Ampliaciones metafísicas

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AMPLIACIONES METAFÍSICAS-NOSOTROS Y LA ESFINGE En este capítulo López de Mesa plantea una serie de cuestiones, ¿en dónde, dentro de la trabazón de la vida, aparece el espíritu? ¿empieza en la esfera físico-química o en la vida celular y sus reflejos? Y, ¿está en todas partes o en ninguna?. Estos planteamientos quedan sin respuesta, pero igualmente se nos muestra que las elaboradas lucubraciones de las teorías sólo dan muestra de una evolución semántica más que de una evolución ideológica. Por las leyes físico-químicas, las cosas tienden a un ordenamiento conforme al grado de sus potencias actuantes, acorde a estos, lo que llamamos instinto sería entonces la forma como los animales adquieren la noción de los medios adecuados a su obra, sería pues una suerte de inteligencia estancada que después de muchos siglos de estancamiento se soltó. Las manifestaciones más elevadas del espíritu como la autognosia, la inteligencia y la conciencia del Yo, no caben dentro de las clasificaciones ni de lo vegetativo ni de lo sensitivo; entonces por estos medios no es posible rastrear ni explicar la formación del alma y sus manifestaciones más elevadas. De la lectura puede concluirse que ha de ser en la actividad esencial creadora y en la inteligencia donde se debe buscar el efecto de la conciencia haciendo examen tanto de sus cualidades superiores como de las inferiores. Posteriormente hace una serie de disertaciones sobre la influencia del número y la posición dentro de las estructuras vitales y de qué manera pudo ser posible la evolución que dio paso a la formación del alma. En otro apartado hace también una distinción entre esencia y existencia para negarle al ser humano y al mundo lo que el llama “sustantividad efectiva”. Nos dice que somos seres efímeros y que no contamos con algún origen permanente que nos haya podido engendrar. pero si admite una unidad absoluta que sólo puede actuar en si misma como conocimiento de si o autognosia y no puede trascender o salir de si, porque pasaría a la dualidad y necesitaría recurrir a algo externo, y ese algo no puede ser otra unidad absoluta o una fracción de ella sino tan solo una existencia más. La unidad absoluta también debe ser inespacial e intemporal y por eso el espíritu al estar determinado por el tiempo y el espacio no podrá

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Ampliaciones metafísicas. Nosotros y la esfinge.

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AMPLIACIONES METAFÍSICAS-NOSOTROS Y LA ESFINGEEn este capítulo López de Mesa plantea una serie de cuestiones, ¿en dónde, dentro de la trabazón de la vida, aparece el espíritu? ¿empieza en la esfera físico-química o en la vida celular y sus reflejos? Y, ¿está en todas partes o en ninguna?. Estos planteamientos quedan sin respuesta, pero igualmente se nos muestra que las elaboradas lucubraciones de las teorías sólo dan muestra de una evolución semántica más que de una evolución ideológica. Por las leyes físico-químicas, las cosas tienden a un ordenamiento conforme al grado de sus potencias actuantes, acorde a estos, lo que llamamos instinto sería entonces la forma como los animales adquieren la noción de los medios adecuados a su obra, sería pues una suerte de inteligencia estancada que después de muchos siglos de estancamiento se soltó. Las manifestaciones más elevadas del espíritu como la autognosia, la inteligencia y la conciencia del Yo, no caben dentro de las clasificaciones ni de lo vegetativo ni de lo sensitivo; entonces por estos medios no es posible rastrear ni explicar la formación del alma y sus manifestaciones más elevadas.De la lectura puede concluirse que ha de ser en la actividad esencial creadora y en la inteligencia donde se debe buscar el efecto de la conciencia haciendo examen tanto de sus cualidades superiores como de las inferiores.Posteriormente hace una serie de disertaciones sobre la influencia del número y la posición dentro de las estructuras vitales y de qué manera pudo ser posible la evolución que dio paso a la formación del alma. En otro apartado hace también una distinción entre esencia y existencia para negarle al ser humano y al mundo lo que el llama “sustantividad efectiva”. Nos dice que somos seres efímeros y que no contamos con algún origen permanente que nos haya podido engendrar. pero si admite una unidad absoluta que sólo puede actuar en si misma como conocimiento de si o autognosia y no puede trascender o salir de si, porque pasaría a la dualidad y necesitaría recurrir a algo externo, y ese algo no puede ser otra unidad absoluta o una fracción de ella sino tan solo una existencia más.La unidad absoluta también debe ser inespacial e intemporal y por eso el espíritu al estar determinado por el tiempo y el espacio no podrá tener conciencia ni adquirir conocimiento. Dentro de toda esta concepción, el mismo López de Mesa no va más allá de las ideas griegas que han surgido como parte de esa cultura eurasiática que el mismo niega.En su elaboración metafísica, López de Mesa niega la realidad de la causalidad, es decir, niega la relación entre causa y efecto en el proceso de llegar a ser, “su entendimiento renuncia a la causalidad óntica” y desde esta perspectiva todo deberá entenderse en términos de proyecciones y posibilidades. Esta misma elaboración nos llevará a concebir la idea de que el cosmos no está sustentado en una realidad física.Ante toda la incertidumbre que puedan dejarnos estos supuestos , acaba diciéndonos además que la “unidad absoluta” podría engendrar un mundo numérico sin que ella necesariamente tenga que ser número; esta concepción resulta difícil de entender en el campo inteligible y para el campo sensible resulta incomprobable. Tal cosa no debe entenderse como la esencia radical de la existencia, no se podría percibir tampoco como un mundo compuesto sólo de hechos aritméticos o actos cuantitativos. Para explicar este mundo numérico en el que vivimos, los filósofos se han valido de explicaciones correspondientes a un mundo semántico que sólo corresponde a una realidad creada por cada sistema dentro de su propia lógica.

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Por ahora se vive tan sólo con el pensamiento de que algún día el hombre podrá lograr una conciencia plena de su existir en el mundo, en ese momento su existencia se habrá realizado en todas sus posibilidades y se fundirá de nuevo en la “unidad absoluta” donde el es visto con autognosia permanente , en la substancia que le dió origen a modo de un pensamiento suyo.

CONCLUSIONES-APLICACIÓN Y RESUMEN-NOSOTROS Y LA ESFINGEEl surgimiento de toda gran cultura requiere el cumplimiento de ciertos requisitos fundamentales:-La armónica estructura nacional del un pueblo de buena estirpe, en cuanto a la conjugación de las diferentes aportaciones raciales se refiere , para que brote la unidad de temperamento y esa unidad se encauce noblemente.-La adquisición de cierta holgura económica que le permita al pueblo dedicar su tiempo libre a las labores del espíritu.-Asimilación del legado cultural de otros pueblos que han hecho historia.

Ahora, cuando se presentan inconvenientes en la aplicación de alguno de estos requisitos, bien sea por motivos relacionados con la economía, una endemia letal, la voluntad etc o porque por el contrario consideran que yan han cumplido con el deber de ser creadores de un espíritu y encarnan realmente un mensaje histórico, el siguiente paso entonces es expandir la cultura a otros continentes, añadiendo elementos de uno y otro lugar, para darle un nuevo rumbo al cauce histórico, que es el punto de partida para la adquisición de una conciencia universal que pueda dar cuenta de la existencia en sí y del ser.Con este movimiento, vemos como las grandes potencias han llegado a influir culturalmente a países pequeños y muy remotos, donde llevan una fortuna “benévola” de un nuevo espíritu , recursos materiales y nuevas cosmovisiones.Con el estallido de las dos guerras mundiales, los países latinos perdieron poderío que antaño los representaba y caracterizaba en europa. Con esta división y debilitamiento del poder en algunos países europeos involucrados en la guerra decayó de tal manera que se debe pensar que el futuro de la humanidad se concentra en dos naciones jóvenes que están llamadas a resolver el problema de un nueva cultura:Rusia y Estados unidos.Estados Unidos se erige entonces como potencia gracias a la asimilación de los movimientos sociales, raciales y culturales que dieron lugar a múltiples civilizaciones dentro de un mismo territorio y que hoy se sintetizan en una unidad original a la que los norteamericanos le han impreso su sello de identidad y visto el estado de esta nación en la actualidad sería impertinente negarles hegemonía, ya que toda esa asimilación de costumbres ha dado lugar a un nuevo espíritu que pretende regir los destinos humanos.Su desarrollo técnico, político y económico no tiene discusión, y por eso a pesar de ser una nación joven con una historia “nueva” ya hace parte fundamental de los problemas del espíritu y demuestra con ímpetu la proximidad de su triunfo.Por el otro lado está Rusia, cuyo proceso de asimilación de la triada territorio, raza y cultura se ha dado de manera más lenta y gradual, pero también ha demostrado ser un país con gran

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ímpetu que dispone de variedad de recursos que le han permitido un desarrollo más discreto pero igualmente importante, por lo tanto no debe negarsele un puesto importante en la dirección de los nuevos episodios históricos.Otra diferencia fundamental entre ambas naciones es que mientras Estados Unidos tiene una clara inclinación al análisis técnico y científico de todos los problemas, y a la organización pragmática de su aprovechamiento social; Rusia por su parte siempre está a la vanguardia de creaciones místicas, artísticas y su trabajo filosófico da muestra de un arduo trabajo, de tenacidad y asimilación de los recursos técnicos de los que dispone. Pero Rusia sin duda tendrá mucha más influencia en los países asiáticos y no será entonces para el mundo occidental un modelo de normatividad moral.El siguiente esquema dará muestra de la complejidad de las múltiples vocaciones del hombre según su lugar de origen y que parece distribuirse armónicamente para lograr una síntesis que quizá sea el futuro de la evolución cultural.El norteamericano entonces posee un gran don para la inventiva técnica y práctica, el Ruso disfruta más en la búsqueda de la solución de los problemas morales y al igual que el norteamericano busca un equilibrio social, el Inglés se ha dedicado a perfeccionar el estudio psicológico del hombre, ahondando en el desarrollo de sus virtudes sociales y políticas, el Francés ha gozado de gran riqueza y claridad en su pensamiento, el Italiano ha logrado llevar el arte a otro nivel, el Alemán está dotado para la especulación metafísica, la técnica y el arte, además de ser un ejemplo del desconcierto cultural debido a los colapsos de su conducta, el Español está dotado de una personalidad mística y sensible, generoso pero individualista, el Griego clásico, es un artista excepcional al igual que el italiano, metafísico como el alemán, pero sus normas espirituales aún siguen vigentes.

¿Y qué es lo que podemos hacer nosotros Iberoamericanos, en este inmenso campo de la cultura por venir?Al comienzo de toda gran cultura, está el mito, nosotros tenemos a Bolívar.El surgimiento de toda gran nación se da a partir de una epopeya, nosotros la tuvimos en las grandes guerras de emancipación política.El desarrollo de nuestras naciones es ya de por sí un triunfo histórico que nos permite proyectarnos en un lugar dentro de la magna construcción cultural en curso.Se debe cambiar entonces esa actitud derrotista y pesimista que lleva a pensar que la especulación filosófica se agotó en los sistemas europeos, pero aún así, estos siguen dando vueltas por todas partes con las mismas ideas. Este pensamiento sólo da lugar a un ocio repetitivo de las creaciones ajenas, limitando el ingenio propio.La imaginación entonces será la principal herramienta para explorar los campos baldíos de la filosofía. Uno de ellos es el estudio de la Posibilidad como una probable ley universal y no sólo como la voz representativa de lo incierto que puede o no ocurrir.Los seres considerados en totalidad, existen mientras revelan , mientras expresan, mientras “realizan” las posibilidades implicadas en su esencia. Todos ellos subsisten mientras disfrutan de alguna posibilidad existencial inexpresa y todos ellos mueren al agotar su radio de operación.“Todo ser trae pues consigo, un campo de posibilidades, conforme a su constitución esencial, es venido a existencia por dichas posibilidades, y perdura hasta extinguir ese germen de sus

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determinaciones. Así contemplada, la posibilidad es determinante de la existencia y no solamente expresión pasiva del puede y no puede ser”. pg.220Otro campo de investigación aún virgen, sobre el cual podrían ocuparse los pensadores iberoamericanos es sobre esa entidad que une al mundo, que posee la posibilidad absoluta y que debe tener más posibilidades que las que dieron origen al presente y es obvio pensar que al consumir éste las que hoy le dan existencia, regrese a ese oculto meta-cosmos.