�VOJWFS-sidad, en su creación, hay que ser cuidadoso de que se instale en una región que realmente demande la presencia de educación



superior, que se puedan garantizar recursos sin afectar los de otras universidades y que en el proyecto se incluyan garantías de DBMJEBE�BDBEÏNJDB�Z�QPMÓUJDBT�JOTUJUVDJPOBMFT�mSNFT�

Para el diario -B�/BDJØO se trata de triunfos políticos de legis-ladores y funcionarios que logren una universidad en su loca-lidad. Remarca el optimismo del intendente y sus funcionarios, que ya diseñaron facultades {en realidad se estableció el siste-NB�EF�EFQBSUBNFOUPT^ �Z�TF�EFmOJØ�FM�FEJmDJP�EPOEF�GVODJPOB-ría la universidad, cuando el Mercado de Abasto se mude a su OVFWP�MVHBS �MP�RVF�PDVSSJSÓB�QBSB�mO�EF�B×P��

%FUBMMFT�EF�JOUFSÏT&M�UFYUP�QFSJPEÓTUJDP�EFmOF�BM�QSPZFDUP�DPNP�iWFSTJØO�PQUJNJ[B-EBw �EF�VO�QSPZFDUP�BOUFSJPS �EF�TFUJFNCSF�� iRVF�ZB�FYJTUF�FO�FM�4FOBEPw�Z�GVFSB�QSFTFOUBEP�QPS� MB�TFOBEPSB� KVTUJDJBMJTUB�Mabel Müller. La nota aclara que

Ese proyecto, que está en la Comisión de Educación, tiene una disposición polémica: la UNA se constituiría sobre la infraestruc-tura, personal y presupuesto que las dependencias que la UBA y la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) tienen en ese Munici-pio. Esos artículos fueron eliminados del proyecto.

"TJNJTNP �TF�NFODJPOB�B�MB�GVUVSB�VOJWFSTJEBE�DPNP�iMB�6/"w�Z�TF�destaca que en caso de ser aprobada sería la número 39 del país. 1PS�PUSB�QBSUF �iOP�TF�DPOPDF�DPO�QSFDJTJØO�MB�PGFSUB�FTUVEJBOUJMw. En el devenir de la concreción de nuestra universidad, se producen, como vemos, idas y venidas, objeciones y optimismos, avances y retrocesos, recortes o cambios de denominaciones, todo enmar-cado en un dinámico y complejo proceso educativo en marcha.

-B�WP[�EF�MPT�GVODJPOBSJPT&M�TFDSFUBSJP�EF�1MBOJmDBDJØO �$BQBDJUBDJØO�Z�%FTBSSPMMP� MPDBM �



8BMUFS�3PNFSP �SFNBSDØ�MP�TJHVJFOUF��i2VFSFNPT�RVF�MB�VOJWFS-sidad no compita con otras propuestas educativas. Por eso va-NPT�B�QPOFS�FKF�FO�FM�BSUF�Z�MP�BNCJFOUBMw��:�BHSFHØ�i"RVÓ�UFOF-mos una larga tradición de escuelas de arte y queremos hacer OVFTUSP�BQPSUF�BM� UFNB�BNCJFOUBMw��5BNCJÏO�IBDF�SFGFSFODJB�B�los institutos municipales ya mencionados anteriormente. Aña-EF�BM�SFTQFDUP�RVF�i-B�JOUFODJØO�FT�RVF�MB�6/"�SFÞOB�UBNCJÏO�B�los ocho institutos municipales de cultura del municipio, de nivel terciario, que incluyen la conocida escuela de cine e institutos EF�UFBUSP �NÞTJDB �DFSÈNJDB�Z�GPUPHSBGÓB �FOUSF�PUSPTw�

%JmDVMUBEFT�QBSB�FM�QSPZFDUPEl diario La Nación explica pormenores para la aprobación de VOJWFSTJEBEFT��i4FHÞO�FTUBCMFDF�MB�-FZ�EF�&EVDBDJØO�4VQFSJPS �MB� DSFBDJØO� EF� VOB� VOJWFSTJEBE� FYJHF� VOB� MFZ� OBDJPOBM � iDPO�QSFWJTJØO� EFM� QSFTVQVFTUP� DPSSFTQPOEJFOUFw � Z� VO� FTUVEJP� EF�factibilidad del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), inte-HSBEP�QPS�UPEPT�MPT�SFDUPSFTw��5BNCJÏO�EJDF�RVF�i&O�VO�TJTUFNB�universitario que se caracteriza por haberse expandido sin con-trol, la creación de nuevas instituciones viene siendo rechazada desde el mundo universitario y desde el Ministerio de Educa-DJØO �OP�TJFNQSF�DPO�TVFSUFw�El secretario de Políticas Universitarias, Alberto Dibbern, expre-só que:

.ÈT�BMMÈ�EFM�MVHBS�HFPHSÈmDP�EPOEF�TF�JOTUBMF�VOB�OVFWB�VOJWFS-sidad, en su creación, hay que ser cuidadoso de que se instale en una región que realmente demande la presencia de educación superior, que se puedan garantizar recursos sin afectar los de otras universidades y que en el proyecto se incluyan garantías de DBMJEBE�BDBEÏNJDB�Z�QPMÓUJDBT�JOTUJUVDJPOBMFT�mSNFT�

&M�QSPZFDUP�EF�6OJWFSTJEBE�MPDBM�Z�PUSPT�QSPZFDUPTLa presentación del proyecto de creación de la Universidad de



Avellaneda se enmarca en una serie de proyectos correspon-dientes a distintos lugares del país:

Desde 2002, en el Congreso Nacional se presentaron proyectos para abrir universidades en San Ramón de la Nueva Orán, en Salta; en Pilar, en el norte del conurbano bonaerense; en José C. Paz; en San Vicente; en la zona del partido bonaerense de Merlo; en las islas Malvinas; en Tierra del Fuego, y en Villa Mercedes (San Luis).

A ellas se agregan las creadas en 2002: Chilecito, en La Rioja y la del Noroeste Bonaerense, en Junín. Otro medio de Avellaneda publicaba, el 30 de noviembre de 2007, noticias relacionadas con el proyecto de la universidad MPDBM��4F�USBUB�EF�VO�BWBODF�TJHOJmDBUJWP�QBSB�FM�BWBODF�EFM�QSP-yecto universitario. El senador Pampuro, quien había sido con-vocado por el intendente Municipal, presenta el proyecto ante FM�4FOBEP�/BDJPOBM�EPOEF�iSFDJCJØ�MB�BQSPCBDJØO�EF�TVT�QBSFT�EF�MB�$ÈNBSBw��&M�EÓB��EF�OPWJFNCSF�iMB�)POPSBCMF�$ÈNBSB�de Senadores de la Nación, aprobó el Proyecto de Ley para la $SFBDJØO�EF�MB�6OJWFSTJEBE�/BDJPOBM�EF�"WFMMBOFEB�6/"7w��

-PT�OPNCSFT�EF�MB�6OJWFSTJEBE�/BDJPOBM�EF�"WFMMBOFEBEl diario La Nación VUJMJ[B�MB�TJHMB�6/" �RVF�mHVSB�FO�MPT�QSJNF-ros tiempos del proyecto, mientras que el artículo del 30/11/07 de BWFMMBOFEBXFCTJUF�utiliza UNAV. Los fundamentos que utiliza Pampuro para interesar a los miem-bros del Senado Nacional apuntan a lo señalado anteriormente: iMB�JNQPSUBODJB�EF�BCSJS�VOB�OVFWB�VOJWFSTJEBE�QÞCMJDB�BCPDBEB�B�MBT�BSUFT �FM�EFQPSUF �Z�FM�NFEJP�BNCJFOUFw��&M�TFOBEPS�/BDJP-OBM �+PTÏ�1BNQVSP�EJKP��i1PS�TVFSUF�SFDJCJNPT�VOB�DPOTJEFSBCMF�BQSPCBDJØO�EF�UPEPT�MPT�CMPRVFT�EF�MB�$ÈNBSBw�øEl encargado de presentar el proyecto fue, precisamente, el se-nador Pampuro quien recibió la aprobación de sus pares de la Cámara. El jueves 28 de noviembre, la Honorable Cámara



de Senadores de la Nación aprobó el Proyecto de Ley para la Creación de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNAV).

"SHVNFOUPT�RVF�KVTUJmDBO�FM�QSPZFDUPEl Senado acompaña este proyecto, según explica Pampuro, porque estamos apostando muy fuerte a la educación pública. Sabemos que donde no hay una universidad pública aparece VOB�QSJWBEB �RVF�TJHOJmDBO�VO�DPTUP�FDPOØNJDP�RVF�OP�UPEPT�pueden afrontar, y mucho menos en el área artística, que es una de las disciplinas a las que se orientará la UNAV. Muchas personas se pierden la posibilidad de ser grandes creativos por no tener los recursos económicos. En esos casos el Estado les EFCF�EBS�MB�QPTJCJMJEBEw�Otros elementos de interés del proyecto universitario es que DVFOUB�DPO�iDVSSÓDVMBT�FTQFDÓmDBTw�EFOUSP�EF�iVOB�VOJWFSTJEBE�QÞCMJDBw��"EFNÈT�iBIPSB� MB� SFHJØO�WB�B� UFOFS�VO�OVFWP�DBOBM�para expresar sus vocaciones artísticas, deportivas y de medio ambiente, que son las tres grandes currículas que tendrá esta VOJWFSTJEBEw��:�BTFWFSB�FM�NJTNP�1BNQVSP�RVF�iTF�USBCBKØ�DVJ-EBEPTBNFOUF �Z�DPO�NVDIB�QSPMJKJEBEw�&M�FOUPODFT�JOUFOEFOUF�FYQSFTB�RVF�i)BZ�RVJFOFT�QVFEFO�EFDJS�que nos estamos adelantando, pero es tan grande la convicción que tenemos de que pronto vamos a concretar este sueño, que ZB�DPNFO[BNPT�B�EBS�MPT�QSJNFSPT�QBTPTw��&OGBUJ[Ø�RVF�MB�VOJ-WFSTJEBE�iFTUBSÈ�BCPDBEB�B�VOB�QSPQVFTUB�FEVDBUJWB�RVF�FO�MB�BDUVBMJEBE�TF�FODVFOUSB�BVTFOUF�FO�MB�SFHJØOw��

6O�FEJmDJP�QBSB�MB�6OJWFSTJEBE4F�CBSBKBSPO�WBSJPT�FEJmDJPT�DPNP�TFEF�VOJWFSTJUBSJB��&M�.FSDBEP�de Abasto era una, como ya vimos. Otro inmueble está ubicado en Paso de la Patria y Entre Ríos en la localidad de Piñeyro.

.ÈT�QSFDJTJPOFT�TPCSF�MB�QSPQVFTUB�FEVDBUJWBPara atender a la problemática ambiental habrá 35 ha dedica-



EBT�B� FTF� mO� FO� MB�EFTFNCPDBEVSB�EFM� BSSPZP�4BSBOEÓ� FO� FM�Río de la Plata. En lo deportivo, el contexto de la una ciudad con una suma de méritos deportivos posibilita la capacitación y formación de profesionales en el deporte. La tercera disciplina iTFSÈ�FM�FTQFDJP�RVF�BHMVUJOBSÈ�UPEB�MB�BDUJWJEBE�BSUÓTUJDBw�RVF�crecerá al nivel universitario.

&M�TJTUFNB�FEVDBUJWP�Z�DVMUVSBM�MPDBMAvellaneda es una ciudad con muchas fortalezas, ya que su .VOJDJQJP�iTF�DBSBDUFSJ[B�QPS�FM�TPTUFOJNJFOUP�EF�VO�HSBO�TJTUF-ma educativo y cultural, compuesto de 40 jardines municipales, cinco Centros Asistenciales, Educativos, Municipales (CAEM), PDIP�JOTUJUVUPT�DVMUVSBMFT �Z�VO�5FBUSP�.VOJDJQBM�EF�QSJNFS�OJWFMw�

$POWPDBUPSJB�B�MB�DPNVOJEBEEn la nota a la que venimos aludiendo, y dada su amplia difu-sión digital, se convoca a la comunidad para sus comentarios y opiniones en relación con el proyecto universitario, dentro de FTUPT�UÏSNJOPT��i5PEBT�MBT�QFSTPOBT�JOUFSFTBEBT�FO�SFDJCJS�JOGPS-mación del proyecto para la creación de la Universidad Nacio-nal de Avellaneda o sumar su adhesión, enviar un mail a univer-TJEBE!BWFMMBOFEB�CB�HPW�BSw��Otra publicación digital bajo el título 1PMÓUJDB�EFM�TVS, destaca las BDUJWJEBEFT�EFM�JOUFOEFOUF�RVJFO�FODBCF[B�MB�DPNJUJWB�PmDJBM�BS-gentina a Nueva York. La visita protocolar tiene como objetivo iIBMMBS�TPMVDJPOFT�B�MB�QSPCMFNÈUJDB�EF�MB�CBTVSB�FO�MB�SFHJØOw �FO�FTQFDJBM�QPS�FM�1SPZFDUP�EFOPNJOBEP�i1SPQVFTUB�EF�SFGVODJPOB-MJ[BDJØO�VSCBOB�FO�MB�SJCFSB�EF�"WFMMBOFEB�Z�2VJMNFTw��$PO�FTF�mO�Z�KVOUP�B�GVODJPOBSJPT�OBDJPOBMFT �QSPWJODJBMFT�Z�NVOJDJQBMFT �así como empresarios vinculados a estas temáticas, se visitaron tres rellenos sanitarios que cumplían los estándares ecológicos internacionales, y se conocieron maquinarias de última genera-ción. La alcaldesa dio detalles de recuperación de terrenos de un parque neoyorkino para disfrute de los ciudadanos.



Durante este encuentro se abordaron temáticas relacionadas con la actividad cultural, el proyecto de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNAV), y el plan de urbanizaciones en Avella-neda, entre otras. Toda esta actividad dentro de la importancia conferida a la problemática ambiental de Avellaneda y el rol de la futura universidad para contribuir a su mejoramiento. También se conversó sobre el plan de urbanizaciones en esa ciudad.



Los autores

Jorge Calzoni es rector de la Universidad Nacional de Avellane-da, Ingeniero en Construcciones e Ingeniero Civil egresado de la Universidad Tecnológica Nacional y NBHJTUFS en Gestión de la Educación Superior, ámbito en el que, además, se desempeñó como secretario Académico y de Extensión Universitaria. Docen-te en la Facultad Regional Avellaneda y en la Universidad Nacio-nal de Avellaneda, ha publicado numerosos artículos en libros y revistas especializadas, y disertado en ámbitos nacionales e internacionales.

Patricia Domench es secretaria General de la Universidad Na-cional de Avellaneda, Profesora Titular Ordinaria de Estado y Sociedad, investigadora, especialista en estudios institucionales y organizacionales y en políticas públicas, doctora en Ciencias Sociales, NBHJTUFS�4DJFOUJBSVN en Administración Pública, espe-DJBMJTUB�FO�(FTUJØO�Z�1MBOJmDBDJØO�EF�1PMÓUJDBT�4PDJBMFT��)B�QV-blicado numerosos artículos en libros y revistas especializadas.

Adriana María Presa es jefa de la División de Evaluación Institu-cional de la Universidad Nacional de Avellaneda, profesora Ad-junta de Estado y Sociedad, especialista en Docencia y Gestión de la Educación Superior, NBHJTUFS en Políticas y Administración de la Educación y doctoranda en Ciencias Políticas. Ha realizado numerosos trabajos acerca de la educación superior y ha partici-pado en la asesoría técnica de diferentes universidades públicas y privadas de la República Argentina.



Agradecimiento especial

Este libro tiene respecto de la contribución de Irene Mercedes Aguirre una deuda de gratitud que estas líneas no pueden sal-var. Las referencias históricas, el material de investigación y sus aportes de contenido dan solidez al trabajo colectivo, iluminando este encuentro de pasado y de presente cargado de futuro que converge en la Universidad Nacional de Avellaneda. A su apor-te profesional como investigadora docente con una destacada trayectoria, le ha añadido la pasión y el cariño por una Casa que siente suya.

Irene Mercedes Aguirre es docente e investigadora universitaria de grado y posgrado y sus áreas académicas de desempeño son la Historia, la Historia de la Cultura, la Historia de las Ideas y la Ciencia, la Metodología de la Investigación y Resolución de $POnJDUPT��"EFNÈT�EJSJHF�FM�*OTUJUVUP�EF�*OWFTUJHBDJPOFT�)JTUØSJ-cas de la Municipalidad de Avellaneda y forma investigadores en historia local. Es autora de numerosos libros, artículos, ponen-cias y capítulos de libros. Es profesora invitada de prestigiosas universidades del país y del exterior, en las que brinda cursos, conferencias, módulos de carreras de posgrado y asesoramien-tos académicos. Integra redes nacionales e internacionales de Educación Superior. Ha recibido múltiples distinciones y recono-cimientos por sus aportes sobre pedagogía de la sensibilidad, la JNQPSUBODJB�EF�MB�NVMUJEJTDJQMJOBSJFEBE�FO�DPOnJDUPT�EF�GBNJMJB�Z�su actuación internacional por la paz.






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